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Capítulo 107

CONSIDERACIONES GENERALES DE TERATOGENIA.


NOMENCLATURA Y CLASIFICACIÓN.
PRINCIPALES AGENTES TERATOGÉNICOS.
MEDICACIONES Y EMBARAZO.
Ruiz Redondo GM, Prados S, Palomo MJ, Garrido MC

INTRODUCCIÓN • Desorganización o disrupción: Defecto morfológico


que resulta de una alteración extrínseca o interferencia
Las malformaciones congénitas ocupan un lugar pre- de un proceso del desarrollo normal.
ponderante dentro de la patología humana, tanto por su
• Deformación: Forma, posición o aspecto anormal de
relativa frecuencia como por las repercusiones estéticas,
una parte del cuerpo que resulta de fuerzas mecánicas.
funcionales, psicológicas y sociales que implican.
• Displasia: Organización anormal de células dentro de
A principios de los años 60, se identificó un factor los tejidos.
ambiental, el fármaco Talidomida responsable de graves
defectos congénitos por reducción de extremidades.
Este descubrimiento puso de manifiesto que los defec- TERATOLOGÍA
tos congénitos no sólo eran producidos por causas ge-
néticas sino que existían agentes ambientales que ac- Es la rama de la ciencia que estudia las causas, meca-
tuaban como potenciales factores de riesgo para el nismos y patrones del desarrollo anormal. Las causas de
desarrollo embrionario/fetal humano. De ahí surge el las anomalías congénitas suelen dividirse en:
concepto de teratógeno definido como cualquier factor • Factores genéticos, como anormalidades cromosómicas.
ambiental capaz de causar una anomalía en la forma o
• Factores ambientales como fármacos.
en la función actuando sobre del desarrollo embrionario
o fetal. Cuando éstas actúan juntas se denomina herencia
multifactorial.
Debemos definir una serie de conceptos sobre este te-
ma, como son: Anormalidades Causadas por Factores genéticos

Defectos de nacimiento en Humanos Son los más importantes numéricamente y representan


1/3 de los defectos del nacimiento y el 85 % de las causas
Son las causas principales de mortalidad de lactantes conocidas. Pueden ser causadas por alteración en los pro-
y pueden ser funcionales, estructurales, metabólicos, con- cesos de mitosis y meiosis, aberraciones cromosómicas (6
ductuales o hereditarios. - 7% de los cigotos).

Anomalías Congénitas Anomalías causadas por factores ambientales


Anormalidad estructural de cualquier tipo. Hay 4 tipos Aunque el embrión humano se protege bien en el úte-
de anomalías congénitas: ro, ciertos agentes ambientales pueden causar alteracio-
• Malformaciones: Es un defecto morfológico de un ór- nes del desarrollo consecutivas a la exposición materna a
gano, parte de éste o región mayor del cuerpo que re- los mismos.
sulta de un proceso de desarrollo intrínsecamente Un teratógeno es cualquier agente que produce una
anormal. anomalía congénita o aumenta la frecuencia de una ano-

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Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

Tabla 1. Nivel bioquímico de acción de los teratógenos mas frecuentes.

Nivel bioquímico Teratógeno


ADN cromosómico – Virus, radiaciones ionizantes,substancias alquilantes (radiomiméticos), antibióticos. esteroides.
ARN mensajero – Virus
Reacciones de transferencia – Antimetabolitos (antagonistas del ácido fólico), alcohol, anticonvulsivantes, litio
de grupos metilo, síntesis de ARN (antagonista del magnesio).
Síntesis de proteínas – Antibióticos
Oxidación fosforilativa – Substancias alquilantes (y otras en teratogénesis experimental)
Ciclo de Krebs – Teratogénesis experimental
Glicolisis – Sustancias alquilantes (y otras en teratogénesis experimental)
Consumo de glucosa – Teratogénesis experimental: inanición, insulina.

malía en la población. Los factores ambientales como in- de malformaciones fetales por exposición a radiaciones
fecciones y fármacos, pueden simular trastornos genéti- son muy bajos. La dosis aceptadas acumuladas de radia-
cos, por ejemplo cuando se afecta dos o más niños de pa- ciones ionizantes durante el embarazo son de 5 rad y un
dres normales. En este caso el principio importante es “no examen diagnóstico no excede este máximo. El período de
todo lo que es familiar es genético”. mayor sensibilidad de teratogénesis para el sistema ner-
Los órganos y partes de un embrión son más sensibles vioso central es entre la 10 y 17 semana de gestación por
a los teratógenos durante la diferenciación rápida. lo que las pruebas radiológicas no urgentes deben ser evi-
tadas durante este período. Las consecuencias de exposi-
Los factores ambientales causan 7% a 10% de las ano- ción a radiación prenatal incluyen un incremento en la inci-
malías congénitas. Como la diferenciación bioquímica es ante- dencia de niños con leucemia y un leve cambio en la
rior a la morfológica, con frecuencia el periodo durante el cual frecuencia de mutaciones genéticas. Tales exposiciones
son sensibles las estructuras o interferencias por teratógenos no son indicación de aborto terapéutico.
precede en unos días a la etapa de su desarrollo visible.
La radiación ionizante puede dar lugar a alteraciones
Los teratógenos actuan a diferente nivel bioquímico co- del mecanismo de reparación del DNA, por lo tanto puede
mo se resume en la Tabla 1.
determinar múltiples malformaciones como la anulación de
esbozos embrionarios, o bien ocultar sus efectos en las cé-
lulas germinales del embrión y manifestarse en la futura
RADIACIONES descendencia del recién nacido.
Hay diferentes tipos de radiaciones. La Tabla 2 mues-
tra las diferentes características y efectos biológicos de las Microondas
radiaciones. Una microonda, como puede ser el sol, emite radiación
no ionizante y es por ello que se cree que la misma es se-
Radiaciones ionizantes
gura. A pesar de ello, siempre debemos tomar precaucio-
Se sabe que la radiación ionizante tiene efectos tanto nes con respecto a cualquier clase de emisión o escape de
mutagénicos como teratógenos. Sin embargo, los riesgos radiación.

Tabla 2. Características y efectos biológicos de las radiaciones.

TIPO DE RADIACIÓN CARACTERÍSTICAS FÍSICAS EFECTOS BIOLÓGICOS


Son nocivos y producen:
– Alteraciones fetales. – Muerte.
Rayos X y rayos α – Alteraciones maternas. – Cáncer en la descendencia.
– Alteración de ovogonias del feto hembra – Mutaciones en las células germinales
(pueden transmitirse a su descendencia). transmisibles a la descendencia.
A dosis muy elevadas (no las de uso
Microondas, radar y diatermia. Producen calor. doméstico) pueden producir algún
caso de cataratas congénitas en el feto.
Ultrasonidos No producen efectos sobre el feto. No provocan malformaciones.

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Campos electromagnéticos ner en cuenta que un rad produce 5 mutaciones por cada
millón de células, por lo que no es nocivo. Para elevar la
No se ha comprobado que haya problemas por la ex-
mutagénesis espontánea y alcanzar niveles de nocividad
posición a campos electomagnéticos de frecuencia baja.
se requieren entre 25-50 rads.
Los efectos observables a dosis mayores a 100 rads
La única dosis que podemos considerar de seguridad
son:
absoluta es la dosis cero. Y, para evitar problemas, si te-
• microcefalia. nemos que hacer radiografías en mujeres que pudieran es-
tar gestantes, convendría realizarlas durante la regla.
• malformaciones craneales o esqueléticas.
• CIR y retraso del crecimiento postnatal. La Tabla 3 muestra la teratogenicidad de la radiación
en las distintas fases del desarrollo embrionario.
Isótopos radiactivos

El I-131 puede concentrarse en la glándula tiroides fe- TERATOGÉNESIS INFECCIOSA


tal a partir de la semana 13. A dosis terapéutica se consi-
dera agente teratógeno. Ante una malformación múltiple deben investigarse la
posibilidad de una etiología infecciosa, especialmente si
Relación entre la dosis de radiación recibida y sus existe una afectación cerebral u ocular y no se detecta
efectos anomalía cromosómica u otro diagnóstico específico. La
mayoría son de origen vírico, y son consecuencia del paso
La sensibilidad de órganos y sistemas a las radiaciones
de gérmenes por vía hematógena a través de la placenta.
y los efectos sobre los mismos, vienen determinados por la
“ley de Bergonie-Tribondeau”, que indica que las células Los mecanismos de producción son complejos:
son tanto o más sensibles cuanto: • Lesión celular directa.
• Más jóvenes sean. • Proceso de reparación postnecrosis.
• Posean menor período cariocinético (o de crecimiento). • Disminución de la capacidad de proliferación celular.
• Sea menor su grado de diferenciación (pluripotenciali- • Reacciones inmunológicas a la infección.
dad).
Entre los agentes descritos como teratógenos pode-
Sus efectos pueden ser variables (muerte embrionaria
mos señalar:
o fetal, microcefalia, alteraciones del SNC, mutagénesis,
etc.) y acumulativos, aunque difíciles de cuantificar en rela- • Treponema pallidum.
ción con la dosis que alcanza al embrión o al feto. Además • Toxoplasma gondii.
la radiación que alcanza a un individuo depende de diver-
sos factores (potencia, distancia foco-individuo, etc.). • Citomegalovirus.

No está pues claro qué dosis puede recibir una mujer • Rubéola.
sin que tenga repercusiones sobre el feto. La OMS reco- • Parotiditis.
mienda que ninguna mujer debe ser sometida a procedi-
• Varicela.
mientos diagnóstico-terapéuticos que le administren más
de 15 rads en sus primeros 30 años de vida. Debemos te- • VIH.

Tabla 3. Teratogenicidad y desarrollo embrionario.

Días de gestación Diferenciación celular y efecto teratogénico


15 No hay diferenciación celular; el embrión puede morir si se mata el suficiente número de células, pero,
por lo demás, no se observan efectos teratógenos.
15-25 Fase de diferenciación del SNC.
20-30 Se inicia la formación del esqueleto axial, de la musculatura y de los brotes de las extremidades.
25-40 Diferenciación de ojos, corazón y miembros inferiores.
60 Diferenciación completa de muchos órganos.
90 Diferenciación completa; escasa susceptibilidad a la aparición de malformaciones congénitas.

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Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

Rubéola secuelas moderadas o graves, como retraso psicomotor,


atrofia óptica y sordera.
La rubéola materna provoca en la fase de viremia una
infección de las vellosidades coriales o de la placenta des-
Sífilis congénita
de donde se produce una viremia fetal con generalización
a todos los tejidos. La infección durante el primer trimestre La infección luética materna puede trasmitirse al feto en
produce el síndrome fetal en el 50% de los casos, dismi- cualquier periodo de la gestación aunque en general la gra-
nuyendo la afectación orgánica en infecciones más tardías vedad de las lesiones es proporcional a la precocidad de la
llegando al 6% a mitad de la gestación. infección fetal.
Las malformaciones congénitas que puede inducir la La sífilis fetal grave, por invasión masiva del feto, con-
infección por el virus de la rubéola forman el llamado “Sín- diciona una lúes eminentemente visceral que ocasionan
drome de Gregg”, que consiste en la asociación de micro- edema, maceración y muerte fetal.
cefalia a veces acompañada de retraso mental, cataratas, La sífilis precoz está representada por la triada clásica
sordera y cardiopatía congénita. Otras malformaciones se- de pénfigo palmoplantar, rinitis y esplecnomegalia. Los sín-
cundarias serían: meningocele, criptorquidia, hipospadias, tomas esqueléticos son frecuentes sobre todo en huesos
hidrocele, atresia intestinal, sindactilia y alteraciones del largos (osteocondritis, osteomelitis) con dolor nocturno, tu-
desarrollo dentario. También pueden producirse malforma- mefacción y pseudoparálisis.
ciones viscerales como hepatoesplecnomegalia, síntomas
nerviosos y alteraciones óseas entre otros. La sífilis tardía está constituida por secuelas de las le-
siones iniciales junto a las lesiones histológicas de este pe-
riodo. Son características las deformidades de los dientes
Varicela y patoriditis definitivos, la queratitis y la sordera.
La incidencia es baja. La parotiditis se asocia más fre-
cuentemente a abortos. Toxoplasmosis
En cuanto a la varicela hay que distinguir la varicela del Es la consecuencia de una infección primaria silente en
feto y la neonatal. La congénita o fetal se presenta cuando la madre. La forma más característica se expresa con la
la madre presenta varicela en la primera mitad del embara- “tétrada de Sabin”: Coriorretinitis (la manifestación más fre-
zo. El recién nacido muestra un cuadro malformativo con cuente), hidrocefalia, calcificaciones intracraneales y con-
manifestaciones cutáneas, oculares y de las extremidades. vulsiones. El pronóstico de la toxoplasmosis congénita es
La varicela neonatal se presenta en cualquier momento de grave. El 25% de los recién nacidos afectos fallecen en los
este periodo coincidiendo con varicela materna. Puede primeros días y un porcentaje elevado quedan con secue-
presentar una evolución leve o grave. las graves oculares y neurológicas.
La Tabla 4 resume los principales efectos teratogéni-
Citomegalovirus cos de las infecciones fetales.
Actualmente es la infección vírica más frecuente a juz- En la Tabla 5 se exponen los efectos teratógenos de
gar por la frecuencia de colonización del virus en recién na- otros agentes infecciosos menos frecuentes.
cidos que oscila entre el 0,5-1%. La mayoría de los recién
nacidos infectados permanecen asintomáticos (90% de los
casos). Uno de cada 10.000 a 20.000 recién nacidos ex- AGENTES QUÍMICOS Y
perimentan un cuadro clínico florido que consiste en dis-
función del SNC, microcefalea, calcificaciones, cerebrales,
FARMACOLÓGICOS
periventriculares, ictericia, anemia, trombocitopenia, y co- Los efectos tóxicos de los diferentes medicamentos va-
riorretinitis. El 90% de los supervivientes pueden mostrar rían con el período de gestación y la madurez del feto. El

Tabla 4. Efecto teratogénico de las enfermedades infecciosas.

CITOMEGALOVIRUS Microcefalia,hidrocefalea,calcificaciones intracraneales,retraso mental.


VARICELA ZOSTER Cicatrices en piel,anomalias de ojos,microcefalia,defectos en miembros.
RUBEOLA Microcefalea,microftalmia,cataratas,ceguera,sordera,cardiopatías congénita.
TOXOPLASMA GONDII Hidrocefalia,microcefalea calcificaciones cerebrales periventriculares,retraso mental.
TREPONEMA PALIDUM Hidrocefalia,defectos de hueso y dientes,retraso mental.

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Tabla 5. Efectos teratógenos, personal expuesto y medidas preventivas de diferentes agentes infecciosos.

EFECTOS TRABAJADORAS MEDIDAS


AGENTE
OBSERVADOS POTENCIALMENTE EXPUESTAS PREVENTIVAS
Citomegalovirus (CMV) Defectos en el nacimiento, bajo Sanitarias, trabajadoras en Buenas prácticas higiénicas
peso al nacer, desórdenes contacto con jóvenes y niños tales como lavarse las manos
del desarrollo
Virus de la hepatitis B Bajo peso al nacer Sanitarias Vacunación
Virus del SIDA (HIV) Bajo peso al nacer, Sanitarias Precauciones de práctica
cáncer en la infancia universal.
Parvovirus humano B19 Aborto Sanitarias, trabajadoras en Buenas prácticas higiénicas
contacto con jóvenes y niños. tales como lavarse las manos.
Rubéola Defectos al nacer, Sanitarias, trabajadoras en Vacunación antes del
bajo peso al nacer contacto con jóvenes y niños embarazo, sino antes de
la inmunidad
Toxoplasmosis Aborto, defectos al nacer, Sanitarias, veterinarias Buenas prácticas higiénicas
desórdenes del desarrollo tales como lavarse las manos.
Varicela Defectos al nacer, Sanitarias, trabajadoras en Vacunación antes del
bajo peso al nacer contacto con jóvenes y niños embarazo sino antes
de la inmunidad

riesgo de teratogénesis está presente desde el momento cibe un grupo de defectos físicos y mentales detectables al
de la concepción, pero el embrión humano es más suscep- nacimiento o en etapas más tardías en el desarrollo, que se
tible a su efecto durante el primer trimestre (1-70 días de producen como resultado directo de la ingestión de alco-
gestación). La exposición a un teratógeno dentro de las pri- hol durante el embarazo.
meras dos semanas de gestación se cree que puede resul-
Se caracteriza por una serie de signos y síntomas, des-
tar tanto en malformación como en pérdida fetal, pero de-
tacando tres aspectos fundamentales:
bido a que el embarazo es raramente identificado en este
período temprano, la implicación directa de algún medica- • Deficiencia neurológica y mental: Disfunción demostra-
mento con pérdida fetal o disgenesia es difícil de reconocer. da (Retardo de ligero a moderado), microcefalia, esca-
sa coordinación, hipotonía, irritabilidad en infancia, hi-
Durante el segundo trimestre (70-154 días de gesta-
ción), los órganos fetales están en continuo crecimiento y peractividad en la adolescencia, retardo en el
diferenciación. Los agentes con actividad antimetabólica aprendizaje.
tienen durante esta época un potencial teórico de efectos • Retraso del crecimiento y desarrollo somático: Prenatal
adversos. (afecta la longitud más que el peso) y postnatal (longi-
El tercer trimestre (día 154 al parto) es caracterizado tud, peso y circunferencia cefálica).
por una habilidad fetal deteriorada para metabolizar agen- • Dismorfia cráneo-facial: Ojos: fisuras palpebrales cor-
tes tóxicos y por una competencia de los medicamentos tas, ptosis, estrabismo, pliegue epicántico, miopía, mi-
con sustancias endógenas por los sitios de unión a las pro- croftalmía, blefarofimosis. Orejas: escaso desarrollo de
teínas plasmáticas. la concha, rotación posterior, disfunción de la trompa
Hay que tener presente que no todos los fetos expuestos de Eustaquio. Nariz: Corta, filtro hipoplásico. Boca: mi-
“in útero” a un medicamento teratógeno potencial desarrollan crognatia o relativa prognatia en la adolescencia, labio
malformaciones, y que el tipo de éstas puede ser variable pa- o paladar hendido, dientes pequeños con alteración del
ra un mismo agente causal. Por lo menos el 2 % de las ano- esmalte, mal oclusión dental. Maxilar: hipoplásico
malías congénitas depende de drogas y fármacos. De estos También se pueden presentar otras malformaciones:
del 7 al 10 % de las anomalías es causado por teratógenos
reconocibles como los que se exponen a continuación. • Cardiaca: Soplos, defecto septal atrial y ventricular,
anomalía de los grandes vasos, tetralogía de Fallot.
Alcohol • Renogenital: Hipopasia de labios, hipospadias, defec-
to renal.
El Síndrome Alcohólico Fetal, conocido por sus siglas
en inglés FAS (fetal alcohol syndrome) es el nombre que re- • Cutánea: Hemangiomas, hirsutismo en la infancia.

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Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

• Esquelética: Pectus excavatum, restricción de movi- – El estado general de los drogadictos suele estar com-
mientos articulares, hipoplasia de uñas, sinostosis ra- plicado por infecciones o deficits nutricionales.
dioulnar, anomalía de Klippel – Fiel, escoliosis, anoma-
lía de crestas palmares. Cannabis (marihuana, haschish)

• Muscular: Hernia diafragmática, diastasis de rectos. Puede condicionar cierto grado de hipofunción testicu-
lar y de ciclos anovulatorios o insuficiencia lútea en la mujer.
Tabaco Sus efectos en la gestación son semejantes a los del
tabaco: no produce malformaciones, aunque sí parece au-
El tabaco actuaría sobre la gestación a través de:
mentar el índice de abortos, muertes intrauterinas y retra-
1. Vasoespasmo producido por la nicotina. so del crecimiento. Se recomienda inhibir la lactancia en las
consumidoras.
2. Hipoxia fetal, por exceso de carboxihemoglobina en
sangre materna.
Heroína
3. Dudosamente por una alimentación inadecuada, fre-
Favorece la infertilidad. Su empleo en el embarazo pue-
cuentemente asociada al hábito de fumar.
de conducir a:
De sus efectos sobre la gestación cabe extraer los si-
– Mayor índice de abortos.
guientes aspectos:
– Aumento de partos prematuros.
– El tabaco no produce malformaciones fetales, al menos
no existen datos concluyentes en este sentido. – Retraso de crecimiento intrauterino por malnutrición,
por otros tóxicos asociados o por acción directa de la
– Puede provocar retraso del crecimiento intrauterino,
droga.
afectándose más los fetos varones. El peso de los fe-
tos de mujeres fumadoras de más de 10 cigarrillos al – Anemia severa: Es la complicación más frecuente.
día es inferior al de las no fumadoras, recuperándose el – Mayor frecuencia de embarazos múltiples.
peso fetal si se deja de fumar. No obstante parece ace-
lerar la maduración fetal, por lo que el síndrome del dis- – Posible incremento de rotura prematura de membra-
nas y accidentes hemorrágicos.
tress respiratorio del recién nacido es menos frecuente
en hijos de fumadoras. – Problemas derivados de la patología médica asociada.
– La nicotina, a través de su efecto vasoconstrictor pla- – Problemas derivados del síndrome de abstinencia, sobre
centario, puede desencadenar una hipoxia fetal transi- todo alrededor de parto y puerperio (Inhibir la lactancia).
toria y, a través de la misma, condicionar la aparición
Sobre el recién nacido causa:
de un retraso mental.
– Aumento de la mortalidad perinatal.
– En algunos estudios parece que se asocia a un incre-
mento de placentas previas y desprendimientos pre- – Aumento de casos de bajo peso.
maturos de placenta, probablemente asociadas a la hi- – Síndrome de abstinencia. De todas maneras es menos
poperfusión uterina crónica. severo que el producido por la metadona y con mayor
frecuencia de convulsiones, por lo que durante el em-
Drogas barazo se prefiere que la heroinómana siga consu-
miendo heroína y no metadona.
Es difícil evaluar la acción concreta de una droga en el
embarazo, dado que en ella influyen distintos factores a – Aumento de la patología infecciosa de transmisión ma-
considerar: terno-fetal.

– Frecuentemente el drogadicto lo es a diferentes sus- – Menor incidencia de hiperbilirrubinemias y distress res-


tancias y no sólo a una. piratorio.

– Las drogas no se consumen puras, sino adulteradas – No está demostrado el efecto teratógeno.
por otras sustancias.
Cocaína
– El ambiente social en que se mueven los drogadictos
Sus efectos sobre el embarazo son:
tiene consecuencias a añadir en la evolución de la ges-
tación y de los recién nacidos. – Mayor incidencia de abortos.

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CONSIDERACIONES GENERALES DE TERATOGENIA. NOMENCLATURA Y CLASIFICACIÓN. PRINCIPALES AGENTES TERATOGÉNICOS. MEDICACIONES Y EMBARAZO.

– Mayor incidencia de abruptio placentario. Drogas inhalatorias


– Hipertensión arterial. No se dispone de trabajos, ni de información coheren-
– Aumento de la actividad uterina. te al respecto.

– Vasoconstricción placentaria. Sutancias químicas ambientales


– Taquicardia materna. En los últimos años hay cada vez mayor preocupación
– Hiperactividad fetal. sobre la posible teratogenicidad de sustancia químicas
ambientales, que incluyen contaminantes industriales y
Sus efectos sobre el recién nacido son:
sustancia químicas agrícolas, y aditivos de alimentos. No
– Comportamiento neurológico negativo. obstante, es evidente que la mayor parte de estas sustan-
cias químicas no es teratógena en humanos.
– Aumenta la mortalidad perinatal.
– Dudosamente teratógena. Mercurio Orgánico

Los niños de madres cuya dieta durante el embarazo


Anfetamina
consiste en pescado con valores anormalmente altos de
En el embarazo producen: mercurio orgánico adquieren la enfermedad de Minamata
fetal y presentan alteraciones neurológicas y conductuales
– Disminución de la ganancia ponderal materna.
que semejan la parálisis cerebral.
– Aumento de recién nacidos de bajo peso.
En algunos casos se encuentra un daño cerebral gra-
– Aumento de partos prematuros. ve, retraso mental y ceguera en niños de madres que reci-
bieron metil mercurio en el alimento. Se considera que el
– Aumento de complicaciones hemorrágicas postparto.
metil mercurio es un teratógeno que causa atrofia cerebral,
– Aumento de la mortalidad perinatal. espasticidad, convulsiones y retraso mental.
– Posible síndrome de abstinencia del recién nacido. Plomo
– Aumento de ciertas malformaciones fetales como atre-
Este elemento es abundante en sitios de trabajo y en el
sia biliar, cardiopatías congénitas y labio leporino.
ambiente, pasa a través de la membrana placentaria y se
– Retrasos neurológicos en el recién nacido e hiperactivi- acumula en los tejidos fetales. Este aumenta el número de
dad en épocas posteriores. abortos, anormalidades fetales, retraso de crecimiento in-
trauterino y déficit funcionales.
LSD
Alrededor del año 1978, los gobiernos comenzaron a
Aumenta la incidencia de abortos espontáneos, pero tomar conciencia de las consecuencias perjudiciales que
no parece interferir sobre el peso fetal, ni produce síndro- producía en la salud la exposición al plomo, la cual puede
me de abstinencia en el recién nacido. dar como resultado serios problemas en la salud de los
adultos, los niños y especialmente en la salud de las muje-
Se duda de su acción teratógena, pues se han demos- res embarazadas y en la de sus bebés. Hasta los últimos
trado anomalías cromosómicas in vitro, así como en leu- años de la década de 1970, el plomo era utilizado en las
cocitos periféricos de usuarios de LSD o de hijos de ma- soldaduras y en las tuberías de los sistemas de agua pú-
dres adictas al mismo. blicos, también como sistema de aislamiento en construc-
ciones de viviendas, carreteras, en pinturas, etc.
Barbitúricos
Puede determinarse el nivel de plomo mediante un
Su abuso puede conducir a la dependencia y a un sín- análisis sanguíneo, y si fuese alarmantemente elevado rea-
drome de abstinencia en madre y recién nacido. La depre- lizar un tratamiento quelante (el cual está contraindicado
sión respiratoria del recién nacido también es una compli- durante el embarazo), por lo que lo importante es evitar
cación frecuente, particularmente si el consumo se ha una exposición excesiva a este elemento.
producido cerca del parto.
Bifeniles Policlorados (BPC)
Opiáceos
Son sustancias químicas teratógenas que producen re-
Se ha descrito síndrome de abstinencia en recién naci- traso de crecimiento intrauterino y cambio de coloración
dos de mujeres que han consumido codeína o pentazocina. de la piel.

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Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

Tóxicos laborales Tampoco se han descrito efectos teratogénicos deriva-


dos de la ecografía vaginal.
Algunos gases y sustancias químicas (benzol, cloruro
de vinilo, tolueno,...) aumentan los abortos precoces y tar-
Medicamentos habituales durante el
díos; pueden dar alteraciones genéticas y malformaciones.
También se asocian a algunos casos de esterilidad. embarazo
En gestantes expuestas a disolventes aumenta el ries- Existen diversos sistemas de clasificación de fármacos
go de preeclampsia/eclampsia. durante el embarazo, el más conocido en nuestro medio
es el de la Foods and Drugs Administration (FDA), de
La exposición a Pb y productos químicos industriales
EEUU, dividiéndolos en cuatro categorías:
se relaciona con aborto espontáneo y recién nacidos de
bajo peso. Categoría A: Fármacos que en estudios controlados se
ha comprobado que no producen malformaciones, ni efec-
Las agricultoras gestantes sometidas a pesticidas presen-
tos perjudiciales en el feto.
tan mayor riesgo de malformaciones (defectos orofaciales,
musculoesqueléticos y del SNC) y muerte fetal intrauterina. Categoría B: No existen indicios de riesgo en humanos.
Estudios en animales no han demostrado riesgo para el fe-
Factores ambientales maternos to, pero no existen suficientes estudios en mujeres emba-
razadas. O también aquéllos que han demostrado efectos
La madre puede ser una fuente de teratogenicidad pa- adversos en animales, pero no se han observado en ade-
ra el feto. Entre los factores más importantes hay que se- cuados estudios sobre mujeres embarazadas.
ñalar:
Categoría C: No puede descartarse el riesgo. Estudios
• Factores anatómicos: las anomalías uterinas se aso- animales han demostrado un efecto adverso en el feto, pe-
cian a mayor frecuencia de determinadas malformacio- ro no hay estudios adecuados en mujeres embarazadas.
nes, sobre todo de cadera, rodilla o pie. También las No obstante los beneficios del tratamiento pueden ser
bridas amnióticas pueden provocar amputaciones con- aceptables en embarazadas a pesar de los riesgos. O tam-
génitas y anillos de constricción de las extremidades. bién cuando no se dispone de estudios reproductivos en
• Factores nutritivos: sobre todo señalar el papel desem- animales, ni adecuados en mujeres embarazadas.
peñado por factores vitamínicos, y más concretamente Categoría D: Indicios claros de riesgo fetal en la espe-
el del ácido fólico, en la aparición de defectos del tubo cie humana. No obstante los beneficios del fármaco pue-
neural. Así como el adecuado aporte de yodo en el em- den ser aceptables por la embarazada a pesar del riesgo.
barazo, para un correcto desarrollo del SNC fetal.
Categoría X: Contraindicado en el embarazo. Los estu-
• Diabetes Mellitus: la incidencia de malformaciones con- dios en animales y en las mujeres embarazadas han de-
génitas en fetos de madre diabética insulin-dependien- mostrado anomalías fetales, con un riesgo que supera cla-
te es 2-3 veces mayor que las observadas en la pobla- ramente a cualquier beneficio.
ción de gestantes sin esta patología. La frecuencia y la
intensidad de la malformación producida estará en re- No obstante, un fármaco puede variar su clasificación
lación con la gravedad de la anomalía metabólica. según el trimestre de la gestación. El “Teratology Society
Public Affairs Committee” propuso en 1994 que se aban-
Para llevar a cabo un prevención primaria de estas mal- donara dicho sistema para utilizar uno basado en pruebas,
formaciones, es necesario un control metabólico adecua- que en la actualidad está en desarrollo.
do precoz y estricto, particularmente en el período precon-
cepcional y durante las primeras semanas de gestación. En nuestro país desde 1991 el Servicio de Información
Telefónica sobre Teratógenos Español (SITTE) (teléfono
Las malformaciones fetales más frecuentes producidas
918222435) patrocinado por la Dirección General de Far-
por la diabetes materna son microcefalia, polihidramnios,
macia y Productos Sanitarios del Ministerio de Sanidad y
agenesia renal y atresia duodenal
Consumo, que asesora sobre el riesgo de teratogenicidad
ante el consumo de fármacos.
Ultrasonidos
Seguidamente exponemos las normas básicas para la
Diversos estudios han demostrado que la exposición a utilización de medicamentos en el embarazo:
la energía para el feto se situó muy por debajo del máximo
• Prescribir solo la medicación necesaria.
de seguridad (de 94mW/cm2), del American Institute of Ul-
trasound in Medicine. • Evitar medicamentos de reciente aparición.

950
CONSIDERACIONES GENERALES DE TERATOGENIA. NOMENCLATURA Y CLASIFICACIÓN. PRINCIPALES AGENTES TERATOGÉNICOS. MEDICACIONES Y EMBARAZO.

• Utilizar la dosis mínima durante el menor tiempo posible. sa la barrera placentaria. En dosis terapéuticas su uso a
corto plazo es aparentemente seguro. En su combinación
• Evitar medicamentos con varios principios activos.
con codeína, tampoco hay evidencias de malformaciones
• Evitar prescribir varios medicamentos a la vez. en el primer trimestre.
• Restringir al máximo la medicación en el primer trimes- Ibuprofeno: Categoría B, en el tercer trimestre catego-
tre. ría D. Es un AINE al que se le ha asociado en alguna oca-
• Tener en cuenta la tolerancia de la paciente a la medi- sión con gastrosquisis. Todos los AINES usados en el ter-
cación. cer trimestre pueden causar inhibición del parto y cierre
precoz del ductus. Tras el uso prolongado de cualquier AI-
• Desaconsejar la automedicación. NE, el oligoamnios es una complicación común. La expo-
• Evitar hábitos nocivos como el alcohol, el tabaco,etc. sición intraútero a partir de las 34 semanas produce cierre
prematuro del ductus, disfunción renal y coagulopatías.
• Revisar la medicación previa a la gestación.
Ketoloraco (Toradol ®): Categoría B, en el tercer tri-
• Toda mujer en edad fértil es una gestante potencial.
mestre categoría D. Es un AINE, con los efectos secunda-
Las Tablas 6 y 7 muestran respectivamente los fárma- rios de éstos, pero además, el ketoloraco se excreta por la
cos cuyo uso se considera seguro durante el embarazo y leche materna.
los fármacos teratogénicos.
Ácido acetil salicílico: Factor de riesgo C (D si es usado
en el tercer trimestre). Atraviesa la placenta. En la madre
Principales fármacos utilizados en el puede producir diversos efectos adversos como anemia,
embarazo hemorragia anteparto y/o postparto, embarazo y parto
prolongado así como aumento del número de complica-
Analgésicos ciones intraparto (cesárea, parto instrumetal).
Paracetamol: Factor de riesgo B. Se utiliza en el emba- El AAS ha sido utilizado en el tratamiento del parto pre-
razo habitualmente como analgésico y antipirético. Atravie- maturo, sólo o con beta-miméticos. Mientras que los efec-

Tabla 6. Fármacos considerados seguros en cualquier momento del embarazo.

Ácido fólico Clotrimazol Lincomicina


Ácido nalidíxico Codeína Liotironina (Triyodotironina)
Ácido pantoténico Colecaciferol (Vit D3) Nitrofurantoína
Amonio Dexclorfeniramina Nistatina
Amoxicilina Digoxina Metildopa
Ampicilina Difenhidramina Miconazol (vía tópica)
Anfotericina B Dihidrotaquisterol Minerales (*)
Antiácidos Doxilamina Paracetamol
Atropina Econazol (vía tópica) Penicilinas
Bisacodil Ergocalciferol (Vit D2) Piridoxina
Bromhexina Eritromicina Riboflavina
Cefalosporinas Etambutol Sulfasalacina
Ciclizina Fenoterol Tiamina
Ciproheptadina Folinato cálcico Tiroglobulina
Clindamicina Hierro Vacuna antitetánica
Clorfeniramina Inmunoglobulina antitetánica Vacuna diftérica
Cloridio de amonio Inmunoglobulina anti-D Vitaminas (*)
Cloruro Insulina
Clorhexidina Isoniazida
Cloroquina (profilaxis) Levotiroxina
(*) a las dosis recomendadas durante el embarazo.

951
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

Tabla 7. Fármacos considerados teratogénicos en el embarazo.

Fármacos taratogénicos o con efectos adversos,


Fármaco teratogénicos contraindicados en el embarazo
cuyo uso pudiera estas justificado en el embarazo
Andrógenos Ácido valproico
Dietilestibestrol Aminoglucósidos
Misoprostol Aminopterina, metotrexato
Retinoides (isotretionina, etretinato y tretinoina) Carbamacepina
Retinol (vitamina A) a altas dosis (más de 8.000 UI), Ciclofosfamida y demás agentes alquilantes
excepto en los raros casos de una severa hipovitaminosis A Cloranfenicol
Talidomida Fenobarbital
Fenitoina
Inhibidores de la enzima convertidora de la angiotensina
(captopril, enalapril,…)
Litio
Penicilamina
Progestágenos
Quinina y cloroquina (a altas dosis)
Tetraciclinas
Warfarina y acenocumarol

tos en el recién nacido son infrecuentes, pueden aparecer En caso de emesis los fármacos más usados son la
complicaciones en la madre, como tiempo de sangrado Doxilamina en combinación con la piridoxina (Cariban) con
prolongado, vértigo, tinnitus, cefalea e hiperventilación. riesgo B y en segundo lugar se utiliza la metoclopramida
También se ha relacionado con el cierre precoz del ductus (Primperán) factor de riesgo B. No es adecuado el uso de
arterioso. La aspirina administrada a bajas dosis en la se- inhibidores de la bomba de protones, si fuera necesario la
mana previa al parto puede afectar la agregación plaque- mejor elección es el lansoprazol (factor de riesgo B). El mi-
taria del recién nacido y causar complicaciones hemorrági- soprostol está contraindicado, ya que incrementa el tono
cas. Su posible efecto teratogénico es controvertido y no uterino.
está demostrado, en resúmen podemos concluir que la as-
pirina debe ser evitada durante el embarazo, sobre todo en Laxantes
altas dosis o en forma crónica. Inicialmente, medidas dietéticas como aumento de in-
gesta líquida y dieta rica en fibra.
Profilácticos de reflujo gastroesofágico y
antiulcerosos Formadores de bolo
El primer paso para evitar el reflujo gastroesofágico es Metilcelulosa, salvado, psyllium (plantago o llanten)
mejorar los hábitos alimenticios (5 comidas al día y alimen- practicamente no se absorben y son considerados como
tos ricos en fruta y verdura). Si fuera necesario el uso de seguros (categoría B).
medicación se prefieren en primer lugar fármacos que no
se absorban vía sistémica como el sucralfato (factor riesgo Vitaminas
B) y los antiácidos que en general son fármacos seguros y
no existe constancia de un aumento de riesgos para el fe- Una dieta equilibrada y suficiente bastaría para cubrir el
to, aunque se recomienda no utilizarlos en el primer tri- aumento de requerimientos que se produce durante el em-
barazo. Parece ser que el déficit de ácido fólico esta rela-
mestre. El ácido alginico no se absorbe y el hidroxido de
cionado con anomalías del tubo neural (espina bífida, etc...)
aluminio y las sales de magnesio, muy poco. Si hay estre-
y algunos estudios indican que los suplementos polivitamí-
ñimiento de base, se aconsejan los preparados con mag-
nicos podrían proteger contra la aparición de labio y pala-
nesio que apenas ofrecen riesgo para el feto. Se desacon-
dar hendidos.
seja el bicarbonato sódico por la posibilidad de inducir
alcalosis metabólica, retención hídrica y aumento de peso, La vitamina A, a dosis recomendadas (5.000UI/día)
tanto en la madre como en el feto. pertenece a la categoría A, pero a dosis elevadas (18.000-

952
CONSIDERACIONES GENERALES DE TERATOGENIA. NOMENCLATURA Y CLASIFICACIÓN. PRINCIPALES AGENTES TERATOGÉNICOS. MEDICACIONES Y EMBARAZO.

150.000) entra dentro de la categoría X, pudiendo produ- Los antagonistas a y b, representados por el labetalol,
cir defectos en el tracto urogenital y anomalías del sistema ocupan un escalón inferior. En algunos casos en los que se
nervioso central. ha utilizado por vía IV por HTA grave se han observado ca-
sos de hipotensión, bradicardia neonatal y oliguria.
Anticoagulantes y antiagregantes
De los bloqueantes de los receptores a existen pocas
En caso de riesgo de procesos tromboembólicos o tra- referencias en la literatura. El prazosin cruza la barrera pla-
tamiento de los mismos durante el embarazo o la lactancia centaria, pero las concentraciones encontradas en el feto
es necesario aplicar la medicación de elección: heparina no son lo suficientemente importantes como para producir
de bajo peso molecular (factor de riesgo C), pues a dife- efectos adversos.
rencia de la warfarina y otros cumarínicos (totalmente con- De los antagonistas de calcio, el nifedipino, aunque no
traindicados) no atraviesa la barrera placentaria, reducien- es teratogénico, no está indicado en el embarazo por re-
do así la posibilidad de complicaciones de sangrado tanto ducir la tensión arterial bruscamente y retrasar el parto al
a la madre como al feto. Su uso a largo plazo se ha aso- reducir las contracciones uterinas. Sin embargo, sí está in-
ciado a osteopenia, plaquetopenia y disminución de los ni- dicado en las emergencias hipertensivas por vía sublingual.
veles de vitamina D en la madre, no en el feto.
Los vasodilatadores directos, especialmente la hidrala-
El ácido acetil salicílico como ya hemos comentado an- zina, están indicados en el tratamiento de la preeclampsia
teriomente, aunque debe ser evitado durante el embarazo, y de las crisis hipertensivas graves, aunque no deberían
cuando se administra a baja dosis o dosis antiagregante usarse antes del tercer trimestre.
(100 mg/día) previene del infarto placentario y se usa en
Los inhibidores de la ECA están contraindicados por la
caso de diagnóstico o sospecha de patología de coagula-
posibilidad de producir alteraciones fetales como oligohi-
ción materna también se ha utilizado para la prevención de
dramnios, anuria neonatal e insuficiencia renal, deformida-
la hipertensión inducida por el embarazo, preeclampsia y
des craneofaciales, retraso del crecimiento intrauterino, hi-
eclampsia, con resultados no concluyentes.
potensión neonatal e hipoplasia pulmonar.
Aunque no es teratogénico, puede aumentar el riesgo
No es aconsejable el uso de diuréticos durante el em-
de hemorragias fetales y maternales. En las últimas sema-
barazo. Además, pueden producir alteración en el equili-
nas del embarazo disminuye la contractibilidad uterina,
brio hidroelectrolítico materno y/o fetal y oligohidramnios.
prolongando la gestación, aumenta la duración del parto y
produce el cierre prematuro del ductus arterioso. Antianginosos

Antianémicos Los nitratos orgánicos pueden utilizarse durante el em-


barazo en el tratamiento de la cardiopatía isquémica. Pa-
Generalmente la anemia es ferropénica, debido a que
san a través de la placenta, pero se metabolizan rápida-
los requerimientos de hierro aumentan a lo largo del em-
mente sin producir efectos nocivos sobre el feto.
barazo, siendo máximos en el tercer trimestre. Los suple-
mentos de hierro, que se administrarán a partir del segun- Los antagonistas del calcio tienen todos categoría C.
do trimestre, utilizando sales de hierro por vía oral, no son No han producido toxicidad fetal en humanos y pueden
perjudiciales para el feto ni para la madre, aunque en esta considerarse como antianginosos efectivos cuando se
pueden producir alteraciones gastrointestinales. considera necesaria su utilización.

Antihipertensivos Antiarrítmicos

De los antihipertensivos de acción central, la metildopa La lidocaína no es teratogénica pero atraviesa la barre-
(Aldomet), es el fármaco de elección (factor de riesgo C), ra placentaria y puede producir depresión cardiorespirato-
aunque al atravesar la barrera con facilidad, puede produ- ria neonatal, cuando se emplea a dosis elevadas.
cir hipotensión neonatal. La quinidina también atraviesa la barrera, y aunque
Los betabloqueantes son los fármacos de segunda tampoco se le ha relacionado con malformaciones fetales,
elección, sobre todo atenolol y metoprolol, ya que no hay está encuadrada dentro de la categoría C, lo mismo que la
evidencias acerca de teratogenicidad, pero se aconsejan procainamida.
durante el tercer trimestre. Pueden producir, en el neona- La amiodarona, usada en el tratamiento de arritmias
to, efectos de bloqueo de receptores beta-adrenérgicos ventriculares, se parece estructuralmente a la triyodotironi-
como bradicardia, hipoglucemia y dificultad para el inicio na. Atraviesa la barrera y se han descrito algunos casos de
de respiración espontánea. hipotiroidismo y bocio neonatal. Se aconseja un especial

953
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

seguimiento a los embarazos de madres tratadas con relativamente seguros durante el embarazo (Categoría C
amiodarona. los de alta potencia y B baja y media potencia). Se reco-
mienda utilizarlos a dosis bajas y durante poco tiempo ya
Hormonas que, de lo contrario, pueden producir retraso en el creci-
miento intrauterino e insuficiencia suprarrenal en el recién
Levotiroxina: es una hormona necesaria para la madre
nacido. También son usados para maduración pulmonar
y para el desarrollo del feto en caso de hipotiroidismo ma-
fetal (betametasona)
terno. Factor de riesgo A.
Antitiroideos: Tanto el carbimazol, como el metimazol y Tratamientos dermatológicos
propiltiouracilo pueden producir hipotiroidismo y bocio ne-
Antiacneicos: De los queratolíticos, el ácido salicílico es
onatal, que suele ser autolimitado y reversible. El riesgo es
bastante seguro y está encuadrado en la categoría A.
menor si se reduce la dosis durante el tercer trimestre. Es-
tán encuadrados en la categoría D. Los antibióticos por vía tópica más utilizados son la eri-
tromicina y clindamicina catalogados como A.
Estrógenos y ACO: Factor de riesgo X. están totalmen-
te contraindicados, porque su exposición aumenta la fre- La isotetrinoina es un retinoide de conocida y potente
cuencia de síndrome de Down, defectos cardiacos, altera- capacidad teratogénica, Por esta razón, se recomiendan
ciones oculares y auditivas. medidas anticonceptivas durante y postratamiento.
Los ACO se asocian a un conjunto de malformaciones Antimicóticos: Por vía tópica no hay problemas con
fetales denominado VACTERL (defectos vertebrales, ana- clotrimazol, econazol, miconazol y nistatina. Por vía oral se
les, cardiacos, traqueales, esofágicos, renales y de los aconseja la nistatina. La griseofulvina, terbinafina, ketoco-
miembros) incluso inducen a masculinización en la niñas. nazol, yoduro potásico y flucitosina están contraindicadas.
Progesterona natural micronizada: Factor de riesgo D. En caso de infección sistémica está indicado la anfote-
no ha demostrado riesgo de teratogenicidad e incluso en ricina B (categoría B) que aunque no es teratogénico debe
ocasiones se utiliza como profilaxis en algunas patologías extremarse su uso por el riesgo de nefrotoxicidad materna.
obstétricas (amenaza de aborto, insuficiencia itsmocervical
Corticoides tópicos: No existen muchos datos en hu-
previo cerclaje, etc..).
manos. Debido a su escasa absorción pueden considerar-
Agonistas dopaminérgicos: En caso de hiperprolactine- se seguros (Categoría A) el acetato de hidrocortisona, be-
mia materna acompañada de esterilidad, el fármaco de tametasona, fluometasona, fluocinolona, fluocortona,
elección es la Bromocriptina (Factor de riesgo C). Una vez triamcinolona. Si se aplican en zonas extensas de la piel
conseguido el embarazo debe de retirarse de inmediato, pasan a pertenecer a la categoría C, pudiendo producir los
aunque no se han observado riesgos significativos para el efectos en neonato antes mencionados.
feto.
Antipsoriasicos: Los retinoides son teratogénicos por lo
Antidiabéticos: la diabetes durante el embarazo es por que están absolutamente contraindicados durante el em-
sí sola un importante factor dismorfogenético, de aumento barazo. Se aconsejan medidas anticonceptivas durante y
en la incidencia de abortos e incluso de la mortalidad ma- postratamiento.
terna y fetal.
Antibióticos
El tratamiento de elección es la insulina, que apenas
atraviesa barrera placentaria. Los antidiabéticos orales y Las infecciones urinarias son las más frecuentes en el
sulfonilureas atraviesan la placenta pudiendo producir hi- embarazo, los antibióticos mas utilizados son la fosfomici-
poglucemia fetal prolongada, siendo ésta una de las razo- na seguida de betalactámicos y las cefalosporinas (Factor
nes por lo que están contraindicados. de riesgo B)
Las biguanidas (metformina) factor de riesgo C, son uti- Los aminoglucósidos, aunque son fármacos no terato-
lizadas en asociación o no al clomifeno como inductores génicos, son capaces de atravesar la placenta pudiendo
de ovulación en pacientes con síndromes metabólicos acumularse en tejidos fetales y originar embriotoxicidad a
anovuladoras. nivel renal y auditivo. La gentamicina es la más usada (Ca-
tegoría C, junto con la amikacina y la neomicina). Otros son
Corticoides: El uso de corticoides durante el embarazo
la kanamicina, la estreptomicina y la tobramicina incluidas
se relacionó, durante mucho tiempo, con un aumento en la
en la categoría D.
incidencia de paladar hendido. Posteriormente, otros estu-
dios de mayor calidad metodológica no han sido capaces Los Macrólidos más seguros son eritromicina y azitro-
de demostrarlo, por lo que los corticoides se consideran micina (Categoría B).

954
CONSIDERACIONES GENERALES DE TERATOGENIA. NOMENCLATURA Y CLASIFICACIÓN. PRINCIPALES AGENTES TERATOGÉNICOS. MEDICACIONES Y EMBARAZO.

Fluoroquinolonas: contraindicadas en el embarazo. Re- dores reversibles como la moclobemida, con menor riesgo
lacionadas con la aparición de artropatias en animales de hipertensivo, pero de la que se dispone de poca informa-
experimentación en las fases de desarrollo. ción en su utilización durante el embarazo y, por esta ra-
zón, se contraindica su uso en embarazadas.
Lincosanidos: Son seguros (Categoría B).
Las tetraciclinas, categoría D, están contraindicadas. Antiepilépticos
Producen Alteraciones óseas y dentales, hipospadias, her-
Las crisis epilépticas durante el embarazo ponen en
nia inguinal e hipoplasia de extremidades y toxicidad hepá-
peligro tanto a la madre como al feto y los riesgos asocia-
tica materna.
dos a dicho tratamientos (Categoría C y D) son menores
Antivíricos que los producidos por las crisis epilépticas no tratadas.
Por eso, hoy día está universalmente reconocido el trata-
Hace unos años se recomendaba evitar los fármacos miento antiepiléptico durante el embarazo.
antivirales durante el embarazo. Hoy día se consideran se-
guros el aciclovir y la zidovudina, estando éste último fár- En general, para reducir los riesgos de malformaciones
maco especialmente recomendado en mujeres infectadas congénitas se recomienda monoterapia, cuando sea posi-
con VIH, para evitar transmisión materno-fetal, aunque ble, control estricto de las crisis y suplementos de ácido fó-
existe gran controversia sobre este tema. lico y vitamina K (parece haber cierta deficiencia, en la ma-
dre, hacia final del embarazo). Los fármacos recomendados
Antimicóticos vaginales son carbamacepina y benzodiacepinas.

Puede aplicarse perfectamente lo comentado en anti- La carbamacepina se ha asociado a defectos del tubo
micóticos por vía tópica. neural en alrededor del 1% de los tratamientos por lo que
no se recomienda su uso. También se han descrito mal-
Tricomonicidas formaciones similares al síndrome fetal de la hidantoina,
aunque su prevalencia parece ser muy baja.
El metronidazol aunque posee categoría B debe evitar-
se en el primer trimestre del embarazo (es mutagénico en El ácido valproico también está relacionado con un in-
ese periodo). cremento en la incidencia de defectos del tubo neural, mal-
formaciones, retraso de crecimiento intrauterino, hepatoto-
Anestésicos locales xicidad fetal y síntomas de abstinencia neonatal.
Dependiendo de la patología y de la zona de aplicación La fenitoina puede producir el síndrome fetal de la hi-
tópica hay que tener cuidado ya que pueden absorberse y dantoina y los niños parecen presentar un menor coefi-
afectar al feto, como en el caso del tratamiento de las he- ciente intelectual.
morroides con compuestos de varios principios activos en-
Fenobarbital o primidona tienen un riesgo de 2 a 3 ve-
tre los que se encuentran anestésicos locales que pueden
ces superior de sufrir malformaciones que la población
absorberse por vía rectal.
normal. No se han descrito malformaciones específicas
para estos fármacos.
Antidepresivos
Las succinamidas son de elección para el pequeño mal
Los inhibidores selectivos de la recaptación de seroto-
debido a su bajo, o inexistente, potencial teratogénico.
nina tienen categoría B, por lo que se consideran más se-
guros que los antidepresivos clásicos. Antipsicóticos
Antidepresivos tricíclicos. Tienen categoría C, aunque
Los datos disponibles son bastante contradictorios a
la mayoría de los efectos teratogénicos que se les han atri-
la hora de valorar su uso durante el embarazo. Práctica-
buido, no se han demostrado. Puede producirse un sín-
mente todos tienen categoría C y no se recomienda su
drome de abstinencia si el tratamiento materno ha sido
uso al final del embarazo por la posibilidad de producir ic-
prolongado y ha ocurrido al final de la gestación. También
tericia, hiperreflexia y/o síntomas extrapiramidales neona-
se han descrito efectos anticolinérgicos en el feto, como
tales.
retención urinaria.
Las fenotiacinas pueden actuar como inductores enzi-
Inhibidores de la MAO: Pertenecen a la categoría C. La
máticos en el hígado fetal.
fenelcina es el representante más genuino. Pueden produ-
cir reacciones hipertensivas en la madre, con consecuen- El haloperidol (Categoría C) se ha visto implicado en al-
cias graves. Recientemente se han comercializado inhibi- gunos casos aislados de focomelia.

955
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

El litio (Categoría D) atraviesa la barrera placentaria y deina inofensiva. Otros prefieren el dextrometorfano que es
puede producir anomalía de Ebstein. También, con menor bastante seguro en embarazadas. El glicerol tiene catego-
claridad se le ha implicado en la producción de hipotiroidis- ría X.
mo, hemorragias, hipotonia muscular y cardiomegalia. Debe
Rinológicos: Generalmente se utilizan en el tratamiento
utilizarse solamente en los dos últimos meses del embarazo.
del catarro común. La mayoría contiene un vasoconstrictor
Hipnóticos-ansiolíticos: Las benzodiacepinas están en- adrenérgico (simpaticomimético) que actúa como descon-
cuadradas en la categoría D, debido a que en general, y el gestionante, normalmente fenilefrina o fenilpropanolamina,
diacepan en particular, han sido repetidamente relaciona- un antihistamínico, un analgésico y, a veces, expectoran-
das cuando se administraban en primer y segundo trimes- tes y mucolíticos.
tre del embarazo con diversos efectos teratogénicos como Están encuadrados en la categoría C, aunque no exis-
labio y paladar hendidos, hernia inguinal y alteraciones car- te evidencia de teratogenicidad, pero tampoco son clara-
diovasculares, Las evaluaciones posteriores no han conse- mente seguros, ya que la absorción sistémica de los sim-
guido establecer una asociación causal. paticomiméticos puede producir taquicardia maternal y
En el último trimestre, el uso continuado de benzodia- fetal. Los antihistamínicos producen constipación materna,
cepinas puede producir un síndrome de abstinencia neo- y los expectorantes y mucolíticos son de dudosa eficacia.
natal o, si se utilizan dosis altas poco antes del parto, el Se permite el uso de descongestionantes nasales tópi-
"síndrome del bebé flácido". Por estas razones se aconse- cos de forma moderada y en cortos periodos de tiempo,
ja la utilización de benzodiacepinas de acción corta y du- ya que pueden producir rinitis medicamentosa y, si hay ab-
rante periodos cortos de tiempo, aunque esto no confiere sorción sistémica, reacciones cardiovasculares por los
una seguridad total. simpaticomiméticos.
Tampoco se conocen perfectamente las acciones terato-
génicas del zolpidem y zopiclona aunque tengan categoría B.
LECTURAS RECOMENDADAS
Los barbitúricos están contraindicados durante el em-
barazo si no se utilizan como antiepilépticos. El más utili- Brent RL, Beckman DAA. Clinics in perinatology. Teratology 13
(3), 1986.
zado de todos es el fenobarbital (Categoría D).
Cunnighan FG, Gant NF, Leeno KJ et al. Williams Obstetrics, 21
Aparato respiratorio ed. Madrid: Editorial Panamericana, 2002.
Durán P, Cabero LI. Fármacos y drogas durante el embarazo. En:
Antiasmáticos: La teofilina tiene categoría C y aunque Cabero L, ed. Tratado de Ginecología y Obstetricia y Medici-
suele utilizarse en embarazadas hay que contar con la po- na de la Reproducción. Madrid: Editorial Panamericana,
sibilidad de originar en el recién nacido: irritabilidad, vómi- 2003; 1117-29.
tos, taquicardia, alteraciones del ritmo cardiaco e hipoglu- Egeland GM, Perham-Hester KA, Gessner BD, Ingle D, Berner
JE, Middangh JP. Fetal alcohol síndrome in Alaska, 1997
cemia.
through 1992: an administrative prevalence derived from mul-
Los broncodilatadores beta-adrenérgicos (Salbutamol, tiple data sources.
Terbutalina) también tienen categoría C. Si se utilizan al fi- Famy C, Streissguth AP, Unis AS. Mental illness in adults with fe-
nal del embarazo y/o preparto pueden retrasarlo y produ- tal alcohol syndrome or fetal alcohol effects. Am J Psychiatry
1998; 155: 552-4.
cir además alteraciones del ritmo cardíaco y de la glucemia
Ferrar CH, Blumer JF. Fetal effects of maternal drugs exposure
en el neonato.
Annu Rev Pharmacol Toxicol 1, 1991.
Los parasimpaticolíticos (Bromuro de ipratropio, Catego- Martinez-Frías ML, Rodríguez Pinilla E, Pavón MT, Mejías C. Ser-
ría C) y los corticosteroides (Beclometasona, Categoría A) no vicio Información Telefónica sobre Teratógenos Español (SIT-
tienen ninguna contraindicación cuando se utilizan inhalados. TE): Resultados de los 6 primeros años de funcionamiento.
Prog Obste Ginecol 1997; 40: 603-10.
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Martinez–Frias Ml, Rodríguez E. Fármacos durante la gestación.
Antihistamínicos: La dexclorfeniramina y meclozina tie- Fármacos y embarazo. Madrid: Asociación española de de-
nen categoría B, por lo que pueden utilizarse durante el recho farmacéutico, 2001; 33-40.
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puede producir alteraciones extrapiramidales en el neona- proaches for prevention and control of congeniatal and gene-
tic disorders. Report of a WHO meeting. Cairo, 1999.
to cuando se usa a dosis altas y/o al final del embarazo.
Suele utilizarse como antiemético. Protocolos asistenciales en Obstetricia SEGO. Fármacos y gesta-
ción. Madrid: SEGO, 2004.
Antitusígenos: Tienen categoría C o D. Como antitusí- Teratology Society Public Affairs Comité. FDA classification of
geno, a dosis bajas, muchos autores consideran a la co- drugs for teratogenic risk. Teratology 1994; 49: 446-7.

956
Capítulo 108
LAS MALFORMACIONES CONGÉNITAS. CLASIFICACIÓN.
FORMAS MÁS FRECUENTES.
Marin-Buck A, Guerra AL, Villalba N, Santandreu M, Mercé LT

DEFINICIÓN Tabla 1. Tasa de prevalencia de los defectos congénitos a partir de datos


acumulados de la literatura en 1991.
Defecto morfológico o estructural primario de un órga- a. Defectos estructurales (leves y graves) 10-15%
no, parte de un órgano o de una región del organismo que
a.1. Defectos estructurales graves 5%
resulta de un proceso de su desarrollo intrínsecamente (durante el 1º año de vida)
anormal debido a factores genéticos o ambientales. Se
a.2. Defectos estructurales graves 1-3%
subdividen en: (período feto-neonatal)
– Malformaciones mayores: son aquellas malformacio- b. Deformaciones (leves y graves) 2-3%
nes que tienen consecuencias estéticas importantes o c. Defectos y enfermedades multifactoriales 5%
necesitan atención médica obligada, siendo subsidia- d. Anomalías cromosómicas 0,6%
rias además de corrección quirúrgica. e. Retraso mental
– Malformaciones menores: son aquellas malformacio- e.1. Moderado-grave 0,3%
nes que no comportan un trastorno estético ni repre- e.2. Leve 0,3-1%
sentan un problema médico importante para el pacien- f. Mutaciones
te, no requiriendo obligatoriamente corrección
f.1. Monogénicas autosómicas 0,1-1%
quirúrgica ni tratamiento médico.
f.2. Recesivas 0,25%
f.3. Ligadas al cromosoma X 0,05%
FRECUENCIA Todos los Defectos
defectos estructurales
Entre el 5-6% de los recién nacidos presentan algún ti- congénitos
po de defecto congénito; ello quiere decir que en España Etiología conocida 70% 40%
nacen alrededor de 20.000 -25.000 niños al año con ano- • Anomalías cromosómicas 2,3% 6%
malías o malformaciones diversas.
• Monogénicas 4,5% 7,5%
Estos defectos congénitos constituyen la primera cau- • Multifactoriales 58,4% 20%
sa de mortalidad perinatal (35%), y una de las primeras ra- • Enfermedades maternas
zones de infertilidad ya que en el 85% de los abortos del crónicas 1% 2%
primer trimestre se confirma una cromosomopatía o una • Infecciones maternas 4% 2%
alteración anatómica. • Agentes químicos 3% 1%
No existen datos sobre la incidencia de las diversas Etiología desconocida 30% 60%
malformaciones, es decir, el número de nuevos casos so-
bre el total de zigotos concebidos a lo largo de un período FACTORES QUE MODIFICAN LA
de tiempo determinado. Se dispone de mayor información
respecto a la prevalencia entre los recién nacidos: número
FRECUENCIA
total de recién nacidos afectados por una o más malfor- Entre los factores que modifican la frecuencia de las
maciones observadas entre el momento del nacimiento y malformaciones deben considerarse los factores genéti-
los primeros años de vida, entre la población total de recién cos, interacción de la genética y el ambiente, transcurso
nacidos investigados (Tabla 1). del tiempo, edad de los padres y teratógenos.

957
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

Factores genéticos ta que la tasa de prevalencia y el incremento de la patolo-


gía son bastante distintos en cuanto a la influencia de la
En familias en las que ya ha aparecido una malforma- edad del padre y de la madre.
ción, la tasa de recurrencia generalmente es más elevada
y está relacionada con la herencia mendeliana o con un Para otros procesos la relación es negativa. La gas-
modelo multifactorial, según la patología específica. trosquisis y la extrofia vesical son más frecuentes en los re-
cién nacidos de madres jóvenes.
Aún así, en el 2% de los hijos de padres absolutamen-
te sanos y con una evolución obstétrica correcta, se des-
Teratógenos
cubrirán alteraciones congénitas de algún tipo.
Han sido evaluados en el capítulo precedente.
Interacción genética-ambiente
Otros factores que pueden afectar la prevalencia son el CLASIFICACIÓN ETIOLÓGICA
grupo étnico y el tipo de vida. Este último factor ha sido
evaluado mediante diferentes indicadores, como el nivel Las malformaciones congénitas se pueden clasificar
socio-económico o el emplazamiento geográfico. Sin em- desde un punto de vista etiológico como sigue:
bargo, la interacción entre factores genéticos ambientales
ha impedido, hasta la fecha, definir la contribución especí- Cromosomopatías
fica de ningún factor.
La más frecuente es el síndrome de Down. Factores
que influyen son los siguientes:
Transcurso del tiempo
• Edad materna.
El estudio de la prevalencia de malformaciones en el re-
• Hijo previo con cromosomopatía documentada.
cién nacido a lo largo del tiempo ha mostrado que sólo un
grupo de malformaciones ha sufrido una variación real: los • Progenitor portador de una anomalía cromosómica.
defectos de tubo neural (DTN), a la que puede añadirse el • Infertilidad previa.
incremento menos documentado de los hipospadias.
La prevalencia de los DTN ha disminuído en todos los Enfermedades monogénicas
países desarrollados, aunque la verdadera razón es des-
conocida. Hasta ahora no existe un apoyo relevante para Las más frecuentes son los errores innatos del metabo-
la hipótesis de la influencia de la dieta alimenticia. En cier- lismo. Se debe investigar siempre que existe un anteceden-
tos países se ha comunicado un incremento de hipospa- te de un progenitor o familiar afecto, situación excepcional
en la práctica clínica diaria. Es imprescindible un estudio
dias en relación con la disminución de la paridad y el sub-
previo del progenitor o familiar afecto. Se rigen por las leyes
siguiente mayor peso relativo de los recién nacidos
de Mendel. Aparecen en uno de cada mil nacidos vivos
afectados de madres subfértiles.
siendo responsable del 8,5% de la mortalidad infantil.
Todas las demás modificaciones de la prevalencia en
las poblaciones estudiadas pueden estar relacionadas con Enfermedades multifactoriales
la intervención médica, el diagnóstico prenatal, la interrup-
ción selectiva del embarazo en fetos con enfermedades Casi siempre son el producto de una interrelación en-
congénitas, los avances en el diagnóstico neonatal que tre un factor genético y un factor exógeno. Entre los facto-
permiten anticipar el diagnóstico, etc. res exógenos hay que tener en cuenta los factores am-
bientales y las enfermedades crónicas maternas.
Edad de los padres
Factores ambientales:
La edad de la madre está relacionada con la frecuencia – Fármacos.
del síndrome de Down y otras anomalías cromosómicas. La
edad del padre posee poca importancia y sólo se ha relacio- – Tóxicos ambientales.
nado con patología resultante de nuevas mutaciones génicas – Infecciones.
(acondroplasia, síndrome de Alpert, displasia tanatofórica).
– Radiaciones.
En ambos casos la relación es positiva, en el sentido de
– Alteraciones uterinas.
que hay un incremento del riesgo de la patología a medida
que aumenta la edad; sin embargo, hay que tener en cuen- – Carencias nutritivas.

958
MALFORMACIONES CONGÉNITAS

Enfermedad crónica materna Riesgo fetal alto (>2,5%)


– Diabetes que se asocia a mayor incidencia de anence- • Edad materna superior a 40 años.
falia, displasias caudales y otras. • Hermanos o hijos de individuos con defectos del tubo
– Trastornos ováricos funcionales. neural.

– Distiroidismos. Riesgo fetal moderado (< 2,5%)


– Hiperparatiroidismos.
• Parientes de 2º grado de defectos del tubo neural.
– Discorticalismos. • Hijo con anomalía cromosómica (1%).
• Hijos de madres entre 35-39 años.
• Hijos de pareja con hijo muerto no estudiado.
FACTORES DE RIESGO DE
• Hijos de abortadora habitual.
MALFORMACIÓN CONGÉNITA • Factores teratógenos.
Se pueden considerar los factores que contribuyen a
un riesgo de malformación congénita muy alto (> 5%), alto Riesgo fetal bajo
(> 2,5%), moderado (< 2,5%) y bajo.
• Es el que presentan los embarazos normales.

Riesgo fetal muy alto (> 5%)


CLASIFICACION Y DESCRIPCION DE
• Hijos de parejas heterocigotas para enfermedades re-
LAS MALFORMACIONES CONGENITAS
cesivas (25% de riesgo).
La Tabla 2 muestra la frecuencia de las diferentes malfor-
• Hijos varones de mujeres portadoras de enfermedades
maciones congénitas según los datos del estudio EUROCAT.
genéticas ligadas al cromosoma X (50% de riesgo). A continuación pasamos a describir las más importantes.
• Hijos de portadores de anomalías cromosómicas equi-
libradas. Sistema músculo-esquelético
• Hijos de individuos afectados de una cromosomopatía Son las malformaciones estructurales más frecuentes y
(30% de riesgo). afectan a 1,8-3,2 de 10.000 recién nacidos con una inci-
dencia de 9,1-10,5/1.000 sobre la mortalidad perinatal.
• Hermanos de dos niños afectos de defectos del tubo
neural (10% de riesgo). Las cuatro displasias óseas más frecuentes son, la dis-
plasia tanatofórica (Figura 1), la acondroplasia, la osteogé-
• Hijos de individuos afectados por un gen dominante nesis imperfecta y la acondrogénesis.
(50% de riesgo).
Dentro del cuadro general de las malformaciones, las
• Signos ecográficos indirectos de malformación fetal anomalías de la porción de los pies (zambos, valgos, etc.)
(15-20% de riesgo). (Figura 2) constituyen el 2º defecto congénito en orden de

Figura 1. Displasia tanatofórica. Es una malformación esquelética muy Figura 2. Los pies zambos son el segundo defecto congénito en orden
frecuente. de frecuencia.

959
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

Tabla 2. Clasificación de las anomalías congenitas según el estudio


EUROCAT (1980-1992).

Tipo anomalía R.N. vivos+Mortinatos+


Abortos inducidos
Nº Tasa
SNC 8.055 25,5
• Defectos tubo neural 4.677 14,8
• Anencefalia 1.762 5,6
• Espina bífida 2.389 7,5
• Encefalocele 476 1,5
• Microcefalia 931 2,9
Figura 3. Polidactilia.
• Hidrocefalia 1.509 4,8
OCULARES 1.861 5,9
• An-microftalmia 502 1,6
• Cataratas 230 1,0
OIDO 1.919 6,1
CARDIOVASCULARES 15.854 50,1
• Hipoplasia cavidades izdas. 678 2,1
• Truncus común 281 0,9
• Transposición de los
grandes vasos (TGV) 1.059 3,3
HENDIDURAS
• Sólo palpebral 1.989 6,3
• Labio + paladar 2.771 8,8 Figura 4. Reducción de extremidad.
SISTEMA DIGESTIVO 4.415 13,9
• Fístula traqueo-esofágica 933 2,9
• Atresia del intestino grueso 1.096 3,5 frecuencia (109 /1.000 malformados). La polidactília ocupa
• Atresia del intestino el 6º lugar (47,9 /1.000 malformados) (Figura 3), las altera-
delgado 737 2,3 ciones reduccionales de las extremidades en 10º lugar
UROGENITALES 6.878 21,7 (30,8/1.000) (Figura 4) y el labio leporino en el 12º lugar
• Hipospadias 3.418 10,8 (26,9 /1.000) (Figura 5).
• Agenesia renal unilateral 601 1,9 El diagnóstico prenatal es ecográfico. Ante la detección
• Agenesia renal bilateral 720 2,3 prenatal de una anomalía esquelética se debe realizar un
• Enfermedad renal quística 1.115 3,5 estudio cromosómico fetal pues una cuarta parte presen-
tan alteraciones del cariotipo.
EXTREMIDADES 17.238 54,5
• Def. reducción 1.891 6,0
• Polidactilia 2.560 8,1
• Sindactilia 1.809 5,7
DIAFRAGMA 992 3,1
PARED ABDOMINAL
• Onfalocele 838 2,6
• Gastrosquisis 346 1,1
CROMOSÓMICAS 7.105 22,4
• Trisomía 21 (Sd. Down) 4.641 4,7
• Trisomía 18 (Sd. Edwards) 714 2,3
• Trisomía 13 (Sd. Patau) 300 0,9 Figura 5. Labio leporino.

960
MALFORMACIONES CONGÉNITAS

Sistema cardiovascular Canal auriculo-ventricular

Ocupan el 2º lugar con una incidencia de 1,8- Ocurre una alteración en la división entre ventrículos y
2,4/10.000 de recién nacidos y se asocian en un 25% de aurículas mezclándose sangre venosa y arterial (Figura 7).
los casos a otras malformaciones, fundamentalmente
músculo-esqueléticas (8,8%), del sistema nervioso central Hipoplasia de cavidades izquierdas
(6,9%), genitourinarias (5,3%), gastrointestinales (4,2%) y
Se caracteriza por un ventrículo izquierdo reducido de
del aparato respiratorio (3,8%).
tamaño con atresia aórtica (la más frecuente) y/o mitral (Fi-
Un 13% de los recién nacidos con cardiopatía congé- gura 8). La atresia aórtica constituye la primera causa de
nita presentan anomalías cromosómicas, y la cifra se eleva muerte por malformación cardiaca en la primera semana
a un 40% si se incluyen mortinatos. de vida.
El diagnóstico prenatal es ecográfico con resultados di- Existe una dilatación de cavidades derechas y en un
versos que van mejorando en base a la nueva tecnología 40% de casos se asocian otras malformaciones.
Doppler y a la especialización específica de profesionales
en ecocardiografia prenatal.
Sistema Nervioso Central
Los defectos más frecuentes son los siguientes:
Defectos del tubo neural
Comunicación interventricular
Son malformaciones congénitas derivadas de un de-
Es la malformación congénita cardiaca más frecuente fecto en el cierre del tubo neural en el período embrionario.
(30,9%) y la que más frecuentemente se asocia a embrio- Su incidencia varía según áreas geográficas y factores am-
patía diabética (Figura 6). bientales. También existe un riesgo de recurrencias y se ha
Si el defecto del septo interventricular es menor de 5 demostrado que ésta es mayor en las zonas de mayor in-
mm (Figura 6) el cierre espontáneo antes de los 5 años cidencia. Así en EEUU la incidencia es de 1-2/1.000 recién
ocurre en el 50% de los casos. nacidos y en Irlanda y Gales alcanza el 7-8/1.000.

Figura 6. Comunicación interventricular. Figura 7. Canal atrio-ventricular.

Figura 8. Hipoplasia de cavidades izquierdas. Figura 9. Anencefalia.

961
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

El riesgo de recurrencia general es del 3% si existe un


hijo previo afecto y es del 9% si se trata de un área de ma-
yor incidencia.
La anencefalia (Figura 9) es el resultado de un fallo en
el cierre de la porción más anterior del tubo neural y su
diagnóstico ecográfico hoy en día es posible en el primer
trimestre (11-12 semanas). Es una anomalía letal.
El segundo gran grupo de defectos del tubo neural lo
constituye la espina bífida, que consiste en un defecto de
cierre del tubo neural en la cuarta semana, no producién-
dose la fusión de las dos mitades del arco vertebral.
Figura 12. Holoprosoncefalia.
La espina bífida se subdivide en oculta (cubierta por
piel) y abierta. Su localización más frecuente es la región
lumbar. A su vez la espina bífida abierta se subdivide en
rísticas morfológicas del cráneo y el “signo de la banana o
meningocele (protusionan meninges) y mielomeningocele
plátano” por la morfología cerebelosa, presentes en el 99%
(protusionan meninges y tejido nervioso) (Figura 10).
de los casos (Figura 10).
El mielomeningocele impide la deambulación en un
84% de los casos y en un 94% de los casos existe una in- Hidrocefalia
continencia de esfínteres.
Consiste en el aumento del volumen de los ventrículos
El diagnóstico prenatal es ecográfico en base a la visión cerebrales respecto al tejido cerebral, asociándose a un
directa de los arcos vertebrales y los signos indirectos, co- aumento de la presión del L.C.R., diferenciándose de la
mo son el denominado “signo del limón” por las caracte- ventriculomegalia, que es debido a un proceso destructivo,
sin existir un aumento de la presión del L.C.R. (Figura 11).
Su incidencia es de 0,12-2,5/1.000 nacimientos y la
causa más frecuente es la obstructiva. En un 30% de los
casos se encuentra asociada a espina bífida. En un 2% de
las hidrocefalias se tratan de formas congénitas ligadas al
cromosoma X, y son fundamentalmente las hidrocefalias
debidas a la estenosis del acueducto de Silvio.
El diagnóstico prenatal es ecográfico estableciéndose
un valor máximo normal de 10 mm para el ventrículo late-
ral cerebral. Los fetos afectos de ventriculomegalia en ge-
neral tienen una evolución mala, con elevada mortalidad
(70-80%), y sólo el 50% de los supervivientes alcanzan un
desarrollo intelectual normal; y en un 27% de los casos
Figura 10. Mielomemningocele con el “signo de la banana”, denominado
así por ser la morfología que adquiere el cerebelo. existe una cromosomopatía.
Un 16% de los casos de hidrocefalias prenatales de-
tectadas son debidas a holoprosencefalia, que es debida a
un defecto parcial o total de la división del prosencéfalo en
etapas precoces (4-8 semanas), lo que produce una alte-
ración en las estructuras medias. En un 88% de los casos
se asocia a malformaciones faciales y en un 50% a altera-
ciones cromosómicas de las cuales un 50% son trisomías
13, y en general tienen un mal pronóstico (Figura 12).

Aparato urogenital
Su incidencia es de 1-3/1.000 recién nacidos, aunque
su verdadera incidencia es desconocida pues algunas no
Figura 11. Hidrocefalia. se manifiestan hasta edades tardías y para algunos auto-

962
MALFORMACIONES CONGÉNITAS

Figura 13. Hidronefrosis. Figura 14. Síndrome de Prune-Belly.

Figura 15. Riñón multiquístico o Potter II. Figura 16. Riñón poliquístico infantil o Potter I.

res su incidencia sería del 1%. Sobre el total de malforma- go de recurrencia del 25%. Su pronóstico es muy malo de-
ciones representan un 20-30% y son el 18-20% de las bido a la insuficiencia renal que provoca y a las alteracio-
malformaciones congénitas letales. nes respiratorias secundarias al oligoamnios (Figura 16).
El diagnóstico prenatal es ecográfico y en cuanto a la Las agenesias renales unilaterales son más frecuentes
frecuencia diagnóstica, aproximadamente el 87% son obs- que las bilaterales (Potter primario) y en ambos existe una
tructivas y el 6% riñones multiquísticos. tendencia familiar, asociándose la agenesia renal bilateral a
Las uropatías obstructivas o Potter IV son debidas a la malformaciones cardiacas (42,8%) y la unilateral a diversos
existencia de un proceso obstructivo en el sistema excre- síndromes.
tor urinario con un denominador común que es la hidrone-
frosis (Figura 13). En un tercio de los casos de uropatía Defectos de la pared anterior del abdomen
obstructiva existen anomalías genéticas o malformaciones
Su incidencia es del 0,7/1.000 recién nacidos. En con-
asociadas.
junto es la 7ª causa en orden de frecuencia de malforma-
Por orden de frecuencia las causas de uropatía obs- ciones congénitas fetales.
tructiva son: estenosis de la unión pieloureteral, estenosis
de la unión ureterovesical, ureterocele, estenosis o atresia Las dos malformaciones más frecuentes en este apar-
ureteral y síndrome de Prune-Belly (Figura 14). tado son el onfalocele y la gastrosquisis. El onfalocele se
produce por una falta de retorno intestinal en la 10ª sema-
El riñón multiquístico o Potter II es la causa más fre- na, produciéndose secundariamente el defecto de la pared
cuente de masa abdominal en el neonato y afecta más al del tronco, y encontrándose el contenido abdominal evis-
lado izquierdo. Son riñones no funcionantes y en un 10- cerado rodeado de una membrana (peritoneo), membrana
20% de los casos el riñón contralateral es patológico (Fi- que está ausente en caso de gastrosquisis, flotando los ór-
gura 15).
ganos libres en el líquido amniótico y localizándose el de-
Menos frecuente es el riñón poliquístico infantil o Potter fecto al lado derecho del cordón umbilical. El onfalocele en
I que es una enfermedad autosómica recesiva con un ries- más del 50% se asocia a malformaciones congénitas (Fi-

963
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

Figura 18. Complejo pared abdominal-extremidades. Se trata


de un defecto completo de la pared anterior abdominal, o de
Figura 17. Onfalocele. tórax y abdomen y extremidades.

gura 17). El diagnóstico prenatal y diferencial entre ambos Manual Básico de Ecografía Obstétrica y Ginecológica, SESEGO,
es ecográfico. 2004.
Manual de Diagnóstico Prenatal para Sanitarios. Madrid: Ministe-
Un defecto menos frecuente es el complejo “pared ab- rio de sanidad y consumo, 1991; 13-25.
dominal extremidades” que consiste en un defecto com-
Nogales Espert A. Monografías de Pediatría 1985; 26: 13-20.
pleto de la pared anterior abdominal, o de tórax y abdomen
Ramos JM, Ferrer M, Carreras E, Farrán I, Borrell A. Ecografía
y extremidades (Figura 18).
obstétrica. Criterios biométricos y funcionales. Malformacio-
nes fetales. Barcelona: Mosby-Doyma, 1995.
Registro de anomalías congénitas de la comunidad autónoma
LECTURAS RECOMENDADAS vasca 1990-1993.
Carrera JM y cols. Diagnóstico prenatal. Barcelona: Salvat, 1987. Sánchez Villares E et al. An Esp Pediatría 1986; 25: 145-53.
Carrera JM et al. Progresos en diagnóstico prenatal 1995; 7: 15- Winter RM, Knowles SAS, Bieber FR, Baraitser M. The malformed
22. fetus and stillbirth, a diagnostic approach. 1988; 9-11.

964
Capítulo 109
CROMOSOMOPATIAS: FORMAS MÁS FRECUENTES
De Castro B, Hernández S, Borrell A

INTRODUCCIÓN CRITERIOS GENERALES DE SELECCIÓN


Las anomalías cromosómicas o, también llamadas cro- DE LA POBLACIÓN DE RIESGO DE
mosomopatías, constituyen un grupo importante de defec- CROMOSOMOPATÍA
tos congénitos, cuya base es genética y se originan por la al-
teración en el número o en la estructura de los cromosomas. Criterios epidemiológicos
Aproximadamente 1 de cada 160 recién nacidos vivos Edad materna. Edad gestacional
presenta una anomalía cromosómica demostrable. No
La incidencia de trisomías autosómicas producidas por
obstante, la frecuencia de anomalías cromosómicas pre-
un exceso del número de cromosomas autosómicos au-
sentes en los fetos es muy superior a la hallada en estudios
menta marcadamente cuando aumenta la edad materna, y
de recién nacidos, siendo estas diferencias el resultado de
disminuye con la edad gestacional, con algunas excepcio-
pérdidas fetales en forma de abortos espontáneos del pri-
nes. Dos amplios estudios, el de Cuckle et al, 1987 y el de
mer trimestre (50-60%) o muertes fetales (5%).
Hecht and Hook, 1994 muestran que el riesgo de trisomía
La frecuencia de anomalías cromosómicas en gesta- 21 aumenta exponencialmente con la edad materna.
ciones que abortan espontáneamente en el primer trimes-
La letalidad de los casos de trisomía 21 detectada me-
tre se ha establecido en torno al 50-60%. Su letalidad va-
diante biopsia corial de primer trimestre es del 40% y la de
ría en función de la severidad de la anomalía y, en grado
los casos detectados por amniocentesis es del 30%. Una
variable, persiste a lo largo del embarazo, de modo que la
edad materna de 35 años confiere un riesgo de síndrome
frecuencia global de anomalías cromosómicas, que se es-
de Down de 1:270 en segundo trimestre. Otras trisomías
tima del 0.6% (1/160) en nacidos vivos, se eleva a un 6%
como la 13 y la 18 muestran también un aumento de pre-
(1/16-17) en nacidos muertos.
valencia con la edad materna y una disminución a medida
Así pues, las cifras de prevalencia de anomalías cro- que avanza la edad gestacional. Trisomías de los cromo-
mosómicas en poblaciones de gestantes dependen no só- somas sexuales tales como 47, XXX; 47, XXY; 47, XYY;
lo de la edad materna para algunas de ellas, sino también muestran una asociación con la edad materna menos pro-
de la semana de gestación en que se valoren y de su dis- nunciada y la prevalencia no cambia con la edad gestacio-
tinta letalidad individual. nal al estar asociadas a una menor letalidad intrauterina. La
La mayor parte de de anomalías cromosómicas se ge- monosomía X y las triploidías no guardan relación con la
neran de novo, principalmente por errores de disyunción edad materna pero su prevalencia disminuye con la edad
meiótica durante la gametogénesis, produciendo distintas gestacional al ser altamente letales. No existe evidencia de
trisomías y monosomías. Determinado tipo de anomalías que la edad paterna avanzada constituya un factor de ries-
cromosómicas estructurales, como las translocaciones e go para la concepción de un hijo afecto de aneuploidía.
inversiones, pueden estar presentes en forma equilibrada El primer método de cribado para la trisomía 21, intro-
y, por tanto carecer de manifestaciones fenotípicas, aun- ducido a principios de los años sesenta, se basaba en la
que puedan ser transmitidas tanto en formas que se defi- edad materna avanzada. Desde la introducción de la am-
nen como equilibrada o desequilibrada, en función de la re- niocentesis para el diagnóstico prenatal de anomalías ge-
percusión fetal del desequilibrio genómico.
néticas se hizo evidente que este procedimiento no podía
La detección de trisomía 21 ha sido el objetivo priorita- aplicarse a todas las gestaciones ya que conllevaba un
rio en el diagnóstico prenatal de las cromosomopatías por riesgo de aborto y tenía un elevado coste. En los últimos
su elevada frecuencia, por el retraso mental severo que 30 años se han mantenido unas políticas de cribado que
conlleva y por su prolongada supervivencia postnatal. pueden calificarse como dogmáticas. La primera, observa-

965
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

da principalmente en países con sistemas privados de sa- sustancias en la selección de un grupo de “alto riesgo”. Es-
lud, se adhiere al dogma de los 35 años de edad o riesgo te método de cribado es más efectivo que el que tiene en
equivalente; dado que la edad materna de las mujeres em- cuenta únicamente la edad materna y, con una misma ta-
barazadas se ha incrementado en la mayoría de los países sa de técnicas invasivas (alrededor del 5%), puede identifi-
desarrollados, el grupo de “positivos” constituye ahora al- car al 50–70% de los fetos con trisomía 21.
rededor del 15-20% de los embarazos. La segunda políti-
ca, instituida en países con sistemas públicos de salud, se Marcadores ecográficos
adhiere al dogma de ofrecer técnicas invasivas al 5% de las
mujeres con el mayor riesgo; en los últimos 20 años, el Los síndromes cromosómicos presentan un patrón va-
punto de corte para las técnicas invasivas se ha incremen- riable de malformaciones fetales y la ecografía permite es-
tado, por tanto, de 35 a 38 años. tablecer su sospecha. Está bien establecido que la proba-
bilidad de que una anomalía estructural fetal se asocie a
La edad materna avanzada, considerándose como tal una anomalía cromosómica aumenta con el número de
una edad superior a los 35 años, es un método de criba- anomalías ecográficas detectadas. Así, la incidencia global
do, que permite detectar aproximadamente el 30% de los de cromosomopatía es de un 14-16%, siendo de un 2-
fetos con trisomía 21. 14% en caso de anomalía aislada y del 23-35% en caso de
anomalías múltiples.
Antecedentes de anomalía cromosómica
De forma paralela al desarrollo de los marcadores bio-
Otra indicación para recomendar estudio citogenético químicos, se han descrito múltiples marcadores ecográfi-
está relacionada con los antecedentes de anomalía cromo- cos, que son variantes de la normalidad y se asocian a
sómica o bien la existencia de un progenitor portador de aneuploidía. Estos marcadores pueden estar presentes
una anomalía. Así, el riesgo de recurrencia está aumentado también en fetos normales, por lo que para ser predictores
en caso de hijo anterior con cromosomopatía y en el caso de aneuploidía, ha de quedar validada su aplicabilidad a
concreto de síndrome de Down es de un 0,74% por enci- través de tres parámetros, sensibilidad o tasa de detección
ma del riesgo estimado por edad materna. En el caso de (casos afectos que se detectan mediante el marcador), ta-
padres afectos de una anomalía cromosómica equilibrada sa de falsos positivos (casos normales que presentan el
hay posibilidad de una segregación desequilibrada suman- marcador) y valor predictivo positivo o VPP (probabilidad
do aproximadamente un 10% al riesgo por edad. En caso de que se trate de un caso patológico cuando se encuen-
de una translocación recíproca equilibrada, el riesgo de un tra presente el marcador).
hijo con anomalía desequilibrada es del 12%. En caso de En los años noventa, se introdujo el cribado mediante
translocación Robertsoniana que incluya al cromosoma 21, la combinación de la edad materna y el grosor de la trans-
si la portadora es la madre, el riesgo es de un 10-15% e in- lucencia nucal fetal (TN) a las 11–13+6 semanas de gesta-
ferior al 5% si es el padre. Si un progenitor es portador de ción. Este método ha demostrado ser capaz de identificar
una inversión pericéntrica, el riesgo de anomalía cromosó- alrededor del 75% de los fetos afectados con una tasa de
mica desequilibrada es del 6% a excepción de la del cro- falsos positivos de aproximadamente el 5%.
mosoma 9 que se considera una variante de la normalidad.
En el año 2001, se encontró que en el 60–70% de los
fetos con trisomía 21, el hueso nasal no era visible en la
Marcadores bioquímicos
ecografía de las 11–13+6 semanas y los resultados prelimi-
Los marcadores bioquímicos son sustancias produci- nares sugieren que este hallazgo puede incrementar la ta-
das por el feto o la placenta, que pasan a la circulación ma- sa de detección de la exploración del primer trimestre y la
terna. La concentración de las mismas está relacionada con bioquímica sérica hasta más del 95%, aunque actualmen-
la salud del feto y con la masa corporal de la gestante. te es un tema muy controvertido ya que la tasa de detec-
ción del hueso nasal ausente o presente es muy baja.
A finales de los años ochenta, se introdujo un nuevo
método de cribado que tenía en cuenta no sólo la edad Los métodos de cribado descritos se desarrollan en el
materna sino también la concentración de varios produc- primer trimestre (11-13) o al inicio del segundo trimestre
tos feto-placentarios en la circulación materna. A las 16 se- (15-18). La ecografía de las 20 semanas también se ha
manas de gestación, la mediana de las concentraciones empleado para modificar el riesgo de la edad o del cribado
séricas maternas de alfa-fetoproteína (AFP), estriol no con- de segundo trimestre. Benacerraf propone el uso de un
jugado (E3), gonadotropina coriónica humana (hCG) (total “score” que recoge de manera ponderada los diversos
y fracción b libre) e inhibina A en embarazos con trisomía marcadores ecográficos, detectando el 81% de fetos con
21 difieren lo suficiente de los valores normales para per- síndrome de Down y el 100% de fetos con trisomía 18 y 13
mitir el uso de combinaciones de algunas o todas estas con una tasa de falsos positivos del 4,4%.

966
CROMOSOMOPATIAS

Estimación del riesgo Es el resultado de la triplicación de una pequeña por-


ción del cromosoma 21 llamada banda 21q22. Ésta pue-
La estimación del riesgo, a priori, para la edad de la pa- de ser debida a la presencia de un cromosoma 21 com-
ciente, se obtiene del meta-análisis de Cuckle, que expre- pleto adicional, en cuyo caso hablamos de trisomía
sa dicho riesgo en el momento del parto. La dificultad prin- primaria, o bien, a la triplicación exclusiva de la banda
cipal está en ajustar el tiempo exacto de gestación por q22, la cual ocurre por translocación u otra anomalía es-
ecografía y además la concentración de los distintos mar- tructural. De todos los síndromes de Down (SD), el 93-
cadores en suero materno varía con el tiempo de gesta- 95% son trisomías primarias por falta de disyunción du-
ción, por lo que el valor del marcador debe ser transfor- rante la primera división meiótica, siendo el 95% de estos
mado a múltiplos de la mediana (MoM) corregido según casos de origen materno. Un mosaicismo se detecta en
peso, raza, tabaquismo, DMID, número de fetos. un 2 a un 3% de los SD y normalmente representan una
La estimación del riesgo puede efectuarse por diferentes forma menos severa. Finalmente, un 3 a un 5% de los ca-
métodos. El más utilizado es el like-hood o de probabilidad. sos, son el resultado de una translocación, siendo las más
La razón de probabilidad para un determinado marcador comúnmente asociadas al SD, las que afectan a los cro-
bioquímico o ecográfico se calcula según la distribución po- mosomas del grupo D (13 al 15) y principalmente el 14, y
blacional gaussiana para un grupo afecto y otro no afecto de en similar medida al grupo G (21, 22). En estos casos, el
la trisomía a detectar. Finalmente la estimación de riesgo se riesgo de recurrencia es del 10% si es la madre la porta-
obtiene multiplicando la probabilidad a priori para la edad de dora de la translocación y de un 2 a un 3% si es el padre
la paciente de ser portadora de dicha trisomía por la razón el portador.
de probabilidad obtenida a partir de los marcadores, previa-
mente transformados en MoM, y se expresa como un índi- Marcadores bioquímicos del síndrome
ce de probabilidad de 1 entre el resultado de dicho produc- de Down
to. Todo el proceso de cálculo se efectúa mediante un
La alfa-fetoproteína es producida por el hígado fetal y
programa informático específico diseñado para este fin.
por la vesícula vitelina. Se ha descrito la asociación de ni-
El nivel de corte, es decir, el "riesgo" a partir del cual se veles bajos de AFP-SM con trisomía 21, y los mecanis-
ofrecerá un procedimiento invasivo de diagnóstico, es una mos propuestos para explicar estos niveles reducidos
decisión arbitraria y depende fundamentalmente de los re- han sido dos, una producción fetal disminuida, el más
cursos materiales que se puedan invertir en el programa en aceptado, y un paso placentario dificultoso. La selección
concreto. En el momento actual existe amplio consenso en de casos mediante valores de AFP-SM inferiores a un va-
España para utilizar en el segundo trimestre y para el sín- lor cut-off en función de la edad gestacional junto con la
drome de Down un nivel que oscile entre 1:270 y 1:250, edad materna permite detectar el 40% de SD con un
expresado en el momento del cribaje, que corresponde al 6,8% de falsos positivos.
riesgo de una mujer de 35 años de ser portadora de un fe-
La gonadotrofina coriónica es secretada por el sinciti-
to afecto de síndrome de Down. Para la toma de decisio-
trofoblasto. Los niveles de hCG total en plasma materno
nes se utilizan comúnmente las curvas ROC (Receiver
en gestaciones con SD se encuentran aumentados como
Operating Characteristic) en las que gráficamente se con-
reflejo de una alta actividad placentaria que permitiría la
frontan sensibilidad y especificidad para cada punto de
supervivencia de estos fetos. La tasa de detección es del
corte arbitrariamente establecido. Combinando los marca-
64% con un 8,6% de falsos positivos. Recientemente se
dores, podemos establecer con mayor precisión el riesgo
ha descrito la mayor utilidad de la subunidad beta libre,
de aneuploidía fetal y evitaremos la práctica innecesaria de
con una tasa de detección del 80% y un 5% de falsos po-
buen número de procedimientos invasivos (amniocentesis
o biopsia corial) para el diagnóstico inequívoco. sitivos, así como, la aplicabilidad de ésta en primer tri-
mestre.
El estriol no conjugado es producido por el hígado fetal
CRITERIOS ESPECÍFICOS DE y se encuentra disminuido en gestaciones afectas. Con el
SELECCIÓN DE LA POBLACIÓN triple screening (edad, AFP, hCG, uE3) la tasa de detección
es del 60-70% con un 5% de falsos positivos.
Trisomía 21 (síndrome de Down)
La proteína plasmática A asociada al embarazo (PAPP-
Es la anomalía cromosómica autosómica más frecuen- A) es una glicoproteina específica del embarazo, codifica-
te afectando a 1 de cada 700 recién nacidos en nuestro da por un gen localizado en el brazo largo del cromosoma
país y a 1-3/1000 en el contexto mundial. La prevalencia 9, y el trofoblasto se considera la mayor fuente de su pro-
actual se considera cercana al 1/500. ducción, aunque su función es esencialmente desconoci-

967
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

da. Se detectan niveles circulantes de esta proteína en En el primer trimestre, entre 64 fetos con una EG me-
sangre materna a partir de la semana 4ª de gestación, con dia de 12,3 sem, un 76% presentaban un aumento de la
aumento progresivo a lo largo del embarazo. La reducción translucencia nucal, un 47% alteración en la onda de flujo
de los niveles de PAPP-A en presencia de SD es más mar- del ductus venoso, hueso nasal ausente en el 16%, car-
cada entre las semanas 6ª y 11ª, pero en el segundo tri- diopatía en el 20%, alteración de extremidades inferiores
mestre esta diferencia ya no es evidente, perdiendo, por en el 20%, hiperecogenicidad intestinal en el 7% e hidrops
tanto, su capacidad discriminativa para el SD y otras triso- en el 5%. Un 17% de los fetos con SD no presentaban nin-
mías autosómicas. guna alteración ecográfica en el primer trimestre.
La incorporación de la Inhibina A supone un aumento Anomalías cardíovasculares
de la tasa de detección que oscila entre el 5 y el 10%.
Las cardiopatías están presentes en un 40% de recién
Anomalías estructurales fetales nacidos vivos con trisomía 21. Las más frecuentes son el
canal atrioventricular y las comunicaciones interauricular e
En la Tabla 1 se muestran las alteraciones ecográficas interventricular. El VPP en el caso concreto de SD es del 5-
asociadas a la trisomía 21según una revisión de Hill en 8%. Asimismo existe una alteración en el flujo del ductus
1996. venoso que presenta un patrón más pulsátil llegando has-
En la unidad de Diagnóstico Prenatal del Hospital Clíni- ta la ausencia o reversión de las velocidades teledistólicas,
co de Barcelona (UDP-HCP), las anomalías ecográficas coincidiendo con la contracción atrial. Diversas series pu-
detectadas en 31 casos de SD con una EG media de 19,2 blicadas muestran una alteración en el 70% de los fetos
semanas, fueron: cardiopatía en un 26%, hidrops en un afectos y en un 5% de los cromosómicamente normales.
19%, higroma quístico en un 10%, atresia duodenal en un Más recientemente también se ha descrito una frecuencia
6%, marcadores en un 40% y ninguna en un 16%. aumentada de regurgitación tricuspídea y de retorno veno-
so anómalo.

