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El desarrollo sustentable propone tres ejes analíticos: un desarrollo

comprometido con la satisfacción de las necesidades de las


generaciones presentes, un desarrollo respetuoso del medio
ambiente y un desarrollo que no comprometa los derechos de las
generaciones futuras. (GARZA, 2010)

Por otra parte Whitman Rostow , crea un modelo de economía


lineal de Rostow, este autor sostiene que las etapas del crecimiento
económico en los países menos desarrollados son:

 Sociedad tradicional (agricultura de subsistencia)


 Creación de las condiciones previas al arranque
 Despegue (cuando la tasa de inversión supere la tasa de
población)
 Camino a la madurez (que dura sesenta años)
 Etapa del consumo de masas.

Teoría del Desarrollo Sustentable

El Desarrollo Sustentable tiene sus orígenes en el año 1972, en la publicación del Informe al Club
de Roma, los Límites del Crecimiento: Un Informe del Proyecto del Club de Roma, sobre el
predicamento de la humanidad, el cual señalaba la existencia de límites físicos al crecimiento,
debido al agotamiento previsible de los recursos naturales y a la incapacidad global de asimilación
de los residuos del planeta.

De igual manera, según la Cumbre de la Tierra (1992), realizada en Río de Janeiro por 178
países, concordaron en un conjunto de principios, denominado Carta de la Tierra, los cuales
habrían de ser respetados por los gobiernos y la población, y se adoptó un programa de
acciones para promover la sustentabilidad, el cual se denominó Agenda 21, y de allí se creó un
mecanismo institucional dentro del Sistema de las Naciones Unidas, que fue la Comisión para
el Desarrollo Sostenible, la cual se encarga de velar por el bienestar de la calidad de vida de
las poblaciones a nivel mundial y de los ecosistemas, tratando de crear conciencia, para que
no se destruya el medio ambiente a escala mundial, ya que ése es la base para un desarrollo
sustentable.
En ese sentido, la Comisión para el Desarrollo Sustentable de las Naciones Unidas (ob. cit.),
señala que, “el Desarrollo Sustentable tiene como punto central la gente, en el sentido de que su
principal objetivo, es el mejoramiento de la calidad de vida del hombre, y está fundamentada en la
conservación, en virtud de estar condicionado por la necesidad de respetar la capacidad de la
naturaleza para el suministro de recursos y servicios para el mantenimiento de la vida” (p. 10).

De igual manera, Reed (2000), señala que el Desarrollo Sustentable abarca tres componentes
básicos: económico, social y ambiental, que constituyen sus fundamentos o pilares sobre los que
descansa este desarrollo.

1) “El Componente Económico de la Sustentabilidad, señala que las sociedades se encaminen por
sendas de crecimiento económico, que generen un verdadero aumento del ingreso y no apliquen
políticas a corto plazo que conduzcan al empobrecimiento a largo plazo” (p. 49). Como por ejemplo,
el endeudamiento externo, que acarrea posteriormente, el pago del servicio de la deuda, el cual
compromete el bienestar de la población futura, por la merma en los ingresos de la nación, el cual
pudiera destinarse a la ejecución de políticas públicas, a través del gasto social.

El mismo autor señala, que requiere además, que las sociedades generen un flujo óptimo de
ingresos a la vez que mantienen las existencias básicas de capital. En el contexto, el capital
incluye el capital de fabricación humana, capital humano y el capital natural. La economía
sostenible requiere de un enfoque diferenciado respecto al crecimiento, en el sentido, de que
muchas áreas del mundo en desarrollo necesitan urgentemente aumentar su capacidad productiva
y, al mismo tiempo, y con la misma urgencia, las sociedades industrializadas deben reducir su
consumo de recursos naturales y dar a dichos recursos un uso más eficiente. La Sustentabilidad
Económica, exige además, internalizar todos los costos, incluyendo los costos sociales y
ambientales relacionados con la producción y disposición de los bienes.

