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COSMOVISION MAYA

Guatemala, en su herencia indígena goza de cosas maravillosas. La más excelsa


es la Cosmovisión Maya, de la cual soy estudioso. La misma, no fue destruida en
la Conquista sino que se escondió tras el catolicismo en hechos tales como la
erección de iglesias sobre los templos prehispánicos, el convertir las fraternidades
iniciáticas en cofradías, el disfrazar dioses sagrados de santos, etc.

Muchos hablan de sincretismo, lo cual es una realidad en unos casos. Pero no en


la sabiduría de las castas sacerdotales, de la cual la Itzá, ubicada en el Lago de
Petén, al norte del país, es la que se conserva casi íntegra. Sabiduría que se
escondió tras el disfraz y el prejuicio al ser tachados durante siglos a sus iniciados
de brujos y vulgares hechiceros.

La cosmovisión maya -su concepción del mundo- fue cambiando paulatinamente


conforme su religión se volvió más compleja. No obstante, en términos generales,
cuenta la antigua tradición maya que el mundo fue creado, destruido y recreado al
menos tres veces antes de que se moldeara éste, nuestro mundo, el mismo en
que vivieron los mayas antiguos y en que habitamos nosotros.

Cuenta también que, al final de la tercera creación, al Primer Padre, a quien


llamaban Nun-Yal-He o 1 Maíz Revelado, lo capturaron y asesinaron los señores
del Reino de Xibalbá, el hogar de los muertos, y lo enterraron en un juego de
pelota. Hasta allá fueron a rescatarlo sus hijos gemelos, dos semidioses llamados
Hunahpú e Ixbalanqué. Gracias a ellos, el Primer Padre resucitó de la hendidura
de un caparazón de tortuga, y se preparó para crear nuestro mundo.

La creación como tal, según textos hallados en la ciudad de Cobá, tuvo lugar el
día 4 ahau 8 kumk'ú, que en nuestro calendario equivale al día 13 de agosto de
3114 a.C.

Lo primero que hizo 1 Maíz Revelado fue alzar el Árbol del Mundo, llamado
Wakah-Chan o Cielo Elevado. Así separó al cielo de la tierra y estableció el centro
de todo lo creado, el eje del cosmos. A veces, los mayas representaban a este
árbol como una exuberante caña de maíz cargada de mazorcas maduras.

Esto se debía a que el Primer Padre era dios del maíz y alimento de la humanidad;
pero también lo representaban como una gigantesca ceiba, a la cual llamaban
Cielo Elevado, Primer Árbol Precioso, Árbol del Cielo, Bosque Elevado o
Plataforma del Cielo, entre otros nombres.

Se dice, asimismo, que en los primeros momentos de la creación el cielo estaba


acostado sobre la tierra, de tal manera que la luz no
existía. En este lugar, conocido precisamente como
Cielo Acostado, los dioses auxiliares, bajo la supervisión del Primer Padre,
colocaron tres piedras, las tres piedras fundamentales de la creación que fueron el
símbolo del sacrificio, la muerte y la resurreción del Primer Padre.

Después, el Primer Padre entró en el cielo y lo convirtió en el Cielo Elevado,


opuesto recíproco del Cielo Acostado. Aquí construyó una casa de ocho pisos, con
la cual ordenó todo el universo superior: el mundo en que vivimos y los astros
celestes. El techo de esta casa era conocido como Domo del Cielo o Casa del
Norte y hasta ahí llegaban las ramas del Árbol de la Creación, la Ceiba Madre.

Posteriormente, el Primer Padre impuso al cielo el movimiento circular, y echó a


andar en él las constelaciones. Todo lo que él hacía estaba escrito en las estrellas
para que los hombres pudieran leerlo. En total, creían los antiguos mayas, el cielo
tenía trece pisos y daba hospedaje a los astros y a algunos animales solares,
como los venados y las aves de colorido plumaje.

Los mayas imaginaron la tierra como un enorme cocodrilo sobre el que los
hombres de la cuarta creación nos desplazamos sin saberlo y en cuyo dorso nace
la vegetación que hoy conocemos: los bosques, las selvas, los desiertos y las
tundras. Encima de este cocodrilo habitaron los antiguos mayas y construyeron los
hermosos palacios y edificios para sus dioses de acuerdo con los movimientos
celestes que el Primer Padre imprimió al cielo el día de la creación.

Bajo este cocodrilo se hallaba el inframundo, dividido, como el infierno de Dante,


en nueve pisos, en cuya parte inferior se encontraba el Reino de Xibalbá. En el
inframundo vivían los muertos en compañía de los animales nocturnos o
peligrosos, como los murciélagos, los búhos y los jaguares, y ciertas deidades
conocidas como Bolontikú.

El mismo día que el Primer Padre alzó el Árbol del Mundo, estableció también las
ocho direcciones del cosmos, que se desplegaron sobre la tierra como kan tzuk,
kan xuk: cuatro divisiones, cuatro esquinas. Al hablar de estas direcciones, los
mayas se referían a los puntos cardinales y las cuatro esquinas del universo. A
pesar de ello, los mayas reconocían cinco direcciones básicas: el centro y los
puntos cardinales, a cada uno de los cuales le correspondía un color: al norte, el
blanco; al sur, el amarillo; al oeste, el negro; y al este, el rojo.

En cada uno de ellos había un Bacab -uno de tantos seres celestes que
imaginaron los mayas- que cargaba sobre sus espaldas una porción de cielo para
sostenerlo durante toda la eternidad. Y el centro, donde estaban ubicados el Árbol
del Mundo y las tres piedras de la creación, se consideraba el ombligo del mundo,
el cordón umbilical -representado como una cuerda con cabeza de serpiente que
emergía del vientre de Nun-Yal-He, el Primer Padre- con que la humanidad se
conectaba con los dioses y la fuente de la vida.
ARQUITECTURA MAYA

La planificación de los centros ceremoniales mayas estuvo marcada por la


topografía y las condiciones del terreno, lo cual determinó las diferentes formas y
estructuras de las edificaciones.
La arquitectura maya participó de las características generales de las culturas
americanas, pero tuvo modalidades especiales, incluso de su propio estilo (el
“arco falso”, bóveda maya, cresterías, estelas y altares).
Se registraron varios estilos arquitectónicos como el “estilo Petén” en Uxmal, el
“estilo Usumacinta” en Palenque, el estilo Puuc de Uxmal, entre otros. Y hubo
además otro detalle muy valioso, el de la pintura mural integrada a la arquitectura.
Entonces, la cultura maya produjo una arquitectura monumental, de la que se
conservan grandes ruinas en Palenque, Uxmal, Tikal, Quiriguá, Tajín, Copán,
entre otros.
Elementos arquitectónicos mayas
Plataformas ceremoniales: De poca altura (máximo cuatro metros), en los lados
tenían figuras labradas. Escenarios de ceremonias públicas, en la parte superior
había altares, banderas, incensarios y, a veces, un tzompantli: hilera de varas
con cráneos ensartados.
Pirámide: Superposición de varias plataformas, sin nunca culminar en un volumen
geométrico realmente piramidal. Sirve de basamento al templo, acercándolo lo
más posible al cielo, pero tuvo también una función funeraria secundaria en
importancia.
Templo: El templo es de planta cuadrangular, muros verticales con una, tres o
cinco entradas que conducen a varias piezas, sea directamente, o sea pasando
por un pórtico, cuando hay varias puertas. Las entradas se cerraban mediante
cortinales o esteras amarradas en el interior a unas argollas empotradas, tres en
cada lado de la entrada.
Los templos carecen de ventanas, pero en algunos casos pueden tener aperturas
en forma rectangular o imitando el signo IK, que significa aire. El espacio interior
del templo varía mucho, desde los minúsculos santuarios del Petén hasta los de
mayor amplitud de Palenque.
Crestería: Elemento propio de la arquitectura maya, que consiste en una alta
construcción situada sobre el techo del templo, la cual hace resaltar la verticalidad
del conjunto pirámide-templo y la idea de acercamiento al cielo. La crestería se
aplicaba la mayor parte de los elementos decorativos simbólicos.
Orientación: La orientación de las construcciones en el área de los mayas
durante la época clásica, tiende a coincidir con los puntos cardinales.
Bóveda maya: Se le ha denominado como falsa, salediza o simplemente maya,
esta se fabrica acercando los muros a partir de cierta altura (inmediatamente
encima del dintel de las puertas), superponiendo las hiladas de piedras de manera
que cada hilada sobresalga de la inmediata inferior, hasta dejar en la parte
superior un corto espacio que se cerraba con una pequeña losa.

El factor que permitió el funcionamiento de este tipo de bóveda fue el


conocimiento del mortero de cal ya usado en los muros, el cual daba cohesión al
núcleo y permitía la adherencia de las piedras del parámetro.
El techo así obtenido era semejante en el interior al de la choza y determinaba un
corte transversal en forma de triángulo o trapecio. Su inconveniente era que sólo
permitía techar espacios angostos, ya que para piezas de mayor anchura, la altura
necesaria para garantizar estabilidad de la bóveda hubiera sido excesiva. Sin
embargo se hizo en algunos casos excepcionales, como en la cripta funeraria del
Templo de las Inscripciones.
Estela: La estela es un monolito que, empieza por ser una referencia calendárica
y acaba por ser una obra de arte. En sus inicios la estela no pasaría de ser un
"marcador".
Su función es fungir como un libro de registro siendo su principal objetivo anotar
una fecha. El numeral, poco a poco, se transformó en glifo poético.

