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Se denominan recursos naturales a aquellos bienes materiales y servicios que proporciona la naturaleza sin alteración por parte

del ser humano; y que son valiosos para las sociedades humanas por contribuir a su bienestar y desarrollo de manera directa
(materias primas, minerales, alimentos) o indirecta (servicios ecológicos indispensables para la continuidad de la vida en el
planeta).
Recursos renovables
Artículo principal: Recurso renovable
Los recursos renovables son aquellos recursos que no se agotan con su utilización, debido a que vuelven a su estado original o
se regeneran a una tasa mayor a la tasa con que los recursos son disminuidos mediante su utilización. Esto significa que ciertos
recursos renovables pueden dejar de serlo si su tasa de utilización es tan alta que evite su renovación. Dentro de esta categoría de
recursos renovables encontramos al agua y a la biomasa estos son naturales
Algunos de los recursos renovables son: el bosque, el agua, el viento, los peces, radiación solar, energía hidráulica, madera,
energía eólica y productos de agricultura
Recursos no renovables
Artículo principal: Recurso no renovable
Los recursos no renovables son recursos naturales que no pueden ser producidos, cultivados, regenerados o reutilizados a una
escala tal que pueda sostener su tasa de consumo. Estos recursos frecuentemente existen en cantidades fijas o consumidas
mucho más rápido de lo que la naturaleza puede recrearlos.
Se denomina reservas a los contingentes de recursos que pueden ser extraídos con provecho. El valor económico (monetario)
depende de su escasez y demanda y es el tema que preocupa a la economía. Su utilidad como recursos depende de su
aplicabilidad, pero también del costo económico y del costo energético de su localización y explotación. Por ejemplo, si para extraer
el petróleo de un yacimiento hay que invertir más energía que la que va a proporcionar no puede considerarse un recurso.
Algunos de los recursos no renovables son: petróleo, los minerales, los metales, el gas natural y los depósitos de agua
subterránea, siempre que sean acuíferos confinados sin recarga.
La contabilidad de las reservas produce muchas disputas, con las estimaciones más optimistas por parte de las empresas, y las
más pesimistas por parte de los grupos ecologistas y los científicos académicos. Donde la confrontación es más visible es en el
campo de las reservas de hidrocarburos. Aquí los primeros tienden a presentar como reservas todos los yacimientos conocidos
más los que prevén encontrar. Los segundos ponen el acento en el costo monetario creciente de la exploración y de la extracción,
con sólo un nuevo barril hallado por cada cuatro consumidos, y en el costo termodinámico (energético) creciente, que disminuye el
valor de uso medio de los nuevos hallazgos.
DESARROLLO SOSTENIBLE
Se llama desarrollo sostenible aquél desarrollo que es capaz de satisfacer las necesidades actuales sin comprometer los recursos y
posibilidades de las futuras generaciones. Intuitivamente una actividad sostenible es aquélla que se puede mantener. Por ejemplo,
cortar árboles de un bosque asegurando la repoblación es una actividad sostenible. Por contra, consumir petróleo no es sostenible
con los conocimientos actuales, ya que no se conoce ningún sistema para crear petróleo a partir de la biomasa. Hoy sabemos que
una buena parte de las actividades humanas no son sostenibles a medio y largo plazo tal y como hoy están planteadas.
La ecología ha alcanzado enorme trascendencia en los últimos años.
El creciente interés del hombre por el ambiente en el que vive se debe fundamentalmente a la toma de consciencia sobre los
problemas que afectan a nuestro planeta y exigen una pronta solución.
Los seres vivos están en permanente contacto entre sí y con el ambiente físico en el que viven. La ecología analiza cómo cada
elemento de un ecosistema afecta los demás componentes y cómo es afectado. Es una ciencia de síntesis, pues para comprender
la compleja trama de relaciones que existen en un ecosistema toma conocimientos de botánica, zoología, fisiología, genética y
otras disciplinas como la física, la química y la geología.

En 1869, el biólogo alemán Ernst Haeckel acuñó el término ecología, remitiéndose al origen griego de la palabra (oikos, casa;
logos, ciencia, estudio, tratado). Según entendía Haeckel, la ecología debía encarar el estudio de una especie en sus relaciones
biológicas con el medio ambiente. Otros científicos se ocuparon posteriormente del medio en que vive cada especie y de sus
relaciones simbióticas y antagónicas con otras.
Hacia 1925, August Thienemann, Charles Elton y otros impulsaron la ecología de las comunidades. Trabajaron con conceptos
como el de cadena alimentaría, o el de pirámide de especies, en la que el número de individuos disminuye progresivamente desde
la base hasta la cúspide, desde las plantas hasta los animales herbívoros y los carnívoros.
SE ENTIENDE POR MEDIO AMBIENTE todo lo que afecta a un ser vivo y condiciona especialmente las circunstancias de vida de
las personas o la sociedad en su vida. Comprende el conjunto de valores naturales, sociales y culturales existentes en un lugar y
un momento determinado, que influyen en la vida del ser humano y en las generaciones venideras. Es decir, no se trata sólo del
espacio en el que se desarrolla la vida sino que también abarca seres vivos, objetos, agua, suelo, aire y las relaciones entre ellos,
así como elementos tan intangibles como la cultura. El Día Mundial del Medio Ambiente se celebra el 5 de junio.

SAN JUAN BOSCO


1815-1888
Fiesta: 31 de enero
Presbítero, "Padre y maestro de la juventud", patrono de los editores, fundador de los salesianos. Por su gran devoción a María
Auxiliadora, conseguía de ella innumerables milagros.
"En su vida, lo sobrenatural se hizo casi natural y lo extraordinario, ordinario." Pío XI sobre S. Juan Bosco.
Reseña
Tuvo una niñez muy dura. Una vez ordenado sacerdote, empleó todas sus energías en la educación de los jóvenes. Sus grandes
amores que fundamentan su espiritualidad: La Eucaristía, la Virgen María, la Iglesia, la fidelidad al Santo Padre, la juventud.
Fundador de la Congregación de los Salesianos, comunidad religiosa con rama masculina y femenina, dedicados a la educación
de los jóvenes, en especial los pobres. Les enseñaba la vida cristiana y diversos oficios. Atrajo y sigue atrayendo a multitudes de
jóvenes a Cristo. La Congregación toma su nombre de San Francisco de Sales.
Famoso por sus sueños proféticos, ¡se conocen 159 de ellos! Quizás el mas famoso es el de la Nave de Pedro, que
explicaremos mas adelante.
San Juan Bosco escribió también algunos opúsculos en defensa de la religión.
Gran constructor de iglesias, entre ellas la Basílica de San Juan Evangelista, la Basílica de María Auxiliadora y la Iglesia del
Sagrado Corazón en Roma donde celebró su última misa.

Vida de San Juan Bosco


Juan Melchor nace en 1815, junto a Castelnuovo, en la diócesis de Turín. Era el menor de los hijos de un campesino piamontés. Su
niñez fue muy dura. Su padre murió cuando Juan tenía apenas dos años y medio. La madre, Margarita, analfabeta y muy pobre,
pero santa y laboriosa mujer, que debió luchar mucho para sacar adelante a sus hijos, se hizo cargo de su educación.
El primero de sus 159 sueños proféticos
A los nueve años de edad, un sueño que el rapazuelo no olvidó nunca, le reveló su vocación. Más adelante, en todos los períodos
críticos de su vida, una visión del cielo le indicó siempre el camino que debía seguir.
En aquel primer sueño, se vio rodeado de una multitud de chiquillos que se peleaban entre sí y blasfemaban; Juan Bosco trató de
hacer la paz, primero con exhortaciones y después con los puños. Súbitamente apareció Nuestro Señor y le dijo: "¡No, no; tienes
que ganártelos con la mansedumbre y el amor!" Le indicó también que su Maestra sería la Santísima Virgen, quien al instante
apareció y le dijo: "Toma tu cayado de pastor y guía a tus ovejas". Cuando la Señora pronunció estas palabras los niños se
convirtieron primero, en bestias feroces y luego en ovejas. Mas Sueños e historias >>>
Una gran cualidad: su interés por la salvación de la juventud
El sueño terminó, pero desde aquel momento Juan Bosco comprendió que su vocación era ayudar a los niños pobres, y empezó
inmediatamente a enseñar el catecismo y a llevar a la iglesia a los chicos de su pueblo. Para ganárselos, acostumbraba ejecutar
ante ellos toda clase de acrobacias, en las que llegó a ser muy ducho. Un domingo por la mañana, un acróbata ambulante dio una
función pública y los niños no acudieron a la iglesia; Juan Bosco desafió al acróbata en su propio terreno, obtuvo el triunfo, y se
dirigió victoriosamente con los chicos a la misa.
La alegría de Don Bosco
Los muchachos de la calle lo llamaban: ‘Ese es el Padre que siempre está alegre. El Padre de los cuentos bonitos’. Su sonrisa era
de siempre. Nadie lo encontraba jamás de mal humor y nunca se le escuchaba una palabra dura o humillante. Hablar con él la
primera vez era quedar ya de amigo suyo para toda la vida. El Señor le concedió también el don de consejo: Un consejo suyo
cambiaba a las personas. Y lo que decía eran cosas ordinarias.
Durante las semanas que vivió con una tía que prestaba servicios en casa de un sacerdote, Juan Bosco aprendió a leer. Tenía un
gran deseo de ser sacerdote, pero hubo de vencer numerosas dificultades antes de poder empezar sus estudios. A los dieciséis
años, ingresó finalmente en el seminario de Chieri y era tan pobre, que debía mendigar para reunir el dinero y los vestidos
indispensables.
El alcalde del pueblo le regaló el sombrero, el párroco la chaqueta, uno de los parroquianos el abrigo y otro, un par de zapatos.
Después de haber recibido el diaconado, Juan Bosco pasó al seminario mayor de Turín y ahí empezó, con la aprobación de sus
superiores, a reunir los domingos a un grupo de chiquillos y mozuelos abandonados de la ciudad.
San José Cafasso, sacerdote de la parroquia anexa al seminario mayor de Turín, confirmó a Juan Bosco en su vocación,
explicándole que Dios no quería que fuese a las misiones extranjeras: "Desempaca tus bártulos --le dijo--, y prosigue tu trabajo con
los chicos abandonados. Eso y no otra cosa es lo que Dios quiere de ti".
El mismo Don Cafasso le puso en contacto con los ricos que podían ayudarle con limosnas para su obra, y le mostró las prisiones y
los barrios bajos en los que encontraría suficientes clientes para aprovechar los donativos de los ricos.
