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Rocher, Guy (1972) Talcott Parsons et la Sociologie Américaine. Paris: PUF, Capitulo IL, pags. 46 ~70. CAPITULO IL La teoria general de la accion. Talcott Parsons ha elaborado progresivamente una concepeién de la sociologia, de su lugar y de su contenido que es bastante singular. Muy pocos sociélogos se han dedicado con tanto empefio como él para delimitar los contomos de la sociologia, trazar sus fronteras, desoribir sus relaciones con las disciplinas vecinas y diseiiar un mapa del conjunto de las micias del hombre. Se puede decir que Parsons ha hecho en cierto modo 1a ecologia de 1a sociologfa, ya que ha buscado situarla en “el entomo” de las otras ciencias del hombre y anelizar las relaciones que mantiene con cada una de efflas. De ello resulta que la obra de Parsons supera en gran modida la simple sociologia, pues se dirige en definitiva al conjunto de las ciencias humanas. Parsons mismo se define siempre como un socidlogo, pero es evidente que no puede abordar su obra solamente como una sociologia. Es importante pues tomar de la obra de Parsons el panorama més global posible, si no se quicre traicionarla en lo que ella tiene quizss de més original y seguramente de més audaz. Por ello, en este capitulo vamos 8 comenzar por seguir a Parsons desde el nivel mas elevado de andlisis, que es el de Ja teoria general de la accién, 1o que nos permitird seguidamente, en fos capitulos subsiguientes, comprender mejor la teoria sociolégica parsoniana en sus perspectivas de conjunto! L. Lanocign de accién social El punto de partida de toda la teorfa de Parsons, que al mismo tiempo Ja proyecta en un marco exiremadaments vasto, es la novién de accién social. Esta no se deja encerrar en ‘una definicién precisa y estricta, lo que desespera algunas veces al que toma contacto con la obra de Parsons, Sin embargo, Parsons ha explicitado suficientemente bien en varias cocasiones fo que entiende por ella, La accién social, en el sentido en que él fa entiende, es toda conducta humana que esti motivada y guiada por las significaciones que el actor descubre en el mundo exterior, significaciones que tine cn cuenta y a las cuales responde. Los rasgos esenciales de la accién social residen pues en la sensibilidad del actor a la significacién de las cosas y de los seres ambientes, la toma de conciencia de estas significaciones y Ta reaccién a los mensajes que estas tltimas transmiten Definida en primer lugar por su significatividad, Ia accién social se interpreta a partir de ta subjetividad que tiene de su entomno, de los sentimientos que la animan y de las ideas que la habitan, de las motivaciones que le hacen actuary de las reacciones que tiene de su ptopia accién, Subrayemos enseguida ~ deberemos volver a ello ~ que cl actor que esté aqui en cuestion puede ser un individuo, pero también un grupo, una organizacién, una regién, una " Los elementos de fa teoria general de la acoidn estén repartidos un poco en todas partes en a obra de Parsons. Se los encuentra principalmente en The structure of social action (1937), Toward a general theory of action (951), Working papers in the theory of action (1953) y un buen mimero de astiouls, algunos de los euales serén mencionados en el curso de este capitulo, 2 sociedad global, una civilizacién, Parsons evita asimilar Ja accién social a la conducta individual. Al contrario, generaliza la nocién a toda entidad, individual o colectiva, de la cual se puede asi una conducta que es posible analizar a partir de las significaciones que alli estén implicadas. Por otra parte, la nocién de accién social no esté destinada a encerrar al observador en el solo punto de vista subjetive del actor. Al contrario, hiabiendo tomado nota de esta subjetividad, sc es inducido a analizar la acci6n social a partir de la dualidad actor-situacién, fundamental en toda la teorfa parsoniana de Ia accién, El actor de Parsons es un ser-en- situacién, pues su accién es siempre la lectura de un conjunto de signos que pereibe en su entorno y a los cuales responde. El entomo det actor es en primer fugar el medio fisico donde se despliega su accién, es decir, fos objetos materiales, las condiciones climéticas, la geografia o la geologia de los lugares, pero también el organismo biolégico en el caso del actor individual. Ei actor siente ef peso 0 la influencia de esos objetos, los explica, desarrolla senitimientos con respecto a ellos, los utiliza para Jos fines que les impone. Todas estas selaciones con el medio fisico suponen un juego de interpretaciones a través de las cuales el actor pervibe fa realidad y le da un sentido en funcién del cual acttia. Poro en el entomo que rodea al actor, el objeto privilegiado es evidentemente el objeto social, es decir, en primer lugar los otros actores. Con ésios, la acciGn social deviene interaccién. El andlisis de Ja subjetividad det actor se vuelve ahora de doble 0 mititiple pantalla: a la subjetividad de Ego responds fa subjetividad de Alter, sea éste a su vez individual o colectivo. En toda su obra, Parsons demuestra la complejidad de las relaciones soviales entre las personas humanas. Esta interaccién entre dos 0 varios actores y la subjetividad que alli esta comprometida constituye uno de Jos ejes principales de la teoria parsoniana. Poro hay otra categoria de los objetos sociales privilegiados a los ojos de Parsons, son Jos objetos culturales 0 simbéticos. Porque esté cargada de significacién, la accién social se roviste necesariamente de simbolismo. Es a través de los signos y de los simbolos como el actor conoce su entomo, to siente, lo evaltia y lo manipula. En la interaccién social, simbolismo es esencial para la comunicacién bajo todas sus formas, y liga a los actores entre si, Interacciém y accién ge mueven, puss, on un vaste universe « accién toma un sentido tanto a Jos ojos del actor mismo como de los otros. tra funcién del simbolismo en ia accién social, es la de mediatizar las regias de conducta, fas normas, los valores culturales que sirven para guiar al actor en la orientacién de su accién. Las normas y valores son, en efecto, de naturaleza csencialmente simbélica en varios aspectos. En primer lugar, puede decirse que hacen comunicable 1a conducta de los actores: por fas normas y valores a los cuales se refiere, la accién humana se toma menos ‘opaca respecto a los otros actores tanto como al actor que actita, pues todos pueden leer alli un sentido, una orientacién, una continuidad. Ademés, es a través de las normas y de los valores como el actor puede intorpretar una situacién, descubrir alli puntos de referencia, limites y fuerzas que debe tener en cuenta cn su conducta, Finalmente, las normas y valores proporcionan al actor fines y medios que le sirven de guias y que al mismo ticmpo confieren 2 su accién una significaciéa particular a sus propios ojos y a los de los otros actores. Como Jo subraya Parsons, la accién humana se sitta entre dos universos de “no- accién”, que constituyen al mismo tiempo dos érdenes definitivos de coacciones. El primero de esos universos es del entome fisico que comprende realidades como ef clima, ef estado ide Ios recursos, os instrumentos y técnicas disponibles, la constitucién biolégica de los individuos, la base hereditaria y caracterioldgica. Este primer universo de coacciones es comin a fodas las especies vivientes y comprende un conjunio de condiciones con las que toda acciénrdebe contar. Bl segundo, #8 el del entorno simbético o cultural, que propone fines a alcanzar y medios apropiados, establece limites a la accién permitida, define prioridades y sugiere elecciones. E] universo cultural singulariza la accién humana entre todas las formas posibles de accién, En efecto, es porque reviste un caricter simbélico y normative que la accién humana se distingus de todo otro tipo de accién. De lo que acabamos de decir resulta que la accién social a la cual so dirige toda la teoria de Parsons comparte los cuatro elementos siguientes: 1) Un sujeto-aotor, que puede ser un individuo, un grupo o una colectividad; 