Sección: Docentes

Título: Niveles de dominio de la lengua

Balazo: una propuesta de Teresa Colomer y Ana Camps
Autor: Esther López-Portillo
Palabras clave: lengua, enseñanza de la lengua, lectores competentes, niveles de
dominio de la lengua, aprender lengua, usuarios del lenguaje.

Enseñanza de la lengua
Es en el ámbito escolar donde los estudiantes aprenden a desempeñarse con los
sistemas de signos, uno de ellos, el lenguaje escrito. En el proceso de enseñanza
de la lengua se concibe al lenguaje como un todo que no debe fragmentarse;
cumplir con esta premisa y con las características del enfoque comunicativo y
funcional implica, además de la enseñanza de la comprensión y la producción de
textos; el desarrollo de habilidades como hablar y escuchar, y la reflexión sobre los
usos y convenciones del lenguaje.

Teresa Colomer y Ana Camps —investigadoras y académicas españolas

especializadas en didáctica de la lengua; cuyos trabajos, individuales y colectivos,
son referente para formadores y académicos— a lo largo de su obra ponen énfasis
en la lectura y las implicaciones que tiene en el proceso de enseñanza y
aprendizaje; afirman que la enseñanza de la comprensión lectora es una habilidad
que debe cruzar el currículo; saber leer, comprender diversos tipos de textos y
conocer cosas relacionadas con su formato, estructura y contenidos, es útil no
sólo para la clase de lengua.

En ese sentido, proponen que los docentes se desempeñen como mediadores y

que realicen actividades centradas en leer para aprender. Además, desde su
punto de vista, es la escuela quien tiene la responsabilidad de mejorar los
procesos de aprendizaje de la lengua escrita, a partir de analizar el modo en el
que el lector actúa y construye el significado del texto.

Dominio de la lengua
Teresa Colomer y Ana Camps han clasificado el dominio de la lengua en cuatro
niveles; mismos que es necesario conocer e identificar con el propósito de
diagnosticar en qué nivel se ubican los alumnos y promover, en respuesta,
actividades adecuadas para el desarrollo de habilidades y competencias.

1. Nivel ejecutivo: en escuelas regulares, se puede ubicar en este grupo a los

niños de primero y segundo, por ejemplo, estar en este punto implica que el
estudiante es capaz de traducir un mensaje oral al lenguaje escrito y viceversa; lo
que significa que tiene un dominio básico del código.

2. Nivel funcional: en este grupo caben los estudiantes que se han apropiado de la
lengua y la conciben como un hecho interpersonal que les permite resolver las
exigencias de la vida cotidiana. Necesita, además del conocimiento básico del
código, el conocimiento de diversos tipos de textos de uso cotidiano como cartas,
solicitudes, recados, listas, folletos, invitaciones, etcétera.

3. Nivel instrumental: se puede decir que quienes pertenecen a este nivel de

dominio, son capaces de utilizar lo mismo el lenguaje oral que el escrito como
herramienta de búsqueda y registro de la información con diversos fines: acceder
a nuevos conocimientos —curriculares y extra curriculares—, satisfacer intereses
personales y entretenerse, entre otros.

4. Nivel epistémico: es el punto más alto de la pirámide; los estudiantes que se

ubican aquí, tienen un alto grado de apropiación del lenguaje oral y escrito y
pueden manifestar, a través de él, sus posturas, ideas y puntos de vista, de forma
estructurada, creativa, crítica y analítica. De acuerdo con las autoras, en este nivel
“la estructuración del lenguaje y ordenación del pensamiento están en perfecta
armonía y una al servicio de la otra”.

Más allá de los niveles

Las autoras también señalan que es fundamental proporcionar a los estudiantes el
acompañamiento y las herramientas necesarias para que logren desempeñarse
lingüísticamente con eficacia; la enseñanza de la lengua oral y escrita es objetivo
prioritario de la escuela, institución responsable de la conservación, producción y
distribución de conocimientos socialmente significativos que, finalmente,
conducirán a los estudiantes a ampliar, profundizar o modificar su proceso de
comprensión del mundo.

Bibliografía
• Colomer, Teresa y Camps, Ana: Enseñar a leer, enseñar a comprender.
Madrid, Celeste/MEC, 1996.