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Deterioro cognitivo y demencia de origen vascular

Cognitive deterioration and dementia of vascular origin

P. Martínez-Lage1, J.M. Manubens2

INTRODUCCIÓN de la DV. La epidemiología descriptiva, ana-


lítica e intervencionista ha recalcado la
El papel de la enfermedad vascular relevancia de los factores vasculares como
cerebral como causa de demencia viene agentes causales de demencia.
siendo reconocido desde hace más de un
siglo. Durante las dos últimas décadas la EPIDEMIOLOGÍA
demencia vascular (DV) ha sido objeto de
una amplia investigación y un enriquece-
dor debate en todo lo relacionado a su epi-
Epidemiología descriptiva
demiología, su etiopatogenia y sus manifes- La epidemiología de la demencia es en
taciones tanto clínicas como radiológicas. general bien conocida. Son muy numerosos
Se asiste ahora a una nueva redefinición de los estudios descriptivos poblacionales en
las distintas formas de DV y se ha introdu- los que se han analizado las cifras de pre-
cido el concepto de deterioro cognitivo valencia e incidencia de demencia y de sus
vascular (DCV) para identificar los estadios distintos subtipos diagnósticos. A diferen-
iniciales de un proceso hipotéticamente cia de lo observado en la enfermedad de
susceptible de intervención preventiva y Alzheimer (EA), en el caso de la DV las
terapéutica. Junto a las lesiones vasculares cifras de prevalencia pueden variar de unos
clásicas (infartos arteriales y lacunares) se estudios a otros1. Diferencias geográficas en
van conociendo otros tipos de lesión vas- la prevalencia de enfermedad vascular cere-
cular cerebral como la leucoaraiosis (L-A) bral o la aplicación de metodologías distin-
o los infartos incompletos, que contribuirí- tas en la investigación epidemiológica pue-
an al desarrollo del deterioro intelectual y den explicar parte de esta variación. La
se va afinando cada vez más en la correla- ausencia de criterios diagnósticos univer-
ción clínica, neuropsicológica y radiológi- salmente reconocidos para la DV, la imposi-
ca. Se investigan y se reconocen con mayor bilidad de utilizar las pruebas de neuroima-
asiduidad las manifestaciones conductua- gen como herramienta diagnóstica en la
les y psicológicas como síntomas propios investigación epidemiológica o el distinto

ANALES Sis San Navarra 2000; 23 (Supl. 3): 149-171.

1. Centro Psicogeriátrico Landazábal. Burlada. Correspondencia


Navarra Dr. Pablo Martínez-Lage
2. Servicio de Neurología. Hospital Virgen del Centro Psicogeriátrico Landazábal
Camino. Pamplona C/ Landazábal 2
31600 BURLADA (NAVARRA)
Tfno: 948 136700
Fax 948 135317
Correo electrónico:pmartineza@meditex.es

ANALES Sis San Navarra 2000, Vol. 23, Suplemento 3 149


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trato que se da a los casos diagnosticados La contribución de los procesos vascu-


de “demencia mixta”, que unas veces se lares al desarrollo de deterioro cognitivo y
engloban junto a los casos de EA y otras en demencia es difícil de calcular en los estu-
el grupo de las DV son algunas de estas dios epidemiológicos. La proporción de
variables metodológicas. demencias que pueden achacare directa-
mente a causa vascular es, como se ha
Según los datos de EURODEM2 la preva- mencionado, del 15%. Los dos estudios lle-
lencia de DV en Europa es de 1,6% entre las vados a cabo en Pamplona aportan cifras
personas mayores de 65 años. Estas cifras similares3,6. Es llamativo sin embargo que
oscilan entre un 0 y un 1% para el grupo de en uno de estos estudios la proporción de
edad de 65 a 69 años y entre un 2 y un 8% demencias mixtas es de 42,8% y en el otro
entre las personas mayores de 90 años. Al de sólo un 12,9%. Este dato es importante
igual que ocurre con la EA, las cifras de si el componente vascular de la demencia
prevalencia aumentan con la edad. La DV mixta es susceptible de tratamiento pre-
es más frecuente en varones si bien esta ventivo.
diferencia es dependiente de la edad dado
Otro aspecto epidemiológico importan-
que a partir de los 85 años la prevalencia
te en el terreno del deterioro cognitivo vas-
es más alta en mujeres. La DV sería res-
cular hace referencia al deterioro cogniti-
ponsable según los estudios europeos de
vo que se presenta en pacientes con ictus.
un 15,8% de todas las demencias mientras
Hasta un 30% de los pacientes con infarto
que un 53,7% serían casos de EA.
cerebral desarrollan demencia en los tres
meses siguientes al ictus, lo que supone un
En Pamplona la prevalencia de DV es
riesgo 9 veces mayor que el que presentan
del 3% entre las personas de 70 a 74 años y
los controles sin ictus7. La repetición del
llega al 6% en las mayores de 903. Estas
ictus puede ser el desencadenante de la
cifras de prevalencia son menores que las
demencia en algunos casos pero no en
encontradas en otros estudios poblaciona-
todos y muchos enfermos desarrollan
les con similar metodología, como el lleva-
demencia sin que acontezca hecho clínico
do a cabo en Gerona4. Si bien el estudio
alguno que la explique. Aún más, en
Pamplona se refiere a una población urba-
muchos casos el tipo de demencia que se
na y el de Gerona se llevó a cabo sobre
desarrolla es una EA y no una DV. Se cono-
población rural, es posible que estas dife-
ce bien que los pacientes con ictus tienen
rencias no se deban sólo a factores meto-
un riesgo dos veces mayor de desarrollar
dológicos y guarden relación con la distin-
EA que la población general. También es
ta frecuencia e incidencia de la enfermedad
importante prestar atención al deterioro
vascular cerebral que parece ser más alta
cognitivo, aunque no llegue a la categoría
en Gerona. Al igual que en los otros estu-
de demencia, que se asocia al ictus8 . En un
dios europeos la DV en Pamplona es más
estudio reciente llevado a cabo en el Hos-
frecuente entre hombres hasta los 90 años.
pital Virgen del Camino en colaboración
A partir de esta edad es más prevalente en
con el Charing Cross Hospital de Londres se
mujeres.
pudo comprobar que un 35% de pacientes
La incidencia de DV en Pamplona es con enfermedad vascular leve o moderada
también similar a la observada en otras ciu- (AIT, infarto asintomático, o ictus estable-
dades europeas5. El análisis de los datos cido) presentan deterioro cognitivo. Este
conjuntos de ocho estudios europeos dato es similar al encontrado en muchos
muestra que las cifras de incidencia de DV otros estudios9.
aumentan también con la edad desde los A la hora de valorar cuál es el impacto
0,7 casos/personas-año en el grupo de los de los procesos vasculares sobre la apari-
65-69 años a los 8,1 casos en los mayores ción de deterioro cognitivo y demencia en
de 90. En el estudio Pamplona se observó las personas mayores parece importante,
una caída de la incidencia por encima de según lo dicho, tener en cuenta no sólo los
los 90 años si bien el escaso número de per- casos de DV sino también los de demencia
sonas de esta edad incluidas en el estudio mixta y también los de deterioro cognitivo
impide sacar conclusiones a este respecto. que no alcanzan la gravedad de demencia.

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DETERIORO COGNITIVO Y DEMENCIA DE ORIGEN VASCULAR

Así, según el estudio canadiense en el que en las formas hereditarias, no se puede


se incluyeron 10.000 personas mayores de decir que exista un marcador genético de
65 años, un 5% de ellos tenían deterioro riesgo para DV. Por el contrarío sí parece
cognitivo de cualquier grado achacable a que el genotipo ApoE-4 se asociaría a for-
causa vascular10. mas de demencia mixta en las que la pato-
logía vascular se combina con la patología
Alzheimer.
Epidemiología analítica
Independientemente de la aparición de
El estudio analítico de los factores de un ictus isquémico, es importante también
riesgo que se asocian al desarrollo de DV recalcar el papel de los factores de riesgo
está sometido también a importantes pro- vascular sobre la aparición de deterioro
blemas metodológicos11. Es fácil compro- cognitivo y demencia16. En el estudio Pam-
bar que cuando se comparan sujetos con plona sobre epidemiología de las demen-
DV y controles normales la mayor parte de cias se pudo comprobar que las personas
los factores de riesgo vascular tradicional- con hipertensión arterial o diabetes mos-
mente reconocidos (hipertensión, diabe- traban un rendimiento inferior en el exa-
tes, tabaquismo, hiperlipidemia, cardiopa- men Mini-Mental de Folstein. Además,
tía) se asocian significativamente a DV. Por entre las personas que al inicio del estudio
el contrario, si la comparación se estable- puntuaban por encima de 24 en este test
ce entre pacientes con ictus que no tienen (punto de corte establecido para la detec-
demencia y pacientes con DV los resulta- ción de deterioro cognitivo), aquellas que
dos son poco consistentes. En otras pala- tenían hipertensión tenían un riesgo signi-
bras, si bien se conocen bien los factores ficativamente mayor de obtener puntua-
de riesgo para el accidente vascular cere- ciones inferiores a 24 al cabo de tres
bral, las condiciones que se asocian a DV años17. En los últimos años se han publica-
han de investigarse más minuciosamente. do numerosos estudios poblacionales que
La repetición de varios ictus o la locali- demuestran una asociación significativa
zación de los infartos sufridos pueden ser entre hipertensión arterial, diabetes, fibri-
factores determinantes en algunos casos12. lación auricular y deterioro cognitivo o
En otros, es posible que hubiera ya un demencia. Aún más, se dispone ya de
deterioro cognitivo o demencia previa a la datos aportados por la epidemiología
presentación del evento cerebrovascular13. intervencionista según los cuales el con-
La asociación de patología vascular de la trol eficaz de la hipertensióna arterial se
sustancia blanca puede también ser traduce en una reducción de hasta un 50%
importante. Se ha destacado también el en la incidencia de demencia18.
papel de los episodios de hipoperfusión
cerebral (hipotensión ortostática, bradia- ANATOMÍA PATOLÓGICA DEL DCV
rritmias) o de hipoxemia (procesos infec-
El espectro completo de lesiones de
ciosos respiratorios, apnea de sueño, epi-
índole vascular capaces de producir alte-
lepsia) en el desarrollo de demencia tras
ración cognitiva está todavía por determi-
un ictus14. En otros trabajos se ha señalado
nar. Son diversos los tipos de lesiones que
a los estados de hipercoagulabilidad (poli-
pueden aparecer y además pueden pre-
globulia, hiperfibrinogenemia) como facto-
sentarse con distintos grados de grave-
res que se asociarían significativamente al
dad, lo que dificulta la interpretación de
desarrollo de algunas formas de DV sub-
las observaciones. Los tres hallazgos neu-
cortical15. Por último, se ha investigado
ropatológicos clásicamente relacionadas
también el papel de los factores genéticos.
con demencia vascular son los infartos
Se han descrito algunas formas de DV he-
corticales, infartos lacunares y patología
reditaria en relación con arteriopatías de
vascular de la sustancia blanca (L-A)5
depósito en los pequeños vasos cerebra-
(Tabla 1).
les (angiopatías hereditarias, –CADASIL–,
angiopatía amiloide) y se ha investigado el El infarto arterial clásico es una lesión
papel del genotipo ApoE o de las mutacio- cavitada macroscópica que ocupa un terri-
nes en el factor V-Leiden. En general, salvo torio arterial e involucra en la mayoría de los

