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Revista Espacio ECP, 2020, Vol.

1, N°1, 90-96 ISSN: 2452-5383 (en línea)

LA FILOSOFÍA PRÁCTICA DE SPINOZA Y EL


PARADIGMA CENTRADO EN LA PERSONA
THE SPINOZA PRACTICAL PHILOSOPHY AND THE
PERSON-CENTERED PARADIGM
Claudio Rud & Viviana Rey
Asociación Casa Abierta, Buenos Aires, Argentina

“En un universo cuyo centro está en todas partes y su circunferencia en ninguna”


Blas Pascal (1669)

Resumen
Queremos compartir en esta presentación, cómo la filosofía practica de Baruch Spinoza, con su visión
ética, inmanente y no dualista del mundo, aporta un soporte epistemológico que da coherencia, claridad y
eficacia a nuestro modo de estar y de trabajar en las relaciones de ayuda. Vamos a presentar a grandes
rasgos la filosofía de Spinoza y sus conceptos fundamentales, en relación con las ideas más importantes del
Acercamiento Centrado en la Persona, que inciden más directamente en nuestra tarea psicoterapéutica.
Comenzaremos por un primer concepto, que, de alguna manera, nos va a permitir comprender todo lo
demás.

Palabras claves: Spinoza, Rogers, enfoque centrado en la persona, psicología humanista, filosofía.

Abstract
We want to share in this presentation, how the practical philosophy of Baruch Spinoza, with its ethical,
immanent and non-dualistic vision of the world, provides an epistemological support that gives coherence,
clarity and effectiveness to our way of being and working in helping relationships.
We will present in broad strokes the philosophy of Spinoza and its fundamental concepts, in relation to the
most important ideas of the Person-Centered Approach, which have a more direct impact on our
psychotherapeutic task. We will start with a first concept, which, in some way, will allow us to understand
everything else.

Keywords: Spinoza, Rogers, person-centered approach, humanistic psychology, philosophy.

* Correspondencia a Buenos Aires, Argentina. Correo electrónico:


claudio@casabierta.com ; reyvivi@casabierta.com
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INTRODUCCIÓN Inmanencia es uno de esos conceptos que tienen


Como profesionales, estamos comprometidos la característica de parecer inocuos y de resultar,
con el Enfoque Centrado en la Persona, al que ya luego de un análisis, claves para abordar la
hace años preferimos llamar Acercamiento concepción política, social, religiosa de un autor.
Centrado en la Persona (ACP), con un lenguaje En principio se trata de un concepto que alude a
propio, nacido de la experiencia y del aporte de un proceso que es por completo interno a algo,
otros autores congruentes con esta mirada del que tiene lugar por la simple relación entre sus
mundo y de la vida. componentes. De modo que, para explicar lo que
Hemos elegido un orden particular en la allí sucede, no hace falta recurrir a nada exterior,
exposición de los conceptos, pero nos damos cuenta ya que nada exterior o trascendente lo afecta.
que en cada paso, está el todo, cada concepto está Pero tan importante como lo que encierra el
íntimamente relacionado con todo. Como en la concepto es lo que excluye. Porque inmanencia
esfera de Pascal o el Aleph borgiano cada concepto se opone a trascendencia. Cuando un proceso
contiene a todos los otros y cada uno de los otros tiene lugar de modo inmanente, invalida
permite acceder a una praxis que los contiene. cualquier tipo de intervención externa. Un
Podríamos probar diferentes recorridos, empezar proceso inmanente es, ante todo, autosuficiente.
por otro lado, relacionarlos de diferentes maneras; (Gustavo, 2008, p. 83).
comenzar con un ejemplo de la práctica y desde allí, Cada uno de esos componentes, (todas las cosas
acceder a los conceptos más fundantes desde el y el hombre incluido) es expresión de ese todo, que
punto de vista lógico. O bien comenzar por la no es una totalidad indiferenciada. Su potencia es la
noción de sustancia única e inmanencia para luego de expresar la infinita diversidad a través de los
acceder al entendimiento de aquello que distintos modos singulares. Entonces, no hay nada
entendemos como acontecimiento. Hoy elegimos que esté por fuera de ese todo, en otro plano u otro
este último, pensando didácticamente en facilitar la orden.
comprensión y en la utilidad de lo que queremos Spinoza (1977) define el todo, como un universo
exponer. absolutamente interconectado, único y actual. Lo
nombra como “sustancia única”, sinónimo de Dios
INMANENCIA o Naturaleza. De esta manera se aleja nítidamente
Inmanencia en su etimología, (RAE) se refiere a del dualismo cartesiano, (que reconoce dos
permanecer dentro (del término latino “immanens”: sustancias separadas: (res cogitan y res extensa) que
el prefijo “im- “, “hacia el interior”, y el verbo aún hoy día está presente con consecuencias en el
“manere”, que es sinónimo de “quedarse o pensamiento científico y en nuestra vida cotidiana.
permanecer”). Nombra un proceso causal, en donde El hombre pertenece a ese mismo orden
el efecto permanece dentro de la causa. En este inmanente; ya no se trata de pensar al hombre como
sentido, se opone a trascendencia, en donde la causa un imperio dentro de otro imperio, con un lugar
queda por fuera del efecto. privilegiado en el cosmos, sino de considerarlo
Spinoza, (1977) toma este tipo de causalidad, de como un modo más entre los diferentes modos en
una manera radical: Todo lo que existe es una única que la sustancia única se expresa.
sustancia, una totalidad inmanente. La causa de Ya no podemos concebirnos como
todo lo que existe permanece en el efecto. Esa individualidades, sino como expresión de
totalidad, existe por la propia necesidad de su relaciones, nudos de una trama mayor. De esta
naturaleza, no por una causa exterior. Spinoza manera cae, otro de los dualismos, consecuencia del
nombra este proceso causal como causa sui. pensamiento dicotómico: la idea de que el otro y yo,
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somos individualidades separadas. Desde la diferentes modos de manifestación de la


