Académique Documents
Professionnel Documents
Culture Documents
4. NO BUSQUE VENGANZA
A pesar de que a menudo es tentador crear una estrategia para la
venganza, o planear un discurso vengativo, tu debes resistir estos aguijones.
Cuando tu carga ha sido comunicada a Dios en oración, debe permanecer en
Sus manos y bajo Su control. “Mía es la venganza y la retribución” y otra vez
“El Señor juzgará a su pueblo” (Deuteronomio 32:35).
5. ESCOGE PERDONAR
Cuando las palabras de un amigo o de un extraño te causan dolor, es
posible que no recibas una disculpa de ellos. Aún así, tu debes hacer una
decisión consciente de perdonar su trasgresión. ¿Por qué es esto tan
importante? Una vez más, la Biblia contiene una respuesta clara: “Porque si
perdonáis a los hombres sus ofensas, os perdonará también a vosotros
vuestro Padre celestial” (Mateo 6:14).
6. EXAMINE SU CORAZÓN
Ahora que tú has trabajado efectivamente en tu reacción y has perdonado
a la persona que te criticó, hay un paso final importante. Tú debes detenerte
y preguntarte a ti mismo, ¿fue cierta alguna de las críticas o acusaciones?
¡Ay, ay, ay, otra vez! A pesar de que muchas veces las palabras de crítica son
simplemente el producto de la ira o de la frustración, debemos considerar
que a veces podrá ser verdad. Dios podría estar usando a alguien para atraer
tu atención hacia un área problemática de tu vida.
Por ejemplo si una mañana llegas a tu oficina y el saludo de tu jefe es
“¿Otra vez tarde?” Puede que sea tiempo de comprar un reloj de alarma
nuevo, o de acostarse más temprano.
A pesar de que estas palabras no suenan muy bonitas, no dejan de ser
ciertas. Como creyentes, siempre debemos desear el aceptar sugerencias
para mejorar, ya que buscamos el ofrecer nuestras vidas como testigos para
el Señor Jesucristo.
Dios entiende el dolor que puede resultar de la crítica. Ya que Él está
constantemente contigo, Él es además testigo de cada emoción que tú
sientes durante el día. Permite que su presencia de amor te sirva como
fortaleza cuando te has convertido en recipiente de críticas. En lugar de
hacer interno tu dolor, dáselo a Dios quien está esperando convertir tu
lamento en gozo.