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casos la corteza junto con la sustancia blan- poseen una membrana pial-glial y en las
ca y región subcortical subyacente. Habi- que puede observarse una arteriola cen-
tualmente se producen por oclusión atero- tral. Consisten por tanto en una dilatación
trombótica o embólica de una arteria de de los espacios perivasculares de Virchow-
calibre mediano o grande y por tanto se aso- Robin. Su formación se ha relacionado con
cian con cardiopatías embolígenas (fibrila- atrofia cerebral, hipertensión o incluso
ción auricular, valvulopatías) o bien a ate- hidrocefalia normotensiva23. En el caso de
rosclerosis de grandes arterias (arco aórtico, la hipertensión se ha hipotetizado que la
ejes carotídeos o sistema vertebro-basilar). espiralización de las arteriolas sería res-
Los infartos lacunares (Fig. 1A) son ponsable de la expansión del espacio peri-
lesiones isquémicas también cavitadas vascular. En el caso del estado lacunar, por
cuyo tamaño es menor de 1,5 cm que apa- el contrario, se acumulan focos de necro-
recen en el territorio de las pequeñas arte- sis isquémica sin membrana glial ni vaso
rias penetrantes del cerebro. Son por tanto central. En la mayoría de los casos de
lesiones subcorticales por definición y en demencia en los que se observa estado
orden de frecuencia aparecen en ganglios lacunar puede observarse también una
basales, tálamo, protuberancia o sustancia arteriolosclerosis intensa y extensa23. Ade-
blanca hemisférica. En general, los infartos más, los infartos lacunares aparecen más
lacunares aislados no producen deterioro allá de los ganglios basales y pasan a afec-
cognitivo19. La excepción está en algunos tar también a la sustancia blanca donde se
casos de localización estratégica o capri- acompañan de otra forma de patología
chosa como el infarto lacunar de la por- vascular también relacionada con patolo-
ción caudal de la rodilla de la cápsula gía de pequeño vaso (leucoencefalopatía
interna o los infartos lacunares que afec- arteriolosclerótica). Debe tenerse en cuen-
tan bilateralmente el tálamo20. Por el con- ta que el hallazgo de lagunas en ganglios
trario, sí puede aparecer demencia cuando basales o tálamo puede no ser infrecuente
los infartos lacunares son numerosos, en autopsias de personas sin deterioro
cuando existe el llamado estado lacunar21. cognitivo22. Es posible que el estado lacu-
Se ha discutido si el estado lacunar es por nar puro no produzca necesariamente
sí mismo capaz de causar demencia. En demencia y que el deterioro cognitivo sea
primer lugar debe distinguirse el estado más probable cuando además hay leuco-
lacunar del estado criboso22. En este últi- encefalopatía. Esta entidad en la que se
mo se acumulan pequeñas cavidades que combinan lagunas y leucoencefalopatía se

Figura 1. (A) Infarto lacunar en la sustancia blanca hemisférica, anatomía patológica macroscópica.
(B) Leucoaraiosis, desmielinización en el centro semioval. (Cortesía de la Dra. T. Tuñón, Ser-
vicio de Anantomía patológica, Hospital de Navarra).

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DETERIORO COGNITIVO Y DEMENCIA DE ORIGEN VASCULAR

ha conocido como encefalopatía subcorti- sia de las células musculares de la pared


cal arteriosclerótica24 y en muchos casos arterial va dando lugar a degeneración y
ha recibido el discutido epónimo de enfer- depósito de colágeno y lípidos que poco a
medad de Binswanger25. poco va comprometiendo la luz vascular.
La presencia de lesiones de la sustan- Pueden encontrarse vasos totalmente
cia blanca o de leucoencefalopatía isqué- ocluidos por formación de trombos loca-
mica en pacientes con demencia había les en relación con lesiones de la íntima. A
sido ya resaltada por Binswanger y Alzhei- la vez, aumenta la permeabilidad de la
mer. Desde el punto de vista macroscópico capa endotelial y hay paso de proteínas
se observan como áreas de rarefacción y plasmáticas como fibrinógeno a la pared
decoloración de la sustancia blanca (Fig. vascular (degeneración fibrinoide, arterio-
1B) que toma un aspecto marronáceo o losclerosis o angiopatía amiloide). Junto a
gris. En tinciones para mielina se observa la arteriolosclerosis hipertensiva otras for-
palidez de grado variable de aspecto par- mas de patología de pequeños vasos ce-
cheado o parcheado-confluente que afecta rebrales que pueden encontrarse en
a ambos hemisferios por igual. Es más pacientes con infartos lacunares y leuco-
acentuada en la región periventricular y encefalopatía isquémica son la angiopatía
zonas profundas de la sustancia blanca. amiloide o las angiopatías hereditarias.
Las fibras subcorticales en “U” están pre- Hay otros tipos de lesiones vasculares
servadas como también lo están la cápsu- que se describen en pacientes con demen-
la interna y el cuerpo calloso. Este último cia (Tabla 1). Entre ellos destaca el con-
se presenta habitualmente disminuido en cepto de “infarto incompleto”. Este térmi-
grosor. El aspecto microscópico23 es tam- no se aplica a las lesiones isquémicas en
bién variable desde la simple vacuoliza- las que se produce muerte neuronal que
ción o espongiosis sin pérdida llamativa no se acompaña de reacción astrocitaria y
de axones o mielina, hasta desmieliniza- en la que por tanto no hay destrucción del
ción leve, disminución de la densidad de resto del parénquima y no se produce la
oligodendrocitos con gliosis, destrucción cavitación propia del infarto clásico27. Este
de mielina y pérdida axonal. En el caso de tipo de “necrosis isquémica selectiva” se
mayor intensidad se presentan también observa a menudo en la periferia de los
focos de necrosis (lagunas). Suele haber infartos cavitados en la que la intensidad
una reducción importante de la densidad de la isquemia ha sido probablemente
de oligodendrocitos junto con una marca- menor. Otros ejemplos de infarto incom-
da astrocitosis reactiva. Curiosamente, a pleto son la esclerosis hipocámpica28 o la
pesar del grado de destrucción tisular necrosis laminar29. En el caso de la esclero-
llama la atención la ausencia de macrófa- sis hipocámpica se observa pérdida neu-
gos lo que habla a favor de una evolución ronal en el sector CA1 y subiculum del
lenta del proceso patológico. Sea cual sea hipocampo junto con una intensa gliosis.
el grado los cambios son siempre más lla- Este hallazgo se ha descrito en pacientes
mativos en la periferia de un vaso si bien con episodios de anoxia cerebral y por ello
en los casos más intensos puede obser- se le supone un origen hipóxico-isquémi-
varse desmielinización y pérdida axonal co. En algunos trabajos se ha descrito
lejos de la arteriola. Se ha demostrado como un hallazgo relativamente frecuente
también la existencia de una ruptura de la en pacientes con demencia en los que no
barrera hematoencefálica con salida de siempre puede constatarse en la historia
proteínas plasmáticas al neuropilo y un episodio vascular. En el caso de la
edema vasogénico22. necrosis laminar se produce pérdida neu-
En la mayoría de los casos en los que ronal en las láminas III y V de la corteza.
estas lesiones alcanzan un grado de inten- Dado que este fenómeno se observa en los
sidad importante, se acompañan de pato- territorios fronterizos entre dos territorios
logía de los pequeños vasos26. Habitual- vasculares se ha relacionado con una vul-
mente se trata de una arteriolopatía nerabilidad selectiva de esas poblaciones
hipertensiva con hialinosis, lipohialinosis neuronales a la isquemia. Se ha hipotetiza-
o fibrohialinosis. La hipertrofia e hiperpla- do que los infartos incompletos podrían

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Tabla 1. Lesiones anatomopatológicas relacionadas con el DCV.


