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Comercio Exterior, vol. 35, núm .

11 ,
M éx ico, noviembre de 1985, pp. 1049-1059

El exitoso
,
despegue

economtco de Taiwán S.C. TSIANG *

't 1crecimiento económ ico logrado durante los últimos 30 años de la vida diaria. Los industri ales refugiados trajeron consigo al-
por Taiwán , así como por Co rea del Sur, Hon g-Kong y Singa- gunas fábricas textiles de algodón y lan a y las establ ec ieron en
pur, se ha co nsiderado ejemplar entre los países en desa rrollo, Taiwán con ayuda gubernamental.
con bt,~enas razo nes. Taiwán es un a pequeña isla de 35 962 km 2,
con una muy alta densid ad demográfica pero con una relativa Las urgentes necesidades fi sca les derivadas de mantener fuerzas
escasez de recurso s natura les. A pesa r de esto, y de que su po- armadas de ap roximadam ente medio millón de person as, unid as
blación aumentó en más del doble (pasó de 8.13 millones de habi- al imperativo no menos urgente de restab lecer la infraestru ctura
tantes en 1952 a 18.73 millones en 1983), logró en ese período económica, hicieron imposibl e el equilibrio del presupuesto. Así,
un aumento de cinco veces en su ingreso real per cáp ita. Este en los primeros años de la posguerra hubo un rápido proceso de
resultado es tanto más notable cua nto que persistió la ominosa inflación.
necesid ad de conservar una adecuada capacidad militar. Debido
a las tensiones bélicas de esa región fue necesa rio mantener a no En esa época, las autoridades económicas de Taiwán orient¡;¡ban
menos de medio millón de hombres en arm as durante todo ese su trabajo co nforme a dos populares y erróneas concepciones de
tiempo . política de desa rrollo, muy en boga en l"os círculos académ icos
de entonces. La primera de ellas postulaba que la mejor ma-
Que un país subdesa rro llado logre el despegue económico fun- nera de impul sa r la industri a en un país en desarrollo es rod earla
damentalmente por su propio esfuerzo se ha co mparado a me- con un muro de altos aranceles o de restri cc iones cuantitativas
nudo co n la hazaña de alguien que se leva nte sosteniéndose de a la importac ión, con lo cual se le garantiza un mercado interno
sus propias agujetas; va le la pena, por tanto, estudi ar la experiencia protegido en el que pueden medrar las industrias incipientes; la
ex itosa de Taiwán y de otros países asiáticos de industri alización segunda postulaba la necesidad de mantener, incluso frente a una
reci ente para beneficio de otras nac ion es en desa rrollo que aún inflac ión con siderable, tasas bajas de interés a fin de estimul ar
se esfuerza n por escapa r de la trampa de la pobreza. la inversión industrial, con lo cual se aseguraba, según se decía,
el abastecimiento de crédito barato a las nuevas indu strias.
El Gobierno nacionali sta de la República de China comenzó
su labor de reconstrucción y desarrollo de Taiwán después de la Por desgracia, estas polrticas gemelas son dañinas más que be-
devastac ión provocada por la segund a guerra mundi al y por la néficas; como resultado de ellas, los países en desarroll o que han
derrota en el territorio co ntinental. Los bombardeos de la fuerza persistido en aplicarlas, siguiendo la estrategia entonces en boga,
aérea ali ada causaron graves daños a las principales industrias de se han quedado tristemente rezagados. Afortunadamente, Taiwán
la isla durante ese conflicto y luego la población, co nstituida por fue uno de los primeros países que tuvo el valor de romp er con
aproximad amente 6 millones de personas, se vio súbitamente in- dicha estrategia, al abandonar, en primer lu ga r, la políti ca deba-
crementada por el arribo de casi 2 millones de so ldados y re- jas tasas de interés cuando hay inflación y al devaluar, lu ego, su
fugiados procedentes de China. Las industri as que dejaron los moneda hasta un nivel rea lista gracias al cual se podía prescindir
japoneses se orientaban en su mayoría a abastecer el mercado de restricciones cuantitativas y de aranceles prohibitivos, con lo
de su país (por ejemplo, la indu stri a del azúcar y la del arroz) o que la orientación del proceso de indu strializació n se cambió de
a sati sfacer las necesidades militares de japón, sin otra base econó- la sustitución de importacio nes a la promoción de exportaciones.
mi ca que las mantuviera (tal fue el caso de la planta de alumi-
ni o) . Otras indu stri as se caracterizaban por di sponer de fábricas El rápido crecimiento eco nómico de Taiwán durante los 30
de muy pequeña escala que sati sfacía n las simples necesidades años posteriores a la reforma ha sido en verdad notab le; Corea
del Sur, que empre ndió el mismo camino pocos años después,
tambi én ha tenido logros dignos de encomio. Por tanto, resu lta
* De la Chun g-H ua lnstitution for Economic Resea rch. El autor pre- adecuado reexam inar aq uell a estrategia dominante, a la luz de
se ntó este trabajo, co n el.título "Reaso ns for the success of economic la ex periencia ocurrida en Taiwán.
takeoff of Taiwan" en el seminari o " Políticas para el Fomento de las
Exportaciones: la Expe riencia Intern acional", ce lebrado en la ciudad
de M éxico el 29 y 30 de julio de 1985. [Traducción del inglés de Ser-
Estudiaremos en primer término los argume ntos teóricos de
gio Ortiz H ernán.] los partidarios de aq uell as políticas y los compa raremos co n el
desarrollo rea l logrado en Taiwán .
1050 el despegue económico de taiwán

