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Física II

Carrera de Geología

Ferromagnetismo,
Imanes, Polos
Magnéticos

2005
Física II (Geología). Texto de 2 Ferromagnetismo, Imanes, Polos Magnéticos
Clases, Prof. Diego E. García

Ferromagnetismo, Imanes, Polos Magnéticos, corresponde a Clases de Física II, para


la carrera de Geología, Profesor Diego E. García. F. de C. E. F. y N. de la U.N.C.
Editado entre 2004 y 2010
Física II (Geología). Texto de 3 Ferromagnetismo, Imanes, Polos Magnéticos
Clases, Prof. Diego E. García

Unidad 7: Propiedades magnéticas de las sustancias

Ferromagnetismo.

El dispositivo que se muestra en la figura 1 se conoce como “anillo de Rowland”. Consiste en un


arrollamiento, con forma de toroide circular, pero en vez de tener núcleo de aire, se tiene núcleo de
hierro.
Líneas
B de B

i
i

Figura 1

Por el arrollamiento se hace circular una cierta corriente eléctrica i , la cual produce un campo
magnético B en el interior del toroide. Las líneas de ese campo B, se han dibujado con líneas de puntos
en la figura. Como se ve, las mismas se cierran en el interior del toroide, ninguna línea se cierra por fuera
de él.
Analizaremos a continuación de qué forma se ve afectado el campo B en un punto del interior
del toroide, inicialmente en el medio “aire”, cuando el medio en el interior del toroide pasa a ser hierro en
vez de aire.
Para ello, comenzaremos el análisis suponiendo núcleo de aire, en cuyo caso el módulo del
campo B en un punto cualquiera dentro del arrollamiento valdria, de acuerdo con la fórmula del campo
en el interior de un toroide:
Ni
B0 0 (nucleo de aire) (1)
l
El subíndice “0” en el campo B se refiere a su valor en el aire; l “es la longitud media del
perimetro del toroide. Recordemos que 0 se denomina constante magnética y su valor es:

7 N Wb
0 4 10 2
y sus unidades también pueden expresarse como: 0
A Am
Ni amp
La expresión se mide en y se conoce con el nombre de “intensidad de campo H ” y
l m
también suele designarse como campo de exitacion magnetica . Se trata de un vector que tiene la misma
dirección y sentido del campo B ( en un medio isótropo) y cuyo módulo vale:
Ni
H (2)
l
Tal como surge de la (2), el valor que toma el módulo de H en el interior del arrollamiento
depende exclusivamente de la corriente “ i ” que circula por el arrollamiento, haya o no haya núcleo de
hierro en el toroide.
En resumen, cuando el toroide tiene núcleo de aire, los valores de los campos H y B , están
dados por las (1) y (2):
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Ni
H (2)
l
Ni
B0 0 (1)
l
Pasemos ahora a analizar lo que ocurre cuando, en el interior del toroide, se introduce un núcleo
de hierro: en este caso, la experiencia indica que el valor del campo B se incrementa muy notablemente
con respecto al campo B0 que habia en el aire.
Resulta entonces que, el valor del campo B dentro del anillo de Rowland puede calcularse
multiplicado el valor del campo B0 en el aire, por un cierto coeficiente adimensional que se conoce con el
nombre de permeabilidad magnética relativa, a la que designaremos con el símbolo rel ó r .
Escribimos entonces:
Ni
B r 0 (3)
l
Como se dijo, el aumento del campo B en el hierro, con respecto al aire es muy grande y el valor
de r puede ser del orden de 5000.
Ni
Si tenemos en cuenta que H l , la (3) queda:
l
B r 0H (3’)
Definimos ahora el coeficiente al que designaremos como permeabilidad magnética, al que
indicaremos con el símbolo como:

r 0

Weber N
Las unidades de son las mismas que las de 0 , es decir:
A.m A2
Teniendo en cuenta la (3’), resulta entonces finalmente, que el valor del campo B en el interior
del anillo de Rowland puede expresarse como:
B H (4)
Wb N
Las unidades de B resultan las ya conocidas 2
ó .
m Am
Vector magnetizacion
Ya hemos visto que el campo B0 en el aire se ve notablemente aumentado si el medio es hierro.
Existe un modelo sencillo, conocido como modelo de corrientes de Ampère, para explicar en forma
elemental este fenómeno.
El mismo consiste en imaginar que en el interior del material, los electrones producen corrientes
cerradas, con un efecto equivalente a la existencia de muy pequeñas espiras circulares, por cada una de
las cuales circula una corriente.
Si llamamos iA , “corrientes amperianas” a las mismas, resulta posible hacer un dibujo
representativo de este modelo, como se muestra en la figura 2.