2) Una situacién, que comprende objetos fisicos y sociales con los cuales el actor entra en relacién; 3) Simbolos, por intermedio de los cuales el aotor entra en relacién con los diferentes elementos de la situacién y fes atribuye una significacién; 4) Reglas, normas y valores, que guian la orientacién de la acoién, es decir, las relaciones del actor con los objetos sociales y no sociales de su entomo, 2, El sistema deta Accién Social La accion social, entendida en ef sentido que acabamos de decir, os el objeto de estudio de todas las ciencias del hombre, en la perspectiva que adopta Parsons. Ahora debe ser dade otro paso. Para que el estudio de Ja aceién social se vuelva verdaderamente cientifico, en el sentido mas riguroso del término, se debe, segin Parsons, plantear un postulado fundamental, aa saber que la aocién humana presenta siempre los caraateres de un sistema. Ya hemos dicho que a los ojos de Parsons la nocién de sistema es esencial a la ciencia. Son Vilfredo Pareto y su discipulo e intérprete americano L.J. Henderson quienes han convencido de ello a Parsons de una manera definitiva. Desde sus primeros escritos y a fo largo de toda su obra, Parsons est on la busqueda de los elementos sistémicos en la accién humana, bajo cualquier forma quo ésta altima se presente y oualesquiera sean las modalidades. Si hay una cosa de la cual Parsons esté seguro, es que las ciencias det hombre no pueden ser cientificas sino en la medida en que recurran al andlisis sistemtico, come fo han hecho las ciencias fisicas y mas recientemente la biologia. De hecho, la accién humana se presta al andlisis sistémico. Toda accién se presenta como un conjunto de unidades-actos de uno o de varios actores, es decis que se la puede descomponer en fracciones de gestos, palabras, mimicas, cuya totalidad reconstituida forma, por ejemplo, tn rot social (el rol de padre de familia o el de jefe de offcina), 0 alin un momento més o menos largo de interaccién entre dos o varios actores, Un buen némero de investigaciones sobre los pequefios grupos han utilizado de una manera empirica estos procedimientos de anitisis y de sintesis. As, Robert Bales ke elaborado categorias que permiten descomponer cada intervencién de fos participantes de una discusién de grupo en pequeiias unidades, clasificarlas y reconsiruir nucvas sintesis de actos que no estaban emparentados a primera visia’, La acci6n, a oualquicr nivel de realidad en que se sitée, es ? Robart Bales, Interaction process analysis, Cambridge, Addison-Wesley, 1950, 4 siempre un compuesto, él producto de una sintesis analiticamente descomponible. Al mismo tiempo, 1a accién que se considera como un compuesto no es ella misma jams una realidad aislada. Esté ligada a otras acciones y compone con ellas un conjunio ms amplio, Asi, el rol de padre de familia es un elemento en un conjunto de acciones que constituye la familia. Y ésta a su vez se inscribe'en wwrmarco mas amplio que es el parentesco, y asi sucesivamente. En consecuencia, toda accién puede ser considerada al mismo tiempo como una totalidad de unidades-actos y como un elemento de una totalidad mas amplia. La accién no es pues jams cni simple ni aislada, Esta interdependencia de las unidades de accién es ya un elemento de prucha a favor de la nocién de un sistema de accién, en la medida en que todo sistema supone una intettelacién de las partes que constifuyen una totalidad, Pero ella sola no es suficiente para legitimar que se hable de un sistema de accién. La nocién de sistema a la cual recusre Parsons es mucho mas compleja, Se puede decir que a sus ojos el sistema de accidn requiere tres condiciones. La primera es una condicién de estructura: jas unidades de un sistema y el sistema mismo deben responder a ciertas modalidades de organizacién, para lo que se constituyen elementos o componentes relativamente estables que pueden servir de puntos de referencia para el andlisis de! sistema. En el sistema de accién, son los modelos normativos y a.un nivel de abstraccién més elevado las “variables estructurales”(pattern variables) las que cumplen este rol, segi Parsons. La segunda condicién implica Ia nocién de funcién: para que un sistema de accién exista y se mantenga, ciertas necesidades clementales del sistema, en cuanto sistema, deben ser satisfechas. Es el problema de los prerrequisitos funcionales, 0 ain de las dimensiones funcionales del sistema de accién. La tercera condicidn se refiere a Jos procesos del sistema mismo y en el interior del sistema: por su naturaleza un sistema de aceién implica actividades, cambios, una evolucién que no pueden producirse por azar sino ‘que deben-obedecer-a ciertas modalidades 0 ciertas reglas: Es principalmente el andlisis de estos tres aspectos fundamentales del sistema de accién lo que constituye la teorfa general de la accién. Vamos ahora a seguir un poco mas en detalle ef pensamiento de Parsons a propésito de cada uno de ellos. Una observacién se impone previamente. En Parsons, la nocién de sistema de accién xno ¢9 una nocién conereta; no se reiaciona con una realidad objetiva, digamos, por ejempio, una familia o una fabrica. Tal como lo utiliza, el sistema de accién esta en el orden de la conceptualizacién y del anilisis; es un modo de reconstruccién mental de la realidad, una manera de coneebir las cosas, en resumen, un procedimiento heuristic. No hay nada en la reatidad de lo cual pueda decirse: éste es el sistema de accién. Toda accién sin embargo puede ser analizada a la manera de un sistema de accién, a cualquier nivel de realidad que esta accidn se sith, ya se trate de la conducta que adoptan dos personas una con respecto a la otra, o de la lucha de clases, o de un conflicto internacional. El sistema de accién es una nocién de un allo grado de generalidad que no tiene comespondencia directa en el universo de Ja realidad, ya que es un instrumento analitico cuya area de aplicacién es extremadamente extendida, 3. Los modelos exilturales Elementos estructuroles del sisteran de acciéa 5 Si se vuelve a los fundamentos elementales de todo sistema de accién, se puede decir que éte debe comprender dos componentes esenciales: un actor y su situacién, formada por abjetos fisicos y sociales. En su formulacién mas simple, el sistema de accién se reduce a ta organizacién de las relaciones de interacci6n entre el actor y su situacién. En realidad, no hay siempre interaccién propiamente dicha: Es-con-los-otros actores (los “objetos sociales” en el Yenguaje de Parsons) que interviene una verdadera interaccién, es decir, una complementariedad de accién y una inter-influencia. En lo que hace a objetos fisicos, ol actor ge encuentra mas bien para actuac sobre ellos o para adaptarse a ellos. En. cuanto a los objetos simbélicos o culturales, el actor los utiliza para comunicarse con los otros actores, 0 so refiere a ellos como guias para Ja orientacién de su accién con los objetos fisicos o los otros actores sociales. Pero estas distinciones no cambian nada de Ia naturaleza de la accién social, tal como fa conoibe Parsons. Habiendo Hevado de nuevo el sistema de accién a sus clementos de base, la primera cquestién que se plantea es la siguiente: qué es lo que hace que entre el actor y los objetos de su entomo, las relaciones de interaccién puedan existir, mantenerse, perpetuarse? En otros téminos, cuales son los factores que estructuran las relaciones de interaccién y de accién, permitiendo asi que duren y conozcan tna relativa estabilidad? ‘Lo que desconcierta mucho a los erfticos de Parsons es su perpetuo asombro ante el orden. Bajo la influencia de los teéricos socialistas y marxistas, se ha venido a privilegiar el conflicto y el cambio en el ‘andlisis de la accién, Parsons, al interrogarse sobre los fandamentos del orden, no podia dejar de hacerse la reputacién de ser un conservador social a quien interesa solamente el mantenimiento del statu quo. Sus ctiticos sin embargo han traspuesto muy fécilmente al plano ideotégico una problematica que es osencialmente de onien analitico. Se olvida que para Parsons, ef orden aparece