El primer puesto que ocupó Don Bosco fue el de capellán auxiliar en una casa de refugio para muchachas, que había fundado la
marquesa di Barola, la rica y caritativa mujer que socorrió a Silvio Pellico cuando éste salió de la prisión. Los domingos, Don Bosco
no tenía trabajo de modo que podía ocuparse de sus chicos, a los que consagraba el día entero en una especie de escuela y
centro de recreo, que él llamó "Oratorio Festivo".
Pero muy pronto, la marquesa le negó el permiso de reunir a los niños en sus terrenos, porque hacían ruido y destruían las flores.
Durante un año, Don Bosco y sus chiquillos anduvieron de "Herodes a Pilatos", porque nadie quería aceptar ese pequeño ejército
de más de un centenar de revoltosos muchachos.
Cuando Don Bosco consiguió, por fin, alquilar un viejo granero, y todo empezaba a arreglarse, la marquesa, que a pesar de su
generosidad tenía algo de autócrata, le exigió que escogiera entre quedarse con su tropa o con su puesto en el refugio para
muchachas. El santo escogió a sus chicos.
Oratorios, escuelas, talleres...
En esos momentos críticos, le sobrevino una pulmonía, cuyas complicaciones estuvieron a punto de costarle la vida. En cuanto se
repuso, fue a vivir en unos cuartuchos miserables de su nuevo oratorio, en compañía de su madre, y ahí se entregó, con toda el
alma, a consolidar y extender su obra. Dio forma acabada a una escuela nocturna, que había inaugurado el año precedente, y
como el oratorio estaba lleno a reventar, abrió otros dos centros en otros tantos barrios de Turín.
Por la misma época, empezó a dar alojamiento a los niños abandonados. Al poco tiempo, había ya treinta o cuarenta chicos, la
mayoría aprendices, que vivían con Don Bosco y su madre en el barrio de Valdocco. Los chicos llamaban a la madre de Don Bosco
"Mamá Margarita".
Con todo, Don Bosco cayó pronto en la cuenta que todo el bien que hacía a sus chicos se perdía con las malas influencias del
exterior, y decidió construir sus propios talleres de aprendizaje. Los dos primeros: el de los zapateros y el de los sastres, fueron
inaugurados en 1853.
Crece la familia
El siguiente paso fue construir una iglesia, consagrada a San Francisco de Sales. Después vino la construcción de una casa para la
enorme familia. El dinero no faltaba, a veces, por verdadero milagro. Don Bosco distinguía dos grupos entre sus chicos: el de los
aprendices, y el de los que daban señales de una posible vocación sacerdotal. Al principio iban a las escuelas del pueblo; pero con
el tiempo, cuando los fondos fueron suficientes, Don Bosco instituyó los cursos técnicos y los de primeras letras en el oratorio.
En 1856, había ya 150 internos, cuatro talleres, una imprenta, cuatro clases de latín y diez sacerdotes. Los externos eran
quinientos. Con su extraordinario don de simpatía y de leer los corazones, Don Bosco ejercía una influencia ilimitada sobre sus
chicos, de suerte que podía gobernarles con aparente indulgencia y sin castigos, para gran escándalo de los educadores de su
tiempo.
Veía en sueños el estado exacto de la conciencia de sus discípulos y después los llamaba y les hacía una descripción tan completa
de los pecados que ellos habían cometido, que muchos aclamaban emocionados: "Si hubiera venido un ángel a contarle toda mi
vida no me habría hablado con mayor precisión" .
Se gana de tal manera el cariño de los jóvenes, que es difícil encontrar en toda la historia de la humanidad, después de Jesús, un
educador que haya sido tan amado como Don Bosco. Los jóvenes llegaban hasta pelear unos contra otros afirmando cada uno que
a él lo amaba el santo más que a los demás.
Dedicó su vida a la difusión de las buenas lecturas
Además de este trabajo, Don Bosco se veía asediado de peticiones para que predicara; la fama de su elocuencia se había
extendido enormemente a causa de los milagros y curaciones obradas por la intercesión del santo. Otra forma de actividad, que
ejerció durante muchos años, fue la de escribir libros para el gusto popular, pues estaba convencido de la influencia de la lectura.
Él decía que Dios lo había enviado al mundo para educar a los jóvenes pobres y para propagar buenos libros, los cuales, además
eran sumamente sencillos y fáciles de entender. "Propagad buenos libros --decía Don Bosco-- sólo en el cielo sabréis el gran bien
que produce una buena lectura". Unas veces se trataba de una obra de apologética, otras de un libro de historia, de educación o
bien de una serie de lecturas católicas. Este trabajo le robaba gran parte de la noche y al fin, tuvo que abandonarlo, porque sus
ojos empezaron a debilitarse.
En búsqueda de colaboradores
El mayor problema de Don Bosco, durante largo tiempo, fue el de encontrar colaboradores. Muchos jóvenes sacerdotes
entusiastas, ofrecían sus servicios, pero acababan por cansarse, ya fuese porque no lograban dominar los métodos impuestos por
Don Bosco, o porque carecían de su paciencia para sobrellevar las travesuras de aquel tropel de chicos mal educados y
frecuentemente viciosos, o porque perdían la cabeza al ver que el santo se lanzaba a la construcción de escuelas y talleres, sin
contar con un céntimo.
Aun hubo algunos que llevaron a mal que Don Bosco no convirtiera el oratorio en un club político para propagar la causa de "La
Joven Italia". En 1850, no quedaba a Don Bosco más que un colaborador y esto le decidió a preparar, por sí mismo, a sus futuros
colaboradores. Así fue como Santo Domingo Savio ingresó en el oratorio, en 1854.
Nace la gran familia Salesiana
Por otra parte, Don Bosco había acariciado siempre la idea, más o menos vaga, de fundar una congregación religiosa. Después de
algunos descalabros, consiguió por fin formar un pequeño núcleo. "En la noche del 26 de enero de 1854 --escribe uno de los
testigos-- nos reunimos en el cuarto de Don Bosco. Se hallaban ahí además, Cagliero, Rocchetti, Artiglia y Rua. Llegamos a la
conclusión de que, con la ayuda de Dios, íbamos a entrar en un período de trabajos prácticos de caridad para ayudar a nuestros
prójimos.
Al fin de ese período, estaríamos en libertad de ligarnos con una promesa, que más tarde podría transformarse en voto. Desde
aquella noche recibieron el nombre de Salesianos todos los que se consagraron a tal forma de apostolado. Naturalmente, el
nombre provenía del gran obispo de Ginebra, San Francisco de Sales (el "Santo de la amabilidad"). El momento no parecía muy
oportuno para fundar una nueva congregación, pues el Piamonte no había sido nunca más anticlerical que entonces.
Los jesuitas y las Damas del Sagrado Corazón habían sido expulsados; muchos conventos habían sido suprimidos y, cada día, se
publicaban nuevas leyes que coartaban los derechos de las órdenes religiosas. Sin embargo, fue el ministro Rattazzi, uno de los
que más parte había tenido en la legislación, quien urgió un día a Don Bosco a fundar una congregación para perpetuar su trabajo
y le prometió su apoyo ante el rey".
En diciembre de 1859, Don Bosco y sus veintidos compañeros decidieron finalmente organizar la congregación, cuyas reglas
habían sido aprobadas por Pío IX. Pero la aprobación definitiva no llegó sino hasta quince años después, junto con el permiso de
ordenación para los candidatos del momento. La nueva congregación creció rápidamente: en 1863 había treinta y nueve
salesianos; a la muerte del fundador, eran ya 768, y en la actualidad se cuentan por millares: Diecisiete mil en 105 países, con
1,300 colegios y 300 parroquias, y se hallan establecidos en todo el mundo.
Don Bosco realizó uno de sus sueños al enviar sus primeros misioneros a la Patagonia. Poco a poco, los Salesianos se
extendieron por toda la América del Sur. Cuando San Juan Bosco murió, la congregación tenía veintiséis casas en el Nuevo Mundo
y treinta y ocho en Europa. Las instituciones salesianas en la actualidad comprenden escuelas de primera y segunda enseñanza,
seminarios, escuelas para adultos, escuelas técnicas y de agricultura, talleres de imprenta y librería, hospitales, etc., sin omitir las
misiones extranjeras y el trabajo pastoral.
El siguiente paso de Don Bosco fue la fundación de una congregación femenina, encargada de hacer por las niñas lo que los
Salesianos hacían por los niños. La congregación quedó inaugurada en 1872, con la toma de hábito de veintisiete jóvenes, entre
ellas, Santa María Dominga Mazzarello, que fue la cofundadora, a las que el santo llamó Hijas de Nuestra Señora, Auxilio de los
Cristianos (o Hijas de María Auxiliadora). La nueva comunidad se desarrolló casi tan rápidamente como la anterior y emprendió,
además de otras actividades, la creación de escuelas de primera enseñanza en Italia, Brasil, Argentina y otros países. "Hoy en día
son dieciséis mil, en setenta y cinco países".
Para completar su obra, Don Bosco organizó a sus numerosos colaboradores del exterior en una especie de tercera orden, a la que
dio el título de Colaboradores Salesianos. Se trataba de hombres y mujeres de todas las clases sociales, que se obligaban a
ayudar en alguna forma a los educadores salesianos.
Nuestro Señor le inspiró un sabio método de enseñanza
El sueño o visión que tuvo Don Bosco en su juventud marcó toda su actividad posterior con los niños. Todo el mundo sabe que
para trabajar con los niños, hay que amarlos; pero lo importante es que ese amor se manifieste en forma comprensible para ellos.
Ahora bien, en el caso de Don Bosco, el amor era evidente, y fue ese amor el que le ayudó a formar sus ideas sobre el castigo, en
una época en que nadie ponía en tela de juicio las más burdas supersticiones acerca de ese punto.
Los métodos de Don Bosco consistían en desarrollar el sentido de responsabilidad, en suprimir las ocasiones de desobediencia, en
saber apreciar los esfuerzos de los chicos, y en una gran amistad. En 1877 escribía: "No recuerdo haber empleado nunca un
castigo propiamente dicho. Por la gracia de Dios, siempre he podido conseguir que los niños observen no sólo las reglas, sino aun
mis menores deseos". Pero a esta cualidad se unía la perfecta conciencia del daño que puede hacer a los niños un amor
demasiado indulgente, y así lo repetía constantemente Don Bosco a los padres.
