Académique Documents
Professionnel Documents
Culture Documents
ÍNDICE
INTRODUCCIÓN ……………………………………………………………………………………. 1
CAPÍTULO I: IMPERIO DEL TAHUANTINSUYO / LOS INCAS: GENERALIDADES………. 2
CAPÍTULO II: ORGANIZACIÓN POLÍTICA DE LOS INCAS……………………………………. 7
CAPÍTULO III: LA ORGANIZACIÓN SOCIAL INCA…………………………………………….. 9
CAPÍTULO IV: ORGANIZACIÓN ECONÓMICA INCA………………………………………….. 13
CAPÍTULO V : ORGANIZACIÓN ADMINISTRATIVA DE LOS INCAS………………………… 18
CAPÍTULO VI : EDUCACIÓN Y CIENCIA INCA………………………………………………….. 22
CAPÍTULO VII: ORGANIZACIÓN MILITAR INCA………………………………………………… 27
CAPÍTULO VIII : LA COSMOVISIÓN ANDINA Y LA RELIGIÓN INCAICA……………………. 30
CAPÍTULO IX: LAS MANIFESTACIONES CULTURALES INCAICAS / ARTE INCA………… 35
CAPÍTULO X : CRISIS DEL TAHUANTINSUYO: GUERRA ENTRE PANACAS……………… 49
CAPÍTULO XI : INVASIÓN Y CONQUISTA DEL TAHUANTINSUYO …………………………. 52
CAPÍTULO XII: I. LA REBELIÓN DE MANCO INCA……………………………………………... 60
CAPÍTULO XIII : LAS GUERRAS ENTRE PIZARRISTAS Y ALMAGRISTAS………………… 67
CAPITULO XIV: LAS REBELIONES DE LOS ENCOMENDEROS CONTRA LA CORONA
71
ESPAÑOLA…………………………………………………………………………………………….
CAPÍTULO XV: FRANCISCO DE TOLEDO Y LA CONSOLIDACION DEL SISTEMA
77
COLONIAL……………………………………………………………………………………………...
BIBLIOGRAFÍA……………………………………………………………………………………….. 81
INTRODUCCIÓN
Lic. José Ccañi Mamani 1
HISTORIA DEL IMPERIO INCA: Del Tahuantinsuyo hasta el Virreinato
Los Incas fueron una cultura andina que partiendo como una etnia organizada en un
curacazgo cuzqueño hacia el siglo XII logró desarrollar una importante civilización que
controlo casi por completo el Sur de la América prehispánica, pues la influencia Inca llegò
a articular totalmente los actuales territorios de Perú, Bolivia y Ecuador además de Chile,
el noroeste de Argentina y la zona sur de Colombia.
Desde la ciudad sagrada del Cuzco, los Incas consolidaron un estado que, por su
extraordinaria capacidad organizadora, logró sintetizar y difundir múltiples conocimientos
artísticos, científicos y tecnológicos de sus antecesores. Basados en un concepto de
expansión del estado, el Tahuantinsuyo (Imperio Inca) recogió aquellos conocimientos y
los potenció.
Tras la conquista de Francisco Pizarro durante la década comprendida entre 1530 y
1540, el total sometimiento de la población articulada por el Tahuantinsuyo demoró hasta
1572, debido a la resistencia que organizaron los Incas desde Vilcabamba. Actualmente,
algunas costumbres y tradiciones de la desaparecida civilización Inca prevalecen en
etnias andinas
CAPÍTULO I
Lic. José Ccañi Mamani 2
HISTORIA DEL IMPERIO INCA: Del Tahuantinsuyo hasta el Virreinato
1.2. LÍMITES
1.3. REGIONES
Durante el gobierno del Inca Pachacutec se dividió el territorio de los Incas en cuatros
suyos a los que se denominó de la siguiente manera:
1.4. CAPITAL
El centro mayor de poder y asiento de la élite incaica fue la ciudad del Cusco que
deriva del Qosco o de Acamama. Se encuentra entre los ríos Huatanay y Putumayo. Su
nombre significa “Ombligo del Mundo”. Fue el lugar donde se asentaron originalmente y
fue punto desde el cual iniciaron la expansión por todos los Andes. A medida que
extendían su dominio, los incas fueron estableciendo núcleos o centros administrativos.
2. ORÍGENES
2.1. HIPÓTESIS
Los incas son descendientes de cultura HUARI. (Su forma de organización es similar)
- Los incas desarrollan inventos de cultura Huari: caminos, puentes, tambos y huananí
Cuando los aimaras entran a isla del sol y luna…los de HURIN SAYA si dirigen
hacia puno y hacia cerro TAMPUTOCO…dirigido por APOTAMBO
Siglo XVI: Expansión del Estado Inca y consolidación del Tahuantinsuyo con
Tupac Yupanqui y Huayna Capac.
Siglo XVI: Crisis del Estado Inca e invasión española. Surgen los incas de
Vilcabamba resistiendo la conquista europea.
3.1. LA CAPAC CUNA
La Capac Cuna era la lista o relación oficial de los Incas. Estaba compuesta por 14
Incas, a los cuales se les presentan divididos en 2 dinastías. La de los Hurin Cusco: a la
que pertenecieron los 5 primeros incas, quienes moraron en el Inticancha el primer
templo dedicado al Sol encontrándose en la parte baja (Hurin) del Cusco; y, la de los
Hanan Cusco: a la que pertenecieron los 8 incas restantes, quienes residieron en la parte
alta (Hanan) de la ciudad donde cada uno levantó su palacio particular.
CONFEDERACIÓN O REYNO CUSQUEÑO 3.- LLOQUE YUPANQUI HURIN CUSCO O BAJO CUSCO
4.-MAYTA CAPAC
5.-CAPAC YUPANQUI
6.-INCA ROCA
7.-YAHUAR HUACA
8.-WIRACOCHA
CAPÍTULO II
ORGANIZACIÓN POLÍTICA DE LOS INCAS
Lic. José Ccañi Mamani 7
HISTORIA DEL IMPERIO INCA: Del Tahuantinsuyo hasta el Virreinato
1. EL INCA
Era la cabeza de un gobierno teocrático y despótico. Considerado como hijo del Sol, era
un hombre dios nacido para gobernar al pueblo. Era considerado «Señor de la Tierra» y
«Ordenador del Mundo». El título de Sapa Inca reforzaba la idea que él era el único señor
existente sobre el mundo.
2. EL AUQUI
Los españoles creyeron que existía un solo Inca en el poder y pensaron que como
en Europa, había un príncipe heredero llamado auqui que debía gobernar el
Tahuantinsuyo después de la muerte del inca reinante. Para familiarizarlo más con las
funciones de gobierno se instituyó el correinado, el cual serviría para que el auqui
conociera las labores del gobierno y también para poder determinar si el candidato
elegido era apto para suceder a su padre
Era el Consejo Imperial. Su sede era la ciudad del Cusco y su misión era asesorar al inca
en asuntos de gobierno. Estaba integrado por cuatro Apocunas o Suyuyu Apus (uno por
cada Suyo)
4. EL APUNCHIC O WAMANI
5. EL TUCUY RICUC
Se traduce como «el que todo lo ve». Era el inspector el veedor, el visitador
imperial. Cada año visitaba los lugares bajo su jurisdicción para recoger el tributo, casar a
las parejas (Huarmicoco), ejercer como juez criminal (Taripa Camayoc), visitar las obras
públicas y supervisar las labores de los curacas a quienes podía castigar sino cumplían
sus funciones.
6. EL CURACA
Los jefes de los ayllus recibieron el nombre de curacas desde mucho antes de que
se establecieran los incas en el Cuzco. Los mismos incas fueron, antes de su expansión,
únicamente curacas del Cuzco. Con la expansión de los incas sobre las diferentes ayllus,
el poder de los curacas se mantuvo casi sin variaciones y siguieron siendo elegidos por la
propia gente porque los incas supieron siempre que una de las formas de mantener su
poder en el territorio andino era respetando a las autoridades locales.