Tabla 1. Alteraciones ecográficas asociadas a la trisomia 21. Atresia duodenal


Craniofacial Un 5-15% de fetos con trisomía 21 tienen esta anoma-
pliegue nucal aumentado lía, con un VPP para SD del 30-40%. Su principal inconve-
higroma quístico niente es la aparición tardía después de la semana 20.
macroglosia
Sistema nervioso central Hidrops no inmune
ventriculomegalia moderada
Sistema cardiovascular El riesgo de cromosomopatía es del 12-30%, siendo la
defectos septales ventriculares (CIV) trisomía 21 la más frecuente, teniendo presente que la pro-
defectos septales atriales (CIA) babilidad de aneuploidía en un feto hidrópico es menor a
alteraciones en dos cojines endocárdicos medida que aumenta la edad gestacional.
calcificación de las cuerdas tendinosas
Sistema gastrointestinal Higroma quístico
atresia duodenal
El diagnóstico prenatal mediante ecografía se basa
hiperecogenicidad intestinal
en la demostración de un quiste bilateral, septado, loca-
ano imperforado
lizado en la región occipitocervical. Se le atribuye una
Sistema urogenital
sensibilidad del 4% y un VPP del 15%. Aunque es espe-
pielectasia
Sistema esquelético
cialmente frecuente en el Síndrome de Turner, se ha
braquicefalia con occipucio plano descrito un subtipo llamado “no septado” que consiste
huesos llargos cortos en dos áreas sonolucentes reducidas (3-9 mm), en am-
clinodactilia bas zonas anterolaterales cervicales, llamadas sacos yu-
sindactilia gulares, de aparición tardía (>13 sem), que no se asocia
dedos cortos y gruesos a hidrops ni otras anomalías y de carácter transitorio que
sandal gap cuando se asocia a cromosomopatía (6%), usualmente
elongación de los isquions es un SD.
Hídrops no inmune
Liquido amniótico Ventriculomegalia lateral
polihidramnios
Son las formas leves las que se asocian a anomalías
Restricción del crecimiento intrauterino
cromosómicas. El VPP para trisomía 21 es del 8,7%.

968
CROMOSOMOPATIAS

Otras anomalías mayores Ausencia del hueso nasal


Hidronefrosis bilateral (VPP: 5%), Retraso de creci- Ya hemos comentado que algunos grupos presentan
miento intrauterino (VPP: 2%), Onfalocele (VPP: 0,6%). En resultados muy prometedores sobre su papel como mar-
casos esporádicos una hernia diafragmática se ha asocia- cador ecográfico de SD en primer o segundo trimestre. Sin
do a trisomía 21. embargo hay algunas series en población general con re-
sultados poco alentadores
Marcadores ecográficos
“Sandal gap”
Braquicefalia
Se ha descrito la separación entre el primer y segundo
Dos recientes estudios utilizando el índice diámetro
dedo del pie en fetos con SD.
frontotalámico observado/esperado han permitido detec-
tar el 21% de SD y el 10% respectivamente Ectasia piélica bilateral

Macroglosia La probabilidad de SD en presencia de una ectasia pié-


lica bilateral aislada se sitúa entre un 3,1-3,7% y en caso
Se asocia de manera muy específica a trisomía 21. Se
de acompañarse de otras anomalías es de un 32%.
ha detectado en un 10% de los fetos con SD en 2º trimes-
tre y en un 20% en 3º trimestre. Hiperecogenicidad intestinal

Microtia El origen de ésta, podría ser una hipomotilidad intesti-


nal que en segundo trimestre provocaría un espesamiento
Se pueden detectar un 67-75% de SD con un 2-18%
del meconio, con una sensibilidad para SD de un 7-12%.
de falsos positivos y un VPP de 7-8% en 2º trimestre tar-
dío con este marcador. Polihidramnios

Pliegue de nuca En una serie de 136 casos de polihidramnios antes de


la semana 26, se detectaron un 5% de anomalías cromo-
Ha sido el marcador de aneuploidía más estudiado. Be- sómicas, de las cuales un 2% eran trisomías 21. En ningún
nacerraf propuso un punto de corte de 6 mm en el grosor caso se presentaron de forma aislada, sino asociadas a
medido en el plano suboccipito-bregmático, y con este cri- cardiopatía, atresia duodenal o hidrops.
terio detectó un 42% de fetos afectos con un 0,1% de falsos
positivos y un VPP del 69%, que ajustado a la prevalencia
del síndrome en la población general es del 27%. Nicolaides
Trisomía 18 (Síndrome de Edwards)
le atribuye un VPP del 37% en población de riesgo. Es el segundo síndrome cromosómico más frecuente
con una incidencia de 0,3 por cada 1.000 recién nacidos.
Translucencia nucal (pliegue de nuca en primer El pronóstico es adverso, con una supervivencia media de
trimestre) 48 horas, falleciendo el 30% en el primer mes de vida y el
Describe la presencia de un engrosamiento nucal inespe- 90% en el primer año. Aproximadamente el 80% están
cífico en presencia de fluido, normalmente consistente en un causados por una no disyunción pimaria siendo de origen
edema nucal. En la actualidad ya no se utiliza el punto de cor- materno en el 96% de los casos. En un 10% la trisomía se
te de 3 mm sino que el incremento del valor de la translucen- encuentra en mosaico, siendo casos de menor severidad y
cia nucal sobre la mediana correspondiente a la edad gesta- en el 10% restante se trata de una translocación normal-
cional incrementa progresivamente el riesgo relativo por edad. mente esporádica.
Los fetos se caracterizan por presentar un retraso de
Reducción del fémur y húmero crecimiento asociado a múltiples malformaciones. Tanto es
De los estudios publicados sólo se puede concluir que así, que la detección de las malformaciones por ecografía
el acortamiento de fémur y húmero se halla presente en los permite sospechar su presencia en un 80-90% de los casos.
fetos afectos aunque su aplicación clínica es limitada. La
reducción del humero es superior a la del fémur. Marcadores bioquímicos

En los casos de trisomía 18, los valores de AFP, alfa-


Clinodactilia
hCG, beta-hCG, hCG, E3, uE3, estradiol, lactógeno pla-
El 60% de RN afectos de SD tienen una hipoplasia de centario y progesterona se han encontrado disminuidos en
la segunda falange del 5º dedo de la mano y un 50% pre- el segundo trimestre, con un valor predictivo superior para
sentan clinodactilia. la beta-hCG y uE3.

969
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

Los programas de screening bioquímico que integran Anomalías estructurales fetales


AFP, hCG, uE3 y edad materna se pueden aplicar en el
La Tabla 2 presenta las anomalías estructurales que el
screening de trisomía 18, incorporando como gestantes de
estudio ecográfico muestra en el Síndrome de Edwards.
riesgo las que tienen valores extremadamente bajos de es-
tos parámetros. En la unidad de diagnóstico prenatal del HCP de Bar-
celona (UDP-HCP), de un total de 17 casos con una edad
También en el primer trimestre actualmente se dispone
gestacional media de 20,2 sem, las anomalías fetales más
de un algoritmo propio para la trisomía 18 basado en la
frecuentes fueron: cardiopatía (29%), hidrops (29%), RCIU
disminución de la PAPP-A, la fB-hCG y el aumento de la
con polihidramnios (29%), defectos de extremidades
TN.
(29%), higroma quístico (18%), onfalocele (12%), anomalí-
as renales (12%), anomalías de la línea media (12%), DTN
Tabla 2. Alteraciones ecográficas asociadas a la trisomia 18. (12%), atresia esofágica (12%), marcador (6%) y ninguna
(6%). En el primer trimestre, de un total de 32 fetos con
ALTERACIONES ECOGRÀFICAS ASOCIADAS A LA TRISOMÍA 18
edad gestacional media de 12.2 semanas, las anomalías
Craniofaciales
más frecuentes que se detectaron fueron: TN aumentada
cráneo en fresa
(81%), ductus venoso revertido (62%), edema subcutáneo
micrognatia
(62%, 9% de los cuales en el contexto de hidrops fetal),
pliegue nucal aumentado
RCIU precoz (31%), onfalocele (44%), cardiopatía (25%: hi-
Sistema nervioso central
poplasia de cavidades izquierdas y CIV), y alteraciones en
quistes de plexos coroideos
las extremidades superiores e inferiores.
mielomeningocele
cisterna magna aumentada
RCIU severo
hipoplasia cerebelar
ausencia de cuerpo calloso Un RCIU severo asociado a polihidramnios es una de
microcefalia las presentaciones típicas y casi patognomónica: el hallaz-
Sistema cardiovascular go ecográfico de un decalaje superior a 7 días en un em-
defectos septales atriales (CIA) brión de 9 a 13 semanas confiere un riesgo 9 veces supe-
defectos septales ventriculares (CIV) rior de presentar una trisomía 18. La incidencia de
doble salida del ventrículo derecho anomalías cromosómicas en un RCIU se sitúa en un 20%
canal atrioventricular principalmente triploidías en 2º trimestre y trisomía 18 en
coartación de Aorta tercer trimestre. La probabilidad de una cromosomopatía
dextroposición cardiaca aumenta en caso de malformaciones múltiples, líquido am-
calcificación de los músculos tendinosos niótico aumentado y estudio Doppler normal.
cordon con 2 vasos
flujo pulsátil en la vena umbilical Cardiopatía
alteraciones del flujo del ductus venoso La probabilidad de trisomía 18 ante una cardiopatía es
Sistema gastrointestinal del 5- 13%, siendo las más frecuentes la CIV, canal atrio-
onfalocele
ventricular, coartación aórtica, atresia mitral y tetralogía de
hernia diafragmática
Fallot. Se ha descrito un patrón ecocardiográfico típico que
atresia esofágica con fístula
permitiría sospechar una trisomía 18: CIV con mala alinea-
tráqueo-esofágica
ción del septum conal y displasia polivalvular, sin transpo-
Sistema urogenital
sición de grandes vasos.
riñones en herradura
displasia renal quística Onfalocele
hidronefrosis
agenesia renal unilateral Tiene un VPP del 11-22% y una sensibilidad del 20-
Sistema esquelético 40%. La asociación a cromosomopatía se encuentra au-
dedos sobrepuestos mentada cuando el onfalocele es pequeño y sin contenido
defectos reduccionales hepático, en madres de edad avanzada y fetos varones.
pie equino-varo
pies en mecedora (rocker bottom) Otras anomalías
Líquido amniótico Hernia diafragmática (3-16%), anomalías renales (15%),
polihidramnios espina bífida (10-17%) y anomalías faciales de la línea me-
Restricción de crecimiento intrauterino dia.

970
CROMOSOMOPATIAS

Marcadores ecográficos Arteria umbilical única

Cabeza en fresa Entre los fetos con cromosomopatía, un 4-11% pre-


sentan una AUU y en la mayoría de los casos es una triso-
Es una morfología de la cabeza fetal característica de la
mía 18 o 13.
trisomía 18. Consiste en un frontal prominente y una zona
occipital aplanada en una visión transversal suboccipito-
bregmática. Confiere una probabilidad del 80%. Trisomía 13 (síndrome de Patau)
Se caracteriza por presentar múltiples malformaciones
Micrognatia
fetales, con una alta letalidad in útero. La incidencia de tri-
Confiere una probabilidad de trisomía 18 del 32%. somía 13 se sitúa en 1 de cada 5000 recién nacidos. La
supervivencia media es de 130 días dado que el 50% fa-
Anomalías de fosa posterior llecen en el primer mes de vida y sólo el 18% sobreviven al
La visualización ecográfica de una cisterna magna au- año. En el 80% de los casos se produce por una no dis-
mentada ha sido descrita como marcador de trisomía 18, yunción primaria, y en el 20% restante por una transloca-
y se puede detectar en el 44% de los casos en tercer tri- ción que afecta a los cromosomas del grupo D. En menor
mestre, sobre todo en ausencia de dilatación patente de medida se ha descrito en mosaico, con un mejor pronósti-
ventrículos laterales. co en estos casos.

Agenesia del cuerpo calloso Marcadores bioquímicos

Es característica de la trisomía 18, a pesar de que tan Se describió un aumento en los niveles de hCG sérica
sólo se encuentra presente en un 8% de los casos, y nun- materna en los casos de trisomía 13, pero no hay estudios
ca como anomalía aislada. bioquímicos extensos para esta trisomía. En el primer tri-
mestre el perfil de riesgo de trisomía 13 es idéntico al de
Anomalía nucal trisomía 18, así que el riesgo normalmente se informa con-
juntamente como riesgo de trisomías 18 y 13.
Mediante la medida del pliegue de la nuca en 2º tri-
mestre se obtiene una sensibilidad del 50%. La translu-
Anomalías estructurales fetales
cencia nucal en el primer trimestre tiene una sensibilidad
superior, comprendida entre un 70-75%. Las alteraciones ecográficas asociadas a la trisomía 13
se muestran en la Tabla 3.
Quistes de plexos coroideos
En nuestro departamento (UDP-HCP) de una serie de
Es el marcador por excelencia en la trisomía 18. La inci- 8 casos con una edad gestacional media de 18,9 sema-
dencia de estos quistes en un feto de 2º trimestre en la po- nas las anomalías fetales detectadas fueron: holoprosen-
blación general es del 1%. Son transitorios ya que el 90% cefalia en un 62%, anomalías renales en un 50%, car-
desaparecen entre las semanas 26 y 28. Las características diopatía en un 25%, anomalías faciales en un 25%,
de bilateralidad, persistencia y gran tamaño se relacionan higroma quístico en un 12%, onfalocele en un 12% y
con mayor probabilidad con trisomía 18. Estudios en pobla- anomalías de fosa posterior en un 12%. En el primer tri-
ción general han concluido que la presencia de un quiste de mestre se diagnosticaron 3 casos entre 2000-2004, de
plexos coroideos sin otras anomalías asociadas aumenta el los cuales 2 presentaban holoprosencefalia, DVR en los
riesgo de trisomía 18 por un factor de 9 (likelihood ratio). 3 y cardiopatía en 2 casos.

Defectos de extremidades Holoprosencefalia


Son el signo guía del diagnóstico ecográfico de trisomía Se trata de la existencia de un ventrículo único dilatado
18 conjuntamente con el RCIU. Dedos de la mano super- en la línea media. De un total de 7 series con 132 casos, la
puestos (el índice sobre el tercero y el quinto sobre el cuarto) prevalencia de defectos cromosómicos fue de un 33% (4%
(19-80%), pies en balancín (39-50%) o zambos (23-32%). Asi- en presentación aislada y 39% asociada a otras anomalí-
mismo la reducción del fémur es un marcador de trisomía 18. as), y un 23% fueron trisomías 13. En un estudio sobre 38
casos de holoprosencefalia, no se detectó ninguna ano-
Polihidramnios
malía cromosómica en caso de presentación aislada o con
Se ha descrito la triada constituida por hidramnios, anomalías faciales exclusivamente y en cambio la mitad de
anomalía postural de la mano y otra anomalía, como bue- los casos con anomalías extrafaciales asociadas presenta-
na predictora. ban cromosopatía.

971
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

Tabla 3. Alteraciones ecográficas asociadas a la trisomía 13. Otras anomalías


ALTERACIONES ECOGRÁFICAS ASOCIADAS A LA TRISOMÍA 13 Anomalías renales, onfalocele, RCIU (43% en 2º tri-
Restricción de crecimiento intrauterino mestre), mielomeningocele y hernia diafragmática.
Sistema nervioso central y cráneo
holoprosencefalia Marcadores ecográficos
dilatación de los ventrículos laterales
Son marcadores ecográficos de trisomía 13: la polidacti-
aumento de la cisterna magna
lia, el hipotelorismo, la microftalmia, la arteria umbilical única,
microcefalia
Cara
aumento de cisterna magna y agenesia de cuerpo calloso.
hendidura labial/palatina
ciclopia Monosomía X(síndrome de Turner)
hipoplasia facial
La incidencia se estima en 1 de cada 5000 recién na-
hipotelorismo
Cuello/hidrops cidos hembra, y no se relaciona con la edad materna. Su
translucencia nucal aumentada/higroma quístico frecuencia es más alta en el momento de la concepción,
hídrops/linfangiectasia representando el 20% de abortos espontáneos con ano-
Renal malía cromosómica. El 57% de los casos corresponden a
riñones hiperecogénicos un cariotipo 45,X, por una no disyunción parenteral, pater-
aumento del tamaño renal na en el 75% de los casos. En un 17% hay un isocromo-
hidronefrosis soma del brazo largo del X. En un 16% se trata de un mo-
Alteraciones cardíacas saico y en un 10% hay una delección del brazo corto del
Extremidades X. El fenotipo presenta grandes variaciones y en algunos
polidactilia casos no se diagnostica hasta la pubertad.
pie equino-varo o en mecedora
dedos doblados o superpuestos Marcadores bioquímicos
Abdomen
onfalocele
Independientemente de que se trate de casos hidrópi-
extrofia vesical cos o no, se detectan unos niveles bajos de AFP y de uE3.
hiperecogenicidad intestinal En los casos no hidrópicos hay una disminución de hCG.
Otras En los casos con hidrops, los niveles de hCG son altos.
hiperecogenicidad de las cuerdas tendinosas
arteria umbilical única Anomalías estructurales fetales

Higroma quístico
Es la anomalía fetal ecográfica más estrechamente re-
Microcefalia
lacionada con monosomía X. De los fetos con higroma
Si ante una microcefalia la probabilidad de cromoso- quístico, la mitad está afecta de monosomía X. El 75% de
mopatía es del 15%, la de trisomía 13 es del 6%. estos casos, a su vez, se asocian a hidrops fetal.

Defectos faciales de la línea media Anomalías cardiovasculares


Se trata de labio leporino, hendidura palatina, hipotelo- Se encuentran en un 35% de estos fetos siendo las
rismo o más severas como ciclopia, arrinia o proboscis. El más frecuentes la coartación de aorta y las lesiones del co-
labio leporino asociado a trisomía 13 en un 70% de los ca- razón izquierdo y de la válvula aórtica.
sos es de localización media mientras que el de presenta-
ción lateral responde a otras etiologías. Estos defectos de Anomalías renales
la línea media se asocian a anomalía cromosómica en un
Se encuentran en un 19-38% de casos. Se trata de hi-
48% de los casos y a trisomía 13 en un 25%, siempre en
dronefrosis, riñón en herradura, agenesia renal, riñones
caso de malformaciones múltiples.
multiquísticos y duplicación renal.
Cardiopatía
Marcadores ecográficos
El 80-90% de fetos afectos de trisomía 13 tienen una
Translucencia nucal
cardiopatía, principalmente, CIV e hipoplasia de cavidades
izquierdas. Del 2 % al 8% de las diagnosticadas por eco- Una gran proporción de monosomías X presentan una
grafía se asocian a trisomía 13. translucencia nucal aumentada en el primer trimestre.

972
CROMOSOMOPATIAS

Reducción de fémur Otras anomalías


En una serie de 44 casos de higroma quístico de los Ventriculomegalia, cardiopatía (CIV), anomalías de ex-
cuales 31 eran monosomías X, el 90% presentaban una re- tremidades (pie zambo y sindactilia), displasia renal multi-
ducción del fémur. quística, onfalocele, defectos del tubo neural, atresia biliar.
De los datos del UDP-HCP sobre 5 fetos con monoso-
Marcadores ecográficos
mía X en 2º trimestre la anomalía más frecuente es el hi-
groma quístico asociado a hidrops, habitualmente hidrotó- Placenta hidrópica
rax, ascitis y/o edema subcutáneo. De los 11 fetos La sospecha de triploidía se establece al encontrar una
diagnosticados durante el primer trimestre, con edad ges- placenta con degeneración hidrópica o una mola hidatifor-
tacional media de 13 semanas, 54% presentaban hidrops, me parcial (estos cambios están en relación con un com-
el 100% aumento de la translucencia nucal, DVR o ausen- plemento haploide de origen paterno).
te en el 60%, cardiopatía en el 18% y RCIU en el 18%.
Anomalías de la cara
Triploidías y poliploidía Hipertelorismo (58%), micrognatia (50%), anomalías de
La incidencia en recién nacidos vivos es del 0,1 al 0,4 la línea media (29%), macroglosia (17%).
por 1000, si bien un 2% de las concepciones tienen una
Sindactilia
dotación triploide. La etiología de la triploidía corresponde
a una dotación haploide completa sumada a un número di- Se ha relacionado la sindactilia de 3º y 4º dedo con la
ploide normal siendo en la mayoría de los casos el com- triploidía.
plemento extra de origen paterno, por dispermia o doble
fertilización. En un 10% responde a la fertilización de un
ovocito diploide. LECTURAS RECOMENDADAS
Benacerraf BR, Nadel A, Bromley B. Identification of second tri-
Marcadores bioquímicos mester fetuses with autosomal trisomy by use of a sonogra-
phic scoring index. Radiology 1994; 193: 135-40.
Se ha observado que en casos de triploidía cuando el Biagiotti R, Cariati E, Brizzi L, D’Agata A. Maternal serum scree-
origen del exceso haploide es materno, los niveles de AFP ning for Down’s syndrome in the first trimester of pregnancy.
son normales y los de hCG y uE3 están muy disminuidos. Br J Obstet Gynaecol 1995; 102: 660-2.
En los casos asociados a mola parcial, es decir, de origen Borrell A. Aneuploidia y ecografía: marcadores ecográficos y ano-
paterno, los niveles de AFP y hCG son altos. malías asociadas. En: Ramos P, ed. Ecografía obstétrica.
Barcelona: Mosby/ Doyma Libros, 1995.
Anomalías estructurales fetales Brizot ML, Kuhn P, Bersinger NA, Snijders RJ, Nicolaides KH.
First trimester maternal serum alpha-fetoprotein in fetal triso-
Clásicamente se han descrito como signos de triploi- mies. Br J Obstet Gynaecol 1995; 102: 31-4.
día la tétrada: RCIU, hidrocefalia, oligoamnios y placenta Crane JP. Ultrasound evaluation of fetal chromosomal disorders. In:
hidrópica. De una serie de 4 casos descritos en la UDP- Callen PW. Ultrasonography in Obstetrics and Gynecology, 1988.
HCP en todos se detectó RCIU severo con una gran des- Golbus MS, Simpson JL. Genetics in Obstetrics & Gynecology:
proporción entre cabeza y cuerpo y un grado variable de Cytogenetics, 2nd edition. Philadelphia: Saunders, 1992; 3-28.
ventriculomegalia. En primer trimestre, de 4 casos, se ob- Golbus MS, Simpson JL. Genetics in Obstetrics & Gynecology:
Spectrum of autosomal chromosome abnormalities. 2nd edi-
servó cardiopatía en 2 casos, onfalocele en 2, alteracio-
tion. Philadelphia: Saunders, 1992; 61-78.
nes en las extremidades superiores en 2 y RCIU también
Kellner LH, Weiss RR, Weiner Z, Neuer M, Martin GM, Schulman
en 2 casos. H, Lipper S. The advantages of using triple-marker screening
for chromosomal abnormalities. Am J Obstet Gynecol 1995;
RCIU severo asimétrico y precoz 172: 831-6.
Afecta más severamente al cuerpo detectándose una Loncar J, Barnabei VM and Larsen JW Jr. Advent of maternal se-
rum markers for Down Syndrome Screening. Obstet Gynecol
marcada discordancia entre cabeza relativamente normal y
Surv 1995; 50: 316-20.
abdomen muy pequeño. La combinación de un RCIU pre-
Nicolaides KH, Snijders RJM, Gosden CM, Berry C, Campbell S.
coz, con gran desproporción entre cabeza y abdomen, oli- Ultrasonographically detectable markers of fetal chromoso-
goamnios moderado y en ausencia de cambios placenta- mal abnormalities. Lancet 1992; 340: 704-7.
rios evidentes es altamente sugestiva de triploidía de Snijders RJM, Nicolaides KH. Ultrasound markers for fetal chromo-
origen materno. somal defects. London: The Parthenon Publishing, 1996; 1-194.

973
Capítulo 110
BASES FÍSICAS DE LOS ULTRASONIDOS.
NOCIONES BÁSICAS EN LA ECOGRAFÍA
OBSTÉTRICA Y GINECOLÓGICA
Marin-Buck A, Padilla A, de la Torre J, Carballo J, Troyano JM, Mercé LT

INTRODUCCION y viceversa. Generalmente en Obstetricia y Ginecología se


utilizan sondas abdominales de 3,5 MHz y vaginales entre
Los ultrasonidos son ondas de alta frecuencia, entre 5 y 7 MHz.
1,5 y 60 MHz, no audibles por el oído humano, que se ge-
neran aplicando corriente alterna a un transductor com-
puesto por cristales piezoelectricos. UTILIZACIÓN DEL DOPPLER EN
Los ultrasonidos al igual que el sonido, viajan a una ve- OBSTETRICIA Y GINECOLOGÍA
locidad definida y en forma de una onda. La frecuencia es
Cuando las ondas de ultrasonidos emitidas son refleja-
el número de ciclos completos por unidad de tiempo y se
das por un objeto en movimiento, lo son con una frecuen-
mide en Hertzios (Hz), de manera que 1Hz es igual a 1 ci-
cia distinta dependiendo de la velocidad que tenga del ob-
clo por segundo. Los ultrasonidos atraviesan los tejidos y
jeto en movimiento (Fenómeno Doppler).
lo hacen de forma distinta dependiendo del medio físico en
el que son transmitidos, lo harán muy bien por el agua y Nosotros conociendo la velocidad a la que emitimos y
muy poco por el aire. a la que recibimos el ultrasonido, y aplicándolo a los vasos
Cuando los ultrasonidos llegan a la interfase entre dos con sangre en movimiento podemos a través de una serie
estructuras de distinta densidad son reflejados con una de cálculos de física de fluidos conocer la velocidad y por
intensidad proporcional a la diferencia de estas densida- consiguiente el flujo de sangre en un vaso.
des. El transductor lleva acoplado un receptor que perci- Con subsiguientes avances técnicos se ha podido vi-
be estos ultrasonidos reflejados. La integración espacio sualizar el vaso insonado mientras medimos su flujo (Du-
temporal entre los ultrasonidos emitidos y los reflejados la plex Doppler) y asignar una señal color a la ultrasónica de
hace un sistema computerizado que genera una señal tal manera que podemos visualizar el flujo y codificando su
que puede ser visualizada en un monitor en forma de dirección dar un color al que se aleja del transductor y otro
imagen. Se coloca el transductor sobre la zona a explo- al que se acerca a este (Doppler color).
rar utilizando un compuesto gelatinoso que impida la pér-
dida de ultrasonidos en la interfase entre la zona explora- La estimación del flujo se realiza indirectamente anali-
da y el transductor. zando la ondas de velocidad del flujo obteniendo una serie
de índices como son el índice de resistencia o el índice de
La mayoría de los equipos realizan ecografía en tiem- pulsatilidad.
po real lo que permite visualizar movimiento. Esto se con-
sigue emitiendo los ultrasonidos de forma continua y se- El Doppler es muy útil en la investigación de la circula-
cuencial, y al recibirlos se integran generando las ción uteroplacentaria y de sus alteraciones. Podemos de-
imágenes. tectar alteraciones compensatorias en el flujo cerebral y
umbilical en los fetos con hipoxia crónica.
Las sondas que emiten ultrasonidos se diferencian en
la forma (lineal, sectorial, cónvex) y lo que es más impor- En Ginecología su utilidad principal estriba en el diag-
tante en al frecuencia a la que emiten. Cuanto menor es la nóstico diferencial de masas ginecológicas. Los vasos neo-
frecuencia de la longitud de onda a la que emiten mayor formados de las neoplasias tienen mayor flujo sanguíneo
será la profundidad de exploración y peor será la definición que los normales.

975
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

Otra utilidad es el diagnóstico diferencial de estructuras Niveles de atención ecográfica


sonoluscentes que mediante el Doppler podemos identifi-
car como vasculares. Nivel I: Realizada por obstetras (no dedicados exclusi-
vamente a ecografía), que utilicen un equipo lineal (electró-
nica-digital).
ECOGRAFÍA OBSTÉTRICA Nivel II: Realizada por ecografistas dedicados prioritaria-
mente a la ecografía obstétrica. Utilizan equipos de alta re-
La ecografía es una herramienta imprescindible para el
solución sectorial, transductor vaginal. Pueden practicar por
diagnóstico y tratamiento en Obstetricia y desde su uso
ellos mismos técnicas invasivas de diagnóstico prenatal.
generalizado ha revolucionado todos los aspectos de esta
disciplina. Nivel III: Realizada por ecografistas dedicados exclusi-
vamente al diagnóstico prenatal (Unidades de Diagnóstico
La exploración obstétrica debe ser siempre reflejada en
Prenatal). Utilizan equipos de alta resolución. Doppler. Eco-
un informe escrito y si es posible con una imagen fotográ-
cardiografía. Econeurografía. Transductor vaginal.
fica. En el informe debe siempre hacerse constar.
– Identificación de la gestante. Exploración ecográfica en el primer trimestre
– Fecha de la exploración.
La SEGO aconseja que se realice entre la 8ª y 12ª se-
– Nivel de la ecografía realizada. mana de gestación. El objetivo de esta ecografía es esta-
– Sonda utilizada. Utilización de Doppler. blecer como mínimo:
– Los datos que se expondrán a continuación para cada
Localización del saco gestacional
edad gestacional.
En las Tablas 1 y 2 se exponen las ecografías que son En la mayoría de las gestaciones se puede identificar el
aconsejables realizar durante el embarazo y la sistemática saco o vesícula gestacional con sonda vaginal a las 5 se-
de la exploración, teniendo en cuenta tanto los objetivos manas de gestación aunque se pueden visualizar ya des-
como el contenido durante las diferentes exploraciones. de las 4 semanas y media. Con sonda abdominal se pue-
den detectar entre la 5ª y la 6ª semana.

Tabla 1. Ecografías durante el embarazo. Normalmente se miden los tres diámetros espaciales
del saco gestacional y su media se correlaciona con la
Primer trimestre: 8ª - 12ª semana de gestación
edad gestacional (Tabla 3) pero esta es menos precisa que
1ª ecografía
la longitud craneocaudal del embrión (LCC) o Crown Rump
Segundo trimestre: 18ª - 20ª semana de gestación
Lenght (CRL). Por lo tanto la usaremos para estimar la
2ª ecografía
edad gestacional mientras no visualicemos el embrion, en-
Tercer trimestre: 34ª - 36ª semana de gestación
tre la semana 4 y 6, sabiendo que la estimación es de ± 5
3ª ecografía

Tabla 2. Sistemática de la exploración ecográfica durante el embarazo.

Semana de gestación Nivel Objetivos Contenido


8ª - 12ª I – Vitalidad embrionaria 1. Saco gestacional y embrión:
– Estimación de la edad de gestación (1) – Nº de sacos y/o embriones
– Patología del 1r trimestre – Presencia o ausencia del embrión
– Marcadores ecográficos precoces – Latido cardíaco fetal
de aneuploides (2) – Medida de la LCR y estimación de la edad
– Localización y características del
trofoblasto.
2. Observación del útero y anexos
18ª - 20ª II – Número de fetos 1. Biometría basal (DBP, CC, CA, CC/CA, LF)
– Control del CIR 2. Estudio de la anatomía fetal
– Diagnóstico de anomalías estructurales y 3. Características de la placenta, cordón
marcadores de cromosomopatías (nº de vasos) y estimación de la cantidad
de líquido amniótico
34ª - 36ª I – Estimación de la normalidad fetal y 1. Estimación del crecimiento fetal
de su entorno (DBP, CC, CA, CC/CA, LF, etc.)
2. Estudio de la anatomía fetal

976
BASES FÍSICAS DE LOS ULTRASONIDOS. NOCIONES BÁSICAS EN LA ECOGRAFÍA OBSTÉTRICA Y GINECOLÓGICA

Tabla 3. Diámetro medio del saco gestacional durante el primer trimestre fundir gestaciones múltiples con fusiones entre amnios y
del embarazo.
corion o bridas amnióticas.
Semanas Diámetro saco gestacional (cm)
Con la sonda vaginal, identificando los sacos amnióti-
5.0 1.0 cos y el crecimiento trofoblástico es posible precisar el tipo
5.5 1.3 de gestación múltiple. Es importante identificar las gesta-
6.0 1.7 ciones gemelares monocoriales biamnióticas y las mono-
6.5 2.0
coriales monoamnióticas, muy raras, pero con importante
repercusión durante la gestación y el parto.
7.0 2.4
7.5 2.7 Vitalidad embrionaria: Latido cardíaco
8.0 3.1
Con la sonda vaginal se detecta el latido cardíaco fetal
8.5 3.4
aproximadamente a las 6 semanas. Es posible visualizar el
9.0 3.8 embrión antes de visualizar si tiene latido o no. Con sonda
9.5 4.1 vaginal se debe ver el latido de los embriones con LCC ma-
10.0 4.5 yor de 5 mm que correspondería a unas 6 semanas. Con
sonda abdominal esto se retrasa una semana o incluso
más si la paciente es obesa.
días. En el momento que veamos embrión nos guiaremos En caso de duda siempre se debe repetir la ecografía a
por el CRL para estimar la edad gestacional ecográfica. la semana y contrastar la exploración con otro ecografista.
Es importante no confundir la vesícula gestacional en la
que todavía no se visualiza el embrión, con la pseudovesí- Biometría del embrión: Longitud Cráneo Caudal (LCC)
cula que suele aparecer en las gestaciones extrauterinas y La ecografía discrimina entre torso y cabeza embriona-
otras diversas situaciones. El saco gestacional tiene un ani- ria entre la 7ª y 8ª semana de gestación dependiendo de
llo hiperecogénico que rodea a una vesícula hipoecogéni- las sondas. La longitud cráneo caudal es el método más
ca más o menos regular que es donde está el embrión. La preciso para valorar la edad gestacional durante el emba-
pseudovesícula no presenta este anillo hiperecogénico y es razo (Tabla 4). No debe utilizarse más tarde de la 12 se-
generalmente más irregular. mana cuando el embrión se flexiona y reflexiona, no sien-
do tan preciso.
Saco vitelino

Suele ser la primera estructura que se ve dentro del sa- Tabla 4. Longitud cráneo caudal durante el primer trimestre del embarazo.
co gestacional, apreciándose entre la semana 4 y 5 apro- Semanas CRL (cm)
ximadamente. Es un dato importante para identificar al sa-
6.0 .45
co gestacional como tal. Con posterioridad aparecerá en
su vecindad el botón embrionario. Se suele ver cuando la 6.5 .65
vesícula gestacional mide aproximadamente 8 mm. 7.0 .92
7.5 1.3
Tiene una morfología de membrana anular ecorrefrin-
gente y un tamaño menor de 6 mm. Si es mayor se acon- 8.0 1.5
seja hacer un seguimiento más frecuente de la paciente al 8.5 1.9
asociarse a cromosomopatías u otras alteraciones. 9.0 2.2
9.5 2.7
Presencia o ausencia de embrión
10.0 3.1
Con la sonda vaginal el embrión se visualiza una sema- 10.5 3.6
na antes que con la sonda abdominal, entre la 5ª y la 6ª se- 11.0 4.1
mana. La primera estructura embrionaria que se visualiza
11.5 4.7
es una combinación entre la cavidad amniótica en des-
12.0 5.2
arrollo y el saco vitelino.
12.5 6.0
Número de embriones 13.0 6.5

Se contarán el número de embriones y no de estructu- 13.5 7.4


ras saculares, ya que en etapas precoces se pueden con- 14.0 7.9

977
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

Descripción de útero y anejos anomalías estructurales en un 80-90% de los casos. A par-


tir de la semana 10 aumentan los factores maternos y am-
Es imprescindible una exploración del útero y sus ane-
biéntales.
jos para diagnosticar masas y/o malformaciones que serán
difíciles de visualizar con posterioridad durante el embara- Existen una serie de criterios ecográficos durante el pri-
zo. mer trimestre que diagnostican el aborto. Es importante te-
ner en cuenta la edad gestacional, fecha de la prueba de
En el útero la presencia, tamaño y localización de mio-
embarazo positiva y las ecografías previas si las tuviese. Si
mas se debe reseñar porque estos aumentan con la ges-
existen dudas se repetirá el estudio dando un margen de
tación. Las malformaciones uterinas son más fácilmente
aproximadamente 1 semana.
diagnosticables en este trimestre.
Estos criterios dependen del tipo de sonda utiliza-
Las masas anexiales suelen corresponder al cuerpo lú-
do.
teo gravídico que no debe exceder de los 3 centímetros.
Sospecharemos gestación patológica (interrumpida o
Patología ecografica del primer trimestre de mal pronóstico) si:
– No se visualiza el embrión con un diámetro de saco
Diagnóstico de gestación interrumpida
gestacional medio mayor de 20 mm con sonda vaginal
Las principales causas de de pérdida de la gestación y 25 mm con sonda abdominal. Se llama a esto huevo
durante el primer trimestre son las cromosomopatías y las huero.

Tabla 5. Diámetro biparietal (mm) durante la gestación normal.

Gestación p5 Media P95


14+0 – 14+6 28 31 44
15+0 – 15+6 31 34 37
16+0 – 16+6 34 37 40
17+0 – 17+6 36 40 43
18+0 – 18+6 39 43 47
19+0 – 19+6 42 46 50
20+0 – 20+6 45 49 54
21+0 – 21+6 48 52 57
22+0 – 22+6 51 56 61
23+0 – 23+6 54 59 64
24+0 – 24+6 57 62 68
25+0 – 25+6 60 66 71
26+0 – 26+6 63 69 75
27+0 – 27+6 66 72 78
28+0 – 28+6 69 75 81
29+0 – 29+6 72 78 85
30+0 – 30+6 74 81 88
31+0 – 31+6 77 83 90
32+0 – 32+6 79 86 93
33+0 – 33+6 81 88 96
34+0 – 34+6 83 90 98
35+0 – 35+6 85 92 100
36+0 – 36+6 86 94 102
37+0 – 37+6 87 95 103
38+0 – 38+6 88 96 104
39+0 – 39+6 89 97 105

978
BASES FÍSICAS DE LOS ULTRASONIDOS. NOCIONES BÁSICAS EN LA ECOGRAFÍA OBSTÉTRICA Y GINECOLÓGICA

– No se visualiza el latido cardíaco fetal en un embrión – Pseudovesícula gestacional.


con LCC mayor de 6 mm con sonda vaginal o 10 mm
– Presencia de líquido libre.
con sonda abdominal.
– Visualización directa de la gestación extrauterina con
– No se visualiza el saco vitelino en un saco gestacional
una morfología de doble halo ecorrefringente con vesí-
con diámetro medio mayor de 18 mm con sonda vagi-
cula en su interior. Se suele observar a nivel de la am-
nal o 20 mm con sonda abdominal.
polla tubárica y en la mayoría de los casos es homola-
Embarazo extrauterino teral al cuerpo lúteo del ovario.

El diagnóstico ecográfico correcto de una gestación En una paciente con una prueba de embarazo positiva
extrauterina puede no ser sencillo siendo muy recomenda- en la que no visualizamos la gestación intrauterina debemos
ble el empleo de la sonda vaginal con o sin el Doppler co- de solicitar los niveles sanguíneos de beta-HCG. Con son-
lor. El Doppler puede ser de gran utilidad al comprobar un da abdominal, debemos visualizar la gestación intrauterina
descenso de las resistencias vasculares de la trompa afec- siempre que la beta-HCG sea superior a 1800 mUI/ml. En
ta, y ausencia de flujo peritrofoblástico intrauterino. caso negativo sospecharemos una gestación extrauterina.
Con sonda vaginal el nivel de corte se establece entre 800
Los signos ecográficos son:
y 1000 mUI/ml dependiendo de los equipos y experiencia
– Útero vacío. del ecografista. Si existen dudas se debe monitorizar la be-
– Aumento variable del espesor endometrial. ta HCG y repetir la ecografía cada 48 horas.

Tabla 6. Circunferencia cefálica (mm) durante la gestación normal.

Gestación p5 Media P95


14+0 – 14+6 102 110 118
15+0 – 15+6 111 120 129
16+0 – 16+6 120 130 140
17+0 – 17+6 130 141 152
18+0 – 18+6 141 152 164
19+0 – 19+6 151 163 176
20+0 – 20+6 162 175 189
21+0 – 21+6 173 187 201
22+0 – 22+6 184 198 214
23+0 – 23+6 195 210 227
24+0 – 24+6 206 222 240
25+0 – 25+6 217 234 252
26+0 – 26+6 227 245 264
27+0 – 27+6 238 256 277
28+0 – 28+6 248 267 288
29+0 – 29+6 257 277 299
30+0 – 30+6 266 287 309
31+0 – 31+6 274 296 319
32+0 – 32+6 282 304 328
33+0 – 33+6 288 311 336
34+0 – 34+6 294 317 342
35+0 – 35+6 299 323 348
36+0 – 36+6 303 327 353
37+0 – 37+6 306 330 356
38+0 – 38+6 308 332 358
39+0 – 39+6 309 333 359 CC = [3,14 x (BPD+DFO)/2]

979
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

Exploración ecográfica del segundo – Biometría fetal. (DBP, DAAP, DAT, LF).
trimestre La medición de las distintas partes del feto sirve para
valorar el crecimiento armónico de la anatomía fetal res-
La exploración ecográfica del segundo trimestre es
muy importante pues durante la misma se pueden diag- pecto a la edad gestacional.
nosticar la mayoría de las malformaciones fetales. La SE- Clásicamente hay tres parámetros que debe incluir to-
GO recomienda que esta ecografía se realice entre la 18 y da biometría fetal:
la 20 semana por un ecografista experto con el equipo
– Cabeza fetal: Se realiza un corte transversal a nivel
adecuado y el tiempo necesario para realizar una ecogra-
fía de Nivel II. de la sutura interhemisferica, cavum del septum pe-
llucidum y del tercer ventrículo. Se mide el diámetro
Básicamente la exploración rutinaria del segundo tri- biparietal (DBP) desde el borde externo de un parie-
mestre debe incluir. tal hasta el interno del otro (Tabla 5). Si el DBP no
– Número de fetos. coincide con la amenorrea se medirá en el mismo
corte el diámetro frontooccipital (DFO) para obtener
Si la gestación es múltiple se establecerá el número de
el índice cefálico (DBP/DFO). Si este parámetro no
placentas y amnios.
esta entre 0,70 y 0,85 la medida del DBP no coinci-
– Vitalidad fetal. dirá con la amenorrea por dolicocefalia (<0.70) o
– Situación, presentación y posición del feto/fetos.. braquicefalia (> 0.85). En este caso mediremos la

Tabla 7. Diámetro ventrículo cerebral anterior (mm) durante la gestación normal.

Gestación p5 Media P95


14+0 – 14+6 5,2 6,7 8,1
15+0 – 15+6 5,3 6,8 8,3
16+0 – 16+6 5,4 6,9 8,4
17+0 – 17+6 5,6 7,0 8,5
18+0 – 18+6 5,7 7,2 8,6
19+0 – 19+6 5,8 7,3 8,8
20+0 – 20+6 5,9 7,4 8,9
21+0 – 21+6 6,1 7,5 9,0
22+0 – 22+6 6,2 7,7 9,2
23+0 – 23+6 6,3 7,8 9,3
24+0 – 24+6 6,4 7,9 9,4
25+0 – 25+6 6,6 8,1 9,5
26+0 – 26+6 6,7 8,2 9,7
27+0 – 27+6 6,8 8,3 9,8
28+0 – 28+6 7,0 8,4 9,9
29+0 – 29+6 7,1 8,5 10,1
30+0 – 30+6 7,2 8,7 10,2
31+0 – 31+6 7,3 8,8 10,3
32+0 – 32+6 7,5 9,0 10,4
33+0 – 33+6 7,6 9,1 10,6
34+0 – 34+6 7,7 9,2 10,7
35+0 – 35+6 7,9 9,3 10,8
36+0 – 36+6 8,0 9,5 10,9
37+0 – 37+6 8,1 9,6 11,1
38+0 – 38+6 8,2 9,7 11,2
39+0 – 39+6 8,3 9,8 11,3

980
BASES FÍSICAS DE LOS ULTRASONIDOS. NOCIONES BÁSICAS EN LA ECOGRAFÍA OBSTÉTRICA Y GINECOLÓGICA

circunferencia cefálica en este mismo plano (Tabla ESTUDIO DE LA ANATOMIA FETAL


6).
PARA DIAGNÓSTICO DE LAS
– Abdomen: La medición del abdomen fetal se debe MALFORMACIONES CONGENITAS
realizar en un corte transversal a altura de la inserción
de la vena umbilical, debiendo visualizar los 2/3 de Durante el segundo y el tercer trimestre se deben ex-
ésta y la cámara gástrica. Podemos calcular el diá- ploran las distintas partes de la anatomía fetal.
metro abdominal medio (DAM) hallando la media en-
Cabeza
tre diámetro abdominal antero-posterior (DAAP) y el
transverso (DAT), pero también podemos medir la Podemos realizar cortes coronales, sagitales y axia-
circunferencia abdominal (Tablas 11 y 12). No se de- les. Comenzamos con un corte axial alto para ver el cuer-
be calcular la biometría abdominal con un solo diá- po de los ventrículos laterales (VL). Bajamos un poco la
metro. sonda y vemos los cuernos frontales, el atrio y los cuer-
nos occipitales de los VL. Realizaremos aquí la medida
– Fémur: La longitud del fémur (LF) es un buen paráme- atrio-ventricular, que no debe de ser mayor de 10 mm, y
tro biométrico que puede empezar a medirse a partir es constante durante el segundo y tercer trimestre (Ta-
de las 12 semanas. Se realiza un corte longitudinal del blas 7 y 8). Más abajo, en un corte axial medio vemos el
mismo midiendo la diáfisis del mismo entre los puntos tálamo, como dos cuñas triangulares a ambos lados del
de osificación (Tabla 13). tercer ventrículo que queda en medio, y que puede ser vi-

Tabla 8. Diámetro ventrículo cerebral posterior (mm) durante la gestación normal.

Gestación p5 Media P95


14+0 – 14+6 5,1 6,7 8,4
15+0 – 15+6 5,1 6,8 8,5
16+0 – 16+6 5,2 6,9 8,6
17+0 – 17+6 5,3 7,0 8,7
18+0 – 18+6 5,4 7,1 8,8
19+0 – 19+6 5,5 7,2 8,8
20+0 – 20+6 5,6 7,2 8,9
21+0 – 21+6 5,6 7,3 9,0
22+0 – 22+6 5,7 7,4 9,1
23+0 – 23+6 5,8 7,5 9,2
24+0 – 24+6 5,9 7,6 9,3
25+0 – 25+6 6,0 7,7 9,3
26+0 – 26+6 6,1 7,7 9,4
27+0 – 27+6 6,1 7,8 9,5
28+0 – 28+6 6,2 7,9 9,6
29+0 – 29+6 6,3 8,0 9,7
30+0 – 30+6 6,4 8,1 9,8
31+0 – 31+6 6,5 8,2 9,9
32+0 – 32+6 6,6 8,3 9,9
33+0 – 33+6 6,7 8,3 10,0
34+0 – 34+6 6,7 8,4 10,1
35+0 – 35+6 6,8 8,5 10,2
36+0 – 36+6 6,9 8,6 10,3
37+0 – 37+6 7,0 8,7 10,4
38+0 – 38+6 7,1 8,8 10,4
39+0 – 39+6 7,2 8,8 10,5

981
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

sible hasta la semana 18-19. Por detrás vemos el acue- siones importantes, pueden comprimir estructuras vecinas
ducto de Silvio y a los lados el gyrus del hipocampo. Ba- y estrechar los agujeros de Monro con la consiguiente hi-
jando la sonda vemos el quiasma óptico y el polígono de drocefalia.
Willis. Con un corte axial oblicuado hacia atrás vemos el
Algo más atrás del cavum vemos el cuerpo calloso, los
vermis y los hemisferios cerebelosos, donde mediremos
tálamos, el tercer ventrículo y los plexos coroideos. Si con-
el diámetro transverso.
tinuamos en el barrido veremos los cuernos occipitales de
Haciendo un corte coronal podemos objetivar si existe los VL, imagen llamada en “ojos de buho”.
dilatación ventricular, a la altura del cuerpo calloso que es
En un corte sagital medio vemos desde arriba el cuer-
hipoecogénico veremos las prolongaciones anteriores de
po calloso en forma semicircular e hipoecogénico, que si-
los VL, y el quinto ventrículo, que es el cavum del septum
gue el contorno del quinto ventrículo. Consta de tres par-
pellúcidum. El cavum es una colección de líquido cefalora-
tes el cuerpo calloso, la rodilla, el cuerpo y el rodete. En la
quideo entre las dos hojas del septum pellucidum anterior
parte más inferior del cavum aparece el tálamo, muy ho-
a los forámenes de Monro. Está presente en la mayoría de
mogéneo. Posteriormente está el cerebelo, muy ecogéni-
los fetos y en el 80% de los niños de término. La porción
co, indentado por el cuarto ventrículo, de forma triangular
del cavum que se extiende posteriormente a las columnas
y econegativo.
del fornix es el cavum vergae. Ambos pueden adquirir as-
pecto de quistes cuando sus márgenes laterales biconve- Por lo tanto, de forma esquemática deberían explo-
xos se separan más de un centímetro. Si alcanzan dimen- rarse:

Tabla 9. Diámetro transverso del cerebelo (mm) durante la gestación normal.

Gestación p5 Media P95


14+0 – 14+6 12 14 15
15+0 – 15+6 13 15 17
16+0 – 16+6 14 16 18
17+0 – 17+6 15 17 19
18+0 – 18+6 16 18 21
19+0 – 19+6 17 20 22
20+0 – 20+6 19 21 24
21+0 – 21+6 20 22 25
22+0 – 22+6 21 24 27
23+0 – 23+6 22 25 28
24+0 – 24+6 24 26 30
25+0 – 25+6 25 28 31
26+0 – 26+6 26 29 33
27+0 – 27+6 27 31 34
28+0 – 28+6 29 32 36
29+0 – 29+6 30 33 37
30+0 – 30+6 31 35 39
31+0 – 31+6 32 36 40
32+0 – 32+6 34 37 42
33+0 – 33+6 35 39 43
34+0 – 34+6 36 40 44
35+0 – 35+6 37 41 46
36+0 – 36+6 38 42 47
37+0 – 37+6 39 43 48
38+0 – 38+6 40 44 49
39+0 – 39+6 41 45 51

982
BASES FÍSICAS DE LOS ULTRASONIDOS. NOCIONES BÁSICAS EN LA ECOGRAFÍA OBSTÉTRICA Y GINECOLÓGICA

– Ventrículos laterales (cuernos anteriores y posteriores, y Merece la pena mencionar que el diámetro transverso
plexos coroideos) (Tablas 9 y 10). cerebelar es una medida muy útil a la hora de determinar
– III y IV ventrículo. la edad gestacional de un feto (Tabla 9). En muchas oca-
siones nos vemos ante gestaciones no controladas que su
– Septum pellucidum y cuerpo calloso. primera ecografía se hace aproximadamente en el segun-
– Tálamos y pedúnculos cerebrales. do trimestre, y este parámetro nos puede ser de gran ayu-
da. Es fácil medir y recordar su correlación, dado que con
– Cerebelo (vérmix y lóbulos) (Tabla 9).
una edad gestacional de 18 semanas el diámetro transver-
– Cisterna magna (Tabla 10). so cerebelar es de 18 mm, para las 20 semanas será de
– Morfología global del cráneo (signos “del limón” o “de la 20 mm aproximadamente, y así sucesivamente. A partir de
banana”). La presencia del “signo del limón” en un corte la semana 24 la correlación no es tan exacta.
transversal se asocia, en un 77% de los casos, a una es- La cisterna Magna o cerebelo-medular es el espacio
pina bífida. También debe descartarse la presencia del subaracnoideo entre el bulbo y la superficie inferior del ce-
“signo de la banana”, a causa de la obliteración de la cis- rebelo. Puede variar en tamaño, 3 mm ± 5 mm, llegando a
terna magna con un abombamiento de los hemisferios ser muy grande y denominarse megacisterna magna si mi-
del cerebelo (probable asociación con espina bífida).
de más de 10 mm, sugiriendo una lesión del espacio pos-
En el cuello se evaluarán sus contornos (tumoraciones, terior. Puede tener prolongaciones alares alrededor de uno
etc.) y, si es posible, sus estructuras vasculares. o ambos hemisferios cerebelosos. Es importante no con-

Tabla 10. Diámetro de la cisterna Magna (mm) durante la gestación normal.

Gestación p5 Media P95


14+0 – 14+6 1,9 3,5 5,3
15+0 – 15+6 2,1 3,8 5,7
16+0 – 16+6 2,4 4,1 6,0
17+0 – 17+6 2,6 4,3 6,3
18+0 – 18+6 2,8 4,6 6,6
19+0 – 19+6 3,1 4,9 6,9
20+0 – 20+6 3,3 5,1 7,2
21+0 – 21+6 3,5 5,4 7,5
22+0 – 22+6 3,7 5,6 7,7
23+0 – 23+6 3,9 5,8 8,0
24+0 – 24+6 4,1 6,0 8,2
25+0 – 25+6 4,3 6,2 8,5
26+0 – 26+6 4,4 6,4 8,7
27+0 – 27+6 4,6 6,6 8,9
28+0 – 28+6 4,7 6,8 9,1
29+0 – 29+6 4,9 6,9 9,3
30+0 – 30+6 5,0 7,0 9,4
31+0 – 31+6 5,1 7,2 9,6
32+0 – 32+6 5,2 7,3 9,7
33+0 – 33+6 5,3 7,4 9,8
34+0 – 34+6 5,3 7,5 9,9
35+0 – 35+6 5,4 7,5 10,0
36+0 – 36+6 5,4 7,6 10,0
37+0 – 37+6 5,4 7,6 10,1
38+0 – 38+6 5,5 7,6 10,1
39+0 – 39+6 5,5 7,6 10,1

983
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

fundirlo con un quiste aracnoidal del cual se diferencia por- existe una obstrucción extraventricular del flujo del LCR a
que no produce efecto de masa sobre las estructuras ve- nivel del espacio subaracnoideo, o se produce un mal fun-
cinas y además en su interior pueden verse vasos y tabi- cionamiento de las vellosidades aracnoideas.
ques que corresponden a la hoz cerebelosa.
En las hidrocefalias no comunicantes, la obstrucción se
produce a nivel intraventricular. La más frecuente es la es-
Malformaciones de la cabeza y el sistema nervioso
tenosis del acueducto (33-43%). A parte de las dilatacio-
central
nes ventriculares, se suelen observar los plexos coroideos
Anencefalia colgando o flotando en el LCR, y así mismo se suele vi-
sualizar muy bien el tercer ventrículo. Recordar que la dila-
La anencefalia es el defecto más común del tubo neu-
tación de las astas posteriores de los ventrículos laterales
ral, con una incidencia de 1/1.000 RN. Es la ausencia total
ocurre antes que la de las astas anteriores.
o parcial del cráneo y del cerebro fetal, y es letal. La osifi-
cación del cráneo comienza en la semana 9 y se comple- Infecciones con afectación del SNC:
ta entre la 11 y la 12, momento en que debe de ser valo- Citomegalovirus, Toxoplasmosis y Rubéola
rada.
El CMV aparece como calcificaciones periventriculares
Craneoaracquisis y se suele asociar a microcefalia, hidrocefalia, ascitis y CIR.
Se recomienda, ante una serología positiva y alguno de es-
Apertura completa espinal que acompaña a la anence-
tos hallazgos ecográficos, determinar el CMV en LCR por
falia.
PCR.
Cefalocele La Toxoplasmosis se presenta como calcificaciones
multifocales intracraneales, hidrocefalia, microcefalia, atro-
Herniación del cerebro y/o de las meninges. Es 10 ve-
fia cerebral e hidroanencefalia.
ces menos frecuente que el mielomeningocele.
La Rubéola puede dar como resultado afectación neu-
Quistes de plexos coroideos rológica, cataratas, glaucoma, coriorretinitis, microftalmos,
microcefalia, sordera y malformaciones cardíacas.
Son espacios quísticos dentro de los plexos coroideos.
Aparecen en casi el 1% de la población general sin aso-
Columna vertebral y malformaciones
ciarse a cromosomopatías ni malformaciones, desapare-
ciendo a partir de la semana 24. Aunque la presencia de Realizaremos cortes longitudinales a lo largo de toda la
los mismos junto con otros marcadores ecográficos deter- columna para comprobar la integridad de la piel que recu-
minarían la necesidad de un estudio cromosómico, ya que bre la espalda fetal, poniendo énfasis en la región lumbo-
se asocian al onfalocele, alteraciones cardíacas y renales, sacra y cervical donde son más frecuentes los defectos de
paladar hendido, micrognatia e hidrocefalia, y también a la cierre del tubo neural. Rotando la sonda 90 grados realiza-
trisomía 18 y 21. mos cortes transversales de la columna identificando los
tres núcleos de osificación de las vértebras, el cuerpo ver-
Si vemos los quistes en ausencia de otras malforma-
tebral y los arcos neurales, a la vez que los tejidos blandos
ciones, deberemos repetir la ecografía entre la semana 22
adyacentes.
y 24. Si persiste la imagen recomendamos amniocentesis
o funiculocentesis. Disrafismo espinal, Mielocele, Mielomeningocele y
Malformación de Arnold-Chiari tipo II.
Quistes Aracnoideos
Es sinónimo de espina abierta. Es la segunda altera-
Son colecciones de LCR congénitas y habitualmente
ción más frecuente del tubo neural. Puede ser de dos ma-
benignas y únicas, en un 60% están en la fosa craneal me-
neras, el mielocele que no está cubierto de piel, y el mie-
dia.
lomeningocele donde el tejido neural y las meninges están
en continuidad con la piel. En un corte transverso se ve
Hidrocefalia congénita
una imagen en U. Es importante determinar la localización
Hidrocefalia o ventriculomegalia, término que se usa in- y la extensión de la lesión. A partir de la semana 12 se
distintamente, es la dilatación de los ventrículos laterales. puede hallar signos ecográficos en la cabeza que sugieran
Puede ser unilateral, que suele ser por obstrucción de uno una espina bífida, como el “signo del limón”, “signo de la
de los forámenes interventriculares de Monro, o bilateral, banana”, hidrocefalia-ventriculomegalia y microcefalia. El
dividiéndose en comunicantes o no comunicantes. Las hi- signo del limón es una deformidad del hueso frontal, y se
drocefalias bilaterales comunicantes son aquellas donde aprecia entre la semana 14 a la 24. El signo de la banana

984
BASES FÍSICAS DE LOS ULTRASONIDOS. NOCIONES BÁSICAS EN LA ECOGRAFÍA OBSTÉTRICA Y GINECOLÓGICA

se refiere a un aplanamiento anormal del cerebelo, que dio del septo interauricular. Por último debemos de confir-
oblitera la cisterna magna. Estos signos indirectos junto a mar en el pericardio que el líquido pericárdico no excede
un defecto espinal se denominan Malformación de Arnold- los 2 mm a nivel auricular. Realizando correctamente este
Chiari tipo II. corte es posible diagnosticar la gran mayoría de las mal-
formaciones cardíacas.
Corazón
Los tractos de salida de las grandes arterias (pulmonar
La valoración ecográfica para descartar cardiopatías y aorta) se visualizan con el corte de las cinco cámaras.
debe incluir al corazón y a la salida de los grandes vasos. Debemos de realizar un corte paralelo al de las cuatro cá-
Las malformaciones cardiacas son las malformaciones maras pero un poco más alto y con una ligera rotación en
congénitas severas más frecuentes, afectando entre un abanico de la sonda. La arteria pulmonar sale del ventrícu-
0,5-1% de los recién nacidos. La mitad de estas malfor- lo derecho y se cruza perpendicularmente sobre la aorta,
maciones son defectos menores fácilmente corregibles en forma de X, para luego dividirse en sus dos ramas. Si
con cirugía. Pero existe un 0,25-0,5% que son considera- continuamos por la izquierda veremos el ductus arterioso,
das como malformaciones moderadas o severas con una que conecta la pulmonar con la aorta. El calibre de la pul-
alta tasa de mortalidad. La aparición de una cardiopatía monar y la aorta son muy similares. Si realizamos un corte
congénita aconseja buscar otras malformaciones fetales, sagital veremos el arco aórtico y la salida de los troncos su-
ya que ésas se suelen asociar. El estudio cardíaco por tres praaórticos. En este plano podemos ver al ductus arterio-
cortes detecta entre un 60-70% de las cardiopatías con- so más fácilmente, formando la imagen en “palo de golf”.
génitas.
En un plano paralelo al de las cuatro cámaras y algo
El corazón se explora en un corte transversal a la altu- más alto al de la salida de los grandes vasos, vemos el pla-
ra del tórax fetal en el que no se debe visualizar el estóma- no de los tres vasos más tráquea, quedan de forma aline-
go. Debemos realizar por lo menos tres cortes, el de las ada de izquierda a derecha y de diámetro mayor a menor
cuatro cavidades, el corte del trayecto de salida de los la arteria pulmonar, la aorta y la vena cava superior. La tra-
grandes vasos y el corte de los tres vasos y traquea. que queda econegativa por detrás. Se puede ver en este
Lo primero es ver el situs cardíaco, es decir, la relación corte el ductus arterioso, que confluye en forma de V con
del corazón con el resto de órganos intraabdominales. Lo el istmo aórtico.
habitual es el situs solitus, orientado hacia la izquierda, la
Abdomen y malformaciones
aurícula derecha, la vena cava inferior quedan a la derecha,
y la aurícula izquierda, estómago y aorta descendente a la En el abdomen fetal se debe explorar con una siste-
izquierda. El situs inversus es al revés, una dextrocardia, y mática que consiga que la mayoría de los órganos sean vi-
generalmente no supone riesgo de patología. sualizados.
El plano ecográfico clásico para visualizar el corazón En primer lugar se debe comprobar la integridad de la
es el denominado “corte de las cuatro cámaras”. Si estas pared abdominal realizando cortes transversales seriados.
están normoconfiguradas descartamos un 30-40% de Los más importantes son los que examinan la inserción del
malformaciones cardíacas. Se realiza en un corte trans- cordón umbilical que es el lugar donde los defectos de pa-
verso a la altura de la cuarta costilla. Lo primero es valorar red son más frecuentes.
el eje cardíaco, que suele ser de 45 grados aproximada-
Recordar que hasta la 12º semana existe una hernia-
mente hacia la izquierda con respecto al esternón. El co-
ción fisiológica del intestino. No diagnosticaremos un onfa-
razón debe de ocupar 1/3 del área torácica total. El ven-
locele con seguridad hasta la semana 14º, a no ser que és-
trículo derecho queda justo por detrás del esternón, y
te sea muy importante.
tiene la banda moderadora, que es la confluencia de los
músculos papilares en el ápex y que ayuda a su identifi- Exploraremos los órganos abdominales empezando
cación. La aurícula izquierda es la más posterior y queda por la cámara gástrica que debe ser visualizada en todos
cerca de la columna vertebral y de la aorta descendente. los fetos en la semana 18º aunque es posible verla 4 se-
Por lo tanto si se marca un eje entre esternón y columna manas antes. Examinamos el estómago en el corte que uti-
se visualiza de adelante a atrás el ventrículo derecho y la lizamos para medir los diámetros abdominales y lo encon-
aurícula izquierda. Las válvulas aurícula-ventriculares de- traremos a la izquierda en un feto en cefálica y a la derecha
ben de batir hacia los ventrículos al unísono, de forma sin- en uno en podálica. El estómago se encuentra debajo del
crónica, siendo la tricúspide algo más apical que la mitral. corazón y nunca se debe visualizar en un corte correcta-
Debemos de comprobar la integridad del tabique inter- mente realizado de cuatro cámaras (hernia diafragmática).
ventricular, y visualizar el foramen oval a nivel del 1/3 me- El diafragma se explora en un corte longitudinal a través de

985
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

la línea media fetal y aparece como una fina línea menos La vejiga es una estructura sonoluscente redondeada y
ecogénica que separa el hígado y estómago del tórax. regular que se encuentra en la línea media de la pelvis fe-
tal y cambia de tamaño. Si no la visualizamos debemos re-
El hígado se explora en el mismo corte que el estóma-
petir la ecografía en 30 minutos. Podemos visualizar a nivel
go. Es una estructura de ecogenicidad homogénea que
vesical las dos hipogástricas mediante Doppler color, des-
ocupa la mayor parte del abdomen fetal y cuyo interior es
cartando así la arteria umbilical única.
atravesado por los vasos del sistema porta. La vesícula bi-
liar se ve también en este plano. El estómago es con la vejiga fetal la única estructura
Si descendemos transversalmente en el feto encontra- sonoluscente que no es vascular en el abdomen fetal.
remos las glándulas suprarrenales y justo debajo los riño- Cualquier otra estructura sonoluscente es sospechosa y
nes que comienzan a visualizarse en el 90% de los fetos debemos establecer el diagnóstico diferencial según su re-
entre la semana 17º y 22º aunque con sonda vaginal se lación con las estructuras vecinas.
pueden identificar mucho antes. Exploraremos la corteza y
Gastrosquisis y Onfalocele
las pelvis renales en busca de dilataciones. La pelvis renal
se mide en su distancia anteroposterior en un corte trans- La gastrosquisis es el defecto de todas las capas de la
versal y hablamos de patológica cuando es mayor de 7 pared abdominal. Suele estar a la derecha de la inserción
mm, sospechosa entre 4 y 7 mm y normal o fisiológica por del cordón umbilical. Suele protuir intestino delgado sin
debajo de 4 mm. Los uréteres nunca son visibles en con- membrana que recubra el defecto, lo que hace que au-
diciones normales. mente la alfafetoproteína en el LA.

Tabla 11. Circunferencia abdominal(mm) durante la gestación normal.

Gestación p5 Media P95


14+0 – 14+6 80 90 102
15+0 – 15+6 88 99 112
16+0 – 16+6 96 108 122
17+0 – 17+6 105 118 133
18+0 – 18+6 114 128 144
19+0 – 19+6 123 139 156
20+0 – 20+6 133 149 168
21+0 – 21+6 143 161 181
22+0 – 22+6 153 172 193
23+0 – 23+6 163 183 206
24+0 – 24+6 174 195 219
25+0 – 25+6 184 207 233
26+0 – 26+6 195 219 246
27+0 – 27+6 205 231 259
28+0 – 28+6 216 243 272
29+0 – 29+6 226 254 285
30+0 – 30+6 237 266 298
31+0 – 31+6 246 277 310
32+0 – 32+6 256 287 322
33+0 – 33+6 265 297 334
34+0 – 34+6 274 307 345
35+0 – 35+6 282 316 355
36+0 – 36+6 289 324 364
37+0 – 37+6 295 332 372
38+0 – 38+6 302 339 380
39+0 – 39+6 307 345 387

986
BASES FÍSICAS DE LOS ULTRASONIDOS. NOCIONES BÁSICAS EN LA ECOGRAFÍA OBSTÉTRICA Y GINECOLÓGICA

El onfalocele se produce por un defecto de los múscu- Cordón umbilical


los, fascia y piel abdominal. Se produce una hernia a nivel
El cordón umbilical debe ser explorado siempre bus-
de la base umbilical de material abdominal, pero cubiertas
cando anomalías en su inserción. La inserción a nivel pla-
por dos capas, el peritoneo y el amnios. En un 50-70% el
centario determinará la ubicación de la placenta.
contenido es intestinal, pero también se puede encontrar al
hígado si el defecto es mayor. En un 30% de los casos se Nos cercioraremos de la existencia de los tres vasos en
asocia un polihidramnios. un corte transversal. La arteria umbilical única es un mar-
cador de anomalías cromosómicas y si la encontramos de-
Extremidades bemos realizar una exploración minuciosa del feto.
Debemos comprobar la integridad de todas las extremi- La inserción puede ser marginal en un 10% de los ca-
dades, prestando atención a la proporcionalidad de los sos. Tiene poca importancia durante el embarazo, pero
miembros. La existencia de bridas amnióticas, accidentes durante el alumbramiento puede desgarrarse con facilidad.
vasculares, exposición a teratógenos o una biopsia corial La inserción velamentosa es aquella en que el cordón se
antes de la semana 11º pueden ser causa de amputaciones inserta en las membranas, a cierta distancia del margen
o malformaciones. Existen muchas patologías que asocian placentario. Se observa en el 1% de los partos simples, pe-
malformaciones de las extremidades, pero suelen asociar- ro en un 6% de los gemelares. Su importancia radica en la
se a otras malformaciones, por lo que ante una sospecha fragilidad de las membranas y sus vasos que, en ocasio-
debemos de realizar una exploración más exhaustiva. nes, se asocia a los vasa previa, cuando estos pasan cru-

Tabla 12. Cociente circunferencia cefálica/circunferencia abdominal durante la gestación normal.

Gestación p5 Media P95


14+0 – 14+6 1,12 1,23 1,33
15+0 – 15+6 1,11 1,22 1,32
16+0 – 16+6 1,10 1,21 1,31
17+0 – 17+6 1,09 1,20 1,30
18+0 – 18+6 1,09 1,19 1,29
19+0 – 19+6 1,08 1,18 1,29
20+0 – 20+6 1,07 1,17 1,28
21+0 – 21+6 1,06 1,16 1,27
22+0 – 22+6 1,05 1,15 1,26
23+0 – 23+6 1,04 1,14 1,25
24+0 – 24+6 1,03 1,13 1,24
25+0 – 25+6 1,02 1,12 1,23
26+0 – 26+6 1,01 1,11 1,22
27+0 – 27+6 1,00 1,10 1,21
28+0 – 28+6 0,99 1,09 1,20
29+0 – 29+6 0,98 1,08 1,19
30+0 – 30+6 0,97 1,08 1,18
31+0 – 31+6 0,96 1,07 1,17
32+0 – 32+6 0,95 1,06 1,16
33+0 – 33+6 0,94 1,05 1,15
34+0 – 34+6 0,93 1,04 1,14
35+0 – 35+6 0,92 1,03 1,13
36+0 – 36+6 0,91 1,02 1,12
37+0 – 37+6 0,90 1,01 1,11
38+0 – 38+6 0,89 1,00 1,10
39+0 – 39+6 0,88 0,99 1,09

987
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

zando el orificio cervical interno. Si se rompen espontáne- – Oclusiva Parcial: Ocluye parcialmente el orificio cervical
amente pueden conducir a una situación crítica del feto. interno.
– Oclusiva total: Ocluye completamente todo el orificio
Placenta
cervical interno.
La placenta empieza a visualizarse a partir de la sema- La sonda vaginal es mejor que la abdominal para dis-
na 8 por ecografía vaginal, aunque no nos deberíamos re- criminar el tipo de placenta previa. No se puede hablar de
ferir a ella como tal hasta la semana 14 que es cuando ya placenta previa hasta las 20 semanas.
está normoconfigurada. Su exploración es importante por
varios motivos. Inserción

Localización Detallaremos en qué lugar del útero se encuentra e in-


vestigaremos la presencia de hematomas retroplacentarios.
Puede localizarse:
– Alta: alejada del orificio cervical interno. Estructura

– Baja: Inserta cerca del orifico cervical interno pero a La gradación de la placenta según su estructura no tie-
más de 2 cm de este. ne una utilidad contrastada pero es ampliamente utilizada
– Marginal: Borde placentario a menos de 2 cm del orifi- – Grado 1: Estructura homogénea, placa basal y corial
co cervical interno. apenas visible.

Tabla 13. Longuitud Femur (mm) durante la gestación normal.

Gestación p5 Media P95


14+0 – 14+6 14 17 19
15+0 – 15+6 17 19 22
16+0 – 16+6 19 22 25
17+0 – 17+6 21 24 28
18+0 – 18+6 24 27 30
19+0 – 19+6 26 30 33
20+0 – 20+6 29 32 36
21+0 – 21+6 32 35 39
22+0 – 22+6 34 38 42
23+0 – 23+6 37 41 45
24+0 – 24+6 39 43 47
25+0 – 25+6 42 46 50
26+0 – 26+6 44 48 53
27+0 – 27+6 47 51 55
28+0 – 28+6 49 53 58
29+0 – 29+6 51 56 60
30+0 – 30+6 53 58 63
31+0 – 31+6 55 60 65
32+0 – 32+6 57 62 67
33+0 – 33+6 59 64 69
34+0 – 34+6 61 66 71
35+0 – 35+6 63 68 73
36+0 – 36+6 64 69 74
37+0 – 37+6 66 71 76
38+0 – 38+6 67 72 77
39+0 – 39+6 68 73 78

988
BASES FÍSICAS DE LOS ULTRASONIDOS. NOCIONES BÁSICAS EN LA ECOGRAFÍA OBSTÉTRICA Y GINECOLÓGICA

– Grado 2: Discreto aumento de la ecogenicidad de for- ce sospechar del bienestar fetal y una puntuación alta tie-
ma dispersa; placa corial algo ondulada. ne un alto valor predictivo de bienestar fetal que es com-
parable al registro cardiotocográfico aunque no se realiza
– Grado 3: Algunas indentaciones de la placa corial y al-
rutinariamente.
gunas imágenes calcificadas que empiezan a dibujar
los cotiledones. Los parámetros utilizados son distintos según los auto-
res pero los más utilizados son:
– Grado 4: Marcadas indentaciones que van desde la
placa corial a la basal estableciendo tabiques comple- – Movimientos respiratorios fetales en un corte transver-
tos y aparición o aumento de lagunas anecóicas den- sal del abdomen superior o longitudinal a nivel del dia-
tro de los cotiledones. fragma.

Líquido amniótico – Movimientos corporales del feto.


– Tono fetal expresado por movimientos de flexo-exten-
Es muy importante su valoración, aunque siempre es
sión de las extremidades y formación de un puño.
más o menos subjetiva. No obstante, es de gran ayuda pa-
ra el diagnóstico de sospecha de malformaciones o altera- – Cantidad de líquido amniótico.
ciones del bienestar y crecimiento fetal.
Existen varias técnicas de medición del líquido amnióti- Marcadores ecográficos de
co. Medimos el volumen del líquido amniótico según el mé- cromosomopatías
todo de Phelan y Rutherford. Calcula la cantidad de líquido
Existe cada vez más interés en las imágenes ecográfi-
por la suma de sus lagunas en los cuatro cuadrantes del
cas que puedan hacer sospechar una anomalía cromosó-
útero, tomando como puntos de referencia la línea alba y
mica. Aunque no existe todavía un parámetro definitivo hay
el ombligo materno. Se coloca el transductor transversal o
algunos que parecen consolidarse.
longitudinal, pero siempre perpendicular al suelo en cada
cuadrante y se mide verticalmente la mayor laguna de lí- La sonoluscencia nucal es una colección de aspecto lí-
quido. Sumamos las cifras de cada cuadrante. quido sobre la columna cervical fetal, a nivel de la zona oc-
cipital del mismo. Es normal en todos los fetos, pero si es-
Existe oligoamnios grave cuando la suma es menor de
tá aumentada de tamaño se puede asociar a
5 cm, oligoamnios leve si es entre 5 y 8 cm. Se considera
cromosomopatías como la trisomía 13 (Patau), 18 (Ed-
polihidramnios por encima de 22 cm.
wards) y 21 (Down). Durante el primer trimestre podemos
El método de Maning mide la ventana vertical máxima medir la sonoluscencia nucal en un corte longitudinal puro
de líquido amniótico, es decir, una única laguna, la mayor del embrión entre las 9 y las 14 semanas. Debemos de
que se halle sin partes fetales. Por debajo de 20 mm se medir al feto ocupando 2/3 de la pantalla y con actitud in-
considera oligoamnios, y por encima de 60 mm polihi- diferente. Los cursores se deben de colocar en la parte in-
dramnios. terna de las membranas. Si la sonoluscencia nucal es ma-
El oligoamnios nos debe hacer pensar en una anomalía yor de 3 mm sospecharemos de anomalía cromosómica.
fetal urológica, retraso de crecimiento intrauterino, feto pos- Es importante conocer que la medida debe repetirse 3 ve-
término, o rotura prematura de membranas. El polihidram- ces y la medida definitiva será la media de las tres. Por úl-
nios se asocia en un 33% a anomalías fetales como atresia timo no se debe confundir la piel fetal con el amnios, dado
esofágica, diabetes materna y embarazos gemelares. que a veces puede su proximidad plantea problemas de
diferenciación.
Ecografía del tercer trimestre En el segundo trimestre entre la semana 15º y la 21º se
utiliza el pliegue nucal medido en un corte transversal de la
Se realiza entre la 34 y 36 semanas y sigue básica-
cabeza ligeramente oblicuo que explore la fosa posterior.
mente la misma dinámica que la del segundo trimestre.
Es sospechoso si este es superior a 5 mm.
El perfil biofísico También la hipoplasia o aplasia del hueso nasal se ha
sugerido como marcador ecográfico de cromosomopatías.
Cuando el embarazo se acerca al final, la ecografía
Entre la semana 11º y 14º, en el 73% de las trisomías 21
puede valorar el bienestar fetal mediante lo que se deno-
no se identifica el hueso nasal, mientras que en la pobla-
mina el perfil biofísico fetal. El perfil biofísico se obtiene
ción general no alcanza el 0,5%.
puntuando la presencia o ausencia de una serie de pará-
metros ecográficos durante una exploración como máximo La ventriculomegalia de entre 10-12 mm o más se aso-
de 30 minutos de tal manera que una puntuación baja ha- cia a un aumento de cromosomopatías, y más si el feto es

989
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

femenino. Los quistes de plexos coroideos se asocian a la chamos que existe un CIR tipo II cuando la biometría del
trisomía 18, pero no está muy clara su correlación. Si se abdomen esté por debajo de 2 desviaciones estándar de
detecta un foco hiperecogénico cardíaco, sobre todo cá- la media o cuando los valores de la circunferencia abdomi-
mara izquierda, el riesgo de aneuploidía se multiplica por nal no supere a la cefálica a las 36 semanas.
cuatro. La hiperefringencia intestinal puede ser sugestiva
de trisomía 21. La ectasia piélica por encima de los 5 mm CIR Tipo III
se ha visto relacionada con esta misma patología, pero su Por mecanismos mixtos. Suele comenzar a mitad del
hallazgo aislado no es indicación de diagnóstico invasivo. segundo trimestre. El crecimiento es semiarmónico y un
La mayoría de las malformaciones estructurales fetales aspecto hipotrófico. Suele ser secundario a infecciones o
son indicativas de técnicas de investigación genética. tóxicos.

Alteraciones en el crecimiento fetal Macrosomía fetal


Para detectar una anomalía en el crecimiento fetal es Hablamos de macrosomía fetal cuando el peso fetal es
imprescindible fechar correctamente la gestación, funda- mayor de 4.000 gr. Ecográficamente se habla de macro-
mentalmente mediante la ecografía del primer trimestre. somía cuando el peso estimado por ecografía es superior
al percentil 90 en las tablas que debe tener cada pobla-
Las alteraciones del crecimiento se dividen básicamen-
ción. Es difícil estimar el peso fetal y se han propuesto di-
te en:
versas formulas matemáticas que implican a los diversos
parámetros biométricos pero sobretodo al abdomen. Para
Crecimiento intrauterino restringido (CIR)
diagnosticar macrosomía se debe disponer de tablas pro-
Es una entidad heterogénea con múltiples etiológicas. pias, realizar correctamente la biometría y asumir un error
Es la limitación del potencial intrínseco de crecimiento del medio de entre un 4% y un 10%.
feto. Se puede utilizar la formula: Peso fetal = 0.0816 x CA3
donde CA es el valor de la circunferencia abdominal.
Bajo peso al nacimiento (BPN)

Son todos los recién nacidos que pesan < 2.500gr al Ecografía ginecológica
nacimiento independientemente de su edad gestacional. Si
está por encima de la semana 37 se llama distrófico. Para realizar una ecografía ginecológica es casi im-
prescindible la utilización de la sonda vaginal, dejando la
Pequeño para la edad gestacional exploración abdominal para casos concretos en los que no
se visualicen correctamente las estructuras del aparato ge-
Cuando el peso estimado está por debajo del percen- nital. De todas formas es mejor hacer siempre ambas eco-
til 5-10. grafías ya que se puede pasar por alto masas o formacio-
nes pélvicas altas que no se llegan a visualizar por vía
CIR Tipo I (Simétrico o precoz)
transvaginal. Así mismo, en situaciones especiales como
El crecimiento es menor del normal pero armónico. To- virginidad, cleisis vaginal,… se sugiere hacer ecografía
dos los parámetros biométricos son significativamente me- transrrectal.
nores que lo normal. Se acepta que están por debajo de 2 Seguiremos también una sistemática de exploración.
desviaciones estándar. Suelen empezar al comienzo del
segundo trimestre. Las cromosomopatías y las infecciones Utero
son las causas más frecuentes.
Posición
CIR Tipo II (Asimétrico o tardío)
Nos basamos en la relación del útero respecto a la ve-
Retraso en el crecimiento no armónico, generalmente jiga y si éste presenta una flexión del fundus o no. De es-
la cabeza corresponde con la edad gestacional pero el ab- ta manera se divide en 5 posiciones. Anteversoflexión:
domen no. Comienza a finales del segundo trimestre y fondo uterino flexionado hacia delante con relación al cér-
principios del tercer trimestre. Hasta la semana 34 no de- vix. Anteversión: útero hacia vejiga pero sin flexión del fon-
be existir una diferencia mayor de 5 mm entre la circunfe- do uterino. Extensión: útero recto en campo medio. Re-
rencia abdominal y la cefálica y a partir de entonces el ab- troversión: útero en dirección inversa a la vejiga.
domen crece más rápido y es mayor la biometría. Suele ser Retroversoflexión: igual a la anterior pero con flexión pos-
secundario a una insuficiencia útero-placentaria. Sospe- terior del cuerpo uterino.

990
BASES FÍSICAS DE LOS ULTRASONIDOS. NOCIONES BÁSICAS EN LA ECOGRAFÍA OBSTÉTRICA Y GINECOLÓGICA

Forma Trompas
Regular o irregular, se detallarán las malformaciones No las distinguimos en condiciones normales. Pode-
uterinas que se observen. mos encontrar formaciones sonoluscentes extraováricas
regulares que suelen corresponder a hidátides.
Tamaño
Medición de la distancia craneocaudal entre el fondo Saco de Douglas
del útero y el final del cuello en un corte longitudinal puro. Vacío o con líquido.
Distancia anteroposterior máxima entre cara anterior y
posterior en el mismo corte que el longitudinal. Diámetro
transverso mediante un corte transversal puro a nivel de LECTURAS RECOMENDADAS
cuerpo uterino.
Bajo JM, Olaizola JI, Martinez Cortes L. Anatomía ecográfica fe-
Endometrio tal: En: Bajo JM, Olaizola JI. Ecografía Obstétrica. Aportación
de la sonda vaginal, 1ª edición. Barcelona: Masson, 1994;
En el corte longitudinal puro medimos distancia máxima 27-42.
anteroporterior. Detallamos la morfología del endometrio en Bajo JM, Martínez Cortés L. Sistemática de exploración ecográfi-
relación a la fase del ciclo menstrual, la presencia de pólipos ca durante la gestación. En: Fabre E, ed. Grupo de trabajo
endometriales, deformidades de la línea endometrial, etc. sobre asistencia al embarazo. Manual de Asistencia al Emba-
razo Normal, 1º Edición. Zaragoza: Sociedad Española de Gi-
Miometrio necología y Obstetricia, 1995; 309-27.
Bowerman RA. Desarrollo precoz: primer trimestre. In Bowerman
Corte longitudinal puro. Medimos la pared posterior del RA, ed. Atlas de Anatomía ecográfica del feto normal, 2ª edi-
útero. En el miometrio detallamos la presencia y localiza- ción. Madrid: Mosby/Doyma, 1994; 13-35.
ción de miomas y su tamaño, relaciones dentro del mio- Filly RA. Ultrasound evaluation during the first trimester. In: Callen
metrio y si deforman o no la cavidad endometrial. PW, ed. Ultrasonography in Obstetrics and Gynecology. 3rd
ed. Philadelphia: Saunders, 1994; 63-85.
Ovarios Fleischer AC, Goldstein RB et al. Doppler sonography in Obs-
tetrics and Gynecology. In: Callen PW, ed. Ultrasonography
Medimos el ovario en las tres direcciones del espacio en in Obstetrics and Gynecology. Philadelphia: Saunders,
los máximos diámetros. Reseñamos las formaciones del 1994.
ovario. Ecogenicidad, forma y tamaño. Presencia de tabi- Ecografía Práctica en Obstetricia y Ginecología. Curso básico de
ques o papilas dentro de las formaciones así como las ca- Ecografía. SESEGO, 2004.
racterísticas de los límites interno y externo de las mismas. Nicolaides K. Falcón O. Fetal Medicine Foundation.

991
Capítulo 111
MARCADORES BIOQUÍMICOS Y ECOGRÁFICOS
DE CROMOSOMOPATÍAS
Gómez ML, Montalvo J, Mercé LT

INTRODUCCION dividualizar el riesgo. Los marcadores de cromosomopatí-


as pueden ser:
Hasta hace pocos años, el cribado prenatal de las cro-
– Epidemiológicos: edad materna, antecedentes.
mosomopatías fetales mas comunes dependía exclusiva-
mente de datos epidemiológicos: Historia familiar, edad – Ecográficos del 1º y 2º trimestres.
materna > 35 años y antecedentes clínicos. Es sencillo, pe- – Bioquímicos del 1º y 2º trimestres.
ro su eficacia es mínima como cribado primario. Tiene una
Los tests combinados incluyen la determinación de
sensibilidad muy baja, inferior al 30%, con una tasa de fal-
dos o más marcadores (bioquímicos y ecográficos) que
sos positivos del 10%.
siendo, independientes (sin relación entre ellos), su utiliza-
El cribado de todos los embarazos debiera identificar in- ción conjunta permite aumentar la sensibilidad (detección) y
dividualmente a las mujeres con un aumento del riesgo en el valor predictivo (reducción de la tasa de positivos falsos).
una anomalía. El diagnóstico antenatal posibilita el tratamien-
to fetal y la terminación electiva de la gestación cuando la
ciencia médica no puede ofrecer soluciones mas adecuadas. MARCADORES ECOGRÁFICOS
En España no ha habido una política uniforme y global PRECOCES
para el screening y diagnóstico prenatal de la anomalías
La ecografía que se realiza en el 1º trimestre tiene va-
cromosómicas para todo el territorio, y actualmente existe
rias misiones: establecer la actividad fetal y posible gesta-
una gran diversidad respecto a lo que se aplica en las dis-
cion gemelar o múltipe, fijar la edad gestacional, descartar
tintas comunidades y, dentro de estas, en las distintas áre-
algunas alteraciones estructurales y analizar los marcado-
as sanitarias. Las prácticas más extendidas como indica-
res ecográficos precoces de cromosomopatías.
ción para ofrecer la práctica de técnicas invasivas para el
diagnóstico citogenético son: El marcador por excelencia es la sonoluscencia (o
translucencia nucal) (SN, TN) (Figura 1). Es un cúmulo fi-
1. Utilizar únicamente la edad materna “avanzada”, sin
siológico y transitorio de líquido en la región de la nuca fe-
marcadores ecográficos ni bioquímicos.
tal que procede embriológicamente del sistema linfático
2. Utilizar marcadores bioquímicos del segundo trimestre paracervical. Su medida se realiza en un plano sagital en-
y edad materna en un cálculo combinado de riesgo. tre la parte externa del hueso occipital y la parte interna de
3. Utilizar sólo marcadores ecográficos la piel en la zona nucal, expresada en mm. Hablamos de
un riesgo aumentado, cuando la medida se encuentra por
4. Aplicación del método combinado del primer trimestre encima de 2,5 a 3 mm según la edad gestacional 10,5 a
(test combinado) que introduce en el cálculo el riesgo 13,5 semanas). Es el marcador ecográfico más sensible y
proporcional aportado por la edad, marcadores eco- específico en el cribado de las principales trisomías auto-
gráficos (sonolucencia nucal) y marcadores bioquími- sómicas (T21, T18 y T13), de monosomías (XO) y de algu-
cos (PAPP-A y fracción libre de la beta-hCG). nas alteraciones estructurales, fundamentalmente las car-
diopatías. Existe una correlación positiva entre el valor de
la SN y la incidencia de cromosomopatía (a mayor medida,
CONCEPTO DE MARCADOR mayor riesgo).
Es un indicador relativamente específico, aunque no En la ecografía del primer trimestre (11+0 - 13+6 se-
diagnóstico, de una determinada anomalía que permite in- manas), el marcador de primer orden utilizado es la medi-

993
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

da de la Sonoluscencia nucal (SN), que combinado con que han presentado un riesgo intermedio (1/101-1/1000)
los marcadores Bioquímicos, la longitud cráneo-caudal en el SC. (S del 95% con una TFP del 5% en el procedi-
(LCC) y la edad materna constituyen el Screening com- miento de un solo paso y S del 91,1% con una TFP del
binado (SC) del primer trimestre. 2,6% en el procedimiento de dos pasos).
Durante el estudio ecográfico del primer trimestre po- También se ha propuesto añadir al SC del 1º trimestre
demos usar otros marcadores que denominaremos de el estudio de la OVF del Ductus Venoso (S del 85% con
segundo orden y emplearlos cuando el marcador de pri- una TFP del 1,2%).
mer orden sea positivo o cuando aparezca un SC de alto En general con la utilización del SC del 1º trimestre se
riesgo para aumentar la especificidad. Estos marcadores puede conseguir una sensibilidad del 79% para una tasa
de segundo orden o de rescate para los casos de riesgo de falsos positivos del 5%, como lo demuestra nuestra ex-
intermedio son: periencia.
– Presencia o ausencia del hueso nasal (Figura 1). En un intento teórico de rescate de las T21 no diag-
– Estudio de la OVF del ductus venoso (Figura 2). nosticadas mediante el SC del 1º trimestre (5 FN) se podría
haber diagnosticado 3 T21 que tenían Riesgo Intermedio
– Presencia de regurgitación tricuspídea (Figura 3). (351/5837), 4 T21 con Riesgo Bioquímico + Edad materna
Se ha evidenciado un aumento de la sensibilidad y una (1092/5837), 2 T21 con niveles de PAAP-A < 0,5 MoM
disminución de la TFP cuando se añade la valoración de la (532/5837) y ningún caso con SN > 1,5 MoM.
ausencia de hueso nasal al SC del 1º trimestre. (S: 96% Como conclusiones parece ser que la mejor propuesta
para TFP: 5%). teórica sería reevaluar el Riesgo Intermedio. Esto plantea
una serie de inconvenientes:
Se puede añadir la regurgitación tricuspídea al SC
del 1º trimestre, ya sea a todas las pacientes o solo a las – Reevaluación de 10-15% de las gestantes.

Figura 2. OVF del ductus venoso sugestiva de cromosomopatía


Figura 1. Translucencia nucal y ausencia del hueso nasal. con onda A reversa.

a) b)

Figura 3. Medida de la LCC (a) y regurgitación tricuspidea (b).

994
MARCADORES BIOQUÍMICOS Y ECOGRÁFICOS DE CROMOSOMOPATÍAS

– La técnica de valoración tanto de la OVF del DV como fetos euploides aunque se puede asociar a patología
de la Regurgitación tricuspídea son muy operador de- estructural del tracto urinario.
pendientes y requieren una alta cualificación.
– Onfalocele: T18.
– El entrenamiento para la obtención de la OVF en la válvu-
la tricúspide es dificultoso y en nuestra experiencia su ob- – Quistes de plexos coroideos: 1% de fetos euploides y
tención no llega al 70% de los casos, lo cual imposibilita- T18 asociado a defectos estructurales.
ría este planteamiento teórico como técnica de screening. – Pielectasia y foco hiperecogénico ventricular: T21 aso-
ciada a otros marcadores.

OTROS MARCADORES DEL – Marcadores de los anejos: volumen placentario, ecoes-


tructura placentaria, arteria umbilical única, quistes del
1º TRIMESTRE cordón umbilical, despegamineto corioamniótico tar-
– CRL pequeño: El retraso precoz se asocia fundamen- dío, Doppler de la arteria umbilical. En la T18 el volu-
talmente a T18 y triploidía. men placentario es menor. Los quistes placentarios se
asocian a las triploidías. Los quistes de cordón y el de-
– Longitud femoral y humeral significativamente acorta-
pegamiento corioamniótico tardío son mas frecuentes
da: T21.
en T21. La aparición tardía (>13 sem) de diástole o so-
– Arteria umbilical única: Aparece en 3% de fetos cromo- bre todo la inversión del flujo en la arteria umbilical son
somicamente euploides y en el 80% de T18, aunque marcadores de T21.
estos fetos son portadores de anomalías mayores.
Muchos de estos marcadores son transitorios (sobre
– Megavejiga: Aumenta el riesgo de T13 y T18 y se re- todo la SN), por ello debemos ser muy estrictos a la hora
suelve espontáneamente en prácticamente todos los de valorarlos en una edad gestacional concreta.

Tabla 1. Anomalías cromosómicas comunes en fetos con anomalías ecográficas.

