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LA NEUROCIENCIA EN EL APRENDIZAJE DEL NIÑO

¿Qué es la neurociencia?
La neurociencia es el conjunto de disciplinas científicas que
estudian el sistema nervioso, con el fin de acercarse a la
comprensión de los mecanismos que regulan el control de las
reacciones nerviosas y del comportamiento del cerebro.
Existen múltiples disciplinas como la neuroanatomía,
neurofisiología, neurofarmacología, neuroquímica… etc. Es por
ello que la neurociencia debe ser estudiada de manera
integrada y complementaria con el fin de comprender la
complejidad del cerebro.

Aprendizaje y Neurociencia

El aprendizaje es la capacidad que tiene nuestro cerebro de adaptación


a los requerimientos ambientales y a los cambios. Nuestro cerebro se
desarrolla desde que nacemos hasta que morimos, en todas las etapas
de nuestra vida es posible modificarlo y cambiarlo, las experiencias de
la vida le van moldeando, pero el momento de mayor plasticidad y donde
se producen los mayores y más rápidos cambios es en la infancia. Las
experiencias que vivimos en nuestra niñez tienen un impacto decisivo en
la “arquitectura” de nuestro cerebro. El cerebro de un niño/a de 3 años
es dos veces más activo que el cerebro de un adulto con una elevada
actividad intelectual. Por eso es fundamental ayudar a los niños/as en su
desarrollo cerebral para que optimicen todas sus posibilidades a través
del juego y del respeto a su identidad. La maduración neurológica es
diferente en cada niño/a, hay que respetar sus ritmos de maduración
para ayudarles a desarrollarse y crecer con seguridad en sí mismos. En
la edad adulta nuestro cerebro también cambia, tal y como lo usemos así
se irá configurando; En el caso de las personas de más edad se puede
retrasar el envejecimiento del cerebro manteniéndolo activo. A través
del neuroaprendizaje se puede optimizar el funcionamiento del cerebro
para potenciar los procesos que intervienen en el aprendizaje: atención,
memoria, lenguaje, lectura, escritura, razonamiento y emociones

APORTACIONES DEL NEUROAPRENDIZAJE Y LA NEUROEDUCACION  

Las investigaciones sobre el funcionamiento de la mente en los procesos de aprendizaje


nos demuestran lo siguiente:

• El aprendizaje va acompañado primero


de una maduración de las estructuras
mentales que lo sustentan. Por eso
debemos respetar los ritmos de
desarrollo.

• El aprendizaje consiste en el
establecimiento de redes neuronales,
para que se produzca un aprendizaje
tenemos que crear la red pertinente. La
manera de crear esa red es utilizando el mismo camino hasta asentarlo. Para ello
debemos relacionar contenidos, reforzar conocimientos, llegar a las mismas conclusiones
(usando los mismos caminos neuronales), utilizando diferentes alternativas de
pensamiento

• Las emociones positivas potencian el aprendizaje y la motivación. Cuando una persona


tiene emociones positivas relacionadas con algo que hace, tenderá a repetir eso para
tener de nuevo las sensaciones positivas.

• Para que se produzca el aprendizaje, es fundamental que estén cubiertas otras


necesidades básicas. Si un niño o niña tiene hambre o sueño, o tiene un problema con
otros niños o niñas, tendrá más dificultades para aprender, ya que su mente, sus
pensamientos irán destinados a satisfacer esas necesidades previas
. • Para aprender tienen que querer aprender. Para que la mente aprenda, hace falta
cierta voluntad hacía esa tarea mental. Y para ello debemos despertar su interés, su
curiosidad y sus ganas de aprender. (Pedagoga, 2016) La Neuropsicología, así como
ocurrió con la psicología científica, tiene su origen en los trabajos médicos de los siglos
XIX y XX. La especialidad médica neurológica es una de las disciplinas que más ha
contribuido al desarrollo autónomo de la neuropsicología, dado que a partir de la
observación de las distintas patologías causadas por daño cerebral se empezó a
comprender mucho mejor la conducta humana. Según Arthur Benton en 1971 en su libro
Introducción a la Neuropsicología sistematiza su contenido como “neurología de la
conducta”. La neuropsicología se sitúa en el cruce que componen las neurociencias
(estudio del sistema nervioso desde un enfoque multidisciplinar) por un lado y la
Psicología por el otro; es un enfoque modélico que intenta explicar la base material y
funcional sobre los que se asientan los fenómenos “normales” y patológicos de la mente
humana. Esta disciplina, en plena construcción, sugiere una forma de intersección entre
las neurociencias y las ciencias de la educación; en la actualidad esta relación se
encuentra en sus comienzos. Algunas de las investigaciones más promisorias de la
Neuroeducación se están realizando en el área de los trastornos específicos del
aprendizaje, ejemplo, discalculia, dislexia, disgrafía, trastornos específicos del desarrollo
del lenguaje (TEDL) entre otros; así también como