CAPÍTULO III
Lic. José Ccañi Mamani 9
HISTORIA DEL IMPERIO INCA: Del Tahuantinsuyo hasta el Virreinato
1. LA REALEZA
Conforman la familia real del inca:
El inca
La coya
El auqui
Cipa collas
Pihuichures
1.1. El inca
Hijo del Sol y máxima autoridad, era el nexo entre los pobladores del imperio y el
universo de dioses y ancestros.Administraba los recursos, realizaba obras públicas,
establecía alianzas y también declaraba guerras. El principio de dualidad funciono
también para el Inca, un Inca Hanan Cusco y otro Inca Urin Cusco.
1.2. LA COYA
Lic. José Ccañi Mamani 10
HISTORIA DEL IMPERIO INCA: Del Tahuantinsuyo hasta el Virreinato
La Coya era la esposa principal del Inca y pertenecía a su misma panaca, por eso se
la consideraba su “hermana”. En realidad, este término se refería a todas las personas
de la misma edad del monarca que formaban parte de su extenso grupo familiar.
Los Príncipes.- Eran los hijos del inca tenían la condición de príncipes: pero, el de
su esposa, la de príncipe heredero. Los príncipes solteros se denominaban Auquis, y las
princesas solteras, Ñustas.
1.4. CIPACOLLAS
1.5. PICHUICHURES
Hijo del concubina o de esposas secundarias del Inca, en otras palabras fueron los
vástagos nacidos de una Pihua o Esposa secundaria, tenían condiciones de bastardos.
Todos eran príncipes de sangre real, aunque en orden descendiente desde el punto de
vista jerárquico.
2. LA NOBLEZA
La nobleza se dividida en nobleza de sangre , nobleza de privilegio y la nobleza
provincial (advenediza)
2.1. LA NOBLEZA DE SANGRE
2. Las panacas eran las familias o grupos de parentesco conformadas por los
descendientes de un inca. La panaca principal de la élite estaba integrada por el
Inca, la coya y sus respectivos hijos. Estos trascendían a la nobleza, de modo que
el parentesco podía establecer un linaje, llamado panaca, que atañía incluso al
inca y su familia. La familia de cada Inca formaba un Ayllu Real que recibía el
nombre de Panaca.
3. Orejones Los orejones era basicamente aquellos incas que poseian grandes
aretes de oro gigantes que en su oreja colgaban y por eso que se llamaban
"orejones" por sus grandes orejas colgantes eran descendientes d los panacas
tenian la importancia de tener funciones administrativas y tanto militares, eran de
la nobleza incaica osea tenian el poder de gobernar.
4. Reyes Hatuncuracas dominados por el inca eran etnias dominados por el inca,
nobles que envían sus hijos al yachaywasi
Lic. José Ccañi Mamani 11
HISTORIA DEL IMPERIO INCA: Del Tahuantinsuyo hasta el Virreinato
Estaba integrada por las personas que el Inca había premiado por determinados
méritos convirtiéndolas en una especie de nobles de «segunda categoría». Lo más
probable es que estas personas, pese a formar parte de ayllus que se habían establecido
en el Cuzco, no pertenecían a ninguna de las panacas sino que habían accedido a
alianzas privilegiadas con los incas e integraban el grueso de la burocracia cuzqueña.
Hatun runa era el hombre común del imperio incaico perteneciente a un ayllu con
derechos y obligaciones que se dedicaban a las labores de agricultura. Los hatun eran la
base del imperio incaico de ellos dependía los principios incaicos de reciprocidad y
redistribución se sabe que los incas exportaban productos de un ayllu para llevarlos a
otros ayllus necesitados por desastres naturales ,en el imperio existían un sin número de
ayllus distribuidos proporcionalmente . Los hatun runas pertenecientes a un ayllu tenían
vínculos de sangre, económico, religioso, lingüístico. Los ayllus siguen existiendo hoy en
día, son las denominadas comunidades campesinas
3.2. MITIMAES
Los mitimaes fueron grupos de personas que eran enviados de sus lugares de
origen a otras regiones para cumplir tareas o misiones específicas. Se trasladaban junto
con sus familias y sus propios jefes étnicos subalternos. A pesar de alejarse de sus
pueblos de procedencia mantenían sus vínculos de reciprocidad y de parentesco que los
unían a sus ayllus. Esa fue la diferencia fundamental que los distinguía de los yana, o
servidores, que perdían los lazos de unión con sus orígenes.
3.3. YANACONAS
Fueron los sirvientes del estado, en ciertos casos tuvieron la condición de siervos
perpetuos. Llegaban a la condición de yanaconas como castigo por actos hostiles y
rebeldes contra el estado inca. Los yanaconas perdían todo vínculo con su población y su
lugar de origen, perdían los lazos de reciprocidad con su ayllu de origen. Los incas
podían disponer libremente de ellos.
3.4. PIÑA
CAPÍTULO IV
Lic. José Ccañi Mamani 13
HISTORIA DEL IMPERIO INCA: Del Tahuantinsuyo hasta el Virreinato
1.2. LA REDISTRIBUCIÓN
Suponía una jerarquía; por una parte, se aplica a los ayllus; y por otra, a un centro
coordinador (el estado). Hay un doble movimiento: agrupación en los almacenes del
estado de los bienes obtenidos por el trabajo de los distintos ayllus; y, su posterior
redistribución entre los distintos ayllus de acuerdo a sus necesidades. Al distribuirse
permitía la circulación de los bienes.
2. FORMAS DE TRABAJO
2.1. EL AYNI fue la forma de trabajo que consistió en la ayuda mutua entre los
miembros de los ayllus para la agricultura, la construcción o techado de las casas o el
cuidado de los rebaños.
2.2. LA MINKA cuando todos los miembros del ayllu realizan faenas comunales en
beneficio de toda la comunidad (por ejemplo un depósito, camino o puente).
2.3. LA MITA, era el trabajo de los miembros del ayllu para el estado incaico. Su
finalidad era producir bienes destinados a la redistribución que realizaba el
estado. Este trabajo era realizado por turnos, por un tiempo determinado y
para realizar una tarea específica. Se utilizó para construir andenes,
cultivar maíz, transportar tejidos, entre otras actividades económicas.
Todo los bienes que se obtenían era para el estado inca y se almacenaban
en los depósitos del estado denominados colcas.
3. TIPOS DE TIERRA
Lic. José Ccañi Mamani 14
HISTORIA DEL IMPERIO INCA: Del Tahuantinsuyo hasta el Virreinato
Las tierras para el cultivo fueron muy importantes para la actividad agrícola. El valor de la
tierra radica en que si realmente es fértil y se cuenta con la mano de obra necesaria para
hacerla producir.
Cada Inca recibía, las que pasaban después a su panaca. La producción de estas
era destinada al sustento del Inca y su familia, se situaron alrededor del Cusco. Fueron
trabajadas por mediante la mita y los yanaconas.
Eran tierras cuya producción estaban destinadas para mantener a los templos y a
las personas dedicadas al culto. De esta forma la producción de estas tierras era
destinada al mantenimiento los sacerdotes, o a los asistentes a fiestas y ritos especiales
se utilizaban como ofrendas. Estaban distribuidas por todo el imperio incaico.
Eran las tierra que se administraban y comunitariamente entre los miembros del
ayllu. Los curacas eran los encargados de la distribución de estas tierras entre la
población, quienes las trabajaban para su sustento. No sólo incluyeron las tierras, sino
también pastos y fuentes de agua. De estas tierras, a cada persona se le entregaba una
parcela llamada topo o tupu, la que se debía explotar para poder sustentarse.
- EL TOPO O TUPU
Fue una técnica muy particular usada por los incas, estaban compuestos por varios
surcos que no eran más que hendiduras en la superficie de la tierra, el agua no podía
empozarse más de un día ya que los cultivos podían pudrirse.
A causa de la zona geografía que el agua sea un recurso natural escaso y de difícil
manejo. En épocas incaicas, estos problemas fueron enfrentados exitosamente, creando
una tecnología propia y original ligada a una fuerte organización que giraba en torno al
riego, logrando así un gran desarrollo agrícola. Entre las técnicas más usadas por ellos
se encuentran los canales de regadío, las canaletas, las acequias y los canales de
derivación. Los conocimientos hidráulicos -canales y bocatomas-, permitieron la irrigación
y el cultivo, especialmente del maíz.
