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Adolfo Alsina: fui hijo de Valentín Alsina, acérrimo enemigo de Rosas. Cuando
asume Don Juan Manuel por segunda vez, mi familia emigró a Montevideo y regresa
después de Caseros.
En 1855, fui nombrado gobernador de Buenos Aires, también fui
vicepresidente de Sarmiento, aunque estaba muy lejos de las decisiones del sanjuanino,
ni siquiera me dejaba en la presidencia, cuando el viajaba.
Luego, en la presidencia de Avellaneda fui Ministro de Guerra y
Marina, en esta función apliqué el telégrafo a las comunicaciones militares.
Construí la Zanja de Alsina, una profunda trinchera, para detener a los
mapuches.
A los votantes que coincidan conmigo, apoyando el centralismo porteño
y pensando que hay que alejar a los indígenas de las mejores tierras de nuestro país,
depositen la boleta verde, con la cruz al lado de mi nombre.
Partido 2 : POR LA LIBERTAD
Martín Guemes: nací en una famita adinerada, trabajando desde pequeño, en las
fincas que poseía mi familia.
A los 14 años, visualicé mi vocación militar y me incorporé a la
Compañía del Regimiento Fijo de Infantería de Buenos Aires. Participé en las
Invasiones Inglesas y luego me puse al servicio de la Revolución de Mayo.
Tuve muy buena relación con el General San Martín, quién me
encomendó el mando de la Avanzada del Río Pasaje, hoy llamado Juramento, pues allí
Belgrano, juramentó la bandera nacional.
Para defender el norte, de los realistas, formé un ejército reducido pero
valiente, utilizando la técnica de la guerrilla, y logré detener al enemigo.
Por eso, quienes estén en contra de la ingerencia política, económica y
cultural del extranjero, tengan en mí un aliado fiel.
Partido 2 : POR LA LIBERTAD
Lista: Confederación
Estanislao López: como representante neto del “federalismo”, les cuento que me inicié
en el mismo, junto a un grande; ese gran hombre fue José Gervasio Artigas.
Para que Uds. comprendan mi accionar, qué es el federalismo.
El federalismo, es una corriente nacional, basada en las autonomías
provinciales, que delegan algunas atribuciones en el poder central, pero conservando
siempre sus propias decisiones en materia política, como elegir sus propias autoridades,
tener sus propias constituciones, y en la faz económica, defender las producciones
regionales.
¿Quiénes apoyaban al federalismo?: algunos caudillos, intelectuales y
la mayoría de los pueblos del interior, que veían afectadas sus economías y sus
libertades políticas, ante el centralismo porteño, que solamente beneficiaba a Buenos
Aires.
Por la causa federal, firmé los Tratados de Pilar y Benegas, el Tratado
del Cuadrilátero y el Pacto Federal de 1831.
A los ciudadanos, que deseen vivir en una provincia, que crezca día a
día, institucional y económicamente, los invito a que me voten sin pensarlo demasiado..
Julio A. Roca ; nací en una familia unitaria; mi padre luchó con los caudillos unitarios
Lavalle y Paz. En mi niñez parecía que era muy travieso y me declaraba siempre
inocente, de allí mi apodo de “zorrito”.
La suerte de la familia Roca, cambió después de Caseros, mi padre
comenzó a luchar a la par de Urquiza, quien los hizo trasladar a Concepción del
Uruguay.
En 1858, entré en el ejército de la Confederación como subteniente y mi
bautismo de fuego fue la batalla de Cepeda; realmente me conocieron en la batalla de
Pavón. Luego participé en las luchas contra Chacho Peñaloza y Felipe Varela: en 1865,
participé en la Guerra de la Triple Alianza.
Cuando muere Alsina, ocupo su lugar como Ministro de Guerra y
Marina y propuse sobre los indígenas una política opuesta a la de Alsina. Yo pensaba
una ofensiva final, sin sables, ni lanzas, pero sí con fusiles a repetición Remington.
Mis enemigos dicen que fue un genocidio, la verdad que no me
importaban las víctimas, pero si, los millones de hectáreas “recuperadas” a los indios.
En 1880, fui elegido presidente, la idea del progreso social y la fe en los
avances del capitalismo industrial, me hizo tener una visión donde habría que eliminar
las tradiciones indígenas, como las hispánicas y la falta de educación al estilo europeo,
por eso impulsé las llamadas “leyes laicas”, como la Ley del Registro Civil y la 1.420.
En 1898, nuevamente fui presidente, con una situación del país distinta:
el ascenso del radicalismo y el despertar de las luchas obreras, que tuve que reprimir.
Amigos del gobierno, reaconsejaban cambiar el sistema electoral, pero yo no accedí.
Para aquellos ciudadanos que piensen que los pueblos originarios, no
contribuyen a la grandeza del país y que estén de acuerdo a que la provincia de Santa
Fe, colabore con la compra de manufacturas extranjeras y vendan las materias primas
baratas, pongan una cruz, al lado de mi retrato.
Carlos Pellegrini: nací en 1846, en los últimos años del rusismo; mi padre era
italiano, y por mi forma de expresarme, me decían “el gringo”
En 1886, fui el vicepresidente de Juárez Celman, viajé a Europa y
Estados Unidos. El 26 de julio de 1890, estalló en Buenos Aires, una revolución,
llevada adelante por la Unión Cívica, formada por los oponentes de Juárez Celman. Los
revolucionarios dirigidos por Leandro Alem, fueron derrotados, pero Juárez Celman
tuvo que renunciar.
Asumí como presidente y tuve que tomar algunas medidas para salir
del trance, fundé el Banco Nación, pude sacar al país de la crisis y permití elecciones
libres en la Capital, que posibilitó el ascenso como senadores a Aristóbulo del Valle y
Leandro Alem.
Pienso que seré un buen colaborador de Roca, por eso les pido que me
voten.
Partido UNA NUEVA NACION