m1

mi
m3
m2

Figura 2
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Podemos decir que cada una de esas corrientes, tiene asociado un vector en la dirección normal
al plano de la espira, al cual se le llama momento magnético y que se define como
mi iA dS n
donde dS es el área de la espira elemental y n es el versor normal a ella. Las unidades de esos
vectores momento magnético corresponden a A m 2 . Como se muestra en la figura, los mismos se
encuentran orientados al azar, cuando el material no está en presencia de un campo H.
Pero si ubicamos ese material en presencia de una campo exterior H ó B0 , por ejemplo en el
interior del toroide de la figura 1, ocurre que esos vectores momento magnético elementales tienden a
orientarse, en mayor o menor medida según el material que se trate, en la dirección del campo H
aplicado. Sucede aquí algo parecido a lo que ocurría en un dieléctrico, cuyos dipolos moléculares se
orientaban en presencia de un campo eléctrico exterior.
A partir del modelo que se acaba de describir, definimos un vector al que la damos el nombre de
vector magnetización, M ,de la siguiente forma:
La dirección y sentido de este vector es coincidente con la dirección y sentido del campo H en
cada punto ( en los materiales isótropos).
El valor del vector magnetización, es igual a la cantidad de momentos magnéticos elementales
orientados, por unidad de volumen.
En cuanto a las unidades del vector magnetización, corresponden a:
A m2 A
M M
m3 m
Las unidades de M , son las mismas que las del campo H .
Entonces, cuando los momentos magnéticos elementales están orientados, decimos que el
material está magnetizado. Las sustancias que tienen la propiedad de magnetizarse intensamente,
además del hierro, son el cobalto y el níquel.
A partir de las consideraciones anteriores, podemos plantear la siguiente expresión:

B 0 H 0 M (5)
en donde:
0 H : es el campo B0 existente en el aire;

0 M : es el aumento de dicho campo debido a la magnetización del hierro o del material que se trate.
La expresión (5) es la adecuada para definir el campo B en el interior de una sustancia. Se ha
escrito en forma escalar, porque tanto H como M , tienen la misma dirección.

Materiales ferromagneticos
Se llaman así aquellas sustancias que tienen un comportamiento magnético similar al del
hierro. En estos materiales, el primer término de la (5), es insignificante con respecto al segundo, porque
la magnetización es muy grande. Como ya se dijo, el cobalto, el níquel se comportan como materiales
ferromagnéticos. En estos materiales, con un pequeño valor de campo de excitación H se logran valores
muy altos de magnetización y por lo tanto de campo B resultante. También se comporta como
ferromagnético el gadolinio (Gd), que es un elemento químico de la serie del lantano, de masa atómica
157 y número atómico 64, que funde a 1200 ºC.
No obstante el comportamiento como ferromagnético del gadolinio, se observa a temperaturas
relativamente bajas por debajo de 20 ºC. Por encima de esa temperatura, pierde sus propiedades
ferromagnéticas.
Los monocristales de las sustancias ferromagnéticas, presentan marcadas propiedades de
anisotropía, es decir que se magnetizan en forma diferente, según la dirección. Sin embargo, los cuerpos
ferromagnéticos se comportan en forma isotrópica, debido a la orientación al azar de los cristales.

Materiales paramagneticos y diamagnéticos


Materiales paramagnéticos son aquellos en que la magnetizacion M es irrelevante, es decir que
en presencia de un campo H , prácticamente no se magnetizan. Podemos citar como ejemplo a los
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siguientes metales: el uranio, platino, aluminio, sodio.