- Productos agrícolas
Se estima que los incas cultivaron cerca de setenta especies vegetales, entre ellas,
papas, camotes, maíz, ajíes, algodón, tomate, maní, oca y quinua.
- Principales Cultivos
CAPÍTULO V
3. LA ORGANIZACIÓN DECIMAL
Los incas para tener un mejor control de la población de los ayllus utilizaron el
sistema decimal. Este empadronamiento estuvo destinado posiblemente a crear escalas
de control desde la misma base del ayllu (una familia nuclear). Y sus fines pudieron
ser administrativos, militares o tributarios.
El Purej 1 familia
4. LOS QUIPUS
Estas últimas eran de diverso color, tamaño y grosor; y, cada cierto espacio se
colocaba nudos.
CAPÍTULO VI
Los hijos del pueblo no asistían a las escuelas, ellos recibían una educación no
formalizada, muy diferente a la recibida por la nobleza, que se ha practicado y practica en
todas las épocas y en todos los lugares del mundo. La educación del pueblo incaico se
caracterizó, porque más que recibir una educación llena de conocimientos científicos y
teóricos, recibió una educación eminentemente práctica, la cual tenía como punto de
partida el hogar y en su misma comunidad o Ayllu.
Este tipo de educación estaba a cargo de los padres y los miembros más antiguos,
quienes trasmitían de esta manera a los más jóvenes, sus conocimientos, sus
experiencias, y habilidades, sobre aspectos relacionados con la agricultura, las artes y la
moral, la religión, la caza y la pesca, así como toda manifestación cultural propia de su
nivel social. Esta clase social es digna de admiración y singular elogió, ya que de su seno
salieron los más grandes arquitectos, ceramistas, orfebres, textiles y agricultores, en
suma, los creadores de la gran cultura del Antiguo Perú, orgullo de América y de la
humanidad.
Durante el incario todo estaba regido por normas o leyes, lo que constituye un
verdadero Derecho. Pero conviene añadir que este Derecho no estaba compilado,
reunido en un código, como sucede en la actualidad, era más bien un derecho impuesto
por la costumbre y que se traducía por la misma organización imperial. Cada uno sabía lo
que debía y lo que no debía hacer.
2. LAS CIENCIAS
Durante el incanato se cultivaron diversos aspectos científicos entre los cuales cabe
mencionar:
La filosofía, que buscó una interpretación del mundo y de la vida en base a sus
creencias religiosas.
La cosmología, que buscó interpretar la forma de la creación del mundo inca bajo
la concepción del hacedor Wiracocha.
Astronomía, basada en el estudio de los movimientos de los astros como
factores determinantes en el proceso de siembra y cosecha.
Medicina, pese a que estuvo ligada a la magia y a la hechicería, sin embargo,
utilizaron el poder medicinal de algunas plantas como la coca, la huamanripa, el
jeto-jeto etc. Habían curanderos especializados que al aplicar sus bebidas en los
pacientes, obtenían excelentes resultados.
Cirugía, fueron magníficos cirujanos, al igual que los hombres de la cultura
Paracas, especializados en la trepanación craneana. Esta clase de intervenciones
en el cráneo se explica, sobre todo, por las acciones de guerra y las armas de los
ejércitos que ocasionaban contusiones y fracturas que motivaban la operación.
Como implementos de cirugía utilizaron finos enseres que tenían como base la
piedra de obsidiana.
Ingeniería, que se basó en cálculos y orientaciones de orden matemático para
realizar las construcciones arquitectónicas así como también para la construcción
de los andenes y los canales.
Lic. José Ccañi Mamani 27
HISTORIA DEL IMPERIO INCA: Del Tahuantinsuyo hasta el Virreinato
CAPÍTULO VII
ORGANIZACIÓN MILITAR INCA
La Organización militar en el Imperio
Inca, compusieron un poderoso, eficiente
y bien equipado ejército, a fin de
asegurar la paz dentro de su propio
territorio, poder enfrentarse ante posibles
enemigos del exterior y para ensanchar
sus dominios. El servicio militar era
obligatorio para todos los runas o
ciudadanos varones comprendidos entre
los 25 y 50 años de edad. Estaban
exceptuados sólo los que por defectos
físicos no podían portar armas ni desplazarse con rapidez.
1. LAS ARMAS
El ejército imperial contaba con dos tipos de armas:
CAPÍTULO VIII
1. LA COSMOVISIÓN ANDINA
1.1. CONCEPTO DE COSMOVISIÓN
El hombre andino, mediante sus mitos y tradiciones, nos transmite la forma en que
organizo su territorio, su sociedad, su pensamiento, etc. Los cronistas fueron los primeros
en describir las características de la sociedad inca, y en sus crónicas recogieron las
leyendas y tradiciones, que nos revela la forma diferente concebir e interpretar el mundo
que tenían nuestros antepasados.
Dentro del nivel horizontal, se encuentra la noción de dualidad: el mundo era dividido
en dos mitades, hanan y hurin.
En el nivel vertical, el mundo estaba compuesto por tres planos: el Hanan Pacha o
mundo de arriba, era el espacio donde vivían divinidades como Wiracocha, el sol, la
luna y el rayo; el Kay Pacha o mundo de aquí (de los vivos), era el espacio donde
vivían los hombres, las plantas, los animales y algunos objetos sagrados como el Inca
o el Cusco; y, el Ucu o Hurin Pacha, era el mundo de abajo (o de los muertos), en
este espacio vivian las divinidades relacionadas con la fuerzas profundas de la tierra
como la Pachamama o Pachacamac, aqui también se encontraban las pacarinas.
El término huaca en el mundo andino hace referencia a todo objeto que es sagrado,
como por ejemplo un ídolo, un templo una ciudad, un cerro, una laguna, el Inca, el
curaca, etc. Todo aquello que ofrecía un aspecto que llamara la atención se podía
convertir en una huaca.
Las huacas eran veneradas porque se tenía la creencia que ellas permitían
asegurar la producción agrícola y ganadera. Mediante el ofrecimiento de ofrendas y la
realización de fiestas y rituales, la población andina invoca la colaboración de estos seres
sagrados.
En cada ayllu se tenía la creencia que su origen estaba en el interior de la tierra, del
subsuelo. Se sostenía que los primeros habitantes de un ayllu habían salido de un
Lic. José Ccañi Mamani 32
HISTORIA DEL IMPERIO INCA: Del Tahuantinsuyo hasta el Virreinato
determinado lugar al cual todos los miembros del ayllu reconocían como su lugar de
origen o pacarina. Todo ello debido a la orden de alguna divinidad.
El vínculo que establecía la pacarina entre los miembros de un ayllu era muy
poderoso. Cada persona se sentía pariente de la otra, y esta relación se mantenía de
generación en generación.
Las pacarinas podían ser cerros, cuevas, volcanes, lagos e incluso el mar. Uno de
los ejemplos más conocidos es el que trata sobre el origen de los Incas. En la leyenda de
los hermanos Ayar, los incas afirman haber salido de unas cuevas del cerro Huanacaure.
Por otro lado, en la leyenda del Lago Titicaca se sostiene que la pacarina de los Incas se
encontraba en el lago Titicaca, de donde surgieron por orden del Sol.
Cada ayllu tenía sus propias divinidades pero algunos dioses adquirieron una
importancia regional o también panandina. Por lo general, las organizaciones sociales y
políticas más complejas fueron las que consiguieron difundir por extensas zonas el culto
de sus propias divinidades.
1. Sol o Inti
Era el dios de los Incas, éstos imponían su culto al realizar sus conquistas por
todos los ámbitos del Imperio. Lo consideraban como el origen de la vida, de los animales
y de las plantas que con su luz y su calor permite el crecimiento, el desarrollo y la
vivificación en el mundo de aquí o Kay Pacha. En todas las ciudades, principalmente los
centros administrativos debían existir templos en cuyos altares se le debía rendir culto
manteniendo en todo instante, el fuego sagrado como señal de profunda devoción. El sol
era adorado en su templo denominado Coricancha. El sol fue comparado como un animal
que tenía que obedecer las órdenes de su amo, el dios Wiracocha.
