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Pornografía e infidelidad, plaga entre hombres cristianos Encuesta realizada en 2014 por

Barna Group a petición de Proven Men Ministries. FUENTES Entrecristianos NUEVA


YORK 08 DE OCTUBRE DE 2014 01:05 h Una nueva encuesta realizada a nivel nacional
en Estados Unidos revela alarmantes cifras sobre el consumo y adicción a la pornografía
entre los hombres cristianos. Además sale a la luz una alta tasa de infidelidad sexual de
hombres cristianos casados. La encuesta fue realizada en 2014 por Barna Group a petición
de Proven Men Ministries, y en ella se utilizó una muestra representativa a lo largo y ancho
de los Estados Unidos de 388 hombres adultos que se han identificado como cristianos. Son
llamativas algunas de las cifras arrojadas por la encuesta: Entre los encuestados que tienen
18-30 años de edad: El 77% ve pornografía al menos una vez al mes. El 36% lo hacen
diariamente. De esta población el 32% admite su adicción a la pornografía y un 12% cree
que lo son. Para los hombres de 31-49 años las cifras no son menos inquietantes: El 77%
había viso pornografía en el trabajo en los últimos tres meses. El 64% admite haber visto
pornografía por lo menos una vez al mes. El 18% admite ser adicto a la pornografía y un
8% indican que posiblemente lo sean. La pornografía es una plaga incluso entre los
hombres cristianos casados y los deslices sexuales extramaritales avanzan a un ritmo
alarmante: El 55% admite ver pornografía al menos una vez al mes. El 35% confiesa haber
tenido un desliz sexual extramarital desde que se casaron. Se hace cada vez más necesario
que el tema de la pornografía y de los deslices sexuales sean abordados por la iglesia, no
sólo desde el púlpito sino brindando herramientas eficaces para que la feligresía encuentre
libertad sobre la adicción sexual.   Imprimir NOTICIAS RELACIONADAS Pornografía y
esclavitud sexual: debate de actor porno y pastor ‘¡Pastores: confrontad pornografía desde
el púlpito!’ Ante la pornografía el cristiano "tiende a autojustificarse” “No puedo manejar
esto solo” (sexo online) Ocho consejos para prevenir la infidelidad conyugal TAGS
Infidelidad Pornografía ética Cristiana Sexo Matrimonio +qFamilia   9 COMENTARIOS    
Si quieres comentar inicia sesión o regístrate   A.I.M. 01/11/2014 00:58 h 8     0     0  
Mientras haya iglesias q repitan semana tras semana lo mismo, y no quieran tratar temas q
tb son reales y están ahí, no creo q cambie la cosa. Suele importar más el q dirán y dejan
muchos temas fuera. Es más, este no se m había pasado x la cabeza, y menos aún lo he oído
en una predicación. En ese sentido vamos atrasados. No se habla de sexo, de adicciones, etc
desde el púlpito, y son cosas q están a la orden del día. Me preocupan aquellos q sufren y
no saben cómo o a quién oedir ayuda x miedo.   Android 22/10/2014 22:32 h 7     0     0  
¡Vaya! ¡Cuanta condena en los comentarios! ¡Cuanto juicio sin saber de qué se habla! ¿Y
qué os parece una pastoral real a los pobres cristianos adictos al porno? ¿Qué os parece que
se les ayude a escapar de su pequeño infierno? ¿O es que los véis sólo como unos
depravados con cara de viciosos? ¿No sabéis que tienen dolor, vacíos, luchas, dilemas que
no pueden afrontar? ¿Y qué de sus parejas (de los casados)? ¿No pueden decir nada? ¿O es
que se desentienden? ¿Quizás tendrán algo que ver?   Respondiendo a Android EZEQUIEL
JOB 12/12/2014 15:04 h 9     0     0   Estimado: La solución es CONFESAR, reconocer ante
Dios que se está pensando, o haciendo mal, LUEGO el señor actúa sacando lo malo (malos
pensamientos de nosotros), decirle a alguien como sacarse una mancha no es malo, es una
obligación ante Dios. "1Jn 1:9 Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para
perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad. 1Jn 1:10 Si decimos que no
hemos pecado, le hacemos a él mentiroso, y su palabra no está en nosotros."  
coolestmcse22 13/10/2014 21:50 h 6     0     0   Lo unico que te puede librar de estas
cadenas, es la Gracia radical y pura de Dios, sin las obras de la ley. Mientras mas te metes a
"guardarte" mas fuertes se hacen las cadenas. El pecado se aprovecha del mandamiento y el
pecado revive, te encadena. Mientras vivíamos en la carne, las pasiones pecaminosas,
estimuladas por la Ley, obraban en nuestros miembros llevando fruto para muerte
(Romanos 7:5) Aparte de La Ley, el pecado está muerto. LIberate, pon tu Mirada fija en
Jesus, y vive por fé.   YIYE 11/10/2014 00:31 h 5     0     0   Saber que esos espíritus se
alimentan de inmoralidad sexual? Que por eso se hace adicción. Si estamos ignorantes,
bloqueamos la conciencia y lo malo, lo hacemos bueno. Sin darnos cuenta que ya estamos
cautivados y atrapados con y por el enemigo. Yo creo que debemos de hablar con la verdad
de las cosas espirituales a todos!! La verdad nos hará libres.   YIYE 11/10/2014 00:27 h 4
0     0   Pues todos corren peligro grandes y chicos, mujeres y hombres, casados o solteros.
Pero mi humilde opinión personal es que si no sabes como trabaja tu enemigo, no sabrás
contraatacar. Yo he observado que si los Padres estamos ignorantes, cuanto más los hijos.
Porque? Yo he observado en mis 37 años de Cristiana, que no se habla nada de lo que está
detrás de la PORN en las Iglesias, que siempre hemos cuidado el que dirán, mientras más y
mas víctimas caen. La porno...si la ves entran espíritus?   Manolo 10/10/2014 10:18 h 3     0
0   Cuando Jesucristo dice: "coja cada uno su cruz y sígame", no quiere decir que nos
pongamos al hombro un madero para que las autoridades nos crucifiquen en las Ramblas o
en la Puerta del Sol, no; quiere decir que muramos definitivamente al yo adánico a fin de
que El que es la Vida viva en nosotros; que El(el Soberano) tome el control en el nuevo
hombre quitando el "control" del viejo hombre anulándolo. Lo mejor es pedirle que nos
mantenga limpios y puros, confiando en El no en nosotros, mora.   EZEQUIEL JOB
10/10/2014 00:04 h 2     0     0   1Jn 5:18 Sabemos que todo aquel que ha nacido de Dios,
no practica el pecado, pues Aquel que fue engendrado por Dios le guarda, y el maligno no
le toca. EL CRISTIANO SI ALGUNA VEZ PECA (NO DE MUERTE), CONFESARÁ
SU PECADO AL SEÑOR JESÚS, Y NO LO VOLVERÁ A HACER. PERO SI
"PRACTICA" EL PECADO (INMUNDICIA Y ADULTERIO) YA NO ES CRISTIANO,
YA NO ES PARTE DE LA IGLESIA. AUNQUE ASISTA Y DIGA QUE ES
CRISTIANO. "POR SUS FRUTOS LOS CONOCERÉIS" SE OLVIDARON DE "HUIR
DE LA FORNICACIÓN" (1Cor 6:18)   Juan 09/10/2014 08:32 h 1     1     0   Las cifras son
de escándalo. Muchos cristianos y debido a que nuestra carnalidad es "muy creativa"
justifican incursiones en el reino de las tinieblas viéndolo como un mal menor, ante la
presión de una sociedad cada vez más erotizada y pervertida. Una cosa es luchar contra la
tentación y otra muy distinta practicar el pecado. El ciclo adictivo de la pornografía tiene
las mismas consecuencias que la adicción a cualquier droga y aparte de la degradación
espiritual produce dependencia psicológica.       ESTAS EN: PROTESTANTE DIGITAL -
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Ante la pornografía el cristiano "tiende a autojustificarse” Lidia Martín, psicóloga, explica


