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UNIVERSIDAD POPULAR AUTÓNOMA DE VERACRUZ

SECRETARÍA DE EDUCACIÓN PÚBLICA

TEMA

Divorcio

INVESTIGACIÓN

MATERIA DE

DERECHO CIVIL

PRESENTA

LUCERO CANSECO PÉREZ

CARRERA

LICENCIATURA EN DERECHO

ASESOR

LIC. DOMINGO MARTÍNEZ CRISTÓBAL

JÁLTIPAN, VERACRUZ

22-MARZO-2020

JÁLTIPAN DE MORELOS VERACRUZ-MARZO-2020


El divorcio, concepto, clases y efecto
La palabra divorcio proviene del latin divortĭum, en un sentido estricto es la disolución del
vínculo matrimonial, mientras que en un sentido amplio, se refiere al proceso juridico que
tiene como objetivo dar término a una unión conyugal.

Existen dos tipos de divorcio el necesario y el voluntario.


Es divorcio necesario cuando la disolución del vínculo es solicitada solo por uno de los
cónyuges, en base a una causa específicamente señalada en el Código Civil, ante la
autoridad judicial competente, es decir, el juez de lo familiar. Es más complejo y largo, y
en el mismo las partes (los cónyuges) alegarán las causas que consideran dieron lugar al
divorcio. Estas causas están expresamente previstas en la ley.

Es divorcio voluntario Cuando hay mutuo acuerdo entre los cónyuges para romper el
vínculo matrimonial.

En el supuesto de divorcio necesario uno de los cónyuges deberá haber realizado una
conducta especificada en la ley como causal de divorcio. Los ejemplos más comunes de
conductas señaladas como causantes de divorcio son:

El adulterio debidamente probado de uno de los cónyuges;

El hecho de que durante el matrimonio nazca un hijo concebido, antes de la celebración


de éste, con persona distinta a su cónyuge, siempre y cuando no se hubiere tenido
conocimiento de esta circunstancia;

La propuesta de un cónyuge para prostituir al otro, no sólo cuando él mismo lo haya


hecho directamente, sino también cuando se pruebe que ha recibido cualquier
remuneración con el objeto expreso de permitir que se tenga relaciones carnales con ella
o con él;

La incitación o la violencia hecha por un cónyuge al otro para cometer algún delito.

La conducta de alguno de los cónyuges con el fin de corromper a los hijos, así como la
tolerancia en su corrupción etc.

Dentro de este proceso de divorcio existirán medidas que son provisionales y son aquellas
que se adoptan con la intención de atender las necesidades que surjan a partir de la
situación creada desde que se iniciaron los trámites para deshacer el vínculo conyugal,
hasta que se dicte la sentencia definitiva.

Estas medidas provisionales tienen por finalidad regular la situación que se plantea en ese
período de tiempo, y asegurar la efectividad de las medidas definitivas que se adopten en
su día.

Las medidas provisionales quedarán sin efecto cuando sean sustituidas por las que
establezca definitivamente la sentencia o cuando se ponga fin al procedimiento.

Protección de menores y mayores incapacitados


La patria potestad únicamente se puede dar sobre hijos cuya filiación se encuentre
determinada, ya sea de forma matrimonial, no matrimonial o mediante adopción. Esto se
extrae del artículo 154.1 del C.C.

La titularidad de la patria potestad pertenece de forma conjunta a ambos progenitores y


su contenido se considera que tiene una naturaleza bifronte o de doble vertiente, puesto
que reúne un contenido personal y otro patrimonial.

- ARTÍCULO 154 C.C.

Respecto al contenido patrimonial de la patria potestad, el artículo 154.1 del C.C.


establece que los padres que ostenten la patria potestad sobre sus hijos deben “velar por
ellos, tenerlos en su compañía, alimentarlos, educarlos y procurarles una formación
integral”.

Por otra parte, en cuanto al contenido patrimonial de la segunda parte del artículo (154.2
C.C.) se establece que los padres serán administradores de los bienes de sus hijos.

