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PRESENTACIÓN

En el Plan de salud de Cataluña, el instrumento básico de la política sanitaria


catalana, las actividades de promoción de la salud y de prevención de la enfermedad
se han considerado como prioritarias a la hora de alcanzar, el año 2000, toda una
serie de objetivos de salud y de reducción de riesgo, en la línea de los objetivos
fijados para la OMS-Europa en su estrategia de Salud para todos en el año 2000.

Los objetivos de salud y de disminución del riesgo en materia de salud materno-


infantil, incluidos en el Plan de salud 1996-1998, son de gran importancia para el
mantenimiento y la mejora de la salud de la madre y del niño. En cuanto a las
intervenciones, en el Plan de salud se hace especial énfasis en la atención sanitaria
del embarazo, el parto y el puerperio.

El seguimiento del embarazo es un proceso complejo y necesariamente


multidisciplinario que necesita la coordinación entre los diferentes profesionales y
entre los diferentes niveles de atención sanitaria. Por ello, el consenso profesional,
basado en evidencias científicas sobre este tipo de procedimientos, ayuda a mejorar
la atención sanitaria, y por lo tanto, los resultados en términos de salud. De hecho,
una de las recomendaciones establecidas por el Plan de salud es la de avanzar en la
protocolarización de la atención al embarazo, el parto y el puerperio.
Para dar cumplimiento a esta recomendación, y siguiendo la filosofía de trabajo
desarrollada por el Departamento de Sanidad y Seguridad Social, en el sentido de
recoger las experiencias profesionales acumuladas y la opinión colegiada de las
instituciones profesionales implicadas, el mes de octubre de 1995 se propuso a un
amplio grupo de expertos la elaboración por consenso de unos protocolos que
asentaran las bases mínimas de los criterios y procedimientos para el seguimiento
del embarazo normal y la detección y clasificación de los embarazos de riesgo.
Fruto de este trabajo es el libro que hoy tengo la satisfacción de presentaros, el
Protocolo de seguimiento del embarazo en Cataluña.
A todos los expertos que han participado en la elaboración de este protocolo les
hago llegar, en mi nombre y de todo el Departamento de Sanidad y Seguridad
Social, el agradecimiento por el trabajo llevado a cabo. Quiero hacer una especial
mención a la Dirección General de Salud Pública, por su trabajo de coordinación y
PRESENTACIÓN

redacción del protocolo. También quiero agradecer la colaboración de la Sociedad


Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO), por habernos ofrecido su
experiencia científica y profesional en este campo y su apoyo continuo en todo el
proceso de confección de este documento; también manifiesto nuestro
reconocimiento a la Sociedad Catalana de Obstetricia y Ginecología y a la
Asociación Catalana de Comadronas, por su activa colaboración durante todas las
etapas de elaboración de esta publicación. Ciertamente, sin la valiosa colaboración
de todos los profesionales que han participado no habría sido posible la realización
de este protocolo.

Ahora será necesario continuar trabajando en la elaboración de los protocolos del


parto y del puerperio y orientar los esfuerzos técnicos y profesionales para poder
hacer operativas estas recomendaciones y conseguir los resultados en salud que
todos deseamos.

Quiero reiterar el compromiso del Departamento de Sanidad y Seguridad Social y del


Servicio Catalán de la Salud de dar respuesta y soporte a todas las iniciativas, tanto
públicas como privadas, que se pongan en marcha en los próximos años en esta
línea. Solo así conseguiremos alcanzar los objetivos de salud contenidos en el Plan
de salud, y, en definitiva, la salud para todos (para todos los ciudadanos de
Cataluña) el año 2000.

