Vous êtes sur la page 1sur 16

CURSO DE NOM 59 EN JMM, Q.

ROO

OBJETIVOS

Concientizar a los proveedores de servicios ambientales sobre la


importancia ecológica de cada especie y su rol dentro de los servicios
ambientales.

Duración estimada: 1 a 2 horas.


Instructora propuesta: Biól. Gabriel Canto Polanco
Beneficiarios que lo recibirán: Ejido Tabasco y predio
Buenaventura del ciclo 2009.

TEMARIO
• Métodos de evaluación para especies en riesgo
• Categorías de riesgo en México
• Consecuencias del impacto humano
• Organizaciones internacionales que protegen a las
especies
• Anfibios
• Peces
• Reptiles
• Aves
• Invertebrados
• Mamíferos
• Plantas
• Hongos

RESUMEN DE LA EXPOSICIÓN
PRIMERA PARTE (PRIMERA SESIÓN):
GENERALIDADES Y MÉTODOS DE EVALUACIÓN
DEL RIESGO DE EXTINCIÓN DE LAS ESPECIES
SILVESTRES DE MÉXICO.
La Norma oficial Mexicana para la categorización de las especies de flora y fauna
mexicanas en riesgo fue publicada en el D. O. F., el 6 de marzo de 2002.

PREGUNTARLE A LA GENTE SI ELLOS SABEN QUE SON LAS NOM’S Y SI CONOCEN ALGUNA.

La NORMA OFICIAL MEXICANA es una serie de reglamentos cuyo objetivo es certificar


valores, cantidades y características mínimas o máximas en el diseño, producción o servicio de
los bienes de consumo, sobre todo los de uso extenso y fácil adquisición por el público en
general, poniendo atención en especial en el público no especializado en la materia, son de uso
obligatorio en su alcance. En todos los casos se emiten las normas publicándose en el Diario
Oficial de la Federación indicándose una fecha para su entrada en vigor y dejando un tiempo para
su estudio y entrada en vigor.

SI SON DE CONSUMO; ¿QUE TIENEN QUE VER CON LOS ANIMALES Y PLANTAS SILVESTRES?

EL HOMBRE DAÑA Y AFECTA A LAS POBLACIONES DE FLORA Y FAUNA Y A SU VEZ LA CONSUME


Y NO SOLO COMO ALIMENTO.

PREGUNTARLE A LA GENTE SI ELLOS TIENEN UN REGLAMENTO O NORMAS EN SUS TRABAJOS Y


CUAL DE ELLAS SON OBLIGATORIAS.

I. OBJETIVO DE LA NOM – 059 – SEMARNAT-2001.

Esta Norma Oficial Mexicana tiene como objeto identificar las especies o
poblaciones de flora y fauna silvestres en riesgo en la República Mexicana
mediante la integración de las listas correspondientes, así como establecer
los criterios de inclusión, exclusión o cambio de categoría de riesgo para las
especies o poblaciones, mediante un método de evaluación de su riesgo de
extinción.

II. CONSECUENCIAS DE LAS AMENAZAS A LA BIODIVERSIDAD Y


VULNERABILIDAD DE LAS ESPECIES DE FLORA Y FAUNA.

La pérdida de biodiversidad representa inevitablemente la


reducción en la población de especies, con la consecuente
pérdida de diversidad genética y el incremento de la vulnerabilidad
de las especies y poblaciones a enfermedades, cacería, y cambios
fortuitos en las poblaciones.
La extinción de especies es una de las consecuencias más
importantes de la pérdida de la biodiversidad. Aun cuando la
extinción es un proceso natural a la intensa transformación del
hombre sobre el medio natural, la extinción se debe a procesos
antropogénicos.
La rápida destrucción de los ecosistemas más diversos del
mundo, especialmente en los trópicos, ha llevado a los expertos a
concluir que probablemente una cuarta parte de la totalidad de la
diversidad biológica del planeta está en serio peligro de extinción
durante los próximos 20-30 años.
Actividades humanas dirigidas al desarrollo que pueden
afectar la biodiversidad y ponen en riesgo la existencia de las
especies.