INVA LIDEZ DE LOS ARGUMENTOS EN FAVOR DE LA nóm ico, ta l como lo hi cieron ve nturosamente Taiwán y otros paí-
ESTRATEGIA DE DESARROLLO BASADA EN LA ses de indu strializac ión rec iente en el Extremo O ri ente.
SUSTITU CIÓN DE IMPORTAC IONES
Como se dijo, en un principio Taiwán ap licaba la estrategi a
de desa rrollo entonces preva lec iente, es decir, dejaba que su mo-
E 1 argumento más in ge nuo en pro de esta estrateg ia es q ue
la industria de los países en desarrollo (actividad diferente de la
agricultura y de la minería, que producen materi as primas) no ti ene
neda estuviera muy sob reva lu ada y perm itía la inflación intern a,
al mismo tiempo que lograba el eq uilibrio de su ba lanza de pa-
gos por medio de co ntrol es c uantitativos estrictos y un alto muro
. posibilidad alguna de competir co n las indu stri as de los países de-
ara nce lario. Conforme a ta les po lític as, las únicas exportac iones
sarrollados . Por tanto, si la actividad económi ca de un país en
que pudo co nserva r Taiwán fueron las tradicion ales, de suyo es-
desarrollo ha de diversificarse hac ia otros ca mpos distintos de los
casas, esto es, azúca r, arroz y piña, más un os c uantos rubros
trad icio nales (productores de materi as primas) , es necesario que
menores ad icionales, orientadas todas en lo fund amental hac ia
sus indu strias nu evas e in cipientes di spongan de un a fuerte pro-
mercados constituid os merced a las relac iones come rciales de la
tección.
preguerra, por ejemplo, a Japón . De plano fue imposible establecer
En su forma más simple, esta concepción equ i·Ja le a nega r por nuevas indu strias de exportac ión y abrir nu evos mercados en el
comp leto la ex istencia de ve ntajas comparativas en los pa íses en exterior. Así, los esfue rzos de in dustri alizació n se vieron limitados
desarrollo. Acaso esto obedezca a una confusión entre la ausencia al establec imi ento de industrias prod uctoras de artícu los baratos
aparente de ventajas absolutas en cualqui er industria, cuando el de consumo destinados al mercado interno fuerteme nte protegi-
tipo de cambio está sobreva lu ado, y la fa lta de ventaj as compa- do . Dado qu e Taiwán es apenas un a pequeña isla, más o menos
rativas en cualqui er industria, lo cua l constituye un a imposibili - del tam año de H o landa, y dado que a princip ios de los cincuen-
dad lógica. ta los co nsumidores tenían un ingreso per cápita muy bajo, las
indu strias destinadas a sustituir importaciones fu ncionaro n inevi-
No se requi ere mayor grado de preparac ión que la c;¡ue dan tab lemente muy por debajo de las esca las necesa ri as para la utili-
los estudios de li cenciatura sobre teoría del comerc io internac io- zación eficiente de la técnica moderna.
nal para entender que es imposible la inexiste ncia de in dustri as
con ventajas comparativas, o la de otras con ve ntajas abso lutas Mante ner la moneda naciqnal muy sobreva luada med iante res-
de costo, siempre qu e el tipo de ca mbio se ajuste en el nivel que tricc iones cuantitativas a la importac ión fue equivalente a privarse
permita esas ventajas. Por supuesto, es posible que la indu stria a sí mismo de los enormes beneficios de la especialización basada
tradicional de exportacion sea tan productiva, inclu so en condi - en las ventajas com parativas y negarse la úni ca oportunidad de
ciones de libre comercio y tipo de cambio de equilibrio, que sea constituir indu stri as con esca las económicas de ope ració n sobre
la única con ventajas absolutas y comparativas de costo. En este la base de amplios mercados foráneos para las mercancías expo r-
caso, tal industria debería ser la única que exportara, a menos tab les.
que pueda demostrarse q ue esconde deseco nnm ías externas o
De esta suerte, cuand o el finado profesor T.C. Liu y yo mismo
se basa en la explotac ión de recursos naturales que se agota n con fu imos llamados por el Gobierno de Taiwá n, en calidad de ase-
rapidez, por ejemplo, la industria petrolera . En este último caso, sores de política económica, en el vera no de 1954, inmediata-
la política adecuada consiste más bi en en imponer un gravamen mente aprovec hamos la oportunidad para persu adir a los funcio-
apropiado a la exportación de las industrias tradicion ales orien- narios públicos de adoptar una política de deva luación, junto con
tadas al exterior que sean pertinentes y dejar que se deprecie la liberac ión del comercio, es dec ir, depreciar el tipo de cambio
el tipo de cambio de la moneda nacional, de suerte qu e algun as de la moneda nacion al hasta un nivel real ista que asegurase el
de las nuevas industrias de exportación puedan dispon er de ven- equ ili brio de la balanza comerc ial, sin necesidad de im poner se-
tajas absolutas de costo. 1
veras restri cciones cuantitativas ni elevados aranceles protectores.
Un argumento más elaborado qu e el anterior es el que afir- Ocurrió entonces que un bien informado ministro del gabinete
ma que la demanda mundial de los productos exportabl es de un nos advirti ó que la demanda de las principa les exportac iones tai -
país en desarrollo puede ser inelástica. En este caso, la deva lu a- wanesas era muy inelásti ca con respecto al tipo de ca mbio, ya
ción, junto con la supresión de barreras arance larias protectoras que los dos rubros primarios de dichas ventas al exterior eran por
o de restricciones cuantitativas a la importación, pu ede cond ucir ese tiempo el az úca r y el arroz, que en conjunto rep resentaban
a tal deterioro de los términos de intercambio que el bienestar casi 80% del va lor de las exportaciones a principios de los cin-
del país sufra menoscabo, a pesar de cierto aumento de las ex- cuenta. Las ventas externas de az úcar taiwanesa prácticamente
portaciones. Esta concepción puede designarse de manera sumari a estaba n fijas por el acuerdo internacional del dulce que asignaba
como el " pesimismo de la elasticid ad" . cada año un a parte de l mercado mundial a cada país productor
y signatario de ese convenio. Las exportaciones de arroz de Taiwán
Como lo demostraron los acontecimientos posteriores, ta l ac- se dirigían en excl usiva a Japón y las ca ntidades y los precios (en
titud pesimista no se apoyaba en la rea lid ad . De hec ho, este su- dólares) se establecía n, año por año, med iante negociaciones di-
puesto ha resultado tan erróneo que la última mod a académ ica rectas entre los dos gobiernos. Así, estos dos rubros principa les
parece haberse trasladado hasta el extremo opuesto de considerar de las exportaciones virtua lmente se enfrenta ban a una elastici -
que todos los " bienes comerciables" de un país pequeño disfrutan dad de d•!manda igual a cero con respecto al tipo de cambio. En
de un a demanda mundial perfectamente elástica. Por supu esto, opin ión de ese ministro, Taiwán representaba un caso típico de
ninguna de estas consideraciones es estrictamente vá lida, pero país en desarrollo capaz sólo de produ cir unos cuantos artículos
los países que en verdad creyeron en el pesimismo de la elastici- tradicional es de exportación y con lo que, al parecer, era una de-
dad ciertamente desaprovecharon una excelente oportun idad de manda mundial extremadamente in elásti ca. La devaluación sólo
elevar la productividad rea l de sus recursos disponibles mediante empeora ría los términos de interca mbio, elavaría los prec ios in-
su reasignación y el comerc io. Así, habrían logrado un poderoso ternos de las mercancias importadas y con ello alimentaría el fuego
impulso en sus esfuerzos por alcanzar la etapa del despegue eco- de la infl ación.
comercio exterior, noviembre de 1985 1051

A pesa r de todo, pers istimos en nu estra pos ición y argum en- im puesto adeud ado. Así, el precio de mercado de los certificados
tamos que aun si las prin cipales exportac io nes trad ic io nales se constituiría un margen flex ible qu e habría de agrega rse a la tasa
viese n confro ntadas po r demandas foráneas de poca elasticidad, fija básica y permitiría que la tasa efectiva resultante se aproxim ase
debería haber cie ntos de nuevos productos susceptibles de fabri - al tipo de ca mbi o de eq uilibrio co nforme al siste ma arancelario
carse con mano de obra barata y de venderse de inmediato en vigente y que se aju stase de manera automática en concord anci a
países co n una escasez re lativa de fuerza de trabajo y, por tanto, con las va ri aciones de la oferta y la demanda.
co n altos costos sa lariales, siempre y cuando no se encubriesen
artificialmente la ab und anc ia y baratura de l trabajo en Ta iwán La misma tasa efecti va así lograda se ap licó gradu alm ente a
mediante la sob reval uac ión de su mon eda. todas las im portac iones y expo rtac ion es y a la mayo ría de las re-
misiones y transferencias. Co n ello se logró al fin la unifi cación
En co ntra de la opini ó n de que la deva luación segura mente del compl ejo sistema de tipos de cambio múltipl es. En agosto de
alentaría la inflación interna, señalamos que los precios en el mer- 1959, a fin de acatar las regulac ion es del FM I, el Banco de Tai-
cado nac iona l de los bienes importados no se determin an por los wán suspendió la prácti ca de separar el tip o de cambio rea l en
costos fina les en ti erra cua nd o se restringe cuantitativamente su dos compon entes (el tipo bás ico y el precio de los certificados
oferta . M ás bien , sus precios de mercado t ienden a determinarse de ca mbi o) y anunc ió qu e de ahí en más el tipo de ca mbio del
por la fu erza de la demanda efectiva interna y por las ca ntidades nu evo yuan taiwanés habría de ser de 38 .08 por dól ar estadouni -
que se autorizan a ingresar en el pa ís. Al devaluar y liberar el co- dense a la compra y de 38.38 a la venta. Se permitió qu e ese tipo
mercio, y en el supu esto de que la demanda externa para todas se deslizara hasta 40 por dól ar en 1960, cuando se fijó hasta fe-
las posibles exportaciones de Taiwán no sea inelástica en conjunto, brero de 1973.
aumentarían los ingresos de expo rtac ión y, por tanto, tambi én se
elevarían las cantidades autorizadas de importación. Por otro lado, En el cuad ro 1 pueden estudi arse los notables efectos en el
si se permite que las importaciones aumenten parí passu con las comerc io exte ri or de Taiwán que tuvo la polít ica de devaluación
exportac ion es después de la devaluación y la li berac ió n come r- y liberación comerci al. Las deva lu ac ion es y rebajas impositivas
c ial, de suerte que haya eq uili brio, no habrá una expa nsi ón de a las expo rtac io nes ap licadas en 1955 fueron sin dud a eficaces
la demand a efectiva agregada en térm in os mo netarios que sea pa ra rea nim ar el co mercio de expo rtac ió n y sacarlo del maras mo
atribuibl e a la devaluac ió n. As í, no hay razó n algun a por la cual en que había caído en 1954, a pesa r de las predicc ion es de los
los bien es importados en co11junto deban aumentar de precio, partid arios de l pesimismo de la elastic idad; sin emba rgo, apenas
si la devalu ac ió n se une a la li berac ión de l comercio. en los años sesenta, después de que el tipo de cambio se vincu ló
con la demanda libre de importac ion es, se logró la verd ade ra ex-
D e hec ho, en tanto que el aranc el im p lícito que impone a las pansión de las ve ntas al exteri o r. H ac ia 1970, el va lor en dólares
importaciones la restricción cuantitativa ini cial, junto con los aran- de las exportac io nes taiwa nesas hab ía ll egado ya a 1 481 millo-
celes, no sea mayor que la ll amada tasa arance laria óptima, habrá nes que, compa rados con los 93 millon es correspo ndi entes a la
sin duda un aum ento del ingreso real debido a una asignac ió n sima de 1954, representaba un aumento de 15.9 veces en 16 años.
más efici ente de los recursos. Así, siempre que no se perm ita inad- La tasa an ual medi a de crecimiento durante los sesenta fue de
vertidamente un a expa nsión monetaria dura nte el proceso de rea- 21.7%. En los setenta co ntinuó esa rápida expa nsión , de manera
signac ión de rec ursos, es más probab le que el nivel gene ral de que en 1980 el va lor en dólares de las expo rtacion es de Taiwán
precios di sminuya, en vez de elevarse, como afirm an los teóricos alca nzó un monto de 19 811 millones, equivale nte a más de 200
de la inflac ió n impu lsada por los costos. veces la cifra de 1954. La tasa medi a anu al de crecimiento du -
rante los setenta fue de 32.6 por c iento.
Por fortuna, nu estras argum entac iones obtuviero n lenta y gra-
du alm ente la aprobac ió n del Gobierno. En abri l de 1958 llegó a El rápid o aum ento de las exportac iones, grac ias a la liberación
la presid encia de la Com isión de Contro l de l Tipo de Ca m bio y comercial y a un tipo de cambio más rea lista, mostró qu e se había
del Comerc io un ministro a quien habíamos convencido de la va- dotado a la eco nomía taiwanesa de la capac id ad para ajustarse
lid ez de nu estras co ncepciones. Así, se adoptó el principi o de la a modo de co ncentrar sus esfuerzos en activid ades en las cuales
devalu ació n junto co n la liberación comerc ial, en ca lid ad de ob- podría utilizar co n las mayo res ve ntaj as su dotación de recursos
jetivo consciente de po lít ica que habría de alcanzarse de manera y evita r aq uell as en las q ue se enco ntraba en desventaja por las
gradual. En la fecha indicada, se deva lu ó el tipo básico de cam- limitaciones de éstos . Dic ho aju ste se manifestó en el cambio de
bio de 15.55 nu evos yuanes taiwaneses a 24.58 a la co mpra y las estru cturas de las exportaciones y de la industri a taiwanesas.
24.78 a la venta. Más importante fue que, a partir de ese mom en-
to, los exportadores (excepto los de azúca r, arroz y sa l) hab rían Con respecto a la prim era de dic has estructuras, en 1952 los
de reci bir certificados de cambio por el monto tota l de los ingre- productos naturales y elaborados de origen agrícola constitu ye-
sos de exportación que entregasen al Banco de Ta iwá n. Los ex- ron 91.9% del valor total de las ventas al exterior. En 1970, la par-
portadores podrían vender en el mercado ta les ce rtificados a los ticipación co njunta de estos dos grupos había descend ido ya a
importadores, qu ienes tendrían que presentarlos para adquirir di- 21.4% y, fin alm ente, en 1984 bajó hasta 6.1 %. Al contrario, la
visas en el banco mencionado. Al mismo tiempo, a fin de lograr pa rti cipac ió n de los productos indu stri ales en las expo rtaciones
que la demanda de mercado de los certificados de camb io refle- se elevó ma rcada mente desde 8.1% en 1952 a 78 .6% en 1970
jara correctamente la demanda de mercado de importac iones, se y a 93 .9% en 1984 (véase el cuadro 2).
suprimi eron co n audac ia las restricciones cuantitativas sobre toda
cl ase de importac ion es permitidas, aunque lo que aún se con si- · Con lo anteri or quedó claro que en el caso de una pequeña
deraba importació n suntuari a sigui ó prohibid a. En genera l, aún se isla co ngesti o nada, co n apenas un a tercera parte de su superfic ie
mantuvieron los elevados aranceles ex istentes, pero la sobretasa susceptible de cultivo y con una densidad demográfica total ma-
de defensa de 20%, que sol ía impo nerse co n base en el va lo r de yor q ue la de los Pa íses Bajos, no son ciertame nte los producto s
las importac iones, se ca lcu ló de ahí en ad elante con base en el agríco las, tales como arroz y az úcar, los que ti enen claras venta-
1052 el despegue económico de taiwán