inmanencia, comprendemos como el otro y yo multiplicidad, de formas y transformas de la
somos expresiones diferentes de la misma sustancia singularidad, nada queda fuera de lo que llamamos
y esa diferencia no implica separación, sino más “encuentro”. Todo lo que suceda será parte de la
bien inevitable mutua implicación y mutua potencia compartida y la presencia, ya que todo
potencia. pertenece y es expresión de esa “tendencia a
“Lejos en la casa divina del gran Dios Indra perseverar en el ser”, con la que definimos el
cuelga una red maravillosa que se estira conatus.
infinitamente en todas direcciones. En cada nodo Ya veremos como la comprensión y el
cuelga una joya resplandeciente. Gracias a que la entendimiento de este orden inmanente, al que el
red es infinitamente grande, el número de joyas hombre pertenece, tiene profundas implicancias en
es infinito. En cada joya podemos ver las nuestra tarea como terapeutas centrados en la
imágenes reflejadas de todas las otras joyas. persona y nos permite resignificar los términos de
Cada joya contiene no solamente la imagen nuestra práctica, y entonces hablamos de ser en
reflejada de todas las otras joyas, sino también de relación, de singularidades, de devenir, de
sí misma reflejada en todas las otras joyas y así acontecimiento, de transformación, de potencia
ad-infinutum. El reflejo de cada joya es lo que la compartida y de “aquí y ahora todo”.
hace una joya, sin él no existiría. Cada joya es
parte de todas las otras joyas y contiene todas las SOMOS RELACIÓN
otras. Cuando alguna joya es tocada, todas las Toda práctica psicoterapéutica lleva consigo,
otras joyas se ven afectadas”1. explícita o implícitamente, una noción de hombre.
La filosofía práctica de Spinoza, es una filosofía Nosotros comprendemos al hombre, como una
afirmativa; no es posible en ella entender lo que expresión más de la interconexión de este universo
ocurre desde la negación. Un concepto que nos inmanente. Cada hombre en su singularidad es
ayuda a comprender esto es el de conatus: la expresión de una trama de relaciones. Con una
tendencia de todo lo que existe, a perseverar siendo. compleja capacidad de afectar y ser afectados. Al
Otro dualismo cae: la idea de dos fuerzas creando lo estar mutuamente constituidos, ya no podemos
viviente (eros/tanatos). Desde este punto de vista, concebirnos como sujetos aislados. Nuestra esencia
hay una sola fuerza expresiva, que es afirmativa. La (aquello sin lo cual no somos) se define en esa
muerte, la destrucción, la comprenderemos como mutua constitución, con lo cual nuestra esencia
parte de la interacción de todo, pero ya no como ua implica necesariamente, la presencia del otro, y de
fuerza intrínseca. Lo que existe, tiende a existir y la totalidad.
busca aquello que lo afirme en esa acción. La vida El universo todo es un sujeto compuesto. Donde
tiende a vivir y utiliza todos sus recursos para decimos hay entonces, estamos hablando de
permanecer en esa dirección, que es la de su propia encuentros. En rigor todo lo que ocurre está
afirmación, dentro de la trama total. Entonces, si constituido por encuentros, que son la
todo lo que existe es afirmación, cada existente manifestación de todo lo que hay. Somos un rosario
ocupa un lugar afirmativo y expresivo dentro del de afecciones, vivimos tocando y siendo tocados
acontecer inmanente. por infinidad de contactos, algunos agradables,
Un ejemplo de ese acontecer podría ser, cuando otros desagradables, otros nos resultan indiferentes.
recibimos a una persona en consulta: suceden ahí, Lo que nos resultará agradable no está normatizado
a priori, ni por una ley general ni por una
1
La metáfora de la red de Indra se desarrolló en las escrituras Avatamsaka
sutra de la escuela majaiana (en el siglo tercero) y posteriormente en la experiencia anterior, (nadie sabe de qué es capaz un
escuela china Huayan (entre el siglo sexto y octavo).
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cuerpo). La idea de Inmanencia, como vimos, mismo que cuando estamos frente a nuestra botella,