Eduard Rius Pey


Consejero de Sanidad y Seguridad Social
PRESENTACIÓN

La Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO), tiempo atrás, redactó


unos protocolos de actuación en el embarazo y el parto, elaborados por un gran
número de profesionales, que permitió la publicación de diversos manuales. Dadas
las características de Cataluña y su sistema sanitario, se hizo la propuesta de
adecuar los protocolos que se utilizaban en el resto de España, para poder aplicarlos
a nuestro entorno. Esta propuesta fue muy bien vista por la SEGO y, junto con el
Departamento de Sanidad y Seguridad Social, se consideró que los profesionales
que habían participado en la redacción de los protocolos de la SEGO, junto con
otros, así como los que pertenecían a otros estamentos también involucrados en la
asistencia de la embarazada, fueran los que redactasen, sobre la base de los
anteriores, unos protocolos pensados para la realidad catalana y que introdujeran
otros aspectos no tratados en los primeros manuales como, por ejemplo, todos los
aspectos de las tareas educativas hechas durante el embarazo, o la incorporación
de los protocolos ya establecidos en el sistema sanitario catalán, que tan buenos
resultados han tenido.

No cabe duda que en Cataluña hay un número suficiente importante de


profesionales sanitarios, de un nivel científico muy cualificado, que permite
establecer, con total garantía, documentos consensuados de gran utilidad. El
resultado de esta colaboración ha sido muy enriquecedor y, como se puede apreciar,
de un valor indiscutible. Creo que el ejemplo de establecer nexos de colaboración
entre instituciones, con resultados altamente positivos, es un hecho a seguir por
otros, a fin de conseguir mejorar la oferta de servicios. Así mismo, la capacidad de
nuestros profesionales de poder trabajar conjuntamente en objetivos de salud
comunitaria es muy alta y, por ello, es necesario vaticinar que, al menos en el campo
de la salud materno-infantil, se podrá llegar a consensos para diferentes procesos
que, de manera inequívoca, serán la base de las prestaciones sanitarias.
PRESENTACIÓN

La SEGO se ha puesto, y continuará haciéndolo, a disposición de los profesionales


para poder contribuir a la mejora de este ámbito, en beneficio de las mujeres,
dejando de lado planteamientos no científicos. Por esto, la edición de este Protocolo
de seguimiento de embarazo en Cataluña constituye la base de las colaboraciones
presentes y futuras.

Luís Cabero Roura


Presidente de la Asociación Española
de Ginecología y Obstetricia
INTRODUCCIÓN

En Cataluña, en los últimos años, ha continuado la mejora de los indicadores del


nivel de salud materno-infantil. La mortalidad infantil ha pasado de una tasa de 10.4
muertos por mil nacidos vivos en el año 1983 a una tasa de 5.9 en el año 1993. Así
mismo, la mortalidad materna en los últimos años se mantiene por debajo de 10
casos por 100.000 nacidos vivos. En nuestro país, aunque la mortalidad materna y la
mortalidad infantil son bajas, se considera que en parte son muertes evitables si
existe una atención sanitaria adecuada y de calidad. En cuanto a la morbilidad
infantil se producen un número importante de complicaciones en los embarazos, en
el parto y en el puerperio que también son susceptibles de ser reducidas si se
mejora el proceso de atención gestacional y del parto. La evidencia científica
disponible muestra que existe una relación clara entre la calidad de la atención
prenatal y determinados resultados en salud como son la mortalidad perinatal, el
bajo peso al nacer y la prematuridad, las complicaciones neonatales y las
complicaciones maternas.

El Plan de Salud de Cataluña 1996-1998, en el apartado de salud materno-infantil,


ha establecido los siguientes objetivos generales de salud y de reducción de
riesgo:
• Mantener la mortalidad materna relacionada con el embarazo, el parto y el
puerperio en los niveles actuales.
• Reducir la mortalidad perinatal, la mortalidad infantil y la prevalencia de
prematuridad.

