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PROFESIONALIZACIÓN DEL SERVICIO

DOMESTICO

Temática: Cuidado del Adulto Mayor

Destinatarios:
Participantes de dicho curso

Disertantes:
Dra. Ivana García y Lic. Lorena Luján de la
Dir. Gral. de Salud de Nuestro municipio

Ciclo
2010

DIRECCIÓN GRAL. DE CAPACITACIÓN


MUNICIPIO DE CENTENARIO
PROV. DE NEUQUÉN
CUIDADO DEL ADULTO MAYOR

Introducción
En nuestra sociedad, el cuidado de los adultos mayores, los abuelos
o los ancianos de la familia, aún cuando éstos llegan a presentar
limitaciones y enfermedades, con su carácter y sus obsesiones o
necedades, representa un verdadero reto sobre la atención
adecuada que se les debe proporcionar debido en gran parte a la
reciprocidad que nos merecen. Es perfectamente conocido lo
tradicionalista de nuestra familia y afortunadamente no nos hemos
comportado como lo hacen las sociedades de otros lugares del
mundo y conservamos a nuestros adultos mayores en casa, a pesar
de los cambios que esta decisión acarrea para toda la familia.
El cuidado del adulto mayor en el hogar, una vez que éste depende
totalmente de sus familiares o de sus cuidadores, es una
problemática muy amplia que exige no sólo experiencia sino que las
atenciones y cuidados que recibe sean personalizados, ajustados
específicamente para las necesidades de cada persona. Se trata de
lograr una conducta equilibrada: por una parte, evitar agredir su
dignidad sin dejar de prodigarle los cuidados adecuados; y, por otro
lado, no incurrir en el error de olvidarse de las propias necesidades
(de quien lo atiende) ya que sólo así se podrá brindar una atención
de calidad.
Cuidado cotidiano
Alguien que está confinado en la cama necesitará ayuda para
muchas actividades cotidianas que todos consideramos normales,
como lavarse, cepillarse los dientes e ir al baño. Algunas personas
incapacitadas sólo necesitan asistencia mínima, quizá darles la mano
para ayudarles a entrar a la regadera, mientras que otras necesitan
de otra persona que se encargue de atender todas sus necesidades
físicas cotidianas. La persona enferma también necesita que la
pongan cómoda: para alguien que se puede mover pero está
confinado en la cama, puede ser simple cuestión de comprobar que
tenga suficientes almohadas y que no tenga mucho calor, ni pase
frío. Sin embargo, alguien que no se puede ni mover en la cama,
necesita ayuda considerable para mantenerse cómodo.

ASPECTOS A TENER EN CUENTA PARA EL CUIDADO DE LOS


ADULTOS MAYORES

• Establecer rutinas para mantener las cosas normales


Una rutina puede disminuir la toma constante de decisiones y traer orden y
estructura a la vida diaria, que de otra forma resultaría un tanto confusa. En

