EN LO PRINCIPAL: Apelación de la resolución de autos.

S.J.L. de Menores

____________________, abogado por el demandado en los autos

sobre regulación de alimentos caratulados " ____________________rol de
ingreso Nº 190-98, a US. con respeto digo:

Con fecha 23 de Octubre de 1998, se dicto sentencia en la que se

condena a mi parte a pagar una pensión de alimentos equivalente a tres ingresos
mínimos mensuales, los que corresponden actualmente a la suma de $ 172.026.
Esta suma es absolutamente elevada, y excede con todo el máximo legal, toda
vez que en la actualidad sus ingresos ascienden sólo a la suma de $ 398.000
líquidos según consta de la documentación que acompañare en la oportunidad
procesal correspondiente.

Además de lo anterior mi representado esta actualmente casado,

tiene un hijo legítimo con su cónyuge, por lo que también debe proveer a las
necesidades de su mujer y familia. La elevada suma que S.S. ordena pagar impide
claramente lo anterior, es decir, se traduce en que este hijo deberá abandonar el
Colegio Particular en el que estudia actualmente, la interrupción de un tratamiento
medico de la cónyuge y otras anomalías imposibles de cuantificar.

Por otro lado la demandante declara un ingreso inferior al que

verdaderamente tiene, según se puede deducir de la causa de regulación de
visitas que actualmente se tramita en este mismo tribunal entre las mismas partes
y cuyo rol de ingreso es 05-98. Con fecha 21 de Octubre de 1998, la demandante
reconoce ante el tribunal que ella cuida a cuatro menores en su domicilio en mérito
de su actividad como Auxiliar de Educación de Párvulos, sin embargo en la causa
por regulación de alimentos afirma que cuida a un solo menor percibiendo por este
concepto la suma mensual de $40.000, sin animo de debatir mayormente en cual
sería la razón por la cual se informa una cosa en un juicio y otra cosa en otro,
podemos deducir por los dichos de la demandante de autos, que el cuidado de
cuatro menores le debe producir ingresos cuatro veces más altos.

POR TANTO:

Ruego a US: tener por interpuesto recurso de apelación y que se eleven los autos
a la Ilustre Corte de Apelaciones de San Miguel para efecto de que esta
resuelva y deje sin efecto la sentencia apelada, rechazando la demanda
interpuesta, o subsidiariamente rebajando sustancialmente la suma fijada en el
fallo.