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IPM Profesorado de Educación Física

Taller de Lectura, Escritura y Oralidad

Guía de estudio y trabajos prácticos

Profesor Javier Gómez


Año
2011
Guía 1 Leer y escribir en el ámbito de la educación superior

En la educación superior los alumnos deberán manejar una serie de competencias


comunicativas fundamentales para la apropiación de los conocimientos propuestos por cada
área curricular, para tal fin los estudiantes deben leer bibliografía preparada por los docentes,
elaborar apuntes, resúmenes, notas, responder guías, elaborar proyectos, monografías, ensayos,
reseñas, entre otros escritos.
Dado que en el ámbito superior la adquisición del conocimiento se demuestra a partir de
un correcto dominio de los textos propios del mundo académico, el alumno debe ser un receptor
y un productor competente de este tipo de discurso. Los textos expositivos poseen un lenguaje
específico, una construcción compleja, la presencia de definiciones que ponen en juego los
saberes previos del alumno.
Los géneros discursivos del mundo académico suponen una serie de restricciones y crean
un conjunto de reglas necesarias para la construcción del saber científico que se oponen a la
espontaneidad y a la fluidez propia de la lengua oral. El alumno de estudios superiores debe
estar preparado para afrontar sus propias limitaciones y a partir de ellas poder construir un
discurso critico propio.

Consignas:
1. Leer los siguientes textos que se refieren a la adquisición del conocimiento y a los textos
expositivos.
2. Elegir dos frases que sean significativas para el abordaje de la lectura de textos
académicos. fundamentar
3. Escribir un titulo para cada uno de los artículos.
4. Escribir un breve artículo sobre el desafío que implica iniciar estudios superiores

Texto 1

Este tipo de textos, expositivo-explicativos, se organizan a partir de las relaciones lógicas


que se establecen entre las unidades textuales que lo constituyen, estructurándose con una
forma que va de una premisa o problemática inicial, pasa por un desarrollo y va a una
conclusión final. Las informaciones siguen una cadena antecedente-consecuente. No
mantienen relación inmediata con el contexto de producción sino con una serie de elementos
relacionados entre si que el lector debe representarse en una estructura lógica.
Aznar, E., Cross. Y Quintana 1999) Coherencia textual y lectura, Barcelona, ICE

Texto 2
Apropiarse del conocimiento en cualquiera de las áreas que componen el currículo
educativo supone apropiarse del discurso en se expresa cada una de esas parcelas del saber.
Esas formas de expresión, diversas y complejas, han ido tejiéndose a lo largo de la historia y
están impregnadas de ese transcurrir o discurrir por el tiempo y por las diferentes visiones
del mundo, del pensamiento que las ha sustentado y a las que, a la vez, constituyen a partir
de sus especiales maneras de decir. Esas formas de expresar la historia, las matemáticas, las
ciencias experimentales, la literatura o la filosofía, son peculiares, especificas.
Pocas veces nos detenemos a observar al discurso como algo que no es un simple
vehículo transparente que permite ver a su través como si no existiera. El papel fundamental
que para entrar en cada uno de esos mundos desempeña el uso lingüístico es, muchas veces,
obviado. Las habilidades discursivas que exigen la comprensión y la producción de los textos
característicos de cada una de las materias que componen el currículo es algo que con
demasiada frecuencia no se toma en consideración, cuando tendría que formar parte del
propio proceso de enseñanza y aprendizaje de cada área. Para dar cuenta de un
experimento, para resolver un problema de matemáticas, para comentar un texto filosófico,
para exponer las causas de un determinado hecho histórico, etc., es necesario poseer los
recursos lingüístico-textuales, que permitan asegurar el éxito del trabajo.
Miret Bernal, Ines y Amparo Tuson Valls 1996) ´La lengua como instrumento de aprendizaje
´, en Textos de didáctica de la lengua y de la literatura, N 8, Barcelona, Grao.

Texto 3
Leer es un proceso de interacción entre lector y texto, proceso mediante el cual el primero
intenta satisfacer, obtener información sobre los objetivos que guían su lectura. Esta
afirmación implica la presencia de un lector activo que procesa y examina el texto. Implica,
además, que siempre debe existir un objetivo que guie la lectura. Siempre leemos para algo,
con un fin. El abanico de finalidades es amplio y variado, evadirse, buscar información, seguir
instrucciones, informarse, aplicar la información para realizar un trabajo, etc.
Para leer necesitamos manejar con soltura las habilidades de decodificación y aportar al
texto nuestros objetivos, ideas y experiencias previas, necesitamos implicarnos en un
proceso de predicción e inferencia continua, que se apoya en la información que aporta el
texto y en nuestro propio bagaje, y en un proceso que permita encontrar evidencia o
rechazar las predicciones e inferencias de que se hablaba.

Sole, Isabel 2002 El reto de la lectura, en estrategias de lectura, Barcelona, Grao

Para reflexionar en forma grupal:

LA AVENTURA DEL CONOCIMIENTO Y EL APRENDIZAJE


Por Alejandro Dolina

La velocidad nos ayuda a apurar los tragos amargos. Pero esto no significa que siempre
debamos ser veloces. En los buenos momentos de la vida, más bien conviene demorarse. Tal
parece que para vivir sabiamente hay que tener más de una velocidad. Premura en lo que
molesta, lentitud en lo que es placentero. Entre las cosas que parecen acelerarse figura
-inexplicablemente- la adquisición de conocimientos.
En los últimos años han aparecido en nuestro medio numerosos institutos y establecimientos
que enseñan cosas con toda rapidez: "....haga el bachillerato en 6 meses, vuélvase perito
mercantil en 3 semanas, avívese de golpe en 5 días, alcance el doctorado en 10 minutos....."