Parénquima Vasos
• Infartos cavitados • Aterosclerosis
Corticales • Arteriolosclerosis
Subcorticales • Angiopatía amiloide
Lacunares • Arteriopatías inflamatorias
• Patología de la sustancia blanca • Arteriopatías hereditarias (CADASIL)
Espongiosis
Desmielinización
• Esclerosis hipocámpica
• Necrosis laminar
• Infarto incompleto
• Atrofia granular cortical
• Atrofia
Cortical
Subcortical
• Estado criboso
• Hematomas
• Placas seniles (?)

afectar a cualquier área cerebral en la que descripción detallada está fuera del alcan-
se produjera un episodio de isquemia que ce de este trabajo. Los infartos corticales o
por su baja intensidad o corta duración no córticosubcorticales grandes se producen
da lugar a infarto pero si a muerte neuro- habitualmente por oclusión ateroembólica
nal27. de una arteria de calibre grande o mediano
La atrofia granular cortical se produce bien en relación con embolismo de origen
como consecuencia del acúmulo de infar- cardiaco o con ateromatosis aórtica, caro-
tos microscópicos en la corteza y se ha tídea o vertebrobasilar. Pueden producirse
descrito en relación con microangiopatías también infartos corticales en la región
como la angiopatía amiloide o algunas vas- fronteriza de dos territorios vasculares
culitis así como en relación con microem- por un mecanismo hemodinámico o por
bolismos múltiples23. hipoxia. Este mecasnismo puede ser espe-
cialmente importante en pacientes con
La atrofia cerebral tanto cortical como
estenosis ateromatosas moderadas o gra-
subcortical (reducción del peso cerebral,
ves de las grandes arterias extra o intra-
ensanchamiento de surcos corticales, dila-
craneales en los que se postula que las
tación ventricular, reducción del grosor
regiones fronterizas entre dos territorios
del cuerpo calloso) es uno de los hallazgos
vasculares se encontrarían en una situa-
neuropatológicos más constantes en los
pacientes con demencia vascular. ción de perfusión al límite en la que se
habrían agotado los mecanismos compen-
satorios de la autorregulación del flujo
ETIOPATOGENIA Y sanguíneo cerebral. En tal situación cual-
FISIOPATOLOGÍA DEL DCV quier caída de tensión arterial o del conte-
Las causas y los mecanismos por los nido de oxígeno dejarían estas áreas en
que se produce el deterioro cognitivo y la situación de isquemia-hipoxia. Se ha es-
demencia de causa vascular son tan varia- peculado que la perfusión al límite (perfu-
dos como los de la patología vascular cere- sión de miseria) podría por si misma cau-
bral (Tabla 2). Ya se ha descrito en el epí- sar disfunción neuronal (deterioro
grafe anterior cómo las lesiones que se cognitivo) aun cuando no se desarrollara
detectan en el análisis anatomopatológico infarto o muerte neuronal. Sería esta una
de los cerebros de pacientes con DV son forma de disfunción neuronal isquémica
muy variadas. Cada una de ellas tiene reversible. No obstante, los casos bien
mecanismos etiopatogénicos propios cuya documentados de demencia o deterioro

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DETERIORO COGNITIVO Y DEMENCIA DE ORIGEN VASCULAR

Tabla 2. Lesiones vasculares asociadas a DCV y sus mecanismos etiopatogénicos.


Tipo de lesión Mecanismo etiopatogénico
Infarto cortical Aterotrombosis
Cardioembolismo
Coagulopatía
Infarto fronterizo (hipoperfusión)
Infarto lacunar Arteriolosclerosis
Angiopatía amiloide
Otras microangiopatías (diabetes, hereditarias)
Embolismo (?)
Leucoaraiosis Isquemia distal
Ruptura BHE
Infarto incompleto Hipoperfusión
Anoxia
Penumbra isquémica (en infartos establecidos)
Atrofia granular cortical Microangiopatías
Microembolismo
Atrofia Asociada a infartos
Infarto incompleto (?)
Apoptosis (?)

cognitivo que han mejorado tras la revas- Willis y aquellas que lo hacen desde el sis-
cularización (by-pass extra-intracraneal) o tema meningocortical y podrían ser conse-
resolución de una estenosis grave (endar- cuencia de un estado de perfusión al lími-
terectomía o angioplastia) son hasta la te en estas zonas. No obstante, la peculiar
fecha sólo anecdóticos. distribución perivascular de las lesiones
iniciales ha llevado a pensar que la vacuo-
El infarto lacunar se relaciona con la lización y desmielinización podrían estar
oclusión de las pequeñas arterias pe- en relación con un aumento de la permea-
netrantes del cerebro24 y ésta con la pre- bilidad vascular (ruptura de la barrera
sencia de patología de pequeños vasos hematoencefálica) con salida de proteínas
(arteriolosclerosis hipertensiva, microan- plasmáticas al parénquima22, lo que podría
giopatía diabética, angiopatía amiloide, poner en marcha un mecanismo de infla-
arteriopatías hereditarias). Se ha defendi- mación y reacción glial. En cualquier caso,
do también el mecanismo embólico o la ambos mecanismos tienen un origen emi-
oclusión del ostium de las arterias perfo- nentemente vascular.
rantes por una placa de ateroma para
explicar algunos infartos de tipo lacunar.
Algunas lagunas podrían corresponder a La formulación del concepto de infarto
pequeñas hemorragias. incompleto permite un enfoque novedoso
en cuanto a otros posibles mecanismos
La etiopatogenia de la L-A no está del etiopatogénicos del DCV. Tales lesiones
todo aclarada30. Dado que habitualmente la podrían ser consecuencia de episodios de
desmielinización y vacuolización se aso- isquemia que por su intensidad baja o su
cian a arteriolosclerosis intensa y extensa duración corta no producen infartos cavi-
y teniendo en cuenta que es frecuente la tados pero si necrosis neuronal. Este fenó-
asociación con infartos lacunares se ha meno podría ocurrir cuando la isquemia
postulado que la L-A obedecería a un tiene lugar sobre poblaciones neuronales
mecanismo de isquemia por hipoperfusión especialmente vulnerables a la isquemia
mantenida. En este sentido se han descrito como lo son las del sector CA1 del hipo-
las lesiones propias de la L-A como “infar- campo o las del las láminas III y V de la cor-
tos incompletos” de la sustancia blanca. teza. Es llamativo que la necrosis laminar
Algunas lesiones se localizan fundamental- de la corteza se produzca fundamental-
mente en los territorios limítrofes entre las mente en territorios vasculares frontera
arterias que penetran desde el polígono de donde es más probable que se produzca

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hipoperfusión en relación con disfunción demencia en pacientes con enfermedad


de la autorregulación del flujo sanguíneo vascular cerebral. Algunos autores como
cerebral (perfusión de miseria o hipoerfu- del Ser han dado especial importancia a
sión distal). En este sentido, los episodios las lesiones isquémicas del lóbulo tempo-
de hipotensión arterial (hipotensión ortos- ral35. Otros trabajos no han señalado corre-
tática, bradiarritmias) o de hipoxia (apnea lación alguna entre demencia y localiza-
de sueño, procesos respiratorios) pueden ción o gravedad de las lesiones. La
constituirse en factores etiopatogénicos existencia de atrofia cerebral es, como se
importantes31. ha señalado, uno de los hallazgos que de
manera más consistente se describe en
El gran dilema de la fisiopatología del pacientes con DV. Sin embargo, los meca-
DCV radica en explicar cómo una patología nismos a los que obedece dicha atrofia y
eminentemente aguda como es el infarto su relevancia en cuanto a la aparición y
cerebral se convierte en un proceso cróni- progresión de la alteración cognitiva están
co en el que las facultades intelectuales por dilucidar.
van perdiéndose de manera progresiva. Se
han formulado diversas hipótesis en este Tradicionalmente las únicas lesiones
sentido32. que son objeto de análisis y cuantificación
en los estudios topográficos o volumétri-
Se ha dado importancia a la cantidad o cos han sido los infartos corticales o lacu-
volumen de tejido cerebral lesionado o nares y la L-A. En los últimos años, la neu-
infartado, que estaría en relación con el roimagen funcional ha aportado datos
número de infartos y el tamaño de los mis- sólidos en el sentido de que las áreas cere-
mos como principal determinante de la brales disfuncionales pueden ser más
aparición de alteración cognitiva (hipóte- amplias que las detectadas en la neuroi-
sis volumétrica)33. En un principio se había magen estructural36. Los fenómenos de
establecido que aparece demencia cuando diasquisis, según los cuales una lesión vas-
el volumen de infarto sobrepasa los 100 cular produce hipoperfusión e hipofunción
ml. Posteriormente, estudios anatomopa- en áreas distantes o la presencia de infar-
tológicos y de neuroimagen han mostrado tos incompletos podrían explicar esta
que tal umbral es variable y puede apare- observación. Se ha postulado también que
cer demencia con volúmenes mucho la isquemia podría ser responsable del
menores de infarto34. arranque y posterior mantenimiento de
La topografía o localización de las determinados fenómenos a nivel celular y
lesiones vasculares ha sido también objeto molecular, entre los que se incluyen fenó-
de estudio (hipótesis topográfica)33. En menos inflamatorio o de muerte celular
algunos casos de DV el cuadro cognitivo programada (apoptosis) que en última ins-
completo puede achacarse a la presencia tancia serían responsables de muerte neu-
de un solo infarto de localización capri- ronal.
chosa. Son las llamadas DV por infarto La asociación a otra patología de tipo
estratégico entre las que se incluyen los degenerativo (enfermedad de Alzheimer)
infartos del gyrus angular, los infartos talá- es otra de las hipótesis que se esgrimen
micos bilaterales paramedianos, infartos para explicar cómo la enfermedad vascu-
de la arteria cerebral anterior que involu- lar cerebral puede ser causa de un cuadro
cran el prosencéfalo basal, infartos sub- de deterioro cognitivo progresivo y
corticales en la cabeza del núcleo caudado demencia32. Es el caso de la demencia
o infartos lacunares en la porción caudal mixta que se discute más adelante.
de la rodilla de la cápsula interna20. Se trata
no obstante de casos poco frecuentes. Quedan muchas preguntas por respon-
Cuando se analiza la DV en conjunto, la der en cuanto a la manera en que la lesión
lesión del hemisferio dominante, la afecta- cerebral de origen vascular destruye el
ción bilateral, la localización cortical en engranaje anatomofuncional que da sus-
unos casos o subcortical en otros son cir- tento a las funciones cognitivas. En algu-
cunstancias que han mostrado una asocia- nos aspectos como el lenguaje o la aten-
ción significativa con la existencia de ción espacial puede existir una clara

