deuda, cabe preguntarse: ¿es sostenible la deuda pública en España y otros muchos países? Hasta qué punto es sostenible la deuda pública es una cuestión que ha preocupado a muchos autores. Hace años cobró una gran importancia un estudio de los economistas Carmen Reinhart y Kenneth Rogoff según el cual el crecimiento de un país se detiene bruscamente cuando su deuda pública supera el 90% del PIB. Este estudio sirvió para justificar las políticas de control del déficit y de austeridad que llevamos años sufriendo. Lo curioso del caso es que investigaciones posteriores demostraron que el estudio de Reinhart y Rogoff estaba mal hecho: efectivamente, se puede decir que hay una correlación negativa entre deuda y crecimiento, pero esta correlación es lineal y no se dispara a partir de una deuda del 90% del PIB.
Si hablásemos de agentes económicos privados,
está claro que una deuda a los niveles en los que se presenta en España, Italia, Grecia y otros países NO es sostenible. Sin embargo, estamos hablando de países y de deuda soberana, por lo que la respuesta depende de muchos factores: * Dado que el sector público sólo hace frente al pago de intereses, la sostenibilidad de la deuda dependerá del tipo de interés al que tenga que endeudarse el Estado. En el punto más álgido de la crisis de deuda, a España le llegó a costar un 7% de interés colocar sus bonos en el mercado; en el momento de escribir estas líneas paga un 2'12%. Estos tipos son asumibles por el Estado, pero debemos preguntarnos si se trata de unos tipos realistas o si se deben a la actuación del BCE. * Estamos dando por sentado que el Estado sólo paga intereses porque refinancia la deuda, pero puede que esto no sea posible si los mercados retiran su confianza. En estos casos, la deuda pasa a ser completamente insostenible y el Estado quiebra o pasa a una situación de respiración asistida, como le pasó a Irlanda y Portugal y como sigue pasándole a Grecia. * Un factor primordial al hablar de sostenibilidad de la deuda será el equilibrio de las cuentas públicas. Es fundamental que el Estado pueda hacer frente a los intereses de la deuda sin necesidad de pedir más préstamos para pagar esos intereses, es decir, mientras las cuentas públicas incurran en déficit primario (ingresos públicos - gastos sin tener en cuenta el pago de intereses de la deuda) la deuda pública no hará más que crecer. * Puesto que la forma más habitual de medir la deuda pública es dividirla entre el PIB, cuanto más crezca el PIB más se reducirá el ratio deuda/PIB y más sostenible nos parecerá la deuda. Por el contrario, si el PIB disminuye o se estanca, el ratio crecerá y la deuda se agigantará. Es uno de los motivos más básicos por los que las recetas de austeridad salvaje hacen crecer los ratios de deuda y una de las razones por las que se afirma que "antes de pagar la deuda hay que crecer...". El crecimiento del PIB es doblemente importante, ya que habrá una mayor recaudación fiscal y se podrá hacer frente al déficit. * Otro factor a tener en cuenta es el comportamiento de los precios. Cuando hay inflación, el dinero pierde valor y las deudas, que están expresadas en unidades monetarias, también. Por tanto, al Estado le interesa que haya una inflación moderada para que se vaya erosionando el valor de la deuda. Por desgracia, es normal que las crisis de deuda en las que se apliquen recetas de austeridad desemboquen en un escenario de deflación, lo que hace más difícil pagar cualquier deuda. También podemos aplicar el concepto de apalancamiento financiero a la sostenibilidad de la deuda pública. Como vimos en esta entrada, endeudarse para llevar a cabo una inversión es aconsejable mientras que la rentabilidad de la inversión sea mayor que el tipo de interés de la deuda (apalancamiento positivo), pero si los intereses son mayores que la rentabilidad de la inversión, la operación puede ser ruinosa (apalancamiento negativo). Siguiendo este razonamiento, la deuda pública sería sostenible mientras la tasa de crecimiento de la economía (el % de variación del PIB) sea mayor que el tipo de interés medio de la deuda; por el contrario, mientras el coste de la deuda sea mayor que el crecimiento de la economía, el país profundizará en su endeudamiento. Al hablar de sostenibilidad, hemos de tener en cuenta que las condiciones pueden cambiar muy rápidamente. Puede que la deuda sea hoy sostenible, pero una perturbación externa puede disparar la prima de riesgo y hacer que la deuda deje de ser sostenible, o puede haber factores que favorezcan al país, como una bajada del precio del petróleo. http://economiapuntes.blogspot.com/2015/06/la-deuda-publica-examen.html
(No es una fuente “oficial” pero es un buen resumen)