Trisomía 21 Trisomía 18 Trisomía 13 Triploidía Turner


Ventriculomegalia + + + +
Holoprosencefalia +
Quistes de plexos coroideos +
Complejo Dandy Walker + +
Hendidura facial + +
Micrognatia + +
Hipoplasia nasal +
Edema nucal + + +
Higroma quístico +
Hernia diafragmática + +
Anomalías cardiacas + + + + +
Onfalocele + +
Atresia duodenal +
Atresia esofágica + +
Anomalías renales + + + + +
Miembros cortos + + + +
Clinodactilia +
Dedos superpuestos +
Polidactilia +
Sindactilia +
Talipes + + +
Retraso del crecimiento + + +

995
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

MARCADORES ECOGRAFICOS – AFP (alfa-fetoproteina) (Origen fetal): Disminuye en


presencia de la T21.
TARDIOS
– Fracción Beta de la HCG (Total o libre) (Origen pla-
Existen signos que aparecen fundamentalmente en la centario): Aumenta en T21 y está disminuida en las T
ecografía del 2º trimestre y que nos pueden poner en la 18 y T 13
pista de una cromosomopatía:
– Estriol no conjugado (uE3) (Origen feto-placentario):
– Longitud femoral y humeral (Disminuida en T21). Disminuye en la T21.
– Intestino ecogénico (T21, T18, T13, XO…) – Inhibina-A (Origen placentario, citotrofoblasto): Está
– Pielectasia (Asociacion de un 3% a T21). aumentado en la T21durante el 2º trimestre (semanas
14-16).
– Foco ecogénico intracardíaco.
– PAPP-A (Glicoproteina sintetizada en el trofoblasto):
– Ventriculomegalia. Disminución significativa en el 1º trimestre (entre 6 y 11
– Quistes de los plexos coroideos. semanas en todas las cromosomopatías.). No varía en
el 2º trimestre.
– Pliegue nucal.
– Alteraciones estructurales. Estrategias de screening
A la mayoría de estos marcadores se les da valor si se 1. Screening en el 1º trimestre: 11 a 13 semanas (10-14).
asocian entre ellos, a otro marcador precoz, a la edad > 35
– Screening ecográfico: Edad + SN
años o a una alteración estructural (Tabla 1).
– Screening combinado en el 1º trimestre: Edad +
BHCG + PAPP-A + SN
MARCADORES BIOQUIMICOS 2. Screening en el 2º trimestre: 15 a 19 semanas.
Se trata de determinadas substancias de origen fetal, – Doble test bioquímico: AFP + HCG
placentario o feto-placentario cuyas concentraciones en – Triple test bioquímico: AFP + HCG + uE3
suero materno se modifican substancialmente en presen- – Test quadruple bioquímico: AFP +HCG + uE3 + In-
cia de determinadas anomalías cromosómicas o de algu- hibina-A
nos defectos estructurales fetales (Defectos abiertos del
tubo neural o de la pared abdominal). 3. Test en los dos trimestres:
1. Test integrado:
Estos parámetros séricos maternos determinan en que
medida se modifica el riesgo individual de presentar ano- – SN + PAPP-A en el 1º trimestre.
malías cromosómicas o anomalías congénitas y modificar – Test cuadruple en el 2º trimestre.
el riesgo individual relacionado con la edad. 2. Test serológico integrado: es sólo serológico y po-
Se expresan en múltiplos de la mediana (MoM) de los tencialmente el mejor cuando la translucencia nucal
valores obtenidos para cada semana de gestación en fetos no es utilizable.
no afectos. En el síndrome de Down se utiliza como corte – PAPP-A en el 1º trimestre
el valor 1/270 que es el riesgo de una mujer de 35 años de – Test cuadruple en el 2º trimestre
presentar T21 en el 2º trimestre.
La elección de la estrategia de screening debe estable-
Dado que las concentraciones séricas varían con el cerse entre los tests capaces de proporcionar una tasa de
curso de la gestación, es preciso una datación correcta de detección de al menos el 60% con una tasa de falsos po-
la gestación y el ajuste de una serie de parámetros como sitivos menor del 5%, aunque con las estrategias actuales
la edad, el peso, la talla, la presencia de gestación única o a nuestro alcance es posible que en un futuro se pueda lle-
múltiple, diabetes, hábito tabáquico y raza. Según el mar- gar al 75% de detección con menos del 3 % de falsos po-
cador, o asociación de marcadores utilizados se obtendrá sitivos.
una determinada sensibilidad, especificidad y tasa de fal-
Actualmente existen 4 tests que cumplen estos requi-
sos positivos. Exigen la obtención de curvas de normali-
sitos:
dad propias basadas en una amplia casuística en cada la-
boratorio. 1. Test integrado.
Los marcadores que se han utilizado ampliamente 2. Test cuádruple para mujeres que llegan en el 2º tri-
son: mestre.

996
MARCADORES BIOQUÍMICOS Y ECOGRÁFICOS DE CROMOSOMOPATÍAS

3. Test Combinado del 1º trimestre, y PROPUESTA PARA UNA POLÍTICA


4. Test serológico integrado. DE SCREENING NACIONAL
La SN en el primer trimestre no debe utilizarse como El test integrado ecográfico-bioquímico en 1º-2º tri-
test único de cribado dado que pese a su alta sensibilidad, mestres, pese a sus prometedores resultados en cuanto
tiene un alto porcentaje de falsos positivos. (Tabla 2) a sensibilidad y especificidad, tiene algunas desventajas

Figura 4. Esquema de funcionamiento del protocolo de cribado de Cromosomopatías.

Paciente gestante remitida por Atención Primaria


en primer o segundo trimestre de la gestación

Consulta de Obstetricia
Estimación de E.G. (según F.U.R.)

Citación en Unidad de Ecografía (S. de Obstetricia y Ginecología)


y Consulta de Screening prenatal (S. de Análisis Clínicos)

Realización de Ecografía

Si E.G. entre 10 y 14 semanas, Si E.G. mayor de 14 semanas Si E.G. menos de


envío a consulta de Screening con Informe envío a consulta de Screening 10 semanas, nueva
que incluye CRL y medida de sonoluscencia nucal con Informe que incluye CRL cita para ecografía

En consulta de Screening, información a la paciente sobre el


programa, objetivos y limitaciones

Paciente decide no someterse al programa


Paciente decide someterse al programa
STOP

Extracción de sangre y realización de determinaciones


de marcadores bioquímicos

10-14 semanas: Evaluación de datos mediante 15-19 semanas: Evaluación de datos mediante
Aplicación Informática: Edad materna, marcadores bioquímicos, Aplicación Informática: Edad materna, marcadores bioquímicos,
EG., S.N. Estimación de riesgo y elaboración de informe EG., S.N. Estimación de riesgo y elaboración de informe
(Respuesta en 24 horas) (Respuesta en 24 horas)

Riesgo cromosopatías <1/270 Riesgo cromosopatías >1/270

Envío de informe Contacto telefónico (Tiempo máximo 3 días)


a domicilio

Entrega en persona de informe y cita para Consulta Genética

Prueba diagnóstica Decisión paciente tras STOP


(Biopsia corial/Amniocentesis según E.G.) consejo genético

997
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

Tabla 2. Sensibilidades y tasa de falsos positivos (TFP) de diferentes parámetros para la detección prenatal de cromosomopatías.

Sensibilidad (%) para TFP de: TFP (%) para S de:


1% 3% 5% 8% 10% 70% 75% 80% 85%
Edad 0 0 21,1 31,6 31,6 34,6 42,4 50,0 58,4
PAPP-A 26,3 36,8 47,4 47,4 57,9 18,1 21,5 28,5 29,4
b-hCG 10,5 10,5 10,5 15,8 26,3 55,7 60,5 65,5 67,3
TN 52,6 63,2 63,2 63,2 63,2 26 30 50,6 65
Combinado 57,9 73,7 78,9 84,2 89,5 1,8 4,7 5,2 8,6
Combinado >35 69,2 92,3 92,3 92,3 100 1,7 1,7 2,3 2,7
Combinado>38 57,1 71,4 100 100 100 2,4 3,4 3,4 3,4

como su mayor coste, las dificultades organizativas in- Pese a ser este el programa más recomendable, no
herentes a la obligada visita de la paciente en dos mo- podemos olvidar que en muchos centros de nuestro país
mentos diferentes para que sea posible realizar el pro- vienen practicándose desde hace tiempo programas de
grama. También se pueden argüir otras de carácter screening en el 2º trimestre, básicamente doble y triple test
ético, dado que en ocasiones debería aplazarse la infor- bioquímico, con resultados aceptables pese a tener un va-
mación sobre hallazgos significativos, ecográficos o de lor predictivo negativo algo menor que los tests combina-
laboratorio en el 1er trimestre a la espera de completar el dos, y una sensibilidad en el límite del 60% que habíamos
screening en el 2º. propuesto como aceptable. Es evidente que no siempre es
posible conseguir los medios para la realización del mejor
El screening combinado del 1º Trimestre (Test Combi-
programa, como buenos equipos y ecografistas expertos.
nado) creemos que es el que ofrece en estos momentos
En ese caso, sería aceptable proseguir con el test seroló-
mayores ventajas y el que debería ser recomendado para
gico de 2º trimestre, aunque sería aconsejable ampliarlo a
implantar en todo el territorio nacional.
cuadruple test y si fuera posible, al test serológico integra-
Este programa puede llevarse a cabo de dos formas di- do (1º-2º trimestre).
ferentes: En un solo paso, con realización simultánea de
Asimismo, sería muy recomendable disponer del cua-
ecografía y pruebas de laboratorio (11-14 semanas) que es
druple test del 2º trimestre en los centros donde, pese a
más sencillo de organizar, o bien Secuencial, con deter-
disponer del programa combinado, un porcentaje impor-
minaciones bioquímicas en la semana 9-11 y ecografía en-
tre las semanas 12-14, alcanzando con ello la mayor sen-
sibilidad de las pruebas. Tabla 3. Resultados del triple screening del 1º trimestre para el diagnóstico
prenatal de cromosomopatías.
Estas VENTAJAS son:
Semana de Sensibilidad
1. Tiene buena sensibilidad: 70-90% según diferentes Estudio/año N
gestación (n/N)
grupos de estudio ajustado a una TFP del 5%. En es-
tudios prospectivos de intervención el índice de detec- 90,9%
Krantz et al, 2000 10-13 5.809
(30/33)
ción se encuentra entre 80-92% para una TFP entre
3,4 y 5,2%. 90,2%
Bindra et al,2002 11-13 14.383
(74/82)
2. Su coste es menor que el del screening integrado, sin 92%
que la efectividad sufra grandes reducciones. Spencer et al, 2000 10-13 11.105
(23/25)
3. La determinación precoz del nivel de riesgo permite an- 85,7
Schuchter et al,2002 10-13 4.802
ticipar las actitudes diagnósticas y propuestas terapéu- (12/14)
ticas lo que beneficiaran a la madre y/o al feto. 78,7%
Wapner et al,2003 10-13 8.514
(48/61)
4. Permite la aplicación de técnicas invasivas más preco-
83%
ces que la amniocentesis, como la biopsia corial. SURUSS 10-14 47.507
(83/101)
5. La reducción del tiempo de espera en obtener informa- 83%
Sabria et al,2004 10-14 3.492
ción diagnóstica conlleva menor repercusión psicológi- (10/12)
ca y morbilidad materna en caso de la realización de 78,9%
Montalvo et al, 2004 10-14 4.866
IVE. (15/19)

998
MARCADORES BIOQUÍMICOS Y ECOGRÁFICOS DE CROMOSOMOPATÍAS

tante de gestantes sobrepasen los plazos del mismo cuan- mos claro su significado. No obstante, hay que intentar
do acuden a la consulta obstétrica. unificar los criterios y el protocolo propuesto por la SEGO
con el screening combinado del 1º trimestre, cuando pue-
En la Tabla 3 se muestran nuestros resultados y los
da realizarse, sería el más adecuado.
aportados por la literatura hasta la fecha.

LECTURAS RECOMENDADAS:
CONCLUSION
Nicolaides K, Falcón O. La ecografía de las 11 a las 13,6 sema-
Como conclusión después de lo expuesto, hemos vis- nas. London: Fetal Medicine Foundation, 2004.
to la multitud de marcadores que nos ponen en la pista de Recomendaciones para la Organización de un Servicio de Obste-
una cromosomopatía y cualquiera de ellos nos será de tricia y Ginecología. Madrid: Documentos de la SEGO, 2005.
ayuda en el diagnóstico prenatal siempre y cuando tenga- Wald N. Estudio SURUUS.

999
Capítulo 112
DIAGNÓSTICO PRENATAL DE ANOMALÍAS CONGÉNITAS.
INDICACIÓN Y TÉCNICAS DE DIAGNÓSTICO.
Ces L, Méndez Y, Marin-Buck A, Troyano JM, Mercé LT

INTRODUCCION recién nacidos y son responsables de aproximada-


mente el 25% de los defectos congénitos. Se clasifican
El "diagnóstico prenatal" representa todas aquellas ac- según su mecanismo de transmisión en:
ciones diagnósticas encaminadas a descubrir durante la vi- – Autosómicas Recesivas: Para su expresión fenotípi-
da intrauterina un "defecto congénito", entendiendo por tal ca, requieren la homocigosis. Ambos progenitores
"toda anomalía del desarrollo morfológico, estructural, fun- deben ser portadores y su descendencia tiene una
cional o molecular presente al nacer (aunque puede mani- probabilidad del 25% de ser afectos, otro 25% de
festarse más tarde), externa o interna, familiar o esporádi- ser sanos y un 50% de ser portadores sanos. Se in-
ca, hereditaria o no, única o múltiple" (Comités de Trabajo cluyen aquí la mayoría de los trastornos metabóli-
de la OMS, 1970, 1975, 1982). cos debidos a deficiencias enzimáticas, por ejem-
El objetivo del diagnóstico prenatal es establecer con la plo la galactosemia, la hemocromatosis, el
mayor precocidad posible la existencia de un defecto con- síndrome adrenogenital, la fibrosis quística, etc.
génito, lo que nos permite tomar las medidas adecuadas – Autosómicas Dominantes: Se manifiestan fenotípi-
en cada caso. Además, la confirmación de la normalidad camente aunque se hereden en heterocigosis. El
contribuye a reducir la ansiedad por parte de los progeni- portador de gen afectado tiene un 50% de posibili-
tores durante el resto de la gestación. dades de transmitir la enfermedad a su descenden-
cia. Ejemplos son la corea de Huntington, distrofia
miotónica, neurofibromatosis, etc.
CLASIFICACION ETIOLÓGICA DE LAS – Recesivas ligadas al cromosoma X: Cuando una
ENFERMEDADES CONGÉNITAS mujer porta un gen de este tipo, cada hijo tiene un
50% de riesgo de estar afectado, y cada hija tiene
Los defectos congénitos están presentes en el 3-6%
un 50% de riesgo de ser portadora. Los hombres
de las gestaciones a término y son la causa de la mayoría
que poseen un gen recesivo ligado al X siempre pa-
de los abortos precoces. Según su etiología podemos dis-
decerán la enfermedad ya que no tienen un segun-
tinguir entre:
do cromosoma X que pueda expresar el gen domi-
• Anomalías cromosómicas: Responsables del 12- nante normal. Por ejemplo, la hemofilia A y B,
14% de los defectos congénitos. La mayoría se produ- enfermedad de Duchenne, etc.
cen de novo por errores en la meiosis (fundamental-
• Enfermedades multifactoriales o poligénicas: Son
mente por la no disyunción). Pueden ser anomalías
aquellas en las que existe una influencia combinada de
numéricas (monosomías, trisomías, poliploidías, etc) o
factores genéticos y ambientales. Son las más frecuen-
estructurales (translocaciones, inversiones…), y afectar
tes y responsables de buen número de las malformacio-
a los autosomas o a los cromosomas sexuales.
nes. Se afectan múltiples miembros de la familia, pero no
Ejemplos: Trisomías (Síndrome de Down o trisomía 21, existe un patrón hereditario específico, disminuyendo el
Síndrome de Edwards o trisomía 18) y gonosomopatí- riesgo cuanto más distantes sean los familiares afecta-
as (Síndrome de Turner o 45X0, Síndrome de Klinefel- dos y aumentado si los padres son consanguíneos. En-
ter o 47 XXY). tre ellas pueden citarse los defectos del tubo neural.
• Anomalías monogénicas o enfermedades heredita- • Malformaciones por efecto ambiental teratogénico
rias mendelianas: Se encuentran en el 1-1,5% de los en las que participan distintos factores:

1001
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

– Anomalías congénitas de origen infeccioso: rubéo- • Progenitor afecto de enfermedad genética (autosó-
la, herpes virus, toxoplasmosis, listeriosis, sífilis, mica dominante).
HIV, hepatitis. • Madre portadora de enfermedad genética (recesiva
– Anomalías congénitas por agentes toxico-medica- ligada al sexo).
mentosos. • Pariente de 1er grado (Hermano/Progenitor) afecto
– Anomalías congénitas por agentes físicos: radiacio- de malformaciones congénitas (generalmente poli-
nes ionizantes. génicas).
– Anomalías congénitas por enfermedades maternas: 2. Historia de infertilidad previa (Abortos o pérdidas feta-
isoinmunización Rh, diabetes. les de repetición)
3. Altas edades parentales: superiores a los 35 años.
INDICACIONES DEL DIAGNÓSTICO 4. Exposición a teratógenos:
PRENATAL • Físicos: Rx
• Químicos: Drogas, fármacos, alcohol, Ac. retinoico,
El objetivo del clínico será estimar el riesgo que tiene
etc.
una gestante de tener un hijo con un defecto congénito
frente al riesgo hipotético de la prueba que podamos utili- • Biológicos: Rubéola, HIV, Toxoplasma, etc.
zar para su diagnóstico. Para ello habrá que tener en cuen- 5. Enfermedades parentales: Diabetes, fenilcetonuria. etc.
ta los siguientes puntos:
6. Marcadores clínicos, ecográficos o bioquímicos de
1. Valoración del riesgo de afectación congénita. anomalía fetal.
2. Información a la pareja. • Sospecha o evidencia ecográfica de una malforma-
ción fetal y/o signos ecográficos sugerentes de un
3. Elección de la prueba/s a realizar.
síndrome cromosómico.
4. Elección de la fecha a realizar. • Marcadores bioquímicos de anomalía cromosómi-
Según estos cuatro puntos, el clínico valorará la necesi- ca obtenidos mediante el cálculo integrado de ries-
dad de realizar un diagnóstico prenatal y, según la indica- go en el en el primer trimestre (PAPP-A y fracción li-
ción, el tipo de prueba a realizar. Cada indicación requiere bre de β-hCG) o en el segundo trimestre (AFP y
una prueba específica para su diagnóstico, determinada β-hCG).
por la edad gestacional y el tipo de análisis a realizar.

TÉCNICAS DE DIAGNÓSTICO PRENATAL


SELECCIÓN DE LA POBLACIÓN DE La técnica diagnóstica dependerá del defecto congéni-
ALTO RIESGO to que se quiera descartar, así como de la edad gestacio-
nal, la rapidez en obtener los resultados, la experiencia del
Dado el coste económico y el hecho de que algunas de clínico y del laboratorio en las diferentes técnicas e indica-
las pruebas de diagnóstico prenatal llevan implícito un cier- ciones, y en las particularidades anatómicas de cada caso
to riesgo (técnicas invasivas), no es posible generalizar su (inserción placentaria, actitud fetal, cantidad de líquido, ge-
uso a todas las gestantes, de ahí la necesidad de realizar melaridad, etc) (Tabla 1).
una selección de "gestantes con alto riesgo de enfermedad
congénita” a las que se ofrece directamente una prueba in- • Las anomalías cromosómicas deben descartarse a
vasiva y/o la ecografía dirigida. A las mujeres de “bajo ries- partir del estudio citogenético en células fetales obteni-
go” se les realiza las pruebas de screening (que valoran das del líquido amniótico (amniocentesis), vellosidades
marcadores bioquímicos- AFP, BHCG, PAPP-A- y ecográ- coriales (biopsia corial) o sangre fetal (cordocentesis).
ficos), y en el caso de ser positivos, se indica una prueba • Las anomalías monogénicas o enfermedades here-
más específica para la confirmación del diagnóstico. ditarias mendelianas pueden diagnosticarse básica-
Los criterios de alto riesgo más admitidos son los si- mente por estudio bioquímico, ya sea en vellosidades
guientes: coriales o en líquido amniótico, a través de los produc-
tos de síntesis o de degradación de moléculas o me-
1. Antecedentes familiares. diante el estudio del ADN. La técnica que se suele uti-
• Hermano afecto de enfermedad genética (autosó- lizar con más frecuencia es la biopsia de vellosidades
mica recesiva). coriales.

1002
DIAGNÓSTICO PRENATAL DE ANOMALÍAS CONGÉNITAS. INDICACIÓN Y TÉCNICAS DE DIAGNÓSTICO.

Tabla 1. Técnicas diagnósticas en Diagnóstico Prenatal.

PRUEBAS DIAGNÓSTICAS
FACTORES DE RIESGO OBSTÉTRICAS LABORATORIO
CROMOSOPATÍAS
Edad materna > 35 años
Hijo anterior afecto Biopsia corial o Amniocentesis Cariotipo
Anomalía cromosómica en progenitor
CIR tipo I Amniocentesis Cariotipo
Screening bioquímico con riesgo >1/250-270:
1er Trimestre: PAPP-A +betaHCG libre
Biopsia corial Cariotipo
+ translucencia nucal
2º trimestre: AFP + betaHCG Amniocentesis Cariotipo
Ecografía diag. prenatal
Sospecha de marcador ecográfico Biopsia corial Cariotipo
Sangre fetal
MALFORMACIONES
Biopsia corial
Serologías TORCH Amniocentesis PCR ADN
Sangre fetal
AFP suero materno >2,5 MoM Amniocentesis (alfafetoproteina -
acetilcolinesterasa en líquido amniótico)
Ecografía sospechosa Ecografía diagnóstico prenatal Cariotipo

• Las malformaciones, es decir anomalías con expre- Las cifras de PAPP-A en embarazos no viables, em-
sión morfológica, se detectan con la ecografía. barazos ectópicos, casos de amenaza de aborto y sín-
dromes de Down, Edwards, Patau y Turner, se encuen-
tran más bajas que en embarazos normales, sobre todo
TÉCNICAS NO INVASIVAS DE si se dosifica en la semana 12 de embarazo. Posterior-
DIAGNÓSTICO PRENATAL mente los valores séricos se solapan con los de un em-
barazo normal, de forma que durante el segundo trimes-
Determinaciones bioquímicas en sangre tre es imposible distinguir entre un embarazo normal y
materna uno afecto de síndrome de Down usando el PAPP-A co-
mo marcador.
Primer trimestre

El momento de realización es entre las semanas 8-13, Tabla 2. Parámetros bioquímicos del primer trimestre.
siendo el más óptimo las 9-10 semanas. Se determinan
dos marcadores (Tabla 2): Síndrome de Down (Trisomía 21):
PAPP-A decrece por debajo de 0,4 MoM ↓
• β-HCG libre: La gonadotropina coriónica humana (β-
HCG), suele elevarse en el suero materno de las gesta- Beta hCG Libre incrementa 2,0 MoM ↑
ciones afectas de trisomía 21 (superiores a 2,4 MoM), hCG incrementa por encima de 2,0-2,5 MoM ↑
por lo que unido a los otros marcadores puede ser de TN 2,0-2,2 MoM ↑
utilidad para la selección de casos de riesgo. Debe Síndrome de Edwards (Trisomía 18):
descartarse su presencia por una gestación gemelar o PAPP-A decrece por debajo de 0,2 MoM ↓
por un embarazo más precoz de lo estimado.
Beta hCG Libre por debajo de 0,3 MoM ↓
• PAPP-A (Proteina Plasmática A asociada al embarazo): TN 3,3 MoM ↑
es una glicoproteína de elevado peso molecular produ-
Trisomía 13:
cida por la placenta humana. Su función es todavía des-
PAPP-A decrece por debajo de 0,5 MoM ↓
conocida. Se detecta a partir del día 28 de concepción,
incrementándose paulatinamente con el tiempo. Beta hCG Libre por debajo de 0,5 MoM ↓

1003
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

Segundo trimestre En todo embarazo se debe realizar un mínimo de una


ecografía por trimestre ya que, dado el carácter esporádi-
Los parámetros bioquímicos que se utilizan para el
co de las malformaciones, el grupo de riesgo está consti-
diagnóstico prenatal no invasivo se resumen en la Tabla 3.
tuido por la totalidad de las embarazadas. Aún así, en las
• AFP: Esta glucoproteína es producida primero por el mujeres con un alto riesgo de defecto congénito debe se-
saco vitelino y después en el hígado fetal. Circula en guirse un control más estricto, siendo controladas en un
sangre fetal y pasa a la orina fetal y al líquido amnióti- centro con nivel capacitado para el diagnóstico prenatal y
co. Alcanza su nivel más alto en suero fetal y líquido el número de ecografías debería incrementarse (además
amniótico hacia la semana 13 de gestación, luego de- de las nombradas, es aconsejable otra alrededor de las
clina rápidamente, mientras que la concentración en el 28-30 semanas).
suero materno aumenta conforme avanza el embarazo.
• Ecografía del primer trimestre (10-14 semanas)
Su determinación suele realizarse entre la semana 15 y
22, aunque su sensibilidad máxima se encuentra entre • Ecografía del segundo trimestre (18-22 semanas)
la semana 16 y 18. • Ecografía del tercer trimestre (34-36 semanas)
Un aumento de la AFP en el suero materno indica ries-
go aumentado de defectos del tubo neural fetal u otras Ecografía de las 11-14 semanas
malformaciones estructurales y exige más evaluación. La exploración ecográfica del primer trimestre, se reali-
• β-HCG libre o total za a las 11-14 semanas, preferentemente vía transabdo-
minal (en un 5% puede ser necesaria la vaginal para visua-
Screening ecográfico lizar mejor alguna estructura o marcador), y cumple varias
funciones:
Además de constituir una técnica imprescindible para
1. Datar la gestación midiendo la longitud craneo-caudal.
la realización de cualquier técnica invasiva, la ecografía
permite el diagnóstico directo de la mayor parte de las mal- 2. Establecer el número de fetos y la frecuencia cardiaca
formaciones que se expresen de forma morfológica o es- fetal.
tructural. El porcentaje de diagnósticos variará, sin embar-
3. Evaluar la presencia de marcadores ecográficos para el
go, en función del tipo de anomalía, de la edad gestacional,
cálculo de riesgo.
de la idoneidad del equipo utilizado y de la experiencia del
que realiza la exploración. 4. Descartar de forma precoz la presencia de malforma-
ciones fetales mayores.
El screening ecográfico se basa sobre todo en la bús-
queda de marcadores ecográficos, que se definen como 5. Determinar el estado y características del útero y ane-
un hallazgo ecográfico que no constituye en sí mismo una jos ovulares.
malformación y que pueden estar presentes en los fetos • Translucecia Nucal (TN): Es la apariencia ecográfica del
normales, aunque aparecen con mayor frecuencia en los acumulo subcutáneo de líquido detrás del cuello fetal
fetos portadores de algún defecto congénito. en el primer trimestre de embarazo. Es el marcador
ecográfico más importante en el primer trimestre de
gestación.
Tabla 3. Parámetros bioquímicos del segundo trimestre.
Se debe realizar entre la semana 11 y 14 (CRL 45-
Síndrome de Down (Trisomía 21):
84), siendo el momento ideal las 12 semanas. Se de-
PAPP-A decrece por debajo de 0,4 MoM ↓
be medir con el 75% de la pantalla ocupada por el fe-
Beta hCG Libre incrementa 2,0 MoM ↑ to, estando éste en posición neutral (sin
hCG incrementa por encima de 2,0-2,5 MoM ↑ hiperextensión o hiperflexión), en posición sagital, y
TN 2,0-2,2 MoM ↑ diferenciando claramente el amnios separado (no
Síndrome de Edwards (Trisomía 18): confundir). Se realizan 3 mediciones utilizando la má-
xima distancia de la (TN) y se toma la mayor de ellas
PAPP-A decrece por debajo de 0,2 MoM ↓
como válida. Se considera positivo si el valor es >
Beta hCG Libre por debajo de 0,3 MoM ↓
p95 para EG.
TN 3,3 MoM ↑
• Hueso Nasal (HN): En 1886 Langdon Down definió la
Trisomía 13:
hipoplasia nasal como una de las características de la
PAPP-A decrece por debajo de 0,5 MoM ↓
trisomía 21. El HN aparece inicialmente con un CRL de
Beta hCG Libre por debajo de 0,5 MoM ↓ 42 mm y progresa de forma lineal.

1004
DIAGNÓSTICO PRENATAL DE ANOMALÍAS CONGÉNITAS. INDICACIÓN Y TÉCNICAS DE DIAGNÓSTICO.

Al igual que la TN, debe hacerse con una edad gesta- placenta hasta la aurícula derecha y a través del fora-
cional entre las 11-14 semanas, con el 75% de la pan- men oval a la aurícula izquierda, con paso preferencial
talla ocupada por el feto, en un corte medio sagital (tá- al corazón y cerebro. La onda de velocidad de flujo a
lamo visible). nivel del ductus tiene una forma característica, con una
alta velocidad durante la sístole ventricular (onda S) y la
En la imagen de la nariz deben aparecer tres líneas dis-
diástole ventricular (onda D), y un flujo positivo o hacia
tintas: la línea superior representa la piel y la inferior,
delante durante la sístole auricular (onda a).
que es más gruesa y más ecogénica que la piel, repre-
senta el hueso nasal. Una tercera línea, casi en conti- En casos con un aumento en la TN (> p95) puede es-
nuidad con la piel pero en un nivel más alto, represen- tar indicado el DV ya que a las 11-14 semanas el flujo
ta la punta de la nariz. anormal del ductus (onda a reversa) se asocia a ano-
Valoraremos la presencia o ausencia de HN, enten- malías cromosómicas, cardiopatías y resultados peri-
diendo hipoplasia (ausencia) del HN, la no visualización natales adversos. Su uso como marcador aislado no es
o una pérdida clara de ecogenicidad de la línea que re- universalmente aceptado.
presenta el Hueso nasal. Nuevamente con el 75% de la pantalla ocupada por el
El HN es visible en el 99,5% de las gestaciones nor- feto y un corte para-sagital derecho se localiza el DV
males. La combinación de marcadores bioquímicos del con ayuda del Doppler color. Se coloca la muestra ocu-
primer trimestre, junto con la TN y HN aumenta la sen- pando todo el vaso, debiendo obtener al menos tres
sibilidad de detección de anomalías congénitas hasta ondas de buena calidad y mismo tamaño, repitiendo el
un 97%, permitiendo reducir el uso de técnicas invasi- procedimiento en tres ocasiones.
vas y su yatrogenia.
• Además de los citados, la ecografía del primer trimes-
• Ductus Venoso (DV): Constituye uno de los “shunts” de tre debe valorar otras determinaciones entre las que se
la circulación fetal, que lleva sangre oxigenada desde la encuentran longitud del fémur y húmero, longitud de la

Tabla 4. Marcadores ecográficos de cromosomopatías.

Trisomía 21 Trisomía 18 Trisomía 13 Triploidía Turner


Ventriculomegalia + + + +
Holoprosencefalia +
Quistes de plexos coroideos +
Complejo Dandy Walker + +
Hendidura facial + +
Micrognatia + +
Hipoplasia nasal +
Edema nucal + + +
Higroma quístico +
Hernia diafragmática + +
Anomalías cardiacas + + + + +
Onfalocele + +
Atresia duodenal +
Atresia esofágica + +
Anomalías renales + + + + +
Miembros cortos + + + +
Clinodactilia +
Dedos superpuestos +
Polidactilia +
Sindactilia +
Talipes + + +
Retraso del crecimiento + + +

1005
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

oreja, longitud del maxilar, presencia de megavejiga, • Análisis genético de células fetales (procedentes de lí-
presencia de arteria umbilical única, entre otros. Los quido amniótico, trofoblasto o sangre fetal) mediante
distintos marcadores ecográficos de cromosomopatías técnicas de citogenética, genética molecular o citoge-
se incluyen en la Tabla 4. nética molecular (FISH, PCR-FQ).
• Estudios bacteriológicos (convencionales o mediante
Ecografía del segundo trimestre
PCR específica de microorganismos) o inmunológicos
Al igual que en el primer trimestre, en la ecografía del en casos de sospecha de infección fetal.
segundo trimestre, cada anomalía cromosómica tiene su • Estudio de hemopatías congénitas y aloinmunización.
propio patrón sindrómico de anomalías detectables (Tabla
4, Snijders y Nicolaides 1996, Nicolaides et al 1992). Se re-
Biopsia corial
comienda por tanto que una vez detectada una anoma-
lía/marcador en un examen ecográfico de rutina, se realice Consiste en la obtención de una pequeña muestra de
una rigurosa revisión de aquellas características de la ano- vellosidades coriales (Figura 1) para la realización de diver-
malía cromosómica relacionada con ese marcador. Si se sos estudios según la indicación (citogenética, genética
identifican anomalías adicionales, el riesgo se vería incre- molecular, estudios enzimáticos).
mentado de forma dramática. En el caso de anomalías La obtención de muestras puede realizarse por dos ví-
aparentemente aisladas, la decisión de llevar a cabo una as:
prueba invasiva depende del tipo de anomalía.
• Vía transabdominal: previa aseptización de la pared ab-
dominal materna y por acceso percutáneo se procede
TÉCNICAS INVASIVAS DE a aspiración con aguja o trocar fino. Deben realizarse
pequeños movimientos con la aguja para que con el bi-
DIAGNÓSTICO PRENATAL sel de la misma se obtengan cortes mínimos de frag-
Actualmente es posible acceder al feto “in útero” para mentos de corion.
obtener información diagnóstica a través de la técnica de • Vía transcervical: previa aseptización de la cavidad va-
la ecografía obstétrica, siendo uno de sus principales ginal, mediante pinza semi-rígida o catéter desechable
atractivos su carácter no agresivo, así como distintas téc- con guía maleable, realizando la prueba en la zona de
nicas invasivas que tienen como objetivo la obtención de mayor espesor placentario.
material celular o líquidos biológicos fetales o placentarios
Escoger una vía u otra dependerá de la localización de
para obtener información específica sobre el riesgo poten-
la placenta y de la experiencia del explorador. En ambos
cial del feto para determinadas anomalías en base a una in-
casos, exige el control ecográfico simultáneo y continuo, y
dicación previamente establecida.
no requiere la sedación de la paciente. El resultado puede
El diagnóstico prenatal de certeza sólo puede realizar- obtenerse en 48-72 horas.
se mediante métodos invasivos, que conllevan un riesgo
Debe realizarse un control ecográfico al finalizar el pro-
de pérdida fetal de 0,5-1%. Por eso es tan importante se-
cedimiento y otro a las dos semanas del mismo. En ges-
leccionar la población de riesgo.
tantes Rh (-) debe administrarse globulina anti-D tras el
Las eventualidades más comunes en la práctica clínica procedimiento. Se recomienda reposo relativo 24 horas y
son: abstinencia sexual una semana, hasta la ecografía de con-
trol.
• Estudio citogenético en casos de riesgo de anomalía
cromosómica fetal.
• Estudios bioquímicos en el líquido amniótico para de-
terminar la presencia y/o cuantificación de sustancias
como "marcadores" de determinadas anomalías fetales
(alfafetoproteína y acetilcolinesterasa en defectos abier-
tos del tubo neural y de pared abdominal), determina-
dos productos en trastornos metabólicos congénitos o
algunas hormonas (17-OH-progesterona en casos de
déficit congénito de 21-hidroxilasa).
• Estudios enzimáticos en trastornos metabólicos con-
génitos con diagnóstico posible. Figura 1. Vellosidad corial obtenida mediante biopsia corial.

1006
DIAGNÓSTICO PRENATAL DE ANOMALÍAS CONGÉNITAS. INDICACIÓN Y TÉCNICAS DE DIAGNÓSTICO.

Complicaciones En la práctica, puede ser realizada en cualquier perio-


do de la gestación a partir de la semana 14 pero su utilidad
– Amenaza de aborto: Es relativamente frecuente (15%),
en diagnóstico prenatal precoz se limita esencialmente en-
pero suele tratarse de un fenómeno autolimitado que
tre las semanas 14-18.
cede con reposo.

– Corioamnionitis. Es extremadamente rara. Técnica

– Aborto: El riesgo de pérdida fetal atribuible a la biopsia Realizamos la amniocentesis para diagnóstico prenatal
corial, es inferior al 1%. Las pérdidas fetales totales alrededor de la semana 16 de amenorrea según la soma-
suelen ser del 3%. tometría ultrasónica (DBP=36 mm; PC=170 mm; Fé-
mur=19,5 mm; CRL=93 mm y OFD=44 mm.). Conviene
– Isoinmunización Rh. Se recomienda la profilaxis anti-D ser exacto datando la gestación, ya que las cifras de AFP
en madres Rh(-). varían mucho de una semana a otra. La amniocentesis
precoz se lleva a cabo en las semanas 10-13, extrayendo
Contraindicaciones 1 ml/semana de líquido amniótico. Algunos autores rein-
Por vía transcervical se consideran contraindicacio- yectan el sobrenadante de líquido tras filtrarse componen-
nes la estenosis cervical, vaginismo, infección vaginal, te celular. Los riesgos de esta técnica serían comparables
DIU "in situ", mioma con interferencia en el acceso, vi- o superiores a los de la biopsia corial.
sualización inadecuada, hemorragia activa o pérdida de Se trata de una técnica que no es compleja pero exige
líquido. varios requisitos y pasos que deben cumplirse (Figura 2):
Por vía transabdominal, la interferencia de miomas o de 1. Estudio ecográfico previo de la edad gestacional, con-
intestino, placenta muy alejada y no asequible, y hemorra- diciones fetales, cantidad de líquido amniótico y locali-
gia activa. zación placentaria y funicular.
La gestación gemelar no debe considerarse una con- 2. Preparación y realización en condiciones de asepsia.
traindicación para la biopsia corial aunque debe evaluarse
3. Punción ecoguiada con aguja con mandril, 20-22G y 8-
individualmente la variedad, localización e individualización
12 cm desechable, penetrando en una zona libre de in-
de las placas coriales.
serción placentaria y con un movimiento decidido para
En el primer trimestre puede considerarse como pro- no desgarrar o desprender la membrana.
cedimiento de elección aunque exige mayor experiencia.
4. Retirar el mandril una vez alcanzada la cavidad amnió-
tica.
Amniocentesis
5. Desechar el primer ml. de líquido amniótico cambiando
“La extracción del líquido amniótico a través de pun- la jeringa.
ción y aspiración transabdominal” se desarrolló en la déca-
6. Aspiración lenta de 20-25 ml. de líquido amniótico.
da de los 50 para el estudio de la bilirrubina en los casos
de anemia hemolítica fetal y posteriormente para estimar la 7. Aconsejar a la paciente reposo absoluto las primeras
madurez pulmonar fetal mediante las determinaciones de 24 horas y abstinencia sexual una semana, hasta nue-
lecitina y esfingomielina. vo control ecográfico.

a) b)

Figura 2. Amniocentesis: a) técnica bajo guía ecográfica, b) cultivo de las células fetales.

1007
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

El estudio del cariotipo se realiza mediante el cultivo de Las indicaciones de la biopsia corial para estudio cro-
las pocas células fetales presentes en el líquido amniótico. mosómico se superponen esencialmente a las de la am-
El resultado lo obtendremos en 18-21 días. niocentesis.

Complicaciones

El riesgo de pérdida fetal atribuible a la amniocentesis OBTENCIÓN DE SANGRE FETAL


se estima entre 0.5 – 1%. Se trata de un procedimiento con indicaciones más se-
– Amenaza de aborto. La perdida de LA y el spotting, lectivas y uso más restringido que exige mayor experiencia
cuando suceden, suelen ceder en 23 días con reposo. que la de los procedimientos anteriores.
Inclusive cuando se pierde gran cantidad de LA, esta La técnica más comúnmente utilizada es la punción del
puede recuperarse en el plazo de una semana de ce- cordón umbilical (funiculocentesis) que según la vía de ac-
sada la pérdida y el embarazo continuar normalmente. ceso puede ser transplacentaria, transamniótica o trans-
– Corioamnionitis. Se calcula un riesgo del 0,05%. placentaria-transamniótica).

– Aborto: Se piensa que el riesgo global de pérdida fetal En otros casos puede obtenerse mediante punción del
esta en torno al 0,5%. trayecto intrahepático de la vena umbilical (PIVU) o más ex-
cepcionalmente mediante la punción cardíaca intraventri-
– Isoinmunización Rh: Debe prescribirse la profilaxis an- cular (cardiocentesis). La punción intrahepática de la vena
tiD en los casos de madre con Rh (-). umbilical tiene las ventajas de su menor movilidad y de evi-
tar la punción arterial que es la causa más importante de
Contraindicaciones
bradicardia fetal severa.
No existen contraindicaciones absolutas, aunque la pre- Este procedimiento debe practicarse tan sólo en uni-
sencia de miomas o la localización placentaria pueden difi- dades con experiencia adecuada y exige contar con la in-
cultar o imposibilitar el procedimiento. Tampoco es reco- fraestructura para identificación inmediata del origen fetal
mendable su realización en presencia de actividad uterina. de la sangre (volumen corpuscular medio mediante Coul-
La gestación múltiple no es una contraindicación para la ter) y recursos para la atención en casos de complicacio-
amniocentesis. Sin embargo, es esencial la identificación de nes, haciendo un control de FCF y posible hemorragia en
los distintos sacos amnióticos, registrando cuidadosamen- el punto de punción durante varios minutos.
te la topografía fetal y placentaria de los distintos sacos. El índice de pérdidas fetales guarda relación con la ex-
periencia del centro y la indicación, oscilando entre el 1-2%
Indicaciones de amniocentesis y biopsia corial
en centros con mayor experiencia pudiendo sin embargo
Las indicaciones de la amniocentesis se relacionan en alcanzar el 6-7%.
la Tabla 5.
Contraindicaciones

Tabla 5. Indicaciones de amniocentesis en Diagnóstico Prenatal. Las contraindicaciones de la cordocentesis o PIVU es-
tán esencialmente condicionadas por la escasez o exceso
1. RIESGO DE ANOMALÍA CROMOSÓMICA FETAL
de líquido amniótico, interferencia de partes fetales o tu-
• Edad materna avanzada (convencionalmente
≥35-38 años). moraciones en la pared uterina.
• Cromosomopatía fetal en gestación previa.
• Anomalía cromosómica estructural o mosaicismo en
progenitor. ELECCIÓN DEL PROCEDIMIENTO
• Anomalía fetal ecográfica o datos sugestivos de
aneuploidía.
INVASIVO EN DIAGNÓSTICO
• Marcadores de aneuploidía en suero materno. PRENATAL
2. RIESGO DE TRASTORNO GENÉTICO LIGADO AL SEXO
La decisión de utilizar una u otra técnica en cada caso
3. RIESGO DE TRASTORNO METABÓLICO CONGÉNITO
DIAGNOSTICABLE viene condicionada en primer lugar por el tipo de informa-
4. RIESGO DE DEFECTO DEL TUBO NEURAL ción que se pretende obtener. En algunos casos existen
• Alfafetoproteína. diversas opciones para alcanzar la misma finalidad y, en tal
• Acetilcolinesterasa. situación, deben valorarse los factores que condicionan la
5. RIESGO DE INFECCIÓN FETAL (PCR específico elección entre varios procedimientos alternativos.
en líquido amniótico).
Los factores que pueden condicionar la elección son:

1008
DIAGNÓSTICO PRENATAL DE ANOMALÍAS CONGÉNITAS. INDICACIÓN Y TÉCNICAS DE DIAGNÓSTICO.

Tabla 6. Amniocentesis vs. Biopsia corial. • Riesgo del procedimiento.


AMNIOCENTESIS BIOPSIA CORIAL • Pérdidas fetales.
Precocidad
Fiabilidad diagnóstica • Morbilidad fetal.
Diagnóstico molecular
Ventajas Alfafetoproteína
Tiempo diagnóstico: • Morbilidad materna.
Acetilcolinesterasa
corto
• Fiabilidad diagnóstica.
Cultivo prolongando
Exige mayor experiencia • Lapso entre muestra y diagnóstico.
Inconvenientes Tiempo diagnóstico:
Anomalías confinadas
largo
• Aceptabilidad por la paciente.
• Coste del procedimiento.
En la Figura 3 se relaciona la elección del procedimien-
Tabla 7. Estudios en las muestras provenientes de las técnicas invasivas to invasivo en base a la edad gestacional. En la Tabla 6 se
de diagnóstico prenatal. recogen las ventajas e inconvenientes de la amniocentesis
Biopsia versus la biopsia corial, permitiéndonos elegir el procedi-
Corial Corial Amnio- Sangre
miento invasivo para cada caso individualizado.
trans- trans- centesis fetal La muestra para el estudio antenatal de las anomalías
cervical abdominal
genéticas puede ser el líquido amniótico obtenido por am-
Citoginética SÍ SÍ SÍ SÍ niocentesis, placenta por biopsia corial, o sangre fetal por
Citoginética funiculocentesis. Excepcionalmente es precisa la biopsia
Molecular SÍ SÍ SÍ SÍ
de algún otro tejido fetal guiado por ecografía. Sobre estas
Bioquímica NO NO SÍ SÍ muestras se pueden llevar a cabo estudios citogenéticos,
Enzimática SÍ SÍ SÍ - génicos, enzimáticos o bioquímicos (Tabla 7).
Molecular A modo de resumen, la Tabla 8 muestra todas las téc-
SÍ SÍ - SÍ
(ADN)
nicas de diagnóstico prenatal que se pueden aplicar en los
Serología - - - SÍ diferentes trimestres del embarazo.

Figura 3. Elección de la técnica invasiva de elección según la edad gestacional.

Tabla 8. Pruebas de Diagnóstico Prenatal durante la gestación humana.

PRIMER TRIMESTRE SEGUNDO TRIMESTRE TERCER TRIMESTRE


– Screening 1 trimestre (sem 8-13):
er
– Screening 2 trimestre (semana 15):
do
– Ecografía del tercer trimestre
β-HCG + PAPP-A + TN β-HCG + AFP (34-36 semanas)
– Ecografía 11-14 semanas – Amniocentesis (16 semana) si indicada
– Biopsia corial si indicada (11-14 sem) – Ecografía selectiva (18-22 semanas)

1009
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

LECTURAS RECOMENDADAS Protocolo de la SEGO (actualizado 2003): Pruebas para la De-


tección de los Defectos Congénitos
Protocolo de Screening del primer trimestre del Hospital Materno
Protocolo de la SEGO (actualizado 2003): Diagnóstico Prenatal Infantil Vall d`Hebron.
de los defectos Congénitos I: Técnicas no invasivas. Williams. Obstetricia. 21a edición. Editorial médica Panamericana
Protocolo de la SEGO (actualizado 2003): Diagnóstico Prenatal Kypros H. Nicolaides. Orlando Falcón. La ecografía de las 11-
de los defectos Congénitos I: Técnicas invasivas. 13+6 semanas.

1010
Capítulo 113
DIAGNÓSTICO ECOGRÁFICO DE LAS
MALFORMACIONES FETALES
De la Torre J, Marín-Buck A, Santandreu M, García Peña M, Troyano JM, Mercé LT

INTRODUCCION Pero desgraciadamente, y a pesar del indudable valor


del método ecográfico, los ultrasonidos no son la panacea
En conjunto, el 3% de los fetos en países desarrollados diagnóstica, al menos en estadios gestacionales inferiores
nacen con algún tipo de anomalía indeleble. De ellos el 25% a las 22 semanas. Esto se debe fundamentalmente a tres
fallecen a lo largo de la gestación, el 20% mueren en las pri- hechos:
meras horas del postparto, y el 15% entre el primer y cuarto
– En primer lugar, hay marcadores malformativos o va-
año de vida. El 40% restante de fetos afectos que consiguen
sobrevivir lo harán con algún tipo de tara física, psíquica y/o riantes de la normalidad con carácter transitorio (quis-
sensorial, así como con una penetrancia variable, que influi- tes de plexos coroideos, ecogenicidades de cuerdas
rá indudablemente a lo largo de su vida (Tabla 1). tendinosas etc.).

Independientemente, existe un 4% de fetos afectos de – En segundo lugar, existen alteraciones tan sutiles que
patologías cromosómicas, y si además analizásemos el ca- escapan a la capacidad diagnóstica tanto del explora-
riotipo de especímenes obtenidos en abortos espontáne- dor como de las características técnicas del ecógrafo
os, la cifra de cromosomopatías rondaría el 14%. (ciertas alteraciones en la disposición de las circunvo-
luciones cerebrales, paquigirias, angiomas planos
Posiblemente las enfermedades cromosómicas son las etc.).
que comportan un diagnóstico prenatal más problemático,
ya que no siempre la expresión fenotípica muestra los ca- – En tercer lugar, y posiblemente el más trascendente, la
racteres que definen a un determinado síndrome genético aparición tardía de expresiones fenotípicas malformati-
en función de su penetrancia; los mosaicismos son un vas. Téngase en cuenta que a diferencia del adulto, en
ejemplo claro de ello. Sin embargo las alteraciones estruc- el desarrollo embrio-fetal, morfología y función del ór-
turales del feto sí que pueden asociarse o formar parte de gano no van aparejadas. Esto quiere decir que tras el
otros síndromes más complejos o ajustarse fielmente al período embriogenético, la constitución anatómica fetal
patrón de una determinada cromosomopatía. está establecida totalmente, pero la función de los dis-
tintos órganos se pondrá en marcha en momentos
Estos datos hablan por sí solos de la necesidad de es- cronológicos distintos. A raíz de este hecho, sólo podrá
tablecer una estrategia efectiva en la detección de cual- ser detectada una determinada anomalía cuando la
quier variante de la normalidad fetal en su desarrollo. En función de un órgano, aparato o sistema se active y
este sentido la ecografía se ha situado sin lugar a dudas en ponga en evidencia su déficit. El llenado y peristaltismo
el procedimiento de elección para valorar el desarrollo y intestinal grueso que se produce alrededor de la 24-26
eumorfismo del feto a lo largo de la gestación. semanas, es un ejemplo claro de esto, lo mismo que el
inicio funcional de los barorreceptores aórticos alrede-
Tabla 1. Incidencia de alteraciones malformativas fetales en países dor de la 22-24 semanas, por lo que el concepto ho-
desarrollados. meostático de centralización ante la hipoxia hipoxémi-
ca no será un hecho contrastable por debajo de esa
Número de malformaciones anuales 3%
edad gestacional.
– Fallecidos intraútero 25%
– Fallecidos en el postparto 20% Por todo ello, la ecografía hay que considerarla en su
– Fallecidos en los primeros cuatro años 15% justa dimensión, entendiendo su importancia estratégica,
– Fetos malformados que sobreviven pero también sus limitaciones. Los resultados hoy en día
con algún tipo de tara 40% criticables sobre la metodología del proyecto RADIUS so-

1011
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

bre todo, EUROFETUS, y algunos estudios europeos mul- – Síndrome: Múltiples anomalias (malformaciones, dis-
ticéntricos, son un ejemplo claro de ello. rupciones, deformidades o displasias) que afectan di-
versas áreas del desarrollo y que están relacionadas
Podemos admitir que el rendimiento diagnóstico de
etiopatogenicamente, por ejemplo los síndromes de
malformaciones mayores por ecografía entre las 18 y 22
Down, Turner, Edwards…
semanas está entre un 66% y un 80%, mientras que para
malformaciones menores se cifra alrededor del 41%. Por – Secuencia: Conjunto de alteraciones derivado de una
debajo de la semana 16 se detectan un 12% de malfor- única malformación o factor mecánico conocido (malfor-
maciones mayores. Es sobre la 32º semana, cuando po- mación o disrupción), por ejemplo la Secuencia Potter.
demos afirmar que la capacidad predictiva ecográfica ron- – Asociación: Múltiples anomalias que aparecen de for-
da el 92-96% de las malformaciones mayores. ma no casual, que no muestran ninguna relación etio-
Como observación personal, desde el punto de vista patogénica y que no constituyen una secuencia, sín-
de los autores, entendemos como malformación mayor a drome o defecto de campo, po ejemplo VACTERL.
toda anomalía fetal que implica déficit severo en la es- La mayoría de los síndromes prenatales, incluyendo las
fera anatómica, funcional, sensorial y/o intelectual con cromosomopatías, se acompañan de expresiones fenotípi-
impacto definitivo durante su vida adulta e influyendo cas dismorfológicas. Basados en este hecho, la ecografía
en la esperanza de la misma, dependiendo en cuanto intenta detectar la mayor parte de estos signos dismorfoló-
a sus soluciones, de soporte médico-quirúrgico-palia- gicos a los que se les ha denominado marcadores eco-
tivos para su posible integración social y superviven- gráficos. Cuanto más precozmente se determinen, más
cia. Dicha alteración puede ser externa o interna, familiar o eficaz y trascendentes serán dichos diagnósticos. Lógica-
esporádica, hereditaria o no, única o múltiple. También es mente, estos marcadores no siempre serán detectables en
importante conocer la clasificación y definiciones de las etapas tempranas de la gestación sino que irrumpirán más
anomalías del desarrollo embriofetal para entender la pato- tardíamente y en otros casos, como ya se ha expuesto, ten-
génesis y, en muchos de los casos, la etiología de las mis- drán carácter transitorio, pero no por ello menos alarmantes
mas. Así tenemos: que los llamados marcadores estables. Esto obliga, en los
planes de diagnóstico prenatal, a la realización de un míni-
Defectos primarios únicos o aislados mo de tres ecografías a lo largo de la gestación: ecografía
de primer trimestre, ecografía de la semana 20º y ecografía
Son mayoritariamente de etiología poligénica y multi-
del tercer trimestre. La inclusión de una cuarta exploración
factorial. Presentan riesgos de recurrencia empíricos por
ecográfica concretada entre la 14-16 semanas, donde ya es
debajo de los riesgos mendelianos (2-10%).
posible detectar alrededor del 96% de los detalles anatómi-
– Malformación: Defecto estructural originado por un cos fetales, cada vez más en uso en los protocolos de se-
error primario localizado en la morfogénesis, por ejem- guimiento prenatal, ha aumentado espectacularmente la
plo fisura del labio-paladar. sensibilidad diagnóstica de las malformaciones, fundamen-
talmente cardiopatías, ya que la realización de la ecografía
– Deformación: Alteración en la forma o estructura de
de la 20 semanas, tras una evaluación ecográfica de sos-
una parte que se ha diferenciado normalmente, causa-
pecha malformativa no confirmada en la semana 14º, posi-
da por mecanismos mecánicos no disruptivos, por
bilita una sensibilidad global de diagnóstico del 75-80%.
ejemplo pie zambo deformativo.
Dejando a un lado el análisis de los marcadores dirigi-
– Disrupción: Defecto estructural resultante de la des-
dos al diagnóstico prenatal de cromosomopatías, que ya
trucción de una parte que se desarrolló normalmente,
han sido tratados en el correspondiente capítulo, nos cen-
por ejemplo amputación por bridas amnióticas.
traremos en el aspecto puramente dismorfológico de los
– Displasia: Organización anormal de células en un tejido cuadros malformativos más frecuentes.
(s) y su resultado (s) morfológico (s) como consecuen-
El diagnóstico ecográfico de malformaciones fetales
cia de un proceso dishistogenético, por ejemplo los he-
exige la realización de una metodología reglada (Tabla 2).
mangiomas.
El cumplimiento de la sistemática establecida definirá a la
ecografía como satisfactoria. Si no se consiguiera la visión
Anomalias múltiples
total o parcial de un determinado órgano o función, debe-
– Defecto de campo embriológico: Existen múltiples de- ría hacerse constar y considerar en el diagnóstico final co-
fectos, pero todas derivan de un único trastorno de mo una exploración insatisfactoria. Se deberían tomar las
desarrollo embrionario de un campo embriológico, por medidas pertinentes para repetir la ecografía en otro mo-
ejemplo defectos de linea media. mento hasta su confirmación y aunque esto no siempre

1012
DIAGNÓSTICO ECOGRÁFICO DE LAS MALFORMACIONES FETALES

Tabla 2. Factores a considerar en la sistemática de la exploración ecográfica para el diagnóstico de malformaciones fetales.

Primer trimestre Segundo y tercer Trimestre


– Sonoluscencia nucal • Polo cefálico • Abdomen • Placenta
(14 semanas) – Ventrículos laterales – Estómago – Grado madurativo
– Alteraciones del ritmo – Tercer ventrículo – Hígado – Inserción/biometría
embriocárdico – Cisterna magna – Vasos hepáticos – Vascularización
(7-8 y 14 semanas) – Plexos coroideos – Riñones anómala
– Hemodinamia anómala del – Tálamo – Intestino • Líquido amniótico
conducto venoso de – Cerebelo – Vejiga – Volumen
Arancio (14 semanas) • Cara – Pared abdominal – Ecoestructura (PLF)**
– Regurgitación tricuspídea – Fosas orbitarias • Extremidades • Función fetal
– Presencia del hueso nasal – Huesos nasales – Morfología – Micción (oligohidramnios)
– Hemodinamia anómala – Maxilares – Biometría – Regurgitación (deglución)
umbilical – Labios (lengua) – Número – Ecoestructura intestinal
– Flujo vitelino anómalo – Pabellones auriculares • Columna vertebral – Peristalsis
– Anomalía del saco vitelino • Tórax – Puntos de osificación – Hidrodinamia nasal
– Anatomía embrionaria – Límite diafragmático – Imagen sagital – Perfíl hemodinámico.
desde la semana 10º – Pulmones • Cordón umbilical
– Corazón: 4 cámaras y – Número de vasos
grandes vasos – Quistes/otros

** PLF= Partículas libres flotantes.

sea posible, hay que recordar que de aquí se derivan cier- La presencia de líquido nucal por debajo de 3 mm de
tas implicaciones y responsabilidades legales, como abor- sección puede considerarse un hecho fisiológico en más
dar la problemática de la interrupción legal lo más precoz- del 40% de los embriones, desapareciendo en la semana
mente posible o bien evitar las tasas de falsos positivos 12º. Este hecho transitorio y fisiológico se produce por una
diagnósticos. sobreoferta de drenaje linfático a la vena yugular interna
hasta el desarrollo definitivo del sistema linfático torácico.

DIAGNÓSTICO ECOGRÁFICO DE
MALFORMACIONES EN EL PRIMER
TRIMESTRE
La estimación de riesgo de los defectos congénitos
se basa en la evaluación de una serie de parámetros bio-
químicos y ecográficos que modifican el riesgo de base
que presenta una mujer embarazada. El screening de al-
teraciones cromosómicas se desarrolla en otro capítulo.
Nos ocuparemos de los parámetros ecográficos de utili-
dad en el primer trimestre para identificar alteraciones
estructurales.

Sonoluscencia nucal

Es el marcador ecográfico más importante en el primer


trimestre para descartar alteraciones cromosómicas feta-
les. Es un marcador morfológico circunscrito al área cervi-
cal embrio-fetal, de características quísticas, limitado entre
la piel y la columna cervical. Se mide entre la superficie pe-
rivertebral y la cutánea (Figura 1). Por regla general es un
marcador transitorio que desaparece alrededor de la 15-16
semanas, pero aproximadamente en un 12% de los casos
se observa su sustitución por un engrosamiento nucal, ad-
quiriendo características de expansión tegumentaria. Figura 1. Sonoluscencia nucal sindrómica.

1013
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

El mantenimiento y engrosamiento patológico de coleccio-


nes cervicales se debe primordialmente a fallos estructura-
les y funcionales en los sistemas canaliculares linfáticos
(estenosis), o como mecanismo de sobrecarga de cavida-
des cardíacas derechas motivadas por insuficiencias pre-
coces o cardiopatías congestivas.
Hoy es un hecho contrastado la relación existente en-
tre sonoluscencia nucal detectada en el primer trimestre y
riesgo de cromosomopatías (T21, T13, T18), aumentando
este en función del grosor a partir de los tres milímetros, y
más aun si el valor de la sonoluscencia se incrementa con
la edad gestacional. La sonoluscencia nucal puede consi-
derarse como el marcador más sensible de aneuploidías
detectables por ecografía en el primer y segundo trimes-
tres de la gestación.
Sin embargo, la presencia de sonoluscencia nucal sin
correlato cromosomopático, no excluye otros riesgos de
patología fetal, tanto malformativo como de incidencia pe-
rinatal. En nuestra experiencia, el 36,5% de las sonolus-
cencias nucales superiores a 5 mm sin cromosomopatías
asociadas han expresado algún tipo de patología fetal, por
lo que este debe ser considerado como un marcador mu-
cho más extenso de malformaciones e incidencias perina- Figura 3. Bradicardia y arritimia cardiaca en embriones como
marcador de cardiopatía precoz. Mal pronóstico embrionario
tales. Entre ellas: linfangiomas, nanismos tanatofóricos, semanas 6-7.
cardiopatías del tipo hipoplasia de cavidades, así como
una significativa incidencia de patología perinatal como CIR
tipo II, leucosis neonatal, etc. El embrión, en sus primeros estadios, está sometido a
un estado restrictivo provocado por el desarrollo del es-
Ritmo embriocárdico pacio intervelloso, esto hace que el pulso a nivel de arte-
La valoración embriocárdica (7-8 semanas) y la circula- ria umbilical manifieste un perfil de tipo sistólico-adiastóli-
ción fetal en el primer trimestre (12-14 semanas) ofrecen co (Figura 2). Esta alta presión intraembrionaria favorece el
posibilidades de alerta ante determinadas patologías mal- desarrollo miocárdico así como la compartimentación y
formativas, sobre todo cardiopatías. Estos marcadores expansión fisiológica de las cavidades cardíacas. Secun-
embriocárdicos se refieren fundamentalmente a la bradi- dariamente, los mecanismos de conducción irán paulati-
cardia y a la arritmia. namente sincronizándose como expresión de la madurez
y normodesarrollo de los nódulos de inducción eléctrica y
de la integridad estructural cardiaca. Cualquier cambio in-
usual en la dinámica embriocárdica debe hacer sospechar
una anomalía estructural del corazón. La aparición de flu-
jos reversos precoces en arteria umbilical representa
igualmente un fracaso de eyección ventricular, en unas
etapas en las que el miocardio debe ofrecer una gran for-
taleza funcional.
Las alteraciones del ritmo cardíaco, valoradas entre la
10 y 18 semanas, son un buen marcador de alerta de es-
tas patologías. No obstante, la determinación de las altera-
ciones del ritmo embrionario entre la 7 y 8 semanas ofrecen
unas perspectivas diagnósticas de mayor trascendencia,
dada la precocidad del marcador y, además, establecen
Figura 2. Perfil hemodinámico funicular adiastólico fisiológico criterios pronósticos en cuanto a viabilidad embrionaria a
del primer trimestre. corto plazo (pérdida del bienestar embrionario precoz).

1014
DIAGNÓSTICO ECOGRÁFICO DE LAS MALFORMACIONES FETALES

Las alteraciones del ritmo embrionario detectadas entre


la 7-8 semanas se asocian a muerte embrionaria inmi-
nente, con una semana de antelación pronóstica, car-
diopatías estructurales del tipo canal atrio-ventricular
completo y miocardiopatías ventriculares (fibroelastosis)
(Figura 3).

Hemodinámica del conducto venoso de Arancio

En casos con un aumento en la translucencia nucal


(<percentil 95) puede estar indicado evaluar el ductus ve-
noso ya que la mayoría de las cardiopatías congénitas
(80%) se asocian a alteraciones del mismo. El fracaso más
significativo de la función hemodinámica fetal se manifiesta
por la aparición de ascitis, produciéndose por fallo en el
gasto cardíaco. Solo situaciones extremas restrictivas des-
encadenan edemas generalizados en el feto, ya que las co-
nexiones fisiológicas derecha-izquierda a través del fora-
men oval, ductus arterioso y conducto venoso de Arancio,
compensan la mayoría de las cardiopatías restrictivas, al-
gunas tan severas como la hipoplasia de cavidades iz-
quierdas.
Figura 5. Perfil hemodinámico de la cava inferior irregular y
Cuando los factores desencadenantes de un fallo reverso como mecanismo de sobrecarga de cavidades derechas.
ventricular izquierdo no son compensados hemodinámi- La ascitis acompañante es un dato de severo fracaso cardiaco.
camente, se suceden una serie de hechos concatenados
que van provocando retrógradamente una sobrecarga
de cavidades derechas (Figura 4), manifestándose a ni-
derecha. Este patrón se asocia, no sólo a una mayor in-
vel de la vena cava inferior, sobrecarga en el conducto
cidencia de aneuploidías, sino a cardiopatías estructura-
venoso de Arancio y vena umbilical intrahepática. Ante
les que conlleven un fracaso ventricular derecho desen-
este mecanismo de sobrecarga retrógrada, la hepato-
cadenantes de signos hemodinámicos retrógrados de
megalia, ascitis y anasarcas será únicamente cuestión
sobrecarga (Figura 5).
de tiempo. La congestión vascular hepática es el signo
clínico ecográfico más evidente del fracaso ventricular En todos estos fenómenos hay un hecho evidente: la
derecho. El ductus venoso se constituye en el punto asociación de varios marcadores hemodinámicos, inclu-
anatómico más sensible, ya que la aparición de un flujo yendo las alteraciones del ritmo cardíaco, aumenta la sen-
patológico, expresado por un perfil reverso o ausente de sibilidad y especificidad de cardiopatía. Si estos se asocian
la onda “A” durante el período de contracción auricular a sonoluscencia nucal, predicen además un riesgo de
aneuploidías entre el 80-90%.

Hemodinámica del saco vitelino

El saco vitelino tiene un desarrollo simultáneo al em-


brionario. Ecográficamente es habitual que primero detec-
temos la vesícula vitelina ubicada en el espacio extraceló-
mico (semana 4ª-5ª). Adosada a ella, como un anillo de
sello, aparece posteriormente la cresta embrionaria, obser-
vándose los primeros movimientos cardíacos (semana 5ª).
A partir de esta edad gestacional, se produce una paulati-
na elongación y separación del istmo alantoideo, alejándo-
se cada vez más del embrión (Figura 6). Estos fenómenos
evolutivos se acompañan de cambios morfológicos, es-
Figura 4. Perfil hemodinámico del ductus venoso, que muestre
tructurales y volumétricos del saco vitelino. En un principio
la presencia de onda “A” como expresión de función tricuspídea
fisiológica. Su ausencia o reversión son indicativas de sobrecarga su volumen sobrepasa al del embrión, pero a partir de la
de cavidades derechas. semana 7ª este hecho se invierte exponencialmente a la

1015
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

El saco vitelino guarda relación con mecanismos he-


matopoyéticos e inmunológicos extraembrionarios mer-
ced a la producción de ciertas proteínas transitorias. Al-
gunas se relacionan con el bloqueo del rechazo materno
al huésped (alfa fetoproteína no concavalina), otras con
factores propiamente nutricionales (Factor de creci-
miento embrio-fetal pancelular Insulin-Like, transferri-
na...) y otras mantienen la tensión superficial del amnios
frente al celoma extraembrionario (albúmina, alfa 1-anti-
tripsina...). En definitiva, tiene un papel fundamental,
aun del todo no conocido en el mantenimiento embrio-
nario y probablemente en la calidad fetal a lo largo del
resto gestacional. Los datos indirectos obtenidos a tra-
vés del estudio vascular, aunque groseros, pueden
aportarnos información sobre la patología del desarrollo
y probablemente de las alteraciones genéticas embrio-
narias.
Desde el punto de vista hemodinámico existen tres ti-
pos de flujos patológicos relacionados con mal pronóstico
embrionario y posibles asociaciones malformativas:
• Flujo vitelino irregular disruptivo.
• Persistencia de flujo diastólico (no restrictivo).
Figura 6. Saco vitelino, istmo alantoideo y vascularización • Flujo venoso prevalente.
patológica no restrictiva del mismo.
Si a estos factores le sumamos las alteraciones del ta-
maño, morfología y ecoestructura, las incidencias y el pro-
vez que se va produciendo una involución progresiva has- nóstico gestacional se verán ensombrecidos (Figura 7).
ta su desaparición definitiva, alrededor de las 12-14 sema-
nas de gestación.
El istmo o tallo alantoideo desarrolla brotes de células
endoteliales que dan lugar a un doble sistema capilar arte-
riovenoso, los cuales muestran una gran actividad hemodi-
námica, sobretodo en la fase activa de su desarrollo; es
decir, entre la 6ª y 8ª semana, puesto que la regresión fun-
cional y hemodinámica comienza sobre la 10ª semana. Es
fundamental, por este hecho, valorar los factores hemodi-
námicos vitelinos antes de esta edad gestacional.
La detección por ecografía transvaginal del flujo vitelino
se consigue en un 73% de los intentos rutinarios usando
angio-Doppler. Entre la 7ª-8ª semana la frecuencia de de-
tección es del 86%.
Las características hemodinámicas del saco vitelino
vienen dadas por una baja velocidad, inferior a 6 cm/seg,
acompañadas de un perfil adiastólico. El perfil hemodiná-
mico obedece al mismo patrón restrictivo funicular de es-
tos estadios gestacionales.
La elongación del istmo vitelino-alantoideo implica evo-
lutivamente un gradual decrecimiento de la vasculariza-
ción, cada vez más angosta, hasta la interrupción definiti- Figura 7. En la imagen superior, perfil de onda vitelina fisiológica.
va entre las semanas 12-14. Foto inferior: Flujo irregular disruptivo de escasa pulsatilidad.

1016
DIAGNÓSTICO ECOGRÁFICO DE LAS MALFORMACIONES FETALES

La detección ecográfica de una patología vitelina es un


marcador potencial de anomalía embrionaria y fetal. Exis-
ten datos razonables para poder afirmar la relación de
complicaciones embriofetales ante un saco vitelino de apa-
riencia patológica asociado a diabetes materna.
La ausencia o saco vitelino no visible es un predictor de
aborto. El tamaño anormal, tanto por exceso como por de-
fecto, se asocia igualmente a una alta incidencia de aborto,
pudiendo además predecir una gestación anormal en cual-
quier sentido, con una sensibilidad baja (16%), pero con una
especificidad del 95% y un valor predictivo positivo del 44%.
Figura 9. Hiodrocefalia precoz (semana 15ª).
– Una morfología anormal y/o persistencia por encima de
la decimotercera semana de gestación, debe conside-
rarse como un marcador de aneuploidías.
– La pérdida de la morfología esférica del saco vitelino en
fases precoces obliga a un seguimiento seriado del
desarrollo embrionario, y a la búsqueda de marcadores
en etapas posteriores del primer trimestre.
– La presencia de un doble saco vitelino se asocia a cier-
tas anomalías estructurales como exonfalias, arteria
umbilical única etc.

Figura 10. Enfermedad Adenomatosa Quística Pulmonar tipo II


(semanas 14-15).

– La opacificación vitelina se relaciona con muerte em-


brionaria por interrupción nutricional y vascular.

Malformaciones congénitas

Las malformaciones susceptibles de ser detectadas


ecográficamente por debajo de las 15 semanas se pueden
resumir en:
• Síndrome de Prune Belly o cualquier uropatía obstruc-
tiva, ya que la visión vesical del embrión antes de las 9
semanas puede considerarse un hecho inusual y un
marcador de obstrucción uretral (Figura 8).
• Agenesia renal bilateral-displasias renales asociada a
anurias (oligohidramnios).
• Hidrocefalias (Figura 9).
• Defectos del tubo neural.
• Teratomas sacrocoxígeos.
• Cardiopatías, sobre todo el canal AV completo.
• Enfermedad adenomatosa quística pulmonar Tipo II (Fi-
gura 10).
Figura 8. Visión patológica de imagen vesical en la 9ª semana.
Es un hecho inusual que puede considerarse como un marcador • Tumoraciones cervicales.
de obstrucción uretral, comprobándose su evolución a las 12
semanas de gestación (imagen inferior). • Hidropesía.

1017
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

• Patología gemelar (siameses, transfusión feto-fetal, cos años que se conoce que la regurgitación tricuspídea,
acardios) (Figura11). incluso en ausencia de otras anomalías cardiacas, se aso-
cia con una mayor prevalencia de aneuploidías. Para su
• Bandas amnióticas.
medición, en un corte de cuatro cámaras se sitúa la venta-
• Síndromes malformativos abigarrados (Limb-Wall- na Doppler a través de la válvula tricúspide de forma que el
Body) (Figura 12). ángulo de dirección del flujo sea menor de 30º. La regurgi-
Esta catalogación es posiblemente una serie de otras tación en esta edad gestacional se diagnostica cuando se
más extensas, que en próximas fechas se verán engrosa- visualiza al menos en la mitad de la sístole con una veloci-
das por nuevas aportaciones de malformaciones detecta- dad superior a 80 cm/s.
das en períodos gestacionales inferiores a la semana 12. Huggon y su equipo encontraron regurgitación tricuspí-
La ecografía precoz del primer trimestre, en función del dea en casi el 60% de los fetos con trisomía 21 y tan sólo
desarrollo tecnológico y del análisis de marcadores, cons- en el 8,8% de los cromosómicamente normales. El grupo
tituye hoy por hoy un elemento fundamental, no sólo en el de Nicolaides publica recientemente una estimación del
diagnóstico, sino en el pronóstico de una determinada riesgo del síndrome de Down en base a la asociación de la
gestación. regurgitación con otros marcadores, especialmente con la
La garantía diagnóstica del método ecográfico se sus- sonoluscencia nucal. Para ellos la regurgitación está pre-
tenta en tres pilares: ecógrafo fiable, formación adecuada sente en el 4,4% de los fetos cromosómicamente norma-
y tiempo suficiente de exploración por órganos y aparatos les, en el 67,5% de los que presentan una trisomía 21, y en
del feto. el 33,3% de los que presentan una trisomía 18.

Regurgitación tricuspídea Presencia del hueso nasal

La ecocardiografía fetal en el primer trimestre es una Una de las características faciales de los pacientes con
técnica de reciente estudio y desarrollo. Así, hace muy po- síndrome de Down es el achatamiento de la nariz. En ba-

Figura 11. Fetos siameses y cordón umbilical común (semana 7ª-8ª). Figura 12. Síndrome malformativo abigarrado (semana 10ª).

1018
DIAGNÓSTICO ECOGRÁFICO DE LAS MALFORMACIONES FETALES

se a esta característica Nicolaides examina la apariencia El SNC lo componen el conjunto de estructuras cere-
ecográfica del hueso nasal en el primer trimestre de la ges- brales y la médula espinal, por tanto, el diagnóstico prena-
tación, concluyendo que el hueso nasal no es visible me- tal de sus anomalías habrá que buscarlos en estas dos
diante ecografía entre las 11 y 14 semanas en el 60–70% áreas anatómicas.
de los fetos con trisomía 21 y en alrededor del 0,6 al 2%
de los fetos cromosómicamente normales. La combina- Hidrocefalia
ción de este marcador ecográfico junto con la sonoluscen- Es el aumento de la cantidad de líquido cefalorraquídeo
cia nucal y la bioquímica materna permiten una tasa de de- ventricular con el consiguiente aumento de tamaño de los
tección del síndrome de Down del 90% con una tasa de ventrículos. Se produce como consecuencia de la dilata-
falsos positivos del 2,5%. ción patológica del sistema ventricular cerebral, aunque
generalmente la definición se reduzca a los ventrículos la-
terales.
MALFORMACIONES NEUROLÓGICAS
Es posiblemente, junto con la anencefalia, la malfor-
mación más frecuente del SNC, con una incidencia que
Malformaciones del sistema nervioso ronda el dos por mil recién nacidos vivos. Puede acom-
central (SNC) pañar a otras malformaciones del SNC o ser una anoma-
lía única.
El SNC presenta anomalias frecuentes, ya sea aisladas
o formando parte de síndromes malformativos. En el con- En relación a los mecanismos de producción, la hidro-
junto de las malformaciones fetales, las neurológicas ocu- cefalia puede ser:
pan un lugar señalado y constituyen las patologías más fre- – Simétrica, donde se afecta todo el sistema ventricular.
cuentes después de las nefrouropatías. Sin embargo,
presentan mayor complejidad en relación al diagnóstico – Asimétrica, generalmente producida por la estenosis
objetivo y exacto de la malformación y en cuanto al esta- aislada de uno de los agujeros de Monro.
blecimiento de un pronóstico prenatal referente a la viabili- – Comunicante, producida por mecanismos estenóticos
dad y alcance de las secuelas futuras. En relación a los de- extraventriculares o por hiperproducción aracnoidea-
fectos del tubo neural (DTN), la extensión y que sean coroidea.
abiertos o cerrados determinará su detección ecográfica.
– No comunicante, donde la obstrucción anatomopato-
Desafortunadamente este hecho no se relacionará con el
lógica se produce dentro de los propios sistemas de
grado de morbilidad neurológica. Por otro lado, ciertas al-
drenaje intraventriculares: acueducto de Silvio y aguje-
teraciones sutiles, como tumoraciones, disposición anó-
ros de Luska y Magendie (Tabla 3).
mala de las circunvoluciones cerebrales y alteraciones es-
tructurales o agenésia del cuerpo calloso y anomalías
vasculares, dificultan aun más el diagnóstico de la neuro- Tabla 3. Factores etiológicos de la hidrocefalia congénita.

patología fetal. HIDROCEFALIAS COMUNICANTES

Alrededor del 18% de las malformaciones del SNC, • Herniación cerebelosa (Arnold Chiari)
fundamentalmente la agenesia del cuerpo calloso y la es- • Disposición anómala e inmadurez de las circunvoluciones
pina bífida oculta sin hidrocefalia asociada, no se diagnos- cerebrales (agirias)
• Agenesia de aracnoides
tican prenatalmente.
• Encefalitis-meningitis
Entre un 3 a un 5/1000 fetos nacidos vivos presentan • Mielomenigoceles-encefaloceles
una malformación del SNC, representando el 20% relativo HIDROCEFALIAS NO COMUNICANTES
de todas las malformaciones detectadas. • Estenosis de agujeros de drenaje
En planes de cribado ecográfico, en la exploración ha- • Estenosis del acueducto (la más frecuente, curso evolutivo
bitual del cerebro fetal y columna vertebral, hay que insis- in crescendo)
• Hemorragias intraventriculares (pueden producir
tir en la valoración sistemática del cavum del septum pe-
hidrocefalias estables)
llucidum, atrio ventricular, cisterna magna, morfología del
• Hamartomas y otras tumoraciones cerebrales-
vermis cerebeloso (signo de la banana) y morfología del ependimarias-aracnoideas
contorno craneal a nivel frontotemporal (signo del limón). • Agenesia del cuerpo calloso (producen ventriculomegalias
Cualquier alteración en la evaluación de estas estructuras, asimétricas, estables, de escasa cantidad)
alerta de la existencia subyacente de una patología del • Quistes de Dandy Walker
SNC aunque no podamos concretar cual. • Malformaciones vasculares

1019
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

Desde un punto de vista biométrico, se define como la


disminución del volumen cefálico a tres desviaciones es-
tándar por debajo de la media, siendo aplicable al llamado
índice cefálico frontooccipital, circunferencia craneal, o diá-
metro biparietal, este último siempre que no esté compen-
sado por un aumento proporcional del diámetro occipito-
frontal (Dolicocefalia).
Representa una de las malformaciones del SNC menos
frecuentes (1/10.000-1/50.000), siendo muy difícil y com-
prometido su diagnóstico, por lo que puede escapar a su
detección antes de la semana 20.
Figura 13. Hidrocefalia que muestra asimetría y movilidad en los
plexos coroideos.
El problema que plantea el diagnóstico prenatal de las
microcefalias es el establecer aquellos casos en que se
asocien o no alteraciones neurológicas, ya que en algunas
Puede clasificarse como mono o biventricular por obs- ocasiones responden a problemas únicamente biométri-
trucción a nivel del foramen de Monro, triventricular gene- cos sin otras implicaciones.
ralmente por estenosis del acueducto de Silvio, o tetraven- Toda alteración neurológica asociada a una disminu-
tricular por obstrucción de los forámenes de Luschka y ción del volumen craneal debe hacer sospechar una mi-
Magandie u obliteración del espacio subaracnoideo. La crocefalia, y de igual modo cualquier asociación malforma-
oclusión del acueducto puede ser secundaria a infección o tiva extracraneal, obligando a su estudio genético.
hemorrágica. La estenosis primaria puede ser esporádica,
La sospecha prenatal de microcefalia tiene una base
ligada al cromosoma X o autonómica recesiva.
biométrica, siendo muy demostrativa la disminución del
Los datos ecográficos que sustentan el diagnóstico de diámetro biparietal en relación al diámetro interorbitario ex-
hidrocefalia se basan fundamentalmente en la magnitud y terno y en relación al diámetro torácico. El diagnóstico sue-
forma de los ventrículos laterales, con una evidente des- le hacerse desafortunadamente por encima de la 26 se-
proporción de los plexos coroideos en relación al gran vo- manas, cuando se pone de manifiesto el retraso en el
lumen ventricular, asociado a una gran motilidad y asime- incremento cefálico en relación al resto de la biometría fe-
tría topográfica de los mismos (Figura 13). tal (Figura 14).
Más del 60% de los cuadros hidrocefálicos tienen un
Holoprosencefalia
origen extracerebral, por lo que siempre habrá de indagar-
se en la integridad del canal medular. Constituye una malformación como consecuencia de
un defecto en los mecanismos de segmentación de ambos
Las implicaciones neurológicas dependen del grado
hemisferios cerebrales, produciéndose herniaciones en la
de afectación cerebral y no siempre del volumen ventri-
línea media, dando la impresión de que existe un solo ven-
cular, por lo que es muy comprometido establecer un
trículo central.
pronóstico prenatal de estas lesiones, siendo las hidro-
cefalias genuinas o aisladas las que tienen un mejor pro- Generalmente se presenta asociada a cuadros malfor-
nóstico. mativos abigarrados o formando parte de ciertas secuen-
El índice de cromosomopatías asociadas a hidrocefa-
lias ronda el 12%, debiéndose ser muy cautos ante las
ventriculomegalias anodinas, ya que aumentan la inciden-
cia a un 15-16%.

Microcefalia

Pueden ser primarias o constitucionales, generalmente


mutaciones monogénicas recesivas, dominantes o ligadas
al cromosoma X, o por anomalias cromosómicas, o se-
cundarias por causas exógenas como infecciones, isque-
mia… La microcefalia vera es una malformación aislada,
autosomica recesiva. Asociada a otras anomalías forma Figura 14. Microcefalia, diámetro biparietal menor que el
parte de síndromes malformativos. diámetro interorbitario externo (dato antropométrico).

1020
DIAGNÓSTICO ECOGRÁFICO DE LAS MALFORMACIONES FETALES

Se presenta con una incidencia aislada de 1/15.000 y


asociada a cromosomopatías de 1/5.000, siendo incom-
patible con la vida, aunque se han encontrado casos de
supervivencia superior a los 12 meses.

Agenesia del cuerpo calloso

La formación del cuerpo calloso finaliza a las 11 sema-


nas. Cuando éste se halla ausente se produce un despla-
zamiento lateral y craneal de los ventrículos laterales en
“alas de murciélago”. Define una malformación de etiología
genética multifactorial donde no se descartan factores te-
ratogénicos, detectándose una tendencia incidental no es-
tadísticamente significativa en madres con síndrome comi-
cia. Los hábitos tóxicos como alcohol, drogas, incluidas
preferentemente las de síntesis, y agentes infecciosos for-
man parte de los elementos causantes de esta patología.
Su incidencia se establece alrededor del 5/1.000 y del
7/1.000 cuando forma parte de complejos sindrómicos o
cromosomopáticos.
El diagnóstico prenatal de esta malformación es, al
igual que otras del SNC, difícil y comprometido, dado que
estas agenesias pueden ser parciales o totales, por lo que
Figura 15. Holoprosencefalia alobar. Sistema ventricular único el diagnóstico es la mayoría de las veces de presunción a
asociado a malformaciones axiales de la cara. través de los signos indirectos asociados; Entre éstos: ho-
rizontalización de circunvoluciones cerebrales, ausencia
del cavum del septum pellucidum, ya que tienen un origen
cias cromosómicas, como el síndrome de Patau (T-13) o a embriológico simultáneo, ventriculomegalia de predominio
una alteración genética (autosomica recesiva o ligada al en astas posteriores, estable y de irrupción cercana a la 20
cromosoma X). También puede ser secundaria a acción de semanas, y agenesia de la arteria pericallosa (Figura16).
teratógenos.
Secuencia Dandy-Walker
Existe un espectro de mayor a menor gravedad, con
tres tipos de holoprosencefalia: Consiste en una dilatación del IV ventrículo que co-
• Alobar. Existencia de un ventrículo único, que se abre munica ampliamente con un quiste de fosa posterior,
a un quiste a nivel occipital, con fusión de tálamos y au- con agenesia o hipoplasia del vermix cerebeloso. La
sencia de cuerpo calloso, por ausencia de cisura inter- existencia de formaciones quísticas, asociadas o aisla-
hemisférica. das, ubicadas topográficamente en la porción posterior

• Semilobar. Ausencia parcial de la cisura interhemisféri-


ca en su tercio anterior, con presencia de ventrículo
único en las secciones frontales y surco central en re-
gión posterior que separa dos hemisferios.
• Lobar. Existe segmentación diencefálica pero asociada
a agenesias parciales de estructuras interhemisféricas;
agenesia del cuerpo calloso, septum pellucidum no vi-
sible, por lo que se aprecian dos hemisferios únidos
por un puente de tejido cortical.
Generalmente estas malformaciones suelen formar
parte de un complejo sindrómico más extenso donde des-
tacan las alteraciones de fusión en la línea media corporal,
Figura 16. Agenesia del cuerpo calloso. Signos indirectos:
sobre todo de la cara: labio leporino, hendidura palatina, horizontalización de circunvoluciones cerebrales, ausencia del
ciclopia, etc. (Figura 15). cavum, ventriculomegalia estable.

1021
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

Esquizoencefalia

Caracterizada por la presencia de depresiones en “ha-


chazo” en las cisuras hemisféricas e intercircunvoluciones
cerebrales. Generalmente son bilaterales y simétricas,
afectando preferentemente al área rolándica. Estas depre-
siones pueden a veces, en función de su tamaño, ser de-
tectadas ecográficamente, no siendo infrecuente su aso-
ciación a otras malformaciones del SNC.

Megalencefalia

Figura 17. Megacisterna magna, alteración en la morfología


Se trata de una macrocefalia idiopática. Existe una im-
cerebelosa. Sospecha ecográfica de secuencia Dandy-Walker. pronta frontal que recuerda al cráneo en trébol o turricefa-
lia. Su asociación a macrosomías límites debe hacer pen-
sar en Síndrome de Soto.
del cerebelo, con aumento o deformación de la cisterna
magna, definen la sospecha prenatal del síndrome de Tumores
Dandy-Walker, malformación que debe su origen a alte-
Son variados en cuanto a su forma, ecoestructura y to-
raciones estructurales del romboencéfalo en fases pre-
pografía. Dependen del tipo histológico para establecer su
coces de la gestación.
gravedad. Son frecuentes sus asociaciones a otras patolo-
Su forma aislada tiene una incidencia relativamente ba- gías tumorales extraneurológicas, como los rabdomiomas
ja: 1/25.000-1/30.000, pasando desapercibidas en mu- cardíacos, constituyendo tumores en este caso tipo ha-
chos casos durante la vida de los afectos, siendo un ha- martomas, por lo que debe sospecharse una esclerosis tu-
llazgo casual (quistes aracnoideos). Sin embargo las berosa de implicaciones variables (síndromes convulsivos
formas asociadas a otras malformaciones o cromosomo- etc..).
patías llegan desde un 15% hasta un 70% de los casos.
La mayoría de los tumores desencadenan desestructu-
Toda cisterna magna aumentada, alteración en la mor- ración habitual de la normal arquitectura cerebral, pudien-
fología cerebelosa y/o la presencia de quistes retrocerebe- do provocar edema cerebral o hidrocefalia. Salvo en los
losos definen la sospecha prenatal de esta patología (Figu- casos de los hamartomas, donde es posible la involución
ra 17). espontánea de los mismos, la mayoría de los tumores son
En estadios avanzados se acompaña de desplaza- teratomas, con un pronóstico perinatal infausto (Figura 19).
miento craneal del tentorio y de hidrocefalia, pero a princi- Dentro de los tumores histológicamente benignos nos
pio del segundo trimestre puede que sólo se manifieste la encontramos con los papilomas de plexos coroideos, uni-
hipoplasia del vermix, la dilatación del IV ventrículo y el laterales y desencadenantes de hidrocefalias asimétricas
quiste de fosa posterior. y/o comunicantes. Tienen un mal pronóstico perinatal. Sin
embargo los tipos histológicos más frecuentes son los te-
Otras anomalías cerebrales (miscelanea)

Lisencefalia

Ausencia total (agiria) o parcial de las circunvoluciones


cerebrales (anomalía de la maduración y migración neuro-
nal). Se acompañan de otros cuadros malformativos (mi-
crocefalia, hidrocefalia), constituyendo una malformación
de muy difícil detección, solo sospechada ante la presen-
cia de otras malformaciones y siempre por exploración
ecográfica transvaginal (Figura 18).
Se clasifica en: Tipo I: inversión de la relación entre
substancia gris y blanca y córtex anómalo en 4 capas; Ti-
po II: obliteración del espacio subaracnoideo por neuronal
Figura 18. Lisencefalia: Ausencia parcial de circunvoluciones
y células gliales y córtex caótico con múltiples nódulos (Agiria parcial). Ventriculomegalia estable y precoz, suele asociarse
neuronales; Tipo III: microencefalia y agiria/paquigiria. a microcefalia.

1022
DIAGNÓSTICO ECOGRÁFICO DE LAS MALFORMACIONES FETALES

Hidranencefalia

Formación quística masiva que no permite distinguir la


arquitectura cerebral, salvo estructuras subhipotalámicas,
cerebelo y troncoencéfalo. Cuadros hemorrágicos intrapa-
renquimatosos o disrupción vascular carotídea son habi-
tualmente los causantes de este cuadro. Cuando estas le-
siones quísticas afectan parcialmente al parénquima
cerebral se denomina porencefalia.
Las malformaciones vasculares, salvo el aneurisma de
la vena de Galeno que por su notoriedad y ubicación no
Figura 19. Tumor cerebral. Desestructuración de la arquitectura
plantea conflicto diagnóstico si además nos ayudamos del
cerebral, heterogeneidad y edema. Doppler pulsado, pasan desapercibidas la mayoría de las
veces. La búsqueda intencionada de vasos arterio-veno-
sos en otras malformaciones del SNC, nos puede aportar
ratomas, astrocitomas, PNET, papilomas de plexos coroi- datos y experiencia en cuanto a la detección de estas
deos y ependimomas. Otros descritos, pero muy poco fre- anomalías vasculares fuera del ámbito del seno longitudinal
cuentes, son los glioblastomas multiformes, oligodendro- superficial y profundo, anastomosados por la referida vena
gliomas o tumores meningeos. de Galeno.

Hemorragias cerebrales La presencia, con angio-Doppler, de plexos vasculares


inhabituales en el parénquima cerebral puede permitirnos
Pueden ubicarse en cualquier área del cerebro, provo- detectar otras anomalías arteriovenosas cerebrales prena-
cando en la mayoría de las veces problemas de drenaje ce- talmente (Figura 21).
falorraquídeo. La historia materna frecuente de trombocito-
penia inmunológica, corticoterapias masivas y prolongadas, Quistes de Plexos Coriodeos
entre otras, pueden ayudar a la sospecha de hemorragia in-
Habitualmente utilizados como marcador de cromoso-
traventricular, Suelen observarse masas ecogénicas aisla-
mopatía (T21,T18), pero hoy en día, y tras exhaustivas se-
das dentro de uno o los dos ventrículos laterales donde la
ries estudiadas, se admite que su trascendencia como re-
hidrocefalia es igualmente frecuente.
ferente de patología genética es similar a 1/470
La presencia de masas intraparenquimatosas defini- probabilidades en relación al síndrome de Edwards. Por
das, con ecoestructura homogénea y a veces fluctuantes, tanto no tiene la misma sensibilidad que otros marcadores
deben hacernos pensar en la existencia de una hemorragia más específicos como el pliegue nucal, aunque sí debe
cerebral. Las hemorragias masivas tienen un mal pronósti- servir de alerta para la búsqueda de otras asociaciones
co perinatal (Figura 20). que justifiquen técnicas invasivas de confirmación.
Se presentan como formaciones quísticas ovoideas,
sin otra trascendencia clínica, teniendo una aparición

Figura 21. Distribución anómala de plexos vasculares a nivel


Figura 20. Hemorragia cerebral intraparenquimatosa masiva pericalloso. Hallazgos que hacen sospechar malformaciones
que provoca hidrocefalia externa o no comunicante. arteriovenosas intraparenquimatosas.

1023
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

Entre los defectos del tubo neural, el 5% corresponde


a encefalocele, provocado por un defecto de cierre de la
calota craneal.
Existe un amplio espectro de trastornos morfológicos
agrupados como defecto del tubo neural.

Anencefalia

Ausencia craneal (acrania) y cerebral simultánea susti-


tuída por una masa de tejido conectivo-vascular. La falta
de calota craneal provoca una imagen hosca facial, donde
sobresalen los bordes orbitarios de forma prominente, el
exoftalmus edema palpebral y nariz aguileña confieren la
característica imagen de esta anomalía (Figura 23).

Exencefalia

Herniación total del cerebro (generalmente displásico)


ante la ausencia de bóveda craneal y piel epicraneal. La
imagen ecográfica muestra una estructura cefálica que re-
cuerda un gorro frigio.
La exencefalia, ante la agresión del medio amniótico,
Figura 22. Quistes de plexos coroideos anómalos (imagen desencadena evolutivamente una paulatina desestructura-
superior). El volumen, morfología irregular y asimetría configuran
ción del cerebro, siendo imposible determinar alrededor de
la sospecha de patología asociada. En la foto inferior quiste de
plexo coroideo único o bilateral, transitorio, sin expresión de las, 15 semanas si nos encontramos ante esta patología o
riesgo cromosómico. una anencefalia (Figura 24).

transitoria hasta la 20-22 semanas de gestación. Las for-


mas irregulares, con paredes internas y superiores a 3
cm de diámetro, pueden constituir otros procesos de
mayor entidad clínica (adenomas, teratomas etc...) (Figu-
ra 22).

Malformaciones del tubo neural


El cierre del tubo neural se completa al final de la 4ª se-
mana de desarrollo. Los defectos del tubo neural (DTN),
presentan una frecuencia del 1,2/1.000 recién nacidos vi-
Figura 23. Anencefalia, ausencia de calota craneal y
vos. La espina bífida y la anencefalia presentan una inci- desproporción de los diámetros orbitarios.
dencia similar, constituyendo las malformaciones más co-
munes de los DTN.
La anencefalia es una malformación letal y la espína
bífida ofrece un variado polimorfismo clínico en cuanto a
su gravedad, la cual depende de su extensión y topo-
grafía. El 80% del síndrome espina bífida se presenta
con lesiones abiertas, produciéndose la salida de tejido
neural en contacto directo con el líquido amniótico. Es-
tas formas tienen un peor pronóstico en cuanto a la mor-
bilidad (disfunción neurológica periférica, invalidez, in-
continencia de esfínteres, hidrocefalias etc...). Las
formas cerradas se enmascáran, siendo más difícil el Figura 24. Exencefalia, Herniación total del cerebro a la cavidad
diagnóstico ecográfico. amniótica.

1024
DIAGNÓSTICO ECOGRÁFICO DE LAS MALFORMACIONES FETALES

Figura 25. Iniencefalia. Defecto complejo que asocia malrotación espinal, DTN y exonfalias (diagnóstico realizado en el año 1980, en nuestra unidad).

Iniencefalia Encefalocele

Defecto de cierre complejo, donde se asocian malrota- Fenómeno herniario de cerebro y cubiertas meníngeas.
ciones espinales, hiperlordosis con escoliosis, DTN y de- Las ubicaciones más frecuentes son las occipitales, exis-
fecto occipital. Son frecuentes las malformaciones tipo tiendo otras formas topográficas menos frecuentes, como
exonfalias (gastrosquisis u onfalocele). Es una malforma- la frontal preferentemente supranasal, y las formas latera-
ción incompatible con la vida (Figura 25). les (Figura 26).

Meningocele

DTN que afecta al cierre espinal con salida de las cu-


biertas meníngeas.

Mielomeningocele

En este caso el defecto se acompaña de herniación de


la médula espinal y cubiertas meníngeas.
El diagnóstico ecográfico de los DTN debe basarse en
una exploración pormenorizada de la columna vertebral en
cortes transversales, donde tendremos que detectar los
tres puntos de osificación de los mismos, y también una vi-
sión longitudinal de la misma.
Las imágenes en “V” de los cuerpos vertebrales deben
servir como dato de sospecha, como mínimo de espina bí-
fida. La determinación de acetil colinesterasa en líquido
amniótico es un marcador patognomónico de DTN, sobre
todo si se relaciona con las concentraciones habituales de
butiril colinesterasa, lo cual permite deslindar una exonfalia
de un DTN genuino (Figura 27).