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DETERIORO COGNITIVO Y DEMENCIA DE ORIGEN VASCULAR

correlación entre el déficit y la lesión de muestre deficitaria. También podría ocu-


determinadas áreas corticales. Sin embar- rrir que lesiones localizadas en distintas
go, en el campo del deterioro cognitivo o zonas ocasionaran alteraciones de una
la demencia toman mayor relevancia fun- misma función. En consecuencia, según
ciones como la memoria, orientación, fun- este modelo tanto el tamaño o volumen
ciones ejecutivas o, aún más, los trastor- como la localización de las lesiones isqué-
nos psicológicos o de la conducta en los micas son importantes y se entiende que
que difícilmente puede establecerse una no deben hacerse prejuicios respecto a
conexión anátomo-fenomenológica. Es qué funciones cognitivas han de estar afec-
posible, como ha postulado Mesulam, que tadas37.
el funcionamiento cerebral se asiente
sobre complejas redes neurales en las que NEUROIMAGEN EN LA DEMENCIA
determinadas poblaciones celulares corti- VASCULAR
cales o de los núcleos grises subcortiales El diagnóstico de DV sólo puede esta-
se conectan entre si mediante fibras que blecerse cuando se demuestra la existen-
viajan por la sustancia blanca. Una deter- cia de enfermedad vascular cerebral, haya
minada función cognitiva podría utilizar sido esta sintomática o no. La exploración
componentes de distintas redes y vicever- neurorradiológica es por tanto imperativa
sa. Puede que una lesión en un área deter- en el estudio del DCV38. Además, la neuroi-
minada provoque déficits en varias funcio- magen estructural (TC o RM) aportará
nes o puede que se requieran lesiones en información imprescindible para el diag-
distintos lugares para que una función se nóstico tanto en el sentido de demostrar la

Figura 2. Infarto cortical en el territorio de la arteria cerebral media izquierda.

ANALES Sis San Navarra 2000, Vol. 23, Suplemento 3 157


P. Martínez-Lage et al

existencia de patología vascular cerebral localización subcortical. Se presentan


como a la hora de establecer el tipo de tanto en ganglios basales como en tálamo,
lesiones y orientar así el diagnóstico etio- sustancia blanca o tronco cerebral (Fig. 4).
lógico. La patología vascular de la sustancia
Los infartos corticales aparecen en la blanca o L-A puede observarse en la TC
TC como lesiones hipodensas en forma de como una hipodensidad de localización
cuña que dibujan un territorio vascular periventricular, sobre las astas frontales
(Fig. 2). En la RM la lesión cavitada apare- occipitales o en los centros semiovales16
cerá hipointensa en las secuencias T1 e (Fig. 5A). En la RM la L-A aparece en forma
hiperintensa en las imágenes en T2 (Fig. 3). de lesiones hiperintensas localizadas igual-
Los infartos lacunares tienen un compor- mente en la región periventricular o en la
tamiento similar. Por definición son de sustancia blanca subcortical. A diferencia
pequeño tamaño, inferior a 1,5 cm y de de la TC, en la RM no es infrecuente detectar

Figura 3. RM, Infarto isquémico en el territorio de la arteria cerebral media derecha.

158 ANALES Sis San Navarra 2000, Vol. 23, Suplemento 3


DETERIORO COGNITIVO Y DEMENCIA DE ORIGEN VASCULAR

Figura 4. TC. Infarto lacunar talámico izquierdo.

lesiones hiperintensas periventriculares en lesiones subcorticales de aspecto parchea-


forma de casquetes sobre las astas frontales do, parcheado-confluente o de carácter difu-
u occipitales o en forma de ribetes juntoal so39 (Figs. 5C-E). Sin embargo, incluso en
cuerpo de los ventrículos laterales en per- este tipo de lesiones, parece que la RM no es
sonas normales sin deterioro cognitivo. capaz de distinguir aquellas en las que sólo
También son frecuentes en personas mayo- hay edema o mínima desmielinización de
res las lesiones hiperintensas pequeñas y otras en las que la desmielinización es más
puntiformes (menores de 2x2 mm) en las intensa y hay también daño axonal. Este
sustancia blanca subcortical (Fig. 5B). En hecho, que ha sido profundamente estudia-
general, estas lesiones carecen de significa- do por el grupo de Tuñón, Delgado y Olier
ción clínica o son únicamente expresión de en el Hospital de Navarra explicaría el
gliosis subependimaria (casquetes y ribe- hecho de que pacientes con lesiones exten-
sas de L-A presenten una función cognitiva
tes), atrofia cerebral o aumento de los espa-
completamente normal.
cios perivasculares de Virchow-Robin (lesio-
nes puntiformes). La limitación del uso de la Como se ha dicho, la neuroimagen
RM radica en su excesiva sensibilidad. Las estructural es necesaria para establecer el
lesiones de L-A que parecen guardar rela- diagnóstico de DV. Sin embargo, no se dis-
ción con mecanismos vasculares y contri- pone hoy de datos neurorradiológicos que
buyen al deterioro cognitivo son aquellas permitan establecer una correlación direc-
lesiones periventriculares que se presentan ta causa-efecto entre deterioro cognitivo y
separadas de los ventrículos extendiéndose enfermedad vascular cerebral. Cuando se
sobre la sustancia blanca subcortical o las analizan los estudios en los que se han

ANALES Sis San Navarra 2000, Vol. 23, Suplemento 3 159


P. Martínez-Lage et al

Figura 5. Leucoaraiosis. (A) TC, hipodensidad periventricular en astas frontales y occipitales; (B) RM,
lesiones hiperintensas puntiformes; (C) RM, lesiones parcheadas; (D) RM, lesiones parchea-
das y confluentes; (E) RM, lesiones difusas.

comparado pacientes vasculares con y sin hemisferio izquierdo, presencia de L-A, y,


demencia la falta de uniformidad y consis- especialmente la evidencia de atrofia cere-
tencia en los hallazgos ha limitado su apli- bral (en cualquiera de sus medidas: volu-
cación clínica. En la tomografía axial el men ventricular, dilatación del III ventrícu-
mayor número de infartos, la afectación del lo o de los ventrículos laterales, dilatación

160 ANALES Sis San Navarra 2000, Vol. 23, Suplemento 3


DETERIORO COGNITIVO Y DEMENCIA DE ORIGEN VASCULAR

de los surcos corticales) se observan con tos corticales como en pacientes con infar-
mayor frecuencia entre los pacientes cere- tos lacunares y L-A. Como se ha argumen-
brovasculares demenciados40. Los hallaz- tado, estos hallazgos pueden correspon-
gos son similares en la resonancia en la que der a fenómenos de diasquisis, zonas de
tanto la atrofia como la presencia de lesio- infarto incompleto o áreas hipofuncionan-
nes hiperintensas parcheadas y confluen- tes en relación con fenómenos de desco-
tes de la sustancia blanca son predictores nexión como ocurre con las regiones fron-
significativos de demencia41. Estos mismos tales en pacientes con lesiones
parámetros se asocian con deterioro cog- subcorticales de ganglios basales. La neu-
nitivo cuando los estudios se centran roimagen funcional (PET) en la que se
selectivamente en pacientes con lesiones combinen los estudios de flujo con deter-
vasculares subcorticales. El grupo de Pulli- minaciones de consumo y fracción de
cino en Buffalo42 ha propuesto una serie de extracción de oxigeno pueden permitir la
criterios para la valoración de la TC en el detección de áreas de perfusión al límite o
proceso diagnóstico de DV. Tales criterios de miseria potencialmente susceptibles de
se basan en la existencia de infartos, volu- intervención si están en relación con este-
men ventricular, índice ventricular y grado nosis arteriales accesibles43.
de L-A y permiten establecer 4 niveles de
probabilidad de DV desde DV ausente a DV CLÍNICA DEL DCV. CLASIFICACIÓN
probable (Tabla 3). A pesar de que hay una DE LA DV
asociación lineal significativa entre porcen-
taje de pacientes con demencia y grado en A lo largo de todo este capítulo se ha
la neuroimagen, la complejidad de las venido expresando la enorme heterogenei-
medidas que han de aplicarse hacen estos dad de lesiones, mecanismos etiopatogéni-
criterios poco útiles en la práctica clínica. cos y hallazgos neurorradiológicos que
subyacen a lo que sería el cuadro clínico
La aplicación de la neuroimagen fun- de la DV. La DV es una entidad heterogénea
cional (SPECT y PET) al estudio del DCV se multifactorial y plurietiológica de ahí que
encuentra en pleno desarrollo. Las imáge- en los últimos años se ha preferido aplicar
nes de SPECT muestran defectos parchea- la denominación en plural de demencias
dos irregulares de captación del trazador vasculares. No es posible por tanto reali-
que son reflejo de la presencia de lesiones zar una descripción única de los aspectos
isquémicas. Pueden observarse también clínicos sin una clasificación previa de los
déficits de captación en zonas que inicial- distintos tipos de demencia vascular.
mente no muestran lesión en las pruebas La mayoría de los intentos de clasifica-
de neuroimagen estructural36. Este fenóme- ción de las DV siguen el esquema de la
no se observa tanto en pacientes con infar- tabla 444.

