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1. Introducción
2. El acoso sexual
Fue aprobada por la Asamblea General de las Naciones Unidas con la Resolución
48/104 del 20 de diciembre de 1993. En la parte considerativa de dicha Declaración
se indica:
Reconociendo que la violencia contra la mujer constituye una manifestación de
relaciones de poder históricamente desiguales entre el hombre y la mujer, que han
conducido a la dominación de la mujer y a la discriminación en su contra por parte
del hombre e impedido el adelanto pleno de la mujer, y que la violencia contra la
mujer es uno de los mecanismos sociales fundamentales por los que se fuerza a la
mujer a una situación de subordinación respecto al hombre.
Artículo 2.-
Se entenderá que la violencia contra la mujer abarca los siguientes actos, aunque sin limitarse a
ellos:
Fue aprobada en Beijing en setiembre del año 1995. El párrafo 180, en lo tocante a
las medidas que deben adoptar los gobiernos, el sector privado y las organizaciones
no gubernamentales, los sindicatos y las Naciones Unidas, indica:
c) Promulgar y aplicar leyes para luchar contra el acoso sexual y otras formas de
hostigamiento en todos los lugares de trabajo.
Las mujeres peruanas indican haber sido víctimas de acoso sexual: en el trabajo
(14%), en el centro de estudios (4%), el ámbito social (23%) y en otros lugares
(20%).[5] Estas cifras responden a la situación de discriminación que existe hacia la
mujer peruana.
Una periodista me comentaba que ella conoce varios casos y que las mujeres tienen
mucho temor porque en este país todavía está infravalorado el testimonio de la
víctima. Te piden pruebas que muchas veces es muy difícil de tener sobre todo en
situaciones de hostigamiento sexual y cuando las mujeres dan pruebas son puestas
en entredicho.
Todavía se cree que las mujeres provocamos este tipo de conductas (…) una
conducta que está enraizada en el machismo, en esta lógica de apropiación del
cuerpo de las mujeres, de sentirse con derecho sobre el cuerpo de las mujeres, y con
derecho de vigilarlas, perseguirlas y fastidiarlas.
Por primera vez en el Perú, con la publicación del Decreto Legislativo 1410, se
incorporó el delito de acoso sexual en el Código Penal peruano.
El que, de cualquier forma, vigila, persigue, hostiga, asedia o busca establecer contacto o cercanía
con una persona, sin el consentimiento de esta, para llevar a cabo actos de connotación sexual,
será reprimido con pena privativa de la libertad no menor de tres ni mayor de cinco años e
inhabilitación, según corresponda, conforme a los incisos 5, 9, 10 y 11 del artículo 36.
Igual pena se aplica a quien realiza la misma conducta valiéndose del uso de cualquier tecnología
de la información o de la comunicación.
La pena privativa de la libertad será no menor de cuatro ni mayor de ocho años e inhabilitación,
según corresponda, conforme a los incisos 5, 9, 10 y 11 del artículo 36, si concurre alguna de las
circunstancias agravantes:
2. La víctima y el agente tienen o han tenido una relación de pareja, son o han sido convivientes o
cónyuges, tienen vínculo parental hasta el cuarto grado de consanguinidad o segundo de afinidad.
3. La víctima habita en el mismo domicilio que el agente o comparten espacios comunes de una
misma propiedad.
3.2. Fundamentación
Una de las alternativas para sancionar las conductas del acoso sexual es sin duda el
derecho penal que tipifica estas conductas, pero es insuficiente si es que no existe
una verdadera política de lucha contra la discriminación y violencia contra la mujer,
más que todo en los ámbitos cultural, educativo, psicológico, familiar
(multidisciplinariedad).
El delito de acoso sexual protege bienes jurídicos como la integridad física, psíquica,
moral, así como el derecho a la libertad personal, la intimidad, la tranquilidad y la
paz de una persona.
vigila
persigue
hostiga
asedia a una persona
busca establecer contacto
se acerca o busca cercanía
Cuando el tipo penal en comentario, indica “el que” está refiriéndose a la persona, al
sujeto activo, al agente, que puede realizar cualquiera de los actos.
3.6. Consumación
Para la consumación del delito de acoso sexual, sea en el tipo básico o en la forma
agravada, es necesario que se desarrolle alguna de las conductas descritas en el tipo,
sin que exista el consentimiento de la víctima.
