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Algo de Carnaval…
Un carnaval es una celebración pública que tiene lugar inmediatamente antes de la cuaresma
cristiana, con fecha variable (desde finales de enero hasta principios de marzo según el año), y
que combina algunos elementos como disfraces, desfiles, y fiestas en la calle. Por extensión se
llaman así algunas fiestas similares en cualquier época del año. A pesar de las grandes
diferencias que su celebración presenta en el mundo, su característica común es la de ser un
período de permisividad y cierto descontrol. El origen de su celebración parece probable de las
fiestas paganas, como las que se realizaban en honor a Baco, el dios del vino, las saturnales y las
lupercales romanas, o las que se realizaban en honor del buey Apis en Egipto. Según algunos
historiadores, los orígenes de esta festividad se remontan a las antiguas Sumeria y Egipto, hace
más de 5.000 años, con celebraciones muy parecidas en la época del Imperio Romano, desde
donde se expandió la costumbre por Europa, siendo llevado a América por los navegantes
españoles y portugueses a partir del siglo XV. El carnaval está asociado principalmente con el
catolicismo, y en menor medida con los cristianos ortodoxos orientales; las culturas protestantes
usualmente no celebran el carnaval o tienen tradiciones modificadas, como el carnaval danés.
Algunos autores consideran que para la sociedad rural, fuertemente estructurada por el
cristianismo, el tiempo de «carnestolendas» ofrecía mascaradas rituales de raíz pagana y un lapso
de permisividad que se oponía a la represión de la sexualidad y a la severa formalidad litúrgica
de la Cuaresma. Por lo general, en muchos lugares se celebra durante tres días, y se los designa
con el nombre de carnestolendas, y son los tres días anteriores al Miércoles de Ceniza, que es el
día en que comienza la cuaresma en el Calendario Cristiano. Se supone que el término carnaval
proviene del latín medieval "carnelevarium", que significaba "quitar la carne" y que se refería a
la prohibición religiosa de consumo de carne durante los cuarenta días que dura la cuaresma.
Los carnavales del norte argentino son marcadamente diferentes de los celebrados en otras
regiones del país, Jujuy - Salta, donde los festejos se extienden por todas las localidades de
ambas provincias. Los hitos más importantes dentro de las ceremonias de carnaval son el
desentierro y el entierro del diablo de carnaval. Éste está representado por un muñeco que
simboliza la liberación de los deseos reprimidos. Es por tanto una especie de dios de la
celebración y la lujuria. Durante el carnaval todos pueden ser "Pujllay" el diablo de carnaval.
Una semana antes al carnaval comienzan a desarrollarse carnavalitos y bailecitos, en donde se
bailan danzas tradicionales, numerosas presentaciones de danzas propias y también danzas
bolivianas como son los caporales, tinkus, diabladas. Esto por la proximidad de la frontera con el
país Bolivia. Durante la celebración del carnaval grande los participantes acompañan a las
comparsas y se congregan en los alrededores de los pueblo para llevar a cabo la ceremonia de
"desentierro del carnaval", se procede a desenterrar al Diablo de carnaval que simboliza al rojo
sol, que según la creencia es quien fecunda a la Pacha Mama (madre tierra), dando origen a las
semillas, raíces, troncos, follajes y frutos de la región. Los diablos aparecen antes del comienzo
de la ceremonia. Las comparsas y participantes se reúnen alrededor de mojones de piedra,
generalmente ubicados en las afueras de la ciudad y una vez finalizada la ceremonia todos bajan
cantando canciones y se tiran agua, harina, talco y serpentinas. Luego van por las casas cantando
coplas y finalmente, una semana después, el "carnaval chico ―el entierro. El Domingo de
Tentación finalizan los festejos con la ceremonia de enterrar al diablo, que volverá a su escondite
con hojas de coca, alcohol y cigarrillos para permanecer enterrado durante un año.
Los antecedentes del Carnaval uruguayo hay que buscarlos en Europa, donde en diferentes
contextos, la celebración de las cosechas o de una festividad religiosa, servía como espacio para
la reunión de los pueblos, que rompían de esa manera con los marcos institucionales de la
cotidianeidad, creando un espacio de libertad individual y colectiva. Ya en tierras uruguayas, en
tiempos de la Colonia, los días de Carnaval y también en Navidad y Año Nuevo, los negros
esclavos montevideanos se cubrían con túnicas de vivos y chillones colores y salían a la calle
para ir hasta las murallas, a cuyo pie se les permitía entonar sus cánticos y realizar sus bailes. Las
comparsas de blancos tenían influencias de las estudiantinas españolas. Las letras referían a
situaciones político-sociales en forma irónica, de la misma forma que lo hacen los conjuntos
actuales de carnaval (murgas, parodistas y humoristas). A partir de 1870 se fue conformando
cierta tradición de crítica social, utilizada posteriormente por las murgas.