Los padres deben administrar los bienes de los hijos con la misma diligencia que si se
tratase de los suyos propios y cumpliendo con las obligaciones generales de todo
administrador.

En cuanto al ejercicio de la patria potestad, dice el art. 154.2 C.C.: “la patria potestad se
ejercerá siempre en beneficio de los hijos, de acuerdo con su personalidad”.

En el ejercicio de la patria potestad, los padres podrán recabar el auxilio de la autoridad y


corregir razonablemente a los hijos.

- ARTÍCULO 155 C.C.

El artículo 155.1 C.C. establece que deben “obedecer a sus padres mientras permanezcan
bajo su potestad y respetarlos siempre”.

Además, los padres tienen la obligación de ejercer la representación legal de los hijos
menores.

Dice el tenor literal del artículo 155 C.C. que los hijos (bajo patria potestad) deben
“contribuir equitativamente, según sus posibilidades, al levantamiento de las cargas de la
familia mientras conviva con ella”. De tal forma que sus progenitores pueden disponer en
este sentido no solo de los frutos de los bienes del hijo, sino también de otros posibles
ingresos del hijo e incluso de una parte o de algunos de sus bienes.

Se debe hacer referencia que los progenitores no siempre van a tomar todas las
decisiones conjuntamente y de esta forma cabe la existencia de discrepancias en ciertos
aspectos; así pues, resulta necesario señalar qué decisiones puede tomar un padre de
forma unilateral y qué decisiones deben tomarse de mutuo acuerdo en el ejercicio de la
patria potestad.

- ARTÍCULO 156 C.C.

Respecto a esta cuestión el art. 156 Cc señala que: “la patria potestad se ejercerá
conjuntamente por ambos progenitores o por uno solo con el consentimiento expreso o
tácito del otro. Serán válidos los actos que realice uno de ellos conforme al uso social y a
las circunstancias o en situaciones de urgente necesidad”.

Si existiese conflicto entre los progenitores cualquiera de ellos podrá acudir a la instancia
judicial, por lo que el juez, tras oír a ambos progenitores y al hijo si tuviese capacidad o
fuese mayor de 12 años, atribuirá la facultad de decidir a uno de los progenitores.

- ARTÍCULO 159 C.C.

Además, dice el art. 159 Cc: “Si los padres viven separados y no decidieren de común
acuerdo, el Juez decidirá, siempre en beneficio de los hijos, al cuidado de que progenitor
quedarán los hijos menores de edad”.

- ARTÍCULO 164 C.C.

Con el estudio del artículo 164 C.C. se destaca que la administración alcanza todos los
bienes de los hijos, salvo:

• Los bienes adquiridos a título gratuito,

• Los adquiridos por sucesión en que un progenitor o ambos hubieran sido


desheredados.

Los padres en ejercicio de la patria potestad podrán disponer de los bienes de los hijos.

Podrán gravarlos o enajenarlos con la debida causa de justificación, bien de utilidad o de


necesidad, escuchando necesariamente al menor si tuviere suficiente juicio y si se trata de
bienes inmuebles, establecimientos mercantiles, objetos preciosos o valores mobiliarios,
previa autorización judicial, oído el Ministerio fiscal.

- ARTÍCULO 166 C.C.

El artículo 166 C.C. establece que los padres pueden renunciar a la herencia dejada al hijo
si son autorizados judicialmente para ello.

No obstante, ex art. 166.3 C.C., no será necesaria autorización judicial si el menor hubiere
cumplido dieciséis años y consintiere mediante documento público.
La violencia intrafamiliar, concepto, consecuencias civiles y penales
La violencia Intrafamiliar se especifica como aquella que tiene lugar dentro de la familia, y
que comprende violación, maltrato físico, psicológico y abuso sexual entre otros. Al
tratarse de de conductas coercitivas aprendidas que involucran abuso físico o la amenaza
de abuso físico, en esta figura jurídica que ya es ampliamente reconocida en el Estado de
Tabasco, se incluye el abuso psicológico repetido, el ataque sexual, el aislamiento social
progresivo, el castigo, la intimidación y la coerción económica.