CUADRO 1

Comercio de mercancías de Taiwán


(Millones de dólares y porcentajes)
Tasa anua l Ta sa anual
media de m edia de
crecimiento crecimiento Balanza de
Años Exportaciones (%) Importaciones (%) comercio
19S2 11 6.S 187.2 70.7
19S3 127.6 191 .7 64.1
19S4 93.3 211.4 - 118.1
19SS 123.3 6.0 201 .0 3.2 77.7
19S6 118.3 193. 7 7S.4
19S7 148.3 212 .2 63.9
19S8 1SS.8 226.2 70.4
19S9 1S6.9 231.4 74.S
1960 164.0 296.8 - 132.8
1961 19S .2 322 .1 - 126.9
1962 218.2 304.1 8S.9
1963 33 1.7 361.6 29.9
1964 433.0 21.7 428.0 18.6 S.O
196S 449.6 SS6.0 - 106.4
1966 S36.3 622.4 86.1
1967 640.7 80S.8 - 16S.1
1968 789.2 903.0 - 113.8
1969 1 049.4 1 212 .7 - 136.3
1970 1 48 1.4 1 S23 .0 42.6
197 1 2 060.4 1 844.0 216.4
1972 2 988.1 2 S13.S 474.6
19 73 4 483.4 3 792.S 690.9
1974 S 639.0 6 96S.8 -1 326.8
197S S 308 .8 32.6 S 9S) .7 30.6 - 642.9
1976 8 166.3 7 S98.9 - S67.4
1977 9 360.7 8 S10.9 849.8
19 78 12 678. 1 11 026.9 -1 660.2
19 79 16103.4 14737.7 1 329.7
1980 19 810.6 19 733.1 77.S
1981 22 611 .2 21 199.6 1 411.6
1982 22 204.3 13.9 18 888.4 9.2 3 31S.9
1983 2S 122.7 20 287:1 4 83S.6
1984 30 4S6.4 21 9S9.1 8 497.3
Nota: Antes de 1973 los datos co rresponden a valores netos de las importaciones y las exportaciones; en este año y después los datos corresponden
a valores brutos.
Fu ente: Departamento de Estadística del Ministerio de Finanzas de Ta iwán.

jas comparativas. Más bien dichas ventajas deben radicar en las CUADRO 2
industrias que requieren grand.es cantidades de fuerza de trabajo
y poco espacio territoria l, así como no demasiado capital. De es- Participación relativa de los productos agrícolas e
te modo, los productos textiles, las prendas de vest ir, los zapa- industriales en las exportaciones de Taiwán
tos, las sombrillas, los juguetes y otros productos de la industria
l iger~ parecían adaptarse adecuadamente a la dotación defacto- Años Agrícolas Industriales
res prevalecientes en esta primera etapa. Los productos agrícolas 19S1 91.9 8.1
que permanecieron en la lista de exportac iones también cambia- 19SS 89.6 10.4
ron sus características. En vez de artículos que requerían re lati- 1960 67.7 32.3
196S S4.0 46.0
vamente más tierra para su producción, tal es como el azúcar y 1970 21.4 78.6
el arroz, las nu evas exportac iones agrícolas tendían a uti lizar tra- 197S 16.4 83.6
bajo con mucha intensidad y a economizar el recurso tierra, como 1980 9.2 90.8
es el caso de los hongos, que pueden cultivarse tod o el año en 1984 6.1 93 .9
capas dispuestas al efecto, de los espárragos y, en los últimos años, l. Incluye productos agríco las elaborados.
de las anguilas para japón y los caracoles comestibles para Francia. Fuente: Con sejo de Planeación y D¡!sarrollo Económicos, Taiwan Statis-
tical Data Books 7984; República de China, Quarterly Nationa l
La facilidad aparente co n la cual pudo Taiwán elevar sus ex- Economic Trends, Taiwan Area, DGBAS, mayo de 198S.
comercio exterior, noviembre de 1985 1053

