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PERSONALIDAD VS CARÁCTER, INFLUENCIA INTERNA A EXTERNA

"Nuestro carácter es el resultado de nuestra conducta" (Aristóteles)


¿QUÉ ES PERSONALIDAD?
Personalidad se refiere a una serie de conceptos que están interrelacionados, y por eso
la confusión en relacionarlos con carácter y temperamento. Cuando se habla de
personalidad se hace referencia a lo que nos hace ser lo que somos y aquello que nos
diferencia de los demás. Una definición más técnica señala que el término se refiere a
"las causas internas que subyacen al comportamiento individual y a la experiencia de la
persona". En muchos aspectos, es lo que nos hace humanos. Nos da identidad como
individuos. Nos entrega una visión de nosotros mismos y es lo que perciben los demás.
Sin embargo, creo que en general se suele llamar "personalidad" a algo más superficial
que eso. La gente se refiere a una persona que tiene desplante o un alto grado de
asertividad, como una persona "con personalidad". Al contrario, cuando se está
frente a un individuo tímido o con dificultades para expresarse, las personas
popularmente se refieren como alguien que tiene "poca personalidad". En ambos
casos hay un error de concepto.
No existe persona que no tenga personalidad. Sería como decir que alguien puede vivir
sin piel. Todo individuo que existe tiene una manera de presentarse frente al mundo,
esa es su personalidad.

¿QUÉ ES CARÁCTER?

Del mismo modo, la manera como la conducta de una persona nos afecte
tenderemos a definirla como una persona "con mal carácter" o "buen carácter". Un
concepto, que es equivocado en varios aspectos. El carácter alude a una situación un
poco más compleja que ese reduccionismo popular.
No se refiere a la personalidad, sino al componente valórico y axiológico del
individuo. En otras palabras, a los principios éticos y los valores que la persona ha
hecho suyas.
Se puede tener una personalidad "atractiva", con todo lo de subjetivo que tiene esa
palabra, pero, no necesariamente tener un carácter acorde con principios y valores
sustanciales que marquen la diferencia entre una persona y otra.

Hasta comienzos del año 2008 Eliot Spitzer, un abogado norteamericano, era uno de
los políticos más famosos de EE.UU. En ese momento tenía el cargo de gobernador de
Nueva York. Debido a su personalidad carismática y la confianza que generaba en la
gente por su fama de estricto y celoso con las políticas públicas, era un firme candidato
como para postularse a las elecciones presidenciales. Antes de ocupar dicho cargo fue
fiscal general durante ocho años. En esa responsabilidad había iniciado una verdadera
cruzada contra la corrupción por la cual se había ganado una fama de incorrupto.
Además había dirigido varias investigaciones contra redes de prostitución. Sin
embargo, una investigación que se venía realizando a una organización delictual
dedicada a la prostitución lo acusó por haber invertido cerca de 80 mil dólares en
prostitutas.

La imagen pública que había cultivado de persona intachable se vino abajo. Al principio
negó los cargos, pero ante las evidencias tuvo que admitir que había algo oscuro en su
vida y renunció, lo cual en la práctica se convierte en su entierro político definitivo.
Una linda personalidad no es señal necesaria de tener un buen carácter.

Firmeza de carácter Los jóvenes deberían tener ideas amplias, planes sabios, para
sacar el mayor provecho de sus oportunidades e imbuirse de la inspiración y el valor
que animaban a los apóstoles. Juan dice: “Os he escrito a vosotros, jóvenes, porque
sois fuertes y la palabra de Dios permanece en vosotros, y habéis vencido al
maligno”. 1 Juan 2:14. Se presenta a los jóvenes una norma elevada, y Dios los invita
a emprender un verdadero servicio por él. Los jóvenes de corazón recto que se
deleitan en aprender en la escuela de Cristo, pueden hacer una gran obra por el
Maestro si tan solo quieren prestar oído a la orden del Capitán, tal como ha
resonado a lo largo de las filas hasta nuestro tiempo: “Portaos varonilmente y
esforzaos”. 1 Corintios 16:13.—The Review and Herald, 16 de junio de 1891;
Mensajes para los Jóvenes, 20, 21.

La rectitud de un carácter se pone a prueba en situaciones sencillas y en especial


cuando se tiene la certeza de que a la única persona que le tendremos que dar cuenta
es a nosotros mismos. Una persona que no es recta simplemente porque entiende que
hay que serlo, estará expuesta a cometer delitos o actos inmorales cuando crea que
nadie lo va a sorprender.
En el siglo III a.C. se construyó la Gran Muralla China. Una fortificación que pretendía
proteger de los ataques de los nómadas xiongnu de Mongolia y Manchuria. No
pretendía impedir que pasaran, sino que vinieran con sq caballería e invadieran China.
La muralla mide 7.300 kilómetros, fue construida por diferentes dinastías en un
período de más o menos mil años. Sin embargo, aunque estaba construida para
proteger y se consideraba que era una forma efectiva para que aquello no ocurriera, la
verdad es que China fue invadida varias veces y los invasores no atravesaron por
encima de las murallas ni la horadaron, sólo sobornaron a los guardias de las puertas.
Cuando una persona miente o engaña, roba o falsea alguna información,
simplemente se soborna a sí misma.
No hay peor daño que el que se hace a sí mismo