2. Apu-Kon-Titi-Wiracocha
Señor supremo del Fuego,de la Tierra y del Agua es decir “Señor de todo lo
Creado”, también era denominado como “Illa-Ticsi-Huiracocha-Pachayachachic”, que
significa “Esplendor originario o Maestro del Mundo”.La significación de su nombre es la
siguiente:
-Apu : una cosa que está encima de todo.
4. OTROS DIVINIDADES:
La luna, (Quilla) reputada como esposa del Sol y madre de los incas.
El rayo, (illapa) dios del fuego, semejante a una serpiente venenosa, el ordenaba
al llover y al garantizar; donde más se le veneró fue en el Collao. Fue imaginado
como un guerrero que producía el trueno al sacudir su honda.
El arco iris, (Cuychi o Cochi) dios castigador. Se le señalaba atributos
directamente vinculados a la fertilidad de los campos y fecundidad de las
hembras.
Estrellas, se creía que todos los animales de la tierra tenían en el cielo un símil
que atendía a la conservación y aumento de ellos atribuyendo a las estrellas este
ministerio.
La tierra, (Pachamama o Mamapacha) diosa de la fertilidad, reconocida con
virtudes y defectos femeninos. De ella dependía el éxito de las cosechas
El mar, (Mamacocha) madre de las aguas o lagunas.
Pachacamac; Fue el dios más importante de la costa central, su santuario se
encuentra al sur de Lima. Se pensaba que manejaba los movimientos
telúricos pues su función primordial era dar vida a la tierra, a través del
movimiento. Junto con la pachamama eran considerados divinidades del subsuelo
o de las fuerzas profundas de la tierra.
5. ENTIDADES SAGRADAS
Dentro de los seres sagrados andinos e incaicos, destacan las conopas o madres
de los alimentos. Asimismo, los apus eran los espíritus de los cerros o montañas a los
que se debía rendir culto para asegurar su protección. También se entregaron ofrendas a
los arroyos y lagos, considerados sagrados. Los malquis eran antepasados momificados
que fueron adorados como protectores del grupo de parientes.
Era el principal sacerdote incaico entre sus funciones estaba la de velar por el
cumplimento estricto del culto al sol, otorgar licencia para construir nuevos templos,
facilitar el culto de los dioses de las provincias conquistadas.
CAPÍTULO IX
Los objetos artísticos del Tahuantinsuyo fueron decorados con sencillos diseños
geométricos repetitivos y simétricos que casi siempre reprodujeron seres vivientes
estilizados. Este estilo apareció repentinamente y al expandirse se impuso en los
diversos pueblos que sometieron.
1. LA ARQUITECTURA INCA
1.1. Características.
1. Sencillez
Las construcciones incas carecen de adornos o decoraciones complicadas. El
tallado, escultura, altos o bajos relieves no se utilizaron de manera excesiva o decorativa.
Esta austeridad se refleja también en la disposición de los ambientes dentro de los
templos, ambos o incluso dentro de la misma habitación del Inca gobernante. A pesar de
esta sencillez, las crónicas hispánicas hablan de un decorado especial en
2. Solidez y Materialidad
Emplearon la piedra en grandes bloques sin ninguna necesidad de utilizar
argamasa. Las piedras eran usadas de tal manera que encajaba una con otra. Un
ejemplo de esta arquitectura se encuentra en el templo de Sacsayhuaman.
Una garra de puma hecha de piedras en Sacsayhuamán, Ciudad del Cusco, Perú.
3. Simetría
Las partes de sus construcciones eran
iguales a partir de su eje. En planta, la simetría
es difícil de apreciar ya que los espacios están
superpuestos, aunque suelen converger en un
ápice o en algunos casos, en una sala principal.
4. Monumentalidad
Por sus grandes proporciones. Las piedras, que eran muy grandes, ayudaban a
que las construcciones fueran también grandes, por lo que se puede encontrar varios
sitios en la ciudad del Cuzco con monumentos de piedra bastante grandes. Tenía una
adaptación a la topografía y los accidentes geográficos de la zona. Los incas, querían
demostrar que ellos podían hacer lo que ellos quisieran con la piedra, por lo que hicieron
una de sus más grandes obras: la piedra de 12 ángulos.
CARACTERISTICAS.
La arquitectura inca, presenta las siguientes características:
1. SENCILLA.- Porque sus construcciones carecen de adornos y decoraciones complicadas que
otras culturas presentan.
2. SÓLIDA.- En sus construcciones emplearon la piedra en grandes bloques que le daba solidez,
debidamente unidas, sin necesidad de utilizar argamasa entre ellas.
3. SIMÉTRICA.- Porque las partes de sus construcciones eran iguales a partir de un eje.
4. MONUMENTAL.- Por sus grandes proporciones
Materiales
Muchos de los materiales empleados en la construcción de la arquitectura inca no
pertenecían exclusivamente al Cuzco. Por las fuentes etnohistóricas, se creía que
muchas de las estructuras incas contenían materiales totalmente foráneos, entre ellos la
piedra en la sierra o el adobe (ladrillo de barro cocido) en la costa.
1.2. TIPOS DE ARQUITECTURA INCA
1. Civil.- conformado por las grandes residencias incaicas y por los palacios de la
realeza y la nobleza, destaca las viviendas populares, tambos, caminos y los
chasquis. Los que destacan los siguientes palacios y son:
- Qasama de Pachacutec
- Qoraqora de Inca Roca
Lic. José Ccañi Mamani 38
HISTORIA DEL IMPERIO INCA: Del Tahuantinsuyo hasta el Virreinato
Arquitectura militar
Puca Pucara:
2. ESCULTURA
La Escala esculpida en la llamada “Gruta sagrada” de Machu Picchu (al pie del
torreón).
El Intihuatana, que se halla en la sección del mismo nombre deMachu Picchu. Es
una escultura alargada, tallada y pulida con extrema pulcritud. Existen otros
intihuatanas en los diversos núcleos arquitectónicos incas.
El Trono del Inca en Sacsayhuamán
La gran roca de Kenko (unos 3 km al noroeste de Cuzco), labrada en un sector
con diversas figuras: pasajes, escalinatas, canales y construcciones diversas. Las
figuras talladas se acomodan a la configuración natural de la roca.
Piedra de Saywite.
3. LA CERÁMICA INCA
1. EL URPU O ARÍBALO
Fue el típico ceramio de los incas y realmente su única creación. Fue un cántaro de
gran tamaño utilizado para trasladar líquidos, elaborar licor fermentado de maíz o para
almacenar los granos que se cultivaban. Tenía un cuerpo era voluminoso, su base era
cónica, su cuello largo y estrecho y su boca abocinada. A los lados de su abultado cuerpo
tenía dos asas y junto a la base del cuello una protuberancia de barro cocido, para
anudar en ellas la cuerda con la que se aseguraba el cántaro en las espaldas de las
personas que transportaban estos ceramios. En su decoración se utilizaba
preferentemente los colores rojo indio y el negro. Los motivos que representaron sobre la
superficie del ceramio fueron simbólicos y marcadamente geométricos (rombo,
2. LOS KEROS.
Por lo tanto Fueron vasos de madera hechos por los incas. Los queros son vasos
de regular capacidad mayormente de carácter ceremonial. Se han encontrado muchos
queros adornados con cabezas de felinos, pumas o jaguares, algunas veces con
incisiones en metal y piedras preciosas en los dientes y los ojos.- El centro de su
fabricación y uso fue el Cusco.
Uno de los méritos de los Incas fue la difusión del bronce (aleación de cobre y
estaño), metal que se convirtió en un material desechable dada la cantidad en que se
producía. De las minas de Bolivia, en la zona sur del Titicaca, se extraía el estaño, que
luego era trasladado por todo el Imperio Incaico. Así, el bronce fue el metal empleado en
la fabricación de armas como hachas y porras en forma de estrella, utensilios, adornos,
Los metales preciosos como el oro y la plata fueron destinados casi exclusivamente
a la confección de objetos relacionados con ceremonias y el culto solar y de otras
divinidades, así como para el uso del Inca y las panacas cuzqueñas y local. Con oro y
plata elaboraron orejeras, brazaletes, anillos, collares, pinzas, agujas y pectorales, etc,
estos metales resplandecían en los objetos mencionados por lo que españoles quedaban
asombrados de su gran calidad y belleza.