2) Con relación a la dimensión social de un desarrollo sostenible, presupone que la equidad y una
comprensión de la interdependencia de las comunidades humanas son requisitos básicos para una
calidad de vida aceptable, que, es el principal objetivo del desarrollo. A fin de sostener una
trayectoria del desarrollo durante un largo período (sostenible en el tiempo), las riquezas, recursos
y oportunidades deben compartirse de manera tal, que todos los ciudadanos tengan acceso a
niveles mínimos de seguridad, derechos humanos y beneficios sociales, como alimentación, salud,
educación, vivienda y oportunidades de autorrealización personal.

La equidad social significa, asegurar que todas las personas tengan acceso a la educación y
tengan la oportunidad de hacer contribuciones a la sociedad que sean productivas y justamente
remuneradas. La interdependencia de la comunidad humana implica comprender que las severas
desigualdades sociales constituyen una amenaza para la estabilidad y la viabilidad a largo plazo de
la convivencia humana. La interdependencia implica además, reconocer que los niveles de vida de
las comunidades están relacionados, en última instancia, con el tamaño de la población humana
que deberá ser mantenida por los recursos ambientales y la infraestructura del planeta. De igual
manera, la dimensión social de un desarrollo sustentable, exige la activa participación política de
todos los sectores sociales y la rendición de cuentas por parte de los gobiernos a una sociedad
más amplia en relación con su formulación de políticas sociales básicas referentes, entre otras
cosas, a asuntos de equidad social y tamaño de la población. Requiere también aprovechar el
conocimiento y experiencia de las poblaciones y fortalecer la capacidad de los grupos sociales
para moldear y manejar sus propias vidas.

3) La Dimensión Ambiental de un Desarrollo Sostenible, se fundamenta en el mantenimiento de la


integridad, y por lo tanto, de la productividad a largo plazo de los sistemas que mantienen la
infraestructura ambiental, y por extensión, la vida en el planeta. La Sustentabilidad Ambiental,
requiere el uso de los bienes ambientales de forma tal, que no disminuya la productividad de la
naturaleza, ni la contribución general de los bienes y servicios ambientales al bienestar humano.
Estos tres componentes del desarrollo sostenible, deben converger de forma tal, que generen un
flujo estable de ingresos, aseguren la equidad social, alcancen niveles de población socialmente
convenidos, mantengan las fuentes de capital de fabricación humana y de capital natural, y
protejan los servicios del ambiente que imparten vida (p. 50).

Teoría demográfica de Binford


Este arqueólogo americano formuló una teoría, basado en los efectos que el
humano administra los recursos naturales, como el factor que dio origen a la
agricultura. Este investigador señaló que el medio ambiente tiene la capacidad
de mantenerse estable mientras sea capaz de proporcionar alimentos a la
población.

Pero mientras la población empiece a crecer, necesitara más fuentes de


alimentos para vivir. Cuando la población crece rápidamente el sistema
demográfico tiende a presionarse, causando que la población busque otras
formas más rápidas y eficientes de producir cultivos.

La teoría de Binford mantiene que las poblaciones prehistorias eran capaces de


adaptarse a un ambiente determinado, estos tendían a mantenerse estables en
ese lugar hasta llegar al punto de agotar todos los recursos. Plantea aspectos
que provocaron el origen de la agricultura como el cambio demográfico, el
aumento de población localmente llegaba al punto de sobrepasar la máxima
capacidad del entorno, incitando a la población a cultivar para producir más
alimentos.