Malformación de Arnold Chiari

Existen tres tipos. La que se asocia a mielomeningoce-


Figura 26. Encefalocele, herniación occipital del cerebro y le y que se encuentra frecuentemente en patología fetal es
cubiertas meníngeas (forma más frecuente). la tipo II. Consiste en la herniación de laminillas cerebelo-

1025
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

Hipertelorismo.

Se encuentra asociado a síndromes. Característico en


el síndrome de Smith- Lemli- Opitz asociado a otras ano-
malias faciales, cardiopatias y genitales ambiguos secun-
dario a una alteración molecular a nivel del colesterol.

Micro-Anoftalmia.

Puede ser uni o bilateral y se asocian con síndromes


genéticos

Alteraciones nasales

Arrinia o probóscide en los defectos de linea media

Fisura labiopalatino

Puede ser aislada o formar parte de múltiples síndro-


mes genéticos (cromosómicos o no). El central se suele
acompañar de holoprosencefalia

Micro-retrognatia

Se asocia a síndromes genéticos, cromosomopatías o


teratogenia
Figura 27. Raquisquisis y mielomeningocele.

MALFORMACIONES DEL TORAX


sas al canal espinal y alargamiento del tronco, a los que
puede asociarse hidrocefalia. Generalmente son multifac- Las alteraciones del pulmón fetal se presentan con una
toriales y se asume que hay un componente genético co- incidencia media de 1/3.000-1/4.000 recién nacidos vivos.
mo factor de riesgo. Si se analizaran los casos de éxitus intrauterino y necrop-
sias embriofetales en casos de polimalformaciones detec-
tadas por debajo de la 22º semana, esta incidencia au-
MALFORMACIONES mentaría sensiblemente (1/2.500).
CRANEO-FACIALES A pesar de la prevalencia relativamente baja de la pa-
tología pulmonar fetal, la trascendencia de la mayoría de
El cribado de la anomalias faciales incluye la visualiza-
estas nosologías la sitúan en el grupo de las malformacio-
ción de morfología y mineralización de bóveda craneal,
nes de gran compromiso vital, por este motivo debe tener-
ambas órbitas y cristalinos, rastreo del labio superior, y
evaluación del perfil fetal, intentando identificar párpados,
pabellones auriculares, lengua, maxilar inferior y superior, Tabla 4. Malformaciones del tórax en el diagnóstico prenatal.
mandíbula, raiz nasal y filtrum.
• Hernia diafragmática congénita
Craneosinostosis • Enfermedad adenomatosa quística pulmonar
• Secuestro pulmonar
Es el cierre precoz de fontanela con anomalía craneal. • Quiste broncogénico
Puede ser aislada o asociada a síndromes como: • Atresia bronquial
• Atresia traqueal
– Síndrome de Crouzon: anomalia craneal con abomba-
• Fístula traqueoesofágica
miento frontal, hipertelorismo, implantación baja de pa-
• Enfisema lobar congénito
bellones auriculares.
• Derrame pleural
– Síndrome de Apert (acrocefalosindactilia): displasia • Tumores
facial con abombamiento frontal, depresión de puen- – Teratomas
te nasal, asimetría orbitaria, sindactilia de manos y – Metástasis
pies. – Higromas

1026
DIAGNÓSTICO ECOGRÁFICO DE LAS MALFORMACIONES FETALES

se muy claro el tipo de lesión detectada y las implicaciones


futuras en la calidad de vida del neonato. Son muchas las
consecuencias derivadas de las lesiones congénitas a nivel
del parénquima pulmonar, abarcando un espectro que va
desde la hipoplasia, a graves fenómenos compresivos vas-
culares, mediastínicos, deglutorios y otras disfunciones di-
gestivas en general.
Las patologías prenatales que ofrecen una mayor inci-
dencia sobre el pulmón fetal se resumen en la Tabla 4.

Hernia diafragmática congénita

Anomalia del desarrollo diafragmático con paso de las


vísceras abdominales a la cavidad torácica. Las visceras
herniadas más frecuentes son el intestino, el estómago y el
hígado. En la mayoría de los casos se compromete el dia-
fragma izquierdo y puede tratarse de una alteración aisla-
da o asociada a síndromes genéticos y cromosómicos. Si
se mantiene una reminiscencia del diafragma en ausencia
de algunas de las capas musculares, da lugar a la hernia
con saco, denominada eventración.

Datos generales
• Frecuencia 1/3.000. Figura 28. Hernia diafragmática derecha (la menos frecuente,
5%), asociada a levocardia por compresión mediastínica.
• 95% unilateral.
• 90% afecta a hemitórax izquierdo.
Enfermedad adenomatosa quística pulmonar
• 25% asociada a cuadros polimalformativos y/o cromo-
somopatías. Se trata de un tipo de displasia pulmonar producida
por la interrupción de la diferenciación de los componentes
Signos ecográficos de sospecha histológicos en un momento preciso del desarrollo embrio-
nario. Actualmente la malformación Adenomatoidea Quísti-
• Masa torácica. ca se considera una anomalía quística de las vías respira-
• Dextrocardias (Desviación cardiaca más frecuente). torias. Desde un punto de vista de diagnóstico prenatal
ecográfico se detectan tres tipos en función del tamaño de
• Imágenes quísticas intratorácicas.
los quistes. Sin embargo la clasificación anatomo-patológi-
• Defecto diafragmático (patognomónico). ca propuesta por Stocker en 1998 considera cinco tipos
(0-4).
• Imagen gástrica intratorácica.
Datos generales
Signos de mal pronóstico prenatal
• Frecuencia 1/4.000.
• Polihidramnios.
• La forma más frecuente es la variedad típica que se ca-
• Diámetro o circunferencia abdominal inferior el percen-
racteriza por:
til 5% de la media.
– Formar parte del grupo de los Hamartomas.
• Desviación-ascenso hepático.
– Unilateral.
• Hernia bilateral. – Afecta a un lóbulo o a un segmento pulmonar co-
• Hernia diafragmática derecha (5% de incidencia) (Figu- mo máximo.
ra 28). – Originado por un crecimiento adenomatoso de los
bronquiolos terminales.
• Pruebas de madurez pulmonar deficitaria en relación
a la edad gestacional (valorable desde las 34 sema- – Desencadena una Hipoplasia Alveolar.
nas). – Inmadurez/disfunción pulmonar en el área afecta.

1027
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

Figura 29. Enfermedad adenomatosa quítica pulmonar tipo I (quiste aislado).

Figura 30. Enfermedad adenomatosa quística pulmonar tipo II, múltiples quistes y áreas hiperecogénicas periféricas.

1028
DIAGNÓSTICO ECOGRÁFICO DE LAS MALFORMACIONES FETALES

La característica anatomopatológica de la enfermedad una incidencia de cromosomopatías mayor. El polihi-


adenomatosa quística pulmonar, en cualquiera de sus va- dramnios es prácticamente una constante en estos casos
riedades, son los quistes a nivel de bronquiolos terminales, (Figura 30).
los cuales desencadenan una hipoplasia en los alvéolos
El Tipo III es la forma macroscópica definida como sólida,
vecinos por compresión. Incluso la forma considerada ma-
apareciendo una masa hiperecogénica de extensión variable
croscópicamente como sólida, está constituida por múlti-
en el campo pulmonar fetal. Su frecuencia es significativa-
ples formaciones microquísticas.
mente menor en relación a las otras dos variedades (5%). El
mayor inconveniente de esta forma es que, a pesar de lo lla-
Variedades
mativa que puede ser la hiperecogenicidad pulmonar, puede
• Tipo I (Variedad macroquística). pasar desapercibida, teniendo en cuenta además que su ex-
• Tipo II (Variedad microquística). tensión suele ser mayor que las otras dos formas. Sus impli-
caciones son igualmente más graves (Figura 31).
• Tipo III (Variedad sólida).
Secuestro pulmonar
Características morfológicas y ecográficas
Anomalia del desarrollo de una porción de pulmón que
El Tipo I se caracteriza por presentar formaciones quís- se desarrolla sin conexión con las vías respiratorias. El
ticas de gran tamaño entre 2 y 10 centímetros. Estos quis- aporte sanguíneo se lleva a cabo directamente desde la
tes están a su vez rodeados de otros satélites más peque- aorta mediante un vaso sistémico pulmonar. Suele ser una
ños. No desencadenan enfermedad sistémica fetal y tiene alteración aislada situada en lóbulos inferiores.
en general un buen pronóstico. Representa la variedad
más frecuente (59%), y en algunas ocasiones aparecen co- Aspectos generales
mo quistes únicos aislados (Figura 29).
– Desarrollo de una porción de parénquima pulmonar
El Tipo II presenta formaciones multiquísticas de diá- aislado sin conexión a las vías aéreas.
metro inferior a un centímetro, siguiendo en frecuencia
– Frecuencia 5%.
(40%) al Tipo I. Esta forma suele asociarse a displasias
nefrourológicas (riñones en esponja). En aquellos casos – Morfología generalmente tumoral.
en que la renomegalia comprime grandes vasos, desen-
– Características ecogénicas.
cadena hidropesía fetal, con pronóstico sombrío y con
– Topografía variable, incluso extratorácica.
– Preferencia: Bases pulmonares o cúpulas diafragmáti-
cas en la variedad extralobar.

Variedades
Variedad Extralobar, la menos frecuente (25%). Se ca-
racteriza por la existencia de pleura envolvente que aísla a
la porción secuestrada del resto del pulmón indemne. Tie-
ne peor pronóstico clínico.
Variedad Intralobar (75%), la porción anómala secues-
trada es intrapulmonar, es decir se ubica dentro del mismo
campo pulmonar sano y, por tanto, rodeada de parénqui-
ma. Esta forma siempre es intrapulmonar, mientras que la
extralobar puede situarse topográficamente en otras áreas
anatómicas, incluso en el abdomen.

Datos ecográficos
– Difícil diagnóstico al menos de sospecha.
– Formación redondeada muy ecogénica.
– Ubicada en bases pulmonares o subdiafragmáticas.
Figura 31. Enfermedad adenomatosa quística tipo III: Micro- – Vascularización proveniente directamente de la aorta y
quistes no visibles que provocan hiperecogenicidad pulmonar. no de los vasos pulmonares.

1029
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

Datos ecográficos
– Formación quística aislada (90%).
– Ubicación central mediastínica.
– Los casos visibles muestran un diámetro entre 0,5 y 1
centímetro (Figura 33).

Atresia bronquial
Malformación de escasa incidencia hasta el punto de
constituir una rareza clínica prenatal.

Apectos generales
– En función del número de bronquios atrésicos, el cam-
po de afectación del parénquima pulmonar va a variar
en cuanto a su extensión.
– Pueda afectar a cualquier segmento pulmonar.
– La ubicación más frecuente es el lóbulo superior iz-
quierdo.

Figura 32. Secuestro pulmonar en su forma extralobar, ubicada


en el abdomen fetal.

– Es frecuente su asociación a otras malformaciones


(cardiopatías, hernias diafragmáticas, sobrecarga de
cavidades derechas etc.) (Figura 32).

Quiste broncogénico
Se origina a partir de los restos embrionarios durante la
fase de formación de los bronquios principales. Práctica-
mente el 50% de las patologías pulmonares prenatales, ex-
cluyendo las displasias, corresponden a quistes broncogé-
nicos.

Aspectos generales
– Difícil diagnóstico prenatal, pasando desapercibidos en
más de 80% de los casos dependiendo del tamaño.
– Topografía mediastínica frecuente.
– Asociados en el contexto de otras malformaciones pul-
monares: secuestros, enfermedad quística adenoma-
tosa, derrame pleural, etc.
– Complicaciones neonatales evolutivas, si no se diag-
nostican: hipertensión pulmonar, neumotórax espontá-
neo, obstrucción bronquial, bronquitis de repetición,
etc.
– Existen variedades cuyas complicaciones debutan en Figura 33. Quiste broncogénico, formación quística mediastínica
la edad adulta. de aspecto sacular.

1030
DIAGNÓSTICO ECOGRÁFICO DE LAS MALFORMACIONES FETALES

Figura 34. Atresia bronquial. Hiperecogenicidad pulmonar asociada a atresia bronquiolar, hiperecogenicidad que afecta a uno varios lóbulos
pulmonares. Plantea dificultades diagnósticas con la enfermedad adenomatosa quística pulmonar tipo III.

– La forma más grave, incompatible con la vida, es la En algunos casos puede involucionar en cuanto a su
atresia traqueal, que implica ausencia total de desarro- volumen en el transcurso gestacional.
llo pulmonar dando una imagen de hepatización.
Difícil diagnóstico diferencial con la atresia bronquial (Fi-
Datos ecográficos gura 35).

– Masa ecogénica circunscrita y ubicada al lóbulo supe-


rior izquierdo, aunque menos frecuentemente pueden
detectarse a otros niveles.
– La atresia traqueal se sospecha indirectamente por la
presencia en la totalidad de los campos pulmonares
de una hiperecogenicidad manifiesta, muy llamativa.
Esta situación plantea conflicto diagnóstico con la va-
riedad Tipo III de la enfermedad adenomatosa quísti-
ca pulmonar, pero dado en ambos casos el infausto
pronóstico, el diagnóstico diferencial no es un dato
relevante.
– El polihidramnios suele ser una constante asociada (Fi-
gura 34).

Enfisema lobar congénito


Forma parte del conjunto de patologías prenatales ex-
cepcionales por su escasísima incidencia. No provoca sig-
nos de alteración homeostática fetal, pero sí durante el pe-
riodo neonatal, desencadenando distress respiratorio de
causa mecánica.

Datos ecográficos
Lo más frecuente es la aparición de una zona no bien
definida hiperecogénica dentro de una sección pulmonar,
Figura 35. Enfisema lobar congénito: área hiperecogénica no
pudiendo pasar desapercibida o bien sugerir una enferme- bien definida intrapulmonar. Difícil diagnóstico diferencial con la
dad adenomatosa quística pulmonar tipo III. atresia bronquial.

1031
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

(cardiopatías). La mortalidad global, teniendo en cuenta las


múltiples etiologías, oscila entre el 50% y el 90%.

Malformaciones cardíacas
Las malformaciones cardíacas han demostrado ser un
problema controvertido dentro de la eficacia del diagnósti-
co ecográfico, posiblemente sean conjuntamente a las os-
teoesqueléticas las malformaciones que plantean más
conflictos y compromisos diagnósticos por debajo de la
20-22 semanas de gestación.
La valoración del corazón fetal debe tener en cuenta
los siguientes hechos anatómicos diferenciales:
1. Horizontalización del eje largo.
2. Orientación derecha izquierda del referido eje (35%).
3. El corte de las cuatro cámaras se realizará en sección
transversal del tórax por este motivo.
4. El ventrículo derecho se adosa íntimamente al punto re-
troesternal.
5. La válvula mitral está discretamente ascendida en rela-
ción a la tricúspide.
Figura 36. Derrame pleural y sobrecarga vascular hepática.
6. El foramen oval (ostium secundum) reverbera hacia la
aurícula izquierda.
Derrame pleural 7. El ápex cardíaco se orienta en el mismo sentido de la
Por regla general los derrames pleurales constituyen ubicación gástrica.
nosologías asociadas al contexto de otras patologías que 8. Si trazamos una línea imaginaria entre el esternón y la
desencadenan afectación sistémica fetal (cardiopatías de columna vertebral que atraviese el corazón, esta debe
sobrecarga derecha), o bien en ciertas cromosomopatías, pasar por ventrículo derecho, aurícula izquierda y sec-
cuando el debut es precoz, por debajo de las 16 semanas ción transversa de la aorta descendente.
(Síndrome de Down, Turner etc.). No obstante, en algunas
circunstancias pueden debutar como patologías aisladas, 9. La musculatura papilar del ventrículo derecho es única
e incluso presentarse con una evolución esporádica (Par- y prominente.
vovirosis B19). En cualquier caso este fenómeno restrictivo 10. La musculatura papilar del ventrículo izquierdo es do-
va a tener graves implicaciones en el desarrollo madurati- ble, lateral y anterior (Figura 37).
vo y funcional pulmonar.
11. La raíz aórtica debe medir en sección transversa más
Datos ecográficos de 6 mm y el ventrículo izquierdo, al final de la diástole,
más de 9 mm a partir de las 28 semanas de gestación.
El diagnóstico suele ser sencillo. Imagen de ecogenici-
dad líquida que constriñe al pulmón produciendo una ima- Si se observan estos datos anatómicos, la exploración
gen en "luna menguante". Delimitación del área cardiaca de las cuatro cámaras sí constituye un elemento válido en
que puede verse facilitada por la coexistencia de derrame el cribado de malformaciones cardíacas, ya que la existen-
pericárdico. Polihidramnios frecuente (Figura 36). cia de otras anomalías (conotruncales, por ejemplo) que
obligarían a un análisis pormenorizado de las anastomosis
La punción evacuadora-diagnóstica permite mejorar
ventrículoarteriales y venoatriales, dan generalmente sig-
temporalmente el cuadro, ya que las recidivas son fre-
nos indirectos de sospecha, como ventriculomegalias, al-
cuentes, y establecer el origen del mismo. El estudio del lí-
teraciones del ritmo cardíaco, fibroelastosis endocárdica,
quido pleural puede utilizarse para realizar cariotipo con ex-
hipertrofias y/o defectos septales.
celente sensibilidad. Las derivaciones toracoamnióticas
obtienen resultados dispares. Datos de buen pronóstico: De cualquier forma, la inclusión de la visión de los trac-
unilateralidad, no asociado a cuadros polimalformativos tos de salida aórtico, pulmonar, arco aórtico y ductus arte-

1032
DIAGNÓSTICO ECOGRÁFICO DE LAS MALFORMACIONES FETALES

rioso, son un complemento inestimable en la evaluación La estenosis aórtica, mitral y la coartación aórtica for-
básica del corazón fetal. man parte del complejo sindrómico que afecta preferente-
mente a las cavidades izquierdas, salvo en los casos en
Las malformaciones estructurales del corazón las po-
que el ventrículo izquierdo tenga una función normal. Su
demos dividir en:
presencia prenatal ronda el 20% de todas las cardiopatí-
• Malformaciones del hemicardio izquierdo. as, y salvo que concomite una estenosis del foramen, las
• Malformaciones del hemicardio derecho. formas aisladas dan escasa semiología ecográfica, como
la hipertrofia ventricular derecha. Son tan extensos los
• Malformaciones conotruncales.
matices ecográficos a tener en cuenta para sospecha es-
Malformaciones del hemicardio izquierdo tas patologías, que habría que dedicar más de un capítu-
lo a la valvulopatía aórtica y del arco, así como a la este-
Incluye la hipoplasia del ventrículo izquierdo, estenosis nosis mitral.
aórtica, hipoplasia de la aorta ascendente, atresia-hipopla-
sia de la vávula mitral, hipoplasia de la aurícula izquierda, Malformaciones del hemicardio derecho
canal atrioventricular común.
Menos frecuentes que las del hemicardio izquierdo,
Constituye una de las formas más graves de obstruc- con menores implicaciones sobre el feto y mejor pronósti-
ción cardiaca prenatal y perinatal. co quirúrgico, aunque no por ello dejan de ser patologías
Los signos básicos que deben hacer sospechar esta graves y comprometidas.
patología son: Al igual que en las cardiopatías izquierdas, en las mal-
• Levocardia relativa. formaciones del corazón derecho, existen una serie de he-
chos concatenados que afectan a todas las estructuras
• Discrepancia interventricular.
que la integran:
• Ventriculización derecha del ápex.
• Discrepancia interventricular a favor del ventrículo iz-
• Desviación del septum interventricular hacia el ventrícu- quierdo (Figura 39).
lo izquierdo por hiperpresión de cavidades derechas.
• Estenosis de la vávula tricuspídea.
• Aumento de cavidades derechas.
• Insuficiencia tricuspídea. • Tracto de salida pulmonar menor que la raíz aórtica.

• Aorta ascendente disminuida y arteria pulmonar au- • Frecuentes los defectos septales interventriculares.
mentada. • Hipoplasia de la cava inferior/estenosis agenesia válvu-
• Signo de fibroelastosis endocárdica (Figura 38). la de Galeno.

Figura 37. Características anatómicas diferenciales del corazón fetal fisiológico.

1033
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

Existen otras patologías asociadas frecuentemente


como:
• Malformación de Ebstein: válvula tricúspide en paraca-
ídas por inserción baja, aurícula derecha aumentada,
ventrículo disminuido.
• Atresia/fibrosis valvular pulmonar.
• Tetralogía de Fallot: comunicación interventricular en la
pars membranosa, acabalgamiento aórtico sobre el se-
pum interventricular, estenosis pulmonar, dilatación
aórtica, ventrículo derecho dilatado.

Figura 39. Malformación del hemicardio derecho. Hipoplasia del


ventrículo derecho e hipertrofia septal.

Malformaciones conotruncales

Conjunto de patologías adscritas a los tractos de sali-


da ventriculoarteriales, produciendo una serie de datos
morfológicos y hemodinámicos de muy diversas índoles. El
corte ecográfico de las cuatro cámaras no ofrece el mismo
resultado diagnóstico en este tipo de patologías, siendo
necesario efectuar cortes precisos a nivel de la salida aór-
tica y pulmonar, así como de los arcos aórtico y ductal.
Las anomalías más comunes definidas en este grupo
de patologías son:
• Tetralogía de Fallot (definida anteriormente).
• Transposición de grandes vasos.
• Doble tracto de salida aórtico pulmonar del ventrículo
derecho.
• Tronco arterioso común.
• Defecto septal interventricular asociado a atresia pul-
monar.
Lógicamente estos defectos, definen una secuencia
determinada, sin embargo pueden formar parte o presen-
tar variaciones en función de su asociación a otras patolo-
gías cardíacas (coartación aórtica, malformación de tronco
supraaórtico, etc.) (Figura 40).

Transposición de grandes vasos

Imagen en escopeta de doble cañón correspondiente a la


salida paralela de la aorta y la arteria pulmonar. Salida del trac-
to aórtico del ventrículo derecho y la pulmonar del izquierdo

Doble tracto de salida aórtico-pulmonar


Figura 38. Datos morfológicos de hipoplasia del corazón
Aorta y pulmonar emergiendo del ventrículo derecho.
izquierdo. A: Ventriculización derecha del ápex, discrepancia
interventricular y levocardia relativa. B: Signos de estenosis Imagen de grandes arterias en escopeta de doble cañón.
aórtica. C: Signos de fibroelastosis endocárdica. Defecto septal.

1034
DIAGNÓSTICO ECOGRÁFICO DE LAS MALFORMACIONES FETALES

Tronco arterioso común MALFORMACIONES ABDOMINALES


Defecto septal interventricular, imagen de grandes ar- Las malformaciones abdominales en general, tanto
terias en “Y”, con tronco y válvula común (Figura 41). Hi- las del aparato digestivo como las exonfalias, tienen una
perecogenicidad valvular aórtica y a veces estenosis sub- incidencia variable según estén asociadas o no a cromo-
aórtica hipertrófica. somopatías o a otras malformaciones (1% al 10%). Entre
Para la exploración en general de estas y otras patolo- estas últimas, el onfalocele está relacionado con cromo-
gías de grandes vasos, debe servirnos de referencia a ni- somopatías y tiene una incidencia cercana al 50% si se
vel del arco aórtico la presencia de los tres vasos del trac- asocia a otras malformaciones estructurales. La gastros-
to supraaórtico, estos constituyen de manera inequívoca, quisis no representa un riesgo potencial de cromosomo-
la principal referencia topográfica de la aorta para ecogra- patía.
fistas polivalentes no dedicados específicamente a la eco-
Como sabemos, hasta la semana 12º de gestación,
cardiografía fetal (Figura 42).
se observa un hecho transitorio en la pared abdominal
embrionaria: la existencia de una hernia intestinal fisioló-
gica a través del propio punto de inserción umbilical. A
partir de esta edad gestacional, todo contenido visceral
intraabdominal en la cavidad amniótica debe considerar-
se patológico.

Malformaciones de la pared abdominal


Dentro de las exonfalias nos encontramos con dos no-
sologías básicas: el Onfalocele y la Gastrosquisis.

Figura 40. Malformación del arco aórtico: Tronco supra aórtico


Onfalocele
único.
Disrafia de pared abdominal anterior a nivel de la línea
media, en el mismo punto topográfico de la inserción funi-
cular. Este hecho provoca una eventración de vísceras ab-
dominales dentro del propio desarrollo umbilical. Las vís-
ceras se encuentran rodeadas, en primer lugar, por el
peritoneo parietal y visceral y, en segundo lugar, y más ex-
ternamente por la cubierta amniótica funicular. La grave-
dad y trascendencia de esta anomalía depende de la ex-
tensión de la falla parietal, del volumen y de las visceras
incluidas en el saco herniario.
Por regla general el contenido visceral corresponde a
hígado, estómago e intestino. En este caso la notoriedad
Figura 41. Tronco arterioso común: imagen hemodinámica en
“Y”, saliendo del ventrículo derecho. del proceso hará fácil su diagnóstico, mientras que si so-
lo se produce herniación intestinal, este diagnóstico va a
ser más comprometido en función de su volumen. El on-
falocele suele ser una patología que no cursa de forma
aislada, sino en el contexto de una secuencia polimalfor-
mativa compleja y/o cromosomopatías. Hasta un 90%
de los onfaloceles forman parte de síndromes abigarra-
dos.

Datos ecográficos frecuentes

– Masa herniaria abdominal de línea media anterior.

Figura 42. Detalle anatómico de la aorta transversa y tronco – Contenido de vísceras variable (hígado, estómago,
supraaórtico fisiológico. asas intestinales).

1035
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

A diferencia del onfalocele, el contenido herniado co-


rresponde a tracto intestinal, más frecuentemente intestino
delgado. No afecta a la inserción funicular.

Signos ecográficos frecuentes


– Asas intestinales sobrenadando en cavidad amniótica.
– Punto herniario pararrectal derecho en el 92% de los
casos.
– No afecta a la inserción funicular.
– A veces puede existir una gran falla estructural provo-
Figura 43. Onfalocele. cando salida hepática (excepcional).
– Interesa a todas las estructuras de la pared abdominal:
peritoneo parietal, músculo, aponeurosis y piel.
– Compromete el trayecto funicular por donde se expan-
de. – Son frecuentes las peritonitis, engrosamiento intestinal
periférico, dilatación de asas postestenóticas, fistulas
– Rodeado de membrana amniótica y peritoneal. intestinales. La presencia de marcadores en líquido
– No existen datos de engrosamiento peritoneal por no amniótico es patognomónicos.
haber contacto con el líquido amniótico. – Aisladamente tienen buen pronóstico y solución quirúr-
– No existe riesgo de fístulas intestinales. gica. No se asocia a cromosomopatías (Figura 44).

– Polihidramnios frecuente Otras patologías, ya complejas, como la extrofia vesi-


cal, donde al defecto parietal se le acompaña la apertura
– Polimalformaciones asociadas: cardiopatías, malforma- vesical en contacto directo con la cavidad amniótica, sín-
ciones del SNC, malformaciones esqueléticas (90%).
– Cromosomopatías asociadas (T13, T18, T21, por este
orden) 12-18%.
– Mal pronóstico prenatal-perinatal con una mortalidad
superior al 80% (Figura 43).

Gastrosquisis

Evisceración intestinal a través de un defecto de la pa-


red lateral, generalmente derecha de un cordón umbilical
normal. Suele ser esporádica.
Disrafia de la pared abdominal, que generalmente afec-
ta a las áreas pararrectales, con predomino del área para-
rrectal abdominal derecha. Esta falla estructural interesa a
todas las estructuras parietales del abdomen, por lo que se
produce una salida directa del contenido visceral a la cavi-
dad amniótica, poniéndose en íntimo contacto con el líqui-
do amniótico. No es infrecuente por este motivo (hasta un
30% de los casos), que se produzcan signos de peritonitis
irritativa amniótica, perforaciones intestinales y otras com-
plicaciones que ensombrezcan el pronóstico de fetos afec-
tos de esta anomalía.
La salida masiva de contenido intestinal y enzimas vis-
cerales (lipasas, proteasas, transaminasas, bilis etc.) es un
marcador patognomónico de perforación intestinal, al igual
que la presencia aumentada de AFP tanto en suero mater-
no como en líquido amniótico. Figura 44. Gatrosquisis.

1036
DIAGNÓSTICO ECOGRÁFICO DE LAS MALFORMACIONES FETALES

drome cloacal por defecto de diferenciación y conjunción ciones, madurando no solo los procesos digestivos de
mülleriana, y síndrome de Cantrell (onfalocele, cardiopa- aprovechamiento alimentario, sino el desarrollo ganglionar
tías complejas, hernia diafragmática, DTN y defectos facia- que permitirá la peristalsis normal. Sólo las situaciones de
les de conjunción) tienen una incidencia muy baja dentro estrés desencadenan crisis de relajación anal y salida ma-
de este contexto malformativo. siva de meconio.
Todo este proceso hace que el llenado paulatino, por
Malformaciones del aparato digestivo porciones descendentes, sea un mecanismo evidente y
Tienen una incidencia cercana al 1/10.000 recién naci- cronológicamente asociado a la edad gestacional.
dos vivos cuando se presentan de forma aislada, mejoran- Mientras los procesos atresiantes de porciones altas se
do el pronóstico perinatal. Sin embargo las formas asocia- acompañan precozmente (24-26 semanas) de polihidram-
das a otras malformaciones o cromosomopatías aparecen nios, los procesos obstructivos de intestino grueso hacen
con una incidencia media de 1/3.000. más patente y permiten la dilatación preestenótica, debu-
tando el polihidramnios más tardíamente.
Uno de los principales problemas que plantea es el ini-
cio funcional de los mecanismos peristálticos y de llenado Las consideraciones expuestas hacen que el diagnós-
en relación a la edad gestacional. Cuanto más inferior es el tico precoz de estas patologías sea realizado, salvo ex-
tracto intestinal, más tardíamente se pondrá en marcha la cepciones, por encima de la 22º semana.
peristalsis y por tanto más tardíamente se detectarán las
El polihidramnios más precoz, desde el punto de vista
anomalías.
cronológico, se desencadena en las patologías de la de-
A pesar de que existe conexión, por solución de conti- glución; Es decir en aquellas en las que está implicada la
nuidad anatómica, entre el orificio anal y el medio amnióti- función faríngea, ya sea por causa neurológica (anencefa-
co, el feto no realiza mecanismos de defecación intraútero, lias, encefaloceles, malformaciones del SNC en general), o
si no que va paulatinamente desarrollando el tubo digesti- por causas obstructivas (tumoraciones orales, teratomas
vo en sentido descendente, llenando paulatinamente el cervicales anteriores etc.) (Figura 45).
esófago, estómago, intestino delgado, intestino grueso y
Las anomalías digestivas más frecuentes se pueden
por último el sigma-recto. Gracias a ello realiza y entrena
enumerar en:
mecanismos de absorción y distensión en las distintas por-
Anomalías intestinales
• Atresia de esófago (incluyendo la atresia del cardias o
atresia esofágica distal).
• Atresia pilórica.
• Atresia duodenal genuina y/o extrínseca por páncreas
anular.
• Malrotaciones.
• Microcolon.
• Atresia anal.
• Peritonitis meconial (intestino hiperecogénico).

Anomalías viscerales
• Hepáticas.
• Esplénicas.
• Retroperitoneales en general.

Atresia de esófago
Datos clínicos-ecográficos
Figura 45. Patología de la deglución (arcadas). Asociación a • Frecuencia 1/3.000.
polihidramnios y ausencia de imagen gástrica. Sospecha
diagnóstica de disfunción faringea o atresia de esófago. • Mortalidad cercana al 80%.

1037
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

• Fecha gestacional de sospecha diagnóstica: 18-20 se- • Asociada a malformaciones del SNC, esqueléticas, re-
manas si no concomitan fístulas. nales y cardíacas (40%).
• Asociación a otras malformaciones (50%-60%). • Asociada a cromosomopatías (30%-40%). General-
mente T 21, en este caso provocada por una esteno-
• Asociación a cromosomopatías (70%).
sis extrínseca debido a páncreas anular o constrictor.
• Falsos negativos cercanos al 80%.
• Fecha de sospecha diagnóstica: 25 semanas.
Datos de sospecha ecográfica (10%)
Datos de sospecha ecográfica
• Polihidramnios.
• Polihidramnios (100%).
• CIR.
• Signo de la “doble burbuja”, dilatación gástrica y duo-
• Imagen gástrica no visible de forma constante. deno preestenótico, donde el istmo está provocado
• Regurgitación aumentada en frecuencia. por el esfínter pilórico (dato patognomónico).
• CIR: refuerza la sospecha de trisomía 21.
Inconvenientes diagnósticos
• Fístula traqueoesofágica. Inconvenientes diagnósticos

• Llenado gástrico visible (asociación a estenosis duode- No tiene.


nal y presencia de jugos gástricos). Las malrotaciones, microcolon, atresias bajas, in-
• Agastria-Microgastria (falsos positivos). cluidas las anales, tienen el inconveniente de irrumpir tar-
díamente, alrededor del final del segundo y principios del
Atresia de píloro tercer trimestre. Los signos asociados, como el polihi-
dramnios, son variables y la mayoría de las veces tardíos.
Datos clínicos-ecográficos
La incidencia de estas patologías está entre 1/8.000-
• Incidencia (1/1000.000), diagnóstico necrópsico. 1/20.000. Cuanto más baja sea la lesión mejor pronóstico
• Asociada a genodermatosis. quirúrgico, aunque no debemos olvidar que en el 5% de
los casos existe relación con cromosomopatías, preferen-
• Asociación a cromosomopatías: 5%.
temente, síndrome de Down así como con otras malfor-
• Fecha gestacional de sospecha diagnóstica: 20-22 se- maciones estructurales.
manas.
El dato ecográfico más significativo se sustenta en la
aparición de imágenes quísticas arrosariadas, dispuestas
Datos de sospecha ecográfica
linealmente a lo largo del tracto intestinal afectado, gene-
• Polihidramnios (100%). ralmente intestino grueso.
• Aumento de la frecuencia del bostezo fetal (paladeo-ar- La hiperecogenicidad intestinal preestenótica hablaría
cada). de un grave compromiso funcional del intestino teórica-
• Aumento del volumen gástrico. mente indemne, provocando impactación meconial.

• Ausencia de mecanismos de peristalsis gástrica ya que La fibrosis quística de páncreas puede asociarse a
se afectan la capacidad contráctil del antro pilórico y no cuadros de impactación meconial por déficit enzimático y
suele existir conducción. Hay que realizar el diagnósti- acumulo de detritus mucosos que espesarían el meconio
co diferencial con la estenosis hipertrófica de píloro habitual. Ecográficamente aparece, el marco cólico disten-
donde existe hiperperistaltismo. dido e hiperecogénico, manteniendo estable esta situación
indefinidamente (Figura 46).
Inconvenientes diagnósticos Dentro de las patologías viscerales más comunes po-
• Ausencia de estándar biométrico gástrico. demos resumir las hepáticas, esplénicas y/o retroperitoe-
nales en general, si bien estas últimas, por la entidad clíni-
• Asociación a atresias duodenales.
ca de sus procesos, merecerían una consideración
especial. Nefrouropatías y diversos procesos tumorales de
Atresia de duodeno
esta zona son un ejemplo claro de ello.
Datos clínico-ecográficos
La patología hepática prenatal más frecuente la cons-
• Incidencia variable: 1/5.000-1/10.000. tituyen los quistes, que se originan principalmente a ex-

1038
DIAGNÓSTICO ECOGRÁFICO DE LAS MALFORMACIONES FETALES

pensas de fallos en los sistemas de drenaje biliar o bien a La litiasis biliar es un cuadro más común de lo espe-
fallos mesenquimales sin afectación tisular. Generalmente rado en exploraciones rutinarias (40/1.000). Cuadros que
son aislados y carentes de complicaciones salvo cuando conlleven espesamiento biliar deben formar parte de la
tienen gran tamaño ya que puedan provocar fenómenos sospecha del clínico (eritroblastosis fetal, hemoglobinopa-
compresivos intraabdominales. tía paroxísticas de Di Giuglielmo, fibrosis quística de pán-
creas, etc...). Las formas aisladas tienen un curso hacia la
Los quistes del colédoco, o del conducto biliar co-
resolución espontánea prenatal, pero no se sabe las impli-
mún, suelen ser igualmente aislados y de características
caciones a largo plazo.
simples. Ciertos cuadros de agenesia biliar incompleta se
asocian a este tipo de patología quística (Figura 47). Las visceromegalias suelen observarse concomitan-
tes a procesos desencadenantes de hidropesías en gene-
Las formaciones sólidas, ecogénicas y de predominio
ral, tanto por fallo hemodinámico cardíaco derecho, como
topográfico en lóbulo derecho, suelen corresponder a he-
otros factores incidentes en la función hepática: infeccio-
mangiomas. Generalmente tiene un curso evolutivo hacia
nes (TORCH), metabolopatías (hiperglicinemia no cetósica,
la resolución espontánea, salvo que su origen tenga una
diabetes fetal congénita), y tumores en general.
base metastásica o neoplásica primaria, extremadamente
rara (Figura 48). La incidencia total de estas anomalías se Otras patologías abdominales, como los procesos
presenta alrededor de 1/20.000-1/25.000 recién nacidos quísticos retroperitoneales (mesentéricos), tienen su
vivos, en sus formas aisladas. origen en fallos en la diferenciación celular de los canalí-

Figura 46. Atresia duodenal, dilatación sacular de intestino delgado e impactación meconial. Todas estas patologías salvo excepciones irrumpen
después de la semana 24º. Debe descartarse cromosomopatía.

1039
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

Figura 49. Situs solitus: imagen cardiaca con ápex a la derecha


Figura 47. Quiste simple hepático. y cámara gástrica ubicada a la izquierda.

La discrepancia posicional entre las vísceras torácicas


bien orientadas y las abdominales son un hecho relativa-
mente frecuente y no tiene implicaciones en la integridad
fetal (1/10.000). Cuando la distorsión se produce a la in-
versa, la incidencia sube relativamente a 1/8.000 y, en es-
tos casos, la asociación a otras malformaciones es mayor,
entre ellas las cardiopatías. La referencia topográfica nos
dará la ubicación del ápex cardíaco en un sentido contra-
rio a la ubicación gástrica y hepática (Figura 49).

MALFORMACIONES
NEFROUROLÓGICAS
Se presentan con una incidencia del 34% dentro del
conjunto global de las malformaciones. Las formas malfor-
mativas aisladas representan un hallazgo del 32%, el 20%
se asocia a otro tipo de malformaciones complejas dentro
del propio aparato excretor, mientras que el 48% forma
parte de cromosomopatías y otros síndromes malformati-
vos extrarrenales.
El signo malformativo más evidente que obliga a por-
menorizar más detalladamente la exploración nefrourológi-
Figura 48. Formación sólida que corresponde habitualmente a
hemangiomas hepáticos, aunque debe descartarse patología ca es la hidronefrosis, la cual puede tener una etiología
neoplásica primaria o metastásica. obstructiva o bien estar asociada a los propios cambios
estructurales de la displasia parenquimatosa. Por este mo-
tivo, no siempre la dilatación pélvica corresponde a un pro-
culos linfáticos. Salvo que su tamaño dificulte el diag- ceso estenótico.
nóstico diferencial con otras patologías, la integridad de
El 13% de la patología malformativa nefrourológica pre-
la anatomía intraabdominal y su ubicación posterior, la-
senta únicamente una displasia corticomedular aislada sin
teralizada a la izquierda, así como su aparente cambio
otros signos asociados. Esto influye negativamente en su
de situación promovido por la motilidad intestinal y no
diagnóstico precoz.
por el proceso, harán sospechar este tipo de patologí-
as.Como en todo proceso quístico, el aumento de tama- La clasificación primordial de las malformaciones ne-
ño inusitado y el enrarecimiento ecoestructural, deben frourológicas debemos basarla, dado lo sinóptica y aplica-
ser considerados como factores de riesgo neoplásico o bilidad clínica, en los conceptos vertidos por E.L.Potter en
de complicación. 1972. Esta clasificación incluye los diferentes rangos de

1040
DIAGNÓSTICO ECOGRÁFICO DE LAS MALFORMACIONES FETALES

severidad concerniente a la displasia corticomedular, la Agenesia Renal


cual muestra grandes hechos diferenciales, así como la
patología quística, hipoplasia, agenesia y la patología deri- Detectable alrededor de la 12 semanas y confirmada
vada de los procesos obstructivos. en la 15º. El dato de sospecha de la agenesia bilateral es
el anhidramnios precoz. La ausencia de masas renales ob-
Se pueden dividir en tres grupos: servables, sí las suprarrenales, y la constante falta de diná-
1. Anomalia de posición y de forma: Ectopia cruzada, ri- mica de llenado y vaciado vesical son prácticamente pa-
ñón en herradura. tognomónicas. Incidencia: 1/5.000.

2. Hipoplasia renal y displasia con diferenciación metané- Es una patología incompatible con la vida, asociándo-
frica anómala. Son riñones pequeños a menudos aso- se además a la hipoplasia pulmonar de infausta trascen-
ciados a formaciones quísticas dencia en la función y madurez del mismo.
a) Hipoplasia segmentaria. La agenesia unilateral se presenta con una frecuencia
b) Displasia renal: lesión primaria que afecta todo el de 1/2.000, no tiene ninguna implicación en la morbilidad
tracto urinario. fetal y su diagnóstico prenatal resulta a veces difícil, ya que
no se piensa en ella. La ausencia de arteria renal ipsilateral
c) Hipoplasia displasia renal quística: frecuentemente a la agenesia es un dato que refuerza la sospecha diag-
asociado a malformaciones cardiacas o SNC. nóstica (Figura 50).
d) Displasia renal con riñón doble.
Potter tipo I: Enfermedad poliquística infantil
e) Displasia renal con obstrucción del tracto urinario.
f) Formas familiares de displasia renal. Incidencia: 1/14.000.

3. Enfermedad renal quística. Incompatible con la vida tanto en la forma prenatal co-
mo en la neonatal (un mes de supervivencia media, aunque
a) Quiste renal simple. existen casos de hasta un año).
b) Displasia renal con cambios multiquísticos (Tipo II y
Los criterios diagnósticos se basan en: renomegalia, hi-
IV de Potter).
perecogenicidad, indefinición capsular y múltiples quistes
c) Enfermedad poliquística: 1.Tipo adulto o III de Pot-
ter (autosómica dominante); 2.Tipo infantil o I de
Potter (autosómica recesiva), se asocia a riñón es-
ponja, quistes y fibrosis hepática.
d) Quistes medulares.
e) Quiste multilocular.
f) Quistes renales y síndrome malformativo múltiple.
El mayor inconveniente en el diagnóstico prenatal de
las nefrouropatías ocurre en los casos de displasia genui-
na sin otros datos morfológicos asociados y detectables
ecográficamente. Desde un punto de vista conceptual es-
ta anomalía presenta un riñón con anomalía total o parcial
de la diferenciación por la persistencia de tejido heterotó-
pico o indiferenciación estructural.
En función de nuestra capacidad diagnóstica, po-
dremos establecer el tipo de lesión y el grado de afec-
tación funcional renal prenatalmente, aunque este he-
cho presenta una gran dificultad. No debemos olvidar,
que en principio, sólo se justifica una actitud terapéuti-
ca prenatal en el contexto de las nefrouropatías, en
aquellos casos en que la función renal esté conservada,
y llegar a evaluar la normofunción renal es un hecho que
no está al alcance de todas las unidades de medicina
fetal. Figura 50. Agenesia renal.

1041
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

corticomedulares. Hay igualmente pérdida de definición Los datos más característicos vienen definidos por: re-
vascular y de la diferenciación corticomedular. nomegalia, quistes múltiples periféricos o subcorticales de
tamaño variable que deforman la superficie renal. Existe di-
El oligohidramnios se presenta frecuentemente, así co-
latación ureteral. Mientras las formas bilaterales son letales,
mo la ausencia de imagen vesical, siendo una constante en
la unilateral no tiene incidencias relevantes en la morbimor-
este tipo (Figura 51).
talidad fetal (Figura 52).
Potter tipo II: Displasia renal multiquística
Potter tipo III: Enfermedad poliquística juvenil o del
Incidencia 1/1.000 recién nacidos vivos. adulto
Es la forma más frecuente detectada en recién naci- Enfermedad de herencia autosómica dominante carac-
dos. Afecta generalmente a un solo riñón, aunque excep- terizada por la presencia de renomegalia, hiperecogenici-
cionalmente puede ser bilateral (1/10.000). dad, riñones irregulares parecidos al Potter tipo I aunque
más pequeños, pudiendo concomitar un euamnios o anhi-
dramnios. El diagnóstico se fundamenta cuando existe his-
toria familiar (Figura 53).

Potter tipo IV: Displasia secundaria a obstrucción


ureteral

La displasia renal, en este caso, está producida por


una severa y prolongada obstrucción, manifestando se-
cuelas parenquimatosas más tardíamente a lo largo de la
gestación. Si la obstrucción se inicia en fases precoces
desencadenará un riñón poliquístico. La obstrucción pue-
de ocurrir tanto a nivel pieloureteral como en la uretra.
Los datos ecográficos se resumen en: megavejiga, hi-
Figura 51. Potter tipo I. pertrofia vesical, megauréter, hidronefrosis bilateral, agene-
sia de rectos abdominales, oligohidramnios, CIR y en algu-
nos casos solo se afectan áreas segmentarias del riñón. El
caso más genuino viene determinado por el síndrome de
Prune Belly (Figura 54).

Diagnóstico ecográfico de las malformaciones


renales obstructivas.

El diámetro anteroposterior de la pelvis renal, en condicio-


nes fisiológicas, puede aparecer dilatado y medir menos de 5
mm entre la 15-19 semanas, 6 mm entre la 20-29 semanas y
8 mm entre la 30-40 semanas de gestación. La imagen vesi-
Figura 52. Potter tipo II. cal debe ser visualizada en todos los fetos, ya que incluso en
fase de micción, siempre queda orina residual intravesical.
Se define como hidronefrosis moderada o pielecta-
sia cuando el diámetro antero posterior supera las medi-
das antes reseñadas. Pueden observarse en algunas oca-
siones hidronefrosis transitorias en fases premiccionales,
siendo este un hecho asociado a la poliuria y a la macro-
somía fetal. Las hidronefrosis graves son fácilmente de-
tectables por ecografía, incluso en fases tan precoces co-
mo la 10º semana gestacional.
Todo cuadro hidronefrótico debe hacer pensar en un
proceso obstructivo, estenótico o malformativo complejo
asociado. En algunas ocasiones es difícil, hacer un diag-
Figura 53. Potter tipo III (renomegalia). nóstico diferencial con cuadros obstructivos extrarrenales

1042
DIAGNÓSTICO ECOGRÁFICO DE LAS MALFORMACIONES FETALES

(síndrome cloacal, imperforación anal etc...). Muchos cua- la misma. El problema que plantean estas patologías, es
dros, en los que se presentan dilataciones pélvicas asimé- que desgraciadamente la gravedad no está en relación al
tricas, corresponden a reflujos vesicoureterales por urete- grado de dilatación en todos los casos observados. Sin
roceles (Figura 55). embargo el adelgazamiento parenquimatoso y la pérdida
de estructuras caliciales, sí guarda relación con la disfun-
Dilatación calicial
ción renal, desencadenando severas alteraciones paren-
Cualquier cuadro que desencadene hipertensión en la quimatosas (displasias corticomedulares), o destrucción
pelvis renal retrógradamente, provocará una dilatación de del mismo.

Figura 54. Potter tipo IV.

Figura 55. Megavejiga, dilatación pelvica asimétrica por doble sistema ureteral, imagen tridimensional de vejiga persistente y ureterocele (formación
quística intravesical).

1043
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

morfológicos preestenóticos. En función del tipo de obs-


trucción y del tiempo transcurrido desde el inicio de la no-
xa, la dilatación del uréter puede tener dos formas básicas:
– Formas estáticas o rectilíneas, asociada a procesos
crónicos donde los mecanismos de lucha ya han fra-
casado (Figura 57).
– Formas dinámicas u ondulantes, debidas a mecanis-
mos peristálticos de lucha y por tanto pulsátiles (Figura
58).
Solamente el 25% de los casos de displasia renal pue-
den ser detectados ecográficamente cuando estas se pre-
Figura 56. Dilatación calicial con pérdida del parénquima. sentan de forma aislada. La patología hidronefrótica es en
cambio un marcador lo suficientemente patente como pa-
ra alertar al clínico. El estudio de la función renal (bioquími-
co, diuresis y Doppler) es hoy día el complemento funda-
mental para establecer el auténtico estado nefrourológico
prenatal.

MALFORMACIONES
OSTEOESQUELÉTICAS
Es una patología de difícil diagnóstico prenatal, sobre
todo por debajo de la 20º semana de gestación, demos-
trando ser un problema controvertido dentro de la eficacia
diagnóstica ecográfica. Son junto a las cardiopatías, las
malformaciones que plantean más conflictos y compromi-
Figura 57. Dilatación ureteral lineal (forma estática). sos diagnósticos, unido al hecho de la extensa semiología
y variedades patológicas existentes
Las malformaciones esqueléticas en general se deno-
minan Displasias óseas o Esqueléticas, apareciendo
con una incidencia media de 3/10.000.
La asociación de displasias esqueléticas a translucen-
cia nucal, sin correlato cromosomopático, aumenta la sen-
sibilidad diagnóstica en un 15% para este tipo de patologí-
as en general.
En función de las características morfológicas, la EARP
(Asociación Europea de Radiología Pediátrica) clasifica las
displasias osteoesqueléticas en:
Figura 58. Dilatación ureteral peristáltica (forma dinámica).
• Osteocondrodisplasias, expresan dismorfologías de
desarrollo tanto del hueso como del cartílago.

La evaluación de la función renal es un hecho capital, • Disóstosis, donde sólo se afectan las estructuras óse-
ya que solo se justifica una teórica actitud derivativa intrau- as.
terina, en aquellos casos en que la función renal esté con- • Osteolisis, en aquellos casos de aumento en los meca-
servada (Figura 56). nismos patológicos de reabsorción.

Dilatación ureteral • Alteraciones no filiadas.


• Metabolopatías congénitas.
Las dilataciones del uréter desencadenadas por proce-
sos obstructivos, provocan de forma paulatina cambios • Cromosomopatías.

1044
DIAGNÓSTICO ECOGRÁFICO DE LAS MALFORMACIONES FETALES

De todas estas, tanto las condrodisplasias como las di-


sóstosis, son las que se presentan con una significativa in-
cidencia en relación a las restantes.
Las displasias óseas configuran un amplio grupo de
desórdenes responsables de alteraciones del crecimiento,
de la estructura o de la morfología del esqueleto, que pue-
den aparecer asociados a síndromes.

Acondroplasias

Las acondroplasias se producen por alteración especí-


fica del condrocito, estando la división celular disminuida
en la zona proliferativa, originando un retraso de creci-
miento óseo lineal. Tienen una herencia autosómica domi-
nante, aunque en un 80% se deben a factores mutágenos.
Se caracteriza por el acortamiento rizomiélico de huesos
largos, hiperecogenicidad y engrosamiento diafisario, hi-
perlordosis, incurvación en varo de las extremidades infe-
riores y braquidactilia en manos y pies. Asocia alteraciones
morfológicas faciales como frente olímpica, amplia y raíz
nasal en "silla de montar". Los casos de acondroplasia ho-
mocigota tienen una mortalidad prenatal/perinatal del
100%.
Entre la 22-26 semanas es la edad gestacional óptima
de diagnóstico ecográfico, ya que es aquí donde se pone
de manifiesto el déficit biométrico de los huesos largos. Las
acondroplasias que asocian hidrocefalia u otras malforma-
ciones del SNC, suelen asociarse a las formas letales.

Displasia tanatofórica

La displasia tanatofórica se trata de una condrodis-


plasia metafisaria en la que se afecta la secuencia ma-
duración-degeneración del condrocito, siendo el cartíla-
go hipocelular y con áreas de fibrosis. Constituye una
forma grave de condrodisplasia, incompatible con la vi-
da en todas sus variantes. Los datos ecográficos de sos-
pecha a tener en cuenta son: acortamiento rizomiélico
evidente y precoz, incurvación en varo de todas las ex-
tremidades, tórax estenótico o asfixiante, con hipereco-
genicidad costal, braquidactilia, asociaciones dismorfo-
lógicas faciales del mismo tipo que las condrodisplasia
Figura 59. Datos antropomórficos de la acondroplasia, facies
en general y macrocefalia.
hosca, nariz en silla de montar, macrocefalia, almohadillado
plantar, acortamiento óseo, braquidactilia (dedos en salchicha).
Hipocondroplasia

La hipocondroplasia es una variante de las condrodis-


plasias con el inconveniente de tener una expresión fenotí- Acondrogénesis
pica de menor penetrancia, lo que conlleva dificultades
diagnósticas concluyentes. Afecta sobre todo a las extre- Las acondrogénesis expresan un acortamiento límite
midades, con un espectro muy variado, poniéndose de de las extremidades hasta el punto de poder confundirse
manifiesto el acortamiento a nivel acromiélico con altera- con una focomelia. La tipo II es una anomalía de la osifi-
ción funcional tanto de la articulación del codo como de la cación epifisaria, con defecto en la síntesis de colágeno II,
rodilla (Figura 59). denominada displasia espóndil-epifisaria. Su asociación a

1045
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

tórax estenótico, macrocefalia e hidramnios hace sospe- cuadros agudos de parálisis respiratorias y/o neuroló-
char una secuencia condrodisplásica. gicas.
– Tipo IV. Es una forma idiopática y benigna con escasas
Osteogénesis Imperfecta
manifestaciones clínicas, salvo la alta incidencia de
La osteogénesis Imperfecta forma parte de las displa- fracturas óseas en traumatismos habituales (deportes
sias de causa metabólica por fallo en los mecanismos de etc.).
aposición y mineralización ósea. Cursa con transparencia
esquelética y tendencia a presentar múltiples fracturas. Displasia campomiélica
Anomalia hereditaria por déficit del colágeno tipo I. La displasia campomiélica se produce por una reduc-
Existen cuatro grupos o tipos ción del número de condrocitos en fase proliferativa,
acompañada de una desmineralización en la zona de cal-
– Tipo I o forma tardía, con escasas manifestaciones clí-
cificación y presencia de osteoporosis dentro de la diáfisis.
nicas (fracturas infantiles al menor trauma) como hipo-
Define una nosología que presenta entre otras: incurvación
acusia y escleróticas azules.
anómala de huesos largos, generalmente en varo y de ex-
– Tipo II con graves manifestaciones de fracturas múlti- tremidades inferiores predominantemente, tórax asfixiante
ples y seriadas durante la vida intrauterina, siendo una o estenótico, donde se incluyen escápulas agenésicas o
forma prácticamente letal. Es la forma más frecuente hipoplásicas e hidrocefalias. En algunas ocasiones su aso-
(1/55.000-1/60.000). ciación a polihidramnios hace pensar en una trisomía 18.
Es incompatible con la vida (Figura 60).
– Tipo III. Presenta graves y constantes fracturas aunque
con un debut prenatal más tardío, prácticamente en el Por último y dentro de este complejo sindrómico, mu-
tercer trimestre. Manifiesta una forma progresivamente cho más extenso, las Disostosis son alteraciones en el
invalidante afectando incluso a la columna vertebral y desarrollo y estructura morfológica de los huesos de forma
arcada costal. La muerte sobreviene en el adulto por aislada o asociadas. Existen más de un centenar de sín-

Figura 60. Datos morfológicos sospechosos de displasia campomiélica: acortamiento óseo, incurvación anómala de huesos largos, tórax estenótico
y polihidramnios.

1046
DIAGNÓSTICO ECOGRÁFICO DE LAS MALFORMACIONES FETALES

dromes asociados, pero en la mayoría de los casos pre- embrionarias son el resultado de dos tipos de mutaciones
sentan: turricefalia, macrocefalia, trigonocefalia (síndrome en el genoma. La primera de ellas es de carácter prezigó-
de Crouzon), anemia de Fanconi cuando se asocia a age- tico y se presenta en aquellos casos donde existe una pre-
nesia del hueso radial, mucopolisacaridosis, etc. El gran disposición familiar sobre algunos de estos tumores, mien-
problema de estas patologías es su amplio espectro dis- tras que la segunda, en donde no existe una transmisión
morfológico, con penetrancia variable, incluso anodina, y familiar, es siempre de carácter postzigótico.
sus implicaciones en la esfera intelectual y sensorial.
Neoplasias benignas fetales e infantiles.

Algunas neoplasias neonatales o infantiles se compor-


TUMORES FETALES tan como benignas pese a tener evidencia histopatológica
Los tumores fetales son entidades poco frecuentes pe- de malignidad en los primeros meses de vida (neuroblas-
ro tienen importantes implicaciones para la embarazada y tomas congénitos, hepatoblastomas o teratomas). Las ver-
para el feto. Una vez son diagnosticados, es fundamental daderas causas de este “período de benignidad oncogéni-
el seguimiento multidisciplinario con el reconocimiento pre- ca”, el cual comienza en la vida intrauterina, son aun
coz y la anticipación a los problemas durante el embarazo, inciertas, pero pone de manifiesto la necesidad del diag-
parto y periodo postnatal. nóstico y toma de decisiones precoces... (Figura 61).

La biopsia fetal forma parte, a veces necesariamente, Asociación de neoplasias y malformaciones


del diagnóstico histológico definitivo. Ocasionalmente el congénitas
tratamiento intrauterino puede llegar a ser posible (punción
de quistes serosos de ovarios). Los tumores fetales pue- Es conocido que la teratogénesis y la oncogénesis son
procesos que comparten mecanismos en su etiopatoge-
den ser malignos y metastatizar en diferentes órganos de
nia. El grado de citodiferenciación, el estado inmunológico
la economía fetal e incluso de la placenta, aunque no se
embrionario y el tiempo de exposición a determinada noxa
han descrito metástasis maternas. Por el contrario, en ra-
van a condicionar que el efecto sea teratogénico, onco-
ras ocasiones, se han descrito en gestantes con neopla-
sias malignas como melanomas, leucemias o carcinomas
de mama, metástasis placentarias (infiltración leucemoide
placentaria). En el caso de los melanomas maternos, el tu-
mor puede metastatizar en vísceras fetales (hígado, pul-
món, hueso etc.).
Entre los mecanismos fundamentales del origen de los
tumores fetales está la hiperplasia celular. Este exceso ce-
lular daría como resultado errores en el desarrollo de los
rudimentos embrionarios. La formación de tumores em-
brionarios tras la infancia se explicaría por la persistencia
de estos vestigios celulares.
Este tipo de tejidos anómalos, como los hamartomas o
la disgenesia gonadal, son el principal origen de las neo-
plasias en niños mayores o en adultos. Cuando alguno de
estos tejidos anómalos aparece en un recién nacido, ha
debido existir una alteración celular en la maduración, mi-
gración o diferenciación celular durante la vida intrauterina.
Una cosa si es cierta, muchos tumores de índole neo-
plásica, tienen un buen pronóstico si se diagnostican du-
rante el primer año de vida, y por tanto si se diagnostican
durante la vida prenatal, de aquí la importancia del diag-
nóstico precoz y su abordaje neonatalmente. Los reno-
blastomas son un claro ejemplo de ello.
Existe a su vez una teoría genética de la carcinogéne-
Figura 61. Tumores suprarrenales. El 90% se asientan en la
sis para explicar su patogenia y el comportamiento de cier- suprarrenal derecha, siendo los más frecuentes los
tos tumores embrionarios. Según esta teoría las neoplasias neuroblastomas y las hemorragias.

1047
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

géncio o ambos. Determinados agentes biológicos, quími-


cos o físicos que son teratogénicos para el embrión son
carcinógenos en la vida postnatal. Un evento teratógeno
en la vida intrauterina puede predisponer a un evento on-
cogénico en el periodo postnatal. Se piensa que estos te-
jidos anormales esconden oncogenes latentes los cuales,
ante ciertas condiciones medioambientales, se activan
produciendo una transformación maligna de un tumor.

Diagnóstico prenatal

El diagnóstico prenatal de tumores fetales debería es-


tar basado en tres tipos de hallazgos ecográficos:
Figura 63. Rabdomioma cardiaco: irrumpen tardíamente y
• Hallazgos generales: ausencia o disrupción del contorno, pueden provocar fenómenos hemodinámicos restrictivos.
forma, tamaño, localización o ecogenicidad de una es- Frecuente asociación con tumoraciones renales y cerebrales.
tructura anatómica normal. Presencia de estructuras
anormales o de una biometría anómala, movimientos fe-
No hay una clasificación formal para los tumores feta-
tales anómalos, presencia de polihidramnios o una hidro-
les, a parte de distinguir si son sólidos o quísticos, por lo
pesía fetal. El hidramnios es un signo muy importante ya
que la mejor clasificación debería ser según su localización.
que el 50% de los tumores fetales se acompañan de él.
Los mecanismos subyacentes van desde la interrupción
Tumores intracraneales
de la deglución, obstrucción mecánica, aumento de la
producción del líquido amniótico o tumores intracraneales Los tumores cerebrales son poco frecuentes en niños
con lesión neurológica para estas funciones (Figura 62). y sólo el 5 % se presentan durante el periodo fetal. El tera-
toma es el más frecuente. Se deben sospechar ante la pre-
• Hallazgos específicos del tumor: cambios en la estruc-
sencia de lesiones ocupantes de espacio quísticas o sóli-
tura de la masa tumoral, calcificaciones, quistificación,
das o bien ante un cambio en las estructuras anatómicas
edema, sangrado, vascularización anómala, etc.
normales como por ejemplo un desplazamiento de línea
• Los hallazgos en órganos específicos son menos fre- media. Generalmente suelen asociar hidrocefalia, pero el
cuentes pero altamente sugestivos, como la aparición aspecto ecográfico de ellos es similar exceptuando el lipo-
de una masa ocupante (rabdiomiomas cardíacos) (Fi- ma (hiperecogénicos y homogéneos) y los papilomas de
gura 63). plexos coroideos. Catalogar una neoplasia intracraneal co-
Dejando a un lado los tumores intracraneales, donde el mo parte de procesos del tipo de esclerosis tuberosa es
pronóstico suele ser generalmente malo, el pronóstico pa- bastante complicado y generalmente las ecografías de se-
ra tumores de otras localizaciones es variable en función gundo trimestre suelen ser negativas, aunque se sospecha
del tamaño tumoral (por la compresión de órganos veci- por su frecuente asociación a tumores cardíacos (rabdo-
nos), grado de vascularización (riesgo de insuficiencia car- miomas). El pronóstico depende de varios factores como
la localización, el tamaño y el tipo histopatológico. Los te-
diaca o hidropesía) o de la presencia de hidramnios (riesgo
ratomas congénitos suelen ser mortales (Figura 62).
de prematuridad asociado).
Tumores de la cara y cuello

Epignato, es un tipo raro de teratoma que nace de la


cavidad oral o faringe. En la mayoría de los casos el epig-
nato surge del hueso esfenoides, aunque algunos surgen
del paladar blando o duro, de la faringe, la lengua o incluso
de la mandíbula. Suelen crecer hacia fuera y hacia la cavi-
dad nasal, oral o intracranealmente. Los tumores benignos
están compuestos de tejidos derivados de las tres hojas
blastodérmicas. La mayoría contienen cartílago, tejido adi-
poso, hueso y tejido nervioso. También pueden presentar
calcificaciones o áreas quísticas. Es preciso establecer el
diagnóstico diferencial con los teratomas cervicales, ence-
Figura 62. Tumoración intracraneal asociada a edema. faloceles y otros tumores de la cara. El polihidramnios sue-

1048
DIAGNÓSTICO ECOGRÁFICO DE LAS MALFORMACIONES FETALES

le estar presente en estos casos debido a la compresión fa-


ríngea existente. Es preciso un estudio detallado de las es-
tructuras cerebrales ya que en ocasiones pueden presentar
un crecimiento intracraneal. El resultado final dependerá del
tamaño y de la lesión de estructuras vitales vecinas. El po-
lihidramnios se asocia a mal pronostico y la mayor causa de
mortalidad neonatal en estos casos es por asfixia al obstruir
las vías aéreas superiores, aunque una exéresis quirúrgica y
un postoperatorio favorable son en ocasiones posibles. El
polihidramnios, la ausencia de deglución así como la falta
de llenado gástrico secuencial, deben evaluarse como fac-
tores para adelantar el momento del parto.
El mioblastoma es un tumor muy raro que general-
mente emerge de la cavidad oral. Es exclusivo del sexo fe-
menino y puede ser debido a una excesiva producción es-
trogénica por los ovarios fetales bajo el estimulo de la
gonadotropina coriónica humana. Ecográficamente es una
gran masa sólida protruyendo de la boca fetal y con cone-
xiones vasculares entre la cavidad oral y la masa, objetiva-
bles con ecografía Doppler color. También se asocian a
polihidramnios.
El teratoma cervical es una tumoración poco frecuen-
te. Los hallazgos ecográficos se corresponden con una
Figura 64. Teratoma cervical gigante. Debe realizarse el
formación unilateral, bien delimitada, generalmente multilo- diagnóstico diferencial con bocio y otros tumores exógenos.
cular con áreas sólido quísticas y que en el 50% de los ca-
sos se acompaña de calcificaciones y polihidramnios (30%
por obstrucción esofágica). El pronóstico el bastante malo Tumores torácicos
y la mortalidad intrauterina o la mortalidad neonatal esta en
torno al 80% por obstrucción de las vías aéreas. La morta- Tumores pulmonares
lidad tras la cirugía es superior al 80% ya que estos tumo- Ya se han descrito anteriormente casos de malforma-
res suelen ser grandes, por lo que es preciso una severa ciones quísticas adenomatosas y secuestro pulmonar ex-
disección cervical y múltiples intervenciones adicionales tralobar pero no el de tumores pulmonares fetales.
para conseguir una resección total de tumor y un resulta-
do funcional y estético aceptable (Figura 64). Tumores mediastínicos
El bocio fetal puede asociarse a hipertiroidismo (por Incluyen el neuroblastoma y el hemangioma producien-
un exceso o déficit de yodo, exposición intraútero a drogas do hipoplasia pulmonar, desplazamiento mediastínico, hi-
antitiroideas o defectos congénitos del metabolismo de dropesía y polihidramnios.
hormonas tiroideas), hipotiroidismo o con un estado euti-
roideo. El diagnóstico ecográfico se basa en la demostra- Rambdomioma (hamartoma)
ción de una masa sólida, de localización anterior y que pro-
Es el tumor primario cardiaco mas frecuente en fetos,
voca una hiperextensión cervical fetal. También se asocian
neonatos y niños. Con una frecuencia de1/1.000 partos,
a polihidramnios. La mayoría de casos corresponden a
en un 50% se asocia con esclerosis tuberosa (enfermedad
mujeres con historia de patología tiroidea. La funiculocen-
de herencia autosómica dominante) y un 80% padecen cri-
tesis puede ayudar en la determinación del estado tiroideo
sis convulsivas y retraso mental.
fetal, especialmente en mujeres que padecen una enfer-
medad de Graves Basedow. En estos casos un paso Ecográficamente se presenta como una masa única o
transplacentario de drogas o anticuerpos tiroestimulantes múltiple ocupando las cavidades cardíacas. El pronóstico
puede desencadenar un bocio fetal. El tratamiento mater- varía en función del tamaño, número y localización, pu-
no generalmente corrige el hipertiroidismo fetal. El trata- diendo ser incluso asintomáticos. La tasa de mortalidad in-
miento fetal directo en casos de hipotirodismo se puede fantil de los casos operados durante el primer año de vida
llevar a cabo por funiculocentesis o amniocentesis, y esto es del 30%, sin embargo más de un 70% de los mismos
puede también corregir el bocio fetal. pueden tener un curso evolutivo a la resolución espontá-

1049
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

nea, siempre que no provoquen cuadros restrictivos en las


cavidades cardíacas.
Aunque la ecografía es concluyente, no es frecuente
que se realice el diagnóstico prenatal. Cuando esto suce-
de debe conocerse el alcance del problema para el ade-
cuado seguimiento clínico y hemodinámico, ya que esta
patología suele asociarse a procesos tumorales del mismo
origen en el cerebro y riñones. Otro factor a tener en cuen-
ta es el debut de este tipo de tumores, generalmente por
encima de las 28 semanas.

Teratoma intrapericárdico Figura 66. Tumor ovárico ecoestructuralmente complejo. Esta


situación debe alertarnos ante fenómenos de torsión o neoplasia
En la mayoría de los casos el tumor asienta en el lado y establecer la finalización de la gestación.
derecho. Puede tener 2 o 3 veces el tamaño cardiaco y
suele ser quístico o pediculado. La rotura de estos quis-
tes, o la compresión del sistema linfático cardiaco, hace
que en la mayoría exista un derrame pericárdico que pue-
de desarrollar un taponamiento cardiaco y una hidropesía,
lo cual ensombrece el pronóstico prenatal.
Se han detectado otro tipo de tumores fetales: retro-
peritoneales, hepáticos y neuroblastomas. Estos últimos,
como ya se ha dicho, de curso benigno, a pesar de su ín-
dole neoplásica. En más del 90% de los casos se asientan
en la glándula suprarrenal derecha.
Los tumores de origen vascular, linfáticos y del colá-
geno (hemangiomas, linfangiomas, sarcomas) manifiestan
preferencia prenatal por las extremidades aunque, en casos
de asentamiento visceral, pueden pasar desapercibidos o
manifestarse como masas ecogénicas de tamaño variable
(hemangioma hepático), o bien produciendo semiología sis-
témica (derrame pleural, quilotórax etc...) (Figura 65).
Ciertas tumoraciones cutáneas asociadas a protube-
rancias o pilificación han sido igualmente descritas (Nevus
piloso, melanoma infiltrante).
Los teratomas sacrocoxígeos forman parte de las tu-
moraciones exofíticas del polo fetal inferior. El gran tamaño, Figura 67. Las malformaciones polivasculares del cordón se
asocian a cromosomopatías (triploidias). La agenesia arterial
funicular demostrada a través de los vasos hipogástricos se
asocia a malformaciones cardiacas y digestivas. En la foto
inferior se aprecia agenesia de la hipogástrica izquierda.

así como la amplia vascularización detectada por angio-


Doppler, permiten en principio hacer el diagnóstico dife-
rencial con el mielomeningocele.
Las tumoraciones genitales se circunscriben prefe-
rentemente a procesos ováricos que en más del 90% son
quistes serosos simples producidos por transferencia hor-
monal materna. Tienen la particularidad de resolverse es-
Figura 65. El derrame pleural puede estar desencadenado por pontáneamente en los primeros meses neonatales, al ce-
patologías viscerales que debuten con un cuadro sistémico. sar la actividad hormonal transferida. Sólo el aumento

1050
DIAGNÓSTICO ECOGRÁFICO DE LAS MALFORMACIONES FETALES

inusitado o el enrarecimiento ecoestructural, unido a la Las anomalias morfológicas que se originan en el seno
vascularización por angio-Doppler, pueden ser indicativos de un embarazo gemelar monocigoto se producen, en casi
de terminar el parto antes del término, ya que la torsión y todos los casos, en los embarazos gemelares monocoriales.
menos frecuentemente las neoplasias (disgerminomas), Cuando la evolución de la gestación es correcta, sin trans-
pueden ensombrecer el pronóstico. En nuestra experiencia fusión feto-fetal, se obtienen unos gemelos normales simé-
hemos observado muertes súbitas intraútero por torsión tricos separados, o bien, unidos dando lugar a monstruosi-
del pedículo ovárico (Figura 66). dades dobles simétricas (siameses) como dos esbozos
embrionarios desarrollados uniformemente, unidos entre sí
Entre los procesos masculinos, la torsión testicular,
por una fusión parcial. Por el contrario, cuando el producto
tumores del epidídimo e hidroceles graves, estos últimos
de gestación es asimétrico reconocemos una patogenia de
como signo premonitorio de ascitis fetal independiente-
transfusión feto-fetal secundaria a anastómosis vasculares
mente de su etiología, son los que presentan mayos inci-
funcionantes, que dará lugar a dos fetos de diferente tama-
dencia. Cuadros como la hipospadia o genitales ambi-
ño, uno de los cuales puede morir intraútero evolucionando
guos, presentan indudables dificultades diagnósticas.
hacia feto papiráceo, mientras que el otro puede desarrollar
Entre las patologías malformativas anexiales, el polihi- insuficiencia cardíaca. En estos casos se ha visto una mayor
dramnios/oligohidramnios se asocia a un 40 % de malfor- proporción de anastomosis arterio-venosas. Sin embargo,
maciones estructurales de diversas índoles. Las placenta- en las anastómosis arterio-arteriales y/o veno-venosas el
rias circunscritas se asocian a la aparición de procesos trastorno hemodinámico entre ambos fetos es más grave y
vasculares anómalos precoces (hemangiomas). Las funi- el defecto en la organogénesis dará lugar a las diferentes va-
culares a cromosomopatías del tipo triploidías. La agene- riantes del Chorangiophagus parasíticus o fetos llamados
sia verdadera de una arteria umbilical única, sobre todo la acardio-acéfalos. Una situación evolutiva distinta originará el
derecha, se asocia a cardiopatías y malformaciones ne- feto heteroparasiticus unido externamente al feto normal, o
frourológicas. La presencia de múltiples vasos anómalos bien, a un fetus in fetu o feto endoparasiticus que puede ser
placentarios es común en malformaciones abigarradas y confundido con un teratoma maduro.
triploidías (Figura 67).

LECTURAS RECOMENDADAS
PATOLOGIA DE LA GESTACIÓN Adzick NS, Harrison MR, Crombleholme TM. Fetal lung lesions:
GEMELAR MONOCORIAL management and outcome. Am J Obstet Gynecol 1998; 179:
884-9.
MOOAMNIÓTICA Babu R, Kyle P, Spicer RD. Prenatal sonographic features of con-
genital lobar emphisema. Fetal Diagn Ther 2001; 16: 200-2.
Entre las dos variedades de embarazo múltiple, la ges-
Borrell A, Costa D, Martínez JM, Delgado RG, Fraguell T, Fortuny
tación gemelar univitelina o monocigótica se presenta
A. Criteria for fetal nuchal thikness cut-off: A re-evaluation.
aproximadamente una vez por cada tres embarazos ge- Prenat Diagn 1997; 17: 23-9.
melares bicigóticos. Dembinski J, Kaminski M, Schild R, Kuhl C, Hansmann M, Bart-
Considerando la cronología de la fase de bipartición del man P. Congenital intrapulmonary cyst in the neonate. Peri-
natal management. Am J Perinatol 1999; 16: 509-14.
óvulo fecundado, puede dividirse según las características
Falcon O, Faiola S, Huggon I, Allan L, Nicolaides KH. Fetal tricus-
placentarias en gestación monocigótica bicorial si la bipar- pid regurgitation at the 11 + 0 to 13 + 6-week scan: associa-
tición se produce entre las 6 y 24 horas trás la fecundación tion with chromosomal defects and reproducibility of the me-
y gestación monocigótica monocorial biamniótica. Esta es thod. Ultrasound Obstet Gynecol 2006; 276:609-12.
la más frecuente y se produce si la bipartición tiene lugar Galindo A, Cano I, Olaizola I, De la Fuente P. Diagnóstico prena-
en el estadio de blastocito inicial entre el quinto y sexto día. tal de los defectos de la pared abdominal: análisis retrospec-
Por último la gestación monocigótica monocorial mono- tivo de 36 casos. Prog Diagn Prenat 1996; 8: 379-93.
Levi S, Chervenak FA. Preface: Ultrasound screening for fetal
amniótica se producirá cuando la bipartición tiene lugar en
anomalies, is it worth it? Screening revisited after the EURO-
la fase de blastocito avanzado en la 2ª semana. FETUS data. Ann N Y Acad Sci 1998; 847: IX.
El embarazo gemelar monocigótico bicorial tiene un May DA, Spottswood SE, Ridick-Young M, Nwomeh BC. Case
riesgo gestacional similar a las gestaciones gemelares bici- report: Prenatally detected dumd-bell shaped retroperitoneal
duplication cyst. Pediatr Radiol 2000; 30: 671-3.
góticas ya que, normalmente, anidan separadamente en la
O´Rahilly R, Müller F. The nervous system. Human Embriology &
decidua. Sin embargo, los gemelos monocigóticos mono- Teratology. New York: Wiley-Liss, 1992.
coriales tienen otros problemas añadidos que multiplican la Pandya PP, Brizot ML, Kuhn P, Andjers RJM, Nicolaides KH. First
mortalidad por tres, en comparación con los monocigotos trimester fetal nuchal translucency thikness and risk for triso-
bicoriales o los bicigóticos. mies. Obstet Gynecol 1994; 84:420-3.

1051
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

Troyano Luque JM, Clavijo Rodríguez MT. Cribado de Malforma- Troyano JM, Clavijo MT, Clemente I, Marco OY, Rayward J and Mah-
ciones neurológicas. En: Cavero L, ed. Cribado en Medicina tani VG. Kidney and urinary tract diseases: Ultrasound and bio-
Materno-fetal. Madrid: SEGO, 2000; 37-58. chemical markers. Ultrasound Rev Obstet Gynecol 2001;1:1-17
Troyano-Luque JM, Clavijo MT, Bajo Arenas J, Suárez MN, Mar- Tsukahara Y, Ohno Y, Itakura A, Mizutani S. Prenatal diagnosis of
co OY. Valor de la ecografía en el diagnóstico prenatal (I). Rev congenital diaphragmatic eventration by MRI. Am J Perinatol
Ginecología Obstetricia 2000; 1: 24-88. 2001; 18: 241-4.

1052
Capítulo 114
INTERRUPCIÓN VOLUNTARIA DEL EMBARAZO.
MÉTODOS
Teulón M, Díaz-Toledo B

INTRODUCCIÓN 1. Evitar un grave peligro para la vida o la salud física o


psíquica de la embarazada, siempre que así conste en
Se estima que de los 210 millones de embarazos que se un dictamen emitido por un médico de la especialidad
producen en el mundo anualmente, 46 millones (22%) finali- correspondiente, distinta de aquel que va a practicar el
zan en un aborto. En la mayoría de los países, el aborto le- aborto. En caso de urgencia por riesgo vital para la
gal está permitido para salvar la vida materna y en muchos gestante, podrá prescindirse del dictamen y del con-
para preservar su salud física y mental. En los países donde sentimiento expreso.
el acceso a métodos de planificación es sencillo y universal,
la tasa de abortos legales es menor aunque nunca llega al 2. Si el embarazo es consecuencia de un hecho constitu-
cero, al no existir método anticonceptivo 100% efectivo. tivo de un delito de violación, previamente denunciado
(realizado antes de las 12 semanas de gestación).
Casi 20 millones de estas interrupciones se realiza de
forma “insegura”: se estima que el 13% de la mortalidad 3. Presunción de graves taras físicas o psíquicas en el fe-
materna relacionada con el embarazo (67.000 muertes to (el aborto debe practicarse en las primeras 22 se-
anuales) se debe a la práctica de un aborto no seguro. El manas de gestación y debe constar un dictamen acor-
95% de los abortos realizados en estas condiciones se re- de emitido por dos especialistas distintos del médico
alizan en países en vías de desarrollo. Estos abortos son que va a realizar la interrupción del embarazo)
causa además, de una alta morbilidad que ocasiona gra- En los casos previstos en el apartado anterior, no
ves secuelas para la mujer. será punible la conducta de la embarazada aún cuan-
Es por tanto necesario, que la interrupción voluntaria de do la práctica del aborto no se realice en un centro o
la gestación sea estipulada y organizada por ley, de rápido establecimiento público o privado acreditado o no se
acceso para todas la mujeres realizada en unidades acredi- hayan emitido los dictámenes médicos exigidos.
tadas con profesionales sanitarios adiestrados en la materia. Los centros en los que se practican IVE deben estar par-
Los profesionales sanitarios tienen obligaciones éticas ticularmente acreditados para realizar este tipo de intervencio-
y legales acerca de los derechos de la mujer y deben ga- nes, siendo la acreditación diferente si los abortos a realizar
rantizar el libre acceso de las mujeres a esta práctica den- son de bajo riesgo (menos de doce semanas de gestación) o
tro de la legalidad vigente en cada país. de alto riesgo (más de doce semanas de gestación), para lo
que deberán reunir determinados requisitos, recogidos en la
legislación Real Decreto 2409/1986, de 21 de noviembre, so-
INTERRUPCIÓN LEGAL DE LA bre centros acreditados y dictámenes preceptivos para la
GESTACIÓN EN ESPAÑA practica legal de la interrupción voluntaria del embarazo.
El seguimiento y evaluación de las IVE que tienen lugar
Las interrupciones voluntarias del embarazo (IVE)
en nuestro país, se lleva a cabo a través de un sistema de
en España quedaron despenalizadas, a través de la Ley
vigilancia epidemiológica que recibe información de todo el
Orgánica 9/1985 (Julio 1985), según la cual, será punible
Estado.
el aborto practicado por un médico, o bajo su dirección, en
centro o establecimiento sanitario, público o privado, acre- Cada IVE que se practica, ha de ser notificada por
ditado y con consentimiento expreso de la mujer embara- el médico responsable de la misma a la autoridad sa-
zada, cuando concurra alguna de las circunstancias si- nitaria pertinente de cada Comunidad Autónoma don-
guientes: de se llevó a cabo la intervención con carácter anual,

1053
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

Gráfico 1. Número de abortos realizados. Tasas por 1.000 mujeres entre 15 y 44 años. Total Nacional.

Fuente: Ministerio de Sanidad y Consumo.

Gráfico 2. Distribución porcentual del número de abortos realizados según semanas de gestación. Total Nacional.

Fuente: Ministerio de Sanidad y Consumo.

la Dirección General de Salud Pública, elabora una pu- rrumpir la gestación. Esta estimación se apoyará en la
blicación anual con las estadísticas correspondientes fecha de la última regla (FUR), el examen físico de la pa-
referidas al conjunto del Estado. ciente y en nuestro medio en la realización de una eco-
grafía obstétrica de nivel básico.

RECOMENDACIONES PREVIAS A LA • Ha de realizarse historia clínica completa y una explo-


ración ginecológica (orientada al despistaje de ETS,
REALIZACIÓN DE UNA INTERRUPCIÓN gestación ectópica, etc.).
VOLUNTARIA DE LA GESTACIÓN • Se debe proporcionar a la paciente una información
• La estimación de la edad gestacional es un factor cla- precisa y sencilla de todo el procedimiento así de có-
ve para decidir el método más apropiado para inte- mo todas las opciones disponibles en cada caso, que

1054
INTERRUPCIÓN VOLUNTARIA DEL EMBARAZO. MÉTODOS

Tabla 1. Distribución porcentual del número de abortos realizados según • Debe proporcionarse información sobre métodos de
motivo de la interrupción.Total Nacional.
planificación familiar que puedan usarse después del
Año Salud Riesgo Violación Varios No procedimiento para evitar gestaciones no deseadas fu-
materna fetal (%) motivos consta
turas.
(%) (%) (%) (%)
2004 96,70 3,06 0,02 0,22 0,00
2003 96,89 2,83 0,02 0,26 0,00 MÉTODOS DE INTERRUPCIÓN DE LA
2002 96,81 3,03 0,03 0,13 0,00
GESTACIÓN:
2001 97,16 2,53 0,09 0,22 0,00
2000 97,16 2,57 0,05 0,14 0,06 PREPARACION CERVICAL. Está indicada la prepara-
ción cervical previa a la interrupción por métodos quirúrgi-
1999 97,22 2,47 0,04 0,19 0,09
cos, sobre todo en primíparas, adolescentes y en interrup-
1998 97,32 2,27 0,03 0,28 0,10
ciones de más de 10 semanas de gestación ya que facilita
1997 97,79 2,08 0,03 0,03 0,07 y acorta el procedimiento, reduciendo el porcentaje de
1996 97,83 2,05 0,02 0,03 0,06 complicaciones. La preparación se puede realizar emple-
1995 97,91 1,64 0,01 0,10 0,33 ando dilatadores osmóticos que actúan absorviendo el
Media 97,28 2,45 0,03 0,16 0,07 agua de la matriz extracelular o administrando Misoprostol
Fuente: Ministerio de Sanidad y Consumo. (400 mg. 3-4 horas antes).
Dado que la mayoría de las mujeres que desean inte-
rrumpir la gestación son candidatas a ambas vías, quirúr-
la ayude en su toma de decisiones. Debe asegurar la gica o médica, es importante que cada paciente, adecua-
confidencialidad del procedimiento. En la elección del damente informada de sus ventajas e inconvenientes elija
método de la interrupción además de considerarse la el procedimiento que prefiere. Cada procedimiento, pauta
edad gestacional y las preferencias de la paciente, se y ruta de administración tiene sus propias particularidades
tendrá en cuenta la experiencia del profesional sanita- que deben adaptarse a la edad gestacional, condicionan-
rio que va a realizar la interrupción. tes de la paciente y experiencia del profesional sanitario en-
• Se realizará analítica sanguínea básica (hemoglobina), cargado de la interrupción.
grupo y Rh ante la eventual aparición de complicacio- PROFILAXIS ANTIBIÓTICA. Está demostrado que
nes y para realizar profilaxis de la isoinmunización Rh si su empleo reduce el riesgo de endometritis posterior.
fuese preciso en las 72h primeras horas. Existen varias pautas recomendadas: Doxiciclina
• Está demostrado que el uso de antibióticos durante el 100mg/12h 2 dosis el día del aborto, Ofloxacilo
procedimiento quirúrgico disminuye la tasa de infeccio- 400mg/12h 2 dosis o Ceftriaxona 1gr iv 30 minutos an-
nes posteriores. tes del procedimiento.

Tabla 2. Particularidades de aborto quirúrgico y médico. ACOG Practice Bulletin Nº 67, “Medical Management of Abortion”, Octubre 2005).

Aborto Médico Aborto quirúrgico


• Habitualmente evita un procedimiento invasivo. • Requiere siempre un procedimiento invasivo.
• No suele requerir anestesia. • Puede realizarse bajo sedación, no siempre requiere anestesia.
• Precisa 2 o 3 visitas. • Suele realizarse en una visita única.
• Alta tasa de éxitos (~95%). • Alta tasa de éxitos (~99%).
• Precisa varios días o incluso semanas hasta completarse • Se finaliza en un periodo predecible de tiempo,
(dep. de la pauta empleada). en general corto.
• Factible en edades gestacionales precoces. • Factible en edades gestacionales precoces.
• Sangrado moderado/ abundante durante un • Sangrado genital escaso.
periodo corto de tiempo.
• Es necesario realizar seguimiento para • No requiere seguimiento.
verificar que el aborto es completo.
• Precisa la cooperación de la paciente en un proceso • Al precisar una única visita es más fácil de realizar
con varias visitas. en pacientes poco cumplidoras.

1055
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

ANALGESIA Y ANESTESIA: La mayoría de las muje- latación cervical, este procedimiento se denomina tam-
res que se someten a un aborto padecen dolor en algún bién regulación de la menstruación o extracción
grado, por tanto se ha de procurar siempre, un manejo del menstrual y tradicionalmente ha sido poco empleado
dolor adecuado que no comprometa la calidad del proce- en nuestro país.
dimiento. Asimismo, si se considera necesario se prescri-
A partir de la 7 semanas, se debe realizar dilatación del
birán ansiolíticos para facilitar la relajación previa a un pro-
cuello del útero mediante dilatadores manuales, osmó-
cedimiento quirúrgico.
ticos o mediante prostaglandinas locales (Misoprostol).
En general los AINES (tipo Ibuprofeno y derivados), ad- Para el legrado se utiliza una cánula curva conectada a
ministrados una hora antes del procedimiento y pautados un sistema de aspiración. El diámetro de la cánula se
regularmente después, son suficientes para controlar el elegirá según las semanas de gestación (8 semanas,
dolor. El Paracetamol no ha demostrado ser efectivo en va- cánula Nº 8). La cánula ha de introducirse en la cavidad
rios estudios. uterina inicialmente sin aspiración, para comprobar que
está adecuadamente colocada, y ya con el vacío co-
El empleo de anestesia local (paracervical) con o sin se-
nectado la cánula ha de moverse de lado a lado (nun-
dación asociada suele ser suficiente para cualquier proce-
ca de fuera a dentro), cuidadosamente hasta acabar
dimiento del primer trimestre. La mayoría de los procedi-
con todos los restos. El uso posterior de una legra cor-
mientos del segundo trimestre requieren alguna sedación
tante para garantizar que la cavidad está vacía, hoy en
(Midazolam 2gr iv o Fentanilo 100mcg iv). La anestesia pa-
día, es controvertido.
racervical se aplica inyectando 10-20ml Lidocaína 1% o
Bupivacaina 0’25% en el estroma cervical en tres puntos En general, no es necesario realizar un examen anato-
(12, 4 y 8h) previa aspiración para confirmar que la infusión mopatológico de los restos obtenidos, aunque si es in-
no se hace directa sobre un vaso, lo que podría ocasionar teresante realizar una inspección “de visu” que valore
serias complicaciones cardiacas. Tras la colocación de la tanto el aspecto macroscópico como la cantidad de
anestesia paracervical puede desencadenarse un síncope material extraído, ya que una cantidad escasa puede
vasovagal generalmente autolimitado que se tratará con ser sugestiva de un procedimiento incompleto, defec-
Atropina (0’5mg -1mg cada 5 minutos, sin exceder un to- tuoso o ser sugestiva de gestación ectópica.
tal de 3mg). 2. DILATACIÓN Y EXTRACCIÓN. Es el método de elec-
Se puede contemplar el uso de anestesia regional o ción durante el segundo trimestre siempre que se rea-
general en casos en los que la manipulación uterina vaya a lice por profesionales experimentados y cuando no se
ser mayor o la paciente lo solicite, con una tasa de compli- precise la realización de una autopsia fetal. Es más rá-
caciones superior que las técnicas de anestesia local, ade- pido y no obliga a la paciente a soportar una inducción
más alargan el tiempo de recuperación precisando vigilan- del parto.
cia médica posquirúrgica. Precisa dilatación cervical. La técnica consiste en in-
troducir una cánula de vacío de 12-14mm que aspi-
re el líquido amniótico y placenta y que acerque los
MÉTODOS QUIRÚRGICOS DE restos fetales al segmento uterino inferior para que
INTERRUPCIÓN DE LA GESTACIÓN: luego sean extraídos con pinzas fuertes de agarre es-
pecificas Sopher, Forester etc. La cánula no debe lle-
Tradicionalmente han sido los más utilizados en Espa-
gar nunca hasta el fondo uterino. El control ecográfi-
ña, hasta la difusión del empleo del Misoprostol en los últi-
co del procedimiento facilita la técnica. Una vez
mos años.
finalizada la extracción de todas las partes fetales, se
1. LEGRADO POR ASPIRACIÓN. Está basada en la apli- introducirá la cánula de aspiración de nuevo hasta
cación de un sistema de vacío manual o eléctrico que completar el vaciamiento uterino por completo. Es
permite evacuar el contenido uterino. Es uno de los mé- una técnica muy segura cuando está realizada con
todos más empleados y seguros para interrupciones de profesionales adiestrados en este tipo de procedi-
gestaciones de primer trimestre desde la 7 semanas la mientos.
12 semanas (hasta 15 semanas en manos experimen-
3. HISTEROTOMÍA E HISTERECTOMÍA. Son técnicas en
tadas). Se puede realizar de forma ambulatoria.
la actualidad en desuso, debido a su alta morbilidad, y
En gestaciones menores de 7 semanas, la aspiración sólo se contemplan en el caso de inducciones fallidas
se puede realizar en la consulta mediante una cánula rí- en ausencia de personal cualificado para una extrac-
gida de Karman conectada a una jeringa de vacío de ción vaginal o en el contexto de un proceso neoplásico
50cc bajo anestesia local paracervical, sin precisar di- genital que requiera cirugía concomitante.

1056
INTERRUPCIÓN VOLUNTARIA DEL EMBARAZO. MÉTODOS

MÉTODOS MÉDICOS DE INTERRUPCIÓN Misoprostol. Es el empleado en nuestro hospital. Ac-


túa como análogo de prostaglandinas, se comercializa en
DE LA GESTACIÓN: forma de tabletas estables a temperatura ambiente, de ba-
Desarrollados en las últimas dos décadas, precisan la jo coste económico. En España está comercializado úni-
administración de fármacos por vía oral, vaginal o intrave- camente para prevenir el ulcus gástrico, aunque está auto-
nosa que induzcan la expulsión fetal. Generalmente se em- rizado su uso compasivo para la interrupción de la
plean en edades gestacionales precoces (hasta la 9 sema- gestación. En otros países se utiliza además como induc-
nas) o a partir de la 15 semanas. Existen varias pautas tor del parto en gestaciones avanzadas. Se puede usar por
descritas que utilizan Mifepristona (RU486), Metotrexate o vía oral, aunque la vía vaginal ha demostrado mayor bio-
Misoprostol solas o en combinación. En España, la Mife- disponibilidad y menores efectos secundarios sobre todo
pristona no está comercializada, por lo que el régimen más gastrointestinales. Ha desplazando a un segundo plano a
utilizado es el que emplea Misoprostol solo, en dosis repe- otras prostaglandinas utilizadas tradicionalmente para este
tidas por vía oral o vaginal. En edades gestacionales preco- fin, por sus innegables ventajas en cuanto administración y
ces permiten que la mujer aborte en su casa sin someterse efectos secundarios. Estas mismas ventajas han facilitado
a ningún procedimiento invasivo. Por el contrario, la induc- su uso inapropiado fuera del ámbito sanitario del que so-
ción del aborto en gestaciones más avanzadas precisa el mos testigos a diario en nuestra práctica clínica.
ingreso hospitalario bajo vigilancia médica. Es importante La pauta de administración según el protocolo de IVE
reseñar que todos los regímenes empleados tienen descri- de nuestro hospital será:
ta una tasa de fallos, que pueden obligar a la paciente a
Misoprostol 400mg/6h intravaginales (comprimidos
someterse a un procedimiento quirúrgico posterior. El lími-
previamente humedecidos) las primeras 24h, posterior-
te de edad gestacional en el que estas pautas están indica-
mente, si no se ha producido la expulsión fetal se aumen-
das dependen de la pauta administrada aunque en general
tará la dosis a 600mg/6h intravaginales. Tras 48h si no se
hasta los 63 días tienen una tasa de éxitos alta 96-99% (Mi-
ha producido la expulsión, se valorará el empleo de pros-
fepristona + Misoprostol, y algo menores en los regímenes
tanglandinas i.v (PGE2).
con Misoprostol oral solo). Aunque las contraindicaciones
médicas son infrecuentes, si son frecuentes las contraindi- Dinoprostona (PGE2). La administración de prosta-
caciones socio-psicológicas, de forma que no serán bue- glandinas intravenosas debe realizarse bajo estrecha vigi-
nas candidatas a un aborto médico aquellas pacientes po- lancia médica, precisan la colocación de una vía central y
co responsables o problemáticas que no vayan a cumplir el sondaje vesical.
programa de seguimiento, que deseen acabar con la inte- La pauta de infusión vigente en nuestro hospital con-
rrupción de forma rápida o que no entiendan adecuada- siste en:
mente las instrucciones del proceso. Tampoco son buenas
candidatas aquellas que no accedan fácilmente a un servi- Realizar una solución con 1 ampolla de Dinoprostona
cio de urgencias. Es fundamental que la paciente sea infor- PGE2 (0’5ml/5mgr) en 500cc de solución salina. Se inicia la
mada de todo el proceso, con descripción adecuada de los infusión a un ritmo de 15ml/h durante 60’, si no se consigue
síntomas (dolor abdominal y sangrado) que se van a pre- dinámica eficaz se irá aumentando cada 2-3h el ritmo de in-
sentar, y que se informe a la paciente que el procedimiento fusión 30ml/h, 45ml/h hasta un máximo de 60ml/h.
tardará en completarse en algunos casos varias semanas. También se han utilizado por vía intramuscular, intram-
niótica, extraamniótica (a través de una sonda de Foley).
Fármacos empleados: Mifepristona (RU 486). Inhibidor competitivo del re-
Prostanglandinas: Son potentes estimuladores de la ceptor de la progesterona. Produce sobre el útero gestan-
contractilidad uterina en cualquier momento de la gesta- te necrosis de la decidua, reblandecimiento del cérvix y
ción. No tienen acción feticida. Su principal desventaja son aumenta la contractibilidad uterina y la sensibilidad a las
su alta tasa de efectos colaterales: nauseas, vómitos, dia- prostaglandinas. Su empleo combinado con Misoprostol
rrea, fiebre, que dependerán de la vía de administración y es la pauta más empleada para realizar un aborto médico
dosis. Presentan un tiempo de latencia variable entre 10- en todo el mundo con una tasa de éxito que oscila 92-99%
22h. Sus principales contraindicaciones para su uso son: (FDA). En EEUU su uso está restringido a gestaciones me-
nores de 49 días (desde FUR).
enfermedad cardiaca, enfermedad hepática o renal, pato-
logía pulmonar, EIP activa, cesárea clásica previa, hiper- Metotrexate. Su uso ha sido desplazado por el em-
sensibilidad. Se administrará con cautela en caso de asma, pleo masivo del Misoprostol. Bloquea la enzima dihidrofo-
hipertensión, diabetes mellitus, epilepsia, glaucoma, útero lato-reductasa, encargada de la producción de Timidina
con cicatrices previas y anemia falciforme. durante la síntesis del DNA.