Quizá se supriman algunos... detalles. ¿Qué detalles? Desconfío. Yo he pasado 7 años de mi


vida en la escuela primaria, 5 en el colegio secundario y 4 en la universidad. Y a pesar de que
he malgastado algunas horas tirando tinteros al aire, fumando en el baño o haciendo rimas
chuscas.
Y no creo que ningún genio recorra en un ratito el camino que a mí me llevó decenios.
¿Por qué florecen estos apurones educativos? Quizá por el ansia de recompensa inmediata
que tiene la gente. A nadie le gusta esperar. Todos quieren cosechar, aún sin haber
sembrado. Es una lamentable característica que viene acompañando a los hombres desde
hace milenios.
A causa de este sentimiento algunos se hacen chorros. Otros abandonan la ingeniería para
levantar quiniela. Otros se resisten a leer las historietas que continúan en el próximo número.
Por esta misma ansiedad es que tienen éxito las novelas cortas, los teleteatros unitarios, los
copetines al paso, las "señoritas livianas", los concursos de cantores, los libros condensados,
las máquinas de tejer, las licuadoras y en general, todo aquello que no ahorre la espera y nos
permita recibir mucho entregando poco.
Todos nosotros habremos conocido un número prodigioso de sujetos que quisieran ser
ingenieros, pero no soportan las funciones trigonométricas. O que se mueren por tocar la
guitarra, pero no están dispuestos a perder un segundo en el solfeo. O que le hubiera
encantado leer a Dostoievsky, pero les parecen muy extensos sus libros.
Lo que en realidad quieren estos sujetos es disfrutar de los beneficios de cada una de esas
actividades, sin pagar nada a cambio. Quieren el prestigio y la guita que ganan los ingenieros,
sin pasar por las fatigas del estudio. Quieren sorprender a sus amigos tocando "Desde el
Alma" sin conocer la escala de si menor. Quieren darse aires de conocedores de literatura
rusa sin haber abierto jamás un libro.
Tales actitudes no deben ser alentadas, me parece. Y sin embargo eso es precisamente lo
que hacen los anuncios de los cursos acelerados de cualquier cosa. Emprenda una carrera
corta. Triunfe rápidamente. Gane mucho "vento" sin esfuerzo ninguno.
No me gusta. No me gusta que se fomente el deseo de obtener mucho entregando poco. Y
menos me gusta que se deje caer la idea de que el conocimiento es algo tedioso y poco
deseable. ¡No señores: aprender es hermoso y lleva la vida entera! (…)

Guía N2 texto y contexto

Se llama paratextos a aquellos elementos que sin formar parte constitutiva del cuerpo
propiamente dicho del texto aportan indicios, orientan su comprensión. El concepto es amplio
y abarca desde elementos que tienen que ver con el diseño como colores, tipos de letras,
ilustraciones y con ordenadores como índices, prólogos, epígrafes, títulos, portadas, solapas,
bibliografía, etc.

El paratexto es un elemento que pone en juego las expectativas del lector, es un primer
acercamiento al texto que puede cumplir o no con las mismas. Los paratextos son auxiliares
en la lectura que preparan al lector para aquello que vendrá. En la actualidad juegan un papel
muy importante ya que intentan seducir a un lector que va demasiado rápido de texto en
texto sin detenerse demasiado en profundizar las ideas del mismo.

Consignas

1. Escribir los paratextos mas adecuados para estos textos:

• Pique la cebolla. Agregue la carne. Rehogue el conjunto y condimente. Agregue


aceitunas. Rellene los discos de masa y lleve al horno.

• Antecedentes laborales. De 2008 a 2010 trabajo en Libermet s.r.l

• Millones de turistas invaden la Costa Atlántica. Los precios no mantienen una gran
variación con respecto a temporadas anteriores.

• Antagonismos. Este medicamento debe ser administrado con precaución en aquellos


pacientes que presenten sensibilidad a alguno de los componentes.
2. Escribir los posibles paratextos para alguno de estos títulos. Manual de campamento,
guía de primeros auxilios, reglamento del ajedrez, Antología de cuentos infantiles, Guía
T.

3. Reflexiona acerca de los paratextos propios de los textos académicos. Menciona


algunos y explica su utilidad.

Guía Nº 3. Texto y Enunciado. La subjetividad en el lenguaje.

Se llama enunciador a aquel que produce un texto desde algún lugar específico, desde
su saber o desde determinada experiencia. La formalidad propia de los textos académicos
produce un ocultamiento de las marcas propias de la enunciación y de la oralidad, aunque
esta siempre está presente. Un texto expositivo construye su discurso intentando la
objetividad, para ello usa una terminología específica, cita sus fuentes, respeta las normas de
escritura, muestra conocimiento del tema.
Otro tipo de textos, propios de la argumentación o del ámbito de la opinión, poseen una
marcada subjetividad que se evidencia a partir del uso de adjetivos calificativos, de
pronombres personales y demostrativos, de adverbios temporales y espaciales, en tanto que
ciertos verbos expresan ciertas actitudes frente a un tema como por ejemplo. Creer, opinar,
dudar, sospechar, sostener, intuir, etc.

-Lee los siguientes textos:

Rodolfo Walsh por Rodólf Fowólsh

Me llaman Rodolfo Walsh. Cuando chico, ese nombre no terminaba de convencerme:


pensaba que no me serviría, por ejemplo, para ser presidente de la República. Mucho después
descubrí que podía pronunciarse como dos yambos aliterados (1), y eso me gustó.

Nací en Choele-Choel, que quiere decir "corazón de palo". Me ha sido reprochado por
varias mujeres.