menos como un hecho que como un problema. Sin duda, Ia observacién més superficial nos obliga @ reconocer que la accién humana, ya sea individual 0 colectiva, no obedece al azar; no os ni cadtica ni imprevisibie; no es tampoco la guerra de todos contra todos. Tanto en Ia accién individual como en la de una colectividad, es observable un cierto orden que permite en particular al actor predecir con bastante precision su propio comportamicnto y el de los que Je rodean. Pero este orden que se puede constatar de muchas maneras permanece en realidad como problema resuclto sin cesar y siempre a resolver. La cucstién sigue plantefindose: jcudl es el Fandamento del orden en Ja accién social? Pues lo que deberia asombramos, no es que haya conflictos y luchas, sino més bien que un cierto orden subsista més allé de todas las causas de desorganizacion de la accién individual y colectiva. Parsons ha querido retomar la problemética del orden para recuperar el hilo o os hilos conductores que han seguido los fildsofos que se han interrogado sobre la naturaleza de ta sociedad humana, Se sitta asf de entrada en la tradicién de Hobbes, Looke, Mills, Rousseau. Como ellos, considera que el orden no puede ser tomado como adquirido, sino que demanda ser explicado. Ahora bien, las bases sobre las cuales hasta aqui se ha creido poder fndar la existencia del orden en la accién social humana no han sido satisfactorias. El orden no puede ser considerado como el resultado de la convergencia esponténea y accidental de intereses divergentes, como lo orefa Locke; no es ef producto de un contrato social a la manera de Jean-Jacques Rousseau; tarmpoco hace falta ver alli el fruto de wna autoridad que los hombres hhabrian aceptado, como la oreia Hobbes, para ovitar la lucha permanente. Todas estas interpretaciores tenian un vicio fendamental; estaban fundadas sobre el postulado segin el cual la acci6n del hombre estd motivada por el interés perseguido de un modo individualista y 6 que eta necesario explicar la existencia del orden a pesar de los intereses y del individuatismo del homabre. Esta psicologia simplista del utilitatismo clisico ha sido criticada severamente por las investigaciones mas recientes de tos principales precursores de la ciencia social modema, que han abierto la mirada a una nuova interpretacion del orden, de una manera auténticamente cientifica. Y esta reinterpretaciOn del orden on la accién social constituye, a los ojos de Parsons, el mas grands descubrimiento de las ciencias del hombre de a primera mitad del siglo XX. En varias ocasiones, Parsons ha seffalado le asombrosa convergencia de las investigaciones de diferentes teéricos, pero principalmente de Freud y Durkheim. Partiendo de puntos muy alejados, estos dos investigadores ~ quienes sin embargo se han ignorado uno al otro — han seguido vias que los han aproximado al punto de dar a sus obras un cardcter compiementario. Uno y otro han puesto en evidencia ef hecho de que la accién humana obedece a reglas, normas, modelos que sirven para estructurarla, es decir, para darle un marco que asegure la coherencia. En la obra de Freud, las reglas de conducta han aparecido bajo Ia forma de Super yo, compuesto de las sanciones y de las figuras significativas que forman la Conciencia moral de 1a personalidad. En Durkheim, las reglas y los modelos se llaman “representaciones colectivas” y “conciencia colectiva”; en la medida en que est4 sometida a su coaccién, Durkheim acepta reconocer que la accién individual deviene de un"hecho social” Una diferencia importante de punto de vista distingue a Freud de Durkheim y constituye al mismo tiempo la complementatiedad de sus aportes. Freud identifica los modelos sociales en la estructura de la personalidad individual, mientras que Durkheim ve en la sociedad ta depositaria de las representaciones colectivas. Para Freud los modelos sociales existen en Comic que estén interiorizados, asimilados por la persona y que forman parte integramente de 1a organizacién de la personalidad psiquica. Para Durkheim, 1os modelos existen en la medida en que estén en primer lugar institucionalizados, de manera que asi puedan gjercer una coaccién exterior sobre la conciencia moral de las personas. Estas dos perspectivas estén lejos de ser contradictorias. Parsons se ha mostrar que son en realidad complementarias, que constituyen las dos caras de una misma moneda, dedicado a Mis exactamente, estas dos perspectivas se requieren una a la otra, al encontrar cada una en la ofta su punto de apoyo. Los modelos exteriores que son interiorizados por la persona para convertirse en el Super yo son aquellos mismos que estén institucionalizados, en Ja medida on que son compartidos por una pluralidad de personas. E inversamente, los modclos estén institucionalizados porque una pluralidad de personas los han interiorizado. La conciencia moral de Freud se une asi con la conciencia coiectiva de Durkheim; el Super yo es el reverso individnatizado de las representaciones colectivas que descansan en la sociedad, En Ia sociologia francesa, esta complementariedad de to individual y de to colectivo ha sido conocida bajo el nombre de “reciprocidad de las perspectivas”, segtin Ix expresién de Georges Gurvitch. Es la misma idea que Parsons ha expresado de una manera mis elaborada y subrayando més las rafces histéricas, En esta reciprocidad de tas perspectivas, Parsons ve la solucién al problema del orden planteado por Hobbes, Locke, Mills y Rousseau. Bl fundamento del orden reside en la 7 estructura del sistema de la accién, es decir, en los modelos, las normas y fos valores que tienen una significacién para el actor, individual o colectivo, por el hecho de que estan intetiorizados en la personalidad y de que estén al mismo tiempo institucionalizados en la sociedad y Ja cultura, Parsons mismo resume asi su pensamiento: "E] teorema més fundamental dela teoria de la aceién me parece que es que la estructura de los sistemas de accién consiste en los modelos culturales de significacién, que estén institucionalizados en et sistema social y la cultura, y que estén interiorizados en la personalidad y el organismo. El que esta proposicién no sea evidente y no caiga por su propio peso esta atestiguado por la historia larga y compleja del behaviorismo y de las otras teorias reduccionistas de la conduota humana’. Bfectivamente, este teorema es central en la obra de Parsons, pues explicita la reciprocidad de las perspectivas mostrando que ella descansa sobre {a doble naturaleza de los modelos cutturales, que estin a la vez en la conciencia de las personas y en el universo simbdlico de la sociedad, se puede decir que los mismos modelos se encuentran en el actor én la simacion, porque han sido interiorizados también por los otros actores y porque estén institucionalizados en la cultura y fas estructuras sociales. 4. Las variables estructurales deb sistem de accidn Parsons ha querido Hevar més lejos el andlisis de los factores de estructuracién del sistema de accién. Si es verdad que los modelos culturales sirven para estructurar el sistema de accién, como se acaba de ver, se debe agregar que ellos mismos se estructran a su vez de ‘ana manera particular. Por su naturaleza, ol modelo cultural impone al actor hacer elecciones, opciones, prodlucir juicios que le obliguen a tomar posicién, a dejar de lado alguna cosa o tne conducta a favor de otra. La accion guiada por los valores es pues necesariamente a la vez tina eleccién y un rechazo, una orientacién hacia algo y un apartarse con respecto a otra cosa, im si'y un no. En resumen, la dualidad y la contradiccién estén inscriptas en el corazon mismo del universo de los valores. Otos sociélogos antes que Parsons habian ya sefialado y puesto en evidencia esia duatidad, Este fue particularmente el caso de Ferdinand Tonnies, quien desarrolla 1a teoria de las dos categorias fundamentales de las relaciones sociales, 1a soviedad y la comunidad, mis exactamente las relaciones societarias y las relaciones comunitarias. Cada uno de estos dos tipos de relaciones sociales elementales era un compendio de modelos y de valores que definen {a naturaleza mana y la vida en sociedad. Prueba de ello cs que Tonnies mismo tenia una inclinacién netamente definida por formas comunitarias de vida social, en las cuales vela una moralidad superior. Parsons retoma Ia dicotomia de Tonnies, qus considera como ta primera expresién incompleta de una distincién estructural en el anlisis de la acci6n, Pero la principal objecién que Parsons hace a fa dicotomia de Tonnies, ¢5 que ella condensa en exceso y recubre varias dimensiones que deben ser explicitadas.