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ENSAYO

El Objeto: Uso y Función

¿Qué es un objeto? Un objeto tiene muchas definiciones. En algunos casos es


definido vagamente como todo lo que está la vista, lo que puede ser percibido
por el hombre. En otros casos es definido como cualquier cosa que sea
fabricada, es decir que esté formada por materia y transformada por medio de
un proceso de manufactura, bajo ciertas normas. También es definido como un
elemento de consumo o una cosa que le sirve al ser humano para una cosa en
particular. Bajo esta última definición, entendemos al objeto como un elemento
que está dado por la acción que realiza el hombre sobre el y la razón por la
cual y para la cual lo está haciendo.

Ahora bien, la acción que el hombre realiza sobre el objeto se puede definir
como uso, ya que este está vinculado a la utilización de un objeto para alcanzar
una meta1 o un fin. Esta finalidad de uso, a su vez, tiene una connotación
importante en el objeto ya que no es más que su función. Cabe recalcar que un
objeto puede tener más de una finalidad de uso, es decir puede contar con
varias funciones. Estas funciones pueden ser prácticas (las que están
relacionadas con los aspectos fisiológicos del uso), estéticas (el aspecto
psicológico de la percepción sensorial durante el uso) y simbólicas
(determinadas por todos los aspectos espirituales, psíquicos y sociales del
uso). Por medio de estas funciones se crean las relaciones del usuario con el
objeto y se da la oportunidad de satisfacer las necesidades de este usuario e
incluso la posibilidad de suplir deseos.

Estás funciones se ven reflejadas en todos los objetos que se encuentran en la


cotidianidad del ser humano. Estos, por lo general, cumplen una función
práctica que es requerida para la satisfacción de la mayoría de las
necesidades. Sin embargo, existen también ciertos objetos cuya finalidad de
uso principal es meramente estética, están dados únicamente para satisfacer

1
http://definicion.de/definicion-de-uso/
los sentidos de su usuario. De manera menos común, existen los objetos cuya
finalidad es meramente simbólica, pero en este caso el proceso tiene a ser más
complicado ya que cada persona es una mente diferente y, por lo tanto, percibe
al mundo de manera diferente y puede percibir al objeto simbólicamente
diferente. Sin embargo, en la mayoría de los casos, las finalidades vienen
mezcladas y conjugadas en un mismo objeto. De hecho, ya no existe para el
comprador la opción de no elegir y de comprar simplemente el objeto en
función del uso, ya que en la actualidad no existe un objeto que esté
simplemente en función del mismo. Por fuerza, la libertad de elegir que tiene el
hombre lo obliga a entrar en el juego cultural donde priman no sólo las
necesidades sino también los deseos. Un mismo objeto puede tener una
misma finalidad de uso, más sin embargo contener mil características distintas,
que vienen dadas principalmente por la función estética, y por ende incluso
simbólica, que logran una diferenciación presentando ante el usuario una
amplia gama de alternativas con un mismo fin. Es ahí donde el diseñador
industrial tiene la oportunidad de ejercer un rol que genere impacto, haciendo
uso de sus conocimientos sobre el usuario objetivo y de sus capacidades para,
no sólo satisfacer sus necesidades, sino también cumplir sus deseos.
Principalmente, porque por medio de la alteración de la forma el diseñador no
sólo logra hacer más atractivo el objeto para el usuario, sino que además
puede y debe utilizar está función con el propósito de hacer evidente el proceso
de uso mediante el cual el objeto cumplirá con su función práctica, de manera
que consolide la relación que existe entre el objeto y su usuario.

En conclusión, se entiende a la relación entre el objeto, su uso y sus funciones


como cíclica, ya que sólo por medio del proceso de uso se tornan perceptibles
todas las funciones del objeto a su usuario y, asimismo, por medio de ciertas
funciones que le otorgue el diseñador al objeto es que se va a hacer evidente
para el usuario cómo debe ser este proceso de uso, de tal forma que pueda
cumplir con su finalidad y satisfacer la cabalidad as necesidades para las que
está diseñado.

Elaborado por: Sara Mendoza


Referencias bibliográficas:

• Barthes, Roland. Semántica del objeto


• Baudrillard, Jean . El sistema de los objetos
• Löbach, Bernd. Diseño Industrial. Bases para la configuración de los
productos industriales. Editorial Gustavo Gili. Barcelona .1981.

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