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Propuestas PeEIeNCeMUE ERs) Para la organizacién de este material los contenidos precederén a la seleccién de los textos. AE ees * Aspectos de la vida cotidiana * Los que "mandan *, los que “obedecen * y los que "cuestionan y luchan" * Los miedos a pensar o ser diferente * Democracias-dictaduras * La Ultima dictadura militar Repensar estas problematicas desde el hoy ZORRO PRECAVIDO En aquel pals habla grupos de poderosos que decidian sobre cual era la verdad y cual la mentira de todas las cosas. Pero lo peor era el hormi- quero de charlatanes que vivian de esas palabras y las convertian en leyes ‘Se cuenta que un dla un zorro pasé corriendo como alma que lleva el diablo frente a un grupo de charlatanes - ¢Qué te pasa Zorro? ¢ A dénde vas ? - Quisieron saber. - Huyo porque se estén llevando a los camellos para hacer trabajos muy pe- #8 lignsos ~ Pero vos no sos un camello - le dijeron. - jJa! -dijo el zorro-, éy si a alguno de ustedes se le ocurre verme cara de ca ‘mello? - y siguié comiendo como alma que lleva al diablo. e ee . a partir del cuento... Extraldo del "El Hombre que softs", Laura Devetach Editorial Colihue + Relectura del cuento detenida intencional- mente en el final: la fuga del zorro, * Lectura por parte del docente (sin detenerse) + Construccién en pequenos grupos finales altemativos en el cual los animales -que hie + Para trabajar en pequefios grupos el docente les | yan ono nombrado- aparezcan para en con- reguntard a cerca de qué ots miedos tendria| junto encontrarle otra solucién al miedo. f! zoo, Sugiriéndolela posbilidad de pensar en otros animales que pudieran sentir miedos Tomar registro de los mismes. * Conversacién grupal * Lectura completa de la o las + En caso de haberse producido varios finales se seleccionaré uno argumentando las posibilida- des mas enriquecedoras para concluirlo, Reescr- tura grupal (En caso de planteario en ef pequefio grupo apa- recerdn [a diversidad de finales que luego de la feescritura podrén intercambiar fos boradores | « Realizacién de ilustraciones para el para las obsenaciones entre pares) armado de una compilacién, © Secmarantia ae DOH = STE, a 45a partir de un a texto argumentativo. a Conectar el cuento con la narrativa por parte del docente sobre los he- ‘chos ocurridos en la Ultima dictadu- ra militar y acompariarlos de la lec tura de algunos titulares y/o cope tes de los diarios, acercaré a la com- prensién sobre “un gran miedo co- lectivo” que atravess parte del pue- blo, Ast como otra parte hizo uso y ‘abuso del poder. Ademés de expli car las diferentes estrategias, elec ciones, luchas, ocultamientos, discri- minaciones entre otros sentimien- tosy acciones que en forma colectt va ylo individual se fueron constru- yendo, Otro texto que ya fue publicado en un cuademillo anterior, pero que ‘consideramos que repone Io histor- o en una transposicién que el do- cente deberd apoyar con menos es fuerzos es : "El golpe’, de Graciela Montes, Recomendable ademas pa- ra el segundo ciclo en donde ade- més pueden trabajarse desde otros portadores aspectos de la deuda ex tema, de las otras dictaduras a lo largo de la historia, de las Ideas de Patria Grande que sonaron Atahual pa, los aborigenes de América, los egros esclavos, San Martin, Bolivar, Artigas, Andresito, entre otros, con la posibilidad de traerlos a la histo- ria reciente de la década del 70 y a laactualidad EL GOLPE por Graciela Montes * Algunas personas piensan que de las cosas malas y trstes es ‘mejor olvidarse. Otras personas creemos que recordar es bueno; que hay cosas malas y tristes que no van a volver a suceder pre~ cisamente por es0, porque nos acordamos de ellas, porque no las echamos fuera de nuestra memoria Es el caso de la historia que vamos a contar aqui... El 24 de ‘marzo de 1976 hubo un golpe de Estado, Un golpe de Estado es eso: una trompada a la democracia, Un grupo de personas, que tienen el poder de las armas, ocupan or la fuerza el gobierno de un pals. Toman presos a todos: al Presidente, a los diputados, a