Académique Documents
Professionnel Documents
Culture Documents
La primera pregunta que Dios le hizo al hombre está en Génesis 3:9 y fue ¿En dónde estás?.
Obviamente Dios que sabe todo, no estaba preguntando porque no supiera, sino para que el
hombre obtuviera ubicación. Ésta es una pregunta que prevalece hasta nuestros días y como un
eco aún oímos
¿y tú en dónde estás?
¿cuál es tu ubicación?.
Sabemos que ninguno de nosotros tenemos la capacidad de decidir en que lugar vamos a nacer,
pero sí tenemos la opción de escoger el lugar en donde vamos a vivir y en una medida mas
limitada también en donde podríamos morir.
Las razones por las que escogemos donde vivir varían mucho y van desde lo razonable y práctico,
hasta aquello que no lo es y que a veces cae en lo egoísta.
Vemos en Apocalipsis 2:13 que hay un ministro que mora en donde tiene su trono Satanás; la
pregunta inmediata es:
Porqué está viviendo ahí?
Tenemos abundancia de textos en donde Dios guía a sus hijos para ir a donde vivir, vemos a Elías
enviado al arroyo de Querit y si él no hubiera hecho caso los cuervos jamás le habrían alimentado,
pero de la misma manera también vemos a Abram (sin la H todavía) que descendió a Egipto sin
orden divina, y a Lot yéndose a Sodoma sin la guianza y a Elimelec llevándose a Nohemi y sus hijos
hacia Moab sin que Dios se lo hubiera dicho, casi todos se movieron por hambre o alguna
necesidad razonable, pero sin guianza, con excepción de los descritos en el principio.
La ubicación correcta no viene por nuestras necesidades o deseos sino por la guianza que Dios
provee por medio de su Santo Espíritu, hoy te invito a que tomes en cuenta el famoso pasaje de
Jeremías
“Paraos por los caminos, y mirad, y preguntad por las sendas antiguas, cuál sea el buen camino, y
andad por él, y hallaréis descanso para vuestra alma”.
Si estás en la ubicación correcta siempre tendrás paz.
Bendiciones.