La violencia intrafamiliar es estipulada en la Ley para la Prevención y Tratamiento de la


Violencia Intrafamiliar para el Estado de Tabasco, en las siguientes formas:

MALTRATO FÍSICO.- Todo acto de agresión intencional en el que se utilice alguna parte del
cuerpo, algún objeto, arma o substancia para sujetar, inmovilizar o causar daño a la
integridad física del otro, encaminado hacia su sometimiento y control.

MALTRATO PSICOEMOCIONAL. Al patrón de conducta consistente en actos u omisiones


repetitivos, cuyas formas de expresión pueden ser prohibiciones, coacciones,
condicionamientos, intimidaciones, amenazas, actitudes devaluatorias, de abandono y
que provoquen en quien las recibe, deterioro, disminución o afectación a su estructura de
personalidad y en los casos en que se compruebe que ha sido realizado con la intención
de causar daño moral al receptor de violencia intrafamiliar, será considerado maltrato
psicoemocional en los términos de este Artículo, aunque se argumente como justificación
la educación y la formación del mismo, tratándose de un menor de edad.

ABUSO O NEGLIGENCIA FETAL: Daño ocasionado a un ser humano en proceso de


formación y crecimiento in útero.

MALTRATO SEXUAL: Al patrón de conducta consistente en actos u omisiones reiteradas y


cuyas formas de expresión pueden ser negar la atención a las necesidades sexoafectivas,
inducir a la realización de prácticas sexuales no deseadas o que generen dolor, utilizar la
celotipia para el control, manipulación o dominio de la pareja y que generen daño; así
como los delitos a que se refiere el Título Cuarto del Libro Segundo del Código Penal para
el Estado de Tabasco, es decir, aquellos contra la libertad, la seguridad sexual, y el normal
desarrollo psicosexual, respecto de los cuales la presente Ley sólo surte efectos en el
ámbito asistencial preventivo.

Factores de su incidencia.

Algunos autores señalan que la violencia Intrafamiliar es generada principalmente por tres
factores;

La falta de control de impulsos,


La carencia afectiva y

La incapacidad para resolver problemas adecuadamente;

Aunado a lo anterior, en algunas personas la incidencia es clara por abuso de alcohol y


drogas.

De ello se desprende claramente que estos patrones de conducta comienzan en la


infancia, no solo al privar a un niño del amor que naturalmente necesita, sino también al
agredirlo, física, psicológica y emocionalmente, con golpes lentos que, en su continuidad,
provocan una formación defectuosa de la conciencia del niño sobre su papel en el entorno
social en que le corresponderá vivir.

Se considera como familia en riesgo de violencia intrafamiliar, la constituida por dos o más
personas, que de acuerdo a sus antecedentes y actual calidad de vida tienen mayor
probabilidad de ejercer los actos relacionados con la violencia intrafamiliar, en detrimento
de los otros integrantes de la familia.

En una proporción muy alta de familias (no tengo estadísticas actuales) existe
disfuncionalidad en mayor o menor grado. A menudo las personas que han sido objeto de
algún tipo de abuso físico o verbal, o sufrieron el abandono físico o emocional de uno de
sus padres o de ambos, buscan alivio en alguna adicción para remediar el dolor latente, ya
sea a través de relaciones personales dañinas o adicciones al dinero, el sexo, la ira, las
drogas, la bebida, etc. aunque la mayoría de las veces no se da cuenta de lo que le está
sucediendo.

El codependiente generalmente manifiesta no haber escuchado en su infancia frases


como "eres muy inteligente", "estás haciendo un buen trabajo" o "gracias mi amor,
agradezco mucho tu ayuda", al crecer se sienten abandonados, tienen una autoestima
baja y buscan la aprobación de otras personas para sentirse mejor consigo mismos. Su
hambre de amor y aprobación son tan grandes, que, al llegar a la adolescencia o la
adultez, están dispuestos a soportar cualquier cosa, con tal de recibir lo que considera que
es amor.