También ha fijado los siguientes objetivos operacionales ligados a las actividades


que se prevén llevar a cabo a fin de conseguir los siguientes objetivos generales:
• Antes de finalizar el periodo de vigencia de este Plan de Salud, el 80% de las
embarazadas habrán recibido la primera visita de control del embarazo en las 12
primeras semanas de gestación, de acuerdo con las indicaciones del Protocolo de
seguimiento del embarazo del Departamento de Sanidad i Seguridad Social.
• Antes de finalizar el período de vigencia de este Plan de Salud, el 90% de los
embarazos habrán estado tipificados según su riesgo y se habrán atendido en las
unidades maternales del nivel asistencial que les corresponda, de acuerdo con
INTRODUCCIÓN

• los criterios del Protocolo de seguimiento del embarazo del Departamento de


Sanidad y Seguridad Social.
• Antes del año 2000, los centros de atención maternal ofrecerán el diagnóstico
prenatal para detección de anomalías congénitas al 90% de las mujeres
gestantes, de acuerdo con los criterios del Protocolo de diagnóstico prenatal del
Departamento de Sanidad y Seguridad Social, y facilitarán información completa y
comprensible sobre los procedimientos que es necesario efectuar.

Las intervenciones que se proponen son la adopción de criterios comunes de


actuación para la atención al embarazo, al parto y al puerperio, con la finalidad de
impulsar la aplicación de estándares de calidad en todos y cada uno de los
procedimientos de seguimiento del embarazo, así como el establecimiento de
criterios de clasificación de riesgo.

Para dar complimiento a estas propuestas la Dirección General de Salud Pública y el


Servicio Catalán de la Salud han impulsado la elaboración de un Protocolo de
seguimiento del embarazo, a partir de la experiencia acumulada para los
profesionales y de la evidencia científica de los procedimientos propuestos. Se trata
de conseguir la adopción de criterios comunes de actuación para la atención al
embarazo, al parto y al puerperio, y de actuar en la detección precoz de los
embarazos de riesgo, orientándolos hacia unidades adecuadas, es decir, las
maternidades de tecnología idónea al riesgo que presenten.

La Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO) elaboró, el año 1993, un


protocolo de atención al embarazo normal. Entre los profesionales que colaboraron,
de manera consensuada, en su confección figuraba una amplia representación de
profesionales de Cataluña.

Por ello el citado protocolo ha estado el punto de referencia del grupo de trabajo,
aunque se ha propuesto ampliarlo en algunos aspectos concretos y adaptarlo a
nuestras necesidades para facilitar su aplicación a nuestra red sanitaria. También se
han introducido los cambios que se han ido produciendo a partir de la constatación
INTRODUCCIÓN

derivada de la práctica y las aportaciones de la literatura científica en los últimos


años.

Para hacer operativa esta tarea de actualización se ha considerado, como hacen


numerosos autores, que los tres componentes básico de la atención prenatal son:

1. las intervenciones y el seguimiento médico del embarazo


2. la evaluación continuada del riesgo para la madre y el feto y
3. la promoción y educación para la salud de la madre y el niño

Como estrategia de trabajo se formaron tres grupos de expertos para revisar,


separadamente, estos tres grandes bloques temáticos y después poder integrar los
resultados de cada grupo en un único protocolo de atención a la mujer embarazada
sin riesgo. Además, establecer unas directrices globales para que el embarazo y el
parto sean atendidos en el nivel asistencial adecuado de acuerdo con el nivel de
riesgo que presenten y, por lo tanto, adecuado para hacer frente a las
complicaciones que se puedan presentar.

La elaboración del Protocolo se ha efectuado durante el año 1998 y han participado


obstetras, comadronas, médicos de familia, epidemiólogos y sanitarios de promoción
de la salud, así como, a nivel institucional, las sociedades científicas implicadas
(Sociedad Española de Obstetricia i Ginecología y Asociación Catalana de
Comadronas).