los senadores, a os gobernadores, a los representantes que el pueblo habla elegido con su voto, y ocupan su lugar. Se convierten en dictadores. A los amigos los nombran intendentes, jueces, ministros, secretarios... asi todo queda en familia. Se sienten poderosos y gobiernan sin rendirle cuentas a nadie Aunque, por supuesto, como no les gusta que los vean como 2 ogros, siempre explican por qué dieron el golpe. Por lo gene- ral dicen que es para “poner orden” en un “pais desorlenado”. Dicen que hace falta “mano dura” para “poner las cosas en su lugar”. (..) Pero como en realidad no saben, y tampoco tienen costumbre de reflexionar ni pensar demasiado, terminan ha ciendo estropicios y siempre pero siempre dejan al pais mucho peor de como estaba En la Argentina hubo varios golpes de Estado antes del que vamos a contar aqui Cinco golpes en 36 anos! Pero ninguno de esos golpes puede compararse con el que recordamos hoy, aunque la “mala costumbre” de fos golpes ay d6 mucho a que los golpistas se instalasen con tanta facilidad en ef gobiemo. Lo de 1976 y lo que sucedié después fue lo peor que nos haya pasado jamés en toda nuestra historia. jo VERAYS - HO eaniiacas S Sammedhva de DOM - Sure, EI 24 de marzo los argentinos que encendimos la radio nos enteramos de que las emisoras habian sus- pendido su prgramacién habitual para “entrar en cadena” es0 queria decir que, en lugar de tangos, rock 0 boleros, fbamos a escuchar marchas militares, partes de guera y discursos. Pero no nos imaginamos que iba a ser tan diferen- te de otros golpes que ya habiamos vivido. Sin embargo, esta vez iba a ser diferente. Esta vez las Fuerzas Armadas en su conjunto se ha- blan puesto de acuerdo para cortar de un hachazo ef sistema constitucional (..) detrés de un unico objetivo -0.al menos era eso lo que decian en los discursos- de- rrotar a la subversién, aniquilar la guerrilla, Que Jos golpistas hablaran de “aniquilar” no sor- prendia mucho a nadie, porue era una época en la que la gente estaba acostumbrada ala intolerancia, En esos afios los jévenes se cuestionaban el modo en que estaba organizado el mundo y hacian grandes huelgas y manifestaciones gigantescas de protesta, que muchas veces teminaban en duros enfrenta- ientos con la policta. En nuestio pals se produjo uno muy famoso en 1969: “El Cordobazo". Los jévenes hablan tomado conciencia de vivir en un mundo injusto y fo cuestionaban todo: fa distribu- cién de la riqueza, el que hubiera ricos muy ricos y po- bres muy pobres, el hecho de que algunos paises do- :inaran a otros y los manejaran a su antojo y, en ge- neral, el autoritarismo de fos que manejaban el po- der, lo que se llamaba “el sistema”, el modo en que estaban ordenadas, por la fuerzas, todas las cosas. Ha- bia grupos, grandes grupos, que opinaban que habia Hegado el momento de cambiar (..) Los golpistas lamaron “guerillero” y “subversivo” a todo el que no les pareciese dispuesto a plegarse a ese plan oficial y terrible que se ilamé Proceso de Reorganizacién Nacional. Todos los que por alguna razén les parcian diferentes, parados en otra vereda, disidentes o crfticos sencillamente pasaban a ser “guemrlleros” y “subversivos", es decir enemigos que debian ser aniquilados. Para aniquilar a los enemigos y “poner en caja” a toda la sociedad fos golpistas tenian un estilo, el del cuartel, y un método, el del teror. EI maldito plan consistié en secuestrar, torturar y asesinar en foma clandestina a més de 30.000 argen- tinos y extranjeros entre los que habia médicos, estu- diantes, gremialistas, monjas, sacerdotes, obispos, es- critores, politicos, jueces, agricultores, obreros, maes- tros, conscriptos, cientificos, atstas, periodistas, be- és, nifios y guerrillers. Todo se hacia en forma secreta, por fo general du- rante la noche y de manera muy violenta. Los secuestrado seran tasladados kyego.a centros de tortura, que también eran secretos; Funcionaban en ef sectorrmasapartado de un cuartel, en una fabrica aban- donada, en el sstano de una comiart, en bs fondosde un hospital, en un viejo casco de estancia, en