excluye cualquier referencia a un orden ajeno al nos relacionamos con la imagen recortada, la
acontecimiento. incluimos en cadenas asociativas, y consideramos
Somos constitucionalmente seres afectivos. Es que es un otro absolutamente separado.
por esto que Spinoza (1977) dedica el tercer libro de El conocimiento adecuado, siempre incluye o
su Ética a la descripción minuciosa de todos los “inserta” la cosa en la totalidad, comprendemos
afectos humanos, no para juzgarlos o criticarlos sino entonces que las personas somos también parte de
para conocerlos y comprenderlos adecuadamente. una red, de una trama, que somos tejido, plexo,
Demuestra cómo los hombres somos también complexo, relaciones constitutivas siempre
modos en los que se expresa el todo. El hombre es cambiantes. Nudos de una red en transformación
expresión de dos de los infinitos atributos, extensión que se anuda y desanuda en forma incesante. Cada
(todo lo que entendemos por lo material) y nudo se constituye como singularidad en relación,
pensamiento (todo lo que entendemos como el que desaparece como tal en el tiempo reingresando
mundo de las ideas). Esos atributos son algunos de a una nueva relación constitutiva y así al infinito.
los infinitos caminos de expresión de la naturaleza y Al estar frente a otro entonces, comprendemos
en el hombre, configuran la experiencia total e que aquello que definimos como identidad, en rigor
integra. Los contactos ocurren en esa experiencia es una estructura móvil, siempre cambiante, que
total del organismo. ocurre en cada encuentro. A esto nos referimos
Tomemos como ejemplo una botella, si la vemos cuando decimos que la relación funda sus términos.
desde su extensión, es una cierta organización Cada individuo singular es un nudo de relaciones y
estable de partículas en movimiento y reposo que se cada relación es un nudo de individuos singulares.
relacionan o encuentran con mi cuerpo (que Es a partir de la trama, que cada acontecimiento
también es una organización estable de partículas en va definiendo quien soy y cada relación
movimiento y reposo) de una manera en particular. establece nuevas identidades. Uno no es
A esa relación e interacción corporal, le idéntico a sí mismo, nuestra identidad se
corresponde una idea de la botella en el atributo configura a partir de relaciones y eso es siempre
pensamiento. Entonces también me relaciono con la cambiante. También somos parte de una
imagen de la botella. complejidad mayor que es el universo, es por
Ninguna cosa vista desde esta perspectiva puede eso que la perspectiva del encuentro como
pensarse aislada o recortada. El recorte es una tarea modo de considerar el encuentro terapéutico
de la imaginación (que es uno de los géneros de implica necesariamente revisar la noción de
conocimiento que nombra Spinoza, el primero). identidad (Rud, 2008).
Tendemos a imaginar que es posible lo individual,
existiendo separado de su entorno. Siguiendo con PODER Y POTENCIA
nuestro ejemplo de la botella, desde la imaginación Todo lo que podemos está determinado
creemos que existe una botella, separada de todo lo causalmente, o sea depende, de la complejidad de
demás, y tendemos a crear cadenas asociativas de relaciones de las que formamos parte en el
ideas, que nos llevan a un conocimiento confuso y momento presente. Esa potencia expresada, es
parcial. Cuando conocemos adecuadamente, según nuestra singularidad.
Spinoza (1677), comprendemos las cosas en Esa potencia expresada, como dijimos antes, es
términos de encuentro, entre los diferentes modos lo que Spinoza llama conatus: la fuerza con la que
de expresión o singularidades y sus relaciones. cada existente tiende a perseverar en el ser.
Cuando estamos frente a una persona, pasa lo Hablamos de una única fuerza, la de existir, la que
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nos conforma esencialmente y cada existente es ampliando la comprensión de la identidad y


