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Cualquier palabra nuestra, dirigida con este fin a las autoridades competentes,
cualquier alusión pública tenían que ser seriamente pensadas y medidas por nuestra
parte, en interés mismo de los que sufren, para no hacer, a nuestro pesar, más grave y
más intolerable todavía su situación.
1.-Describe las ideas fundamentales expresadas por Pío XII en estos textos.
Ante el clima bélico que se vive en Europa los mensajes son de paz (… La
humanidad debe este anhelo (de vuelta a la paz) a centenares de millares de personas
que… sólo por el hecho de su nacionalidad… han sido destinadas a la muerte o progresiva
extinción…) y evitar que con sus declaraciones en cada uno de los países donde se
producen estos hechos, pueda ocasionar la muerte de inocentes.
2.- Analiza las acusaciones que se lanzaron contra Pío XII sobre sus silencios durante la
Segunda Guerra Mundial.
Pío XII nunca formuló propuestas concretas. La diplomacia pontificia apoyó todos
los intentos. Desde su primera encíclica intentó demostrar la inutilidad de la guerra y
cómo representaba la violación continua de la justicia y de la caridad. Nunca quiso
declarar una cruzada contra el bolchevismo, una guerra contra Rusia.
Tal situación es para Pío XII un trágico dilema y un continuo sufrimiento moral
tener que escoger entre el silencio y la palabra. Se limita a sus declaraciones. Siente
como suyas las desgracias y dolores de los inocentes exterminados. Intenta disminuir sus
sufrimientos, suavizar la situación moral y jurídica, para defenderlos derechos religiosos,
remediar su miseria y sus necesidades. Mide sus palabras para paliar el sufrimiento.
3.- Haz una comparativa entre las formas de actuación de Benedicto XV y Pío XII ante la primera y segunda guerra
mundial respectivamente.
BENEDICTO XV- 1ª GUERRA MUNDIAL PÍO XII- 2ª GUERRA MUNDIAL
Condena de la guerra (8.9.1914) la califica Llamamiento patético a favor de la paz
de azote de la ira de Dios y espectáculo (Sep. 1938) Pío XI.
monstruoso.
Pío XII: radio-mensaje 24.8.1939. Suplica a
Encíclica Ad beatissimi (1.11.1914) habla los responsables de los Estados de desistir
de tremendo fantasma,, espectáculo atroz (Nada se pierde con la paz; con la guerra se
y doloroso, la más negra tragedia de la puede perder todo)
locura humana.
Acción diplomática de Paz.
Condena dura y firme.
Intenta alejar la guerra de Italia.
Actividad a favor de la Paz. Intenta
No formula protestas concretas. Actúa en la
mantener a Italia fuera de la guerra.
diplomacia.
Intentó frenar los crecientes
Encíclica Summi pontificatus 20.10.1939.
nacionalismos francés y alemán.
Inutilidad de la guerra, violación de la
Llamada a la paz el 1.8.1917, con justicia y la caridad. Discursos calculados.
propuestas concretas de desenlace,
Su silencio ante situaciones concretas
perdón, restitución de los territorios
(judíos, comunismo, …) pueden explicarse
ocupados,…
por el temor a desencadenar mayores
Medidas para aliviar daños materiales y violencias.
morales: intercambio de prisioneros,
Actividad para atenuar los sufrimientos.
búsqueda de desaparecidos,…
Organización de la Oficina Vaticana de
Ayuda económica de 82 millones de liras
información (prisioneros, desaparecidos,
oro a las poblaciones que mayores
prófugos, deportados, …) 800 empleados
privaciones y sufrimientos habían
para 11.000.000 de solicitudes.
experimentado.
Recogida de víveres y ropa para los
necesitados.
Más difícil todavía lo tuvo Pío XII. Situación similar a la de su antecesor Benedicto
XV, pero con el agravante de tener que luchar contra el extermino por razones de raza o
nacionalidad. Por una parte condenar la matanza sólo por el hecho de la guerra, por otra
condenar las matanzas por razones de raza, religión o nacionalidad.
Es cierto que el silencio pudo salvar muchas vidas de inocentes, pero también,
todos sabemos cómo se ha utilizado a la Iglesia, sin preguntar por qué, para acusarla de
ser servil con cierto tipo de gobiernos.
Tal vez hubieran muerto muchísimas más personas en la II guerra mundial, pero
Cristo también murió por defender la verdad y condenar ciertas conductas. Y todo
cristiano está llamado a ser como Cristo, y en ocasiones, esto nos lleva a perder la vida
físicamente por mantener vivo el mensaje evangélico. Nos enseñó que no debemos tener
miedo a la muerte. Aunque también dijo que debíamos ser astutos y que el Espíritu
actuaría en nosotros, puesto que los caminos de Señor son inescrutables.
Cierto es que es muy fácil analizar esto con la seguridad de que ha pasado el
tiempo y estos ecos se van diluyendo.
¿Si hubiera sido yo? Pues, la verdad, prefiero no verme en este tipo de situaciones.
El Espíritu actuó así en la Iglesia y hay que aceptarlo.