* Esto se le aparecié 2 Parsons sobre todo en el anélisis del rol social del médico, que fue objeto de su primer jnvestigacién empirica, Eso le dio la ocasién de mostrar que en ciertos aspectos, Ia préctica médica recurta a relaciones comunitarias, y en otros, a relaciones societarias. Asi, el médico y 0 paciente forman una comunidad de interés, en la que su objetivo conxin y que dortina jodas sus relaciones ¢s el de Ia curacién o de Ia salud del paciente. Pero al mismo tiempo, las 5 Talcott Parsons, “The Point of View of de Author”, en The Social Theories of Talcott Parsons, publicado bajo le diseccion de Mex Black, Englewood Cif, N.1, Prentice-Hall, 1961, p. 342 Figg soine todo en The Soucture of Social Action, en una nota al final del capitulo XVII, donde Parsons discute Jas categorias de Tonnies. 8 relaciones entre el médico y el pacionte deben tomar ciertos caracteres socictarios: el paciente debe aceptar estat en relacién con el médico de una manera especifica, es decir en cuanto paciente solamente y no en cuanto amigo o de una manera global. La oposicién establecida por Tonnies entre Ie sociedad y la comunidad no-es-pucs unidimensional, como lo habia oreido Tonnies, sino pluridimensional. Es importante separar as diversas dimensiones que comporta. A estas dimensiones, Parsons las ve como una serie de dilemas que se presentan a todo actor social, y a los cuales debe dar respuesta en la orientacién de su accién. No hay, comic lo habia creido Tonnies, un solo dilema posible, sino varios. Por otro lado, su nimero no ¢s ilimitado, pues en toda sociedad y en todas las relaciones sociales, las opciones clementates y fundamentales se reducen a algunas. Luego de haber vacilado en saber si existen cuatro, cinco o seis dilemas, Parsons afirma finalmente que él ve cuatro. A estos cuatro dilemes, que requieren cada uno dos respuestas posibles, Parsons les ha dado el nombre de “variabies estructurales” de la accién (pattem variables). Se advierte que Parsons ha comenzado a elaborar su nocién de variable estructural con motivo del andtisis del rol profesional. Alli aparecen tos primeros esbozos cuando intenta encontrar una distincién mejor que aquélla que es costientemente empleada entre las profesiones liberates y el mundo de ios negocios: en lugar de hablar del espiritu desinteresado en el primer caso y de prosecucién de interés en el otro, Parsons busca poner a punto variables mas socioldgicas y menos utilitaristas.* Luego, aplica esas mismas variables, retocéndolas, al andlisis de 1a profesién médica misma. En The Social System’, la variable estructural aparece pues como un concepto exclusivamente sociolégico. Bs en Toward a ‘General Theory of Action que las Variables estricturales oftecen posibilidades de aplicacion mucho més extendidas y pertenecen al nivel més general de andlisis, es decis, a la teoria general de la accién, Durante varios afios, mds precisamente entre The Structure of Social Action (1937) y Working Papers on the Theory of Action (1953), las variables estructurales han constituido el je centraf de Ja teorfa general de Ia accién de Parsons, Mas tarde, Parsons ha introducido nuevos elementos, de los cuales volveremos a hablar mis adelante, pero las variables estructurales continéan jugando un rol central en la teorla parsoniana. Explicitemos répidamente las cuatro variables, tal como Parsons mismo las presenta en sus escritos més recientes En primer lugar, ef actor social puede decidir juzgar un objeto fisico 0 social a partir de ctitetios generales aplicables a todo un conjunto de objetos, Ei actor opta entonces por el universatismo. E1 actor puede, por el contrario, considerar el objeto en aquelio que io singulariza y juzgarlo en si mismo, siguicndo criterios que no se apliquen sino a ese objeto y a las condiciones particulares que lo constituyen. El actor opta entonces por el particularismo. Por ejemplo, el profesor juzga y evaliia a sus alumnos a partir de ciertos criterios generales, que dan a su juicio fundamentos de justicia y de equidad. En cambio, el padre. de familia juzga a su hijo a partic de criterios mas particulares a su hijo mismo que si él fuera su profesor. Esto no impide que un cierto particulatismo entre también en el juicio de un > “the Professions and Socal Struchuns”, en Social Forces, 17 (mayo 1939), 4, Igualmente en Essays in Social Theory. * The Social System, capituloX 9 profesor, y que el padre de familia adopte un cierto universatismo on el juicio que emite sobre sus hijos. Pero la nota dominante es puesta sobre el universalismo cn el caso del profesor y el particularismo en el cago del padre. Y es este acento lo que hace para Parsons la diferencia en fa respuesta a un dilema En segundo lugar, ol actor puede juzgar un objeto fisico 0 social segiin To que este objeto produce, hace, cumple. Su juicio se basa entonces sobre la performance del objeto. En cambio, ef actor puede oforgar importancia més bien a lo que es el objeto on si mismo, independientemente del éxito de su accién o de lo que aporte al actor. Es entonces la cualidad del objeto el criterio de juicie que adopta el actor. Fn tercer lugar, el actor debe optar entre la neutralidad afeotiva y la afectividad en sus relaciones con los objetos de su situaci6n, Opta por la neutralidad afectiva cuando pone sus sentimientos entre paréntesis, on beneficio de relaciones de interaccién orientadas mAs en foncién de su instrumentalidad o de una finalidad exterior. De una manera general, las relaciones del mundo del trabajo estén dominadas mas por Ia neutralidad afcctiva. No es sino en ciertos contextos, como ef de la familia o de Ja amistad, que la afectividad puede expresarse de una manera més libre en las relaciones sociales. En fin, el actor puede elegir estar en selacién con otros actores solamente bajo ciertos aspectos especificos, ¥ no de una manera global, En otros términos, el actor puede estar en yelacién con una pluratidad de personas que son para él clientes, 0 pacientes, o empleados. Cpta entonces por la especificidad. Si elige al contrario la difusién, es que opia por relaciones sociales mas globales, por las cuales esta ligado a fos otros actores de una manera méltiple, fen cuanto persona humana total, Se podria todavia aqui utilizar el ejemplo del profesor cuyas relaciones con sus alummnos son mas bien especificas mientras que las del padre con los hijos son mas difusas, Se ve enseguida que estas cuatro variables estructurales son una explicitacién de la dicotomia de Tonnies. El universalismo, la performance, la noutralidad afectiva y la especificidad caracterizan ias selaciones que Tonnies Yamaba societatias; el particularisino, la cualidad, Ja afectividad y la difusién son las opciones tipicas de las relaciones comunitarias La ventaja que tienen estas distinciones sobre Ja dicotomia de Tonnies, es que son evidentemente mas flesibles. Permiten analizar relaciones sociales donde se mezclan, por cjemplo, el universalismo y la performance, la afectividad y In eapecificidad. En otros t&minos, las variables de Parsons han servido para multiplicar la utilizaciin de a dicotomia de Tonnies, desprendiendo de alli dimensiones que Tonnies habia condensado en exeeso. Desde Toward a General Theory of Action (1951), Parsons insiste en decir que estas variables estructurales son los componentes escnciales de todo sistema de acciém. Bsto significa para él que estas variables tienen una enorme generalidad analitica en cuanto se aplican a conductas individuales 0 colectivas, al andlisis