 Proyectos agrícolas y ganaderos que impliquen el desmonte


de tierras, la eliminación de tierras húmedas, la inundación, el
desplazamiento de la vida silvestre mediante cercos o ganado
doméstico, el uso intensivo de pesticidas, la introducción del
monocultivo de productos comerciales en lugares que antes
dependieron de un gran surtido de cultivos locales para la
agricultura de subsistencia (Figura 17).
 Proyectos de piscicultura que comprendan la conversión, para
la acuicultura o maricultura, de importantes sitios naturales de
reproducción o crianza, la pesca excesiva, la introducción de
especies exóticas en ecosistemas acuáticos naturales.
 Proyectos forestales que incluyan la construcción de caminos de
acceso, explotación forestal intensiva, establecimiento de
industrias para productos forestales que generan más desarrollo
cerca del sitio del proyecto (Figura 18).
 Proyectos de transporte que abarquen la construcción de
caminos principales, puentes, caminos rurales, ferrocarriles o
canales, los cuales podrían facilitar el acceso a áreas naturales y a
la población de las mismas.
 Canalización de los ríos (Figura 19).
 Actividades de dragado y relleno en tierras húmedas costeras
o del interior.
 Proyectos hidroeléctricos que impliquen grandes desviaciones
del agua, inundaciones u otras importantes transformaciones de
áreas naturales acuáticas o terrestres, produciendo la reducción o
modificación del hábitat y el consecuente traslado necesario hacia
nuevas áreas y la probable violación de la capacidad de
mantenimiento.
 Riego y otros proyectos de agua potable que puedan vaciar el
agua, drenar los hábitats en tierras húmedas o eliminar fuentes
vitales de agua.
 Proyectos industriales que produzcan la contaminación del aire,
agua o suelo (Figura 20).
 Pérdida en gran escala del hábitat, debido a la minería y
exploración mineral.
 Conversión de los recursos biológicos para combustibles o
alimentos a escala industrial.
Figura 17. Muchos bosques son talados para crear grandes
extensiones agrícolas.
Figura 18. La tala de árboles ya sea legal o ilegal ha reducido
el hábitat de muchas especies.

Figura 19. La canalización de los ríos contribuye a la perdida


de la biodiversidad.

Figura 20. Tortuga marina comiendo un pedazo de plástico.


I. EXTINCIÓN DE ESPECIES.

Hace poco más de cinco décadas que los naturalistas


comenzaron a emplear el concepto de "la extinción" y éste empezó
a hacerse cada vez más popular para designar un fenómeno que la
actividad humana estaba provocando en todo el planeta: la
desaparición de especies de la flora y la fauna silvestres. La
expansión constante del humano sobre la naturaleza, origina la
destrucción de la cadena alimenticia animal, desequilibrando el status
quo de las especies, inclusive al humano, quien subsiste gracias a la
madre naturaleza, al igual que todas las especies, con diferencia de
que la nuestra, es la única que daña al ambiente.

La extinción de los animales y el peligro de extinción de


los animales es un problema que tenemos que solucionar para
lograr mantener las especies animales para futuras generaciones.

Muchas naciones cuentan con leyes para proteger a las


especies que dependen de su conservación para existir, por ejemplo
con la prohibición de su caza. Sin embargo, pocas especies
obtienen una protección legal considerable, extinguiéndose
muchas sin ningún tipo de reconocimiento público.

La extinción de una especie es irreparable y, de momento,


irreversible, afectando de manera directa o indirecta a la cadena
alimentaria y, eventualmente, al propio ser humano.

La extinción de la fauna tiene graves repercusiones en los


ecosistemas, sobre todo en lo referente a las cadenas tróficas y
alimenticias. En la mayoría de los casos, de las especies
desaparecidas no se tenía suficiente información acerca de su papel
en los diferentes ecosistemas en que participaban.
En nuestro país existen, según la lista de especies en peligro de
extinción presentada en la Organización de Estados Americanos
(OEA) el 5 de febrero de 1973, cerca de cuarenta especies de
vertebrados, tanto terrestres como acuáticos. Por ejemplo, el jaguar
(Panthera onca) y el cocodrilo (Crocodylus acutus y C. moreletti),
cuyas poblaciones han decrecido debido a la caza de que son objeto
para el comercio de sus pieles, el cual, la mayoría de la veces, se
realiza en forma ilegal, principalmente en la zona sureste del país
(Figura 21).
Figura 21. Jaguar (Panthera onca). Familia FELIDAE. Status P.