1057
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

Tabla 3. Pautas más utilizados para realizar un aborto médico primer trimestre. (ACOG Practice Bulletin Nº 67, “Medical Management of Abortion”, Octubre
2005).

Pautas de administración Tasas de éxito (%) Ventajas e inconvenientes Edad Gestacional


Mifepristona 600mg v.o, Deben permanecer en observación 4 horas Hasta 49 días
92
+ Misoprostol 400mg v.oral (FDA) tras la administración (7s)
Comparado con el anterior:
- Tasa éxitos mayor.
Mifepristona 200mg v.o
95-99 - Expulsión fetal más rápida. Hasta 63 días. (9s)
+ Misoprostol 800mg vaginales
- Menores efectos secundarios.
- Requiere administración vaginal.
Comparado con los 2 anteriores:
Metotrexate 50mg/m2 i.m
92-96 - Tarda más tiempo en conseguirse Hasta 49 días
+ Misoprostol 800mg vaginales 3-7
la expulsión. (7s)
días después
- Medicación de coste menor.
- Pauta más complicada.
Misoprostol 800mg vaginales
88 - Mayor tasa de efectos secundarios. Hasta 56 días. (8s)
repetidas 2-3 veces
- Medicación de bajo coste.

Soluciones intrauterinas hiperosmolares: La instila- de urgencia en función de la severidad de la sintomatolo-


ción intraamniótica de soluciones hiperosmolares (salina hi- gía de la perforación.
pertónica, urea) para desencadenar las contracciones ute-
Hematometra: Retención de sangre y coágulos que
rinas es un método actualmente en desuso, debido a sus
ocurre normalmente en la primera hora del procedimiento
efectos adversos y su tiempo de latencia.
y ocasiona dolor abdominal hipogástrico. Requiere la eva-
cuación uterina y el empleo de uterotónicos.

COMPLICACIONES DEL ABORTO LEGAL Complicaciones retardadas: entre las 3h y los 28


La edad gestacional y el método empleado para la in- días del procedimiento (aparecen en un 1% de los
terrupción son los factores determinantes de la morbilidad casos).
del aborto legal. En general cuando se realiza por manos Infección: Generalmente secundarias a la retención de
expertas son procedimientos seguros. La morbilidad au- restos. Sus síntomas incluyen fiebre, dolor pélvico y san-
menta de forma proporcional a la edad gestacional. grado genital prolongado. El empleo de la ecografía para
descartar la presencia de restos es particularmente útil pa-
Complicaciones inmediatas: en las primeras ra el diagnóstico de una endometritis y su tratamiento an-
3h tras el procedimiento. tibiótico. Los síntomas sugestivos de sepsis avanzada (fie-
Hemorragia: Puede deberse a laceraciones vaginales o bre alta, postración, dolor abdominal importante,
cervicales, perforación uterina, evacuación uterina incom- taquicardia) requieren un manejo agresivo con antibiotera-
pleta o atonía uterina. Su aparición se minimiza empleando pia del amplio espectro, ingreso hospitalario, reevacuación
una técnica cuidadosa de legrado. uterina y descartar perforación uterina inadvertida.

Perforación uterina: El riesgo de perforación está es- Retención de restos: Ocasiona sangrado genital pro-
trechamente ligado a la experiencia del cirujano y al uso de longado, fiebre, dolor pélvico. Generalmente obliga a reali-
preparación cervical previa al legrado. Los síntomas y con- zar un legrado o a emplear en caso de que los restos se-
secuencias de la perforación dependerán de su localiza- an escasos fármacos que faciliten su expulsión con control
ción y extensión: una perforación fúndica puede ser inde- clínico.
tectable o menos grave, mientras que una lateral puede Gestación en curso: Esta complicación está descrita
dañar la vasculatura uterina y ocasionar una hemorragia en procedimientos realizados sobre gestaciones muy pre-
importante o un hematoma disecante del ligamento ancho. coces en tanto en procedimientos farmacológicos como
Están descritas asimismo lesiones de la vía urinaria y di- por aspiración. Son raras. Se ha descrito la aparición en el
gestiva. Se deberá realizar una laparoscopia o laparotomía feto de la secuencia Moebiüs resultante de la eventual in-

1058
INTERRUPCIÓN VOLUNTARIA DEL EMBARAZO. MÉTODOS

juria ejercida sobre el feto, consistente en parálisis oftálmi- SÍNTESIS ABORTO LEGAL Y MBE:
ca y facial y deformidades óseas en extremidades.
Existen publicadas varias guías de práctica clínica para
Complicaciones tardías: a partir de los 28 días del la realización de un aborto legal cuyas principales conclu-
procedimiento (son raras y si existen serán derivadas siones deben aplicarse a toda paciente que va a ser so-
de la aparición de complicaciones anteriores). metida a este procedimiento con distintos niveles de evi-
dencia clínica.
Sensibilización Rh: Es obligatorio realizar despistaje de
grupo y Rh en todos los procedimientos de aborto legal y Actuaciones anteriores al procedimiento:
realizar inmunoprofilaxis en gestante Rh negativas.

C • Debe determinarse realizarse una determinación de
Sinequias uterinas: Síndrome Asherman. La formación concentración de Hemoglobina, una determinación
de sinequias uterinas suele ser consecuencia de legrados de grupo sanguíneo y Rh. En función de las carac-
agresivos y más frecuentes si la intervención se complica terísticas individuales y de la prevalencia local pue-
con endometritis. de estar indicado realizar un despistaje de hemo-
globinopatias, HIV y Hepatitis B o C.
Gestaciones futuras: No se ha encontrado ninguna
asociación entre la realización de un aborto del primer tri- 
✔ • Es recomendable realizar una citología cervicovagi-
mestre y la aparición de complicaciones en embarazos nal en todas aquellas pacientes que no la tengan
posteriores, ni con la incidencia de cáncer de mama. La con anterioridad o no cumplan el intervalo reco-
asociación entre un aborto previo del segundo trimestre y mendado por las autoridades sanitarias locales.
la incidencia de partos prematuros posteriores tampoco ha

B • La realización de una ecografía previa a la interrup-
sido claramente establecida por ningún estudio metodoló- ción no es obligatoria pero se considera recomen-
gicamente correcto. dable para datar la gestación y descartar embarazo
ectópico.

MORTALIDAD 
A • Debe realizarse profilaxis antibiótica.

Los procedimientos realizados durante el primer tri-



C • Hay varias pautas adecuadas para realizar profilaxis
antibiótica previa a una interrupción mediante cirugía:
mestre son más seguros que aquellos hechos durante el
segundo (tasa mortalidad materna 0’1-0’4 muer- – Metronidazol 1gr rectal + doxiciclina
tes/100.000 abortos primer trimestre versus 1’7-8’9 muer- 100mg/12h voral 7 días.
tes/100.000 abortos segundo trimestre). Es importante – Metronidazol 1gr rectal+ Azitromicina 1gr voral.
destacar que en países desarrollados, como EEUU, la 
C • No existe evidencia clínica de que sea preciso rea-
mortalidad materna en relación con la interrupción de la lizar profilaxis antibiótica en casos de interrupciones
gestación a cualquier edad gestacional 0’6/100.000 es por métodos médicos.
muy inferior a la mortalidad materna en relación con gesta-
ciones de nacidos vivos 7’5/100.000 nacidos vivos. Esto Métodos quirúrgicos para interrumpir la gestación.
contrasta con la situación anteriormente comentada en el
tercer mundo donde hasta el 25% de las muertes mater- 
B • Deben evitarse los métodos de aspiración antes de
la 7s, tienen una tasa de fallos superior que los mé-
nas están en relación con la interrupción de la gestación
todos médicos.

B • El legrado por aspiración es el método apropiado
SEGUIMIENTO POSTABORTO para interrumpir las gestaciones entre 7-15 sema-
nas, aunque a partir de la semana 12 pueden ser
No existe evidencia de que sea necesaria una visita pos- más recomendable emplear métodos médicos si el
terior al procedimiento, los síntomas relacionados con la profesional sanitario no tiene experiencia suficiente
gestación desaparecen durante la primera semana y la en este tipo de legrados.
menstruación reaparece de forma espontánea en las prime-
ras 6 semanas posteriores. Es importante informar a la pa- 
✔ • El legrado debe realizarse con cánula de aspiración
ciente de los posibles síntomas y complicaciones que pue- y pinzas de fórceps, no debe terminarse con legra
den ocurrir durante los días posteriores al procedimiento cortante.
(fiebre, sangrado excesivo, dolor pélvico etc.) y establecer un 
B • El legrado por aspiración es más seguro si se reali-
circuito sencillo pero eficaz que permita hacer un seguimien- za bajo anestesia local, particularmente en edades
to clínico y un diagnóstico precoz de la complicaciones. gestacionales precoces.

1059
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)


A • Para interrupciones >15s, el método de dilatación y • Grade of Evidence recommendation level RCOG Na-
extracción precedido de preparación cervical es se- tional Evidence-Based Clinical Guidelines. “The care of
guro y efectivo cuando se realiza por profesionales Women Requesting Induced Abortion. September 2004.
experimentados en este tipo de interrupciones. 
A Requires at least one randomised controlled trial as part

B • La preparación cervical previa a una interrupción of a body of literature of overall good quality and con-
por legrado es beneficiosa y debe ofrecerse de ru- sistency addressing the specific recommendation (evi-
tina en pacientes menores de 18 años y con gesta- dence levels Ia, Ib).
ciones >10s.

B Requires the availability of well-conducted clinical stu-

B • Según la evidencia disponible para realizar la pre- dies, but no randomised clinical trials on the topic of the
paración cervical previa a la interrupción del primer recommendation (evidence levels IIa, IIb, III).
o segundo trimestre se recomienda:

C Requires evidence obtained from expert committee re-
– Misoprostol 400mg vaginales 3h antes de la ci- ports or opinions and/or clinical experience of respec-
rugía. ted authorities. Indicates an absence of directly appli-
cable clinical studies of good quality (evidence level IV).
Métodos médicos para interrumpir la gestación:
Good practice points Recommended best practice ba-

A • La interrupción médica de la gestación se conside- sed on the clinical experience of the Guideline Develop-
ra una alternativa aceptable a la quirúrgica en pa- ment Groups.
cientes adecuadamente informadas y selecciona-
das.

A • Las pautas que contienen Mifepristona+ Prostan- LECTURAS RECOMENDADAS
glandinas (B) son seguras y efectivas para interrup-
“Abortion” eMedecine (www.emedecine.com). Trupin S. Julio 2006.
ciones de hasta gestaciones de 63 días.
ACOG Practice Bulletin Nº 67, “Medical Management of Abor-

A • Las pautas que contienen Metotrexate y Misopros- tion”, October 2005)
tol están indicadas solo en gestaciones de hasta 49 “Clinical policy guidelines”. National Guideline Clearinghouse.
días y el aborto puede tardar en ocurrir con dicha March 2006
pauta hasta 4 semanas. “Kuller. R, Fekih A y cols.” Surgical methods for first trimester ter-
mination of pregnancy”. The Cochrane Database of Syste-

A • La administración del Misoprostol puede ser reali- matic Reviews. September 2004.
zada de forma segura por la propia paciente por vía Kuller. R, Gulmenzoglu, A M. Y cols. “Medical methods for first tri-
oral o vaginal. mester abortion”. The Cochrane Database of Systematic Re-

B • Dado que los fármacos empleados pueden ser te- views. August 2005.
ratógenos, debe indicarse un procedimiento quirúr- Medema. S, Wildschut. HIJ y cols. “Medical methods for mid-tri-
mester termination of pregnancy” The Cochrane Database of
gico en caso de fallo de la pauta médica.
Systematic Reviews. August 2005.

C • Se contemplará en todo momento la posibilidad de “Medical management of Abortion”. National Guideline Clearing-
realizar un legrado de urgencias en aquellas pa- house. March 2006
cientes (<1%) que durante el procedimiento pre- “Mifepristone for the medical termination of pregnancy”. © 2006
senten un sangrado genital excesivo. UptoDate®
Ministerio de Sanidad y Consumo. (www.msc.es).
Procedimientos posteriores:
“Overview of pregnancy termination” © 2006 UptoDate®

B • Está indicada la realización de profilaxis anti- isoin- Protocolo de IVE. Hospital de Fuenlabrada, Madrid. Julio 2004.
munización Rh en aquellas mujeres Rh negativas
RCOG National Evidence-Based Clinical Guidelines. “The care of
sometidas a un aborto en las primeras 72h postpro- Women Requesting Induced Abortion. September 2004.
cedimiento. Safe Abortion: Technical and Policy Guidance for Health

✔ • Se debe facilitar a toda paciente información de la Systems”. WHO. Geneve. 2003.
sintomatología que va a experimentar y una lista de Say. L, Kuller. R. y cols “Medical versus surgical methods for first
posibles motivos de consulta urgencia, así como trimester termination of pregnancy”. The Cochrane Database
of Systematic Reviews. August 2005.
proporcionar una atención médica continuada de
Shulman L.P, Frank W.L. “Surgical termination of pregnancy: First
urgencia 24 h.
trimester”. © 2006 UptoDate®

B • Facilitar el acceso a métodos de planificación fami- “Surgical Management of Abortion”. Roche. N.E. eMedecine
liar inmediatos a la interrupción. (www.emedecine.com). June 2006.

1060
Capítulo 115
MORTALIDAD MATERNA
González Mesa E, Larracoechea Barrionuevo J, Larracoechea Romarate JM

El concepto de mortalidad materna ha sufrido varias rante un período de tiempo determinado (generalmente 1
modificaciones a lo largo de este siglo. En su concepción año) con el número de mujeres gestantes durante el mis-
clásica, mortalidad maternal es el término que se utiliza pa- mo período. En la práctica no se usa este denominador por
ra etiquetar las muertes ocurridas por complicaciones del ser de difícil obtención, sino que se considera el número de
embarazo, parto y puerperio. nacidos vivos, cifra que aunque está estrechamente rela-
cionada con la de embarazos, no coincide con ella, ya que
Antes de 1958 no se establecía ninguna limitación de
habría que sumar las muertes fetales, y restar el exceso
tiempo para considerar que una muerte era debida a com-
condicionado por los embarazos múltiples.
plicaciones del embarazo, parto y puerperio, por lo que en
teoría podían incluirse mujeres muertas como consecuen- Para el cálculo de la tasa de mortalidad materna clási-
cia de complicaciones de un embarazo ocurrido años an- camente se ha utilizado el multiplicador 103, pero en los úl-
tes. En la actualidad la FIGO sólo considera muerte mater- timos años, por el gran descenso experimentado en las ci-
na a la que ocurre durante el embarazo o los siguientes 42 fras absolutas de mortalidad materna, la tasa es ya inferior
días después de su terminación. La Asociación Médica a la unidad en los países desarrollados, lo que ha obligado
Americana amplía este plazo hasta los 90 días después del a utilizar multiplicadores 104 o 105.
alumbramiento. Diversos estudios realizados en países desarrollados
En el Manual correspondiente a la IX Revisión de la Cla- ponen de manifiesto la subestimación de las tasa de mor-
sificación Internacional de Enfermedades (CIE-IX) la defun- talidad materna entre 25 y 80%. Las causas de esta su-
ción materna queda definida como la “muerte de una mujer bestimación tienen su origen en la deficiente declaración al
mientras está embarazada o dentro de los 42 días siguien- cumplimentar los certificados médicos o en la codificación
tes a la terminación del embarazo, independientemente de inadecuada
la duración y sitio del embarazo, debida a cualquier causa
relacionada con el embarazo o agravada por éste o su
atención, pero no a causas accidentales ni incidentales”. EVOLUCIÓN DE LAS TASAS DE
La defunción materna se denomina Directa si es “pro- MORTALIDAD MATERNA
ducida por alguna complicación obstétrica, intervenciones, Como es bien sabido, existen grandes diferencias
omisiones, tratamientos incorrectos o por una cadena de mundiales en la distribución de mortalidad materna, siendo
acontecimientos originada en cualquiera de las circunstan- más marcadas que las relacionadas con la mortalidad pe-
cias mencionadas”. Se entiende por defunción materna In- rinatal. A pesar de la reducción observada en los últimos
directa “la originada por una enfermedad existente desde años del número de muertes maternas en todo el mundo,
antes del embarazo o que evoluciona durante éste, no de- continúan observándose grandes diferencias cuando se
bidas a causas obstétricas directas, pero sí agravadas por comparan dos continentes distintos, dos países de un mis-
los efectos fisiológicos del embarazo”. mo continente, e incluso dos áreas geográficas de un mis-
Las cifras absolutas de mortalidad materna no sirven mo país, siendo la mala distribución de los recursos uno de
para medir la fuerza del fenómeno. Por ello habitualmente los factores responsables de estas desigualdades.
se utilizan las tasas de mortalidad materna, que son cifras Esta tendencia a la baja se inició a primeros de siglo, y
relativas que relacionan las absolutas con la población ex- ha sido paralela no sólo al desarollo científico sino a la me-
puesta. La población expuesta en este caso, está consti- jora de las condiciones socioeconómicas en las distintas
tuída por las mujeres embarazadas, por lo que, en teoría, comunidades. Una prueba de ello es que las causas obs-
las tasas deberían relacionar las cifras de mujeres muertas tétricas de mortalidad materna son muy similares en todos
por complicaciones del embarazo, parto y puerperio du- los países.

1061
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

La incorporación de los antibióticos al arsenal terapeú- o no, y que como consecuencia de éste va a agravarse
tico, el establecimiento de los bancos de sangre y las po- hasta sus máximas consecuencias. Las más frecuentes
sibilidades de transfusión, la institucionalización de la asis- hacen referencia a cardiopatías, sobre todo en el período
tencia al parto, la mejora conseguida en las técnicas de comprendido entre las 28 y 32 semanas de la gestación, y
asepsia y antisepsia, el mejor estado nutricional de la po- en el puerperio inmediato, nefropatías, hepatopatías y en-
blación, o la mejor preparación del personal sanitario, son fermedades endocrinometabólicas, sobre todo en relación
factores que claramente han condicinado el descenso de con la diabetes y el hipertiroidismo.
la mortalidad materna.
Actualmente se sabe que las mujeres más jóvenes
(menores de 20 años), las de 35 años o más, y las mujeres
que han tenido cuatro o más hijos tienen índices de morbi-
CAUSAS DE MORTALIDAD Y mortalidad mayores. El embarazo no deseado es un factor
MORBILIDAD de riesgo sobreañadido.
Por cada mujer que fallece como consecuencia de un La excesiva juventud de la madre es ya un factor de
embarazo, muchas más sobreviven pero padecen trastor- riesgo reproductivo en cualquier área del mundo. En los
nos a largo plazo para su salud. La incontinencia de orina, países subdesarrollados la incidencia de matrimonios pre-
gases o heces, el prolapso uterino, la esterilidad que con- coces es más alta. Así, en Bangladesh el 90% de las mu-
diciona una histerectomía obstétrica, las fístulas rectovagi- jeres se casan antes de los 18 años, y el 30% han tenido
nales o vésicovaginales, la dispareunia u otros procesos al menos dos hijos a los 19 años. En un estudio epidemio-
causados por complicaciones en el embarazo o parto con- lógico desarrollado en este país por Rochat en 1981 se pu-
tribuyen al sufrimiento crónico y la baja calidad de vida ex- so de manifiesto cómo las adolescentes menores de 15
perimentada por millones de mujeres. años presentaban una tasa de mortalidad maternal cinco
veces superior a la de las mujeres de 20 a 24 años. Patro-
Se consideran causas obstétricas directas de mortali-
nes similares de mortalidad han sido descritos en otros
dad materna a todas aquellas inherentes exclusivamente a
medios.
la gestación, parto o puerperio. En los países desarrollados
la hemorragia y la enfermedad hipertensiva son las más co- Pasados los 30-35 años el riesgo de mortalidad mater-
munmente halladas. En los países subdesarrollados las in- na también se eleva, sobre todo en los países subdesarro-
fecciones, las consecuencias de las roturas uterinas y las llados, en los que son más frecuentes los partos entre mu-
hemorragias son las más frecuentemente descritas. jeres de más edad.
Las causas obstétricas indirectas hacen referencia a Ajustando por cada grupo de edad, múltiples estu-
cualquier enfermedad preexistente al embarazo, conocida dios han puesto de manifiesto cómo la gran multiparidad

Gráfico 1. Distribución de la Mortalidad Materna en el mundo.

(Tomado de www.safemotherhood.org)

1062
MORTALIDAD MATERNA

actúa condicionando el riesgo de muerte materna. Los Un dato llamativo en los resultados viene representado,
partos en las mujeres de mayor edad tienden a ser par- por la diferencia de datos existente entre la tasa oficial de
tos de elevada paridad, muchos de los cuáles no han si- mortalidad materna publicada por el INE y la recogida di-
do planeados, y frecuentemente, no deseados. La plani- rectamente de los hospitales participantes (Tabla 1).
ficación familiar en este grupo de edad puede, según
Al igual que el resto de indicadores de salud mater-
estos datos, reducir significativamente el número de
noinfantil, la mortalidad materna está muy influída por va-
muertes maternas. riables biológicas, socioeconómicas y asistenciales. La
No obstante, ni los patrones reproductivos ni las com- edad de la mujer parece ser la variable biológica más im-
plicaciones obstétricas pueden explicar la diferencia exis- portante. En España, las tasas más bajas se dan en muje-
tente en las tasas de mortalidad materna de los países res de 20 a 30 años. Por debajo de 20 años y por encima
desarrollados con relación a la existente en aquellos países de 30, las tasas se incrementan de forma considerable,
en vías de desarrollo. Las posibilidades y la disponibilidad siendo máximas en el grupo de edad de 45 o más años.
de los servicios sanitarios actúan claramente condicionan- La paridad parece ejercer mucha menos influencia en
do estas diferencias. nuestro país que la edad de la madre. De hecho, las tasas
de mortalidad materna aumentan con la paridad, pero
La accesibilidad de los servicios de maternidad, la do-
cuando se ajusta esta variable con la edad de la madre,
tación en recursos técnicos y humanos, y su nivel de or-
sus efectos desaparecen.
ganización modifican el nivel de asistencia prestado a la
mujer y actúan como factores diferenciales de la mortali- En cuanto a la distribución por causas de las muertes
dad materna observada en los distintos países (Gráfico 1). maternas en España, el primer lugar por orden de impor-
tancia lo ocupan las hemorragias del embarazo y del parto
(tasa de 1,8 por 100.000 nacidos vivos y proporción de
MORTALIDAD MATERNA EN ESPAÑA 16,18% del total de muertes), seguidas en segundo lugar
por las toxemias del embarzo y el puerperio (tasa de 1,5
Las tendencias de la mortalidad materna en España por 100.000 nacidos vivos y proporción de 13,23%), en
durante este siglo han sido claramente decrecientes. Las tercer lugar por la sepsis (tasa de 1,2 por 100.000 nacidos
cifras absolutas han pasado de 3674 muertes en 1901 a vivos y proporción de 10,29%), y en cuarto lugar por la pa-
sólo 68 a principios de 1980. En los dos primeros decenios tología derivada del aborto (tasa de 1 por 100.000 nacidos
las cifras estuvieron estacionarias por encima de 3.000 vivos y proporción de 8,8%).
muertes, pero a partir de 1924 se inicia un descenso con-
Al igual que el resto de indicadores de salud mater-
tinuado hasta el principio de la década de los 80. El des-
noinfantil, la mortalidad materna está muy influída por va-
censo de las tasas de mortalidad materna ha sido paralela
riables biológicas, socioeconómicas y asistenciales. La
al de las cifras absolutas. De una tasa de 564,7 por
edad de la mujer parece ser la variable biológica más im-
100.000 nacidos vivos en 1901, se ha pasado a una de
portante. En España, las tasas más bajas se dan en muje-
11,5 por 100.000 nacidos vivos en 1980, y en torno a 7,5
res de 20 a 30 años. Por debajo de 20 años y por encima
por 100.000 nacidos vivos en 1997.
En el año 2002 fueron publicados los resultados de una
Tabla 2. Mortalidad materna y atención sanitaria (Tomado I.N.E.).
encuesta hospitalaria de mortalidad materna dirigida por el
Dr. de Miguel Sesmero en la que participaron 69 hospita- Todas las Causas Partos Asistidos
Año Abortos
les repartidos por la geografía española. En ella se reco- causas directas centros sanitarios
gieron los casos de muerte materna en el período 1995- 1985 20 11 9 82,5%
1997. Sobre un total de 363589 nacidos vivos se obtuvo 1986 24 21 3
una tasa de 7,15 por 100000 nacidos vivos.
1987 21 20 1
1988 21 17 4
Tabla 1 Tasa de Mortalidad materna recogida en la Encuesta Hospitalaria
de Mortalidad Materna 1995-1997, comparada con la obtenida de los 1989 12 9 2
datos del INE. 1990 22 19 2 88,1%
I.N.E. Encuesta 1995-1997 1991 13 12 1
Nacidos vivos 1.090.921 363.589 1992 19 19 0
Muertes maternas 30 26 1993 12 9 3
Tasa Mortalidad Materna 2,74/100000 7,15/100000 1994 13 13 0
Ratio Mortalidad Materna 1/36364 1/14.663 1995 10 10 1 99,1%

1063
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

Tabla 3. Causas Indirectas de Muerte materna en España. Encuesta por las toxemias del embarzo y el puerperio (tasa de 1,5
Hospitalaria 1995-1997.
por 100.000 nacidos vivos y proporción de 13,23%), en
Hemorragias subaracnoideas tercer lugar por la sepsis (tasa de 1,2 por 100.000 nacidos
Patología neoplásica vivos y proporción de 10,29%), y en cuarto lugar por la pa-
tología derivada del aborto (tasa de 1 por 100.000 nacidos
Patología cardiovascular: Infarto de miocardio,
valvulopatía, edema pilmonar vivos y proporción de 8,8%).
Patología infecciosa: HIV positivo, sepsis

LECTURAS RECOMENDADAS
de 30, las tasas se incrementan de forma considerable, Bouvier-Colle: Mortalité maternalle. Ency. Med. Chir. Obstet. Edi-
siendo máximas en el grupo de edad de 45 o más años. tions Techniques, 1994.
La paridad parece ejercer mucha menos influencia en De Miguel J.R., Temprano M. Muñoz P, et al. Mortalidad materna
nuestro país que la edad de la madre. De hecho, las tasas en España en el período 1995-1997: resultados de una en-
de mortalidad materna aumentan con la paridad, pero cuesta hospitalaria. Prog Obstet Ginecol 2002; 45 (12):525-34
cuando se ajusta esta variable con la edad de la madre, Fabre E: Encuesta Nacional de Mortalidad Perinatal. 1995.
sus efectos desaparecen. Gallo M: Memoria asistencial 1981-1994 del Departamento de
Obstetricia y Ginecología HR Materno Infantil. Málaga.
En cuanto a la distribución por causas de las muertes
Piédrola G: Medicina Preventiva y Salud Pública. Salvat. Barcelo-
maternas en España, el primer lugar por orden de impor- na, 1990.
tancia lo ocupan las hemorragias del embarazo y del parto WHO. Maternal Mortality Ratio and Rates Tabulation of Available
(tasa de 1,8 por 100.000 nacidos vivos y proporción de Information (3rd Edition). Maternal Health and Safe Metlier
16,18% del total de muertes), seguidas en segundo lugar Prood Program. WHO. Geneve, 1991.

1064
Capítulo 116
OBTENCIÓN DEL TÍTULO DE DOCTOR
Orensanz I, Almagro- Martínez J, Salazar FJ

ESTUDIO DE DOCTORADO El Gobierno puede establecer límites máximos de ad-


misión de estudiantes, tanto para Universidades públicas
1. Normativa de tercer ciclo como para privadas. En el caso de la enseñanza pública,
son las Comunidades Autónomas las que deben progra-
Los estudios de tercer ciclo para la obtención del grado
mar la enseñanza de las Universidades y demás centros de
de Doctor en las Universidades españolas están regidos por
su competencia, y la oferta de plazas debe ser publicada
lo dispuesto en la Ley Orgánica 6/2001 de 21 de diciembre
en el BOE.
de 2001 (BOE 24 de diciembre de 2001) de Universidades,
por el Real Decreto 778/1998, de 30 de abril (entrada en vi- En esta ley también se reconocen los derechos y de-
gor el 1 de octubre de 1998), por el que se regula el tercer beres de los estudiantes universitarios, aunque cada Uni-
ciclo de estudios universitaria, la obtención y expedición del versidad puede tener sus propias normas y criterios y es-
título de doctor y otros estudios de postgrado, y por el Real tablecer los procedimientos que considere oportuno para
Decreto 56/2005 de 21 de enero de 2005 (BOE 25 de ene- la verificación de los conocimientos de los estudiantes.
ro de 2005) por el que se regulan los estudios universitarios
El Real Decreto 56/2005 define el título de Doctor co-
oficiales de posgrado, y por las demás disposiciones sobre
mo aquél que representa el nivel más elevado en la educa-
dicha materia promulgadas por el Estado español, las Con-
ción superior, acredita el más alto rango académico y fa-
sejerías de Educación y Cultura de las distintas Comunida-
des Autónomas y por las propias Universidades. culta para la docencia y la investigación.

La Ley Orgánica 6/2001 de 21 de diciembre de 2001 Este Real Decreto destaca la importancia de los estu-
reconoce que el título de doctor en medicina tiene carác- dios de Posgrado par reforzar la educación y el avance de
ter oficial y validez en todo el territorio nacional. Define los la sociedad, y ofrece un marco jurídico que permite a las
estudios de doctorado como aquéllos que tienen como fi- universidades españolas estructurar las enseñanzas de
nalidad la especialización del estudiante en su formación Posgrado de una forma más flexible y autónoma, para así
investigadora dentro de un ámbito del conocimiento cien- poder equilibrarlas y equipararlas a las del ámbito europeo
tífico, técnico, humanístico o artístico. y mundial.

Estos estudios se organizarán según dicten los Estatu- Las Universidades adquieren autonomía para definir y
tos aprobados por el Gobierno, de acuerdo con criterios organizar la formación especializada e investigadora, aun-
que incluyen el seguimiento y superación de materias de que el Real Decreto establece los procedimientos para ga-
estudio y la elaboración, presentación y aprobación de un rantizar la calidad de las enseñanzas dadas en los progra-
trabajo original de investigación. mas de doctorado.

Esta ley intenta fomentar la investigación dentro de la El Real Decreto no impone directrices sobre los conte-
Universidad y reconoce y garantiza la libertad de investiga- nidos formativos de las enseñanzas impartidas, siempre
ción dentro de la misma, y que la Universidad asume la in- que se cumplan las diretrices generales de organización y
vestigación como uno de sus objetivos esenciales y la in- estructura que garanticen los requisitos mínimos de cali-
vestigación es un derecho y un deber del personal docente dad.
e investigador de las Universidades.
Este Real Decreto favorece la comunicación y cola-
La Ley también reconoce la autonomía de las Universi- boración interdepartamental e interuniversitaria a la hora
dades en sus procedimientos para admitir a sus estudian- de realizar un programa de Posgrado, aunque siempre
tes, siempre que cumpla la normativa básica establecida tiene que quedar preestablecido qué departamento es
por el Gobierno y respete los principios de igualdad, méri- responsable del contenido de un programa y de la eva-
to y capacidad. luación y certificación de los conocimientos de los estu-

1065
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

diantes que acceden a cada curso o seminario impartido 1. Período de docencia


en cada programa. Comprende un mínimo de 20 créditos universitarios
La implantación de los nuevos planes de estudio cita- (1 crédito = 10 horas) correspondientes a cursos o
dos en este real decreto se realizará en función de las dis- seminarios.
ponibilidades económicas de las instituciones responsa- 2. Período de investigación tutelada
bles de la enseñanza universitaria. Es de aplicación para Mínimo 12 créditos para el desarrollo de no o varios
universidades tanto públicas como privadas. La Universi- trabajos de investigación tutelados dentro del de-
dad de la Iglesia Católica se ajustará a las directrices de es- partamento que ha propuesto el programa de doc-
te Real Decreto. La Universidad Internacional Menéndez torado que está realizando el doctorando. Para cur-
Pelayo podrá organizar y desarrollar programas oficiales de sar este periodo es necesario haber realizado el
Posgrado de carácter oficial y con validez en todo el terri- periodo de docencia previo
torio español, y también podrá suscribir convenios de co-
laboración con otras universidades o institutos universita- c) Reconoce las actividades formativas de tercer ciclo y
rios de investigación nacionales o extranjeros. delega en la Universidad la limitación de la actividad do-
cente de cada departamento
El Real Decreto 778/1998 para garantizar la calidad de
los programas de doctorado: d) Intenta conseguir un mayor rigor científico de la tesis
doctoral al garantizar la independencia de los miem-
a) Propone un número mínimo de alumnos por programa bros del Tribunal calificador, y al imponer una fase de
b) Estructura los programas de doctorado en dos perio- evaluación y discusión de la tesis previa a la defensa
dos pública de la misma. Además se amplía el rango de ca-

Créditos Título
Primer período Mínimo 20 créditos (200 horas), 15 de Superado este primer período se obtiene
los cuales serán en materias fundamen- un Certificado de docencia, homologa-
tales incluidas en un programa de docto- ble en todas las universidades españo-
rado y los restantes, bien en materias afi- las.
Período docente nes o metodológicas del programa, bien
Primera fase
en cursos o seminarios fuera del progra-
32 créditos ma.
(duración mínima Créditos Título
2 años) Segundo período
Tras la superación del primer período, el Finalizados los dos períodos, un tribunal
alumno cursará 12 créditos de trabajos examinará los resultados y certificará la
tutelados de iniciación a la investigación, superación de esta fase otorgando el Tí-
Iniciación a la que se pueden repartir en uno o más tra- tulo / Diploma de Estudios Avanza-
investigación bajos de investigación. dos, homologable en todas las universi-
dades españolas.
Definición Requisitos previos y procedimiento Título
Elaboración y defen- • Haber completado los créditos reque- • Tras la defensa de la tesis y la aproba-
sa de una tesis doc- ridos en el programa y haber obtenido ción por parte de un tribunal se obtie-
toral, la cual consiste el Diploma de Estudios Avanzados. ne el título de Doctor.
en una investigación • El estudiante necesita la aprobación
con resultados origi- de un Director de Tesis, que tiene que
nales relacionados ser Doctor, para la supervisión y ayu-
Segunda fase
con el programa de da en la investigación. Si el Director no
(sin límite máximo
Doctorado en el cual pertenece al departamento, adicional-
de duración)
el alumno está inscri- mente se nombrará un tutor en repre-
to. sentación del mismo.
• El alumno debe presentar en el depar-
tamento el proyecto de tesis con el in-
forme favorable de su Director para su
posterior aprobación y registro.

Estructura de los estudios de doctorado


Real Decreto 778/98 del 30 de abril (BOE 1 de mayo de 1998)

1066
OBTENCIÓN DEL TÍTULO DE DOCTOR

lificaciones de las tesis doctorales y se elimina el plazo a su vez programas oficiales de posgrado interdeparta-
máximo de su presentación mentales e interuniversitarios, pero se debe especificar qué
departamento y Universidad es responsable de la tramita-
Limita el número de denominaciones del título de Doc-
ción de los expedientes de los estudiantes, y de la expedi-
tor a uno por Universidad para evitar prolongaciones de los
ción y registro del título de Posgrado.
títulos de segundo ciclo, pero en el título de doctor sí apa-
rece la denominación del título previo del doctorando, la Las Subcomisiones de evaluación de las enseñanzas
Universidad, el lugar y la fecha de expedición del mismo, el Universitarias evaluarán el contenido científico, técnico o
programa de doctorado y el Departamento responsable artístico de los programas de doctorado de las Universida-
del mismo. des.
Los programas de doctorado deben comprender:
2. Información general
a) Cursos o seminarios sobre los contenidos fundamen-
Los estudios de tercer ciclo tienen como finalidad la tales de los campos científico, técnico o artístico a los
formación avanzada del doctorando en las técnicas de in- que esté dedicado el programa de doctorado corres-
vestigación. pondiente.
Para obtener el título de doctor es necesario: b) Cursos o seminarios relacionados con la metodología y
– Estar en posesión del título de Licenciado, Arquitecto, formación en técnicas de investigación.
Ingeniero o equivalente u homologado a ellos. c) Trabajos de investigación tutelados.
– Realizar y aprobar los cursos, seminarios y trabajos de d) Cursos o seminarios relacionados con campos afines
investigación tutelados del programa de doctorado del al del programa y que sean de interés para el proyecto
Departamento correspondiente y obtener la suficiencia de tesis doctoral del doctorando.
investigadora.
– Presentar y aprobar una tesis doctoral consistente en 3. Admisión a los programas de doctorado
un trabajo original de investigación
La finalidad de los estudios universitarios de tercer ci-
Los programas de Posgrado se elaborarán y organiza- clo tiene como finalidad de formación avanzada del docto-
rán según establezca cada universidad según los criterios rando en las técnicas de investigación. Dicha formación se
y requisitos académicos dictados por la normativa oficial lleva a cabo mediante cursos, seminarios y cualquier otra
del Estado español. De esta forma la Universidad estable- actividad dirigida a la formación investigadora del docto-
ce las líneas de investigación de sus estudiantes y la rela- rando y a la elaboración y presentación de la tesis docto-
ción de profesores e investigadores encargados de la di- ral.
rección de tesis doctorales, el número máximo de
Las universidades deben establecer las líneas de inves-
estudiantes por programa, los criterios de selección y la
tigación de cada uno de sus programas oficiales de Pos-
programación y requisitos de formación metodológica o
grado, la relación de profesores e investigadores encarga-
científica.
dos de la dirección de tesis doctorales, el número máximo
Las universidades deben enviar al Consejo de Coordi- de estudiantes, los criterios de admisión y selección, y la
nación Universitaria los programas de Posgrado que dese- programación y requisitos de formación metodológica o
an impartir antes del 15 d febrero del curso académico an- científica.
terior al que se deseen impartir dichos cursos. Una vez
Para solicitar su admisión en el doctorado el estudian-
evaluados los distintos programas por el Consejo de Coor-
te deberá haber obtenido previamente un mínimo de 60
dinación Universitaria, los programas probados serán pu-
créditos en programas oficiales de Posgrado o hallarse en
blicados en el BOE.
posesión del título oficial de Master, siempre que haya
Una vez implantados los programas oficiales de pos- complementado entre sus estudios universitarios de Grado
grado serán evaluados por la Agencia nacional de Evalua- y Posgrado un mínimo de 300 créditos.
ción de la Calidad y Acreditación. Los criterios de calidad
Los estudiantes pueden acceder a cualquier programa
requeridos para la acreditación de un programa de docto-
oficial de Posgrado, en cualquier universidad, siempre que
rado son publicados por el Ministerio de Educación y Cien-
hayan superado los requisitos de admisión del órgano res-
cia.
ponsable del citado programa de Posgrado. La admisión
Los programas de doctorado serán propuestos y coor- de los estudiantes en el doctorado se regulará por cada
dinados por un Departamento universitario. Pueden existir universidad.

1067
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

Primera fase – Primer período Únicamente deben ser admitidos por el departamen-
to correspondiente.
Primera fase – Segundo período Presentar el Certificado del primer período expedido
Admisión por una universidad española.
Licenciados,
Presentar el Diploma de Estudios Avanzados expedi-
Ingenieros o
Segunda fase do por una universidad española.
Arquitectos
españoles Homologado por el Ministerio de Educación, Cultura Solicitar la admisión acreditando la homologación del
y Deporte, con el español de Licenciado, Ingeniero o título y efectuar posteriormente la preinscripción en el
Arquitecto departamento responsable del programa de Docto-
rado.
Sin homologar Dos requisitos previos para la matrícula:
• Resolución favorable de admisión previa otorgada
por la Comisión de Doctorado de la Universidad.
• Admisión al programa de Doctorado concreto por
Admisión de parte del departamento responsable.
alumnos con título Tras la finalización del Doctorado, si no se obtiene la
extranjero homologación del título de grado previo, el título de
Doctor no tendrá validez oficial.
Admisión al segundo período o a la segunda fase Acreditar a la Comisión de Doctorado la obtención
de un título extranjero equivalente al Certificado del
primer período o al Diploma de Estudios Avanzados.

Con el RD 56/2005 queda derogado el RD 778/1998, mismo, debe formalizar su matrícula como estudiante de
aunque éste último podrá seguir siendo aplicado a los pro- doctorado, lo que le otorgará el derecho a un tutor para
gramas de doctorado iniciados con anterioridad al RD sus trabajos de investigación, utilización de los recursos
56/2005 de 21 de diciembre de 2005 hasta el inicio del necesarios para el desarrollo de su trabajo y a los derechos
curso académico 2007-2008, fecha en que se prevé la de- de participación de cualquier otro estudiante admitido en
finitiva extinción de los programas de doctorado vigentes. un programa oficial de Posgrado.
Los estudiantes que hayan iniciado sus estudios de docto-
rado según dicta el RD 778/1998 de 30 de abril de 1998 u
4. Reconocimiento de la suficiencia
otros previos, serán admitidos en programas oficiales de
doctorado sin perjuicio alguno y podrán solicitar a la uni-
investigadora
versidad que les corresponda el reconocimiento de los Previamente a la defensa de la tesis doctoral el docto-
créditos de los cursos y trabajos de investigación realiza- rando deberá obtener un mínimo de 32 créditos en el pro-
dos con anterioridad. Sin embargo la regulación de elabo- grama de doctorado al que esté adscrito distribuidos:
ración, tribunal, defensa y evaluación de la tesis doctoral se
debe realizar según dicta el RD 56/2005 a partir de los seis a) Periodo de docencia: Mínimo 20 créditos (1 crédito =
meses de su entrada en vigor. 10 h lectivas)

Traslados de Universidad Al menos 15 créditos deben corresponder a cursos o


seminarios sobre los contenidos fundamentales de los
Para garantizar el derecho al estudio reconocido en la campos científico, técnico o artístico a los que está de-
Ley de Reforma Universitaria, las comisiones de Doctorado dicado el programa de doctorado. Se pueden comple-
podrán admitir a estudiantes de doctorado de otras univer- tar hasta un máximo de 5 créditos con cursos o semi-
sidades. Los cursos, seminarios y trabajos de investigación
narios no contemplados en el programa de doctorado,
tutelados de doctorados declarados como apto en otra uni-
previa autorización del tutor.
versidad serán convalidados en la Universidad receptora si
cumplen los requisitos de la legislación correspondiente, Estos cursos deben tener un mínimo de 3 créditos.
según prevean las normas de la Universidad receptora. Los
Una vez superados los 20 créditos del periodo de do-
alumnos quedan sometidos al régimen general de la Uni-
cencia el doctorando puede obtener un Certificado que
versidad receptora y del Departamento correspondiente
acredita que ha superado el curso de docencia de ter-
Una vez un estudiante es admitido dentro de un pro- cer ciclo de estudios universitarios, y que es homolo-
grama de doctorado por el Departamento responsable del gable en todas las Universidades españolas.

1068
OBTENCIÓN DEL TÍTULO DE DOCTOR

b) Periodo de investigación: Mínimo 12 créditos luarla. El tribunal debe estar compuesto por siete miembros,
cinco titulares y dos suplentes, todos con el título de doctor
Estos créditos deben invertirse en el desarrollo de uno
y con experiencia investigadora acreditada. No pueden for-
o varios trabajos de investigación tutelados que se de-
mar parte del tribunal el director de la tesis, salvo casos de
ben realizar dentro del Departamento que desarrolle el
tesis presentadas en el marco de acuerdos bilaterales de
programa de doctorado al que esté adscrito el docto-
cotutela con universidades extranjeras que así lo tengan pre-
rando. Para cursar el periodo de investigación es nece-
visto; más de dos miembros del órgano responsable del
sario haber completado el periodo de docencia.
programa oficial de Posgrado del doctorando ni más de tres
Para superar el periodo de investigación se exige la miembros de la misma universidad o de Organismos Públi-
presentación del trabajo o trabajos de investigación, y cos de Investigación. La comisión de Doctorado debe elegir
se valora la capacidad investigadora del doctorando en entre los miembros del tribunal a un presidente, que debe
función del trabajo o trabajos realizados y de las publi- ser catedrático universitario, un secretario y tres vocales. El
caciones especializadas en las que hayan podido ser acto de defensa pública de la tesis será convocado por el
publicados éstos. Presidente y comunicado por el Secretario a la Comisión
Una vez superados ambos periodos, se valorarán los con una antelación mínima de 15 días naturales a su cele-
conocimientos adquiridos por el doctorando en los cursos, bración. En dicho acto deben estar presentes los cinco
seminarios y periodo de investigación tutelado, en una ex- miembros que constituyen el Tribunal. En caso de imposibi-
posición pública ante un Tribunal único para cada programa. lidad de asistencia de algunos de los miembros titulares de-
signados por la Comisión, debe sustituirle el primer suplen-
Una vez superada esta valoración se garantiza la sufi- te y, si no es posible, el segundo suplente. En situaciones
ciencia investigadora del doctorando, que puede obtener muy excepcionales, de posibles incidencias que surjan en el
un certificado-diploma acreditativo de los estudios avanza- propio acto de lectura de tesis, el Director del Departamen-
dos realizados, y que es homologable en todas las Univer- to de que se trate o el propio Presidente del Tribunal, debe
sidades españolas. Si hay varias áreas de conocimiento, el comunicarlo inmediatamente a la Comisión a través de su
trabajo o trabajos de investigación y el certificado-diploma Presidente. La Comisión, reunida o consultada de urgencia,
debe estar vinculado a una de ellas. analizará la situación y tomará una decisión.
• El acto de defensa de la tesis tendrá lugar en sesión pú-
5. Evaluación y lectura de la tesis doctoral
blica y consistirá en la exposición por el doctorando de
La tesis doctoral deberá consistir en un trabajo original de la labor realizada, la metodología, el contenido y las con-
investigación relacionado con los campos científico, técnico, clusiones, con una especial mención a sus aportaciones
humanístico o artístico del programa de posgrado. Para su originales. Tanto los miembros del tribunal como los
elaboración, el órgano responsable del programa de Posgra- doctores presentes en el acto formularán al doctorando
do debe asignar al doctorando un director de tesis, que tie- las cuestiones que estimen oportunas según indique el
ne que ser doctor con experiencia investigadora acreditada. presidente del tribunal evaluador. Una vez finalizada la
La tesis puede ser codirigida por uno o por más doctores. defensa y discusión de la tesis cada miembro del tribu-
nal formulará por escrito su valoración personal, y según
Una vez finalizada la tesis doctoral, y aprobada por su
esto el tribunal emitirá la calificación global, que podrá
director, el doctorando debe depositarla según determine
ser no apto, aprobado, notable y sobresaliente. El tribu-
la universidad, para que otros doctores puedan remitir las
nal podrá otorgar la mención de Cum Laude si la califi-
observaciones oportunas. El órgano responsable del pro-
cación global es de sobresaliente y se emite, en tal sen-
grama de Posgrado del doctorando debe remitir la tesis
tido, el voto favorable de, al menos, 4 de sus miembros.
doctoral y la documentación recibida a la comisión de Doc-
torado. También se debe enviar a la comisión una pro- Para la presentación de la tesis doctoral en otro idioma
puesta de expertos en la materia que puedan formar parte de la UE, no es necesario solicitar autorización previamente
del tribunal encargado de juzgar la tesis doctoral, y la co- en cada caso sino que la Comisión de Doctorado lo autori-
rrespondiente aceptación de los miembros propuestos. za siempre que se acompañe, al menos, la introducción o
Con toda esta información la comisión de Doctorado deci- presentación y las conclusiones de la tesis en castellano. Pa-
de si autoriza o no a la defensa de la tesis doctoral. En ca- ra que la tesis se pueda exponer en un idioma extranjero, se
so de no autorización debe comunicarlo por escrito al doc- necesitará el acuerdo de todos los miembros del Tribunal.
torando, al director de tesis y al órgano responsable del
Una vez aprobada la tesis doctoral, la universidad se
programa de Posgrado, con las razones de su decisión.
debe ocupar de archivarla y de remitir al Ministerio de Edu-
Una vez autorizada la defensa de la tesis doctoral la co- cación y Ciencia y al Consejo de Coordinación Universita-
misión de Doctorado debe nombrar a un tribunal para eva- ria la ficha de tesis reglamentaria.

1069
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

En el anverso del título de Doctor se podrá incluir la Defensa de tesis doctoral en régimen
mención “Doctor europeus” si se cumplen las siguientes de co-tutela
condiciones:
Definición:
a) Que durante la etapa de formación del doctorando en
el programa oficial de <posgrado haya realizado una Inscripción y presentación de una única tesis en un De-
estancia mínima de tres meses en una institución de partamento de una Universidad española y en otro de una
enseñanza superior de un Estado europeo distinto de Universidad de otro país perteneciente a la Unión Europea
España cursando estudios o realizando trabajos de in- para su posterior defensa y para la obtención del Título de
vestigación que le hayan sido reconocidos por el órga- Doctor por las dos universidades donde se ha presentado
no responsable del programa de Posgrado. la Tesis Doctoral
b) Que al menos el resumen y las conclusiones se hayan Este proceso está regulado por las leyes españolas
redactado y presentado en una de las lenguas oficiales que regulan la normativa de los estudios de Tercer Ciclo y
de la Unión Europea distintas a alguna de las lenguas la normativa propia de la Universidad española donde se
oficiales en España. presenta la tesis doctoral, y por la legislación correspon-
c) Que la tesis haya sido informada por un mínimo de dos diente a los estudios de tercer ciclo de la otra Universidad.
expertos pertenecientes a alguna institución de educa- Para poder llevarse a cabo la defensa de una tesis doc-
ción superior o instituto de investigación de un Estado toral en régimen de co-tutela es requisito imprescindible la
miembro de la Unión Europea distinto de España firma de un convenio específico para cada caso particular,
d) Que, al menos, un experto perteneciente a alguna ins- a propuesta de la Universidad en la que se vaya a leer la
titución de educación superior o instituto de investiga- tesis doctoral.
ción de un Estado miembro de la Unión Europea dis-
Características generales:
tinto de España, con el grado de doctor, y distinto de
los mencionados en el párrafo anterior, haya formado El proceso de defensa de una tesis doctoral en régimen
parte del tribunal evaluador de la tesis. de co-tutela se inicia con la presentación del proyecto de
La defensa de la tesis se realizará en la universidad es- tesis en el Departamento correspondiente, mediante la so-
pañola en la que esté matriculado el doctorando. licitud del interesado, dirigida al Director del Departamen-
to. En el caso de que latesis estuviera previamente inscri-
Las universidades podrán nombrar Doctor “honoris ta, el Departamento deberá ratificar la misma en régimen
causa” a las personas que, en atención a sus méritos aca- de cotutela. Una vez aprobada la solicitud por el Consejo
démicos, científicos o personales, sean acreedoras de tal de Departamento será remitida a la Comisión de Doctora-
consideración. do para su estudio y aprobación si procede, acompañada
del correspondiente convenio de colaboración específico.
6. Estudios en el extranjero Una vez estudiada la solicitud y dado el visto bueno al Con-
venio, se arbitrará el procedimiento que corresponda para
En España, los estudios de grado realizados en el ex-
la firma del mismo.
tranjero son reconocidos a nivel nacional siempre que
cumplan con los requisitos legales establecidos para los La tesis deberá inscribirse en las dos Universidades
estudios de grado nacionales. con exención de pago en una de ellas.
La universidad evalúa y reconoce parte de los estudios El doctorando deberá tener un director de tesis en ca-
realizados en el extranjero en las siguientes modalidades: da universidad.

Acuerdos de cooperación Programas desarrollados conjuntamente y aprobados por las instituciones participantes.
interinstitucionales
Supervisión conjunta de tesis Los estudiantes de Doctorado tienen dos supervisores de tesis en dos países diferentes. Los
(convenios de cotutela) estudiantes reciben una doble titulación concedida por ambos socios.
Programas de movilidad Estancias de tres a doce meses en instituciones en el extranjero (no se permite la matricula-
(SÓCRATES / ERASMUS) ción en las dos instituciones al mismo tiempo). Los estudiantes reciben la titulación de la uni-
versidad “de origen”.
Mención de “Doctorado Europeo” Estancia de al menos tres meses en otra universidad europea, tras la cual los estudiantes tie-
nen una evaluación internacional con al menos dos miembros de dos universidades europeas
no españolas.

1070
OBTENCIÓN DEL TÍTULO DE DOCTOR

El tiempo de duración de la investigación de la tesis a) Certificación acreditativa de la nacionalidad del solici-


doctoral no podrá ser inferior a dos años. El tiempo de es- tante (fotocopia compulsada del DNI o pasaporte).
tancia mínimo en una de las Universidades no será inferior
b) Copia compulsada del título de doctor cuya homologa-
a nueve meses, completándose el periodo restante en la
ción se solicita o de la certificación acreditativa de su
otra. Dicha estancia podrá realizarse en una sola vez o en
expedición.
varios periodos y en todo caso, deberá tener lugar con
posterioridad al inicio del trámite de la solicitud de cotute- c) Copia compulsada de la certificación académica de los
la. El cómputo del plazo de presentación de la tesis se con- estudios realizados por el solicitante para la obtención
tabilizará desde el momento de la aprobación de la cotute- del título de doctor, en la que consten, entre otros ex-
la en la Comisión de Doctorado tremos, la duración oficial, en años académicos, del
programa de estudios seguido, las asignaturas cursa-
En la presentación de la tesis doctoral, el tribunal en-
das, la carga horaria de cada una de ellas y sus califi-
cargado de juzgar la misma será designado entre las dos
caciones.
Universidades ateniéndose en su composición a la legis-
lación en vigor en cada uno de los dos países. Los gas- d) Memoria explicativa de la tesis realizada, redactada en
tos originados por los profesores desplazados para el ac- castellano y firmada por el interesado, con indicación
to de la lectura, estarán regulados en el Convenio de los miembros del jurado y calificación, así como un
específico. ejemplar de ésta.
La redacción de la tesis se realizará en una de las dos e) Publicaciones a las que haya dado lugar la tesis docto-
lenguas oficiales previstas por las dos Universidades de los ral.
dos países implicados y se completará con un resumen es-
f) Justificación del abono de la tasa de homologación co-
crito en el otro idioma.
rrespondiente.
La publicación, explotación y protección de los resulta-
g) La Comisión de Doctorado de la Universidad recepto-
dos de la investigación realizada serán aseguradas por las
ra, podrá solicitar documentación complementaria
dos instituciones de acogida del doctorado conforme a los
cuando lo considere necesario.
procedimientos específicos de cada país.
En el título de Doctor se incluirá la mención de “cotute- En tal sentido, sólo se admitirán, con comunicación al
la” con la Universidad de… interesado, las solicitudes de homologación que vengan
avaladas por un Departamento, Instituto Universitario de
La Comisión de Doctorado realizará el seguimiento y Investigación o Grupo de investigación reconocido o Cen-
control de las tesis doctorales en cotutela tro Mixto Universidad-Consejo de Investigaciones Científi-
En el convenio de co-tutela se indicará el Departamen- cas.
to y la Universidad en que tendrá lugar la defensa de la te- A tales efectos, deberá emitirse por cualesquiera de los
sis doctoral. Cualquier modificación de las previsiones es- anteriores centros o estructuras, con carácter previo a la
tablecidas debe ser aprobada por la Comisión de presentación de la correspondiente solicitud de homologa-
Doctorado. ción por el interesado, un informe escrito motivando la re-
El Departamento enviará a la Comisión de Doctorado lación existente entre la tesis doctoral realizada y las líneas
cualquier convenio que presente la Universidad contrapar- o equipos de investigación de la Universidad, que aquél
te de la co-tutela, para que sea examinado por ésta. deberá acompañar a su solicitud junto con el resto de la
documentación de carácter obligatorio.
7. Homologación de títulos extranjeros de
Requisitos de los documentos:
educación superior
Los documentos expedidos en el extranjero deberán
El R.D. 309/2005, de 18 de marzo (BOE del 19) esta-
ajustarse a los requisitos siguientes:
blece la competencia para la homologación a títulos y gra-
dos académicos de posgrado en los rectores de las Uni- 1. Deberán ser oficiales y estar expedidos por las autori-
versidades españolas. dades competentes para ello, de acuerdo con el orde-
namiento jurídico del país de que se trate.
Solicitud:
2. Deberán presentarse legalizados por vía diplomática o,
El procedimiento se iniciará mediante solicitud del inte- en su caso, mediante la apostilla del Convenio de La
resado, dirigida al Rector de la Universidad, acompañada Haya. Este requisito no se exigirá a los documentos ex-
de los siguientes documentos: pedidos por las autoridades de los Estados miembros

1071
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

de la Unión Europea o signatarios del Acuerdo sobre el La resolución se adoptará, en todo caso, de acuerdo con los
Espacio Económico Europeo. criterios y causas de exclusión establecidos por la normativa de
homologación de títulos extranjeros vigente y al amparo de la cual
3. Deberán ir acompañados, en su caso, de su corres-
se desarrolla el presente procedimiento.
pondiente traducción oficial al castellano. No será ne-
cesario incluir traducción oficial del ejemplar de la tesis
Plazos:
doctoral, ni de los documentos complementarios que
requiera la Comisión de Doctorado. El plazo para resolver y notificar la resolución del pro-
cedimiento será determinado por cada universidad. Según
Validación de documentos: se establece en la disposición adicional vigesimonovena de
la Ley 14/2000, de 29 de diciembre, de Medidas Fiscales,
En caso de duda sobre la autenticidad, validez o con-
Administrativas y de Orden Social, y en anexo 2, la falta de
tenido de los documentos aportados, la Comisión de Doc-
resolución expresa en el plazo señalado permitirá entender
torado podrá efectuar las diligencias necesarias para su
desestimada la solicitud de homologación.
comprobación, así como dirigirse a la autoridad compe-
tente expedidora de los mismos para validar los extremos
dudosos. 8. Expedición del título de doctor
El título de Doctor será expedido por el Rector de la
Tasa: universidad en que fue aprobada la tesis doctoral, en nom-
Las tasas que tengan que abonar los interesados, de bre del Rey de España, previa verificación del cumplimien-
acuerdo con el artículo 28 de la Ley 53/2002, de 30 de di- to de lo dispuesto en la legislación española.
ciembre, de Medidas Fiscales, Administrativas y del Orden El título de Doctor incluye la mención de Doctor por la
Social, correspondientes a la iniciación del procedimiento, Universidad en la que fue aprobada la tesis doctoral. En él
constituirán ingresos exigibles para la resolución, siendo figura la denominación del previo título de Licenciado, Ar-
requisito necesario para la tramitación del expediente: quitecto o Ingeniero o equivalente del que estuviera en po-
sesión el interesado y que se requiere para acceder a los
Tramitación y resolución estudios de doctorado, así como la Universidad, lugar y fe-
La resolución se adoptará motivadamente por el Rec- cha de expedición del mismo. También figura el programa
tor de la Universidad, previo informe de la Comisión de de doctorado y la denominación del Departamento res-
Doctorado. La resolución podrá ser favorable o desfavora- ponsable del mismo.
ble a la homologación solicitada.
9. Efectos del título de doctor
La Comisión de Doctorado se constituirá en comités de
al menos dos de sus miembros, por ámbito de conoci- El título de Doctor obtenido y expedido con lo dispues-
miento, para emitir dicho informe. La valoración de la tesis to en la legislación española tendrá carácter oficial y validez
doctoral requerirá a su vez, informe de dos expertos, de- en todo el territorio nacional, surtirá efectos académicos
signados por la Comisión, del ámbito de conocimiento co- plenos y habilitará para la docencia y la investigación de
rrespondiente, preferentemente de la Universidad o si no lo acuerdo con lo establecido en las disposiciones legales.
hay, de dos especialistas externos. El interesado tendrá derecho a que se le expida la cer-
El informe de la Comisión de Doctorado previo a la re- tificación de que el título de Doctor está en trámite de ex-
solución contendrá los siguientes extremos: pedición (certificación supletoria del título) desde el mo-
mento de abonar los derechos de expedición del título., y
Valoración del nivel de los estudios realizados para la
dicha certificación supletoria tendrá el mismo valor que el
obtención del título de doctor requerido.
título solicitado a efectos del ejercicio de los derechos in-
Valoración de la tesis doctoral. herentes al mismo.

1072
Capítulo 117
LA RESPONSABILIDAD SANITARIA
Zamarriego Moreno JJ

Sumario: La “lex artis ad hoc”. El consentimiento infor- mayor conocimiento, mayor zozobra”, pero ello no quita
mado. El consentimiento informado según el Convenio de que hoy, el estudiante de Medicina, el MIR y el médico
Oviedo y la Ley 41/2002. Especial referencia a la informa- en general precisen unos conocimientos básicos del
ción. Aspectos relativos a la confidencialidad de los datos campo del Derecho sanitario, porque es imprescindible
sanitarios. Conceptos generales de responsabilidad médi- para su ejercicio profesional y para el adecuado funcio-
ca. La responsabilidad civil. La responsabilidad penal. La namiento y consolidación de la relación clínica médico-
responsabilidad disciplinaria. La responsabilidad deontoló- paciente.
gica. La responsabilidad patrimonial de las Administracio-
Así vemos que en los últimos años, y cada vez con ma-
nes Públicas. Los protocolos y el papel de las Sociedades
yor frecuencia, se producen relaciones entre la ciencia mé-
Científicas. La medicina en equipo. El médico residente. El
dica y la ciencia jurídica, y no precisamente porque ambas
aseguramiento. La nueva visión de la ley de ordenación de
tengan en sí mismo mucho que ver, sino como conse-
las profesiones sanitarias.
cuencia del elevado y creciente número de demandas-
querellas interpuestas contra los profesionales médicos
Preámbulo como consecuencia de su actividad y de las obligaciones
Desde que hace casi diez años redactamos este ca- que a los médicos impone la contrapartida de los derechos
pítulo relativo a “Responsabilidad civil e información al de los pacientes.
paciente y sus familiares” hasta hoy, la normativa ha Ello obliga a que el médico tenga algunos conocimien-
cambiado sustancialmente, sobre todo en materia sani- tos básicos de dicha ciencia jurídica para conocer a lo que
taria. Se han promulgado numerosas leyes, algunas de ésta concede relevancia, y que, desde la perspectiva de la
gran relevancia por su rango básico, otras que forman Medicina puede aparentemente no tenerla.
parte del ordenamiento nacional por provenir de Conve-
Es obvio que el acercamiento por el médico a una cien-
nios Internacionales suscritos por España, como el Con-
cia con criterios claramente diferenciales y con unas cate-
venio de Oviedo, se ha modificado lo que se conoce co-
gorías que ni siquiera se aproximan a las que conocemos,
mo mayoría de edad sanitaria rebajada, excepto para
conlleve una gran dificultad en la aproximación; no obstan-
determinados supuestos, a los 16 años, se ha promul-
te, vamos a pretender que a través de una exposición no
gado un nuevo Estatuto Marco así como la ordenación
excesivamente técnica, se pueda conseguir conocer, al
de las profesiones sanitarias y más aún, se ha avanzado
menos, aquellos temas en los que sin duda el residente, el
con distintas normas en cuestiones relativas a la repro-
médico, se verá envuelto a lo largo de su ejercicio profe-
ducción asistida, las instrucciones previas (ZAMARRIE-
sional.
GO), etc. Todo ello lleva a que los profesionales médicos
ven ahora imprescindible adquirir conocimientos en cien- Hay que señalar que para los médicos la lectura de la
cia jurídica como se ve en la creciente demanda de for- legislación, y en cualquier caso de la normativa general y
mación en esta materia, máster en Derecho sanitario, de los fallos judiciales supone una cierta dificultad basa-
etc. Las cosas están así, y el objeto de este capítulo que da en que la Medicina estructura su estudio en base a cri-
se nos ha encomendado es un sucinto repaso por algu- terios cartesianos, en tanto que el Derecho trata de con-
nas cuestiones que ineludiblemente van afectar de mo- jugar diversos preceptos a fin de subsumir en ellos el
do inmediato al médico pero no ya en su ejercicio profe- caso concreto. Pero, en realidad, si nos fijamos, su mo-
sional independiente o como servidor público, sino dus operandi no está muy alejado del Derecho. Al médi-
desde que acaba la carrera y tras superar la fatigosa for- co se presenta un enfermo con diversos síntomas clínicos
mación MIR, entra a formar parte del personal sanitario que, en principio, basado en sus conocimientos, trata de
de una institución pública. Es indudable el aforismo “a incluir en un síndrome o una enfermedad concreta, para,

1073
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

posteriormente, y a través de unas pruebas complemen- lificar dicho acto de conforme o no con la técnica normal
tarias, llegar a un diagnóstico definitivo. Una vez conse- requerida, derivando de ello tanto el acervo de exigencias
guido éste, aplica lo que los conocimientos médicos del o requisitos de legitimación o actuación lícita, de la co-
momento actual suponen la terapéutica o tratamiento de rrespondiente eficacia de los servicios prestados y, en
ese caso. De una manera no muy distinta opera el jurista; particular, de la posible responsabilidad de su autor/mé-
se encuentra con un supuesto de hecho, busca en la dico por el resultado de su intervención o acto médico
normativa jurídica dónde éste pueda subsumirse y, des- ejecutado.
pués de realizar diversas pruebas periciales, testificales,
Numerosas sentencias hacen referencia a esta “lex ar-
documentales, etc., le aplica la solución que en la norma
tis ad hoc”, que supone un módulo enjuiciador de la ac-
está prevista.
tuación médico-sanitaria, y así se recoge en las Sentencias
Esto que, en principio, parece de fácil aplicación, su- del Tribunal Supremo de 7 de febrero de l990, 29 de junio
pone una integración de conocimientos, porque no todos de 1990, 11 de marzo de 1991, 23 de marzo de 1993 y 25
los casos están perfectamente tipificados, incluso muchos de abril de 1994. Según este criterio jurisprudencial, puede
aparecen contemplados en diversas normas. Por ello, es- entenderse la “lex artis ad hoc” como aquel criterio valora-
te proceso de integración supone, como en la Medicina, tivo de la corrección del concreto acto médico ejecutado
un importante esfuerzo intelectual. por el profesional de la Medicina –Ciencia o Arte médica–,
De los diversos puntos de contacto que se establecen que tiene en cuenta las especiales características de su au-
hoy entre ambas ciencias, uno de ellos, tal vez el de mayor tor, de la profesión, de la complejidad y trascendencia vital
importancia, es la responsabilidad del profesional sanitario del actor, y, en su caso, de la influencia de otros factores
y del médico en particular, porque no cabe duda que la endógenos –estado o intervención del enfermo, de sus fa-
profesión médica supone un ejercicio en sí mismo de ele- miliares, o de la misma organización sanitaria–, para califi-
vado riesgo, tanto para quien la ejerce como para quien es car dicho acto de conforme o no con la técnica normal re-
su destinatario, ya que cada vez se incorporan nuevos co- querida (derivando de ello, tanto el acerbo de exigencia o
nocimientos, nuevas técnicas, muchos de los cuales, si requisitos de legitimación o actuación lícita, de la corres-
bien proporcionan mayor fidelidad diagnóstica, exigen un pondiente eficacia de los servicios prestados y, en particu-
más intenso control y cuidado en su dispensación, ya que lar, de la posible responsabilidad de su autor/médico por el
en sí mismos o en sus consecuencias son dañosos o pue- resultado de su intervención o acto médico ejecutado.
den producir daño. (STS Sala de Civil de 25 de abril de 1994) que como se ve
acoge con idéntica terminología la descripción doctrinal.
Por lo tanto, son sus notas características:
I. LA “LEX ARTIS AD HOC”
a) Como tal “lex” implica una regla de medición de una
El ejercicio de la profesión médica se encuadra hoy,
conducta a tenor de unos baremos que valoran la mis-
desde el punto de vista jurídico, en lo que se denomina ”lex
ma.
artis ad hoc”, concepto perfectamente consolidado y que
fue inicialmente establecido por MARTÍNEZ-CALCERRA- b) Objetivo: Se trata de valorar la corrección o no del re-
DA. Esta denominación ha sido totalmente asumida por la sultado de dicha conducta, o su conformidad con la
jurisprudencia, que la cita exactamente en estos términos técnica normal, que esa actuación médica sea ade-
e incluye los presupuestos de la misma. cuada o se corresponda con la generalidad de las con-
ductas profesionales ante casos análogos.
En realidad, la “lex artis ad hoc” es un patrón de dili-
gencia, una determinada forma de actuar por los profesio- c) Técnica: Los principios o normas de la profesión médi-
nales sanitarios de acuerdo a determinados parámetros o ca en cuanto ciencia se proyectan al exterior a través
patrones que implican un ajuste o diligencia para la conse- de una técnica y según el arte personal de su autor.
cución de un acto relativo al ejercicio profesional.
d) Profesionalidad: El autor o afectado por la ley es un
La “lex artis ad hoc” es el criterio valorativo de la co- profesional de la Medicina.
rrección del concreto acto médico ejecutado por el pro-
e) Módulos de integración axiológica:
fesional de la Medicina –Ciencia o Arte Médica– que tie-
ne en cuenta las especiales características de su actor, – Autor: Circunstancias personales y profesionales
de la profesión, de la complejidad o trascendencia vital del médico y de su especialidad.
del actor, y en su caso, de la influencia de otros factores – Del objeto sobre que recae, especie de acto, clase
endógenos –estado e intervención del enfermo, de sus de intervención, gravedad o no, dificultad de ejecu-
familiares, o de la misma organización sanitaria–, para ca- ción.

1074
LA RESPONSABILIDAD SANITARIA

– Factores endógenos, tanto en la intervención o en ma en la obligación de cada médico de tener el material


sus consecuencias, que pueden haber influído en adecuado y la obligación de mantenerlo en correcto esta-
su desarrollo, como la gravedad del enfermo, o sus do de funcionamiento, siendo responsable de los perjui-
familiares, o la misma organización sanitaria. cios que los defectos de los aparatos o instrumental pro-
duzcan al enfermo; bien es cierto que con la tecnificación
f) Concreción de cada acto médico o presupuesto “ad
de la Medicina y la alta tecnología de los medios que utili-
hoc”, ya que éste es el que individualiza a dicha “lex ar-
za no podría, en sentido estricto, achacarse al profesional
tis”, pues, como se dijo antes, toda profesión está re-
médico la responsabilidad de su cuidado y sobre todo
gida por una “lex artis” que condiciona su correcto ejer-
cuando éste actúa como trabajador dependiente de un
cicio, mientras que en la Medicina esa lex, aunque
prestador sanitario público. Por ello, es trascendental de-
tenga un sentido general, posee unas peculiaridades
terminar a quién debe atribuirse la responsabilidad por fa-
de cada acto en donde influirán en un sentido y otro los
llo de cobertura o de funcionamiento de los medios técni-
diversos factores ya vistos, lo que sin duda servirá pa-
cos utilizados. A pesar de ello, se hace recaer en el
ra valorar la responsabilidad.
médico el último cuidado de los mismos, y así, en Sen-
Este patrón de diligencia viene además, en general, tencia del Tribunal Supremo de 1 de diciembre de 1987,
configurado por el contenido del art. 1104 del Código Civil exige al médico un especial cuidado en la revisión de sus
cuando dice “La culpa o negligencia del deudor consiste aparatos y elementos funcionales; y la de 22 de febrero de
en la omisión de aquella diligencia que exija la naturaleza 1991 declaró negligente la conducta del médico por fati-
de la obligación y corresponda a las circunstancias de las ga y deterioro del material por el reiterado uso del mismo,
personas, del tiempo y del lugar”. ya que dentro de los elementales deberes profesionales
se encuentra el cerciorarse previamente del buen estado
Acabamos de referirnos a los medios de los que se dis-
de conservación del instrumental que utiliza. Por último, la
pone, y hay que hacer en este punto un receso en cuanto
Sentencia del Tribunal Supremo de 23 de marzo de 1993,
a que la doctrina jurisprudencial entiende como actuación
que se refiere a la falta de cobertura de un determinado
diligente y concordante con la “lex artis ad hoc”, el que
equipamiento médico-quirúrgico, aplicando la responsabi-
pueda, en cada caso, derivarse a los pacientes a lugares
lidad por el principio del conjunto de posibles deficiencias
en donde una cobertura sanitaria, con mayor infraestructu-
asistenciales; en este caso concreto se produce la con-
ra, garantizaría en mayor medida su tratamiento, o asegu-
dena de un anestesista por no existir desfibrilador eléctri-
rarse de que los medios de que se dispone son los ade-
co en el quirófano donde actuaba, ya que “la maniobra de
cuados, ya que, en cualquier caso, existe una tendencia
colocar al paciente en la posición de decúbito supino des-
jurisprudencial a la “obligación de eficacia”, derivada del
de la de decúbito prono, en que se la mantuvo durante la
art. 7 de la Ley General de Sanidad; y así se recoge en la
intervención quirúrgica entraña riesgos que exigen la ac-
Sentencia del Tribunal Supremo de 6 de octubre de 1994
tuación directa del anestesiólogo, que, en el caso, pudo
con respecto a la falta de medios en un centro sanitario en
advertir la parada cardiaca inmediatamente y adoptar las
la que se condena solidariamente tanto al citado centro co-
medidas necesarias en tiempo útil para evitar las conse-
mo a los médicos, cirujano y anestesista, responsables de
cuencias que necesariamente se derivarían de la anoxia
la operación, argumentando “que la sentencia recurrida es-
cerebral causada por aquella parada cardiaca; al estar
tablece como hecho acreditado la escasez de medios que
acreditado que fue ese repetido retardo en advertir la pro-
de hecho obligó al traslado del menor intervenido a otro
ducción de la parada así como el uso de los medios ten-
Centro médico-quirúrgico, y ello evidentemente supone la
dentes a evitarla, la causa de las lesiones padecidas, y ello
falta de adecuación del Establecimiento del recurrente pa-
implica una conducta negligente de la anestesista, ya que
ra esta clase de operaciones en punto a las múltiples y
tratándose de una fibrilación presenciada cuando el pa-
complejas eventualidades organizativas y funcionales que
ciente está previamente monitorizado, o se consigue en
puedan surgir, lo que encuadra el hecho proclamado den-
los primeros 60 segundos de evolución si se detecta fibri-
tro de la conducta propia del dueño del Establecimiento en
lación ventricular se procederá como primer paso a los
que tuvo lugar tan lamentable acontecimiento, y por ello,
desfibriladores eléctricos, sin que el retraso en el uso del
en el art. 1.902 del Código Civil, lo que no mengua en lo
citado aparato quede justificado por la situación alejada
más mínimo la posible subsunción de la conducta ilícita ci-
del quirófano en que se realizaba la operación, del desfi-
vil del mismo en orden al art. 1.903 del mismo cuerpo le-
brilador, ya que el anestesista ha de tener a su disposi-
gal en su párrafo cuarto”.
ción, para su aplicación en tiempo óptimo, todos los me-
Debe pues quedar claro que existe, según la jurispru- dios que, según las circunstancias de tiempo y lugar,
dencia, una obligación de poseer los medios técnicos ne- permitan cumplir sus deberes profesionales con las ma-
cesarios para la actividad que se desarrolla y que se plas- yores garantías de éxito”.

1075
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

Por lo tanto, la “lex artis ad hoc” no sólo consiste en tualmente establecen las Sociedades Científicas y que in-
aplicar correctamente los conocimientos médicos al uso cluso avalados por diversas sentencias judiciales constitu-
en el medio en que se encuentra, sino poner a disposición yen y forman parte del conjunto de la actividad que se co-
del enfermo los que fueran necesarios, enviándole, si es noce como lex artis.
preciso, a otro Centro que para su dolencia revista mayo-
De todo ello puede fácilmente deducirse que existe una
res garantías, puesto que se considerará imprudente la ac-
exigencia de una determinada forma de actuar en función
tuación del profesional sanitario cuando, aun conociendo
del autor/médico, las circunstancias del paciente, los me-
la limitación de los medios con los que cuenta, procede a
dios asistenciales con los que se cuenta, el estado de la
actuar, quedando a salvo, lógicamente, los casos de ex-
ciencia y especialmente en cada caso concreto que es lo
trema urgencia, que serán valorados en la sentencia.
que constituye el “ad hoc” de la prestación específica.
Todo este complejo sistema, que como se ve queda
Una antigua Sentencia define la actividad médica de
perfectamente “desmenuzado” en los fallos judiciales, ha
modo encomiástico y exigente. Es la Sentencia del Tribu-
obligado a que por parte de determinados colectivos sani-
nal Supremo de 31 de mayo de 1982, Sala 2.ª indica en su
tarios se hayan puesto en funcionamiento los ya aludidos
Tercer Considerando lo siguiente:
protocolos de actuación médica, en el bien entendido de
que tales Protocolos, y siempre que no se actúe sometido “La profesión médica, ejercida con profilaxis adecuada,
a un régimen jerárquico, podrán utilizarse o no, pero tienen certero diagnóstico y atinada terapéutica, merece ge-
la virtualidad de servir de guía o patrón pericial como lo que nerales loa y encomio, puesto que tiene mucho de sa-
la Medicina actual considera adecuado a cada proceso pa- cerdocio y, de ella depende la salud, la integridad física
tológico. y hasta la vida del común de la población integrante de
cualquier Estado; por ello, es función vocacional que
No debe confundirse la utilización de Protocolos de ac-
requiere acabada preparación científica, abnegación,
tuación con lo que se conoce vulgarmente como Medicina
defensiva, entendiendo ésta como la que realizaría un con- sacrificio e inasequibilidad al cansancio y al desaliento,
junto de prestaciones sanitarias complementarias, muchas sin que pueda ejercerse adecuadamente y con efica-
de ellas innecesarias, con el fin de proporcionar una posi- cia si, el profesional médico, se deja invadir por la abu-
ble cobertura a quien actúa, en busca de hipotéticas com- lia, por la indiferencia, por la inhumanidad, por la pasi-
plicaciones no fácilmente percibibles, pero que pudieran vidad inerte, por la rutina o por la falta de interés
aparecer si la batería de pruebas complementarias se am- humano y profesional, renunciando, de antemano, a
plía. La diferencia entre ambos procedimientos es eviden- los medios auxiliares y complementarios del examen
te, ya que el Protocolo utiliza exclusivamente aquello que la clínico o a agotar mediante la investigación y la obser-
ciencia médica considera necesario en cada proceso pa- vación ade- cuadas, toda posibilidad de incurrir en
tológico; ello no es óbice para que puedan extrapolarse al- errores que pudieron soslayarse con el empleo de la
gunas situaciones que lógicamente por su imprevisibilidad debida diligencia”.
no deban ser contempladas. Este considerando, no cabe duda, supone una gran
Por su parte la Ley 41/2002 establece que todo profe- estima por la profesión médica, pero, al mismo tiempo, es
sional que interviene en la actividad asistencial está obliga- indicativo de la exigencia con que el Tribunal va a juzgar
do no sólo a la correcta prestación de sus técnicas, sino al sus actuaciones.
cumplimiento de los deberes de información y documenta-
ción clínica, y al respeto a las decisiones adoptadas libre y
voluntariamente por el paciente. II. EL CONSENTIMIENTO INFORMADO
La Ley 44/2003, a la que luego se hará más detallada Define la doctrina el consentimiento (de sentire cum)
referencia, configura asimismo un patrón de diligencia: La como la concordancia de la voluntad declarada de las
prestación de atención sanitaria técnica y profesional ade- partes que celebran el contrato. Hay por lo tanto consen-
cuada a las necesidades de la salud de las personas que so, pero nótese que este consenso supone una situación
atienden con un uso racional de recursos diagnósticos y bilateral y sinalagmática para ambas partes del negocio ju-
terapéuticos, evitando la sobreutilizacion, infrautilización e rídico, ya que si no hay consenso hay disenso, y entonces
inadecuación. no llega a formarse el contrato. De lo que se trata es de
que coincidan en querer lo mismo las posiciones contra-
Por último, los protocolos asistenciales, aunque no son
puestas.
de obligado cumplimiento como se verá, sí establecen un
patrón de diligencia en cuanto al proceder técnico frente a El consentimiento consiste ciertamente, según señala
determinadas situaciones clínicas, protocolos que habi- ALBALADEJO, en estar de acuerdo o conformes las par-

1076
LA RESPONSABILIDAD SANITARIA

tes, pero como quiera que el Código Civil no define el con- una declaración de voluntad, no sólo para la parte de ne-
sentimiento, sino que solamente se refiere a él en el Título gocio jurídico que tal acto conlleva, sino que lo supera y lo
Segundo de Disposiciones Generales de los Contratos hace depender de principios más trascendentes que los
cuando dice en su artículo 1.254 que “el contrato existe de la seguridad jurídica y del tráfico económico; lo hace de-
desde que una o varias personas consienten en obligarse”, pender de derechos personalísimos, de derechos ejercita-
y en el artículo 1.258, que los contratos se perfeccionan bles, de derechos derivados, en suma, de la propia perso-
por el mero consentimiento, señalando el artículo 1.261 nalidad. Ello ha llevado a que el consentimiento para la
que “no hay contrato sino cuando concurren los siguientes asistencia sanitaria pueda de alguna manera figurar con
requisitos: 1º. Consentimiento de los contratantes”. cierto grado de autonomía, y salir del reducido ámbito del
Código Civil, para sublimarlo en un derecho político, con-
Se ve pues que en diversos preceptos aludidos, y en
sustancial a la propia persona, como señala DE LOREN-
los que se hará hincapié posteriormente, aparece la expre-
ZO, y que se plasma en la Sentencia de la Sala de lo Con-
sión consentimiento, pero en ningún caso aparece su de-
tencioso Administrativo del Tribunal Supremo de 4 de abril
finición, sino que simplemente lo utiliza como parte funda-
de 2000, y por ello busca salidas y alternativas, a veces di-
mental del negocio jurídico, señalando el articulo 1.262 que
fíciles por la propia cerrazón del tráfico jurídico, y se refiere
“el consentimiento se manifiesta por el concurso de la ofer-
de modo expreso a la prestación de un consentimiento sa-
ta y de la aceptación sobre la cosa y la causa que han de
nitario como distinto al que es necesario para comprar o
constituir el contrato”.
vender y que ha quedado taxativamente definido en la Ley
La cuestión está en que el consentimiento al que aquí 41/2002. Básica reguladora de la autonomía del paciente.
se refiere el Código Civil y el ordenamiento jurídico, lo hace
Por eso puede decirse, finalmente, que si bien traído de
en referencia al negocio jurídico, entendiendo por tal una
la doctrina anglosajona, el concepto jurídico de consenti-
situación de contenido puramente patrimonial y económi-
miento informado, sólo tiene encaje en los actos médicos,
co para salvaguardar el tráfico jurídico.
y aquellos otros supuestos en los que se derivan derechos
La cuestión que aquí se plantea es que aunque real- de las personas (Ley Orgánica de Protección de Datos de
mente la actuación sanitaria no puede entenderse a los Carácter Personal) y por lo tanto no puede regularse ya só-
meros efectos procesales y de responsabilidad de otro lo por el Código Civil, sino por las legislaciones que lo am-
modo que a la celebración de un negocio jurídico, de un paran. No puede tener el concepto de las características
contrato innominado, de un contrato de servicios médicos, que la doctrina alude para el consentimiento del negocio
ya sea con obligación de medios o con obligación de re- jurídico; es un consentimiento distinto, es un consenti-
sultados, que genere una responsabilidad subjetiva o cua- miento jurídicamente autónomo, es un consentimiento, por
si objetiva patrimonial de la Administración, el acto médico fin, que no tiene prácticamente nada que ver con el con-
en sí no puede incluirse exclusivamente en una regulación sentimiento negocial.
negocial; no es un mero negocio jurídico, es una situación
Ello no quiere decir que en la teoría general del derecho
que trasciende por su relevancia del negocio jurídico; afec-
no le puedan afectar otras circunstancias que el ordena-
ta a un bien jurídico constitucionalmente protegido como
miento reconoce para la prestación del mismo, cuando el
es la protección de la salud, y a unos elementos para su
1.265 CC señala que será nulo el consentimiento prestado
formulación que proceden de la propia dignidad de la per-
por error, violencia, intimidación o dolo, pero ello, no inva-
sona y que se conforma en un verdadero derecho funda-
lida la argumentación que sostenemos. Es preciso dotar a
mental.
este consentimiento civilista de una óptica política, aunque
Nos encontramos aquí por tanto, con una cuestión su- goce de la complementariedad de alguno de los elemen-
mamente filosófica que aunque pretenda subsumirse en el tos que tradicionalmente lo configuran.
puro negocio jurídico, es un acto que trasciende del mis-
La expresión de consentimiento informado, como se
mo.
ha dicho proveniente de la doctrina anglosajona, es pues,
Lo que ocurre es que el ordenamiento no define el ac- un novus en el ordenamiento español, procedente origina-
to médico; especifica claramente la compraventa, o el riamente de la jurisprudencia, y asumido con posterioridad
arrendamiento, etc., pero no se refiere al acto médico. por la Bioética y trasladado al ordenamiento.
Es por ello que las recientes legislaciones, conocida la La cuestión ahora es la forma de prestar el consenti-
realidad social y la trascendencia del acto médico, confie- miento, ya que el consentimiento puede ser expreso, es-
ren cada vez con mayor relevancia, un contenido a la pres- crito o verbal, o tácito o implícito. Se discute incluso por la
tación del consentimiento, desvinculándolo del negocio ju- doctrina el valor jurídico del silencio. La ley 41/2002 esta-
rídico puro. Ahora ya, la prestación del consentimiento es blece como regla general la prestación del consentimien-

1077
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

to de forma verbal y señala cuando debe ser escrito. Pe- La categorización de que se precisaba consentimiento
ro en los propios actos del paciente el consentimiento es- escrito para cualquier “intervención”, así como el hecho,
tá implícito, por ejemplo: “Le voy a sacar sangre para ha- dictado por la norma de que la información debería ser
cerle un análisis”, en ese momento el enfermo extiende el completa, continua, verbal y escrita, ha sufrido distintas
brazo y expone la zona donde se va a realizar la veno- modulaciones tanto doctrinales como legales. Debe notar-
punción. se asimismo que en aquel momento el término “consenti-
miento informado” no aparecía regulado en la ley, siendo
Para la prestación del consentimiento se precisa en ge-
únicamente un elemento de la relación contractual, y hay
neral mayoría de edad, pues según señala el art. 1.263 del
que esperar hasta la Ley 15/1999, de Protección de datos
Código Civil “No pueden prestar consentimiento: 1º los de carácter personal para que el término “consentimiento
menores no emancipados”; sin embargo veremos que en informado” aparezca descrito.
base al concepto de “minoría madura”, concepto perfecta-
mente configurado por la doctrina jurídica sobre el presu- De otra suerte, el proceso de transferencia de la mate-
puesto del ejercicio de los derechos de la personalidad que ria sanitaria a las Comunidades Autónomas hizo que éstas
se excepcionan de la patria potestad en el art. 162,1º; pe- regularan con diferente rango los derechos de los pacien-
ro además se reconoce una mayoría de edad sanitaria a tes, apareciendo situaciones diversas y diferentes entre las
los 16 años por la Ley 41/2002, que ejerce su ámbito de Comunidades Autónomas, siendo prototípico la Ley cata-
influencia en todo el territorio al ser ley básica, excepto en lana, que admitía para la mayoría de los supuestos una
mayoría de edad sanitaria a los 16 años; en tanto que la
determinados supuestos tasados, como luego se verá. La
Ley gallega hace una pormenorizada descripción de as-
conjunción de la mayoría de edad sanitaria con la doctrina
pectos relativos al consentimiento informado y otros con
del menor maduro permite establecer un complejo sistema
una magnífica técnica jurídica.
de derechos ampliados a estos adolescentes. (ZAMA-
RRIEGO). Por otro lado, la supuesta extralimitación jurídica del ya
citado artículo 10 de la Ley General de Sanidad, en lo rela-
Todo ello supone que la capacidad de obrar que el or-
tivo a la información, así como el haber surgido polémica
denamiento atribuye a la mayoría de edad, es un concep-
doctrinal por lo que el término “intervención” supone, fue,
to elástico que se pone sobre todo de manifiesto en el ám-
en alguna manera, modulado por el llamado Convenio de
bito sanitario, donde los médicos aprecian continuamente
Oviedo (Convenio del Consejo de Europa para la protec-
la capacidad del paciente en función de las circunstancias
ción de los derechos humanos y la dignidad del ser huma-
clínicas que se producen en las diversas entidades patoló- no con respecto a las aplicaciones de la biología y la me-
gicas. Por eso la propia Ley 41/2002 establece el consen- dicina) suscrito en Oviedo el 4 de abril de 1997, que entró
timiento por representación cuando el paciente, a juicio del en vigor en nuestro ordenamiento el 1 de enero de 2000.
médico encargado de la asistencia, no tenga capacidad
para prestar el consentimiento. Es necesario, por ello, que Todo ello aconsejaba que se dictara una norma con
este concepto de capacidad se configure para el ámbito rango de ley básica que regulara para todo el Estado la
sanitario como “capacidad ad hoc” concepto configurado materia relativa a los derechos y deberes de los pacientes,
por nosotros como capacidad adecuada para decisión y por ello, se promulga la Ley 41/2002, de 14 de noviem-
bre, básica reguladora de la autonomía del paciente y de
concreta; esto es, para determinados actos sanitarios no
derechos y obligaciones en materia de información y do-
es preciso la plena capacidad de obrar en estricto sentido
cumentación clínica.(publicada en el BOE al día siguiente y
jurídico, sino la capacidad adecuada o suficiente, capaci-
que entró en vigor a los seis meses de su publicación).
dad ad hoc.(ZAMARRIEGO).
Aunque poco a poco el colectivo sanitario había ido tra-
bajando y poniendo en práctica a través de Comisiones o So-
III. EL CONSENTIMIENTO INFORMADO ciedades científicas los denominados consentimientos infor-
SEGÚN EL CONVENIO DE OVIEDO Y mados, no cabe duda de que la Sentencia de 25 de abril de
1994, de la Sala Primera del Tribunal Supremo, en la que se
LA LEY 41/2002 enfatiza entre los deberes del médico, e incluíble por tanto en
Desde que el 1986 se promulgó la Ley General de Sa- la lex artis, la materia de información, hizo que la promulgación
nidad, reguladora en su artículo 10 de los derechos de los de la citada Ley 41/2002 haya tenido en el ámbito de la pro-
pacientes, la doctrina jurídica, en materia de Derecho Sa- fesión sanitaria un impacto de tal naturaleza no comparable al
que en su momento tuvo la Ley General de Sanidad.
nitario, y más concretamente, en la de responsabilidad ci-
vil, ha adquirido un incremento extraordinario, tal vez como Por ello, y aun debiendo tenerse en cuenta que la prac-
pocos, en el campo de la teoría general. tica totalidad de las Comunidades Autónomas, como se ha

1078
LA RESPONSABILIDAD SANITARIA

dicho, han dictado normas de diferente rango en materia – Consentimiento informado: La conformidad libre, vo-
de ordenación sanitaria, es preciso ahora por su extraordi- luntaria y consciente de un paciente manifestada en el
naria trascendencia en todo el territorio nacional, hacer una pleno uso de sus facultades después de recibir la in-
concreta reseña del contenido y articulado de la Ley formación adecuada para que tenga lugar una actua-
41/2002, de 14 de noviembre, básica reguladora de la ción que afecte a su salud.
autonomía del paciente y de derechos y obligaciones
– Documentación clínica: Cualquier dato de carácter
en materia de documentación e información
asistencial en cualquier soporte.
En la Exposición de Motivos de dicha Ley señala que
– Historia clínica: Conjunto de documentos que contie-
“los derechos de los pacientes son el eje básico de las re-
ne datos, valoraciones e informaciones de cualquier ín-
laciones clínico-asistenciales”. Distingue en su articulado a
dole sobre la situación y evolución clínica del paciente
los pacientes de los usuarios del sistema, y su ámbito de
a lo largo del proceso asistencial.
aplicación se refiere a los profesionales sanitarios tanto de
los centros y servicios públicos como a los privados. – Información clínica: Todo dato, en cualquier forma,
que permita adquirir o ampliar conocimientos sobre el
La Ley expone tres principios básicos:
estado físico y la salud de una persona, o la forma de
1. dignidad de la persona preservarla, cuidarla, mejorarla o recuperarla.
2. autonomía – Informe de alta médica: El documento emitido por el
3. intimidad médico responsable en un centro sanitario al finalizar el
proceso asistencial de un paciente.
Al objeto de evitar interpretaciones sobre el denomina-
do término “intervención” de la Ley General de Sanidad, di- – Intervención en el ámbito de la sanidad: Toda ac-
ce ahora que “toda actuación en el ámbito de la sanidad tuación realizada con fines preventivos, diagnósticos,
requiere el consentimiento de los pacientes”, aclarando terapéuticos, rehabilitadores o de investigación.
que el consentimiento es previo a la actuación. – Médico responsable: El profesional que tiene a su
A los efectos de mera clasificación didáctica se incluye cargo coordinar la información y la asistencia sanitaria
a continuación el principal contenido de la citada Ley del paciente o del usuario con carácter de interlocutor
41/2002, que por su relevancia hace imprescindible su co- principal en todo lo referente a su atención e informa-
nocimiento y que debe hacerse concordar con el articula- ción durante todo el procesos asistencial, sin perjuicio
do correspondiente: de las obligaciones del resto de los profesionales inter-
vinientes.
Autonomía del paciente – Servicio sanitario: Unidad asistencial, con organización
Los presupuestos de dicha autonomía permiten la ac- propia dotada de los recursos técnicos y del personal
tuación después de recibir información adecuada entre las cualificado para llevar a cabo actividades sanitarias.
opciones clínicas disponibles, pudiendo negarse el pacien- – Paciente: Persona que requiere asistencia sanitaria
te al tratamiento, situación ésta que constará por escrito. para el mantenimiento o recuperación de la salud.