de grupos restringidos o de sociedades globales, a la descripcién de Ta accién de actores individuales o de instituciones sociales, Sin embargo, Parsons ha creido poder reagrupar estas cuatro variables en dos grandes clases, pues todas elas no se dicigen a los mismos elementos del sistema de Ia accién. Dos de Jos grupos de variables descansan més particularmente sobre ef objeto con el cual el actor est on relacin, sobre la significacién que este objeto tiene para el actor y el tipo de juicio 10 que roquiere por parte del actor. Es el caso de las variables universalismo / particularismo y cualidad / performance. Parsons llama a este primer grupo las variables estructurales de modalidad del objeto, El segundo grupo de variables, el de la especificided / difusién y de la neutralidad afectiva y de la afeotividad, se dirige sobre todo al actor y define la actitud que adopta con respecto al objeto y cl tipo de relacién que tiene con él. Es por ello que Parsons llama a este segundo grupo las vatiables estructurales de orientacién al objeto. Asi se reoupera la dualidad actor / situacién que esta en el coraz6n del sistema de la acciéa. Las variables de modalidad del objeto se sitdan del lado de la situacién, es decir, de los objetos que ella comprende. Las variables de orientacién al objeto se ubican del lado del actor. La funcién de estructuracién del sistema de la accién que cumplen las cuatro variables estructurales aparece pues aqui de una manera inequivoca, 5. Los prerrequisitos funcionales del sistema de accién Si el andlisis de la estructuracién de la accién pone en relieve tos factores que contribuyen a la estabilidad del sistema, las dimensiones funcionales del sistema de acciin nos llevan a considerar 2 éstos en su actividad. En efecto, en el lenguaje de Parsons, la funcién de wn sistema vivo corresponde a un conjunto de actividades destinadas a responder a una necesidad 0 necesidades det sistema en cuanto sistema, La nocién de funcién tal como la entiende Patsons es pues esencial al andlisis sistémico, al menos cuando sc trata de un sistema de accién. “La nocién de funcién, escribe Parsons, ¢s central para la comprensién dc todos tos sistemas vivos. En efecto; no es otra cosa que el corolario de is noci6n de sistema vivo, del cual describe ciertos caracteres, algunos de los cuales conciemen a las relaciones entre el sistema y su entomo, mientras que otros se refieren a la diferenciacién interna del sistema mismo”. Esta cita revela la doble via de andlisis del sistema de accién a la cual Parsons adhiere siempre. En primer lugar, un conjunto de conductas que deberian tratarse como un sistema de accién (por ejemplo, un roi profesional 0 una ciase social) perienecen a un todo mas vasto, con ef cual esté en relacién de diversas maneras, pues depende de él, al mismo tiempo que contribuye con él en cierta medida, Un primer grupo de necesidades del sistema so desprende de alli: éstas son las que se refieren a sus relaciones con su medio. En segundo lugar, al sistema de accién es en si mismo un compuesto de partes o de unidades que tienen entre si relaciones a la vez de diferenciacién y de integracién. Aparece aqui un segundo grupo de necesidades del sistema, que son el resultado de las exigencias de su organizaci6n interna ‘Cuando un sistema de accién funciona y se mantiene, es que ha sabido responder a esos dos érdenes de necesidades o de problemas. Esto supone que ha sabido organizar y movilizar las actividades necesarias. He aqui a qué corresponde {a nocién parsoniana de funcidn. Se encontrarén pues en ef sistema de accién funciones o conjuntos de actividades que se refieren a las relaciones del sistema con su etitomo y otras que responden a las necesidades de organizacién interna. “Some Problems of General Theory in Sociology” en Theoretical Sociology: Perspectives and Developments, bajo la direccién de Johut McKinney y Rdward A. Tiryekain, New York, Appleton-Centary- Crofis. 1970, p.29 ik Parsons propone un segundo modo de andlisis de las funciones del sistema de accibn, que deriva de otra distincién que hace, esta vez entre los fines del sistema y los medios de los que dispone. Esta nueva distincién corresponde a la que Parsons ha empleado frecuentemente, entre las actividades del sistema que é1 llama “consumatorias”, es decir que corresponden a la obtencién de Jos fines buscados (ya se trate de bienes, de satisfacciones o de ideales) y las otras actividades que llama “instrumentales”, porque conciemen a Ia biisqueda y la utilizacién de los medios. Estas dos maneras de plantear el problema de las necesidades y de las funciones del sistema, en téminos de extemo / intemo y de fin / medio se superponen una a otra complementandose. Asi, se puede hablar de fines que suponen relaciones con el entorno y de otros fines que conciemen a la organizacién inferna del sistema, y asi sucesivamente. En consecnencia, la utilizacién simulténea de estas dos distinciones revela la presencia necesaria de cuatro fimciones en todo sistema de accién, pata satisfacer lo que Parsons estima que son las cuatro necesidades elementaies del sistema de accién, Se puede decir que un sistema de acoidn existe solamente si estas cuairo necesidades son satisfechas al menos de una manera relativa y, en conscoucneia, solamente on la medida en que las funciones correspondlientes existan, Por ello es qu Parsons cree poder afirmar que las cuatro funciones son Jos pretrequisitos funcionales de todo sistema de accién. Parsons presenta igualmente las funciones elementales como cuatro "dimensiones" del sistema de aocién, en el sentido preciso en que este término es utilizado en fisica. Dicho de otro modo, en cada momento de la vida de un sistema de accién, todas Ias unidades-actos que lo componen deben situarse en una u oirs de las cuatro dimensiones. Y si se pudiera seguir na unidad-acto durante todo el tiempo que dura un sistema de accién, como es posible en fisica, se la veria moverse como una partioula de una dimensién a la otra a medida que el sistema de acoién se modifica. Al mismo tiempo, el movimiento de cada unidad-acto es en si mismo un factor de modificacién del sistema. Las cuatro fimciones o dimensiones del sistema de accién son las siguientes. En primer lugar, Parsons Mama adaptacién al conjunto de las unidades-actos que sirven para establecer relaciones entre ef sistema de accién y su medio exterior. Tal como lo define Parsons, el medio exterior al sistema de accién es generalmente otzo 0 varios otros sistemas, que pueden ser sistemas de accién o de no-accién, La adaptacién consiste en ir a obtener de esos sistemas exteriores los diversos recursos que el sistema necesita, en ofrecer a cambio productos que provienen del sistema mismo, y en adaptar y transformar esos recursos para hacerlos servir a {as necesidades del sistema. Esta funcién comprende, como su nombre lo indica, las actividades destinadas 2 asegurar que el sistema se adapte a su entorno, @ sus coacciones, sus exigencias y sus limites, y también aquetlas por las cuales el sistema adapta clentomo a sus necesidades, lo modifica, fo controla, la explota. La proseoucién de los fines constituye Ia segunda dimensién de todo sistema de accién. Parsons clasifica en esta categorfa a todas las acciones que sirvon para definir los fines del sistema, para movilizar y administrar los recursos y Jas onergias on vistas @ la obtencién de estos fines y para oblener finalmente la gratificacién buscada. Es precisamente a capacidad de fijarse fines y de perseguirlos metédicamente fo que distingue al sistema de accién de los sistemas de no-accién, es decir, de ios sistemas fisico 0 biolégico 2 En todo sistema de accidn, ciertas unidades-actos estén destinadas a establecer controles, a inhibir las tendencias a la desviacién, 2 mantener la coordinacién entre las partes y 2 evitar las perturbaciones muy profundas. A este conjunto de acciones, Parsons les da el nombre de integracién. Se trata de la dimensién estabilizadora del sistema, es decir, aquella donde se encuentran las acciones que tienden a proteger el sistema