1. CARACTERÍSTICA
5. TÉCNICAS
5.1. TÉCNICAS DE FORMA
1. LAMINADO: es el resultado del trabajo de martillado con un percutor,
piedra o hueso según la etapa de la labor, sobre una piedra plana como
yunque.
CAPÍTULO X
2. EL PROBLEMA DE LA SUCESIÓN
Se sostiene que, antes de morir Huayna Cápac, eligió como su sucesor a su hijo
Ninan Coyuchi con la condición de que su nombramiento sea refrendado por la voluntad
de las divinidades. Durante dicho proceso se produjo la muerte de Ninan Coyuchi, de la
misma enfermedad que murió Huayna Cápac. Con este hecho no quedo ningún
candidato que asuma el gobierno como Inca.
Esta noticia se difundió por todo el Tahuantinsuyo, sobre todo en el Cusco. Ello dio
lugar a que se produjeran una serie de intrigas y acuerdos entre las panacas con la
finalidad de presentar a uno de sus miembros como candidato a ser Inca. A partir de lo
cual se generó una serie de guerras entre Huascar y Atahualpa, que representaron las
pugnas entre las panacas por controlar el poder.
Las panacas ubicadas en el Cusco aceptaron a Huascar como sucesor del Inca, y
esperaron la llegada de la momia de Huayna Cápac para iniciar los funerales y las
ceremonias de confirmación del nuevo "Sapa Inca". Sin embargo, cuando llegaron los
orejones, Huascar los mandó matar por no haber traído con ellos a Atahualpa, quien
había estado en el norte con su padre.
élite. Asimismo, había manifestado su deseo de despojarlos de sus tierras y ordenar que
las momias de los anteriores Incas fueran enterradas. Este comportamiento motivó que
los miembros de las panacas empezaran a ver a Atahualpa como un candidato más
apropiado.
Con el apoyo de los generales del ejército que había dejado organizado su padre, y
el de los miembros de las panacas cusqueñas debido al desprestigio en que había caído
Huascar, Atahualpa decidió luchar por el derecho de ser nombrado como Inca. Los
ejércitos de ambos aspirantes se enfrentaron en varias oportunidades, originando la
movilización de una inmensa cantidad de hatun runas.
La forma que emplearon los incas para conquistar a las diversas poblaciones
andinas al Tahuantinsuyo se basó en gran medida en una presión ejercida a través de
amenazas de guerra. De esta manera muchas poblaciones aceptaron el dominio de los
incas sin estar realmente convencidos, solo se sometieron por temor. Una prueba de ello
fueron las innumerables rebeliones que tuvo que combatir Huayna Cápac durante su
gobierno.
Además, las exigencias del estado Inca a las diversas poblaciones sometidas eran
cada vez mayores conforme el Tahuantinsuyo se expandía. Asimismo, los curacas
locales veían que su poder disminuía frente al Inca, al convertirse en vasallos del Cusco.
También, los curacas tenían la obligación de movilizar parte su población a lugares
lejanos para producir el excedente que necesitaba el estado Inca para poder realizar la
redistribución. Asimismo, tuvieron que aceptar en sus tierras, contra su voluntad, la
presencia de centenares o miles de individuos enviados por el Estado Inca para vigilar y
reprimir a la población, en caso de sublevación.
Los pueblos más importantes que colaboraron con los invasores españoles fueron
los Chancas, Cañaris , la Chachapoyas y Huancas. Su ayuda está registrada en
documentos coloniales y en las crónicas, que los llaman "indios amigos", y sin su apoyo
los españoles se hubieran tenido muchas dificultades para someter a los Incas.
CAPÍTULO XI
inversionistas, como ocurrió con las expediciones españolas de entonces: a partir de ella
se constituyó la hueste perulera.
La empresa de la conquista fue llamada también la «Empresa perulera» o «Empresa del
levante». Fue un negocio privado que la corona española tomó como un proyecto
político. Los tres principales socios juraron con una misma hostia.
Francisco Pizarro: Jefe de la empresa
Diego de Almagro: Proveedor universal
Hernando de Luque: Procurador y financista
Pedro Arias: Cuarto socio minoritario
Gaspar de Espinoza: Segundo financista
4. FRANCISCO PIZARRO
Francisco Pizarro nació en Trujillo de Extremadura el año de 1478 y fue hijo
bastardo de un hidalgo y de una humilde campesina del lugar. Tras actuar como
soldado en Italia, retornó a España y pasó a América como paje de Nicolás de Ovando,
gobernador de la Española. Fue lugarteniente de Alonso de Ojeda en sus expediciones a
Venezuela y Colombia. Con Martín Fernández de Enciso fundó la primera ciudad del
continente, Santa María la Antigua de Darién (costa atlántica de Panamá).
En 1513 acompañó a Vasco Núñez de Balboa, como su lugarteniente, al
descubrimiento del Mar del Sur. Durante esta expedición, los españoles, en medio de su
disputa por algunas onzas de oro, oyeron de Panquiaco, hijo del cacique Comagre, las
primeras noticias sobre la existencia de un gran imperio hacia el sur.
En 1519 participó con Pedrarias Dávila en la fundación de la ciudad de Panamá, de
la cual fue alcalde en varias oportunidades y tras el fracaso de Pascual de Andagoya en
su expedición al sur, decidió unirse a dos amigos para iniciar la conquista del mítico Birú.
por orden de Pizarro, pasó a reconocer las costas. En su camino hizo un importante
hallazgo: una balsa con comerciantes de origen tallán procedentes de una ciudad a
la que llamaban Tumbes. Tres de ellos se unieron a la expedición: eran Fernandillo,
Felipillo y Francisquillo. Así mismo, durante su recorrido Ruiz había cruzado de norte a
sur, por el Pacífico, la línea ecuatorial.
Partieron nuevamente hacia el sur y bajaron a tierra en la bahía de San
Mateo desde donde continuaron a pie, atravesando las tierras de los Barbacoas y
Atacames. Cansados de las duras jornadas, de los encuentros con los indios, los
hombres de la expedición exigieron a Pizarro retornar a Panamá. Avanzaron todavía
hasta el río Tempula, bautizado por los españoles como Santiago y reembarcaron. El
nuevo destino fue una isla a la que se ha dado el nombre de isla del Gallo. Una vez allí y
casi en secreto, Almagro abandonó la isla para regresar a Panamá y traer nuevos
hombres de refuerzo. Maña se dieron algunos descontentos para remitir una nota al
gobernador de la capital del Darién. La nota fue envuelta en un ovillo de algodón. Ella
decía:
Pues señor gobernador,
Miradlo bien por entero,
Que allá va el recogedor
Y aquí queda el carnicero
Gobernaba Panamá por entonces Pedro de los Ríos, en reemplazo de Pedrarias
Dávila. Preocupado por la suerte de estos hombres de los Ríos remitió a Juan Tafur,
quien, una vez en la isla, conminó a Pizarro a retornar a Panamá. Como no estaba
dispuesto a ver el fracaso de su empresa, Pizarro instó a sus hombres a no echarse atrás
y trazando con su espada una raya en la arena les dio a elegir: regresar a Panamá, a la
vergüenza y la pobreza o cruzar la raya y continuar con él hacia el sur donde les
esperaba la honra y la riqueza. Trece hombres decidieron acompañarlo. Son conocidos
como los Trece del Gallo.
Tafur trasladó a los trece a la isla de la Gorgona, donde había más alimentos. Allí
esperaron muchos meses hasta que un día avistaron la nave del buen Ruiz que
retornaba en su búsqueda. Pizarro ordenó continuar la marcha hacia el sur. Tiempo
después avistaron una ciudad, la que supieron era Tumbes. Aparecía amurallada y les
traía un vago recuerdo de Valencia, por eso la bautizaron como Nueva Valencia de la Mar
del Sur. Los amistosos nativos los invitaron a bajar. Se ofreció Antonio de Molina, quien
regresó entusiasmado. Lo siguió Pedro de Candia, el griego. Pero había que continuar.
Así, siguieron navegando hasta que avistaron la desembocadura de un río, al que,
después sabrían, los nativos llamaban Saucha y los españoles llamarían Santa. Al fondo
se podía apreciar una cordillera a la que nombraron Sierra Morena. Hoy se le conoce
como Cordillera Negra. Llegados a este punto decidieron retornar a Panamá.
