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A K M IN D A A B E N T U R A Y M A U R IC IO K M O U R L L A A D O L E S C E N C IA N O R M A L

8. Contradicciones sucesivas en todas las En el adolescente, un indicio de normalidad


manifestaciones de la conducta se observa en la labilidad de su organización
defensiva.
La conducta del adolescente está dominada
En el mundo adulto el que no tolera los
por la acción, qué constituye la forma de
cambios de conducta del adolescente, el que
expresión más típica en estos momentos de la
no acepta que el adolescente pueda tener
vida, en que hasta el pensamiento necesita
identidades ocasionales, transitorias,
hacerse acción para poder ser controlado.
circunstanciales como he descripto
El adolescente no puede mantener una línea
anteriormente, y exige de él una identidad
de conducta rígida, permanente y absoluta,
adulta, que por supuesto no tiene por qué tener.
aunque muchas veces la intenta y la busca.
Estas contradicciones, con la variada
Spiegei (63) ha hablado de la personalidad
utilización de defensas, facilitan la
del adolescente describiéndola como "esponjosa".
elaboración de los duelos típicos de este
Por supuesto es una personalidad permeable,
período de la vida y caracterizan la identidad
que recibe todo y que también proyecta
adolescente.
enormemente, es decir, es una personalidad en
la que los procesos de proyección e introyección
son intensos, variables y frecuentes. 9. Separación progresiva de los padres
Esto hace que no pueda haber una línea de Ya he indicado que uno de los duelos funda-
conducta determinada, que ya indicaría una mentales que tiene que elaborar el adolescente
alteración en la personalidad del adolescente. Por es el duelo por los padres de la infancia. Por lo
eso es que hablamos de una "normal tanto, una de las tareas básicas concomitantes a la
anormalidad", de una inestabilidad, permanente identidad del adolescente, es la de ir separándose
del adolescente. Sólo el adolescente mentalmente de los padres, lo que está favorecido por el
enfermo podrá mostrar rigidez en la conducta. El determinismo que los cambios biológicos
psicópata, por ejemplo, muestra todas las imponen en éste momento cronológico del
características descriptas como fugaces y individuo. La aparición de la capacidad efectora
transitorias en el adolescente, pero de una de la genitalidad impone la separación de los
manera rígida, cristalizada, estable e inflexible. padres y reactiva los aspectos genitales que se
El neurótico obsesivo, el autista, el adolescente habían iniciado con la fase genital previa. La
con difusión de personalidad, nos mostrarán intensidad y calidad de la angustia con que se
características estabilizadas de conducta en un maneja la relación con los padres y su separación
nivel patológico.
de éstos, estará determinada por la forma en que
se ha realizado y elaborado la fase genital previa
de cada individuo, a la que se sumarán, por
supuesto, las
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experiencias infantiles anteriores y la actual de la convierte en un modelo del vínculo genital


propia adolescencia. que el adolescente buscará realmente.
La aparición de la instrumentación de la La presencia internalizada de buenas
genitalidad con capacidad procreativa, como ya imágenes parentales con roles bien definidos, y
hemos señalado, es percibida también por una escena primaria amorosa y creativa,
padres del adolescente. Muchos padres se permitirá una buena separación de los padres, un
angustian y atemorizan frente al crecimiento de desprendimiento útil, y facilitará al adolescente
sus hijos reviviendo sus propias situaciones el pasaje a la madurez, para el ejercicio de la
edípica, lo que, como ya lo he indicado, daría genitalidad en un plano adulto.
lugar a situaciones conflictivas sumamente
Por otro lado, figuras parentales no muy
complejas que es preciso tener en cuenta.
estables ni bien definidas en sus roles, pueden
No son ájenos los padres a la ansiedades que aparecer ante el adolescente como
despiertan la genitalidad y el desprendimiento desvalorizadas y obligarlo a buscar
real, y a los celos que esto implica en los hijos y identificaciones con personalidades más
en ellos mismos. La evolución de la sexualidad
consistentes y firmes, por lo menos en un sentido
depende en gran parte de cómo los mismos padres
compensatorio o idealizado. En esos momentos la
acepten los conflictos y el desprendimientos lo que
identificación con ídolos de distinto tipo,
los hijos de una manera u otra pueden expresar.
cinematográficos, deportivos, etcétera, es muy
Ya me he referido al concepto de ambivalencia
frecuente. En ocasiones pueden darse
dual qué es menester reiterar aquí para entender
identificaciones de tipo psicopático, en donde
el difícil proceso de separación entre padres e
por medio de la identificación introyectiva el
hijos adolescentes.
adolescente comienza a actuar los roles que
Muchas veces los padres niegan el
atribuye al personaje con el cual se identificó.
crecimiento dé los hijos y los hijos viven a los
En virtud de la necesidad de negar las
padres con las características persecutorias
más acentuadas. fantasías genitales, y la posibilidad de
realización edípica los mecanismos
Esto ocurre especialmente si la fase genital esquizoparnoides suelen ser muy intensos. Gran
previa se ha desarrollado con dificultades y las parte de la relación con los padres está
figuras de los padres combinados, la escena pri- disociada y éstos son vividos entonces como
maria, ha tenido y tiene caracteres de figuras o muy malas o muy buenas, lo que por
indiferenciación y de persecución. Si la figura de supuesto depende fundamentalmente de cómo
los padres aparece con roles bien definidos, en han sido introyectadas estas figuras en las
una unión amorosa y creativa, la escena primaria
etapas pregenitales, entre las que la fase genital
disminuye sus aspectos persecutorios y se
previa. Las identificaciones se hacen entonces
con sustitutos parentales
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en los cuales pueden proyectarse
cargas libidinales, especialmente en sus
aspectos idealizados, lo que permite la
negación de la fantasía edípica
subyacente. Es así como aparecen
relacionen fantaseadas con maestros,
héroes reales H imaginarios,
compañeros mayores, que adquieren
características parentales, y pueden
empezar a establecer relaciones que en
ese momento satisfacen más.
La disociación esquizoide del
adolescente es
un fenómeno normal y natura) que es
preciso
aprender a reconocer para comprender
algunas
de sus características. La ubicación social
de
este fenómeno puede hacer que se entienda
con
mucho más claridad la base fundamental
común
que presenta determinada característica
cultural, en un cierto medio geográfico y
tradicional.
Sólo se observará una variación externa
de
la forma de expresión de un fenómeno
básico
psicológico que es el qué describo en esto
momento.
I0. Constantes fluctuantes del humor y del
estado de ánimo