contra cambios brascos y perturbaciones mayores, y a mantener alli el estado de coherencia o de “solidaridad” necesario para su supervivencia y su funcionamiento. En fin, todo sistema de accién necesita de un conjunto de unidades-actos que sirvan para asegurar entre los actores la motivacién necesaria. Se trata de alguna manera aqui de la acumulacién de una reserva de motivacién de 1a cual debe disponer todo sistema de accién, reserva que debe renovarse siempre porque se consume sin cesar, El sistema de accién necesita que la energla que proviene de Ia motivacién se mantenga al menos en cierto nivel minimo. Esta funcién aparece pues como una suerte de sistema de canalizacin que sirve a la vez para acumular energia bajo forma de motivacién y para difundirla. Por ello Parsons ha dado a esta dimensién el nombre de latencia. Esta es al mismo tiempo el punto de contacto entre el sistema de accidn y el universo simbélico y cultural. Este ditimo pertenece al sistema de acoién de una manera particular, en cuanto proporciona los simbolos, las ideas, los modos de expresién y los juicios que son necesarios para crear 1a motivacién y canalizarla hacia la aceién. La combinacién de estas cuatro funciones que siguen las distinciones externo-interna y medios-fines da el paradigma del cuadro 1. Desde los Working Papers in the Theory of Action (1953) donde Parsons to ha presentado por primera vez, este paradigma se ha vuelto central en toda su obra, donde se lo encuentra sin cesar y bajo todas las formas. Como este ‘cuadro se Ice normalmente en el sentido de las agujas de relo} = dada la jerarquéa cibemnética de fa cual hablaremos més adelante ~ Parsons recurre sin cesar a la abreviacién AGTL. (donde G significa en inglés “goal-attainment” que hemos traducido por la proseeucién de los fines) para designar el conjunto de las cuatro funciones elementales. Cuadra 1 El paradigma funcional del sistema de la aocién Medios Fines A G Adaptacién Prosecucién de | Extemo | fines | Tatencia Tntegracion Interno | | (EEE Eee eee] ; I * Para ayudar a la comprensién de lo expuesto, vamos a seguir el ejemplo de Parsons, quien tiene la costuribre de presentar sus paradigmas bajo la forme de cuadros dle doble entrada B Sin embargo, no debe faltar aqui asociar a la obra de Parsons el nombre de Robert Bales, pues a ¢f debe Parsons la formulacién de estas cuatro funciones. En efecto, después de Toward a General Theory of Action (1951), donde habia extendido Ia nocién de las variables estructarales a la teoria general de fa accién, Parsons investigaba cémo el funcionamiento giobai de todo sistema de accién podia ser ligado a estas cuatro variables estructurales. Fue entonces cuando se sorprendid de la convergencia de su investigacién y de los trabajos de su colega de Harvard, Robert Bales. As{ como lo hemos dicho mas arriba, éste trabajaba en et andlisis de la interaccién entre 1os miembros de grupos restringidos reunidos para resolver problemas definidos, fo que lo habia conducido a elaborar categorias para clasificar las unidades de accién de cada uno de los participantes. Bales habia reagrupado las categorias que uiilizaba bajo cuatro titulos, que correspondian a fo que habia Lamado “problemas fancionates de! grupo”. Esta formulacién de Bales de Jos problemas funcionales es la que Parsons ha retenido finalmente, retocéndola ligeramente. Con respecto a esto, seftalemos de paso que a través de Bales, Parsons se encontré abrevando en larga tradicién de las investigaciones emericanas sobre la psico-sociologia de Jos pequefios grupos. Es asi como s¢ ha reconeiliado con la sociologia americana y ha sacado elementos que han ocupado un lugar en el centro mismo de su teoria, Ademés, para incorporar de este modo el aporte de Bales a su teoria general, Parsons debfa aceptar ef postulado de la unidad de lo micro-sociolégico y de lo macro-sociologico, de manera de poder generalizar a todo sistema de accién categorias elaboradas para el nivel micro-sociolégico. Como Parsons ya habia aceptado desde hace mucho tiempo una unidad és global todavia, Ja de todos Jos sistemas de accién, de lo biolégico a lo sociolégico, no le fue dificil reconocer la unidad de lo micro y de lo maero-sociolégico, Sin embargo, no es necesario creer que el préstamo que Parsons tomé de Bales te ha impedido seguir su investigacion sobre las variables estructurales. Al contratio, Parsons ha tenido que demostrar los lazos que ligan las vatiables estructurales a las dimensiones funcionales. Por otra parte, es l6gicamente normal que asi sea. Las actividacles que responden a una funcién particular, digamos la adaptacién, impone a los actores tipos de conducta que son diferentes de las actividades que responden a otra funcién, digamos la prosecucién de los fines, En el primer caso, Ia relacién actor-situacién est4 ordenada a objetives y on consecuencia sometida a reglas que no pueden ser las mismas que en el segundo caso. Se puede pues esperar que a cada una de las cuatro flanciones corresponda un juego particular do variables estructurales, que comprende a fa vez ciertas variables de orientacién al objeto y ciertas variables de modalidad del objeto. No es posible retomar agai los pasos que ha seguido Parsons para Hegar a relacionar Jas variables estructurales con respecto a cada una de las funciones.” El cuadro 2 (pagina siguiente) resume la concordancia que ha establecido. Se observard que on relacién a cada una de las cuatro funciones, se encuentran dos variables estructorales de orientacién al objeto 0 de actitudes y dos variables estructurales de modalidad det objeto. "? ° Bs en Working Papers in the Theory of Action, cap,3 y 5, donde se encuentran las explicaciones més detalladas que ha proporcionedo Parsons. En 1960, Parsons he refinado todavia més su andlisis de las relaciones entre las variables estructurales y les fianciones del sisterna de aceién, en su erticulo “Pattem Variables Revisited: A Response to Robert Dubin’, 6. Los sub-sistemas de la aceién Bl esquema de las dimensiones funcionales del sistema de la accién ha permitido a ‘Parsons precisar su pensamiento sobre otro punto. Inspiréndose probablemente en Sorokin,” Parsons ha insistido durante mucho tiempo sobre el hecho de que la aceién social implicaba necesariamente Ia intervencién de tres sistemas: la personalidad, ta cultura, el sistema social Se puede analiticamente distinguir el aporte de cada uno a Ja accién, aunque toda accion social conoreta sea global y recurra a los ires sistemas a la vez. Llegado el caso, Parsons afiadia de paso que un cuario sistema entraba también en juego, del cual sin embargo se podia decir muy poco, el organismo biolégico. El andlisis de tas dimensiones funcionales de Ia accién ha inducido a Parsons a inteoducir ol organismo en su esquema y a otorgarle un lugar tan importante como no Io ha hecho quizis ningin otro socidlogo. Ademés, Ia divisién del sistema de accién en cuatro funciones distintas ha permitido claborar un modelo teérico de las relaciones que existen entre el organismo, {a personalidad, la cultura y el sistema social. Este modelo es esencial para la comprensiin de toda la obra de Parsons. Cundeo 2 Relaciones entre las variables estructurales y las dimensiones funcionales del sistema de accién Universalismo (*) _Afeotividad (*) (Neutralidad) ()°.