A partir del siglo III d. C., aparecen las estelas coincidiendo con hechos religiosos
realizados en cada "período" calendárico de los que hoy se pueden rehacer
cronologías y niveles históricos de la cultura maya.
Glifo: Ornamento que enmarca un ideograma desarrollado con la mayor pulcritud.
Se dio nombre de glifo emblema a los signos que se incluían en las inscripciones,
en la imposibilidad de definir más exactamente su real significación.
Se interpretaron como glifos nominales los que se encuentran registrados en los
costados del sarcófago de Palenque, junto con representaciones humanas que
suponen a los familiares del personaje enterrado.
Los glifos servían para designar el nombre, deidad tutelas del sitio, dinastía
reinante o algún elemento que la caracterizara. También había ciertos glifos
relacionados con la vida de varios gobernantes, de las ciudades: nacimiento,
captura y sacrificios y nombres de personajes, así como también ascenso al
poder, posibles alianzas de linaje, matrimonios, mención de antepasados y
descendientes.

LA ASTRONOMÍA MAYA

La Astronomía Maya compone el conjunto de estudios sobre los astros que


realizaron los mayas y que hoy siguen sorprendiendo a los científicos. Su
obsesión por el movimiento de los cuerpos celestes se basaba en la concepción
cíclica de la historia, y la astronomía fue la herramienta que utilizaron para
conocer la influencia de los astros sobre el mundo.
Los mayas eran un grupo de pueblos indígenas mesoamericanos
perteneciente a la familia lingüística maya o mayense, que tradicionalmente han
habitado en los estados mexicanos de Yucatán, Campeche, Tabasco y Chiapas,
en la mayor parte de Guatemala y en regiones de Belice y Honduras.

LOS DIOSES MAYAS


Los dioses mayas se distinguen por su naturaleza antropomorfa, fitomorfa,
zoomorfa y astral. La figura más importante del panteón maya es Itzamná, dios
creador, señor del fuego y del corazón. Representa la muerte y el renacimiento
de la vida en la naturaleza. Itzamná se vincula con el dios Sol, Kinich Ahau, y
con la diosa Luna, Ixchel, representada como una vieja mujer endemoniada.
Algunos investigadores opinan que su nombre deriva de las palabras con que
supuestamente se definió ante los hombres: "Itz en Caan, itz en muyal" ("Soy el
rocío del cielo, soy el rocío de las nubes"). Pero también parece que significa
"casa de la Iguana" y, conforme a esta idea, habría cuatro Itzamnás,
correspondientes a las cuatro direcciones del universo. Itzamná, en la mitología
maya, es la divinidad más importante, el señor de los cielos, del día y de la
noche. Suele aparecer como un dios cuádruple, característica mágica que
también se ve en la cábala judía y el tetragrámaton, las cuatro letras de dios y el
valor mágico del número cuatro. Los itzamnás abarcan el Universo y, como en
otras culturas mesoamericanas, están relacionados con los cuatro puntos
cardinales y sus colores: Este, rojo; Norte, blanco; Oeste, negro; Sur, amarillo.
Se le identifica unas veces con el dios creador Hunab Ku y otras con el dios Sol,
Kinich Ahau. Se manifestaba como mujer bajo el nombre de Ixchel, diosa de la
Luna y de las artes femeninas. Su imagen es la de una vieja desdentada, con los
pómulos hundidos y la nariz grande. A su carácter divino, debe agregarse su
condición de héroe cultural, inventor de la escritura y de los libros y protector de
la medicina. Cuatro genios o divinidades, los Bacabs, por otra parte, aparecen
como sostenedores del cielo, los identificados con los cuatro puntos cardinales,
un árbol (la ceiba sagrada) y un ave. Según la versión de ciertos pueblos mayas,
sería hijo de Hunab Ku, ser supremo y todopoderoso.
Chac, que se destacaba por su larga nariz, es el dios de la lluvia y suele
aparecer multiplicado en chacs, divinidades que producen la lluvia vaciando sus
calabazas y arrojando hachas de piedra. Las uo (ranas) son sus acompañantes
y actúan como anunciadoras de la lluvia. Ligado con la vegetación y con un
alimento primordial entre los mayas y otras culturas precolombinas es el joven
dios del maíz, Ah Mun, en frecuente lidia con el dios de la muerte, Ah Puch,
señor del noveno infierno. Otras divinidades asociadas con las tinieblas y la
muerte son Ek Chuah, dios negro de la guerra, de los mercaderes y de las
plantaciones de cacao. Sobresale también Ixtab, diosa de los suicidios.
La similitud y los contactos entre la cultura maya y la azteca explican la
aparición entre los mayas de la Serpiente Emplumada (Quetzalcóatl), que recibe
el nombre de Kukulcán en Yucatán y de Gucumatz en las tierras altas de
Guatemala.
El dios Jaguar se considera señor de la noche estrellada, aunque en realidad
reina al mismo tiempo en el cielo, en la tierra y en el mundo subterráneo de las
sombras. Bajo distintos nombres (onza, ocelote, yaguareté) aparece en distintas
mitologías de África y América, como en la tupí-guaraní, en una de cuyas
leyendas se cuenta que "Jaguar reventó el vientre de Sol, lo comió, le royó los
huesos" o, según otra versión, que tiene una piel de color azul celeste y está
esperando la orden divina para devorar a la humanidad.

COSMOLOGÍA Y PALINGENESIA

Los mayas creían que había trece cielos dispuestos en capas sobre la tierra y
que eran regidos por sendos dioses llamados Oxlahuntiku. La tierra se apoyaba
en la cola de un enorme cocodrilo o de un reptil monstruoso que flotaba en el
océano. Existían nueve mundos subterráneos, también dispuestos en capas, y
regidos por sendos dioses, los Bolontiku, que gobernaban en interminable
sucesión sobre un "ciclo" o "semana" de nueve noches. El tiempo era
considerado una serie de ciclos sin principio ni fin, interrumpidos por cataclismos
o catástrofes que significaban el retorno al caos primordial. Pero nunca se
acabaría el mundo porque creían en la palingenesia, la regeneración cíclica del
universo. Los libros del Chilam Balam exponen predicciones acerca de esos
ciclos de destrucción y renacimiento, como la que relata la sublevación de los
nueve dioses contra los trece dioses celestiales, el robo de la gran Serpiente, el
derrumbe del firmamento y el hundimiento de la tierra. También en el Chilam
Balam se dice que en 1541 llegaron los dzules, los extranjeros. Hasta ese
momento estaba medido "el tiempo de la bondad del sol, de la celosía que
forman las estrellas, desde donde los dioses nos contemplan", pero llegaron los
dzules y lo deshicieron todo. "Enseñaron el temor, marchitaron las flores,
chuparon hasta matar la flor de los otros porque viviese la suya": habían venido
"a castrar al Sol". Según los mayas lacandones, cuando se acabe el mundo los
dioses decapitarán a todos los solteros, los colgarán por los talones y juntarán su
sangre en vasijas para pintar su casa. Después reconstruirán la ciudad de
Yaxchilán, donde se habrán refugiado los lacandones. Según otra versión, los
jaguares de Cizín, dios del inframundo, se comerán al Sol y la Luna.

Congreso de astrónomos

Copán fue uno de los centros mayas que más contribuyó al desarrollo de la
astronomía; allí se celebraron varios congresos de astrónomos. El altar Q (en
la fotografía), en el que aparecen 16 astrónomos —cuatro en cada cara lateral
—, fue erigido en conmemoración de uno de estos congresos.

CALENDARIO MAYA
El calendario solar maya era más preciso que el que hoy utilizamos. Todas
las ciudades del periodo clásico están orientadas respecto al movimiento de la
bóveda celeste. Muchos edificios fueron construidos con el propósito de
escenificar fenómenos celestes en la Tierra, como El Castillo de Chichén Itzá,
donde se observa el descenso de Kukulkán, serpiente formada por las sombras
que se crean en los vértices del edificio durante los solsticios. Las cuatro
escaleras del edificio suman 365 peldaños, los días del año. En el Códice
Dresde y en numerosas estelas se encuentran los cálculos de los ciclos lunar,
solar, venusiano y las tablas de periodicidad de los eclipses.
Entre los mayas, la cronología se determinaba mediante un complejo sistema
calendárico. El año comenzaba cuando el Sol cruzaba el cenit el 16 de julio y
tenía 365 días; 364 de ellos estaban agrupados en 28 semanas de 13 días cada
una, y el año nuevo comenzaba el día 365. Además, 360 días del año se
repartían en 18 meses de 20 días cada uno. Las semanas y los meses
transcurrían de forma secuencial e independiente entre sí. Sin embargo,
comenzaban siempre el mismo día, esto es, una vez cada 260 días, cifra
múltiplo tanto de 13 (para la semana) como de 20 (para el mes). El calendario
maya, aunque muy complejo, era el más exacto de los conocidos hasta la
aparición del calendario gregoriano en el siglo XVI.