portaciones después de la devaluación y la liberación come rcial Así, la demanda mundial a la que se enfrenta n los productos
(esto es, un aumento del va lor en dólares de sus ventas al exterior exportab les de un país en desarrollo pequeño, aunqu e no tanto
de 213 veces en 26 años), ha refutado de manera contundente como para volverse litera lm ente un átomo, ni es inelástica, co-
el pesimismo de la elasticidad que prevaleció en los primeros años mo supusieron los pesimistas tempranos de la elasticidad, ni es
de la posguerra. Por otro lado, la experi enc ia taiwanesa tampoco infinitamente elástica como se plantea en los textos modernos de
apoya en realidad la nueva hipótesis, adoptada últimamente por comercio y finanzas internac ionales. La curva de la demanda agre-
numerosos economistas, consistente en suponer que los "bienes gada a la que se enfrenta un país en desarrollo tal es probab le-
comerciables" de un país "pequeño" se enfrentan a una demanda mente muy elástica dentro de cierto rango, es decir, tiene un
mundial de mercado infinitamente elástica. desarrollo casi horizontal, que termin a ab ruptam ente y se vuelve
un movimiento vertical hacia abajo. Sin emba rgo, si los empresa-
La experiencia de Taiwán demuestra que la verdera situac ión rios de ese país son suficientemente hábiles e in gen iosos, pronto
a la que se enfrenta un país " pequeño" no corresponde ni al viejo descubrirán nuevos productos para exportar, o nuevos mercados
pesimismo de la elasticidad, ni a la nueva hipótesis de una de- para su viejos productos, para todos los cuales habrá otro segmen-
manda mundial infinitamente elástica. Si bien el conjunto de las to casi horizontal de la curva de la demanda¡ el cual, sin embargo,
exportaciones taiwanesa s se expandió a pasos agigantados des- es probable que termine otra vez en una línea vertical hacia aba-
pués de la devaluación y la liberac ión, cada rubro en particular jo. Y así suces ivamente. De esta suerte, la curva de la demanda
se enfrentó con frecuencia a restricc iones cua ntitativas una vez mundial agregada de las exporta'c iones puede consid era rse en
que alcanzó el nivel en el que repre se ntaba una amenaza para conjunto como una especie de función esca lo nada. Cuando lo s
los productores extranjeros de ese o de un artícu lo similar. Así, empresarios del país tienen la habilidad suficiente, estos escalones
la curva de la demanda exterior de cada producto de exporta- horizontales se distribuyen muy cercanamente unos a otros en
ció n se transformaba súbitamente de una lín ea más o menos ho- la dimensión vertica l, pero se extiend en co n más amp litud en la
ri zo ntal y elástica en una vertica l y de desarrollo hacia abajo con horizontal, de modo que la curva de la demanda agregada resul-
elasticid ad cero . Esto qui ere decir que cuando los productores tante puede aproximarse a una de trazo suave y muy elástico. En
de otros países comenzaban a sentirse amenazados pedían a sus cambio, si los empresarios carecen de la habilid ad suficiente,
gobiernos que implantaran restricciones cuantitativas (a veces dichos esca lones serán muy pronunciados y se distribu irán muy
amparándose bajo el eufemismo de " restricciones voluntarias") lejos unos de otros en la dimensión vertical. La curva de la de-
contra las importaciones del producto de que se tratase. En tales manda agregada resultante será entonces eq uivalente a un a rela-
casos, lo único que le quedaba a Taiwán era tratar de descubrir tivamente inelástica. Ha sido muy afortunado para Taiwán que
nuevos mercados de exportación para ese producto, sólo para disponga de tan amplia oferta de empresarios capaces, pero al
enfrentarse a restricciones cuantitativas simi lares cua ndo había mismo tiempo debe insistirse en la gran importancia de los in-
logrado penetrar de man era considerable en esos ámbitos nove- centivos adecuados que fueron consecuenc ia de la implantac ión
dosos de comercia lización, o bien elaborar nuevos productos des- de un tipo de camb io realista y que permitieron recompe nsar a
tinados a la exportación. Las ventas taiwanesas al .exterior, tanto los exportadores con todo el va lor de equilibrio del mercado de
agrícolas como de manufacturas, ilustran bien este proceso . Como sus ingresos de exportación. Además, la política de apertura a la
se dijo, la creciente densidad demográfica de Taiwán volvió muy inversión extranjera directa y a la participac ión foránea en las in -
pronto no redituable el cultivo de arroz para exportar. En vez de dustrias nacionales fue también muy úti l al respecto, ya que a
éste, Taiwán impulsó la producción de hongos que podían pro- menudo los inversionistas extranjeros aportan nuevas ideas sobre
ducirse en capas preparadas bajo pequeños cobe(tizos, con lo productos y tienen relaciones útiles en mercados no aprovechados.
que se utilizó tierra en poca cantid ad relativa. El nuevo cultivo
se volvió pronto un rubro . principa l de exportación, co n valor Como es natural, la estructura de la economía de Taiwán cam-
superior a 100 millones de dólares al año. Sin emba rgo, más pronto bió en correspondencia con las profundas variaciones de la com-
que tarde Estados Unidos impuso lo que se ll amó un a " restric- posición de las ventas al exterior y con el ráp ido aumento de la
ción voluntaria" a las exportaciones de hongos taiwaneses a su importancia relativa de la producción destinada a los mercados
territorio . Y Taiwán se vio forzado a buscar nuevas oportunida- foráneos. En 1951, la participación de la producción agrícola en
des para sus hongos en el M erc ado Común Europeo, a la vez que el PIB del país era de 32.5%, en tanto que la de la indu stria, in-
se preocupó por desarrollar un nuevo cu ltivo de exportación , los cluyendo a la minería, la manufactura, los servicios públicos y
espárragos. Con este producto se repitió la historia y muy pronto la construcción, era de sólo 32 .9%. En 1970, la participación agríco-
tanto Estados Unidos como el Mercado Común Europeo comen- la había ya declinado hasta 15.5%, mientras que la industrial se
zaron a im poner restricciones cuantitativas a los espárragos tai- había elevado a 41 .3 %. Durante los setenta continuó esta ten -
waneses, de la misma manera que había ocurrido con los hon- dencia, y en 1984 los productos agrícolas participaban con só lo
gos. Por tanto, Taiwán tuvo que real izar una constante actividad 6.5%, en tanto que los industrial es se habían elevado aún más,
de producción de nuevas exportaciones y descubrimiento de otros hasta 50.6% (véase el cuadro 3) .
mercados, tal como fue el caso de las angu il as y las cebo ll as para
el mercado japonés y de los caracoles para el de Francia, y otros. El cambio de ponderación en el PIB en favor de la producción
indu strial tuvo inmensa importancia para lograr el mejoramiento
En cuanto a las exportac iones de manufacturas se dio un pro- permanente del ingreso real per cápita y del_ nivel de vida de la
ceso simil ar . Por ejemp lo, los productos textiles, el ca lzado, las población taiwanesa . No debe olvidarse q ue en una isla conges-
sombri ll as, los te levisores blanco y negro y de color, los juguetes tionada como Taiwán, la agricu ltura está inevitablemente su jeta
mecánicos y eléctricos, etc., fueron sujetos a restricciones en Es- a la implacable ley de los rendimientos decrecientes. La única for-
tados Unidos y en los países de Europa Occidental. Sólo mediante ma de escapar a ella en gran escala es sacar fuerza de trabajo de
un constante desarrollo de nuevos productos de exportación y la agricu ltura, en donde la tierra constituye el factor limita nte, y
de un descubrimiento incesante de nuevos mercados pudo Taiwán llevarla a la industria en donde aq uélla no representa un obstácu lo.
elevar sus exportaciones tota les con un ritmo tan notable. Esta reasignación de recursos productivos y la capacidad de con-
1054 el despegue económico de taiwán

centrarse en las industrias en las que se dispone de ventajas co m- esto es, alca nza r la capac id ad de mantener un crec im iento auto-
parativas auténticas fueron las razones básicas para que Ta iwán sostenid o permanente del ingreso real pe r cápita.
no sólo haya podido mantener a una población mucho mayor (se
elevó de 8.13 millones en 1952 a 18.73 millones en 1983), sino Dicho aumento depende en el largo plazo del co ntinuo c re-
también pudiera proporc ionarle un ingreso real per cápita c inco c imiento de l capita l productivo por unid ad de 'trabajo, dejando
veces superior (véase el cuadro 4) . Sin embargo, reasignacióri y aparte los aumentos repentinos debidos a las innovaciones técnicas
concentración tales sólo fueron posib les merced a la deva luac ión y al mejoram iento de las oportunidades comerciales. Sin embargo,
y la liberación comercial que pusieron a Taiwán en el camino del los aumentos del capital productivo deben financiarse con ahorros.
desa rrollo orientado hac ia la exportación. De ahí la gran importancia de éstos para el desarrollo eco nómico
de un país .