Otra causa de extinción, es la desaparición o perturbación de


los hábitats característicos de las especies, debido a desforestación,
establecimiento de cultivos agrícolas, asentamientos humanos,
etcétera, con la consecuente alteración del equilibrio ecológico. Tal es
el caso del pavón (Oreophasis derbianus) en Chiapas, cuyo hábitat, el
bosque nublado, se encuentra ya muy reducido. Esto ha ocasionado
que sus poblaciones disminuyan en forma alarmante ya que no se
adaptan a zonas alteradas (Figura 22).
Figura 22. Pavón (Oreophasis derbianus). Familia CRACIDAE.
Status P.
La contaminación química es, también, causa de daño a la
fauna. Los insecticidas aplicados en los cultivos, a la larga entran a
las corrientes de ríos y mares, donde son ingeridos por
microorganismos que son comidos por peces y otros animales, y
éstos, a su vez, devorados por las aves. En cada paso de esta cadena
alimenticia, el insecticida se concentra cada vez más. Tales
concentraciones en las aves afectadas hacen que produzcan huevos
con cáscaras deficientes en calcio, que el paso de las madres rompe
durante la incubación. Como consecuencia de este proceso los
pelícanos pardos, los cormoranes, el pinzón del mar de Cortez
y otras aves se han extinguido ya en algunos lugares donde antes
predominaban (Figura 23).

Figura 23. Pinzón del mar de Cortez (Carpodacus mexicanus


mcgregori); Familia FRINGILLIDAE. Status E.
Todas estas situaciones se han acentuado en el presente siglo
debido a la explosión demográfica humana. Cada día es necesario
talar bosques y selvas para satisfacer necesidades de alimento y
habitación. Por estas razones es importante elaborar un plan nacional
de explotación racional de recursos faunísticos. Dicho proyecto debe
tener en cuenta una serie de consideraciones sociales, tales como la
agricultura que altera zonas naturales y afecta a la fauna.
Pero ¿cómo convencer a esta población de poner fin a la
perturbación, cuando todos sus esfuerzos apenas bastan para
evitar que se mueran de hambre? ¿Cómo recomendarles no
matar un ocelote cuando la venta de su piel proporciona un
cierto ingreso que alivia su ya deteriorada economía? Es por
ello, que los científicos involucrados en la conservación de la fauna no
sólo deben ser capaces de proponer medidas de protección sino,
también en colaboración con otros especialistas, de presentar
alternativas de satisfacción a las necesidades del conjunto
social y no solamente del individuo (Figura 24).
La lucha por salvar la fauna silvestre no puede restringirse a
los biólogos. Es necesaria la participación de los gobiernos y del
pueblo en general, creando una conciencia de responsabilidad hacia
las generaciones futuras.

Figura 24. Mujer sosteniendo una piel de ocelote con fines de


comercialización.
II. ORGANIZACIONES INTERNACIONALES QUE PROTEGEN A LAS
ESPECIES DE FLORA Y FAUNA SILVESTRE.

La preservación de las especies no es exclusiva de México (NOM


– 059 – SEMARNAT – 2001), internacionalmente se han establecido
listas de flora y fauna que tienen como objetivo evitar que se
comercialice con algunos animales y plantas. Una especie puede
estar en una lista de protección local, nacional o internacional. Se
considera delito afectar de alguna manera a los organismos listados
en dichos documentos. Entre las listas o documentos regulatorios de
la protección se encuentran la Lista Roja y las listas del a CITES.
Lista Roja

La Lista Roja de Especies Amenazadas de la UICN (también


denominada en algunas ocasiones como el Libro Rojo), creada en
1963, es el inventario más completo del estado de conservación de
especies de animales y plantas a nivel mundial.
La lista es elaborada por la Unión Internacional para la
Conservación de la Naturaleza (UICN), la principal autoridad
mundial en este tópico. Muchos gobiernos y organizaciones crean sus
propias listas rojas regionales basadas muy usualmente en la
elaborada por la UICN, en el que clasifican a las especies de su región
que se encuentran bajo amenaza.
El objetivo es llevar al público la urgencia de los problemas de
conservación, así como ayudar a la comunidad internacional a reducir
la extinción. Es actualizada anualmente, realizándose un análisis en
profundidad de las evaluaciones que contiene cada cuatro o cinco
años.
Utiliza un conjunto de criterios para evaluar el riesgo de
extinción de miles de especies y subespecies, los que suelen ser
aplicables a prácticamente todos los taxones del planeta.

La Lista Roja elaborada por la UICN tiene dos categorías con


criterios específicos en los cuales son clasificados los “taxones” que
corren el riesgo de desaparecer:

1. "En Peligro" (abreviado oficialmente como EN desde su


nombre original en inglés, Endangered) y
2. "en Peligro Crítico" (abreviado oficialmente como CR
desde su nombre original en inglés, Critically
Endangered).

Estas últimas dos categorías, junto con "Vulnerable", integran


a las especies amenazadas dentro de la lista.