Una de las imágenes más agradables que suscita el nombre de Don Bosco es la de sus excursiones domingueras al bosque, con
una parvada de rapazuelos. El santo celebraba la misa en alguna iglesita de pueblo, comía y jugaba con los chicos en el campo,
les daba una clase de catecismo, y todo terminaba al atardecer, con el canto de las vísperas, pues Don Bosco creía firmemente en
los benéficos efectos de la buena música.
La construcción de iglesias
El relato de la vida de Don Bosco quedaría trunco, si no hiciéramos mención de su obra de constructor de iglesias. La primera que
erigió era pequeña y resultó pronto insuficiente para la congregación. El santo emprendió entonces la construcción de otra mucho
más grande, que quedó terminada en 1868. A ésta siguió una gran basílica en uno de los barrios pobres de Turín, consagrada a
San Juan Evangelista.
El esfuerzo para reunir los fondos necesarios había sido inmenso; al terminar la basílica, el santo no tenía un céntimo y estaba muy
fatigado, pero su trabajo no había acabado todavía. Durante los últimos años del pontificado de Pío IX, se había creado el proyecto
de construir una iglesia del Sagrado Corazón en Roma, y el Papa había dado el dinero necesario para comprar el terreno. El
sucesor de Pío IX se interesaba en la obra tanto como su predecesor, pero parecía imposible reunir los fondos para la
construcción.
"Es una pena que no podamos avanzar" --dijo el Papa al terminar un consistorio--. "La gloria de Dios, el honor de la Santa Sede y
el bien espiritual de muchos fieles están comprometidos en la empresa. Y no veo cómo podríamos llevarla adelante"
--"Yo puedo sugerir una manera de hacerlo" --dijo el cardenal Alimonda.
--"¿Cuál? --preguntó el Papa.
--"Confiar el asunto a Don Bosco".
–"¿Y Don Bosco estaría dispuesto a aceptar?"
–"Yo le conozco bien" --replicó el cardenal--; "la simple manifestación del deseo de Vuestra Santidad será una orden para él".

La tarea fue propuesta a Don Bosco, quien la aceptó al punto.


Cuando ya no pudo obtener más fondos en Italia, se trasladó a Francia, el país en que había nacido la devoción al Sagrado
Corazón. Las gentes le aclamaban en todas partes por su santidad y sus milagros y el dinero le llovía. El porvenir de la
construcción de la nueva iglesia estaba ya asegurado; pero cuando se aproximaba la fecha de la consagración, Don Bosco repetía
que, si se retardaba demasiado, no estaría en vida para asistir a ella. La consagración de la iglesia tuvo lugar el 14 de mayo de
1887, y San Juan Bosco celebró ahí la misa, poco después.
Muerte de Don Bosco
Pero sus días tocaban a su fin. Dos años antes, los médicos habían declarado que el santo estaba completamente agotado y que
la única solución era el descanso; pero el reposo era desconocido para Don Bosco. A fines de 1887, sus fuerzas empezaron a
decaer rápidamente; la muerte sobrevino el 31 de enero de 1888, cuando apenas comenzaba el día, de suerte que algunos autores
escriben, sin razón, que Don Bosco murió al día siguiente de la fiesta de San Francisco de Sales.
Su cuerpo permanece incorrupto en la Basílica de María Auxiliadora en Turín, Italia.
Sus últimas recomendaciones fueron: "Propagad la devoción a Jesús Sacramentado y a María Auxiliadora y veréis lo que son
milagros. Ayudad mucho a los niños pobres, a los enfermos, a los ancianos y a la gente más necesitada, y conseguiréis enormes
bendiciones y ayudas de Dios. Os espero en el Paraíso".
Cuarenta mil personas desfilaron ante su cadáver en la iglesia, y sus funerales fueron una especie de marcha triunfal, porque toda
la ciudad de Turín salió a la calle durante tres días a honrar a Don Bosco por última vez.
Fueron tantos los milagros conseguidos al encomendarse a Don Bosco, que el Sumo Pontífice lo canonizó cuando apenas habían
pasado cuarenta y seis años de su muerte (en 1934) y lo declaró Patrono de los que difunden buenas lecturas y "Padre y maestro
de la juventud".

Fuente Bibliográfica: "Vidas de los Santos de Butler", tomo I, excepto algunas adaptaciones hechas por las Siervas de los
Corazones Traspasados de Jesús y María, y partes que van en letra itálica, procedentes de: "Vidas de Santos (1)" y "Autobiografía
de San Juan Bosco", del Padre Eliécer Sálesman, Apostolado Bíblico Católico.
El protagonismo en la formación de la infancia de Juan recaería entonces en manos de su madre. Una mujer de un férreo carácter,
una sólida devoción y una intensa fidelidad a su familia. No buscó un segundo matrimonio, sino que sola se dedicó a formar a sus
tres hijos varones entre los que entraba Antonio, el cual quedó huérfano de padre y madre. La manera en que Margarita defendió a
sus hijos en medio de la pobreza y el espíritu de disciplina y devoción que les impartió, tendrían mucho que ver en el futuro
apostolado de Don Bosco.
Tras la Revolución, los franceses trataron de ocupar el Piamonte en contra del Imperio austríaco lo que hizo de este un campo de
batallas e inestabilidad que terminarían en 1815, precisamente el año en que nació Juan. Estas guerras dejarían los campos
devastados y la amenaza de hambrunas que Margarita tendría que enfrentar con sus hijos.
Otra situación que la madre de Don Bosco tuvo que afrontar fue la educación de Antonio, hijo de Francisco y de su primera esposa.
Con la muerte de Francisco el niño había quedado huérfano de padre y madre y a la caridad de su madrastra que, por fortuna, lo
acogió como a un hijo y le dio la prioridad de hijo primogénito. Sin embargo, Antonio Bosco no superaría completamente su
orfandad y se mostraría huraño dentro del contexto de la familia para oponerse con frecuencia a los sueños de Juan, su hermano
menor.
[editar] El sueño de los nueve años
En 1825 Juan viviría una experiencia bastante curiosa que marcaría su vida y que ha sido registrada como "el sueño de los nueve
años". Él mismo abriría la vida de Juan a un aspecto bastante estudiado en la vida de Don Bosco: sus sueños premonitorios. En
particular este primer sueño ha sido señalado como la descripción de lo que sería su misión entre los jóvenes más necesitados.
Don Bosco mismo describió dicho sueño:
(...) Cuando tenía nueve años, tuve un sueño... ¡Este sueño me acompañó a lo largo de toda mi vida! Me pareció estar en un lugar
cerca de mi casa, era como un gran patio de juego de la escuela. Había muchos muchachos, algunos de ellos decían malas
palabras, Yo me lancé hacia ellos golpeándoles con mis puños. Fue entonces cuando apareció un Personaje que me dijo: “No con
puños, sino con amabilidad vencerás a estos muchachos” Yo tenía sólo nueve años. ¿Quién me estaba pidiendo a hacer algo
imposible? Él me respondió: “Yo soy el Hijo de Aquella a quien tu madre te enseñó a saludar tres veces al día. Mi Nombre
pregúntaselo a mi Madre.” De repente apareció una Mujer de majestuosa presencia. Yo estaba confundido. Ella me llevó hacia ella
y me cogió de la mano. Me di cuenta que todos los niños habían desaparecido y en su lugar vi todo tipo de animales: perros, gatos,
osos, lobos... Ella me dijo: “Hazte humilde, fuerte y robusto… y lo que tu ves que sucede a estos animales , tu lo tendrás que hacer
con mis hijos.” Miré alrededor y vi que los animales salvajes se habían convertido en mansos corderos ... Yo no entendí nada… y
pregunté a la Señora que me lo explicara... Ella me dijo: "A su tiempo lo comprenderás todo".[11]
Los sueños marcarían la vida de Don Bosco y los mismos han sido motivo de extensos estudios ya desde su tiempo. Pero en
especial este sueño ha sido como el derrotero de su apostolado, pese a que Juan no lo entendió muy bien y tuvo diferentes
interpretaciones en el seno de su familia. Sería sólo hasta 1846 cuando el padre Cafasso le aconsejaría darle crédito a sus sueños
como parte de un plan divino en beneficio de las almas.[12]
Especialmente la frase "no con puños, sino con amabilidad vencerás a estos muchachos" será la base del futuro sistema preventivo
de Don Bosco y su inspiración en la espiritualidad salesiana.
[editar] Primeros estudios
La Casa de I Becchi en donde creció el niño Juan Bosco, en la actualidad uno de los más preciados museos de la Congregación
Salesiana.
El deseo de estudiar y salir adelante son características en la vida de Juan durante este período. Para luchar por la realización de
sus sueños, tendría que enfrentarse a los obstáculos que provenían de la situación de pobreza de su familia y de la oposición de su
hermano Antonio que lo prefería en las faenas del campo. Ni Antonio ni José irían a la escuela. Juan en cambio sí lo hará gracias a
la tenacidad de su personalidad y a la ayuda de su madre.
En 1828 deja I Becchi y va a trabajar como pastor a casa de los Moglia en Moncucco, distante ocho
kilómetros. Desde su niñez, Juan demuestra un espíritu de liderazgo y las características del que sería
su apostolado entre los jóvenes al reunir niños y jóvenes en los ratos libres y entretenerlos con actos de
malabarismo y anécdotas con mensajes formativos. También comienza en ese tiempo a insistir en la
idea del sacerdocio, hecho este que demostraría con una gran devoción y asistencia sacramental.
En noviembre de 1829 Juan se encontraría con un anciano sacerdote, Melchor Calosso, quien admiraría
en el joven su inteligencia y devoción y le prometería ver por sus estudios, pero murió el 21 de
noviembre de 1830. Con la perspectiva del matrimonio de su hermano Antonio, Margarita divide la propiedad y deja la casa de I
Becchi a su hijastro mientras ella va a vivir con José a Sussambrino. Este acontecimiento posibilita que Juan pueda asistir por fin a
la escuela en Castelnuovo, lo que hizo que el muchacho tuviera que caminar cinco kilómetros cuatro veces por día.
El 4 de noviembre de 1831 comienza sus estudios secundarios en Chieri, a 12 kilómetros de Castelnuovo de Asti y para pagar las
12 liras mensuales, Juan recorre las aldeas pidiendo ayudas, sin embargo, su memoria prodigiosa y su dedicación al estudio, bien
lo hacen centro de aprecio en la región. Al realizar diversos trabajos para pagarse sus estudios, Juan aprende pastelería, sastrería,
ferretería, zapatería y muchos otros oficios que después le servirían para sus muchachos. Se convierte además en maestro del
teatro, música, prestidigitación y funda un movimiento juvenil al que llama "La Sociedad de la Alegría". Es promovido varias veces
en el colegio y es sin duda el mejor estudiante.