Mi vocación se despertó tempranamente: a los ocho años decidí ser aviador. Por una de
esas confusiones, el que la cumplió fue mi hermano. Supongo que a partir de ahí me quedé
sin vocación y tuve muchos oficios. El más espectacular: limpiador de ventanas; el más
humillante: lavacopas; el más burgués: comerciante de antigüedades; el más secreto:
criptógrafo en Cuba.
Mi padre era mayordomo de estancia, un transculturado al que los peones mestizos de Río
Negro llamaban Huelche. Tuvo tercer grado, pero sabía bolear avestruces y dejar el molde en
la cancha de bochas. Su coraje físico sigue pareciéndome casi mitológico. Hablaba con los
caballos. Uno lo mató, en 1947, y otro nos dejó como única herencia. Este se llamaba "Mar
Negro", y marcaba dieciséis segundos en los trescientos: mucho caballo para ese campo. Pero
esta ya era zona de la desgracia, provincia de Buenos Aires.
Tengo una hermana monja y dos hijas laicas.
Mi madre vivió en medio de cosas que no amaba: el campo, la pobreza. En su implacable
resistencia resultó más valerosa, y durable, que mi padre. El mayor disgusto que le causo es
no haber terminado mi profesorado en letras.
Mis primeros esfuerzos literarios fueron satíricos, cuartetas alusivas a maestros y celadores
de sexto grado. Cuando a los diecisiete años dejé el Nacional y entré en una oficina, la
inspiración seguía viva, pero había perfeccionado el método: ahora armaba sigilosos
acrósticos.
La idea más perturbadora de mi adolescencia fue ese chiste idiota de Rilke: Si usted piensa
que puede vivir sin escribir, no debe escribir. Mi noviazgo con una muchacha que escribía
incomparablemente mejor que yo me redujo a silencio durante cinco años. Mi primer libro
fueron tres novelas cortas en el género policial, del que hoy abomino. Lo hice en un mes, sin
pensar en la literatura, aunque sí en la diversión y el dinero. Me callé durante cuatro años
más, porque no me consideraba a la altura de nadie. Operación masacre cambió mi vida.
Haciéndola, comprendí que, además de mis perplejidades íntimas, existía un amenazante
mundo exterior. Me fui a Cuba, asistí al nacimiento de un orden nuevo, contradictorio, a veces
épico, a veces fastidioso. Volví, completé un nuevo silencio de seis años. En 1964 decidí que
de todos mis oficios terrestres, el violento oficio de escritor era el que más me convenía. Pero
no veo en eso una determinación mística. En realidad, he sido traído y llevado por los
tiempos; podría haber sido cualquier cosa, aun ahora hay momentos en que me siento
disponible para cualquier aventura, para empezar de nuevo, como tantas veces.
En la hipótesis de seguir escribiendo, lo que más necesito es una cuota generosa de
tiempo. Soy lento, he tardado quince años en pasar del mero nacionalismo a la izquierda;
lustros en aprender a armar un cuento, a sentir la respiración de un texto; sé que me falta
mucho para poder decir instantáneamente lo que quiero, en su forma óptima; pienso que la
literatura es, entre otras cosas, un avance laborioso a través de la propia estupidez.

(1) Unidad métrica compuesta por una sílaba breve (sin acento) y una larga (acentuada).
Así, habría que leer Rodólf Fowólsh.

Rodolfo J. Walsh nació en 1927 en la localidad de Choele-Choel, provincia de Río Negro. Fue
escritor, periodista, traductor y asesor de colecciones. Su obra recorre especialmente el
género policial, periodístico y testimonial, con celebradas obras como Operación
Masacre y Quién mató a Rosendo. Walsh es para muchos el paradigmático producto de una
tensión resuelta: la establecida entre el intelectual y la política, la ficción y el compromiso
revolucionario. El 25 de marzo de 1977 un pelotón especializado emboscó a Rodolfo Walsh en
calles de Buenos Aires con el objetivo de aprehenderlo vivo. Walsh, militante revolucionario,
se resistió, hirió y fue herido a su vez de muerte. Su cuerpo nunca apareció. El día anterior
había escrito lo que sería su última palabra pública: la Carta Abierta a la Junta Militar.
Fuente: http://www.literatura.org/Walsh/Walsh.html

Consignas

1. Explique desde que lugar se ubica el enunciador en cada uno de los textos

2. Identifique el género discursivo al que pertenece cada texto


3. Reconoce las marcas propias de la subjetividad en cada uno de los textos. Ver teoría

4. Escribí sobre alguna persona usando un mayor y un menor grado de subjetividad –usar
como modelo los textos leídos-

Guía N 4. Tipos textuales

La palabra texto deriva del latín textum y etimológicamente significa tejido. Desde esta
perspectiva un texto es un entramado de voces-polifonía-, de palabras que se relacionan
entre si a partir de una coherencia interna dada por una adecuada articulación de formas
lingüísticas y de reglas compositivas. Un texto es eficaz cuando logra cumplir su objetivo con
la mayor economía posible. Desde un punto de vista estructural los textos poseen una trama
compositiva dominante, esta surge a partir de una serie de regularidades dadas por el uso y
la tradición de determinados textos. Por ej. se supone que cuando leemos un cuento nos
preparamos a que un protagonista realice una serie de hechos. Cuando escribimos un
mensaje de texto podemos abreviar y modificar las palabras. En función de su organización
los textos pueden tener alguna de las siguientes tramas textuales

• Narrativa: es aquella que relata una serie de sucesos relacionados entre sí


temporalmente o por medio de relaciones de causa – consecuencia. Ej.: la crónica
periodística, los cuentos.

• Descriptiva: es la que da características de objetos, lugares, situaciones, hechos,


fenómenos, etc.

• Conversacional: es aquella que se estructura a través del diálogo, por ejemplo las
entrevistas, las obras teatrales, historietas.

• Expositiva: es aquella que presenta datos, los muestra. Por ejemplo el pronóstico del
tiempo.

• Explicativa: es la que profundiza un tema o aspecto, antes mencionado. Menciona sus


causas, consecuencias; amplía datos e información.

• Argumentativa: es la que incluye fundamentos, defendiendo puntos de vista y posturas.


Por ejemplo discursos, publicidades.

Consigna:

1. Indicar trama dominante, género, marcar los paratextos y ámbito de circulación social del
texto

Texto 1
Mejora paulatinamente el tiempo sobre la región central del país, aunque se mantendrá el
cielo con nubosidad variable y escasa amplitud térmica, mientras que para la región
patagónica sigue el tiempo bueno y temperaturas elevadas.

Texto 2

TERCER ACTO.

Despacho Del Presidente de la República. Entra Joaquín, siempre vestido con harapos, pero limpio y
afeitado, y saluda sonriente al Presidente.

