Vivimos en un mundo profundamente diferente al de nuestros antecesores, el habitus
entendido como un haber de la sociedad que se transforma en el ser del individuo, mutó rápida y ampliamente. Somos un ser complejo, nos transformamos, a diferencia de la energía, somos seres finitos. Nuestra realidad es limitada en puntos de semejanza a la de nuestros antecesores; no seguimos las mismas modas, no nos sublevamos ante las mismas causas, y por sobre todo, nuestra manera de relacionarnos se modificó. Las ciencias sociales nos aportan conocimiento acerca del comportamiento humano y el funcionamiento organizacional de la sociedad, es por ello que considero pertinente resaltar la relevancia de la psicología y la ciencia política en la actualidad, tomándome la libertad de relacionarlas en el marco de nuestro contexto histórico. El epicentro de la evolución de la sociedad, vendría siendo el comportamiento humano en relación con el medio ambiente físico y social que lo rodea. La psicología, precisamente estudia la evolución de los seres humanos y cómo el contexto afecta el comportamiento del mismo. En la actualidad, el comportamiento del individuo moldea el funcionamiento social, teniendo como consecuencia la metamorfosis colectiva, afectando a todo órgano común. Resaltando la psicología de masas, el ser se contagia del comportamiento colectivo y se limitan a repetirlo sin cuestionarse nada, influenciado por el mismo contexto histórico, ya sea religioso, social, económico o político, resultando en la inexistencia de autonomía. Por el otro lado, la ciencia política, de igual manera que la psicología es una ciencia que ha evolucionado a través de la historia de la humanidad. Su disciplina trata de describir y explicar el comportamiento político mediante el estudio de los factores psicológicos, sociales y ambientales que influyen en él. Partiendo desde la concepción de Aristóteles, los seres humanos somos animales políticos, nuestro actuar tiene consecuencias en la sociedad conjunta.
La conducta humana no es inherente al individuo, si no que está siempre modulada por el
entorno del mismo, es por esto que es pertinente tener conocimiento de las cuestiones políticas desde la visión de la psicología debido a que nos permite participar en la sociedad, obtener una mayor compresión de los procesos subyacentes a los hechos políticos que acontecen en nuestra vida cotidiana, con el objetivo de expandir y lograr la toma de decisiones y elecciones más apropiadas para el bien común. La psicología cumple el rol de entender el comportamiento y responder los cuestionamientos existenciales del ser humano mientras que la ciencia política sirve para defender los intereses y el bienestar de las comunidades, por esto, considero relevante relacionar ambas debido a que una no funciona sin la otra, se complementan de manera extraordinaria para contribuir a ciertos modelos del comportamiento y transformar la historia o incluso, el presente. Coloquialmente, se podría expandir la relación de estas disciplinas como un círculo cromático debido a que sublevan causas de diferentes factores que se dividen por entidades. Empero, tienen cierta afinidad que afectan al individuo y a la misma sociedad. Ambas son causa y consecuencia con el objetivo de lograr la resolución de conflictos. Una vez logrado el objetivo, el individuo recupera su autonomía e independencia, aún cuando está siendo influenciado por su cultura, religión o ideologías.
Análogamente, no hay mejor manera de evidenciar la importancia de las disciplinas
mencionadas anteriormente que manifestando nuestro contexto. El contexto histórico de Colombia no podría ser más agitado, por más de 60 años hemos vivido una guerra incesante, conflictos internos, desastres naturales que han contribuido a la corrupción, narcotráfico teniendo como resultado una crisis económica, política y social en donde cada uno de nosotros ha sido afectado sin importar el sexo, edad, estrato o ideología. Estos antecedentes han sacudido el país, lo cual ayudó a la psicología y la ciencia política incorporarse en el país por la necesidad de intervenir en los conflictos con el objeto de brindar una solución al contexto en el que se desarrolla el individuo. Es necesario comprender el habitus del ser humano para la resolución de conflictos. Es por esto que el comportamiento de los individuos dentro de una sociedad son limitados para prevalecer el orden social y suprimir el instinto elemental.
Podemos apreciar la relevancia de las mencionadas en la actualidad colombiana; la
percepción de la corrupción, el discurso político de los diferentes partidos, movimientos sociales, rechazo a las minorías, etc. Son casos persistentes que enduramos como ciudadanos. Un caso que vale la pena mencionar es el cambio de gobierno en materia del proceso de paz, en donde no solo ha transformado el plan de desarrollo, sino también el acuerdo de paz pactado por el gobierno anterior en donde la llegada del nuevo gobierno actual desmaterializa el acuerdo pactado en La Habana; afectando directamente a los campesinos quienes contaban con el programa integral de sustitución de cultivos ilícitos para generar ingresos bajo al margen de la ley y contribuir a la superación de condiciones de pobreza y marginalidad de las familias. Relacionando directamente esta problemática social con la psicología, las principales víctimas del conflicto interno fueron los campesinos, en donde estuvieron marginalizados por las FARC y no tuvieron otra alternativa que cultivar drogas ilícitas generación tras generación, privandolos de su autonomía, transformando su habitus, cultura y economía de manera inherente. En materia de ciencia política, precisamente se estudia las causas y la evolución de esta crisis social y cómo afecta a la sociedad. Se intenta buscar soluciones adecuadas en donde el fin sea el bien común. La realización de políticas públicas, organismos de control, ordenamientos jurídicos y estrategias que de manera gubernamental alivien la condición de los campesinos.
Teniendo una sociedad como la nuestra, en donde se prima la violencia y la corrupción
hace parte de nuestro contexto, volviendo al concepto de la psicología de masas, el ser humano dentro de su parte cognitiva, se contagia del comportamiento colectivo, perdiendo su individualidad se limitan a repetir aquellos comportamientos inmorales debido a que es una fuente primaria de conocimiento. La ciencia política, se encarga de comprender los fenómenos sociales que enfrentamos y qué podríamos realizar para solucionar o transformar el detrimento. Por consiguiente, ambas disciplinas cumplen el objetivo de analizar el modo en el que los procesos políticos, a lo largo de la historia o en el presente, contribuyen al comportamiento humano.