[editar] Formación sacerdotal
San Francisco de Sales, obispo de Ginebra y Doctor de la Iglesia, era saboyano y fue uno de los principales modelos de vida de
Don Bosco.Preocupado por sus escasos recursos económicos que le imposibilitaban seguir la formación sacerdotal, Juan decide
ingresar a los franciscanos el 18 de abril de 1834. Su decisión cambió radicalmente debido a un sueño en donde veía frailes que lo
desaconsejaban de ello. Con la orientación del padre José Cafasso y la ayuda del padre Cinzano, Juan ingresó al Seminario
Diocesano de Chieri el 30 de octubre de 1835, tenía 20 años.
En el siglo XIX, la Iglesia Católica europea estuvo fuertemente influenciada por un movimiento espiritual y
teológico conocido como el Jansenismo fundado en el siglo XVII por el obispo Cornelio Jansen (1585 - 1638)
y que creó un fuerte rigorismo moral basado en una interpretación literal de los textos de Agustín de Hipona.
La ascética era la base de su espiritualidad que los alejaba de los sacramentos, especialmente de la
Eucaristía mientras promulgaban por un rigorismo moral extremo. Cuando Juan ingresó al Seminario de
Chieri, esta posición teológica estaba en su apogeo en el Piamonte y al mismo tiempo era objeto de
combate por notables personajes como el padre Cafasso, quien fue confesor de Don Bosco y por parte de
los jesuitas, los que lograron que la Iglesia condenara dicha tendencia teológica.
Si bien el joven Juan Bosco sufrió el rigor del jansenismo en su formación sacerdotal en Chieri al someterse
él mismo a penitencias extremas, ascetismo, la abstención al deporte y la elección limitada de amigos, la
búsqueda diaria de la comunión desaconsejada por dicha corriente (sacrificaba el desayuno por ir a
comulgar a la Iglesia de San Felipe) es una muestra de que el joven entendía el problema de la Gracia de
manera diferente. Ello quedaría totalmente demostrado al final de su formación cuando entre sus propósitos
escoge a San Francisco de Sales como modelo de amabilidad. El Santo Obispo de Annecy, con la teología espiritual salesiana, fue
una de las más destacadas respuestas al rigorismo jansenista y sería uno de los pilares fundamentales del apostolado de Don
Bosco al punto de darle su nombre a la Congregación que fundaría posteriormente en favor de los jóvenes. Uno de los momentos
más destacados de la vida de Juan en el Seminario fue su amistad con Luis Comollo quien murió prematuramente en 1839 y del
cual Don Bosco escribiría un recuento de su corta vida.[13]
De esta manera el joven seminarista Bosco de Asti fue ordenado sacerdote el 5 de junio de 1841 por Monseñor Franzoni,
arzobispo de Turín, en la capilla privada arzobispal. Celebró su primera Eucaristía en la Iglesia de San Francisco de Asís en Turín,
ante el altar del Ángel de la Guardia.
[editar] Los muchachos de Turín
Esta foto de Jacob Riis muestra niños sin hogar en la calle Mulberry en Nueva York en 1890, situación
común durante todo el siglo XIX en Europa y Estados Unidos, como en la actualidad lo es en
Latinoamérica y Asia. Niños como estos motivaron el apostolado de Don Bosco.
El joven sacerdote, Don Bosco tenía 26 años cuando se ordenó, se transladó a Turín en donde acepta la
sugerencia de su confesor, el padre Calosso, de adelantar tres años más de estudios en el Instituto
Pastoral fundado por él ("Convitto Eclesiastico" en italiano), cerca de la Iglesia de San Francisco de Asís.
El propósito de dichos estudios era profundizar en la tarea sacerdotal, la teología moral y la predicación. Al
mismo tiempo prestaba servicios pastorales en diferentes centros de la ciudad, lo que le permitiría conocer
la realidad juvenil de la misma.
Según estadísticas de la época,[14] cuando el joven Don Bosco llegó a Turín en noviembre de 1841 habían
7148 niños menores de 10 años empleados como constructores, sastres, carpinteros, pintores de brocha,
limpiadores de chimeneas y muchos otros oficios. Se trataba de la revolución industrial que comenzaba a dar sus frutos en la
capital saboyana y en donde los obreros tenían que trabajar hasta 14 horas por pobres salarios de máximo 30 liras semestrales de
la época. Por su parte, las cárceles turineses estaban atestadas de muchachos tan jóvenes como 12 años en condiciones de
hacinamiento. El joven sacerdote de origen campesino se dejó pronto impresionar por esta realidad con la que él mismo se
identificaba y rechazó numerosas ofertas que le hubieran podido garantizar una vida de bienestar y tranquilidad entre la burguesía
de la ciudad.
[editar] Bartolomé Garelli
El 8 de diciembre de 1841 Don Bosco tuvo un encuentro que se haría significativo para su futura obra. Se trata de un muchacho
que sólo aparece en su biografía esa vez, pero que para Don Bosco, siempre sensible a los signos de su cotidianidad que veía
siempre desde una óptica de fe, le abrirían las puertas a la realización de la misión descrita en el sueño de los nueve años. Don
Bosco, recién ingresado al Instituto Pastoral del padre Cafasso, fue a celebrar ese día la Eucaristía en la Iglesia de San Francisco
de Asís y encontró al sacristán Comotti maltratando a un muchacho de 16 años de nombre Bartolomé Garelli porque no sabía ser
acólito. Defendido por Don Bosco el muchacho le confesó que no había recibido la Primera Comunión, que no conocía el catecismo
y que era pobre y abandonado. Después de la Misa, Don Bosco le dio las primeras lecciones de catecismo y al siguiente domingo
Garelli regresó con 20 muchachos que llegaron a ser 80 en marzo de ese año. Fue el inicio del Oratorio de Don Bosco que, sin
embargo, no tuvo todo el respaldo de la ciudadanía ni de la Iglesia en sus inicios. Para muchos Don Bosco estaba planeando una
revolución con esos muchachos abandonados dispuestos a todo, para otros el joven sacerdote estaba robando la feligresía de las
diferentes parroquias de donde provenían los muchachos y por último, para otros Don Bosco había perdido la razón. El padre Borel
le sugirió que redujera el grupo a 20 muchachos, el Marqués de Cavour le advirtió que estaba perdiendo el tiempo y los sacerdotes
Vincenzo Ponzati y Luis Nasi hicieron cuidadosos arreglos para ingresarlo en un hospital mental.
Don Bosco estuvo atento a los signos de su tiempo.
Don Bosco tiene entonces que enfrentarse a la sospecha y la antipatía de muchos que no entendían cómo
un sacerdote iba por las calles con muchachos de tan baja clase social. Comienza entonces la fase nómada
del Oratorio a través de Turín: primero en algunos espacios de la Iglesia de San Francisco de Asís y en los
patios del Instituto Pastoral de Calosso, después organizaba sus actividades en las calles y en las afueras
de la ciudad. Pasó con sus muchachos a la Capilla de San Francisco de Sales en el Hospital de Santa
Filomena del Internado para niñas de la Marquesa de Barolo en donde además predicaba y confesaba. En
mayo de 1845 con 400 muchachos, se reúne en los predios del cementerio abandonado de la Iglesia de
San Pedro, cerca de la Capilla de San Martín. En ese lugar Don Bosco conocería a otro muchacho de una
gran importancia en la vida salesiana: Miguel Rúa, quien llegaría a ser su mano derecha y su primer
sucesor. Después arrendó algunas habitaciones de la casa del padre Moretta y por último arrendó el campo de los hermanos
Filippi.
El 5 de abril de 1846, un día antes de que se venciera el plazo para abandonar el Campo de los Filippi con sus muchachos,
Pancrazio Soave lo llevó a los predios de Francisco Pinardi y Don Bosco le dio 350 francos por una franja de tierra: una nueva fase
de su sueño comenzaría para él y sus muchachos.
[editar] Valdocco
El Rey Carlos Alberto de Piamonte-Cerdeña fue una de las primeras autoridades civiles favorables a la obra de
Don Bosco y evitó que el Conde de Cavour prohibiera el Oratorio, al que veía como sospechoso de actividad
revolucionaria.
Artículo principal: Valdocco
La Casa Pinardi estaba ubicada en Valdocco y sería allí en donde Don Bosco centraría el desarrollo de su
apostolado. Valdocco se convertiría en un nombre de fama mundial y a él se asociarían con el tiempo el
nombre de grandes personalidades de la misión salesiana. Las adaptaciones al edificio y al terreno para el
Oratorio fueran hechas por él mismo y sus muchachos. El 12 de abril de 1846 el Arzobispo bendijo la capilla y
aumentó el número de muchachos, especialmente los domingos. El Conde de Cavour, temeroso de que fuera
el principio de una revolución liderada por Don Bosco, intentó prohibir el Oratorio, pero en su auxilio llegó la
orden favorable del rey Carlos Alberto. La intensidad de su trabajo desinteresado en favor de sus muchachos, deterioró bien pronto
su salud y Don Bosco estuvo a las puertas de la muerte. En dicha ocasión, las manifestaciones de afecto de los jóvenes se hicieron
significativamente evidentes especialmente en intensas oraciones, ayunos y promesas hechas cerca de la habitación de
convalecencia del joven sacerdote. Don Bosco se recuperó de manera extraordinaria y de dicho evento Don Bosco afirmaba que se
trataba de un milagro obrado por sus muchachos. Después de pasar un periodo de descanso en su casa, regresa a Turín el 3 de
noviembre de 1846, pero esta vez no regresaba solo: con él venía su madre, Margarita Occhiena, que con 58 años de edad venía a
darle una mano al sueño de su hijo. Los muchachos, muchos de ellos huérfanos, comenzarían a llamarla "Mamá Margarita" y con
ese nombre será recordada por la tradición salesiana.
[editar] Oratorio de Don Bosco
Los talleres de artes y oficios se convirtieron en una prioridad para Don Bosco con el ánimo de sacar a los
muchachos de los peligros de la calle.
Artículo principal: Oratorio Salesiano
El Oratorio de Don Bosco se desarrolla entonces como un espacio en donde los muchachos podían aprender
un oficio útil, asistir a los sacramentos y tener un patio para jugar sanamente con los amigos. Desde el
principio Don Bosco puso en el centro de su obra la figura de San Francisco de Sales como modelo de
amabilidad, dulzura y espiritualidad religiosa. Visitaba las fábricas en donde trabajaban sus muchachos para
garantizar de que no fueran víctimas de explotación, buscaba trabajos dignos para muchos de ellos para lo
cual hacía que los empleadores firmaran con él tratados que garantizaran los derechos de los muchachos
anticipándose así a la legislación laboral internacional. Planeaba retiros espirituales para muchachos obreros
y en 1847 elaboró el primer reglamento del Oratorio.