En concreto, el contenido del Protocolo que os presentamos en cada uno de sus


capítulos, como criterios comunes mínimos a tener en cuenta para hacer el control y
seguimiento de una gestación, es el siguiente:

Seguimiento del embarazo normal


Se define el contenido de la atención prenatal del embarazo normal (número mínimo
de visitas, determinaciones de laboratorio, controles y cribados, ecografías,
contenido mínimo de la historia clínica, de la exploración física y obstétrica, etc.).
INTRODUCCIÓN

Evaluación continuada del riesgo


Se ha elaborado una clasificación de riesgo para la madre y/o el feto que facilitará la
regionalización de los servicios de atención perinatal, es decir, que permitirá
concentrar recursos específicos sobre las mujeres que lo necesiten y evitará la
medicalización excesiva de las embarazadas sin riesgo. Concretamente, se
especifican los factores de riesgo que suponen:

• Alterar el esquema de visita o las pruebas complementarias establecidas en la


atención prenatal en el primer nivel asistencial.
• Realizar interconsulta con otras especialidades o centros especializados, o bien la
derivación de la embarazada directamente a un nivel asistencial superior para el
seguimiento de un embarazo o de un parto de riesgo.

Educación sanitaria
Se han tratado los temas relacionados con la promoción y educación para la salud
de la madre y el niño, como la alimentación de la madre y el niño, la exposición a
diferentes tóxicos, la actividad física o laboral, la información sobre la atención que
recibirá durante la gestación, la preparación al parto y otros. Más concretamente, los
temas tratados han sido:

• La promoción de la salud antes del embarazo, introduciendo el concepto de


atención pregestacional o preconcepcional.
• La información que se ha de dar sobre la atención sanitaria que recibirá la
embarazada (sobre la conveniencia de empezar pronto la atención prenatal, sobre
las diferentes pruebas de cribado y otras exploraciones, sobre la frecuencia de
visita y sobre la conducta a seguir ante determinados signos de alarma, etc.).
• La información general sobre los cambios propios del embarazo, sobre el
desarrollo del niño y sobre la contribución de la madre y el padre en este proceso.
• La vigilancia de los estilos de vida no saludables: tabaco, alcohol, drogas,
fármacos, comportamientos asociados a enfermedades de transmisión sexual
(ETS).
• El mantenimiento de la salud buco-dental de la embarazada.
INTRODUCCIÓN

• El consejo sobre el incremento óptimo de peso para cada mujer según sus índices
de masa corporal, la evaluación y el consejo nutricional, así como las necesidades
de suministrar un complemento nutricional de minerales, vitaminas y,
específicamente, la conveniencia de recomendar un suplemento de folatos a las
gestantes para prevenir los defectos del tubo neural.
• La atención en la preparación al parto y al puerperio, teniendo en cuenta la
promoción de la lactancia materna, así como la atención a circunstancias
adversas que puedan aparecer, como la atención al duelo ante la muerte fetal o
del recién nacido.

Finalmente, solo me queda desear que el papel impreso, que es el Protocolo, se


convierta en actuaciones profesionales y en acciones prácticas que permitan mejorar
los resultados en términos de salud materna y infantil en Cataluña.

Lluís Salleras Sanmartín


Director general de Salud Pública
AUTORES

La elaboración de este protocolo ha sido coordinada por:

Rosa Fernández Bardón


Departamento de Sanidad y Seguridad Social.
Dirección General de Salud Pública

Ramon Prats Coll


Departamento de Sanidad y Seguridad Social
Dirección General de Salud Pública

Lluís Cabero Roura


Sociedad Española de Ginecología y Obstetrícia (SEGO)

Josep M. Carrera Macià


Sociedad Catalana de Ginecología y Obstetrícia

Dolors Costa Sampere


Asociación Catalana de Comadrones

El grupo de expertos que ha asesorado la elaboración de este


protocolo está formado por:

Capítulo I.
Seguimiento del embarazo normal.