Algunas definiciones:
La violencia de género nace de la desigualdad y las relaciones de poder de los hombres sobre las
mujeres, y se ejerce por quienes sean o hayan sido sus cónyuges o estén o hayan estado
vinculados a ellas por relaciones afectivas, aún sin convivencia.
La manipulación mental: (el acoso afectivo) Esta forma de violencia supone el desconocimiento del
valor de la víctima como ser humano, en lo que concierne a su libertad, a su autonomía, a su
derecho a tomar decisiones propias acerca de su propia vida y de sus propios valores. La
manipulación mental puede comprender el chantaje afectivo. En la manipulación se da una relación
asimétrica entre dos o más personas. Es asimétrica porque una da y la otra recibe, una gana y la otra
pierde. Las tácticas de manipulación incluyen amenazas y críticas, que generan miedo, culpa o
vergüenza encaminados a movilizar a la víctima en la dirección que desea el manipulador.
La agresión insospechada, es una forma de violencia psicológica tan sutil y elaborada que se
disimula y oculta entre las fibras del tejido social. La agresión insospechada es la que muchos
agresores ejercen disfrazándola de protección, de atención, de buenas intenciones y de buenos
deseos. Una forma de agresión insospechada es la que ejercen las personas sobre protectoras sobre
sus protegidos. Les rodean de atenciones, de mimos y de cuidados, pero no les permiten
desarrollarse como personas autónomas, no les permiten ejercer su derecho a la libertad, no les
permiten escapar del entorno artificial que han fabricado para ellas. Todo lo hace el protector por el
bien de su protegido (generando dependencia), eliminando de su camino el menor escollo, para
librarle de todas las desazones de la vida. Y el protegido no llega a crecer ni a independizarse
nunca. Y el día que el protector falte o no pueda seguirle protegiendo, su integridad valdrá bien
poco.
Otra forma de agresión insospechada es la que ejercemos sobre nuestros mayores, cuando creemos
que les mostramos amor y consideración dándoles tareas para "que se sientan útiles", como si no se
hubieran ya ganado el derecho a dejar de ser útiles. Muchas personas agobian a sus mayores con
demandas de ayuda, sin tener en cuenta que los mayores ya se han jubilado de esas tareas y tienen
derecho a vivir sin trabajar, tienen a sus padres privándoles del derecho de salir con sus amigos, de
viajar a su gusto o de sentarse a no hacer nada, llevan en algunos casos a sus mayores a vivir con
ellos para que no estén solos y los convierten en ―empleados para todo‖, privándoles de libertad,
descanso y muchas veces, de lugar de residencia, pues muchos ancianos viven una temporada con
cada hijo, con lo cual carecen de referencia y de vivienda fija. Los convierten en nómadas y en
sirvientes sin paga. Y la sociedad mira para otro lado, mientras que otros los "meten" en una
residencia.
El acoso escolar se diferencia del acoso en el trabajo: El acoso escolar consiste, en intimidar a un
compañero de clase. Es una forma de acoso entre iguales. La víctima puede ser cualquiera,
generalmente alguien débil, intimidándolo y atemorizándolo a la luz del día, haciendo alarde
ostentoso de su fuerza, su poder. Es necesario entender de que el acoso escolar no son simples
"peleas entre chavales" o situaciones que han de resolver entre ellos. El acoso entre escolares puede
provocar el suicidio del niño que lo padece. Es una situación grave para todos, de la que es preciso
tomar conciencia, defender a la víctima y cambiar la conducta del agresor. Una situación de abuso
continuado con el visto bueno (o la vista gorda) de personas que podrían remediarlo o, al menos,
denunciarlo. Los menores tienen derechos a respetar y a hacer respetar.
