por las diócesis MAYAGÜEZ 5 al 11 de diciembre de 2010 ev: 25
La Virgen María, Madre
del Dios Providente REV. P. FLOYD L. McCoy Jordán también lo consigna el hecho de que se le llame Patrona principal, o sea que tampoco excluye el Para El Visitante hecho de que hay otros títulos que participan de La famosa escritora puertorriqueña, Rosario ese patronato de María sobre la Isla. Ferré, escribió una novela que ella tituló La ba- La misma iconografía de la Virgen María, talla de las vírgenes. Un título muy sugestivo que Madre de la Divina Providencia, evidencia ese ca- hace pensar en algo así como Star Wars. Aunque rácter providente de Dios. El niño descansa acos- la obra de Ferré es ficción, pienso que es nece- tado en el regazo de la Madre que está pendien- sario establecer la realidad histórica en la que se fundamenta esa ficción. Ese ejercicio hay que te a él para en momentos de peligros, ella poder hacerlo en atención a aquellas personas que no protegerlo. El niño es Puerto Rico, que puede saben distinguir donde comienza una y donde estar seguro ya que en caso de peligro, su Madre termina la otra. acudirá al Dios providente para que lo libre. Las vírgenes que supuestamente tienen una Más gráficamente, este carácter protector guerra son las advocaciones marianas bajo los maternal lo recoge la iconografía de Nuestra títulos de Nuestra Señora de la Monserrate de Señora del Perpetuo Socorro. El niño Jesús, que Hormigueros y de la Virgen María, Madre de la Divina Providencia, llamada comúnmente “La jugaba mientras María hacía los quehaceres en Providencia”, Patrona de Puerto Rico. El proble- su humilde hogar de Nazaret, es asustado por la ma es que la novela de Ferré tal vez refleja un aparición de unos ángeles que le muestran las malestar, producto de una confusión, que existe herramientas con que será martirizado en el fu- en una parte del pueblo fiel católico de nuestra turo. Atemorizado, corre hacia los brazos de su isla. madre, que instintivamente lo levanta en el aire y Es importante, para poder desenredar la ma- lo aprieta contra su pecho para protegerlo y con- deja, empezar por uno de los extremos. Lo pri- solarlo. En la carrera, al niño se le suelta una de mero que hay que aclarar es que el nombre de sus sandalias y por eso la estampa lo muestra con la Patrona principal de Puerto Rico no es el de la sandalia colgando, que es parte fundamental “Virgen de la Providencia”, como si Providencia de la iconografía. fuera su nombre. Cuando descubrimos el título Además de ilustrarnos el carácter providen- completo se abre un mundo maravilloso ante cial de ese título, el icono es un ejemplo de que cualquier advocación mariana se refiere a la Ma- nuestros ojos. Su título es la Virgen María, Madre dre del Dios Providente, que está dispuesta siem- de la Divina Providencia. Lo que nos dice que se pre a proteger a su Hijo y a protegernos a cada refiere a la Virgen María en general y a su condi- uno de nosotros. Por lo tanto, no hay que pensar ción de Madre de Dios (Teotokos) en particular; en batallas de las vírgenes, que están muy lejos Dios que es providente, o sea que provee a sus de la humildad de María, sino más bien en la ri- criaturas, como bellamente lo enseñó Jesús ha- queza de los símbolos y advocaciones marianas blando con emoción de su Padre. que son testimonio de un amor añejo y profundo Esto es importante, ya que el título es uno a nuestra Madre del Cielo, bajo cualquiera de sus genérico en el sentido de que en él están inclui- títulos. dos cualquiera de los títulos y advocaciones ma- Sigamos amando y venerando a María en rianas, ya que cada una de ellas se refiere a la cualquiera de sus títulos y advocaciones. Es justo, Madre de Dios. Las advocaciones más antiguas a es necesario y además es evangélico, ya que ella la introducción de la advocación de la Providen- misma lo dice en Lucas (Lc. 1:48): Bienaventurada cia en Puerto Rico: la Virgen de Belén, la Virgen me llamarán todas las generaciones. Destacar su del Carmen, la Inmaculada Concepción, la Valva- importancia en el Plan de Salvación también está prefigurado en ese evangelista: Bendita tú, entre nera, la Monserrate, etcétera, todas son Madres todas las mujeres… (Lc. 1:42). Amar a María es del Dios proveedor y quedan acogidas bajo el camino seguro hacia el cielo. “El niño es Puerto Rico, que puede estar seguro ya que en caso de peligro, su Madre acudirá título dado a la Patrona Principal de la Isla. Así al Dios providente para que lo libre”. (Archivo EV / Amado Vega)