9.4.1 LECCIONES DE LOS MODELOS DE DESARROLLO AGRÍCOLA A


LARGO PLAZO, LA FAO

Las primeras teorías sobre el papel de la agricultura en el desarrollo económico se elaboraron en


términos muy generales y trataron de obtener inferencias prácticas a partir de la observación de los
patrones internacionales (Capítulo 2). Una de esas corrientes del pensamiento fue la del "modelo
dualista", según el cual el sector industrial sería el motor del crecimiento, apoyándose en recursos
extraídos del sector agrícola[1026]. Sin embargo, las recomendaciones estratégicas basadas en este
modelo se fundan en una mala interpretación, para propósitos de política, del hecho de que la
porción del PIB correspondiente a la agricultura se reduce inexorablemente con el tiempo. Una
parte de la ley de Engel - las elasticidades de ingreso de la demanda de alimentos, en términos
agregados, son menores a la unidad - explica de por sí esa tendencia. Al contrario de los
pronósticos de las primeras teorías de crecimiento, el descuido del desarrollo agrícola ha
deprimido la tasa de crecimiento económico general. Y, el otro lado de la moneda, ha sido la
asociación positiva entre crecimiento agrícola y crecimiento global del PIB, como se señaló en el
Capítulo 1.
En las francas palabras de Hans Binswanger:

Hace mucho tiempo que habría debido declararse el fracaso de la noción de


que el desarrollo urbano puede resolver la pobreza rural[1027].

John Mellor y Bruce Johnston trataron de derivar consecuencias de política partiendo de una teoría
más completa del desarrollo agrícola[1028]. Estando de acuerdo con modelos anteriores respecto a
que una de las principales funciones de la agricultura era liberar factores productivos para la
industria, ellos también aseveraron que las estrategias de crecimiento agrícola debían
concentrarse en los pequeños productores y que los gobiernos debían jugar un papel principal a
través de inversiones en capital humano, innovación tecnológica y organización de los agricultores.
Pusieron el acento en el papel de los gobiernos, pero omitieron temas centrales como los
incentivos a la producción, los derechos de propiedad y la necesidad de corregir las
imperfecciones del mercado, y sus prescripciones se mantuvieron en un plano general [1029].

Asociación de Estados del Caribe, ACS AEC en referencia a la El Desarrollo Sostenible arraigado
en la Agricultura

Las problemáticas referidas a la producción de alimentos, las políticas sobre el


desarrollo agrícola y la seguridad alimentaria generalmente han figurado en un
lugar cimero en la “Lista de Prioridades” de la región. La agricultura es
considerada un sector importante en la mayor parte de los países del Gran
Caribe, especialmente ante la diversificación económica que ha tenido lugar en
las últimas décadas y la emergencia y crecimiento de otros sectores como el
turismo y los servicios profesionales. Sin embargo, algunos han sugerido con
fuerza que el sector agrícola dentro de la región está declinando rápidamente.
No obstante, más recientemente, con las inminentes inquietudes sobre una
producción sostenida de alimentos, la seguridad alimentaria y los precios de los
alimentos que plagan a muchos países del Gran Caribe, se ha visto un resurgir
del apoyo y desarrollo centrado en la agricultura. “El desarrollo agrícola se está
redescubriendo como un elemento esencial del crecimiento económico”
(William and Smith, 2009).

Se ha reconocido que el desarrollo del sector agrícola tendrá un impacto


significativo y de peso en la producción interna de alimentos, la seguridad
alimentaria, una menor dependencia de las importaciones de alimentos, y en el
bienestar económico y social general. La teoría de Sir Arthur Lewis sobre el
desarrollo económico tiene un pilar central: “la importancia de los suministros
de alimentos en el crecimiento económico sostenido”. Lewis consideró el
desarrollo agrícola como un componente esencial del crecimiento en la
economía. Williams y Smith en su documento Reconsideración del Desarrollo
Agrícola: El Reto del Caribe destacan que: “con tantas fuerzas que están
remodelando la agricultura y con la continua dependencia de las importaciones
de alimentos, no cabe duda de que el Caribe (y por extensión el Gran Caribe)
necesita reconsiderar el enfoque sobre el desarrollo agrícola”.

