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Tendencia Socialista

Política y estrategia de la huelga de la Universidad del Valle


La movilización de los estudiantes en la Universidad del Valle y que apunta hacia una
lucha anticapitalista, en el sentido de confrontar al enemigo inmediato de clase, a la forma
de gobierno y a la estructura del poder interno y académico, al sistema de financiación y a
los vínculos y trabas que el capital monopolista provoca, ha puesto en manifiesto una
realidad que el movimiento confronta. La "huelga estudiantil" es superada en su relativa
estrechez por la huelga general de las masas que tienen su sustrato y su condicionamiento
en la universidad: los trabajadores, los profesores y los estudiantes. La participación de los
sectores que conforman las masas de la Universidad, no se dan de manera similar, ni
sincronizadamente. Las particularidades que se deducen de la naturaleza y del ser social del
movimiento estudiantil ubican esta fuerza social como principal entre los distintos sectores
participantes.

Pero no hay que entender este tipo de huelga, que rebasa las concepciones de las huelgas
estudiantiles, únicamente en el sentido que moviliza a varios sectores determinados por la
estructura de la Universidad, sino que hay que entender que la huelga de masas, en el
sentido como se presenta en la actual lucha, constituye una unidad de los aspectos
reivindicativos y políticos: la lucha reivindicativa, —elección de de-cano en propiedad,
etc.— ha sido el hilo que ha permitido vincular los diferentes aspectos políticos; a su vez la
lucha política —movilización anti-imperialista ha fecundado el terreno de las luchas
reivindicativas. La causa y el efecto se suceden y alternan sin cesar y de este modo el factor
reivindicativo y el factor político, lejos de distinguirse completamente o incluso de
excluirse recíprocamente, constituyen en la actual huelga dos aspectos complementarios de
la presente confrontación clasista. Entender esta óptica, nos permite clarificar y ante todo
poner de manifiesto el carácter global de masas del movimiento. Este, el movimiento
apunta en su conjunto a logros reivindicativos y políticos. Suprime la unilateralidad y
enfatiza la complementaridad y la articulación de los objetivos.

El carácter de huelga general de masas, exige entonces la existencia de un programa y de


una línea que movilice a cada uno de los sectores objetivamente interesados e implicados
en la actual crisis. Si la crisis, involucra no sólo el aspecto de la unidad en la enseñanza, si
se está cuestionando no sólo la ideología que sustente el aparato escolar. Si por el
contrario, la crisis globaliza estos aspectos y confronta la estructura de la Universidad en su
conjunto. Entonces, las fuer-zas que dinamizan el proceso, que se unifican en los objetivos,
presentan una movilización en torno a los aspectos generales y a los particulares que cada
sector involucre.

La articulación entre los sistemas financieros del BID, las fundaciones y la FES y la
estructura de poder y el sistema de gobierno de 'la Universidad, plantea que la
reestructuración de la Universidad, objetivo que unifica a los sectores de los trabajadores,
estudiantes y profesores, implica una posición de cuestionamiento y de rechazo a los
empréstitos del BID y a las onerosas exigencias de tipo financiero y político, lo mismo reza

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para las fundaciones extranjeras.

Si además la FES constituye un organismo de poder paralelo, al controlar los fondos


especiales de la Universidad y al ejercer una política de intromisión en la vida académica
de la misma. Bonificación a profesores, manejo de la asociación de exalumnos, corrupción
y favoritismo del profesorado. Entonces el movimiento masivamente debe confrontar esta
situación.

Si además la legalidad, Ley orgánica universitaria, reviste de forma jurídica una posición
de clase, la lucha involucra este aspecto dominante. La reestructuración no puede
entonces, ser entendida sino a partir de deslindar acerca del problema del BID, las Funda-
ciones, la FES, el estatuto orgánico universitario.

No es, ya lo demostramos, un problema únicamente del estudiantado, capta objetivamente


a los trabajadores y al profesorado.