Los mayas eran astrónomos absolutamente realizados. Su principal interés, en


contraste con los astrónomos "occidentales", era estudiar los movimientos del Sol
sobre sus latitudes. Todos los años, el sol viaja a su punto del solsticio del verano,
o a la latitud de 23-1/3 grados del norte.
La mayoría de las ciudades mayas estaban localizadas al sur de esta latitud, lo
que significa que podrían observar el sol directamente por encima durante el
tiempo que pasaba sobre su latitud. Esto sucedía dos veces al año, en tiempos
iguales alrededor del día del solsticio.

Los mayas podían determinar fácilmente estas fechas, porque en el mediodía


local, no había sombra. Las observaciones del paso por el cenit son posibles
solamente en las zonas tropicales y eran absolutamente desconocidas por los
conquistadores españoles que descendieron sobre la península de Yucatán en el
decimosexto siglo. Los mayas tenían un dios que representaba dicha posición del
sol, llamado el dios del salto.

Venus era el objeto astronómico de mayor interés. Quizá lo conocían mejor


que cualquier otra civilización que no perteneciera a Mesoamérica. Pensaron que
era más importante que el sol. Lo miraron cuidadosamente mientras se movía a
través de sus estaciones y se dieron cuenta que tardaba 584 días en coincidir la
Tierra y Venus en la misma posición con respecto al Sol. Además, se fijaron que
transcurría cerca de 2922 días para que la Tierra, Venus, el Sol y las estrellas
coincidieran.

El patrón de Venus se cuenta generalmente en la conjunción inferior, esa vez


en que Venus pasa entre el Sol y la Tierra. Un diagrama de esta situación se
puede considerar a la izquierda.

Según sus observaciones, durante este período, Venus no se podía ver desde
la Tierra, ya que desaparece por un período de 8 días aproximadamente. Cuando
se sale justo después de la conjunción inferior, es decir, cuando aparece después
en el cielo de la mañana, el llamado orto heliaco (porque sale con el Sol), era la
posición más importante de Venus.

Después salir, Venus alcanza su mayor brillo. Entonces se irá hacia el oeste,
moviéndose rápidamente (en el movimiento retrógrado) lejos del Sol. Luego
seguirá siendo visible cerca de 260 días en el cielo de la mañana hasta que
alcanza la conjunción superior. En este punto, Venus está en el lado opuesto del
Sol respecto de la Tierra. Llega a ser débil, hasta que se sumerge bajo el
horizonte, para volver a aparecer en el lado opuesto del Sol al cabo de 50 días.
Después sale como estrella de la tarde y sigue en el cielo nocturno alrededor de
260 días hasta que pasa por el este y brilla más intensamente antes de llegar la
conjunción inferior otra vez.

Los Mayas hicieron observaciones diarias en Venus, el cual tenía un efecto


psicológico sobre los Mayas y otras culturas de Mesoamérica. Se ha demostrado
que medían el tiempo de algunas de sus guerras basándose en los puntos
inmóviles de Venus y de Júpiter. Hacían sacrificios humanos después de la
conjunción superior, cuando Venus estaba en su magnitud más débil porque
temían más el primer orto heliaco después de la conjunción inferior.
En el códice de Dresde, los Mayas tenían un calendario que exhibía el ciclo
completo de Venus. Contaron cinco sistemas de 584 días, 2.920 días en total u 8
años aproximadamente, y cada 5 repeticiones de Venus completaban un ciclo.

Los Mayas pensaban que evidentemente no era más que un trozo sobre el Sol
y lo observaron hasta alcanzar una trayectoria fuera de la eclíptica. Observaron la
variación de su trayectoria a lo largo del año por el horizonte. En Chichen Itzá,
durante la puesta del Sol, la serpiente de la estrella se levanta encima del lado de
la escalera de la pirámide llamada El Castillo en el día del equinoccio de primavera
y de otoño. Los Mayas no solo conocían los extremos del Sol en los solsticios,
sino también los equinoccios en que el sol parecía salir justo al este o justo en el
oeste. Las observaciones de la eclíptica deben haber sido una porción importante
de la observación solar maya.

Los Mayas tenían un componente lunar en sus inscripciones del calendario.


Después de obtener la información sobre las fechas de los calendarios mayas, las
inscripciones típicas mayas contienen un cómputo lunar. La cuenta lunar se
basaba en 29 o 30 días. El período sinódico lunar consta de aproximadamente
29,5 días, así que alternando su cuenta entre estos dos números la luna también
fue introducida cuidadosamente en la secuencia del calendario. El conocimiento
lunar también era importante para ellos porque permitía hacer predicciones de
eclipses: un almanaque para predecirlos está contenido en el Códice de Dresde.

Los Mayas retrataron la eclíptica en sus ilustraciones como una serpiente de


dos direcciones. La eclíptica es la trayectoria del Sol en el cielo marcada por un
grupo de constelaciones fijas de estrellas. Aquí la Luna y los planetas pueden
verse porque están limitados, como la Tierra, por el Sol. Las constelaciones en la
eclíptica también se llaman constelaciones del zodiaco. No se sabe exactamente
cuáles fueron las constelaciones fijas en la eclíptica vista por los mayas, pero hay
una cierta idea del orden en algunas partes del cielo. Se sabe que había un
escorpión, que comparamos con nuestra propia constelación de Escorpio, pero
con la diferencia de que sus pinzas coincidían con la actual constelación de Libra.
También se ha encontrado que Géminis aparecía en la cultura maya como un
cerdo o un pecarí, (un animal de la familia del cerdo). Otras constelaciones en la
eclíptica eran identificadas como un jaguar, una serpiente, un palo, una tortuga o
un monstruo del xoc, es decir, un tiburón o monstruo del mar. Las Pléyades eran
vistas como la cola de una serpiente de cascabel que se llamaba "Tz'ab."

La Vía Láctea (nuestra galaxia) era venerada por los mayas. La llamaron el
Árbol del Mundo y era representada mediante un árbol en flor alto y majestuoso, el
Ceiba. La figura blanquecina también fue llamada el Wakah Chan. Wak significa
"erguido". Chan o K'an significa "cuatro", "serpiente" o "cielo". El Árbol del Mundo
se encuentra en el cenit cuando Sagitario está por encima del horizonte. En este
tiempo la Vía Láctea sale por encima del horizonte y cruza el meridiano. Las
nubes de estrellas que forman el llamado actualmente “Camino de Santiago”
fueron vistas como el árbol de la vida de donde proviene toda la vida. Cerca de
Sagitario, el centro de nuestra galaxia, donde el árbol del mundo cruza la eclíptica,
era de especial atención para los Mayas. Un elemento importante del árbol del
mundo es el monstruo Kawak, de cabeza gigante. Este monstruo era también una
montaña o un monstruo del witz. Un tazón de la fuente del sacrificio en su cabeza
contiene una lámina del pedernal y el jeroglífico de Kimi que representa la muerte.
La eclíptica se representa a veces como una barra que cruza el eje principal del
árbol del mundo, representado una forma muy similar a la cruz cristiana. Encima
del árbol del mundo encontramos un pájaro llamado Itzam Ye, el pájaro más
importante. Hay evidencias que demuestran que el Sol se aparecía en el árbol del
mundo en el solsticio de invierno.

Cuando en los meses de invierno la Vía Láctea dominaba el cielo, fue llamada
"serpiente blanca deshuesada". Esta parte de la Vía Láctea había pasado por
encima en el cielo nocturno durante la estación seca. No es brillante como las
nubes de estrellas que dominan el norte del cielo del ecuador durante los meses
de verano, pero los observadores en zonas oscuras podrán ver el resplandor
fácilmente. Aquí la eclíptica cruza dicha Vía Láctea otra vez, cerca de la
constelación de Géminis que era la localización aproximada del Sol durante
solsticio del verano. Es posible que las quijadas de la serpiente Blanco-
Deshuesada fueran representadas por la cabeza del monstruo de Kawak.

Los reyes Mayas midieron el tiempo de sus rituales de accesión en


consonancia con las estrellas y la Vía Láctea. Celebraron reuniones del k'atun
aproximadamente cada veinte años. Al final del período del k'atun, una de las
reglas de los mayas era levantar una figura, llamado árbol de piedra, para
conmemorar el acontecimiento. En la figura de piedra se representaban la hora de
estas ceremonias e iban vestidas con los trajes que contenían los símbolos
asociados al árbol del mundo. En sus sombreros llevaban el pájaro principal, Itzam
Ye, y en sus brazos sostenían una barra ceremonial que representaba a la
serpiente de dos direcciones de la eclíptica. Usando los elementos del traje del
árbol del mundo la regla de los mayas estaba ligada al cielo, a los dioses y a ese
ingrediente esencial, la vida. Además, se ha encontrado que cuando la reunión del
k'atun coincidía con ciertas posiciones planetarias, los mayas iban a la guerra para
obtener prisioneros. La cosmología maya era una filosofía viva y religiosa que
impregnó sus vidas a un modo que puede parecer excesivo para la gente
moderna. Ellos eran observadores astutos, sensibles a la naturaleza cíclica del
sol, de la luna y de los planetas.