Tabla 3. Criterios neurorradiológicos de demencia vascular33.


Grado Descripción Criterios
0 DV ausente Sin infartos, EL-A < 3; IV, cualquiera
1 DV improbable Un infarto; VOL<100 ml; IV, cualquiera
Infartos múltiples; VOL<100ml; IV<60
EL-A: 3, IV<60
2 DV posible Infartos múltiples; VOL<100ml; IV∆60
Infarto(s); VOL∆100ml; IV<60
EL-A: 3; IV∆60
EL-A: 4; IV<60

3 DV probable Infarto(s); VOL ∆100 ml; IV∆60


EL-A: 4; IV ∆60
EL-A: Escala de gravedad de lesión de la sustancia blanca (método de van Swieten et al, 1990)
VOL: Volumen de infarto (Método de Nelson et al, 1980)
IV: Indice ventricular (método de Hughes y Gado, 1981)

ANALES Sis San Navarra 2000, Vol. 23, Suplemento 3 161


P. Martínez-Lage et al

Tabla 4. Clasificación de la demencia vascular. riosclerótica combina la presencia de lagu-


nas múltiples y L-A; en el caso del estado
Demencia Multi-infarto
lacunar cuando hay demencia es habitual
Demencia por infarto estratégico
Patología de pequeño vaso
que también coexista L-A; y en la enferme-
Demencia subcortical senil
dad de Binswanger los hallazgos neuropato-
Lagunas múltiples lógicos y neurorradiológicos son lagunas
Enfermedad de Binswanger múltiples y L-A; la angiopatía amiloide es
Angiopatía amiloide una causa más, junto a la hipertesión de
Hipoperfusión arteriolopatía, infartos lacunares y L-A.
Isquemia global
Isquemia fronteriza Demencia por hipoperfusión
Infarto incompleto
La demencia por hipoperfusión estaría
Demencia hemorrágica
causada por lesiones isquémicas de meca-
nismo hemodinámico o hipóxico31. Se
Demencia multi-infarto incluyen por tanto los infartos fronterizos
Demencia multi-infarto es un término y también la demencia que podría estar
que inicialmente fue acuñado para denomi- ocasionada por los todavía mal definidos
nar a todas las DV y recalcar el hecho de (en cuanto a sus manifestaciones clínicas y
que la demencia era debida a la acumula- detección radiológica) infartos incomple-
ción de múltiples infartos45. En la actualidad tos27. Nuevamente surge la confusión dado
se entiende pr demencia multi-infarto sólo que la hipoerfusión puede también ser
aquella que responde a la acumulación de causa de lesión subcortical de la sustancia
infartos múltiples corticales en el territorio blanca e incluso infartos lacunares como
de arterias de calibre mediano o grande. puede ocurrir tras cirugía cardiaca.

Demencia por infarto estratégico Demencia hemorrágica


La demencia por infarto estratégico Se incluirían bajo este epígrafe los cua-
sería aquella en la que el cuadro de demen- dros de demencia secundarios a la acumu-
cia con múltiples déficit cognitivos sería lación de hematomas intraparenquimato-
consecuencia de una única lesión isquémi- sos cuya etiología, factores de riesgo,
ca de localización caprichosa20. Tal lesión neurorradiología, manifestaciones clínicas
puede ser tanto de tipo cortical como sub- y tratamiento están en general bien esta-
cortical y responder a etiologías diversas. blecidos. Los hematomas hipertensivos
Se incluirían bajo este epígrafe la demen- son los más frecuentes. En pacientes no
cia secundaria a infarto cortical en el gyrus hipertensos con demencia hemorrágica
angular, la demencia que se asocia a infar- habrán de buscarse causas más raras de
tos talámicos uni o bilaterales o aquella hemorragia como coagulopatías, vasculi-
secundaria a lesión lacunar en la porción tis, malformaciones arteriovenosas. Hay
más caudal de la rodilla de la cápsula inter- algunas formas que requieren especial
na. Todas estas entidades muestran mani- atención como son las demencias hemo-
festaciones clínicas, radiológicas y etiopa- rrágicas familiares asociadas a angiopatía
togénicas muy diversas. amiloide hereditaria.
Este tipo de clasificaciones mezclan
Demencia por patología de pequeño criterios topográficos, anatomopatológi-
vaso cos o etiopatogénicos por lo que a la hora
En el apartado de demencias por patolo- del diagnóstico clínico, el médico se ve
gía de pequeño vaso se incluyen también limitado por la escasa información que
entidades distintas que tienen en común la dicha clasificación aporta para establecer
presencia de lesiones subcorticales, lagunas correlaciones clínico-radiológicas y, sobre
y L-A. Se entremezclan de manera algo con- todo clínico-etiopatogénicas. Esto es espe-
fusa conceptos topográficos, anatómicos y cialmente importante en los casos más
etiológicos. Se discute más adelante cómo la inicpientes de DCV. En el estado actual de
encefalopatía o demencia subcortical arte- conocimiento se echa en falta un método

162 ANALES Sis San Navarra 2000, Vol. 23, Suplemento 3


DETERIORO COGNITIVO Y DEMENCIA DE ORIGEN VASCULAR

de clasificación que permita aventurar un nopsia u otros. Puede hipotetizarse que el


diagnóstico etiológico a partir del cuadro patrón patocrómico clásicamente adscrito
clínico. En este sentido puede ser útil ini- a la DV de inicio agudo y deterioro escalo-
cialmente la clasificación del DCV en dos nado y fluctuante se produzca con mayor
grandes grupos sindrómicos como el DCV frecuencia en estas formas de DCV corti-
cortical y el DCV subcortical46. cal.
En el DCV cortical pueden encontrarse En el caso del DCV subcortical, las
distintas combinaciones de trastornos en características que definen fundamental-
el área del lenguaje, praxis, funciones mente el patrón de deterioro cognitivo son
visuoespaciales o visuoconstructivas, cál- las alteraciones de las funciones ejecuti-
culo y también déficit de memoria. Aunque vas, los trastornos de la atención y capaci-
las funciones mnésicas se consideran dad de concentración, la pérdida de inicia-
como una función cognitiva dispersa, sin tiva y falta de motivación, y los cambios
una representación cortical concreta, está importantes de carácter y personalidad a
bien establecido que algunos procesos, lo que se suman importantes manifesta-
especialmente aquellos relacionados con ciones de tipo neuropsiquiátrico en forma
el registro, almacenamiento o aprendizaje fundamentalmente de trastornos afecti-
de nueva información requieren la indem- vos, apatía o abulia24. El trastorno de
nidad de la corteza temporal y las forma- memoria puede ser prominente, pero a
ciones hipocámpicas47. Los infartos en el diferencia de las formas corticales los défi-
territorio de la arteria cerebral posterior y cits de memoria pueden mejorar si se
cerebral media pueden involucrar estas administran pistas para la evocación, se
áreas y dar lugar a trastorno de memoria realizan tareas de aprendizaje asistido o se
en el contexto de una DV cortical. Junto a corrigen los déficits atencionales durante
los déficits cognitivo puede ser también la exploración. A todo ello hay que añadir
importantes lo síntomas conductuales y la casi constante asociación de trastornos
psicológicos que en general han sido poco del control motor como alteración de la
estudiados en la DV. Se conoce bien que marcha que se hace lenta y a pequeños
las lesiones frontales izquierdas pueden pasos con riesgo de caída, rigidez parató-
dar lugar a síndromes depresivos, o que nica, marcada lentitud de movimientos,
las lesiones parietooccipitales pueden dar temblor, y síndrome pseudobulbar25. Tam-
lugar a alucinaciones e ideas delirantes48. bién es frecuente la urgencia miccional e
La gran mayoría de pacientes con este tipo incontinencia. Los signos focales como
de DCV cortical mostrarán dos o más infar- hemiparesia, hiperreflexia, Babinski, rigi-
tos grandes corticales o corticosubcorti- dez, exaltación de reflejos peribucales,
cales en el territorio de arterias de media- liberación de reflejos primitivos son prác-
no o gran calibre, que responderán a un ticamente una constante en la exploración.
mecanismo aterotrombótico o cardioem- La gran mayoría de las clasificaciones pro-
bólico y serán puestos de manifiesto puestas para la DV han identificado el
mediante pruebas de neuroimagen. Este deterioro subcortical con la patología de
sería el cuadro correspondiente a la llama- los pequeños vasos cerebrales (arteriolos-
da demencia multi-infarto. Ha de tenerse clerosis) y se han distinguido tres entida-
en cuenta también la posibilidad de los des: la enfermedad de Binswanger, el esta-
infartos fronterizos de mecanismo hemo- do lacunar y la leucoencefalopatía
dinámico o hipóxico como posible causa isquémica. Las tres entidades comparten
de DCV cortical47. En casos mucho más manifestaciones clínicas, radiológicas, así
raros la etiología puede estar en algunas como factores de riesgo y es posible que
vasculitis que afectan a arterias de media- las tres entidades constituyan un único
no o gran calibre como la arteritis de célu- síndrome con diversas etiologías. La hiper-
las gigantes. La distribución topográfica tensión, la diabetes, algunas CADASIL,
de las lesiones en el DCV cortical hará que también la angiopatía amiloide e incluso
el cuadro cognitivo se acompañe también algunos estados de hipercoagulabilidad
de distintos signos focales de daño corti- (poliglobulia, aumento del fibrinógeno)
coespinal, síndromes sensitivos, hemia- pueden causar un cuadro clínico y neuro-