La principal dificultad a la que se enfrenta un país en desa rrollo


CUADRO 3 en sus esfuerzos por escapar de la trampa de la pobreza y eleva rse
mediante un crec imi ento autososte nid o es generar suficientes
Participación relativa de los sectores en el PIB de Taiwán (%) ahorros, a pesar del ingreso per cáp ita m ise rablemente bajo que
existe, así como financiar la necesari a inversión en eq uipo de
Años Agricultura Industria 1 Servicios
capital, de manera que el cap ital productivo po r unidad de tra-
1951 35.5 23.9 40.6 bajo siga en crecimiento co ntinu o incluso si existe una pob lac ión
1955 29.2 26.4 44.4
en aumento. Como dijo el profesor W.A. Lewis, "el problema cen-
1960 28.7 29.6 41.7
1965 23.7 33.9 42.4 tral de la teoría del crec imi ento eco nómico es ente nder el proceso
1970 15.5 41.3 43.2 med iante el cua l un a com uni dad pasa a ahorrar (invertir) 12%,
1975 12.8 45.9 41.3 cuando antes ahorraba 5%, con todos los cambios en las actitud es,
1980 7.7 52.2 40.1 las instituciones y las téc nicas que esto entraña" (Lewis, 1955, pp .
1984 6.5 50.6 42 .9 225-226).
l. Incluye actividades que elaboran productos proven ientes de la agri-
cultura. Por desgrac ia, la moda académ ica prevaleciente durante los
Fuente: Dirección General de Presupuesto, Contabi lidad y Estadística, cincuenta y los sesenta en materia de teoría monetaria había pl an-
Nationallncome of the Republic of China; Repúb lica de Ch ina, teado una po lítica totalm ente errón ea al respecto, que desesti -
Quarterly National Economic Trends, Taiwan Area, DGBAS, ma- mu laba, en vez de promover, los ahorros del públ ico. Esto es,
yo de 1985. que de acuerdo co n la influencia preva leciente de la economía
keynesiana, la mayoría de los países en desarrollo fue ron inducidos
a adoptar una po lítica mon etaria co nsistente en mantener la es-
CUADRO 4 tru ctura de las tasas de interés de su sistema bancario a los mis-
mos bajos niveles convencionales de los países desarroll ados, que
Ingreso nacional de Taiwán a precios de mercado se caracterizan por una más ab und ante oferta de capital y por
(Precios constantes de 7976) precios más estables, y ello conform e a la idea eq uivocada de que
era necesario para estimular la in versión real y el c recimiento, así
Ingreso nacional agregado Ingreso per cápita como para imped ir una in flac ión impul sada por los costos, que,
Monto Monto según se decía, sería provocada por tasas de interés in crementa-
Años (millones) 1 Índice 2 (un idades) 1 lndice 2 das. En realidad, tal política oficial de tasas bajas de interés, frente
1952 87 308 13.5 10 222 25.9 a cond iciones inflacionarias y gra n escasez intern a de capital, a
1955 11 2 760 17.5 11 895 30.1 la vez añadían combustible a la infl ac ión naciona l, al crear un
1960 151 718 23.5 13.601 34.5 enorme exceso de demanda de los créditos bancarios, y dism inu ían
1965 240 229 37.3 18 582 47.1 la formación rea l de capital en el ámbito interno, al desalentar
1970 387 166 60.1 26 582 67.4 la entrada de ahorros genuinos del público en las in stituciones
1975 558 598 86 .7 34 910 88.5
de intermediación financi era y al desviarlos al ateso ramiento de
1980 879 139 136.4 49 832 126.3
1981 911 667 141.5 50 733 128.5 metales prec iosos y de divisas o al encam inarlos hacia inversiones
1983 1 016 894 157.8 54 606 138.4. personal es en bienes inmueb les u otros usos no prod uctivos.
l. Nuevos yuanes taiwaneses. Taiwán fue probablem ente el primero entre los países en de-
2. 1976 ~ 100.
sarroll o que, en una época tan temprana como 1950, aba ndonó
Fuente: Consejo de Planeación y Desarrollo Económicos, Taiwan Statis-
tical Data Book 1984 con audacia la política de bajas tasas de interés, de aprobación
casi universal, y elevó las tasas co rrespo ndi entes a las c uentas de
ahorro hasta igualar casi la preva lec iente tasa de inflación de pre-
cios que a comienzos del año mencionado se situaba por amba
INVALIDEZ DE LOS ARGUMENTOS EN FAVOR de 100%. En marzo de 1950, el Banco de Taiwán estab leció un
DE LA POLÍTICA DE BAJAS TASAS DE INTERÉS, sistema espec ial de aho rro, llamado Depósitos co n Tasa de Inte-
FRENTE A ESCASEZ DE CAPITAL E INFLACIÓN rés Preferenci al, conforme al cual se ofrecía una tasa nomina l de
interés de 7% men sual, nunca vista hasta entonces, y la cua l, ca l-
¡~ uando se eleva el ingreso rea l per cápita a con secuencia del cu lada a interés compuesto mes a mes, como se estipulaba, as-
~ comercio exterior y la especialización en industrias que tie- cendería a un notab le 125% al año .
nen ventajas compa rativas, es preciso al mi smo tiempo inducir
que la poblac ión nac ional ahorre una parte crecien te de su s d is- Los efectos de la po lítica de interese.s altos fu eron en verdad
ponibilidades monetarias a fin de lograr el despegue econ óm ico, muy rápidos y ex itosos. Los depósitos total es de ahorro y a p la-
comercio exterior, noviembre de 1985 1055

zos se elevaron con rap idez desde un magro tope de 6 millones tiempo de haberse establecido, reaccionó deteniendo la corriente
de nu evos yuanes taiwaneses, o apenas l. 7% de la oferta mone- de sus nuevos ahorros hacia el sistema bancario e incluso comenzó
taria de entonces (dinero+ depósitos a la vista), a fines de marzo a retirar sus depósitos. A fines de diciembre de ese año, el total
de 1950, hasta 28 millones de nu evos yuanes taiwaneses a fines de ahorros y depósitos a plazo había caído hasta sólo 26 mi llones
de junio, aproximadamente eq uival entes a 7% de la oferta mo- de nuevos yuanes taiwaneses, o 4.5% de la oferta monetaria del
netaria del momento. Más notable aún es que rápidamente se puso momento. Y, a partir de agosto, los precios renudaron su rápida
un alto a la inflación de precios. La tasa media mensual de infla- carrera al alza, hasta que, en febrero de 1951, eran 65% superio-
ción durante los primeros tres meses de 1950 aun había sido alta res a los de ju lio del año anterior, cuando se anunc ió la primera
(1 0.33%), pero cayó extraordinariamente hasta sólo 0.4% al mes di sminución de las tasas de interés.
en el segundo trimestre. De hecho, a partir de mayo de 1950,
los precios comenzaron a disminuir un poco. Este resultado sor- Las autoridades monetarias, alarmadas por la posibi lidad de
prendentemente rápido ocurrió antes del propicio cambio de for- que se desatara de nuevo una inflación sin freno, se vieron obli-
tuna de Taiwán, es decir, antes de que Estados Unidos reanudara gadas a elevar, el 26 de marzo de 1951, la tasa de interés de los
su ayuda, poco después de l esta llido de la guerra de Corea, el depósitos a un mes de 3 a 4.2 por ciento, equivalente a una tasa
27 de junio de aq uel año . anual de 64%. Al parecer, el público se calmó lo suficiente como
para que se reanudara el flujo de ahorros hacia el sistema bancario
El Gobierno, estim ul ado en parte por el éxito inmediato, y te- y a ritmo ta l que un año desp ués, es decir, hacia fines de marzo
meroso también de que la tasa de interés de 125% al año fuese de 1952, el total de depósitos de ahorro y a plazo había alcanzado
into lerable con precios estables, disminuyó drásticamente la tasa la suma de 27 1 mil lones de nuevos yuanes taiwaneses o 31.2%
de interés pagadero a los depósitos a un mes, cortándola por la de la oferta monetaria de ese entonces; seis meses después ese
mitad en ju lio, hasta dejarla en 3.5% mensual , y volvió a reducirla total se elevó a 541 millones de nuevos yuanes taiwaneses o 56.4%
en octubre hasta sólo 3%. El público, sorprendido por el abrupto de la oferta monetaria. Entonces se estabilizaron otra vez los pre-
retroceso de la política oficial de altas tasas de interés, a tan poco cios (véase el cuadro 5).