La matemática Maya

Los Mayas usaban una cuenta basada en 20. La matemática de la totalidad o la


matemática holonómica está basada en 20 y no en 10. La cuenta de 20
corresponde a los 20 dedos de las manos y los pies, por lo tanto es un sistema
entero, matemática humana entera. La matemática decimal es solo la mitad de la
cuenta.
La matemática Maya es holística y visual. Se le llama sistema de notación punto-
barra ya que los números se escriben con puntos y barras. El punto tiene el valor
de 1 y la raya de 5:

1 = un punto,

2 = dos puntos,

3 = tres puntos,

4 = cuatro puntos,

5 = una barra.

10= dos barras, etc.

Si queremos escribir 6, es un punto encima de una barra. 7 es una barra con dos
puntos. 10 es dos barras, 15 son tres barras, 20 es equivalente al 0. Los Mayas
tenían el concepto del 0 antes de que ese concepto fuera desarrollado en el Viejo
Mundo.

Orden de posición de valor, notación vigesimal

Los Mayas escriben los números en niveles, de abajo hacia arriba y se basan en
el 20.

En el primer nivel, un punto equivale a 1; en el segundo nivel, un punto equivale


a 20. En el tercer nivel, un punto equivale a 400; en el cuarto nivel un punto
equivale a 8.000; y en el quinto nivel un punto equivale a 160.000: esta es una
demostración de un tipo muy diferente de matemáticas. Esta es la matemática del
tiempo.

Al ciclo de un día le llaman kin, 20 días se denomina un vinal, 20 años solares es


un katun y 400 años solares es un baktun.

Los orígenes del sistema de numeración maya están en el interior de una zona
comprendida entre Tres Zapotes, Monte Albán, y Chalchuapa (El Salvador). En
algunos monumentos olmecas aparecen cifras y esbozos de glifos, pero entre 300
a. C. y 150 d. C. se inscriben ya fechas con el sistema de cuenta larga.
Los mayas utilizaban un sistema de numeración de puntos y rayas, el
punto equivalía al 1 y la raya al cinco. Se escribían hasta 4 rayas lo que nos da un
máximo de 20, después de esa cantidad, se utilizaba un sistema bastante

complejo de multiplicación.

Para los números mayores hay que multiplicar el valor de cada cifra por 1, 20,
20x20, 20x20x20… según el lugar que ocupe, y sumar el resultado. Es por tanto
un sistema posicional que se escribe de arriba abajo, empezando por el orden de
mayor magnitud.

GEOMETRÍA

La geometría se encuentra presente en las distintas facetas de la actividad


diaria de los mayas, tal como: diseño de sus ciudades, las formas de sus edificios,
cerámica y tejidos. Todas las ciudades se encuentran distribuidas de forma
geometría, basándose en la posición de las estrellas y el sol. Las plazas se
encontraban en el centro y alrededor las casas, las primeras filas las ocupaban los
jefes o altos cargos y las siguientes los campesinos. Poco más se sabe de la
geometría maya.

CALENDARIO MAYA

En este Derecho Consuetudinario Maya se respetan dos leyes : la Ley Divina del
Creador y la Ley Natural sobre la Tierra. Aquí se encuentra la sabiduria de
nuestros abuelos, aquellos profetas Mayas qui vinieron de la constelación de
estrellas, Las Pleyades ; aquellos que nos dejaron estos grandes conocimientos y
a su debido tiempo, después de terminar su trabajo aquí en la tierra Maya, se
regresaron hacia aquel lugar de donde habian venido. Estos cuatro profetas
Mayas son : Balam Quiche, Balam Aqab, Balam Majaqutaj e Ikg Balam.

SIGA PARA CONOCER LOS SIGNIFICADOS ————————–>>>

Mientras estuvieron en tierra Maya, estos profetas tuvieron sus compañeras de


vida, y ellas fueron : Kaja Paluma, Tzununha, Chomiha y Kakixaha ; tambien
tuvieron hijos a excepción de Ikg Balam. Estos profetas aquí vivieron y nos dejaron
grandes conocimientos. Por ejemplo, nos enseñaron cuales son los materiales a
usar cuando se hace ceremonia, eso fue desde aquella primera ceremonia
celebrada sobre el Cerro Chui’ Saqarib’al (Lugar de Amanecer) en aquella
madrugada cuando por vez primera se esperaba la salida del sol sobre la faz de la
tierra. Cada uno de estos profetas traía su ofrenda para dar gracias : Balam Kiche
traía el Kaxlam Pom, Balam Aqab ofrecio el Mexcam Pom ; Señor Majacutaj
ofrecio Cuil Pom, e Ikg Balam ofrecio gok pom. Hasta hoy en día se practica esta
ceremonia tal como se hizo en aquel primer día sobre aquel sagrado Cerro “Lugar
de Amanecer”. También nos dejaron, entre otras cosas, nuestros 20 grandes
calendarios. En fin, nos dejaron una tradición entera.

Con el estudio y formación de los calendarios, llegaron a saber que cada 5200
años la tierra se oscurece por un periodo de 60 a 70 horas, a este periodo de 5200
años le llamaron “Un periodo de Sol”. Asi se empezo a medir el tiempo de los 20
calendarios y entro en vigencia la nueva constitución de los pueblos Maya, el
llamado Derecho Consuetudinario. El Calendario de los 20 días, Tzolqij, como se
dijo anteriormente, es el que controla la vida del ser humano desde su nacimiento
hasta su muerte.

Este calendario Tzolqij o Cholqij, año del ciclo humano, tiene 13 meses y cada
mes tiene 20 días. Asi pues, un año esta compuesto de 260 días o sea el tiempo
de gestacion del ser humano en el vientre materno. Otro calendario es el del Año
Solar o Haab, el cual tiene 18 meses de 20 dias cada mes, dando un total de 360
días, a esto se le agregan cinco días más llamados días del Wayeb (que es el
encaje del año) y nos da la cantidad de 360+5=365. Estos 365 corresponden al
tiempo que tarda la Madre Tierra en su gira al rededor del sol.

Así pues, despues de llegar a medir el tiempo es cuando comienza la cuenta de


los días. A un día se le llama Qij ; a un mes se le llama Winal ; a un año se le
llama un Tun, a 20 año un Katun, etc.
Cada día es representado por una imagen llamada glifo y como día primero se
coloca al “BAATZ”.

Nota
En los 20 días del Calendrio Sagrado están expresadas todas las fuerzas básicas
de la creación y destrucción, de lo positivo y negativo, de lo bueno y malo, la
dualidad que existe en el mundo, en la sociedad, en la familia y en el corazón del
ser humano. De la conjugación de tales fuerzas en las vidas individuales depende
el curso de la existencia y del destino. Es importante saber que todo lo que uno
hace repercute de una manera a uno mismo, a la familia y a la comunidad. Por
eso los abuelos recomiendan portarse bien para el bien de uno, de la familia y de
la comunidad en general.

Ajau : Gran Padre o Ser Supremo

Ajq’ij : sacerdote maya

Nahual : es el Espíritu o la Energía, la fuerza qui anima los diferentes días del
calendario Tzolkin ; usualmente está relacionado con un animal regente, con el
espíritu del animal que rige cada signo.
B’ATZ’:
B´atz´ simboliza el tiempo desarrollado, la evolución y la vida humana.
B´atz´ representa el principio de la vida, el tiempo infinito de la inteligencia y la
sabiduría.
B´atz´ también simboliza los fenómenos cósmicos y la sabiduría original.

E:
E simboliza el camino del destino, el guía, el que nos lleva a un punto objetivo y
preciso, la búsqueda de la realización en todas las situaciones, aspectos y
manifestaciones de la vida.

AJ:
Aj representa a las nuevas generaciones. Significa el cañaveral, la abundancia, la
unidad, el poder divino, la clarividencia, las palabras sagradas.
Aj es el amor a la humanidad, la telepatía, las señales del cuerpo y los sueños
inesperados.

I’X:
I´x significa el jaguar o el tigre, la energía felina.
I´x representa a la mujer y el altar maya.
I´x es la energía que protege a los cerros, planicies y montañas.

TZ’IKIN:
Tz´ikin significa pájaro guardián, la libertad, el mensajero, el tesoro, la suerte y el
dinero.
Tz´ikin es el mejor día para el amor, para pedir abundancia material y espiritual,
tanto en lo particular como en lo comunitario.

AJMAQ:
Ajmaq significa el perdón y el pecado, representa lo más oscuro de la noche y el
primer rayo de luz.
Ajmaq es tierra, espíritu de los abuelos y sabiduría ancestral.
Ajmaq es la conciencia planetaria y la energía exterior.

NO´J:
No´j simboliza el movimiento del cielo y la tierra.
No´j es la cueva o caverna, poder de la inteligencia o sabiduría.
No´j también significa las ideas y pensamientos.
No´j es un día propicio para pedir claridad en la toma de decisiones.