ANALES Sis San Navarra 2000, Vol. 23, Suplemento 3 163


P. Martínez-Lage et al

rradiológico indistinguible de lo que se ha la anatomía patológica puede mostrar un


denominado enfermedad de Binswanger. acúmulo de lesiones hemorrágicas anti-
También los episodios de hipotensión o guas macroscópicas lobares en unos casos
hipoxia repetidos podrían contribuir etio- o más pequeñas y de localización cortical
patogénicamente al daño isquémico sub- en otros; también pueden hallarse lesiones
cortical. En definitiva el cuadro clínico que vasculares isquémicas no hemorrrágicas
se ha descrito, lo que de manera generali- corticales y subcorticales y, por supuesto,
zada se conoce como enfermedad de Bins- patología supuestamente isquémica de la
wanger, constituye en realidad un síndro- sustancia blanca. La AA se ha relacionado
me que puede responder a muy diversas etiológicamente también con la atrofia gra-
etiologías y mecanismos etiopatogénicos nular cortical23 y se ha descrito como
(¿síndrome de Binswanger?)37. Ha de des- hallazgo anatomopatológico en casos clíni-
tacarse que en estos casos de DCV subcor- ca y patológicamente indistinguibles de
tical no parece infrecuente que el cuadro una enfermedad de Binswanger. Esta forma
clínico siga un curso lentamente progresi- de vasculopatía del pequeño vaso cerebral
vo que obliga simpre a plantear la alterna- debe considerarse por tanto, como posible
tiva diagnóstica de la demencia mixta si causa de demencia vascular cortical o sub-
bien se han descrito casos en los que los cortical, aún en ausencia de hemorragia
hallazgos necrópsicos incluyen únicamen- cerebral, aún en ausencia de historia fami-
te patología vascular. liar y, especialmente en ausencia de facto-
res de riesgo vascular. En estos casos la
demencia puede seguir un curso progresi-
Angiopatía amiloide vo más o menos rápido que no necesaria-
La angiopatía amiloide (AA) se caracte- mente debe ir precedido o acompañado de
riza por el depósito de una proteína ami- déficits neurológicos de presenctación
loide en la adventicia y la media de las ictal. La RM puede poner de manifiesto
pequeñas arterias y arteriolas de la corte- depósitos de hemosiderina como señal de
za cerebral y en menor medida del cerebe- antiguas hemorragias lobares o corticales.
lo. Está muy relacionada con la edad y, En otros casos no hay evidencia de hemo-
salvo en los casos familiares, no se descri- rragia pero si de múltiples infartos y pato-
be en personas menores de 60 años. Su logía de la sustancia blanca.
prevalencia en personas ancianas es varia-
ble y puede observarse en un 15 a un 50%
de autopsias no seleccionadas, alcanzando
Arteriopatía Cerebral Autosómica
un 80-90% cuando se trata de pacientes Dominante con Infartos
con EA. Aunque clásicamente la AA se ha Subcorticales y Leucoencefalopatía
relacionado con la hemorragia cerebral (CADASIL)
lobar, algunos enfermos muestran única-
mente infartos isquémicos o leucoencefa- Es una forma hereditaria de DV que se
lopatía49. Algunos enfermos con angiopatía caracteriza por la presencia de una arte-
amiloide y demencia no presentan los cam- riopatía no arteriolosclerótica y sin depó-
bios neuropatológicos típicos de la EA. Es sito de amiloide, que afecta los pequeños
decir, la AA puede por si misma producir vasos penetrantes de los ganglios de la
demencia y ésta, con toda probabilidad, base y la sustancia blanca y da lugar a
obedecerá a mecanismos de tipo vascular. infartos subcorticales, leucoencefalopatía
Esta afirmación es cierta tanto para las for- y demencia. Las primeras descripciones
mas esporádicas como para las formas de esta entidad corresponden a Sourander
familiares de AA. en el año 1977 (demencia multi-infarto
hereditaria). En la última década los traba-
En algunas series consecutivas, no jos de Tournier-Lasserve y sus colegas en
seleccionadas, de enfermos con AA espo- Francia han puesto de manifiesto que esta
rádica la proporción de enfermos con forma genética de demencia vascular, a la
demencia puede acanzar un 30 a un 50% de que denominaron con el nombre de CADA-
los enfermos y sólo la mitad de ellos tienen SIL (acrónimo del inglés Cerebral Autoso-
EA50. Cuando no hay una EA concomitante, mal Dominant Arteriopathy with Subcortical

164 ANALES Sis San Navarra 2000, Vol. 23, Suplemento 3


DETERIORO COGNITIVO Y DEMENCIA DE ORIGEN VASCULAR

Infarcts and Leucoencephalopathy) puede pos lo más homogéneos posible de forma


ser más frecuente de lo que en un princi- que se puedan alcanzar conclusiones váli-
pio se habría pensado51. Clínicamente se das respecto a etiología, factores de ries-
caracteriza por la combinación de ictus, go, medidas preventivas y terapéuticas.
migraña con aura, depresión y, posible-
metne, epilepsia en los miembros de una CRITERIOS DIAGNÓSTICOS
misma familia. El ictus es la forma de pre-
VIGENTES DE DEMENCIA VASCULAR
sentación habitual. Se trata de infartos
subcorticales pequeños que en la mayor Se han formulado series de criterios
parte de los casos siguen el patrón clínico que se han incluido dentro de otras herra-
de uno de los cuatro síndromes lacunares mientas diagnósticas de uso general y que
clásicos. Aproximadamente la mitad de los desarrollan principios globales de diag-
enfermos con ictus presentan además otra nóstico de la demencia y sus distintos
manifestación de la enfermedad como tipos incluida, claro está, la DV. Se trata de
demencia, migraña o trastornos afectivos los propuestos por el manual diagnóstico
(depresión, psicosis bipolar)52. La demen- y estadístico de la asociación Americana
cia es característicamente subcortical de Psiquiatría (Diagnostic and Statistical
(síndrome de Binswanger) y puede seguir Manual, DSM-IV)53 o de los incluidos en la
un patrón lentamente progresivo o avan- clasificación Internacional de Enfermeda-
zar de forma escalonada. En las pruebas des de la Organización Mundial de la Salud
de neuroimagen aparecen infartos subcor- (CIE-10)54.
ticales en ganglios basales y L-A profusa. El Están disponibles también otras series
diagnóstico de presunción de CADASIL es de criterios que se han diseñado específi-
probablemente fácil de establecer en un camente para la DV y que han sido formu-
paciente joven que sin antecedentes de lados por consenso entre distintos grupos
riesgo vascular presenta un ictus de tipo de expertos (Tablas 5, 6). Son los criterios
lacunar, muestra lesiones de la sustancia del National Institute of Neurological Disor-
blanca en las pruebas de neuroimagen y ders and Stroke-Association Internationale
además tiene una historia personal o fami- pour la Recherche et l’ensignement en Neu-
liar positiva para migraña con aura, tras- rosciences (NINDS-AIREN)55 o los estableci-
tornos afectivos o demencia de tipo sub- dos por los centros diagnósticos y tera-
cortical. Debe excluirse en todo caso otras péuticos de enfermedad de Alzheimer del
posibles causas genéticas de ictus y pato- estado de California (Alzheimer’s Disease
logía de la sustancia blanca como la angio- Diagnostic and Therapeutic Centres,
patía amiloide, síndrome MELAS, dislipo- ADDTC)56.
proteinemias, enfermedad de Fabry,
homocistinuria, coagulopatías, síndrome Una y otra propuesta de criterios mere-
antifosfolípido. Algunos autores han pro- cen una serie de consideraciones a los tres
puesto la realización de biopsia de piel y niveles: definición de demencia, definición
músculo en búsqueda d e la angiopatía de enfermedad vascular cerebral y defini-
característica aunque la sensibilidad/espe- ción de su relación causal11. En primer lugar,
cificidad de este test diagnóstico no están en ningún caso se consideran los cambios
firmemente establecidas. Se conocen ya cognitivos tempranos. Sólo el deterioro
algunas mutaciones localizadas en el gen avanzado que ya provoca alteraciones de
Notch-3 del cromosoma 19 por lo que pue- las actividades cotidianas laborales o socia-
den plantarse las pruebas genéticas para les (demencia) es susceptible de recibir un
el diagnóstico. diagnóstico. Ninguno de estos criterios per-
mite por tanto detectar pacientes en los
La clasificación del DCV es tan comple- que se pueda aplicar ninguna medida pre-
ja y laboriosa como necesaria para poder ventiva. La definición de demencia que se
avanzar en el conocimiento del mismo. aplica parece haberse extraído más bien
Los neurólogos, geriatras, psiquiatras, del cuadro clínico correspondiente a la
médicos generales deberían guiarse por enfermedad de Alzheimer. Por otro lado la
criterios clínicos y etiopatogénicos a la forma en que se define la presencia de pato-
hora de clasificar a estos pacientes en gru- logía vascular cerebral por parte de los cri-

ANALES Sis San Navarra 2000, Vol. 23, Suplemento 3 165


P. Martínez-Lage et al

Tabla 5. Criterios NINDS-AIREN para demencia vascular probable.