Muchos suelen confundir "carácter fuerte " con actitudes caprichosas , soberbias,
altaneras, agresivas e intolerantes. Eso no es "carácter fuerte", es simplemente mal
carácter.
La tendencia a confundir las cosas es humana. Sin embargo, en relación al carácter
hay que ser muy claro para no señalar elementos equivocados.
Emerson señaló alguna vez que: "El carácter es más importante que el intelecto". Eso
implica que cuando una persona entiende el significado de la virtud y del cultivo del
carácter deja que su vida toda sea dirigida no por la personalidad ni el intelecto sino
por los valores y principios que ha elegido.
EL carácter fuerte no tiene que ver con la fuerza de sanson, carácter de roble, xq de
roble
Cuando crece solo sus ramas suelen ramificarse de un manera característica. En
condiciones favorables vive unos 2 0 0 años y se sabe de árboles que han llegado a
vivir 6 0 0 años.
Lo más interesante del roble son sus raíces que tienden a ser profundas, lo que le da
la estabilidad y fuerza que manifiesta. No sólo forma raíces que penetran de manera
vertical en el suelo, también echa raíces laterales que constituyen una base sólida
que permite su permanencia atada al suelo. Para formar un carácter fuerte se
necesitan raíces profundas y laterales que le den estabilidad a la persona. Dichas
raíces están constituidas por los principios, de vida, los valores y las virtudes que se
adquieren, especialmente en la niñez y la adolescencia temprana.
Las dificultades templan el carácter de una manera excepcional porque hace
que las personas tengan una actitud diferente a la vida. "La formación de un
carácter fuerte y equilibrado" es producto de la tempestad y de la tribulación.1
'Elena G. de White, Alza tus o/os (Buenos Aires: Asociación Casa Editora
Sudamericana, 1982), 320.
CARÁCTER PROPIO DOMINIO – PROPIO – SACAR DE NUESTRAS CASILLAS .
MENTORES, NOSOTROS MISMOS,

Elena de White (1827-1915) escribió una gran verdad: "El carácter débil y vacilante se
transforma por el poder de Dios, convirtiéndose en fuerte y estable".1 Es decir, llega
un punto en la vida humana donde sólo el poder extraordinario de Dios puede lograr
que hábitos de vida arraigados puedan cambiar y lograr que las personas modifiquen
sus conductas y desarrollen un carácter acorde con los ideales de Dios.
CARÁCTER, PROCESO LENTO .
Del mismo modo, el carácter fuerte es resultado de una permanente dependencia de
Dios que da la fortaleza y el discernimiento para entender qué áreas de la vida deben
cambiar.
No hay lugar para los inconstantes en la vida cristiana. La devoción personal y el
contacto con Dios no es para momentos o instantes emocionales. Algunos religiosos
los llaman "ejercicios espirituales", y tienen razón, es más que la mera liturgia de
repetición de cantos y rezos, es una actividad que se ejercita día a día.
Cuando dejamos la devoción personal y nos concentramos en aspectos tangenciales de
la vida, entonces, todo se va convirtiendo en rutinario y termina por perder sentido.
La vida espiritual no es una cuestión de cultos ni cantos, sino de constancia en la
oración, la lectura de la Biblia y el compartir con otros lo que descubrimos en nuestro
andar diario. Cuando la religión se convierte en mera liturgia deriva en formalismo y
pierde toda validez real para la vida cotidiana. No es correcto llamarse religioso si no se
vive como tal
La Biblia dice: "Yo soy el Señor su Dios, así que santifíquense y manténganse santos,
porque yo soy santo" (Levíticos 11:44 NVI). Otro versículo señala: "Sean, pues, santos,
porque yo soy santo" (Levíticos 11:45 NVI).
La invitación es a vivir de un modo tal que toda nuestra vida se convierta en un hito
digno de ser imitado. La santidad involucra nuestro carácter. Es un llamado de Dios a
buscar inteligentemente vivir bajo los principios que él ha ordenado para nuestra
existencia, y que no son para hacernos
infelices, sino todo lo contrario, para darnos una dignidad y una visión de la vida que
nos haga más plenos.

"La mayor necesidad del mundo


es la de varones y mujeres que no se vendan ni se compren;
varones y mujeres que sean sinceros
y honrados en lo más íntimo de sus almas;
varones y mujeres que no teman dar al pecado
el nombre que le corresponde;
varones y mujeres cuya conciencia sea tan leal al deber
como la brújula al polo;
varones y mujeres que se mantengan de parte de la ¡Oficia
aunque se desplomen los cielos"
Elena G. de White1

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