Se llaman materiales diamagneticos aquelos en que la magnetización, al igual que en los
paramagnéticos, es también prácticamente inexistente, pero ese valor mínimo de magnetización tiene
sentido contrario al campo H , y en esto reside su única diferencia con los materiales paramagnéticos.
Podemos citar como ejemplo a los siguientes metales: bismuto, cobre, plomo, plata, mercurio.

Susceptibilidad magnetica
Se trata de una magnitud escalar y adimensional, que es indicativa de la aptitud o precisamente
su “susceptibilidad” para magnetizarse, en presencia de un cierto campo H .
La susceptibilidad magnética se simboliza con m y representa un concepto análogo al que se
definió como susceptibildad eléctrica e , al estudiar las propiedades de los dieléctricos.
La definimos mediante la siguiente expresión:
M
m
H
En el hierro, la susceptibilidad magnética m es del orden de 5000. En las para y dia-magneticas
3
“ m ” es insignificante, del orden de 10 .

Curva de magnetizacion del hierro


La curva de magnetización del hierro se obtiene en forma experimental, mediante un
anillo de Rowland, como el de la figura 1, en el cual el hierro del núcleo no ha sido magnetizado con
anterioridad..
Supongamos ahora que hacemos circular una corriente eléctrica por el arrollamiento y que
hacemos crecer gradualmente esa corriente, desde un cierto valor inicial cero, hasta un cierto valor final.
Para cada valor de corriente leído en el amperímetro, se puede calcular el valor del campo H que le
Ni
corresponde, con H .
l
A su vez, para cada valor de H , le corresponderá un valor de magnetización M y en
consecuencia un valor de B en el hierro. Esos valores de B , se pueden medir mediante un
procedimiento experimental que no analizaremos aquí. De esta forma, se puede obtener un conjunto de
pares ordenados, H , B , que los representamos como puntos en el diagrama que se muestra en la
figura 4. Uniendo esos puntos, se obtiene la curva de magnetización del hierro.

Weber
B
m2

1,6

Zona de
saturación

A
H
m
250 500 1000

Figura 3: curva de magnetización del hierro.


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La curva obtenida no es lineal: a partir de un cierto valor del campo H , que se llama campo de
saturación, se observa que aunque el campo H aumente mucho, prácticamente no se observa
crecimiento en el campo B : se dice que el hierro se ha saturado. Podemos intepretar esta situación con
el modelo de las corrientes amperianas, diciendo que los momentos magnéticos se orientan, por efecto
del campo H , hasta un cierto límite, por encima del cual, por más que se aumente H , la magnetización
M no aumenta.
En la figura 4 se ha dibujado la curva de magnetización para valores representativos un cierto tipo
A
de hierro, en el cual la saturación se produce para una campo H de 500 y el campo B de
m
saturación es de 1, 6 tesla.
Las curvas de magnetización de todos los materiales ferromagnéticos, son similares, aunque los
valores varían de uno a otro.