CUADRO S

Oferta monetaria; ahorro y depósitos a plazo y preferencia/es; tasas de interés, y precios al mayoreo, 1950-1954
1 2 3 4 5 6
Fin del Oferta mo- Ahorro y de- 3/2 (%) Tasa de interés Tasa de inflación
período netaria pósitos a mensual de mensual de
plazo y pre- depósitos precios durante
ferencia /es 1 preferencia/es el trimestre
(millon es de nuevos a un mes (%)
yuanes taiwaneses)
1950 marzo 348 6 1.7 7.00 efectiva 10.3
junio 401 28 7.0 7.00 (a partir de marzo 25) 0.4
septiembre 595 36 6.1 3.50 (a partir de julio 1) 6.0
diciembre 584 26 4.5 3.00 (a partir de octubre 1) 5.4
1951 marzo 732 30 4.1 4.20 (a partir de marzo 26) 4.8
junio 942 59 6.3 4.20 3.9
septiembre 687 164 23 .9 4.20 1.8
diciembre 940 163 17.3 4.20 3.9
1952 marzo 867 27 1 31.2 4.20 2.6
junio 942 494 52.4 3.80 (a partir de abril 29) -1.0
3.30 (a partir de junio 2)
septiembre 959 541 56.4 3.00 (a partir de julio 7) -0.4
2.40 (a partir de septiembre 8)
d iciembre 1 336 467 34.9 2.00 (a partir de noviembre 30) o
1953 marzo 1 0 74 499 46.5 2.00 1.5
junio 1 198 640 53.4 2.00 1.4
septiembre 1 292 671 51.9 1.50 (a partir de julio 16) 1.6
diciembre 1 683 599 35.6 1. 20 (a partir de octubre 1O) 0.5
1954 marzo 1 622 667 41.1 1.20 o
junio 1 809 747 41.3 1.20 -1.4
septiembre 1 923 782 40.6 1.00 (a partir de julio 1) -0.6
diciembre 2 128 765 35.9 1.00 1.3
1955 marzo 2 300 816 35.5 1.00 2.7
-
l. El programa de depósitos co·n tasas de interés preferencia les come nzó a elim inarse gradualmente en marzo de 1955. Después los depósitos sujetos
a ese programa se fusionaron con los depósitos ordinarios y el nombre mismo del programa se suprimió.
Fuente: Banco Central de China, Taiwan Financia/ Statistics Monthly, Oficina de Contabi lid ad y Estadística del Gobierno Provincial de Taiwán, Taiwan
Commodity Prices Statistics Monthly.
·1 056 el despegue económico de taiwán

De ah í en ade lante, las autoridades monetarias disminuyeron incluidas las de automóviles de luj o, y de estímulo a las importa-
animosamente la tasa de interés paso por paso, siempre que con- ciones de materias primas y maquinaria de las empresas priva-
sideraron que la estabilidad de precios lo permitía. Sin embargo, das. Estas dos robustas fuerzas anti-inflac ion arias fueron suficien-
debido a la falta de un mercado monetario libre en esa época, temente poderosas como para refrenar la tasa de aumento de la
los ex itosos ajustes a la baja se guiaron únicamente por las creen- oferta monetaria y hacerla descender a só lo 7% durante 1974.
cias subjetivas de las autorid ades monetarias con respecto a las Pronto se redujo la inflación de precios a 14.9% durante el mismo
expectativas del público sobre la inflación futura. Con c ierta fre- año, de acuerdo con el índice de precios al mayoreo de antes
cuencia sobrevaluaron la confianza del públ ico en la estab ilid ad de la revisión; en 1975 se logró la comp leta estab ilizac ión del nivel
de precios, así como su deseo de aportar ahorro al sistema ban- de precios (véase el cuadro 6).
ca rio, y en consecuencia en esas ocasiones se precip itaron al dis-
minuir la tasa de interés, lo cual elevó de nuevo los prec ios. No De esta suerte, la experiencia de Taiwán demostró de manera
obstante, cuando en respuesta a esto último se elevaba la tasa repetida y convincente que adecuadas tasas de interés para los
de interés, los precios de nuevo se estabi lizaban y se reanudaba la depósitos de ahorro y a plazos son el estímulo necesario para
tendencia al aumento de los depósitos de ahorro y a plazos en atraer al sistema bancario los ahorros voluntarios del público y
el sistema bancario . constituyen además un importante instrumento contra la inflac ión .
Así se dio un mentís concluyente a los teóricos de la inflación
Vale la pena destacar un incidente. En 1972 y 1973, la infla- impulsada por los costos, quienes afirm aban que de elevarse las
ción mundial d io a Taiwán la oportunidad de disponer en dos bajas tasas de interés oficialmente reguladas, de seguro se provo-
años sucesivos de grandes superávit de comercio, que se eleva- caría un aumento repentino de la inflación.
ron a 474 millones de dólares y a 691 millones, respectivamente.
Es obligación del Banco Central absorber todas las divisas exceden- La estab ilid ad relativa de precios y las atractivas tasas de inte-
tes, de suerte que la oferta monetaria interna (moneda+ depósitos rés ofrecidas a los ahorradores restau raro n y estimularon los tra-
a la vista) se elevó 38 y 49 por ciento, respectivamente, en esos dicionales hábitos de frugalidad del pueblo taiwanés . También
dos años, pese a que la tasa objetivo de la expans ión monetaria, se adoptaron medidas fiscales para estimul ar el ahorro y la inver-
según se anunció con frecuencia en la época, era de 20%. Como sión, por ejemp lo, del impuesto al ingreso personal se excluye-
resu ltado, después de un largo período de estabi lid ad comenza- ron los intereses provenientes de depósitos de ahorro y a plazo
ron a elevarse los precios, primero en 7.3% en 1972 y lu ego se con vencimientos de dos años o más; del impuesto al ingreso de
dispararon en 40.3% en 1973. 1 Esto evocó el espectro de la in- las empresas se excl uyeron las utilidades que se reinvirtieran, y
flación, aún fresco en la memoria de los taiwaneses. La tasa an ual otras similares. Gracias a estos estímulos, aumentó con rapidez
.de aumento de ahorros y depósitos a plazo descendió de 40% la corri ente de ahorro voiuntario que fluyó hacia el sistema ban-
en 1971 a 21.5% en 1973. De no tomarse prontas medidas, la cario y con ello se logró el muy necesario financiamiento no in-
tasa de aumento podría volverse negativa . A l fin reaccionaron las flacionario de la inversión interna, a lo que se añadió el estímulo
auto ridades monetarias y elevaron las tasas de interés aplicables de la devaluación y de la liberación comercial concurrentes, que
a los depósitos de ahorro y a un año de 8.75 a 9.5 por ciento; abrieron ampli as oportunidades de inversión en las nuevas indus-
esta medida, adoptada en julio de 1973, fue seguida de otra ele- trias dirigidas a la exportación. La inversión resultante de estas
vación, en octubre del mismo año, hasta 11%, y de nuevo, hasta fuentes no inflacionarias de financiamiento provocó el rápido cre-
15%, en enero del año siguiente, con la espera nza de detener cimiento de la productividad por trabajador y, así, el crecimiento
la tendencia descendente de la tasa de aumento de tales depósitos. del ingreso real per cápita a partir de 1960. Por otra parte, ese
veloz aumento del ingreso facilitó a su vez los ahorros, los cuales
Estos esfuerzos resultaron exitosos al fin , ya que durante 1974 no req uirieron tanto sacrificio de las personas debido a la ten-
se elevaron los depósitos a plazo y el ahorro total en la suma de dencia natural del consumo a rezagarse en relación con el ingreso
43 100 millones de nuevos yuanes taiwaneses, o 37.6% más que creciente. De esta manera, Taiwán, antes ca racte ri zado por su
el saldo de fines del año anterior, en comparación con el aumento muy baja propensión al ahorro, se volvió un país de una vocación
de 1973 de sólo 20 000 millones, equivalentes a 21.5% por encima de ahorro notablemente elevada.
del sa ldo correspond iente. El au mento mencionado en primer tér-
m in o fue igua l a casi 50% de la oferta monetaria total (M 1 ) de En 1952, el porcentaje que se ahorraba del ingreso nacional
1974, suma que debía transferirse de ésta a menos que los ban- era de sólo 5.2%. En 1963 ya se había elevado a 13 .2%, sobrepa-
cos restablecieran la oferta con sus operac iones cred itic ias y de sando las proporciones correspondientes al Reino Unido (9.8%)
y a Estados Unidos {9.1 %) en ese mismo año. A partir de 1972
inversión. Así, se constituyó una importante fuerza anti-inflacio-
el monto porcentual del ingreso ahorrado en Taiwán comenzó
naria que se añad ió al cuantioso déficit comerc ial de ese año, de
811.9 millones de dólares, equ ivalentes a 30 900 millones de a superar inclu so al de j apón, que so lía ser el más alto del mun-
do. En 1978, ese porcentaje ascendió en Taiwán a un monto tan
nuevos yuanes taiwaneses. El déficit comerc ial obedeció só lo en
extraordinario como 35 .2%, que se compara con 22 .3 % en japón,
parte a la recesión mundial de ese año, ya que en parte también
9.3% en el Reino Unido y 9% en Estados Unidos en aque l año
fue provocado deliberadamente por el Gobierno mediante una
(véase el cuadro 7).
política de menores restricciones a las importaciones suntuarias,
El despegue económico de Taiwán fue posible precisamente
l . Se trata de los viejos índices de precios al mayoreo publicados por por esta capacidad de generar ahorro intern o suficiente. Si un país
la Dirección General de Presupuesto, Contabilidad Estadística. Los ín- que ha logrado realizar venturosamente su "despegue eco nóm i-
dices revisados de precios al mayoreo de esa misma Institución mostra-
rían un aumento de sólo 4.5 % en 1972 y otro de 22.9% en 1973, seguido co" (tal como lo definió el profesor Rostow ) ha de entenderse
de una fuerte elevación (40. 6 %) en 1974. La razón de estas grandes dis- como aquél que sale de una situación de lucha contra el subde-
crepancias y del retraso en el aumento principal de los precios radica en sarrollo, en la cual apenas es capaz de impedir que descienda
que los viejos índices se refieren sólo a la zona de Taipei, en tanto que el nivel de vida de su población crecien te, aun contando con al-
los nuevos representan los precios medios al mayoreo en todo Taiwán . guna ayuda del extranjero, para entrar en otra en la que le resul-
comercio exterior, noviembre de 1985 1057