El estudio del cerebro del niño inherente a la emoción, placer y experimento que forman
parte del neuroaprendizaje. El actual sistema educativo es anacrónico, escolástico y
retrógrado Los niños se aburren, se enseña de la misma manera desde hace 200 años.
Según Prensky y Robinson expertos en educación e inventores de modelos
neurocognitivos que establecen cambios en los patrones conductuales de los estudiantes
que genere un nuevo modelo de aprehensión del saber. El colegio seguía el mismo
patrón: niños que aprendían de memoria los conocimientos para luego repetirlos como
loros. “Necesitamos maestros que preparen a los niños para afrontar los nuevos retos.
Ellos son capaces de transformar el cerebro de los alumnos, tanto física como
químicamente, de la misma manera que un escultor con su cincel es capaz de crear una
figura tan bella. El neuroeducador Francisco Mora expone que los docentes , de acuerdo
con la neuroeducación, deberían comenzar a aprovechar todo lo que se conoce del
funcionamiento del cerebro humano para enseñar mejor. Y eso no engloba solo
matemáticas, lengua o literatura. “Muchas veces formamos a las personas para que sean
grandes profesionales, pero nos olvidamos de que antes tienen que ser personas. Y eso
también quiere decir aprender a disfrutar de su tiempo libre”, considera David Bueno.
Sabemos que no hay cerebro cognitivo que no haya sido filtrado por el cerebro emocional.
Por tanto, insiste Mora, hay que buscar el significado emocional de lo que se enseña, para
que el alumno piense: Siga contándome eso, profesor, que me interesa mucho. “Los
profesores tienen que ser la joya de la corona de un país, porque sobre sus espaldas
recae una enorme responsabilidad. Tienen que estar muy formados y conseguir que los
niños se sientan realmente entusiasmados por lo que aprenden. Porque esa es la base
para crear no solo ciudadanos cultos, sino también honestos y libres”. La neuroeducación
aconseja que durante los primeros años de vida los infantes estén en contacto con la
naturaleza, fuente inagotable de estímulos, pues a esas edades es cuando se construyen
los perceptos, las formas, los colores, el movimiento, la profundidad, con los que luego se
tejerán los conceptos. “Para construir buenas ideas hay que tener buenos perceptos. Son
los átomos del conocimiento, del pensamiento. No podemos entender la educación si no
tenemos en cuenta cómo funciona el cerebro. La neuroeducación es mirar la evolución
biológica y aprender de ella para aplicarla a nuestros procesos educativos”. En los
actuales programas de educación, la forma en que se intenta enseñar a los adolescentes
está totalmente en contra de los códigos del cerebro. A esta edad comienza la enseñanza
de materias como Biología, Química, Física, que deben aprender de manera racional. Sin
embargo, el cerebro de los adolescentes es plenamente emocional. “Desde un punto de
vista evolutivo tiene sentido porque en esta época de la vida, los chicos buscan sus
propios límites e intentan superarlos. Forma parte de una estrategia de supervivencia de
la propia especie”

Neuroaprendizaje Sus Bases

El neuroaprendizaje se basa en atender dos factores clave en el aprendizaje: El


aprendizaje consciente (explícito) El aprendizaje Meta consciente (implícito).

El Aprendizaje Explícito: El aprendizaje explícito al ser consciente y voluntario es una


decisión individual. En este sentido, para que el proceso de aprendizaje tenga éxito es
requisito fundamental un óptimo nivel de motivación y compromiso de los que participan.
Para eso es necesario implementar una metodología que dé protagonismo al que
aprende, es decir, que lo coloque en el centro del proceso.

El Aprendizaje Implícito: El aprendizaje implícito se manifiesta cuando desarrollamos


distintas actividades sin tener conciencia de haberlas aprendido. Este aprendizaje se va
incorporando mediante un proceso de experiencia y retroalimentación durante el cual
generamos una especie de competencia no consciente.
CONCLUSIONES

 Las neurociencias son multidisciplinarias y estudian el funcionamiento del cerebro y


del sistema nervioso su aporte brinda explicaciones acerca de las actividades del
encéfalo y como estas determinan la conducta, los procesos básicos y superiores de la
mente y el aprendizaje
 El aprendizaje es el resultado de diversas funciones de las redes neuronales, estas se
forman y expanden mediante la activación simultanea de conjuntos neurales
(conectividad y sinapsis). A su vez estas redes permanecen abiertas durante toda la
vida y se incrementan por la recombinación y asociación de experiencias internas y
externas
 La educación es la “fuerza del futuro“, porque ella constituye uno de los instrumentos
más poderosos para realizar el cambio.

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