Una de las mayores preocupaciones de nuestra sociedad es la necesidad de que,

desde la infancia, se adopten hábitos de vida saludables que permitan el desarrollo

de una vida sana y plena.

Una alimentación apropiada favorece el aprendizaje escolar y previene

enfermedades tales como: obesidad, colesterol, arteriosclerosis....Por todo ello la
educación alimentaria de los niños es fundamental; Familiares y educadores juegan
un papel principal en este aspecto.

En concreto y refiriéndonos a la obesidad como uno de los principales problemas

que afectan actualmente a la población infantil, queremos resaltar que es una
enfermedad que tiende a iniciarse en la infancia y la adolescencia, y que tiene origen
en una interacción genética y ambiental. Siendo la parte ambiental o conductual
sobre la que más podemos incidir, ya que viene dada por un desequilibrio entre la
ingesta y el gasto energético.

La obesidad en la infancia, sobre todo en la segunda década de la vida, constituye un

potente predictor de la obesidad futura.

Para muchas familias, el tener un hijo “rellenito” y con mofletes es indicativo de que
el niño está fuerte y saludable. Los Profesionales en materia de nutrición infantil no
piensan igual. Lo que realmente interesa es que el niño esté sano. Tanto en Europa
como en Estados Unidos, desde los años noventa hasta hoy, la incidencia de la
obesidad infantil se ha duplicado. España se ha convertido en el cuarto país de la
Unión Europea con mayor número de niños con problemas de sobrepeso,
presentando un cuadro de obesidad en un 16,1% entre menores de 6 a 12 años de
edad, superado apenas por los datos de Italia, Malta y Grecia (International Obesity
Taskforce. IOTF 2002). Unos datos “aterradores” si tenemos en cuenta que
contamos en nuestro "currículo" con una de las mejores dietas alimentares del
mundo: la dieta mediterránea, y en el cual hace escasamente cinco años presentaba
apenas un 5% de menores obesos.

Según el último Estudio enKid (1998-2000) sobre los hábitos alimentarios y el

estado nutricional de la población infantil y juvenil, la prevalencia de obesidad es
del 13,9%, y del 12,4% en sobrepeso; frente al 6,4% de niños obesos del año
198416. Estas cifras nos indican que el 26,3% de los niños españoles están por
encima de su peso saludable.

Las personas obesas tienen más riesgo de padecer enfermedades como Diabetes tipo
II, Hipertrigliceridemia, Hipercolesterolemia, Hiperuricemia, Hipertensión Arterial,
incluso algunos tipos de cáncer y enfermedades derivadas de la obesidad. Por todo
ello cobra especial importancia hacer todo lo posible por mantener un peso
saludable, y desayunar es una de ellas.

Por todas estas razones, todas las partes implicadas deberían de aportar su “ granito
de arena “ a este gran problema. El 20 de noviembre de 2007, Corporación
Alimentaria Peñasanta (CAPSA) y el Ayuntamiento de Oviedo firmaron un
convenio de colaboración relacionado con la nutrición y la salud y que está dirigido
a las actuaciones en centros escolares, sociales y sanitarios de la capital. Esta firma
se enmarca dentro de los talleres “Desayunos saludables” que la Concejalía de
Educación había puesto en marcha.

Asimismo este convenio se incluye en el programa municipal Escuela de Salud, que

sirve de instrumento para conseguir una formación continuada para adquirir hábitos
y comportamientos saludables de todos los ciudadanos.

La campaña va encaminada a los escolares de quinto y sexto de Primaria de los

colegios y consta de desayunos gratuitos a base de pan, fruta y leche y un taller de
aprendizaje. El taller pretende enseñar a los menores aspectos como el equilibrio de
nutrientes y concienciarles acerca de la importancia de seguir una alimentación
equilibrada y sana.