J.: Señor Presidente, ahora ya no es el abogado famoso, sino el representante del pueblo. ¿Es
coherente que usted se vista de primera cuando representa a un pueblo que en el sesenta
por ciento viste como yo?

P.: Joaquín, yo debo vestir bien, soy el Presidente de la República. ¿Usted cree que quedaría
bien que venga un embajador a presentar sus credenciales y yo lo reciba con un traje todo
raído?

J.: Sí.

P.:¿Cómo?

J.: Sí, porque sería coherente.

P.: (Atónito). ¿Y el protocolo? ¿Cómo quedaría el país cuando salga en los diarios como un
espantapájaros?

J.: Quedaría como un héroe, como un Presidente que ama a su pueblo y se identifica con él.
Cuando Gandhi fue a Inglaterra para la reunión denominada de la mesa redonda, para
negociar la libertad de la India, fue vestido como el más humilde de sus compatriotas. Y ¿sabe
lo que logró Gandhi? Que la India se independizase de la que, en ese momento, era la mayor
potencia mundial.

P.: Sí, pero no fue por su vestimenta.

J.: De acuerdo, pero sí tuvo influencia su coherencia. En la India los ciudadanos lo trataban
como a un santo. Sus ayunos eran más importantes que cualquier otra noticia. Por otro lado,
en el campo de batalla los soldados se sienten unidos a los que llevan su mismo uniforme.

P.: ¡Joaquín, Joaquín!, usted es demasiado drástico. Las cosas no son tan fáciles.

J.: Señor Presidente, todo es más fácil cuando se es coherente.

De: LA COHERENCIA NECESARIA (Diálogos de un ciudadano con su presidente) GUILLERMO F. PARODI

Texto 3

Del río a la orilla

Se hace un círculo en el suelo para que los niños puedan ponerse en su borde sin chocarse
con ningún otro. El interior del círculo es el río, el exterior la orilla.
Los niños pueden empezar dentro o fuera, pero todos en el mismo sitio. El monitor dirá a la
orilla y todos los niños deben saltar fuera del río, o sea, fuera del círculo. Si el monitor dice al
río, deben meterse todos en el círculo.

El monitor puede decir instrucciones para tratar de despistar a los niños. El que se equivoque
o tarde en reaccionar se elimina.

De: http://www.cosasinfantiles.com/d-juegos-naturaleza.html

Texto 4

Tortugas y cronopios

Ahora pasa que las tortugas son grandes admiradoras de la velocidad, como es natural. Las
esperanzas lo saben, y no se preocupan. Los famas lo saben, y se burlan. Los cronopios lo
saben, y cada vez que se encuentran una tortuga, sacan la caja de tizas de colores y sobre la
redonda pizarra de la tortuga dibujan una golondrina. (Julio Cortázar)

Texto 5

La idea de que las imágenes reemplazaran a las palabras es vieja. Hace veinte años se
pensaba que iba a desaparecer la civilización alfabética y entraríamos en la virtual. Sin
embargo hoy con la computadora volvemos a una civilización alfabética. Creo que el
problema es más complejo. Podríamos tener un futuro con una clase dirigente que maneja la
computadora o internet. Una clase media que usa la computadora de un modo pasivo y un
proletariado que mira la tv.

Tengo que repetir siempre lo mismo. Vayan a las librerías y vean cuanta gente hay. Este es el
siglo con más libros en la historia de la humanidad. Hace 200 años el que leía libros era tan
raro como hoy un ebanista. En general tenemos un proporción baja de lectores respecto a la
población en general, pero sin duda hay muchos mas lectores que hace 30 años.

Eco, Humberto la televisión no es enemiga de los libros, Bs. As., Clarín, 30-10-1998

Guía Nº 5. Revisión de todos los conceptos vistos

La ñ también es gente. María Elena Walsh

La culpa es de los gnomos que nunca quisieron ser ñomos. Culpa tienen la nieve, la niebla, los nietos,
los atenienses, el unicornio. Todos evasores de la eñe. ¡Señoras, señores, compañeros, amados niños!
¡No nos dejemos arrebatar la eñe! Ya nos han birlado los signos de apertura de interrogación y
admiración. Ya nos redujeron hasta la apócope. Ya nos han traducido el pochoclo. Y como éramos
pocos, la abuelita informática ha parido un monstruoso # en lugar de la eñe con su gracioso peluquín,
el ~. ¿Quieren decirme qué haremos con nuestros sueños? ¿Entre la fauna en peligro de extinción
figuran los ñandúes y los ñacurutuces? ¿En los pagos de Añatuya cómo cantarán Añoranzas? ¿A qué
pobre barrigón fajaremos al ñudo? ¿Qué será del Año Nuevo, el tiempo de ñaupa, aquel tapado de
armiño y la ñata contra el vidrio? ¿Y cómo graficaremos la más dulce consonante de la lengua guaraní?
"La ortografía también es gente", escribió Fernando Pessoa. Y, como la gente, sufre variadas
discriminaciones. Hay signos y signos, unos blancos, altos y de ojos azules, como la W o la K. Otros,
pobres morochos de Hispanoamérica, como la letrita segunda, la eñe, jamás considerada por los
monóculos británicos, que está en peligro de pasar al bando de los desocupados después de rendir
tantos servicios y no ser precisamente una letra ñoqui. A barrerla, a borrarla, a sustituirla, dicen los
perezosos manipuladores de las maquinitas, sólo porque la ñ da un poco de trabajo. Pereza ideológica,
hubiéramos dicho en la década del setenta. Una letra española es un defecto más de los hispanos, esa
raza impura formateada y escaneada también por pereza y comodidad. Nada de hondureños,
salvadoreños, caribeños, panameños. ¡Impronunciables nativos! Sigamos siendo dueños de algo que
nos pertenece, esa letra con caperuza, algo muy pequeño, pero menos ñoño de lo que parece. Algo
importante, algo gente, algo alma y lengua, algo no descartable, algo propio y compartido porque así
nos canta. No faltará quien ofrezca soluciones absurdas: escribir con nuestro inolvidable César Bruto,
compinche del maestro Oski. Ninios, suenios, otonio. Fantasía inexplicable que ya fue y preferimos no
reanudar, salvo que la Madre Patria retroceda y vuelva a llamarse Hispania. La supervivencia de esta
letra nos atañe, sin distinción de sexos, credos ni programas de software. Luchemos para no añadir
más leña a la hoguera dónde se debate nuestro discriminado signo. Letra es sinónimo de carácter.
¡Avisémoslo al mundo entero por Internet! La eñe también es gente.