El acoso laboral consiste en desgastar a la víctima para que se auto elimine. Es una forma de acoso
vertical, de arriba abajo. El agresor actúa con mayor maldad y es más artero, porque se mueve en la
sombra, con disimulo, y con el objetivo de eliminar a una víctima que no es cualquiera, sino alguien
elegido con atención, porque estorba a sus planes, le hace sombra o, de alguna manera, perturba su
quehacer. Su acción es, por tanto, mucho más premeditada y cruel que la del acoso escolar
Otra forma de agresión insospechada que todos practicamos alguna vez son los consejos.
Los consejos tienen a veces un matiz de amenaza y otras veces son una forma de acoso contra la
persona que se empeña en no dejarse aconsejar. Hay mucha gente que necesita dar su visto bueno a
las acciones de los demás, ofrecer su consejo sapientísimo o por el contrario, oponer su veto a los
proyectos de los demás. Hay gente que se permite aconsejar lo que hay que hacer en una u otra
situación y hasta previene el desastre si no se siguen sus recomendaciones. Hay gente que se opone
con todas sus fuerzas a que otros hagan algo que ni les va ni les viene, pero en lo que ellos no
pueden dejar de intervenir.
Porque las huellas que quedan en el psiquismo no son visibles. Además, en los
casos de violencia psicológica, el maltratador suele manipular a su víctima para que llegue a creer
que todo son exageraciones suyas que tiene la culpa de lo que sucede. Lo mismo suele hacer con su
entorno, de manera que todo el mundo opine que es un excelente cónyuge, compañero o amigo y
que la otra persona se queja por quejarse, negando En el supuesto de que se queje. El maltrato
psicológico, por sutil e insospechado que sea, siempre deja secuelas. Existen casos en que la
agresión es tan sutil y sofisticada que parece casi imposible detectarla. Pero deja marcas indelebles
en el organismo de la víctima. En su cuerpo o en su psiquismo, porque el cuerpo y el psiquismo
interactúan y forman una unidad psicosomática. Las secuelas de los malos tratos psíquicos
provocan, según distintos estudios, el desarrollo de personalidades adictivas, psicóticas o violentas.
Si un niño maltratado desarrolla una personalidad de maltratador, es más que probable que a su vez
engendre hijos que también serán maltratados, por lo que el patrón de conducta agresiva se va
repitiendo hasta que alguna circunstancia favorable rompa la cadena.
Detectar la violencia psicológica
La violencia psicológica tiene mil caras. Algunas son obvias, otras, prácticamente imposibles de
determinar como tales. Todas las formas de maltrato y acoso psicológico dejan su secuela.
http://www.fundacionmujeres.es/documentos/view/guia_para_mujeres_maltratadas.html
http://elacosomoral-sonia.blogspot.com/2009/07/que-es-la-violencia-de-genero.html
http://grupoevos.com/Blog/about/ CONTINUARA…
El primer paso en el proceso de poner en claro, consiste para todos en traer a la conciencia, nuestro
drama particular de control. Podremos avanzar si nos observamos y descubrimos que hacemos para
manipular y así conseguir energía.
Para poder quedar realmente libres, de ser esa actuación inconsciente que representamos, una
manera es remontarnos a nuestra experiencia familiar, al tiempo y lugar de la infancia y revisar lo
que paso. Una vez que tomamos conciencia de nuestro drama de control (inquisidor-pobre de mi-
intimidador-distante) podemos concentrarnos en una verdad superior en cuanto a nuestros vínculos.
CALABACINES AL CURRY
Se hace rápidamente y el resultado es exótico. Si bautiza este guiso con algún nombre oriental
sacado de‖ Las mil y una noches‖, puede producir una tremenda impresión sin esfuerzo. Sirva
con arroz blanco o para un efecto más erótico, con arroz con azafrán.
INGREDIENTES: Preparación:
1 cucharadita de curry en polvo (o el vino dulce) y hierva a fuego lento por 10 min.
½ taza de coco rallado (o de vino dulce) minutos mas. Corte el fuego. Añada la crema y sirva
La Mariposa
Para hablar del poder del cuerpo de otra manera: Durante muchos años los turistas han
cruzado en tropel el gran desierto americano, recorriendo a toda prisa el llamado "circuito
espiritual": el Monument Valley, el Cañón de Chaco, la Mesa Verde, Kayenta, el Cañón de
Keams, el Painted Desert y el Cañón de Chelly. Echan un apresurado vistazo a la pelvis del Gran
Cañón Madre, sacuden la cabeza, se encogen de hombros y regresan corriendo a casa para, al
verano siguiente, volver a cruzar en tromba el desierto, mirar, mirar y observar un poco más.
