Vous êtes sur la page 1sur 6

Colegio Mixto Privado “San Pedro” Martir

De Verona

Alumno: Denilson David Obando Casasola.

Cátedra: Principio General del Derecho.

Catedrático: Julio Castellanos.

Grado: 5to. Administración de Empresas.

Fecha: 03-06-2020
La sociedad capitalista (también llamada sociedad de capital) tiene carácter mercantil y, por
ello, se basa en el contrato de sociedad mercantil que es aquél por el cual dos o más personas se
obligan a poner en común bienes, industria o alguna de estas cosas para realizar una actividad
económica con el fin de obtener lucro y repartir las ganancias. Se diferencian así, las sociedades
mercantiles de las civiles en que éstas últimas pueden revestir cualquier forma mientras que las
primeras deben adecuarse a lo establecido en el Código de Comercio y adoptar una de las
siguientes formas: la regular colectiva; la comanditaria, simple o por acciones; la anónima; o la de
responsabilidad limitada.

Estado: Es una organización política constituida por un conjunto de instituciones burocráticas


estables, a través de las cuales ejerce el monopolio del uso de la fuerza (soberanía) aplicada a una
población dentro de unos límites territoriales establecidos. Muchas sociedades humanas han sido
gobernadas por estados durante milenios; sin embargo, la mayoría de las personas en
la prehistoria vivían en sociedades sin estado. Los primeros estados surgieron hace unos
5500 años junto con el rápido crecimiento de las ciudades, la invención de la escritura, y la
codificación de nuevas clases de religión. Con el tiempo, se desarrolló una variedad de formas
diferentes de estados, empleando una variedad de justificaciones para su existencia (como
el derecho divino, la teoría del contrato social, etc.). Hoy día, sin embargo, el estado-
nación moderno es la forma predominante de estado a que están sometidas las personas. La
palabra Estado viene del latín status, y este del verbo stare (estar parado). De ahí pasó a significar
a algo parado, detenido, como en statu quo. El verbo stare se vincula con la raíz indoeuropea *sta-,
presente en el verbo griego ίσταμαι (histamai, que se puede traducir como: establecer, poner en
pie, detener, estar en pie). Como término polisémico designa también a todo
aquel país soberano, reconocido como tal en el orden internacional, así como al conjunto de
atribuciones y órganos de gobierno de dicho país. Todo Estado está dotado
de territorio, población y soberanía. Los hablantes de inglés americano a menudo usan los términos
estado y gobierno como sinónimos, y ambas palabras se refieren a un grupo político organizado
que ejerce autoridad sobre un territorio en particular.
Teorías del origen del Estado:
La teoría o filosofía del Estado es una disciplina que tiene como objeto de estudio las posibles
definiciones, orígenes, formas, tareas y objetivos del Estado así también de sus condiciones y
límites institucionales, éticos y legales. Como rama de la filosofía política y en concreto de la teoría
general del estado, a menudo sus temáticas afectan a varias otras ciencias simultáneamente,
incluyendo la filosofía, la teología, las ciencias políticas, el derecho, la sociología y la economía. Se
desarrolla a partir de una eclosión del derecho público en Alemania a principios del siglo XIX. El
término surge de la lengua italiana Stato, que evolucionó del latín Stat.
La formación del Estado Moderno[editar]
El período conocido como Edad Moderna significó para Europa importantes cambios en su
ordenamiento político. El fenómeno más destacado fue el surgimiento del concepto de Estado
moderno: un territorio con fronteras determinadas, la existencia de gobierno común y un
sentimiento de identificación cultural y nacional de sus habitantes. Este proceso fue iniciado a partir
de los siglos XIV y XV. Los monarcas europeos, interesados en concentrar el poder en su persona,
debieron negociar con los señores feudales, quienes cedieron sus derechos individuales sobre sus
feudos a cambio de una serie de privilegios. Los que no estuvieron dispuestos a transigir, fueron
sometidos a través de violentas guerras. Algunos de estos nobles, ante el poder del rey, no les
quedó más que convertirse en una nobleza aburguesada, convirtiéndose en "burgomaestres" o
vasallos directos del rey. De este modo, el concepto feudal de lealtad, fue reemplazado por los de
autoridad y obediencia, propios de un Estado con poder centralizado. En el siglo XVII, el poder
político de los monarcas se fortaleció hasta eliminar cualquier representatividad, dando lugar a
las monarquías absolutas. La monarquía constituyó un Estado moderno sobre la base de una
dirección fuerte, contando con los medios para sostenerla. Con esto, el rey consiguió la resignación
de la sociedad, a cambio de un cierto orden y progreso. Uno de los más claros ejemplos
del absolutismo fue Francia. Durante el siglo XVII, este país se convirtió en la mayor potencia
europea, después de consolidar sus fronteras, gracias a innumerables guerras con los países
vecinos. El rey Luis XIV (1643-1715) fue la mejor personificación de la imagen del monarca
absoluto.
Elementos del Estado:
El Estado tiene cuatro elementos básicos y generales: 1) posee gobierno (poder político), 2) tiene
un pueblo (como nación); 3) ostenta territorio; y, 4) está regulado con base en un  estado de
derecho que lo legitima y que basa su organización en la división de poderes: Ejecutivo, Legislativo
y Judicial.