CUADRO 6

Oferta monetaria; ahorro y depósitos a p lazo; tasas de interés y precios al mayoreo, 7955-7 980

1 2 3 4 5 6
Fin de l Oferta Depósitos de 3/2 (%) Tasas de interés Ta sa media de aumento
período monetaria ahorro y a plazo de depósitos de los precios
a un año respecto al año
(Millones de nuevos yuanes
anterior ( %)
taiwaneses)
1955 2 555 993 38.9 20.98 14.08
1956 3 161 1 006 31. 8 23 .87 12.7 1
1957 3 740 1 399 37.4 21.70 7.22
1958 S 041 2 464 48.9 21. 70 1.39
1959 S 486 3 290 60.0 18.43 10.27
1960 6 037 4 536 75 .1 18.43 14.51
1961 7 699 9 384 121.9 14.40 3.23
1962 8 086 11 68 1 144.5 13 .32 3.04
1963 10 355 15 300 147.8 12.00 6.46
1964 13 979 18 768 134.3 10.80 2.48
1965 16 194 21 602 133.4 10.80 -4.66
1966 18 170 27 630 152 .1 10.08 1.47
1967 23 537 33 025 140.3 9.72 2.52
1968 25 907 37 818 146.0 9.72 1. 99
1969 28 772 47 806 166.2 9.72 -0.24
1970 32 035 60 378 188.5 9.72 2.72
1971 39 980 79 222 198 .2 9.25 0.02
1972 55 126 101 837 184. 7 8.75 7.25 4.45 b
1973 82 310 120 450 146.3 11.ooa 40 .34 22.86
1974 88 079 165 387 187.8 13.soa 14.87 40.58
1975 111 780 212 313 189.9 12.00a -0.60 -5.07
1976 137 560 270 367 196.5 10.75 4.50 2.76
1977 177 575 360 579 203.1 9.50 2.76
1978 238 079 467 950 196.6 9.50 3.54
1979 254 703 514 504 202.4 12.50 13.84
1980 305 444 63 1 752 206.8 12.50 21.54
a. El 26 de julio de 1973 se elevó la tasa de interés a 9.5% y el 24 de octubre del mismo año se sub ió a 11 %; fina lm en te, el 27 de enero de 1974 se
elevó a 15 %. Sin emba rgo, el 29 de septiembre del último año se disminuyó a 14%; y el 13 de diciembre inmed iato a 13.5%; el 22 de febrero de
1975 bajó a 12.75% y el 21 de abril de ese mismo año a 12%.
b. Las cifras de esta co lumna represe ntan el índice de precios al mayoreo rev isado que corresponde a tod a la isla . Las cifras de la co lum na anterior
corres pond en, al pa recer, a la zona de Taipei.
Fu ente: Banco Centra l de Ch in a, Financiai Statistics Monthly Taiwan District, Repúbli ca de Ch ina, DGBAS, Q uarterly Na tiona l Economic Trends, Ta iwan
Area, y Direcció n Genera l de Presup uesto, Contabilid ad y Estadística, Monthly Statistics of the Rep ublic of China.

ta fác il mantener un ráp ido crec imiento autososten ido del in gre- en donde S = ahorro in terno total por año; L = pob lac ión to-
so rea l per cápita, con o sin ayud a extranjera, entonces Taiwán tal (fu erza de tra baj o); K = ca pital produ ctivo total existente, y
debe considerarse como un país que ha pasado la prueba de ma- L = aum ento an ual de la pob lación (fu erza de trabajo) .
nera sob resa li ente.
Si se dividen ambos lados de la desigualdad entre Y (ingreso
El aum ento co ntinu o de la capacidad productiva rea l ha de real an ual agregado), la expresió n adq ui ere una forma más
conseguirse mediante un a inversión sostenid a en cap ita l producti- conocida:
vo, la cua l debe fi nanc iarse co n ahorro. Así, como se mencionó,
W.A. Lew is consideró alguna vez un a propensió n al ahorro de S!Y > (K/Y) (L/L)
12% o más co mo el signo di stintivo del éxito en cuanto al desa-
rrollo económ ico (Lewis, 1955, loe. cit.). Sin emba rgo, conviene o lo que es lo mismo, que el porce ntaje ahorrado del producto
ser más específico; al respecto he demostrado en otro trabajo sobre nacional neto debe se r mayor que la razón capital /prod ucto, mul-
la teoría del c reci mi ento económ ico (Tsiang, 1964), que la co n- tiplicada por la tasa de crec imi ento demográfico.
dicion básica para lograr el despegue económ ico puede form u-
larse así: q ue el ahorro interno per cápita del país de que se trate Si ap licamos esta co ndic ión al caso de Ta iwán, podremos de-
debe se r más que suficiente para mante ner la razón cap ital y t ra- te rmin ar c uándo logró el despegue eco nó mico y cómo se apro-
bajo ante el crecimiento demográfico, esto es, q ue ximó grad ualmente a sati sface r los req ui sitos para el lo (véase el
cuadro 8). La informac ión co ntenida en este cuad ro mu estra que
S > (K/L) L, la condición para lograr el despegue distaba mucho de haberse
1058 el despegue económico de taiwán

satisfec ho antes de la aplicación grad ual, d ura nte los últimos años la política se nsible de tasas de interés logró restaurar los hábitos
de los cin cuenta, de la po lítica de devaluación y liberac ión co- tradiciona les de frugalidad del pueb lo ta iwanés, la propensión a
mercial. Una vez q ue la li berac ión comercial y el aumento con- ahorra r se elevó a pasos agigantados. La insuficiencia del ahorro
sec uente de las exportaciones adq uirieron pleno impul so y que intern o para satisfacer la condic ión básica de l despegue se supe-
raba co n rap idez, y ya en 1963 la propensión interna al ahorro
comenzó a exceder los requerim ientos de inversión para mantener
CUADRO 7 constante la relac ión ca pital/trabajo, frente al crecim iento demo-
gráfico. Es verd ad qu e el excede nte de ese año fue al princ ipio
Ahorro interno neto como porcentaje del ingreso nacional rea lme nte pequeño, es decir, apenas tres puntos porcentuales,
Años Taiwán japón Reino Unido
aprox imadamente, pero -ta l como puede esperarse sobre la base
Estados Unidos
del razona mi ento teórico (Tsiañg, 1964)- el excedente aumentó
1952 5.2 24. 1 6.4 10.4 de manera progresiva de ahí en adelante, hasta alcanzar 7.3 puntos
1955 4.9 20.4 9.8 12.2
po rce nt uales en 1964, 8.4 en 1965, 11 .S en 1966, etc. Durante
1960 7.6 27.7 10.9 8.6 los setenta contin uó elevándose con rap idez la p ropensión al
196 1 8 .0 29.9 11.0 8.4 ahorro de Taiwá n y superó, con muc ho, el 20%, hasta alca nzar
1962 7.6 28.4 9.4 9.0 un ni vel tan alto como el de 35% . Por tanto, el excedente 5/Y
1963 13.4 26.6 9.8 9. 1
1964 16.3 25.2 11.2
co n respecto a (K/Y) (L/L) continuó amp li ándose. Esto significa
9.8
q ue Ta iwá n es ahora plenamente capaz de log rar una tasa de
1965 16.5 23.3 12.4 11.5 crecim iento del ingreso rea l per cápita continua y satisfacto ri a,
1966 19.0 24.7 11 .5 1(1.3 sin el aux ilio de una corriente de capita l extra njero.
1967 20. 1 27.5 10.4 9.7
1968 19.8 29.4 11.2 9.8
1969 22 .1 29.8 13.8 9.8 De hec ho, antes de l supuesto año del despegue (1963), la fo r-
mación de capita l en Ta iwán dependía muy fuertemente de la
1970 23.8 30.9 14.1 8.3 ayuda exterior y de la entrada de capita l. Estos últimos elemen-
1971 27.6 28 .3 11 .8 8.4
1972 31.6 28 .1 11.4 8.7
tos constituían no menos de 30-50 por ciento de las fuent-es de
1973 35.0 29.2 12.5 11.2 fo ndos para fo rmación bruta de capital antes de 1962 (véase el
1974 31.5 26 .5 7.2 8.7 cuadro 9). A partir de 1963, sin embargo, hubo una dism inu ción
marcada del in greso de cap ita l forá neo y de las transfe rencias de l
1975 25.3 22.2 5.3 5.7
exterior, ya que la ayuda estadoun idense estaba dism in uyéndose
1976 32 .2 22.7 6.5 6.4
1977 32.3 21.9 8.8 7.7 ráp idame nte a med ida q ue se acercaba su fecha de termi nación,
1978 35.2 22.3 9.3 9.0 establecida para 1965. Por suerte, en 1963 la economía levantó
1979 34.9 21.3 9.9 8.6 vapor por sí so la y de ahí en más el aho rro interno no sólo ll enó
con éx ito el vacío dejado por la ayuda foránea , sino que tam bién
1980 32 .5 21.0 8.2 5.6
m a ~ t u vo en marc ha la formación interna de capital con un ritmo
Fuente: Para Taiwán, 5tatistical Data Book 1984; para los otros países, Na- crec iente. Después de 1975, al parece r, hay incl uso la tend encia
ciones Unidas, Yea rbo ok of National Accounts 5tatistics, 1981. a q ue Taiwán se vuelva exportador de capita l.

