Baby Human: Hablar

Rosario Martínez García

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Summary
Babies start knowing round their world as longe before their birthday. Many
experiments have done with babies from different cultures, which have the
purpose of knowing the procedure in which babies pretend to get their first
words, and after all, it will start a phenomenon we know as “language explosion”.
Incredible and important notions have been discovered by investigators such as
looking-eyes. Congruent facts have been showed are important for speaking
procedures such us looking-eyes, tune, emotions of the face between others.
Resumen
Los bebes comienzan a conocer el mundo mucho antes del nacimiento. Son
muchos los experimentos realizados a bebes de muchos culturas, que tienen por
objeto conocer el proceso que siguen los bebes hasta conseguir sus primeras
palabras, que llevará poco después a suceder lo que hoy conocemos como
“explosión del lenguaje”. Mediante los experimentos se han descubierto nociones
increíbles que nos dan pistas de la importancia que tiene una mirada para
continuar una conversación e incluso para el mero aprendizaje de las palabras.
Se ha demostrado que tiene que haber una congruencia entre aspectos como la
mirada, el tono, las emociones faciales, entre otros, para los procesos
relacionados con el habla.

El habla de los bebés

Como ya sabemos, el lenguaje es un sistema de comunicación exclusivo del ser

humano, y esta puede darse de diversas maneras a través de un sistema de
signos (Visual, gestual, secuencias sonoras, etc.). Es reconocido porque mediante
él, los seres humanos son capaces de comunicar los pensamientos de la mente.
Ahora nos centraremos en el habla, que es uno de los sistemas de signos que el
ser humano utiliza para comunicar.
Sabemos que el proceso de habla de los bebés comienza mucho antes del
nacimiento. Alrededor de las 18 semanas, el bebé dispone de su sistema sensorial
para experimentar todo tipo de sensaciones dentro del útero de la madre y es a
partir de las 24 semanas cuando su oído está desarrollado y puede oír los sonidos
del mundo exterior.
El bebé se familiariza con los sonidos del exterior y el más fuerte de todos es el
de la voz de la madre. Posteriormente se familiariza con las voces de ambos
progenitores. La primera forma de comunicarse cuando llegan al mundo es el
llanto, que les sirve de herramienta para recibir una respuesta inmediata de los
progenitores en su asistencia. Debido a que su sistema fonológico no está
desarrollado, la lengua es muy grande y la laringe está muy pequeña, el bebé no
puede articular ninguna palabra, lo cual tiene su función de evitar que se ahogue.
Los hallazgos de las investigaciones afirman las siguientes premisas a través de
la investigación con bebés de diferentes culturas:
Los bebes muestran preferencia por el idioma materno que por cualquier otro
idioma extranjero; muestran preferencia por palabras con significado (verbos y
nombres) que las palabras sin significado (preposiciones y artículos), del mismo
modo, se sabe que los bebes son capaces de distinguir las distintas partes del
lenguaje.
La mirada es fundamental para mantener el curso de una conversación; Los
bebes nacen capaces de aprender cualquier idioma, pero a medida que crecen
se hacen especialistas de su idioma materna;
Hacia los 6 meses son capaces de entender todos los sonidos universales, sin
embargo, hacia los 10 meses los bebes pierden la capacidad para reconocer todos
los sonidos, para dar lugar a especializarse en su idioma materno; la exposición
de otro idioma previamente a los 10 meses en un bebé hace que éste sea capaz
de reconocerlo a posteriori, y por tanto, aprender otro idioma de forma
simultánea; al principio, los bebes de todas las culturas balbucean igual (ba ba
da da na na), pero a partir de los 9 meses los sonidos del lenguaje se van
limitando y se van centrando en los de su lenguaje materno
Señalar es un aspecto muy importante para aprender palabras, es un gesto de
comunicación único de los humanos; en los experimentos cuando al niño no se
le señala correctamente el objeto que se pretende que sepa identificar, el niño
es incapaz de reconocerlo, pero sí es capaz de reconocer aquellos que si han sido
señalados de forma congruente con el objeto en cuestión. Para aprender palabras
nuevas, el bebé tiene que guiarse del dedo que señala y de la mirada. En familias
de padres sordos, señalar es una forma natural de comunicarse; para enseñar
palabras nuevas, los padres enfatizan las palabras con gestos más intensos y
esto le facilita al niño la adquisición de la palabra a su diccionario; en los casos
de padres que no son sordos enfatizan las palabras intensificando la entonación;
los signos gestuales son más fáciles de asimilar para los niños que las palabras
habladas debido a que sus centro cognitivos del habla no están totalmente
desarrollados, sin embargo, los centros del cerebro que controlan los
movimientos físicos se desarrollan antes, y es por ello, que los hijos de padres
sordos adquieren un gran vocabulario gestual.
La imitación es otro hallazgo importantísimo para el aprendizaje del lenguaje.
Antes de pronunciar palabras, los bebes saben entonar las conversaciones para
mantenerla. La imitación es un aspecto clave para aprender un idioma. En la
investigación cuando se le pide a un niño que imite una acción que realiza el
investigador, este es capaz de imitarla con éxito, son excelentes imitadores que
aprenden espontáneamente de esta forma.
Entre los 18 meses y los 2 años existe un fenómeno característico en los niños
denominado “explosión del lenguaje”. Para comprender este fenómeno, los
investigadores trataron de comprobar si la forma de los objetos jugaba un papel
importante para la adquisición del lenguaje. Los investigadores afirman que la
forma es decisiva para aprender los nombres de las cosas, de hecho se demostró
que el vocabulario de los niños que se educaba para prestar especial atención a
la forma, era tres veces mayor que el de otros niños. Durante la explosión los
niños pasan a la siguiente fase del lenguaje en el que pasan de articular palabras
aisladas a mini frases de dos palabras. Desde este momento, la forma de juego
de los niños cambia radicalmente y se convierte en una fuente de aprendizaje
por el que aprenden muchas palabras de manera intrínseca. A partir de los 2
años entienden alrededor de unas 1000 palabras y usan unas 300 palabras,
aprenden una palabra cada 90 minutos.

Como conclusión, los bebés comienzan a tener experiencias sensoriales en el

periodo uterino, en el que se sabe que predomina la preferencia por los sonidos
del habla materno y del lenguaje materno. El desarrollo evolutivo del lenguaje
pasa por varias fases, en el que el bebé pasa del llanto al balbuceo, y del balbuceo
a pronunciar palabras y de allí a componer frases simples pero más complejas
conforme se vaya desarrollando durante el transcurso. Un fenómeno importante
que ocurre en los bebes de todas las culturas es que tienen facilidad para
reconocer los sonidos de todo el mundo hasta los 10 meses y tener experiencia
previa a esa edad en otra lengua es fundamental para aprenderla posteriormente,
ya que de esta forma quedan preservadas las conexiones neuronales estimuladas
para la experiencia de estos sonidos que son propios de la lengua en cuestión
que se pretende aprender con el tiempo. Por otro lado hay muchos aspectos
importantes en la adquisición del lenguaje como la congruencia de la mirada,
señalar con el dedo, las formas de los objetivos y la imitación entre otras muchas,
es posible que no haya más aspectos que aún no conocemos. Todos estos
aspectos son importantes y lo que no debemos obviar es que la interacción con
el niño es de suma importancia y que el juego es una herramienta lúdica por el
que los niños aprenden sin parar y casi sin ser conscientes de ello.