-Particularisme) (%) G Especificidad @) ‘Brosecucion defines | Performance (* (Performance) @) (Especificidad) () Calidad @) Difusién © Dikisiéa) ©) (Calidad Neutralidad () Particularismo ®) (niversalismo) ) (Afectividad) ) (C) Variable estructural de actitud o de orientacién al objeto. C@YWariable estructural de modalidad del objeto. A Parsons le parecié que en el nivel mas general de andlisis, se podian considerar el organismo biolégico, la personalidad, a cultura y el sistema social como los cuatro sub- sistemas més globales del sistema general de accién. Y flegs a la conclusién de que esos cuatro subsistemas se situaban unos en relacién con los otros en un orden que describe el esquema de las cuatro funciones del sistema de la accién. El organismo biolégico American Sociologie Rewiew, 25 (agosto 1960), 4, 467-483. Puede encontrarse igualmente este articulo en Sociological Theory and Modern Society, cap. 7. % P, Sorokin, Society, Cultural and Personality: Their Structure and Dynamics, New York, Harper and Brothers, 1947 1s corresponde a la funcién de adaptacién: es por los sentidos como se establece el contacto con ef universo fisico, sea para adaptarse alli, para manipulario, para transformarlo. Para el organismo, hay pues a la vez adaptacién al medio y adaptacién del medio a las necesidades de la accién, La personalidad psiquica responde a la funcién de prosecucién de fines. En y por et sistema psiquico se definen objetivos y los recursos y las energias son movilizados para alcanzat los fines fijados. El sistema social representa la funcién de integracién. Es el que crea solidaridades, propone lealtades, fija limites, impone coacciones. La cultura s¢ asimila a la funcién de latencia. Ella proporciona a los actores los elementos de motivacién y el soporte de Ia coaccién, por las normas, ideales, valores, ideologias que les proponen o les imponen. Cuadro 3 Los sub-sistemas del sistema general de la accién A G El organismo biolbgico personalidad (Adaptacién) (Proscencién de fines) La cultura "| Bisistema social (Latencia) ntegracin Parsons insiste sin embargo en el hecho de que cada uno de los cuatro subsistemas no participa fan completamente y de la misma manera en el sistema general de la accién. En lo que concieme al organismo biolégico, sélo Ia parte de sus actividades que concunren a la conducta significativa de actores depende del sistema de la accién. Asi, los movimientos del ‘onganismo que escapan a la conciencia y a la voluntad, por ejemplo las pulsaciones det corazén o la circulacién de la sangre, no pertenecen al sistema de accién. Por lo que se rofiere a la personalidad y al sistema social, son sin equivoco la sede de la accién y estin enteramente absorbidos en el sistema de accidn, La cultura es cl menos “activo” de los subsistemas, pues como tal no conoce de accién. Proporciona al actor Ia motivacién y las auias de su accién, pero permanece fuera de la accién propiamente dicha. El subsistema de ta cultura se mantiene como detrés del sistema de accién, porque alli participa del exterior sin estar comprometido de una manera tan total como la personalidad, 1 sistema social y et organismo biolégico. “Los cuatro sub-sistemas mantienen entre sf relaciones extremadamente complejas. En cierto sentido, cada uno puede ser considerado como un sistema independiente, Es analiticamente posible aislar cada uno, considerarlo en si mismo, en Jo que lo earacteriza y en su actividad propia. Se pueden delimaitar lo que Parsons lama las “fronteras” de cada uno de Jos sub-sistemas, es decir, las Kineas de demarcacién que lo distinguen de ios otros. Sin estas fronteras, los sub-sistemas se mezclarfan ‘unos con otros y perderian su existencia con su identidad. Pero siendo independientes, los cuatro sub-sistemas son interdependientes. Se requieren uno a oifo, se apoyan unos en otros y se complementan mutuamente, La personalidad no puede existir sin la energfa que le procura ef organismo, sin el tejido de 16, interrelaciones del sistema social y sin el universo simbélico de la cultura. Asimismo, el sistema social tiene absoluta necesidad de Ia motivacién de la personalidad y de la contribucién simbélica y normativa de la cultura. La cultura no existe sino porque se realiza en la personalidad y en la red de interacciones del sistema social. Se puede decir pues de los cuatio sub-sistemas que son-inreductibles unos a otros, pero estén en estrecha y necesaria relacién unos con otros. He aqui lo que es necesario entender cuando Parsons dice de estos sistemas que son “sistemas que existen por sus fronteras” (boundary maintaining systems), pero que son también “sistemas de fronteras abiertas” (open boundary systems). Estas fronteras abiertas entre los subsistemas son por otra’ parte el lugar de cambios constantes. De ello resulta un ir y venir ininterrumpido de “productos” que circulan de un sub-sistema al otro. Veremos més en detaile en los capitulos siguientes lo que Parsons entiende por ello y el lugar central que el andlisis de estas relaciones ocupa en su modelo teérico. Es necesario subrayar répidamente un dltimo aspecto de este esquema. Cada uno de los sub-sistemas, al gozar de una independencia relativa, puede ser considerado como un sistema y ser descompuesto a su vez en cuatro sub-sistemas, siempre siguiendo ¢l modelo de Jas cuatro finciones elementales. Y estos nuevos sub-sistemas pueden a su vez ser tomados como un sistema analizado también en los mismos términos. El sistema de accién de Parsons Se parece a esas mufiecas rusas que, cuando se {as abre, contienen una mas pequefia, la cual contiene una mds pequefia, y asi sucesivamente. Esto quiere decir, desde el punto de vista analitico, que se puede adoptar como sistema de referencia, segin la terminologia de Parsons, cualquier sub-sistema y cualquier nivel de realidad. Esta metodologia confiere al modelo parsoniano una gran flexibilidad, al mismo tiempo que una gran complejidad. Es importante en particular, cuando s¢ utiliza el modelo parsoniano, no perder de vista cl sistema de ‘eferencia que se ha adopiado al comienzo y no confundir los niveles de andlisis. Como estas precauciones no siempre son tomadas, de ello se derivan errores de interpretacion que sc atribuyen al modelo parsoniano cuando depende del empleo que se hace de él 7. Los procesos del sistema de accion Luego de la estructura y las fumciones, la tercera condicién que requiere el sistema de acoién para ser un sistema, es una cierta organizacién de los procesos. Esta tercera condicién ¢s evidentemente esencial en un sisterna cuyo objeto central es precisamente Ia acciGn, es decir un movimiento, Por su naturaleza, la accién acarrea casi necesariamente un cambio, la perturbacién de un estado presente y cl pasaje a un nuevo estado, a veces la innovacién. Por su acciéa, el actor interviene cn una situacién, 1o que desencadena casi inevitablemente una transformacién incluso menor, sea de Ja situacién sea del actor, Si se analiza la accidn a la manera de un sistema, se pucde decir de éste que no es casi nunca estitico. El sistema de accién es un sistema en movimiento, que sigue diversos procesos. Para analizar este movimiento y estos procesos del sistema de accién, Parsons ha creido titi adopiar como punto de partida ta nocién de equilibrio, Esto le ha valido numerosas criticas. Se ha querido ver alli una toma de posicién ideolégica a favor del statu quo y del conservadurismo social. En realidad basta con leer un poco atentamente a Parsons para darse iy cuenta de que se trata en él de un procedimiento heurfstico. Parsons repite frecuentemente que ef equilibrio es un caso limite, poco menos que imposible de realizarse ent la préctica y que no comesponde casi nunca 2 una realidad empitica. El equilibrio del cual habla es un punto de referencia teGrico a partir del cual debe comenzarse el andlisis sistemdético de Ia accion, Es necesario incluso decir que la nocién de equifibrio en Parsons requiere necesatiamente un andlisis dindmico, porque el equilibrio al cual have referencia es siempre problemético. El equilibrio es ya perturbado en ef momento mismo en que parece establecerse. En efecto, fo propio de la accién es ser un factor de desequilibrio en un sistema que tiende hacia un equilibrio que no alcanza casi nunca. La accién requiere siempre una reaccibn, arasirando as{ una cadena sin fin de reajustes y de cambios, Bn varias ocasiones, Parsons iavoca lo que llama “la ley de equivalencia de la accién y de Ja reaccién”. Entiende por ello que toda accién desencadena una reaccién que le es equivalente, 0 poco menos, y esta reaccidn es ella misma una accién que requiere una nueva reaccién, y as{ sucesivammente, El ejemplo concreto de un sistema de acci6n en equilibrio nos serfa dado por un actor cuya accién responde perfectamente a las expectativas de todos los otros actores, a las nomas y valores del grupo o de la colectividad que ellos forman, al mismo tiempo que gratifica plenamente al actor mismo. Se comprende que tal situacién sea completamente excepcional y que, si se produce, no se puede corresponder sino a un corlo momento det tiempo. Se trata mas bien de una suerte de caso limite fedrico que permite apreciar mejor los desequilibrios permanentes en las relaciones actor situacién, los procesos que desencadenan estos desequilibrios y los otros que éstos requieren, Parsons aflade que se pueds, como en fisica, completar la hipdtesis det equitibrio como una “ley de inercia”. Esta se formula del modo siguiente: si en un sistema de accién 0 se aporta ninguna modificacion, este sistema continéa indefinidamente en un estado de estabilidad, En otros términos, suponiendo que sc produzca un estado de equilibtio, es tedricamente Hamado a perpetuarse si alguna modificacién exterior no interviene. Pero en eb sistema de accién, como en fisica, la ley de inercia es teérica, primero porque supone un equilibrio en si mismo tedrico, luego porque supone condiciones exteriores constantes que, en 1a prdctica, no dejan de modificarse. 