Antonia Andreu Domingo


Hospital General Universidad Vall d’Hebron. Barcelona

Mercè Armelles Sebastià


Departamento de Sanidad y Seguridad Social
Dirección Genera de Salut Pública. Barcelona

Miquel Bruguera Cortada


Hospital Clínico y Provincial de Barcelona

Lluís Cabero Roura


Hospital Universitari Maternoinfantil Vall d’Hebron. Barcelona

Josep Ma. Carrera Macià


Institut Universitari Dexeus de Barcelona

Jordi Casabona Barberà


Departamento de Sanidad y Seguridad Social
Dirección General de Recursos Sanitarios. Barcelona
AUTORES

Ma. José Cerqueira Dapena

Hospital Universitari Maternoinfantil Vall d’Hebron. Barcelona

Conxa Castell Abat


Departamento de Sanidad y Seguridad Social
Dirección General de Salud Pública. Barcelona

Dolors Costa Sampere


Instituto Catalán de la Salud. SAP Centro-Lérida. Terrassa

Rosa Fernández Bardón


Departamento de Sanidad y Seguridad Social
Dirección General de Salud Pública. Barcelona

Albert Fortuny Estivill


Hospital Clínico y Provincial de Barcelona

Montserrat Garriga Gimbernat


Instituto Catalán de la Salud. DAP Girona-La Selva. Girona

Guillermo Hernández García


Institut Català de la Salut. DAP Baix Llobregat-Centre. Cornellà de Llobregat

Josep Ma. Laïlla Vicenç


Hospital de Sant Joan de Déu. Esplugues de Llobregat

Sara Martínez de Arenzana


Instituto Catalán de la Salud. DAP Osona. Vic

Marisa Revert Font


Departament de Sanitat i Seguretat Social

Josep Sabrià i Rius


Hospital Universitària de Girona Doctor Josep Trueta

Jordi Sáez Ferrer


Hospital de Terrassa

Emília Sánchez Ruiz


Servei Català de la Salut
Àrea Sanitària. Barcelona

Ricard Tresserras Gaju


Departament de Sanitat i Seguretat Social
Direcció General de Salut Pública. Barcelona

Martí Vall Mayans


Departament de Sanitat i Seguretat Social
Direcció General de Recursos Sanitaris. Barcelona
AUTORES

Lluís Vaquer Aloy


Institut Català de la Salut. DAP Tarragona-Valls
Tarragona

Josep Vidal Tort


Hospital Clínic i Provincial de Barcelona

Montserrat Viñas Pons


Servei Català de la Salut. Àrea jurídica i d’Organització.
Barcelona

Capítulo II.
Evaluación continuada del riesgo durante el embarazo

Francesca Abella Jové


Institut Català de la Salut. DAP. Granollers

Irene Barrabeig Fabregat


Departament de Sanitat i Seguretat Social
Direcció General de Salut Pública. Barcelona

Jordi Bellart Alfonso


Hospital Universitari de Tarragona Joan XXIII

Lluís Cabero Roura


Hospital Universitari Maternoinfantil Vall d’Hebron
Barcelona

Vicens Cararach Ramoneda


Hospital Clínic i Provincial de Barcelona

Pere Cavallé Vallverdú


Hospital Universitari Sant Joan deReus

Carme Coll Capdevila


Insititut Català de la Salut. DAP Maresme. Premià de Mar

Rosa Díaz Gallardo


Institut Català de la Salut. DAP Maresme. Premià de Mar

Àngela Domínguez Garcia


Departament de Sanitat i Seguretat Social
Direcció General de Salut Pública. Barcelona

Pere Duran Sánchez


Hospital de la Santa Creu i Sant Pau. Barcelona

Rosa Fernández Bardón


AUTORES

Departament de Sanitat i Seguretat Social


Direcció General de Salut Pública. Barcelona

Carles Foradada Morillo


Consorci Hospitalari del Parc Taulí. Sabadell

Alfonso García Carbajo


Departament de Sanitat i Seguretat Social
Direcció General de Salut Pública. Barcelona

