Académique Documents
Professionnel Documents
Culture Documents
Selección del terreno: El terreno debe ser preferiblemente plano u ondulado, pero
con pendiente no mayor al 5% (Swing Torres, 2012). Además, debe estar ubicado
cerca de una fuente de agua (el terreno es más fértil) para también facilitar la
construcción de la infraestructura de riego y drenaje (Foro Mundial Bananero,
2017).
Los drenes son importantes en el sistema de riego, ya que, permiten el desalojo del
exceso de agua de riego de la parcela del cultivo. Estos drenes pueden ser
superficiales o profundos, de acuerdo con las necesidades del terreno. Un buen
sistema de drenaje aumenta la producción y reduce la incidencia de plagas y
enfermedades (Swing Torres, 2012).
Los cormos para utilizar como “semilla” no deben presentar galerías ni áreas
necrosadas, ya que pueden provenir del ataque de nematodos y/o bacteriosis. Los
cormos seleccionados, deben de pelarse y desinfectarse antes de sembrarse en
campo definitivo (Swing Torres, 2012). Se puede desinfectar sumergiendo los
cormos durante tres minutos en una solución con 5 ml de cloro por litro de agua.
Alternativamente, se puede remojar el cormo en agua caliente a una temperatura
entre 50° y 55°C por 20 minutos (Foro Mundial Bananero, 2017).
Los hijuelos muy grandes o los que se transportan a grandes distancias se cortan a la
altura de 5 a 10 cm arriba del cuello, para que las sustancias líquidas drenen y se
evite su pudrición. Se clasifican los hijuelos por tamaño, y en el momento de la
siembra se ubican de mayor a menor tamaño y grosor dentro del campo. Las
semillas más grandes tendrán un período de cosecha más corto (Foro Mundial
Bananero, 2017).
6. Limpieza y lavado de hijuelos: A los hijuelos o cormos se les remueve los restos de
tierra con abundante agua y con un cuchillo se eliminan las raíces, partes del cormo
que se encuentren afectadas por daños causados por picudo o microorganismos,
además de cortar la porción aérea.
7. Siembra: Compactar el suelo evita la pudrición, evitando que queden espacios libres
que faciliten el encharcamiento del agua.
El riego se realiza cada 15 días en verano y cada 20, en invierno. Además, el control
de maleza se realiza de forma manual sin uso de productos (Foro Mundial Bananero,
2017).
Tabla 1. Labores realizadas después de la siembra
Referencias:
Torres Swing (2012). Guía práctica para el manejo del banano orgánico en el Valle
Chira. Piura, Perú.