Otro objetivo global, es el de la renuncia de Ocampo Londoño. No es una consigna fruto


del capricho ni de antipatía personal. Vincula profundas aspiraciones de las masas al
reconocer en él al personero de toda una política que en su forma actual reviste la
autocracia, el poder personal, el sistema vertical de decisiones y que es la manera de
agenciar los intereses del capitalismo en la vida académica, administrativa y financiera de
la Universidad. Para nosotros, está claro que la autocracia de Ocampo y su sistema vertical
de decisiones, no es un remanente de otras formas sociales de gobierno sino el imperativo
del capitalismo en la hora. Ocampo Londoño, ha perseguido a los trabajadores, los cuales
han sido clasificados conforme al decreto 3135, se les ha, sistemáticamente, tratado de
introducir en sistema paternalista de relaciones. Los profesores, tradicionalmente han sido
utilizados por él, para los intereses coactivos ante el gobierno departamental. El que una
organización corporativa y vertical como el "Senado de Profesores" haya sido introducido
por Ocampo en alguna época no muy lejana, indican la concepción de Ocampo acerca de la
ideología directivista con la que se debe mover el profesorado. Los profesores asimilados a
los directivos. Además, el hecho de que haya creado una casta profesoral ubica el sector
mayoritario del profesorado contrario al papel de Ocampo en la Universidad del Valle.
Además es criterio a considerar, el papel que en las políticas del aparato escolar
desempeña, ubicándolo como el representante del sector más reaccionario de la Educación
Superior.

La reivindicación de asegurar institucionalmente los mecanismos democráticos para la


elección de autoridades académicas y puestos de dirección, unifican los condicionamientos
objetivos de los sectores en mención. Esta aspiración es la barrera más fuerte a la política
del "dedo" y al favoritismo e introduce elementos de consideración académica y científica.

Responde pues a los intereses y aspiraciones más sentidas a las fuerzas participantes del
polo revolucionario de la contradicción.

En la huelga, además entran a considerarse, la situación de las masas y que gráficamente la


podemos ubicar en los siguientes términos: el interés político ha tomado un carácter más
definido últimamente, el descontento se ha profundizado y se fundamenta en una base
teórica más sólida. El pensamiento estudiantil y de las masas ayer atrasado, hoy realiza
ávidamente un esfuerzo de análisis político. Todas las manifestaciones del poder absoluto y
arbitrario han sido atribuidos a su causa principal. Las consignas revolucionarias ya no
asustan ni siquiera al profesorado. Se comprende que sean las consignas que responden a
los intereses de los participantes. La conciencia de las masas absorbe cada una de las
expresiones de negación, condena o maldición, dirigidas al absolutismo, del mismo modo
que una esponja absorbe una sustancia fluida. Ningún paso de la autocracia queda sin su
repudio. El pensamiento lucha por convertirse en acción.

Se ha hecho entonces necesario buscar sacar el problema del aislamiento de la universidad


que lo quiere hacer aparecer confinado en la "autonomía" de su propia crisis. La huelga
busca a las masas populares donde ellas se encuentren, en las fábricas y sindicatos, en las
calles y los barrios, en los colegios y reuniones públicas. Entiende que su eficacia en tanto
que combate político-social, está determinado relativa-mente por esa actuación. Sin
embargo no busca el "generalismo", a manera de un desenfoque, que dé un desfase de la
instancia en que actúa y que les sirve de sustrato. Por ello convoca un "ENCUENTRO
NACIONAL UNIVERSITARIO" con carácter de emergencia, para darle una orientación
colectiva a la lucha contra un enemigo nacional que confronta la posición de la huelga en la
Universidad del Valle. La movilización nacional se hace posible, porque además otros
centros de educación sufren los rigores de la profunda crisis social en general y en la
instancia educativa en particular. La huelga del magisterio, es otro elemento que junto con
el paro del SENA, concretizan una situación. Que sobre el tapete social, que sobre la arena
política nacional, existan otros tipos de fenómenos tales como el paro de la UTC, obliga a
una consideración que fue la adoptada por el Encuentro Nacional realizado en Cali.