las consecuencias y equipara el consumo de sexo online a la infidelidad matrimonial.
AUTOR Joel Forster MADRID 26 DE OCTUBRE DE 2012 Los cristianos no sólo tienen
un consumo de pornografía parecido a la media social, sino que además tienden a
justificarlo. Es una de las conclusiones del análisis que hace la psicóloga Lidia Martín, que
ha investigado esta problemática desde su praxis como psicóloga. Explica a este diario que
lo grave de visionar sexo online es que “cada vez se necesitarán contenidos más explícitos,
más agresivos y, lo peor, se considerará que son normales, tolerables”. Puede leer el primer
artículo de la seriey el segundo, ambos con el análisis del terapeuta Marcos Zapata. La
accesibilidad desde internet, la comodidad de un consumo desde casa y el hecho de que los
contenidos sean, en muchos casos, gratuitos.“Estos factores, sin duda, contribuyen al uso de
la pornografía”, dice Martín, que ejerce en Madrid. “No hace falta hacer grandes esfuerzos
para cruzarse con archivos de este tipo incluso sin buscarlo o buscando cosas mucho más
inocentes y absolutamente desligadas del tema. Tener el ordenador delante y no tener que
dar ninguna clase de explicación respecto a lo que se consume, facilita su uso (no como
ocurre, por ejemplo, al comprar una revista de este tipo en un kiosko, en que te tienes que
encontrar con el kioskero y además asumir que algún vecino puede toparse contigo en el
momento más inoportuno)”. Este uso tan “cuotidiano” que se puede dar de los contenidos
sexuales online no deben hacernos olvidar, sin embargo, que el riesgo es importante. “Este
terreno es tan altamente adictivo que, al igual que sucede con otras cosas, los primeros
contactos suelen ser gratuitos para convertirse después en interacciones o visionados de
pago”. La pornografía se parece a otras drogas en que, a la larga, el cuerpo se acostumbra y
genera tolerancia: “La persona se acostumbra a cierto contenido y necesita ir subiendo la
temperatura y el calado de lo que ve”, explica Martín. “SON MUCHOS LOS
CONSUMIDORES CRISTIANOS” ¿Cómo es la problemática entre cristianos? Martín
explica que la realidad es bastante decepcionante. “Esperaríamos que entre cristianos esto
no existiera o que, al menos, no fuera tan frecuente como lo es fuera de nuestras filas. Sin
embargo, son muchos los consumidores cristianos de pornografía, aunque lógicamente no
se habla abiertamente de ello”. La psicóloga explica por qué, en su opinión, la diferencia
con personas ‘no religiosas’ es tan pequeña: “Los cristianos somos personas como
cualquier otra, con las mismas debilidades, sólo que regenerados por la sangre de Cristo. Y
en ese sentido es que la cercanía con el Señor y poner nuestra mirada en Sus cosas son la
única protección real con la que contamos en estos casos. Somos igual de débiles, entonces,
que cualquier otro y privarnos del uso de estas cosas es más una cuestión de obediencia que
de falta de tentaciones”. Otro factor que según Martín explica la profundidad de la
problemática en las iglesias evangélicas, es que “hay mucho desconocimiento de hasta qué
punto esto está desaconsejado y prohibido por Dios”. Y añade: “Se tiende fácilmente a la
autojustificación, a dar explicaciones en ocasiones un tanto rebuscadas para conseguir
precisamente esto, ver con buenos ojos lo que no es bueno”. PORNOGRAFÍA COMO
INFIDELIDAD A LA PAREJA Preguntada por las consecuencias en el día a día de un
matrimonio, Lidia Martín es clara: “Yo sí defendería que hay infidelidad en el uso de la
pornografía. En el momento que se visualizan imágenes de otros de cierto tipo y con la
intención clara de crear lujuria y promover el deseo sexual; cuando se promueve, no la
pareja, sino determinadas prácticas y a través de un foco que no es la propia pareja; cuando,
por decirlo de otra forma entra un ‘tercero’ en escena, sea a nivel presencial o a través de
una pantalla, hay una infidelidad”. No ayuda el inventar etiquetas o diferenciar entre
conceptos que en el fondo tienen la misma raíz. “Somos muchas veces excesivamente
legalistas con lo que es o no una infidelidad y en el fondo no es más que una forma de
autojustificar nuestros propios deseos. Parece que si no te acuestas con alguien físicamente
no estás siendo infiel”. Para un cristiano, cree Martín, las palabras de Jesús son
suficientemente claras, cuando dijo que quien mirara con lujuria a una mujer que no es su
esposa “ya adulteró con ella en su corazón”. “De ahí que tengamos que ser un poco menos
benevolentes con nosotros mismos en cuanto a estas cosas. Ninguna esposa o esposo se
siente contento ni feliz al ver o constatar que su cónyuge consume pornografía. No
beneficia a la vida sexual de la pareja, no contribuye a la unidad del matrimonio, no
favorece que nuestro deseo sexual se oriente hacia nuestra pareja sino que, muy por el
contrario, nos distancia de ella”. CULPA QUE LLEVA A PÉRDIDA DE CONFIANZA El
sentimiento de culpa por el consumo de pornografía (tanto si se trata de una persona casa o
soltera) acaba llevando a romper la confianza en las relaciones en un entorno familiar. “En
muchas ocasiones cuando la persona se va embebiendo en la adicción también se va
aislando. Esta es una característica habitual: cada vez el elemento adictivo ocupa más y más
tiempo y facetas de la persona, hasta el punto de que termina prácticamente ‘desconectado’
de la realidad o de la faceta de la realidad correspondiente con el tema en cuestión”. Sobre
la culpa que esto genera, Lidia Martín habla de dos reacciones habituales. “Dependiendo de
qué tipo de culpa sea la que se hace presente, pueden pasar varias cosas: la culpa que lleva
a la confesión y al perdón puede ser que al principio se presentara en forma de aislamiento,
pero termine buscando el acercamiento con el cónyuge, la búsqueda de soluciones y el
abordaje del problema”. Pero cuando la culpa no se gestiona adecuadamente, “cuando lejos
de buscar la confesión y el perdón lo que se busca es la ocultación y la permanencia de la
conducta adictiva, el aislamiento y el distanciamiento de la familia están prácticamente
garantizados”. EFECTOS EN LA SOCIEDAD Ante toda esta realidad, se plantea una
pregunta preocupante: ¿Qué efecto tendrá a nivel social el consumo generalizado de
pornografía que, según todos los informes, se está dando ahora mismo entre la amplia
mayoría de los menores de edad? “Una de las cuestiones que ya estamos contemplando, no
sólo en los jóvenes, sino en los muchos adultos que la consumen, es una banalización de la
sexualidad y de las implicaciones del uso de la pornografía”. Relativizar el problema no
ayuda. “Parece que no pasa nada, pero sí pasa. Uno de los efectos más evidentes y que
acarrea también consecuencias en otros ámbitos es, principalmente, el hecho de que se ven
las relaciones sexuales como algo puramente utilitario, para cubrir una necesidad personal
inmediata, pero poco o nada tiene que ver el amor o el afecto por el otro”. Las principales
afectadas serán las mujeres. “Se tiende a la degradación de la mujer”, explica Martín, “ya
que son principalmente hombres los que hacen uso de estas imágenes y se la cosifica”. El
efecto en los consumidores es de largo plazo: “Pensemos que normalmente este es un
camino con difícil retorno, ya que se crean imágenes mentales que son imborrables,
fácilmente reproducibles una y otra vez y que generan tolerancia, por lo que la adicción
avanza sola”. El consumo repetido ahonda en el problema. “En ese sentido, cada vez se
necesitarán contenidos más explícitos, más agresivos y, lo peor, se considerará que son
normales, tolerables”. “Muchos de los comportamientos que estas imágenes muestran son
vejatorios para una de las partes y es peligroso acostumbrarse a ello y considerar que
constituyen la normalidad y no la anormalidad”, concluye la piscóloga. Lidia Martín es
columnista de este diario y puede leer sus reflexiones en el blog “El Espejo”.En el primer
artículo de esta serie destacábamos algunos de los libros publicados recientemente en
inglés. Aquí les ofrecemos una selección de libros parecida en castellano, una bibliografía
seleccionada por Marcos Zapata: “Cómo sanar las heridas de las adicción sexual” (Dr.
Mark R. Laaser, Editorial Vida), “En el altar de la idolatría sexual” (Steve Gallagher,
Editorial Vida), “Libertad en un mundo obsesionado por el sexo” (Neil T. Anderson,
Editorial Unilit), “Sexualidad sana, liderazgo sólido” (José Luis y Silvia Cinalli), “La
relación sexual y el soltero” (Joseph Knable, Editorial Unilit), “La batalla de cada hombre”
(Stephen Arteburn y Fred Stoker, Editorial Unilit), “Hacia la sanidad sexual” (John White,
editorial Certeza), “El sexo, los hombres y Dios” (Douglas Weiss, Editorial Peniel) y
“Sanidad sexual” (David Kyle Foster, Mastering Life Ministries). Además, Lidia Martín ha
participado, junto a otros autores, en el libro “Psicología y Sexualidad” (Varios autores,
Básicos Andamio).   Imprimir NOTICIAS RELACIONADAS “No puedo manejar esto
solo” (sexo online) Sexo online: silencio en las iglesias TAGS Sexo Online Adicción
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COMENTARIOS     Si quieres comentar inicia sesión o regístrate   sergio 03/02/2016
17:45 h 16     0     0   creo que ver pornografia es un acto de infidelidad hacia su esposa,
pero desear a otras mujeres sin ver pornografia tambien es un acto de infidelidad , . En mi
caso particular que he visto pornografia fui a buscar algo que yo creia que me faltaba. pero
en realidad Jesus me habia dado algo superior . Sobre el momento de tentacion uno tiene
ser obediente al llamado a la santidad que Jesus nos hace, fallamos pero Jesus no. La
medicina sigue siendo la misma.   cylider 18/08/2015 14:46 h 15     0     0   Mi caso y punto
de vista masculino. Al poco tiempo de casados apareció la falta de interés de mi esposa en
el sexo. No permite que la bese o la abrace cuando caminamos por la calle; la tomo de la
mano y se suelta; entro a la recámara cuando se está vistiendo y se enoja, como si fuera yo
un extraño. En varias ocasiones se quedó profundamente dormida en pleno acto sexual. Yo
perdí el interés y no la volví a tocar, eso la hizo feliz y yo, en la abstinencia. No he sido
infiel, ya son varios años.   nanni 27/05/2015 23:26 h 14     0     0   hola mi nombre es nanni
y estoy muy triste,enojada y ya no se que hacer. mi esposo con el cual estube casada diez
años q es el sobrino de pastor miro pornografia toda su vida al mismo tiempo q concurria a
la iglesia. yo me separe de el por este tema, me sentia degradada,nunca me miraba,la mas
fea mujer,comence a sentir celos de esas mujeres,nadie entendia pq no queria ir a
casamientos familiares,el ya ni me tocaba.hasta q no aguante mas y me separe dos años.
luego volvimos y hoy se q no lo sano.   Marina 12/08/2013 01:11 h 13     0     0   La verdad
que es una realidad horrible,yo misma la sufri de parte de mi esposo,y realmente una se
siente devastada,degradada,aún mas cuando no encuentra el motivo,porque aunque una no
le haga faltar el rol de esposa en la intimidad,sea bonita,mas alla de eso y de que vivimos en
una sociedad sexista y todo el consumismo en cuanto a marcas,productos,propagandas
apunten a un masivo contenido erótico,creo que el detonante fué que nunca haya
renunciado a ese hábito de la adolescencia,ya fueron dos veces la que le perdone,pero ya no
puedo mas,mantengo distancia,es triste,créanme que la pornografía destruye el amor y la
confianza y si mi esposo realmente no renuncia y confía en Dios ,socorre a Cris   Melqui
Ll. 06/11/2012 00:12 h 12     0     0   Este como, otros incipientes artículos sobre el tema, no
son sino 'brotes verdes'. Queda mucho por recorrer en el analisis interpretación y correcion
del problema en las Iglesias Evangélicas Españolas. Para Empezar se debería superar ya la
alergia a hablar de sexo abiertamente y de un modo claro en las Iglesias. Aún somos muy
opacos al respecto y pareciera que decir 'sexo' en la Iglesia fuese pecado.....   Marc
04/11/2012 19:12 h 11     0     0   Interesante, pero quizás por falta de tiempo, no hablo de
un hecho real. La pornografía subsiste, entre otras cosas, porque ayuda al hombre al placer
en solitario. Existen millones de hombres solos que requieren de este consumo para
satisfacer sus necesidades. Otro detalle que se le pasó por alto a la psicóloga, quizás por que
no se lo preguntaron, es porque que la porno no es consumida en pareja cuando la realidad
dice que si sucede. Es verdad que Cristo dice que, el que mira una mujer con lujuria, ya
adultero en su corazón. El versículo es válido también para la mujer que mira porno y que
son muchas más de las que se quiere admitir. Se olvidó mencionar que hay muchisimos
cristianos que ya   Paco 31/10/2012 23:56 h 10     0     0   No me malentendais, la salvacion
es por pura gracia divina. Lo que digo es que la verdadera fe se muestra con obras.   manuel
mora 30/10/2012 14:33 h 9     0     0   Filipenses 1:6,Pablo(Apostol de Jesucristo por la
Voluntad de Dios)dice...estando persuadido de esto,que El que comenzó en vosotros la
buena obra,la perfeccionará hasta el dia de Jesucristo.Una de las cualidades recibidas por el
cristiano es que tiene la mente de Cristo y que posee en su ser(una vasija de barro) la