Obligaciones generales del profesional – Usuario: Persona que utiliza los servicios sanitarios pa-
ra educación y promoción de la salud, prevención de
– Correcta prestación de sus técnicas.
enfermedades e información sanitaria.
– Deberes de información y documentación.
Derecho a la información asistencial:
– Respeto a las decisiones adoptadas por el paciente.
– El paciente tiene derecho a conocer toda la informa-
Confidencialidad ción disponible.
Toda persona que elabore o tenga acceso a la infor- – La información será generalmente de forma verbal, de-
mación y documentación está obligada a la reserva debi- jando constancia en la historia clínica.
da.
– Se respetará la voluntad de no ser informado.
Definiciones – La información clínica será verdadera, y forma parte
de todas las actuaciones asistenciales.
Entre otras varias, se refiere a la de: Centro sanitario,
certificado médico, etc.; pero por su relevancia incluimos – El médico responsable garantiza el derecho a la in-
las siguientes: formación, sin perjuicio del resto de los profesionales

1079
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

intervinientes en el proceso, que serán asimismo res- Proyectos docentes e investigación


ponsable de informarle.
Todo paciente o usuario tiene derecho a ser advertido
sobre la posibilidad de utilizar los procedimientos de pro-
Titular del derecho a la información asistencial:
nóstico, diagnóstico y terapéuticos que se le apliquen en
– El paciente. un proyecto docente o de investigación, que en ningún ca-
– También serán informadas las personas vinculadas por so podrá comportar riesgo adicional para su salud.
razones familiares o de hecho, en la medida que el pa-
Revocación del consentimiento
ciente lo permita de manera expresa o tácita.
El paciente puede revocar libremente por escrito su
Estado de necesidad terapéutica (antiguo privilegio consentimiento en cualquier momento.
terapéutico)
(Nótese la diferencia entre revocación y negativa al tra-
Cuando por razones objetivas a juicio del médico de- tamiento).
ba limitarse la información se dejará constancia razonada
de las circunstancias en la historia clínica, y se comunica- Límites al derecho a la información
rá la decisión a las personas vinculadas al paciente por ra- La renuncia del paciente a recibir información está limi-
zones familiares o de hecho. tada por el interés de la salud del propio paciente, de ter-
ceros, de la colectividad y por las exigencias terapéuticas
Información epidemiológica
del caso. Cuando el paciente manifieste expresamente su
Los ciudadanos tienen derecho a conocer los proble- deseo de no ser informado se respetará su voluntad, ha-
mas sanitarios de la colectividad cuando impliquen riesgo ciendo constar su renuncia documentalmente, sin perjuicio
para la salud pública o para su salud individual; esta infor- de la obtención de su consentimiento previo para la inter-
mación se facilitará en términos verdaderos, comprensi- vención.
bles y adecuados.
Intervenciones clínicas “sin consentimiento”
Confidencialidad
Sólo serán las indispensables a favor de su salud, y en
Toda persona tiene derecho a que se respete el carác- los siguientes casos:
ter confidencial de los datos referentes a su salud, y a que
• Cuando exista riesgo para la salud pública, de confor-
nadie pueda acceder a ellos sin previa autorización ampa-
midad con la Ley Orgánica 3/1986.
rada por la ley. Los centros sanitarios adoptarán las medi-
das necesarias para garantizar este derecho. • Cuando exista riesgo inmediato y grave para la integri-
dad física o psíquica del enfermo y no es posible con-
Consentimiento informado seguir su autorización, consultando, cuando las cir-
cunstancias lo permitan, a sus familiares o a las
– Toda actuación en el ámbito de la salud del paciente
personas vinculadas de hecho.
requiere consentimiento libre y voluntario una vez reci-
bida la información adecuada y valorando las opciones
Consentimiento por representación
propias del caso.
Cuando el paciente no sea capaz de tomar decisiones
– El consentimiento será verbal por regla general, pero
a criterio del médico responsable de la asistencia, o su es-
se prestará por escrito en los siguientes casos:
tado físico o psíquico no le permita hacerse cargo de su si-
• Intervención quirúrgica. tuación, prestando en ese caso el consentimiento:
• Procedimientos diagnósticos y terapéuticos invaso-
• Su representante legal, si lo tuviera.
res.
• Las personas vinculadas por razones familiares o de
• Procedimientos que supongan riesgos o inconve-
hecho.
nientes de notoria y previsible repercusión negativa
sobre la salud del paciente. Cuando exista incapacitación legal (en cuyo caso ac-
tuará el representante).
– El consentimiento escrito del paciente es necesario pa-
ra cada una de las actuaciones, si bien se pueden in- Debe notarse aquí que la prestación de este tipo de
corporar anexos siempre que el paciente tenga infor- consentimiento por representación será adecuado a las
mación suficiente sobre el procedimiento de actuación circunstancias y proporcionado a las necesidades que ha-
y sus riesgos. ya que atender, siempre en favor del paciente y con res-

1080
LA RESPONSABILIDAD SANITARIA

peto a su dignidad personal, participando en todos los ca- Otros derechos.


sos en la medida de lo posible.
Los pacientes y usuarios tendrán derecho:
Consentimiento de los menores (mayoría de edad – A recibir información sobre los servicios y unidades
sanitaria). asistenciales disponibles, su calidad y los requisitos de
acceso.
El menor, a partir de los 16 años, o emancipado, que
no sea incapaz ni esté incapacitado, prestará “por sí mis- – A disponer de una guía o carta de servicios que espe-
mo” su consentimiento, excepto en los casos de: cifiquen sus derechos y obligaciones, las prestaciones
disponibles, las características asistenciales del centro
• Interrupción voluntaria del embarazo.
y su dotación de personal, instalaciones y medios téc-
• Ensayos clínicos. nicos.
• Técnicas de reproducción asistida. – Cada servicio de salud regulará los procedimientos pa-
ra garantizar el efectivo cumplimiento de estos dere-
Elementos que debe incluir ineludiblemente el chos.
consentimiento informado.
– Tanto en atención primaria como en atención especia-
– Las consecuencias relevantes o de importancia que la lizada, los pacientes y usuarios tendrán derecho a la in-
intervención origina con seguridad. formación necesaria para elegir médico y centro, con
arreglo a los términos y condiciones que se establez-
– Los riesgos relacionados con las circunstancias perso-
can.
nales o profesionales del paciente.
– Los riesgos probables en condiciones normales con- Documentación e historia clínica.
forme a la experiencia y al estado de la ciencia. – Definición de historia clínica: Es el conjunto de los
– Las contraindicaciones. documentos relativos a los procesos asistenciales de
cada paciente, con la identificación de los médicos y
Instrucciones previas: (Corresponde al denominado los demás profesionales que han intervenido en ellos
“testamento vital”,o “voluntades anticipadas”) con objeto de obtener la máxima integración posible de
la documentación clínica de cada paciente, al menos
– Requisitos: El otorgante de las instrucciones previas
en el ámbito de cada centro.
debe ser mayor de edad, capaz y libre.
– Archivo: Cada centro archivará en cualquier soporte
– Objetivo: Manifestar anticipadamente su voluntad con
las historias clínicas de sus pacientes garantizando su
objeto de que ésta se cumpla en el momento en que
seguridad, correcta conservación y recuperación, ga-
llegue a situaciones en cuyas circunstancias no sea ca-
rantizándose por las Administraciones sanitarias la au-
paz de expresarlos personalmente, sobre los cuidados
tenticidad del contenido y de los cambios operados en
y tratamiento de su salud o, una vez llegado el falleci-
ellas, dictando las Comunidades Autónomas las dispo-
miento, sobre el destino de su cuerpo o de los órganos
siciones necesarias para archivar y proteger las histo-
del mismo.
rias clínicas, evitando su destrucción o pérdida acci-
– Representante: Cabe la designación de representante dental.
para que sea el interlocutor con el médico o equipo sa- – Contenido mínimo de la historia clínica:
nitario para el cumplimiento de las instrucciones pre-
• Documentación relativa a hoja clínico-estadística.
vias.
• Autorización de ingreso.
– Procedimiento: Se regulará por cada servicio de salud,
• Informe de urgencias.
constando siempre por escrito, creándose un “registro
de instrucciones previas”. • Anamnesis y exploración.
• Evolución.
– Revocación: Las instrucciones previas podrán revocar-
se libremente por escrito en cualquier momento. • Órdenes médicas.
• Hoja de interconsulta.
– Inaplicación: No serán aplicadas las instrucciones pre-
• Informes de exploraciones complementarias.
vias contrarias al ordenamiento jurídico, a la lex artis, ni
las que no se correspondan con el supuesto de hecho • Consentimiento informado.
previsto. • Informe de anestesia.

1081
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

• Informe de quirófano o registro de parto. – Conservación de la historia clínica:


• Informe de anatomía patológica. Tiempo: Como mínimo 5 años contados desde la fecha
• Evolución y planificación de cuidados de enferme- de alta de cada proceso asistencial.
ría.
Condiciones: Cada centro sanitario tiene la obligación
• Aplicación terapéutica de enfermería. de conservar la información clínica en condiciones que
• Gráfico de constantes. garantice su correcto mantenimiento y seguridad.
• El informe clínico de alta. – Conservación a efectos judiciales: De conformidad
– Cumplimentación de la documentación: En lo relati- con la legislación vigente.
vo a la asistencia, será responsabilidad de los profesio- – Deber de cooperación:
nales intervinientes.
Los profesionales sanitarios tienen el deber de coope-
– Unidad e integración: Se toma como referencia de la rar en la creación y mantenimiento de una documenta-
historia clínica la institución asistencial como mínimo. ción clínica y secuencial del proceso asistencial.
– Usos: El uso prioritario de la documentación clínica es – Gestión y custodia:
garantizar una asistencia adecuada al paciente.
La gestión de la historia clínica se realizará por la Uni-
– Acceso: Cada centro establecerá el procedimiento dad de admisión y documentación clínica.
que posibilite el acceso a la historia clínica por parte de
los profesionales intervinientes, estando siempre a lo La custodia de las historias clínicas estará bajo la res-
dispuesto en la Ley Orgánica 15/1999, de Protección ponsabilidad de la dirección del centro sanitario.
de datos de carácter personal, en la Ley 14/1986, Ge- Serán de aplicación a la documentación clínica las me-
neral de Sanidad, y resto de normativa; en los supues- didas y técnicas de seguridad establecidas por la Ley
tos de intervención judicial se estará a lo dispuesto por Orgánica 15/1999, de Protección de datos de carácter
los Jueces y Tribunales. personal.
– Acceso del personal administrativo y de gestión, – Custodia: El paciente tiene derecho a que los centros
que sólo puede acceder a los datos relacionados con sanitarios establezcan un mecanismo de custodia acti-
sus funciones. va y diligente de las historias clínicas que permitan la re-
cogida, integración, recuperación y comunicación de la
– Acceso del personal sanitario de inspección, eva-
información sometida al principio de confidencialidad.
luación, acreditación y planificación, que accederán
en función de comprobación de la calidad asistencial, – Informe de alta: Todo paciente, familiar o persona vin-
preservando el respeto de los derechos del paciente. culada en su caso, tendrá derecho a recibir del centro
o servicio sanitario un informe de alta, que en tanto no
– Deber de secreto: Todo el personal que acceda en
sea nuevamente regulado, se regirá por lo dispuesto en
cualquier caso a la historia clínica en el ejercicio de sus
la Orden del Ministerio de Sanidad de 6 de septiembre
funciones, queda sujeto al deber de secreto.
de 1984.
– Constancia del acceso: Las Comunidades Autóno-
mas regularán el procedimiento para que quede cons- Negativa al tratamiento:
tancia del acceso a la historia clínica y de su uso.
En caso de no aceptar el tratamiento prescrito, se pro-
– Acceso del paciente: pondrá al paciente la firma del alta voluntaria, y si no lo hi-
ciera, la dirección del centro, a propuesta del médico res-
El paciente tiene derecho de acceso a la historia clínica
ponsable, podrá disponer el alta forzosa. La no aceptación
y a obtener copia de los datos que figuran en ella, re-
del tratamiento no dará lugar al alta forzosa cuando existan
gulándose por los centros sanitarios el procedimiento
tratamientos alternativos aunque tengan carácter paliativo,
que garantice este derecho.
quedando todas estas circunstancias debidamente docu-
El derecho de acceso del paciente se puede ejercer mentadas. En el caso de que el paciente no acepte el alta,
por representación debidamente acreditada, siempre la dirección del centro, comprobado el informe clínico y oí-
que no sea en perjuicio de terceras personas. do al paciente, lo pondrá en conocimiento del Juez.
Si el paciente ha fallecido, sólo podrán acceder a la his-
Otros derechos:
toria clínica las personas vinculadas a él por razones fa-
miliares o de hecho, salvo que el fallecido lo hubiera – Todo paciente o usuario tiene derecho a que se le faci-
prohibido expresamente. liten los certificados acreditativos de su estado de sa-

1082
LA RESPONSABILIDAD SANITARIA

lud, que serán gratuitos cuando así lo disponga una la información un concepto jurídico indeterminado ya que
norma legal o reglamentaria. se señala que se facilitará previamente a la obtención del
consentimiento una información “adecuada”. Ello quiere
– De conformidad con la Disposición Adicional 4ª, el Es-
decir una información proporcionada al objeto y fin del ac-
tado y las Comunidades Autónomas dictarán las dis-
to médico que se pretende. A mayor riesgo mayor infor-
posiciones precisas para garantizar a los pacientes o
mación. Debe tener en cuenta el médico que los posibles
usuarios con necesidades especiales asociadas a la
resultados lesivos, que eventualmente pudieran convertir al
discapacidad, los derechos en materia de autonomía,
perjudicado en una persona dependiente, conllevarán in-
información y documentación clínica regulados en esta
Ley. eludiblemente una muy elevada indemnización en caso de
litigio, por ello debe valorar hasta donde y cuanta informa-
Otras obligaciones de los profesionales sanitarios: ción debe facilitar en relación con el proceso, y más aun
cuando se trata, por ejemplo, de un de diagnóstico eco-
Los profesionales sanitarios tienen además el deber de gráfico prenatal, factores de riesgo añadidos al parto se-
cumplimentar los protocolos, registros, informes, estadísti- gún su vía, posibles efectos adversos comúnmente produ-
cas y demás documentación asistencial o administrativa, cidos según la experiencia de la ciencia en el momento
que guarden relación con los procesos clínicos en los que actual, etc.
intervienen.
Pero el concepto información es más amplio que el
Rango legal: propio del consentimiento y basta para ello lo que estable-
ce el Convenio de Oviedo relativo a los menores. El artícu-
Esta Ley tiene la condición de básica, de conformidad
lo 6 del Convenio de Oviedo alude en su punto 4 a que el
con lo establecido en el artículo 149.1.1ª y 16ª de la Cons-
representante, la autoridad, persona o institución indicados
titución Española de 1978 y el carácter de supletoria en los
en los apartados 2 y 3, recibirá en iguales condiciones la
proyectos de investigación, procesos de extracción y tras-
información a que se refiere el artículo 5, y este apartado 2
plante, y reproducción humana asistida, así como en los
de este mismo artículo delimita a qué persona está ha-
que carezcan de regulación especial.
ciendo referencia, es decir, a un menor que no tenga ca-
Expuesto de este modo sinóptico el contenido de la pacidad para expresar su consentimiento y se precise pa-
Ley 41/2002, y que acoge expresamente los términos de ra realizar la intervención autorización del representante, si
la misma, no debe olvidarse, como ya se dijo, que es pre- bien la opinión del menor será tomada en consideración
ciso consultar la normativa referente a ordenación sanitaria como un factor que será tanto más determinante en fun-
de cada una de las Comunidades Autónomas que la hayan ción de su edad y su grado de madurez. Queda por tanto
dictado, pues aun cuando éstas deberán adaptarse al con- certificado que debe facilitarse la información en cualquier
tenido de la ley básica, no cabe duda de que permite al- caso, e incluso a los menores legalmente incapaces.
gunos otros derechos no tasados por esta Ley. Esto es lo
que ha obligado a introducir el largo pié de las páginas an- Llegados a este punto, vamos a constatar que la infor-
teriores actualizado a marzo 2006 que contempla gran mación es un elemento clave en la relación médico-pa-
parte de las normas relativas a esta materia y que son de ciente para la conformación de su voluntad prestada en el
aplicación, además de la Ley básica, en cada una de las consentimiento.
Comunidades Autónomas, por lo que deberán, en su ca- Como señala DE LORENZO conviene diferenciar la in-
so, ser consultadas formación previa al consentimiento de la denominada in-
formación terapéutica, por sus diferentes finalidades, tanto
desde el punto de vista médico como del jurídico, pues la
IV. ESPECIAL REFRENCIA A LA información previa al consentimiento es requisito para la
INFORMACIÓN EN LOS ACTOS validez de éste, y se funda en la necesidad de garantizar la
SANITARIOS. autonomía del paciente y los derechos fundamentales di-
rectamente implicados, mientras que la información tera-
Es indudable que existe un derecho a la información, péutica o sobre régimen de vida, entronca más, como sos-
y cuanto más, información necesaria para permitir el des- tiene BELTRÁN AGUIRRE con el derecho a la protección
arrollo del ejercicio de los actos derivados de la propia per- de la salud, y no tiene por objeto esencial garantizar la li-
sonalidad. bertad, y previa responsabilidad del paciente, en la toma
de decisiones.
El reconocimiento de esta información sí que encuen-
tra acogimiento en la propia Ley 41/ 2002, básica regula- Cuando se hace referencia, en general, a qué tipo de
dora de la autonomía del paciente, establece en cuanto a información es precisa antes de la prestación del consen-

1083
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

timiento, el paciente debe tener la suficiente para hacerse se quiebre su referencial. Es por tanto también lógica la di-
una cabal idea del plan terapéutico, de los beneficios que ficultad para integrar una información que puede contrade-
se espera obtener, pero, asimismo, de los riesgos que tal cir los proyectos vitales del individuo; por ello, el proceso
o cual actividad terapéutica conlleva. de intercambio de información entre el médico y el enfer-
mo debe llevarse a cabo con cautela, ya que ninguno de
En cuanto a la información sobre los riesgos, deben
los dos sabe en qué consecuencias puede acabar. (Nóte-
distinguirse las consecuencias seguras de la intervención
de los riesgos típicos, entendiendo por tales aquellos que se algún caso de pacientes a los que una información in-
empíricamente, y de acuerdo con la práctica clínica, pue- correctamente facilitada de procesos de una entidad sufi-
den suceder habitualmente, aunque ocasionalmente, co- ciente que pueden llevarle a la muerte, dio lugar al suicidio
mo consecuencia de la propia actividad médica, añadien- del enfermo).
do, esto sí, aquellos que, por la propia patología o el Se pregunta la Bioética, por ello, si no decir la verdad
estado personal del propio paciente, pueden definirse co- puede formar parte o no del proceso informativo. Ello su-
mo asociados a su cuadro clínico o riesgos específicos. pone incapaz al enfermo para asumir la verdad; abusa de
El Consejo General del Poder Judicial y el Ministerio de su confianza, prescindiendo de su necesidad de saber, y
Sanidad y Consumo vienen organizando conjuntamente a es irreversible; no puede evolucionar hacia la verdad.
lo largo de los últimos años seminarios y jornadas conjun- El enfermo no pide que se le digan falsedades; lo que
tos, que se han centrado especialmente en problemas re- pide es que nos aproximemos a la verdad de una manera
lacionados con el consentimiento y la información. piadosa, sucesiva, adecuada, ya que la verdad supone en
En cuanto a la información sobre riesgos, la Sentencia la información avanzar en un proceso de desvelamiento del
del Tribunal Supremo de 23 de abril de 1992, ya advirtió futuro.
que la falta de información de los riesgos de la atención y Pero es que la necesidad de conocer la verdad no es
de otras alternativas, sobre todo, cuando la consentida no la misma para todos los sujetos, ni para todos los temas
era ineludible e innecesaria, y sí de alto riesgo, implica que para una misma persona, ni en todos los momentos y si-
son los profesionales quienes asumen los riesgos por sí tuaciones de su evolución vital. El paciente, a veces, pre-
solos. senta barreras contra la lucidez; no “quiere” conocer la ver-
En el mismo sentido, la información de los riesgos que dad. Por ello, no se puede imponer unilateralmente la
forman parte del proceso asistencial incluye las complica- información como un presupuesto unilateral de cumpli-
ciones que puedan presentarse, tanto en el preoperatorio, miento de un deber jurídico.
durante la intervención y en el postoperatorio, a lo que alu- El enfermo, reclama respeto a su autonomía personal,
de la Sentencia del Tribunal Supremo de 19 de abril de y, asimismo, una satisfacción de “su” necesidad de infor-
1999. mación, pero ello hay que compaginarlo con su miedo e
Pero es que, asimismo, el proceso de información de- irracionalidad frente al proceso patológico.
be aludir a las posibles deficiencias funcionales y a las ca- El primer deber del médico es respetar a cada persona
racterísticas del Centro asistencial, lo que aflora en la siem- como es, conociendo las necesidades del enfermo; des-
pre citada Sentencia del Tribunal Supremo de 25 de abril cubrir, mediante el diálogo, los momentos, la cantidad y el
de 1994. proceso de la información. Para ello, en muchas ocasiones
Para la Bioética, la información al enfermo supone un es necesario escuchar, mostrar una disposición receptiva,
proceso individualizado que considera la cantidad de infor- sin reticencias, a conocer aquella información que el enfer-
mación ofrecida, el ritmo del proceso informativo, los lími- mo desea percibir, y aunque ésta sea “toda”, los momen-
tes de la información dada y la propia forma del proceso. tos en su transmisión es posible que no sean compulsivos.
Se dice por los bioéticos que en el proceso de información Hay que distinguir la ansiedad de la pregunta, de la nece-
maduran el enfermo y el médico. sidad de la verdad entera. Por eso se dice que es el enfer-
mo quien debe marcar el ritmo del descubrimiento de la
El enfermo debe integrar la información en su marco vi-
verdad, y el médico le sigue, graduando la forma y la can-
tal de referencia (biografía, proyectos, limitaciones, capaci-
tidad, siendo deseable que el enfermo avance en su acep-
dad de análisis, acercamiento a la realidad, etc.), pero es
tación de la verdad al máximo. Pero hay que contar con las
que, además, debe hacerse en un momento de fragilidad
ilusiones y temores del enfermo, y aceptarlos; por eso, el
e inestabilidad; se trata de un enfermo (in-firmus), como en
proceso informativo requiere tiempo.
su momento señalamos, persona sometida a un proceso
patológico que no sólo lo debilita físicamente, sino también En fin, la cada vez más reciente promulgación legislati-
psicológicamente. Por ello, es lógico un cierto miedo a que va sobre el derecho a la información de los usuarios del

1084
LA RESPONSABILIDAD SANITARIA

sistema sanitario, va añadiendo características al mismo. – En toda la actividad de documentación clínica los pro-
Como señala RETUERTO BUADES, el derecho a la infor- fesionales deberán observar las normas deontológicas
mación se configura como un derecho autónomo, diferen- y de conducta aplicables a cada caso.
ciado del consentimiento informado. La salud es un valor
– La documentación de la información clínica tendrá co-
constitucional que debe gozar de los mecanismos ade-
mo fin principal la asistencia sanitaria al ciudadano, de-
cuados para que la persona pueda desarrollar su persona-
jando constancia de todo aquello que pueda facilitar el
lidad, por lo que debe protegerse sin ningún tipo de res-
conocimiento veraz, exacto y actualizado de su estado
tricciones.
de salud por los profesionales que le atienden.
El estudio del contenido constitucional del artículo 43
– La documentación de la información sanitaria, cuando
que establece el derecho a la protección de la salud, que-
se refiera a aspectos de la asistencia directa al pacien-
daría incompleto si no se hiciera referencia a uno de los
te, será responsabilidad del facultativo que le atiende, y
ejes que vertebran la Constitución española, cual es el de
deberá realizarse bajo pautas de unidad e integración,
la libertad; este concepto de libertad subyace en la nueva
con objeto de facilitar el conocimiento de todos los da-
relación médico-enfermo y en la suma de garantías que
tos referidos a un determinado paciente, que deben
acompañan al usuario de la sanidad en su autodetermina-
estar disponibles para todos los servicios que en un
ción personal, consecuencia de la dignidad de la persona
momento determinado lo requieran, incluidas las ur-
humana, comprendida en los artículos 9 y 10 de la Cons-
gencias.
titución española, de los que el artículo 43 es subsidiario, y
cuya primera expresión es el derecho a la información. – El paciente tiene derecho de acceso a la documenta-
ción clínica en la que se reflejan los episodios de su
asistencia sanitaria, debiendo hacerse compatible con
V. ASPECTOS RELATIVOS A LA el derecho de terceros a la confidencialidad de sus da-
CONFIDENCIALIDAD DE LOS DATOS tos que figuren en dicha documentación y con el dere-
cho de los profesionales que hayan intervenido en su
SANITARIOS elaboración, a la reserva de sus datos u observaciones
La confidencialidad de los datos sanitarios tiene su so- estrictamente subjetivos.
porte legal en la protección de la intimidad de la persona, Así por ejemplo, la Ley Orgánica 15/1999, de 13 de di-
que se califica desde la Constitución española como un ciembre, de Protección de Datos, señala en su artículo 7
derecho fundamental apoyado en su dignidad y en los de- que son datos especialmente protegidos por la ley los da-
rechos inviolables que le son inherentes como propio de su tos de carácter personal que hagan referencia a la salud y
realidad ontológica, como señala SÁNCHEZ-CARO. a la vida sexual, y sólo podrán ser tratados automatizada-
Se plantea pues si esta confidencialidad puede ser in- mente y cedidos cuando por razones de interés general así
vadida por los poderes públicos, que con frecuencia acce- lo disponga la ley o el afectado lo consienta, lo que supo-
den a datos sanitarios y los utilizan para muy diversos fines. ne un principio de reserva de ley para la difusión de este ti-
po de datos.
Según ALVAREZ CIENFUEGOS, a la hora de fijar unos
criterios mínimos sobre la confidencialidad de los datos re- El problema es que, en ocasiones, choca la relación
lativos a la salud que afectan, como se ha dicho, a núcle- entre el sistema sanitario que precisa realizar estudios epi-
os esenciales de la personalidad del paciente, señala, en- demiológicos o de otro tipo para orientar la salud de los
tre otros, los siguientes: ciudadanos, y respetar ambos intereses es la base del
conflicto. Este conflicto ha venido, en alguna manera, a
– En la documentación clínica, el interés y el bienestar del
ser resuelto por la Ley 41/2002 de autonomía del pacien-
paciente deben prevalecer, en principio, sobre el inte-
te que resuelve situaciones específicas del ámbito sanita-
rés exclusivo de la sociedad o la ciencia.
rio.
– La dignidad de la persona humana y el respeto a sus
Lo que es evidente es que el dato sanitario no puede
derechos fundamentales deben orientar toda actividad
divulgarse en base al propio secreto profesional que afec-
encaminada a obtener y documentar la información clí-
ta a todos los profesionales implicados, tanto médicos co-
nica.
mo otros estamentos; pero también es cierto que en la
– El previo, libre y espontáneo consentimiento del pa- práctica es relativamente sencillo acceder a datos sanita-
ciente, salvo situaciones de incapacidad o urgencia rios para cualquier otro personal que aún cuando también
grave, deben constituir el presupuesto legitimador de vinculado por sus relaciones específicas con la Administra-
toda documentación clínica. ción sanitaria, desvirtúa la confidencialidad.

1085
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

El propio sistema público de prestación sanitaria, en el gencia y morosidad, y los que de cualquier modo contravi-
que en muchas ocasiones los pacientes hospitalizados se nieren al tenor de aquellas” (responsabilidad contractual), y
encuentran en habitaciones múltiples, impide esta confi- el art. 1.902 Código Civil en el que se recoge la responsa-
dencialidad de su proceso; bien es cierto que cuando se bilidad extracontractual o aquiliana “El que por acción u
trata de datos que por su entidad parezcan ser más sus- omisión causa daño a otro, interviniendo culpa o negligen-
ceptibles de ser tratados de modo más confidencial, la re- cia, está obligado a reparar el daño causado”.
lación médico-paciente se efectúa en ambientes más ínti- Hay que señalar que en estos preceptos se trata, en
mos. Pero lo que sí es cierto es que el propio sistema no cualquier caso, de una responsabilidad subjetiva en la que
facilita la confidencialidad de los datos relativos al pacien- se exige, al menos, culpa o negligencia, es decir, que el
te. que actúa no realice el acto con la diligencia debida, o que
Es indudable que existe, en la mayor parte de los ca- el daño producido sea por su culpa.
sos, un consentimiento tácito o expreso del paciente para
el acceso a sus datos sanitarios para el resto de su entor- 6.2. Evolución del concepto y su
no familiar. Sin embargo, hay cuestiones muy debatidas, y adecuación a la realidad social
concretamente, y por ejemplo, en las pruebas de detec-
ción de HIV en las que se plantea con frecuencia si la pro- Sin embargo, la evolución social hasta nuestros días
pia pareja del paciente tiene o no derecho a acceder a es- tiende cada vez con mayor fuerza a una responsabilidad
te dato sanitario que sin duda resultará relevante para su objetiva o cuasi objetiva, es decir, aquel que demuestra
propia salud. Por ello, con carácter general, puede decirse haber sufrido un daño tiene derecho a ser indemnizado
que es preciso tratar el dato sanitario caso a caso y cues- como consecuencia del mismo, incluso aunque no medie
tión a cuestión, ya que siendo unos relevantes y trascen- una actuación culposa o poco diligente del que se lo cau-
dentes, otros no lo son tanto. só. Expresión de este supuesto es el antiguo art. 40 de la
Ley de Régimen Jurídico de la Administración del Estado,
hoy art. 139 de la Ley de Régimen Jurídico de las Admi-
VI. LA DOCTRINA GENERAL DE LA nistraciones Públicas y del Procedimiento Administrativo
Común, que recogen la obligación de indemnizar por los
RESPONSABILIDAD daños sufridos como consecuencia del funcionamiento
normal o anormal de los servicios públicos. Para cual-
6.1. Antecedentes históricos quier persona no versada surgiría la pregunta ¿Cómo es
preciso responder del funcionamiento normal?. Sin em-
Los juristas clásicos ya recogían en el Digesto (especie
bargo, esta pretensión social no sólo aparece recogida
de manual del jurista romano) tres concretos preceptos de-
en esta disposición normativa, sino, además, en el art.
finidos por Ulpiano, que vivió hacia el año 210 d.C. y que
106, párrafo 2.º de nuestro texto constitucional, cuando
junto con Paulo era asesor de Papiniano; estos “Tria Iura
dice “Los particulares, en los términos establecidos por la
Preceptae” son la base en la que se funda la justicia y las
ley, tendrán derecho a ser indemnizados por toda lesión
relaciones entre individuos.
que sufran en cualquiera de sus bienes o derechos, sal-
“Honeste vivere” (vivir honestamente). vo en los casos de fuerza mayor, siempre que la lesión
sea consecuencia del funcionamiento de los servicios pú-
“Alterum non laedere” (no dañar a otro).
blicos”.
“Suum cuique tribuere” (dar a cada uno lo suyo).
Este precedente antiguo de la responsabilidad indica 6.3. La tendencia hacia la cobertura
que el que causa un daño a otro tiene que repararlo, bien universal del riesgo
sea esta reparación indemnizatoria, o de otro tipo.
El Derecho no hace otra cosa que adecuar sus normas
Sin embargo, es en la codificación cuando los Códigos a la cambiante realidad social del momento, y hoy la so-
Napoleónicos incluyen ya expresamente las relaciones ciedad exige, de modo general, que quien ha sufrido un
obligatorias y la responsabilidad. Ciertamente, esto apare- daño, un perjuicio, deba ser indemnizado. Ello nos condu-
ce recogido en nuestro Código Civil, diferenciando la res- ciría a las teorías en las que se pretende la socialización del
ponsabilidad contractual de la extracontractual, que más riesgo, es decir, si toda actividad o producto es suscepti-
adelante se explicará, y que aparece en los arts. 1.101 y ble de producir un daño, un perjuicio indemnizable, el Es-
ss., en los que se explica que “quedan sujetos a la indem- tado tendría que arbitrar los mecanismos para que fuera la
nización de daños y perjuicios causados los que en cum- propia sociedad la que a fin de cuentas reparara el daño,
plimiento de sus obligaciones incurrieren en dolo, negli- ya que no es otra cosa la cobertura por seguros de res-

1086
LA RESPONSABILIDAD SANITARIA

ponsabilidad civil que ciertamente los que los suscriben haya hecho renuncia o reserva de este tipo de acción pa-
trasladan a los usuarios, por lo que podría decirse que en ra ejercitarla posteriormente.
cada utilización de servicio o cada consumo de producto,
Vamos ahora a explicar someramente en qué consisten
una parte de su coste va destinada a sufragar la propor-
tales tipos de responsabilidad civil.
cional del Seguro de Responsabilidad Civil que la sociedad
con tendencia a la reparación general del daño exige. 6.4.A)1. La responsabilidad civil contractual
Esto que así, rápidamente planteado, y con una evolu- Surge, como hemos visto, del art. 1.101 del Código Ci-
ción temporal inmensamente rápida nos lleva hasta hoy, vil. Un médico, en el ejercicio de su profesión, recibe a un
viene a poner de manifiesto que la exigencia social con-
paciente, estableciéndose entre ellos, ya sea de modo tá-
templada por el Derecho afecta a todas las esferas de la
cito o expreso, una relación contractual de arrendamiento
actividad humana, y, por ende, al ejercicio de la profesión
de servicios o contrato de servicios médicos. Este término,
médica.
contrato de servicios médicos, no existe, como es lógico,
Sin embargo, esta exposición anterior, aunque real, po- en nuestro ya antiguo Código Civil, pero puede subsumir-
dría parecer excesivamente exagerada, y por ello la juris- se en la relación contractual general, e incluso en los con-
prudencia modera los comportamientos y adecua las exi- tratos innominados; para ello es necesario que exista un
gencias a las realidades de cada caso concreto. acuerdo de voluntades, que es lo que en sí mismo supone
el nexo de unión que configura el contrato, del que se de-
6.4. TIPOS DE RESPONSABILIDAD. rivan una serie de obligaciones.

6.4.A) Responsabilidad civil: contractual y extra- Hay que dejar claro aquí que lo que se contrata es un
contractual arrendamiento de servicios, una obligación de medios, y no
una obligación de resultados. El paciente lo que pretende es
6.4.B) Responsabilidad penal que el médico cure su enfermedad; sin embargo, el médico
6.4.C) Responsabilidad patrimonial sólo puede poner en práctica los conocimientos de la cien-
cia en el momento en que se realiza tal contrato, sin que
6.4.D) Responsabilidad disciplinaria
pueda en ningún caso garantizar el resultado. No obstante,
6.4.E) Responsabilidad deontológica lo cierto es que en la gran mayoría de los casos tal resulta-
do pretendido se consigue, pero quiero que desde ahora
6.4.A) Responsabilidad civil quede claramente diferenciado lo que es un arrendamiento
Vaya por delante una afirmación: actualmente en el de servicios, obligación de medios, del arrendamiento de
Sistema Nacional de Salud no es posible reclamar a un obra o contrato de resultado. En este último, ambas partes
médico de manera individual una indemnización como acuerdan no sólo poner los medios necesarios para la con-
consecuencia de su actuación profesional, ya que legal- secución, sino obtener un resultado concreto. Esto que pa-
mente solo cabe exigirla a la Administración correspon- ra la ciencia jurídica está claramente diferenciado, en la Me-
diente (la llamada Responsabilidad patrimonial de las Ad- dicina supone el hacer una serie de distinciones. Un ejemplo
ministraciones públicas que veremos posteriormente); nos aclarará la situación: Un paciente visita al médico y
sólo cuando el médico sea condenado en vía penal se po- acuerda con él, contrata, que ponga los medios necesarios
drá exigir al mismo tiempo la responsabilidad civil acceso- para la curación de su proceso degenerativo hepático. El
ria, cubierta por el seguro, que también aparece en este médico realizará la anamnesis correspondiente, la explora-
trabajo. Todo ello sin perjuicio de que efectivamente el ción, solicitará las pruebas complementarias pertinentes e
médico sea vea afecto por este tipo de responsabilidad instaurará el tratamiento que los conocimientos médicos del
que a continuación estudiamos en el ámbito de su activi- momento están al uso, con lo que se conseguirá o no la cu-
dad profesional propia o a través de otras entidades; sin ración del enfermo, puesto que la Medicina no es en sí mis-
embargo opera con toda efectividad en las actividades de ma una ciencia exacta, y las posibilidades de respuesta del
la medicina privada. caso particular y de la terapéutica concreta son muy diver-
sos. Se trata, aquí, de una obligación de medios.
Nuestro ordenamiento reconoce varios tipos de res-
ponsabilidad civil: la contractual y la extracontractual, Por el contrario, un paciente pretende de un cirujano
pero, además, existe otra derivada del ilícito penal de la estético la consecución de un determinado aspecto en al-
responsabilidad penal, que es la responsabilidad civil guna parte de su anatomía que quiere modificar, siendo
accesoria que surge de los delitos o faltas, y que aparece aquí lo prioritario no sólo la puesta en práctica de los pro-
recogida en el Código Penal, y que se produce siempre cedimientos necesarios, sino la consecución del resultado
que exista condena del autor, a no ser que el querellante pretendido por el enfermo.

1087
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

Nos encontramos, pues, frente a dos tipos de activida- da clase de responsabilidad más o menos objetiva, sin que
des. La obligación de medios que se relaciona con la Medi- opere la inversión de la carga de la prueba, admitida por
cina necesaria, y que incluye de modo global y sin preten- esta Sala para daños de otro origen, estando por tanto a
sión de hacer un numerus clausus diversas especialidades cargo del paciente la prueba de la relación o nexo de cau-
médicas, p. ej. la Alergología, Angiología y Cirugía Vascular, salidad y la de la culpa.
Aparato Digestivo, Cardiología, Cirugía Pediátrica, Cirugía
Es, asimismo, conveniente incluir p. ej. la Sentencia del
Torácica, Medicina Interna, Nefrología, Neumología, Neuro-
Tribunal Supremo relativa a lo que se ha incluido como Me-
cirugía, Neurología, Obstetricia y Ginecología, Oftalmología,
dicina voluntaria, Medicina no curativa, de fecha 25 de abril
Oncología Médica, Oncología Radioterápica, Otorrinolarin-
de 1994, cuando en su Tercer Fundamento de Derecho di-
gología, Pediatría, Traumatología, Cirugía Ortopédica, Uro-
ce “Si las anteriores obligaciones médicas pueden predi-
logía, etc.
carse en los supuestos en los que una persona acude al
De otro lado y en otro grupo, se encuentran las espe- mismo para la curación de una enfermedad o cuadro pa-
cialidades médicas de resultado, en las que lo que se pre- tológico en los que, como se ha dicho anteriormente, el
tende es un hecho concreto, arrendamiento de obra en contrato que liga a uno y otro cabe calificarlo nítidamente
nuestro ordenamiento jurídico, lo que también podría de- como arrendamiento de servicios, en aquellos otros en que
nominarse como Medicina voluntaria, que incluye la Cirugía la Medicina tiene un carácter meramente voluntario, es de-
Plástica, Estética y Reparadora, el Radiodiagnóstico, los cir, en los que el interesado acude al médico no para la cu-
Análisis clínicos y la Bioquímica clínica, el Scanner, la Eco- ración de una dolencia patológica, sino para el mejora-
grafía, la Resonancia magnética, etc. miento de un aspecto físico o estético, o como en el
Pero aun, hay situaciones que se complican más, por- estudiado en los presentes autos para la transformación de
que sus actuaciones participan de los dos tipos de Medi- una actividad biológica –la actividad sexual–, en forma tal
cina. p. ej., la paciente que solicita le sea efectuada una li- que le permita practicar el acto sin necesidad de acudir a
gadura de trompas, pretende un resultado, obligación de otros métodos anticonceptivos, el contrato, sin perder su
resultado, Medicina voluntaria, contrato de obra; sin em- carácter de arrendamiento de servicios que impone al mé-
bargo, se realiza por el especialista de una de las ramas, dico una obligación de medios se aproxima ya de manera
Obstetricia y Ginecología, que hemos incluido en las de notoria al de arrendamiento de obra, que propicia la exi-
Medicina necesaria, arrendamiento de servicios, obligación gencia de una mayor garantía en la obtención del resulta-
de medios. do que se persigue, ya que, si así no sucediera, es obvio
que el interesado no acudiría al facultativo para la obten-
Así que, como se ve, la cuestión no es tan sencilla co-
ción de la finalidad buscada. De ahí que esta obligación,
mo a primera vista parece. Pero ello nos ha servido para
que repetimos es todavía de medios, se intensifica hacien-
hacer una expresión general de la situación que aparece
do recaer sobre el facultativo no ya solo como en los su-
profusamente recogida en los diversos fallos judiciales. La
puestos de Medicina curativa, la utilización de los medios
doctrina constante de nuestro Tribunal Supremo, Sala l.ª,
idóneos a tal fin, así como las obligaciones de informar ya
iniciada con firmeza y rotundidad en la Sentencia de 26 de
referidas, sino también, y con mayor fuerza aun, las de in-
mayo de 1986 es que la obligación del médico y del profe-
formar al cliente –que no paciente–, tanto del posible ries-
sional en general es una obligación de medios y no de re-
go que la intervención, especialmente si ésta es quirúrgica
sultado. En este mismo sentido Sentencias del Tribunal
acarrea, como de las posibilidades de que la misma no
Supremo de 26 de mayo de 1986; 1 de diciembre de
comporte la obtención del resultado que se busca y de los
1987; 12 de julio de 1988; 7 de febrero de 1990; 12 de fe-
cuidados, actividades y análisis que resulten precisas para
brero de 1990; 16 de abril de 1991; 20 de febrero de 1992;
el mayor aseguramiento del éxito de la intervención”. En el
13 de octubre de 1992; 2 de febrero de 1993; 15 de fe-
mismo sentido, relativo a determinados implantes o próte-
brero de 1993; 4 de marzo de 1993; 15 de marzo de 1993;
sis se pronuncia la Sentencia de la Audiencia de Valladolid
15 de noviembre de 1993; 29 de marzo de 1994; 1 de ju-
nio de 1994; 10 de octubre de 1994 y 5 de diciembre de de 5 de diciembre de 1994 y la Sentencia del Tribunal Su-
1994, que mantienen como doctrina constante que la obli- premo de 7 de febrero de 1990. Estos casos expuestos
gación contractual o extracontractual (que luego se verá), son, entre otros, a los que hacía referencia cuando se da
del médico no es la de obtener en todo caso la recupera- la interconexión o dualidad dentro de una misma especia-
ción del enfermo, o lo que es lo mismo, no es la suya una lidad.
obligación de resultado, sino una obligación de medios, es
6.4.A)2. La Responsabilidad extracontractual
decir, está obligado no a curar al enfermo, sino a propor-
cionarle todos los cuidados que requiera según el estado La responsabilidad extracontractual o aquiliana viene
de la ciencia. Pero es que, además, queda descartada to- recogida en el Código Civil en los arts. 1.902 y ss., ya cita-

1088
LA RESPONSABILIDAD SANITARIA

dos. Recogemos nuevamente y por su relevancia los si- bas responsabilidades con una tendencia cada vez mayor
guientes: a satisfacer los intereses del perjudicado, y ello en base a
los argumentos antedichos de demanda social de cober-
Código Civil. Art. 1.902 “El que por acción u omisión
tura del riesgo.
causa daño a otro, interviniendo culpa o negligencia, está
obligado a reparar el daño causado”. Por ello, la jurisprudencia española admite incluso el
Código Civil. Art. 1.903 “La obligación que impone el concurso entre ambas responsabilidades, contractual y
artículo anterior es exigible, no solo por los actos u omisio- extracontractual, y se muestra inclinada a conferir al perju-
nes propios, sino por los de aquellas personas de quienes dicado la elección entre aplicar las normas contractuales o
se debe responder. las extracontractuales, posición ésta optativa que le es
muy favorable, ya que puede acogerse a las ventajas que
Los padres son responsables de los daños causados ambas normativas ofrecen.
por los hijos que se encuentren bajo su guarda.
Las Sentencias del Tribunal Supremo de 5 de julio de
Los tutores lo son de los perjuicios causados por los 1983, de 14 de noviembre de 1984 y de 29 de noviembre
menores o incapacitados que están bajo su autoridad y de 1994, abonan este concurso, estableciendo esta última
habitan en su compañía. en su Cuarto Fundamento de Derecho lo siguiente: “Esta
Lo son igualmente los dueños o directores de un esta- Sala tiene establecido que no es bastante que haya un
blecimiento o empresa respecto de los perjuicios causados contrato ente las partes para que la responsabilidad con-
por sus dependientes en el servicio de los ramos en que los tractual opere necesariamente con exclusión de la aquilia-
tuvieran empleados, o con ocasión de sus funciones. na en la órbita de lo pactado y como desarrollo del conte-
nido negocial, siendo aplicables los arts. 1.902 y ss., no
Las personas o entidades que sean titulares de un
obstante la preexistencia de una relación negocial. Tam-
Centro docente de enseñanza no superior responderán
bién se ha dicho que cuando un hecho dañoso es violación
por los daños y perjuicios que causen sus alumnos meno-
de una obligación contractual y, al mismo tiempo, del de-
res de edad durante los períodos de tiempo en que los
ber general de no dañar a otro, hay una yuxtaposición de
mismos se hallen bajo el control o vigilancia del profesora-
do del Centro, desarrollando actividades escolares o ex- responsabilidades contractual y extracontractual, y da lu-
traescolares y complementarias. gar a acciones que pueden ejercitarse alternativa o subsi-
diariamente, u optando por una o por otra, o incluso pro-
La responsabilidad de que trata este artículo cesará porcionando los hechos al juzgador para que éste aplique
cuando las personas en él mencionadas prueben que em- las normas en concurso que más se acomoden a aquellos,
plearon toda la diligencia de un buen padre de familia para todo ello en favor de la víctima y para lograr un resarci-
prevenir el daño”. miento del daño lo más completo posible. Mas cuando co-
Si la responsabilidad contractual tenía unos límites cla- mo en el caso el interesado se manifiesta optando de mo-
ros y comprensibles y surgía del acuerdo de voluntades li- do exclusivo por la responsabilidad contractual, la
bremente expresado por las partes, la extracontractual Audiencia no debía haber entrado en el examen de la aqui-
surge de la generalidad del “alterum non laedere”, y, por lo liana, dado que la causa petendida se configura tanto por
tanto, se aplica a todo caso en que no medie ese nexo los hechos como por la fundamentación jurídica de los
obligatorio. La realidad es que en la mayor parte de las ac- mismos”. En el mismo sentido, la Sentencia del Tribunal
tuaciones médicas de la Medicina pública, puede decirse Supremo de 24 de diciembre de 1994.
que sería este tipo de responsabilidad la aplicable, puesto
que se acoge mediante un sistema de cobertura social en 6.4.B) La responsabilidad penal
la que el paciente acude a un servicio público sin posibili-
Como señala SÁNCHEZ-CARO, en el ámbito penal se
dad, en principio, de escoger al médico que va a tratarle, y
utiliza junto al término “imprudencia”, los de “impericia” y
éste, por otra parte, tiene la obligación de prestar sus ser-
“negligencia”.La impericia supondría, como establece RO-
vicios al paciente, todo ello en aras de un sistema público,
MEO CASABONA, la falta de conocimientos necesarios
de un servicio público, en el que se incluyen, además, nu-
para actuar, la falta de habilidad, la ineptitud y la no pose-
merosas normas administrativas. Podría decirse, sin em-
sión de la capacidad requerida; en tanto que la negligencia
bargo, que con la nueva normativa sobre elección de es-
supone la no aplicación de los conocimientos y habilidades
pecialista el paciente ha “seleccionado” al médico, pero
cuando se poseen.
éste presta un acuerdo de voluntad general, y no específi-
co para ese paciente, sino para todos aquellos que están La jurisprudencia exige una serie de requisitos básicos
incluidos en el servicio sanitario del que forma parte. Lo imprescindibles para configurar el tipo de la imprudencia
cierto es que los Tribunales escogen o entremezclan am- penal:

1089
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

– La previsión o posibilidad de que ocurra un resultado que requieren asimismo imprudencia grave.
dañoso por parte del sujeto activo(el médico) teniendo
– La sustitución de niños en los centros sanitarios o so-
en cuenta que el resultado dañoso ha de ser previsible
ciosanitarios por imprudencia grave.
conforme a los conocimientos de la ciencia y además
la personalidad del agente ya que se dice “el deber evi- Si tratamos ahora, igualmente de modo resumido, las
tar presupone poder evitar”. faltas (infracciones leves) podrían esquematizarse del si-
guiente modo:
– Que el resultado no sea querido por dicho sujeto (el
médico) ya que, de otra suerte, un comportamiento – Los que por imprudencia grave causaren una lesión
culposo se convertiría en una actuación dolosa; esto que no requiera además de una primera asistencia fa-
es, se requiere una acción u omisión consciente y vo- cultativa, tratamiento médico o quirúrgico. Pena: multa
luntaria. uno a dos meses.

– Que la actuación infrinja una norma de cuidado, esto – Los que por imprudencia leve causaren la muerte de
es, que se ejecute el acto si adoptar las cautelas o pre- otra persona. Pena: multa de uno a dos meses.
cauciones necesarias para evitar resultados perjudicia- – Los que por imprudencia leve causaren lesión constitu-
les. tiva de delito. Pena: multa de quince a treinta días.
– Que se produzca un resultado que constituya una in- (Las faltas anteriormente descritas sólo se persiguen
fracción legal, resultado dañoso para las personas o las mediante denuncia de la parte agraviada o de su re-
cosas presentante legal)
– Que exista un enlace lógico (nexo causal) entre la acti- – Abandono de jeringuillas pudiendo causar daño o con-
vidad inicial y el resultado siendo esta relación de cau- tagio de enfermedades o en lugares frecuentados por
salidad directa, completa e inmediata. menores. Pena arresto de tres a cinco fines de sema-
na o multa de uno a dos meses.
Analizando ahora el concepto del “deber de cuidado” al
que se refiere el Tribunal Supremo dice que su infracción – Actividades sin seguro obligatorio de responsabilidad
consiste en la trasgresión de una norma sociocultural que civil cuando una norma lo exige legalmente para el ejer-
está demandando la actuación de una forma determinada cicio. Pena de uno a dos meses (ver Ley de ordenación
que integra el elemento normativo externo. Este deber de de las profesiones sanitarias citada).
cuidado es objetivo y no subjetivo y supone, en fin, la com- La imposición de la pena y su gravedad en la impru-
paración de una actuación habitual, con la que se ha pro- dencia penal está apreciada en base a la peligrosidad ob-
ducido y que ha dado lugar a resultados dañosos. jetiva de la acción, la previsibilidad del resultado lesivo, la
Todo ello supone sin duda que la actuación se ha si- importancia del bien jurídico comprometido y la entidad de
tuado al margen de la lex artis; pero se verá ahora como las consecuencias dañosas producidas.
algunos autores sostienen incluso que la falta de consenti- Por último nos referiremos al concepto de imprudencia
miento informado podría enlazar el tipo de la imprudencia profesional que aparece recogido en el nuevo Código Pe-
penal, ya que entendido que la obtención del mismo forma nal de 1995. Esta norma distingue entre imprudencia gra-
parte de la lex artis su ausencia lo incardina en el supues- ve, el olvido de las precauciones exigidas por la más ele-
to de imprudencia. mental prudencia lo que supone la omisión de las más
A modo de resumen esquemático se relacionan a con- elementales cautelas realizando la acción con inexcusable
tinuación los delitos de imprudencia en el ámbito sanitario: irreflexión y ligereza; y la imprudencia leve que correspon-
de a la omisión de la diligencia media acostumbrada en la
– Homicidio, que exige imprudencia grave actividad. Dicho esto, aparece el concepto de imprudencia
– Aborto, requiere imprudencia grave profesional como aquella inobservancia de las reglas de
actuación que vienen marcadas por lo que en términos ju-
– Lesiones, requieren imprudencia grave y un resultado
rídicos se conoce como lex artis, situación que apareja un
tipificado tratamiento penal más riguroso, ya que al profesional se le
– Lesiones al feto que precisan igualmente imprudencia debe exigir mayor atención y cuidado en la observancia de
grave las reglas de su arte o ciencia que no es exigible a quien no
es profesional; para ello es preciso que la imprudencia se
– Manipulación ilegal de genes humanos, precisa impru-
califique como grave, teniendo como consecuencia añadi-
dencia grave
da la pena de inhabilitación especial para el ejercicio de la
– Las falsedades de autoridades y funcionarios públicos, profesión durante un tiempo.

1090
LA RESPONSABILIDAD SANITARIA

6.4.B)1. La responsabilidad civil accesoria tracontractual; incluso, si no hay sentencia, por sobresei-
miento, archivo de diligencias, fallecimiento del prestador
Frente a la responsabilidad civil, aquella que da lugar a
de servicios, etc., puede acudirse a la vía civil, salvo que en
reparación del daño, generalmente mediante indemnización,
cualquiera de los supuestos se haya declarado la inexis-
hay una serie de hechos que, por su relevancia, el ordena-
tencia del hecho, conforme a la reiterada jurisprudencia,
miento jurídico incluye en el Código Penal, siendo suscepti-
entre otras la Sentencia del Tribunal Supremo de 28 de no-
ble de la aplicación de una pena en base a la comisión de
viembre de 1992.
un hecho tipificado en el Código Penal como delito o falta, y
que tienen en dicho ordenamiento su traducción penal de
6.4.C) La responsabilidad patrimonial de las
arresto, prisión, reclusión, inhabilitación, etc. Pero este tipo
administraciones públicas
de pena siempre lleva aparejada la responsabilidad civil ac-
cesoria, que opera como un plus de compensación perso- Desde que fue modificada la Ley 30/1992, de 26 de
nal a la víctima; en términos fácilmente comprensibles, el Es- noviembre, de Régimen Jurídico de las Administraciones
tado, la sociedad, se satisface por la pena aplicada, Públicas y Procedimiento Administrativo Común, por la Ley
mientras que la víctima se resarce por dos vías: una como 4/1999, de 13 de enero, en lo que se refiere a la exigencia
parte de la sociedad con la pena aplicada al inculpado y con de responsabilidad de las autoridades y personal al servi-
una indemnización que a él personalmente le corresponde. cio de las Administraciones Públicas (art. 145 y 146) “para
Hay que dejar aquí muy claro la distinción entre responsabi- hacer efectiva la responsabilidad patrimonial a la que se re-
lidad civil accesoria derivada del delito o falta de la respon- fiere el Capítulo I de este Título, los particulares exigirán di-
sabilidad subsidiaria. Esta última surge sólo cuando la con- rectamente a la Administración Pública correspondiente las
dena penal y en cantidad al inculpado no puede satisfacerse indemnizaciones por daños y perjuicios causados por las
por éste, porque su situación es de insolvencia. En este ca- autoridades y personal a su servicio”. Como luego se dirá
so, y sólo en éste, el condenado por responsabilidad subsi- esto supone que los profesionales médicos de los Servi-
diaria hará frente a la indemnización que al inculpado le co- cios Sanitarios Públicos no pueden ser demandados a tí-
rresponde. Existe la creencia generalizada entre los médicos tulo individual por los perjudicados como consecuencia de
empleados públicos condenados por delito o falta que las daños o lesiones producidas como consecuencia de su
empresas de las que dependen, p. ej. los Servicios Públicos actividad, con las variantes que en cuanto a responsabili-
de Salud, hará frente a la indemnización, pero esto, repeti- dad penal también se acotan más adelante.
mos, no es así, ya que según la jurisprudencia los requisitos La responsabilidad patrimonial consiste en que las Ad-
para la responsabilidad civil subsidiaria son: ministraciones Públicas deben indemnizar cuando produ-
– Que se produzca un delito o falta que de lugar a un per- cen un daño con ocasión del funcionamiento (ya sea nor-
juicio a tercero. mal o anormal) del servicio público sanitario. Se trata de
una responsabilidad objetiva, sin culpa, para la que basta
– Que exista relación de dependencia entre el autor del
poner de manifiesto y demostrar el daño y el nexo causal,
delito o falta y el responsable subsidiario.
siendo preciso la demostración de infracción de la “lex ar-
– Que el ilícito penal se haya cometido en el ejercicio de tis”. Sólo se excluye de esta responsabilidad cuando con-
las funciones encomendadas a su autor. curra fuerza mayor, que supone aquellas circunstancias
que no se hubieran podido prever o evitar según el estado
– Que el responsable penal sea insolvente.
del conocimiento de la ciencia en el momento en que se
La doctrina dota a esta responsabilidad subsidiaria de ocasionó el acto que dio lugar al resultado dañoso. Por el
un carácter casi objetivo, apartándose de la culpa “in eli- contrario sí se responde por el caso fortuito, aconteci-
gendo” o “in vigilando”, así que basta con que se den los miento acaecido aunque fuera imprevisible.
requisitos anteriores, sin necesidad de probar la culpa del
Como consecuencia de este tipo de responsabilidad, la
responsable subsidiario (Sentencia del Tribunal Supremo
Administración debe exigir a las autoridades y personal a
de 20 de diciembre de 1991).
su servicio lo pagado directamente a los lesionados, pero
Por lo tanto, esta responsabilidad civil accesoria sólo sólo cuando concurra dolo, culpa o negligencia grave,
surge como pago o resarcimiento indemnizatorio a la vícti- quedando fuera por tanto los casos de imprudencia leve.
ma de un delito o falta, y se aparta por ello claramente de Sin embargo esta repetición tampoco es hoy posible ya
la responsabilidad civil simple. Este tipo de responsabilidad que, como quiera que este tipo de actividad se encuentra
accesoria puede ser renunciada por el querellante, y tiene cubierta con una póliza de responsabilidad civil tomada por
además la particularidad de que si el fallo es absolutorio los propios servicios sanitarios públicos, ya no es la propia
para el querellado, puede acudirse posteriormente a la vía Administración la que paga sino la compañía aseguradora,
civil para ejercitar una acción por responsabilidad civil ex- motivo por el cual técnicamente no es posible la repetición.

1091
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

6.4.D) La responsabilidad disciplinaria a la Sentencia de la Audiencia de Zaragoza, de 31 de julio


de 1993, invoca los artículos 21, 33 y 38 del Código de De-
Los Reglamentos de las Instituciones Sanitarias ontología Médica.
Este tipo de Reglamentos de régimen administrativo
tienen también como es lógico su influencia y su cumpli-
mentación, y sirven en muchos casos como fuente de va-
VII. LOS PROTOCOLOS. EL PAPEL DE
lor decisivo para juzgar la conducta del médico. En este LAS SOCIEDADES CIENTÍFICAS
sentido, la Sentencia del Tribunal Supremo, Sala 2.ª, de 17
Como quiera que del articulado de la Ley 41/2002 se
de julio de 1982, contempla el incumplimiento de un regla-
obtiene la conclusión de que cualquier actuación en el ám-
mento de régimen interior por parte de un médico de guar-
bito sanitario debe ser informada y consentida, bastando,
dia, al indicar que “si bien el recurrente era un simple mé- en general, el consentimiento verbal, que puede ser inclu-
dico de guardia no especialista y su edad de 26 años, so implícito o tácito, pero exige que sea escrito para de-
teniendo siempre presente lo que se tiene dicho sobre di- terminados actos, ha dado lugar a la elaboración de los
ficultades de los diagnósticos, omitió una norma contenida llamados documentos de consentimiento informado que
en el reglamento de régimen interior de los médicos de se establecen para gran cantidad de procesos clínicos, es
guardia que le obligaba a no tomar ninguna decisión por ello que las Sociedades científicas han acometido la ta-
personal y a dar cuenta inmediata al especialista que rea de realizar estos documentos contando con el debido
corresponda, y, en su defecto, a cualquiera de los mé- asesoramiento jurídico, al tiempo que han elaborado pro-
dicos especialistas de la clínica, precepto aplicable por tocolos de actuación para los procesos de mayor relevan-
revisión de la reglamentación nacional aprobada por Orden cia, que como se vio, constituyen un procedimiento de
Ministerial de 25 de noviembre de 1976, que no hace sino ajuste a la lex artis, y junto a ello suponen una mayor pro-
recoger la natural prevención ante titulados que aun care- tección ante demandas injustificadas. La Sociedad Espa-
cen de la perfección profesional que proporciona normal- ñola de Ginecología y Obstetricia ha sido pionera en esta
mente la experiencia”, sentencia ésta de la que cualquiera materia.
puede obtener el adecuado aprovechamiento.
No debe confundirse la utilización de Protocolos de ac-
6.4.E) LA RESPONSABILIDAD DEONTOLÓGICA. tuación con lo que se conoce vulgarmente como Medicina
La responsabilidad deontológica defensiva, entendiendo ésta como la que realizaría un con-
junto de prestaciones sanitarias complementarias, muchas
Las normas deontológicas profesionales de ellas innecesarias, con el fin de proporcionar una posi-
ble cobertura a quien actúa, en busca de hipotéticas com-
Además de todo lo anterior, el médico se encuentra so-
plicaciones no fácilmente percibibles, pero que pudieran
metido en su ejercicio al Código de Ética y Deontología de
aparecer si la batería de pruebas complementarias se am-
la Organización Médica Colegial de 10 de septiembre de
plía. La diferencia entre ambos procedimientos es eviden-
1999, que sirve de base para valorar la conducta individual
te, ya que el Protocolo utiliza exclusivamente aquello que la
del médico a los efectos de determinar la diligencia con la
ciencia médica considera necesario en cada proceso pa-
cual ha intervenido en el proceso y las previsiones que el
tológico; ello no es óbice para que puedan extrapolarse al-
mismo contiene relativas, entre otras, a la prevalencia del
gunas situaciones que, lógicamente por su imprevisibili-
principio de autonomía del paciente así como el derecho a
dad, no deban ser contempladas.
la información que enfatiza en su art. 10; es llamativo el
punto 4 del artículo 9, cuando señala que respetará la li-
bertad de los pacientes competentes y tratará y protegerá
la vida de todos aquellos que sean incapaces, pudiendo
VIII. LA MEDICINA EN EQUIPO
solicitar la intervención judicial cuando sea necesario. In- Cada vez es más notoria la imposibilidad de que un so-
cluye aquí el término competente frente a su opuesto in- lo profesional médico actúe independiente y aisladamente
competente, y el de capaz frente al de incapaz, situaciones para la resolución de la enfermedad. Hoy, se hace impres-
que desde un punto de vista terminológico no suponen cindible, tanto en el ámbito público como en el privado, el
más que una confusión procedente de la traducción de di- concurso de numerosos especialistas que intervienen en
chos términos en lengua inglesa, ya que con frecuencia se las diferentes fases del proceso; pero no sólo profesiona-
utiliza como sinónimos la incapacidad por la incompeten- les médicos, sino que, y además, otros profesionales sani-
cia, siendo aquélla una cualidad propia del individuo, y és- tarios intervienen también, y en gran medida, con su cola-
ta una atribuida, si bien esta terminología no aparece sufi- boración. Por ello, se habla hoy de la llamada Medicina en
cientemente contrastada. A título de ejemplo nos referimos equipo, donde un conjunto de profesionales sanitarios re-

1092
LA RESPONSABILIDAD SANITARIA

aliza determinada actividad sobre un paciente. En el ámbi- contraviniendo las órdenes recibidas, o más allá de ellas
to público, las competencias de cada uno de ellos apare- (extralimitación), siendo constantes las recomendaciones
cen cada vez más perfiladas, pero, a pesar de ello, existe para que esta tutela se ejercite con todo rigor.
una tendencia jurisprudencial a la búsqueda de un “res-
En este sentido, se transcribe la Recomendación de fe-
ponsable”, que podríamos decir que actúa como jefe de
cha 7 de noviembre de 1989, del Defensor del Pueblo, en
todo ese equipo, y así se dice que sea cual fuere la inci-
la que dice “Por lo que al segundo aspecto se refiere, es
dencia que tenga hoy la prestación colectiva del acto mé-
de resaltar que el facultativo que intervino en la asistencia
dico, hay que tener presente que el elemento primordial al-
es Médico Residente y, como tal, alumno en período de
rededor del cual se articula la responsabilidad médica es la
formación en la unidad docente del hospital. Conviene su-
tradicional prestación individual, no obstante ser el acto
brayar, en este sentido, que, según el art. 4.1 a) del R.D.
médico un acto complejo por su técnica y diversificación, y
127/84, de 11 de enero, por el que se regula la formación
debido a ello y a otros posibles factores concurrentes re-
médica especializada y la obtención del título de médico
sulta sumamente difícil establecer el régimen de atribución
especialista, son médicos residentes aquellos que para
de responsabilidades.
obtener su título de Médico Especialista permanecen
Ya en la órbita puramente pragmática, es de todos los en los Centros y en las Unidades Docentes acreditados
lectores sumamente conocida la actividad sanitaria que se un período limitado en el tiempo de práctica profesio-
ejerce en los hospitales del sector público, en la que una nal programada y supervisada, a fin de alcanzar de for-
cadena de profesionales médicos distintos intervienen a lo ma progresiva los conocimientos y la responsabilidad
largo del proceso curativo del paciente, de modo que es necesarios para ejercer la especialidad de modo efi-
frecuente que sea un médico quien diagnostica, otro quien ciente. Consiguientemente, el citado R.D. exige, en el des-
opera, y otro, al fin, quien sigue el curso postoperatorio, y arrollo de los correspondientes programas de formación la
todo ello en base a un sistema de eficiencia en el funcio- supervisión de la práctica profesional desarrollada por
namiento de principios tayloristas. los médicos residentes, supervisión que parece no ha-
Asimismo, cada vez aparece con mayor frecuencia la berse dado en la situación objeto de análisis y que de ha-
responsabilidad del Jefe del Servicio en diversos fallos ju- berse efectuado como debiera podría haber evitado la pre-
diciales, aun en el caso de no haber tenido una actuación sunta mala práctica, por lo que se emite la siguiente
directa, en base a su responsabilidad organizativa. RECOMENDACIÓN: Que se valore la oportunidad y con-
veniencia de dictar las Instrucciones oportunas, al objeto
La jurisprudencia, sin embargo, delimita las diferentes de que en el Hospital de la Seguridad Social “X” se proce-
responsabilidades a través de lo que se conoce como da, con carácter general, a supervisar la práctica profesio-
“principio de confianza”; esto es, el médico que actúa de nal programada de los médicos residentes, tal como de-
forma correcta puede confiar en que los demás miembros termina el precitado R.D. 127/1984, de 11 de enero”.
del equipo actúan también de forma correcta, salvo que las
circunstancias objetivables avalen lo contrario. Este princi- En el mismo sentido, otra Recomendación del Defensor
pio significa también que cada uno es responsable de lo del Pueblo, de 22 de noviembre de 1993, dirigida al Direc-
que hace, en virtud del principio de la división del trabajo, tor Territorial del Instituto Nacional de la Salud de Cantabria.
pero además está obligado a hacer algo cuando ese prin- Se incluye a continuación la Disposición adicional pri-
cipio de confianza se rompe ya sea en la división de traba- mera de la Ley 44/2003 a la que se hace referencia en otro
jo horizontal o vertical. epígrafe y que debe ponerse en relación con el futuro Es-
tatuto del Residente.

IX. EL MÉDICO RESIDENTE Ley 44/2003 de ordenación de las profesiones sanita-


rias.
Parece que hasta ahora nos hayamos olvidado de a
Disposición adicional primera. Relación laboral especial
quién va dirigido este Manual, pero es la realidad que este
de residencia.
hoy médico Residente será mañana quien realice un ejer-
cicio profesional autónomo, porque en tanto está someti- 1. La relación laboral especial de residencia es aplicable a
do al aprendizaje, opera sobre él la protección y tutela de quienes reciban formación dirigida a la obtención de un
su especial condicionamiento, de modo que sus actos, título de especialista en Ciencias de la Salud, siempre
siempre y en cualquier caso, están supervisados y tutela- que tal formación se realice por el sistema de residen-
dos a los efectos de responsabilidad por quien tenga so- cia previsto en el artículo 20 de esta Ley, en centros,
bre él esa competencia, y sólo y únicamente serán res- públicos o privados, acreditados para impartir dicha
ponsables de modo personalísimo cuando actúen formación.

1093
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

Los residentes tendrán la consideración de personal la- nomicista, un plus de riesgo para las empresas asegura-
boral temporal del servicio de salud o centro en que re- doras, que tienden, lógicamente, a elevar continuamente
ciban la formación, y deberán desarrollar el ejercicio los precios de las pólizas, haciendo en muchos casos la
profesional y las actividades asistenciales y formativas cobertura insostenible. Al mismo tiempo, las aseguradoras
que de los programas de formación se deriven. tienden a poner topes de cantidad asegurada, que, en mu-
chos casos, son superados por el “petitum” de los de-
2. El Gobierno regulará, mediante real decreto, la relación
mandantes. Sin embargo, la realidad no es tal como pu-
laboral especial de residencia, de acuerdo con las nor-
diera parecer, ya que aunque es de general conocimiento
mas de la Comunidad Europea que resulten aplicables
entre los profesionales médicos o a través de los medios
y estableciendo, además de las peculiaridades de su
de comunicación la petición de elevadísimas indemnizacio-
jornada de trabajo y régimen de descansos, los su-
nes, la realidad es que tales demandas no prosperan en
puestos de resolución de los contratos cuando no se
ese quantum, siendo aquilatadas por los juzgadores, y so-
superen las evaluaciones establecidas, los procedi-
bre todo cuando el proceso transcurre en las diferentes
mientos para la revisión de las evaluaciones otorgadas,
instancias. Ello no quita que en determinadas especialida-
la duración máxima de los contratos en función de la
des, y una de ellas es la Obstetricia, la cuantía de las in-
duración de cada uno de los correspondientes progra-
demnizaciones es muy elevada superando incluso los es-
mas formativos, y los supuestos excepcionales para su
tándares habituales lo que nos conduce sin duda a la
posible prórroga cuando se produzcan casos, no im-
pretensión de que se establezcan baremos, avalado por
putables al interesado, de suspensión de la relación la-
las organizaciones médicas colegiales, que supondría una
boral.
cierta estabilidad en este complejo sistema de asegura-
3. La relación laboral especial de residencia se aplicará miento.
también en aquellos supuestos de formación en Áreas
Según MORILLAS JARILLO, este tipo de asegura-
de Capacitación Específica que, conforme a lo estable-
miento desfigura la institución de la responsabilidad civil,
cido en el artículo 25, se desarrollen por el sistema de
el perjudicado no duda en plantear la demanda si sabe
residencia previsto en el artículo 20 de esta Ley.
que el autor está cubierto por un seguro, los Tribunales
interpretan más libremente las condiciones y la cuantía
de la indemnización, la extensión de este tipo de segu-
X. EL ASEGURAMIENTO ros contribuye al incremento de las demandas de repa-
De todo lo que ha quedado expuesto, puede deducir- ración, propicia el principio “pro damnato” o “favor victi-
se, en resumen, que la tendencia actual es el resarcimien- mae” y, por último, fomentaría la medicina defensiva.
to del daño; nótese que este tipo de resarcimiento actúa Aun siendo ciertos, en alguna medida, todos estos argu-
siempre por vía civil, contractual, extracontractual o patri- mentos no cabe duda de que el aseguramiento debe en-
monial, y en su caso como accesoria de la responsabilidad marcarse en la forma social del ejercicio de la profesión
penal, aunque la experiencia demuestre que por su facili- médica.
dad, gratuidad y rapidez, el paciente utilice con mayor fre- Es pues preciso exponer algunos conceptos:
cuencia la vía penal, sobre todo frente al ejercicio privado
de la actividad médica (y últimamente se apuntan datos a – tomador, es quien suscribe el contrato y paga la prima
su incremento también por los actos en los Sistemas sani- – asegurado, puede ser el mismo tomador u otros, o el
tarios públicos) dando lugar en la mayoría de los casos al tomador y otros
archivo de diligencias, al sobreseimiento o a la absolución.
– asegurador, es la entidad aseguradora
Pero es lo cierto que muchas de estas acciones prosperan
en la vía civil. – riesgo cubierto es la responsabilidad civil sanitaria del
médico en el ejercicio de la especialidad concreta fija-
Parece, pues, necesario e incluso ahora obligatorio el
da en la póliza y por la cuantía que se tenga contrata-
ejercicio profesional con cobertura de seguros de respon-
da
sabilidad civil, ya que, como se dijo al principio, siendo la
Medicina una actividad de gran riesgo, tanto para quien la – exclusiones son los riesgos no cubiertos y que apare-
ejerce como para quien la recibe es obligado este tipo de cen perfectamente señalados en el contrato de seguro
cobertura. (debe aquí recordarse que la responsabilidad penal no
puede lógicamente asegurarse pero si la accesoria ci-
Lo que sucede es que dado que existe una gran dis-
vil).
crecionalidad judicial en la aplicación de las indemnizacio-
nes por daño con cuantías absolutamente dispares, entre – suma asegurada, que puede ser de dos tipos, suma
unas Salas y otras, conlleva, desde un punto de vista eco- por año o periodo de seguro (agregate limit) o suma

1094
LA RESPONSABILIDAD SANITARIA

por siniestro, añadiendo en general la unidad de si- XI. LA NUEVA VISIÓN DE LA LEY DE
niestro (se considerará como un solo siniestro la su-
cesión de hechos y circunstancias que deriven de un
ORDENACIÓN DE LAS
mismo origen por igual causa con independencia del PROFESIONES SANITARIAS
número de perjudicados y el numero de reclamacio-
Ley 44/2003, de 21 de noviembre, de ordenación
nes formuladas y el numero de profesionales implica-
de las profesiones sanitarias.(BOE 280 de 22 de no-
dos).
viembre de 2003).
Otra cuestión de suma importancia es la relativa al ám-
Dada la complejidad y amplitud de esta norma nos ha
bito temporal de cobertura, ya que la doctrina se pregun-
parecido oportuno señalar algunos contenidos de modo epi-
ta, cuándo se produce el siniestro, si en el momento del grafiado en evitación de farragosas consultas al texto nor-
hecho dañoso o en el momento de la reclamación, y ello mativo al que debe remitirse para su completa integración.
da lugar a las cláusulas “claim made”, en función de las
cuales es imprescindible realizar un estudio exhaustivo de Objeto y ámbito de aplicación:
la póliza a fin de saber exactamente el tiempo de cobertu-
ra, el tiempo añadido (generalmente un año) o las pólizas Servicios sanitarios públicos y privados
que admiten la reclamación por hechos ocurridos no sólo
Profesiones sanitarias tituladas:
durante el periodo de cobertura sino otro anterior. Ello dio
lugar a la modificación del art. 73 de la Ley 50/1980, de 8 – Licenciado: medicina, farmacia, odontología, veterina-
de octubre, de Contrato de Seguro, como consecuencia ria y de ciencias de la salud
de las Sentencias de 20 de marzo de 1991 y 23 de abril de – Diplomados: enfermería, terapia ocupacional, podología,
1992. Como se ve el asunto es de tal complejidad que re- óptica, nutrición y dietética y otros en ciencias de la salud
quiere un estudio aparte.
– Otros no previstos que se podrán declarar
Como regla general, los médicos que trabajan en el
Sistema Nacional de Salud están normalmente ampara- – Profesiones del área sanitaria de formación profesional
dos por pólizas de responsabilidad civil por una cuantía de grado superior: técnico en AP, dietética, documen-
suficiente para la generalidad de las demandas; esta tación sanitaria, imagen para diagnóstico, etc.
responsabilidad comprendería tanto el caso de la res-
Del ejercicio de las profesiones sanitarias.
ponsabilidad patrimonial de la propia Administración co-
Principios generales.
mo la responsabilidad civil accesoria de una responsa-
bilidad penal de sus profesionales. Ahora bien, como • Derecho al libre ejercicio
sucede en determinadas especialidades (obstetricia)
• Titulo oficial de habilitación
que las cuantías indemnizatorias pueden superar la pre-
visión de la cobertura de la póliza suscrita, en el caso de • Funciones en ámbito sanitario, docente, de investiga-
responsabilidad patrimonial sería la propia Administra- ción, de gestión clínica, de prevención, de información
ción la que debería hacer frente al exceso, existiendo la y educación sanitaria
posibilidad de repetir frente al profesional cuando se • Participación en proyectos de salud y bienestar de las
diese la concurrencia de dolo, o culpa o negligencia gra- personas
ves (art. 145. 3. de la Ley 30/92 de 26 de noviembre de
• Actuación al servicio de la sociedad, el interés y la sa-
Régimen Jurídico de las Administraciones Públicas y del
lud del ciudadano
Procedimiento Administrativo Común, redactado según
la modificación de la Ley 4/1999 de 13 de enero); pero • Formación continuada con acreditación regular de
no así cuando se tratara de responsabilidad penal, ya competencia
que aun cuando el médico estaría cubierto por la póliza,
• Ejercicio
se insiste, para la responsabilidad civil accesoria, no lo
estaría por la patrimonial de la Administración ya que se – autonomía técnica y científica con historia clínica
trata de una responsabilidad civil individual del médico, común y única por paciente, unificación de criterios
de actuación basados en guías y protocolos de for-
y la póliza de cobertura que llegaría hasta el cuantum
ma orientativa.
concreto, por eso se recomienda en esas especialida-
des de “alto riesgo” un segundo tramo de cobertura, – eficacia organizativa de servicios, secciones y equi-
que sin concurrir con la cuantía asegurada de la póliza pos asistenciales con normas escritas de funciona-
suscrita por Administración ampare estas situaciones miento interno y funciones de cada miembro
del exceso. – continuidad asistencial

1095
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

Relación entre profesionales sanitarios y personas • En el supuesto de que como consecuencia de la na-
atendidas. Principios generales turaleza jurídica de la relación en virtud de la cual se
• Prestación de atención sanitaria técnica y profesional ejerza una profesión, el profesional hubiere de actuar
adecuada a las necesidades de salud de las personas en un asunto forzosamente, conforme a criterios pro-
que atienden fesionales diferentes a los suyos podrá hacerlo cons-
tar por escrito con la salvaguarda del secreto profe-
• Uso racional de recursos diagnósticos y terapéuticos sional y sin menoscabo de la eficacia de su
evitando la sobreutilización, infrautilización e inadecua- actuación.
ción
• Derecho de los pacientes a la libre elección de médico Relaciones interprofesionales y trabajo en equipo
(se puede ejercer el derecho de renuncia si no conlleva • Cooperación multidisciplinaria
desatención).Se facilitará el conocimiento de nombre,
titulación y especialidad del profesional asistente. Dere- • El equipo profesional es la unidad básica en la que se
cho a la información de acuerdo a la 41/2002.Registros estructuran los profesionales
públicos accesibles • El equipo actuará de forma jerarquizada o colegiada
según conocimientos, competencia y titulación basa-
Licenciados sanitarios
dos en la confianza y conocimiento reciproco admitién-
• Prestación personal y directa dose la delegación de actuaciones si existe capacidad
objetiva para la delegación
• Médicos: corresponde a los licenciados en medicina la
indicación y realización de las actividades dirigidas a la • Los equipos de profesionales una vez constituidos y
promoción y mantenimiento de la salud, a la preven- aprobados en el seno de las organizaciones serán re-
ción de las enfermedades y al diagnóstico, tratamiento, conocidos y apoyados por los directivos.
terapéutica y rehabilitación de los pacientes, así como
• Los centros e instituciones serán responsables de la
el enjuiciamiento y pronóstico de los procesos objeto
capacidad de los profesionales para realizar una co-
de atención.
rrecta actuación en las tareas y funciones encomenda-
Diplomados sanitarios das

• Prestación personal de los cuidados o los servicios Gestión clínica


propios de su competencia:
• Se establecerán los sistemas de acceso a la gestión clí-
• Enfermeros: nica con criterios de conocimiento y capacitación
• Corresponde a los diplomados universitarios en enfer- • Son funciones de gestión clínica:
mería la dirección, evaluación y prestación de los cui-
dados de enfermería orientados a la promoción, man- – jefatura o coordinación de unidades y equipos
tenimiento y recuperación de la salud, así como a la – tutorías
prevención de las enfermedades y discapacidades – organización de formación especializada, continua-
da y de investigación
Ejercicio profesional en las organizaciones
sanitarias – participación en comités internos

• Se regirá por las normas legales del vínculo • Las funciones de gestión estarán sometidas a evalua-
ción y serán objeto del oportuno reconocimiento
• Se podrán prestar servicios en dos o más centros si
median alianzas estratégicas o proyectos de gestión
Investigación y docencia
compartida (salvo normativa sobre incompatibilidades)
• Toda estructura asistencial estará a disposición de la
• Los centros sanitarios revisaran cada 3 años el cumpli-
investigación y la docencia
miento de requisitos (titulación, especialización, diplo-
mas, certificados, etc. Contando con un expediente • Los servicios de salud, instituciones y centros sanita-
personal de cada profesional) rios y las universidades podrán formalizar conciertos
(Ley Orgánica 2/2001)
• Registros del personal medico a disposición de los
usuarios (nombre, titulación, especialidad, categoría y • Los centros acreditados contarán con comisión de do-
función) cencia y jefe de estudios

1096
LA RESPONSABILIDAD SANITARIA

De la formación de los profesionales sanitarios • Mejorar en los propios profesionales la percepción de


su papel social
Principios rectores
• Posibilitar los instrumentos de comunicación entre pro-
• Colaboración permanente entre todas las administra- fesionales
ciones competentes educativas y sanitarias
• Concertación de las universidades y centros docentes Comisión de formación continuada

• Disposición de toda la estructura sanitaria para su utili- • Se constituirá y formarán parte de ella las administra-
zación en la docencia pregrado, especializada y conti- ciones públicas presentes en el Consejo interterritorial
nuada del sistema nacional de salud, representantes de los
colegios, de las universidades, del Consejo nacional de
• Revisión permanente de la metodología docente especialidades todo ello con régimen de funcionamien-
• Actualización permanente mediante la formación conti- to de la 3º/1992 LRJAPPAC sin perjuicio de las com-
nuada petencias de las CCAA

• Metodología para la evaluación de conocimientos Funciones de la Comisión de Formación continuada


Formación de los profesionales sanitarios – Detección, análisis, estudio y valoración de las ne-
cesidades de los profesionales en materia de for-
• Cap. II De la formación universitaria (véase la ley)
mación continuad
• Cap. III De la formación especializada en ciencias de la – Propuesta de adopción de programas o activida-
salud (detallado sistema de desarrollo de la obtención des
de títulos de especialistas en ciencias de la salud, ex-
– Propuesta de la adopción de medidas para planifi-
pedición del titulo de especialista, reconocimiento de tí-
car, armonizar y coordinar la actuación de los di-
tulos extranjeros, estructura de las especialidades, sis-
tema de formación de especialistas, programas de versos agentes
formación, acceso a la formación especializada por el – Estudio, informe y propuesta de procedimientos,
sistema de residencia, formación para una nueva es- criterios y requisitos para la acreditación de los cen-
pecialidad hasta los 8 años de obtenido el anterior, tros

• Áreas de capacitación específica con diploma expedi- – La de estudio, informe y propuesta para el estable-
do por el Ministerio de Sanidad con carácter oficial y cimiento de procedimientos, criterios y requisitos
validez en todo el territorio del Estado pudiendo acce- para la acreditación y la acreditación avanzada de
der a dicho diploma los especialistas que acrediten al profesionales en un área funcional específica de
menos 5 años de ejercicio de la especialidad. una profesión o especialidad, como consecuencia
del desarrollo de actividades de formación conti-
• Acreditación de centros y unidades docentes, comisio- nuada acreditada
nes de docencia, Comisiones Nacionales de Especiali-
dad, Comités de Áreas de capacitación especifica, Acreditación de centros actividades y profesionales
Consejo Nacional de Especialidades en Ciencias de la
salud, Registro nacional de especialistas en formación. – Por el Ministerio de Sanidad y CCAA
– Las administraciones públicas podrán en cualquier
Formación continuada momento auditar y evaluar los centros y actividades
• Principios generales: – A partir de la entrada en vigor de esta ley solo po-
drán ser tomadas en consideración en la carrera de
• Proceso de enseñanza y aprendizaje activo y perma-
los profesionales sanitarios las actividades de for-
nente al que tienen derecho y obligación los profesio-
mación continuada que hubieran sido acreditadas
nales sanitarios.
– Se admite la delegación de funciones en órganos
• Objetivos: inferiores
– Garantizar la actualización de los conocimientos – Las credenciales de los profesionales y sus revisio-
– Potenciar la capacidad de los profesionales nes no sustituirán los procedimientos de formación
– Generalizar el conocimiento por parte de los profe- conocimientos y habilidades que serán necesarios
sionales de los aspectos científicos, técnicos, éticos, para determinar los mecanismos de promoción y
legales, sociales y económicos del sistema sanitario contratación.

1097
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

Diplomas de acreditación y diplomas de gún procedimientos supervisados por la administración


acreditación avanzada sanitaria correspondiente conservándose la documen-
tación relativa a la evaluación de los profesionales
• Los diplomas serán expedidos por las administraciones
sanitarias públicas Desarrollo profesional en ejercicio profesional por
• Se establecerán registros para la inscripción de los Di- cuenta propia
plomas • Podrán acceder voluntariamente a los procedimientos
• Los diplomas serán valorados como mérito en la provi- del desarrollo profesional en la forma que se determine
sión de plazas.(cuando así se prevea en la normativa por la administración sanitaria superando las mismas
correspondiente) evaluaciones que las que se establezcan para la pres-
tación por cuenta ajena en centros sanitarios privados
Del desarrollo profesional y su reconocimiento
Homologación del reconocimiento del desarrollo
• Normas generales profesional
• Reconocimiento público, expreso y de forma individua- • El consejo interterritorial del SNS, la Comisión de Re-
lizada del desarrollo alcanzado por un profesional sani- cursos Humanos, la Comisión consultiva Profesional
tario en cuanto a conocimientos, experiencia en las ta- establecerán criterios generales para la homologación
reas asistenciales, docentes y de investigación, así valida para los distintos sistemas de salud
como al cumplimiento de los objetivos asistenciales de
la organización donde presta sus servicios Ejercicio privado de las profesiones sanitarias
• El reconocimiento del desarrollo profesional será públi- • Modalidades y principios generales:
co y con atribución expresa del grado alcanzado
• En la sanidad privada se podrá ejercer por cuenta pro-
• Se podrá acceder voluntariamente al sistema de des- pia o ajena según cualquiera de las formas contractua-
arrollo profesional les previstas.
• Los servicios sanitarios privados estarán dotados de
Desarrollo profesional
elementos de control que garanticen la calidad profe-
• Principio generales: sional y los procedimientos de evaluación según estos
– Se articulará en 4 grados, pudiendo establecerse principios:
un nivel previo – Derecho a ejercer la actividad adecuada a la titula-
– El primer grado y el acceso a los superiores reque- ción
rirá evaluación favorable de méritos, conocimien- – Respeto a la autonomía técnica
tos, competencia, formación continuada acredita- – Marco de contratación estable, motivación para la
da, actividad docente e investigación y actividad eficiencia y estímulo para el rendimiento
asistencial, su calidad y el cumplimiento de indica-
– Participación en la gestión y organización
dores y la implicación en la gestión clínica.
– Derecho y deber a la formación continuada
– Para obtener el primer grado será necesario acredi-
– Evaluación de la competencia y calidad del servicio
tar 5 años de ejercicio, y para pasar a los siguien-
prestado
tes grados 5 años desde la acreditación anterior
– Obligación de cobertura de responsabilidad civil a
– La evaluación será por comité específico en cada
través de aseguradoras, aval o garantía.
centro integrado por profesionales de la misma pro-
fesión, representantes del servicio y evaluadores – Libre competencia
externos – Libertad de prescripción.
– Los profesionales podrán hacer constar pública-
Prestación de servicios por cuenta ajena
mente su grado de desarrollo
• La prestación de servicios por cuenta ajena en centros
Desarrollo profesional en centros sanitarios privados dará derecho a ser informado de las funcio-
privados nes, tareas y cometidos, objetivos y sistemas de eva-
luación.
• Si existen profesionales por cuenta ajena de acuerdo
con la capacidad de cada centro se podrán establecer • Obligación de ejercer con lealtad, eficacia y observan-
criterios para el desarrollo de la carrera profesional se- cia de los principios técnicos, científicos y éticos.

1098
LA RESPONSABILIDAD SANITARIA

• Obligación de actualización de conocimientos haberse iniciado los de Relación laboral especial de re-
sidencia se regulará mediante RD
• Evaluación regular de las competencias y sistemas de
control de calidad. • Sólo podrán utilizarse las denominaciones de los títulos
de especialidad, diplomas de áreas de capacitación,
Ejercicio privado diplomas de acreditación y acreditación avanzada y los
• Art. 43 Registros de profesionales públicos que prestan grados de desarrollo cuando hayan sido obtenidos, ho-
sus servicios en centros sanitarios privados y entidades mologados o reconocidos.
de seguro. • Efectos retributivos del desarrollo se negociarán con
• Art. 44 Publicidad del ejercicio profesional privado res- las organizaciones sindicales
petará la base científica, la veracidad quedando expre- • Queda derogada la 24/82 sobre prácticas y enseñan-
samente prohibida la publicidad de productos no auto- zas sanitarias especializadas cuando entre en vigor el
rizados, de actuaciones sobre las que no exista RD sobre relación laboral especial de residencia
evidencia científica, los servicios de carácter creencial y
• Derogatoria habitual.
los productos milagro (sancionable por la 14/86 LGS,
26/84 DCU y 34/88 General de publicidad) • Informes sobre financiación se remite a la 16/2003 de
cohesión y calidad así como a normas legales de refe-
• Art. 45 Seguridad y calidad en el ejercicio profesional
rencia estatal y autonómica
privado
• ENTRADA EN VIGOR al día siguiente de su publicación
• Art. 46 Cobertura de responsabilidad. OBLIGACION
en el BOE (22 de noviembre de 2003)
DE SUSCRIBIR EL OPORTUNO SEGURO DE RC que
cubra las indemnizaciones que se puedan derivar del Queda así sintetizada gran parte de la materia que es-
eventual daño ta ley regula reiterando que es preciso hacerla concordar
con el articulado correspondiente que, en muchos de sus
De la participación de los profesionales capítulos, es muy detallado y prolijo, sin embargo sirva es-
te apunte orientativo para quien, de una manera rápida, in-
• Comisión consultiva profesional es el órgano de partici-
tente tener una visión general de dicha ley.
pación de los profesionales en el sistema sanitario y en
el desarrollo, planificación y ordenación de las profesio-
nes sanitarias actuando también en el ámbito de la for-
mación, el sistema de reconocimiento del desarrollo
LECTURAS RECOMENDADAS
profesional y la evaluación de la competencia. Actas del Seminario Conjunto sobre Responsabilidad del perso-
nal sanitario. CGPJ M.SC. Madrid, 1994.
• Composición:
Albaladejo M.: Derecho Civil. Derecho de obligaciones. Volumen
– Representantes del Consejo Nacional de Especiali- 1º Madrid. (358).
dades-Representantes profesionales de los Conse- Álvarez Cienfuegos J.M.: La confidencialidad de los datos rela-
jos Generales de Colegios tivos a la salud. En MARTÍNEZ-CALCERRADA y DE LO-
RENZO, Tratado de Derecho Sanitario (obra citada) (36 y
– ...
37.).
– Representante designado por las organizaciones Beltrán Aguirre J.R.: La información en la Ley General de Sanidad
científicas y en la jurisprudencia. En “Derecho y Salud”. Volumen III.
– Representantes designados por la Comisión de Re- Núm.2. Julio a Diciembre de 1995 (160).
cursos Humanos del SNS De Lorenzo R. “El contrato de prestación de servicios médicos”.
Ponencia I Jornada de DerechoSanitario. Alicante, 1984.
– ...
De Lorenzo R. y Martínez-Calcerrada, L. Tratado e Derecho mé-
dico. Madrid. Colex. 2001.
Adicionales, transitorias, derogatorias y finales
De Lorenzo y Montero R.: El consentimiento informado y la infor-
• Dirección de centros sanitarios se establecerán requisi- mación clínica en el Derecho español. En “Tratado de Dere-
tos, procedimiento de selección nombramiento o con- cho Sanitario” (213).
tratación y Régimen de infracciones y sanciones se re- Fernández Costales J. “El contrato de servicios hospitalarios y la
responsabilidad civil hospitalaria”. La Ley. 1992.
miten a la 14/86 LGS.
Fernández Costales J. “La responsabilidad civil sanitaria”. La Ley-
• Implantación del sistema de desarrollo, plazos y perio- Actualidad. 1995.
dos, a determinar por la administración sanitaria, pero Garzón Real B. “Responsabilidad civil, negligencia profesional e
en el plazo de 4 años de la entrada en vigor deberán imprudencia médico-sanitaria. La Ley. 1987.

