Clase de escritura creativa

Cómo empezar

1. Analizar un enunciado: se trata de comprender bien lo que se pregunta y pensar

los conceptos-ideas que incluye el enunciado.
2. Partir de una idea-concepto, asociando progresivamente una nueva idea a la
anterior, al tuntún.
3. Preguntarse sobre el enunciado algunas de las 7 Q: ¿qué, quién, dónde, por qué
medios, por qué, cómo, cuándo, cuánto?
4. Partir de varias ideas a la vez implica un orden. Hay que asociarlas siguiendo
algún criterio: de más importante a menos, oposición, semejanza, contrarias,
causalidad, etc. pero ordenándolas según queramos que aparezcan.
5. Empezar por cualquier idea que nos venga a la mente y probar de enlazar un
pensamiento con el siguiente
6. A veces la idea no aparece. Entonces hay que buscar otra, empezar desde otro
punto de vista o ángulo.
7. Si tenemos un pensamiento fuerte que se corresponde con lo que queremos
defender, es más fácil partir de éste, escribiéndolo al inicio y luego ir
deduciendo el resto.
8. Si no sabemos como continuar, buscaremos un ejemplo para ilustrar lo que
hemos dicho, ya que lo importante es proseguir, y en haciéndolo suelen aparecer
más ideas.

Lo que hay que hacer

1. Hay que hablarse mentalmente cuando pensamos la idea. Hacerse preguntas y
responderlas es el mejor método.
2. Nos podemos ayudar de una hoja de papel, o en el mismo examen tomar notas
de lo que pensemos.
3. Concentrarse en lo que estamos haciendo. Si esperamos a que venga la
inspiración esta no llegará si estamos distraídos.
4. Es mejor partir de pensamientos que de unas ideas. Un pensamiento es una idea
compleja, que verbalizamos como una oración y suele tener sujeto y predicado.
Intentaremos crear pensamientos, es decir, dos o más ideas en una estructura
gramatical.
5. Si no hallamos pensamientos, partamos de una idea e intentemos decir algo de
ella (es decir, añadamos un verbo y un predicado.
6. Si no encontramos como empezar o continuar, deberemos hacer brainstorming y
seleccionar la siguiente idea más importante que encontremos.
7. Si no hayamos ninguna idea habrá que improvisar e inventar una
8. Si no hayamos una palabra concreta que tenemos en la punta de la lengua
deberemos dar un rodeo por el contorno de la idea (buscar un sinónimo)ç
9. La experiencia personal es nuestro mejor aliado. Si no sabemos como empezar o
continuar, recordaremos algún hecho de nuestras vidas implicado en la idea e
intentaremos extraer más ideas y/o opiniones.
10. Si no conocemos el tema o qué decir sobre algo, habrá inventarlo, procurando
que se acerque lo más posible a lo que se nos pide. Buscaremos un tema
parecido que conozcamos.
11. Si lo hemos intentado todo y aún así no hemos escrito una línea, lo dejamos para
otro momento, ya que no se trata de una falta de ideas sino de motivación.
 Técnicas con ideas

1. Las ideas se llaman unas a otras. Si dejamos que la mente las busque irán
apareciendo ideas relacionadas.
2. Las ideas poseen extensión, es decir, los conceptos se pueden englobar en
conceptos más generales, y los conceptos generales desmenuzar en otros más
particulares.
3. A la hora de resumir las ideas importantes de un texto, veremos que algunas
engloban a otras. Las englobaremos hasta quedarnos con dos o tres ideas
generales sobre las que empezar.

Ejercicios para empezar

Asociando ideas: crea una oración (todo lo larga o corta que quieras) en la que
aparezcan los siguientes conceptos (no necesariamente por el mismo orden).¿Cuál es
más fácil de asociar? Cuál más difícil? ¿Por qué?

fuego lluvia
azúcar caramelos de menta
guitarra concierto
miedo sentimientos
cuchillo cadáver
amor libertad
grano de arena planeta
encendedor cama elástica

Asociando ideas 2: buscamos una idea de la que deberemos extraer 8 ideas más que se
asocien con ella.

Empezando: se trata de familiarizarse con los comienzos rápidos para no bloquearse.

Vaciamos la mente y escribiremos lo primero que se nos pase por la cabeza,
continuando lo más rápido posible, sin detenernos, aunque no tenga sentido. Al cabo de
diez segundos dejamos de escribir, y contamos el número de palabras y verificamos la
coherencia.