1. Reconoce las marcas propias de la subjetividad.

2. Reconoce marcas propias del lenguaje oral.

3. Enunciar el sentido global del texto.

4. Reconoce el contexto propio de circulación de este texto y a qué polémica responde.

Lee el siguiente texto:

Tribuna abierta: ¿El final de la cultura del libro impreso?

Para saber cómo vamos a terminar, hace falta estar al tanto de lo que sucede hoy en los Estados
Unidos. Dos o tres años después, nos pasará lo mismo a nosotros. Días atrás, The Washington Post
analizaba las bondades de la "Book Builder", máquina que inventó un tal Harvey Ross y que permitiría
imprimir, encuadernar y entregar un libro en cualquier idioma en sólo cinco minutos. Ross y su
máquina apuestan al fin de las librerías. Su idea es más bien la de quioscos donde un extraño híbrido
de encuadernador y diariero será quien venda los libros. Contempla, en definitiva, un retorno al pasado
en el que el impresor volverá a ser librero. Me parece que algo de razón tiene. Si hay algo que no se
dice de esta bendita economía electrónica, es que supone una combinación de avance y retroceso, que
implica también una paradójica vuelta al pasado. En el debate que se publicó en el último número de la
revista Surplus, tres especialistas italianos coincidieron en que Internet disuelve los vínculos laborales
tradicionales, crea trabajos solitarios y nichos comunitarios. Esto es lo más interesante de todo lo que
está ocurriendo. La desarticulación de la economía tradicional dará lugar a una comunidad
fragmentada, y uno de esos fragmentos será el de los amantes de libros impresos.

La industria anglófona del libro apunta en realidad a cosas muy diversas. The Random House ya
está digitalizando sus títulos, mientras que Simon & Schuster y McGraw-Hill se disponen a hacerlo. La
Encyclopaedia Britannica eliminó el plantel de 2.300 personas que conformaba su famosa estructura de
venta domiciliaria. Las versiones electrónicas en CD y el Web site ya se convirtieron en su principal
fuente de ingresos. Por otra parte, en marzo, 400.000 lectores bajaron a su computadora Riding the
Bullet, la última novela de Stephen King.
Avances y retrocesos

Parece un hecho consumado: “un mundo feliz para todos gracias a Internet”. Sin embargo, sería
imprudente descuidar un aspecto de la evolución general. El disco y la amplificación transformaron la
música; la pólvora hizo lo propio con la guerra; pero Internet cambiará de manera mucho más
radical la naturaleza del libro. El libro del futuro sólo seguirá siendo igual para unos pocos
extravagantes. Para los demás, se transformará en otra cosa, que tendrá aspectos regresivos. Se
leerán envíos y rebotes con imágenes virtuales, sonido u otras experiencias sensoriales. Todo en una
lengua empobrecida. Una suerte de libro medieval escrito en una jerga que resuena con múltiples
voces que nos distraen: dibujos animados, juegos virtuales e historietas conforman un flujo opiáceo
que se desliza por una página continua. Uno de los especialistas que entrevistó The Washington Post
parece darse cuenta del dilema: "Será el nacimiento de una nueva etapa de la escritura o el fin de la
civilización occidental".

Nos guste o no, el lenguaje de una página escrita es más preciso que el de una imagen. Es una
única voz en la que concentrarse y mediante la cual la mente puede enriquecerse. En 1950, el
vocabulario medio de un chico estadounidense de 14 años constaba de 25.000 vocablos. En la
actualidad, es de apenas 10.000. ¿No es acaso evidente, especialmente para muchos docentes, la
creciente dificultad que tienen las nuevas generaciones para concentrarse? Algunos consideran que
todo es muy sencillo. Estamos presenciando un salto de importancia similar al de la invención de
Gutenberg, pero eso no significa necesariamente un avance: pone en peligro la lengua en aras de algo
que aún resulta poco claro e inquietante. Sólo los necios pueden dejar de ver estos riesgos.

Los libros impresos ya no le servirán a nadie. Tal vez los mejores comiencen a dedicarse al habla.
Acaso en el futuro la competencia se dé entre aquellos que, sin libros, se hayan convertido en maestros
de la palabra hablada y, como héroes homéricos, restituyan un nombre a las cosas; y aquellos que (me
temo, los más) se hayan perdido ante una pantalla de figuras y sonidos, y hayan dejado de hablar.
Alvi, Geminello (2000) "Una nueva etapa de la escritura", Buenos Aires, Clarín.

1. Contrastar con lo expuesto por Eco en el texto 5 de la guía anterior.

2. El texto de Geminello es del 2000, reflexiona: ¿ Cuál es el estado actual del libro?

3. Reconoce marcas propias de la subjetividad.

Guía n 6 Las voces ajenas. Concepto de polifonía.

Actividad: Leer el texto de Bajtin. Elaborar un resumen con las ideas centrales.

Algo de toría para recordar al momento de escribir:

CITAS TEXTUALES : Se copian tal y como están impresas y el texto va entre comillas ( « » )
Se pueden citar textos completos, sin que tengan principio ni fin y se señala con puntos
suspensivos (...) dónde los párrafos se inician, terminan o se cortan. Después del texto entre
comillas, se enumeran en forma correlativa y la referencia va entre paréntesis ( ). Al pie de
página, se anota la referencia completa identificándola con el número utilizado en el párrafo.
Ej:

«... sus autores analizaron los reglamentos de prácticas profesionales...» (1) Para entregar
una obra de características y aplicaciones prácticas...» (2)

CITAS DE REFERENCIA: Se interpreta lo que dice el autor, respetando la esencia de su


aporte. La referencia se anota sin comillas y al final del párrafo se pone ( ) el número
correspondiente. Se pueden identificar con un número correlativo entre paréntesis las citas
textuales y de referencia, conservando la secuencia de la numeración en todo el texto. El
anotar las citas al pie de página se hace con el propósito de facilitar la lectura y para que el
lector pueda identificar.