2Qué es lo que rompe sin cesar el equilibrio y hace caer la ley de ia inercia? Hay, segin Parsons, dos grandes provesos principales que modifican las relaciones actor / sitaacién: son la actividad y el aprendizaje. Lo que Parsons llama la activided (performance), son todas las conductas por las cuales el actor actia, hace algunas cosas, produce, comunica, tc. Por toda actividad, cada actor introduce perturbaciones més o menos importantes en st situaciéa; al mismo tiempo, sufre por su lado ias perturbaciones que resuitan tanto de la actividad de los otros actores, cuanto de objetos no sociales de su entomo (las modificaciones do la temperatura, por ejemplo). El aprendizaje es otra forma de proceso que combate el equilibrio. Lo que es aprendido ¢ interiorizado tiene generalmente por efecto modificar, aunque més no fuese ligeramente, al actor y, por consiguiente, las condiciones de su accién y su accién. misma. ‘Ahora bien, el actor humano asimila siempre nusvas observaciones, conosimientos, ideas que Jo modifican, incluso imperceptiblemente. 18 Lo que acabamos de decir de la actividad y del aprendizaje se aplica de una manera general a todo actor, es decir, no solamente al actor individual sino también a los grupos, a las colectividades, tomados como actores. Recortando estos dos primeros tipos de procesos, todavia se puede distinguir en ellos otzos cuatro, seain se considere 1a accidn del actor o ia accién del sistema. Si se toma on primer hugar af actor, los dos principales procesos segin los cuales organiza su accién son la comunicacién y la dedicacién. Casi toda la aceién del actor implica estos clos procesos. Por otra parte, desde que hay comunicacién, esto supone que se toma una decisién en cuanto a lo que debe ser comunicado y en cuanto a la oportunidad o la necosidad de comunicar. Uno y otto de estos dos provesos son evidentemente, por su naturaleza, perturbadores del equilibrio, pues introducen sin cesar elementos nuevos en una situacién, Si se refiere al sistema, Parsons ve también alli un doble proceso en accién, Hay, por ‘una parte, un proceso de diferenciacién, por el cual las partes de un sistema se distinguen, afirman su singularidad y su relativa autonomia, especialmente cumpliendo una funcién que les es propia. En la medida en que se produce una diferenciacién, todo sistema de accién debe recurtir al mismo tiempo a un proceso de integracién, destinado a volver a ligar unos con ‘ottos los elementos diferenciados, a establecer entre ellos relaciones de interdependencia y de intercambio, a atarlos en conjunto para formar un todo cuyos elementos estén suficientemente coordinados. Parsons ha utilizado mucho esta titima distincién. Tendremos la ocasién de recuperarla més adelante, 8. La jerarquia cibernética El anélisis parsoniano de los procesos requiere ser completado por los préstamos que Parsons ha hecho de la cibemética, especialmente su nocién de jerarquia cibemética (ver cuadro 4). Esta se vuelve, en efecto, en la teoria parsoniana, un importante principio de integracién, al mismo tiempo que de cambio," Parsons se inspira en la teorfa cibernética para decir que el sistema de accién, como todo otro sistema activo, sea viviente 0 no, es el Ingar de una incesante circulacién de energfa y de informacién. Son fos intercambios de energia y de informacién entre las partes los que provocan la accién del sistema. Las partes de un sistema no son todas igualmente ricas en informacién y en energia, algunas disponen de mas energia, otras de mAs informacién. Las que disponcn de menos energia se henefician de més informacién, ¢ inversamente. Ahora bion, un principio fundamental de cibernética pretende que sean las partes mis ricas en informacién las que impongan controles sobre las partes més ricas en energia. De ello se deduce que en todo sistema de accién se instauran una serie de controles sucesivos y acumulativos, que se armonizan entre ellos de una manera jerérquica, Las partes mas ricas en energia se sitian en ta base de ta jerarquia donde juegan el rol de factores de condisionamiento de la accién; las partes mAs ricas en informaci6n se ubican en Io alto de la jerarguia y cumplen un rol de factores de control de la accién, © Parsons ha explicitado el empleo que he hecho de la teoria cibemética especialmente en Societies: Evolutionary and Comparative Perspectives, cap. 19 Parsons otorga a este principio una validez universal en los sistemas de accién. Lo cita y lo recuerda frecuentemente y, en sus titimos escritos, lo convierte en una de ias grandes eyes de organizacién de todo sistema de accién. Cuadro 4 Jerarquic cibernética del sistema general de la accién Dimensiones functonales | Sub-sistemas del sistema de | Relaciones cibernéticas del sistema de cccién accién Latencia Sistema cultural Rico en informacién (controles) Integracié Sistema social Jerorquia—_Jerarquia bea i de los delos factores de —_factores de condiciona control rr : : Prosecucién de fines Sistema psiquico ee Adaptacién Sistema orginico Rico en energfa (condiciones) Asi, si se vuelve a fos cuatro sub-sistemas del sistema general de la accién, se puede establecer que el organismo es el sub-sistema més rico en energia y el més pobre en informacién. Le sigue la personalidad, seguido luego por el sisterna social, mientras que la cultura es evidentemente cl subsistema més rico en informacién y el més desprovisto de energia. Entre estos cuatro sub-sistemas se establece pues una jerarquia de controles, que corresponde al orden que se encuentra en el cuadro 4. De ello resulta que los elementos culturales disponen, en iiltima instancia, de controles que se ojerven sobre el sistema social, a personalidad y el organismo, mientras que la personalidad ejerce sus controles sobre el organismo, pero sufie controles ms poderosos por parte del sistema social y de Ja cultura. El mismo principio se aplica todavia a los cuatro pretrequisitos funcionales descriptos mds arriba, En el orden de la accién, la adaptacion esti mucho mas cerca del gasto de energia, mientras que fa Tatencia, por el hecho de que forma el lazo con la cultura, es mucho mas rica en informacién, Entre los dos, Ia proscoucién de fines esté més cerca de Ia energia que se desplicga en el sistema, mientras que la integracién se aproxima més a {a latencia. En todo sistema de accién, la jerarquia de los controles se establece pues a partir de la latencia para ir seguidamente ¢ la infegraci6n, la prosecucién de fines y, finalmente, ia adaptacién. 20 Es importante finalmente subrayar que la jerarquia cibernética es concebida por Parsons como un principio a la vez de orden y de cambio. Es un principio de orden en cuanto preside la integracién de los clementos det sistema. Es un principio de cambio en cuanto indica on qué direccién acttian los dos tipos de factores, factores de condicionamiento y factores de control,

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