expresión de esa potencia. El poder personal entenderla como un fenómeno no preexistente que
entonces, es una fuerza presente, no direccional, (no se constituye en cada encuentro, como multiplicidad
tiende a la realización de una esencia, ya que dicha móvil, y por lo tanto siendo siempre circunstancial.
fuerza es la esencia misma), expresándose (expresa Que el “Otro” no sea nadie propiamente
todo lo que puede en acto). Ser consiente o conocer hablando, ni usted ni yo, significa que es una
adecuadamente esa fuerza, que siempre es en estructura que se encuentra solamente efectuada
relación, implica ligarla al contexto de relaciones en por medio de términos variables en los diferentes
las que se configura. mundos perceptivos – yo para usted en el suyo,
Desde la filosofía de la inmanencia, la esencia es usted para mí en el mío. No basta siquiera con
la potencia, y la potencia es todo lo que puedo aquí ver en otro una estructura particular o específica
y ahora, en acto. Esa potencia siempre está del mundo perceptivo en general; de hecho, es
plenamente expresada, y su aumento o disminución una estructura que funda y asegura todo el
dependen del tipo de relación que establezco con funcionamiento del mundo en su conjunto. Y es
todas las fuerzas expresivas presentes en el entorno. que las nociones necesarias para la descripción
Esta manera de entender el poder en la relación, del mundo (...) permanecerán vacías e
como potencia expresiva, coloca al terapeuta en un inaplicables, si el “Otro” no estuviera ahí,
lugar de profunda implicación y compromiso en el expresando mundos posibles (Larrosa, 2003).
encuentro. Más que mantenernos a distancia, nos
percibimos partícipes y cooperadores de ese IMPLICANCIAS EN LA RELACIÓN
movimiento de transformación que ese presente TERAPÉUTICA
vivo trae. El encuentro terapéutico es una Querríamos desarrollar ahora, la articulación de
experiencia viva, transformándose. Y nuestro poder algunos de los conceptos que describimos, con el
reside en disponer nuestra potencia a asistir a lo que paradigma centrado en la persona, especialmente
hay. vinculado a la relación terapéutica. Acercarnos a lo
comprensión de esa mirada recíproca, es una toma
RECIPROCIDAD RADICAL de posición frente a la realidad y a la práctica,
Como dijimos, es la relación la que funda los donde la transformación es posible, desde la mutua
términos, la que permite la expresión de los implicación.
mismos. En este sentido, hay ya allí una Cuando estamos frente a otro en el consultorio,
reciprocidad fundante en tanto que la relación, al igual que lo que explicábamos antes, hay en el
distribuye recíprocamente una identidad encuentro una mutualidad radical, reciproca,
circunstancial a cada uno de los participantes del inevitable, la inter-subjetividad, la inter-
encuentro. Es decir que el contacto al menos entre corporeidad, son originarias. Estamos allí, siendo
dos, desnudo de toda atribución a alguna de las otros frente a un otro, constituyéndonos
partes, librado de toda significación, eximido de mutuamente en ese presente de la relación,
toda finalidad, es profundamente igualitario. Esto es expresando un orden inmanente. Toda nuestra
la reciprocidad radical a la que nos referimos. potencia esta expresada allí, en comunión con la
Soy el que se constituye en la plenitud del potencia del otro.
encuentro con el otro que a su vez también se Dijimos que todo lo que existe, incluido el
constituye ahí. Esa reciprocidad constitutiva que es hombre, es esencialmente lo que puede, y eso que
originaria, funda lo que nombramos como puede, está plenamente expresado en el aquí y ahora
identidad. Desde este punto de vista seguimos del encuentro. Se nos hace necesario entonces,
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revisar la noción de tendencia actualizante (Rogers, Aceptar lo que el cliente sea en un momento