CAPÍTULO XII
I. LA REBELIÓN DE MANCO INCA
1. INTRODUCCIÓN
2. MARCHA AL CUSCO
En compañía de Túpac Huallpa, a quien Pizarro había nombrado «rey» en
Cajamarca (en ese momento ningún cronista conocía todavía la palabra Inca) y, llevando
en calidad de prisionero a Calcuchimac, personaje de la élite incaica que apoyaba a
Atahualpa, el grueso de la hueste conquistadora emprendió la marcha hacia el Cusco.
Durante el viaje, en Jauja, murió súbitamente Túpa Huallpa y fue ejecutado
Calcuchímac, bajo la acusación de haber envenenado al primero. Después de ello,
Francisco Pizarro reconoció a Manco Inca como soberano del Tahuantinsuyo y ambos
marcharon hacia el Cusco.
Manco Inca, hijo de Huayna Cápac, no aceptaba a su hermano Atahualpa como
inca. Por eso, cuando llegaron los españoles se alió con ellos con el fin de expulsar a los
hombres de Atahualpa -liderados por el general Quisquis-, de lo que consideraba su
territorio.
afirman que la cabeza del Inca, lejos de descomponerse con el paso del tiempo, se ponía
más hermosa cada día. Éste fue el recuerdo que el pueblo andino guardó del último de
sus incas y, tal vez, el origen de algunos de sus mitos más bellos.
Esta creencia habría dado origen al mito de Incarri, que tiempo después era
contado por los habitantes andinos y cuyo argumento consistía en que a partir de la
cabeza de un Inca enterrada en algún lugar de los Andes crecería nuevamente su cuerpo
y se daría lugar a la reivindicación del poblador nativo y al nacimiento de una nueva era.
Españarrí fue a buscarlo y le dejó una carta. Cuando llegó Inkarrí encontró el mensaje.
Enojado gritó: ¿Qué ave, qué animal ha manchado con sus patas este papel tan
blanco?». Pero Inkarrí sabía de su hermano, por eso le dejó unos quipus que dicen que
eran de hilo.
«Esos harapos, esas hilachas ¿de qué mísero serán?», dijo Españarrí.
Pero la luna y el sol se juntaron, el toro y el Amaru. El mundo avanzó. La tierra tembló y
la cabeza de Inkarrí la escondió su hermano. Desde entonces surgieron los degolladores.
La sangre de Inkarrí está viva en el fondo de nuestra madre tierra. Se afirma que llegará
el día en que su cabeza, de su sangre, su cuerpo habrán de juntarse. Ese día
amanecerá en el anochecer, los reptiles volarán. Se secará la laguna de Parinacochas,
entonces el hermoso y gran pueblo que nuestro Inkarrí no pudo concluir será de nuevo
visible».
B. Segunda versión
«... El Inka de los españoles apresó a Inkarrí, su igual. No sabemos dónde. Dicen que
sólo la cabeza está creciendo hacia adentro; dicen que está creciendo hacia los pies...
Entonces volverá, Inkarrí, cuando esté completo su cuerpo. No ha regresado hasta
ahora. Ha de volver. Ha de volver a nosotros, si Dios da su asentimiento. Pero no
sabemos, dicen, si Dios ha de convenir que vuelva». Fragmento de una versión recogida
en Puquio
CAPÍTULO XIII
LAS GUERRAS ENTRE PIZARRISTAS Y ALMAGRISTAS
1. PRIMERA GUERA CIVIL: LA GUERRA DE DIEGO DE ALMAGRO EL VIEJO
A. Antecedentes y causas de la guerra
En 1534 Carlos V dividió los territorios sudamericanos en dos líneas paralelas. Así,
aparecieron la gobernación de Nueva Castilla, de Francisco Pizarro, desde el grado 1° de
latitud sur hasta el 14°, cerca de Pisco; y, la gobernación de Nueva Toledo, de Diego de
Almagro, que se iniciaba en el grado 14° y terminaba en el 25°, en Taltal (Chile).
Almagro recibió la noticia de la confirmación de su gobernación de Nueva Toledo,
cuando se encontraba en el Cusco (1535) preparando la expedición de conquista de
Chile. Inmediatamente los soldados seguidores de Almagro reclamaron la antigua capital
incaica para Diego de Almagro, pero mientras llegaban los documentos que acreditaban
su nombramiento, Almagro prefirió continuar con la expedición al sur con la remota
esperanza de encontrar otro Perú.
La conquista de Chile o Nueva Toledo (1535-1537), por parte de su gobernador,
Diego de Almagro, resucitó antiguas rivalidades entre él y su viejo socio Francisco
Pizarro. La expedición a las tierras chilenas había resultado un fracaso: el territorio
descubierto era pobre, el Huillac Umu había fugado, Felipillo intrigaba con los andinos,
las luchas contra los indígenas araucanos se sucedían y la constante amenaza de
motines dentro de la propia tropa española la agotaba. Finalmente, decidió regresar al
Cusco.
Hernando y Gonzalo Pizarro, que en ese momento se encontraban en la antigua
capital inca, habían sofocado con mucho esfuerzo la sublevación de Manco Inca.
Aprovechando la frágil situación de los Pizarro, Almagro tomó la ciudad,
argumentando que ésta se encontraba dentro de su gobernación. A la vez hizo
prisionero a Hernando Pizarro, hermano del conquistador del Perú.
Enterado de lo sucedido, Francisco Pizarro inició una serie de negociaciones con la
finalidad de liberar a sus hermanos. Finalmente, logró su objetivo.
Francisco Pizarro, que deseaba evitar una guerra, convocó a las conversaciones de
Mala (octubre de 1537) bajo el arbitraje del sacerdote de la orden mercedaria, Fray
Francisco de Bobadilla. Finalmente, el 15 de noviembre de ese mismo año el fraile falló a
favor de la gobernación de Nueva Castilla. La «gran ciudad» pertenecía a Pizarro. Pero
Almagro y su gente reaccionaron con indignación y se levantaron en armas.
Posteriormente en las conversaciones de Lunahuana y Chincha se determinó que: el
Cusco quedaba provisionalmente bajo el poder de Almagro hasta la llegada del fallo del
Rey de España; y, que se libera a Hernando Pizarro
B. La batalla de Las Salinas y la muerte de Almagro, el Viejo
Tan pronto como fue liberado, Hernando dirigió el ejército pizarrista contra Almagro.
Los pizarristas se encontraron con los de Chile (nombre que recibieron los almagristas) el
6 de abril de 1538 en los campos de las Salinas, muy cerca del Cusco. Tras una
sangrienta batalla los almagristas fueron derrotados.
Aunque Diego de Almagro trató de refugiarse en la fortaleza de Sacsayhuamán, no
fue difícil tomarlo prisionero, pues se encontraba muy enfermo. Una vez en el Cusco,
Hernando Pizarro levantó un «rapidísimo» juicio contra Almagro, acusándolo de haber
dado muerte a numerosos españoles, desconocido a las autoridades legítimamente
nombradas, abandonado la conquista de Chile, repartimientos sin gozar de los
derechos concedidos por la Corona, de romper juramentos y tregua, etc.
Al final del proceso don Diego fue sentenciado a muerte y se le estranguló en su
propia celda. Luego, su cadáver fue llevado a la plaza mayor del Cusco, donde fue
decapitado el 8 de julio de 1538. Más tarde, en España, Hernando Pizarro pagaría con
muchos años de prisión la muerte de Diego de Almagro.
2. SEGUNDA GUERRA CIVIL: LA GUERRA DE DIEGO DE ALMAGRO EL MOZO (LA
REVANCHA DE LOS ALMAGRISTAS)
Después de la muerte de Diego de Almagro, Francisco Pizarro no dudó en quitarles casi
todas sus encomiendas a los de Chile. Por ello, éstos decidieron reunirse de nuevo en
Lima con el fin de vengarse. Encabezados por Juan de Rada, se unieron al hijo mestizo
de su antiguo líder, Diego de Almagro el Mozo.
