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INTRODUCCION:
A ningún obrero fiel de la obra de predicar el Evangelio de Cristo, se le puede causar un
dolor más agudo, más intenso que el ver destruido el fruto de sus afanes.
Nada angustia más a un ministro del Evangelio que el enterarse que la fe genuina en la
verdad se ha socavado, (abrir un hueco) que los principios bíblicos enseñados se han
alterado, que las creencias en la doctrina se han corrompido.
Por lo tanto no cuesta trabajo, pues, entender la profunda angustia que sintió Pablo
cuando vio el gran estrago (daño) que causaban entre los creyentes corintios las falsas
enseñanzas.
Y vuelvo y repito tenía tanto celo por ellos que estaba dispuesto a darse a parecer
como insensato no siéndolo, con tal de proteger a la congregación.
Para pablo lo que está en peligro de ser destruida es la Obra de Dios en los corintios, y
corría peligro de perderse la herencia de ellos.
Pablo tenía claro que había actuado como mensajero de Dios. Su objetivo había sido
conseguir para Cristo una Iglesia que le fuera completamente fiel…”los tengo
prometidos a un solo esposo, que es Cristo, para presentárselos como una virgen pura.”
Y ahora me dirijo así como lo hago a la congregación, así ahora al consistorio, a todo el
consejo de la IRV…, ¿no debe ser esa también la actitud correcta que debemos tener: la
de velar sin descanso, por cuidar la pureza de la vida de la Iglesia, en doctrina y vida? o
¿existe otra responsabilidad más importante que tengamos como congregación y para
con la congregación?
Creo que esta debe ser una tarea intensa, sin descanso y permanente.
Me llama la atención cómo el apóstol, ante el temor de que los santos pudiesen ser
engañados y sus pensamientos fueran extraviados de la sincera fidelidad, pura y
devoción a Cristo; apela a recordar un suceso muy antiguo que ocurrió en el Edén.
El texto nos recuerda cómo la serpiente con su astucia engañó a Eva y a Adán.
El texto no lo explica, pero le puedo asegurar que durante estos últimos 2000 años se ha
venido atentado contra la Iglesia presentando a un Jesús diferente; y esto se ha hecho
adulterando la figura de Su Persona (Su dignidad, Su Majestad, Su Divinidad, Su
Santidad entre otras).
Y en segundo lugar atentando contra Su Obra (Sus Enseñanzas, Sus Obras prodigiosas,
Su expiación, Su Victoria total, Su reinado para siempre).
Cualquier cosa que haya sido, el apóstol lo combatió y nosotros debemos hacerlo.
Segundo, “si reciben un espíritu diferente del que ya recibieron”. ¿Qué espíritu es ese
del cual le habla?
Nosotros sabemos que El Espíritu Santo nos guiará solo a Cristo y solo a la verdad, este
es su santo propósito y nada ni nadie podrán cambiar esto.
Creo hermanos sinceramente, como dicen de manera popular: “sin que me quede nada
por dentro” que este peligro sigue presente en nuestra época, cuánto más sabiendo que
existe una corriente en las Iglesias presbiterianas americanas y reformadas de Holanda
que se conoce como Post-modernismo que es un tipo de combinación de ecumenismo
(unidad entre iglesias diferentes comprometiendo la doctrina bíblica) y remodelación
(cambios sin tener en cuenta lo que dice la Escritura y la doctrina) que se pega
(contamina) al modelo reformado ortodoxo, resultando en una especie de postura
teológica neo-reformada, calvinismo amigable, posición intermedia etc. (para diluir el
evangelio histórico de la gracia de Dios donde Cristo es nuestro único y todo-suficiente
salvador)
Y también: Ese Libro que llaman (Orden Eclesiástico) esa son normas para europeos,
para holandeses, y por lo tanto no debemos utilizarla como norma para tratar los asuntos
de la Iglesia.
Y por último ese tipo de Gobierno eclesiástico, (modelo de consistorio reformado) eso
es muy jerárquico y no permite el desarrollo del liderazgo en la Iglesia.
Permítame aclarar esta terrible situación y combatir con todas mis fuerzas esta
desviación de la verdad:
AMEN.
P. Néstor González