I. Los criterios para el diagnóstico de Probable demencia vascular incluyen todos los siguientes:
1. Demencia definida como declinar cognitivo desde un nivel de funcionamiento previo más alto
que se manifiesta por alteración de la memoria y de dos o más áreas cognitivas (orientación, atención,
lenguaje, funciones visoespaciales, funciones ejecutivas, control motor, praxis), que preferiblemente
habrá sido establecido en la exploración clínica y se habrá documentado mediante evaluación neu-
ropsicológica; estos déficits serán lo suficientemente graves como para interferir con las actividades
de la vida diaria más allá de las limitaciones físicas debidas al ictus.
Criterios de exclusión: Se excluyen los casos con trastornos del nivel de consciencia, cuadros
confusionales, psicosis, afasia o déficit sensitivo o motor grave. Quedan también excluidas otras enfer-
medades sistémicas o cerebrales que puedan causar deterioro cognitivo.
2. Enfermedad cerebrovascular definida por la presencia de signos focales en la exploración neu-
rológica como hemiparesia, paresia facial central, signo de Babinski, déficit sensitivo, hemianopsia, y
disartria compatibles con ictus (haya o no historia previa de ictus) y evidencia de enfermedad vascu-
lar cerebral relevante por neuroimagen (TAC o RM) incluyendo infartos múltiples de grandes arterias o
un infarto único en lugar estratégico (giro angular, tálamo, prosencéfalo basal, territorio de la ACP o
ACA) así como lagunas múltiples en ganglios basales y sustancia blanca o lesiones extensas de la sus-
tancia blanca periventricular, o cualquier combinación de las mismas.
3. Una relación entre las dos entidades manifestada o sugerida por una o más de las siguientes:
a) Inicio de la demencia en los tres meses siguientes a un ictus clínicamente reconocido; b) deterioro
agudo de la función cognitiva; o fluctuación o progresión escalonada de los déficits cognitivos.

II. Los datos clínicos que son compatibles con DV probable incluyen
(a) Trastorno de la marcha temprano (marcha a pequeños pasos o marche à petits pas, o marcha par-
kinsoniana, apráxica-atáxica o imantación); (b) historia de inestabilidad y caídas inmotivadas frecuen-
tes; (c) urgencia miccional o aumento de la frecuencia y otros síntomas urinarios no explicables por
enfermedad urológica; (d) parálisis pseudobulbar; y (e) cambios afectivos y de personalidad, abulia,
depresión, labilidad emocional u otros déficit subcorticales incluyendo el enlentecimiento psicomotor
y anormalidad de las funciones ejecutivas.

III. Los rasgos que hacen incierto o improbable un diagnóstico de DV incluyen: (a) trastorno de memo-
ria temprano y empeoramiento progresivo de la función mnésica y ortas funciones cognitivas como
lenguaje (afasia sensitiva transcortical), habilidad motora (apraxia), o percepción (agnosia) en ausen-
cia de la correspondiente lesión focal en la imagen cerebral; (b) ausencia de signos neurológicos foca-
les más allá del trastorno cognitivo; y (c) ausencia de lesiones cerebrovasculares en la RM o TC cere-
bral.

IV. El diagnóstico clínico de DV posible puede hacerse en presencia de demencia (sección I-1) con sig-
nos neurológicos focales en pacientes en los que no se dispone de pruebas de imagen cerebral para
confirma un EVC definida; o en ausencia de una clara relación temporal entre demencia e ictus; o en
pacientes con un inicio insidioso y un curso variable (plateau o mejoría) de los déficit cognitivos en los
que hay evidencia de EVC relevante.

V. Son criterios de DV definida: (a) criterios clínicos de DV probable; (b) evidencia histopatológia de
EVC obtenida por autopsia o biopsia; ausencia de ovillos neurofibirlares y placas neuríticas en exceso
a lo esperable por la edad; y (d) ausencia de otros procesos clínicos o patológicos capaces de produ-
cir demencia.

VI. Puede hacerse una clasificación de DV para investigación sobre la base de las características clíni-
cas, radiológicas y neuropatológicas en el caso de algunas subcategorías o entidades definidas como
la DV cortical, DV subcortical, BD, y demencia talámica.

166 ANALES Sis San Navarra 2000, Vol. 23, Suplemento 3


DETERIORO COGNITIVO Y DEMENCIA DE ORIGEN VASCULAR

terios NINDS-AIREN (Tabla 6) puede resul- un mismo cerebro enfermedad vascular


tar demasiado restrictiva dado que exige cerebral y cambios neuropatológicos pro-
tanto la presencia de evidencia radiológica pios de la EA. Tal coincidencia plantea
(enfermedad vascular cerebral relevante) siempre la duda de cuál es el papel etiopa-
como clínica (signos focales). No se especi- togénico y la contribución que cada una de
fica qué debe entenderse como “relevante” las patologías hace al desarrollo de
en la neuroimagen aunque se menciona la demencia33.
existencia de “múltiples infartos de vaso Está bien establecido que los factores
grande o un solo infarto en situación estra- de riesgo vascular, hipetensión, diabetes,
tégica” o “múltiples lagunas en ganglios incluso la existencia de fibrilación auricu-
basales y sustancia blanca o lesiones exten- lar, lo son también para el desarrollo de
sas de la sustancia blanca”. Respecto a los demencia en general y de enfermedad de
signos focales se hace referencia a déficits Alzheimer en particular16. Se ha demostra-
corticoespinales, sensitivos, visuales o do también que los pacientes con ictus tie-
incluso disartria, estructuras que no inter- nen un riesgo muy elevado de desarrollar
vienen en los procesos cognitivos. Por otro demencia12. La enfermedad de Alzheimer
lado, la posibilidad de que algunos déficits se acompaña en muchos casos de patolo-
cognitivos puedan considerarse en sí mis- gía vascular cerebral en forma de angiopa-
mos como signos focales puede inducir tía amiloide, presencia de infartos isqué-
confusión. Los criterios ADDTC son más micos o patología vascular de la sustancia
permisivos dado que únicamente exigen la blanca. Un estudio reciente ha demostra-
evidencia radiológica. Por último, la forma do que a igualdad de carga neuropatológi-
en que debe establecerse la relación causal ca de placas seniles y ovillos neurofibrila-
entre demencia y patología vascular parece res la presencia de un infarto lacunar
también poco consistente. Los criterios aumenta enormemente la probabilidad de
NINDS-AIREN basan tal relación en el crite- que tales cambios cerebrales se traduzcan
rio patocrónico (inicio agudo coincidiendo clínicamente en una demencia58.
con un ictus, curso fluctuante o deterioro
escalonado), mientras que los criterios Todos estos datos confirman que la
ADDTC no abordan esta cuestión crucial. asociación de EA y patología vascular
Por último debe mencionarse que la mayor cerebral no es infrecuente y llevan a plan-
limitación de estos grupos de criterios radi- tear la hipótesis de que en muchos casos
ca en la ausencia de una clasificación clíni- ambos procesos contribuyen etiopatogé-
co-etiopatogénica adecuada. nicamene a la aparición y progresión de
cambios cognitivos y demencia. Ante la
En general no se dispone de datos feha- coincidencia de las dos patologías cabe
cientes de validación de estos criterios res- plantearse si una es causa de la otra, o
pecto a la confirmación anatomopatológica viceversa o si se trata simplemente de epi-
por lo que su especificidad y sensibilidad fenómenos, de una simple coincidencia en
no están bien establecidas. Probablemente un mismo cerebro de dos procesos que
la aplicación de estos criterios permite tiene una prevalencia alta entre las perso-
reconocer adecuadamente la DV pero no nas mayores. Sea cual sea la respuesta, la
son eficaces a la hora de distinguir DV y traducción terapéutica es evidente, ante
demencia mixta por lo que no parecen un paciente con deterioro cognitivo pare-
mayor especificidad que la clásica escala ce obligado llevar a cabo todos los esfuer-
isquémica de Hachinski57. Se ha puesto ade- zos para detectar y tratar eficazmente los
más en duda la fiabilidad interobservador factores de riesgo vascular.
y la reproducibilidad de tales criterios57. Se
hace preciso formular nuevas directrices
para el diagnóstico del DCV. TRATAMIENTO DE LA DEMENCIA
VASCULAR
EL CASO DE LA DEMENCIA MIXTA El principal objetivo en el tratamiento
del DCV debería ser la prevención prima-
El término de demencia mixta se aplica ria38. Los factores de riesgo para desarro-
a aquellos casos en los que coinciden en llar DCV no están bien establecidos por lo

ANALES Sis San Navarra 2000, Vol. 23, Suplemento 3 167


P. Martínez-Lage et al

Tabla 6. Criterios de la ADDTC para el diagnóstico de demencia vascular isquémica (DVI)


1. Demencia
Demencia es un deterioro de la función intelectual a partir de un nivel de funcionamiento previo conocido o esti-
mado, que es suficiente para interferir en el comportamiento del sujeto en las actividades propias de la vida coti-
diana, que no se reduce a una sola categoría del rendimiento intelectual y que es independiente del nivel de cons-
ciencia
El deterioro vendrá avalado por los datos de la historia clínica y debe documentarse mediante evaluación estan-
darizada del estado mental o mediante el examen neuropsicológico detallado en el que se apliquen test cuantifi-
cables, reproducibles y para los cuales se disponga de datos normalizados.