Magnetismo remanente, campo coercitivo, fenómeno de histéresis


Para trazar la curva de la figura 4, se ha partido de un hierro que se había magnetizado
con anterioridad. Supongamos ahora que, llegamos a un cierto valor de H con su correspondiente valor
A
de B en el núcleo, por ejemplo 500 y 1, 6 tesla. y que a partir de allí se comienza a recorrer el
m
camino inverso, es decir se comienza a disminuir el valor de H , hasta llegar a H 0 .
Cabe preguntarse con respecto a los valores de B que le corresponden a los valores de H en
el “camino de vuelta”: ¿serán los mismos que el camino de ida? Es decir, cuando llegamos a H 0 por
valores decrecientes: ¿será B 0 ? La respuesta es negativa, porque la experiencia indica que, una vez
que ha desaparecido el campo de excitación H , no obstante ello, el núcleo de material ferromagnético
permanece con un cierto valor de magnetización, o sea que permanece un cierto valor de campo
magnético en el hierro al que se lo designa como campo B remanente, que se lo indica como B reman. y
también se lo suele llamar magnetismo remanente.
Para lograr que desaparezca ese magnetismo remanente del núcleo, lo que debemos hacer es
producir un campo H en sentido contrario : ello se logra haciendo circular por el arrollamiento del anillo
de rowland, una corriente en sentido contrario a aquella que magnetizó originariamente el hierro. A ese
campo de excitación H necesario para lograr la desaparición del magnetismo remanente, se le da el
nombre de campo cohercitivo se indica con H c .
El hecho que se acaba de relatar relacionado con que, al desaparecer el campo H no
desaparece el campo B del núcleo de hierro, lo podemos interpretar diciendo que los valores que va
tomando B cuando se va achicando H , están atrasados. El término atraso quiere decir aquí que,
cuando H llega a cero, B todavía no se anula y que recién lo hace después que H se ha invertido
hasta H c , o sea con atraso. El nombre con que se designa el fenómeno de aparición de un magnetismo
remanente y de que sea necesario un campo coercitivo para anularlo, se llama: fenómeno de histéresis
magnética. La razón de ser del término histéresis, es que en griego la palabra histereyn significa atraso.

Temperatura de Curie
A una cierta temperatura, los materiales ferromagnéticos dejan de comportarse como tales, se
convierten en paramagnéticos. La temperatura a la cual se produce este cambio de las propiedades
magnéticas de las sustancias ferromagnéticas, se conoce como temperatura de Curie.
En la tabla siguiente se eindican las temperaturas de Curie para los materiales ferromagnéticos
más conocidos.
Material Temperatura de Curie
Hierro 770 ºC
Cobalto 1140 ºC
Níquel 358 º
Gadolinio 20 ºC
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Imán cilíndrico, modelo de polos magnéticos


Consideremos una barra cilíndrica larga de hierro, no magnetizada previamente, a la cual la
ubicamos en un arrollamiento en forma de solenoide: en primer término, hacemos circular una corriente
por el arrollamiento, aconsecuencia de lo cual se producirá una magnetización en el interior de la barra de
hierro; luego de ello, interrumpimos la corriente y por el fenómeno de magnetismo remanente, la barra
quedará magnetizada.
Esa barra magnetizada con magnetismo remanente, se denomina imán.
Si llamamos M a la magnetización remanente suponemos que la misma es uniforme dentro de
la barra cilíndrica, las líneas de campo del vector 0 M , serán como se muestra en la figura 4

Superficie Superficie
cerrada cerrada

Sur M Norte
0

Figura 4: Líneas de magnetización en el interior de un imán


Consideremos ahora, sendas superficies cerradas imaginarias, que rodean a cada uno de los dos
extremos del imán, por ejemplo, pueden ser de forma cilíndrica, con la base del cilindro perpendicular al
eje de la barra y que se muestran con líneas de puntos en la figura.
Retomemos ahora la (5), que expresa el campo B en el hierro:
B 0H 0M (5)
Sabemos, por definición, que las líneas de campo B son cerradas.

Ello significa que cada una de las líneas de B que entran a la superficie del extremo
derecho, a la que llamaremos S, también deberán salir de ella, es decir, no habrá ninguna línea que
entre y que no salga. Si ahora recordamos que el flujo de un campo de vectores (en este caso B ), a
través de una superficie cerrada, se corresponde con la diferencia entre la cantidad de líneas que entran
y las que salen, concluimos que el flujo del campo B a través de la superficie cerrada S, vale cero. Si
llamamos B a ese flujo resultante, podemos escribir entonces:
B 0 (6)
Pero, de acuerdo con la (5), es:
B 0H 0M
(7)

0H
y 0M
son los flujos resultantes a través de A de los vectores 0 H y 0 M respectivamente.
Entonces, si igualamos a cero el B dado por la (7), resulta:

0H 0M
0
o bien:
0H 0M
(8)