CÓMO CITAR LIBROS: Las notas y referencias bibliográficas en el texto deben estar
numeradas, incluyéndose al final de la página correspondiente, conservando el siguiente
orden:
Nombre del autor, título de la obra, lugar de edición, casa editorial, nombre de la colección o
serie a la que pertenece la obra, año de edición, número de edición (en su caso) y la o las
páginas de donde se obtuvo la referencia utilizada. Si el documento no registra el nombre del
autor, editar o lugar de edición se deberá señalar de la siguiente manera: s/autor, s/editor,
s/lugar de edición. Todos estos elementos deben estar separados por comas. El título de la
obra irá en cursiva, y sólo la primera letra se escribirá en mayúscula (a menos que las
palabras que integran el título sean nombres propios) y las subsiguientes en minúsculas.
Ejemplo:
Eco Humberto, Cómo se hace una tesis, Gedisa, Barcelona, 1982.

CONSULTA DE DOCUMENTOS ELECTRÓNICOS: El material digital o electrónico incluye


páginas web, mensajes de correo electrónico, base de datos en CD-ROM, cintas magnéticas y
diskettes. Para elaborar la cita de un documento con tales características, se deben incluir los
siguientes datos, todos los cuales se separarán con comas:

1. Nombre y apellidos del autor, escritos en letras mayúsculas y minúsculas.


2. Título del trabajo en letras cursivas y con mayúsculas y minúsculas. Si la cita se refiere
a una revista o se relaciona con un correo electrónico, el título se escribirá con letra normal
y encomillado.
3. Tipo de soporte (en línea, CD-ROM, cinta magnética, diskette), dato que se colocará entre
corchetes ( [ ] ). Si la referencia es con respecto a un correo electrónico, la información se
ubicará entre ángulos ( < > ).
4. Título de la publicación periódica (si es el caso).
5. Volumen y/o número de edición (si es el caso).
6. Número de páginas del documento.
7. Lugar de publicación.
8. Editor.
9. Fecha de publicación o actualización.
10. Disponibilidad y acceso (Dirección URL).
11. Fecha de consulta.
Ejemplo:
Aquiles Bailoyo, Cómo citar Bibliografía (1), [en línea], 5 pp., Universidad Bovina, 5
de junio de 2009, Dirección URL: http://www.comocitarbiblio.unbov.ar/numero1
/baker221b.html.

Si la consulta se refiere a un periódico en línea, se sugiere anotar los datos de la siguiente


manera:

s/a, “Que te pasha Clarín?!”, [en línea], Argentina, Clarin.com.ar, 25 de marzo de


2009, Dirección URL: http://www.clarin.com.ar/notas/acusacionk.html, [consulta: 25
de marzo de 2009].

Estilo directo e indirecto

Estilo directo reproduce las palabras exactas de los interlocutores, para indicarlo se colocan
guiones, o bien se encierran las expresiones textuales entre comillas. Un ejemplo de lo
anteriormente explicado lo encuentras en la obra de Eduardo Mendoza "La ciudad de los
prodigios":

- ¿Qué hora es? - preguntó Onofre.

- Las cinco y media, poco más o menos - respondió el cura -. Eh, ¿qué haces? -agregó viendo
que Onofre intentaba levantarse.

- He de ir a la Exposición -respondió éste.

- Olvídate de la Exposición. Tendrá que pasar sin ti -dijo Mosén Bizancio.

Estilo indirecto, en cambio, reproduce la conversación pero no de forma textual. Observa


este ejemplo en la obra de Miguel Delibes "El hereje":

Don Bernardo replicaba que las cosas marchaban solas y había que dejarlas; que el secreto
de la vida estribaba en poner las cosas a funcionar y dejarlas luego para que avanzasen a su
ritmo. Pero Ignacio argumentaba que tenía el almacén abandonado y que a Dionisio
Manrique le faltaban luces para sustituirle.

Guía n 7. La argumentación

La secuencia argumentativa

Según J. M. Adam, los componentes constitutivos de la secuencia argumentativa son los


siguientes:

a. Hipótesis (o tesis) sostenida

b. Argumentos (que sostienen la hipótesis)

c. Contraargumentos (argumentos de los adversarios, que pueden traerse al discurso propio)

d. Dimensión polémica o refutación de los contraargumentos( puede estar o no)

f. Conclusión

La secuencia así descripta presenta una estructura jerárquica en la que la hipótesis


sostenida –que expresa la postura que el enunciador defiende a lo largo de su discurso- es el
eje en torno al cual se despliegan los argumentos, cada uno de los cuales mantiene una
relación lógica (del tipo de las relaciones de causa-consecuencia) y de dependencia con ella.
Según la extensión del discurso, los argumentos variarán en cuanto a su cantidad.

Para ejemplificar, tomemos el siguiente fragmento de un diálogo cotidiano:


(Ana)- Hoy no es un día para ir a la playa. Hace frío, hay viento, en cualquier momento se
larga a llover-

En este caso, la primera oración (“Hoy no es un día para ir a la playa”) es la hipótesis


sostenida por Ana, quien busca fundamentar su postura a través de una serie de razones que
enumera a continuación y que se constituyen en los argumentos que convoca
parademostrar su hipótesis (“Hace frío, hay viento, en cualquier momento se larga a llover”).