3.7. Penalidad
El artículo 176-B, del Código Penal, que tipifica el delito de acoso sexual, señala la
pena, para el tipo básico y la forma agravada.
Tipo básico
CONDUCTA PENALIDAD
Formas agravadas
CONDUCTAS PENALIDAD
3. La víctima habita en el mismo domicilio que el La pena privativa de la libertad será no menor
agente o comparten espacios comunes de una misma de cuatro ni mayor de ocho años e
propiedad. inhabilitación, según corresponda, conforme a
los incisos 5,9,10 y 11 del artículo 36 del
Código Penal.
4. La víctima se encuentra en condición de dependencia
o subordinación con respecto al agente.
4. Conclusiones
Era necesario que se configure la figura penal del delito de acoso sexual, a fin de
proteger la integridad física, psíquica, moral, así como el derecho a la libertad
personal, la intimidad, la tranquilidad y la paz de una persona.
Una de las formas como se manifiesta la discriminación y la violencia contra la
mujer es a través del acoso sexual. Este fenómeno no solo debe ser abordado por
el derecho penal sancionando a los acosadores. También debe enfrentarse el
problema desde una política gubernamental con un contenido más amplio:
interdisciplinario.
[7] “La posibilidad de que una mujer adulta experimente violencia física por parte
de su pareja es, en promedio, 12 puntos porcentuales más alta si fue testigo de
violencia física perpetrada hacia su madre. Es más, actualmente es probable que las
mujeres repitan patrones de violencia familiar tal y como lo repitieron las mujeres
que nacieron décadas atrás. Sea que haya nacido en 1990 o 1970, presenciar P-IPV
en la familia durante la niñez predice el mismo riesgo de experimentarla
posteriormente. En otras palabras, el efecto que tiene la violencia intrafamiliar
durante la niñez por generaciones prácticamente permanece sin cambios. En
América Latina y el Caribe, es probable que las mujeres de hoy repitan patrones de
violencia familiar tal y como lo hicieron las mujeres que las precedieron.” Suzanne
Duryea. Disponible aquí.
DECRETO LEGISLATIVO 1410
EL PRESIDENTE DE LA REPÚBLICA
POR CUANTO:
Que, el literal b) del numeral 4 del artículo 2 del citado dispositivo legal, establece la
facultad de legislar para fortalecer el marco jurídico para la prevención y protección
de violencia contra la mujer y grupo familiar, así como de víctimas de casos de
acoso, acoso en espacios públicos, tentativa de feminicidio, feminicidio, violación
sexual y violación sexual de menores de edad y para la sanción efectiva ante la
comisión de dichos delitos;
Que, resulta necesario realizar modificaciones al Código Penal para incorporar tipos
penales que sancionen los actos de acoso, acoso sexual, chantaje sexual y difusión
de imágenes, materiales audiovisuales o audios con contenido sexual; a fin de
garantizar una lucha eficaz contra las diversas modalidades de violencia, que afectan
principalmente a las mujeres a lo largo de todo su ciclo de vida;
Artículo 1. Objeto
1. Sancionar los actos de acoso, en todas sus modalidades, incluidos el acoso sexual
y chantaje sexual; así como la difusión de imágenes, materiales audiovisuales o
audios con contenido sexual, a fin de garantizar una lucha eficaz contra las diversas
modalidades de violencia que afectan principalmente a las mujeres a lo largo de todo
su ciclo de vida.
Incorpórense los artículos 151-A, 154-B, 176-B y 176-C al Código Penal, en los
siguientes términos:
La misma pena se aplica al que, por cualquier medio, vigila, persigue, hostiga,
asedia o busca establecer contacto o cercanía con una persona sin su consentimiento,
de modo que altere el normal desarrollo de su vida cotidiana, aun cuando la
conducta no hubiera sido reiterada, continua o habitual.
Igual pena se aplica a quien realiza las mismas conductas valiéndose del uso de
cualquier tecnología de la información o de la comunicación.
2. La víctima y el agente tienen o han tenido una relación de pareja, son o han sido
convivientes o cónyuges, tienen vínculo parental consanguíneo o por afinidad.
La pena privativa de libertad será no menor de tres ni mayor de seis años y de ciento
ochenta a trescientos sesenta y cinco días-multa, cuando concurra cualquiera de las
siguientes circunstancias:
2. Cuando para materializar el hecho utilice redes sociales o cualquier otro medio
que genere una difusión masiva.”
