LOGISTICA El packaging: un elemento

crucial en la cadena de valor logística

Publicado en Cargadores
15th de Abril 2019

Cada una de las etapas que conforman la cadena de valor tiene una función esencial y unas
necesidades de transporte y logística específicas. Una de las fases más importantes es la del
embalaje, aunque no siempre se valora en su justa medida el peso que tiene en los procesos.
El packaging no consiste simplemente en guardar los productos en cajas de cartón;
actualmente, representa un sistema complejo y coordinado que garantiza que la mercancía
se traslade de forma segura, económica y eficiente a lo largo de toda la cadena de
suministro. El embalaje no solo permite que la mercancía se transporte de la forma
adecuada desde el centro final de distribución hasta la puerta del consumidor, sino que
también tiene un papel fundamental en las demás etapas del proceso logístico.

Las nuevas tendencias en la logística y el comercio electrónico están teniendo un gran

impacto en los fabricantes de embalajes y favoreciendo que las operaciones logísticas de
esta fase se vuelvan cada vez más complejas. A continuación, analizaremos las
transformaciones que está experimentando la logística del packaging, su funcionamiento y
qué puede hacerse para mejorar su eficiencia y optimizar las operaciones de las empresas
que se dedican a este sector.

¿A qué retos logísticos se enfrentan los fabricantes de

embalajes?
El auge del comercio electrónico de los últimos tiempos está planteando nuevos y
numerosos retos en el ámbito de la logística del packaging. Algunas prácticas del modelo
B2C (con un consumidor que exige un servicio más rápido, cercano y de mejor calidad)
están afectando actualmente a la relación que mantienen proveedores y clientes en el
entorno de las empresas B2B. La calidad y la puntualidad en la preparación del embalaje
tienen un impacto fundamental en el consumidor del modelo B2C. El embalaje del
producto no solo debe ser de una calidad excelente para proteger la mercancía en su
viaje a lo largo de toda la cadena logística; también debe efectuarse a tiempo su
entrega a fin de evitar retrasos en las plantas de producción.

En las primeras etapas de la fabricación del papel y de la mercancía impresa, por ejemplo,
las empresas deben trasladar palets muy pesados, utilizando para ello maquinaria específica
que les permita cargar y descargar los vehículos. Debido al gran volumen de material que
implica la mayor parte de los pedidos de embalaje, para este tipo de envíos, es preferible
optar por modalidades de transporte de carga completa (FTL), que permiten cubrir tanto
rutas en corta distancia (menos de 160 km) como trayectos nacionales en larga distancia.
Garantizar la eficiencia de estos procesos resulta esencial y, por ello, se recurre a las cargas
FTL: el producto (el embalaje) tiene un escaso valor añadido; sin embargo, ocupa un
espacio muy amplio, lo que significa que, cuando el volumen de embalajes es muy grande,
es preferible que se transporten aprovechando toda la capacidad disponible en los
vehículos.

Es esencial que el embalaje se transporte de forma eficiente en cargas completas, ya que, si

se producen deficiencias en los procesos logísticos del packaging (como que no se entregue
a tiempo el material a los fabricantes de productos), estas pueden tener un efecto negativo
considerable en los fabricantes de bienes de consumo de alta rotación (FMCG) y bienes de
consumo envasados (CPG), quienes no pueden detener la cadena de producción y deben
responder a una demanda constante. El concepto de «justo a tiempo» (JIT) cobra una
importancia especial en esta fase. Los mejores fabricantes de FMCG y CPG aplican el
sistema de organización de justo a tiempo. Además, necesitan producir mercancías
rápidamente y de forma continua que deben entregar con puntualidad a sus
distribuidores y retailers.

Por otro lado, a pesar de la urgencia inherente a estos procesos, a menudo no pueden
justificar destinar un espacio que conlleve un coste elevado a almacenar un embalaje con un
valor económico muy bajo, incluso aunque hacerlo contribuya a reducir posibles retrasos a
la hora de entregarlo. Al contar con muchos clientes que aplican la política de no almacenar
el packaging, los fabricantes de productos de embalaje deben estar ubicados
suficientemente cerca de las instalaciones de los mismos como para ofrecerles servicios
logísticos económicos con rapidez y flexibilidad que se acerquen al sistema de justo a
tiempo. La proximidad de los clientes y la aplicación de unos métodos y procesos eficientes
no solo son cruciales para la totalidad de la cadena de suministro de los fabricantes de
embalaje, sino también para la de los fabricantes de productos