TIJAX:
Tijax simboliza el cuchillo de obsidiana, el cuchillo de doble filo.
Tijax es la fuerza y el poder del guerrero.
Tijax simboliza lo drástico, el sufrimiento, las revelaciones por medio de imágenes
fugaces.
Tijax es el poder del trueno y el rayo.

KAWOQ:
Kawoq significa la fuerza de la unión, la conciencia y el desarrollo del plan
cósmico.
Kawoq significa crecimiento, fertilidad, energía para la abundancia material y
espiritual.
Kawoq simboliza a la mujer, la esposa y a la Sagrada vara de la autoridad.

AJPU:
Ajpu es el día de la grandeza y de la fuerza de la vida.
Ajpu son los cazadores seguros y certeros.
Ajpu es apto para obtener la certeza, la seguridad, el valor y la energía para
vencer los obstáculos.

IMOX:
Imox significa la esencia de nuestra conciencia y de nuestra mente. Imox es el
lado izquierdo, la parte sutil del ser humano.
Imox es la sensibilidad, lo inusual y lo excéntrico.
Imox se representa con el lagarto o cocodrilo de los ríos. Imox es el espíritu de la
lluvia.

IQ´:
Iq´ simboliza el espíritu vital, el relámpago, la tempestad.
Iq´ simboliza las corrientes del aire, la limpieza y la pureza del cristal.
En este día nació el viento y así se origino la vida. Iq´ es el purificador del cuerpo,
de la mente y del espíritu.

AQ´AB´AL:
Aq´ab´al significa el amanecer y el atardecer, la luz y la oscuridad.
Aq´ab´al es el signo de la renovación, de las oportunidades y la dualidad. Este día
es para pedir claridad, nuevas oportunidades, renovación de la vida y la
estabilidad.

K´AT:
K´at significa la red para pescar y para guardar el maíz.
K´at también significa los enredos y los problemas.
K´at es el día propicio para desenredar un problema y pedir por la abundancia.

KAN:
Kan significa la serpiente emplumada.
Kan es el movimiento, creador y formador del universo.
Kan es la evolución humana, el desarrollo espiritual, la justicia, la verdad, la
inteligencia y la paz.
KAME:
Kame significa la muerte, que es lo único seguro, todos nacemos un día y luego
volvemos al origen.
Kame es la muerte para el mundo maya, es una energía positiva.
Kame es un día especial para tener contacto con los ancestros.

KEJ:
Kej significa venado. Kej son los cuatro pilares que sostienen el cielo y la tierra.
Kej son los cuatro puntos cardinales, los cuatro caminos.
Kej es el conocimiento del poder a través de la existencia física. La armonía es la
mayor fuerza de este día.

Q´ANIL:
Q´anil significa germen, semilla, vida y creación.
Q´anil es la creación del universo, en especial la vida de la madre naturaleza.
Q´anil es un día para pedir por la germinación y la vida.
En el día Q´anil se pude reiniciar o reconquistar algo perdido.

TOJ:
Toj significa la divinidad del sol.
Toj es el fuego del espíritu del Ajaw.
Toj es la nivelación con la justicia, la vida y la esperanza.

TZ´I´:
Tz´i´ significa perro, secretario, escritura, justicia y autoridad.
Tz´i´ es el guardián de la ley material y espiritual.
Tz´i´ representa la fidelidad, el orden y la exactitud.
Tz´i´ es un día para pedir solución a los problemas legales.

El tzolkín (ciclo de 260 días) es el año ritual maya, tiene 260 días repartidos en 20
trecenas (20 x 13 = 260). Cada día de la trecena recorre 20 signos. El haab es el
año solar maya, tiene 365 días y está repartido en 18 meses de 20 días, más 5
días extras (18 x 20 + 5 = 365). Los 5 días extras se llaman uayeb, y se
consideraban de mal agüero. A cada mes se le llama veintena.

MEDICINA MAYA

La Medicina maya se practica en cada región del país de una forma particular, sin
embargo, a pesar de las diferencias que puedan presentarse, comparten aspectos
que, de cierto modo, hacen similar esta práctica: el origen, las causas y el
tratamiento.

Para los mayas, el origen de los males y las enfermedades estaba íntimamente
relacionado con los aspectos morales y religiosos. La principal creencia era que
éstas provenían del enojo de los dioses, sin embargo también se contemplaba la
presencia de “malos vientos”, de faltas cometidas ante la sociedad y del descuido
de la higiene personal en algunas ocasiones.

De acuerdo con el origen de la enfermedad, se distinguen tres clases de médicos


mayas:

=Ah men

Considerado un profeta o adivino, encargado de tratar lo relacionado con los


aspectos espirituales o religiosos por medio de rituales en los que recibía
indicaciones, apoyo y protección de los dioses a través del “zaztún” incorporaba
algunas plantas con poderes o propiedades especiales las que se incluyen
algunas plantas alucinógenas o estimulantes del sistema nervioso. Gozaban de
gran aceptación y con frecuencia eran solicitados para realizar rituales de
atracción de lluvia o “chá chaac”, para agradecer a los dioses por la cosecha, para
proteger la vivienda o propiedades de alguna persona utilizando a los duendes
mayas conosidos como "aluxes". De esta manera, la principal actividad de estos
personajes es la de servir de enlace entre el pueblo maya y sus dioses.

Pul Yah

Era identificado como un “Brujo Hechicero” cuya principal habilidad era o es la de


ahuyentar los “malos vientos” o espíritus mediante ritos que incluían animales e
ídolos de barro. Se creía que tenían el poder para causar daños a sus enemigos
para lo cual podían convertirse en algún animal y así llegar hasta su objetivo.
Utilizaban también el “zaztún” y algunas hierbas para curar a los enfermos. Estos
hechiceros realmente infundían temor entre la gente pues se creía que poseían
habilidades especiales para curar, pero también podían causar serios males si así
lo deseaban. Por lo general se acudía a ellos cuando una persona consideraba
que alguien le estaba haciendo algún mal por medio de la hechicería o cuando los
hierbateros no encontraban alguna explicación lógica a la enfermedad tratada.

Dzac Yah

Estos eran los verdaderos médicos mayas, puesto que tenían un amplio
conocimiento de las plantas medicinales y sus propiedades curativas. Fueron, tal
vez, los únicos que establecieron tratamientos de acuerdo con la sintomatología o
diagnóstico de las enfermedades de las que elaboraban amplios registros. Los
hierberos o hierbateros como también se les denomina, son personas que poseen
la habilidad de interpretar las características somáticas de una enfermedad
(mediante la plática con el paciente y la auscultación, si es necesario) y establecer
acciones basadas en el diagnóstico de la misma.

La fortaleza de los tratamientos de la enfermedades residía principalmente en el


uso de las hierbas, sin embargo también empleaban métodos complementarios
tales como el sangrado mediante el uso de sanguijuelas o utilizando colmillos
secos de víbora de cascabel, el punzado con espinas de puerco espín, pescado o
maguey, al igual que los apretones y masajes para curar ciertas dolencias.

De todos los curanderos o “médicos mayas”, los dzac-yahes son los que cuentan
con un método de curación muy reconocido por su alta eficacia. Incluso gran
cantidad de remedios y sanaciones practicadas por estos personajes aún tienen
gran uso y aceptación entre los descendientes del pueblo maya.

Hierbas utilizadas por los Mayas

Entre las hierbas que los curanderos mayas utilizan para hacer sanaciones se
encuentran:

• Azahar: Es la flor de la naranja agria. Se mezcla un puñado de hojas de la


naranja con un puñado de flores del mismo árbol, se agrega menta y se
cuece a fuego lento. Se deja reposar y se toma. Es un calmante para los
que padecen tensión nerviosa.

• Pomolché: La savia de esta planta sirve para el tratamiento de granos


difíciles y la viruela.
• Guayaba: El cocimiento de las hojas de esta planta sirve para el tratamiento
de la escabiasis. Se cuecen las hojas, se deja reposar y al estar templada
la cocción se preparan baños con ella.
• Ciruela: Las hojas de este árbol sirven para eliminar el sarpullido. Se
cuecen en abundante agua, se dejan reposar, y al estar a temperatura
agradable para el paciente, se aplican baños por todo el cuerpo. Es
importante que después del baño el paciente no se exponga a corrientes de
aire para no bloquear el efecto de esta preparación.
• Belladona: Se utiliza para el tratamiento de las paperas. Se soasan las
hojas, se aplican en la parte afectada y se cubren con vendas para
mantenerlas en su lugar. Mientras se sigue este tratamiento el paciente no
debe exponerse a corrientes de aire.
• Kitinché y Bel sinik ché: Se mezclan las hojas de esta planta y se preparan
baños con el cocimiento una vez reposado y teniendo temperatura
agradable. Sirve para eliminar el mal olor del sudor.