El codependiente.

Se trata de un ciclo, tipificado por tres fases. El agresor no se cura por sí solo, debe tener
un tratamiento. Si su pareja permanece junto a él, el ciclo va se repite una y otra vez, cada
vez con más violencia.

PRIMERA FASE: ACUMULACION DE TENSIONES

Dinámica de la violencia intrafamiliar

Esta fase puede durar semanas, días, meses o años.


A medida que la relación progresa, se incrementa la demanda y el stress.

El comportamiento agresivo se incremente, habitualmente más hacia objetos que hacia la


pareja. Por ejemplo, dar portazos, arrojar objetos, romper cosas.

El comportamiento violento es reforzado por el alivio de la tensión luego de la violencia.

La violencia se orienta hacia la pareja y puede registrarse aumento del abuso verbal y/o
físico

La pareja codependiente intenta modificar su comportamiento a fin de evitar la violencia.


Por ejemplo: mantener la casa cada vez más limpia, a los chicos más silenciosos, etc.

Al continuar el abuso la pareja codependiente comienza a sentirse responsable por el


abuso.

El agresor se incrementa su actitud de celos y control sobre lo que está a su alcance: el


tiempo y comportamiento de la su pareja.

El violento trata de aislar a la víctima de su familia y amistades.

SEGUNDA FASE: AGUDIZACION DE LA VIOLENCIA

La necesidad de descargar las tensiones acumuladas, se vuelve apremiante.

El abusador hace una elección acerca de su violencia. Decide tiempo y lugar para el
episodio, hace una elección consciente sobre qué parte del cuerpo golpear y cómo lo va a
hacer.

Como resultado del episodio la tensión y el stress desaparecen. Si hay intervención policial
se muestra calmo y relajado, en tanto que su pareja parece confundida o histérica debido
a la violencia padecida.

TERCERA FASE: LUNA DE MIEL

Sobreviene por un período de calma, arrepentimiento o luna de miel, plagado de


muestras de amor.

Puede suceder que el agresor reconozca parte de la responsabilidad por el episodio


agudo, dándole a la pareja la esperanza de algún cambio en la situación a futuro. Actúan
como si nada hubiera sucedido, prometen buscar ayuda, prometen no volver a hacerlo,
etc.

Si no hay intervención y la relación continúa, hay una gran posibilidad de que la violencia
haga una escalada y su severidad aumente.
A menos que el golpeador reciba ayuda para aprender métodos apropiados para manejar
su stress, esta etapa sólo durará un tiempo y el ciclo vuelve a comenzar en su primera
fase, retroalimentándose a sí mismo.

Se trata, sin duda, de un fenómeno complejo, que compete a toda la sociedad, ya que al
darse en el seno familiar, condiciona futuras conductas de las nuevas generaciones que
poblarán nuestro país. Un problema grave, que hoy no esta siendo minimizado, dado que
en el país y en nuestro Estado se regula tanto en la materia penal como en la civil, y
existen programas para su prevención y tratamiento en diversas instancias, entre las
cuales cabe destacar al DIF, que a través de la Procuraduría de la Defensa del Menor,
desempeña una importante labor.

Responsabilidad civil por violencia familiar.

Dejando de lado lo que se encuentra previsto en materia penal y de procedimientos


penales, así como en la familiar, establecida también en el Código Civil del Estado de
Tabasco, iré directamente al tema, señalando que el Artículo 2024 del señalado
ordenamiento señala lo siguiente, en relación a la obligación de reparar los daños y
perjuicios:

"El autor de un hecho ilícito debe reparar los daños y perjuicios que con tal hecho cause a
otra persona, a menos que demuestre que el daño o el perjuicio se produjo como
consecuencia de culpa o negligencia inexcusable de la víctima. Esta responsabilidad puede
ser a cargo de una persona que no sea la autora del hecho ilícito, en los casos en que así lo
disponga la ley."