En mayo de 1847 comienza una nueva dimensión en el Oratorio. Hasta entonces los muchachos tenían que buscarse por su propia
cuenta el dormitorio, muchos de ellos lo hacían en la calle. Bajo petición del joven Alejandro Percamona, un muchacho huérfano
que le pidió posada, Don Bosco y con la intervención de Mamá Margarita, inician el proyecto del internado en Valdocco.
La primera experiencia de extensión de su apostolado la vivió en la misma Turín, cuando ese mismo año abre el Oratorio de San
Luis en Porta Nova y el del Ángel Guardian en Vanchiglia dos años después. En tanto comenzó las construcciones de una nueva
capilla para reemplazar la inicial. La idea de crear los talleres dentro del Oratorio nace de la necesidad de sacar a los muchachos
de los trabajos en las fábricas. A partir de 1853 comienza la construcción de talleres de calzado, sastrería, carpintería, imprenta y
metalistería. Gracias a esto, 300 muchachos dejaron de trabajar en las fábricas. Para 1869 habían 375 internos y entre 1854 y ese
año se contaban ya más de 800 muchachos que habían pasado por el internado.-.-"[15]
Con la ayuda de un seminarista, Francesia, Don Bosco comienza también a dar clases dentro del Oratorio y para 1860 tiene
completa la educación media para sus muchachos insistiendo en que sus estudios fueran los mejores. De la calidad educativa de
esta primera escuela de Don Bosco se tiene el comentario de un profesor universitario de Turín: "En el lugar de Don Bosco usted
tiene que estudiar, realmente estudiar".[16] Por otra parte, la situación difícil que enfrentaba en aquella época el avance del
nacionalismo italiano no pocas veces hóstil a la Iglesia, causó que los seminarios fueran cerrados, en no pocas ocasiones el
Arzobispo de Turín fue exiliado y las órdenes religiosas perseguidas. Por el contrario, el Oratorio de Don Bosco ganó pronto un
sólido prestigio entre las autoridades civiles por el tipo de trabajo que tenía much-.-"o que ver con la promoción social de jóvenes
marginales. Esta misma situación hizo que el Oratorio se convirtiera además en un oasis para la Iglesia y por esta razón muchos
seminaristas diocesanos y religiosos fueran enviados a seguir sus estudios de formación sacerdotal con Don Bosco. En 1861 se
ordenaron 34 jóvenes sacerdotes formados por Don Bosco para la Arquidiócesis de Turín y según estadísticas del tiempo[17] Don
Bosco dio a la Iglesia un número total de 2500 sacerdotes. Otra fuente, en cambio, señala que fueron 6 mil en el lapso de 34 años.
[18]

[editar] Congregación Salesiana


Artículo principal: Congregación Salesiana
Si bien Don Bosco era un sacerdote diócesano, comienza a desarrollar la idea de una
comunidad religiosa que pudiera continuar su misión. Pero semejante plan era
contraproducente en una época en la que se agudizaba la lucha entre el poder del Estado y de
la Iglesia.
En 1855 Urban Ratazzi, un gobernador declarado anticlerical, hizo aprobar una ley en la cual
suprimía 35 órdenes religiosas, cerraba 334 casas religiosas, dispersaba 5.456 sacerdotes y
religiosos y los privaba de sus derechos civiles.[19] Por otro lado, el Estado exigía el derecho de
elegir al obispo. Lo más sorprendente es que fue el mismo Ratazzi quien aconsejó a Don Bosco cómo fundar su Congregación de
tal manera que no se enfrentara con la legislación civil, otro elemento de la vida extraordinara de este sacerdote. Su consejo fue
que formara una sociedad clerical, una asociación de ciudadanos libres que en lo religioso dependiera de la Iglesia, y en lo social
fueran libres ciudadanos. Es por esta razón que la Congregación Salesiana ideada por Don Bosco tiene elementos que no entran
en conflicto con la sociedad civil y que serían claves en la expansión del carisma en los cinco continentes y a lo largo de las
décadas siguientes. Es por ello que el nombre oficial de los salesianos es "Sociedad de San Francisco de Sales". Don Bosco evitó
por ejemplo llamar a los laicos consagrados como Fray o Hermano para llamarlos simplemente "Señor" y no les puso hábito
distintivo, mientras en la organización de la autoridad religiosa no llamó a los superiores como prior, Provincial o Superior General,
sino Director, Inspector y Rector Mayor y no hablaba de Convento y Provincia, sino de Casa e Inspectoría, entre muchas otras
particularidades que son términos civiles más que religiosos.

Las Hijas de María Auxiliadora, fundadas por Don Bosco y Madre Mazzarello, serían las llamadas a llevar el carisma salesiano a las
muchachas.
Los primeros jóvenes, miembros del Oratorio de Valdocco, fueron Miguel Rúa, Juan Cagliero, Francesia, Angelo Savio, Rocchietti,
Turchi y otros que aceptaron la propuesta de Don Bosco. El 26 de enero de 1854 hicieron la promesa inicial en la fundación de los
que Don Bosco llamó sin dudas los salesianos en honor de San Francisco de Sales. El 25 de marzo de 1855 el joven Miguel Rua
sería el primero en hacer sus Votos, seguido después por el resto. Para el 9 de diciembre de 1856 Don Bosco se refería de manera
abierta a su Congregación que recibió la aprobación de S.S. Pío IX en 1858. Para el 14 de mayo de 1862 Don Bosco recibió los
votos de 22 jóvenes entre los cuales dos lo hacían como coadjutores, la manera en la que Don Bosco llamó a los laicos
consagrados salesianos. A estos les diría que el propósito de la Congregación Salesiana era la de buscar la santificación personal
y continuar el trabajo en favor de los muchachos, especialmente aquellos más necesitados de instrucción y educación.[20] Los
inicios de la Congregación Salesiana de Don Bosco no fueron fáciles y le trajeron serios problemas, especialmente en lo
concerniente a su aprobación definitiva. Sin embargo, comenzó la fundación de varias casas salesianas primero en Piamonte:
Lanzo en 1864, Cherasco y Alassio en 1869, Valsalice en 1872 y Vallecrosia en 1875. El primer país extranjero en recibir a los
salesianos de Don Bosco fue Francia con casas en Niza en 1875, Marsella en 1878 y París en 1884. Para enero de 1863 había 39
salesianos, 80 en 1865, 320 en 1874 y 768 en 1888, año de la muerte de Don Bosco.
[editar] Hijas de María Auxiliadora
Madre Mazzarello.
La otra obra perenne de Don Bosco fue la fundación de las Hijas de María Auxiliadora. Hasta entonces había
centrado todas sus fuerzas apostólicas y recursos posibles a los muchachos. Gracias a un sueño en el que la
Virgen María le pide interesarse también por las muchachas, Don Bosco ve la oportunidad de hacer ese sueño
realidad cuando conoce al padre Pestarino quien le habla de María Dominga Mazzarello, una muchacha de su
parroquia, Mornés, que demuestra una gran devoción y carisma por las jóvenes más necesitadas. El 8 de octubre
de 1864 Don Bosco se encontraría con la joven Mazzarello de Mornés y de dicho encuentro vendría a la luz la
fundación del Instituto de hermanas que harían del carisma salesiano una oportunidad también para las muchachas. En diciembre
de 1877 llega a Uruguay la primera expedición misionera de las Hijas de María Auxiliadora en América. Se instalan en Villa Colón
(Montevideo).
[editar] Salesianos Cooperadores
Artículo principal: Asociación de Salesianos Cooperadores
Don Bosco ideó su "Tercer Orden" con la idea de que su carisma fuera llevado por laicos que, sin ser religiosos de votos,
permanecieran en el ámbito de la sociedad civil para ayudar a los jóvenes y a disposición de la Iglesia. A este tipo de salesianos los
llamó los cooperadores y a ellos se refería como los "salesianos externos". Fueron aprobados por S.S. Pío IX en 1876 y el mismo
Papa anotó su nombre entre los miembros, así como notables benefactores, miembros de la Iglesia y la sociedad civil y numerosos
exalumnos. En 1888 se contaba con 80 mil cooperadores.
[editar] Don Bosco en el mundo
Iglesia construida en la colina en donde nació Juan Bosco en 1815, I Becchi, renombrado como Colle
Don Bosco o la "Colina de las Bienaventuranzas Juveniles".
Bien pronto las obras de Don Bosco serían conocidas en numerosos países. La situación de
inestabilidad política en el Piamonte ocasionó que numerosas familias de esa región emigraran a
Latinoamérica. De la misma manera, el aprecio y prestigio de Don Bosco le ganó la simpatía de
notables personajes como el Papa Pío IX que lo llamaba "el tesoro de Italia", cardenales como
Alimonda que se refería a Don Bosco como el "divinizador del siglo", obispos, nobles e incluso los
nacionalistas y anticlericales como Ratazzi que dijo en 1867 "para mí Don Bosco es quizá el más
grande milagro de nuestro siglo",[21] el Papa León XIII dijo "Don Bosco es un santo" a los salesianos,
mientras que el Cardenal Bilio mencionó "Nadie es canonizado mientras vive, pero Don Bosco ya fue hecho santo", todos ellos que
contribuirían a hacer conocer el nombre y la obra del sacerdote turinés.
Además de numerosos viajes a través de Italia, los otros dos países que vieron el rostro del santo educador fueron Francia y
España. Le Monde de París escribió sobre él:
La gente corre detrás de él, deseosos de verlo, de tocar su ropa, porque sienten que un aura especial de santidad emana de él.[22]
Profundamente sensible por las culturas extranjeras, Don Bosco dominaba además de su lengua natal, el piamontés, otros idiomas
como el italiano, español, francés e inglés, además de las lenguas clásicas griego y latín.
El 11 de noviembre de 1875 Don Bosco envió la primera expedición allende los mares al Nuevo Mundo. Se trataba de Argentina y
pensaba en la Patagonia a donde envió a Juan Cagliero como encargado de la expedición y quien llegaría a ser el primer obispo
salesiano. Desde Argentina los salesianos llegarían con sus Oratorios a las demás naciones latinoamericanas. En 1876 llegan a
Uruguay bajo la dirección de Mons. Luis Lasagna, llamado el obispo misionero, pues desde allí extendió la obra salesiana a
Paraguay y Brasil. En vida, Don Bosco envió salesianos a los siguientes países: Argentina, Uruguay; Brasil en 1882; Chile en 1886
y Ecuador en 1888.