• Eucalipto: El cocimiento a base de eucalipto y miel o azúcar. Es un gran


remedio para la tos. Se mezclan, se cuecen, se dejan reposar y al tener
temperatura ambiente se beben de manera espaciada. Por el tiempo que
dure este tratamiento los pacientes deben abstenerse de consumir bebidas
muy frías y comidas muy calientes.
• Oox (ramón): Se sancochan doce hojas en medio litro de agua, se deja
reposar y se beben paulatinamente estando el cocimiento a temperatura
ambiente. Se recomienda no consumir bebida extremas.
• Albahaca: Sirve como auxiliar en el tratamiento de enfermedades de los
ojos como la conjuntivitis. Se mastrujan las hojas en agua, se cuela y se
lava abundantemente la zona afectada.
• Menta: Se cuecen las hojas de menta en un litro de agua, se deja reposar y
enfriar y luego se toma de manera racionada. Sirven para cólicos.
• Toronjil: Es un antiespasmódico. Se prepara una infusión con las hojas y se
toma de manera racionada.

MEDIO AMBIENTE DE LOS MAYAS

Tal vez nunca dejará de maravillarnos la enorme extensión de tierra en la que


floreció la cultura maya: poco más de 350,000 km2. Para dar una justa dimensión
a este dato, basta considerar que actualmente la extensión territorial de Italia es
de 301,227 km2; la de Reino Unido, e Irlanda del Norte, de 244,100 km2, y la de
Hungría, de 93,030 km2.

El área maya abarcó los estados mexicanos de Yucatán, Campeche, Quintana


Roo, Tabasco y Chiapas; en Centroamérica, ocupó Guatemala, Belice y parte de
Honduras y El Salvador. Esta variedad geográfica trae aparejada una importante
diversidad de climas, paisajes y expresiones culturales que tuvieron como
escenario ecosistemas de gran riqueza vegetal y animal, tales como la selva, la
sabana, el manglar, el bosque y el arrecife, por mencionar algunos.

De hecho, la cultura maya se integró por un conjunto de grupos étnicos y


lingüísticos muy diversos cuyas costumbres, paisajes y relaciones con su medio
ambiente, como se evidencia, eran también variadas. Sin embargo, es posible
identificar a estos grupos bajo el concepto de cultura maya, y estudiarlos de
manera integral, porque lograron conformar una unidad cultural en lo concerniente
a su organización social, política y económica, a su desarrollo artístico y científico,
a sus expresiones culturales y a una cosmovisión compartida.

¿Cómo acercarse entonces a este conjunto de territorios tan distintos, pero


integrados culturalmente? A grandes rasgos, se identifican tres grandes áreas de
asentamiento: la primera, al norte de la península de Yucatán, donde predomina
un clima seco y caluroso; la segunda se ubica al centro, en una amplia zona
húmeda y tropical (tierras bajas de Guatemala y parte de Honduras, Tabasco y
Chiapas); finalmente, se reconoce el sur por ser una región montañosa que abarca
las zonas altas de Guatemala y el sur de Chiapas.

La variedad geográfica contenida en dichas áreas adquiere matices


sorprendentes: selvas rodeadas por caudalosos ríos, corrientes y depósitos de
agua subterráneos; numerosos cenotes (dzonot, en lengua maya), cadenas
montañosas de origen volcánico, altiplanicies y extensos lagos; espesos bosques
y regiones planas de suelos calizos. La lista pareciera ser infinita.

Esta vasta zona no sólo es el hogar de numerosas plantas y animales de gran


belleza (en ella viven helechos que son contemporáneos de los dinosaurios).
También ha resguardado, durante siglos, tesoros artísticos que son considerados
patrimonio de la humanidad y sitios de importancia mundial por su biodiversidad,
como los pantanos de Centla y la Reserva de la Biosfera de Sian Ka'an. Podemos
gozar de ellos hoy en día gracias a que la relación de los mayas con la naturaleza
se basó --y aún se basa-- en el respeto hacia ella y está estrechamente ligada a
su conciencia de la unidad cósmica, el equilibrio y la armonía.

Por otra parte, la importancia del agua en esta zona fue fundamental: conforma
todo un sistema hidrográfico en el que destacan caudalosos ríos, como el
Usumacinta o el Atitlán; cenotes de los que los mayas no sólo se abastecían, sino
que tenían un uso ritual, como el de Chichén Itzá; chultunes o pozos creados para
conservar el agua acumulada durante las lluvias, ubicados cerca de grandes
ciudades como Tikal, Uaxactún y El Naranjo. Los mayas desarrollaron incluso
sistemas primitivos de irrigación cuyos restos todavía pueden observarse en
Edzná y Kohunlich, por ejemplo.

ARTE MAYA

El arte Maya, es un reflejo de su estilo de vida y cultura. Este arte se


manifestaba, en dibujos y pinturas en papel o al fresco, bajo y alto
relieves en piedra, madera, barro, jade, y hueso, así como figurillas de
barro. El proceso técnico de los metales era conocido, pero
su escasez los hizo utilizarlo solo en adornos. La Música era
muy apreciada y hay pruebas de obras teatrales, que se
llevaban a cabo en las ceremonias públicas. La nobleza
Maya encargaba trabajos muy finos para sus palacios, y para
acentuar su grandeza, entre éstos, joyería de Jade y Obsidiana
transportadas por mercaderes desde las Tierras Altas de Guatemala.
Tronos grabados, pinturas murales, así como cerámica policroma con escenas
de la vida en las cortes, y por supuesto, Estelas con textos para ser recordados
por sus hazañas en batalla. La mayoría de figurillas de una extensa variedad, se
han encontrado en tumbas reales. El arte Maya, no era solo para la realeza,
como lo atestiguan los muchos hallazgos en las casas de la gente común.

Escultura. La forma más conocida de escultura son las Estelas,


que eran monolitos de piedra con grabados de gobernantes o
dioses y textos que han ayudado a entender su cultura, La
Mayor del Mudo Maya es la Estela E de Quiriguá que pesa 65
Toneladas y mide 10.5 Mt. de Altura, y sus grabados cubren 8
metros de ella por tres lados. Otras formas incluyen figurillas,
dinteles de madera como en Tikal y El Zotz, (izq.), o piedra llamados Paneles,
destacando los de La Corona (anteriormente, sitio Q), Piedras Negras y Cancuén.
Los Mayas usaron mucho Jade en sus objetos, lo que es remarcable debido a su
dureza, sin embargo la fineza de grabados y esculturas en Jade es impresionante.
El escultor trabajaba con las tradiciones locales incluso en la forma de las caras,
se puede identificar los estilos de cada región, como perspectivas, gestos,
vestimentas, y la profundidad de los grabados, lo que respetaba la tradición. Los
habitantes de Cotzumalguapa, muy cerca de Monte Alto, desarrollaron un estilo
artístico original, así como su propio estilo de escritura, que quedó plasmado en el
gran número de Esculturas Monumentales, que incluyen, Estelas, Altares,
Cabezas colosales y Esculturas tridimensionales. Además, de escaleras, pilares y
piedras de pavimento con inscripciones. También hay un gran número de
Escultura pequeñas, Lo Característico del Estilo de Cotzumalguapa es su
extraordinario realismo al representar figuras humanas, que en algunos casos, se
pueden considerar retratos de personas, casi seguramente, Reyes y Nobles. En
Muchos casos, éstos individuos participan en complejas escenas en las que
interactúan con otros humanos o seres sobrenaturales. Son elementos muy
distintivos del estilo de Cotzumalguapa, las viñetas de lenguaje, representadas
con gran variedad de flores y frutas. Los signos Jeroglíficos, se escriben en
cartuchos circulares, pero éstos también adquieren formas complejas de
animación. El arte escultórico Maya en las cuevas, constituye otro grupo de
importancia, con Grabados y Petroglifos, hechos por medio de incisiones, picados
y cincelados, las técnicas más comunes en la escultura, otro clase de escultura es
la tridimensional, en arcilla cruda una forma rara y frágil de arte.

Cerámica A diferencia de los monumentos, los que eran para ser vistos por
todos, la cerámica era muy anecdótica y fue donde los artistas Mayas, dejaban
volar su imaginación. Hay un aspecto del arte Maya que muchas veces no se
toma en cuenta, siendo éste, la tremenda variedad y excelencia de diseño y
estilo que contiene la cerámica. El arte cerámico griego era de excelente calidad
pero a comparación de los Mayas su estilo es monótono. Los Nobles Mayas a
diferencia de la escultura, no requerían ningún patrón en sus vasijas, lo que lleva
a una gran variedad y calidad que variaba de un taller a otro y eran vendidos a la
nobleza de otras ciudades. Las vasijas pintadas de los Mayas tienen mucho en
común con el arte moderno que cualquier otra cultura, además, su valor era
dado por la calidad y no por algún estándar preconcebido. Al igual que los
Chinos y Griegos, los artistas Mayas firmaban sus trabajos, consecuentemente,
su trabajo no era de una cultura o ciudad, sino personal. Muchas variedades de
cerámicas, de muy buena calidad han sido encontradas, como Frascos para
guardar esencias y medicamentos, Incensarios, urnas funerarias e incluso
figurillas articuladas. Un tipo de cerámica que se llama Pabellón Moldeado-
Tallado, aparecieron en la zona del Petén y Belice, durante el período clásico
terminal (700-900 DC), considerados un artículo de lujo, estaba hecho de una
pasta fina naranja y se caracteriza por tener motivos Mayas y extranjeros, lo que
puede dar alguna luz en el contexto del Colapso Maya.
ESCRITURA MAYA

La escritura maya, común y equívocamente llamada jeroglíficos mayas, fue el


sistema de escritura usado por la civilización maya precolombina en Mesoamérica,
siendo el único sistema de escritura descifrado de los sistemas de escritura
mesoamericanos. Las primeras inscripciones que son identificables como mayas
datan del siglo III a. C., y la escritura fue usada hasta un poco después de la
llegada de los conquistadores españoles en el siglo XVI (e incluso luego en
lugares como Tayasal). La escritura maya usaba logogramas complementados por
un juego de glifos silábicos, con funciones similares a los de la escritura japonesa.
La escritura maya fue llamada "jeroglífica" por los antiguos exploradores europeos
de los siglos XVIII y XIX, quienes no la entendían, pero encontraron que tenía
reminiscentes similitudes en su apariencia con los jeroglíficos egipcios, con los
que la escritura maya no está relacionada.