Igual pena se aplica a quien realiza la misma conducta valiéndose del uso de
cualquier tecnología de la información o de la comunicación.
2. La víctima y el agente tienen o han tenido una relación de pareja, son o han sido
convivientes o cónyuges, tienen vínculo parental hasta el cuarto grado de
consanguinidad o segundo de afinidad.
Artículo 3. Financiamiento
Artículo 4. Refrendo
Modifícanse los artículos 4, 6, 8, 12, 13, 16 y 22, así como la denominación del
Capítulo I del Título II de la Ley Nº 27942, Ley de Prevención y Sanción del
Hostigamiento Sexual, los cuales quedan redactados de la siguiente manera:
e) Trato ofensivo u hostil por el rechazo de las conductas señaladas en este artículo.
12.1 Los funcionarios y servidores públicos sujetos al régimen laboral público, que
hayan incurrido en actos de hostigamiento sexual serán sancionados, según la
gravedad, conforme al literal k) del artículo 85 de la Ley N° 30057, Ley del Servicio
Civil.
13.2 La Oficina de Recursos Humanos, o la que haga sus veces, dicta la medida de
protección correspondiente hacia la víctima de hostigamiento en el plazo de tres (3)
días hábiles como máximo, desde conocido el hecho. Asimismo, remite el caso a la
Secretaría Técnica de las Autoridades del Procedimiento Administrativo
Disciplinario dentro de las 24 horas de conocido el hecho.
En caso la Secretaría Técnica tome directamente conocimiento del hecho, debe
informar inmediatamente a la Oficina de Recursos Humanos, o la que haga sus
veces, para que adopte las medidas de protección.
22.2 El empleador del hostigador, en cuyo centro o marco laboral se haya producido
el acto de hostigamiento, debe adoptar las medidas de sanción correspondientes, las
cuales pueden ser las dispuestas en el numeral 8.3 del artículo 8 de la presente Ley.”
“TÍTULO II
Capítulo I
Modifícase el literal k) del artículo 85 de la Ley Nº 30057, Ley del Servicio Civil, el
cual queda redactado de la siguiente manera:
Son faltas de carácter disciplinario que, según su gravedad, pueden ser sancionadas
con suspensión temporal o con destitución, previo proceso administrativo:
(…)
POR TANTO:
Dado en la Casa de Gobierno, en Lima, a los once días del mes de setiembre del año
dos mil dieciocho.
imagen: informateperu.pe
En los últimos días, los medios de comunicación han centrado su
atención en el congresista Yonhy Lescano. Sobre él pesa una grave
denuncia por el presunto delito de acoso sexual cometido contra una
periodista (cuya identidad se mantiene en reserva) a través de
mensajes de WhatsApp.
4.3. Consumación
5. ¿Cuál es la pena?
El caso
La sentencia, que ha sido publicada en el sitio web del Poder Judicial, expone los
siguientes hechos. Desde julio de 2018, Alex Manuel Álvarez Silvera, empezó a
hostigar a su ex pareja, una menor de edad a quien le exigía insistentemente retomar
la relación. Ante su negativa, Álvarez empezó a acosarla por diferentes medios, pero
principalmente a través de Whatsapp, enviando mensajes intimidatorios cuya
gravedad fue escalando y que incluían todo tipo de agravios personales (“Perras
como tú no deben vivir”), chantajes (“No sabes lo que te espera puta de mrd, la perra
de monserrat”) e incluso amenazas de muerte a la víctima y su madre (“Y dale toma
foto bb toma tu Scream para irme a la cárcel cuando te mate y así pueda ser el
asesino que tanto quiero ser, si tengo que irme a la cárcel para que las perras como tú
no vivan lo haré»).
Mediante amenazas, Álvarez llegó a obtener imágenes con contenido erótico de la
víctima, las cuales amenazó de difundir públicamente si esta no accedía a tener
relaciones sexuales con él. Toda esta situación, que causó un grave deterioro
psicológico de la víctima, alcanzó el punto más álgido cuando esta decidió dejar de
asistir al colegio por temor a encontrarse a su agresor y la madre tomó conocimiento
de los hechos, pues este último le envió las imágenes de contenido erótico (“Su hija
no es virgen desde el febrero del 2017 si no me cree hágale una prueba toxicológica
por los dos lados”). Tras esto, la madre apoyó la denuncia de su hija y al ser
intervenido, Álvarez no tuvo más alternativa que confesar el delito al habérsele
intervenido el teléfono en donde aparecían todas las conversaciones que mantuvo con
la víctima. Tras un proceso breve, ha sido sentenciado a 4 años y 8 meses de prisión
efectiva.