Recordemos ahora que el flujo de un vector a través de un área plana perpendicular a las líneas
de campo es el producto del módulo del vector, por el área. Además, si como ya dijimos, la superficie
cerrada tiene la forma cilíndrica de base A, podemos calcular el flujo que entra, o flujo entrante a la
superficie S, con la siguiente expresión:
0M 0 MA (9)
Física II (Geología). Texto de 9 Ferromagnetismo, Imanes, Polos Magnéticos
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El signo menos de (9) se debe a que el flujo de 0 M es entrante a la superficie S. Pero como
todas las líneas de 0 M entran no sale ninguna, porque no hay líneas de 0 M fuera del imán,
concluimos que la (9) representa el flujo resultante del vector 0 M , a través de la superficie cerrada S.
Debe aclararse al respecto, que el área lateral de la superficie S, dada por las generatrices del cilindro
que es dicha superficie, no es atravesada por líneas de campo.
Ahora bien, volvamos a la expresión (8): de acuerdo con ella, el flujo del campo 0 M , es de
igual valor, pero de signo contrario al flujo del vector 0 H . Este hecho, nos permite expresar la siguiente
conclusión:
De una superficie cerrada S, que rodea al extremo derecho de un imán cilíndrico, salen líneas de
campo 0 H.
En cambio, si consideramos la superficie cerrada que rodea al extremo izquierdo del imán
siguiendo un razonamiento análogo, podemos afirmar que, a dicha superficie entran líneas de campo del
vector 0 H . Esta situación se representa en la figura 6.
Podemos decir que el extremo, en este caso, derecho del imán, es una fuente de líneas de
campo 0 H . El término fuente es adecuado, porque significa que de la misma salen líneas de campo
0 H.
Designamos con el término polo norte a la fuente de líneas de campo 0 H en un imán cilíndrico.
En el extremo izquierdo, en cambio, entran (y no salen), líneas de 0 H : por esta razón, decimos
que el recinto encerrado por la superficie (en este caso), de la izquierda, es un sumidero de líneas de
campo. El término sumidero, se refiere a que las líneas entran, pero no salen.
Designamos con el término polo sur al sumidero de líneas de campo 0 H en un imán cilíndrico.

0 H
0 H

S N

0 H
0 H

Figura 6: líneas de campo 0 H en un imán cilíndrico

Este modelo de polos magnéticos, presenta una analogía formal con las líneas de campo
eléctrico de un dipolo, formado por dos cargas eléctricas puntuales de signos opuestos. En este modelo
de polos magnéticos, tenemos en los extremos del imán, sendas “cargas magnéticas”, o “masas
magnéticas” que son el polo norte y el polo sur.
Pero en esta analogía con las cargas eléctricas, debemos establecer una diferencia muy
importante y que es la siguiente:
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Las cargas eléctricas pueden existir solas o aisladas, en cambio, no se puede aislar un polo norte
o un polo sur: si cortamos en dos partes el imán, en cada mitad aparecerá un polo norte un polo sur en
sendos extremos
Decimos que en el polo norte existe una masa magnética o carga magnética, que la indicaremos
con mmag y a la cual le asignamos un valor coincidente con el valor del flujo entrante 0H
del vector

0 H . Escribimos entonces:
mmag 0H
(10)
En la (10), hemos considerado el valor absoluto del flujo.
Las unidades de la masa magnética que se ubica en cada uno de los polos, son las mismas que
las del flujo 0 H , o sea las unidades del valor escalar 0 H , por un área:
N A 2
mmag m
A2 m
A N
donde: H y 0
m A2
Entonces:
Nm
mmag
A
En cualquier punto fuera del imán, el campo es 0 H B 0 , donde B 0 es el vector campo
magnético en el aire. Al igual que las cargas eléctricas, los polos magnéticos de igual signo se repelen,
los de distinto signo, se atraen.