La escritura maya se compone de un complejo conjunto de glifos que


laboriosamente se pintaban en cerámica, muros o códices, se tallaban en madera
o piedra, o se moldeaban en estuco. Los glifos tallados y moldeados también se
pintaban, aunque con frecuencia la pintura se deterioraba hasta perderse.

Actualmente unos tres cuartos o un poco más de las inscripciones mayas se han
podido descifrar con variados grados de certidumbre, lo suficiente como para dar
una idea panorámica de su estructura.

La escritura maya era un sistema logosilábico. Los símbolos individuales ("glifos")


podían representar bien una palabra (normalmente un morfema) o una sílaba; a
decir verdad, el mismo glifo confrecuencia podía usarse de las dos formas. Por
ejemplo, el glifo calendárico MANIK’ se usaba asimismo para representar la sílaba
chi. (Por convención se escriben las lecturas logográficas en mayúsculas y las
lecturas fonéticas en cursiva (itálica). Es posible, pero no está comprobado, que
estas lecturas conflictivas se originaran al ser adaptada esta escritura a nuevos
idiomas, como sucedió con los caracteres Han para el japonés (kanji). Igualmente
hubo ambigüedad en sentido contrario: glifos diferentes se podían leer de la
misma manera. Por ejemplo, media docena de glifos sin relación aparente se
empleaban para escribir el pronombre de tercera persona u-, de uso muy común.
La put maya se escribía usualmente en bloques organizados en columnas de dos
bloques de ancho, y se leían de la siguiente forma:

Orden de lectura de los glifos mayas. Posee reconocible analogía con el orden de
escritura de la actualidad, como por ejemplo, en las columnas de un periódico.

Dentro de cada bloque, los glifos eran dispuestos de arriba hacia abajo y de
izquierda a derecha, aparentemente casi como los bloques silábicos de la
escritura coreana Hangul. No obstante, en el caso del maya, cada bloque tendía a
corresponderse con una frase nominal o verbal tal como 'su tocado verde'.
Además, los glifos a veces eran abreviados o condensados, en donde un
elemento de un glifo sustituiría parte de otro. El condensamiento aparece en otras
escrituras: Por ejemplo, en los manuscritos españoles medievales la palabra de a
veces se escribía Ð (una D con el trazo central de una E). Un ejemplo en inglés es
la "y comercial" (en inglés ampersand) o et (&) que es una ligadura de la palabra
"et" en francés normando. A veces, en lugar de la configuración usual de los
bloques, se escribían los glifos mayas en renglones o columnas sencillas, o en
forma de 'L' o 'T'. Estas variaciones aparecían más frecuentemente cuando se
adaptaban mejor al área disponible para escribir.

Los glifos mayas eran básicamente logográficos, es decir, cada símbolo


representaba un ente o concepto, como "pescado" o "jaguar". En general, los
glifos utilizados como elementos fonéticos fueron en su origen logogramas
correspondientes a objetos cuyas voces asociadas en lenguaje hablado eran
monosílabos terminados en una vocal, en una consonante débil (como y, w, h) o
en una oclusiva glotal (sonido parecido al de la h en las interjecciones ¡uh!, ¡ah!,
¡eh! del castellano).

Un ejemplo es la evolución a glifo fonético del logograma 'aleta de pescado'. Tenía


dos representaciones: podía ser el dibujo de una aleta de pescado, o también el
de un pescado con la aleta prominente. En el lenguaje hablado, aleta de pescado
era kah. Por eso los glifos 'aleta de pescado' terminaron funcionando también
como glifo fonético de la sílaba ka.

Los glifos fonéticos silábicos que surgieron de esta forma tenían dos funciones
básicas: por un lado, servían como complementos fonéticos para desambiguar
logogramas con más de un significado (esto ocurrió también en la escritura
egipcia), y por otro se usaban para escribir elementos gramaticales que carecían
de logograma, tales como inflexiones de los verbos (hay analogía con el japonés
moderno). Por ejemplo, la voz bálam, jaguar, podía escribirse como un sólo
logograma (lo representaremos como BALAM en lo que sigue, por comodidad), o
podía matizarse añadiéndole logogramas fonéticos, según contexto (ba—BALAM,
o también BALAM-—ma, o ba—BALAM—ma, donde ba y ma son glifos fonéticos),
o incluso podía escribirse de forma totalmente fonética, con tres glifos (ba—la—
ma)

Los glifos fonéticos representaban sílabas simples abiertas (formadas por


consonante+vocal o únicamente vocal). Sin embargo la fonotáctica maya es un
poco más complicada. La mayoría de palabras mayas finalizan en consonante, no
en vocal, y también pueden encontrarse secuencias de dos consonantes en medio
de la palabra, como en xolte’ [ʃolteʔ] 'cetro', que es CVCCVC. Cuando estas
consonantes finales eran sonantes (l, m, n) o glotales (h, ’) a veces se omitían en
la escritura, pero más frecuentemente las consonantes finales se escribían, lo que
significa que también aparecía una vocal extra. Ésta era típicamente una vocal
"imitativa" que repetía la de la sílaba anterior. Así, la palabra [kah] 'aleta de
pescado' se escribiría ka-ha. Sin embargo hay muchos otros casos donde se
usaba otra vocal final, y sus reglas ortográficas sólo se han comprendido
parcialmente. He aquí lo que se comprende actualmente:
• Una sílaba CVC se escribía CV-CV con las dos vocales iguales: yo-po [yop]
'hoja'.
• Una sílaba con vocal larga (CVVC) se escribía CV-Ci, a menos que la vocal
larga fuera [i], en cuyo caso se escribía Ci-Ca: ba-ki [baak] 'cautivo', yi-tzi-
na [yitziin] 'hermano menor'.
• Una sílaba con vocal glotalizada (CV’C o CV’VC) se escribía con una a final
si la vocal era [e, o, u], o con una u final si la vocal era [a] o [i]: hu-na [hu’n]
'papel', ba-tz'u [ba’tz’] 'mono aullador'.

Una forma escrita más compleja es ha-o-bo ko-ko-no-ma para [ha’o’b kokno’m]
'ellos son los guardianes'. (La duración y la glotalización de las vocales no siempre
estaban indicadas en palabras comunes como 'ellos son'). Un conjunto mínimo,
sin traducción completa, es el siguiente:

ba-ku [bak]

ba-ki [baak]

ba-ku [ba’k] o [ba’ak]

ba-ke [baakel] (omitiendo la l)

LITERATURA MAYA

Los libros de la literatura maya que se conocen, son de temas religiosos y


mitológicos y no son de fácil interpretación. Hacen continua alusión a su historia,
su religión y la ciencia de su época, con un profundo sentido patriótico y poético.

Entre las principales obras se pueden citar:

"El Libro de Chilam Balam" es uno de los más famosos, pues refleja la
desesperación del aborigen por la invasión de los conquistadores. Se hallaron
varias versiones de esta obra, con contenidos distintos según el pueblo que la
hubiera escrito, pues se hacían diferentes versiones en los distintos clanes.
Pero por su contenido de diversos temas: religiosos, históricos, literarios,
sobre astronomía y calendarios, se puede apreciar toda la sabiduría del
pueblo maya.
Se cree que sus autores fueron sacerdotes que transcribieron manuscritos
sagrados, a los que acotaron noticias locales y elementos de la historia de
cada lugar. Eran considerados libros sagrados y se los leía en ocasiones
especiales.
las copias que se conservan no son las originales, sino transcripciones de
alrededor del siglo XVI.