1979). Comprendemos el conatus, como tendencia dado, aumenta la probabilidad de que el cambio
formativa de todo lo que hay; si todo está terapéutico ocurra. El terapeuta está abierto a que el
expresado, no hay nada en estado potencial, ya no consultante sea lo que sus sentimientos inmediatos
esperamos que se actualicen potencialidades, sino le dicten. Con lo cual no hay nada que cambiar,
que entendemos que la tendencia actualizante es la modificar, reparar; el consultante está siendo todo lo
tendencia a actualizar la potencia, de acuerdo a que puede ser de manera afirmativa. Y eso es lo que
aquello que nos es de utilidad, que siempre es aceptamos, su potencia aquí y ahora y eso es lo que
tender a relaciones que aumenten nuestra plena comunicamos, lo que afirma; aun lo que no puede o
expresión. La transforma, es esa actualización de cree que tendría que poder es una afirmación de su
nuestra potencia (Larrosa, 2003). momento actual. Todo afirma, tanto la confusión
Carl Rogers (1979), explora la relación como la claridad, la abundancia como la carencia, la
terapéutica y, considera las actitudes del terapeuta alegría como la tristeza. La confianza en la
como facilitadoras de un encuentro humano tendencia actualizante, desde esta perspectiva, es la
transformador en donde el contacto es la primera confianza en que lo que está ocurriendo es perfecto,
condición. Nosotros entendemos que, en toda ya que todo está expresado. No es la confianza en lo
relación, el contacto es inevitable, y comenzamos el que podrá sino en lo que puede, y en lo que
encuentro llevando la conciencia a esa mutua podemos ahí en ese encuentro íntimo y
afectación (contacto). Experimentamos que las transformador. Y la aceptación incondicional, se
actitudes básicas son expresión de una sola actitud, desprende naturalmente del entendimiento de la
que es más bien una disposición, a la que “necesariedad” de todo lo que ocurre.
nombramos como presencia terapéutica. Como todo Cuando habitamos plenamente el momento
lo que ocurre está mutuamente constituido, dicha presente, la transformación ocurre “naturalmente”,
presencia, no es algo que ofrece el terapeuta, sino la noción de sí mismo se acerca cada vez más a la
que es un acontecimiento dentro de esa mutua experiencia personal, en constante transformación;
implicación, dentro de esa trama expresiva que es el somos la experiencia, aquello que nos pasa, que nos
encuentro terapéutico. Por lo tanto, no estamos sucede, que nos atraviesa.
hablando de dos presencias que se suman sino de
una única que se expresa. DARSE A CONOCER
La aceptación “positiva” incondicional, es para El éxito en la psicoterapia es facilitar el darse a
nosotros la aceptación del proceso de ir siendo con conocer, tanto del consultante como del terapeuta.
todo lo que existe en el aquí y ahora. La vida misma Darse a conocer tiene para nosotros dos sentidos,
es un proceso afirmativo que supera la antinomia uno que pone el acento en el conocer, es el
implícita entre negativo y positivo. No se trata ofrecernos a esa relación, abiertos y dispuestos a
entonces de una aceptación “moral” como una conocer lo que ocurre. El otro sentido, centrados en
especie de deber, sino de una aceptación que es un el darse, es para nosotros el modo en que se expresa
sí al recién llegado que es el otro y que soy yo la congruencia o transparencia, otra de las actitudes
constituyéndome ahí, de donde nacerá un lenguaje que describe Rogers (1979) como facilitadoras. El
común de expresión única. terapeuta es “eficaz” cuando es su experiencia en el
Todo lo que experimentamos en el encuentro encuentro, y la ofrece al servicio de quien consulta.
terapéutico es afirmativo de la potencia de existir, Nuestra ética se alinea en el estar al servicio,