En mi primer trabajo sobre este tema


(30) he señalado y enfatuado cómo los
fenómenos de "depresión" y "duelo"
acompañan el proceso identifica torio de la
adolescencia. Un sentimiento básico de
ansiedad y depresión acompañarán
permanentemente como substrato a la
adolescencia.
La cantidad y la calidad de la
elaboración de los duelos de la
adolescencia determinarán la
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mayor o menor intensidad de esta expresión
y
de estos sentimientos. ;
En el proceso de fluctuaciones ¿dolorosas
permanentes, la realidad no siempre satisface
las aspiraciones del individuo, es decir, sus
necesidades instintivas básicas, o su
modalidad especifica de relación objetal en
su propio campo dinámico. El yo realiza
intentos de conexión placentera —a veces
displacentera—, nirvánica con el mundo, que
no siempre se logra, y la sensación de fracaso
frente a esta búsqueda de satisfacciones
puede ser muy intensa y obligar al individuo
a refugie en sí mismo" He ahí el
repliegue autista (38) que es tan singular
del adolescente y que puede dar origen a ése
"sentimiento de soledad" tan característico
de esa tan típica situación de "frustración y
desaliento" y de ese "aburrimiento"-que
"suele ser un signo distintivo del
adolescente" (13). El adolescente se refugia
en sí mismo y en el mundo interno que ha
ido formando durante su infancia
preparándose para la acción y, a diferencia
del psicópata, del neurótico o del psicótico
elabora y reconsidera constantemente sus
vivencias y sus fracasos. Como ejemplo típico
de lo contrario podemos tomar al psicópata,
que siente la necesidad de actuar
directamente por lo penoso que se le hace
enfrentar depresivamente todas estas
situaciones de su mundo interno.
La intensidad y frecuencia de los procesos
de introyección y proyección pueden
obligar al adolescente a realizar rápidas
modificaciones de su estado de ánimo ya que
se ve de pronto sumergido en las
desesperanzas más profundas
10 preciso entenderlos sobre la base de los normalmente adulta, permitirá un acercamiento
2 mecanismos de proyección y de duelo por la más productivo a este periodo da la vida. Podrá
cua pérdida de objetos que ya he descripto: al determinar el entender al adolescente desde el
ndo fallar éstos intentos de elaboración, tales punto de vista adulto, facilitándole su proceso
ela cambios dé humor pueden aparecer como micro evolutivo hacia la identidad que busca y nece-
bor crisis maniacodepresivas. sita. Solamente el mundo adulto lo comprende
a y adecuadamente y facilita, su tarea evolutiva, el
sup
era adolescente podrá desempeñarse correcta y
los satisfactoriamente, gozar de su identidad, de
due He descripto aquí el síndrome de la todas sus situaciones, aun las que
los, adolescencia normal. Se trata por supuesto de aparentemente tienen raíces patológicas, para
pue una presentación esquemática de un proceso elaborar una personalidad más sana y feliz....
de fenomenológico que permite apreciar la
pro De lo contrario, siempre se proyectarán en el
expresión conductal y determinar las adolescente las ansiedades y la patología del
yect
ara características de la identidad y del proceso adulto y se producirá un colapso o crisis de
se adolescente. Los fenómenos subyacentes, de enfrenamiento generacional, que dificulta el
en carácter dinámico, se interpretan como el proceso evolutivo y no permite el goce real de
una motor que determina este tipo de expresión de la personalidad.
rela conducta.
ció Destacamos que el aceptar una "normal anor-
n
que malidad" del adolescente, no implica ubicar a
mu éste en un cuadro nosológico, sino que tiene por
cha objeto facilitar la comprensión de este periodo de
s la vida, con las características que he
vec destacado, todo lo cual configura una
es manifestación que se puede objetivar en la
suel
e clínica. La descripción de esta situación, en la que
ser han sido destacados los caracteres de
des "anormalidad", tiene el mismo objeto que ha
me llevado a Melanie Klein a hablar de fantasías
did psicótocas en el bebe. Se trata de ubicar la
a. personalidad con todas sus
L
os 103
cam
bios características dinámicas para una mejor com-
de prensión de la misma. Las descripciones ideali-
hu zadas, o los preconceptos denígratorios y per-
mor secutorios con respecto a la adolescencia, no
son ayudan ni al sociólogo, ni al educador, ni al
típi psicólogo o al psiquiatra a enfrentar este periodo
cos de la vida cuyo estudio profundo, curiosamente, ha
de sido dejado un poco de lado, si se revisa ade-
la cuadamente la literatura psiquiátrica y
ado psicóanalítica excepto la de los últimos dos o tres
lesc años.
enci Poder aceptar la anormalidad habitual en el
a y
adolescente, vista desde el ángulo de la
es
personalidad idealmente sana o de la personalidad
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