EL SISTEMA DE CULTIVO Este concepto se relaciona con la manera de cultivar


una parcela (Sébillotte, 1990). Se define por la naturaleza de los
cultivos y su sucesión, y por, los itinerarios técnicos. En 1975 era
definido como un sub-conjunto del sistema de producción. La evolución de
esta definición, al nivel de los agrónomos, muestra que este concepto es
relativo al manejo de los cultivos y no a una superficie de terreno,
definida como un ecosistema y10 considerada como sub-conjunto de una
explotación agrícola. El manejo de una sucesión de cultivo tiene que
conjugar diferentes plazos en el tiempo: el instante para arreglar una
herramienta, la campaila agrícola para definir estrategias de producción
de un cultivo, el medio plazo para mantener y mejorar la aptitud a producir
del terreno. También el manejo de un cultivo tiene que tomar en cuenta
los efectos en las cercanías, por ejemplo, para evitar problemas de
contaminación por enfermedad. Entonces el concepto de sistema de cultivo,
en su afán de ayuda a razonar el manejo de un cultivo, y frente a la
dificultad de establecer situaciones comparables, debe complementar el
estudio experimental con estudios de campo, y caracterizar estas
situaciones reales a diferentes plazos de tiempo, definiendo gamas de
variaciones de los estados del medio. Pero el manejo de una parcela se
razona en función de los medios disponibles -superficie, equipos, mano
de obra, insumos-, de objetivos de producción y de riesgos aceptados. Se
integra en un espacio más amplio de manejo, que corresponde a la unidad
de producción.

LA COMUNIDAD CAMPESINA La referencia (a raíz de los trabajos de D. Thumer)


a la comunidad campesina (comunidad aldeana o colectividad local) abría
sin embargo perspectivas sumamente interesantes. Así, para Mendras, “la
membresia a una comunidad campesina define al campesino, nada más”I2.
Esta nueva pista sólo dio frutos significativos en el campo del análisis
sociocultural o sociopolitico. Con la excepción (relativa) de H. H.
StahlI3, que plantea brevemente la comunidad campesina como taller
colectivo diversificado (¿y luego, porqué nQ como espacio social de
producción de relaciones sociales de producción?), su papel en la
organización de los procesos de producción queda totalmente descuidado.
Suelen mencionarse tán sólo las relaciones de cooperación simple (ayuda
mutua, solidaridades de vecinos, etc.) o los ajustes funcionalistas
ligados a los riesgos propios de cualquier agricultura escasamente
tecnifi~ada’~. Wolf, Redfield, Mendras y ShaninI5 enfatizali el papel
de la comunidad como enlace, instancia de mediación en los planos
políticos y culturales, entre 1 O0 Los sistemas de producción en el espacio,
la historia y la sociedad campesinos y sociedad global. Por su parte, Jersy
Tepicht piensa la comunidad campesina a la vez como “concha protectora”
de la autonomía de los grupos domésticos y como “garantía colectiva de
la transferencia de excedentes”’6. En la medida en que se excluye que
la comunidad pueda constituir el marco en el cual cobre sentido una
coordinación de los esfuerzos productivos individuales -y por ende una
organización técnica y social del trabajo- el impacto de las relaciones
que definen la dependencia de la agricultura campesina sólo puede
percibirse de manera univoca y lineal. Estas relaciones serán simplemente
“sobrepuestas”, tratadas -tal como lo planteaba Chayanov- como simples
limitantes externos.