Palabra de Dios,la cual dice..'no descubrirás la desnudez de tu hermano';por tanto El ha
elegido a lo que no es,a lo menospreciado del mundo,para avergonzar a lo que es algo en
este mundo.Cristo se hace grande en nosotros y nosotros pequeños ,hasta la desaparición de
nuestro yo adánico;por tanto nos resulta repulsivo,repugnante y desechable todo asunto
pornográfico ,como resultado   Sergio de Lis 30/10/2012 11:10 h 8     0     0   Es muy
frecuente sorprenderse por comentarios de hermanos -que pertenecen a los que se definen
como 'yo, es que soy así'- como, 'sí, yo como a cualquier hora, nunca digo no a nada...' (lo
escuché ayer), y se da la misma postura en otros aspectos, de manera que concluyes que no
se diferencian demasiado del resto de la sociedad. Es el uso -extraño- que hacen de la
libertad que hay en Cristo. Y, como bien dice Manuel Mora (7), nuestras obras, nuestra
conducta es por haber sido salvos YA. Por eso, esa libertad es también para poder rechazar
las obras de las tinieblas, que nos son propuestas constantemente. Para esos hermanos que
se sienten tan libres para disfrutar de todo, la pornografía online   manuel mora 29/10/2012
23:51 h 7     0     0   Sr.Paco,entremezcla usted varios asuntos,aunque no se lo recrimino
pues es asunto sencillo de vivir y complejo de esplicar.En primer lugar (Rom.4:4)puede
ayudarnos para comprender que no somos justificados ante Dios por nuestras obras ,ni por
nuestros esfuerzos humanos,somos justificados no por obras sino por la creencia en El por
la fe que El nos ha dado;y de igual manera mostramos esta Fe por las obras nuevas que El
nos tenía preparadas de antemano(Stg.2:18)(Ef.2:10).Es preciso distinguir entre
justificación y santificación,entre salvación y santidad,pues nuestra intervención en las
primeras es nula y en las segundas es resultante de las primeras,aunque ambas son dadas
por Dios.   Paco 28/10/2012 23:44 h 6     0     0   Aquel que no se esfuerce en la santidad, no
puede esperar ir al Reino de los Cielos, porque somos salvos por nuestras obras: según
seamos, así nos labraremos nuestro propio destino. ¿O alguno cree que Gracia significa
hacer lo que se quiera?. Yo, también lucho, esta vida es una batalla contra el pecado.  
manuel mora 28/10/2012 23:41 h 5     0     0   La deformación del area sexual en la persona
fruto del pecado solo Dios con su poder puede sanarla y retornarla al grado de santidad para
la que fue creada inicialmente como un componente primordial de la totalidad integral que
compone el ser humano.El verdadero cristiano con independencia de su estado civil debe
suplicar al Señor que lo haga y lo mantenga puro ante El.No debemos caer en la trampa
engañosa de que nosotros por nuestros propios medios podemos solventar,caso de que
exista ,algún tipo de deformación espiritual concerniente al area sexual.Si algun hermano o
hermana tiene alguna dificultad de este tipo ,debe orar a Dios para que El repare,limpie
,sane y mantenga en santidad tanto   luis gomez 28/10/2012 23:46 h 4     0     0   Un pastor
comentaba que de repente le aparecio en su movil una ventana que le invitaba a ver unas
peliculas A,ese es su nombre en Asia,y por unos segundos tuvo una terrible lucha en su
interior .El problema es la frecuencia con que vienen estas luchas y su aparente caracter
inocuo.No hago daño a nadie .Tengo curiosidad.   Pili 27/10/2012 10:21 h 3     0     0  
Lidia, me alegro mucho de que toques este tema. Ya esprese mi sentir en el artículo que
escribio Marcos Zapata. Es necesario que personas capacitadas como vosotros abordeis este
tema cuanto antes, hablando del peligro que la consumición de pornografia conlleva, dentro
y fuera del matrimonio. Gracias a Dios que tenemos hombres y mujeres que velan por el
pueblo de Dios .   Miguelángel 27/10/2012 00:06 h 2     0     0   Más que por la fuerza de la
pornografía y del pecado de fornicación, es un asunto de santidad, horror hablar de santidad
ante un evangelismo moderno, light, bajo en santidad, del cual como se está viendo y
viviendo poco ya se testifica y justifica en la palabra de Dios y sí más en el análisis y
filosofías humanas por el temor ante los llamados racionalistas y antifundamentalistas; ante
lo cual bueno es llevar presente lo que nos demanda el Apóstol San Pedro: Despojaos, pues,
de toda maldad y de todo engaño, de hipocresías, envidias y maledicencias, y como niños
recién nacidos apeteced la leche espiritual no adulterada para con ella crecer en orden a la
salvación, si es que habéis gustado cuá   Pastor Rolando A. Paiva 27/10/2012 00:06 h 1     0
0   BIEN BUEN MATERIAL Y TEMA PARA TRATARLO.
Leer
más: http://protestantedigital.com/qfamilia/28259/Ante_la_pornografia_el_cristiano_tiende
_a_autojustificarserdquo

Más del 14% de pastores lucha con la adicción al porno Un estudio Barna concluye que el
57% de pastores adultos luchan o lo han hecho contra este tipo de consumo. El porcentaje
sube al 64% de los pastores jóvenes. FUENTES The Barna Group, MundoCristiano.tv 29
DE ENERO DE 2016 22:00 h Muchos pastores luchan o han luchado contra la adicción a la
pornografía. Los más jóvenes tienen mayor riesgo de caer en esta adicción, según un nuevo
estudio Barna. "The Barna Group" dio a conocer los resultados esta semana, en base a un
estudio on line que incluyó a 432 pastores adultos y 338 pastores jóvenes. Barna planea
lanzar un informe completo, llamado "El fenómeno de la pornografía" en abril. El informe
revela que el 57% de los pastores adultos admitieron luchar actualmente o haberlo hecho en
el pasado contra este tipo de consumo. Un porcentaje que sube al 64% de los pastores
jóvenes. El 14% de los líderes de mayor edad dijeron que actualmente están aún
sumergidos en este mal, porcentaje que llega al 21% de los líderes de menor edad. Más de
uno de cada 10 pastores jóvenes describieron su lucha con la pornografía como una
adicción y uno de cada 20 pastores adultos también la consideran así. El 90% de los
pastores opina que la pornografía es un problema “mayor o mucho mayor” de lo que ha
sido en el pasado. Más de la mitad de los pastores jóvenes encuestados dicen que han
tenido un discípulo suyo que les ha pedido consejo para salir de esta adicción en el último
año. La mayoría de los líderes evangélicos reconoce que su consumo de pornografía afecta
clara y negativamente su ministerio. El 86% de los pastores que lo practican afirman sentir
mucha vergüenza por esto y el 55% viven en el constante temor de ser descubiertos.  
CÓMO ABORDARLO El estudio de Barna muestra una notable diferencia entre la forma
en que los pastores y los miembros de las iglesias piensan en cómo afrontar las
consecuencias para los líderes que están consumiendo pornografía. Más de 4 de cada 10
cristianos adultos piensan que las iglesias deberían despedir a los pastores que tienen esta
adicción. En contraste, sólo el 8% de los pastores piensan que uno de sus colegas que
consuman porno debería dimitir. Ellos ven preferible que reciban consejería y una
supervisión con rendición de cuentas.   Imprimir NOTICIAS RELACIONADAS
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online) Sexo online: silencio en las iglesias TAGS Barna Group Pastores Liderazgo
Pornografía   12 COMENTARIOS     Si quieres comentar inicia sesión o regístrate   sergio
05/02/2016 17:24 h 12     0     0   Mi opinion es que es bueno que los cristianos luchen mas
alla del porcentaje, quiere decir que creen en la santidad aunque les cueste.. La pornografia
es mala para cualquiera, no viene de Dios, pero no nos rasguemos las vestiduras porque hay
otras cosas que son tan malas como estas, .Cuidemos a los estan en esta prueba y no los
humillemos porque todos pecan en esto u otra cosa. Para aquel que ve porno, lucha , busca
a Jesus el te liberara aunque puede ser que lleve tiempo, buscalo a El!!!   Alfonso Chíncaro
(Perú) 03/02/2016 17:10 h 7     0     0   La sensualización de la vida es un peligro mayor
para la vida espiritual. Se parece en algo a transitar por un lugar ventoso, caluroso y lleno
de polvo. El calor te hace sudar y el polvo que se levanta se te adhiere con mucha facilidad.
Debes lavarte muy seguido para evitar que la suciedad se acumule. Si esa óptica
distorsionada empieza a mezclarse con tu cansancio y tus frustraciones, además de la
soledad que se hace común en los ministerios, la pornografía es una de las amenazas más
fuertes.   Respondiendo a Alfonso Chíncaro (Perú) Alfonso Chíncaro (Perú) 03/02/2016
17:36 h 9     0     0   Solo una advertencia: Como dije al inicio de mi comparación, este
problema "se parece en algo", no en todo. No pensemos que es tan concluyente o
irremediable. La biblia nos enseña que hay solución y salida definitiva a esta esclavitud.
Creamos y perseveremos. (Animo a leer los distintos títulos que se han publicado aquí).  
Alfonso Chíncaro (Perú) 03/02/2016 16:42 h 6     0     0   Es posible saber que la encuesta
proviene de los EE.UU. Tal vez no han sido claros (lo dice encima del título, no en el
texto), pero si esas cosas no son fáciles de hallar se puede guglear un poco. Por lo general,
se obtienen respuestas rápidas. Igual con el tamaño de la muestra y otros (web de Barna
Group). Pudo ocurrir que como la noticia viene de otras fuentes (así se indica), la redacción
puede corresponder más al estilo de las fuentes que al de P+D. Lean el editorial "Esa
verdad molesta".   Arturo 02/02/2016 00:09 h 5     0     0   Gracias por la noticia. A los
protestantes (cualquiera sea su denominación) les gusta levantar el dedo y acusar a la
Iglesia Católica de pecados que como Iglesia ha aceptado valientemente. A diferencia de
los protestante que no se observan arrepentimientos por sus pecados corporativos. La
pornografía ciertamente es uno de los problemas de relevancia que tenemos que enfrentar
todos los cristianos.   Respondiendo a Arturo felipe de jesus 03/02/2016 19:20 h 11     0     0
continuación: La pornografía no es un problema sino un pecado de la carne. El problema
aquí es la ADICCION y habría que indagar la insatisfacción sexual que los ha llevado a la
pornografía y a sus consecuentes fantasías eróticas y después a la acción.   Respondiendo a
felipe de jesus felipe de jesus 03/02/2016 19:13 h 10     0     0   Existe una diferencia en la
Iglesia protestante y es que se enseña el arrepentimiento, la renuncia y la vida bajo el
dominio del E. Santo. eso sí da la victoria porque sólo el Señor Jesucristo puede vencer el
pecado y sólo en él somos más que vencedores. En la I. católica se enseña a confesar,
repetir el padrenuestro, el rosario y a la semana siguiente están de nuevo. O sea es un estilo
de vida. La vida cristiana real es de someter la carne al Espíritu Santo y no a vanas
repeticiones.   Respondiendo a felipe de jesus Alfonso Chíncaro (Perú) 03/02/2016 17:29 h
8     0     0   Aunque hoy hay mayor vigilancia y eso es bueno, el problema de los sacerdotes
pedófilos permaneció en vergonzoso silencio durante años y salió a luz por la valentía de
los afectados en denunciar el delito y por la labor de la prensa. Nada de eso disculpa o
disminuye el pecado de lujuria y otros, alentado por la pornografía, entre los ministerios
evangélicos, pero suponer falta de arrepentimiento cuando se está sacando a luz el
problema es bastante desvergonzado. No hay indiferencia.   Mateo 01/02/2016 20:25 h 4
0     0   Creo también que el titular es equívoco. Dad, por favor, los datos de la encuesta
(donde, cuando, números, etc.). No obstante, si es fiable, en el ámbito que se ha realizado,
me sorprende que 6 de cada 10 "cristianos adultos" les parezca que deben tener personas así
en el ministerio pastoral. No haría falta, donde eso fuera así, mucho esfuerzo para entender
porque tanta gente le da la espalda a las Iglesias. Una membresía fría, impasible, transida de
los valores mundanos... ¿nacidos de nuevo?   Enrique 30/01/2016 23:05 h 2     3     0  
Disiento totalmente de estas afirmaciones. 1. Porque no dicen de que país provienen los
encuestados. 2. Existen en el mundo más de 800 millones de Evangélicos, lo que daría un
aproximado de +/- 8 millones de pastores. La encuesta cita 770 encuestados, lo que
significaría menos de 1 de cada 10.000 pastores existentes ¿y tienen la osadía de
generalizar diciendo que el 14 % de los pastores luchan contra la pornografía? Esto es
poner bajo sospecha toda la pastoral. ¡Una vergüenza de encuesta!   Respondiendo a
Enrique Alfonso Chíncaro (Perú) 31/01/2016 22:52 h 3     0     0   Encima del título, al
costado del número de comentarios, se indica que la información se refiere a los EE.UU.
Tal vez está muy poco destacada el lugar de origen de la encuesta.   Jmise 30/01/2016
11:16 h 1     2     0   Aunque estamos muertos al pecado nuestra naturaleza tiende hacia el
pecado. Vivimos en un mundo cada vez más sexualizado. ¡Los cristianos no somos
inmunes! -No obstante luchamos contra los apetitos de la carne (Gal. 5) Si debemos
despedir a lideres que luchan, debemos despedir a toda la iglesia. Una cosa es luchar y
pedir ayuda del cuerpo y otra es permanecer deleitándonos en el pecado. Gracia, amor,
perdón, misericordia, restauración, apoyo es lo que se necesita.
Leer
más: http://protestantedigital.com/sociedad/38466/Mas_del_14_por_ciento_de_pastores_lu
cha_con_la_adiccion_al_porno