A. La muerte de Francisco Pizarro
Los de Chile esperaban ansiosos la llegada de un juez nombrado por la Corona
para que investigue las causas de los conflictos ocurridos en el Perú y castigue a los
culpables. Este juez fue el licenciado Cristóbal Vaca de Castro. Sin embargo, en Lima
corría el rumor de que el funcionario real ya había sido comprado por Francisco Pizarro.
Desilusionados, los almagristas decidieron hacer justicia por sus propias manos.
Fue así como el 26 de junio de 1541 éstos, gritando «viva el rey, muera el tirano»,
cruzaron la plaza mayor de Lima y se introdujeron en la casa del conquistador. Don
Francisco reaccionó corriendo hacia sus armas y vistiendo su coracina. En esa
sangrienta refriega murieron Francisco Martín de Alcántara (hermano materno de Pizarro)
y su paje Gómez de Luna. Finalmente, Juan de Rada, recurriendo a un traicionero ardid,
empujó sobre Pizarro a uno de sus hombres, haciéndolo retroceder y permitiendo que
todos avanzaran sobre él para matarlo a estocadas. Cuenta la leyenda que, a punto de
expirar, Pizarro remojó los dedos de la mano derecha sobre su abierta garganta y dibujó
con ellos una cruz en el piso. Para apurar su deceso, uno de los almagristas le lanzó una
vasija sobre la cara. Ése fue el final del vencedor de los incas.
A la muerte de Pizarro, los de Chile nombraron como gobernador a Diego de
Almagro el Mozo.
B. La llegada de Cristóbal Vaca de Castro
Los sucesos del Perú mostraban que aún no se habían afianza el gobierno español.
Los continuos enfrentamientos entre pizarristas y almagristas, las supuestas
CAPITULO XIV
LAS REBELIONES DE LOS ENCOMENDEROS CONTRA LA CORONA ESPAÑOLA
1. LA ENCOMIENDA Y LOS CONQUISTADORES
A. Características
La encomienda fue una institución de importancia fundamental en las primeras décadas
de la colonización del Perú, ya que a través de ella se articularon las relaciones entre
españoles e indígenas. Esta institución tuvo como antecedente la encomienda medieval
española, un modo de patrocinio muy difundido que consistió en la cesión de tierras a
cambio de protección y defensa. En el caso americano, la encomienda no significó
otorgamiento de tierras, pero sí se mantuvieron los conceptos de protección y defensa.
Así, a diferencia de la encomienda medieval española, la encomienda
americana (también llamada «repartimiento de indios») significó el otorgamiento de
fuerza de trabajo de indígenas a determinados españoles.
La institución de la encomienda tuvo su fundamento jurídico en la obligación de los
indígenas de pagar un tributo a la Corona de Castilla en su condición de «vasallos libres»
del rey. Así, la encomienda se suscita a partir de la cesión del goce del tributo hecha por
el monarca en favor de los encomenderos, en premio de los servicios de dichos
personajes en la incorporación de nuevos territorios al patrimonio de la Corona.
Los deberes de los encomenderos eran varios, quizá el más importante era el de la
doctrina, es decir, que debían sufragar los gastos de los curas doctrineros encargados de
tal labor y, a falta de ellos, ver la manera de asegurar que la evangelización se
propagara. Igualmente, los encomenderos debían cumplir con la denominada «carga
militar», que consistía en la obligación de acudir «con sus armas y caballos» a la defensa
de la tierra cada vez que las autoridades lo solicitaran, bien fuera en el caso de
levantamientos indígenas o de ataques de otro tipo.
Finalmente, los encomenderos estaban obligados a dar buen trato a los indígenas,
aunque esto estuvo lejos de ocurrir, sobre todo en los primeros tiempos.
B. Importancia: la fortuna del encomendero
Durante las primeras décadas de la colonización, los conquistadores
tuvieron bajo su control gobierno, tierras, minas, circuitos comerciales
y recursos humanos, gracias a lo cual lograron amasar grandes fortunas. Si bien la
encomienda otorgaba el derecho de cobrar el tributo a un número de indígenas a
cambio de la obligación de evangelizarlos, sin que ello implicara la posesión de
tierras, los encomenderos también obtuvieron la mano de obra de sus indígenas y,
frecuentemente, el acceso a la compra de sus tierras comunales. Así, este grupo de españoles
privilegiados disponía del monopolio de la mano de obra indígena (la cual
teóricamente no debía utilizar en su beneficio) que aplicaba a la agricultura,
la minería, el comercio y la industria.
En los primeros años no existía ninguna regulación que limitase las exigencias
españolas, de modo que, según un contemporáneo, «la tasa y medida era la
voluntad del encomendero». Sin, límites, muchos encomenderos se aprovecharon sin
reparos del trabajo de sus indígenas y se beneficiaron al máximo con productos –o
eventualmente dinero– exigidos a éstos. Los abusos de los componentes fueron muy
intensos en los tiempos iniciales.
Junto con el aprovechamiento de los frutos del trabajo indígena, el encomendero
gozaba del estatus social más elevado en el naciente mundo hispanoperuano. Así, los
encomenderos eran los vecinos de las ciudades y en los primeros años monopolizaron
tanto el poder político como el económico. La expresión social de la riqueza era la
casa poblada y un enorme séquito de allegados y dependientes. El encomendero llevaba
una vida ostentosa, tenía esclavos y ocupaba puestos en el cabildo.
2. LA CORONA CONTRA EL PODER DE LOS ENCOMENDEROS
La Corona española, cansada de las malas noticias provenientes del Perú, decidió
tomar el control de la situación. Para ello era necesario nombrar un representante oficial
del rey y un tribunal de justicia en este territorio. Sólo así se podrían resolver los
problemas entre los conquistadores por la vía legal y no mediante la guerra. Por eso se
decidió nombrar un virrey para el Perú y se estableció una Real Audiencia en Lima.
Pero para poder gobernar el Perú, la monarquía debía limitar el excesivo poder de
los encomenderos.
Mientras los representantes del rey discutían sobre estos asuntos, el fraile dominico
Bartolomé de Las Casas abogaba para conseguir una legislación que protegiera a la
población indígena. Para el dominico era indispensable que la Corona asumiera el control
de las colonias y liberara a los nativos de los abusos de los encomenderos, pues estos
atropellos eran la causa directa de la disminución de la población aborigen en América.
Además, según él, era un deber del rey cristiano proteger a sus nuevos súbditos.
Así, los planteamientos de Bartolomé de Las Casas y los del emperador Carlos V
coincidieron, motivando la elaboración de un conjunto de leyes conocido como las Leyes
Nuevas.
3. LAS LEYES NUEVAS: A FAVOR DE LOS NATIVOS PERO LIMITANDO EL
PODER DE LOS ENCOMENDEROS
Las Leyes Nuevas fueron proclamadas por Carlos V en noviembre de 1542. En
ellas se creaba el virreinato peruano, se disponía la instauración de una Audiencia para
Lima como máximo organismo judicial del Perú, que estaría presidida por un virrey con
poderes administrativos y militares.
Además, la nueva legislación reconocía a la población nativa como vasallos de la
Corona. Como tales, no podían ser obligados a trabajar sin un salario, tampoco se les
podía imponer tributos de manera arbitraria ni esclavizar por ningún motivo. Los
españoles que los hubieran maltratado o no tuvieran sus títulos en orden perderían
inmediatamente sus encomiendas.
A partir de la promulgación de las Leyes Nuevas, sólo el rey o su representante
podían repartir encomiendas, y al morir el encomendero la población indígena a su cargo
volvía a la Corona, la que les nombraría un nuevo encomendero. Además, todos aquellos
que lucharon contra Almagro el Viejo en la batalla de las Salinas debían perder sus
encomiendas. De esta manera, la Corona pretendía castigar a todos los que participaron
en la primera guerra civil, para evitar así que los derrotados siguieran buscando
venganza y poner un castigo ejemplar a todo aquel que ocasionara enfrentamientos entre
los conquistadores.
Quedaba claro, entonces, que cualquier disputa entre los españoles en América
debía ser resuelta por el rey o sus representantes, y nadie podía hacer «justicia» con su
propia mano.