CUADRO 8
CUADRO 9
Estimación del año aproximado en que ocurrió
el despegue económico de Taiwán Taiwán: fuentes de fondos para la formación interna bruta
de capital (%)
A ños K!Y UL (K/Y) X (L/L) 5/Y 5/Y-(K/Y) X (L/L)
1952 6.0 3.3 19.8 5.2 - 14.6 Formación interna Ahorro interno Entrada de capital
1955 4.8 3.8 18.2 4.9 - 13.3 Perfodos bruta de capita l bruto extranje ro
1960 3.7 3.5 13.0 7.6 - 5.4 1952-55 100.0 59.3 40.7
1961 3.6 3.3 11. 9 8.0 - 3.9 1956-60 100.0 60.0 40.0
1962 3.4 3.3 11. 2 7.6 - 3.6 196 1-65 100.0 85 .1 14.9
1963 3.2 3.2 10.2 13.4 3.2 1966-70 100.0 95.0 5.0
1964 2.9 3. 1 9.0 16.3 7.3 1971-75 100.0 97.4 2.6
1976-80 100.0 106.0 -6.0
1965 2.7 3.0 8.1 16.5 8.4
1966 2.6 2.9 19.0 11 .5
Fuente: Ta iwan 5tatistical Data Book, 1981.
7.5
1967 2.5 2.3 5.8 20.1 14.3
1968 2.4 2.7 6.5 19.8 13.3
1969 2.3 2.5 5.8 22. 1 16.3 Un efecto benéfico incidenta l de la estrategia de desa rro llo tai-
1970 2.2 2.4 5.3 23.8 18.5 wanesa consiste en que, a pesa r de la gran rapidez de su creci-
1972 2.0 2.0 4.0 31.6 27.6 miento industrial, la distribución del ingreso, lejos de hacerse más
1974 2.1 1.8 3.8 31.5 27.7 in equ itativa, como consideran inevitable autoridades tales como
1976 2.2 2.2 4.8 32 .2 27.4 S. Kuznets y otros, se ha vuelto en rea lidad más equ itativa, por
1978 2.0 1. 9 3.8 35.2 31.4 lo menos hasta 1978 (véase el cuadro 10). Este fenómeno atrajo
Fuente: Consejo para la Planeac ión y el Desa rrollo Económ icos, Taiwan la atención de Chenery et al. (1974), qu ienes compararon, en u n
5tatistica l Da ta Book, 1981. estudio muy comprensivo, la experiencia de 66 pa íses. En vista
Nota: La razó n (K/Y) fue estimada por el profesor R.l. Wu y por el autor. de q ue numerosos y eminentes economistas del desarrollo (por
comercio exterior, noviembre de 1985 1059

ejemplo, Kuz neb, Paukert, y Ade lm an y Morris) creían en reali- produ ctivos con un a ca nt id ad dada de fo nd os de in vers ió n dis-
d ad en la po sib il id ad de u n inev itab le efect o d e co mpensación ponib les y d e esa manera d ejó a un a bu ena parte de la fuerza
entre el c recimi ento y la eq u1d ad, el ráp 1do desarrol lo y el sim ul- d e trabajo en co ndic iones de m 1seria en las ocu pac1on es tra di -
táneo mejo ram iento de la d Jstn buc Jón del ingreso en Taiwán han cionales d e baja prod uctividad. Ad emás, com o hemo; señalado,
provocado algu nos e ~f u e r zos pa ra exp lica rl os, po r ejemp lo, los esa polít ica d e tasas de interés redu jo el flu jo d e aho rros hac ia
d e Rani s, Fe 1 y Kuo (1979) y los d e Ku o, Rani s y Fei (1981) . las instit uciones fin anci eras y con ell o d i s m~n uyó tambi én la oferta
de fo ndos no inflacion an os d ispon ibles para invers ión. Al evit ar
eso s erro res comun es, Taiw án pu do proporcion ar con gran ra pi-
d ez nu evas oportun idades d e emp leo a su fuerza d e trabaJO en
CU ADRO 10 las i ndust r i a~ destinadas a exportar, que se expandían de for rna
co nti nu a, todo lo cual d esem bocó en ráp idos au mentos d e lo s
Taiwán : cam bios en la ch ~ trib u ción del ingreso . ingreso s rea les de la clase trabajadora.
ParticipaCión porcentual en el ingreso agregado
por qu intiles de fa milias En conc lusión, si algo nos ense ña la notab le experiencia d e
Taiwán en c uanto al c rec im iento econó mi co co n equi dad en la
Quintiles d e fam ilias distribu ción del ingreso, es el acierto de haber rec hazado las mod as
(del tngreso ma' baJO preva lec ientes durante la posgue rra en las teorías del desarro llo,
al mas alto) 1964 1970 1974 7978 7979
con form e a las cuales se presentab an algunas ideas novedosas
Pri mero (los ma> pobres) 7.7 8.4 8.8 8.9 8 .6 sob re contro les y mani p ulacion es co mo med io; de acelerar el d e-
Segundo 12 6 13. 3 13 5 13 .7 13.7 sarro ll o económi co . H a transcurrido ya sufic iente t1empo como
Tercero 16.6 17 1 17 o 17.5 17.5
para comparar lo s resu ltados de los dos tipos opuesto s de estra-
Cuarto 22. 0 n .5 22 . 1 22 .7 22. 7
Qu1nto (los m~ s ico>) 37 .2 37.5 t egia de l desarrollo : a] el primero e; la po lític a, antes en boga,
411 38. 7 38 .6
Razón entre la participac1ón de util izar restriccion es cuantitati vas y u n mu ro arancelario pa ra
en el ingreso del quintil asegu rar un merca do intern o protegid o a di spos ici ón de las in -
más rico y la participac ión d ustrias q ue sustituyen importacion es, as1como de mantener tasas
del gui nti l má' eob re 5.3 4.6 4.4 4.2 4.4 bajas de interés med iante estrictas regu laciones de los bancos y
Fuente: Direcuón General de Pre;upuesto, Con tabilidad y Estadistica, ~e­ otros intermed iarios financieros; b] el segundo es la política opues-
port on the Survey of Per<on allncome D istribution in Taiwa n area, t a de liberar el com ercio y prom o ver las exportac ion es m edi ante
Republic of Ch ina / 977. un tipo de cambio de eq uilibn o, m ás una tasa de interés determi-
nada po r el m ercado, a fin d e asegurar la m ax1mi zaci ón de l aho-
rro vo !u ntano y la asignací ón eficiente d e los fondos d e capita l
d ispo nib les. El ex 1toso desa rrol lo eco nómico d e Ta iwá n parece
Co n el beneficio qu e da la perspect1 va, no sería difíc il exp lica r mostrar co n c larid ad cuál fue la opc1ó n m ás jui c iosa .
este fe nóm eno d e crec im iento ráp id o y d e mejoramiento d e la
eq u id ad, qu e rara vez ~ e observa en otros pa íses en desa rro llo. REFER ENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
La exp !Jcac ión p rincipal rad ica en q ue las column as gem elas d e
la es rategia taiw anesa de desarro ll o podían co ntr ib uir, según se Ade lman. Ir ma y Cynthia Taft Morris, Econom ic G rowt h and Social Eqwty
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