Con respecto a la dimensión polémica, recordemos que la argumentación aborda siempre


temáticas controvertidas, que son objeto de debate y que originan distintas posturas. El
enunciador puede decidir traer a su discurso algunas de las ideas o argumentos sostenidos
por sus adversarios o por otros enunciadores, para después refutarlos. Esta refutación se
integra así a su despliegue argumental, es parte de su argumentación. Si bien Adam indica
que la dimensión polémica puede estar o no presente en un discurso argumentativo, también
advierte –en coincidencia con otros autores- que en la medida en que se afirma una posición,
se rechazan otras, por lo cual siempre estaría presente, en forma implícita o explícita, una
dimensión polémica en la argumentación. En el ejemplo que acabamos de analizar, el
componente polémico no está explícito; pero si intentamos reconstruir la situación concreta
en la que Ana pudo haber enunciado estas palabras debemos aceptar la posibilidad de que
estuviera rechazando la postura y razones o argumentos de otra persona para ir a la playa.
Volvamos a la hipótesis (o tesis) sostenida en un texto argumentativo. Plantin, la define
como la respuesta que el texto propone al problema o pregunta problemática que lo ha
desencadenado. En nuestro ejemplo, el discurso de Ana responde a la pregunta: ¿Vamos a la
playa? o ¿Este día reúne condiciones para ir a la playa?

La argumentación responde tres tipos de preguntas:

1. ¿Qué tenemos que pensar de esto? ¿Es lindo, es bueno, es justo, es cierto...? VERDAD –
BELLEZA-JUSTICIA

2. ¿Qué debemos creer? ¿Debemos creer esto?

3. ¿Qué debemos hacer? ¿Debemos hacer eso?

La hipótesis puede estar o no explicitada en el texto. Muchas veces es el lector quien debe
formularla a partir de un trabajo de deducción, ya que en el texto se encuentra en forma
implícita. Para ello se orientará a partir de lo que el autor dice en distintas partes del texto o a
partir de lo que no dice pero sugiere. Cuando la hipótesis sostenida está formulada en forma
explícita en el texto, puede estar al comienzo –antes del despliegue de los argumentos- o al
final, después de estos. En este último caso, el texto presenta un despliegue progresivo en el
que se van encadenando argumentos que conducen a la hipótesis, que en estos casos
coincide con la conclusión.

1. Lee con mucha atención la siguiente argumentación en la que el profesor Juan de


Mairena expone a sus alumnos su opinión sobre la educación física.

LA EDUCACIÓN FÍSICA

Siempre he sido -habla Mairena a sus alumnos de Retórica- enemigo de lo que hoy llamamos, con expresión tan ambiciosa como
absurda, educación física. No hay que educar físicamente a nadie. Os lo dice un profesor de Gimnasia. Para crear hábitos
saludables, que nos acompañen toda la vida, no hay peor camino que el de la gimnasia y los deportes que son ejercicios
mecanizados, en cierto sentido abstractos, desintegrados, tanto de la vida animal como de la ciudadana. Aun suponiendo que estos
ejercicios sean saludables -y es mucho suponer-, nunca han de sernos de gran provecho, porque no es fácil que nos acompañen
sino durante algunos años de nuestra efímera existencia. Si lográsemos, en cambio, despertar en el niño el amor a la naturaleza,
que se deleita en contemplarla, o la curiosidad por ella, que se empeña en observarla y conocerla, tendríamos más tarde hombres
maduros y ancianos venerables, capaces de atravesar la sierra de Guadarrama en los días más crudos de invierno, ya por deseo de
recrearse en el espectáculo de los pinos y de los montes, ya movidos por el afán científico de estudiar la estructura y composición
de las piedras o de encontrar una nueva especie de lagartijas.Todo deporte, en cambio, es trabajo estéril, cuando no juego
estúpido. Y esto se verá más claramente cuando una ola de ñoñez y de americanismo invada a nuestra vieja Europa.

a) Reconoce en el texto anterior las partes propias del discurso argumentativo.

b) Escribe una argumentación exponiendo tus ideas a favor o en contra del artículo
anterior. Recuerda seguir la estructura propia del género.

2. Elabore una hipótesis argumentativa a partir de la lectura del siguiente cuento


de E. Galeano.

A orillas de otro mar, un alfarero se retira en sus años tardíos. Se le nublan los ojos, las manos
le tiemblan, ha llegado la hora del adiós. Entonces ocurre la ceremonia de la iniciación: el
alfarero viejo ofrece al alfarero joven su pieza mejor. Así manda la tradición, entre los indios
del noroeste de América: el artista que se va entrega su obra maestra al artista que se
inicia. Y el alfarero joven no guarda esa vasija perfecta para contemplarla y admirarla, sino
que la estrella contra el suelo, la rompe en mil pedacitos, recoge los pedacitos y los incorpora
a su arcilla.

De: Las palabras andantes

Guía n 8 Reseña de textos

Lee el fragmento del libro De que hablo cuando hablo de correr del escritor y corredor
Hareshi Murakami.

Consignas:

1)Escribe en tres líneas el sentido global del texto

2)Busca en una enciclopedia qué es una maratón.

3)Elabora un cuadro comparativo contrastando ambos textos.

4)Escribe sobre una experiencia deportiva “imitando” el estilo del autor.

Trabajo práctico individual:

Escribe una reseña descriptiva sobre algún libro que te interese y que tenga que ver
con tu carrera
Guía n 9 Los textos científicos

Lee el siguiente texto:

Los principios físicos que determinan la caída en pie del gato prevalecen sobre la Ley de
Murphy que determina la caída de la tostada con la mermelada hacia abajo.

JOEL PEREZ PERRI* Laboratorio de Estudios Físicos y Metafísicos

Resumen

En este trabajo hemos comprobado empíricamente que la conservación del momento angular, que
determina la caída de los gatos de pie, representa un principio más poderoso que la Ley de
Murphy, que determina la caída de la tostada con la mermelada hacia abajo. Para esto fijamos
tostadas de diferentes pesos y tamaños a la espalda de distintos tipos de gatos, atándolas o
pegándolas, y tras untar entre una a tres cucharadas de mermelada a la cara exterior de las
tostadas se dejó caer al sistema de diferentes alturas que iban desde 1,3 a 3,5 m. En el 99,16% de
las 476 experiencias que se realizaron los gatos cayeron de pie sin ningún tipo de dificultad. De la
evolución del sistema, que ha respondido a los principios físicos y no a la Ley de Murphy relacionada,
pueden extraerse como conclusión, por un lado, la supremacía de aquellos principios sobre esta ley y,
por otro, la falta de carácter de la misma como ley universal, en la cual se ha descubierto un límite de
validez. Se propone entonces la reformulación de la ley "las tostadas siempre caen con la mermelada
hacia abajo" a "las tostadas siempre caen con la mermelada hacia abajo excepto cuando se fijan a la
espalda de un gato". Creemos que este trabajo es de suma importancia ya que relaciona por vez
primera la física clásica con las Leyes de Murphy, dos campos completamente aislados hasta el
presente.