[editar] Los sueños de Don Bosco
Estatua del Apóstol de la Juventud en Valdocco.
Varios autores se han dedicado a estudiar los sueños de Don Bosco como Pietro Stella[23] y Michael
Mendl,[24] entre muchos otros. En principio, Don Bosco no fue amigo de hacer de ellos un hecho
espectacular y, como se verá adelante, sus recuentos tendrán ante todo un objetivo pedagógico.
Al narrar a sus muchachos sus sueños, Don Bosco les decía sólo aquello que era mejor para ellos, ya
que esta era la intención de Aquel quien le daba esas misteriosas revelaciones[25]
Dice al respecto Mendl:
Utilizar los sueños para estudiar la psique de Don Bosco tiene sus propios riesgos, como Stella
previene.[26] Ciertamento los textos de las Memorias Biográficas fueron redactadas por Lemoyne y
otros. Pero incluso los documentos detrás de los textos de las Memorias "reflejan diferentes preocupaciones de Don Bosco:
algunas veces los estados de la mente de un hombre que habla a una comunidad de jóvenes; algunas veces el estado de la mente
de un hombre que escribe para gente que lo va a leer después.[27] " Sin duda, "la interacción entre de elementos religiosos y éticos
en los sueños de Don Bosco tienen que expresar el tipo de fenómenos que suceden en gente de profundas y operativas
convicciones cristianas.[28]
Don Bosco recontaba sus sueños a los muchachos siempre con el ánimo de dejar una enseñanza o de prevenir algún tipo de
peligro. Con el correr del tiempo él mismo puso varios por escrito. Stella intenta una clasificicación de los sueños de Don Bosco:[29]
1. Sueños que se referían a la propia persona de Don Bosco y su misión, como el sueño de los nueve años. En este tipo de
sueños Don Bosco hizo no pocas premoniciones de muertes y todos ellos tenían que ver con sus muchachos y salesianos
tanto aquellos que tenía cerca en Turín, como los sueños misioneros en países extranjeros.
2. El segundo tipo de sueños según la clasificación de Stella es aquellos que tenían que ver con eventos políticos o
religiosos entre los que destaca el "gran funeral en la corte real" de 1854.
[editar] Muerte
El 31 de enero de 1888 a las 4:45, murió el apóstol de los jóvenes.[30] Tenía 72 años, 5 meses y 14 días de edad y había dado todo
de sí para dejar una obra sólida para sus pobres muchachos. Su cuerpo permaneció en la Basílica de María Auxiliadora y después
fue sepultado el 6 de febrero en la casa salesiana de Valsalice, pero sus restos serían posteriormente trasladados a la Basílica en
donde permanecen en la actualidad.
[editar] Beatificación y canonización
En 1890 se abrió el proceso de beatificación y canonización de Don Bosco. El 2 de junio de 1929 (39 años después), Don Bosco
fue proclamado beato y el 1 de abril de 1934 (44 años después) fue declarado Santo por S.S. Pío XI. Su estatua fue puesta en un
nicho reservado a los santos fundadores de órdenes religiosas en la Basílica de San Pedro y es el único santo cuya estatua está
por encima de la de San Pedro. A lado y lado, se encuentra acompañado por dos muchachos, producto de sus sueños: Domingo
Savio y Ceferino Namuncurá, como signo de la que fue y es su misión: santificar a los jóvenes.
[editar] Otras proclamaciones
Don Bosco recibió otras proclamaciones[31] después de su canonización entre las cuales se destacan patrono de los editores
católicos desde el 24 de mayo de 1946, patrono de los magos e ilusionistas de España desde 1953. Fueron los mismos magos
quienes en un congreso internacional celebrado en Segovia (España), lo escogieron como modelo y protector y patrono del cine,
razón por la cual los Premios Goya son concedidos anualmente en torno al 31 de enero. También es Patrono de los aprendices de
Italia desde el 17 de enero de 1958
En 1959 el Papa Juan XXIII dijo en Cinecittá en un acto de veneración de las reliquias del santo: "Don Bosco, el mundo entero te
admira, el mundo entero te ama".[32]
En 1988, con ocasión del I Centenario de la muerte de Don Bosco, el Papa Juan Pablo II concedió indulgencias para la Familia
Salesiana y el 31 de enero se celebró una Eucaristía solemne en Turín con 58 obispos salesianos, cuatro cardenales y el Rector
Mayor, Don Egidio Viganó. Ese mismo año todos los salesianos del mundo renovaron su obediencia a Don Bosco y entre el 2 y 4
de septiembre el Papa Juan Pablo II hace una extraordinaria peregrinación a I Becchi (Colle Don Bosco), Chieri y Valdocco, los
lugares de la vida de Don Bosco. Al año siguiente, 24 de mayo de 1989, el Papa proclamó oficialmente a Don Bosco como "Padre
y Maestro de la Juventud"
Como testimonio de su obra, actualmente existen más 2.086 presencias salesianas en 128 países,[6] con
16.640 religiosos trabajando en ellas, sin contar los demás miembros de la Familia Salesiana, alumnos,
miembros de los centros juveniles, exalumnos y benefactores de las obras de Don Bosco.
[editar] Testamento espiritual
Don Bosco en 1887, un año antes de su muerte.
Como hombre práctico, Don Bosco dejó su Testamento Espiritual como un mensaje
visionario hacia el futuro de los salesianos y sus jóvenes.
Mis queridos y amados hijos en Jesucristo: antes de partir para mi eternidad, debo
cumplir con vosotros algunos deberes y satisfacer así un vivo deseo de mi
corazón. Ante todo, os agradezco con el más vivo afecto de mi corazón la
obediencia que me habéis prestado y cuanto habéis trabajado para sostener y
propagar nuestra Congregación (...)[33]
Don Bosco dice que "en lugar de llorar" por su muerte, sus hijos deben hacer firmes propósitos de "permanecer seguros en la
vocación hasta la muerte", del trabajo constante, el buen ejemplo para los alumnos y la práctica del sistema preventivo. Es de
destacar que Don Bosco no recomienda penitencias y mortificaciones especiales y dice:
Cada uno, en lugar de hacer observaciones sobre lo que hacen los otros, esfuércese en cumplir con el mayor esmero posible las
responsabilidades que le han sido confiadas[34]
Por último Don Bosco advierte que "cuando comience entre nosotros el bienestar y las comodidades" la sociedad salesiana "ha
terminado su misión"[35] y "no olvidéis que nosotros estamos para los niños pobres y abandonados".
[editar] Don Bosco en el arte

Parte de una de las últimas fotografías de Don Bosco en Barcelona, tomada el 3 de mayo de 1886 en la finca "Martí Codolar". A su
lado Don Rua, su primer sucesor.
"Padre, de muchos hijos, Padre, escucha nuestro grito de vida y juventud. Vuelve, don Bosco siempre joven, que el mundo se
hace viejo, sin fe y sin corazón! Padre, maestro y amigo, los jóvenes del mundo, iremos tras de ti.
(Fragmento de Padre, Maestro y Amigo).
Como una de las figuras más populares de la educación en el mundo, Don Bosco es tema recurrente del arte. El mismo Don Bosco
fue sensible a las manifestaciones artísticas y como todo lo que hacía, siempre era tendiente a la educación y formación de sus
muchachos y a la defensa de la fe. Además de ser un estudiado intelectual, dominaba varios artes y oficios como la carpintería, la
metalistería, la sastrería y la imprenta. Muchas de las iglesias, edificios y escuelas tenían sus aportes, así como el diseño de
muchas piezas religiosas, entre las que se destaca la imagen de María Auxiliadora y los Doce Apostóles pintada por Tomás
Lorenzone para la Basílica de María Auxiliadora en Turín[2]. Por otro lado era un consagrado escritor y entre sus obras se cuentan
innumerables libretos para teatro basados en historias formativas.
Nacido en el siglo de los inicios de la fotografía, Don Bosco es uno de los pocos santos del siglo XIX con un precioso material
fotográfico, un medio ante el que tenía una gran fascinación y utilizaba con el ánimo de perpetuar los momentos más importantes
de la vida de la Congregación. Don Bosco comenzó a ser fotografiado especialmente después de la segunda mitad del siglo, lo que
coincide con el tiempo en el que la fotografía comienza a tener áuge y razón por la cual no se tienen fotos de su más temprana
juventud y niñez. No dejó en cambio registros fotográficos de personajes como Domingo Savio, cuya imagen se tiene gracias a la
descripción de un compañero, ni de su propia madre Margarita Occhiena o de María Dominga Mazzarello.
Numerosas películas han sido producidas con el ánimo de representar la vida de Don Bosco. Entre las más destacadas se
encuentran el Don Bosco de Leandro Castellini y el de Ludovico Gasparini[3],[36] una producción entre Goya y la Editorial CCS y
transmitida por la RAI[4]. De ella dice la Revista de Novedades Literarias:
(...) “Don Bosco”, una biografía magnífica del gran apóstol de la juventud, el santo por antonomasia de la Revolución industrial: Don
Bosco. Hijo de campesinos sus primeros años de vida fueron difíciles, pues la pobreza le obligó a abandonar los estudios, si bien
su clara vocación al sacerdocio le hizo superar todas las pruebas en su camino (...)[37]
El rostro de Don Bosco se hizo mundialmente popular y viene representado en dibujos, pinturas, óleos, murales, vallas, esculturas,
diapositivas y material digital procedente de todos los países en donde su nombre se ha asociado a la educación juvenil y la
mayoría de dichos trabajos artísticos adaptados a las variadas manifestaciones culturales de los cinco continentes.
Por último, el Apóstol de los jóvenes es objeto preferido de la música dentro de los movimientos juveniles salesianos alrededor del
mundo. Muchas canciones son traducidas en diferentes idiomas y diferentes géneros musicales han sido adaptados para rendir
homenaje a Don Bosco o para crear letras formativas en las que priman los valores del sistema preventivo. Una de las canciones
más populares y traducidas en la actualidad es "Padre, Maestro y Amigo".
[editar] Lugares que llevan su nombre
Muchos lugares en el mundo llevan el nombre de Don Bosco como una manera de rendir un homenaje perenne al apóstol de la
juventud. Entre los más destacados se encuentran los siguientes:
1. En Italia: Colle Don Bosco, se trata de la Colina de I Becchi en donde se encuentra la casa de la infancia de Juan. Al lugar le
fue cambiado el nombre y el Papa Juan Pablo II lo llamó "la colina de las bienaventuranzas juveniles". Castelnuovo Don Bosco,
la antigua Castelnuovo de Asti en el Piamonte, la provincia en donde creció Don Bosco. El XXIV barrio de Roma. Una
circunscripción de Bolzano.