CÓMO ZAFARSE DE LAS GARRAS DE LA PORNOGRAFÍA (5 Y ÚLTIMO)   ¿Cómo


avanzar hacia la libertad y la vida? Dios te llama a volver a formar parte de su historia y a
reconectarte con la redención y la restauración que corren a lo largo del drama.
INTIMIDAD CON DIOS AUTOR Fernando Plou 04 DE OCTUBRE DE 2015 09:45 h Me
encanta ver el programa de televisión Extreme Makeover: Home Edition [Reconstrucción
total: Edición del hogar], tan solo para ver el final, cuando la multitud grita: «¡Chófer,
mueva ese autobús!». El programa cuenta la historia de una familia que está pasando
tiempos difíciles y cuya casa tiene una necesidad urgente de reparación. Después, le sigue
un equipo de personas que viene en rescate de la familia a reconstruir su hogar y dejarlo
como nunca imaginarían. Se me hace un nudo en la garganta cada vez que veo la mirada de
gozo en los rostros de los miembros de la familia. Es una poderosa imagen de la profunda
restauración que todos anhelamos (Romanos 8). Si tu corazón y tu vida están en mal estado
debido a una obsesión con la pornografía, uno de los primeros pasos hacia la restauración
es confesarle a Dios y a otras personas que tienes un problema. Admite tu secreto. Rara
vez, un hombre atrapado en la pornografía se libera solo. Debes comenzar por hablar de tu
problema secreto con alguien experimentado en lidiar con adicciones sexuales. Además,
ayuda descargar la conciencia con unos cuantos hombres dignos de confianza. Habrá
momentos en que extrañarás el vicio de la pornografía tanto que la participación de los
demás en tu vida será lo único que te mantenga centrado y consciente de la realidad. La
transformación que perdura siempre supone la confesión de pecado y la lucha con la ayuda
de los demás (Gálatas 6:1; Santiago. 5:16). Si tu problema sale a la luz antes de que lo
confieses, tienes que dejar de mentir y reconocerlo. Debes admitir hasta dónde has llegado,
dejar de quitarle importancia y no culpar a los demás. Satanás sabe que, si un hombre no
asume toda la responsabilidad de sus elecciones, permanecerá aprisionado en la mentira de
que su problema es culpa de los demás. Al igual que Adán, quien le echó la culpa a su
esposa y a Dios cuando lo atraparon en el primer pecado (Génesis 3:11-12), un hombre que
señala con el dedo echándole la culpa a todos termina sintiéndose atrapado como una
víctima indefensa. Quizá, admitir que tienes una lucha sexual fuera de control te resulte
sumamente difícil. Satanás quiere que escondas tu lucha para que pueda tenerte aislado y
engañarte con mentiras tales como «no es tan malo» o «esta vez sí que has ido demasiado
lejos» o «realmente te mereces un descanso». Satanás será implacable en su ataque. Tratará
de acabar contigo porque sabe que un hijo de Dios tiene a su disposición gran poder para
resistirlo, y que el perdón está solo a una oración de distancia (Santiago 4:7; 1 Juan 1:9).
Abrirse a los demás puede ser arriesgado. Debes tener cuidado al elegir en quiénes vas a
confiar. Tienes que hablar con hombres que sean conscientes de su propio estado
pecaminoso y su capacidad para la lujuria; hombres que no te calificarán por tu pecado ni te
arrojarán piedras de condenación con pretensiones de superioridad moral. Necesitas
comunión con un grupo de hombres que estén de tu lado, que mantengan tu lucha en
secreto y que oren contigo, te desafíen y confíen en ti. Esta clase de rendición de cuentas
requiere una inversión de tiempo y esfuerzo, donde las conversaciones van más allá del
trabajo, los deportes y otros pasatiempos. A veces, será dolorosamente incómodo. Pero
habiendo otros hombres involucrados, tendrás un grupo de hermanos de quienes podrás
obtener fortaleza y que te ayudarán a proyectar el hombre que podrías llegar a ser para los
demás y para Cristo (1 Tesalonicenses 2:11-12). Lucha con tu historia. Una vez que
admitas tu adicción sexual, tendrás que luchar con la historia de cómo llegaste a esta
situación y comprenderla. Los patrones de mal comportamiento a menudo señalan la larga
historia de un corazón herido y vacío, en busca de «felicidad» en todos los lugares
equivocados (Juan 4:13-18). Aunque este no es momento para excusas, a menudo hay
relaciones y eventos dolorosos en tu historia que tienes que explorar con la ayuda de los
demás y de Dios. La mayoría de los hombres que están atrapados en la telaraña de la
pornografía ha aprendido a negar las heridas que sufrieron en la vida. Aun si llegan a
admitir que han recibido algunos golpes, tratan de convencerse de que no fue nada del otro
mundo. La verdad es que recibir heridas es parte de la vida en un mundo caído. Y algunas
de las heridas que sufrimos a menudo son un problema más grande de lo que querríamos
creer. Al reflexionar con sinceridad sobre los momentos clave de tu historia, menciona las
heridas reales de tu vida que te dejaron sintiéndote confundido e inseguro. Anota lo que
sucedió y cómo te afectó. Muchos hombres tienen que anotar cómo quedaron afectados al
quedar expuestos a la pornografía a una edad temprana. Otros deben enfrentar y poner en
papel la decepción de un padre ocupado que los hizo sentirse sin apoyo o los ataques de un
padre humillador que los hacía sentirse como perdedores. Será difícil considerar
detenidamente y anotar los eventos que formaron tu historia personal, pero te ofrecerá la
oportunidad de comenzar a desafiar la veracidad de lo que has creído acerca de ti mismo.
Si, por ejemplo, otras personas te ignoraron o te humillaron, probablemente se creó en ti un
sentimiento de inseguridad en cuanto a tu propia aptitud y fortaleza. Pero, con la ayuda de
tu Padre celestial y algunos hombres buenos en tu vida, puedes explorar el dolor de tu
propia historia, confirmar quién eres en Cristo y definir tu fuerza y potencial verdaderos.
Entonces, podrás ver tu verdadera valía como hombre y dejar de creer en los mensajes
falsos que te mantuvieron oprimido tanto tiempo. Llegar a ver la verdad tomará tiempo,
pero Jesús afirmó que conocer la verdad nos haría libres (Juan 8:32). Por eso, el maligno no
quiere que descubras esto. Teme que revivir los momentos que definieron tu historia de una
manera dolorosa exponga sus mentiras y te libre de ellas. También sabe que te ofrece la
oportunidad de reconstruir tu fe en Dios. Los hombres que con frecuencia buscan la
pornografía se encuentran en una grave crisis de fe. Puede que lo disimulen bien y parezcan
estar satisfechos con su vida cristiana, pero su lucha secreta delata cuán vacíos se sienten y
lo que realmente creen acerca de Dios. Sin embargo, cuando consideras detenidamente tu
historia, también creas un contexto sincero para desafiar tu incredulidad y luchar con ella.
Al igual que Jacob o el profeta Jeremías, hay momentos para que luches abiertamente con
Dios (Jueces 6:1-22; Jeremías 20:7-12). Ponerte a la altura de Dios para expresar lo que
piensas y sientes sobre los sufrimientos de la vida puede prepararte para ver al Señor bajo
una luz totalmente nueva. Cuando le hablas a tu Padre desde el corazón, puedes comenzar a
escuchar su voz profunda de verdad, la cual restaurará tu fe en Él. Aunque tal vez vuelvas a
luchar con Dios y sigas teniendo dudas persistentes, puedes llegar a tener una mayor
certeza de que el Señor realmente ofrece muchísimo más de lo que has encontrado en el
mundo para adultos. Al captar una mayor visión de la vida que Dios quiere restaurar en ti,
comenzarás a creer que realmente hay buenas razones para dejar de buscar respuestas en el
sórdido mundo de la pornografía. Aléjate de tu falsa búsqueda. Parte de la promesa del
cristianismo es que puedes ser restaurado y vivir según la fuerza y el propósito que Dios te
ha dado. Si realmente has llegado a darte cuenta de todo lo que eres y tienes en Cristo, y de
los planes que Dios tiene para que ayudes en la extensión de su reino, te desharás del
material pornográfico que tienes y jamás volverás a buscarlo. Serás como el hombre que
encontró un gran tesoro en un campo, y luego fue y vendió todo lo que tenía para comprar
el campo (Mateo 13:44). Alejarse de la pornografía no es fácil; pero, si te rindes a Dios y te
permites encontrar la vida que tu Creador quería para ti, verás que hay muchas cosas
interesantes que pueden alejarte de ella… no solo porque es algo inmoral y falso, sino
también porque Dios ha hecho para ti una vida muchísimo mejor que aquella con la que te
has estado conformando. Jesús resucitó de entre los muertos para darnos libertad y
ayudarnos a vivir de gloria en gloria, y nos liberó para vivir más cerca del propósito para el
que fuimos originalmente diseñados. Esta es la razón por la que un hombre cristiano no se
desanima, sino que quiere renunciar a «lo oculto y vergonzoso» (2 Corintios 3:17–4:2).
Cuando abras tu corazón para creer que en verdad hay una vida honesta de fortaleza,
aventura y propósito para ti en el reino de Dios, querrás hacer lo que sea necesario para
mantenerte alejado de la pornografía. En resumen, Dios tiene algo completamente superior
para ofrecerte, pero no lo encontrarás si sigues aferrándote al ídolo de la pornografía. El
profeta Jonás lo entendió mientras huía de Dios: «Los que confían en vanos ídolos, su
propia misericordia abandonan» (Jonás 2:8). A veces, puede ser difícil creer que en esta
vida haya algo más de lo que nos ofrecen nuestros ídolos, en especial cuando no podemos
verlo de inmediato como una imagen en alguna pantalla. Y Satanás no está dispuesto a
ceder con sus mentiras. Él va a seguir intentando convencerte de que el mundo de las
imágenes sexualmente explícitas es igual de bueno; pero por eso mismo la fe es tan
importante. Algunas veces, la fe en la promesa de algo mejor es lo único que tenemos para
salir adelante (2 Corintios 5:7; Hebreos 11:39-40). Aunque los continuos problemas y
dolores de la vida en un mundo imperfecto pueden hacerlo difícil de creer, Dios tiene y
quiere muchísimo más para nosotros. Pertenecemos a una historia más grande. Y, si
confiesas tu pecado y te alejas de la pornografía, puedes regresar al Señor, encontrar tu
lugar en su historia, y comenzar a vivir de verdad. Vive para la historia más grande de Dios.
Una vez que te alejes del falso mundo de las imágenes pornográficas, no encontrarás a un
Dios que está esperando para reñirte, avergonzarte y condenarte. Como en la parábola del
hijo pródigo, cuando te vuelvas al Señor, encontrarás a un Padre bondadoso que te acepta
con amor y te llena de perdón (Lucas 15:22-24). Y no se detiene allí. De manera similar al
padre del hijo pródigo, Dios restaurará a un hombre arrepentido a su posición original de
honra e importancia, dándole el privilegio de desempeñar un papel vital en su historia más
grande de rescate y renovación. La historia más amplia de Dios tiene proporciones épicas.
El bien está en una guerra constante contra el mal, el peligro acecha en cada esquina, y las
obras de sacrificio y gloria esperan a que alguien las lleve a cabo. Seamos conscientes de
ello o no, eso es lo que estamos viviendo. Es emocionante darnos cuenta de que hay cosas
más grandes sucediendo a nuestro alrededor. Y más emocionante aún es que nos unamos a
la acción. No fuimos hechos para ser espectadores pasivos que simplemente leen y conocen
los hechos de la historia de Dios. Estamos llamados a ser participantes del gran drama que
se está desarrollando (2 Corintios 5:18-21). Mientras estás enredado y perdido en el mundo
de la pornografía, aprendes a conformarte con muy poco. Pero, cuanto más te alejes de esa
vida, más en contacto estarás con las cosas más profundas de la existencia. Sin importar tu
empleo o tus recursos financieros o incluso tus fallas morales, en la historia de Dios,
encontrarás una dirección renovada para tu vida (Jeremías 29:11). Comenzarás a verte de
una manera nueva y emocionante como esposo, padre, amigo o vecino. Dios te llama a
volver a formar parte de su historia y a reconectarte con la redención y la restauración que
corren a lo largo del drama. Aun cuando tus decisiones pasadas de permitirte ver
pornografía pueden hacer que sufras algunas consecuencias dolorosas, Dios todavía te
invita a unirte a la misión y a la aventura de alistarte para una causa mayor a la de tus
propios intereses (2 Corintios 5:15). Recibir el honor de asociarte con Dios para extender su
reino volverá a imprimir un sentido de vida y propósito en tu corazón. ¡Tan solo imagínalo!
El Rey de reyes te llama a ser un guerrero que luche por ver a otros rescatados, restaurados
y liberados para su reino. Con el tiempo y una cuidadosa reflexión, comenzarás a adquirir
una comprensión más profunda del propósito único de Dios para tu vida. Al prestar mucha
atención a aquellas cosas buenas que te hacen sentir vivo o a las situaciones de la vida que
te asustan o te destrozan el corazón, comenzarás a ver con mayor claridad la posición en la
que has sido llamado a servir y a intentar grandes cosas para Dios. No importa si esto
supone un amor por el aire libre o las artes, una injusticia o dolor que tú o alguien más
cercano a ti haya sufrido, o incluso alguna actividad específica que juraste no volver a
intentar jamás, cuando empieces a usar tu fuerza y compasión por Dios y por los demás, irá
definiéndose el lugar dónde Él te quiere. La historia de Dios no es una historia común. Y, si
bien desempeñar tu papel en ella puede ser arriesgado y te costará acostumbrarte, participar
en lo que importa para la eternidad transforma la vida en una aventura real y llena de
significado. Comenzarás a ver que la libertad y la vida que has estado buscando en todos
los lugares equivocados se encuentran en una amistad íntima con Jesucristo (Juan 15:15).
Seguir a Jesús te llevará por direcciones donde hay mucho en juego; pero el verdadero
peligro está en ignorar su llamado. Lo cierto es que solo en Jesús y por medio de Él puedes
encontrar el perdón y la capacidad espiritual para vivir de verdad.   Notas (Artículos
extraídos y adaptados del librito Cuando la mirada de un hombre se desvía, de Jeff Olson,
publicado por Ministerios Nuestro Pan Diario en su serie Tiempo de Buscar. Puedes
encontrar este y otros libritos sobre diferentes temas
en: http://nuestropandiario.org/2009/09/serie-tiempo-de-buscar/ El link para la descarga
de este librito en concreto es este. Si deseas más información, puedes escribirnos
a espana@odb.org. Artículos anteriores de la serie: 1, 2, 3 y 4.
Leer
más: http://protestantedigital.com/magacin/37499/Como_avanzar_hacia_la_libertad_y_la_v
ida