Cristina Martínez Bueno


Institut Català de la Salut. DAP Granollers. Granollers

Ángel Moral García


Hospital Mútua de Terrassa

Araceli Noval Llorach


Hospital General de Granollers

Emilio Pérez Picañol


Hospital Univesitari de Badalona Germans Trias i Pujol

Mercè Peris Tuser


Servei Català de la Salut. Àrea Sanitària. Barcelona

Antoni Plasencia Taradac


Departament de Sanitat i Seguretat Social
Direcció General de Salut Pública. Barcelona

Raimon Rovira Saperas


Hospital General de Vic

Capítulo III
Educación sanitaria durante el embarazo normal

Mercè Armelles Sebastia`


Departament de Sanitat i Seguretat Social
Direcció General de Salut Pública. Barcelona

Irene Barrabeig Fabregat


Departament de Sanitat i Seguretat Social
Direcció General de Salut Pública. Barcelona

Joan Batalla Clavell


Departament de Sanitat i Seguretat Social
Direcció General de Salut Pública. Barcelona

Núria Beà Torras


AUTORES

Hospital Creu Roja de Barcelona

Lluís Cabero Roura


Hospital Universitari Maternoinfantil Vall d’Hebron. Barcelona

Ramon Carreras Collado


Hospital del Mar. Barcelona

Elena Carreras Moratonas


Hospital Universitari Maternoinfantil Vall d’Hebron. Barcelona

Elias Casals Peidró


Departament de Sanitat i Seguretat Social
Direcció General de Salut Pública. Barcelona

Joan Colom Farran


Departament de Sanitat i Seguretat Social
Direcció General de Recursos Sanitaris. Barcelona

Dolors Costa Sampere


Institut Català de la Salut. SAP Centre-Lleida. Terrassa

Emili Cuenca Sala


Departament de Sanitat i Seguretat Social
Direcció General de Salut Pública. Barcelona

Josep Ma. Cuyàs Batista


Fundació Privada Hospital de Mollet

Angela Domínguez Garcia


Departament de Sanitat i Seguretat Social
Direcció General de Salut Pública. Barcelona

Gemma Falguera Puig


Institut Català de la Salut. DAP. Mollet del Vallès
Mollet del Valles

Joan Fernández Ballart


Hospital Unviersitari Sant Joan de Reus

Rosa Fernández Bardón


Departament de Sanitat i Seguretat Social
Direcció General de Salut Pública. Barcelona

Oriol Gamissans Oliver


Hospital Universitari de Badalona Germans Trias i Pujol

Alfonso García Carbajo


Departament de Sanitat i Seguretat Social
AUTORES

Direcció General de Salut Pública. Barcelona

Patricio Garrido Morales


Facultat de Medicina. Universitat de Barcelona

Rafael Guayta Escolies


Departament de Sanitat i Seguretat Social
Direcció General de Salut Pública.Barcelona

Carme Lacasa Plana


Servei Català de la Salut
Àrea Sanitària. Barcelona

Gonçal Lloveras Vallès


Departament de Sanitat i Seguretat Social
Direcció General de Salut Pública. Barcelona

Ma. Luisa Martínez Frias


Facultat de Medicina. Unversitat Complutense de Madrid.

Maria Teresa Miró Coll


Hospital Creu Roja de Barcelona

Manel Muñoz Puigdemasa


Hospital Universitari de Lleida Arnau de Vilanova

Felip Ojeda Pérez


Hospital Universitari de Tarragona Joan XXIII

Marta Palau Gené


Hospital Sant Llorenç de Viladecans

Roser Porta Lluch


Institut Català de la Salut. DAP Badalona. Badalona

Neus Rams Pla


Servei Català de la Salut. Àrea Sanitària. Barcelona

Miquel Reguant Fosas


Institut Català de la Salut
DAP Bages-Berguedà-Solsonès. Manresa

Eulàlia Roura Cuspinera


Departament de Sanitat i Seguretat Social
Direcció General de Salut Pública. Barcelona