Bajo este comportamiento subyace la misma hambre de experiencia numinosa que los
seres humanos han experimentado desde tiempos inmemoriales. Pero a veces esta hambre se
exacerba, pues muchas personas han perdido a sus antepasados (14). A menudo sólo conocen los
nombres de sus abuelos. Han perdido en particular los relatos de la familia. Desde un punto de
vista espiritual, esta situación produce tristeza y hambre. Muchos intentan recrear algo
importante por el bien de su alma.
Durante años los turistas han acudido también a Puyé, una enorme y Polvorienta mesa
que se encuentra en el centro de una extensión despoblada de Nuevo México. Allí los Anasazi,
los antiguos, se llamaban antaño unos a otros a través de las mesas. Dicen que un mar
prehistórico labró miles de sonrientes, lascivos y quejumbrosos ojos y bocas en las paredes
rocosas de aquel lugar.
Los diné (navajos), los apaches Jicarilla, los utes del sur, los hopis, los zunis, los Santa
Clara, los Santo Domingo, los laguna, los picuris y los tesuque, todas estas tribus del desierto se
reúnen en aquel lugar. Y bailan para recobrar el pasado y convertirse de nuevo en los pinos que
se utilizan para construir las estacas de las cabañas, en los venados, en las águilas y Katsinas, en
todos los poderosos espíritus.
Y allí acuden los visitantes, muchos de ellos hambrientos de sus geno—mitos y separados
de su placenta espiritual. Han olvidado también a sus antiguos dioses. Vienen a contemplar a los
que no los han olvidado.
El camino que sube a Puyé fue construido para cascos de caballos y mocasines. Pero con
el paso del tiempo los automóviles adquirieron más fuerza y ahora los habitantes de la zona y los
visitantes acuden en toda suerte de coches, furgonetas, descapotables y camionetas. Los
vehículos gimen y echan humo por la cuesta en un lento y polvoriento desfile.
Los visitantes acuden allí esperando mil cosas distintas, desde 10 sagrado a lo profano. Acuden a
ver algo que no todo el mundo podrá ver, una de las cosas más salva) es que existen, un numen
viviente, la Mariposa:
El último acontecimiento del día es la Danza de la Mariposa. Todo el mundo espera con
deleite esta danza de una sola persona. La interpreta una mujer, pero qué mujer. Cuando el sol se
empieza a poner aparece un viejo resplandeciente con un traje turquesa de ceremonia de veinte
kilos de peso. Con los altavoces chirriando como gallinas asustadas por la presencia de un
halcón, susurra contra el micrófono cromado de los años treinta: "Y nuestra próxima danza será
la Danza de la Mariposa." Después se aleja renqueando y pisándose el dobladillo de sus
pantalones vaqueros.
A veces un bailarín no oye el altavoz y tiene que ser avisado Por un mensajero a pie. Y
además el bailarín siempre tiene que hablar con sus parientes mientras se dirige al lugar donde
actúa y detenerse sin falta para que sus sobrinos y sobrinas le puedan echar un buen vistazo. Qué
impresionados se quedan los chiquillos al ver a un gigantesco espíritu Katsina que se parece
sospechosamente, un poquito por lo menos, a tío Tomás, o a una bailarina del maíz que se parece
mucho a tía Yazie. Finalmente, cabe la posibilidad de que el bailarín aún se encuentre en la
autopista de Tesuque, con las piernas colgando por encima de la cal .1 de una furgoneta de
reparto cuyo silenciador tizna de negro el aire a lo largo de dos kilómetros mientras el viento
sopla de cara.
Pasa el tiempo.
Pasa.
Y pasa.
La gente hace tintinear las monedas en los bolsillos. Emite un siseo al aspirar aire a través
de los dientes. Los visitantes están impacientes por ver a la maravillosa bailarina mariposa.
Los visitantes que sueñan con la frágil belleza de una delicada mariposa experimentan un
inevitable sobresalto cuando ven saltar a María Luján (15). Es gorda, decididamente gorda, como
la Venus de Willendorf, como la Madre de los Días, como la mujer de proporciones heroicas que
pintó Diego Rivera, la que construyó la Ciudad de México con un solo quiebro de la muñeca.