Los estudiantes apoyamos la lucha de los trabajadores por la defensa de sus sindicatos y en
la resistencia contra el capital. Así mismo apoyamos la lucha de los campesinos por la
tierra y por su liberación social, Sin embargo subrayan el carácter de la dirección Utecista
como representante de las tendencias más reaccionarias en el seno del movimiento obrero.
Subraya además y advierte la utilización que de la movilización del campesinado trata de
hacer un sector del partido liberal.

La movilización de los sectores en la instancia educativa y universitaria deben entonces


mantener su propia dinámica. No para aislarse, ya quedó claro, sino para ser eficaces.

II. 26 de Febrero, una nueva situación ubica la lucha.

Al darle un contenido nacional al combate. Al prepararse para iniciar la PRIMERA


JORNADA NACIONAL del Movimiento Estudiantil. Al haber logrado su propósito de
contactarse con las masas; la Universidad del Valle es allanada, la toma militar se produce.
El régimen que se encontraba en la defensiva, que no había sido capaz de aislar el
movimiento, que había tenido que reconocer por boca de Ocampo : "Este es un
movimiento hábil, científico y fríamente dirigido hasta el punto de haber logrado
neutralizar cualquier acción en contra". Produce una "solución" a la altura de esta
consideración. Por razones tácticas (de prevención) y porque los estudiantes se habían
"tomado sin bolillo" según rezaba el afiche de invitación, la Plaza de Caicedo, Pastrana,
Marino Rengifo y los militares procedieron a tomar tal resolución. La acción sobre la Plaza
de Caicedo y a la cual hizo referencia en su alocución el Presidente al declarar el estado de
sitio y al anunciar la dictadura política, constituyó una ofensiva audaz y ganó por la
brillantez de sus planteamientos a los sectores que acudieron a la exposición portátil, al
teatro y a los mítines en dicha toma.

Lo que pretendía castrar el movimiento, quitarle su base de operación, tenía que producir
una respuesta como la dada. Miles de estudiantes universitarios y del bachillerato
plantearon la recuperación de la Universidad. Lo que se ubicó como un “combate de a
piedra dar y a gases respirar”, produjo por parte de los militares, después de las primeras
escaramusas, y que aseguraban la perspectiva de la victoria, la respuesta a bala. Un muerto
inicial, estudiante-compañero Edgar Mejía, produjo la cólera como reacción. El repliegue
necesario entonces, enfatizó el ataque a las propiedades fundamentales del capital
monopolista: los bancos, bombas de gasolina, grandes almacenes. La consigna del respeto
al pequeño y mediano propietario en el contexto de una movilización de miles de personas
agitadas, radicalizadas y con una positiva sed de venganza se cumplió con relativo acierto.
Pero ya esta acción incluyó a otros sectores. El papel de detonador que en otras ocasiones
ha jugado el movimiento estudiantil en la práctica social en Cali volvió a darse. Arrastró
por un lado a sectores de lumpen-proletariado y por el otro activó la movilización de
sectores de barrios populares que agitaron la bandera de la protesta. La conmoción social
sacudió la tranquilidad burguesa. El plomo de los esbirros fue la respuesta. Varios muertos,
ocho reconocidos oficialmente y múltiples heridos a bala, piedra y garrote es el saldo
humano. Ya en la noche del 26 las dependencias del SENA habían sido también mili-
tarizadas. La verdadera dimensión de los acontecimientos, de la movilización y de la
bestialidad del régimen no han podido ser medidos. La respuesta del estado de sitio y de la
represión acelerada destacan la trascendencia que en la actual crisis socio-política jugó la
explosión de Cali.

La jornada universitaria nacional, programada se realizó, en casi todas las partes acordadas.
Algunas de ellas como Medellín y Bucaramanga alcanzaron la confrontación con la
represión. El paro propuesto para los días iniciales de marzo debe levantar entonces la
bandera contra el estado de sitio, la represión militar, la masacre al pueblo en Cali y la
solidaridad con el movimiento de la Universidad del Valle que involucra el retiro
inmediato de la fuerza pública de sus predios. Lucha ésta iniciada heroica y eficazmente
por los estudiantes y el pueblo de Cali.