2. En Argentina: Parroquia San Juan Bosco (Buenos Aires, La Plata av 44 y 134),Parroquia Don Bosco Tucumán Av. Mitre
396.Barrio Don Bosco en Buenos Aires, Localidad Don Bosco de la ciudad de Comodoro Rivadavia en Argentina, Villa Don
Bosco, localidad del Departamento de San Martín, Don Bosco II, un barrio de la ciudad de Neuquén y el equipo de fútbol CDC
Don Bosco. Barrio y avenida Don Bosco en Córdoba, Argentina. Calle y Barrio Don Bosco en Viedma, Rio Negro. Varias calles
de diferentes localidades Argentinas llevan por nombre Don Bosco.
3. En Bolivia: Colegio Don Bosco (Cochabamba, Plazuela Quintanilla), Av. Oquendo 0770. En Bolivia existe una organización de
Salecianos dedicado a seguir la obra de Don Bosco y en la que se puede encontrar mas datos.
4. En Chile: Templo Don Bosco, casa de Don Bosco, Calle Don Bosco en Valdivia. En la Ciudad de Catemu, donde se encuentra
la Escuela Agrícola Salesiana se encuentra la Avenida Salesianos. En Concepción se encuentra la Plazoleta Don Juan Bosco,
ubicada en Barros Arana esquina Roosevelt, también a unos metros de la plazoleta se encuentra el Colegio Salesianos con su
Centro de Formación Técnica y frente a éste el edificio Plaza Don Bosco. Por otra parte Valparaíso honra al santo de la
Juventud mediante el nombre del pasaje que da accceso a la obra salesiana de la ciudad. y en la serena, donde se encuentra la
unica obra salesiana en la region. y la cual sera la primera en el mundo en recibir la reliquia del ataud de don bosco el 4 de julio
de 2009. Ex Calle Irrazabal ahora llamada Av.Don Bosco, donde esta ubicado el Colegio " Salesiano Concepcion" de formacion
técnica y cientifico humanista.
5. En Colombia: Bosconia, un municipio en el departamento de Cesar. En Medellín el Instituto Técnico Salesiano Pedro Justo
Berrío En Bogotá el Centro Don Bosco . El padre Javier de Nicoló dirige la obra del IDIPRON dirigida a las poblaciones juveniles
más vulnerables que lleva el nombre de Bosconia-La Florida. En Barranquilla el Centro Social Don Bosco, En Cali el Instituto
Tecnico Industrial San Juan Bosco.
6. En Costa Rica: CEDES Don Bosco, complejo educativo Salesiano ubicado en el distrito de Concepción de Alajuelita, en la
provincia de San José. Barrio Don Bosco en el cantón central de San José, sitio donde se ubicó originalmente el Colegio
Técnico Don Bosco desde su fundación en 1933 hasta 2004.
7. En Ecuador: Cantón Don Bosco, cuya capital es San Juan Bosco.
8. En El Salvador: Colegio Salesiano Don Bosco y Ciudadela Don Bosco, en Soyapango, San Salvador.
9. En Guatemala: Aldea San Juan Bosco, municipio de Casillas, departamento de Santa Rosa.
10.En Honduras: Templo San Juan Bosco, Centro de Capacitación San Juan Bosco y Boulevard San Juan Bosco, Ciudad de
Tegucigalpa.
11.En México: El Instituto Don Bosco al sur de la Ciudad de México y la Obra Salesiana de Santa Julia, en la misma ciudad;
asimismo, oratorios, seminarios y escuelas en ciudades como Querétaro, Morelia, Tehuacán, Instituto Don Bosco Salesiano
Huichapan, Guadalajara, León, Cd. Sahagún, Hidalgo y el Colegio Salesiano Don Bosco de Monterrey [5], en Monterrey
(Estado de Nuevo Leon).
12.En Panamá: Colegio Don Bosco y Basílica Menor de Don Bosco, Ciudad de Panamá.
13.En Perú: Numerosos colegios en todo el pais, así como un lugar llamado Bosconia, centro de misiones religiosas y la cadena
de Hoteles Don Bosco. También el Jirón Don Bosco y la Plaza Don Bosco en el distrito de Breña.
14.En Republica Dominicana: Algunos colegios llevan su nombre, calles, parques y eventos.
15.En Venezuela: Avenida, Plaza, Colegio y Templo Nacional San Juan Bosco en Altamira - Caracas. Colegio Don Bosco y Casa
Don Bosco - Valencia Estado Carabobo. Parroquia San Juan Bosco - Valencia Estado Carabobo. Centro Juvenil Don Bosco y
Escuela Técnica Popular Don Bosco en Boleíta - Caracas. En Ciudad Ojeda Estado Zulia el Colegio U.E.P. Juan Bosco. Centro
de Aprendizaje Agrícola Don Bosco en Molinete Estado Zulia. Diferentes Casas Hogares en Caracas, Puerto La Cruz, El Tigre,
Mérida, San Cristóbal, Valencia y la Residencia Juvenil en La Vega - Caracas llevan por nombre Don Bosco. Grupo Scouts Don
Bosco Ávila en Sarría - Caracas. Parroquia San Juan Bosco en Coro Estado Falcón. Parroquia San Juan Bosco en Los Teques
Estado Miranda. Parroquia San Juan Bosco y Centro de Capacitación Don Bosco en Puerto Ayacucho Estado Amazonas.
Parroquia San Juan Bosco y Centro de Capacitación Don Bosco en San Félix Estado Bolívar. Parroquia San Juan Bosco en
Valera Estado Trujillo.
[editar] Homenajes a Don Bosco
Imposición del nombre don Bosco a la antigua calle Salta (58) en La Plata. Argentina.
En al año 1934 la Municipalidad de La Plata, Provincia de Buenos Aires, Argentina; honra su memoria mediante la Ordenanza N°
57, imponiendo el nombre de DON BOSCO a la calle 58 que en ese entonces se llamaba Salta.
Sobre esta calle se encuentra la Basílica del sagrado Corazón de Jesús, y el colegio homónimo, obra de Don Bosco.
También existe, en la esquina de 58 y Diagonal 73, de frente a la basílica, un monumento en homenaje a su labor con los niños del
mundo.
[editar] Movimientos juveniles que llevan su nombre
En pleno centro de Comodoro Rivadavia, se muestra imponente, la catedral San Juan
bosco de la Diosesis de Comodoro Rivadavia.
Numerosos movimientos juveniles internacionales de diferentes orígenes tienen espacio
de encuentro con Don Bosco, por ejemplo, agrupaciones de pastorales juveniles
diocesanas, catequéticas y diferentes agrupaciones deportivas, muchas de las cuales
han tenido origen en algún centro salesiano. Don Bosco ha tenido gran afinidad con el
Movimiento Scout Mundial de Robert Baden-Powell hasta el punto que en Argentina los
salesianos fundaron un movimiento inspirado en el Sistema de Patrullas del general
británico unido al Sistema Preventivo conocido como Exploradores de Don Bosco[38] y
afiliado a los Scouts de Argentina. Numerosos grupos scouts tienen su sede o son
liderados en centros salesianos en todo el mundo que se reunen periódicamente como
"Jamboree Scout Salesiano" en varias inspectorías en contacto con las asociaciones
scouts nacionales. En chile existen gran cantidad de grupos en el movimiento juvenil salesiano, donde se puede destacar a las
comunidades apostolicas salesianas donde hacen un gran labor social haciendo lo mismo que don bosco que nos representa
socialmente. Recientemente se han agregado diversos grupos juveniles inspirados siempre en el Sistema Preventivo de Don
Bosco. En EL Salvador existe el grupo juvenil salesiano Iglesia Joven, el cual en el 2010 cumple 25 años de fundacion por el Padre
Corò.
[editar] Devociones por Don Bosco
Como Apóstol de los jóvenes y dada la presencia de los salesianos en los cinco continentes, Don Bosco es un santo con una una
notable popularidad y veneración en muchas regiones del mundo. Cada 31 de enero, durante la celebración de su fiesta, los
centros salesianos e instituciones vinculadas a su nombre, congregación y espiritualidad, adelantan numerosos programas
deportivos, culturales y religiosas que en ocasiones involucran las ciudades, regiones y naciones en donde Don Bosco está
presente. Una de las naciones más notables en el mundo por sus celebraciones multitudinarias durante la fiesta de Don Bosco es
Panamá en donde el santo de Turín es referido como "líder del pueblo".[39] Durante las fiestas del 2008 el padre Pascual Chávez,
actual Rector Mayor y Monseñor Óscar Rodríguez Madariaga, Arzobispo salesiano de Tegucigalpa, se hicieron presente en la
Basílica de San Juan Bosco, Ciudad de Panamá, en una celebración transmitida por Missioni Don Bosco Media Centre de Italia, el
canal italiano Telepace y la cadena EWTN.[40]
Asímismo las celebraciones de Don Bosco de 2008 fueron vividas de manera pública por primera vez en Rangún, Birmania, en un
acto que ha sido considerado de gran importancia dentro de los últimos acontecimientos de un país sometido a un gobierno
dictatorial.[41]
[editar] Libros publicados
Escribió centenares de cartas y obras, todas dirigidas a los jóvenes o instrucciones para la orientación de los jóvenes.
La mayoría de las obras fueron escritas y publicadas en Turín.[42]
• Memorias del Oratorio de San Francisco de Sales, entre 1873 y 1876 y publicadas póstumamente (Turín 1946).
• El joven preparado para la práctica de sus deberes, 1847.
• Colección de curiosos eventos contemporáneos, 1854.
• Conversaciones entre un cura de campo y un abogado sobre el sacramento de la
confesión, 1855.
• La fuerza de la buena educación, 1855.
• La historia de Italia para la juventud desde su poblamiento a nuestros días, 1855.
• Vida de San Martín, obispo de Tours, 1855.
• Vida de San Pedro, príncipe de los apóstoles, primer papa después de Jesucristo, 1857.
• El mes de mayo consagrado a María Inmaculada, 1858.
• Vida del jovencito Domingo Savio, alumno del Oratorio de San Francisco de Sales, 1859.
• Biografía del sacerdote José Cafasso, 1860.
• Trazos históricos del joven Miguel Magone, alumno del Oratorio de San Francisco de
Sales, 1861.