Era evidente que esta legislación molestaría a más de uno en el Perú. Así, las
Leyes Nuevas, lejos de detener los abusos contra la población andina y pacificar al país,
fueron la causa directa de la mayor rebelión contra la Corona española ocurrida en
Sudamérica durante el siglo XVI. La rebelión estaría dirigida, nada menos, que por el
menor de los hermanos del conquistador del Perú, Gonzalo Pizarro.
4. LA REBELIÓN GONZALO PIZARRO O DE LOS GRANDES ENCOMENDEROS
(1544 – 1548)
Como un justo premio por el sacrificio económico y personal que significó la
conquista, los encomenderos del Perú esperaban que el monarca español les concediera
el derecho de heredar sus encomiendas de padres a hijos con el fin de mantenerlas por
siempre dentro de una misma familia. Por esta razón, las noticias acerca del contenido de
las Leyes Nuevas crearon una sensación de frustración entre los encomenderos, que se
sintieron traicionados por su rey.
A. Causas
La llegada a Lima del primer virrey del Perú, Blasco Núñez de Vela, y de los miembros de
la Audiencia, convirtió la frustración de los conquistadores en odio. El virrey, un hombre
inflexible, estaba decidido a aplicar literalmente las Leyes Nuevas. Esta actitud hizo que
los encomenderos nombraran a Gonzalo Pizarro como su Procurador General para
protestar contra la detestada legislación ante el virrey. Pero Núñez de Vela, en lugar de
dialogar con Gonzalo Pizarro, lo condenó a muerte. A Gonzalo no le quedó más camino
que la rebelión.
B. Batalla de Iñaquito
La guerra fue favorable a Gonzalo Pizarro, quien luego de tomar Lima sin dificultad,
persiguió al virrey hasta Iñaquito (cerca de Quito) donde lo derrotó en 1546. Blasco
Núñez de Vela fue capturado y luego decapitado de inmediato en el campo de batalla por
algunos pizarristas.
Nadie sabe hasta ahora por qué el rebelde no tomó la ciudad de Lima, lo cierto es
que después de permanecer un tiempo en las antiguas ruinas decidió marchar hacia el
sur con dirección a Ica.
La batalla de Chuquinga
Mientras los rebeldes retrocedían hacia el sur, un ejército realista, que se había formado
en Charcas (Bolivia) al mando del mariscal Alvarado, estaba a punto de alcanzarlos. Al
enterarse de la presencia del Mariscal, Hernández Girón decidió subir a la sierra para dar
allí la batalla. Efectivamente, ésta se realizó en una quebrada llamada Chuquinga
(Apurímac) el 21 de mayo de 1554. La victoria fue para los rebeldes, quienes luego de la
batalla siguieron su marcha hacia la sierra sur.
La batalla de Pucará
Un ejército organizado por la Audiencia logró alcanzar a Hernández Girón en Pucará,
donde el 8 de octubre de 1554 el ejército rebelde fue derrotado. El caudillo de los
rebeldes huyó y sólo fue atrapado casi dos meses después en Jauja. Una vez capturado,
Hernández Girón fue trasladado a Lima, donde fue decapitado en diciembre de 1554.
CAPÍTULO XV
FRANCISCO DE TOLEDO Y LA CONSOLIDACION DEL SISTEMA COLONIAL
I. INTRODUCCIÓN
Si bien el virreinato del Perú fue creado en con la promulgación de las Leyes Nuevas, no
fue sino hasta el gobierno de Francisco de Toledo (el quinto virrey) que se consolidó la
administración colonial. El virrey Toledo, que lo fue entre los años de 1569 y 1581, fue un
personaje clave para el gobierno del Perú. Cumplió un rol protagónico en el ordenamiento
colonial, por órdenes de Felipe II, porque marcó la pauta de la organización en los
diversos ámbitos de la vida peruana del siglo XVI y, por ello, sus reformas se advierten en
los ámbitos político, legal, económico y hasta religioso.
1. TOLEDO Y SU VISITA GENERAL AL PERÚ
Desde un principio el virrey Francisco de Toledo fue plenamente consciente de que
la única forma de cumplir con éxito su difícil misión era examinando en persona la
situación económica y social del territorio a su cargo. Por eso decidió recorrer todo el
virreinato peruano. Toledo salió de Lima en 1570 rumbo a la sierra central acompañado
por un grupo de asesores jurídicos y religiosos. Así se inició la famosa Visita General del
Perú
La visita se inició en Jauja, donde el virrey quemó una gran cantidad de
expedientes judiciales para demostrar su desacuerdo con la gran afición de la población
andina a los juicios. Toledo consideraba que las demandas indígenas distraían a los
naturales de sus tareas agrícolas. De Jauja, el virrey y su comitiva pasaron a Huamanga,
y de ahí iniciaron la marcha al Cusco.
A. Justificando la conquista
Durante su viaje de Jauja al Cusco, Toledo se preocupó por recolectar información
sobre los Andes prehispánicos. El virrey quería conocer el tipo de gobierno de los Incas,
cómo dominaron a los otros pueblos, el sistema de sucesión de los curacas, etc. Al
parecer, su objetivo al hacer estas averiguaciones era justificar la conquista española
demostrando que los Incas habían conquistado a la fuerza el Perú poco antes de la
llegada de Pizarro y habían implantado un gobierno autoritario y despótico en los Andes.
Por lo tanto, la invasión española representaba la liberación de la población andina de la
tiranía incaica y el monarca europeo se convertía así en el legítimo gobernante del Perú.
B. En el camino del sur
En 1571 Toledo llegó al Cusco. Lo más importante que ocurrió en esta ciudad
durante la estancia del virrey fue la ejecución de Túpac Amaru I. En agosto de 1572, el
virrey continuó su marcha hacia el sur visitando Chucuito, Juli, La Paz y Potosí, la ciudad
minera más importante del virreinato.
En Potosí, Toledo dictó medidas destinadas a mejorar la producción de plata.
Primero estableció la mita minera, sistema de trabajo obligatorio por turnos, que
aseguraba mano de obra andina para las minas. También impulsó técnicas destinadas a
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS :
1. Angles Vargas, Víctor (1998): Historia del Cusco incaico. Lima: Industrial Gráfica,
tercera edición, 1998.
2. Cieza de León, Pedro de: Crónica del Perú. El señorío de los incas.
3. Del Busto Duthurburu, José Antonio (2006): Túpac Yupanqui: descubridor de
Oceanía. Lima: Biblioteca del Congreso del Perú, 2006.Espinoza Soriano, Waldemar
(1997): Los incas. Lima: Amaru, tercera edición, 1997.
4. Espinoza Soriano, Waldemar (1986): Destrucción del Imperio de los incas. Lima:
Amaru, cuarta edición, 1986.
5. Historia universal: América precolombina. Lima: Editorial Sol, 2003.
6. Porras Barrenechea, Raúl (1999): El legado quechua. Lima: Fondo Editorial de la
Universidad Nacional Mayor de San Marcos, 1999.
7. Palao Berastaín, JUAN BERNARDO. 2005. Etnohistoria del Altiplano de Puno. CARE
PERÚ
8. Rostworowski, María (1995): Historia del Tahuantinsuyo. Lima: Ediciones IEP
(Instituto de Estudios Peruanos), 1995.
9. Rostworowski, María (1953): Pachacútec Inca Yupanqui. Lima: Editorial Torres
Aguirre.
10. Rostworowski, María: Historia de los Incas. Lima: Prolibro–Asociación Editorial Bruño.
11. Rostworowski, María: «Incas», en Enciclopedia temática del Perú. Lima: Orbis
Ventures.
12. Rostworowski de Díez Canseco, María (2002): Historia del Tawantinsuyu. Lima:
Fimart, 2002.
13. Lovon Lovon, LOR VILMORI. 2006. Orígenes de la Sociedad Andina. Ed. Titicaca –
FCEDUC –UNA Puno –Perú
WEBGRAFÍA:
1. http://www.tierra-inca.com/album/photos/
2. http://es.wikipedia.org/wiki/
3. http://html.rincondelvago.com/arquitectura-y-sociedad-inca-en-el-periodo-clasico.html
4. http://www.oni.escuelas.edu.ar/2003/rio_negro/187/Incas/ini_inca.htm
5. http://www.antropos.galeon.com/html/INCAS.htmi
6. http://www.monografias.com/trabajos/incas/incas.shtml