un chalet apartado... Hasta allflos levaban y ahi quedaban hun- didos. A partir de ese momento eso ssecuestrados pasa- ban a ser “desaparecidos”. Nadie daba aenta de elbs, nadie sab dénde estaban. La familia 0 fos amigos co- ‘menzaban a buscarb sdesesperadamente Hoy todos sabemos lo que sucedia en esos lugares y hasta se ha logrado identificar muy bien dénde es- taban ubicados y cémo estaban organizados. La CO- NADER, una comisién de notables que se reunié en cuanto el pals regres6 a la democracia, se ocups de recoger los testimonios en tomo a los desaparecidos y de reunirlos en un libro que todos tendriamos que leer alguna vez, el Nunca més Los propios secuestradores hablaban en clave de es0s lugares de horror y les ponian terribles nombres de fantasia: El Vesubio, El Olimpo, La Cacha, La Perla, El Atlético, La Escuelita, el Sheraton, ‘Muchos secuestrados luego liberados 0 que logra- ron escapar pudieron contar los homrores que alll se vivian, La mayor parte de los que soportaron esos torment tos murieron 0 fueron asesinados. Pero no “aparecie ron” jamés. (..) Algunas mujeres que hablan sido se- cuestradas cuando estaban embarazadas tenian sus hijos en esos centros de detencién. A veces parian en un pasillo, o en la mesa de torturas, entre las risas y bburlas de sus secuestradores, y luego se las obligaba a limpiar el lugar de rodilla. Por lo general no volvian a ver a sus hijos: los tor- turadores se los robaban, se quedaban con ellos. Esas cosas sucedian todos los das mentras la po bla- cién seguia adelante con su vida. iba a trabajar, a fa cancha, almercado, b chicos iban alco gio, se haclan peltulas cémias y mucha gente baa vers se habl- ba de los ovnis, se segulan dla ada fos teleteatros Muchos argentinos preferfan mirar para otro lado: “jfor algo seré!", sentenciaban cuando se enteraban del cam de algun desaparecito 0 velen cémo alguien era introducilo con violencia en un auto. Se decian que “eran cosas de subversivos”, es decir, repetian /a Teccién que ks hablan ensenado los gop stasasesnos estaban convencidos de que debfan desentenderse, de que todo es0 no tenfa nada que ver con els Pero el terorismo de Estado no fue la Unica “mé- guina del tenor” que aplicaron los golpistas. La otra fue la demolicién de fa economia. De eso se ocupé el ministro de Videla, José Alfredo Martinez de Hoz. Cuando un pais tiene sus fébricas abjertas, cuando produce yests activo, es natural que haya conflictos Los empresarios y lbs obreros discuten por fos sueltos hay huelgas, quejas, intereses contrepuestos. Pero ef gobe del 24 de marzo estaba decilido a paralizarlo to- do, a dejara todo el mundo ben quetito yen postién defies. Pretendla decretarel fin de bs conflictos con fo que decretaba, ademas el fin de laeconomia, AI prindpb a algunos ks parecié una especie de fiesta porque Martinez de Ho zse las ingenis para que emp eza- ‘aa fluir el dinero. Para eso “interna- cionalizs": pidié dinero prestado al ex terior levants las bareras de la Adua- nna. De golpe y porrazo el pa se len de productos importados: desde un re- Ioja.una ficuadora, dese un paraguasa tun auto, todo venfa de affiera, y mu- cho argentinos se entusiasmaban con Janovedad, que kes parecis divertida, En ess primeros afios de fa dictadu- rano s poda decirque no hubiew dt lan nero, El dinero ciculaba copiosamente ya gran veloci- dad, pero terminé acumulado en unos pocos bo killos Y nunaa sivié para poner en marcha b economia, para crear riqueza, sno, justamente, para aniquilafa, Poco después se vio que toda esa aparente abun- dancia no era sino cartén pintado. La plata dulce se esfuumé. Vinieron los tiempos duros. Muchos empresa- rios cerraron sus fabricas porque no podian competir| con [os articulos importados. Y los argentinos toma- mos conciencia, de pronto, de que deblamos tanto pero tanto dinero a los bancos extranjeros que casi ni odlamos decirnos duefios de lo que era nuestro. Fueron épocas muy tristes. La mayor parte de la gente se encerraba en su casa y trataba de desenten- E

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