Para empezar, hemos detallado en el siguiente cuadro, cuáles son las conductas
cometidas (y admitidas) por el sentenciado y en qué delitos pueden ser subsumidas,
antes y después de promulgado el Decreto Legislativo N° 1410.
Como se desprende del cuadro anterior, hay una diferencia importante entre las
conductas punibles antes y después del Decreto Legislativo N° 1410. Si Alex Álvarez
hubiera sido juzgado con el marco legal anterior, es probable que solo pudiera haber
sido condenado por el delito de coacción, siendo los delitos de pornografía infantil y
grooming, muy difíciles de probar dada la anterior relación de pareja entre el agresor y
la víctima. En el caso de las lesiones graves, el daño psicológico tendría que haberse
probado también. Por otro lado, delitos como la violación a la intimidad o la injuria son
delitos de persecución privada y se ventilan en procesos de querella, lo que en la
práctica implica que la víctima debe sufragar los gastos de su representación legal si
desea obtener justicia.
En la sentencia es posible notar que, pese a que se han configurado por lo menos tres
delitos; el Ministerio Público solo ha invocado en su acusación el delito de acoso
sexual. ¿Por qué no se han invocado el acoso y el chantaje sexual? Como se señala
en los hechos; Alex Álvarez “la amenazaba que si no se iba con él, rompería sus
lentes, amenazándola con romper las lunas de su casa, que si no salía le cortaría su
rostro, y que ande con cuidado por las calles porque en cualquier momento le haría
daño”. Esta conducta, que no está ligada necesariamente a obtener un acto de índole
sexual, se subsume claramente en el tipo penal de acoso. No obstante, este delito no
fue invocado.
Más grave aún es el caso de chantaje sexual. En los hechos se señala que el agresor
“buscaba verla y encontrarse con ella para llevar a cabo actos de connotación sexual
amenazándola con imprimir una foto en el que la menor muestra sus pechos (senos)
y botarlo en el colegio de la menor para que todos la conozcan como la perra de
Monserrat”. Es decir, Alex Álvarez amenazó con difundir material íntimo de la víctima
si ésta no cumplía con sus exigencias. No obstante, pese a que es evidente que este
delito también se ha cometido, tampoco fue invocado por el fiscal.
Resulta importante señalar esto pues no se entiende por qué el Ministerio Público no
invocó al menos estos tres delitos en concurso real a la hora de plantear su
acusación. Esto es importante de señalar a la luz de dos hechos: El primero es que el
Ministerio Público solicitó prisión efectiva para el agresor, la cual podría no haber sido
otorgada si el Juez consideraba que la magnitud del daño era leve y solo ameritaba
prisión suspendida (este fue el alegato de la defensa), lo que habría sido más difícil en
un proceso donde se valora más de un delito. El segundo es que la pena máxima
podría haber sido mayor teniendo en cuenta el concurso ideal y no solo 4 años y 8
meses, que es lo que se dictó al final.
Al ser detenido e incautado el teléfono móvil desde donde Álvarez realizaba los actos
de acoso y chantaje sexual, este optó por admitir su conducta. Por ello, no ha sido
posible en este caso conocer cómo se ofrecen las pruebas y la forma en que se
valoran cuando estas son casi enteramente digitales. Por ejemplo; ¿qué hubiera
pasado si el agresor hubiera borrado las conversaciones y fotos de su teléfono?
¿Habría bastado con que el material se encuentre en el teléfono de la víctima? ¿Su
testimonio sería suficiente?
Esto es importante pues las víctimas de estos delitos suelen producir muchas pruebas
digitales, pero es incierto hasta qué punto una captura de pantalla tiene suficiente
peso probatorio para un fiscal o un juez. En este caso no ha sido necesario dicho
análisis, pero consideramos que en el futuro este detalle podría ser decisivo y es
importante educar a las personas para que sepan de qué manera deben conducirse
en estas situaciones a fin de recabar pruebas útiles para el proceso