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la medida que lo permita la situación cambiante, trate a la persona de la
misma manera que lo hacía antes de la enfermedad.
• Mantener la independencia de la persona
La persona debe mantener su independencia el mayor tiempo posible. Esto
le permitirá mantener su autoestima y disminuirá la carga que deberá
soportar el cuidador.
• Ayudar a mantener la dignidad de la persona
Se debe tener siempre en cuenta que la persona con Alzheimer es todavía
un individuo con sentimientos, que puede sentirse herido por lo que de ella
digan o con lo que ella hagan. Se debe evitar discutir la condición de la
persona delante de ella. Cualquier tipo de conflicto causa estrés innecesario
en la persona con la enfermedad y en el cuidador. De debe evitar llamarle la
atención por algun fracaso y siempre hay que mantener la calma. El enojo
empeora la situación. Se debe siempre tener en la mente que cualquier
conflicto o problema que aparezca es debido a la enfermedad y no es culpa
del enfermo.
• Simplificar las tareas
Simplificar las cosas para un enfermo con EA es importante. Por ejemplo, no
es conveniente crearle dilemas ofreciéndole demasiadas posibilidades para
elegir. Lo más indicado es convencerle de que lo que se le ha ofrecido es lo
mejor para él.
• Intentar mantener la calma y el buen humor
El humor puede aliviar el estrés. Siempre que sea posible, hay que intentar
bromear con el paciente y reírse con él. La risa, han dicho muchos, es una
terapéutica eficaz para muchas condiciones.
La pérdida de la coordinación física y de la memoria aumentan las
posibilidades de lesionarse. Por eso debe mantener su casa lo más segura
posible.
• Mantener la salud física
En muchos casos esto ayudará a mantener las habilidades físicas y
mentales de la persona por un tiempo. El ejercicio apropiado dependerá de
las condiciones de la persona. Consulte con su médico que tipo de ejercicio
(paseos, bicicleta, natación, etc) son los más adecuados para el paciente
• Aprovechar las habilidades de la persona
Algunas actividades pueden elevar el sentido de la dignidad y autoestima
de la persona dándole un propósito y un significado a la vida. Una persona
que ha sido ama de casa, jardinero, comerciante o ejecutivo puede sentirse
mejor si practica las habilidades relacionadas con estas tareas. Las
manualidades o el bricolaje pueden ayudar a mantener ocupado al paciente,
• Mantenga la comunicación
A medida que la enfermedad progresa, la comunicación entre la familia y el
cuidador y la persona puede resultar más difícil.
Por ello, se debe:
• Comprobar periódicamente que la persona vea y oiga.
• Hay que hablar claro, despacio, cara a cara y mirando a los
ojos.
• Demostrarle cariño a través de abrazos si esto le es cómodo a
la persona es una manera de mantener un lazo de afecto entre
la ella y la familia.

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• Algunos pacientes con dificultades del habla, pueden intentar
comunicarse con gestos o con una combinación de palabras,
señales y gestos incentivantes.
• Los accidentes caseros.
Los adultos mayores son particularmente vulnerables a los accidentes. Las
caídas son el problema más común y la persona se lastima mucho como
resultado de lo que se puede considerar como una caída pequeña, ya que
sus huesos son más frágiles y se pueden romper con más facilidad.
Los accidentes caseros más frecuentes son las caídas, las quemaduras y
las intoxicaciones.
Las caídas y fracturas pueden producir un grave deterioro de la calidad de
vida del adulto mayor.
El equilibrio es también un problema y cuando el adulto mayor empieza a
caerse casi nunca se puede incorporar, además de que tendrá miedo que
le vuelva a pasar, por lo que tal vez se la pase sentado o se vaya a acostar.
Es necesario devolverle la confianza, y por supuesto, tratar de hacer todo
lo que sea posible para asegurar que la persona pueda ir de un lado a otro
a salvo y con confianza.
Algunos consejitos para evitar accidentes:
-Compruebe que las alfombras no tengan orillas gastadas y que no haya
cables eléctricos donde se pueda tropezar el adulto mayor.
-Los pisos no deben estar muy encerados ni ser resbalosos.
-Los pasillos y escaleras deberán estar bien iluminados; recoge los juguetes
de los niños y cualquier otro obstáculo.
-Las perillas de luz deben ser fáciles de encontrar.
-Las chimeneas deberán tener una reja protectora y los calefactores de
petróleo deberán estar en un lugar donde no haya riesgo de tropezarse y
tirarlo.
-Las llaves y las estufas de gas se deberán inspeccionar con regularidad
para ver si tienen fugas; los calefactores de gas sólo se deberán usar en
cuartos con ventilación adecuada pues una persona mayor bien podría
perder el conocimiento antes de darse cuenta que algo anda mal.
-Guarda todas las medicinas en un lugar seguro y comprueba que la
persona enferma pueda leer las etiquetas. En especial, si está tomando
pastillas para dormir, mantene el frasco en el botiquín y no junto a la cama
para evitar una sobredosis accidental.
-Otro aspecto importante es la seguridad, tanto en el hogar como fuera de
él. Desgraciadamente, hoy en día muchas personas mayores son muy
vulnerables; crecieron en una época donde los asaltos, el vandalismo y los
ataques a ancianos eran cosa rara. Muchos no se dan cuenta de los
peligros y siguen dejando las puertas sin llave y las ventanas abiertas o
van de compras con la bolsa a la vista de cualquier ladrón. Trata de
persuadir a cualquier amigo o pariente adulto mayor para que tenga las
puertas y ventanas corredizas con cerrojos y con una cadena en el interior
de la puerta principal. La policía o un buen cerrajero local puede hacerle
recomendaciones.
• Uso de la silla de ruedas
-Comprueba que la persona está sentada en forma segura y lo más atrás
posible en la silla. Quizá pueda necesitar un cinturón de algún tipo para
seguridad.

