Universidad del Valle de Guatemala

Facultad de Educación
Psicología del Ciclo Vital

Nombre: Marcos Albrigo

Carné. 19589

EL TRIUNFO (La película)En una realidad educativa tan desigual como la que se vive en
Colombia, es inspirador el mensaje que la película refleja sobre todo para el rol de un educador, y no
es para menos, si bien el contexto donde se desenvuelve la historia es extremadamente difícil, la
estrategia seguida por RON es sin dudas un reto y un llamado constante a la reflexión sobre el
verdadero papel del educador en los procesos de aprendizaje en condiciones bastante sui generis,
pasar de una comunidad rural a un entorno netamente urbano y con toda la complejidad que ello
implica merecen reconocer su perseverancia, disciplina e innovación para llegar a los estudiantes en
las situaciones más hostiles.

Llama poderosamente la atención que una sociedad marcada por el culto al trabajo, el individualismo,
el país de la oportunidades, el sueño americano donde todo es posible, sea precisamente el punto de
quiebre de la sociedad americana, una constante degradación de valores culturales en el entorno
urbano, una especie de territorio de nadie donde solo sobresale el más fuerte, y su influencia directa
en las relaciones socioculturales de una nación multiétnica, acrecienta brechas en diferentes
aspectos que son el reflejo en el ambiente escolar de las escuelas públicas, un escenario
desalentador para cualquier docente, sin embargo para RON CLARK, mas allá de la necesidad
buscar empleo, es su convicción la que le obliga tomar el reto por construir una aprendizaje que sea
transformador de realidades, vivencial e innovador.

No caben dudas, que ese despliegue de humanidad por parte del maestro CLARK, rompe con esa
dicotomía tradicional que existe en el aula de clases, ese divorcio tácito entre estudiantes y maestros,
es un obstáculo constante dentro del aprendizaje, lograr desnudar esas realidades y poder
involucrarse para actuar desde el interior y sentimientos de sus estudiantes le permitieron derrumbar
esas barreras y paradigmas que impedían actuar en equipo, como una familia, y refuerza el
sentimiento de familia porque identifica claramente que el origen de esa rebeldía por parte de sus
estudiantes se fundamente básicamente en la ausencia de un núcleo familiar que los abrigue
filialmente y que les promueva valores y principios que les permita afrontar su realidad social con un
soporte emocional y sicológico sólido. Es precisamente esa cohesión como familia la que permite al
maestro CLARK suplir esas carencias de sus estudiantes y fortalecerlos para asumir cada paso como
Universidad del Valle de Guatemala

Facultad de Educación
Psicología del Ciclo Vital

Nombre: Marcos Albrigo

Carné. 19589

una victoria más allá del resultado académico, lo que se busca es rescatar personas, y ese es
precisamente el logro más importante que se puede traducir en la frase que les lanza cuando los está
motivando para los exámenes estatales “Juntos aprendemos a que nos guste aprender”.

RON CLARK como profesor de una escuela pública de New York, se mueve en varios escenarios, su
accionar es una forma de rechazar el estoicismo gubernamental, el determinismo social, la falta de
oportunidades y sobre todo la indiferencia hacia comunidades socialmente excluidas que se les niega
mejorar sus condiciones de vida a través de la educación, para RON conocer de cerca la realidad
familiar de sus estudiantes le permitió construir un vínculo que con el tiempo se fue reforzando, lo que
le permitió desarrollar y cultivar en su estudiantes y la comunidad educativa la necesidad de generar
conocimiento desde las particularidades y singularidades de sus estudiantes. Sin embargo, es
frustrante como una sociedad del primer mundo esta ciega ante la realidad social de sectores
marginados, aunque la pobreza se mide de forma diferente en muchos lugares, es la pobreza mental
la que se quiere evidenciar, es como repasar el pensamiento platónico con “el mito de la caverna”

Imagina una especie de cavernosa vivienda subterránea provista de una larga entrada, abierta a la
luz, que se extiende a lo ancho de toda la caverna, y unos hombres que están en ella desde niños,
atados por las piernas y el cuello, de modo que tengan que estarse quietos y mirar únicamente hacia
adelante, pues las ligaduras les impiden volver la cabeza; detrás de ellos, la luz de un fuego que arde
algo lejos y en plano superior, y entre el fuego y los encadenados, un camino situado en alto, a lo
largo del cual suponte que ha sido construido un tabiquillo parecido a las mamparas que se alzan
entre los titiriteros y el público, por encima de las cuales exhiben aquellos sus maravillas.