Las categorías de "En Peligro" y "en Peligro Crítico"


contienen a todos las especies que han mostrado importantes
fluctuaciones en su distribución geográfica, junto con una disminución
de ella; una población de individuos maduros menor de los 250 o los
2500 ejemplares con una probabilidad de un 50% o un 20% de
extinción en su forma silvestre; y una fuerte disminución en su
población general en los últimos 10 años o tres generaciones, en
orden del 70% y el 90%, respectivamente.
CITES (Convención sobre el Comercio Internacional de
Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres).

La (CITES por sus siglas en inglés) regula el comercio de las


especies amenazadas, con el objeto de asegurar su supervivencia.
Consta de tres "listas" en los cuales estas especies son clasificadas.
Todas las especies que se encuentran en peligro de extinción son
clasificadas en el Apéndice I, el que impone mayores restricciones y
restringe el comercio de estas especies solo a casos excepcionales. Al
2009, 175 países se habían adherido al tratado.

La CITES (Convención sobre el Comercio


Internacional de Especies Amenazadas de
Fauna y Flora Silvestres) es un acuerdo
internacional concertado entre los gobiernos.

Tiene por finalidad velar por que el comercio


internacional de especímenes de animales y
plantas silvestres no constituye una amenaza
para su supervivencia.

La amplia información disponible


actualmente sobre el peligro de extinción de
muchas especies simbólicas, como el tigre y
TABLA 1. GRUPOS DE FLORA Y FAUNA Y SUS PRINCIPALES FAMILIAS INCLÚIDAS EN LA NORMA
OFICIAL MEXICANA 059.

No. de especies Familias con No. de


Total en alguna más especies Especies
Grupo categoría de en alguna por Ejemplo (s)
Riesgo por categoría de Familia.
grupo Riesgo.
PLETHODON 69 SALAMANDRA ARBÓREA.
TIDAE
HYLIDAE 44 RANA DE ÁRBOL YUCATECA.

RANA LADRONA DE
Anfibios 197 35
LEPTODACTYLIDAE MONTAÑA.

RANIDAE 17 RANA PATA AMARILLA.

AMBYSTOMATIDAE 17 SALAMANDRA O AJOLOTE DE


LERMA.
Aves 371 ACCIPITRIDAE 35 GAVILÁN AZOR.

PSITTACIDAE 23 LORO YUCATECO.

EMBERIZIDAE 22 GORRIÓN SABANERO.

STRIGIDAE 21 BÚHO CORNUDO


TROCHILIDAE 20 COLIBRÍ COLA HENDIDA.

STROPHARIACEAE 28 HONGO SANTITO.


Hongos 42
MORCHELACEAE 7 HONGO MAZORQUITA.

MARIPOSA MONARCA,
*Arthropoda 21
LANGOSTINO.

CONCHA NACAR O MADRE


Invertebrados 46 *Mollusca 17
PERLA.

*Cnidaria 7 CORAL NEGRO.


*Echinodermata 1 PEPINO DE MAR
MURIDAE 77 RATÓN DE CACTUS.

HETEROMYIDAE 31 RATA CANGURO.

Mamíferos 295 SORICIDAE 24 MUSARAÑA.

PHYLLOSTOMIDAE 20 MURCIELAGO TROMPUDO.

DELPHINIDAE 18 ORCA.

Peces 185 CYPRINIDAE 47 CARPA DE PARRAS.


CYPRINODONTIDAE 22 CACHORRITO
CANGREJERO.
GUAYACON SAN
POECILIIDAE 20
GREGORIO.
MEXCALPIQUE COLA
GOODEIDAE 14
AZUL.
ORCHIDACEAE 181 ORQUÍDEAS.
CACTACEAE 238 BIZNAGA POL TZAKAM.
KUKÁ, NAKAX, PALMA
PALMAE 64
Plantas 934 REAL.
ZAMIACEAE 43 Zamias
AGAVACEAE 39 LECHUGUILLA
PINACEAE 36 PINO CARIBEÑO
CULEBRA RATONERA
COLUBRIDAE 143 YUCATECA.

LAGARTIJA DE PIEDRA
Reptiles 466 PHRYNOSOMATIDAE 51 RAYADA.

VIPERIDAE 41 SERPIENTE NAUYACA.

POLYCHROTIDAE 29 ANOLIS ROJO (LAGARTIJA)


TEIIDAE 23 HUICO PIGMEO (LAGARTIJA).

Total 2583
Figura 27. Número de especies de flora y fauna de acuerdo a su categoría de riesgo.

Figura 28. Categorías de riesgo y su porcentaje en la NOM – 059 de acuerdo al número de especies de flora y
fauna.

Vous aimerez peut-être aussi