• Entretenida novela de un viejo soldado de Napoleón I, 1862.
• Trazos históricos de la vida de la Beata Caterina De-Matteri da Racconigi, 1862.
• El pastorcito de los Alpes, vida del joven Francisco Besucco d´Argentera, 1864.
• Valentino y la vocación impedida, episodio contemporáneo, 1866.
• Vida de la Beata María de los Ángeles, carmelita descalza de Turín, 1866.
• Vida de San José, esposo de María y padre putativo de Jesús contada por acreditados autores con la novena en preparación a
la fiesta del santo, 1867.
• El católico preparado para las prácticas de piedad con instrucciones según las necesidades de los tiempos, 1868.
• Severino o recuento de un joven alpino según sus propias palabras, 1868.
• Los concilios generales de la Iglesia Católica, 1869.
• Aparición de la Santísima Virgen sobre la montaña de LaSalette, con otros hechos prodigiosos documentados, 1871.
• Fundamentos de la religión católica, 1872.
• Reglas o Constituciones de la Sociedad de San Francisco de Sales según el decreto de aprobación del 3 de abril de 1874,
1874.
• Cooperadores salesianos, sea un modo práctico para gozar las buenas costumbres y la sociedad civil, 1876.
• El sistema preventivo, 1877 (escrito dentro de la introducción a "Inauguración del patronato de San Pedro en Nizza del Mar".
• Reglamento del Oratorio de San Francisco de Sales, 1877.
• Reglamento para las casas de la Sociedad de San Francisco de Sales, 1877.
• Trazos históricos de la vida del clérigo Luis Comollo (1844.
• Testamento espiritual, (publicado en las Constituciones y Reglamentos de la Sociedad de San Francisco de Sales, Roma,
1972).
Predecesor: Rector Mayor Sucesor:
Primero en el cargo 1874 - 1888 Miguel Rúa
Sistema Preventivo Salesiano o Sistema Preventivo de Don Bosco, se refiere al método educativo desarrollado por la
Congregación Salesiana a partir de la experiencia educativa de Don Bosco. El sistema nació como una respuesta al Sistema
Represivo de educación que primaba en la Europa del siglo XIX y sus territorios de influencia. En tal sentido, la propuesta de Don
Bosco se convirtió en una experiencia visionaria en el desarrollo de la educación contemporánea.
Si bien Don Bosco es su principal representante con la difusión de sus escuelas en todo el mundo, otros personajes aportaron a su
desarrollo como Felipe Neri y Francisco de Sales.
Don Bosco escribió sólo un tratado acerca de su método de formación en 1877: El Sistema Preventivo en la Educación de los
Jóvenes,[1] [2] que fue incluido en las primeras Constituciones de la Sociedad de San Franscisco de Sales.
Otros sistemas de educación se han inspirado en el sistema preventivo salesiano y éste es materia de permanente estudio y
adaptación. En síntesis, sistema preventivo quiere decir "prevenir" al joven
de los peligros a los que puede estar sometido y orientarlo a dirigir su vida
hacia un futuro mejor.
Historia
La historia del sistema preventivo salesiano comienza en la historia de vida
y apostolado de Juan Bosco (1815 - 1888) en la Turín de la segunda mitad
del siglo XIX. Si bien Don Bosco no escribió grandes tratados al respecto,
dejó los elementos primordiales que permitirían un desarrollo posterior de lo
que él había vivido como una novedosa propuesta educativa que respondía
a las necesidades de los jóvenes de su tiempo y de su patria.
Según Carlo Nanni, el sistema preventivo no nació en un escritorio ni es
fruto de una exclusiva literatura pedagógica,[3] sino que debe ser leido en la
persona misma de Don Bosco. De esta manera, quien desee entender las
bases fundantes del SPS debe antes que nada conocer a profundidad la
biografía de Juan Bosco.
Nanni C., Il sistema preventivo di Don Bosco, prove di rilettura per l’oggi,
Leumann, Elledici, 2003.
Nanni define además a Juan Bosco como "hombre de acción" más que
como un teórico y, sin embargo, ello no quiere decir que Don Bosco no
hubiese dejado algún tipo de tratado al respecto. Las obras de Don Bosco
que pueden ser elencadas como de obligatoria lectura para conocer los
principios del SPS son:
1. Las Memorias del Oratorio de San Francisco de Sales, una obra que
fue escrita entre 1873 y 1879 y en la cual Don Bosco describe las actividades pastorales y educativas en dicho centro.
2. El Sistema Preventivo en la Educación de la Juventud, escrita en 1877.
3. Cartas de Roma, se trata de dos escritos que Don Bosco elaboró en su visita a Roma el 10 de mayo de 1884, una carta a los
jóvenes y una a los salesianos. En particular estas cartas son de un valioso contenido pedagógico.
Los historiadores de Don Bosco coinciden en el hecho de que éste no dejó un corpus metódico que pudiera ser definido como el
estudio metódico del SPS. Este sería tarea de los salesianos.
[editar] El sistema represivo
Artículo principal: Disciplina escolar
El concepto de sistema represivo fue definido por Don Bosco en la introducción que él mismo elaboró al Reglamento para las
Casas Salesianas en 1877.[4]
Don Bosco destaca la distancia que existía entre el joven sujeto de la educación y su superior entendido como el educador o
profesor en términos modernos. El castigo físico era la única manera de garantizar el orden en este tipo de sistema y del mismo
Don Bosco señalaría que éste no tiene la garantía de una formación real en valores a largo plazo:
El sistema represivo puede impedir un desorden, mas con dificultad hacer mejores a los que delinquen. Se ha observado que los
muchachos no olvidan los castigos que se les han dado; y que, por lo general, conservan amargor junto con el deseo de sacudir el
yugo de la autoridad y aun de tomar venganza (...).[5]
Aunque Don Bosco estaba confrontando un sistema tenido como esencial para la educación de la Europa que él conoció a lo largo
del siglo XIX y que enfatizaba la frase "la letra con sangre entra", el sistema represivo sigue siendo en la actualidad una propuesta
vista como esencial en muchas regiones del mundo, especialmente en países en vías de desarrollo, pero también en algunas
sociedades industrializadas.
Según un informe de la BBC, para el 2006
se contaban 109 naciones del mundo que
habían abolido el castigo físico dentro de
la formación escolar,[6] pero todavía
existen sociedades en donde no se
concibe una educación sin ellos.
[editar] El Sistema Preventivo según
Don Bosco
En contraposición a dicho sistema
represivo, que Don Bosco conocía bien y
que había sufrido ya como joven de su
tiempo, nace la experiencia del sistema
preventivo. Ante todo es necesario aclarar
que Don Bosco desarrolló este
pensamiento con muchachos difíciles al
optar por los jóvenes marginales de una
ciudad que como la Turín de la mitad del
siglo XIX vivía su propia revolución
industrial, atraía a niños y jóvenes
campesinos empobrecidos y creaba
situaciones extremas como pandillas
juveniles, niños de la calle, delincuencia
juvenil, explotación infantil y otros dramas.
Por lo tanto, el sistema preventivo fue
sometido en sus inicios a las realidades de
punta y no concebido bajo condiciones
favorables. Justamente hacia este tipo de
jóvenes el sistema represivo estaba más
que orientado y de hecho la visita de Don
Bosco a las cárceles de Turín atestadas
en la época de menores de edad le convencerían de ello.
Algunos elementos descritos por Don Bosco de su sistema preventivo son los siguientes:
1. El adulto-educador-formador debe ser una persona de vocación por el oficio educativo y no practicar esto como un mero oficio.
2. El joven nunca debe estar solo, sino sentirse siempre acompañado. La asistencia salesiana no es vigilancia o guardia de
chicos, sino una presencia formativa y constructiva.
3. Las actividades lúdicas, recreativas, deportivas, artísticas, son esenciales en la formación del joven. En este sentido Don Bosco
cita a Felipe Neri: "Haced lo que queráis, a mí me basta que no cometáis pecado",[7] que traducido en términos modernos
implica la educación en la libertad responsable del joven y en el apoyo a sus talentos.
4. La práctica de piedad y la fidelidad a la propia religión y fe. Es de resaltar que Don Bosco, siendo sacerdote católico de un
tiempo sumamente conservador en la historia de la Iglesia, no expresa ningún tipo de coerción o propaganda religiosa: "No se
ha de obligar jamás a los alumnos a frecuentar los santos sacramentos; pero sí se les debe animar y darles comodidad para
aprovecharse de ellos".[7] Este factor sería clave en la expansión del Colegio Salesiano en los cinco continentes y la bienvenida
en países de otras confesiones con un pensamiento que se adelantó cien años al Concilio Vaticano II.
5. El ambiente educativo debe ser cuidadosamente examinado de manera tal que se evite el ingreso de elementos nocivos para la
formación moral y humana del joven. Don Bosco insistía en la elección de "buenas compañías", así como la selección de
buenas lecturas y otras cosas.
6. Don Bosco también expone como parte del SPS las "Buenas Noches", un elemento nacido en el contexto de los internados
salesianos, pero que después se traduciría también en los "Buenos Días", momento en el cual el director, rector o superior se
dirige a los jóvenes con "palabras afectuosas en público (...) para avisarlos o aconsejarlos sobre lo que han de hacer o evitar".[8]
Las Buenas Noches o su correlativa Buenos Días significaba una reflexión de lo que pasaba en la cotidianidad de la escuela y
de las moralejas que de ello podría nutrirse toda la comunidad educativa. Y anotaba Don Bosco: "Aquí está la clave de la
moralidad y de la buena marcha y éxito de la educación".[8]
Don Bosco resalta las consecuencias del sistema preventivo dentro de la educación del joven: el alumno ganará afecto por el
adulto-educador-formador porque lo considerará más que un cuida-chicos, un Padre y un Maestro en el sentido más profundo del
término. Así resumiría: "Procure el educador hacerse amar de los alumnos si quiere hacerse temer".[9] Todo niño, incluso el más
díscolo, violento o indisciplinado, tiene siempre una esperanza y dentro del SPS éste encontrará un espacio para cambiar, no por
medio de la represión y los castigos físicos, sino del diálogo y el sentimiento de formar parte de una gran familia educativa.
Ciertamente Don Bosco habla de las realidades que en la educación de su tiempo se vivían, pero que hoy pueden ser vistas aún
incluso en sociedades con un supuesto desarrollo social.
Por otra parte, Don Bosco insiste en que los alumnos deben conocer muy bien los reglamentos y comprenderlos como parte de su
caminar formativo. La norma no debe ser una sorpresa para el joven.

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