Fuerza sobre una masa magnética (o polo) puntual en un campo H preexistente

Si ubicamos una masa magnética definida por la (10), que la suponemos puntual y ubicada en un
campo magnético preexistente H , sobre ella aparecerá una fuerza cuyo módulo será:
F mmag H (11)
Las unidades de la (11) son:
Nm A
N
A m
Con la (11) podría calcularse, por ejemplo, la fuerza que ejerce el campo magnético
terrestre, sobre cada polo de la aguja imanada de una brújula, como se muestra en la figura 7.
mmag y mmag , indican el valor de la masa magnética que corresponde a cada uno de los polos
norte sur
que están en sendos extremos de la aguja imanada .

mmag N
norte
F mmag H
norte

Polo magnético
Aguja imantada
Sur terrestre,
Norte geográfico
F mmag H Líneas de campo magnético terrestre H terr , su
sur
sentido es hacia el polo sur magnético
mmag
sur
S

Figura 7
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Las fuerzas que actún en cada extremo de la aguja se expresan, de acuerdo con la (11),
como F mmag H ó F mmag H , en donde sus valores absolutos son iguales, por serlo los
norte sur

valores de las masas magnéticas mmag y mmag de los extremos de la aguja.


norte sur

Ley de Coulomb para la interacción entre polos magnéticos puntuales


En vez de calcular la masa magnética con el flujo del vector 0 H , tal como se lo ha
hecho en la (10), es también posible definirla a partir del flujo del vector H . Esta forma de definir la masa
magnética, no introduce ningún cambio conceptual, ya que una de otra difieren sólo en la constante 0 .
Si, para diferenciarla de la anterior, llamamos m ' a la masa magnética definida de esta forma, será:
,
mmag H (11)
Sus unidades serán:
, A 2
mmag m
m
'
mmag Am
Si se quisiera calcular el módulo de la fuerza que aparece sobre una masa magnética
,
m mag definida de esta forma, ubicada en un campo H preexistente, en vez de la (11), debiera usarse la:

,
F 0 mmag H (13)
Con esta definición alternativa de masa magnética, se puede calcular el módulo de la
fuerza de interacción que aparecerá entre 2 masas magnéticas o “polos”, supuestamente puntuales,
mediante la siguiente expresión:
0
m1, m2,
F (14)
4 r2
Por brevedad, se ha suprimido el subíndice “mag”. Las unidades de la (14) son:

2
N Am
N
A2 m 2
La (14) presenta una analogía formal con la ley de Coulomb y podría designarse como ley
de Coulomb en la interacción entre dos masas o polos magnéticos puntuales.

Campo magnético terrestre

La tierra está rodeada por un campo magnético, conocido como campo magnético
terrestre. Se origina por el movimiento de materiales conductores en el interior de la tierra e influye en él
la presencia de corrientes eléctricas en las capas altas de la atmósfera. En las inmediaciones del círculo
polar ártico, se encuentra el polo magnético sur, en tanto que el polo magnético norte se encuentra en el
océano antártico, al sur de Australia, aunque su posición no es estrictamente fija.
En el polo magnético sur, las líneas de campo H son verticales y son entrantes: en cambio, en
el polo magnético norte, las líneas de campo magnético terrestre, también son verticales, pero, son
salientes. En ninguno de estos 2 casos, el campo no tiene componente horizontal.
Se llama eje magnético de la tierra, a la recta imaginaria que pasa por ambos polos magnéticos.
Se llama ecuador magnético a la mayor circunferencia que está contenida en un plano
perpendicular al eje magnético. El ecuador magnético no coincide con la línea del ecuador geográfico,
llegando a alejarse hasta unos 15º de la misma. En el ecuador magnético, la dirección del vector campo
magnético terrestre es horizontal, es decir, no hay allí componente vertical del campo.
La intensidad del campo magnético H en el ecuador magnético es de aproximadamente
0,34 Oersted . El Oersted es la unidad en que se mide el campo H en el sistema cgs. Como en este
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sistema 0 vale 1 (adimensional), en el aire, es 1 oersted es igual a 1 gauss. Entonces el campo

magnético terrestre, expresado como B , también vale, en el ecuador B terr 0,34 gauss .
El gauss corresponde a las unidades en que se mide el campo B en el sistema cgs y la
equivalencia con las correspondientes unidades del MKS es: 1 tesla 104 gauss .
Cerca de los polos, el campo B terr , vale B terr 0, 66 gauss .
Se llama anomalía magnética a una variación notable del campo magnético terrestre, como
ocurre en la región de Kursk, en Rusia, próximo a la frontera con Ucrania, en donde el campo llega a 2
gauss.
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