Y, además, María Luján es vieja, muy, muy vieja, como si hubiera regresado del polvo,
tan vieja como el viejo río y como los viejos pinos que crecen en el lindero del bosque. Lleva un
hombro al aire. Su manta negra y roja salta arriba y abajo con ella dentro. Su pesado cuerpo y
sus huesudas piernas le confieren el aspecto de una araña que brinca, envuelta en un tamal.
Salta sobre un pie y después sobre el otro. Agita su abanico de Plumas hacia delante y
hacia atrás. Es la Mariposa que llega para fortalecer a los débiles. Es alguien a quien casi todo el
mundo consideraría débil: por la edad, por el hecho de representar a una mariposa, por ser mujer.
El cabello de la Doncella Mariposa llega hasta el suelo. Es de color gris piedra y tan
abundante como diez gavillas de maíz. Y luce unas alas de mariposa como las que llevan los
niños en las representaciones teatrales escolares. Sus caderas son como dos trémulos cestos de
treinta kilos de capacidad y el carnoso repliegue de la parte superior de sus nalgas es lo bastante
ancho como para que en ella se sienten dos niños.
Salta, salta y salta, pero no como un conejo sino con unas pisadas que dejan ecos.
Agita su abanico de plumas arriba y abajo, derramando sobre la tierra y sobre el pueblo
de la tierra el espíritu polinizador de la mariposa. Sus pulseras de caparazones de molusco
suenan como los cascabeles de una serpiente y sus ligas adornadas con cascabeles tintinean
como la lluvia. La sombra de su voluminoso vientre y de sus delgadas piernas baila de uno a otro
lado del círculo. Sus pies levantan a su espalda unas pequeñas polvaredas.
Las tribus participan con actitud reverente. Pero algunos visitantes se miran unos a otros
y murmuran: "¿Es eso? ¿Ésa es la Doncella Mariposa?" Están desconcertados y algunos incluso
decepcionados. Parece que ya no recuerdan que el mundo espiritual es un lugar donde las lobas
son mujeres, los osos son maridos y las viejas de considerables dimensiones son mariposas.
Sí, es bueno que la Mujer Salvaje/Mariposa sea vieja y gorda, pues lleva el mundo de las
tormentas en un pecho y el mundo subterráneo en el otro. Su espalda es la curva del planeta
Tierra con todas sus cosechas, sus alimentos y sus animales. Su nuca sostiene el amanecer y el
ocaso. Su muslo izquierdo contiene todas las estacas de las cabañas indias, su muslo derecho
contiene todas las lobas del mundo. Su vientre contiene todos los niños que nacerán en el mundo.
La Mariposa rectifica la errónea idea según la cual la transformación sólo está destinada a
los atormentados, los santos o los extremadamente fuertes. El Yo no necesita transportar
montañas para transformarse. Un poco es suficiente. Un poco da para mucho. La fuerza
polinizadora sustituye el traslado de las montañas.
La Doncella Mariposa poliniza las almas de la tierra. Es más fácil de lo que tú piensas,
dice. Agita su abanico de plumas y salta, pues el! derramando el polen espiritual sobre todos los
presentes, los americanos nativos, los niños pequeños, los visitantes, todo el mundo. Utiliza todo
su cuerpo como bendición, su viejo, frágil, voluminoso, paticorto, cuellicorto y manchado
cuerpo. Ésta es la mujer unida a su naturaleza salvaje, la traductora de lo instintivo, la fuerza
fertilizadora, la reparadora, la recordadora de las antiguas ideas. Es La voz mitológica. Es la
personificación de la Mujer Salvaje.
La bailarina mariposa tiene que ser vieja porque representa el alma, que es vieja. Es
ancha de muslos y ancha de trasero porque acarrea muchas cosas. Su cabello gris atestigua que
ya no necesita respetar los tabús que impiden tocar a la gente. Está autorizada a tocar a todo el
mundo: a los chicos, a los niños, a las mujeres, a las niñas, a los viejos, a los enfermos, a los
muertos. La Mujer Mariposa puede tocar a todo el inundo. Tiene el privilegio de poder tocar
finalmente a todo el mundo. Éste es su poder. Su cuerpo es el de la Mariposa.
LO QUE SE VIENE…
8 de Marzo DIA INTERNACIONAL DE LA MUJER.
ADIVINA – ADIVINADOR:
¡Hincame! ¡Aguijonéame!
Avispa
Avispa
Avispa
Avispa
Para mandar ideas, palabras, sugerencias, cariños y demás: colocar en el asunto cofre