CÓMO ZAFARSE DE LAS GARRAS DE LA PORNOGRAFÍA (4) 2   Los límites del


autocontrol El autocontrol por sí solo no resuelve los problemas fundamentales de esta
lucha. INTIMIDAD CON DIOS AUTOR Fernando Plou 27 DE SEPTIEMBRE DE 2015
13:25 h Muchos hombres intentan liberarse de las garras de la pornografía por medio de sus
agallas y fuerza de voluntad… y fracasan. En la mayoría de los casos, cuanto más intenta
un hombre luchar por sí mismo, tanto más difícil es resistir. Alentar a un adicto a la
pornografía a que simplemente deje de mirarla es como decirle: «No manipules, no gustes,
no toques» (Colosenses 2:21). Pablo enseñó que este enfoque puede tener «a la verdad, la
apariencia de sabiduría» pero «carecen de valor alguno contra los apetitos de la carne» (v.
23). Los hombres que se han vuelto adictos a la pornografía deben evitar situaciones
vulnerables. Pero el autocontrol por sí solo no resuelve los problemas fundamentales de
esta lucha. Si bien la pornografía es un grave problema, debemos darnos cuenta de que
también es el flagrante síntoma de un hombre que no está viviendo según el diseño de Dios
para su vida. Es importante ver que el pecado no es simplemente romper reglas; es «no
[alcanzar] la gloria de Dios» (Romanos 3:23). Es quedar destituidos de la dignidad que el
Señor colocó en nosotros y que teníamos que reflejar siempre. Esa es la razón por la que no
es suficiente que los hombres simplemente dejen de mirar imágenes sexualmente explícitas.
Por supuesto que es una meta, pero la respuesta más profunda es ayudar a la persona
afectada a recuperar más de la gloria y la vida que Dios siempre quiso para ella (2 Corintios
3:18). La historia del cristianismo nos devuelve una vida que estaba perdida; y los hombres
atrapados por la pornografía pueden disfrutar más de esa vida. Cuando Jesús se levantó de
la tumba, inició un increíble proceso de restauración que tendrá su cumplimiento final
cuando Él vuelva (Apocalipsis 21:5). Hasta entonces, cada uno de nosotros tiene libre
acceso al poder de su resurrección en cuanto le aceptamos como el único que puede
rescatarnos del castigo y el poder del pecado. En el siguiente artículo, ofreceremos un punto
de partida para saber cómo encontrar más de la nueva vida disponible solo por medio de
Jesús. (Continuaremos en próximos artículos.)   Notas (Artículos extraídos y adaptados del
librito Cuando la mirada de un hombre se desvía, de Jeff Olson, publicado por Ministerios
Nuestro Pan Diario en su serie Tiempo de Buscar. Puedes encontrar este y otros libritos
sobre diferentes temas en: http://nuestropandiario.org/2009/09/serie-tiempo-de-buscar/ El
link para la descarga de este librito en concreto es este. Si deseas más información, puedes
escribirnos a espana@odb.org.   Imprimir NOTICIAS RELACIONADAS ¿Por qué los
hombres siguen mirando? TAGS Intimidad Con Dios Fernando Plou Pornografía   2
COMENTARIOS     Si quieres comentar inicia sesión o regístrate   Alfonso Chíncaro
(Perú) 30/01/2016 17:21 h 2     0     0   Durante un tiempo prolongado dejé de visitar P+D,
por ello no encontré este artículo a mano. Muy bueno. Quisiera añadir, como complemento,
que en las tres ocasiones que hablan del ejercicio del autocontrol en la biblia (con otras
palabras: "templanza" y "dominio propio"), nunca lo encuentro solo (Gálatas 5:23, II
Timoteo 1:7, II Pedro 1:6); siempre el ejercicio del autocontrol va unido a otras virtudes
que cultivar: poder, amor, conocimiento, paciencia, piedad, fe, mansedumbre.   EZEQUIEL
JOB 27/09/2015 06:13 h 1     0     0   Hermoso, gracias hermano, espero la siguiente pa
Leer más: http://protestantedigital.com/magacin/37438/Los_limites_del_autocontrol

CÓMO ZAFARSE DE LAS GARRAS DE LA PORNOGRAFÍA (3) 3   ¿Por qué los


hombres siguen mirando? A menudo, detrás de la idolatría de un hombre hay un conflicto
basado en la duda de si Dios podrá ofrecerle algo mejor que lo que él puede encontrar en el
mundo de la pornografía. INTIMIDAD CON DIOS AUTOR Fernando Plou 19 DE
SEPTIEMBRE DE 2015 23:54 h Razones físicas. Ver pornografía inevitablemente lleva a
la fantasía y a la auto estimulación; y una ración constante de imágenes para adultos y de
desahogo físico termina afectando a la química corporal del hombre. Cuanto más habitual
se hace, tanto más su cuerpo comienza a esperar el mismo estímulo y la misma euforia.
Esta dependencia física no justifica la responsabilidad de mirar imágenes sexualmente
explícitas, pero comienza a explicar por qué tantos hombres permanecen enredados en la
telaraña de la pornografía. Cuando a un adicto se le corta la pornografía, experimenta
síntomas físicos de abstinencia. Esto desencadena un fuerte impulso para recuperar un
sentido del equilibrio. Muchos adictos sexuales informan que la abstinencia de una adicción
sexual es mucho más prolongada e intensa que la abstinencia de las drogas o el alcohol.19
Pero, por supuesto, hay mucho más que un simple apego físico. Por más intensa que sea
esta conexión, hay razones aún más profundas que explican por qué un hombre sigue
mirando pornografía. Beneficios personales. Los hombres no se vuelven adictos tan solo al
material para adultos. Se vuelven adictos a los efectos que este ejerce sobre ellos al mirarlo,
hasta un punto en que parece que no pueden vivir sin él; y el beneficio va mucho más allá
de la simple gratificación sexual. Ver pornografía satisface algo muy importante en el
fondo del corazón de un hombre. Al analizar el corazón de los hombres adictos a la
pornografía, descubrimos que hay al menos tres beneficios personales que les llevan a
seguir procurando más. 1. Un escape fácil. A veces, un hombre se lanza al mundo de la
pornografía simplemente para desligarse de las presiones de su vida. Quizá, experimente
cierta tensión y agotamiento por las demandas que se le han impuesto, ya sea del empleo, el
matrimonio, la familia o la iglesia. Y, con muy poco esfuerzo, puede permitirse una fantasía
sexual y fácilmente encontrar el descanso que a menudo cree que se merece. Junto con su
intento de escapar, los hombres también buscan llenar el vacío que tienen dentro. 2. Una
falsa afirmación. Todos los hombres tienen un deseo dado por Dios de ser fuertes.
Anhelamos saber que tenemos lo necesario para ser firmes y enérgicos y lidiar con los
desafíos de la vida. Trágicamente, el mundo está lleno de hombres inseguros de sí mismos.
En vez de sentirse confiados, en las vidas de la mayoría, hay personas y eventos que les han
hecho sentirse débiles e ineptos en muchas áreas fundamentales. Si bien la mayoría de los
hombres trata de esconder sus dudas e inseguridades detrás de una fachada bien ensayada,
su corazón sigue anhelando afirmación, como los pulmones ansían el oxígeno. Y, al mirar
imágenes para adultos, el hombre cree que encuentra aquello que ansía. El mundo de
fantasía de la pornografía es un lugar donde un hombre inseguro puede ir para sentirse
mejor consigo mismo. Imaginar que la atractiva mujer que está mirando le corresponde de
buena gana y que él la complace provee un poderoso estímulo a la confianza en sí mismo.
Aun cuando sea de corta vida y artificial, fantasear con conquistar sexualmente a la belleza
que aparece en la imagen lo ayuda a conseguir un falso sentido de fortaleza y seguridad en
sí mismo. 3. Una falsa aventura. Algo ausente en la vida de un hombre absorto en el mundo
de la pornografía es la aventura. Dios nos dio a todos el anhelo de correr ciertos riesgos y, a
veces, de salir de nuestra comodidad. Quiso que nos atreviéramos a grandes cosas y nos
arriesgásemos por una causa mayor. Por supuesto, eso no quiere decir que debamos vivir
despreocupada y tontamente. Hay un momento para sopesar los riesgos y calcular el costo.
Pero también, a veces hay que seguir a Dios y arriesgarse a lo desconocido, a expensas de
todo lo demás. Si bien tener una amistad con Dios y seguir su llamado para extender su
reino es lo mejor que nos puede pasar, a veces, no es algo seguro. De hecho, seguir al Dios
vivo a un territorio desconocido es el mayor riesgo que jamás correremos y la aventura más
increíble que podamos vivir. El problema es que ese nivel íntimo de aventura está ausente
en la vida de muchos hombres. En vez de caminar con Dios y asumir sus riesgos, lo cual
requiere dar un paso de fe, muchos hombres tienden a vivir vidas predecibles y a ir a lo
seguro cuando más se les necesita. Tristemente, demasiados hombres que afirman tener a
Jesús como su Salvador viven más como el tercer siervo en la parábola de los talentos
(Mateo 25:14-30). A diferencia de los dos primeros siervos fieles que corrieron el riesgo,
salieron e incrementaron el dinero que su amo les había confiado, el tercero fue a lo seguro.
Tomó el dinero que su amo le había dejado para administrar y lo escondió en la tierra. Una
y otra vez, las historias de la Biblia muestran que la aventura forma gran parte de lo que es
seguir a Dios. Pero, cuando los hombres se niegan a entrar junto al Señor en el territorio
desconocido de una relación o de una nueva dirección en la vida donde el resultado es
incierto, terminan sintiéndose vacíos y aburridos. En su aburrimiento, muchos hombres
usan la pornografía para tratar de llenar lo que falta. Ver imágenes para adultos puede
devolver sentimientos de emoción y drama a la vida de un hombre. Incluso el riesgo de que
lo atrapen proporciona una emoción que saca a un hombre de su estado «de capa caída». Y
si bien muchos saben que mirar pornografía está mal y que la emoción es efímera, se
aferran a ella porque es la única respuesta que se les ocurre para su aburrimiento. Considera
la historia bíblica de David y Betsabé. El rey estuvo en la posición de mirar a Betsabé
mientras se bañaba porque no estaba viviendo según su propósito. En la época del año
«cuando los reyes [salían] a la batalla» a dirigir a sus tropas, David, el rey guerrero, se
quedó (2 Samuel 11:1-2). La historia implica que su decisión lo dejó aburrido, y este tedio
le costó caro. Ya casi al anochecer, inquieto e incapaz de dormir, el rey se levantó de la
cama y comenzó a caminar por la azotea del palacio. Esa noche, no salió porque estuviera
solo o extrañara a sus hombres. Estaba allí, caminando de un lado a otro como un león
enjaulado porque estaba aburrido y echaba de menos comandar su ejército. Luego, vio a
una bella mujer que estaba bañándose. La emoción de ver a Betsabé por primera vez
aparentemente lo fascinó. Cuanto más miraba, tanto más vivo se sentía. Y aun cuando ella
pertenecía a otro hombre, él usó su poder como rey para tomarla para sí. Razones
espirituales. Es vital que el hombre reconozca lo que consigue con la pornografía. Esto abre
la puerta para que comprenda cómo la usa para lidiar con la tensión y llenar el doloroso
vacío en su vida. También le ayuda a comenzar a ver las razones espirituales por las que
permanece atrapado. 1.Idolatría. Muchos hombres aprenden a depender de la pornografía
para resolver sus inseguridades, vacío y tensión. Por eso, llegan a pensar en ella como una
de sus mayores necesidades. Esto no es ni más ni menos que idolatría. A medida que la
pornografía crece hasta convertirse en un ídolo en la vida de un hombre, este comienza a
creer que no puede vivir sin ella. Su actitud ya no es «puedo dejarla en cualquier
momento». En muchos casos, cree que, si no alquila ese DVD o no mira cómo está ese
nuevo sitio en la red, va a perderse algo que necesita desesperadamente. 2. Incredulidad.
Muchos hombres cristianos saben que está mal llenar sus mentes con imágenes sexuales y
que esto reduce su capacidad de relacionarse con los demás de una manera saludable. Pero,
en lo más profundo de su corazón, no les importa. En la mayoría de los casos, no es que un
hombre no pueda dejar la pornografía; no quiere dejarla porque cree que nada más llenará
su vacío. A menudo, detrás de la idolatría de un hombre hay un conflicto basado en la duda
de si Dios podrá ofrecerle algo mejor que lo que él puede encontrar en el mundo de la
pornografía. Los hombres suelen pensar que la confianza en ellos mismos y la aventura que
obtienen en el mundo de fantasía de cuerpos perfectos y seducción no pueden superarse.
Isaías 22 nos da un ejemplo de este tipo de incredulidad espiritual en los corazones del
pueblo de Dios. El profeta previó que Jerusalén sería atacada por un ejército extranjero. En
vez de volverse a Dios en busca de ayuda y provisión, el pueblo decidió manejar la
situación por su cuenta. Cuando sus esfuerzos fallaron, vino la desesperanza. Resignándose
a la derrota, el pueblo dijo: «Comamos y bebamos, que mañana moriremos» (v. 13). En
otras palabras: «Lo menos que podemos hacer es darnos la gran vida hoy, porque es lo
único que nos queda». Cuando un hombre no cree que Dios puede ofrecerle una alternativa
mejor, toma el asunto en sus propias manos y comienza a conformarse con lo que puede
obtener. En muchos casos, algo que hace crecer la incredulidad del hombre es una
comprensión incompleta del cristianismo, la cual reduce seguir a Dios a poco más que vivir
bien, manteniendo una lista de reglas externas. Muchos hombres que han caído en pecado
sexual han tratado de cumplir externamente con las normas legalistas de su comunidad
religiosa. Pero no sirvió de mucho. En todo caso, empeoró su aburrimiento. Un hombre dijo
que, si guardar las reglas era lo mejor que el cristianismo tiene para ofrecer, entonces
preferiría quedarse con la pornografía. Cumplir una serie de reglas no hace mucho por el
corazón del hombre (2 Corintios 3:6). En sí, es aburrido y no puede competir con el
emocionante mundo de las imágenes cargadas de contenido sexual. Pero parte de la buena
noticia del cristianismo es que seguir a Jesús es mucho más que simplemente seguir una
lista de cosas que se deben o no se deben hacer. Jesús no sacrificó su vida tan solo para que
pudiéramos enderezar nuestro comportamiento. Nos rescató del pecado y la muerte para
restaurarnos para sí y para que cumpliéramos el propósito para el que fuimos creados.
Porque Dios envió a Jesús al mundo «para que vivamos por medio de Él» (1 Juan 4:9). 3.
El maligno. La idolatría y la incredulidad no son lo único que se interpone entre un hombre
atrapado en la pornografía y la vida plena en Cristo. También hay un enemigo real que hará
todo lo que pueda para impedir que tengamos una relación con Dios, a quien él mismo dio
la espalda hace mucho tiempo. Es de vital importancia entender que la lucha con la
pornografía coincide con la advertencia de Jesús de que hay un ladrón que vino a «robar y
matar y destruir» la vida que podemos tener por medio de Cristo (Juan 10:10). Esto no
implica en absoluto que el hombre no es responsable de ceder a la tentación de mirar
imágenes sexualmente explícitas, pero nos ayuda a entender el papel del maligno en
enardecer su batalla. La Biblia hace referencia a Satanás como el «dios» de este mundo (2
Corintios 4:4). Él es la fuerza impulsora detrás de una oscura industria que cuelga imágenes
sucias frente a los hombres para atraerlos y llevarlos lejos de lo que pueden llegar a ser, y
del camino superior creado para ellos. Incluso es quien orquesta algunos de los momentos
de tentación sexual. Por supuesto, el hombre siempre es completamente responsable cuando
sucumbe a la tentación sexual. Pero la idea de «darse un gusto» no siempre viene de la
bestia en su interior. Hay momentos en que un hombre puede estar ocupándose de sus
tareas diarias y de repente sentir un fuerte impulso de ver pornografía. Ya sea que la
tentación haya sido activada por un anuncio que aparece en el ordenador, un anuncio en la
televisión, o un pensamiento «al azar» que parece salir de la nada, no es algo que se buscó.
Es como si la tentación acechara. Algunas veces, la tentación viene del maligno que anda
rondando como un león hambriento «buscando a quien devorar» (1 Pedro 5:8). En última
instancia, Satanás es el autor de la siniestra mentira de que Dios no puede ofrecer nada
mejor que los inmediatos placeres del pecado. El maligno ha estado vendiendo diferentes
versiones de esta mentira desde aquel fatídico día en el Edén, cuando le mintió a Eva acerca
de su Creador (Génesis 3:1-4). Él puede ser especialmente convincente en un momento de
tentación sexual, ya sea que haya orquestado la tentación o no. Y, cuanto más participen los
hombres de sus mentiras, tanto más quedarán atrapados.   (Continuaremos en próximos
artículos.)   Notas (Artículos extraídos y adaptados del librito Cuando la mirada de un
hombre se desvía, de Jeff Olson, publicado por Ministerios Nuestro Pan Diario en su serie
Tiempo de Buscar. Puedes encontrar este y otros libritos sobre diferentes temas en:
http://nuestropandiario.org/2009/09/serie-tiempo-de-buscar/ El link para la descarga de este
librito en concreto es este. Si deseas más información, puedes escribirnos a
espana@odb.org.   Imprimir NOTICIAS RELACIONADAS Los peligros de la pornografía
TAGS Adicciones Intimidad Con Dios Fernando Plou Pornografía   3 COMENTARIOS    
Si quieres comentar inicia sesión o regístrate   Alfonso Chíncaro (Perú) 30/01/2016 17:52 h
3     0     0   Si se publica mi comentario anterior, quisiera aclarar que no apoyo la aberrante
tendencia de echarle la culpa del vicio de la pornografía y otras desviaciones a las mujeres
que usan trajes provocadores. En ningún momento es mi intención quitar responsabilidad,
sino señalar una vulnerabilidad que es real. He leído declaraciones de modistos famosos de
los 60's, diciendo que diseñan para que una mujer atraiga las miradas de todos. De allí hasta
hoy, ahora pensamos que generar deseo es una virtud.   Alfonso Chíncaro (Perú)
30/01/2016 17:44 h 2     0     0   Haciendo énfasis en el verbo "seguir" de la pregunta ¿por
qué los hombres siguen mirando?, hay un elemento que afecta a la mayoría. Es
relativamente fácil alejar los estímulos del alcohol y las drogas, porque cuentan con
desprestigio social, pero hoy en muchos la sensualidad se ha vuelto un valor, algo digno de
elogio, que se debe procurar. Muchos se sienten bien con su aspecto si provoca deseo
sexual, aunque no tenga ningún interés en tener actividad de ese tipo.   EZEQUIEL JOB
23/09/2015 02:11 h 1     0     0   Los cristianos siguen mirando pornografía porque no
confiesan, ni se arrepienten, ni reconocen que es malo a los ojos de Dios, Dios dice:"Sal
101:3 No pondré delante de mis ojos cosa injusta. Aborrezco la obra de los que se desvían;
Ninguno de ellos se acercará a mí." No tiene nada de justo mirar pornografía, el pecado
entra por los ojos, se aloja en la mente, es el momento de confesar y apartarse (1Jn1:9)
(Prov28:13), caso contrario se volverá acción y muerte espiritual (Stg1:13-15).
Leer
más: http://protestantedigital.com/magacin/37361/Por_que_los_hombres_siguen_mirando