2. Demencia vascular isquémica probable


A Los criterios para el diagnóstico de DVI PROBABLE incluyen TODOS los siguientes:
(1) Demencia
(2) Evidencia de dos o más ictus isquémicos aportada por la historia clínica, signos neurológicos foca-
les y/o estudios de neuroimagen (TAC o RM en secuencias T1) o bien historia de un episodio de ictus
con una clara relación con el inicio de la demencia
(3) Evidencia de al menos un infarto en regiones distintas al cerebelo en la TAC o RM-T1
B El diagnóstico de DVI PROBABLE viene apoyado por:
(1) Evidencia de infartos múltiples en regiones relacionados con la función cognitiva
(2) Historia de múltiples accidentes isquémicos transitorios
(3) Presencia de factores de riesgo vascular (p.ej. hipertensión, cardiopatía, diabetes mellitus)
(4) Puntuación elevada en la escala isquémica de Hachinski (versión original o modificada).
C Los rasgos clínicos que se piensa están relacionados con la DVI pero precisan más investigación incluyen
(1) Aparición temprana de trastorno de la marcha o incontinencia urinaria
(2) Cambios en la sustancia blanca subcortical y periventricular observados en la RM ponderada en T2
que exceden lo esperable por la edad
(3) Hallazgos focales en las pruebas electrofisiológicas (EEG, potenciales evocados) o en las pruebas de
neuroimagen fisiológica (SPECT, PET, espectroscopía por RM)
D Otros rasgos clínicas que no constituyen evidencia rotunda a favor ni en contra del diagnóstico de DVI
PROBABLE incluyen:
(1) Periodos de progresión lenta de los síntomas
(2) Ilusiones, psicosis, alucinaciones, ideas delirantes
(3) Crisis epilépticas
E Los siguientes aspectos clínicos arrojan dudas sobre el diagnóstico de DVI PROBABLE:
(1) Afasia sensitiva transcortical en ausencia de la correspondiente lesión focal en estudios de neuroi-
magen
(2) Ausencia de síntomas o signos centrales más allá del trastorno cognitivo

3. DVI posible
El diagnóstico de DVI posible puede establecerse si hay
(1) Demencia
y uno o más de los siguientes:
(2) (a) Historia o evidencia de un ictus único (pero no infartos múltiples) sin una clara relación con tem-
poral con con el inicio de la demencia
o
(b) Síndrome de Binswanger (sin ictus múltiples) que incluye todo lo siguiente
(i) Inicio temprano de incontinencia no explicable por enfermedad urológica, o de trastorno de la mar-
cha (marcha parkinsoniana, imantación, marcha apráxica o marcha senil) que no se explica por
causa periférica
(ii) Factores de riesgo vascular y
(iii) Cambios difusos en la neuroimagen de la sustancia blanca

4. DVI definida
Un diagnóstico de DVI definida exige el examen histopatológico del cerebro, así como
A. Datos clínicos de demencia
B. Confirmación patológica de infartos múltiples, algunos en zonas distintas al cerebelo
Nota: Si hay evidencia de enfermedad de Alzheimer o de algún otro proceso patológico que se piensa ha contri-
buido al desarrollo de demencia debería hacerse un diagnóstico de demencia MIXTA

5. Demencia mixta
Debe hacerse un diagnóstico de demencia mixta cuando se presentan una o más enfermedades cerebrales o sis-
témicas adicionales que se piensa guardan relación causal con la demencia
Se debería especificar el grado de certeza del diagnóstico de DVI debería especificarse como posible, probable o
definida así como enumerar el (los) otro(s) proceso que contribuye a la demencia. Por ejemplo: demencia mixta
por DVI probable y EA posible o demencia mixta por DVI definida e hipotiroidismo

6. Clasificación para investigación


La clasificación de la DVI para investigación debería especificar las características de los infartos que pueden
separar los distintos subtipos del trastorno como son
Localización: cortical, sustancia blanca, periventricular, ganglios basales, tálamo
Tamaño: volumen
Distribución: grandes, pequeños, pequeño vaso
Gravedad: isquemia crónica frente a infarto
Etiología: embolismo, aterosclerosis, arteriolosclerosis, angiopatía amiloide, hipoperfusión

168 ANALES Sis San Navarra 2000, Vol. 23, Suplemento 3


DETERIORO COGNITIVO Y DEMENCIA DE ORIGEN VASCULAR

que la atención debe centrarse sobre los Manubens JM, Rocca WA (eds). Epidemiolo-
factores de riesgo vascular tradicional- gía e la demencia vascular. Controversias en
mente reconocidos: hipertensión, diabe- su diagnóstico. JR Prous Editores, Barcelo-
tes, tabaquismo, hiperlipidemia. Lo mismo na, 1992; 9-30.
puede decirse en cuanto a la prevención 2. LOBO A, LAUNER LJ, FRATIGLIONI L, ANDERSEN K,
secundaria. Una vez se ha iniciado el dete- DI CARLO A, BRETELER MM et al. Prevalence of
rioro cognitivo, su progresión sólo puede dementia and major subtypes in Europe: A
atribuirse a la aparición de nuevos infartos collaborative study of population-based
cohorts. Neurologic Diseases in the Erderly
por lo que la prevención del ictus lo será
Research Group. Neurology 2000; 54 (Suppl
también del DCV. Cabe toda una serie de 5): S4-S9.
medidas higiénico dietéticas en relación al
estilo de vida, abandono del tabaco, ejer- 3. MANUBENS JM, MARTÍNEZ LAGE JM, LACRUZ F,
cicio y reducción del consumo de alcohol. MURUZABAL J, LARUMBE R, GUARCH C et al. Pre-
valence of Alzheimer’s disease and other
Deben tenerse en cuenta también todas las dementing disorders in Pamplona , Spain.
posibilidades de tratamiento médico de Neuroepidemiology 1995; 14: 155-164.
los factores de riesgo (antihipertensivos,
hipolipemiantes) así como el uso de antia- 4.LLINÁS REGLÁ J. Epidemiología descriptiva. En:
López-Pousa S, Vilalta Franch J, Llinás Reglá
gregantes, anticoagulación e incluso medi- J (eds.): Manual de demencias. Prous Scien-
das quirúrgicas38. Hasta la fecha, la tera- ce, Barcelona, 1996, cap. 3, 56-74.
péutica del DCV viene a ser la misma que
la del ictus dado que en general son esca- 5. FRATIGLIONI L, LAUNER LJ, ANDERSEN K, BRETELER
MM, COPELAND JR, DARTIGUES JF et al. Inciden-
sos los estudios en los que se haya inves-
ce of dementia and major subtypes in Euro-
tigado el efecto de una determinada medi- pe: A collaborative study of population-
da preventiva o terapéutica sobre la based cohorts. Neurologic Diseases in the
función cognitiva. En los últimos años son Erderly Research Group. Neurology 2000; 54
cada vez más los trabajos en los que se (suppl 5): S10-S15.
muestra cómo el tratamiento de la hiper- 6. PÉREZ JM, TIBERIO G. Deterioro cognitivo y
tensión arterial reduce la aparición de demencias en una población geriátrica urba-
deterioro cognitivo y el riesgo de demen- na. Aten primaria 1992; 9: 365-369.
cia31. Por otro lado son cada vez más los
7. TATEMICHI TK, DESMOND DW. Epidemiology of
ensayos clínicos que se centran en pacien-
Vascular Dementia. En: Prohovnik I., Wade J.,
tes con DV y que muestran la eficacia de Knezevic S., Tatemichi T., Erkinjuntti T.
algunos fármacos como co-dergocrina, (eds.) Vascular dementia: Current concepts.:
nicergolina, o pentoxifilina. Algunos antia- John Wiley & Sons, Chichester, 1996, Cap. 3,
gregantes como el triflusal pueden frenar 40- 72.
el deterioro en pacientes con DV59. El nimo- 8. POHJASVAARA T, ERKINJUNTTI T, VATAJA R, KASTE
dipino se ha mostrado eficaz en el trata- M. Dementia three months after stroke.
miento de la DV subcortical38. Por último la Baseline frequency and effect of different
propentofilina, cuyo mecanismo de acción definitions of dementia in the Helsinki Stroke
puede estar relacionado con la inhibición Aging Memory Study (SAM) cohort. Stroke
de la reacción inflamatoria mediada por la 1997; 28: 785-792.
microglía e inducida por la isquemia, ha 9. TATEMICHI TK, DESMOND DW, STERN Y, PAIK M,
mostrado también buenos resultados en el SANO M, BAGIELLA E. Cognitive impairment
tratamiento de la DV. La eficacia de todos after stroke: frequency, paterns, and rela-
estos fármacos podría ser mucho mayor si tionship to functional abilities. J Neurol Neu-
su utilización pudiera iniciarse en fases rosurg Psychiatry 1994; 57: 202-207.
mucho más precoces del proceso y no 10. ROCKWOOD K, EBLY E, HACHINSKI H, HOGAN D.
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