Modelo de Desarrollo Endógeno Sustentable La explicación de cómo será


la realidad de un proyecto económico, tecnológico, administrativo o
social, se puede interpretar a través de un modelo. El uso de modelos
como herramienta gerencial está muy difundida en las organizaciones;
y consiste en representar un objeto real con las variables que la
afectan, cuyo resultado en la simulación pueda recrearse en la realidad.
Shannon, R. (citado por Bermón, L. 2011) “define un modelo como una
representación de un objeto, sistema o idea, de forma diferente a la
entidad misma, su propósito es ayudar a explicar, entender o mejorar
un sistema” (p.1). En los modelos de desarrollo se buscar experimentar
lo que debe suceder bajo escenarios hipotéticos; en teoría son
herramientas necesarias que con unas condiciones específicas,
similares a la que existen en la realidad, permiten simular
acontecimientos de la vida real y cuyo resultado debe replicarse al
ponerlo en práctica. Bajo esta perspectiva, los modelos gerenciales
que han probado ser exitosos en el ámbito empresarial son aquellos en
donde la experiencia puede aportar no sólo un modelo para motivar a
futuros emprendedores, sino un cúmulo de potencialidades para explotar,
de las cuales se pueden extraer lecciones de gerencia para orientar
el desarrollo local competitivo (Vilchez y Salazar 1998). El modelo
aplicado a la Comuna Guaicamacuto fue establecido bajo el marco
institucional del llamado “Socialismo del Siglo XXI”, cuyo objetivo
fue crear una comuna social de desarrollo endógeno como referente de
la nueva sociedad venezolana. Su economía se fundamentó en el trabajo
colectivo, la toma de decisiones en asambleas con la comunidad y la
construcción de un modelo basado en el “poder popular”, por lo tanto,
las comunas se conformaron como sinónimo de construcción de un modelo
económico alternativo construido por el pueblo, ante la concepción
capitalista que concebía al ser humano como objeto y mercancía. A ese
respecto, se puede indicar que el modelo se fundamenta bajo tres (3)
aristas: una política, que busca activar el movimiento popular como
poder comunal de autogobierno, no sólo como mecanismo para procesar
demandas y necesidades, sino también para realizar convocatorias de
las personalidades activas en la comunidad; otra económica, que busca
la conformación de empresas de producción social y un banco comunal
por la vía de préstamos recuperables que otorgan empresas del estado,
como Petróleos de Venezuela (PDVSA), donde se establezcan condiciones
de financiamiento más flexibles que la banca tradicional; y por último
el social, donde los miembros de la comunidad puedan asumir el
ejercicio real del poder popular, es decir, poner en práctica las
decisiones adoptadas por la comunidad a través de la capacitación como
un recurso humano calificado (Hernández, 2009). En este sentido, las
características principales para el Modelo de Desarrollo Endógeno son
las siguientes: La cooperación entre los miembros de la comuna, que
permitan construir las nuevas relaciones sociales de producción.
Reinvertir las ganancias en la producción social, ya que su finalidad
no es la generación de lucro. La comuna realiza la gestión de las
políticas públicas, a través de la ejecución y el control de proyectos.
Es así que el modelo económico productivo socialista, basado en el
desarrollo de las fuerzas productivas sociales, surge a mediados del
siglo XIX promulgado por Marx y Engels, esté no busca la rentabilidad
de las empresas, sino que sirvan a la sociedad (Sánchez, 2010). Así
mismo, según Arocena (1991) “El paso de una economía de mercado a una
economía planificada constituye, como bien se sabe, la llave maestra
de la propuesta socialista a nivel de la organización de la vida
material” (p.144). Teniendo en cuenta lo indicado por Arocena, la
economía socialista venezolana está representada por el sistema
comunal, que es una economía planificada desde el ámbito local, cuya
finalidad es impulsar la transformación del sistema económico hacia
un socialismo, alternativo al modelo rentista petrolero. La producción
desde lo comunal implica la organización y consciencia activa por parte
de las comunidades que deben planificar con mucha inteligencia y saber
qué necesidades se satisfacen de manera prioritaria, así cómo invertir
de forma sustentable los recursos del Estado, con la finalidad de que
le permitan obtener autofinanciamiento.

CONCLUSIÓN

El desarrollo en nuestra cultura actual, ha generada


lamentablemente una crisis ecológica esta la podemos observar en
el deterioro de las condiciones naturales que hacen posible la vida
en el planeta, este trabajo más que exponer las generalidades del
desarrollo sustentable, invita a una reflexión profunda e
introspectiva sobre las acciones que podemos realizar para
entregar un mejor mundo a las generaciones que están por venir.

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