Introducción

A través de la conservación del momento angular, principio básico de la física clásica, y


consideraciones sobre la fisiología de los gatos, se ha determinado hace años que estos animales
siempre caen de pie al ser arrojados 0 al dejarse caer des de una altura razonable . Por otro lado, una
de las Leyes de Murphy establece que una tostada untada con mermelada en una de sus caras
siempre caerá con esta cara contra el suelo. Teniendo en cuenta estos principios surge un intrigante
cuestionamiento: ¿qué sucede si se deja caer un gato con una tostada untada con mermelada atada en
su espalda? O, lo que es equivalente, ¿qué sucede si se deja caer una tostada untada con mermelada
con un gato atado en su cara sin untar? Sea cual sea el resultado de esta experiencia se opondrá al
menos a uno de los principios.

La respuesta a este interrogante podría hallarse con relativa facilidad de no ser porque las Leyes de
Murphy y la física clásica son dos campos sin ningún tipo de conexi6n ni de dominio en común, para los
que no se ha encontrado hasta el momento método de cálculo alguno para relacionarlos.

Es por esto que hemos utilizado los procedimientos empíricos, única relación actual existente, para
resolver el interrogante planteado, lo cual representa el objetivo de este trabajo, determinando que
tipo de principio, física 0 de Murphy, prevalece en este caso concreto. Estos ensayos empíricos pueden
sentar las bases para el desarrollo futuro de sistemas de cálculo.
Materiales y métodos

Se untaron diferentes tipos de tostadas con mermelada de ciruela, durazno 0 frutilla (La Campagnola,
Buenos Aires, Argentina), luego de ser atadas 0 pegadas a las espaldas de diferentes razas de gato. La
cantidad de mermelada untada varió de una a tres cucharadas. Para pegar las tostadas a los gatos se
utilizó pegamento de máxima adherencia (El pulpito, Poxipol, Buenos Aires, Argentina) y para atarlos,
sogas de 7 mm de diámetro (Flex, Santa Fe, Argentina). Luego, considerando como límite de validez
implícito para la Ley de Murphy una altura mínima de 1,30 m, se dejaron caer los gatos y las tostadas
unidos desde esta altura hasta los 3,5 m en sucesivas experiencias incrementando 0,10 m la altura
cada vez. En los ensayos, el sistema gato-tostada se sostenía a la altura adecuada y se soltaba
súbitamente, permitiendo su descenso en caída libre. En la mitad de los casos se arrojó el sistema con
el gato en pie y en la otra mitad con la cara untada de la tostada hacia abajo, es decir, se arrojaron
gatos con tostadas unidas y tostadas con gatos unidos, respectivamente, asegurando equidad en las
experiencias.

Asimismo, se realizaron controles arrojando separadamente idénticos gatos y tostadas untadas de las
mismas alturas. Sin contar estos controles se realizaron 476 experiencias.

En cada ensayo se respetaron las normas de manejo de animales en el laboratorio; para quitar las
tostadas pegadas se procedió a cortar pequeños mechones del pelaje de la espalda de los gatos,
tomando todos los recaudos para que el método fuese indoloro.

Resultados

En el 99,16% de los casos los gatos cayeron de pie sin ningún tipo de dificultad, mientras que en el
0,84% restante cayeron de costado. No se detectó ningún tipo de resultado diferencial basado en
alguna característica o combinaci6n de características del sistema, como ser el tipo de gato, el tipo de
tostada, el tipo de mermelada o el tipo de unión (cantidades comparables de cada uno de estos tipos
cayeron de costado; dato no mostrado).

Por otro lado, el 95,4% de las tostadas arrojadas como control cayeron con la mermelada contra el
suelo. EI 4,6% restante, conformado por un número comparable de representantes de todos los tipos
de tostadas y mermeladas (dato no mostrado), hicieron contacto con el canto formando ángulos con el
piso que iban de los 45 a los 86° tomando como referencia el lado untado; no se detectaron por lo
tanto resultados diferenciales basados en el tipo de tostada 0 de pan. EI 100% de los gatos arrojados
como control cayeron de pie.

Discusión

Los gatos unidos a las tostadas, o las tostadas unidas a los gatos, podrían haber hecho contacto con el
suelo de tres maneras básicas distintas. EI hecho de que se haya observado la resolución (a) muy
minoritariamente en los ensayos realizados rinde cuenta sobre la prevalencia de los principios físicos
de conservación del momento angular por sobre la Ley de Murphy.

De esta manera, no sólo queda solucionado el interrogante planteado sino que se ha descubierto una
importante limitación en la Ley de Murphy, que determina un nuevo límite de validez para la misma.
Por lo tanto, sugerimos la reformulación de la forma original de la Ley, ratificada en tiempos recientes,
por la siguiente variante, según lo que se ha demostrado en este trabajo:

"Las tostadas siempre caen con la mermelada contra el suelo, excepto cuando se fijan a la espalda de
un gato".

Consigna: Si bien el texto leído cumple la superestructura de un texto científico,


carece de una característica fundamental para pertenecer a este ámbito. Leer el
artículo seleccionado de Alan Chambers y fundamentar citando al autor.

Trabajo práctico grupal: Seleccionar una de las conocidas leyes de Murphy y a partir
de la misma escribir un texto seudocientífico que intente justificar, usando los
distintos medios de los que se vale la ciencia, la afirmación planteada por el
enunciado de Murphy.

Guía nro. 10. Recursos con función explicativa: definición, ejemplo, comparación,
analogía y reformulación

Trabajo final: Elaborar una monografía

Oralidad : Les Luthier .ver letras

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