que, desde el punto de vista inmanente, siempre esta ofreciendo nuestra experiencia presente, atentos a
expresada en su totalidad. que sea al servicio de la expresión y del cuidado del
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otro. Se nos hace necesario aquí aclarar que, dentro referimos al nombrar el suceso terapéutico: cuando
de esa línea ética, consideramos que todo terapeuta la presencia "aparece", como expresión del entre y
del ACP, debe apoyarse en como mínimo tres ejes todos los que participamos del encuentro, sentimos
que son, la formación permanente, el propio trabajo y experimentamos el aumento de nuestra potencia
personal, y el trabajo de co-visión de la tarea. de existir, una mayor lucidez, contacto y bienestar.
Creemos que esos tres ejes garantizan el cuidado de Es en los encuentros, y en la comprensión de los
la experiencia de darse a conocer en la entrevista. mismos como potencia de lo común, que podemos
Desde esta mirada es otra la relación de poder acceder la ética, y a la propuesta política de
que se establece, no existe para el terapeuta la Spinoza, que para nosotros incluye además de
exigencia de producir una respuesta, que es un nuestra tarea específica, un modo de estar en la
mandato que impone la lógica médica que supone vida.
que debemos “curar” a quien nos consulta. Es
autorizarse a estar presente, más que forzarse a COMENTARIOS FINALES
hacer. Nuestra tarea entonces, es acompañar a quien Para nosotros esta comunicación, más allá de ser
nos consulta, con el rigor que implica estar un texto es un pretexto que nos permite “darnos a
presentes en ese acontecimiento con toda nuestra conocer” en nuestras búsquedas, intentando
potencia y contemplando activamente, sin mandatos recuperar conceptualmente lo que experimentamos
ajenos a la constitución de ese particular y único a diario en la consulta, ofreciendo una coherencia
encuentro. Con la certeza en que, como decíamos, conceptual a nuestras integraciones desde la
allí reside nuestra eficacia como terapeutas filosofía. Creemos que compartir el aporte de todos,
“La experiencia, la posibilidad de que algo nos es el modo de mantener vivo, el paradigma centrado
pase, o nos acontezca, o nos llegue, requiere un en la persona.
gesto de interrupción, un gesto que es casi
imposible en los tiempos que corren: requiere REFERENCIAS
pararse a pensar, pararse a mirar, pararse a Deleuze, G. (1988). Diferencia y repetición.
escuchar, pensar más despacio, mirar más despacio Barcelona: Júcar Universidad
y escuchar más despacio, pararse a sentir, sentir más Deleuze, G. (2008). En medio de Spinoza. Buenos
despacio, demorarse en los detalles, suspender el Aires: Cactus
automatismo de la acción, cultivar la atención y la Larrosa, J. (2003). Entre las lenguas. Lenguaje y
delicadeza, abrir los ojos y los oídos, charlar sobre educación después de Babel. Barcelona:
lo que nos pasa, aprender la lentitud, escuchar a los Laertes
demás, cultivar el arte del encuentro, callar mucho, Rogers, C. (1977). El poder de la persona. México
tener paciencia, darse tiempo y espacio” (Larrosa, D. F.: Manual Moderno.
2003). Rogers, C. (1977). El proceso de Convertirse en
Habitar la experiencia de ir siendo, nos lleva Persona. Barcelona: Paidós Ibérica.
nuevamente, como de la mano a comprender que Rud, C. (2008). Entre metáforas y caos. Buenos
somos en relación y a esa comprensión Spinoza, la Aires: Nueva generación.
llama noción común (idea adecuada) que implica un Santiago, G. (2008). Intensidades filosóficas.
aumento de la potencia personal de cada uno de los Buenos Aires: Paídos.
que participamos de la relación.
Cuando conocemos mejor, comprendemos y de
esta manera aumenta nuestra potencia de actuar,
nuestra potencia de existir. A esta experiencia nos

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