El "Popol Vuh", "Las antiguas Historias del Quiché", el más conocido, es


el libro sagrado de los indios quichés que habitaban en la zona de Guatemala.
Se explicaba en él el origen del mundo y de los indios mayas. También se
relataba la historia de todos los soberanos.
Se puede señalar que hay allí una conjunción de religión, mitología, historia,
costumbres y leyendas. Es esencialmente una descripción del conjunto de
tradiciones mayas de quienes habitaban la región guatemalteca; pero también
aparecen agregadas algunas ideas cristianas, lo que hace suponer que el
autor conocía a misioneros católicos. No se conoce el nombre del autor pero
por datos sacados del contenido de la obra, se supone que ha sido escrito
hacia 1544.
Fue escrito originalmente en piel de venado, posteriormente trascripto en
1542 al latín por Fray Alonso del Portillo de Noreña.
La versión española fue realizada sobre este último texto en el siglo XVIII
(1701) por el fraile dominico Francisco Ximénez que se había establecido en
Santo Tomás Chichicastenango. Y "Popol Vuh" lo llamó un estudioso de
temas americanistas, que en el siglo XIX lo tradujo al francés, Charles Etienne
Brasseur de Bourbourg.

El significado de los términos que conforman el nombre es:

Popol: Palabra maya que significa reunión, comunidad, casa común, junta.
Vuh: Libro, papel, árbol de cuya corteza se hacía el papel.

Para los Quichés de Guatemala, hombres del bosque o de los magueyes, el


Popol Vuh es una Biblia.

En el libro se distinguen tres partes:

La primera es una descripción de la creación del mundo y del origen del


hombre, que después de varios fracasos fue hecho de maíz, el alimento que
constituía la base de su alimentación.
La segunda parte trata de las aventuras de los jóvenes semidioses Hunahpú e
Ixbalanqué que termina con el castigo de los malvados, y de sus padres
sacrificados por los genios del mal en su reino sombrío de Xibalbay.
La tercera parte es una historia detallada referida al origen de los pueblos
indígenas de Guatemala, sus emigraciones, su distribución en el territorio, sus
guerras y el predominio de la raza quiché sobre las otras hasta poco antes de
la conquista española. Describe también la historia de los Reyes y la historia
de conquistas de otros pueblos.

El "Rabinal Achí": Se ha conservado esta pieza dramática escrita en el


pueblo quiché y que trata sobre la rivalidad entre dos ciudades-estados, y la
captura y muerte de un guerrero notorio.
Los "Anales de los Cakchiqueles" es una conjunción de datos históricos,
mitológicos y religiosos, escrito en lengua maya y caracteres latinos.

PINTURA

Los Mayas fueron grandes pintores, especialmente en cerámica, pero los


murales en Edificios y Cuevas, fueron muy importantes para ellos, ellos usaron
muchos tintes vegetales y minerales para sus obras de arte, como en los
Murales de San Bartolo, los más antiguos e impresionantes descubiertos hasta
ahora. con la descripción del mito Maya de la Creación, hace más de 2000
años. El estuco fue preparado con un pegamento orgánico extraído de un árbol
endémico en Petén llamado localmente Jolol, mezclado con cal y Sascab, en la
parte interna y una mas delgada de cal muy fina con Barita, un mineral mas fino
que el sascab en la superficie, lo que le dio una gran durabilidad al mural. Los
Mayas también pintaban los Monumentos Templos y Palacios con pintura blanca
y roja. Los colores más típicos encontrados en el arte rupestre, son el rojo y
negro, la inspección visual sugiere que el negro es derivado del carbón, aunque
otros pigmentos como el manganeso pueden haber sido usados. El rojo,
(Generalmente un rojo anaranjado provenía de arcillas ricas en hierro, que se
encuentra en las mismas cuevas aunque en algunas hay hematina en el suelo
(Un rojo brillante. El Amarillo y Azul son raros al primero se ha encontrado en la
Cueva de las Pinturas en el Sur del Petén, Guatemala. Al igual que en Tikal y
Nakúm, las cuevas Mayas también tienen graffiti así como copias positivas y
negativas de manos y más raramente de pies. La palabra Maya tz'ib se refiere
a pintura en general, incluyendo imaginería y escritura. Los artistas eran
llamados aj tz'ibob ('ellos los que pintan'), y eran maestros calígrafos y pintores
que firmaban sus trabajos. La vasta colección de arte Maya incluye el nombre de
muchos ah tz'ibob, trabajando y al lado de sus dioses patronos. El Vaso que se
muestra abajo es de un estilo muy particular llamada Los Danzantes de Holmul.
Hay muchas muestras de arte popular en dibujos de cuevas y Graffiti en varias
ciudades Mayas. particularmente en Nakum y Tikal

RELIGION MAYA

Los Mayas tenían un panteón de dioses muy extenso, con más de 165, los cuales
muchas veces tenían aspectos diferentes, como la combinación de características
de joven o anciano o bien de humano y animal, los que jugaban funciones
diferentes. Los reyes eran la encarnación del dios del Maíz, como lo muestran en
su Arte cerámico, los Murales de San Bartolo y el Popol Vuh.

Los principales dioses Mayas del clásico incluyen a: Itzam Ná, dios Creador, una
deidad en forma de reptil, y su esposa, Ix’Chel, la diosa de la luna y el Arco Iris,
Hunahpu' e Xbalanque', los gemelos heroes, Kinich Ajau, el dios del sol, Jobnil
- bacab de el Este, al cual se le asigna el color rojo, y los años Kan. Can Tzicnal
- bacab de el Norte de color blanco,y los años Muluc, Zac Cimi - bacab de el
Oeste de color negro y los años Ix. Jozanek - bacab de el Sur de color amarillo y
los años Cauac. Chac, dios de la lluvia, Bolon Tza’cab, dios del linaje real, Jun
Kaax o Aj Mun dios del maíz y padre de los gemelos héroes, Jum Cimil, una
deidad de la muerte, Ah Chicum Ek, un dios de la Estrella Polar del Norte, Ek
Chuah, dios de los comerciantes, Bulac Chabtan, deidad de la guerra y los
sacrificios humanos, AJ Puch dios de la muerte y muchos más. Habían 13
deidades en el Cielo, y 9 en el inframundo, cada uno con su
correspondiente nivel. La deificación de reyes fallecidos y su
veneración era una elaborada expresión de culto a los
antepasados un tema que con seguridad permitió continuidad a la
religión Maya. Los Mayas creían en el sacrificio con sangre para
mantener el balance del cosmos, y al árbol sagrado
(Ceiba), o árbol de la vida. Durante las ceremonias,
los sacerdotes se transformaban en dioses, usando alucinógenos u
otras substancias para aumentar sus poderes de adivinación.

Las mujeres se consideraban impuras, debido a su menstruación, por


lo que no se les permitía estar en ciertas ceremonias, Las Vírgenes
vestales, en cambio, si podían asistir a los fuegos. Los Sacerdotes eran parte de
la élite y solo eran subordinados del gobernante que también era el líder político, y
tenían ayudantes para las ceremonias.

La habilidad de las manifestaciones de dioses de interactuar con los otros es un


punto importante para entender a los dioses del mar que son nombrados en los
"Anales de los Cachiqueles" así como en el Popol Vuh.

ORGANIZACIÓN POLITICA

Organización política
Los mayas primitivos se agrupaban en pequeños caseríos, distantes unos de
otros. Posteriormente fueron erigidos algunos centros ceremoniales. La vida de
estos primeros habitantes del área maya dependía enteramente de los elementos
naturales y del cultivo y recolección de sus cosechas.
Con la vida sedentaria y la práctica continua de la agricultura primitiva, surgió lo
que al principio fue el culto sencillo de la naturaleza y de los elementos ligados a la
siembra, tales como el sol, la lluvia, el viento, las montañas, el agua, etc.
Habría que imaginar que las sencillas ceremonias eran oficiadas y dirigidas por el
jefe de la familia. Posteriormente, con la tecnificación incipiente de la agricultura, la
práctica religiosa fue organizada en forma más compleja y surgieron los primeros
sacerdotes profesionales.
Los sacerdotes se convirtieron el los depositarios de la ciencia y adquirieron un
poder político creciente que los transformó en una casta dominante. A ellos se
debió el perfeccionamiento del calendario, la cronología y la escritura jeroglífica.
En el siglo IV de nuestra era, la cultura maya se había establecido sólidamente en
el norte y en el centro del Petén. La religión maya se había convertido en un culto
sumamente desarrollado y complejo.
Hemos visto cómo la primera etapa de la civilización maya transcurre durante el
ciclo correspondiente a la caza, a la pesca y recolección. También hemos
conocido la etapa correspondiente al cultivo de las primeras plantas o período
inicial de la civilización agrícola. Durante esta segunda etapa surgió una nueva
unidad política que era la aldea gobernada por un consejo de jefes o cabezas de
familia.
La tercera fase del desarrollo de la civilización maya corresponde un orden social
y económico, en el que predomina la mujer y se establece el matriarcado. La
cuarta etapa de desarrollo se caracteriza por la consolidación de las formas
esenciales de la civilización maya y por el paso del derecho materno al paterno
definitivo.
En la época de mayor florecimiento de la civilización maya, la jerarquía del poder
estaba conformada por:
• Sacerdotes gobernantes
• El sumo sacerdote maya (Ah-Kin-May)
• El sacerdote (Halach Uinic)
• Jefes y señores principales (Bacab)
• Mayordomo real
• Consejo de estado, integrado por los sacerdotes y gente principal
• Jefes guerreros (Nacon)

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