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República Bolivariana de Venezuela

Ministerio del Poder Popular para la Educación Superior

I.U.P. “Santiago Mariño”

Extensión Barinas

Profesor: Ing. Pedro Pérez Alumno: Joksan E. Toro S.

Barinas, Enero 2020


Ensayo:

Dentro del decreto número 444 del 24 de Noviembre de 1958, en la


Ley de ejercicio de la ingeniería arquitectura y profesiones afines podremos
encontrar el reglamento y normas de ética que los ingeniero o arquitecto
debe cumplir con cada una de los términos expuesto. Señala que la
administración pública se abstendrá de dar marcha a solicitudes o tramites
que apoyen la ejecución de trabajos que no llenen requisitos del reglamento,
de lo contrario funcionarios que llegaran a aprobar dichos ordenamientos
acarrearan responsabilidades. Es de importancia recalcar que esta ley no
trata de un nivel industrial, por tanto los trabajadores o profesionales no
podrá ser obligado a pagar impuestos comercio-industriales.

Así que por su parte esta ley está dedicada a profesionales


especializados en las carreras afines, ramas de las ciencias físicas y
matemáticas obtenidas en el país y cumplan requisitos que deben quedar
claramente determinados a los efectos de delimitar su responsabilidad,
considerando profesionales graduados en el exterior por institutos
autorizados de las carreras aun cuando no existan títulos equivalentes en el
país; siempre y cuando estos cumpla con las subscrición en el Colegio de
Ingenieros de Venezuela para ejercer cualquiera de sus actividades, las
cuales estarán previamente establecidas por Ejecutivos nacionales e
informado el Consejo Nacional de Universidades y el colegio Ingenieros de
Venezuela. Por otra parte expone el uso de títulos obtenidos los cuales están
sujetos a reglamentos donde la denominación de ingeniero, arquitecto y
afines quedan exclusivamente para profesionales que la ley dictamine; así
determinando usurpación para las personas que utilicen denominación no
obtenidas dentro de las carreras previstas para generar medios de publicidad
o propaganda. En el ejercicio de la misma establece responsabilidades de
actividades que demandan la formación superior, protege y establece el uso
de documentos técnicos donde ninguna persona de cualquier tipo pueda
usar uso de ellos sin la autorización previa del autor, estos documentos
deben ser expuestos con anterioridad a la administración pública o una
entidad pública, para que tenga validez o efecto deben ser presentados junto
a la firma del autor, su respectiva especialidad con el número de inscripción
el cual fue asignado por el Colegio de Ingenieros de Venezuela y podrán ser
autorizados con su firma siempre y cuando hayan sido elaborados
personalmente o por profesionales en ejercicio legal. Dentro del mismo orden
de ideas las limitaciones de un ingeniero, arquitecto o carreras afines se
encuentra enmarcado en medio de lo que se le ha asignado expresamente
en el título que inviste y estos desempeñaran cargos nacionales, estatales o
municipales a su vez no permitiéndole desarrollar actividades particulares en
el territorio ni tener vínculos comerciales en el cargo que ejerzan. No
obstante es importante recalcar la importancia que juegan los profesionales
que contrae esta ley a la hora de realizar construcciones, instalaciones y
trabajos donde tiene la participación para garantizar un trabajo de calidad, las
empresas además de cumplir con estos requisitos deberá designar
profesionales en ejercicio para colocar en discusión asuntos técnicos que
deben realizar ante administraciones públicas para su aprobación, en
diferentes aspectos de esta construcción las decisiones deben estar
claramente determinadas para lograr determinar su responsabilidad en la
ejecución de la misma, una vez cumpliendo con estos lineamientos las
edificaciones deberán contener un cartel otorgando información del nombre
de la empresa y del profesional o profesionales encargados con su debida
numeración de inscripción en el Colegio de Ingeniero de Venezuela. Para el
cumplimiento y ejecución de todas normativas que se han expuesto con
anterioridad, los profesionales deben tener en claro la inscripción de sus
títulos en el Colegio y así poder ejercer cargos y actividades que se regulan
en la presente ley, teniendo en cuenta una de las pautas más importante
donde expresa que los profesionales no podrán inscribir sus títulos
proveniente del extranjero en el Colegio de Ingenieros de Venezuela cuyo
origen no se permitan el ejercicio de profesionales venezolanos, sin embargo
podrán ser procedas sus solicitudes ante una Corte Suprema de Justicia
donde deberán esperar sus días correspondientes. Aunado a esto la
presencia de profesionales provenientes del extranjero en puestos a ejercer
su función deben estar justificados y serán aceptados siempre que el Colegio
compruebe su necesidad.

Recalcando así que el colegio de Ingenieros de Venezuela cuenta con


su personal jurídico y patrimonial de su propiedad por tanto estos velaran la
integridad y moralidad que representan, integrados por profesionales
subscritos a él, estando o no en su ejercicio de profesión.

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