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cavidad pleural. En condiciones normales, cada día penetran al espacio pleural entre 5 y 10
L de líquido por filtración a través de la microvasculatura que irriga la pleura parietal.
Los trasudados son ultrafiltrados con bajo contenido de proteínas plasmáticas que aparecen
por alteraciones en las presiones hidrostáticas sistémicas o en las presiones coloidosmóticas
(p. ej., en insuficiencia cardiaca congestiva o cirrosis). En la inspección visual
macroscópica, los trasudados de derrame pleural suelen ser de aspecto claro o pajizo.
Los derrames exudativos: son ricos en proteínas y pueden formarse por una
alteración en la reabsorción pleural o linfática. se producen cuando aparecen fugas
capilares y aumenta la permeabilidad a las proteínas o cuando hay un drenaje
linfático deficiente y/o una presión pleural disminuida.
1. Un cociente entre las proteínas de líquido pleural y las proteínas séricas superior a
0,5.
2. Un cociente entre la lactato deshidrogenasa (LDH) del líquido pleural y la LDH
sérica superior a 0,6.
3. Una concentración de LDH en el líquido pleural 1,67 o más veces mayor que la
concentración sérica normal.
También hay que evaluar las características visuales del líquido pleural (seroso,
sanguinolento, lechoso, turbio o francamente purulento).
Los trasudados y exudados pueden diferenciarse utilizando los criterios de Light. Si los
criterios sugieren trasudado, debe llevarse a cabo una cuidadosa valoración en busca de
insuficiencia cardiaca congestiva, cirrosis o enfermedades relacionadas con la aparición de
trasudados. Si los criterios sugieren exudado, podrían ser de utilidad estudios diagnósticos
adicionales.
Opacidad de un hemitórax.
Desviación contra lateral de corazón y tráquea.
Separación de los espacios intercostales.
Aumento del hemitórax.
Ausencia de broncograma aéreo.
El derrame laminar aparece con forma de una densidad fina y en banda a lo largo de la
pared torácica lateral especialmente en la proximidad del ángulo costofrénico. Se reconocen
en la base pulmonar por encima de los ángulos costofrénicos en la proyección frontal y se
deben con frecuencia a una insuficiencia cardiaca congestiva y desaparece al resolver el
problema cardiaco.
La línea de Damoiseau: línea curva del contorno pleural favorecida por la existencia de
presión negativa entre las hojas pleurales que se observa cuando este espacio contiene
liquido en cantidad patológica. Señalada con una flecha verde en la imagen de arriba.
Neumotorax primario
Neumotorax secundario
Ocurre en pacientes con patología pulmonar previa. Suele aparecer, por tanto, en personas
de mayor edad, excepto en los casos de fibrosis quística. La enfermedad pulmonar
obstructiva crónica (EPOC) es la causa más frecuente y la probabilidad de neumotórax es
mayor cuanto más avanzada es la enfermedad. En estos pacientes el neumotórax se debe a
la rotura de bullas intrapulmonares, y dado que su reserva funcional es ya muy limitada, la
repercusión clínica puede ser muy grave. Por ello es importante descartar la presencia de
neumotórax en todos los pacientes con EPOC agudizada.
Neumotorax adquirido
Neumotórax iatrogénico
Neumotorax traumático