El hecho de la renuncia de Ocampo Londoño, por otro lado, presenta para el movimiento el
aspecto de un triunfo político, al golpear al sector más reaccionario en el seno de la
educación superior y al mostrarles a las masas el producto de su propia lucha. No
desarticula el programa planteado sino por el contrario, acelera una perspectiva para sus
logros.

III. Marzo 3, lucha de masas, única política.

"El que se sienta cansado, enferma, incapaz de combatir, DEBE


DESAPARECER y no envenenar el ambiente que los demás respiran, con
quejas amargas, con exhalaciones pútridas, con teorías de desaliento y de
pesimismo".
(Federico Nietzsche).

Ante el estado de de sitio, ante el toque de queda, ante la invasión militar a la Universidad,
el movimiento estudiantil tenía una respuesta. Había sido lanzado fuera de su escenario
natural y su dirección trabajaba entonces en la clandestinidad. Una clandestinidad ante la
cual no se hallaba preparado pero que logra cuajar con relativo acierto. Los allanamientos y
la persecución policial, no impiden a la dirección experimentar sobre su nuevo escenario y
decidir su política. La única política era la que correspondía a la naturaleza de su
movimiento y actuara conforme a la situación que se vivía y se vive. Cuestionaba entonces
las tendencias que en sus polos se encontraban.

Como producto de la brutalidad y del terror, el pánico se había apoderado del ambiente. Se
da entonces la tendencia a la pasividad, a ocultarse, a ser para decirlo drásticamente,
consecuentes con la desbandada. La respuesta de la acción extremoizquierdista se había
apoderado de algunos sectores. Las posibilidades de la acción de masas, como táctica que
rompiera el estado de sitio y demostrara la existencia del movimiento y el planteamiento de
sus tareas era el imperativo. La acumulación de fuerzas para el movimiento estudiantil y su
propio reagrupamiento no se podía dar sino donde se ha logrado: en la calle, Ganando el
derecho, mediante la fuerza de su presencia, a la audiencia pública. El martes 2,
masivamente se ha roto el estado de sitio, con miles de pañuelos blancos, es el día de la
segunda jornada nacional. El primero, en asamblea pública se había logrado reagrupar
fuerzas y ubicar el debate de tal manera que canalizara las tendencias antes mencionadas.
La movilización, la práctica de las masas demuestra el acierto de interpretar el momento,
como de necesaria resistencia de masas organizada y colectivamente. El movimiento se
mantiene no en la desbandada como ha sido la intención de la reacción, sino en el
reagrupamiento y en un proceso acelerado de cualificación político-orgánica.

Si la voz de los fusiles es la cara real de la república de opereta, la movilización es la lógica


del momento. Este aspecto ha sido garantizado hasta ahora. Se ha impuesto relativamente
el derecho a la calle. El jueves 4, el movimiento hará su presencia en la Plaza, mediante la
consigna "la educación en la calle", "la universidad en la calle". Es el día de la huelga
nacional. La solidaridad en los días subsiguientes a la masacre del viernes 26, ha sido de
gran importancia, no sólo para impulsar el proceso en Cali, sino que ha establecido un
jalón hacia la organización nacional a partir de su Comité Nacional nombrado en el
encuentro de solidaridad. Hay un camino mostrado a las masas populares. La respuesta al
estado de sitio y a la dictadura política es la ruptura del estado de sitio y la organización
para la acción. Ninguna excusa justifica el no dar respuestas concretas a la avalancha
reaccionaria. Sólo la acción revolucionaria, en base a una política de masas mostrará el
camino a seguir en la actual crisis

***

NOTA: Estas líneas han sido elaboradas sobre la acción. Escribiendo en la coyuntura
sobre la coyuntura.

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