INFORME VISITA TIBASOSA NOVIEMBRE 4

En este día salimos en ruta hacia la

ciudad de Tunja, de la cual pasaría a
Paipa, Duitama y Tibasosa finalmente.
El trayecto es de alrededor de tres
horas y media, con una carretera en
muy buen estado, lo que permite
llegar con tranquilidad a desarrollar las
diferentes actividades en el municipio.

El paisaje de ida está nutrido por

extensa vegetación y muchos pueblos de Cundinamarca y Boyacá que
prestan servicio alrededor de la variante, es sorprendente la velocidad de
adaptación de los diferentes negocios alrededor de la vía, incluso llegando a
Duitama se visualiza Postobón, más adelante Coca Cola y casi en mitad de
camino a Tibasosa encontramos la planta de Bavaria de Boyacá, una de las
más grandes captadoras de agua de la región.
Tibasosa posee un acceso claro, sin embargo de inmediato se nota la
estrechez de techos y de calles, típica adaptación moderna de un pueblo
colonial a los vehículos pequeños y de carga relativamente baja. En la
avenida principal se hacen notar hermosas palmeras, siete cueros y otras
plantas que adornan el paso, al igual que las bellas materas colgantes de los
balcones tipo colonial de las inmediaciones del centro del municipio.
Al llegar a la plaza se identifica la alcaldía, oficina de cultura y turismo y de
planeación, las cuales están marcadas con bellos letreros en madera que las
identifican adecuadamente. Así mismo las personas del municipio no dudan
en dar indicaciones, son muy cordiales y
tienen asombrosamente limpias las calles.
Al entrar al despacho es impresionante la
cantidad de personas que circulan por la
misma, buscando ayuda de la alcaldesa,
atención a sus problemas y colaboración con
sus proyectos, sin embargo a diferencia de
otros municipios es impresionante el nivel de
institucionalidad que se tiene, pues se
manejan los canales adecuados para dichas
peticiones, y orientan al ciudadano a donde
dirigirlas.
La alcaldesa Jenny Hernández nos recibe
con los brazos abiertos, señalando la
importancia de visitas como la nuestra, de la
promoción del municipio y el reconocimiento

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a sus experiencias exitosas como la cátedra del agua, del buen Tibasoseño y
de uso y aprovechamiento del tiempo libre y la música. Así mismo nos indica
la necesidad de generar mecanismos de sostenibilidad a la práctica,
ampliando el potencial de los actores y directores de acueductos rurales,
acepta la sugerencia de generar un grupo interdisciplinario que lleve el agua
y su cuidado a todo el municipio.
Luego de visitar a la alcaldesa nos desplazamos donde Héctor Emiro
Granados, para preguntarle por el material y metodologías del proceso con
los maestros, las cuales solamente se refieren a una power point de la
cartilla, las calcomanías y la cartilla, sin embargo nos manifiesta la buena
intención de levantar una línea base de
consumos junto con Rigoberto Alfonso.
Posteriormente nos desplazamos donde
la maestra Janeth Vargas, docente de la
sede rural Ayala, una de las promotoras
de los cuadernos viajeros, adaptación de
la metodología sencilla de cartilla del
agua. Ella nos indica la importancia del
material, el nivel de aceptación y la
voluntad de los chicos y sus padres para
adaptarse al cuidado en casa del Agua.
Incluso dentro de la escuela los mismos
estudiantes se censuran entre sí por
dejar abierto el grifo o por no aplicar las
prácticas de cuidado del agua sugeridas.
Al salir damos una vuelta por la plaza,
observando productos típicos como
jugos, arequipes, sabañones y otros
derivados de la feijoa, reafirmando la
percepción de Tibasosa como capital y sede nacional de la feijoa. Allí
encontramos algunos estudiantes del técnico, quienes no se dejan grabar
pero reconocen la existencia de la cátedra, señalando su importancia y cómo
les ha ayudado a reducir el valor del recibo, haciendo felices a sus madres.
Una vez terminado un
apetitoso desayuno en la
panadería de una de las
cooperativas del pueblo nos
dirigimos hacia donde otra
maestra, Rosela Zanabria,
quien trabaja en la
institución de la Moyera, en
Tibasosa, una de las
maestras capacitadas en la
práctica de la cátedra del
Agua. Ella nos señala la
actitud abierta de los

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estudiantes, la importancia del proceso pero la falta de difusión en más
escenarios, la falta de compromiso de la alcaldía y la exagerada cantidad de
apariciones de las cabezas que lo engendraron, dificultando su sostenibilidad
y permanencia en el tiempo.
Una vez salimos de la oficina de Rosela, nos dirigimos a la plaza de nuevo,
de cara a encontrarnos con 2 estudiantes Lady y Natalia Guerrero,
estudiantes de grado 11 y guardianes del agua, quienes nos indican su
participación en principio como parte de sus horas sociales, pero que luego
les motivo y les pareció un instrumento clave para cuidado de los recursos y
economía de sus familias. Ellas consideran un cambio de actitud real, pero
que la metodología tiene mayor impacto en los niños que en los jóvenes y
adultos, lo cual creen que debería cambiar y ser para todos un compromiso.
Posteriormente nos
desplazamos a los tanques de
almacenamiento a ocho
cuadras hacia el oriente, donde
encontramos los tanques de
agua, la cancha de basquetbol
y un mural ejecutado entre los
chicos y los maestros, mural
que los compromete a las
buenas prácticas de cuidado
del agua. Allí un artista de
apodo “shak” nos revela la
intención de dejar un mensaje de memoria que embellezca el pueblo pero
que recuerde la necesidad del cuidado de sus recursos. Dicho mural está a la
entrada de la cancha y de los tanques de almacenamiento, haciendo juego
colorido con el hermoso paisaje Tibasoseño.
Luego de las entrevistas almorzamos en el único restaurante abierto a las 2
pm, pues Tibasosa es un pueblo que en su centro y entre semana tiene poco
movimiento frente a otros de la región. Una vez finalizado el almuerzo
salimos hacia Nobsa, posible receptor del intercambio, con miras a revisarlo
en cámara y radicar la invitación en la alcaldía municipal. Nobsa figura casi
igual de grande a Tibasosa, pero sin duda posee mayor movimiento, cajeros
y comercios más avanzados.

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El recorrido lo retomamos hacia Duitama,

donde visualizamos una ciudad intermedia,
movida, con miles de personas, y que
concentra nuevas urbanizaciones y constituye
uno de los municipios emergentes de Boyacá,
en cuanto Coca cola, Postobón y Bavaria
están en inmediaciones de dicha población.
En su plaza principal no logramos que nos
ubiquen la alcaldía, el tránsito carga los
sentidos e impide el correcto análisis de todos
los aspectos de la ciudad, sin embargo
preguntas a un vendedor y un boticario
indican la gran cantidad de colegios y la falta
de cátedras ambientales.

El recorrido lo finalizamos en Paipa, municipio

poco más grande que Tibasosa y Nobsa, donde
también logramos radicar la invitación de forma
personalizada, en el respectivo despacho. Paipa
aparenta ser también una cuna de posibles
educadores ciudadanos, pues se visualiza

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mucho estudiante en sus calles, y varias instituciones educativas.
El cierre de la jornada es exitoso, pues se logra hacer un panorama regional
de las posibles opciones de intercambio, sin embargo es un reto constituir los
grupos y articularlos en tan poco tiempo, porque en terreno los colegios
cierran la tercera semana de noviembre, arrancan fiestas el 7 de diciembre y
las preocupaciones municipales son de temporada como lo indica Héctor de
la ESP de Tibasosa.

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