"Los integrantes de la familia que resulten responsables de violencia familiar, deberán


reparar los daños y perjuicios que ocasionen con dicha conducta, con autonomía de otro
tipo de sanciones que éste y otros ordenamientos legales establezcan".

Es en este segundo párrafo en el que encontramos responsabilidad civil por violencia


intrafamiliar, reputándose como la obligación de reparar los daños y perjuicios,
ocasionados por la conducta culposa, sin menoscabo de que se puedan aplicar otras
sanciones al agente agresor en contra de los agentes receptores de la violencia.

Sin embargo, del mismo modo que en todo lo referente a la materia de responsabilidad
civil, la valoración para que proceda la indemnización se relacionará únicamente a los tres
elementos tan largamente discutidos en clase:

EL HECHO

EL DAÑO Y

LA RELACION CAUSAL ENTRE AMBOS


El patrimonio de familia, concepto, características, ubicación, formas de
constitución y extinción
El concepto de patrimonio de familia no significa que exista un patrimonio distinto de los
de sus miembros, como si la propia familia constituyera una persona moral. El patrimonio
de la familia, como lo llama nuestro Código Civil, debe entenderse como el conjunto de
bienes afecto a un fin, que pertenece a algún miembro de la familia a la que beneficia y,
en ocasiones, a un tercero.

Para la constitución del patrimonio familiar sólo pueden ser afectados: La casa habitación
en que viva el grupo familiar y, en algunos casos tratándose de bienes rústicos, una
parcela cultivable, cuyo valor estará limitado a 3 650 veces el salario mínimo diario para el
D.F. Ahora bien, la constitución del patrimonio de familia no transmite la propiedad de los
bienes a los miembros de ésta, ya que el que lo constituye conserva su propiedad; los
miembros de su familia sólo tienen derecho al usufructo de los bienes afectados, por lo
tanto, únicamente tienen derecho al uso de la casa y a disponer de los frutos.

Esta institución, creada con el fin de dar protección a los miembros de una familia, tiene
una característica dominante: 1. El patrimonio familiar no puede ser vendido ni gravado
por su propietario, ni puede ser embargado por sus acreedores mientras esté afecto al fin
para el que se constituye, que es el de garantizar la habitación y alimentos a los
acreedores alimentarios. 2. De aquí que sólo tengan derecho a usufructuar el patrimonio
familiar: a) El cónyuge del que constituye el patrimonio; y b) Los que tengan derecho a
alimento

Para constituir el patrimonio familiar se requiere de declaración judicial, a fin de que ésta
sea inscrita en el Registro Público de la Propiedad y surta efectos ante terceros; para ello,
deben probarse ante el juez: 1. La existencia de la familia; 2. La propiedad de los bienes; 3.
El valor de los bienes dentro del límite permitido; 4. La capacidad del constituyente para
disponer de sus bienes. Toda vez que los bienes del patrimonio de la familia salen de la
circulación, éste no puede formarse en fraude de acreedores. Por otra parte, cuando los
bienes del patrimonio familiar provienen de terrenos que el gobierno ha destinado para su
constitución, ésta se hace por la vía administrativa y la resolución correspondiente
también se inscribe en el Registro Público de la Propiedad y del Comercio.

La ampliación y disminución del patrimonio de la familia están directamente vinculadas al


valor de los bienes que lo constituyen; así, cuando el mismo disminuye del valor máximo
legalmente establecido, el patrimonio puede ser ampliado previa aprobación judicial, y
puede ser reducido cuando el citado valor haya aumentado en más de cien por ciento del
máximo autorizado, o bien cuando la disminución resulte benéfica para la familia.

Por lo que hace a la extinción del patrimonio familiar, ésta procede cuando: 1. Cesa la
necesidad de los miembros de la familia; 2. Dejan de habitar la casa por más de un año o
cultivar la parcela por más de dos años; 3. Exista necesidad o notoria utilidad en su
desaparición; 4. Los bienes sean expropiados. En todos los casos de aumento, disminución
y extinción del patrimonio de familia debe darse intervención al Ministerio Público y
decretarse por la autoridad judicial.

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