CÓMO ZAFARSE DE LAS GARRAS DE LA PORNOGRAFÍA (2) 3   Los peligros de la


pornografía La sociedad, las mujeres, las relaciones conyugales, y los usuarios individuales
sufren consecuencias devastadoras. INTIMIDAD CON DIOS AUTOR Fernando Plou 13
DE SEPTIEMBRE DE 2015 13:20 h Algunos bromean diciendo que el peor daño que la
pornografía puede causar es cortarse el dedo con papel. No podrían estar más equivocados.
La pornografía no es un vicio inofensivo. La verdad es que la sociedad, las mujeres, las
relaciones conyugales, y los usuarios individuales sufren consecuencias devastadoras. Es
perjudicial para la sociedad. Desde el inicio de la revista Playboy en 1953, el ciudadano
medio lentamente se ha vuelto más tolerante a las imágenes para adultos, pero no sin
severas consecuencias. Los investigadores han notado que una exposición periódica a la
pornografía puede llevar a cometer actos de violación y abuso sexual infantil. En un
estudio, el 86% de los violadores convictos confesaron hacer uso periódico de la
pornografía, y el 57% reconoció que trató de recrear una escena pornográfica durante la
violación. El mismo estudio reveló que el 87% de los que abusaron de niñas y el 77% de
los que abusaron de niños hacían uso periódico de pornografía dura. Otro estudio encontró
que el 51% de los estudiantes masculinos expuestos a pornografía violenta indicaron que
probablemente violarían a una mujer si pudieran salirse con la suya. En un sentido más
general, la pornografía tiene un efecto perjudicial sobre las actitudes públicas en cuanto al
sexo. Rebaja la relación sexual llevándola fuera del contexto del matrimonio. También
promueve una visión superficial e irreal del sexo que ignora por completo la amenaza de
embarazos no deseados o de contraer enfermedades de transmisión sexual. Mirar
pornografía te expone a la mentira de que el sexo es impersonal y que puedes tener
relaciones sexuales con cualquiera, en cualquier momento y sin consecuencia alguna. Es
degradante para las mujeres. Con frecuencia, las mujeres son explotadas en el mundo de la
pornografía. Algunas de las historias más tristes son las de mujeres que participaron en la
realización de películas para adultos. En muchos casos, las mujeres son coaccionadas para
que lleven a cabo actividades humillantes, degradantes y abusivas, a fin de satisfacer
sexualmente a los personajes masculinos. De hecho, la mayoría de las mujeres que entra en
la industria de los videos pornográficos (al menos las que entran por voluntad propia), hace
una película y luego renuncia, debido a que es una experiencia extremadamente denigrante.
La depravada propaganda de la pornografía es la responsable de difundir la mentira de que
las mujeres están disponibles y dispuestas en todo momento para satisfacer las exigencias
sexuales de un hombre. En la mayoría de los casos, muestra a las mujeres como objetos sin
capacidad de razonamiento, que solo existen para ocuparse de los caprichos sexuales de un
hombre. En última instancia, alienta a mujeres de todas las edades a regalar uno de sus
dones más preciados e íntimos, y permitir que otros lo exploten para obtener beneficio
monetario o sexual. Es dañino para los matrimonios. Es solo cuestión de tiempo antes de
que un esposo le transmita la infección de la pornografía a su matrimonio. Contrariamente a
lo que algunos nos harían creer, el material sexualmente explícito no realza la relación
sexual entre esposos; la arruina. Y recuperar la intimidad y la confianza es un proceso largo
y escabroso. La pornografía crea exigencias irreales en cuanto a la frecuencia de las
relaciones sexuales, los actos sexuales específicos, y la naturaleza de la respuesta de la
mujer, por nombrar solo algunas. Rara vez la vida real está a la altura de lo que se
representa en el mundo falso de las películas para adultos. Cuando un esposo exige que la
realidad imite su fantasía, las relaciones sexuales se vuelven vacías para él y denigrantes
para su esposa. Al final, ambos se sienten resentidos y menos interesados en tener
relaciones sexuales. Más aún, mirar imágenes sexualmente gráficas no hace que un esposo
desee más a su esposa; todo lo contrario. Un investigador descubrió que, cuando a los
hombres se les mostraba fotografías de modelos de Playboy, posteriormente afirmaban que
disfrutaban de menos amor conyugal que otros hombres a los que se les había mostrado
imágenes no pornográficas. Muchos hombres que devoran imágenes sexuales injustamente
comparan a sus esposas con lo que han visto. Y ninguna esposa puede estar a la altura de la
realzada imagen juvenil y de formas perfectas de las páginas centrales. Una esposa dijo:
«Aunque yo era cuidadosa con mi vestimenta y mi figura, descubrí que mi esposo criticaba
cada vez más mi apariencia… No era lo suficientemente atractiva como para competir con
las modelos jóvenes y alteradas quirúrgicamente… Al final, él perdió todo interés en mí
como pareja sexual. Esto tuvo un impacto devastador en la opinión que yo tenía de mi valía
como mujer. Creó tal desesperación en mí que comencé a descuidar mi apariencia». En
casos extremos, mirar pornografía puede llevar al abuso sexual en la relación conyugal. Se
considera un abuso sexual que un esposo coaccione a su esposa para que recree algo que él
ha visto en la pornografía. Un esposo imprimió sus fotografías para adultos favoritas de
Internet y las tenía guardadas en un cuaderno. Varias veces a la semana, hojeaba el
cuaderno como si fuera un catálogo, escogía una escena y luego obligaba a su esposa a
representarla. Es destructiva para los usuarios. La pornografía corrompe las mentes de sus
consumidores. Los hombres que miran imágenes sexualmente explícitas quedan tan
afectados por lo que ven que solo pueden contemplar a las mujeres como objetos sexuales.
En vez de aprender cómo disfrutar y realzar la mente y el corazón de una mujer, terminan
centrándose en su cuerpo y fantaseando en cómo explotar su belleza física. De manera lenta
pero segura, ver imágenes de desnudos condiciona a los hombres a desnudar a las mujeres
en sus pensamientos e imaginar cómo sería tener un encuentro sexual con ellas. De hecho,
la mayoría de los hombres que deja de ver pornografía queda horroriza al saber el grado en
que esto ha afectado su opinión de las mujeres, al verlas como objetos sexuales. Mirar
pornografía también afecta la manera en que los hombres se ven a sí mismos. Los hace
sentirse superficiales, sucios, débiles y totalmente descalificados para servir en el reino de
Dios. Y, cuanto más miran, tanto más sus corazones pierden contacto con la vida para la
que fueron diseñados. Ver imágenes sexualmente explícitas es otro vicio que impide que un
hombre perciba el propósito de Dios para su vida y llegue a cumplirlo. Y, a medida que la
pornografía sigue cegando su corazón y llevándolo cada vez más lejos de donde se
encuentra la verdadera vida, será solo cuestión de tiempo antes de que las imágenes para
adultos que tanto mira se conviertan en una adicción esclavizante «para cometer con avidez
toda clase de impurezas» (Efesios 4:18-19). El grado de esclavitud puede oscilar entre una
adicción de nivel uno (grave) a una adicción de nivel tres (severa). En una adicción de nivel
uno, un hombre ya no tiene un simple interés superficial en el material para adultos… está
obsesionado con mirarlo. Ha pasado de toparse con él ocasionalmente a desviarse en forma
deliberada de su camino para mirarlo. En una adicción de nivel dos, el hombre intenta
relacionar el mundo de fantasía de la pornografía con el mundo real. No es poco frecuente
que un hombre intente recrear en la vida real lo que ha estado viendo. Puede que trate de
representar con su esposa lo que ha visto, ya sea que ella lo sepa y consienta o no. A
medida que su lucha se hace más intensa, puede que recurra al teléfono o al sexo
cibernético, trate de buscar mujeres para un encuentro sexual de una sola noche, o incluso
solicite a una prostituta. Muchos hombres permanecen en una adicción de nivel uno o dos
durante años y nunca van más allá. Si un hombre avanza hacia una adicción de nivel tres (y
hay muchos que lo hacen), participan de formas más severas de pornografía, incluyendo la
pornografía infantil y el sadomasoquismo. Y, como la pornografía desinhibe y embota la
conciencia en cuanto a lo que está mal y es dañino, también puede llevar a un grave
comportamiento criminal, como la violación y el abuso sexual infantil. Los hombres que
quedan esclavizados a una adicción a la pornografía se identifican con una o más de las
siguientes declaraciones: Busco pornografía con frecuencia. A menudo, paso parte del día
esperando poder ver pornografía. Cambio constantemente de opinión sin poder decidir si
mi problema está fuera de control o bajo control. Suelo comparar a mi esposa o a mi novia
con las mujeres que veo en la pornografía. A menudo, prefiero mirar pornografía a tener
intimidad sexual con mi esposa. Me niego a hablar con otros acerca de mi problema
secreto. Miento para encubrir mi lucha. Mirar pornografía me ha llevado a graves
problemas: la pérdida de mi empleo o mi matrimonio, deudas financieras, una enfermedad
de transmisión sexual, un arresto o un embarazo no deseado. Una adicción a la pornografía
no se desarrolla de la noche a la mañana. Conquista a un hombre lentamente, y hay
múltiples factores en juego.   (Continuaremos en próximos artículos.)   Imprimir
NOTICIAS RELACIONADAS Cuando la mirada de un hombre se desvía TAGS Intimidad
Con Dios Fernando Plou Sexo Abuso Sexual Adicciones Pornografía   3 COMENTARIOS
Si quieres comentar inicia sesión o regístrate   Alfonso Chíncaro (Perú) 30/01/2016 18:00 h
3     0     0   La pornografía hace daño, un daño grave. Simplemente eso.   flash 14/09/2015
17:52 h 1     0     0   El problema no es la pornografía, sino las personas. Habría que ver,
¿qué motiva a ver eso? Del la misma manera, podríamos poner en el banco de los acusados
al televisor.   Respondiendo a flash Jedidías 16/09/2015 00:10 h 2     0     0   Bueno, eso es
bastante discutible. De esa forma, tampoco deberíamos evitar el tráfico de drogas, ya que
ellas no serían el problema, sino sus consumidores. Y lo mismo con lo demás, como la
prostitución, etc. Evidentemente, la responsabilidad es de los usuarios. Pero hay una
diferencia entre una TV y una revista pornográfica, creo yo.
Leer más: http://protestantedigital.com/magacin/37295/Los_peligros_de_la_pornografia
CÓMO ZAFARSE DE LAS GARRAS DE LA PORNOGRAFÍA (1) 1   Cuando la mirada
de un hombre se desvía Trágicamente, la mayoría de los hombres no admite que tiene un
problema hasta que ya ha sido atrapado por ello. Pero no tiene por qué ser así: hay salida
del pantano de la autodestrucción sexual. INTIMIDAD CON DIOS AUTOR Fernando
Plou 05 DE SEPTIEMBRE DE 2015 23:55 h 1. Tensos por las exigencias de la vida El
hombre detrás del escritorio estaba inquieto. No veía la hora de que el día llegara a su fin.
Aunque era bueno en su empleo, ya no se dedicaba con entusiasmo. Antes, pensaba que su
trabajo presentaba desafíos y le brindaba satisfacciones. Ahora, simplemente le aburría.
Vivía con una sensación constante de que seguramente había algo más en la vida que la
rutina de ir a trabajar y llegar a fin de mes. Faltaba algo importante en su vida… pero no
sabía qué. Ya ni se acordaba cuándo había empezado a vivir por inercia: en su vida
familiar, su fe e incluso sus actividades de ocio. Cuando se dejó caer frente a su ordenador
en casa, el deseo de huir y el anhelo de aventuras llevaron su atención en una dirección
conocida. Imágenes prohibidas habían estado dándole vueltas en la mente todo el día, y
ahora eran lo único en lo que podía pensar. Una vez que se conectó a Internet, entró en
direcciones conocidas que, finalmente, lo llevarían a sitios en la red donde ya había estado
muchas veces. Cuando las imágenes comenzaron a cargarse en la pantalla, supo que no
había marcha atrás. Sintió una ráfaga de entusiasmo mientras navegaba de página en
página. Esa adrenalina era placentera. Mirar imágenes sexualmente explícitas hacía que su
aburrido corazón se volviera a sentir vivo. El alivio venía con facilidad mientras estaba
absorto en su propia fantasía. Durante unos breves momentos, disfrutó de la euforia
pasajera. Pero luego, la vergüenza irrumpió como una tormenta violenta. Se sintió sucio y
débil. Con un profundo suspiro, se cubrió el rostro con las manos. No podía creer que lo
había vuelto a hacer. En cierto grado, sabía que su problema estaba fuera de control. Quería
buscar ayuda, pero se sentía demasiado avergonzado. ¿Qué pensarían los demás de él?
¿Cómo podría decir la verdad alguna vez? Temía perder todo aquello que significaba algo
para él y, sin embargo, no sabía cuánto tiempo más podría seguir llevando una doble vida.
Asqueado consigo mismo, prometió que lo dejaría. Así era como generalmente trataba de
resolver su confusión interior. Le rogaba a Dios que le perdonara y prometía que esta vez
hablaba en serio. Casi se creyó la ya gastada frase, pero, muy en el fondo, sabía que no
sería para siempre. Si no había un cambio, solo era cuestión de tiempo antes de que
volviera a caer en la tentación. Tristemente, la historia de este hombre es algo muy normal.
Muchos cargan un oscuro secreto que los deshonra y envenena sus relaciones
interpersonales. Parece que el público se está haciendo cada vez más consciente del
problema. Pero a la comunidad cristiana le falta mucho camino por recorrer para reconocer
el alcance de este cáncer dentro de su propio terreno. La verdad es que una multitud de
hombres cristianos, tanto jóvenes como adultos, y de todas las profesiones y condiciones
sociales, miran con frecuencia imágenes sexualmente explícitas. No todos los hombres que
han visto pornografía son adictos a ella, pero muchos sí. Y cualquiera que eche una mirada
ocasional o se tope con ella accidentalmente está en peligro de caer en el vicio.
Trágicamente, la mayoría de los hombres no admite que tiene un problema hasta que ya ha
sido atrapado por ello. Algunos, en su necedad, creen que tienen el control de su hábito.
Otros se sienten impotentes y descontrolados, y viven en un confinamiento solitario por
elección propia. Pero esto no tiene por qué ser así. Hay una salida del pantano de la
autodestrucción sexual. Si luchas con la tentación de ver material pornográfico o conoces a
alguien atrapado en este problema, nuestra intención es comunicar que no estás solo.
Juntos, tomaremos una mayor conciencia del problema de la pornografía y de los múltiples
aspectos de la lucha de un hombre contra la tentación de ver imágenes sexualmente
explícitas. Y, gracias a la resurrección de Aquel que sacrificó su vida por nosotros, también
descubriremos que hay una manera de que un hombre sea restaurado a la gloria y vida
originales para las que Dios lo creó desde el principio (Romanos 6:4).   ¿QUÉ ES LA
PORNOGRAFÍA? Con los años, nuestra cultura secular ha relajado su definición de lo que
es la pornografía. Lo que hace 30 años solía considerarse como material exclusivo para
adultos, ahora suele clasificarse para menores acompañados o incluso para mayores de
trece años. Aunque puede que algunos ajusten sus criterios para que encajen con sus
propios deseos, este librito define como pornografía cualquier imagen o descripción de
desnudos o actividades sexualmente gráficas que se hace y se ve para propósitos de
provocar excitación y comportamientos sexuales inapropiados. Por supuesto, no todas las
descripciones o imágenes de desnudos y comportamiento sexual (como los que se
encuentran en material educativo o libros de texto médicos) son pornográficos. Incluso el
Cantar de los Cantares de Salomón, en el Antiguo Testamento, contiene metáforas gráficas
de interacción sexual entre un hombre y su esposa. Pero, a diferencia de la pornografía, la
intención es enseñar acerca del diseño de Dios para la sexualidad humana, no inflamar la
inmoralidad sexual. Existen varias formas de pornografía. Este librito no tratará algunas de
las formas más aberrantes existentes. El enfoque aquí será sobre dos de las formas de
pornografía más comunes: La «blanda» y la «dura». La pornografía blanda presenta
mujeres desnudas o escasamente vestidas. Destaca los senos y los órganos genitales pero no
muestra relaciones sexuales. La pornografía dura incluye todo lo antes mencionado, pero
también muestra diversos tipos de relaciones sexuales, forzadas o espontáneas, entre dos o
más personas. Los productores de imágenes exclusivas para adultos tienen mucha
experiencia en cómo aprovechar los recursos de la tecnología más avanzada para ofrecer su
producto. Cuando la televisión por cable se hizo más popular en la década de 1970, los
pornógrafos comenzaron a abastecer los televisores con imágenes sexualmente explícitas.
Cuando el uso de reproductores de vídeo comenzó a incrementarse en la década de 1980, la
industria pornográfica rápidamente dejó la cinta de película de 16 mm para introducirse en
las cada vez más populares cintas de vídeo. Los «aficionados» también comenzaron a usar
videocámaras para hacer y vender videos caseros sexualmente explícitos. Y, con la
popularidad de la televisión por cable y satélite, y la difusión de Internet en las décadas de
1990 y 2000, la pornografía se ha propagado agresivamente en la televisión y en las
pantallas de los ordenadores a nivel mundial. Sin embargo, la venta de pornografía quizá no
se hubiese convertido en la floreciente industria que es hoy de no ser por una decisión
tomada por la Corte Suprema de los Estados Unidos en 1973. Ese año, la Corte Suprema
resolvió que la pornografía estaba protegida por la Primera Enmienda de la Constitución de
los Estados Unidos. En poco tiempo, la industria de películas para adultos creció hasta
llegar al enorme tamaño que tiene hoy.   EL TAMAÑO DE LA INDUSTRIA DE LA
PORNOGRAFÍA El dinero proveniente de la pornografía. Vender pornografía es un gran
negocio. En los últimos 40 años, la industria de la pornografía se ha disparado a nivel
mundial, y las cifras son espeluznantes. Se ha informado que las ventas en la industria del
sexo para el año 2006 fueron de 97.000 millones de dólares. Y eso no toma en cuenta las
ganancias no declaradas. La disponibilidad de la pornografía. En Estados Unidos, la
cantidad de librerías para adultos y otros puntos de venta para la pornografía dura sobrepasa
a los restaurantes de la franquicia McDonald’s en casi 3 a 1. El material pornográfico puede
conseguirse fácilmente en cualquier parte. Se vende en las gasolineras, en las tiendas de
comestibles y en los hoteles. Además, Internet ha llevado la pornografía a otro plano. Ya
han quedado atrás los días en que los hombres tenían que dejar sus hogares o sus empleos
para encontrar imágenes sexualmente explícitas. Con solo un clic, aquellos con acceso a
Internet tienen el «lujo» de seleccionar entre más de 4,2 millones de sitios pornográficos en
la red. En los últimos años, los dispositivos móviles pueden descargar y mostrar vídeos para
adultos. Los ingresos anuales provenientes de la pornografía en la telefonía móvil a nivel
mundial están creciendo rápidamente y se espera que pronto lleguen a varios miles de
millones. El consumo de la pornografía. Se estima que más de 40 millones de adultos en
Estados Unidos visitan con regularidad sitios pornográficos en Internet. En 2005, el 55% de
las películas que se alquilaron en los hoteles eran pornográficas. En 2002, uno de cada
cuatro norteamericanos adultos que fueron encuestados admitió haber visto una película
para adultos en el año anterior.9 Los estudios muestran que el uso de la pornografía en la
comunidad cristiana es igual de desenfrenado. Algunos estiman que alrededor de un 70%
de los cristianos lucha con la pornografía. Según un estudio publicado por la revista
Leadership Journal, en marzo de 2005, el 57% de los pastores dijo que la adicción a la
pornografía es el problema sexual más dañino en sus congregaciones. En otra encuesta, el
51% de los pastores afirmó que la pornografía cibernética es una tentación personal, y el
37% admitió que es una lucha real y actual. Es importante que seamos conscientes de los
peligros potenciales con el material sexualmente explícito que está más accesible y que se
ve con más frecuencia que nunca.   (Continuaremos en próximos artículos.) (Artículos
extraídos y adaptados del librito Cuando la mirada de un hombre se desvía, de Jeff Olson,
publicado por Ministerios Nuestro Pan Diario en su serie Tiempo de Buscar. Puedes
encontrar este y otros libritos sobre diferentes temas en:
http://nuestropandiario.org/2009/09/serie-tiempo-de-buscar/ Puede descargar el libro
directamente aquí. Si deseas más información, puedes escribirnos a espana@odb.org.      
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COMENTARIOS     Si quieres comentar inicia sesión o regístrate   Alfonso Chíncaro
(Perú) 30/01/2016 18:10 h 1     0     0   Me leí la serie de un porrazo. Gracias por tocar el
tema. La gran mayoría de varones somos o hemos sido afectados por este grave mal.   
Leer
más: http://protestantedigital.com/magacin/37235/Cuando_la_mirada_de_un_hombre_se_d
esvia

La pornografía daña al hombre en sus relaciones Los hombres que consumen más porno
tienen dificultades para mantener relaciones sanas, concluye un nuevo estudio realizado en
EEUU. FUENTES : The Christian Post AUTOR Redacción P+D WASHINGTON 12 DE
DICIEMBRE DE 2014 20:54 h El consumo de pornografía se ha disparado en la era de
Internet. El consumo de pornografía tiene efectos negativos directos en la capacidad de los
hombres para mantener relaciones sexuales, según un estudio realizado por especialistas de
diversas universidades de Nueva York, Arkansas, Virginia y Madison, en Estados Unidos.
“Los resultados muestran que cuanta más pornografía consume un hombre, más probable es
que quiera usarla durante las relaciones sexuales, pidiendo ciertos comportamientos
sexuales pornográficos a su pareja, que evoquen imágenes pornográficas durante la relación
sexual para que pueda mantener la excitación. Provoca además que el hombre esté más
preocupado por su propio desempeño sexual y su imagen corporal”, decía el estudio
publicado en la revista Archives of Sexual Behavior. “Además, un mayor uso de la
pornografía se asocia negativamente con el disfrute de los comportamientos sexuales
íntimos con su pareja. Llegamos a la conclusión de que la pornografía ofrece un poderoso
modelo que implica la expectativa y comportamiento de los hombres durante los encuentros
sexuales”, exponen los autores.   "CRISIS DE SALUD PÚBLICA", DICE ACTIVISTA
Los investigadores encuestaron a 487 estudiantes universitarios de sexo masculino en los
Estados Unidos con edades comprendidas de 18 al 29 años. Patrick Trueman, presidente de
una entidad anti-pornografía en los medios de comunicación, dijo en un comunicado que
este estudio muestra que la pornografía está provocando en el país una “crisis de salud
pública”. “Los efectos psicológicos nocivos de la pornografía están muy extendidos en
nuestra sociedad”, dijo Trueman. “Tenemos una crisis de salud pública en las manos
causadas por el consumo de pornografía generalizada, y es urgente que el gobierno y la
sociedad lo afronten”.   EVIDENCIAS CONTUNDENTES En los últimos años, otros
estudios se han publicado confirmando el problema. En junio de 2013, el Journal of
Communication publicó un documento que analiza los efectos de la pornografía en los
jóvenes en Dinamarca. Los investigadores encontraron conexiones entre el uso de la
pornografía y el sexismo. “Los resultados mostraron que, entre los hombres, un mayor
consumo de la pornografía está asociado significativamente con actitudes menos
igualitarias hacia las mujeres y un sexismo más hostil”, explicaba el estudio.   Imprimir
NOTICIAS RELACIONADAS Ver pornografía altera el cerebro humano El ‘sexo online’
alimenta la cadena del tráfico de mujeres Sexo online: silencio en las iglesias TAGS
Relaciones Sexo Familia +qFamilia Adicciones Hombre Pornografía   3 COMENTARIOS
Si quieres comentar inicia sesión o regístrate   Evangélicos UCM 29/12/2014 03:48 h 3     0
0   La sociedad española pasó de la represión sexual a la perversión en esa materia casi de
la noche a la mañana -por arte de la 'liberalización', salvoconducto del país para ser
admitido en la liga de las naciones occidentales. Bastaría con prohibir la pornografía pero,
antes, hay que reconciliar al hombre consigo mismo (https://www.youtube.com/watch?
v=3l5DQfvuLuw). Saludos cordiales   lucido14 19/12/2014 00:22 h 2     0     0   No se
puede esperar otra cosa ya que el pecado engendra pecado y hoy vemos un desenfreno
como nunca antes en las personas. Estan perdiendo la vergüenza desnudandose para
mostrar cuerpos esbeltos que muchas veces ha sido modificados por las manos de un
cirujano. Asi tenemos una generación llena de corrucion, fantasia y pecado   Manolo
14/12/2014 19:28 h 1     0     0   La pornografía enferma, pues las consecuencias de
practicarla no quedan en las partes superficiales del varón o la hembra, sino que entra en las
áreas mas profundas del cerebro y del corazón dejando un poso infecto, amorfo y lodoso
basado en un espejismo irreal; Jesucristo lo aclara perfectamente cuando dice " el que
mirare a una mujer para codiciarla, ya adulteró con ella en su corazón"; y en AT se prohíbe
descubrir la desnudez del prójimo/a; la sangre de Jesús nos limpia de todo pecado, mora
Leer
más: http://protestantedigital.com/sociedad/34722/la_pornografia_dana_al_hombre_en_sus
_relaciones