1099
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

Goerlich Peset J. “Los Médicos Residentes. Un supuesto “espe- Sánchez-Caro, J. y Sánchez-Caro, J. El médico y la intimidad.
cial” de contrato de trabajo en prácticas”. Rev. Cívitas, de De- Madrid, Ed. Díaz Santos. 2001.
recho del Trabajo. 1991. Santos Briz. “La responsabilidad civil”. 1991.
Gómez Rivero, M.C. La responsabilidad penal del médico. Tirant Sentencia del Tribunal Supremo de 23 de abril de 1992: “La ope-
lo Blanch. Valencia. 2003. ración a la que fue sometida la menor no era ineludible y ne-
González Morán. “La responsabilidad civil del médico”. Bosch, cesaria, siendo posible otros tratamientos alternativos, evitán-
1990. dose así el alto riesgo de la intervención quirúrgica que se le
Iglesias Cabero M. “La responsabilidad del médico y del personal practicó; que no se advirtió a la madre de los riesgos de la
sanitario en el Derecho comparado”. Actualidad laboral. operación ni de las otras alternativas, para que ella decidiera.
1990. Estas son las actividades y omisiones culposas, que llevan a
la Sala de Apelación a sostener fundadamente que los de-
Lacruz Berdejo JL. “Derecho de obligaciones”. Bosch 1985.
mandados asumieron los riesgos por sí solos, en lugar de la
Martínez-Calcerrada, L. “Derecho Médico”. Tecnos 1986. paciente o de la persona llamada a prestar su consentimiento
Martínez-Calcerrada L. “Responsabilidad médica en su dualidad tras una información objetiva, veraz, completa y asequible.
funcional: cirugía asistencial, cirugía satisfactiva”, La Ley Los recurrentes se limitan escuetamente a resaltar las compli-
1995. caciones de la operación por su propia naturaleza, con apoyo
Martínez-Calcerrada, L. y De Lorenzo, R. Derecho Médico. Trata- del dictamen pericial, cosa que la sentencia recurrida recoge,
do de Derecho sanitario. Colex. Madrid.2001 y no sostiene lo contrario, sino que encuentra el fundamento
de la responsabilidad en aquellos hechos u omisiones”.
Morillas Jarillo, M.J "El seguro de responsabilidad civil derivado
del ejercicio de las actividades médicas y sanitarias" en DE- Sentencia del Tribunal Supremo, Sala de lo Civil, núm. 318/1999,
ONTOLOGIA, FUNCIÓN SOCIAL Y RESPONSABILIDAD DE de 19 de abril Recurso de Casación núm. 3.662/1998. Fun-
LAS PROFESIONES SANITARIAS. BSCH. Fundación Uni- damento de derecho 4º: “Consta, además, que el actor y re-
versidad Complutense. Madrid. 1999. currido no fue informado de las consecuencias de este tipo
de intervención por parte del Doctor, tal como le era exigible.
O´Callaghan X. Nuevas orientaciones jurisprudenciales en res-
Es de destacar, asimismo, que no solamente no fue informa-
ponsabilidad civil médica. Actualidad civil. Enero 2001.
do antes de la intervención, sin que “desde que realizó ésta,
Pueden verse: Información y documentación clínica (Actas del Se- el 5 de agosto de 1991, hasta el día 2 de diciembre de 1991,
minario conjunto sobre información y documentación clínica es decir, cuatro meses después, el Doctor, a pesar de cono-
celebrado en Madrid los días 22 y 23 de septiembre de 1997. cer las gravísimas lesiones y, según él, secuelas irreversibles,
II volúmenes. Madrid. Consejo General del Poder Judicial y Mi- que padecería el paciente, no le indicó que tenía un síndrome
nisterio de Sanidad y Consumo 1997. Bioética y justicia (Ac- de cola de caballo. Es decir, ni antes, ni después de la inter-
tas del Seminario conjunto celebrado en Madrid del 6 al 8 de vención practicada por el Doctor, aún con la presunta apari-
octubre de 1999). Madrid. Ministerio de Sanidad y Consumo, ción de un angioma peridural, éste no informó al paciente, so-
Consejo General del Poder Judicial 2000; Internamientos in- bre diagnóstico, pronóstico y alternativa de tratamiento, de
voluntarios, intervenciones corporales y tratamientos sanita- forma que el paciente pudiera comprender las consecuencias
rios obligatorios (Actas de la jornada conjunta celebrada en de la intervención y, en definitiva, emitir su consentimiento,
Madrid el día 24 de junio de 1999) Madrid, Ministerio de Sani- sin vicios”.
dad y Consumo, Consejo General del Poder Judicial 2000.
Soto Nieto F. “La responsabilidad civil del médico en la esfera
Rebolledo Varela A. “Responsabilidad civil del personal sanitario personal”. Rev. de Responsabilidad Civil, Circulación y Segu-
en centros asistenciales: presupuestos básicos”. Rev. Gene- ro. 1993.
ral de Legislación y Jurisprudencia. 1986.
Soto Nieto F. “Daños derivados de negligencia médica. Tenden-
Repertorios de jurisprudencia. La Ley. cia progresiva hacia el establecimiento de un sistema de ba-
Repertorio de Sentencias de la Actualidad Civil. remos”. La Ley, 1995.
Retuerto Buades M.: La salud, el sistema sanitario público. Su Tirado Suárez FJ. “La Directiva comunitaria de responsabilidad ci-
protagonista: el usuario. Derechos y deberes del usuario de vil, productos y ordenamiento español”. Rev. General de De-
la sanidad. En “Tratado de Derecho Sanitario” (obra citada) recho. 1987.
(818-819). Unidad de Bioética y Orientación Sanitaria. Consejería de Sani-
Romeo Casabona, C. Información y Documentación clínica. Su dad y Consumo. Comunidad de Madrid.
tratamiento jurisprudencial (1990-1999). Madrid. Ministerio Vela Torres. “Criterios legales y judiciales para cálculo de indem-
de Sanidad y Consumo. nizaciones”. Cuadernos deDerecho Judicial CGPJ. 1993.
Romeo Casabona, C. “Responsabilidad penal y responsabilidad Zamarriego Moreno, J.J. Autonomía prospectiva. Instrucciones
civil de los profesionales. Presente y futuro de los conceptos previas /voluntades anticipadas Bioética, Religión y Derecho.
de negligencia y riesgo”. La Ley. 1993. Actas Curso de Verano Universidad Autónoma de Madrid.
Ruiz Vadillo. “La responsabilidad de la Administración y de los Fundación Universitaria Española. 2005
profesionales sanitarios”. I Congreso Derecho y Salud. Bar- Zamarriego Moreno, J.J. El consentimiento de los menores para
celona, 1992. la asistencia sanitaria. Tesis Doctoral. Facultad de Derecho
Sánchez-Caro, J. Claves para la Gestión Clínica. Interamericana Universidad Complutense de Madrid. 2002.
de España, S.A.U. 2004. Zamarriego Moreno, J.J. Implicaciones jurídicas del menor ma-
Sánchez-Caro, J. y Abellán, F. Consentimiento informado. Fun- duro. Actas de IX Congreso Nacional de Derecho Sanitario.
dación Salud. Madrid. 1999 y 2000. Madrid. 2002.

1100
LA RESPONSABILIDAD SANITARIA

Al momento de cerrarse esta obra las normas autonómicas que Decreto 175/2002, de 25 de junio, de regulación del Registro de
contienen una regulación sobre la materia son las siguientes voluntades anticipadas en Cataluña.
(actualizado a marzo de 2006): Extremadura:
Andalucía: Ley 10/2001, de 28 de junio, de Salud de Extremadura.
Ley 2/1998, de 15 de junio, de Salud de Andalucía Ley 3/2005, de 8 de julio, de información sanitaria y autonomía
Ley 5/2003, de 9 de octubre, de declaración de voluntad vital an- del paciente.
ticipada Galicia:
Ley 7/2003, de 20 de octubre, por la que se regula la investiga- Ley 3/2001, de 28 de mayo, de la Comunidad Autónoma de Ga-
ción en Andalucía con preembriones humanos no viable pa- licia, reguladora del consentimiento informado y de la historia
ra la fecundación in vitro. clínica de los pacientes.
Decreto 238/2004, de 18 de mayo, que regula el registro de vo- Ley 3/2005. de 7 de marzo, que modifica la Ley 3/2001, de 28
luntades anticipadas de mayo, reguladora del consentimiento informado y de la
Decreto 246/2005, de 8 de noviembre, por el que se regula el historia clínica de los pacientes.
ejercicio del derecho de las personas menores de edad a re- Madrid:
cibir atención sanitaria en condiciones adaptadas a las nece-
Ley 12/2001, de 21 de diciembre, de Ordenación Sanitaria de la
sidades propias de su edad y desarrollo y se crea el Conse-
Comunidad de Madrid (Título IV).
jo de Salud de las Personas Menores de Edad.
Ley 5/2002, de 27 de junio, sobre Drogodependencias y otros Tras-
Aragón:
torno Adictivos de la Comunidad de Madrid (Título II, Capítulo II).
Ley 6/2002, de 15 de abril, de Salud de Aragón (Título III).
Ley 3/2005, de 23 de mayo, por la que se regula el ejercicio del
Decreto 100/2003, de 6 de mayo, que aprueba el Reglamento de derecho a formular Instrucciones Previas en el ámbito sanita-
Organización y funcionamiento del Registro de voluntades rio y se crea el Registro correspondiente.
anticipadas.
Murcia:
Baleares:
Decreto 80/2005, de 8 de julio, por el que se aprueba el Re-
Ley 5/2003, de 4 de abril, de Salud de las Islas Baleares (Título I, glamento de Instrucciones Previas y su Registro
Capítulos I, II, III, IV y V).
Navarra:
Ley 1/2006 de 3 de marzo, de voluntades anticipadas
Ley Foral 11/2002, de 6 de mayo, de Navarra, sobre los derechos
Canarias: del paciente a las voluntades anticipadas, a la información y
Orden de 28 de febrero de 2005 por la que se aprueba la Carta a la documentación clínica.
de los Derechos y de los Deberes de los Pacientes y Usua- Ley Foral 29/2003, de 4 de abril, de modificación parcial de la Ley
rios Sanitarios y se regula su difusión 11/2002 (con la finalidad de llevar a cabo la adaptación a la
Cantabria: Ley básica 41/2002).
Ley 7/2002, de 10 de diciembre, de Ordenación Sanitaria de Decreto Foral 140/2003, de 16 de junio, por el que se regula el
Cantabria. registro de voluntades anticipadas.
Decreto 139/2004, de 5 de diciembre, que crea y regula el regis- País Vasco:
tro de voluntades previas de Cantabria.
Decreto 272/1986, de 25 de noviembre, por el que se establece
Castilla-La Mancha: y regula el uso de la historia clínica única en los centros hos-
Orden de 20 de febrero de 2003, de la Consejería de Sanidad, de pitalarios, del País Vasco.
las Reclamaciones, Quejas, Iniciativas y Sugerencias sobre el Decreto 45/1998, de 17 de marzo, del País Vasco, por el que se
funcionamiento de los servicios, centros y establecimientos establece el contenido y se regula la valoración, conservación
sanitarios del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha. y expurgo de los documentos del Registro de Actividades Clí-
Ley 6/2005, de 07-07-2005, sobre la Declaración de Voluntades nicas de los Servicios de Urgencias de los Hospitales y de las
Anticipadas en materia de la propia salud Historias Clínicas Hospitalarias.
Castilla y León: Ley 7/2002, de 12 de diciembre de voluntades Anticipadas en el
Ley 5/2003, de 3 de abril, de atención y protección a las perso- ámbito de la Sanidad
nas mayores de Castilla y León. Decreto 270/2003, de 4 de noviembre, del departamento de Sa-
Ley 8/2003, de 8 de abril, sobre derechos y deberes de las per- nidad, por el que se crea y regula el Registro vasco de vo-
sonas en relación con la salud. luntades anticipadas.
Decreto 101/2005, de 22 de diciembre, por el que se regula la Orden de 6 de noviembre de 2003, del Departamento de Sani-
historia clínica dad, por el que se crea el fichero automatizado de datos de
carácter personal denominado “Registro vasco de volunta-
Cataluña:
des anticipadas” y añade a los gestionados por el Departa-
Ley 21/2000, de Cataluña, sobre los derechos de información re- mento de Sanidad.
lativos a la salud, la autonomía del paciente y la documenta-
La Rioja:
ción clínica. Resolución de 18 de julio de 2001, de creación
del grupo de trabajo para el estudio de la posibilidad del uso Ley 2/2002, de 17 de abril, de Salud de La Rioja (Título II).
compartido de historias clínicas entre los centros asistencia- Ley 9/2005, de 30 de septiembre, reguladora del documento de
les de Cataluña. instrucciones previas en el ámbito de la sanidad.

1101
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

Valencia: Ley 3/2003, de 6 de febrero, de Ordenación Sanitaria de la Co-


Orden de 8 de octubre de 1992, sobre el conjunto mínimo de da- munidad Valenciana.
tos a utilizar en la información hospitalaria. Decreto 93/2004, de 4 de junio, que determina la constitución,
Orden de 17 de febrero de 1994, sobre confidencialidad y custo- composición y funcionamiento de la comisión de consenti-
miento informado.
dia de datos médicos de servicios médicos de empresa en la
Comunicad Valenciana. Decreto 168/2004, de 10 de septiembre, del Consell de la Gene-
ralitat, por el que se regula el documento de voluntades anti-
Orden de 14 de septiembre de 2001, sobre normalización de los
cipadas y se crea el Registro centralizado de voluntades an-
documentos básicos de la historia clínica hospitalaria y regu-
ticipadas de la Comunidad Valenciana
lación de su conservación de la Comunidad Valenciana.
Orden de 25 de febrero de 2005, de la Consejellería de Sanidad,
Orden de 4 de diciembre de 2002, que aprueba la carta al pa- de desarrollo del Decreto 168/2004, de 10 de septiembre,
ciente de la Comunidad Valenciana. del Consell de la Generalitat, por el que se regula el docu-
Ley 1/2003, de 28 de enero, de derechos e información al pa- mento de voluntades anticipadas y se crea el Registro cen-
ciente en la Comunidad Valenciana. tralizado de voluntades anticipadas.

1102
Capítulo 118
LA LEGISLACIÓN EUROPEA SOBRE MÉDICOS
ESPECIALISTAS Y EN FORMACIÓN
Zapardiel I, Sanfrutos L, Salazar FJ

INTRODUCCIÓN 3. La garantía que confiere esta Directiva al profesional


para ejercer debe entenderse sin perjuicio del cumpli-
La normativa según la cual los Estados miembros de la miento de las condiciones de ejercicio no discriminato-
Unión Europea reconocen las cualificaciones profesionales rias que pueda imponerle el Estado de acogida (donde
adquiridas en otro Estado miembro así como el ejercicio de se va a realizar la actividad profesional), siempre que
la profesión queda establecida en la Directiva 2005/36/CE estas condiciones estén justificadas objetivamente y
del Parlamento Europeo y del Consejo de 7 de Septiembre sean proporcionadas. Además, el profesional, debe es-
de 2005 relativa al reconocimiento de cualificaciones pro- tar sujeto a las normas disciplinarias que estén relacio-
fesionales. nadas directa o específicamente con su cualificación
La Directiva citada entró en vigor el 20 de Octubre de profesional en el Estado de acogida
2005 derogando las anteriores directivas 77/452/CEE, 4. La libre circulación y el reconocimiento mutuo del título
77/453/CEE,78/686/CEE, 78/687/CEE, 78/1026/CEE, de formación de médico debe basarse en el reconoci-
78/1027/CEE, 80/154/CEE, 80/155/CEE, 85/384/CEE, miento automático sobre la bases de la coordinación
85/432/CEE, 85/433/CEE, 89/48/CEE, 92/51/CEE, de las condiciones mínimas de formación. El acceso a
93/16/CEE y 1999/42/CE con efectos a partir del 20 de esta profesión debe supeditarse a la posesión de un tí-
Octubre de 2007. tulo de formación determinado que garantice una for-
Los Estados miembros deben poner en vigor las dis- mación mínima establecida. Este sistema ha de com-
posiciones legales, reglamentarias y administrativas nece- plementarse con una serie de derechos adquiridos por
sarias para dar cumplimiento a lo establecido en dicha Di- los profesionales.
rectiva a más tardar el 20 de Octubre de 2007. 5. El reconocimiento del título de formación básica de mé-
dico (Licenciado en Medicina) debe entenderse sin per-
juicio de la competencia de los estados miembros pa-
DIRECTIVA 2005/36/CE ra acompañar o no dicho título de actividades
profesionales.
Consideraciones previas 6. Esta justificado mantener para todas las especialidades
La directiva expone 44 consideraciones previas al tex- médicas reconocidas hasta la fecha de esta Directiva el
to de las que cabe destacar: principio de reconocimiento automático.
1. El articulo 3, apartado 1, letra c), del Tratado de la UE, 7. Lo dispuesto en esta directiva no afectará a la compe-
dispone la supresión de obstáculos a la libre circulación tencia de los Estados miembros sobre la organización
de personas y el art. 47, apartado 1 se refiere a la de su régimen de seguridad social y a la determinación
adopción de directivas para el reconocimiento mutuo de las actividades que han de ejercerse en el ámbito de
de diplomas certificados y otros títulos de formación dicho régimen.
2. A fin de garantizar la eficacia del sistema de reconoci- 8. Habida cuenta de la rapidez de la evolución tecnológi-
miento de cualificaciones profesionales, es convenien- ca y el progreso científico, el aprendizaje permanente
te definir trámites y normas de procedimiento unifor- tiene especial importancias y corresponde a los Esta-
mes para su aplicación, así como determinadas dos miembros establecer el sistema de formación con-
modalidades de ejercicio de la profesión. tinuada de los profesionales.

1103
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

9. Para garantizar la transparencia del sistema de recono- – Además los Estados de acogida podrán exigir los si-
cimiento así como para simplificar la gestión y actuali- guientes documentos:
zación de la presente directiva, se ha de crear una red • Prueba de nacionalidad
de puntos de contacto con el cometido de informar a
• Certificado que acredite el establecimiento legal en
los ciudadanos y un Comité único de reconocimiento
un Estado miembro para ejercer la profesión
de cualificaciones profesionales.
• Los títulos relativos a la cualificación profesional
10. La presente Directiva se entiende sin perjuicio de las
medidas destinadas a garantizar un elevado nivel de – Y también podrán solicitar al prestador la siguiente in-
protección de la salud y de los consumidores. formación:
• Si está inscrito en algún tipo de registro público, el
Título I: disposiciones generales nombre del mismo y el nº de inscripción
• La asociación profesional u organismo en que esté
El Objeto de la Directiva es establecer las normas se- inscrito
gún las cuales un Estado miembro, que subordina el acce-
• Información detallada sobre garantías de seguros
so a una profesión regulada o su ejercicio a la posesión de
que estén en relación con la responsabilidad profe-
determinadas cualificaciones profesionales, reconocerá
sional
para el acceso a dicha profesión o su ejercicio las cualifi-
caciones obtenidas en otro Estado miembro. • Información relacionada con regímenes de autori-
zación del Estado respecto a su actividad profesio-
Esta Directiva se aplicará a todos los nacionales con nal.
cualificación profesional de un Estado miembro que pre-
• En actividades sujetas a IVA el nº de identificación.
tendan ejercer una profesión regulada en otro Estado
miembro ya sea por cuenta propia o ajena.
Título III: libertad de establecimiento
Dentro de estas profesiones reguladas entra la de mé-
dico, que quedará cualificada en España con el título de Capítulo III: Reconocimiento de títulos basado en la
formación de Licenciado en Medicina y Cirugía. Así mismo coordinación de las condiciones mínimas de
la calificación especializada será acreditada en España con formación
el Título de Especialista (que en nuestro caso será en Obs-
tetricia y Ginecología). Sección 1: Disposiciones generales
El reconocimiento de las calificaciones profesionales El principio de reconocimiento automático dispone que
permitirá al beneficiario acceder a la misma profesión en el los Estados miembros reconocerán los títulos españoles
Estado miembro de acogida y ejercerla del mismo modo de Licenciado en Medicina y Cirugía y Título de Especialis-
que en el Estado de origen ta (incluido en Obstetricia y Ginecología), otorgándoles, pa-
ra el acceso a las actividades profesionales y su ejercicio,
Título II: Libre prestación de servicios el mismo efecto en su territorio que el que tienen en terri-
torio español.
– El principio de libre prestación de servicios dispone que
los Estados miembros no podrán restringir, por razo- Estos títulos deben haber sido expedidos por el Minis-
nes de cualificación profesional, la libre prestación de terio de Educación y Cultura (MEC) y el de Licenciado en
servicios en otro estado miembro si el prestador del Medicina y Cirugía también por el Rector de una universi-
servicio está legalmente establecido para ejercer la dad acreditada.
misma profesión en el Estado de origen.
Los Estados miembros reconocerán como prueba su-
– El prestador estará sujeto a las normas profesionales ficiente para los nacionales de dichos Estados cuyos títu-
de carácter profesional, jurídico o administrativo que los de formación de médico no respondan a las denomi-
estén directamente relacionadas con las calificaciones naciones antes citadas, los títulos de formación expedidos
profesionales aplicables en el Estado miembro de aco- en estos Estados miembros acompañados de un certifica-
gida. do expedido por las autoridades u organismos competen-
tes.
– Los Estados miembros podrán exigir que cuando el
prestador de servicios se desplace por primera vez, in- Además los Estados miembros mediante procedimien-
forme de ello con antelación, mediante una declaración tos particulares de educación y formación continuada ga-
por escrito a la autoridad competente del Estado rantizarán la actualización de los profesionales para man-
miembro de acogida. tener unas prestaciones eficaces y seguras.

1104
LA LEGISLACIÓN EUROPEA SOBRE MÉDICOS ESPECIALISTAS Y EN FORMACIÓN

Sección 2: Médico concluir y sancionarse mediante una decisión motivada de


la autoridad competente del Estado de acogida en el pla-
El artículo 24 explica los requisitos para obtener en los
Estados miembros la formación básica de médico (en Es- zo máximo de 3 meses a partir de la presentación del ex-
paña el título de Licenciado en Medicina y Cirugía) pediente completo del interesado.

Y el artículo 25 regula la formación médica especializa- En caso de que una profesión esté regulada en el Es-
da, cabe destacar: tado de acogida por una asociación u organización, los na-
cionales de los Estados miembros sólo podrán hacer uso
– La admisión y posterior expedición del título de espe-
del título profesional expedido por esta asociación si acre-
cialista queda supeditada (en España) a la obtención
ditan su pertenencia a esta.
del título de Licenciado en Medicina y Cirugía.
– Comprenderá una enseñanza teórica y practica en un Título IV: modalidades de ejercicio de la
centro hospitalario docente o un centro acreditado.
profesión
– Los Estados miembros deberán velar por el cumpli-
miento de las duraciones mínimas establecidas para ca- Establece que los beneficiarios del reconocimiento de
da especialidad (en el caso de Obstetricia y Ginecología sus cualificaciones profesionales deberán poseer los cono-
son 4 años). Esta duración podrá modificarse con miras cimientos lingüísticos necesarios para el ejercicio de la pro-
a su adaptación al progreso científico y técnico aplican- fesión en el Estado miembro de acogida.
do los artículos 5 y 7 de la Decisión 1999/468/CE, ob- Además exime a la cualificación profesional de médico
servando lo dispuesto en su artículo 8. adquirida en otro Estado miembro de la realización de un
– La formación se realizará a tiempo completo en los periodo de prácticas preparatorio o de experiencia profe-
centros específicos reconocidos con la participación en sional para su adscripción a un seguro de enfermedad en
la totalidad de las actividades médicas del departa- los Estados de acogida en que esto se exige a sus nacio-
mento donde se realice la formación. Estos puestos se- nales.
rán objeto de una retribución apropiada.
Los Estados miembros reconocerán el título de médico Título V: cooperación administrativa y
especialista expedido en España a los médicos que hubie- competencias de ejecución
ran recibido una formación especializada antes del 1 de
enero de 1995 y que no responda a las exigencias mínimas Cada Estado miembro designará, a más tardar el 20 de
de formación establecidas en el artículo 25, si dicho título Octubre de 2007, las autoridades y organismos compe-
está acompañado de una certificación expedida por las tentes facultados para expedir o recibir las pruebas de los
autoridades competentes españolas que acredite que el títulos y demás documentos o información, así como
interesado ha superado la prueba de competencia profe- aquellos facultados para recibir las solicitudes y tomar las
sional específica organizada en el ámbito de las medidas decisiones a que se refiere la presente Directiva.
excepcionales de regularización que figuran en el Real De- También designará un coordinador de las actividades
creto 1497/99.
de las autoridades mencionadas encargado de promover
la aplicación uniforme de esta directiva y recopilar la infor-
Capítulo IV: Disposiciones comunes sobre
mación necesaria para la aplicación de la misma
establecimiento
Además cada Estado miembro designará un punto de
En este capítulo se disponen los documentos exigibles
contacto cuya función será servir de apoyo a los ciudada-
por el Estado de acogida al prestador de servicios (ya ex-
plicado en el resumen del título II de esta Directiva), así co- nos y a los coordinadores para hacer ejercicio de los dere-
mo en casos de duda justificada la comprobación, por par- chos que esta Directiva confiere.
te del Estado de acogida, de la autenticidad de los títulos Por último la Comisión Europea será asistida por un
o cursos de formación. único Comité para el reconocimiento de cualificaciones
Con respecto a los plazos, dispone que el Estado de profesionales y estará integrado por los representantes de
acogida deberá acusar el recibo del expediente del solici- los Estados miembros y presidido por el representante de
tante en el plazo de 1 mes a partir de su recepción y le in- la Comisión.
formará de la posible falta de documentos. Queda contemplada, en el articulo 59 de este título V,
El procedimiento de examen de una solicitud de auto- la consulta a grupos de expertos en relación con los tra-
rización para el ejercicio de una profesión regulada deberá bajos del Comité.

1105
Capítulo 119
REPERTORIO JURISPRUDENCIAL COMENTADO
Zamarriego Moreno JJ, Torres Solanas VM

ÍNDICE eliminado los datos referentes a personas y entidades al


objeto de dificultar su identificación.
– Daño moral
Por otra parte, hay que resaltar que aunque la mayoría
– Sentencia de la Audiencia Provincial de Zaragoza, de
de las sentencias estudiadas en este capítulo son de fe-
12 de mayo de 2003.
chas recientes, sus fundamentos se basan en la legislación
– Diagnóstico prenatal aplicable en el momento que sucedieron los hechos.
– Sentencia del Tribunal Supremo, de 21 de diciembre
Se ha utilizado como procedimiento metodológico in-
de 2005.
cluir en primer lugar la referencia exacta de la sentencia pa-
– Ecografía ra que pueda accederse a su texto íntegro por quien esté
– Sentencia del Tribunal Supremo, de 21 de febrero de interesado; a continuación se introduce un resumen que
2006. extracta el tipo de asistencia (pública o privada); el tipo de
– Sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Catalu- responsabilidad; apunte fáctico y fallo absolutorio o con-
ña, de 10 de enero de 2006. denatorio con la indemnización fijada en su caso. Se apor-
– Sentencia del Tribunal Supremo, de 18 de diciembre ta un extracto de la sentencia en sus propios términos y un
de 2003. comentario jurídico final.

– Mama
Sentencia de la Audiencia Provincial de
– Sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Cana-
rias, de 10 de marzo de 2006. Zaragoza, Sección 5ª, de 12 de mayo de
– Sentencia de la Audiencia Provincial de Madrid, de 22
2003. (JUR 2003\151749).
de abril de 2005. Ponente: Ilmo. Sr. D. Antonio Luis Pastor Oliver.
– Sentencia del Tribunal Supremo, de 23 de septiembre Resumen: Medicina privada. Responsabilidad civil. Se
de 2004. condena a un ginecólogo y a su compañía de seguros a in-
– Parto demnizar con 6.000 euros a una paciente a la que se rea-
– Sentencia del Tribunal Supremo, de 14 de marzo de lizó una ligadura de trompas quedando embarazada des-
2005. pués. La indemnización responde al daño moral por el
– Sentencia del Tribunal Supremo, de 23 de noviembre disgusto inicial al recibir la noticia de la gestación, cuando
de 2004. la paciente pensaba que era imposible. El tribunal no niega
que el ginecólogo no informara a la paciente de la mínima
– Sentencia del Juzgado de 1ª Instancia nº 58 de Madrid,
posibilidad de quedarse embarazada tras la intervención,
de 31 de julio de 2004.
pero afirma que, si lo hizo, no queda demostrado que fue-
– Sentencia del Tribunal Supremo, de 19 de julio de ra por escrito. Por otra parte, el tribunal considera que la
2004.
paciente se habría sometido a la ligadura aún conociendo
– Protocolos la posibilidad de quedarse embarazada, por lo que afirma
– Sentencia de la Audiencia Nacional, Sala de lo Conten- que no hay relación de causalidad entre la ausencia de in-
cioso-Administrativo, Sección 4ª, de 5 de noviembre de formación y el embarazo.
2003.
Extracto del texto de la Sentencia:
Todas las sentencias que se estudian en el presente
capítulo han sido obtenidas de la Base de Datos de Aran- Se plantea la cuestión litigiosa de forma fundamental en
zadi de Legislación y Jurisprudencia. No obstante, se han el ámbito del "Derecho a la información" como exigencia

1107
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

ineludible de la responsabilidad profesional de los agentes eficacia del mismo?. La respuesta es negativa como regla
sanitarios. general. Es decir, lo normal es plantearse dicha efectividad.
Sin embargo, en el caso presente del interrogatorio de la
Ciertamente que la iluminación y el esclarecimiento, a
demandante se infiere la certeza de sus asertos cuando di-
través de la información del médico para que el enfermo
ce que sobre ese extremo nada se le informó.
pueda escoger en libertad dentro de las opciones posibles
que la ciencia médica le ofrece al respecto e incluso la de Así, pues, el hecho de que lo habitual sea que en la in-
no someterse a ningún tratamiento, ni intervención, no su- formación verbal aparezca el dato de la "eficacia" no obli-
pone un mero formalismo, sino que encuentra fundamen- ga automáticamente a aceptar que siempre se da esa in-
to y apoyo en la misma Constitución Española, recono- formación. Y aquí el demando insistió en que sí se la dio.
ciendo la autonomía del individuo para elegir entre las En su consecuencia, este Tribunal no puede afirmar que no
diversas opciones vitales que se presenten de acuerdo con se diera aquella información, pero sí que el ginecólogo no
sus propios intereses y preferencias. ha probado –como le correspondía en la distribución del
onus probandi– que la dio. Por ello y desde la óptica de la
El consentimiento informado constituye un derecho hu-
justicia formal que defiende el proceso civil, habrá que es-
mano fundamental, precisamente una de las últimas apor-
tar a dicha conclusión.
taciones realizada en la teoría de los derechos humanos,
consecuencia necesaria o explicación de los clásicos dere- Será despejar si esa posibilidad de fallo del sistema an-
chos a la vida, a la integridad física y a la libertad de con- ticonceptivo constituye o no un "hecho notorio" de innece-
ciencia. Derecho a la libertad personal, a decidir por sí mis- saria explicación. El Tribunal no considera que sea un co-
mo en lo atinente a la propia persona y a la propia vida y nocimiento popular generalizado y de notoriedad
consecuencia de la autodisposición sobre el propio cuer- indiscutible el que la ligadura de trompas tenga por razo-
po. nes biológicas u orgánicas aún desconocidas fallos en su
función esterilizadora. No hay, pues, conocimiento notorio
No cabe duda de que los actores tenían derecho a ser
que eximiera de la información que es objeto central de la
informados sobre las consecuencias y alcance de una me- litis.
dida quirúrgica esterilizadora, como es la "ligadura de
trompas". La demanda únicamente recoge el consenti- Ahora bien, no toda falta de información está anudada
miento informado para la realización de la cirugía laparos- de forma inmediata y automática a una consecuencia in-
cópica ginecológica, pero sin referencia expresa a la cita- demnizatoria. Es imprescindible probar los perjuicios que
da "ligadura de trompas". Dicha técnica (a la que se aquélla haya originado. Y esa sí que es carga de la parte
contrae el consentimiento documentado) tanto es válida actora. En este sentido la demanda recoge una serie de
para la litigiosa "ligadura" como para otro tipo de interven- conceptos que conforman el quantum indemnizatorio. Así,
ciones que nada tienen que ver con ella. Por ejemplo, la ex- se pueden agrupar los citados conceptos en daños mora-
tirpación de un quiste de un ovario. Por lo tanto, la infor- les y económicos. Dentro de los primeros están los relati-
mación sobre el éxito o fracaso de la "ligadura de trompas" vos a la angustia de afrontar un cuarto embarazo inespe-
y sus efectos fue en todo caso, verbal. rado y con los precedentes de un tercer embarazo con
diabetes gestacional; los relativos a la libertad personal del
Y en este sentido, también la jurisprudencia ha unifica- matrimonio y de realización laboral y personal de la espo-
do sus criterios, haciendo recaer sobre el facultativo la car- sa. En los segundos están los gastos adicionales que to-
ga de la prueba de su existencia, pues es él quien se halla do hijo lleva consigo (alimentos, cuidados, educación,
en situación más favorable para conseguir su acreditación etc.).
(Doctrina de la facilidad probatoria).
Sin embargo, no se puede olvidar que el nexo causal
Es más, en los supuestos, como el presente, de la de- entre la falta de diligencia profesional (ausencia de infor-
nominada "medicina voluntaria”, no propiamente curativa, mación detallada) y los perjuicios reclamados ha de ser di-
la exigencia de información relevante personalizada alcan- recta y precisa. Es decir, si la Sra. M E o más exactamen-
za una mayor relevancia, debiendo ser clara, exhaustiva te si el matrimonio C-ME hubiera desechado la "ligadura de
para que el paciente (o cliente) pueda contar con datos trompas" al recibir la información de la posibilidad de fallo
claros y precisos para poder decidir si se somete o no a la de un 3 a un 7 por mil.
intervención que el facultativo le propone.
De la prueba practicada se deduce con claridad que la
Trasladando estos principios al caso cuyo enjuicia- demandante tenía muy claro dos cosas:
miento nos ocupa, se plantea una duda razonable: ¿es ló-
a) que no quería tener más hijos y
gico que una mujer que desea no tener más hijos y se
plantea un método anticonceptivo, no pregunte sobre la b) que quería hacerse una ligadura de trompas.

1108
REPERTORIO JURISPRUDENCIAL COMENTADO

Consecuentemente, es lógico inferir que la Sra. M E no del Hospital XXX, integrado en el Servicio de Salud de la
hubiera dejado de ligarse las trompas por la información de Comunidad Autónoma. El objetivo no era otro que la reali-
esa mínima posibilidad inevitable de repermeabilización de zación del diagnóstico prenatal, el detectar si el feto pudie-
las mismas; máxime si se tiene en cuenta que ningún mé- ra estar afectado del síndrome de Down (trisomia del par
todo anticonceptivo es fiable al 100 %. Por lo tanto, no hay 21), para, si así fuera, interrumpir la gestación. En el día
relación de causalidad entre la ausencia de información y 12+6 de la gestación, y en dicho servicio hospitalario, le fue
el embarazo de la Sra. M. E. practicada el método de diagnóstico prenatal consistente
en una biopsia Corial transabdominal bajo control ecográ-
Sí que hay daño moral por la sorpresa al recibir la noti-
fico, cuyo resultado le fue comunicado primero telefónica-
cia de un embarazo que, por la falta de información, creía
mente y después mediante sendas cartas acompañadas
imposible. Disgusto y angustia inicial exclusivamente, ya
de informes clínicos. En la primera se le dice que «el exa-
que de haber recibido la citada información la situación de
men de todas las mitosis permite afirmar que se trata de
gravidez se debería a un imponderable de la naturaleza y
una dotación diploide, cuya fórmula cromosómica estable-
no a falta de diligencia del facultativo. Y ese disgusto inicial,
cemos como: 46, XY de hombre citogenéticamente nor-
que puede calificarse como de daño moral, se puede valo- mal». En la segunda, se le participa el mismo resultado po-
rar, haciendo uso de la capacidad moderadora que nos sitivo, esperando que «el embarazo llegue a feliz término».
confiere el art. 1103 CC. El parto tuvo lugar el día 31 de octubre de 1992 y la Sra. A
dio a luz a un hijo varón, afectado por síndrome de Down.
Comentarios:
Doña A y su marido formularon demanda de responsabili-
Esta sentencia se basa en la clásica del Tribunal Supremo dad civil contra el Servicio de Salud, el Hospital XXX, y la
de 12 de enero de 2001, del ponente José Manuel Martínez- compañía de seguros. La sentencia del Juzgado de Prime-
Pereda, que declara que el consentimiento informado es un ra Instancia absolvió a los demandados con el argumento
derecho humano fundamental, (doctrina del Tribunal Consti- de que no concurre el requisito de la conducta negligente,
tucional, Sentencia 132/1989, de 18 de junio), reconocido en puesto que fueron correctas las pruebas prenatales y la
los Pactos Internacionales como la Declaración Universal de actora fue suficientemente informada tanto de los riesgos
los Derechos Humanos, el Convenio para la Protección de los que comportaban como de la imposibilidad de asegurarle
Derechos Humanos y de las Libertades Fundamentales y el absolutamente el nacimiento de un hijo sin problemas. La
Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos. de la Audiencia Provincial desestimó el recurso de apela-
ción al considerar que el diagnóstico se acomodó a la lex
artis, debiéndose su equivocación (el niño sufría síndrome
Sentencia del Tribunal Supremo, Sala de lo
de Down) al margen de error que existe en toda incluso en
Civil, Sección 1ª, de 21 de diciembre de la más diligente. Entiende, también, que fue cumplido el
2005. (RJ 2005\10149). deber de informar.
Ponente: Excmo. Sr. D. José Antonio Seijas Quintana. Donde está realmente el problema es en determinar si
Resumen: Medicina pública. Responsabilidad civil. Se se advirtió a la Sra. A. de alguna posible anomalía en el fe-
condena al Servicio de Salud de la Comunidad Autónoma, to diagnosticada en el período prenatal, como es el sín-
drome de Down, y si se proporcionó a los recurrentes la in-
y solidariamente a la compañía aseguradora, al pago de
formación adecuada una vez realizadas las pruebas. El
54.000.000 de pesetas, por no informar a la paciente so-
consentimiento informado constituye un presupuesto y
bre el riesgo de síndrome de Down conocido por el equipo
elemento esencial de la lex artis y como tal forma parte de
médico en el diagnóstico. Este dato no fue suministrado a
toda actuación asistencial hallándose incluido dentro de la
la interesada, según los hechos reflejados en la sentencia,
obligación de medios asumida por el médico. Siendo este
porque se trataba de "una sola célula presumiblemente
uno de los derechos más importantes del paciente, en el
anormal por la presencia de un cromosoma extra, dudo-
caso del diagnóstico prenatal se traduce en la información
samente del grupo G, y observado únicamente en uno de
que por parte de los profesionales que practicaron la prue-
los portas". Diagnóstico genético no informado a la ges-
ba y del Centro Hospitalario se debe de proporcionar a
tante. Culpa negligente con causa en la omisión de infor-
quien prestó su consentimiento y se sometió a ellas de to-
mación a la interesada que afecta a su autonomía personal
das las posibilidades efectivas de irregularidades o de ries-
para decidir sobre intervención de aborto.
go para el feto, incluso las más remotas, que pudieran
acaecer y tomarse en consideración en el plano científico y
Extracto del texto de la Sentencia:
en el experimental, es decir, toda la información médica-
En el mes de mayo de 1992, Doña A., de 40 años de mente conocida y constatada, incluida la que resulta de
edad, madre de tres hijos, acudió al Servicio de Genética una estadística de resultados, pues esto es en definitiva lo

1109
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

que representa su finalidad propia y lo que va a permitir a definitiva, dar vida a un nuevo ser, que afectará profunda-
los interesados tomar la decisión que consideren más con- mente a la suya en todos los sentidos, sino de los efectos
veniente, tanto de presente como de futuro. No lo enten- que dicha privación conlleva. Son daños susceptibles de
dió así la sentencia puesto que no incluyó dentro del dere- reparación económica con un doble contenido: moral y pa-
cho de información invocado todos y cada uno de los trimonial. Un innecesario embarazo y parto y de la adapta-
extremos que pudieron ser advertidos en la prueba médi- ción de los padres a la nueva situación, social, familiar,
ca y, en particular, «la existencia de un dato perturbador económica y de atención especial surgida de un hecho im-
que había sido desechado técnicamente por carecer de previsto y extraordinario para ellos.
importancia». Este dato perturbador se conoce a través de
la biopsia corial practicada a la Sra. A., y no fue comunica- Comentarios:
do a los demandantes, antes al contrario se les aseguró
A la paciente se le aseguró que el feto era cromosómi-
que el feto era cromosómicamente normal: 46 xy, y que no
camente normal, y que no padecía síndrome de Down, he-
padecía Síndrome de Down, permitiendo la continuación
cho que el Tribunal Supremo asocia a una conducta negli-
de la gestación. No cabe duda de que, tratándose de una
gente. Esta infracción de la lex artis tiene como
prueba diagnóstica prenatal, la información referente a que
consecuencia, según el alto tribunal, una intromisión en la
el feto estuviera afectado del Síndrome de Down, era el ob-
esfera de la autonomía personal de decidir sobre la conti-
jeto propio y específico de la misma y que al omitir esta in-
nuación del embarazo.
formación a los actores, se les privó de la posibilidad de
ponderar la conveniencia de interrumpir el embarazo den- La sentencia establece una "relación de causalidad di-
tro de unos parámetros normales puesto que si hubieran recta y negligente de la actuación del equipo médico" por
sabido con el suficiente tiempo el resultado informado o no informar a la mujer de una forma "suficientemente clara
explicado de las pruebas hubieran podido actuar en con- y completa sobre el diagnóstico", y "porque el diagnóstico
secuencia al encontrarse en tiempo de abortar y dentro del prenatal sólo tiene un sentido lógico, que es el de decisión
amparo de la doctrina del Tribunal Constitucional. Esta cir- sobre la interrupción voluntaria del embarazo".
cunstancia no puede ser irrelevante desde el punto de vis-
La diferencia de esta sentencia con otras sobre res-
ta de la autonomía del individuo, a quien se le ha privado
ponsabilidad por diagnóstico prenatal estriba en que en
de la facultad de decidir de acuerdo con sus propios inte-
este caso la información fue incompleta pero la técnica
reses y preferencias entre las diversas actuaciones que pu-
diera considerar adecuada ante situación tan delicada y diagnóstica fue correctamente ejecutada y aplicada. En
comprometida, como la acontecida. otras resoluciones la responsabilidad surge por aplicación
incorrecta de la técnica diagnóstica que impide conocer a
Con estos antecedentes, es lógico establecer una rela- la madre las taras del feto en las primeras semanas del em-
ción de causalidad directa y negligente entre la actuación barazo, y por una prueba de amniocentesis fallida de la
profesional del Centro Médico en el que se realizaron las que no fue informada la madre.
pruebas y el derecho de la mujer a ser informada de una
forma suficientemente clara y completa sobre el resultado
Sentencia del Tribunal Supremo, Sala de lo
del diagnóstico para que, en función de esa información,
poder tomar la decisión, como es la opción de interrumpir Contencioso-Administrativo, Sección 6ª, de
el embarazo. El hecho de haberse sometido a una prueba 21 de febrero de 2006.
para el diagnóstico prenatal de las mismas, sólo tiene un
Ponente: Excmo. Sr. D. Octavio Juan Herrero Pina.
sentido lógico que es el de decidir en su vista esta inte-
rrupción voluntaria del embarazo; relación que se crea con Resumen: Medicina pública. Responsabilidad patrimo-
independencia de que la madre alegue su intención de nial. La pérdida de decisión por el retraso ecográfico se pa-
abortar. Un simple juicio de probabilidad en razón a la ma- ga. Un fallo del Tribunal Supremo ha condenado a la Ad-
yor o menor situación de riesgo derivada de la edad de la ministración por privar a una embarazada de unos medios
madre y de la posibilidad legal y física de interrumpir su de diagnóstico de una acondroplasia anteriores a las 22
embarazo en función del diagnóstico prenatal, puesto que semanas de gestación. La sala valora que podría haber te-
depende sólo de la voluntad de la mujer y responde a cri- nido una oportunidad de decisión sobre el embarazo. Se
terios de los más variados, derivados del vínculo natural condena a indemnizar a la madre con 62.000 euros por el
que se establece entre la madre y el «nasciturus» o de ide- daño moral ocasionado a una gestante por el retraso en la
as, creencias y convicciones morales, culturales y sociales. práctica de exploraciones ecográficas, lo que excluyó la
El daño, por tanto, resulta no sólo del hecho haber privado posibilidad de que pudiera tomar una decisión sobre la en-
negligentemente a la madre de la posibilidad de decidir a fermedad de su hijo –una acondroplasia– antes de las 22
cerca de su situación personal y familiar y de consentir, en semanas de gestación. La deficiente praxis en la actuación

1110
REPERTORIO JURISPRUDENCIAL COMENTADO

sanitaria, si bien no tuvo repercusión en la enfermedad o Se refiere a los informes médicos aportados por la ac-
padecimientos que presentaba el niño al nacimiento, privó tora, en los que se mantiene que ha existido retraso en la
a la embarazada de unos medios de diagnóstico antes de práctica de las ecografías primera y segunda, error en las
las 22 semanas de gestación. mediciones fetales y que no se han utilizado métodos de
mayor precisión, y el informe del Dr. L. que expone que ha
Extracto del texto de la Sentencia: habido un retraso en la primera ecografía donde «se po-
dría» haber detectado la enfermedad, posibilidad por tanto
Se indica en la sentencia de la Audiencia Nacional, que
que no se deduce equivalente a certeza absoluta, y con-
D. ª C. dio a luz un niño el día 25 de julio de 1996, de nom-
cluye que: "apreciando de forma conjunta todos los infor-
bre J en el Hospital XXX, constando en el informe de alta
mes, la Sala entiende que aunque se hubiera adelantado la
de fecha 5 de agosto 1996: «Diagnóstico y Técnicas Es-
práctica de las primeras ecografías o se hubieran realizado
peciales: 1º Recién nacido a término de peso adecuado
de alta resolución, en su caso, no se ha demostrado que
para la edad gestacional. 2º Bronconeumonía. 3º Acon-
la enfermedad se pudiera haber diagnosticado dentro de
droplasia. 4º Ictericia fisiológica.»
las 22 primeras semanas de gestación, ni en puridad, an-
Se resumen las pretensiones de la pacte actora, indi- tes de la 30 semana, debiendo añadirse de nuevo que no
cando que solicita se aprecie que ha existido mala presta- se ha practicado prueba pericial en el procedimiento de la
ción y praxis sanitaria con error en el diagnóstico de las que poder deducir conclusión diferente, y que en base a la
ecografías; imposibilidad de acogerse la gestante a la IVE; documental aportada no se acredita otra conclusión, por lo
nacimiento de niño acondroplásico y daños y perjuicios pa- que no se deduce posible que se hubiera proporcionado a
ra el niño y la familia de índole física y moral. la madre la información necesaria sobre posibles malfor-
maciones dentro de las 22 primeras semanas de embara-
Y resolviendo sobre tales alegaciones, valora el informe
zo para acogerse a la posibilidad de interrupción voluntaria
de la Inspectora de la Seguridad Social, del Dr. G. y los
del mismo."
aportados por la actora sobre el retraso en la práctica de
ecografías y que en ellas existió error en la mediciones fe- En consecuencia la Audiencia Nacional desestima el
tales, pero ello no equivale a establecer que la acondropla- recurso y contra su sentencia se interpone recurso de ca-
xia como tal enfermedad pudiera haber sido evitada, por lo sación.
que no se acredita que la asistencia sanitaria prestada ha- La sentencia del Tribunal Supremo, en su fundamento
ya sido la causante de la misma, respecto de esta cuestión jurídico tercero, dice: “En este caso, la Sala de instancia,
no se aprecia la necesaria relación directa de causa a efec- deduciendo de los distintos informes incorporados a las
to entre la asistencia y el daño o perjuicio. actuaciones, que no se ha demostrado que la enfermedad
Por lo que se refiere a las alegaciones de que no se se podría haber diagnosticado dentro de las 22 primeras
realizaron las ecografías necesarias y que existió retraso semanas de gestación, concluye "que no se deduce posi-
en las exploraciones ecográficas, en especial la primera, ble que se hubiera proporcionado a la madre la informa-
en la que ya se podría haber detectado la enfermedad ción necesaria sobre posibles malformaciones dentro de
acondroplásica y que en las mediciones fetales hubo las 22 primeras semanas de embarazo para acogerse a la
error y de este modo ni se ejerció una actuación tera- posibilidad de interrupción voluntaria del embarazo", es de-
péutica sobre el feto ni se informó a la madre en tiempo cir, de un hecho que no se considera probado y por lo tan-
hábil para que hubiera tenido la posibilidad de ejercer el to carece de la necesaria certeza, como es si la enferme-
derecho a la interrupción voluntaria del embarazo, seña- dad podía diagnosticarse antes de las 22 semanas,
la que las ecografías se realizaron en las semanas 22, 32 deduce una consecuencia cierta y perjudicial para la recla-
y 35+4 y que tanto el informe de la Inspección Médica mante, como es la imposibilidad de dar información al res-
como del Dr. A. sostienen que el único medio que pare- pecto dentro de ese periodo, exonerando de toda respon-
ce que podría detectar prenatalmente la acondroplasia sabilidad a la Administración que ni siquiera hizo uso de los
sería la ecografía de alta resolución, pero que su realiza- medios de diagnóstico ordinarios en dicho periodo, dado
ción no estaba justificada en este caso por no presen- que la primera ecografía se realizó ya en la semana 22, y
tarse ninguna de sus indicaciones, y que aún en el caso menos aún de los medios específicos como era la ecogra-
de que hubiera sido factible el diagnóstico, este no hu- fía de alta resolución.
biera podido realizarse, en el mejor de los casos, antes Ha de entenderse que la deficiente praxis en la actua-
de la 30 semana (7,5 mes), y por tanto fuera del plazo de ción sanitaria, si bien no tuvo repercusión en la enfermedad
22 semanas contemplado en el tercer supuesto de la o padecimientos que presentaba el niño al nacimiento, pri-
Ley 9/1985, de 5 de julio, para interrupción voluntaria del vó a la embarazada de unos medios de diagnóstico ante-
embarazo. riores a las 22 semanas de gestación, que aun pudiendo

1111
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

ser imprecisos en su resultado no descartan la posibilidad Sentencia del Tribunal Superior de Justicia
de obtener por los mismos información suficiente para que de Cataluña, Sala de lo Contencioso-
la interesada tuviera oportunidad de una decisión al res-
Administrativo, Sección 1ª, de 10 de enero
pecto, de manera que la no utilización adecuada de esos
medios de control del embarazo, al alcance de la Adminis- de 2006.
tración, afectaron a dicha oportunidad de la interesada, im- Ponente: Excmo. Sr. D. José Luis Gómez Ruiz.
pidiendo cualquier posibilidad, por escasas que fueran, de
Resumen: Medicina pública. Responsabilidad patrimo-
un diagnóstico al respecto, lo que constituye un daño mo-
nial. Falta de seguimiento ecográfico adecuado que impide
ral indemnizable, que la Sala valora, atendidas las circuns-
realizar pruebas específicas para detectar síndrome de
tancias personales de la recurrente en relación con los pa-
Down. Nacimiento de una niña con síndrome de Down a
decimientos del hijo afectado, estimándose en tal sentido y
cuya madre no se le realizó un adecuado seguimiento eco-
con dicho alcance el recurso contencioso administrativo in-
gráfico. En el caso, la paciente por su edad –35 años– se
terpuesto.
encontraba cerca del límite en que estaba indicada una
Fallamos: “… estimando parcialmente el recurso con- prueba diagnóstica-invasiva –amniocentesis–, lo que, si-
tencioso-administrativo interpuesto por la misma represen- guiendo una buena praxis, hubiera determinado la necesi-
tación procesal contra la desestimación presunta de la re- dad de practicar una segunda ecografía en el tiempo com-
clamación de indemnización por responsabilidad prendido entre la 15ª y la 20ª semana, y no como se hizo,
patrimonial derivada de actuación sanitaria, formulada el a las 21 semanas y 2 días, momento en que al observarse
24 de junio de 1997 al Instituto Nacional de la Seguridad una anomalía fetal se remitió a la gestante al hospital don-
Social, declaramos el derecho de la recurrente a ser in- de con carácter de urgencia, al día siguiente, fue observa-
demnizada en tal concepto por la Administración deman- da por nueva ecografía en la que se detectó una ectasia
dada”. piélica renal. El retardo en la detección hizo ya inconve-
niente por su riesgo la amniocentesis y, por tanto, era inútil
Comentarios: confirmar el porcentaje de riesgo por el screening. Es de-
El momento de la ecografía, es clave. El retraso en las cir, si aquella actuación urgente se hubiera puesto en mar-
exploraciones ecográficas ha sido motivo de condena en cha con anterioridad a la semana 19 a resultas de la de-
anteriores sentencias. tección entonces de la anomalía, y pudiendo entonces
practicarse el screening, la conducta razonable y activa hu-
En este caso, el Tribunal Supremo ha revocado una biera llevado a la amniocentesis y, por tanto, al diagnósti-
sentencia de la Audiencia Nacional que desestimó la pre- co del síndrome de Down de su hija. Se condena al Servi-
tensión de la demandante al no quedar demostrado, a jui- cio de Salud de la Comunidad Autónoma a indemnizar con
cio de los magistrados, que la enfermedad se podría haber la cantidad de 360.608 euros.
diagnosticado dentro de las 22 primeras semanas de ges-
tación. Sin embargo, la sala de instancia argumentaba que Extracto del texto de la Sentencia:
no estaba probado que se hubiera proporcionado a la ma-
dre información necesaria sobre posibles malformaciones Se ejerce en este proceso una pretensión de respon-
dentro de las 22 primeras semanas de gestación para aco- sabilidad patrimonial de la Administración sanitaria en re-
gerse a la posibilidad de interrupción voluntaria del emba- clamación de la indemnización correspondiente a los per-
juicios económicos y daños morales sufridos por los
razo. Este tribunal entendía que, aunque se hubiera ade-
recurrentes como consecuencia del nacimiento el 18 de ju-
lantado la práctica de las primeras ecografías o se hubieran
nio de 1996 de una hija con síndrome de Down.
realizado las de alta resolución, no se demostró que la en-
fermedad se pudiera haber diagnosticado dentro de las 22 Se imputa la ausencia de información por los médicos
semanas de gestación, ni, en puridad, antes de la 30 se- responsables del embarazo de la presencia de riesgos en
mana. tal de que el feto tuviera tal afección y la omisión de las téc-
nicas de diagnóstico disponibles, las cuales, de haberse
En este sentido, el Tribunal Supremo estima que de un
utilizado, hubieran evitado el nacimiento de la niña.
hecho que no se considera probado no se puede deducir
una consecuencia perjudicial para la reclamante y exonerar En el curso del proceso se han emitido dos informes
a la Administración, "que ni siquiera hizo uso de los medios periciales médicos, por la Unidad de Medicina Legal y Fo-
de diagnóstico ordinarios en dicho periodo, dado que la rense de la Facultad de Medicina de la Universidad y por
primera ecografía se realizó en la semana 22, y menos aún un médico especialista en toco-ginecología, que además
de los medios específicos, como era la ecografía de alta re- se encargó de las aclaraciones solicitadas del anterior.
solución.". Siendo coincidentes sus apreciaciones en los extremos

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REPERTORIO JURISPRUDENCIAL COMENTADO

básicos, que sin embargo resultan refutados por un infor- anomalía fetal se remitió a la paciente al Hospital donde
me del Hospital, fechado el 2 de julio de 1997, y emitido con carácter de urgencia, al día siguiente, fue observada
con motivo de la asistencia y seguimiento del que dicho por nueva ecografía en la que se detectó la ectasia.
centro se encargó a partir de la remisión de la paciente por
Defectuosa praxis, retardo en la detección, que hizo ya
el Centro de Atención Primaria, el 7 de febrero de 1996, y
inconveniente por su riesgo la amniocentesis y por tanto
hasta el nacimiento de la niña el 18 de junio siguiente.
era inútil confirmar el porcentaje de riesgo por el screening.
Tales extremos, básicos en el planteamiento de la ade- Debiendo concluirse que, si aquella actuación urgente rea-
cuada, o no, praxis médica seguida en este caso con los lizada el 7 de febrero de 1996 se hubiera puesto en mar-
siguientes: cha con anterioridad a la semana 19 a resultas de la de-
1. Vigencia de la prueba del triple screening en el tiempo tección entonces de la anomalía, y pudiendo entonces
subsiguiente al embarazo de la recurrente, fijado el 14 practicarse el screening, la conducta razonable y activa
de septiembre de 1995. Prueba que no es diagnóstica que hubiera llevado a la amniocentesis y por tanto al diag-
sino de cribaje, es decir para delimitar, el porcentaje de nóstico del síndrome.
riesgo del síndrome. Sobre las anteriores consideraciones se solapa la
2. La ectasia piélica renal, detectada a la recurrente el 8 cuestión del consentimiento informado. En la contestación
de febrero de 1996, como marcador ecográfico de cro- a la demanda el Servicio de Salud de la Comunidad Autó-
mosomopatía. noma expresa que sí se informó a la paciente de la posibi-
lidad de someterse al screening, pero que no consta en el
Llegados a este punto es preciso considerar las cir- historial, lo que es normal o habitual; apreciación en la que
cunstancias concretas de la paciente, a fin de valorar la coincide el perito en el entendimiento de que tal informa-
praxis seguida. ción debió hacerse verbalmente, como resulta de la prác-
Siendo así que el embarazo se produjo a los 35 años tica del año 1995. Por otro lado, obviamente la paciente no
recién cumplidos –4 días más si nos atenemos a la fecha fue informada sobre el diagnóstico del síndrome porque la
indicada de concepción–; que en esta edad y sólo por prueba al efecto nunca se practicó. Ahora bien, los nueve
edad, según informa la Cátedra, el riesgo de cromosomo- años de rodaje, ya entonces, de la Ley General de Sanidad
patía es de 1/274; que a partir de un riesgo superior a impiden considerar inhabitual la constancia escrita.
1/270 es indicada una prueba diagnóstica invasiva, según Y como quiera que, según lo argumentado antes, un
informa el perito y también se hace constar en las reco- seguimiento ecográfico adecuado hubiera llevado a la po-
mendaciones de la Clínica XXX de esta ciudad; que según sibilidad de un diagnóstico del síndrome, en la medida en
las recomendaciones de la Sociedad Española de Gineco- que no es presumible un rechazo de la paciente a some-
logía y Obstetricia del año 1995 considerando solo la edad terse a la amniocentesis cuando el riesgo era del 1% o in-
de 35 años de una gestante está indicada una prueba ferior, y que en tal circunstancia se hubiera podido ofrecer
diagnóstica invasiva, tal como ratifica el perito, aunque ma- la información completa a fin de que la recurrente estuvie-
tice que es mera recomendación y además de máximos; y ra en condiciones de tomar una decisión sobre la interrup-
por último que existe consenso en considerar grupo de ción del embarazo, hay que concluir que efectivamente fue
riesgo los 38 años. aquella defectuosa praxis la desencadenante de una au-
De manera que la paciente, sólo por su edad, se en- sencia de información en los términos exigidos por el artí-
contraba cerca del límite en que estaba indicada una prue- culo 10 de la LGS que situara a la paciente en las exigibles
ba diagnóstica-invasiva (4 puntos porcentuales), lo que, si- condiciones para decidir sobre la interrupción, o no, de su
guiendo una buena praxis, hubiera determinado la embarazo.
necesidad de practicar la segunda ecografía en el tiempo Y aunque ciertamente la decisión de abortar no es ve-
comprendido entre la 15 y 20 semana, y preferentemente rificable, esto es lo propio de todo proceso mental de ra-
antes de la primera, por lo que luego se dirá (posibilidad de
zonamiento y decisión, tanto más cuanto que la paciente
amniocentesis), a fin de poder detectar la posible ectasia
no tenia motivos reales para plantearse la cuestión, cons-
ciñendo de este modo el porcentaje de riesgo y adoptar la
tando por el contrario, según informe el Hospital en su his-
«conducta razonable y activa», en consideración del infor-
torial médico, que la paciente mantuvo una gestación de-
me del Hospital, consistente en la práctica de la amnio-
seada y bien tolerada, abandonando el tratamiento
centesis.
farmacológico psiquiátrico que hasta entonces había lleva-
Y ciertamente no se hizo así, porque la segunda eco- do, y encontrándose «bien» hasta que tuvo conocimiento
grafía se realizó el 7 de febrero de 1996, en el CAP, a las de la presencia de la ectasia; a lo que hay que añadir que
21 semanas y 2 días, momento en que al observarse una lo que no es presumible es la asunción del riesgo de un na-

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Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

cimiento con el síndrome, excluyendo la interrupción del detectado la existencia del síndrome de Down, pues no es
embarazo en todo caso, con el único objetivo de reclamar presumible un rechazo de la paciente a someterse a la am-
una indemnización, como así se hizo, o bien una acepta- niocentesis cuando el riesgo era del 1% o inferior, y que en
ción de un hijo con síndrome, asumiendo tal situación, y un tal circunstancia se hubiera podido ofrecer la información
posterior cambio de actitud reprochando a la actuación sa- completa a fin de que la gestante estuviera en condiciones
nitaria el no haber procurado la información precisa que de tomar una decisión sobre la interrupción del embarazo,
hubiera determinado su decisión de abortar. hay que concluir que efectivamente fue aquella defectuosa
praxis la desencadenante de una ausencia de información
Resta por último considerar la naturaleza del daño o
en los términos exigidos por el artículo 10 de la Ley
perjuicio y su valoración.
14/1986. Ciertamente, la decisión de abortar no es verifi-
Y aun sin desconocer los pronunciamientos judiciales cable, pero lo que no es presumible es la asunción del ries-
que, partiendo de la base de que no existe un derecho a go de un nacimiento con el síndrome, excluyendo la inte-
abortar como tal, califican en estos casos la lesión jurídica- rrupción del embarazo en todo caso, con el único objetivo
mente lesionada en la manifestación de la autonomía, es de reclamar una indemnización, como así se hizo, o bien
decir en la privación del ejercicio de una opción legalmen- una aceptación de un hijo con síndrome, asumiendo tal si-
te permitida, la realidad de los hechos es que el nacimien- tuación, y un posterior cambio de actitud reprochando a la
to de un hijo con el síndrome puede provocar impacto mo- actuación sanitaria el no haber procurado la información
ral que no se puede desconocer en al menos un grupo de precisa que hubiera determinado su decisión de abortar.
personas, y que tal se prolonga en el transcurso del tiem-
po, uniéndose gastos de carácter extraordinario, y en tal
Sentencia del Tribunal Supremo, Sala de lo
sentido es significativa la prueba practicada por la actora,
de manera que si un hijo con síndrome no es una lesión en
Civil, Sección 1ª, de 18 de diciembre de
los bienes o derechos, desde luego, por el contrario sí lo 2003. (RJ 2003\9302).
es la situación real que de ello resulta, en cuanto incide de Ponente: Excmo. Sr. D. Jesús Corbal Fernández.
forma negativa en el espíritu y en el patrimonio con inde-
pendencia del afecto, a veces extraordinario, prestado a Resumen: Medicina pública. Responsabilidad civil so-
estos hijos y, respecto a la aflicción moral, precisamente lidaria. Negligencia grave de varios ecografistas al no diag-
por este afecto. nosticar taras detectables. Emiten informes declarando la
normalidad del feto cuando faltaba un riñón, el esqueleto
En cuanto a la cuantificación, la Sala considera razona- de la parte izquierda de la pelvis y la extremidad inferior iz-
ble el criterio expuesto por la propia Administración, que la quierda. Absolución del ginecólogo por no poder cumplir
cifraba en cuarenta millones de pesetas como garantía de con el deber de información a la vista de estos informes.
la fórmula de renta vitalicia para atender a las necesidades Culpa más grave de uno de los ecografistas al visualizar
materiales de la niña y más diez millones de pesetas por los dos arterias en vez de una, y detectar normalidad en las
daños morales de los padres. extremidades inferiores cuando faltaba totalmente la iz-
Criterio expuesto en su dictamen que data ahora de quierda. Tras absolver al ginecólogo, el Supremo condena
siete años, y que la Sala actualiza a sesenta millones de al resto a responder con distintas cantidades en función de
pesetas –360.608 euros–, actualización a fecha de esta su responsabilidad. Así, uno de los ecografistas ha sido
sentencia que excluye intereses de demora. condenado a indemnizar con 45.000.000 de pesetas, y los
otros dos a desembolsar 15.000.000 de pesetas con ca-
Comentarios: rácter solidario. El Hospital, el Servicio de Salud de la Co-
munidad Autónoma y la compañía de seguros responde-
En el caso, la Administración pretende desactivar la de-
rán del importe total con carácter solidario entre sí y
fensa de la paciente afirmando que, una vez informada ver-
respecto de los ecografistas.
balmente, rechazó la prueba del screening y, por lo tanto,
impidió la delimitación porcentual del riesgo que hubiera in-
Extracto del texto de la Sentencia:
dicado una técnica invasiva de diagnóstico. El argumento
no es admisible pues no consta en el historial que se ofre- Se formuló demanda contra tres médicos, uno de ellos
ciera dicha posibilidad a la paciente y lo cierto es que la toco-ginecólogo, y los tres especialistas en ecografía, el
prueba nunca se practicó. Por otro lado, los 9 años de ro- Hospital, el Servicio de Salud de la Comunidad Autónoma
daje, ya entonces, de la Ley 14/1986, de 25 Abril (general y la compañía de seguros, solicitando se declare la res-
de sanidad) impiden considerar inhabitual la constancia es- ponsabilidad de dichos profesionales por su actuación ne-
crita. Así las cosas, teniendo en cuenta que si se hubiera gligente en la asistencia de la actora durante su embarazo
realizado un seguimiento ecográfico adecuado se hubiera que dio lugar a que no se diagnosticaran las malformacio-

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REPERTORIO JURISPRUDENCIAL COMENTADO

nes que sufría el feto ni se le informara de las anomalías existe riesgo de malformaciones porque cumple con la exi-
que se presentaban en la gestación, y se condene a los gencia de requerir un control para dentro de dos o tres se-
demandados a pagar, con carácter solidario, 150.000.000 manas. De esta actuación no cabe deducir una responsa-
de pesetas. bilidad para la médico actuante.
La Sentencia del Juzgado de 1ª Instancia estima par- A la tercera semana de la anterior ecografía (veintitrés
cialmente la demanda y condena a los demandados a pa- semanas cuatro días edad de gestión DUM; veinticuatro
gar la cantidad de veinticinco millones de pesetas. La "ra- edad de gestación ecográfica), concretamente el día 16 de
tio decidendi" se puede sintetizar en que hubo una marzo de 1993, se practica por el Dr. C. A. una nueva eco-
deficiente prestación del servicio sanitario que no detecta grafía de la que se deduce que la placenta se halla en po-
una grave malformación no obstante cumplir con la rutina sición anterior (dejó de ser previa), que hay normalidad en
protocolaria y que se concreta en el daño de que no se pu- las extremidades y que el cordón umbilical tiene los tres va-
do interrumpir el embarazo o al menos acudir a actitudes sos. Es decir, no se confirma la arteria umbilical única por-
paliativas respecto al feto. que hay las dos arterias y la vena, y no hay malformación
La Sentencia de la Audiencia Provincial, estima el re- en extremidades (asimismo se hace constar la normalidad
curso de apelación interpuesto por los demandados y des- –N– en cabeza, tórax, abdomen y columna). El anterior in-
estima el de los actores, y absuelve a aquellos de la de- forme incide en una grave negligencia profesional, porque,
manda. Sostiene, en síntesis, que en el caso concreto no aún sin necesidad de entrar a dilucidar las posibilidades de
existió evidencia valorable de presencia de malformaciones visualización que puede proporcionar la ecografía, ni las
y que las probabilidades del descubrimiento de las mismas circunstancias que pueden limitarla, cabe entender (dialéc-
son muy reducidas y que, por ende, no fue posible infor- ticamente) la eventualidad de que no se haya podido vi-
mar a los progenitores, habiendo el ginecólogo informado sualizar las dos arterias o si faltaba una extremidad, pero
a los mismos de la existencia de una arteria umbilical úni- resulta inasumible que se visualizaran dos arterias cuando
ca, con entrega de la ecografía, pero no de las malforma- solo había una o que había normalidad de las extremida-
ciones genéticas que se conocieron en el momento del des cuando faltaba totalmente la inferior izquierda. La defi-
parto. ciencia resulta especialmente trascendente por la fecha en
que se produce, ya que al desactivar la sospecha de arte-
Por los demandantes se formula recurso de casación. ria umbilical única (que se había recogido en el informe
El día 30 de junio de 1.993. Dª. M. G. dio a luz en el precedente del 23 de febrero) desaparecía el riesgo de
Hospital a un niño el cual presentó al nacer diversas mal- malformaciones que lleva consigo, por lo que ya no era
formaciones y anomalías físicas, y como más importantes preciso intensificar las pruebas para su comprobación en
la falta del riñón izquierdo así como de todo el esqueleto de orden a facilitar una posible (hipotética) interrupción legal
la parte izquierda de la pelvis y la extremidad inferior de es- del embarazo, y porque se crea la lógica confianza en el gi-
te lado. Tales deficiencias anatómicas tienen carácter ge- necólogo que atiende el mismo acerca de que se está des-
nético, no fueron detectadas durante el embarazo, y por arrollando de un modo normal.
consiguiente no se les proporcionó a los progenitores in- El 27 de mayo de 1993 (edad de gestación DUM: 33
formación alguna al efecto. La Sentencia recurrida entien- semanas; edad de gestación ecográfica 32-33 semanas)
de que por limitaciones ecográficas no se pudieron evi- se extiende un informe de ecografía por los Drs. J. y M. en
denciar las malformaciones, sin embargo, y con los que se hace constar: líquido amniótico normal; Doppler
independencia de lo que se dirá respecto de la arteria um- normal; probable arteria umbilical única aunque no se pue-
bilical única, omite que en la ecografía del 16-3-93 se apre- de afirmar rotundamente. No consta se haya realizado exa-
cia normalidad en las extremidades, lo que resulta invero- men anatómico del feto porque las casillas están en blan-
símil porque el feto padecía agenesia de la pierna co. El juicio que merece la anterior prestación médica es
izquierda. que no se actuó con la diligencia exigible. Habida cuenta el
Se hace constar que la edad de gestación (DUM) es de tiempo de gestación y la probabilidad de la arteria umbili-
veinte semanas y tres días y que el liquido amniótico es cal única era preciso intensificar las pruebas ecográficas
normal, y se indica en observaciones que requiere control para cerciorarse de si existían malformaciones, pues no
a las 2-3 semanas para valorar placenta (se encontraba en concurría ninguna circunstancia impeditiva, ni siquiera limi-
posición anterior y previa) y el número de vasos del cordón tativa, de la visualización, y en absoluto cabe aceptar que
umbilical. Del informe ecográfico resulta que la Dra. infor- a los ocho meses de gestación no es posible visualizar la
mante cuando menos sospecha que falta una de las dos falta de un riñón, de una parte de la pelvis y de una pierna,
arterias (arteria umbilical única), y también que es cons- porque ello supondría tanto como negar, lo que resulta ab-
ciente de que, en el caso de confirmarse el diagnóstico, surdo, la utilidad de la ecografía. Y una vez conocida la si-

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Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

tuación del feto, a través del ginecólogo cabría dar perfec- Comentarios:
to cumplimiento al deber de información, que como con-
Tres ecografistas del Servicio de Salud de la Comuni-
secuencia resultó omitido.
dad Autónoma han sido condenados por negligencia gra-
La cuarta ecografía efectuada el 29 de junio de 1993 (a ve al emitir informes erróneos en los que se declaraba la
las treinta y ocho semanas; y concretamente el día anterior normalidad del feto cuando en realidad le faltaba un riñón,
al parto) ratifica, si cabe más, la deficiente prestación sani- el esqueleto de la parte izquierda de la pelvis, y la extremi-
taria del caso. Se hacen constar como normales (N) los da- dad inferior izquierda.
tos anatómicos del feto relativos a la cabeza, tórax y ab-
El Supremo considera que su actuación fue muy grave,
domen; no se dice nada acerca de las extremidades; y se
y especialmente la de uno de los ecografistas al visualizar
indica «probable arteria umbilical única». El diagnóstico ob-
dos arterias cuando sólo había una, y detectar normalidad
jetivo de la malformación de la que era portador el feto, no
en las extremidades inferiores cuando faltaba totalmente la
pudo ser evidenciada», no solo no es creíble, sino que, en
izquierda. El ginecólogo actuó en la confianza de los infor-
una calificación los más benévola posible, resulta insoste-
mes ecográficos, en los que no se refería ningún dato de
nible e incomprensible. No existieron dificultades de otro ti-
alarma o riesgo.
po, como las relativas a líquido amniótico o disposición del
cordón umbilical, las que podrían ser compresibles como Error notorio. La sentencia de la Audiencia, que absol-
hipotéticas excusas pero desprovistas de base probatoria vió a todos los demandados, ha sido anulada por el Su-
alguna. premo, que califica de error notorio la valoración de los he-
chos, pues no explica las deficiencias de los informes
De los razonamientos expuestos en el fundamento an-
ecográficos, destacando que resulta inverosímil visualizar
terior resulta: 1. Que existió una actuación sanitaria evi-
normalidad anatómica en el feto una vez visto el resultado
dentemente deficiente al no detectarse unas anomalías de
en el nacimiento.
un feto, y como consecuencia se imposibilitó que el gine-
cólogo pudiera proporcionar a los progenitores la informa- Deber de información incumplido. En ninguno de los
ción adecuada a la que tenían legítimo derecho. 2. La im- cuatro informes ecográficos se hace mención alguna a
posibilidad o grave dificultad de visualización de las malformación, y en el último de ellos se refiere "probable
malformaciones es contraria a un elemental criterio de ra- arteria umbilical única". El Supremo declara que el ginecó-
ciocinio lógico, y es evaluable como error notorio, pues re- logo no pudo cumplir con el deber de información en estas
sulta inverosímil, con las circunstancias concurrentes, vi- circunstancias.
sualizar ecográficamente normalidad anatómica de un feto,
o no visualizar anomalías físicas como las del caso. Sentencia del Tribunal Superior de Justicia
La responsabilidad más grave incumbe al Dr. C. por la de Canarias, Sala de lo Contencioso-
entidad de la negligencia, el momento en que se produjo Administrativo, Sección 1ª, de 10 de marzo
y la incidencia que tuvo en la actuación del ginecólogo. En de 2006.
mucho menor medida, también existió una actuación ne-
gligente –descuidada– de los Drs. J. y M. Y no se aprecia Ponente: Excmo. Sr. D. Francisco José Gómez Cáce-
responsabilidad concreta en el Ginecólogo, porque actuó res.
en la confianza del informe ecográfico del Dr. C. –que no Resumen: Medicina pública. Responsabilidad patri-
contenía ningún dato de alarma o riesgo–, y aunque pos- monial. Condena por no detectar un cáncer de mama a
teriormente conoció el informe de probable arteria umbili- tiempo a una paciente que falleció. El Tribunal Superior
cal única de la tercera ecografía, y resulta harto dudoso de Justicia ha condenado al Servicio de Salud Autonómi-
que haya proporcionado información adecuada al respec- co a indemnizar con 250.675,19 euros al marido y dos hi-
to, dado el momento del conocimiento y la proximidad del jos menores de una mujer que falleció en diciembre del
parto no le es imputable una especial actitud negligente 2002 a causa de un cáncer de mama, que no fue detec-
en relación con el caso que se enjuicia. 4. Se fija la in- tado a tiempo. Según la sentencia de la Sala de lo Con-
demnización de daños y perjuicios para cuya determina- tencioso-administrativo del TSJ, la asistencia primaria
ción se tienen en cuenta las expectativas de que se han que recibió la paciente fue deficiente, pues no descubrió
visto privados los actores y la repercusión del hecho en con los medios a su alcance, "sin duda, suficientes para
sus vidas dada la entidad del evento producido, además ello, la enfermedad que aquejaba". La sentencia relata
del daño moral y el hecho de que, tratándose de una deu- que la paciente acudió en agosto de 1999 a su centro de
da de valor, debe tenerse en cuenta el momento de su salud porque notó un bulto en su pecho izquierdo. En oc-
efectividad. tubre de ese mismo año se le detectó un bulto de dos

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REPERTORIO JURISPRUDENCIAL COMENTADO

centímetros, diagnosticado como quiste glándula enquis- El tumor era altamente agresivo, con factores pronósti-
tada y se le prescribió una ecografía mamaria con pase co adversos, receptores negativos, alta velocidad de creci-
no urgente para el13 de abril del 2000. La víctima, ante el miento y metástasis precoces.
aumento del tamaño del bulto, acudió en febrero del
La Sra. F. falleció el 29 de diciembre del 2002, casada
2000 a una clínica privada, donde le detectaron la exis-
y con dos hijos menores de edad.
tencia de un cáncer maligno, que resultó ser altamente
agresivo y le causó la muerte dos años después. Según De la cadencia de los acontecimientos descritos no es
se recoge en los fundamentos jurídicos de la sentencia, la posible concluir de otro modo que no sea afirmando la de-
enfermedad se pudo detectar en un momento previo, "lo ficiente asistencia primaria recibida, que no descubrió con
que quizá hubiera conducido a un resultado distinto de los medios a su alcance, sin duda, suficientes para ello, la
haberse producido un diagnóstico anterior de la situa- enfermedad que aquejaba a la paciente, y que pudo de-
ción. tectar en un momento previo, lo que quizá hubiera condu-
cido a un resultado distinto de haberse producido un diag-
Extracto del texto de la Sentencia: nóstico anterior de la situación. Y esto no es una hipótesis
sino una afirmación que resulta del curso de los aconteci-
La Sra. F. en Agosto de 1999 notó un bulto en su pe-
mientos.
cho izquierdo, acudiendo al ambulatorio del que fue deri-
vada al Centro de Atención a la Mujer con consulta para el La consecuencia de lo anterior en este punto es la
día siguiente, siendo explorada por la Dra. T. quién no de- constancia acreditada de la relación de causalidad existen-
tecto el bulto. te entre la deficiente asistencia prestada a la recurrente por
los servicios públicos asistenciales y el no diagnóstico de la
La Sra. F. solicitó un cambio de ambulatorio desde el
enfermedad grave que le aquejaba. De hecho no fue el
que fue remitida con pase preferente al ginecólogo vincu-
servicio público de salud quien efectuó el diagnóstico, sino
lado al mismo, Dr. S., quién le reconoce el 26 de noviem-
un médico privado y un gabinete ginecológico también
bre y detecta un bulto de 2 centímetros, diagnosticado co-
particular, determinación confirmada, entonces sí, por el
mo quiste glándula enquistada, prescribiendo ecografía
servicio correspondiente del Hospital.
mamaria con pase no urgente, estando prevista la ecogra-
fía para el 13 de abril de 2000. Los sufrimientos de la paciente hasta su muerte son fá-
ciles de imaginar, lo mismo que el daño moral experimen-
Ante el aumento de tamaño del bulto la Sra. F. acude
tado como consecuencia de su convencimiento de que el
en febrero de 2000 de manera privada a una Clínica priva-
sistema público de salud se pudo haber comportado con
da, practicándose en la Unidad de Mama, ecografía, ma-
ella de otro modo, y pudo recibir una mejor y más pronta
mografía, ecografía con PAAF y citología que arrojan la
asistencia, como le ocurrió cuando acudió a la medicina
existencia de malignidad compatible con carcinoma.
privada. De igual modo es evidente el sufrimiento de su es-
Entre los meses de marzo a mayo de 2000 se somete poso y de los niños que a temprana edad quedaron priva-
a tratamiento con quimioterapia, por carcinoma de mama dos de la presencia y del apoyo de su madre.
izquierda localmente avanzado T3 (12x12 centímetros),
siendo intervenida el 5 de junio de 2000 practicándose En estas circunstancias la Sala a la hora de fijar la in-
mastectomía izquierda y linfadenoctomia axilar izquierda.. demnización, que pretende cubrir la totalidad de los per-
juicios causados tanto a la propia victima ya fallecida por
El resultado anatomopatológico fue de carcinoma duc- los perjuicios experimentados, esencialmente el daño mo-
tal infiltrante grado III con tamaño residual tras quimiotera- ral en los términos antes descritos, y que recibirán sus hi-
pia de 6x4 cms., bordes libres de tumor, axila negativa de jos (como beneficiarios de ella in iure propio, que o como
20 ganglios estudiados. herencia puesto que la indemnización no había alcanzado
Con posterioridad a la intervención recibe tratamiento a integrarse en el caudal hereditario de la fallecida), como
radioterápico ayudante y tamoxifeno hasta septiembre de los causados a su esposo y a los hijos menores por el de-
2000. ceso de su madre en edad temprana, privándoles de su
presencia y rompiendo definitivamente los lazos de afecti-
En junio de 2001 presenta recidiva en pared torácica
vidad propios de su condición, considera adecuado de-
con tumoración que aumenta de tamaño hasta 20 centí-
terminarla en la suma señalada por el actor en la instancia
metros y reinicia radioterapia en octubre de 2001.
y que en esta apelación insiste en solicitar, con el abono
En diciembre de 2001 se determina la existencia de de los intereses legales desde el momento de la interposi-
metástasis pulmonares y subcutáneas, infiltración ósea, ción de la reclamación en la vía administrativa y hasta su
mediastínica y pulmonar, iniciándose radioterapia. pago.

1117
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

Comentarios: quiera de sus manifestaciones, para que de ese modo se


pueda achacar ese daño a la Administración como res-
Relación de causalidad. El tribunal afirma que le cons- ponsable de aquél.
ta "acreditada la relación de causalidad existente entre la
deficiente asistencia prestada a la recurrente por los servi-
cios públicos asistenciales y el no diagnóstico de la enfer-
Sentencia de la Audiencia Provincial de
medad grave que le aquejaba". Madrid, Sección 19ª, de 22 de abril de 2005.
(JUR 2005\122291).
Daño moral causado. Para el tribunal, "son patentes"
los perjuicios sufridos por el marido de la fallecida y sus Ponente: Ilmo. Sr. D. Miguel Ángel Lombardía del Po-
dos hijos menores, tras la muerte de la mujer en diciembre zo.
del 2002 a los 35 años. En su argumentación el tribunal ha
Resumen: Medicina privada. Responsabilidad civil.
explicado que "los sufrimientos de la paciente son fáciles
Médico y aseguradora responden por omitir una ecografía
de imaginar, lo mismo que el daño moral experimentado de mama para confirmar un tumor. La paciente es diag-
como consecuencia de su convencimiento de que el siste- nosticada en 1999 de un nódulo sospechoso, por lo que el
ma público de salud se pudo haber comportado con ella radiólogo recomienda al médico de la paciente la realiza-
de otro modo, y pudo recibir una mejor y más pronta asis- ción de una ecografía mamaria que no llega a efectuarse.
tencia, como ocurrió cuando acudió a la medicina priva- Se acredita como necesaria la exigencia de esta prueba
da". También es evidente el sufrimiento tanto de su espo- complementaria para la detección precoz y un mejor abor-
so como de sus hijos, que a temprana edad quedaron daje de cáncer. La doctrina sobre la facilidad probatoria
privados de la presencia y apoyo de su madre. obliga al médico a probar la falta de causalidad. Se con-
Conviene recordar como la jurisprudencia del Tribunal dena solidariamente al médico y a la aseguradora al pago
Supremo ha matizado la cuestión de la responsabilidad a la actora de la suma de 50.000 euros.
patrimonial objetiva de las Administraciones Públicas por el
funcionamiento normal o anormal de los servicios públicos Extracto del texto de la Sentencia:
que llevaría a una situación insostenible por irreal. Y así en El retraso en el diagnóstico de la dolencia padecida por
Sentencia de catorce de octubre de dos mil tres declaró, la actora no aplicando el médico codemandado todos los
que "la prestación por la Administración de un determina- medios diagnósticos que prescribía en su momento la "lex
do servicio público y la titularidad por parte de aquella de artis ad hoc" en supuestos similares ya establecidos cien-
la infraestructura material para su prestación no implica tíficamente, ni agotando por tanto todas las posibilidades
que el vigente sistema de responsabilidad patrimonial ob- en definitiva de diagnóstico previo o precoz del cáncer de
jetiva de las Administraciones Públicas, convierta a éstas, mama que finalmente sufría la paciente, con las conse-
en: aseguradoras universales de todos los riesgos, con el cuencias que hace derivar de tal consideración.
fin de prevenir cualquier eventualidad desfavorable o daño-
Tal y como pone de relieve la jurisprudencia, la exigen-
sa para los administrados que pueda producirse con inde-
cia de la responsabilidad civil dentro del ejercicio de las
pendencia del actuar administrativo, porque de lo contra-
profesiones sanitarias tanto del ámbito contractual como
rio, se transformaría aquél en un sistema providencialista
extracontractual se enmarca en lo que se denomina una
no contemplado en nuestro Ordenamiento Jurídico".
obligación de medios y no de resultado, exigiéndose el
Aun cuando la responsabilidad de la Administración ha desarrollo de una determinada actividad con independen-
sido calificada por la jurisprudencia de esta Sala, como un cia de la producción del resultado final, y es así desde el
supuesto de responsabilidad objetiva, no lo es menos que instante en que las diferentes circunstancias variables que
ello no convierte a la Administración, en un responsable de acompañan a la ciencia médica hacen imposible poder
todos los resultados lesivos que puedan producirse por el asegurar, dentro del ámbito de las prestaciones del profe-
simple uso de instalaciones públicas, sino que, como an- sional, un resultado expreso y definitivo. La consecuencia
tes señalamos, es necesario que esos daños sean conse- que se desprende de esta calificación es que, en cuanto a
cuencia directa e inmediata del funcionamiento normal o la responsabilidad exigible al profesional sanitario actuante,
anormal de aquélla. En consecuencia, hay que partir de la la misma debe referirse necesariamente a la apreciación de
base de que la carga de la prueba no puede pechar sobre un principio de culpa en esa actuación, con inobservancia
la Administración, sino que será quien desea obtener la re- de lo que se ha denominado "lex artis ad hoc", es decir, la
paración que cree justa, como consecuencia de la a su jui- conducta correcta y adecuada en relación a la ciencia mé-
cio inadecuada prestación del servicio público, quien acre- dica y configurada y exigida por la misma, lejos por otro la-
dite que se produjo un acontecimiento que desencadenó do de toda posible conceptuación dentro del campo de la
un daño imputable al funcionamiento del servicio en cual- responsabilidad objetiva tendente a una equiparación entre

1118
REPERTORIO JURISPRUDENCIAL COMENTADO

todo acto médico fallido con el acto médico generador de la que se plasma la reclamación formulada, en este senti-
responsabilidad civil. do la entidad codemandada sostiene que su responsabili-
dad termina con el hecho de la puesta a disposición de la
A la luz de la doctrina anterior la tesis que sostiene la
asegurada de un listado o catálogo de profesionales con
parte apelante es la de que el retraso en la detección o
los que no le une ninguna otra relación específica, siendo
diagnóstico del cáncer que sufría la paciente por parte del
estos profesionales los que deben responder frente a la
médico codemandado fue determinante de esa situación
paciente asegurada por sus actuaciones. Tal alegación de-
ulterior y de las secuelas aparecidas, y ese retraso diag-
be ser rechazada en atención a que frente a la asegurada
nóstico viene además determinado por la no práctica o no
la propia entidad es responsable también por la actuación
llevar a cabo una prueba consistente en una ecografía ma-
del personal sanitario al asumir la prestación de los corres-
maria expresamente recomendada por el radiólogo en el
pondientes servicios dentro del catálogo presentado a di-
momento de la realización de una mamografía en junio de
cha asegurada, no siendo un simple mediador entre dos
1999, lo que implicaría como se ha adelantado el incum-
partes sino asegurando y garantizando realmente la pres-
plimiento culpable de la "lex artis ad hoc" reconocida cien-
tación de la asistencia médica, a lo que obsta el mayor o
tíficamente para el presente caso. Por los demandados, y
menor grado de dependencia del médico en este caso con
esta es la tesis que recoge la sentencia impugnada, se
la entidad aseguradora.
mantiene sin embargo que la actuación del médico code-
mandado fue correcta en el momento en que se detecta En lo que respecta a la cuantificación de la indemniza-
en la mamografía un "nódulo dudoso", con el que no ten- ción que debe establecerse, la parte actora aporta una se-
dría relación el cáncer detectado posteriormente, y ade- rie de pruebas en orden a la determinación de las secuelas
más que las consecuencias tanto quirúrgicas como en ge- sufridas y que evidentemente deriva como resultado daño-
neral personales sufridas por la paciente se habrían so del tratamiento seguido. Pero aquí es preciso poner de
producido en todo caso. manifiesto que también de forma obvia la patología que su-
La conclusión a la que llega la sentencia combatida no fría la demandante lo era con independencia de la actua-
puede ser aceptada partiendo del propio contenido de las ción del médico codemandado, y el padecimiento de una
pruebas practicadas y obrantes en autos, así del dictamen enfermedad grave con unas consecuencias concretas en
pericial realizado por el Dr. B. se deduce que debió seguir- las si bien incide el diagnóstico tardío de esa enfermedad,
se la recomendación del radiólogo Dr. G. en orden a la no son exclusivamente derivadas o generadas por la ac-
práctica de una ecografía complementaria ante la detec- tuación del codemandado. Ello debe llevar a moderar la
ción en junio de 1999 del ya reseñado "nódulo dudoso", pretensión económica de la recurrente fijando este Tribunal
con una clara relación entre la negación de la exploración como más adecuada a los perjuicios reales de toda índo-
complementaria y el diagnóstico tardío del cáncer. La par- le, tanto físicos como psíquicos sufridos por la demandan-
te demandante acredita así el retraso en el diagnóstico, la te.
pertinencia de la práctica de pruebas complementarias en
Comentarios:
su momento siguiendo las recomendaciones del primer ra-
diólogo, la más que posible incidencia en el resultado pos- La Audiencia Provincial ha condenado a un especialis-
terior de tal omisión, y del mismo modo la altamente posi- ta en oncología que no siguió la recomendación del radió-
ble coincidencia entre el "nódulo dudoso" detectado en logo de realizar una ecografía mamaria, lo que influyó en el
1999 y el cáncer del que fue intervenida la paciente cator- retraso en detectar el cáncer que sufría la demandante.
ce meses después. Frente a ello la parte demandada sólo
La indemnización responde a los daños físicos y psí-
plantea una serie de conjeturas sin apoyo probatorio sufi-
quicos como consecuencia del retraso diagnóstico. El tri-
ciente, teniendo además muy en cuenta aquí la doctrina de
bunal indemniza parcialmente al considerar que el padeci-
la facilidad probatoria, de tal modo que sería el profesional
miento de la paciente contribuyó a la gravedad del cuadro
sanitario y la entidad aseguradora los que tendrían en su
clínico.
poder las mayores posibilidades técnicas y científicas de
acreditar la falta plena y nítida de relación entre el nódulo Las pruebas periciales aportadas al juicio ponen de
detectado y el cáncer posterior, y del mismo modo la no manifiesto que era necesaria una radiografía complemen-
incidencia de la falta de pruebas diagnósticas complemen- taria ante la detección anterior de un nódulo dudoso.
tarias en el mismo resultado.
Su omisión determinó un riesgo mayor y la necesidad
En lo que respecta a la demanda dirigida contra la en- de extremar todas las medidas posibles de detección pre-
tidad de seguros, debe destacarse que el codemandado coz o preventiva del cáncer. El nódulo sospechoso fue de-
pertenece al cuadro médico de dicha entidad en la que es tectado en 1999, pero no fue intervenida hasta catorce
asegurada la demandante, establecida así una relación en meses después como consecuencia de la intervención fa-

1119
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

cultativa. Al caso se ha aplicado la doctrina de la facilidad mendó una mamografía que se efectuó en el Centro
probatoria, correspondiendo al médico y a la entidad ase- Radiológico XXX.
guradora probar que la evolución del cáncer no fue conse-
2) El informe anatomopatológico emitido por el Dr. M.
cuencia de la omisión de la prueba diagnóstica.
contiene el siguiente diagnóstico: «negativo para célu-
Se condena solidariamente al médico y a la asegura- las neoplásicas». Practicada en el Centro Radiológico
dora, considerando que la aseguradora no sólo ofrece un XXX mamografía de chequeo (Rx. latero-mediales), la
cuadro de servicios y médicos, sino que garantiza la ac- Dra. M. C. emitió, en 6 de junio de 1994, el siguiente «
tuación. INFORME. Mamografía: Parenquima glandular displá-
sico, de alta densidad, predominio en la M. dcha., con
Sentencia del Tribunal Supremo, Sala de lo micronodularidad dispersa en un tejido conjuntivo
Civil, Sección 1ª, de 23 de septiembre de edematoso, con poca definición. En la M. dcha. su-
prareolar, hacía el C. Ext., microcalcificaciones irregu-
2004. (RJ 2004\5890).
lares, aglutinadas en 1 cm. En la M. izq. dos calcifica-
Ponente: Excmo. Sr. D. Pedro González Poveda. ciones, dispersas y benignas. En la prolongación
Resumen: Medicina privada. Responsabilidad civil. axilar, poco delimitada, se define un a posible adeno-
Responsabilidad de ginecólogo por omisión de pruebas patía y otras dos bilaterales, más profundas.
diagnósticas. Fallecimiento de una mujer por tumor de ma- Se pasa el transductor ecográfico, valorando numero-
ma que no fue correctamente diagnosticado por no llevar sas microlagunas dispersas y bilaterales. Sobre el gru-
un control inmediato y exhaustivo del bulto axilar de la pa- po de las microcalcificaciones no se aprecia más que
ciente. Falta de acreditación de haber realizado ecografías una discreta perturbación sónica, sin aportar nuevos
por no aportar la historia clínica. El Tribunal Supremo ha datos. Una adenopatía de 1,3 cm. en el hueco axilar
condenado a un ginecólogo por conducta profesional ne- derecho.
gligente al no realizar todas las pruebas médicas necesa-
rias para llegar a un diagnóstico correcto del padecimiento Diagnóstico: Displasia: adenosis y microcalcificacio-
de su paciente, aquejada de un bulto en una axila. La con- nes en la M. dcha., que recomiendo control y/o mar-
ducta fue determinante para no dispensar a la enferma un cador para exéresis».
tratamiento a un tumor de mama en un estadio más pre- 3) La mamografía y el informe se entregaron a Doña E.
coz de su evolución. Indemnización de 150.253,02 euros quien, a su vez, los entregó al Dr. C. R. Este se puso
por daños morales al marido e hijos. en contacto telefónico con la Dra. M. C. haciéndole
saber que había practicado una punción citológica es-
Extracto del texto de la Sentencia: tando a la espera del resultado de su análisis. Ante es-
Por don P., fallecido durante la tramitación de este re- to, la Dra. M. C., con la misma fecha que el anterior, el
curso de casación, se interpuso demanda de juicio de me- 6 de junio de 1994, emitió un nuevo informe con el
nor cuantía, en su propio nombre y en el de su hijo enton- mismo contenido que el anterior en cuanto al aparta-
ces menor de edad, R., y de su hermano, también menor do «Mamografía» y con el siguiente Diagnóstico: «Dis-
y del que era tutor, S., contra don C. R., al que se reclama plasia: adenosis y microcalcificaciones en la M. dcha.
indemnización de los daños y perjuicios sufridos por los ac- que recomiendo control. Adenopatías axilares dere-
tores como consecuencia del error de diagnóstico que se chas a considerar resultado punción citológica».
imputa al demandado al no diagnosticar a doña E., espo- 4) A la vista del resultado de tales pruebas, el Dr. C. R.
sa, madre y tutora con su esposo, respectivamente, de los comunicó seguidamente a la paciente el resultado ne-
demandantes. gativo en cuanto a la detectación de un posible tumor,
Los antecedentes a tener en cuenta para la resolución recomendándole que llevara a cabo una vigilancia
del recurso sobre los que no existe controversia son los si- continua y periódica de su bulto axilar.
guientes: 5) Afirman los actores que en septiembre de 1994, E.
1) Doña E., de 34 años de edad, al advertir la aparición acudió a revisión; el Dr. C. R. le hizo una ecografía y le
de un bulto en su axila derecha, acudió el día 20 de informa que no encontraba nada que le hiciera sospe-
mayo de 1994 a la consulta de Don C. R., especialis- char algo malo. El demandado niega la existencia de
ta en Obstetricia y Ginecología, que reconoció a la pa- tal visita que dice no consta en el historial clínico, his-
ciente, le realizó una ecografía así como una punción torial que no consta en autos a pesar del requerimien-
citológica que remitió para su estudio y análisis al es- to que para su aportación se le hizo en período pro-
pecialista en Anatomía Patológica, Dr. M., y se reco- batorio.

1120
REPERTORIO JURISPRUDENCIAL COMENTADO

6) En 26 de octubre de 1994, la paciente acude a con- 11) El día 26 de diciembre de 1994 inició quimioterapia y
sulta ante el aumento del bulto y notarse el pecho de- posteriormente, entre el 7 de junio y el 25 de julio de
recho más inflamado y más duro que el otro. Se le 1995, se administró radioterapia radical. Al finalizar és-
practica una mamografía en el mismo Centro que la ta, se demostró la aparición de metástasis retroperito-
de 6 de junio, emitiendo la Dra. M. C. el siguiente in- neales, mediastínicas, pleurales y linfangitis carcino-
forme en 26 de octubre de 1994: «Mamografía: La matosa pulmonar, comprobadas con citología pleural
paciente no aporta placas del estudio previo y ade- y scanner de seguimiento. Se comenzó quimioterapia
más se encuentra en fase premenstrual por lo que re- intensiva.
sulta difícil un análisis comparativo preciso en relación
12) E. falleció el 15 de noviembre de 1995, con metásta-
con las microcalcificaciones ya conocidas. Parénqui-
sis pulmonares, mediastínicas, supraclaviculares y re-
ma grandular, de alta densidad, visualizando en re-
troperitoneales. La causa inmediata de la muerte por
gión retroareolar un grupo de pequeñas calcificacio-
fallo respiratorio agudo fue atribuida a tromboembolis-
nes que en el momento actual no impresionan
mo pulmonar.
malignidad aunque seguimos recomendando control
y en su caso exéresis. Se pasa el transductor ecográ- El recurso se interpone por negligencia en el cumpli-
fico, valorando en la zona arriba mencionada, un foco miento de las obligaciones, atendiendo a la naturaleza de
de adenosis, dentro de una estructura repleta de imá- la obligación y de las circunstancias de las personas afec-
genes de retención». A la vista de esta prueba, el Dr. tadas, tiempo y lugar a la luz de la jurisprudencia que los
C. R. aconsejo tratamiento con «Progestogal» (que interpreta, que establecen la yuxtaposición de responsabi-
disminuye la densidad del tejido mamario) y revisión a lidades, contractual y extracontractual en el ámbito de la
los tres meses. responsabilidad civil médica».