El Gobierno:
es el principal pilar del Estado; la autoridad que dirige, controla y administra sus instituciones, la
cual consiste en la conducción política general o ejercicio del poder ejecutivo del Estado. En ese
sentido, habitualmente se entiende por tal órgano (que puede estar formado por
un presidente o primer ministro y un número variable de ministros) al que la Constitución o la norma
fundamental de un Estado atribuye la función o poder ejecutivo, y que ejerce el poder político sobre
una sociedad. También puede ser el órgano que dirige cualquier comunidad política. Más
estrechamente "Gobierno" significa el conjunto de los ministros, es decir, es sinónimo de
"gabinete". Son las definiciones formales de lo que tangiblemente es un Gobierno; pero sustancial
e intangiblemente el gobierno de un Estado comprende el conjunto de intereses vitales que ejercita
y defiende a través de los objetivos nacionales permanentes, estos son las pautas o normas de
conducta inalterables en el arte de gobernar, como la vigencia de la integridad territorial, o la
división del poder en tres ramas, para lo cual por periodos que varían entre cuatro y seis años
generalmente, se identifican cuales objetivos nacionales actuales, conducen a la vigencia de los
intereses vitales, cualquiera que sea la orientación ideológica y filosófica del gobernante de turno.
Formas de Gobierno
Forma de gobierno, forma política, régimen de gobierno, régimen político, sistema de
gobierno,  modelo de gobierno o modelo político son algunas de las diversas maneras de
nombrar un concepto esencial de la ciencia política y la teoría del Estado o derecho constitucional.
Hace referencia al modelo de organización del poder constitucional que adopta un Estado en
función de la relación existente entre los distintos poderes. La manera en la que se estructura
el poder político para ejercer su autoridad en el Estado, coordinando todas las instituciones que lo
forman, hace que cada forma de gobierno precise de unos mecanismos de regulación que le son
característicos. Estos modelos políticos varían de un estado a otro y de una época histórica a otra.
Su formulación se suele justificar aludiendo a muy diferentes causas: estructurales
o idiosincrásicas (imperativos territoriales, históricos, culturales, religiosos, etc.) o coyunturales
(períodos de crisis económica, catástrofes, guerras, peligros o "emergencias" de muy distinta
naturaleza, vacíos de poder, falta de consenso o de liderazgo, etc.); pero siempre como plasmación
política de un proyecto ideológico. La denominación correspondiente a la forma o modelo de
gobierno (además de referencias a la forma de Estado, que indica la estructura territorial) suele
incluso incorporarse al nombre o denominación oficial del estado, con términos de gran diversidad
y que, aunque proporcionan cierta información sobre lo que proclaman, no responden a criterios
comunes que permitan definir por sí solos su régimen político. Por ejemplo: Estados Unidos
Mexicanos, República Bolivariana de Venezuela, Reino de España, Principado de Andorra, Gran
Ducado de Luxemburgo, Federación Rusa, República Popular Democrática de Corea, Emiratos
Árabes Unidos o República Islámica de Irán. Entre los doscientos estados, solo hay dieciocho que
no añaden ninguna palabra más a su nombre oficial, como por ejemplo: Jamaica; mientras que
once solo indican que son "estados". La forma más común es república, seguida de la monarquía.
Hay muy distintas nomenclaturas para denominar las distintas formas de gobierno, desde los
teóricos de la Antigüedad hasta la Edad Contemporánea; en la actualidad suelen utilizarse de
forma habitual tres tipos de clasificaciones:

 El carácter electivo o no de la jefatura de Estado define una clasificación,


entre repúblicas (electiva) y monarquías (no electiva).
 El grado de libertad, pluralismo y participación política define otra clasificación, entre
sistemas democráticos, autoritarios, y totalitarios, según permitan en mayor o menor grado el
ejercicio de la discrepancia y la oposición política o bien niegan más o menos radicalmente la
posibilidad de disidencia (estableciendo un régimen de partido único, o distintos tipos
de regímenes excepcionales, como las dictaduras o las juntas militares); a su vez el sistema
electoral por el que en los sistemas participativos se expresa la voluntad popular ha tenido muy
diversas conformaciones históricas (democracia directa o asamblearia, democracia indirecta o
representativa, sufragio censitario o restringido, sufragio universal masculino o de ambos sexos,
diferentes determinaciones de la mayoría de edad, segregación racial, inclusión o no de
los inmigrantes, y otros), así como muy distintas maneras de alterarlo o desvirtuarlo (burgo
podrido, gerrymandering, fraude electoral, pucherazo).
 La relación existente entre la jefatura del Estado, el gobierno y el parlamento define otra
clasificación más, entre presidencialismos y parlamentarismos (con muchos grados o formas
mixtas entre uno y otro).
Estas tres clasificaciones no son excluyentes, sino que se complementan, de modo que una
república puede ser democrática (Estados Unidos o Sudáfrica) o no democrática (China o Corea
del Norte); una democracia republicana puede ser parlamentaria (Alemania o India),
semipresidencialista (Francia o Rusia) o presidencialista (Argentina o Corea del Sur); y una
monarquía puede ser democrática y parlamentaria (España, Reino Unido o Japón), no democrática
(Arabia Saudita o Ciudad del Vaticano) o situarse en posiciones intermedias (Marruecos), muy
habitualmente calificadas de forma más o menos anacrónica con términos propios de las formas
históricas de la monarquía (monarquía feudal, monarquía autoritaria, monarquía absoluta).

Vous aimerez peut-être aussi