DISPERSIVIDAD

GEOLOGÍA - FACULTAD DE INGENIERÍA - BOGOTÁ D.C.

PEDRO DUVAN MONTEJO MARTÍNEZ - EST. ING CIVIL
TI 96111513926 - COD. 25422747

Los suelos dispersivos son básicamente suelos muy finos que al contacto con agua, defloculan con
gran rapidez (el término deflocular implica la conversión de una masa sin fluidez, en un fluido). Es decir
que las partículas de los suelos dispersivos, al contacto con el agua pierden cohesión y fluyen con el
agua.
Este fenómeno se produce cuando dadas las condiciones mineralógicas de dicho suelo, (en donde la
concentración de cationes de sodio es mayor que en suelos no dispersivos) se pone en contacto con
agua. Las partículas de los suelos dispersivos tienen una atracción electroquímica muy débil entre sí,
por lo que la adhesión a otras partículas del suelo se imposibilita o disminuye tanto que se pierde la
cohesión típica de las partículas que constituyen la materia en estado sólido, generando un suelo en
fase coloidal pero estable, hasta que el agua incide en él, esto genera la conversión de masa de alta
densidad (suelo coloidal) en fluido, al transformarse en un fluido es natural que se comporte como tal,
y como todo fluido, es susceptible a escurrirse y posteriormente formar canales de flujo en la zona
que presente suelos con las características en cuestión, el suelo en estado líquido se abre paso por el
gradiente hidráulico, por grietas y fracturas en el suelo, aumentando el tamaño de los mismos al erodar
material consigo, incluso se puede observar éste fenómeno sin que haya flujo de agua, es decir, se
puede presentar con cuerpos de agua en reposo. Este proceso de flujo subyacente implica transporte
del suelo, y éste trasporte no es más que erosión producida por el agua, mejor llamada erosión pluvial
o fluvial, dependiendo de la naturaleza del agua que incida en el suelo dispersivo.
Como en los suelos dispersivos es mayor la concentración de cationes de sodio, se podría intuir que
estos suelos se encuentran en ambientes marinos (por su contenido salino), pero además se ha
encontrado recientemente que este fenómeno se encuentra asociado con los suelos formados en
climas áridos y semiáridos de suelos alcalinos. En Colombia se encuentran en Huila y la Guajira.
En general se piensa que las arcillas son suelos resistentes a la erosión, pero dada la composición
mineralógica dichas arcillas pueden tornarse dispersivas, además, las arcillas no dispersivas pueden
perder cohesión si se exponen al agua de una composición química específica. También este
fenómeno de dispersividad se puede presentar en rocas arcillolitas y lutitas que tienen en sus poros las
mismas sales que las arcillas dispersivas y, por tanto, tras la erosión sus suelos residuales son
dispersivos. Especialmente las arcillas dispersivas implican un reto ingenieril en la construcción de
obras civiles. Por ejemplo, la erosión pluvial superficial en masas de suelos cohesivos a menudo se da
en suelos dispersivos arrastrando consigo mucho más material erosionable. Este es un problema
común en terraplenes para carreteras, ya que, al quitar el suficiente material la carretera puede quedar
en falso. Otro tipo de obra que vale la pena resaltar son las construcciones hidráulicas que implican
contacto directo con estos suelos, las presas, ya que muchos diques y presas están construidos con
arcillas extraídas de la misma zona, dichas estructuras fallan si hay presencia de suelos dispersivos,
con facilidad. Aunque existe evidencia experimental y teórica que soporta la conclusión de que dichas
arcillas si son bien compactadas y se cuida de evitar grietas, son aptas para la construcción, incluso de
dichas presas. Además, bien es sabido que al tratar éstas arcillas con cal, se modifica y fortalece su
composición en un corto lapso de tiempo.