7) Ante la falta de mejoría, la paciente acude a consulta Es doctrina constante de esta Sala, que la "lex artis ad
el día 17 de noviembre, siéndole recomendado trata- hoc" es tomar en consideración el caso concreto en que
miento con «Augmentine» (antibiótico) y Voltaren (an- se produce la actuación o intervención médica y las cir-
tiinflamatorio). cunstancias en que la misma se desarrolla, así como las
incidencias inseparables en el normal actuar profesional,
8) En 29 de noviembre la paciente acude nuevamente a teniendo en cuenta las especiales características del ac-
consulta del Dr. C. R. que la remite al Hospital YYY, tor del acto médico, de la profesión, de la complejidad y
para que acuda a él el día 7 de diciembre siguiente. trascendencia vital del paciente y, en su caso, la influen-
9) El día 30 de noviembre de 1994 el Dr. C. R. entrega a cia de otros factores endógenos –estado e intervención
la paciente un informe fechado el anterior día 17, en el del enfermo– o exógenos –la influencia de sus familiares
que hace constar: «Diagnóstico: adenopatías axila de- o de la misma organización sanitaria–, para calificar dicho
recha y Mama de alta densidad. Tratamiento: Se re- acto como conforme o no a la técnica médica normal re-
comienda biopsia axilar debido al tamaño de los gan- querida.
glios de axila derecha. Atribuido al médico demandado un error de diagnós-
Recomendaciones: Preoperatorio para intervención tico, éste viene constituido por el conjunto de actos mé-
quirúrgica». dicos que tienen por finalidad constatar la naturaleza y
trascendencia de la enfermedad que sufre el enfermo; de
10) El 30 de noviembre de 1994, E. ingresa por el servicio
ahí que se considere ésta la primera actuación del médi-
de urgencias en la Clínica ZZZ, donde se realiza un
co siendo también lo más importante pues el tratamiento
análisis anatomopatológico de líquido extraído me-
ulterior dependerá del diagnóstico previo. Para la exigen-
diante punción de nódulo axilar con el siguiente «Pro-
cia de responsabilidad por un diagnóstico erróneo o equi-
nóstico Citológico»; «citología compatible con quiste
vocado, ha de partirse de sí el médico ha realizado o no
epidérmico, aunque no se descarta que pueda tratar-
todas las comprobaciones necesarias, atendido el estado
se de una metástasis de un carcinoma escamoso bien
de la ciencia médica en el momento, para emitir el diag-
diferenciado, con componente quístico».
nóstico; realizadas todas las comprobaciones necesarias,
El día 12 de diciembre de 1994 ingresó nuevamente sólo el diagnóstico que presente un error de notoria gra-
para biopsia en la Clínica ZZZ, obteniéndose el diag- vedad o unas conclusiones absolutamente erróneas,
nóstico intraoperatorio de adenocarcinoma ductal infil- puede servir de base para declarar su responsabilidad, al
trante con componente de carcinoma lobulillar y áreas igual que en el supuesto de que no se hubieran practica-
de carcinoma escamoso, practicándose mastectomía do todas las comprobaciones o exámenes exigidos o exi-
radical modificada y linfadenectomía axilar. gibles.

1121
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

En el presente caso, cabe calificar la conducta profe- se ante la sospecha clínica de un proceso maligno por
sional del ginecólogo demandado como negligente, al no persistencia de la adenopatía, cambio de textura o creci-
haber realizado todas las pruebas médicamente recomen- miento de la misma sin causa que lo justifique» y si bien el
dadas para llegar a un diagnóstico correcto del padeci- grado de sospecha de la existencia de enfermedad malig-
miento que presentaba su paciente. En primer lugar ha de na subyacente ante la apreciación de microcalcificaciones
señalarse que, ante la falta de traída a los autos por el de- irregulares, debe ser el radiólogo quien lo especifique, es
mandado de la historia clínica de la enferma, para lo que evidente que en este caso existía tal sospecha en la Dra.
fue requerido en fase probatoria, no puede tenerse por M. C. cuando, desde su primer informe, recomienda con-
acreditada la realización por el propio demandado de eco- trol y/o exéresis.
grafías al reconocer a aquélla.
Por tanto, en el caso, una conducta adecuada a la «lex
Si bien consta que el Dr. C. R., en la primera consulta,
artis ad hoc» exigía la realización de todas las pruebas ne-
realizó una punción-aspiración en la adenopatía axilar de-
cesarias para emitir un diagnóstico que hubiese descarta-
recha, que dio como diagnóstico «negativo para células
do sin duda la existencia de un carcinoma o, detectado és-
neoplásicas», tal punción fue realizada antes de conocer el
te, lo hubiera sido en un estadio precoz que hubiera
resultado de la mamografía; a lo que debe añadirse que,
permitido un tratamiento que llevase a la curación de la en-
de acuerdo con el informe pericial del Dr. R., la prueba de
ferma o a un período mayor de supervivencia.
punción de adenosis con aguja fina (PAAP) no ofrece el
cien por cien de especifidad y siempre debe predominar la En conclusión ha de calificarse la conducta del de-
sospecha clínica. Una vez conocido el resultado de la ma- mandado de negligente y determinante de que no se dis-
mografía de 6 de junio de 1994, en la que la radióloga re- pensase a la enferma un tratamiento de su dolencia en un
comienda control y/o exéresis, el demandado se limitó a estadio más precoz de su evolución de aquél en que lo
recomendar a su paciente que llevara a cabo una vigilan- fue.
cia continua y periódica de su bulto axilar y cualquier va-
riación de la zona, sin señalar fecha alguna para nuevo re- Comentarios:
conocimiento. En cuanto a la consulta llevada a cabo en
26 de octubre de 1994, no obstante la indicación de la ra- El demandado no aportó la historia clínica, por lo que
dióloga, de dificultad de análisis comparativo preciso en no quedó acreditada la realización de ecografías. Además,
relación con las microcalficaciones ya conocidas, al no ha- la conducta adecuada a la "lex artis ad hoc" exigía la reali-
berse aportado las placas del estudio previo y encontrar- zación de todas las pruebas necesarias para emitir un
se las paciente en fase premenstrual, y la recomendación diagnóstico acertado. Ante la irregularidad de las microcal-
de control y en su caso exéresis, el demando se limitó a cificaciones detectadas en la primera mamografía, el gine-
recetar «Progestogel» y revisión a los tres meses, sin acor- cólogo debió de llevar un control más inmediato de la evo-
dar la práctica de ninguna otra prueba que le hubiese lle- lución del bulto axilar reiterando las pruebas citológicas, o
vado a un diagnóstico correcto; actitud que se mantuvo a bien practicar la exéresis recomendada por el radiólogo,
raíz de la consulta de 17 de noviembre de 1994 en que re- como señala el informe pericial. Sin embargo, el demanda-
cetó a la paciente «Augmentine» y «Voltaren», no obstan- do aconsejó tratamiento con antibiótico, antiinflamatorio y
te lo cual en 30 del mismo mes hace entrega a la pacien- reductor de la densidad del tejido mamario.
te de un informe con fecha antedatada al día 17 en el que
diagnóstica, si haber realizado ninguna otra prueba que Daños morales por fallecimiento. El Tribunal Supremo
las ya dichas, «adenopatías axila derecha (antes señala advierte la yuxtaposición de responsabilidades, contractual
que son de 3,5 cm. de diámetro) y mama de alta densi- y extracontractual, de la responsabilidad civil médica y es-
dad», recomendando «biopsia axilar debido al tamaño de tima la infracción de los artículos 1101, 1104 y 1902 del
los ganglios de axila derecha» y como indicaciones esta- Código Civil.
blece «preoperatorio de intervención quirúrgica». Ante la El demandado no es condenado a la indemnización
irregularidad de las microcalficaciones detectadas en la por los gastos médicos de la intervención quirúrgica y el
primera mamografía realizada y la existencia de adenopa- postoperatorio de la paciente, dado que cualquiera que
tías en la axila derecha, el ginecólogo demandado debió hubiese sido el momento de la comprobación de la exis-
de llevar un control más inmediato de la evolución del bul-
tencia del carcinoma, éste debía haber sido tratado igual-
to axilar reiterando las pruebas citológicas o practicar la
mente.
exéresis recomendada por la radiólogo, pues como seña-
la el citado perito en su informe «la biopsia axilar no tiene No obstante, el Tribunal Supremo sí condena a la in-
porque relacionarse con un informe mamográfico (la ma- demnización solicitada por daños morales, desglosada pa-
mografía no se utiliza para estudiar la axila), debe realizar- ra el hijo, para el esposo y para el hermano.

1122
REPERTORIO JURISPRUDENCIAL COMENTADO

Sentencia del Tribunal Supremo, Sala de lo razo, que la doctora L. [que] sólo lo atendió en tres oca-
Contencioso-Administrativo, Sección 6ª, de siones, alega que no hubo equivocación en cuanto al cál-
culo del tiempo de gestación ni en cuanto a la edad gesta-
14 de marzo de 2005. (RJ 2005\3620).
cional y su parecer coincidió con lo informado en la
Ponente: Excmo. Sr. D. Francisco González Navarro. medicina privada por el doctor A.. Este, al practicar la eco-
grafía, informó que a las 34 semanas el feto pesaba 3.100
Resumen: Medicina pública. Responsabilidad patrimo-
g, sus parámetros biométricos era muy superiores a los es-
nial. El “saber discrepante” absuelve al equipo en un parto
perados y un percentil 90. Que en cuanto a que el peso del
con daño muy grave para el neonato. Se trataba de un feto
feto se ignorase en el preparto y en el parto, no cabe de-
macrosómico que a las 34 semanas pesaba 3.100 gramos,
ducir ni que eso fuese así ni que sea la causa de las lesio-
con parámetros biométricos muy superiores a lo normal y un
nes con las que nació el niño. Por un lado, por lo dicho an-
percentil 90. A pesar de las dimensiones del feto, el equipo
tes acerca de cuándo un feto es macrosómico, además
médico optó por un parto sin cesárea porque consideraba
por cuanto la demandante afirma que se le dijo que el niño
que el peso "no condiciona la actitud del obstetra" en la téc-
iba a ser grande y en la pericial citada se advierte de la di-
nica a utilizar para el parto. "Las condiciones obstétricas
ficultad de calcular el peso del feto antes de nacer y que lo
eran favorables, es más perjudicial la cesárea, y en la prácti-
ca habitual se tiende a la progresión", según relatan los he- importante no es ese dato, sino la evolución normal de la
chos probados, que también reflejan la presentación de una presentación del feto pues el peso no condiciona la actitud
"pelvis límite". Se esperó a la expulsión espontánea, lo que del obstetra en el parto, criterio compartido por el doctor J.
no ocurrió, y tras pasar treinta minutos, se optó por aplicar P. Jefe del Servicio de Obstetricia y Ginecología del Hospi-
ventosa –sin resultado–, y después se emplearon fórceps. tal XXX. Que en cuanto a la presentación de una «pelvis lí-
La elección de un método distinto al marcado en los proto- mite» y la idoneidad de haber optado por un parto por vía
colos no culpabiliza al médico si considera que puede ser vaginal y no por cesárea, del expediente remitido por la Ad-
más eficaz otra técnica. Las pruebas periciales confirman ministración se deduce que en el caso de autos las condi-
que la actuación fue conforme a la lex artis. ciones obstétricas eran favorables, que es más perjudicial
la cesárea y que en la práctica habitual se atiende a la pro-
Extracto del texto de la Sentencia: gresión. Así el feto estaba encajado, la dilatación era máxi-
ma y la evolución normal, lo que antes confirmó la matro-
El litigio se ciñe a determinar si la encefalopatía por hi- na en su tacto, todo lo cual es confirmado por los peritos
poxia isquémica que se diagnosticó al hijo de los deman- que informaron en vía judicial, los doctores B. –médico ad-
dantes al nacer el día 3 diciembre 1992, y que provocó su junto a la Unidad de Ecografía–, M. –MIR de guardia en el
fallecimiento en 1996, tiene por causa una mala praxis mé- Servicio de Ginecología– y el ya citado J. P. Que en cuan-
dica. Así y de lo alegado, se pueden identificar las siguien- to al empleo de ventosas y fórceps, del expediente –que,
tes causas en que se basaría la reclamación. En primer lu- repetimos, es el medio de prueba al que se remite la de-
gar, que durante el embarazo la doctora que atendió a la manda– se deduce que cuando la cabeza del feto está en-
demandante hubiera ignorado que estaba gestando un fe- cajada y la dilatación es máxima, se espera a la expulsión
to macrosómico; en segundo lugar, que tal dato se ignora- espontánea por las contracciones del útero y prensa ab-
se en el preparto y en el parto; en tercer lugar, que al pre- dominal; en ese caso, se dejaron pasar treinta minutos,
sentar una "pelvis límite" no se practicase una cesárea; en tiempo que se juzga adecuado, y ante la falta de expulsión
cuarto lugar que en el parto se intentase la expulsión del fe- se informa que fue adecuado y es lo normal acudir a las
to por ventosas –sin resultado– y con fórceps y, por último, ventosas –que no dieron resultado– y, por esa razón, al
que al detectarse durante la monitorización, en la sala de empleo de fórceps, criterio este de la pericial que confirma
dilatación, hipertonía por braquicardia, se suspendiera la lo que ya habían declarado la doctora O. y el doctor G., je-
monitorización y los doctores que la atendieron ignorasen fe de la Sección de Obstetricia. Que en cuanto a que se
esa hipertonía. La actora estaba en un Hospital y en un suspendiese la monitorización al detectarse hipertonía con
Servicio que, salvo prueba en contra que no consta, tenía
braquicardia, el doctor J. P. declaró que esa hipertonía
todos los medios ordinarios para atender ese tipo de even-
consta que ocurrió y que se recuperó con prepar, suspen-
tualidades, y si lo dicho basta en cuanto a que el feto se-
diéndose la infusión de occitocina, criterio que los peritos
gún los demandantes era macrosómico, con más motivo
que informaron en vía penal consideraron adecuado; en
en cuanto al hecho de ser primeriza y que no implica per
consecuencia, no está probado que los médicos que la
se una especial puesta de medios extraordinarios fuera de
atendieron ignorasen tal dato. De lo que ya no hay prueba
la atención normal para tales casos.
es de lo alegado por la actora al respecto, esto es, que se
La sentencia impugnada declara probado lo siguiente: suspendiese la monitorización y que por tal razón se igno-
«Que en cuanto al tratamiento prestado durante el emba- rase si hubo más braquicardias. Que en cuanto a la causa

1123
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

de la hipoxia isquémica, los peritos citados manifiestan ig- En relación con la primera de esas sentencias, porque
norar cual pudo ser la causa de ese padecimiento en el ca- en ella se dice que «en el momento del ingreso, el examen
so de autos. Así señalan que esa hipoxia puede ser intra- del expediente administrativo permite constatar que, según
parto o congénita, que estadísticamente en la mayoría de consta en el informe del Instituto Nacional de la Salud, el me-
los casos se ignora la causa y que en un 10% es intrapar- nor ingresado como consecuencia de una nacimiento pre-
to, sin que a tales efectos sea determinante la presentación maturo de treinta y una a treinta y tres semanas, con un pe-
por vía vaginal. En consecuencia, de las pruebas de las so de 1700 gramos, con una temperatura rectal de 35
que se sirve al parte actora no hay base concluyente para grados, apreciándose la inexistencia de cianosis, llanto dé-
apreciar una quiebra de la lex artis, razón por la cual la de- bil, frecuencia respiratoria de 70 p./ minuto, quejido, aleteo
manda debe ser desestimada». nasal y tiraje subcostal, advirtiéndose que el resto del exa-
men físico aparece normal, excepto la motividad espontánea
Lo que alega la parte es, en síntesis, lo siguiente:
que se encuentra disminuida y la succión, que es débil».
En relación con la sentencia de esta Sala 3ª, sección 6ª,
Estas circunstancias no tienen nada que ver con las
del Tribunal Supremo, de 10 de febrero de 1998: Que se de-
que concurren en el caso de la sentencia impugnada en
duce «la necesidad de que la prueba del error o de la mala
este recurso de casación. Incluso cabe decir son absolu-
praxis corresponde al demandante», y ello porque «existe en
tamente contrarias: parto prematuro en un caso, parto con
estos procedimientos una responsabilidad objetiva, corres-
gestación completa en el otro; peso en el momento del
pondiendo al demandado probar la existencia de causas de
parto (ocurrido entre las 31 y las 33 semanas) de 1700 gra-
fuerza mayor que provoquen la ausencia de responsabili-
mos, en un caso, macrosomía que sin estar exactamente
dad». Como se ve, la parte recurrente sostiene que, en el ca-
precisada en el momento del parto, era ya, en el caso que
so que, en el caso que nos ocupa, la Sala de instancia des-
nos ocupa, a las 34 semanas, de 3.100 gramos.
plaza indebidamente la carga de la prueba al demandante
(ahora recurrente en casación) de la quiebra de la lex artis. Tampoco habría identidad sustancial entre el caso re-
suelto en la segunda sentencia y la que se impugna. Por-
Y luego, con base en la sentencia de esta misma Sala
que mientras en esa sentencia que se alega la Sala de ins-
3ª, sección 6ª, de 30 de octubre de 1999, obtiene la mis-
tancia declara probado que estaba indicada la práctica de
ma conclusión, a cuyo efecto pone especial énfasis en el
la cesárea, en la que aquí nos ocupa, la Sala de instancia
siguiente párrafo de la misma: Que «la conclusión acerca
declara probado que «en el caso de autos las condiciones
del defecto del nexo causal, a que llega la Sala de instan-
obstétricas eran favorables, que es más perjudicial la ce-
cia, no la consideramos acertada en buena lógica, porque
sárea y que en la práctica habitual se atiende a la progre-
si, como en la propia sentencia se declara probada, esta-
sión».
ba indicada la práctica de una cesárea, según se asegura
en el informe médico, en el que, además, se afirma que se Dicho esto a modo de exordio introductorio, –y sin que
han tenido dificultades para valorar el problema al faltar en ello suponga olvidar que el presupuesto de hecho sobre el
la historia clínica datos importantes como los relativos a los que se pronuncian las sentencias alegadas difiere de ma-
antecedentes obstétricos, la evolución del parto hasta al- nera sustancial de los hechos de que trae causa el pre-
canzar los cinco centímetros de dilación, el registro cardio- sente proceso– vamos a ver el problema desde la pers-
gráfico y el test de Apgar al nacer, no se puede excluir di- pectiva de la doctrina jurisprudencial que orienta la
cho nexo causal entre la incorrecta actuación sanitaria y la apreciación de la existencia en un caso concreto de buena
minusvalía que padece la niña [...] de manera que al bus- o mala praxis médica, para lo cual vamos a resumir lo
car la etiología de la incapacidad orgánica y funcional que esencial de esa doctrina que –como ahora se verá– deja
sufre la hija de los recurrentes, sin haberse justificado otras claro que, en el caso aquí debatido, y a la vista del análisis
anomalías perinatales, solamente nos encontramos ante y valoración de la prueba que hace la Sala de instancia, no
un parto sin cesárea, a pesar de venir ésta aconsejada de ha habido mala praxis médica.
acuerdo con la técnica obstétrica, y con la oposición del
A tal efecto, debemos hacer algunas precisiones sobre
perito procesal, quien nos indica que «en el período expul-
el sintagma lex artis, que hemos utilizado ya aquí, y que,
sivo probablemente se produjo una distonía de hombros
cada vez con más frecuencia aparece en la jurisprudencia
por feto grande (4.600 gramos) y posiblemente la extrac-
de esta Sala 3ª del Tribunal Supremo. Y así, por ejemplo,
ción laboriosa de los mismos produjo la lesión del plexo
en nuestra sentencia de 17 de mayo del 2004, dijimos ya
braquial», hipótesis que inexplicablemente no se recoge en
que, aunque el error médico y el correcto empleo de las
la sentencia recurrida, a pesar de lo ilustrativa que es».
técnicas de diagnóstico, valoración y tratamiento se cir-
Hasta aquí, en lo esencial, lo que razona la parte recu- cunscriben a la actuación del servicio sanitario y, por con-
rrente. siguiente, resultarían, en principio, irrelevantes para decla-

1124
REPERTORIO JURISPRUDENCIAL COMENTADO

rar la responsabilidad objetiva, mientras que han de ser in- Y llamamos la atención sobre ello porque de los argu-
excusablemente valoradas para derivar una responsabili- mentos que utiliza la parte recurrente parece deducirse
dad culposa, sin embargo, también pueden tener trascen- que entiende que por ser la responsabilidad de la Adminis-
dencia, en orden a una conclusión sobre el nexo de tración una responsabilidad objetiva, aquélla se convierte
causalidad, que algunos consideran requisito clave de la en aseguradora universal. Concretamente cuando afirma
responsabilidad objetiva o por el resultado. Esta aprecia- que la Sala de instancia aplica el criterio de que «la prueba
ción de si hubo un uso correcto de la técnica, con vistas a de error o de mala praxis corresponde al demandante».
tener o no por establecido la existencia del nexo causal, sin Porque no es esto lo que resulta de la sentencia impugna-
entrar en si tal uso fue o no negligente, es muy delicada, da, sino que –a la vista de lo que resulta de las actuacio-
pues la medicina, no suele presentar un único método, por nes– no hay prueba de esa mala praxis.
más que la protocolización de los actos médicos invita a
ajustarse a unas pautas seriadas de diagnóstico y trata- Debemos insistir por ello en que es necesario desterrar
miento terapéutico, lo que no excluye que puedan existir –y la errónea opinión de que cualquier daño o perjuicio deri-
así ocurre frecuentemente– otros métodos que, pese a no vado de la asistencia sanitaria pública está cubierto por un
ser de uso generalizado, pueden ser igualmente utilizados, seguro que garantizaría, en cualquier caso, su adecuada
si en el caso concreto se considera que pueden ser más reparación, con olvido de que la jurisprudencia ha repetido
eficaces. incansablemente que el instituto de la responsabilidad pa-
trimonial no convierte a las Administración Públicas en ase-
Y no está de más añadir que, no sólo en el ámbito de
guradoras universales de todos los riesgos sociales.
la medicina, sino en otros muchos campos del saber hu-
mano, es precisamente el saber discrepante el que abre Y porque esto es así, nunca se insistirá bastante en que
nuevos caminos a la ciencia y a su aplicación. la declaración de responsabilidad patrimonial de la Admi-
nistración sanitaria exige siempre un cuidadoso análisis de
Esta misma Sala y sección del Tribunal Supremo, en la
los hechos a fin de poder establecer la relación de causa-
sentencia de 14 de julio de 2001 rechazó que hubiera res-
lidad entre la actuación del personal a su servicio y el re-
ponsabilidad patrimonial de la Administración sanitaria por-
sultado producido, lo que no resulta fácil tratándose de la
que, de acuerdo con los hechos declarados probados en
salud, en cuya estabilidad, restablecimiento o pérdida con-
la sentencia recurrida, las lesiones no tenían su origen en la
fluyen tantos y tan variados factores. Y lo que no puede ne-
forma en que se prestó la asistencia sanitaria, la cual fue
correcta y conforme a las reglas de la lex artis, sino inhe- garse es que la Sala de instancia ha estudiado de manera
rentes o derivadas de la propia patología del enfermo. Por muy completa el material probatorio que obra en las ac-
el contrario, pero con idéntica orientación en las sentencias tuaciones –y que ese análisis queda reflejado en la senten-
de 3 y 10 de octubre de 2000 y 7 de junio de 2001 se con- cia impugnada–.
sidera que concurren relación de causalidad por la inade- Por último, y engarzando, con lo que acabamos de de-
cuada actuación médica con incumplimiento de las pautas cir debemos añadir que este Tribunal tiene reiteradamente
de la lex artis, de modo que los defectos en el uso de la dicho que, por más que el nexo causal constituya una
técnica son considerados determinantes de la responsabi- apreciación jurídica susceptible por ello de ser revisada en
lidad. casación, se ha de partir de los hechos declarados proba-
Por último, nos parece necesario recordar también dos por el Tribunal «a quo».
–por prevenir sobre los riesgos de una exacerbación de
esa naturaleza objetiva de la responsabilidad que nos ocu- Comentarios:
pa– que el hecho de que en el ordenamiento jurídico es- La libertad de elección terapéutica ha exonerado al ex-
pañol la responsabilidad extracontractual de las Adminis- tinto Insalud del fatal desenlace de un parto complicado
traciones públicas esté configurada como objetiva apunta que tuvo como resultado el nacimiento de un niño con en-
al dato de que no es necesario la concurrencia de dolo o cefalopatía por hipoxia isquémica que falleció cuatro años
culpa en el agente, y no permite extraer la consecuencia de
después por esta patología.
que deba declararse su existencia, sin más, por el mero
hecho de que el resultado lesivo se haya producido con El hecho de no optar por cesárea es irrelevante para el
ocasión de la actuación de un centro sanitario público. No juzgador porque considera que el médico puede apartarse
sería razonable –antes al contrario: sería manifiestamente de los protocolos médicos u otros métodos generalizados
absurdo– entender que esa objetivación determina que, si en el caso concreto puede interpretarse como más efi-
por ejemplo, la Administración deba responder siempre caz utilizar otra técnica: "El saber discrepante es el que
que en una clínica gestionada por ella y de ella dependien- abre nuevos caminos a la ciencia", dice el fallo en relación
te fallece un enfermo. con este suceso de consecuencias fatales.

1125
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

Sentencia del Tribunal Supremo, Sala de lo to de su esposa. 9) La primera exploración fue realizada
Civil, Sección 1ª, de 23 de noviembre de sobre las 20 h. por el Dr. P. hallando posición cefálica, di-
latación 4 cm., membranas íntegras y auscultación fetal
2004. (RJ 2004\7384).
normal. 10) El registro cardiotocográfico monitorizado fue
Ponente: Excmo. Sr. D. José Almagro Nosete. instaurado a las 19,50 h. interrumpiéndose a las 20,13 h.
por causas desconocidas. 11) a las 20,30 h. vuelve a ser
Resumen: Medicina privada. Responsabilidad civil.
explorada por el Dr. P. hallando una dilatación 5 cm.,
Daños graves a neonato al no evitar el sufrimiento fetal.
membranas íntegras y posición cefálica. 12) A las 20,35 h.
Omisión de medidas elementales (prueba de pH fetal, mo-
el Dr. P. rompe artificialmente la bolsa de aguas apare-
nitorización continua, e inmediata extracción del neonato).
ciendo aguas meconiales calificadas, en la historia, como
Atención por el equipo de guardia de ginecología, com-
«muy teñidas». 13) De ello se informó al Dr. Í.. No se prac-
puesto por comadrona, médico residente, ginecólogo y
ticó microtoma de sangre fetal para comprobación de PH.
responsable de guardia. El Tribunal Supremo ha condena-
14) A las 20,50 h. se instauró el registro cardiotocográfico
do a un centro hospitalario y al responsable del equipo de
observándose inmediatamente una bradicardia calificada
guardia por no adoptar las medidas básicas de control de
como Dip II que se prolongó por espacio de siete minutos
sufrimiento fetal en los momentos previos al parto, en los
y que abarca tres contracciones uterinas. No fue practica-
que había signos evidentes de alto riesgo para el neonato.
da tampoco entonces microtoma de sangre fetal. 15) A las
La condena solidaria asciende a 360.607,26 euros por da-
20.55 h. se inicia la anestesia epidural. 16) A las 21.20 h.
ños severos de retraso psicomotor del niño, que presenta
la paciente es explorada por el Dr. Í. presentando dilatación
una atrofia cerebral global que le hace incapaz para el
incompleta y posición cefálica en plano I y II. Aparecen en
aprendizaje y atención normales, necesitando un equipo
el Registro Dips variables con picos inferiores a 120 pulsa-
multidisciplinar de especialistas que se ocupen de su en-
ciones que se mantienen hasta el expulsivo. 17) A las 22 H.
señanza, de la rehabilitación, de la terapia ocupacional,
es explorada de nuevo por el Dr. Í. que aprecia dilatación
siendo dependiente de otra persona.
completa y ante la presente de los Dips citados decide
acortar el tiempo del expulsivo vaginal momento en el que
Extracto del texto de la Sentencia:
se desciende mediante VOS y Fórceps de Kyelland la ca-
La Sra. F. venía siendo atendida, desde hacía varios beza del niño a III plano extrayéndolo a las 22,15 h., sien-
años por el ginecólogo Dr. J. A.. 2) Tras contraer matrimo- do portador de una vuelta tensa de cordón en cuello. 18)
nio con el Sr. M. y quedar embarazada acude a la consul- Una vez extraído fue reanimado por el anestesista con as-
ta del mismo en Clínica XXX comenzando el Dr. J. A. a piración de secreciones y aplicación de oxígeno, ya que
asistirla durante su embarazo. 3) A la Sra. F. que era primi- presentaba movimientos respiratorios lentos o irregulares
gesta y carecía de antecedentes ginecológicos de su inte- extremidades cianóticas e hiporreflexia. 19) El test de Ap-
rés, le fue practicada a las 16 semanas, a su instancia, una gar dio un resultado de 6/9 y el Ph tomado a las 22.30 h.
amniocentesis con el resultado de 46 XY manteniendo un un resultado de 7,32. 20) El niño pasó a la nursery hasta
embarazo normal salvo un episodio puntual a las 23 se- que 11 o 12 horas más tarde por presentar «tremulaciones
manas de amenaza leve de parto que fue controlado con importantes» (no convulsiones) e hipoglucemia (glucemia
reposo y prepar. 4) En los controles rutinarios del embara- 33) es ingresado en neonatología del propio Instituto. 21)
zo fue asistida también por el Dr. C. J. 5) La fecha previsi- El Dr. J., del Servicio de neonatología indicó: «Impresión de
ble de parto era el 30 de julio de 1988. Todo ello resulta de sufrimiento fetal leve en clínica neurológica leve con altera-
la historia clínica obrante en autos. 6) En las últimas visitas ción metabólica». 22) Restablecidas las constantes y dado
el matrimonio fue advertido de que ambos médicos co- de alta el niño y la madre, a los 25 días de vida el bebé pre-
menzaban en aquellas fechas sus vacaciones estivales y sentó dificultad de succión iniciando a los 4 meses crisis
que seguiría atendiéndoles el Dr. In.. 7) El día 31 de julio de convulsivas por lo que se iniciaron los controles y explora-
1988 –sábado– la Sra. F. comienza a tener las primeras ciones pertinentes diagnosticándosele retraso mental. 23)
contracciones. Acude a Clínica XXX siendo atendida por el En el examen pericial neurológico practicado en la litis el
equipo de Guardia de Ginecología existente en dicha clíni- Dr. R. refiere que el niño presenta retraso severo en el des-
ca, compuesto de comadrona, médico residente, Dr. P. y arrollo mental y en el desarrollo motor, sugiriendo la reso-
por el adjunto y responsable Dr. Í. 8) Se desconoce la ho- nancia magnética cerebral practicada hipoxia-isquémica
ra exacta del ingreso, si bien a las 19,50 h. la paciente ya cerebral difusa sin señales de proncefalia o reblandeci-
se encontraba en la clínica al aparecer esa hora en el re- miento cerebral por antiguas hemorragias o infarto. En
gistro cardioticográfico. En la historia figura como hora de cuanto al origen de la lesión dice: «Podría tratarse de un
ingreso las 20 h. El Sr. M. autorizó en ese momento tanto trauma perinatal». En conclusión el niño presenta atrofia
al Dr. J. A., como al Dr. C. J. como al Dr. Í. a asistir al par- cerebral global posiblemente por hipoxia y ello conlleva un

1126
REPERTORIO JURISPRUDENCIAL COMENTADO

retraso psico-motor severo que le hace incapaz para un no se hizo sino hasta las 22 horas. En la ratificación del in-
aprendizaje y atención normales precisando un equipo forme del catedrático de obstetricia y ginecología Profesor
multidisciplinario de especialistas que se ocupen de su en- I. indica éste que hubiese sido más expeditiva una cesárea
señanza, de la rehabilitación, de la terapia ocupacional y la Drª L. manifiesta que para que pudiese realizarse el ex-
siendo dependiente de otra persona. 24) No existe tras los pulsivo por vía vaginal debió hacerse descender la presen-
análisis practicados a los padres un factor genético en tación del II al III plato. En la misma línea del Doctor B. afir-
ellos que predisponga la patología del hijo. ma que hallándose la presentación cefálica en plano III, no
es indicación segura de parto vaginal y que es la anestesia
La sentencia recurrida establece en su fundamento de
general –no la peridural con la que también puede realizar-
Derecho cuarto que a la luz de toda la prueba practicada,
se la cesárea– la que perjudica el aporte de oxígeno.
inclusive la literatura médica aportada con la demanda
–tampoco objetada–, valorada en su conjunto y siguiendo En lo que concierne especialmente al recurrente, que
pautas de criterio lógico y racional, se llega a la conclusión se hallaba al frente del equipo de guardia, la sentencia ra-
de que las lesiones del niño son correlacionables con las zona que no puede sostenerse que hubiese valorado co-
circunstancias en que se produjo el parto, agravadas posi- rrectamente la situación y aplicado todos los medios de
blemente por haberse demorado su ingreso en el servicio que la ciencia dispone para prevenir y evitar el problema
de neonatología, inmediatamente después del parto. De surgido. Según el dictamen médico-forense y las obras
este modo la hipoxia que se produce en casos de sufri- científicas obrantes en los autos son signos claros de su-
miento fetal es causa constatada de lesiones neurológicas frimiento fetal: la expulsión de meconio, las alteraciones en
–retraso mental– de la etiología que presenta el menor, aún el ritmo cardíaco del feto y las alteraciones del equilibrio
en el supuesto de que los indicadores lo califiquen de leve ácido básico constatable mediante microtomas de sangre
y así se desprende de la bibliografía acompañada con la fetal. Es precisamente esta prueba, que no se practicó en
demanda, y del dictamen pericial médico-forense acorda- el presente caso, pese a la existencia de «aguas muy te-
do como diligencia para mejor proveer. Las pruebas obje- ñidas» y existencia de alteraciones del ritmo cardíaco del
tivas practicadas sugieren la hipoxia-isquemia no existien- feto lo que expone con más claridad el sufrimiento fetal,
do ningún factor genético ni cromosoma predisponente en aún antes de que se altere la frecuencia cardiaca. Tampo-
los padres, si no existen otros motivos explicables, tras un co puede sostenerse que la bradicardia del feto fuese mo-
embarazo normal a término y, por el contrario, se da una derada o no alarmante. Se destaca en los estudios apor-
de las causas más frecuentes conocidas cual es el acci- tados: a) que el estudio cardiotacométrico continuo es
dente perinatal por sufrimiento fetal, fácil es colegir que la imprescindible en todo parto ya que el estetoscopio Pi-
relación causa: lesión neurológica, ha de establecerse con nard sólo es útil para diagnosticar estados muy graves. Ya
criterio de lógica y racionalidad». Asimismo la propia sen- se ha dicho anteriormente que en el presente caso el re-
tencia dictada por la Audiencia, después de estimar que no gistro quedó interrumpido entre las 20,13 h. y las 20,50 h.,
se adoptaron todas las medidas posibles para diagnosticar pese a que la anestesia no se instauró hasta las 20,55 h.
o evaluar el sufrimiento fetal que padecía el niño evitando y a las 20,35 se constataron las aguas meconiales. b) que
la lesión neurológica, consiguiente, continua manifestando se produce bradicardia cuando los latidos por minuto se
en su Fundamento de Derecho Sexto que «A lo anterior no sitúan por debajo de los 120. La caída de la frecuencia
obstan las afirmaciones o conclusiones de algunos de los cardiaca media (Dips) tipo II –como el existente en el ca-
dictámenes periciales practicados, no sólo porque su re- so– representa hipoxia siendo más grave cuanta más du-
sultado no vincula al juzgador pues su apreciación debe ración y amplitud tiene y más largo es el lagtime. Al folio
efectuarse con arreglo a las normas de la sana crítica, sino 51 aparece representado un supuesto de bradicardia fetal
también porque las mismas no resultan incompatibles con grave, que guarda similitud con el que aparece al folio 804
las conclusiones antes relacionadas. Así un Ph de 7,32 int. de la historia clínica y que pudo observarse a las 20,50
posterior en 15 minutos al expulsivo no puede considerar- h. cuando se conectó el monitor. Incluso en la historia clí-
se como prueba evidente de la inexistencia de sufrimiento nica, en las notas obrantes al folio 804 v. aparece califica-
fetal (dictamen pericial Dra. M). Que no sea aconsejable do el sufrimiento fetal como agudo aunque posteriormen-
practicar una cesárea cuando la cabeza del bebé se halla te haya sido calificado como leve o moderado. A la vista
en un III plano, no quiere decir que encontrándose en el por demás que el menor presentó una vuelta tensa de
plano I y con una dilatación incompleta –situación en la que cordón en cuello, aunque tal circunstancia no pudiera vi-
se encontraba la Sra. F. a las 20.30 horas– no pueda ac- sualizarse hasta el momento del expulsivo, no puede esti-
tuarse de otra forma, máxime cuando, como se ha dicho, marse que se adoptaran todas las medidas posibles para
tras la presencia de aguas meconiales no se adoptó nin- diagnosticar o evaluar el sufrimiento fetal que padecía el
guna medida efectiva de comprobación del grado de sufri- niño evitando la lesión neurológica consiguiente, lo que se
miento fetal y del acortamiento del período expulsivo lo que hubiese logrado de mantener la monitorización, realizar la

1127
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

prueba del Ph fetal y proceder a una inmediata extracción Extracto del texto de la Sentencia:
del bebé, al comprobar la presencia de aguas meconiales
En materia de responsabilidad médica, es reiterada la
a las 20,35 h.
jurisprudencia que afirma que la obligación contractual o
Comentarios: extracontractual del médico y, más en general del profe-
sional sanitario, no es una obligación de resultado, o lo que
La condena al hospital responde a que, ante los signos es igual no es la de obtener en todo caso la recuperación
de sufrimiento fetal, no se adoptaron los medios como mo- del enfermo, sino una obligación de medios, es decir está
nitorización continua, realización de prueba del pH fetal, e obligado a procurar al enfermo todos los cuidados que re-
inmediata extracción del neonato. No agotada la diligencia quiera según el estado de la ciencia y la denominada "Lex
exigible y producido el daño, se cumplen los requisitos de artis ad hoc". La doctrina jurisprudencial, de forma pacífi-
los artículos 1.101, 1.113 y 1.114 del Código Civil. ca, es contraria a la tendencia objetivadora de la respon-
sabilidad que se observa en otros ámbitos, y a la inversión
La responsabilidad del hospital es directa aunque la
de la carga de la prueba, en el sentido que sean los profe-
prestación se realice por una sociedad de consultas gine-
sionales médicos los que deban probar la diligencia con la
cológicas jurídicamente independiente de aquél, destaca el
que actuaron, estando por tanto, a cargo del paciente la
Tribunal Supremo en la sentencia. Rechaza el recurso del
carga de probar la falta de diligencia o negligencia y la re-
hospital porque los hechos acaecieron en sus instalacio-
lación o nexo de causalidad entre la acción u omisión cul-
nes aunque la sociedad y los médicos no tuvieran depen- pable y el daño
dencia contractual directa de aquél.
En el presente caso debe partirse como hechos no dis-
La indemnización contrasta con otra, en la que se ha cutidos que efectivamente doña Z en el año 2001, se en-
valorado no sólo una cantidad principal por lesiones, da- contraba asegurada en la entidad XXX que cubre la asis-
ños morales a los padres y el coste de cambio de vivien- tencia médico-sanitaria correspondiente al embarazo y
da, sino además una pensión vitalicia por el perjuicio pa- parto. Entre los facultativos de centros hospitalarios con-
trimonial de futuro para la familia al necesitar cuidados certados por la aseguradora para la prestación de la asis-
especiales y una tercera persona para la atención al neo- tencia garantizada se encontraba, dentro de la especiali-
nato. dad de Obstetricia y Ginecología, el Dr. H, así como el
Hospital YYY. Desde el mes de febrero del año 2000 la Sra.
Sentencia del Juzgado de Primera Instancia Z. que se encontraba en estado de gestación, acudió a la
nº 58 de Madrid, de 31 de julio de 2004. consulta del Dr. H. para el control de su embarazo que fue
calificado de riesgo ante la detección de un mioma. El día
Ponente: Ilmo. Sr. D. Luis Alberto Puertas Pedrosa. 10 de octubre de 2000 el Dr. H. indicó a la Sra. Z. que in-
Resumen: Medicina privada. Responsabilidad civil. gresara a primera hora del día siguiente en la clínica YYY
Ginecólogo condenado por no delegar la cesárea urgente con el fin de iniciar la inducción al parto.
en el equipo de urgencias. Responsabilidad por omisión El día 11 de octubre de 2000 tras el ingreso de la Sra.
de asistencia directa e inmediata. Los hechos relatan có- Z. en el Hospital YYY, el Dr. H. estableció la prescripción de
mo el personal de urgencias puso en conocimiento del gi- Syntocinon a fin de inducir el parto. A las 13:00 horas se
necólogo la necesidad de practicar la cesárea ante el cua- produjo un episodio de desaceleraciones variable atípicas
dro de fiebre y desaceleraciones que sufría la gestante, desconociéndose por qué entonces el Dr. H. no adoptó
aplicando medicación para inducir el parto, pero éste or- ninguna solución, o si por el contrario ni siquiera fue infor-
denó telefónicamente que esperasen a su llegada al hos- mado de la situación. Asimismo se desconoce por qué
pital. Cuando se presentó ya había comenzado la inter- motivo en lugar de al Dr. H. se tuvo que recurrir al ginecó-
vención, haciéndose cargo de la misma y extrayendo una logo de urgencias quién ordenó suprimir el Syntocinon e
niña que fallece a las 48 horas por sepsis precoz (estrep- indicó que en caso de seguir igual se avisase al Dr. H.
tococo B) y encefalopatía hipóxico-isquémica estadio III. A las 18:00 horas ya se daba en la Sra. Z. un cuadro
La indemnización a la que se condena a la aseguradora de fiebre y desaceleraciones variables atípicas que si bien,
del ginecólogo es de 85.057,29 euros para los padres por no eran todavía sostenidas, se iban agravando de forma
el fallecimiento, y de 1.848,22 euros para la madre por los progresiva. El cuadro de fiebre y desaceleraciones varia-
daños de la operación (coagulopatía con sangrado impor- bles atípicas que sufría la Sra. Z. a las 18:00 horas unido al
tante y shock hipovolémico) más el interés legal incre- hecho de que no había progresión en la dilatación, reco-
mentado en un 50 por ciento desde la fecha de la inter- mendaba a todas luces la práctica de la cesárea con ca-
vención. rácter urgente y no existía ninguna justificación para seguir

1128
REPERTORIO JURISPRUDENCIAL COMENTADO

demorando la intervención, sobre todo si, indicado el Aug- tiempo inferior a una hora como ocurrió el 11 de octubre
mentine y retirado nuevamente el Syntocinon, no se nor- de 2000, lo que hizo imposible que el Dr. H. acudiese al
malizaba la situación que, por el contrario, continuaba centro hospitalario en el plazo necesario y adecuado dada
agravándose. Igualmente debe considerarse acreditado la situación de urgencia que se creó posteriormente. Es
que aproximadamente a las 18:00 horas, sino antes, se más, a la vista de las manifestaciones de los peritos no
había mantenido contacto telefónico con el Dr. H. para in- puede tampoco considerarse adecuada la conducta del
formarle de la situación por la que atravesaba la Sra. Z., li- Dr. H. cuando una vez informado a las 18:00 horas del
mitándose aquél a prescribir Augmentine e indicar que se cuadro que presentaba la Sra. Z. con el consiguiente ries-
dirigía hacia la clínica, sin que conste que ordenase retirar go que implicaba para el feto y la necesidad de practicar la
el Syntocinon. Y no es hasta las 18:45 horas cuando la ma- cesárea se limitó a ordenar la aplicación de Augmentine sin
trona ante la inasistencia del Dr. H. y el agravamiento de la referencia alguna a la retirada del Syntocínon, y a indicar
situación de la Sra. Z., decide consultar con el ginecólogo que se le esperase sin tomar la determinación de que se
de guardia, quién a su vez decide comunicar al Dr. H. que consultase al ginecólogo de urgencias o cuando menos
va a practicar la cesárea indicando éste último que espere que se preparase el quirófano para la práctica de la cesá-
nuevamente dado que se encontraba de camino a la clíni- rea. Dicha conducta debe considerarse como no ajustada
ca. A las 19:00 horas, y puesto que el Dr. H. no había lle- a la lex artis ad hoc e implica una falta de diligencia que le
gado, se decide practicar la cesárea por el Dr. A. trasla- era exigible ya que supuso un claro e injustificado retraso
dando al quirófano a la Sra. Z. Una vez iniciada la en la práctica de la cesárea que posteriormente resultó re-
intervención llega el Dr. H. y se hace cargo de la misma ex- levante y determinante en el fallecimiento de la menor y de
trayendo una niña que fallece a las cuarenta y nueve horas las lesiones de la madre. Así los doctores N y B han veni-
de su nacimiento como consecuencia de una sepsis pre- do a manifestar de forma clara la existencia de una relación
coz por estreptococo grupo B y encefalopatía hipóxico-is- de causalidad entre el retraso en practicar la cesárea y el
quémica estadio III y, pese a que en su momento no se fallecimiento de la recién nacida. Igualmente el Dr. O. vino
hubiese practicado la autopsia del recién nacido, en lógica a confirmar en el acto del juicio que la sepsis que presen-
no puede alcanzarse otra conclusión ya que evidenciada y taba la recién nacida en el momento de su nacimiento fue
constatada la existencia de sepsis precoz por estreptoco- el origen de todas las posteriores complicaciones que des-
co grupo B y encefalopatía hipóxico-isquémica estadio III graciadamente derivaron en su fallecimiento.
no se ha puesto de manifiesto ninguna otra posible causa
Todo ello conduce a apreciar la existencia de respon-
del fallecimiento sin que se hubiera apreciado en ningún
sabilidad por parte del Dr. H. en la producción de los da-
momento la presencia de defectos congénitos a los que
ños cuya indemnización se reclama y en consecuencia la
gratuitamente hace referencia la representación de la ase-
aseguradora demandada viene obligada a indemnizar por
guradora. La madre tras la intervención sufrió una coagu-
los daños sufridos por los actores consistentes en la pér-
lopatía con sangrado importante y shock hipovolémico de
dida de su hija recién nacida y las lesiones producidas a la
la que tardó en curar 55 días de los que 17 estuvo hospi-
actora, en virtud el contrato de seguro suscrito con el Dr.
talizada, sin que exista en los autos prueba alguna que
H. y los artículos 73 y 76 de la LCS.
acredite la relación de causalidad entre la demora en la
práctica de la cesárea ocurrida el 11 de octubre de 2000 y Por el contrario no cabe acoger las pretensiones dedu-
las adherencias intrauterinas o Síndrome de Asherman de cidas contra el Hospital ni contra la aseguradora de la pa-
la que ha sido intervenida recientemente la Sra. Z. ciente. En el presente caso no puede considerarse acredi-
tado una actuación contraria a la lex artis ad hoc por parte
En base a los hechos expuestos anteriormente no pue-
del equipo sanitario dependiente del Hospital, pues ningu-
de sino apreciar la existencia de responsabilidad por parte
no de los peritos que han informado en las presentes ac-
del Dr. H. en el fallecimiento de la recién nacida, pues de-
tuaciones ha puesto de manifiesto la existencia de una in-
be considerarse que la praxis médica ante una situación de
adecuada actuación por parte del equipo sanitario
embarazo calificado de riesgo en el que durante la induc-
dependiente del hospital, el cuál informó en todo momen-
ción al parto se ha producido un episodio de des acelera-
to al Dr. H. de la situación de la paciente e incluso proce-
ciones variables atípicas exige llevar a cabo un seguimien-
dió a consultar al ginecólogo de guardia a pesar de que
to directo e inmediato de la situación pues clara la
aquél había indicado expresamente que se esperase a su
posibilidad de que volviese a producirse un episodio de
llegada.
desaceleraciones variables atípicas más graves o, incluso
de forma sostenida que implicaría la necesidad de practi- Tampoco puede considerarse acreditado en virtud de
car una cesárea urgente. Pese a ello el Dr. H. decidió au- la prueba practicada la falta de medios del hospital denun-
sentarse de la clínica para acudir a la consulta privada con ciado en el escrito de demanda. Igualmente debe advertir-
la imposibilidad de acudir a la clínica en un período de se que no existe relación laboral o de dependencia econó-

1129
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

mica, funcional, jerárquica u organizativa entre el hospital y rea inmediata, tras lo que el neonato tuvo que ser reani-
el Dr. H. mado por anestesista al estar hipotónico y presentar pro-
blemas cardiorespiratorios, siendo trasladado cuatro horas
En la responsabilidad de la aseguradora no rige un cri-
después a un hospital. Se anula la condena solidaria a los
terio culpabilístico o de relación extracontractual, sino que,
facultativos y a la aseguradora, impuesta en primera ins-
como señala la STS, debe derivar directamente del contra-
tancia, de 35.300.000 pesetas.
to o concierto de asistencia sanitaria suscrito con la acto-
ra cuyo objeto es facilitar la asistencia sanitaria a los bene-
Extracto del texto de la Sentencia:
ficiarios sin que conste incumplimiento culpable alguno de
las obligaciones asumidas contractualmente por parte de Han de tenerse en cuenta los siguientes hechos no
la aseguradora. La responsabilidad del Dr. H. no nace de controvertidos: 1) En octubre de 1996, doña M. I. requirió
una falta de capacidad para desarrollar la actividad médica los servicios del ginecólogo don P., del cuadro médico de
que hubiera podido ser advertida por la aseguradora, sino la compañía XXX, con la que tenía concertado un seguro
que ésta viene derivada de la conducta concreta desarro- médico sanitario, para el seguimiento y control de su em-
llada durante el día 11 de octubre de 2000 en la que lógi- barazo, siendo la gestante de edad de 40 años, habiendo
camente ninguna participación o reproche se puede atri- sido atendida en 1993 por el citado ginecólogo que le
buir a la codemandada. No existe por tanto constancia de practicó un legrado y teniendo el mismo conocimiento los
ninguna circunstancia de la que se deduzca que dicha so- abortos padecidos por aquélla en año y medio. 2) Durante
ciedad no debería haber incluido en su día al Dr. H. en su el segundo trimestre del embarazo padeció un cólico nefrí-
cuadro médico. tico, de lo que tuvo conocimiento el doctor P.; a los treinta
días del embarazo hubo un amago de aborto que se con-
Comentarios: troló con «Prepar» y con cuatro días de reposo en cama.
3) Aparte de esto, el desarrollo del embarazo fue normal,
La falta de seguimiento directo de un parto por un gi-
siendo calculada la fecha de salida de cuentas por el gine-
necólogo al encontrarse en su consulta privada sin posibi-
cólogo la del 21 de mayo de 1997. 4) En la tarde del día 23
lidad de personarse con la urgencia requerida en el hospi-
de mayo de 1997, el ginecólogo encuentra normal a la
tal ha sido calificado de infracción de la lex artis por el
gestante y le manda hacerse una monitorización en el sa-
Juzgado de Primera Instancia n° 58 de Madrid. La omisión
natorio YYY y la cita para la tarde del día 26; la monitoriza-
de asistencia debida ha determinado la condena a la ase-
ción fue realizada en la mañana del sábado día 24. 5) En la
guradora del ginecólogo. El Hospital es absuelto porque
tarde del lunes 26 de mayo, se entregó al ginecólogo el re-
actuó con corrección aplicando medios disponibles. Ade-
sultado de la monitorización, procedió éste a tactos explo-
más porque el ginecólogo no tenía dependencia laboral del
ratorios y a una ecografía; el médico confirmó retraso en la
centro sanitario.
dilatación. La señora M. I. se mostró dispuesta a someter-
se a una cesárea, pensando que por su edad a lo mejor no
Sentencia del Tribunal Supremo, Sala de lo dilataba por sí misma, lo que el ginecólogo no estimó ne-
Civil, Sección 1ª, de 19 de julio de 2004. (RJ cesario. 6) En la tarde del miércoles 28 de mayo, la ges-
2004\5128). tante informa al médico de las molestias que siente; se le
realiza una ecografía y tacto exploratorio, indicando aquél
Ponente: Excmo. Sr. D. Pedro González Poveda.
que el niño está bien encajado y que en cualquier momen-
Resumen: Medicina privada. Responsabilidad civil. to puede ponerse de parto y que si no ocurre así vuelva a
Absolución de ginecólogo y pediatra en un parto con sufri- la consulta en la tarde del viernes día 30. 7) En la tarde del
miento fetal. Actuación médica correcta, falta de acredita- jueves 29 de mayo, la demandante comunica por teléfono
ción de una conducta censurable imputable a los facultati- al doctor P. que había expulsado el tapón mucoso y que
vos. Contradicción entre periciales que afirman o estaba teniendo muchas molestias como si fueran con-
descartan la responsabilidad de los profesionales. Los he- tracciones. Preguntada aquélla si eran contracciones de
chos relatan la asistencia por ginecólogo a una gestante de parto, manifestó que no sabía explicar el origen o causa de
40 años con antecedentes de abortos durante el año y me- las mismas. Le dijo el médico que era posible que esa mis-
dio anterior al parto, citada en su consulta dos días des- ma noche se pusiera de parto; si ello no sucedía la vería al
pués de haber salido de cuentas. En el transcurso de los día siguiente en la consulta. En esa consulta del día 30 de
cuatro días posteriores, la paciente es monitorizada. La in- mayo, la gestante manifestó que las contracciones habían
tervención se aplaza hasta el cuarto día a pesar de las mo- disminuido sensiblemente en frecuencia e intensidad.
lestias y contracciones referidas por la paciente desde el Practicada ecografía y exploración por tacto, dijo el gine-
segundo día. Dos días antes del parto hay dilatación de cólogo estar dilatada dos centímetros, que había tocado la
dos centímetros. El cuarto día, el ginecólogo decide cesá- cabeza del niño y que esa misma noche con toda proba-

1130
REPERTORIO JURISPRUDENCIAL COMENTADO

bilidad se iniciaría el parto y que, de cualquier forma, el si- estabilizado en la incubadora». El informe emitido por el Dr.
guiente día 31, a las 11 horas, estuviera en el Sanatorio J. F. califica de «prudente» la conducta profesional del pe-
YYY para que la matrona le hiciera una nueva monitoriza- diatra Sr. A. De esta prueba pericial, rectamente valorada,
ción. 8) A las 11 horas del día 31 se le realiza una monito- se manifiesta que la conducta del pediatra Sr. A., desde el
rización por la matrona; ante su resultado, el doctor P., que momento en que fueron requeridos sus servicios, fue ajus-
se encontraba en el Sanatorio, procede a una nueva moni- tada a la «lex artis».
torización, ante cuyo resultado el doctor decidió la inme-
No puede imputarse, por tanto, la existencia de una
diata práctica de una cesárea, que terminó hacía las 13.45
conducta negligente o culposa al pediatra Sr. A. en la asis-
horas. 9) El recién nacido tuvo que ser reanimado por el
tencia prestada al recién nacido.
anestesista que asistía a la operación al apreciar que aquél
estaba hipotónico y presentaba problemas cardio-respira- Recurso del Dr. P.:
torios, siendo llevado el niño a la incubadora hacía las Al ordenar el ginecólogo la realización de una monitori-
14.10 horas. 10) Avisado el pediatra señor A. acordó man- zación fetal para el siguiente día 31, si la paciente no co-
tener al niño en la incubadora ya que le encontraba algo hi- menzaba su parto en horas posteriores a la exploración,
potónico. Hacía las 18.20 horas se personó en el Sanato- realizada en la tarde del día 30, no infringió ninguna norma
rio nuevamente el médico pediatra que, ante el estado del de conducta profesional ya que nada indicaba en el esta-
recién nacido, ordenó su urgente traslado al servicio de ne- do de la paciente la necesidad de proceder a esa monito-
onatología del Hospital ZZZ, en el que tuvo entrada a las rización fetal el mismo día 30 por la tarde. No puede apre-
18.50 horas. 11) En el parte firmado por el doctor A. para ciarse una conducta negligente en el ginecólogo demando.
el traslado del niño se hace constar: «RN a término con
bradicardia hace 24 h. Parto por cesárea. Visto a las 1/2 h Comentarios:
ACP n. Hipotomía cervical; líquido meconial.- En incuba-
dora. Nuevo control a 17.45 leve hipertonía cervical; posi- La condena solidaria impuesta por la Audiencia a un gi-
bles estertores en hemotórax izquierdo». 12) A consecuen- necólogo, un pediatra, y la aseguradora por los daños oca-
cia de las lesiones sufridas, el niño fue declarado sionados a un recién nacido durante la asistencia previa al
minusválido con grado de minusvalía del 33% por resolu- parto –minusvalía del 33 por ciento por retraso madurativo,
ción de 21 de octubre de 1997 de la Consejería de Sani- encefalopatía de etiología sufrimiento fetal perinatal– ha si-
dad, habiéndose apreciado en el previo reconocimiento do anulada por el Tribunal Supremo. Su resolución inter-
médico «retraso madurativo por encefalopatía de etiología preta que en primera instancia –cuya condena solidaria es
sufrimiento fetal perinatal». confirmada por la Audiencia– se limita a aceptar argumen-
tos de informes periciales que encuentran falta de diligen-
Recurso del Dr. A.: cia en los facultativos, sin atender la calificación de otros
«Para que pueda surgir la responsabilidad sanitaria o peritos que informaron de una actuación correcta.
del centro del que aquél depende, como consecuencia del
tratamiento aplicable a un enfermo, se requiere ineludible- Sentencia de la Audiencia Nacional, Sala de
mente que haya intervenido culpa o negligencia por parte lo Contencioso-Administrativo, Sección 4ª,
del facultativo que realizó el acto médico o clínico enjuicia- de 5 de noviembre de 2003. (JUR
do, ya que, en la valoración de la conducta profesional de
2004\49942).
médicos y sanitarios en general, queda descartada toda
responsabilidad más o menos objetiva, sin que opere la in- Ponente: Ilmo. Sr. D. Ernesto Mangas González.
versión de la carga de la prueba admitida para los daños
Resumen: Medicina pública. Responsabilidad patrimo-
de otro origen, siendo imprescindible que a la relación cau-
nial. El nacimiento de un niño con síndrome de Down no
sal, material o física, haya de sumarse el reproche culpabi-
hace responsable al servicio médico. Responsabilidad im-
lístico, que puede manifestarse en una negligencia omisiva
procedente por no estar vinculada a una mala praxis mé-
en la aplicación de un medio curativo o, más generalmen-
dica. Paciente de 35 años que reclama daños y perjuicios
te, en la existencia de una conducta culposa o negligente
por omisión de amniocentesis en las primeras semanas del
en tal aplicación».
embarazo al considerar que es un paciente de riesgo por
La sentencia recurrida se limita a aceptar la valoración estar tratada con medicamentos contra la depresión. Los
de la prueba pericial hecha en primera instancia señalando informes afirman que la paciente no era acreedora de esta
que «en lo que respecta a la del Sr. A., apreciando que és- prueba conforme a los protocolos, antecedentes y edad
te dejó sin su vigilancia profesional al recién nacido, moti- gestacional. La patología fue detectada en la última eco-
vando que no hubiera podido ordenar su traslado inmedia- grafía realizada en la semana 36, que sí era expresiva del
to al hospital, tan pronto la temperatura se hubiera acortamiento del fémur, un signo indicativo –junto al del

1131
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

pliegue nucal– del síndrome de Down. Aunque la edad ma- ese día se recoge en la Historia que: "tras comentar deta-
terna es tenida como un factor de riesgo de síndrome de lladamente los hallazgos ecográficos y su posible significa-
Down –entre los 35 y 38 años–, el protocolo de amniocen- do, la pareja solicita el estudio genético fetal. Se realiza fu-
tesis del Hospital lo marca a partir de los 36 años. La pa- niculocentesis (2cc) sin complicaciones inmediatas
ciente manifestó que había solicitado la amniocentesis va- post-punción". Se realiza informe de Genética donde se
rias veces desde la primera consulta, al temer riesgos por observa que se trata de un feto femenino afecto de trisomía
estar tratada con medicamentos contra la depresión. Sin primaria del cromosoma 21 (Síndrome de Down). El
embargo, esta manifestación no constaba en la historia clí- 15/12/2000 a las 15:56 h. realiza ingreso obstétrico por ro-
nica. El tribunal desestima la demanda por no estar proba- tura de membranas en paciente con 38 + 3 semanas de
do que el síndrome de Down de la niña tuviera relación di- gestación (la fecha de parto prevista era el 26/12/2000). Al
recta con una actuación médica incorrecta o mala praxis. día siguiente, a las 8 h. pasa a dilatación, tras realizar pro-
tocolo profiláctico con unicilina. A las 12:15 h. se produce
Extracto del texto de la Sentencia: el parto que transcurre dentro de los límites normales, es un
Los hechos constitutivos de la asistencia sanitaria por la parto eutócico en mujer multípara con anestesia epidural,
que se reclama aparecen extractados en el informe de la ingresando la recién nacida en el Servicio de Neonatología
Inspección Médica obrante en el expediente sobre la base para observación, siendo su peso al nacer de 1.900 gr. La
de la historia clínica de la paciente. "Se trata de una mujer mujer es trasladada a planta sobre las 17 h. La evolución
de 35 años de edad, que presenta un síndrome ansioso- tanto de la madre como de la niña son favorables por lo que
depresivo reactivo, del que es tratada farmacológicamente es dada de alta el 19/12/2000.
con psicofármacos con evolución favorable, por lo que el El Jefe del Departamento de Obstetricia y Ginecología
13/01/2000 ante la intención de tener un hijo se suspende del Hospital informa: La única forma de diagnosticar un sín-
el tratamiento. El 25/04/2000 acude al médico de cabece- drome de Down es haciendo un cariotipo por biopsia co-
ra por presentar amenorrea, con un retraso de cuatro días, ral, amniocentesis o cordocentesis. Tanto los marcadores
por lo que se solicita test de embarazo. El 10/05/2000 acu- ecográficos como los bioquímicos sólo sirven para decir
de de nuevo al médico de cabecera donde recoge el test que una embarazada tiene más o menos riesgo de tener
de embarazo que es positivo. Dado que la paciente refiere un hijo con Síndrome de Down. Los obstetras dirigieron a
temor a malformaciones fetales por los fármacos que estu- la paciente al Genético y si éste la rechazó, nada podía ha-
vo tomando para la depresión y desea que se le realice am- cer por llegar a un diagnóstico de certeza. Con mayor o
niocentesis se hace informe para obstetricia expresando el menor acierto se limitó al control del embarazo, y cuando
deseo de la paciente. El 3/07/2000 se realiza la primera surgió la sospecha de una malformación fetal estructural,
consulta obstétrica, siendo los resultados normales. Según la enviaron a la Unidad de Diagnóstico Prenatal del hospi-
refiere la reclamante previamente a esta consulta solicitó a tal. Tanto las alteraciones biométricas como las de la pla-
las matronas la realización de una amniocentesis, solicitud centa suelen ser progresivas, lo cual explica que en las pri-
que es denegada por dichas profesionales al no encontrar- meras ecografías no se detectasen estas anomalías. Algo
se la reclamante en el grupo de personas con esta indica- similar sucede con las malformaciones cardiacas.
ción, según afirma la reclamante acudió posteriormente al
Servicio de Genética del Hospital XXX donde fue informada La Subdirección Médica del Centro, en base a la infor-
nuevamente de la no procedencia de la realización de la mación dispensada por el Jefe del Departamento de Gine-
amniocentesis y en la primera visita obstétrica, el 3/07/2000 cología y la Jefa del Servicio de Genética, informa: "La úni-
expuso de nuevo a su obstetra, Dra. E. la posibilidad de re- ca forma de diagnosticar un Síndrome de Down es
alizar una amniocentesis, posibilidad que fue valorada acor- haciendo un cariotipo en biopsia coral, amniocentesis o
dando nuevamente la no procedencia de realización de la cordocentesis y su caso, no se encontraba entre las indi-
prueba. Las nuevas consultas prenatales se cumplen de caciones de realización de esta técnica. La amniocentesis
acuerdo con los protocolos existentes realizándose las eco- es una técnica que no está exenta de riesgos para el niño
grafías y analíticas habituales en cualquier embarazo. En la y se realiza cuando las probabilidades de malformación
última consulta realizada el 20/11/2000, se sospecha la son superiores a los potenciales riesgos. No se puede pro-
existencia de una malformación fetal estructural (en la eco- ducir yatrogenia en la paciente y su hijo si no es absoluta-
grafía realizada el 14/11/2000 se observa que corresponde mente preciso. Precisa un laboratorio bien dotado desde el
a un crecimiento de 30-31 semanas), por lo que es deriva- punto de vista de material y personal, que no tienen en to-
da al Hospital XXX donde se realiza nueva ecografía al día dos los hospitales. Las indicaciones se marcan en el Ser-
siguiente. En dicha ecografía se observa la existencia de vicio de Genética teniendo en cuenta su sensibilidad con-
braquicefalia, acortamiento femoral, retraso del crecimiento traponiendo el riesgo para el feto y la posibilidad de
y cardiomegalia. Al día siguiente se realiza nueva ecografía, diagnóstico de cromosomopatías.

1132
REPERTORIO JURISPRUDENCIAL COMENTADO

Las indicaciones para realizar amniocentesis son: En el trámite de ratificación de su informe pericial el fa-
cultativo hizo las siguientes consideraciones:
– Edad superior 36 años.
Sobre la valoración indiciaria de las ecografías realiza-
– Historia previa de 2 o más abortos del primer trimestre
das. Los datos revelados en las mismas tenían que haber
de causa desconocida.
llevado a la práctica de pruebas complementarias por sos-
– Antecedentes de hijo anterior con anomalía cromosó- pecha de malformaciones.
mica o malformación.
La primera ecografía revelaba un retraso de crecimien-
– Pareja portadora anomalía cromosómica. to que era indicativo de posterior seguimiento del mismo, y
no se midieron determinados parámetros. Sobre la valora-
– Antecedentes de enfermedad molecular.
ción de los Códigos Médicos en las ecografías practica-
– Marcadores ecográficos fetales positivos. das, se trata de ecografías abdominales normales de se-
– Entre las indicaciones no se contempla que lo desee la guimiento de cualquier embarazo.
pareja. Sobre los factores ecográficos indicativos de sospecha
Los marcadores ecográficos y bioquímicos (de Bart) de malformaciones fetales. El grosor del pliegue nucal, ca-
racterístico del Síndrome de Down y que no se realizó en
sólo sirven para indicar el mayor o menor riesgo de que un
esta paciente. Tampoco se realizó somatometría en la pri-
hijo tenga síndrome de Down. Son meramente indicativos.
mera de las ecografías.
Tanto las alteraciones biométricas como las de la pla-
El grosor del pliegue nucal, lo mismo que el tamaño del
centa suelen ser progresivas. Algo similar sucede con las
fémur, es evolutivo.
malformaciones cardíacas, algunas de ellas son evolutivas
y su diagnóstico se realiza a final del segundo o el tercer tri- Las mediciones ecográficas deben constar, sean nor-
mestre". males o patológicas.
La parte recurrente aportó con la demanda un informe El riego de yatrogenia en mujer de 34/35 años no es
médico pericial de especialista en Medicina Legal y Foren- superior al riesgo de Down. La edad materna se determina
se, en el que se hacen las siguientes consideraciones: en la fecha probable de parto, 26/12/2000, en que la ma-
dre tendría 35 años, 7 meses y algún día, edad a la que el
La paciente hizo saber a su médico de cabecera su
riesgo de Down es del 0,5 %, superior al riesgo de amnio-
preocupación de padecer una posible malformación del
centesis.
embrión, debido a su edad y a las circunstancias de in-
gesta medicamentosa, entre otras. La compañía aseguradora codemandada aportó en
trámite de contestación informe médico pericial de Gine-
Por todo ello solicitó de su médico de cabecera una cólogo, en el que se establecen las conclusiones siguien-
prueba de amniocentesis que se rechaza sin programar tes:
otras medidas de screening complementarias.
Además de los antecedentes de los progenitores, hay
Tras la práctica de la primera ecografía obstétrica con- tres criterios para definir la población de pacientes con
vencional el 10/06/2000, en que ya se aprecia un retraso riesgo de trisomía 21 fetal: la edad de la madre, las ano-
del crecimiento fetal. La indicación era la de practicar la malías fetales observadas ecográficamente y los marcado-
amniocentesis reiteradamente demandada por la paciente. res bioquímicos maternos. En este caso, no había antece-
No solamente se niega a la paciente el diagnóstico pre- dentes ni la medicación que la paciente había tomado
coz de la malformación congénita que albergaba en su se- suponía riesgo alguno como causa de cromosomopatías.
no, sino otras pruebas que orientativamente hubiesen po- La edad materna, como factor de riesgo, no está defi-
dido establecer un diagnóstico de sospecha: triple nida con certeza, estimándose entre los 35 y 38 años cum-
screening bioquímico, ecografía vaginal, un más estrecho plidos en el momento de la fecha probable de parto. En el
seguimiento ecográfico del diámetro biparietal y de la lon- protocolo sobre indicaciones para amniocentesis del Hos-
gitud del fémur, entre otras. pital se encuentra la edad materna de 36 años. Bajar la
Con carácter excesivamente tardío, el 28/11/2000, a edad materna un año significa tener que practicar muchos
las 36 semana de embarazo, se produce el diagnóstico del más estudios genéticos, lo que aumentaría la yatrogenia
Síndrome de Down, ahora si a requerimiento de los padres fetal.
y mediante funiculocentesis, produciéndose como conse- El diagnóstico prenatal de las anomalías cromosómicas
cuencia de todo lo anterior un parto de feto vivo con Sín- se basa en la realización del cariotipo fetal. En razón de su
drome de Down. valor técnico y del riesgo de muerte fetal por amniocente-

1133
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

sis, el examen no puede practicarse en todas las embara- La Inspección Médica hace las siguientes considera-
zadas, siendo preciso seleccionar la población de alto ries- ciones:
go de anomalías cromosómicas.
La amniocentesis es solicitada por el temor a la exis-
Los marcadores bioquímicos presentan dificultades tencia de malformaciones fetales por los fármacos que la
técnicas que disminuyen su eficacia diagnóstica. paciente estuvo tomando para la depresión. Pero dicho
motivo no supone indicación para la amniocentesis, al ha-
Los estudios ecográficos también presentan falsos po-
berse suspendido el tratamiento 70 días antes de la última
sitivos y dificultades técnicas que pueden determinar hacer
regla. Y en cuanto al tratamiento con Fluoxetina, dado el
exploraciones cruentas con riesgo fetal. En este caso se
tiempo transcurrido desde la suspensión del tratamiento
realizaron los controles ecográficos necesarios y en las fe-
hasta la fecundación (85 días aproximadamente), y tenien-
chas que se debían hacer, no encontrando anomalías fe-
do en cuenta la posibilidad de utilizar fluoxetina durante el
tales ni marcadores ecográficos de cromosomopatías.
embarazo con adecuado control médico, y que las lesio-
Cada centro determina lo que en su experiencia es el nes descritas solo se producen con el uso de fluoxetina
mejor equilibrio entre los factores de riesgo, las posibilida- durante el primer trimestre de gestación, no parece existir
des de cromosomopatía y las complicaciones que la am- en modo alguno indicación de amniocentesis por este mo-
niocentesis comporta para la madre y para el feto. La pa- tivo. Con los marcadores clínicos sólo se detectan el 25%
ciente fue trataba según el protocolo vigente del Centro de los casos, por lo que se comienza a utilizar otros mar-
Materno, por lo que se puede considerar que actuaron de cadores, tales como los bioquímicos y ecográficos, que
acuerdo con la Lex Artis ad hoc. sólo sirven para indicar si una embarazada tiene mayor o
menor riesgo de tener un hijo con cromosomopatía, por lo
En el trámite de ratificación y aclaración de su informe
que debe confirmarse el diagnóstico con alguna de las
pericial, dicho facultativo efectuó las siguientes considera-
pruebas invasivas.
ciones:
Siguiendo el criterio de valorar riesgos y beneficios se
En la ecografía nº 12 (F. 21, exp.), la expresión "no se
consideró que no estaba indicada la amniocentesis.
visualizan marcadores ecográficos de cromosomopatía",
indica que se hizo valoración del pliegue nucal, teniendo en No se observaron anomalías fetales tras la realización
cuenta que éste es uno de los marcadores más importan- de las tres primeras ecografías de control. Cuando se ob-
tes. servaron posibilidades de existencia de una malformación
cardiaca, tras la ecografía realizada el 14/11/2000, la pa-
La paciente basaba la necesidad de amniocentesis en
ciente fue derivada de forma inmediata a la Unidad de
el tratamiento de su síndrome ansioso depresivo previo al Diagnóstico Prenatal donde se realizó una ecografía el
embarazo. Los parámetros que se han medido en la pri- 21/11/2000. Por ello parece haber existido una adecuada
mera, segunda y tercera ecografías no diagnosticaron la atención durante su embarazo, de acuerdo con los cono-
existencia de retraso de crecimiento. En la semana 12 no cimientos clínicos y protocolos existentes.
hay que medir el fémur, sino que la ecografía correspon-
diente a la misma es para fijar la edad gestacional. El Síndrome de Down no tiene en la actualidad trata-
miento, ni se conoce su etiología. El diagnóstico prenatal
La ecografía vaginal sólo se puede hacer en embarazos del mismo depende de técnicas indirectas y de procedi-
de pocas semanas, hasta la 12, aproximadamente. Des- mientos invasivos, seleccionando la población mediante
pués, por razones técnicas, se deben hacer obligatoria- marcadores clínicos, bioquímicos y ecográficos, entre los
mente por vía abdominal, ya que la sonda vaginal no al- que destaca la medida del grosor del edema de la nuca.
canza a ver todo el feto.
No existe una relación causa-efecto entre la atención
El retraso de crecimiento consiste en la disminución sanitaria prestada y la existencia del nacimiento de una ni-
patológica del ritmo de crecimiento fetal. El pliegue nucal ña con síndrome de Down.
solo aparece en algunos fetos, y cuando aparece, su me-
dida puede estar dentro de la normalidad. En la semana 12 El testimonio de uno de los facultativos que atendió a la
no se visualizan marcadores ecográficos de cromosomo- paciente, aproximadamente a la semana 32 de embarazo,
patía. ha puesto de manifiesto lo siguiente:
En la ecografía de la semana 12 se hace una valoración
El riesgo de aborto por amniocentesis está en el 1 por
del pliegue nucal y el resultado es normal.
100. El riesgo de Down es del 0,4 a los 35 años y del
0,52%, a los 36 años. El riesgo de aborto espontáneo en La selección de candidatas para la amniocentesis se
todas las gestaciones es del 10 al 15%, luego no se pue- basa en marcadores clínicos (edad materna, anteceden-
den aplicar pruebas que entrañen este riesgo. tes) y ecográficos (pliegue nucal). El motivo por el que se le

1134
REPERTORIO JURISPRUDENCIAL COMENTADO

hace la primera ecografía, de 21/11/2000, es porque en ción fetal estructural, la paciente fue derivada a la Unidad
una exploración ecográfica previa realizada en el ambula- de Diagnóstico Prenatal. También señalan que la única for-
torio se detecta un retraso del crecimiento y una leve dila- ma de diagnosticar el Síndrome de Down es haciendo un
tación renal. De forma sistemática se expresa la edad ma- cariotipo en biopsia coral, amniocentesis o condocentesis,
terna independientemente de cual sea ésta, en las y el caso de la paciente no se encontraba entre las indica-
peticiones de ecografía, dado que aquella es un factor im- ciones de realización de esta técnica.
portante de estimación de riesgos. Dicha ecografía es una
El parecer expresado por los Servicios médicos asis-
ecografía transabdominal normal de tercer trimestre, que
tenciales, así como la literatura científica que cita, condu-
confirmó lo que se había visto en el ambulatorio y, además,
cen a la Inspección Médica, órgano especializado de la
permitió apreciar algunos rasgos sutiles no propiamente
Administración, a excluir la concurrencia de nexo casual
malfomativos de la anatomía fetal de muy difícil detección
entre la asistencia dispensada y el daño por el que se re-
y siempre subjetivos que fueron los que hicieron sospechar clama, rechazando concretamente que la falta de realiza-
la posible existencia de un Síndrome de Down. ción de amniocentesis o la falta de detección de las lesio-
En la primera ecografía no es posible medir el fémur. En nes del feto durante el primer trimestre de gestación se
las dos siguientes (8/08/2000 y 25/08/2000) está medido, deban a la actuación inadecuada de los servicios sanita-
y en ambas está dentro de límites normales para la edad rios.
gestacional. Es en la última, 14/11/2000, en la que si es Y el parecer de la Inspección y de los Servicios médi-
expresivo de dicho acortamiento. cos asistenciales ha sido corroborado por el informe peri-
El testimonio de la Jefe de Servicio de Genética del cial incorporado al proceso a instancia de la entidad ase-
Hospital ha puesto de manifiesto lo siguiente: guradora codemandada, al precisar que la edad materna,
como factor de riesgo de cromosomopatías, no está defi-
El Servicio de Ginecología efectúa en todos los segui-
nida con certeza, estimándose entre los 35 y 38 años cum-
mientos de embarazo una valoración del pliegue nucal. Es-
plidos en el momento de la fecha probable del parto, es-
tá en protocolo hacer una ecografía entre las semanas 11
tando establecida en 36 años en el protocolo del Hospital;
y 13 buscando marcadores de cromosomopatía, prueba
que en este caso se hicieron los controles ecográficos ne-
avalada por la literatura y protocolos de la SEGO.
cesarios y en las fechas en que se debían hacer, no en-
El riesgo de anomalía cromosómica aumenta notable- contrando anomalías ni marcadores ecográficos de cro-
mente con la edad. mosomopatías, con el solo hallazgo de pequeñas
diferencias entre la edad gestacional por amenorrea y por
Es cierto que la edad de 35 años de la gestante es la
ecografía, lo que se puede considerar habitual.
determinante para la práctica de amniocentesis en un por-
centaje altísimo de los protocolos de aplicación. Pero cada El facultativo informante, especialista en Ginecología,
grupo de trabajo marca sus criterios en función de los me- además de afirmar que la paciente fue tratada según el
dios de que se dispone y de que haya disponibilidad de protocolo vigente en el Hospital y que se actuó conforme a
ecografistas que realicen esa prueba entre las semanas 11 Lex Artis, ha venido a poner en entredicho diversos aser-
y 13. tos del perito informante a instancia de la parte deman-
dante, así en lo que respecta al crecimiento fetal, al exa-
Se suele poner que no existen marcadores de cromo-
men del grosor del pliegue nucal, al alcance de los estudios
somopatía y ya se da por hecho que el pliegue nucal es
bioquímicos y a los riesgos de la amniocentesis.
menor de 3 mm.
Por todo lo expuesto, no puede darse por acreditada la
Basta con que concurra uno de los criterios del proto-
existencia de un daño derivado de la actuación de la Ad-
colo de indicación de diagnóstico prenatal.
ministración Sanitaria y que los perjudicados no tengan el
La testigo vio a la paciente en la semana 34 y en ese deber jurídico de soportar.
momento ya no se puede hacer amniocentesis. En la his-
toria clínica no consta el deseo de la paciente en tal senti- Comentarios:
do.
Una reclamación de responsabilidad patrimonial por el
Pero frente al parecer expresado por dicho facultativo nacimiento de una niña con síndrome de Down no diag-
se encuentra el de los servicios médicos que atendieron a nosticado en los comienzos del embarazo ha sido deses-
la paciente, los que explican que tanto las alteraciones bio- timada por la Audiencia Nacional. Los magistrados tienen
métricas como las de la placenta suelen ser progresivas, lo en cuenta informes de los distintos servicios médicos en
que explica que en las primeras ecografías no se detecta- los que estuvo la demandante, y el de la Inspección Médi-
sen anomalías, y cuando surgió la sospecha de malforma- ca, para llegar a la conclusión de que la embarazada no era

1135
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

acreedora de una amniocentesis al no ser una prueba indi- en la que se señala que “el feto es persona desde el co-
cada conforme a los protocolos del hospital. mienzo de la dilatación”, los acusados habían sido absuel-
tos por la Audiencia Provincial de los delitos de aborto por
Finalmente, nos detenemos, en una breve cita, en dos
imprudencia profesional, lesiones culposas al feto en con-
sentencias cuyo interés reside en la consideración que
curso ideal con homicidio imprudente, denegación de falta
ofrecen sobre el concepto de persona.
de asistencia sanitaria y falta de imprudencia. Contra la an-
En la primera de ellas, (Sentencia del Tribunal Supre- terior Resolución recurrió en casación la acusación parti-
mo, Sala de lo Penal, de 22 de enero de 1999). El acu- cular. El TS declara haber lugar al recurso y dicta segunda
sado había sido absuelto del delito de lesiones por impru- Sentencia en la que condena, a uno de los acusados, co-
dencia por sentencia de la Audiencia Provincial. Recurrió mo autor de imprudencia leve con resultado de muerte, a
en casación el Ministerio Fiscal y la acusación particular. El la pena de multa de dos meses con cuota diaria de 5.000
TS declara haber lugar al recurso y dicta segunda senten- pesetas.
cia en la que condena al acusado como autor de un delito
de lesiones por imprudente grave, cometido por impru- En el fundamento jurídico cuarto se dice: “Al analizar
dencia profesional, a la pena de un año de prisión con in- desde el punto de vista penal las lesiones causadas al feto
habilitación especial para el ejercicio de la profesión médi- durante el curso de la gestación recordaba que los arts. 29
ca en la especialidad de ginecología y obstetricia por un y 30 del Código Civil se ven forzados a tener por persona al
período de un año y que indemnice a los padres del niño concebido a todos los efectos favorables y no hay efecto
víctima de los hechos en treinta millones de pesetas por las más beneficioso para el ser humano en gestación que el de
secuelas padecidas. conservar la integridad física y psíquica, añadiendo que el
concebido, en armonía con los avances científicos, tiene un
El Ministerio Fiscal razona que el Tribunal de instancia patrimonio genético totalmente diferenciado y propio siste-
ha dictado sentencia absolutoria exclusivamente en base a ma inmunológico, que puede ser sujeto paciente dentro del
la inexistente tipificación penal de las lesiones por impru- útero –conforme a las técnicas más recientes– de trata-
dencia causadas a un ser humano antes de su nacimiento miento médico o quirúrgico para enfermedades y deficien-
en el texto del Código Penal de 1973 y de ello discrepa cias orgánicas, y que la dependencia de la madre, abstrac-
apoyándose en la Sentencia de esta Sala de 5 de abril de ción del tiempo biológico de la gestación, no es un término
1995 en la que se expresa que «el otro», mientras no al- absoluto por cuanto se prolonga después del nacimiento;
cance la categoría de persona (el caso del feto o embrión negar al embrión o al feto condición humana independiente
humano) es más objeto que sujeto pasivo del delito; pero y alteridad manteniendo la idea pretendida de la –mulieris
puede afirmarse que, en estos supuestos de vida depen-
portio–, es desconocer las realidades indicadas”.
diente, las lesiones causadas durante el curso de la gesta-
ción deben tener relevancia penal porque la acción –en La sentencia proclama, en suma, que el ser humano,
sentido lato– se intenta y realiza sobre una persona, la ma- cuyo nacimiento se ha iniciado, constituye el bien jurídico
dre, y el resultado –demostrada la relación causal– tras- protegido y al mismo tiempo el objeto que sufre la acción u
ciende al feto por ser parte integrante de la misma, aunque omisión que como delitos de homicidio o lesiones se tipifi-
las taras somáticas o psíquicas no adquieran notoriedad o can en el Código Penal. No son, pues, los delitos de abor-
evidencia hasta después del nacimiento...». to ni de lesiones al feto los que procede examinar. No es la
salud, integridad o vida del feto lo que se pone en peligro
El Tribunal, en el fundamento jurídico primero, afirma:
sino la salud e integridad física de una «persona», el otro, al
“el comienzo del nacimiento pone fin al estadio fetal y, por
que se refieren el artículo 420 del Código Penal derogado y
consiguiente, se transforma en persona lo que antes era un
el artículo 147 del vigente Código Penal. De acuerdo con
feto. El ser humano, cuyo nacimiento se ha iniciado, cons-
esta doctrina la muerte de un niño, como sucedió en el pre-
tituye el bien jurídico protegido y al mismo tiempo el obje-
sente caso, que vivió varias horas y murió como conse-
to que sufre la acción u omisión que como delitos de ho-
cuencia de la desacertada técnica utilizada en su nacimien-
micidio o lesiones se tipifican en el Código Penal. No son,
to, constitutiva de imprudencia leve, colma cumplidamente
pues, los delitos de aborto ni de lesiones al feto los que
las exigencias típicas del art. 621.2º del Código Penal, por-
procede examinar. No es la salud, integridad o vida del fe-
que ya era una persona, penalmente protegible.
to lo que se pone en peligro sino la salud e integridad físi-
ca de una «persona», el otro, al que se refieren el artículo Por su parte, el magistrado D. Perfecto Andrés Ibáñez
420 del Código Penal derogado y el artículo 147 del vigen- formula el siguiente voto particular:
te Código Penal.
“Mi discrepancia es con el punto de vista manifestado
En la segunda sentencia, (Sentencia del Tribunal Su- en las siguientes afirmaciones de la sentencia. Una pri-
premo, Sala de lo Penal, de 29 de noviembre de 2002), mera que dice: «El comienzo del nacimiento pone fin al

1136
REPERTORIO JURISPRUDENCIAL COMENTADO

estadio fetal y, por consiguiente, se transforma en per- El delito de aborto protege la vida del nasciturus, com-
sona lo que antes era feto». Y otra, en la que se con- prendida la del que ya ha comenzado a nacer. Para
cluye: «No es la salud, integridad o vida del feto lo que que éste pueda llegar a ser considerado «otro» ha de
se pone en peligro sino la salud e integridad física de ser perfectamente discernible de la madre. Y no lo es
una "persona", el otro, al que se refieren el artículo 420 mientras depende orgánicamente en términos esencia-
del CP derogado y el artículo 147 del vigente». Para, fi- les y se encuentra comprendido espacialmente dentro
nalmente, entender que, puesto que se dan las exigen- de ella, con la que su relación es tan estrecha que se
cias típicas del art. 621,2º Código Penal, la conducta hace imposible en la práctica actuar sobre el primero
enjuiciada es típica, en contra de lo que mantiene el tri- sin que la acción incida o se proyecte al mismo tiempo
bunal de instancia. sobre la segunda.
Mi criterio difiere, pues, a la hora de determinar el sen- Pertenecer a la categoría «ser vivo» es, así, condición
tido que debe atribuirse al pronombre indefinido «otro» necesaria pero no suficiente para entrar en la de «otro»
empleado por el Código Penal en los artículos citados, a los efectos de los arts. 138 y 157 CP/1995. Un ser vi-
y también en el artículo 138 cuando se tipifica el homi- vo en período de expulsión, durante el parto, no es ple-
cidio. namente reconocible como «otro» respecto de la ma-
La alteridad, como atributo, reclama la existencia de una dre y tampoco en la relación con los demás sujetos. En
individualidad personal reconocible y plenamente diferen- él hay vida, podría decirse, incluso, que hay otra vida
ciada; lo que trasladado al campo que aquí interesa re- (biológicamente hablando), pero no la vida de otro, por
mite al ser humano vivo, en cuanto dotado de vida inde- falta del mínimo de autonomía requerida para constituir
pendiente. El feto, incluso a término, que se encuentra una subjetividad. Pues ese concepto se satisface sólo
todavía dentro del claustro materno no responde con- por la concurrencia de dos clases de datos, unos de
ceptualmente a tal exigencia. Ni siquiera en el supuesto carácter biológico (en ese momento, el único realmen-
de que se halle en curso de expulsión, ya que durante és- te existente) y otros de naturaleza socio-cultural (que
ta se está naciendo, pero todavía no se ha nacido. no se dan)”.

1137
Índice de materias

A Cromosoma, 479 Fisiopatología, 521


Abdominal, 454 Cromosomopatías, 965 Forceps obstétrico, 785
Aborto, 407, 415, 419, 421
Abruptio placentae, 493 D G
Algoritmo de rcp, 909 Diagnóstico prenatal, 1001 Gardnerella vaginalis, 115
Alumbramiento, 375 Diámetro biparietal, 297 Gastrosquisis, 986
Anafilácticas, 379 Dilatación, 426 Gen hla, 156
Analgoanestesia, 395 Distocia ósea, 711 Genéticos, 464
Anamnesis, 477 Doppler, 878 Genital, 458
Anemia, 379, 411 Ductus venoso, 300 Genitourinarias, 493
Anestesia epidural, 397 Gestacional, 479
Anomalías pélvicas pélvicas, 715 E Gonococia, 928
Anticoncepción, 444 Ecografía cervical, 433 Grupo sanguíneo, 479
Aséptica, 455 Ecografía obstétrica, 976
Asfixia fetal, 904 Ectópico, 443, 447 H
Asfixia perinatal, 907 Electrocoagulación, 444 Hematoma, 498
Asintomática, 453 Embarazo, 446 Hemólisis, 523
Embarazo de riesgo Hemólosis, 493
B elevado, 871 Hemoperitoneo, 446
Bandolera, 497 Embolia de líquido Hemorragia, 429
Benigna, 473 amniótico, 769 Hemostasia uterina, 367
Bienestar fetal, 892 Embrionaria, 413 Hidralacina, 525
Biopsia, 423 Endocervicales, 503 Hidratación, 435
Braxton-hicks, 229 Enfermedad hemolítica Hidrops fetal, 857
Bridas, 494 perinatal, 847 Hiperemesis gravídica, 518
Enfermedad tromboémbólica Hipertensión, 523
C venosa, 753 Hipovolemia, 467
Catéter, 397 Epidimiología, 501 Histerectomía obstétrica, 809
Cefalea, 380 Episiotomía, 374, 381 Histeroscopia, 423
Cérvix, 426 Esfínter, 515 Histológico, 475
Cesárea, 381, 793 Estadio, 474
Cesárea intraperitoneal, 796 Estimulación vibroacústica I
Ciclo endocervical, 69 (eva), 308 Indicadores de riesgo, 871
Citomegalovirus, 918 Estrógenos, 516 Indice diario de movimientos
Coágulos, 447 Etiológico, 423, 470 fetales, 305
Colposcopio, 129 Etiopatogenia, 463 Inducción del parto, 823
Consentimiento informado, 1077 Evacuación, 421, 479 Inducción electiva, 823
Contracciones, 427 Evacuacion uterina, 775 Infección, 477
Cordón umbilical, 375 Extracorial, 495 Infeccion puerperal, 745
Corioagioma, 495 Infecciones perinatales, 917
Corioamniotis, 509 F Interrupción voluntaria del
Cornual, 445 Fenómeno doppler, 975 embarazo, 1055
Corticoterapia, 503 Fetos, 410, 411 Interstical, 455
Corunal, 455 Fibronectina, 506 Intraamniótica, 505
Cotiledones, 461 Fibronectina fetal, 434 Intradural, 398

1139
Fundamentos de Obstetricia (SEGO)

Intraperitoneal, 447 Oligoamnios, 490 S


Intravaginal, 457 Onfalocele, 986 Saco gestacional, 447
Intubación endotraqueal, 912 Ovf del ductus venoso, 994 Saco vitelino, 977
Salpingostomía, 444
L P Salpingostomía, 452
Lactancia, 380, 393 Paracervical, 399 Signo arterial de osiander, 229
Laparoscopia, 449 Parto instrumental, 783 Síndrome de down, 967
Legrado postaborto, 779 Parto pretérmino, 409, 425 Síndrome fetal alcohólico, 248
Legrado puerperal, 779 Patología puerperal Sintetasa, 491
Lesiones genitales, 733 de la mama, 761 Sonoluscencia, 993
Ligadura arteria Péptido auricular Subaracnoidea, 398
hipogástrica, 812 natriurético, 197 Sudoración, 477
Liquido amniotico, 489 Perfil biofísico fetal (pbf), 876 Supino, 464
Líquido amniótico meconial, 914 Perfil biofísico modificado
Longitud craneo caudal (pbm), 876 T
(lcc), 977 Perfil biofísico progresivo Técnica de misgav-ladach, 800
(pbp), 878 Telangiectasia, 175, 176
M Placas, 473 Terapia fetal, 861
Maduración cervical, 823 Placenta normoinserta, 459 Teratogénesis infecciosa, 945
Malformaciones congénitas, 957 Placenta previa, 457 Teratogenia, 943
Malformaciones fetales, 1011 Plaquetopenia, 523 Test de estimulación
Marcadores bioquímicos, 427 Plasma, 469 vibroacústica /eva), 875
Matastásicos, 474 Preeclampsia, 521 Tincion, 493
Membranas, 429 Prematuridad, 915 Tocolíticos, 428
Metildopa, 525 Prematuro, 425 Tocolíticos, 815
Método de pelosi, 801 Prevención, 525 Transvaginal, 447
Metrorragia, 477 Progesterona, 516 Trauma obstétrico, 843
Metrotexate, 450 Prolapso del cordón, 489, 497 Trofoblástica, 473
Mola hidatiforme, 476 Pronóstico, 449 Tromboembolismo
Molecular, 476 Proteinuria, 523 pulmonar,758
Monitorización, 466 Protombina, 469 Trombofilias, 464
Monitorizacion fetal Puerperio, 377 Tromboflevitis, 754
estresante (mfe), 875 Trombosis, 498
Morbimortalidad Q Trombosis venosa
perinatal, 413, 439 Quistes, 478 profunda, 754
Mortalidad materna, 1061
Mortalidad perinatal, 839 R U
Muerte fetal, 491 Radiaciones, 944 Ultrasonidos, 975
Muerte fetal intrauterina, 935 Randomizados, 503
Regurgitación tricuspidea, 994 V
N Responsabilidad Vasculares, 498
Neonatal, 375, 393 sanitaria, 1073 Vellosidades, 470
Neuroendocrinos, 391 Retraso de crecimiento Ventosa obstétrica, 788
Nódulos, 473 intrauterino (rciu), 887 Vesícula vitelina, 447
Nutritiva, 464 Retroplacentarias, 465 Vigilancia fetal intraparto, 897
Riesgo de pérdida de bienestar Vitalidad embrionaria, 977
O fetal, 871
Obstericia, 395 Rotura, 477 Y
Oclusiva, 457 Rotura uterina, 727 Yatrogenia, 419

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