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-Ponga los pies de la persona en el descansa pies. Si hay listones o cintas,
comprueba que queden bien amarrados.
-Si vas a poner un cobertor sobre las rodillas de la persona enferma,
comprueba que esté metido en los costados y debajo de sus pies para que
no haya puntas sueltas que arrastren por el suelo o que se enreden en las
ruedas.
-Cuando empujes la silla de ruedas a otro lugar, comprueba que los codos
de la persona enferma no sobresalgan para evitarles un golpe.
-Cuando pasa por una puerta, dale la vuelta a la silla y jálala hacia atrás.
En forma similar, cuando haya un escalón, dale la vuelta a la silla y pon las
ruedas delanteras en el escalón antes de levantar las ruedas traseras.
-Siempre pon los frenos cuando esté parada la silla y recuerda soltarlos
antes de tratar de moverla.
-Nunca dejes a alguien sentado en una silla mirando hacia una pared o de
espaldas a alguna actividad interesante.
• Actividades mentales
El paciente debe usar la atención, la memoria, la imaginación y el
lenguaje; esto favorecerá el estado de ánimo y su capacidad mental.
Para que el adulto mayor use la memoria es útil que lo ayudes a
repasar los sucesos de su vida, tal vez con ayuda de fotos, o las
noticias del día; preguntarle (y recordarle) lo sucedido ayer, o pedirle
información sobre sus familiares.
La imaginación se puede ejercitar si le preguntas qué espera del día
actual, cuál es su opinión sobre cierto tema, cómo cree que se podría
solucionar algún problema. Durante estas conversaciones debes
hacer frecuente referencia a la fecha y circunstancias presentes,
para favorecer su orientación. Las reflexiones deben tener un acento
optimista, haciéndole presente los aspectos positivos y no los
negativos de su situación. Si logras hacerlo reír debes felicitarte.
También pueden ser útiles para la atención, la memoria y el ánimo
para algunos juegos (dominó, cartas, juegos de memoria o de
atención), la música o el canto, la colaboración en algunas tareas
domésticas o los ejercicios indicados por los especialistas en
rehabilitación. Recuerda, tú que estás a su lado puedes motivarlo a
que se involucre más en los acontecimientos presentes y siga
teniendo ánimos para seguir adelante con optimismo.
A cada uno de los visitantes puedes pedirle que colabore en alguna
actividad. Muchas veces los familiares o amigos se sienten
estimulados a volver si pueden ayudar al paciente, por eso es
importante pedir su colaboración.
• Conducta perseverante y repeticiones.
Este tipo de comportamientos es muy común en aquellas personas
que presentan deterioro cognitivo, ya que éste afecta a la capacidad
de las personas para recordar algún suceso.
• Algunos ejemplos de comportamientos redundantes
son:
Repetir preguntas.
Pedir cosas.

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Llamar con frecuencia.
Moverse de un sitio para otro.
Buscar algún objeto.
Asegurarse de algo (ej: haber cerrado la puerta o el gas, apagar la
luz).
• ¿Por qué pueden ocurrir estos comportamientos
repetitivos?
Aburrimiento
Es posible que el comportamiento se deba a que está “llamando la
atención”, por ejemplo, porque se aburre y quiere distraerse, o
porque se siente solo(a) y quiere compañía.
Olvido
Un comportamiento de este estilo (por ejemplo, preguntar
repetidamente si se ha apagado el gas) puede ser consecuencia del
deterioro cognitivo, que provoca en la persona una pérdida
progresiva de la memoria. Esta pérdida de memoria puede generar
en la persona un sentimiento de inseguridad o incertidumbre, que es
el que en último término provoca el que se repitan las preguntas o
los comportamientos repetitivos (ej: buscar las llaves, asegurarse de
si se ha cerrado una puerta, etc.).
Malestar físico
En ocasiones, las conductas perseverantes o repetitivas pueden
estar indicando que no se encuentra cómoda por algún motivo,
siendo este tipo de comportamiento la manera a través de la cual la
persona expresa o manifiesta su malestar. Puede no reconocer cuál
es la causa de su malestar, lo que contribuye a que se muestre
inquieta (siendo el comportamiento perseverante o repetitivo una
manifestación de esta inquietud).
Malestar psicológico
Es posible que se encuentre preocupado(a) o inquieto(a) por algún
motivo (por ejemplo, por la enfermedad de un familiar). Dormir mal o
estar agotado por alguna actividad puede influir también en que la
persona no tenga la misma capacidad que en otros momentos de
recordar o de prestar atención a las cosas.
• Consejos útiles para prevenir o disminuir la aparición de
estos comportamientos.
-Mantene la calma y responde a las preguntas pausadamente,
aunque sea la “octava vez” que lo haces.
-Habla despacio a la persona para que le resulte más sencillo
entender y así no tenga la necesidad de preguntar constantemente.
-Responde a las preguntas con claridad concretando las mismas lo
máximo posible, de tal forma que sean lo menos ambiguas posibles.
-Explica las cosas de distintas maneras, por si alguna de ellas no es
comprendida con claridad.
-Distrae a la persona con otra actividad.
-Trata de responder sin enfadarte o sin argumentar (ej: sin decir “es
la décima vez que te respondo”).