El pecado inconfesable En 'Shame', Sullivan es incapaz de tener una relación normal,


aunque lo intente. Cuando la película comienza, la sensación que da es de éxito, lo que
muchos hombres querrían: total libertad sexual. Sin embargo, lo que nos presenta es una
esclavitud. PREFERIRíA NO HACERLO AUTOR Noa Alarcón Melchor 04 DE
DICIEMBRE DE 2014 23:25 h Michael Fassbender, en una escena de 'Shame'. Hace unas
semanas, pajareando por Twitter, me encontré con este comentario de Asun Quintana,
pastora y encargada de la consejería de Mujer en el Consejo Evangélico de Madrid, a tenor
de un acto celebrado pocos días antes contra la violencia de género y la trata de personas.
Es una de esas frases concisas que te dejan el alma helada para el resto del día:   Porque
esos, como comentamos después ella y yo brevemente, son muchos hombres, muchísimos,
como para que pasen desapercibidos. Como para ignorarlos. No hubiera sido tan chocante
si pocos días antes no hubiera visto Shame, la maravillosa película de Steve McQueen,
donde Michael Fassbender hace de un adicto al sexo, uno que vive en Nueva York, que es
joven y atractivo, que tiene un buen trabajo, y que podría ser cualquiera de ese millón y
medio de hombres españoles que recurren diariamente a la prostitución. La película no es
apta para mojigatos. Pero a pesar de lo que pueda parecer, en esa presentación explícita del
trastorno de Brandon Sullivan no hay nada erótico ni morboso, precisamente debido a la
maestría, en mi opinión, de McQueen. Una de las cosas que más impresiona de la película
es que uno puede confundirse y perdérsela porque la acción es lenta, pesada y casi estática.
Apenas pasa nada, casi hasta el final, pero es que eso no es lo importante. Lo relevante es el
personaje, ese Sullivan que cuando sonríe te levanta escalofríos, de mirada ausente y gestos
esquivos. En la película nada es lo que debería ser. Sullivan, en el pellejo de Fassbender,
debería ser un hombre joven y atractivo, pero solo despierta una grima pegajosa. La
imponente ciudad de Nueva York debería ser un escenario majestuoso, revelador, pero
debido a los juegos de la fotografía se convierte en una especie de cárcel de edificios, de
rincones oscuros sumergidos en una perenne luz fría, donde no hay nada humano, no hay
árboles, no hay horizonte.   El cartel de la película. La maravillosa Nueva York se convierte
en el reflejo perfecto de la cárcel mental en la que vive el personaje. A pesar de que hay
muchos otros personajes, el peculiar modo del director de hacer que el protagonista esté
presente en prácticamente cada plano de la película lo que te hace es comprender que todo
trata de él, y que está completamente solo. Vive solo, y sus amigos no rozan siquiera la
superficie. Por eso cuando su hermana se presenta en su casa para quedarse allí una
temporada por problemas amorosos, Sullivan pierde el control. La vergüenza (shame, del
título) es difícil de explicar en pantalla. Es un sentimiento oscuro que McQueen soluciona
con la mirada aterrada de Sullivan, mientras intenta disimular, cuando su jefe le dice que
los que se habían llevado su ordenador del trabajo para arreglarlo se encontraron el disco
duro llena de pornografía de todas clases. «Ha debido ser tu becario», admite el jefe,
mientras que la cara de Sullivan es un poema. No nos resulta difícil, llegados a esta altura
de la película, imaginar que el protagonista pueda perder horas de trabajo viendo
pornografía, aunque no lo hemos visto hacer. Le hemos visto acudiendo al baño para
masturbarse, y le hemos visto persiguiendo a una mujer con la que acababa de flirtear en el
metro de camino al trabajo, con una mirada de profunda desesperación al perderla entre la
gente; y le hemos visto observando los cristales de los edificios de Nueva York, observando
a otras parejas haciendo el amor en una especie de truco cinematográfico en el que uno se
pregunta si acaso no está solamente en la cabeza del personaje, porque es muy difícil que
en plena ciudad de Nueva York una escena así, vista desde el nivel del suelo, no suponga
una provocación para los viandantes. Cuando la hermana de Sullivan se presenta en su casa
y él comprende que va a pasar allí más tiempo del que a él le gustaría tenerla cerca, intenta
hacer las cosas bien. En otro momento de vergüenza de la película, tira a la basura toda la
pornografía que tiene escondida en su casa. Muchísimas revistas y películas para una casa
tan pequeña. Da la sensación de que no hay suficientes escondites para mantenerlo
disimulado. Hay una chica de su trabajo, guapa y dulce, que está interesada por él, y
Sullivan se la lleva a cenar. Intenta tener una conversación con ella, intenta interesarse por
su vida, y es una de las escenas más incómodas de la película; es como si Sullivan estuviese
intentando permanecer sereno mientras el incesante baile pornográfico de su cabeza le
deshace el cerebro a tiras. La tensión no es debida a la atracción que puedan sentir
mutuamente, aunque está claro que a ella le gusta ese tipo; él es incapaz de centrarse. Es
incapaz de tener una conversación normal con una mujer, porque debe hacer mucho que no
la tiene. La cita termina sin fuegos artificiales, sin promesa de una segunda cita. Él,
frustrado, decide no tirar todavía por la borda sus fantasías y en la siguiente escena (no
sabemos si ha pasado un día, o varios) la acorrala en la oficina para darle el beso que no se
dieron en la cita. El problema es que ella es una mujer linda y dulce, y para él los besos
significan otra cosa. La lleva a un hotel, pero en condiciones «normales», con una mujer de
las de verdad, que aspira a tener una relación sentimental, donde el sexo no es un simple
impulso para satisfacer una necesidad obsesiva, es incapaz de llegar a nada; y se aparta de
ella con asco y odio hacia sí mismo. Sullivan es incapaz de tener una relación normal,
aunque lo intente. Desde fuera, cuando la película comienza, la sensación que da es de
éxito, de que eso es lo que todos los hombres querrían: no tener compromisos, tener total
libertad sexual con quien le apetezca y como le apetezca. Sin embargo, lo que se nos
presenta es una esclavitud. Sucede que la prostitución se ve como un mal necesario, como
algo que ha existido siempre. Una especie de necesidad para el hombre. Es una alegría que
diversas asociaciones y grupos cristianos hoy en día estén trabajando para erradicar la trata
de personas, porque las cifras hablan de que el 90% de las mujeres que se prostituyen (solo
en España) lo hacen, en realidad, en contra de su voluntad. Básicamente, en el mejor de los
casos, que no estarían haciendo eso si tuvieran otra opción. Trabajar con ellas para
liberarlas de las redes mafiosas y renovar las leyes para que se pueda castigar la actividad
(y no regularla, como algunos perversos legisladores pretenden) es un paso necesario y
urgente. Sin embargo, es solo una parte del problema. No debemos olvidar que Dios tiene
misericordia de todos, incluso de tipos tan asquerosos y despreciables como el protagonista
de Shame. Y no debemos olvidar que una gran mayoría de ese millón y medio de hombres
que paga por sexo cada día viven una especie de cárcel mental muy parecida a la que nos
presenta McQueen en su película. Con esto no quiero decir que haya que ser indulgente,
sino que, como le sucede a Sullivan en su cabeza, cualquier intento solitario por salir de esa
autodestrucción es totalmente inútil. Nadie puede salir de ese estado mental por sí solo sin
pedir ayuda y, seguramente, sin pasar por la vergüenza de admitirlo. Sabemos eso de los
alcohólicos y de los ludópatas, y tenemos historial de grupos cristianos que se
comprometieron a ayudar a superar la adicción a estas personas. Sin embargo, aunque
socialmente los borrachos y los que se pasan el día en las máquinas tragaperras están mal
vistos y son considerados problemáticos, que un hombre adulto consuma pornografía no es
una vergüenza, sino incluso algo saludable que hacer en algún momento de la vida. Y que
lo haga una mujer ya es considerado todo un logro del feminismo. El instituto Max Planck
de Berlín publicó un estudio no hace mucho en el que demostraba que el consumo de
pornografía destruye las capacidades mentales. Literalmente, disminuye el tamaño del
cerebro y afecta a la cognición. La publicación de ese estudio levantó polémica y se
levantaron voces que pretendieron darle la vuelta, encontrarle otras explicaciones o anular
los resultados. Y gran parte de ese rechazo vino a que la industria del sexo (pornografía,
prostitución) es la segunda mayor del mundo, solo detrás de la industria armamentística.
Estamos hablando de luchar contra todo un coloso. Como decía Asun Quintana en nuestra
breve conversación, no es solo un asunto de que las mujeres sean liberadas y los hombres
sean castigados. Eso por sí solo no va a solucionar el problema. Hace falta una visión
global y de conjunto, que abarque con honestidad la profunda dimensión del mal que causa
el pecado en el ser humano. También hemos de ser sinceros y reconocer que probablemente
nada de lo que podamos hacer por terminar con la trata de personas y la prostitución
acabará con el problema, porque vivimos en un mundo roto. Sin embargo, el esfuerzo debe
dirigirse a impedir que los números de mujeres esclavizadas y de consumidores de sexo de
pago sigan creciendo sin medida, y evitar a toda costa que eso pueda llegar a normalizarse.
No ya porque resultaría algo perverso en sí mismo, sino porque tenemos que tener presente
que, al igual que pasa con las mujeres prostituidas, para muchos hombres también supone
una esclavitud y una vergüenza.   Imprimir TAGS Prostitución Pornografía Preferiría No
Hacerlo Noa Alarcón   3 COMENTARIOS     Si quieres comentar inicia sesión o regístrate
Marc 07/12/2014 01:02 h 3     0     1   Lo peor que le puede pasar al tratamiento del tema de
la prostitución es que lo haga alguien que desconoce del tema. Es tan complicada la trama
de sentimientos, intereses, necesidades y obligaciones que hacen que un hombre y una
mujer se prostituyan, que por respeto; el que ignora; debería investigar más. No todas las
mujeres están contra su voluntad en este negocio sino que algunas por necesidad operando
libres de fiolos o chulos. Nunca cesará la prostitución ni siquiera cuando la prohiban.  
Samir 05/12/2014 17:54 h 2     1     0   Exelente, exelente, magistral... Gracias por este
artículo..Me mueve a la acción, la oración, al odio por el pecado y a correr al Salvador.
Bendiciones   Asun 05/12/2014 07:58 h 1     1     0   Gracias por este artículo Noa,
excelente, un análisis profundo. Ahí estaremos. Un beso.   
Leer más: http://protestantedigital.com/cultural/34653/El_pecado_inconfesable

Ver pornografía altera el cerebro humano Los hombres que observan varias horas a la
semana ese tipo de contenidos presentan una reducción de materia gris y una alteración de
la plasticidad neuronal. EE.UU. 30 DE MAYO DE 2014 Los hombres que pasan tiempo
mirando pornografía tienen menos materia gris en ciertas partes del cerebro y registran una
reducción de su actividad cerebral, de acuerdo con una investigación alemana dada a
conocer ayer en Estados Unidos. Según estos especialistas, la investigación proporciona un
primer indicio de que hay una relación directa entre el acto de ver pornografía y la
reducción del tamaño y la actividad del cerebro como reacción a la estimulación sexual.
“Hemos encontrado un importante vínculo negativo entre el acto de ver pornografía por
varias horas a la semana y el volumen de materia gris en el lóbulo derecho del cerebro”,
escribieron dos investigadores del Instituto Max Planck para el Desarrollo Humano de
Alemania en el estudio publicado en la versión de internet de la revista Psychiatry, que
edita la Asociación Médica Americana. “Estos efectos parecen incluir cambios en la
plasticidad neuronal como resultado de una intensa estimulación del centro del placer”, así
como una alteración de la actividad de la corteza prefrontal, añadieron los autores alemanes
Simone Kühn y Jürgen Gallinat EL ESTUDIO Para realizar el estudio, los autores
reclutaron a 64 hombres saludables de entre 21 y 45 años, a quienes pidieron responder un
cuestionario sobre el tiempo que dedicaban a observar videos pornográficos, con el
resultado de un promedio de cuatro horas semanales. También les hicieron tomografías
computarizadas del cerebro (resonancias electromagnéticas) para medir el volumen de ese
órgano y observar cómo reaccionaba y se modificaba ante la exposición a las imágenes
pornográficas. En la gran mayoría de los casos, cuanto más material pornográfico miraban
los sujetos, más disminuía el cuerpo estriado del cerebro, una pequeña estructura nerviosa
justo debajo de la corteza cerebral. Los científicos también observaron que, de la misma
forma, cuanto mayor era el consumo de contenidos pornográficos de los sujetos de estudio,
más se deterioraban las conexiones entre el cuerpo estriado y la corteza prefrontal, que es la
capa externa del cerebro a cargo del comportamiento y la toma de decisiones. Los autores
apuntaron que, a pesar de los datos obtenidos, no se puede concluir aún de forma científica
del estudio que estos daños cerebrales sean causados directamente por el consumo de
pornografía, por lo tanto, afirman que es necesario continuar las investigaciones para
confirmar lo que este primer estudio sugiere.   Imprimir TAGS Ver Pornografía Altera
Cerebro Revista Psychiatry Asociación Médica Americana   7 COMENTARIOS     Si
quieres comentar inicia sesión o regístrate   Alfonso Chíncaro (Perú) 04/06/2014 23:11 h 7
0     0   Interesante la afirmación de que aparecen 'cambios en la plasticidad neuronal como
resultado de una intensa estimulación del centro del placer', además de 'una alteración de la
actividad de la corteza prefrontal'. No se trata de la pornografía en sí, sino de estimular
demasiado el placer. Hay que tener cuidado con eso.   Bengi 02/06/2014 18:16 h 6     0     0
Siento decir que el estudio habla de 'correlación', que no es lo mismo que 'causalidad'... es
decir, ¿Ver pornografía produce alteraciones? o ¿Las alteraciones aumentan la necesidad de
ver pornografia? (para obtener un nivel de satisfacción). No defiendo la pornografía, pero
no hay que malinterpretar estudios para que digan lo que nosotros queremos. :D Dios es
poderoso, y él es suficiente. Dios les bendiga   quim 02/06/2014 18:16 h 5     0     0   Esta
vez de acuerdo con Pep.   cavw<>< 02/06/2014 18:16 h 4     0     0   La disminución de la
materia gris no es el único a esta peligrosa adicción, además afecta la relación conyugal y
centra la misma en la mera búsqueda de satisfacción, arrastrando a la persona al nivel de los
instintos...   Alfonso Chíncaro (Perú) 31/05/2014 22:40 h 3     0     0   Tienes razón Pep,
solo que muchos dicen que con esas cosas no te pasa nada. Todo lo contrario, dicen que es
bueno.   Javier de Terrassa 31/05/2014 22:40 h 2     0     0   'Libres en Cristo', ahí lo
explican bien y ayudan a escapar de ese cautiverio que es la pornografía. 'Setting captives
free' también ayudan a superar ese problema   Pep Porta 30/05/2014 21:38 h 1     0     0   Es
que alguien esperaba que la pornografía estimulara o acrecentara la inteligencia?
Leer
más: http://protestantedigital.com/sociedad/31114/Ver_pornografia_altera_el_cerebro_hum
ano