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-Crea un ambiente agradable en el que la persona no se sienta
incómoda.
-Proporciona “ayudas a la memoria”. Por ejemplo, ten un calendario
a la vista de la persona, ten las cosas por las que la persona suele
preguntar a la vista y bien ordenadas, ten escrito en un papel a qué
hora hay que tomarse un medicamento, etc.

• Entonces…, qué siente el cuidador?

CUANDO SEA VIEJO


El día que este viejo y ya no sea el mismo, ten paciencia y
compréndeme. Cuando derrame comida sobre mi camisa y olvide
como atarme mis zapatos, recuerda las horas que pase enseñándote
a hacer las mismas cosas.

Si cuando conversas conmigo, repito y repito las mismas palabras que


sabes de sobra como termina, no me interrumpas y escúchame.
Cuando eras pequeño para que te durmieras tuve que contarte miles
de veces el mismo cuento hasta que cerrabas los ojitos.

Cuando estemos reunidos y sin querer haga mis necesidades, no te


avergüences y compréndeme que no tengo la culpa de ello, pues ya
no puedo controlarlas. Piensa cuantas veces cuando niño te ayude y
estuve paciente a tu lado esperando a que terminaras lo que estabas
haciendo.

No me reproches porque no quiera bañarme; no me regañes por ello.


Recuerda los momentos que te perseguí y los mil pretextos que te
inventaba para hacerte más agradable tu aseo. Acéptame y
perdóname. Ya que soy el niño ahora.
Cuando me veas inútil e ignorante frente a todas las cosas
tecnológicas que ya no podré entender, te suplico que me des todo el
tiempo que sea necesario para no lastimarme con tu sonrisa burlona.
Acuérdate que yo fui quien te enseñó tantas cosas. Comer, vestirte y
tu educación para enfrentar la vida tan bien como lo haces, son
producto de mi esfuerzo y perseverancia por ti.

Cuando en algún momento mientras hablamos me llegue a olvidar de


que estamos hablando, dame todo el tiempo que sea necesario hasta
que yo recuerde, y si no puedo hacerlo no te burles de mi; tal vez no
era importante lo que hablaba y me conforme con que me escuches
en ese momento.

Si alguna vez ya no quiero comer, no me insistas. Se cuanto puedo y


cuanto no debo. También comprende que con el tiempo ya no tengo
dientes para morder ni gusto para sentir. Cuando me fallen mis
piernas por estar cansadas para andar, dame tu mano tierna para

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apoyarme como lo hice yo cuando comenzaste a caminar con tus
débiles piernas.
Siempre quise lo mejor para ti y he preparado los caminos que has
debido recorrer.
Piensa entonces que con el paso que me adelanto a dar estaré
construyendo para ti otra ruta en otro tiempo, pero siempre contigo.

No te sientas triste o impotente por verme como me ves. Dame tu


corazón, compréndeme y apóyame como lo hice cuando empezaste a
vivir. De la misma manera como te he acompañado en tu sendero te
ruego me acompañes a terminar el mío. Dame amor y paciencia, que
te devolveré gratitud y sonrisas con el inmenso amor que tengo por
ti.

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