Pornografía y esclavitud sexual: debate de actor porno y pastor La campaña ‘The Price of
Life’ reúne en Nueva York a 75 organizaciones con eventos en más de 10 Campus
Universitarios. NUEVA YORK 08 DE OCTUBRE DE 2013 El actor porno Ron Jeremy (i)
y el pastor Craig Gross Entre las muchas iniciativas que nacen cada día en la ciudad de
Nueva York destaca en estos momentos una campaña lanzada por la organización de
universitarios cristianos InterVarsity. Durante los 12 primeros días de Octubre se están
llevando a cabo acciones de concienciación en 8 Campus Universitarios, reuniendo a un
total de 75 organizaciones bajo el movimiento “The Price of Life”. El objetivo: dar a
conocer la realidad del tráfico de personas. Una de las actividades con más repercusión ha
sido el debate entre el veterano actor de la industria pornográfica Ron Jeremy y el experto
cristiano en temas de pornografía Craig Gross, impulsor del ministerio “XXXChurch”. El
debate se llevó a cabo en la Universidad de Nueva York (NYU) y se tituló “Porno libre?
estrellas del porno vs. pastores”. Ante una audiencia de unas 100 personas, Jeremy defendió
que la pornografía y la trata de personas con fines de esclavitud sexual no tienen ningún
vínculo. El actor, que ha protagonizado centenares de películas pornográficas y es
considerado un icono de la industria, argumentó que “el tráfico de mujeres es más un
asunto relacionado con la prostitución que con la pornografía”. MUJERES TRAFICADAS
Y CHICAS MENORES DE EDAD Por su parte, Craig Gross, que conoce la industria bien
para luchar contra sus efectos, respondió que hay mucho material pornográfico producido
con mujeres esclavas. “Hay mucho en internet que no ha sido producido por las compañías
de Los Angeles [foco central de pornografía en EEUU] que incluye a chicas menores de
edad que son potencialmente chicas traficadas”. Y añadió: “Aunque no lo digan en vuestra
industria, ¿existe? ¿está online? La respuesta es sí”. El pastor también criticó duramente el
hecho de que muchas chicas con 18 años recién cumplidos son introducidas en la industria
de la pornografía de forma humillante. Gross citó los títulos de algunas de las cintas de
vídeo, las cuales hacen referencia a la adolescencia de las actrices, incluso a la niñez, con
términos como “niñas de papá” o “canguros prostituidas”. Jeremy defendió su modelo
explicando que aunque sí es verdad que algunas mujeres se convierten en estrellas del
porno justo al cumplir los 18 años, también es una realidad que varias organizaciones de la
industria hacen esfuerzos para controlar el límite legal de edad. “Es verdad que hay series
de películas que se centran en chicos y chicas que acaban de pasar a la mayoría de edad”.
Pero “tienen que mostrar todo tipo de documentación como su pasaporte, su carnet de
conducir, etc. Había alguna gente que intentaba tentar a menores de edad, pero hemos
acabado con eso”, argumentó. LA DIGNIDAD DE LA MUJER EN LA PORNOGRAFÍA
El debate también habló sobre el trato que la mujer recibe en esta industria. El actor, que
ahora dirige sus propias empresas en el sector, explicó que por cada escena sexual se pagan
entre 600 y 1400 dólares, dependiendo del contenido, y destacó que las mujeres actrices
suelen cobrar más que los hombres. Gross contestó a ello diciendo que cobrar más no
significa tener más dignidad en este mundo. El pastor ha hablado con muchas mujeres que
trabajan en este ámbito y explicó que “cuanto más sucio sea lo que actúes, más te pagan. Y
esto no fortalece a las mujeres para nada”. Jeremy contestó: “Lo que digo es que muchas
mujeres pueden vivir bien haciendo porno, si así lo escogen. Esto son chicas que no tienen
dinero para ir a la universidad. Algunas de ellas trabajaban en McDonald’s, escogen hacer
pornografía y se convierten en millonarias en 5 o 6 años”. El debate finalizó con un turno
abierto de preguntas del público. El evento formó parte de una serie de debates que Gross y
Jeremy ya están llevando a cabo por todo EEUU (ver página web). Por su parte, el portavoz
de la campaña 'The Price of Life', Jonathan Walton, dejó clara la posición de los
organizadores del debate: “Creemos que en su esencia, la pornografía es explotación sexual
comercial. Nuestro objetivo [con el debate] fue dibujar líneas claras sobre cómo la
pornografía es usada para entrenar a niños en los EEUU y fuera de aquí”. 100 EVENTOS
EN “THE PRICE OF LIFE NYC” La esclavitud es un problema grave en EEUU. Más de
18.000 personas son traficadas cada año por las fronteras estadounidenses, la gran mayoría
de ellas mujeres para ser usadas en servidumbre, trabajos forzados y prostitución. La
campaña ‘The Price of Life’ de estos días está dando a conocer esta realidad en la ciudad de
Nueva York. Ha incluido hasta el momento conciertos de bandas locales, conferencias con
expertos, profesores universitarios, psicólogos, jueces, etc. Durante las acciones también se
están buscando fondos para la lucha contra el tráfico de personas. Al final de estos 12 días
se habrán llevado a cabo más de 100 actividades, en las que habrán participado
organizaciones como World Vision, Pure Hope, Restore NYC, Nomi Network, New York
City Urban Project y Pulse Movement. Puede conocer más de la campaña realizada en
Nueva York en el Facebook de la iniciativa, en su perfil de Twitter o siguiendo el hashtag
#POL2013.   Imprimir NOTICIAS RELACIONADAS El ‘sexo online’ alimenta la cadena
del tráfico de mujeres TAGS The Price Of Life Nueva York InterVarsity Ron Jeremy Craig
Gross Pornografía Esclavitud Sexual Tráfico De Personas Debate EEUU   15
COMENTARIOS     Si quieres comentar inicia sesión o regístrate   Othoniel Juárez Báez
(México) 06/01/2014 18:27 h 15     0     0   Mucha se ha dicho sobre si la pornografía
contiene o no explotación sexual o si denigra a la mujer o no. No me malinterpreten,
entiendo el punto del debate: 'de todos los males, busquemos el menor'. Sin embargo, queda
claro que entre tanto los cristianos y pastores no denunciemos cualquier tipo de inmoralidad
sexual (incluyendo la pornografía) como pecado ante los ojos de Dios, siempre entraremos
en debates estériles que no hacen otra cosa que endurecer el corazón de los soberbios. La
denuncia del pecado por medio de la ley de Dios es lo único que hace volver los corazones
hacia Dios para hallar gracia por medio de Cristo. El resto de los temas implícitos y sus
repercusiones sociales son asp   FErnando Cazo 30/10/2013 13:11 h 14     0     0   Este Ron
Jeremy que ha aceptado particiapar en este encuentro es un raro exponete de la pornografia.
Es judio, eso juega a su favor , talvez aun hay teimepo de que su alma sea salvada   Alfonso
Chíncaro (Perú) 20/10/2013 18:45 h 13     0     0   Desconcierta, no entristece, que los
comentarios se hayan desviado del tema. Aunque desde el principio se quiso disminuir la
importancia de éste. Lo irónico es que el c#12 tampoco añade al tema. La segunda parte del
c#1 también me parece inexacta. El porcentaje de actrices porno por voluntad propia es
bajo (como en la prostitución) y el aumento de ese porcentaje, créanlo, no significa
progreso ni mejoría.
Leer
más: http://protestantedigital.com/sociedad/30112/Pornografia_y_esclavitud_sexual_debate
_de_actor_porno_y_pastor

EL “ELEFANTE ROSA EN LA IGLESIA” 29   ‘¡Pastores: confrontad pornografía desde


el púlpito!’ Jay Dennis lidera un movimiento que pide a líderes cristianos que hablen
abiertamente del sexo online. AUTOR Joel Forster CALIFORNIA 05 DE SEPTIEMBRE
DE 2013 El consumo de pornografía es una de las mayores problemáticas en las iglesias e
estos momentos. La producción de literatura desde una perspectiva cristiana se une a la
gran cantidad de estudios y libros producidos sobre los efectos del ‘sexo online’ a nivel
secular. Pastores como Jay Dennis creen que es necesario atacar el problema de frente. Más
consejos en la serie “Pornografía y cristianos”que publicó este diario. En un artículo en
Charisma News titulado “Pornografía. El elefante rosa en la iglesia”, Dennis recuerda que
“hay dos verdades que hay que dar a conocer: que muchos compañeros pastores están
teniendo problemas con la pornografía, y que es necesario que los pastores aborden el tema
con las personas a las que están liderando”. El autor admite que abrir la discusión puede
generar “controversia” porque a algunos miembros de iglesia les puede parecer incómodo
darle tanta importancia a un tema que afecta a pocos. PASTORES QUE TIENEN QUE
EMPEZAR POR SÍ MISMOS “La realidad, sin embargo”, dice Dennis, “es que no sólo
unos pocos hombres luchan con esta tentación. La pornografía ha invadido los hogares de
los miembros de las iglesias”, avisa. Y eso incluye a muchos líderes, que deberían de
empezar por afrontar su propio problema. Dirigiéndose a pastores que se sienten atrapados
por la pornografía, el autor recomienda “confesar tu pecado y arrepentirte, borrar todo
contenido pornográfico de los dispositivos electrónicos, instalar un filtro de internet como
‘Covenant Eyes’, encontrar a tres personas a las que rendir cuentas antes de que acaba este
mismo día, darle a tu esposa todos los passwords de tus ordenadores y teléfonos móviles,
rendirse diariamente bajo el control del Espíritu Santo y lanzarse a la ofensiva mediante el
ejemplo y también la predicación sobre el tema”. CONFRONTAR EL PROBLEMA
PÚBLICAMENTE Dennis cree que la problemática debe ser abordada desde todas las
áreas de la iglesia. Eso incluye el trabajo personal y privado, pero también el ‘desnudar’
abiertamente un problema del que muchos son conscientes pero del que nadie habla. A la
hora de llevar la problemática al púlpito Dennis recomienda dar a conocer las estadísticas
de consumo entre cristianos. “La Biblia habla claramente sobre los peligros del pecado
sexual, así deberíamos hacer nosotros también”. En este sentido, es importante retar a todos
los hombres a que habla en con sus propios hijos, ya que “el discipulado en tu propio hogar
es clave”. Aunque el enfoque de Dennis está más sobre ellos, cree que las mujeres también
deben ser conscientes de que la adicción de sus maridos o hijos al sexo online puede
destrozar familias. La oración ante Dios es fundamental, recuerda Dennis, a la vez que
preguntar abiertamente a sus maridos sobre si consumen pornografía. MAYORÍA DE
CRISTIANOS ESTAN DISPUESTOS A HABLAR DE ELLO De forma gráfica, Dennis
explica que en su propia iglesia han creado un “muro” en el que voluntariamente los
hombres pueden comprometerse públicamente a “ser libres de pornografía”. Dennis, por
último, enfatiza en la necesidad de acercarse regularmente, y desde el púlpito, “a temáticas
relacionadas con la sexualidad, desde una perspectiva bíblica”. La buena noticia, para
empezar, es que “la mayoría de las personas en nuestras iglesias están dispuestas a hablar
del tema”. Con el objetivo de generar debate, Dennis impulsa con otros líderes en EEUU el
movimiento “Join 1 milion men” (en castellano: Únete a 1 millón de hombres), que ofrece
recursos, entrevistas y iniciativas en su página web (inglés).   Imprimir NOTICIAS
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14 COMENTARIOS     Si quieres comentar inicia sesión o regístrate   Ricardo de Uruguay
09/09/2013 11:47 h 14     1     0   Luego de escribir el comentario # 10 vino a mi mente
Efesios 5:3: 'Pero fornicación y toda impureza o avaricia, ni aun se nombre entre vosotros,
como conviene a santos'. No quiero írmelas de santurrón, pero no es necesario ensuciar el
púlpito con temas que de ser necesario pueden hablarse personalmente, sin dárseles pública
difusión.   JAIMEVILLA 09/09/2013 11:47 h 13     0     0   Perdon,pero el pecado capital es
la Lascivia. De este pecado derivan todos los pecados sexuales. Y no es lo mismo
pornografia que pornofonia. Sino tambien seria igual que el elefante rosa sea pornofonico.
O que el pulpito sea pornografico. O que todos los habitantes de Florida sean Floros.
Creo,que es muy importante no confundir los terminos,para que los feligreses entiendan
claramente.   LUIS GOMEZ 07/09/2013 01:00 h 12     0     0   Hoy en dia la pornografía no
es solo problema-tentacion para los varones y es bueno que se diga.El gran éxito de
literatura para las mujeres es un libro pornográfico con un contenido machista
brutal,apologia de los malos tratos (consentidos ¿?)...y todo rodeado de glamour ,
modernidad incluso de feminismo(por demencial que suene).GRACIAS POR EL
ARTICULO   gaston 07/09/2013 01:04 h 11     0     0   que se hable en las iglesias y los
hogares   Ricardo Estevez Carmona 07/09/2013 01:06 h 10     0     0   Hablar desde el
púlpito explícitamente de ese mal de nuestra época es una forma de contaminarlo, pues no
dejaría de ser propaganda, por más que tal publicidad sea contraria. Lo que los predicadores
tienen que hacer es enfatizar la necesidad que tienen todos los cristianos (ministros y
ministrados) de ocuparse piadosamente de las cosas puras y santas (Flp 4:8).
Simultáneamente, bajando del púlpito, deben procurar tener conversaciones personales con
aquellos que espiritualmente intuyan que puedan haber caído en este vicio.   db 07/09/2013
01:06 h 9     0     0   Nuevos cambios tecnológicos, nuevas formas de pecar... el mismo
pecado. Iglesia abre los ojos!!!   Lenin Orozco 07/09/2013 01:06 h 8     0     0   Para los
queridos siervos de Dios y personas en general que todavía no han podido salir de esta
esclavitud diabólica, contribuyo con mi granito de arena al referirles un extraordinario Link
que será de mucha ayuda en esta lucha. Hoy es el momento de ser libres en el poder de
Cristo porque lamentablemente sin santidad, nadie verá a Dios. Mi apoyo y oración para
quienes con su dominio propio y determinación en la fe se propongan alcanzar la victoria
definitiva para la gloria del Señor. el link: http://vimeo.com/28119795
Leer
más: http://protestantedigital.com/qfamilia/29956/39Pastores_confrontad_pornografia_desd
e_el_pulpito39

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