Esteve Saltó Cerezuela


Departament de Sanitat i Seguretat Social
AUTORES

Direcció General de Salut Pública. Barcelona

Gemma Salvador Castell


Departament de Sanitat i Seguretat Social
Direcció General de Salut Pública. Barcelona

Rosalia Sanglàs Ramon


Servei Català de la Salut. Àrea Sanitària. Barcelona

Eugeni Sedano Monasterio


Servei Català de la Salut. Àrea Sanitària. Barcelona

Jaume Serra Farró


Departament de Sanitat i Seguretat Social
Direcció General de Salut Pública. Barcelona

Joan Serra Manetas


Servei Català de la Salut. Àrea Sanitària. Barcelona

Josep Ma. Suelves Joanxich


Departament de Sanitat i Seguretat Social
Direcció General de Salut Pública. Barcelona

Ricard Tresserras Gaju


Departament de Sanitat i Seguretat Social
Direcció General de Salut Pública. Barcelona
1. VISITAS DE CONTROL DURANTE EL EMBARAZO

1.1. Tablas resumen

1.1.1. Frecuencia de los controles

Semana de gestación Frecuencia

< 12 SG 1a visita

12 - 36 SG cada 4 - 6 semanas

37- 41 SG cada 2 - 3 semanas (1)

> 41 SG 1 - 3 veces por semana (1)

> 42 SG Ingreso o vigilancia intensiva (2)

(1) Embarazo a término: desde la semana 37 completa a la semana 42 completa

(2) Embarazo atrasado: se considerará gestación atrasada a partir del último día de la
42a semana de gestación
1. VISITAS DE CONTROL DURANTE EL EMBARAZO

1.1.1. Contenido de los controles

ACCIÓN 1r TRIMESTRE 2º TRIMESTRE 3r TRIMESTRE

Semanas de 4 8 12 16 20 24 28 3 36 40 42
gestación 2 P
(SG) A
Visitas de control 1a visita 2a 3a 4a 5a 6 7a 8a 10a R
a 9a 11a T
Visita hospital
preparto
Historia clínica y Si
carnet de la
embarazada
Talla Si
Peso Si Controlar en cada visita
Tensión arterial Si
Inspección de la piel Si
Inspección de las Si
mucosas
Inspección cavidad Si
bucal
Auscultación Si
cardiorespiratoria
Percusión renal Si
bilateral
Exploración columna Si
vertebral
Exploración Si
abdominal
Exploración Si Controlar en cada visita
extremidades
Edema Si
Exploración mamaria Si
Exploración genitales Si
externos
Tacto vaginal Si Opcional Si
(> 37 SG)
Altura fondo uterino Si Controlar en cada visita
Latido cardíaco fetal Si Controlar en cada visita
Movimientos fetales Controlar en cada visita
(> 20 SG)
Estática fetal Controlar en cada visita
(> 28 SG)
NST > 40 SG
Amnioscopia > 41 SG (c/ 48h)
1. VISITAS DE CONTROL DURANTE EL EMBARAZO

Exploración ecográfica 1a (8-12 SG) 2a (18-20 SG) 3a (34-36 sg)


PRUEBA 1r TRIMESTRE 2n TRIMESTRE 3r TRIMESTRE
Test de O’Sullivan --------- Sí (24-48 SG) --------
(emb. sin riesgo)
Test de O’Sullivan Si es necesario Sí (24-28 SG) Sí (30-32 SG)
(emb. con riesgo)
TTOG Si es necesario Si es necesario Si es necesario
Cribado
bioquímico --------- Sí (14-17 SG) ---------
(emb. sin riesgo)
Cariotipo fetal Si es necesario ---------
(emb. con riesgo)
Grupo ABO y Sí --------- ---------
factor RH
Coombs indirecto Si es necesario Si es necesario Si es necesario
Hemograma Sí Sí Sí
Proteinuria Sí Sí Sí
Urinocultivo Si (16 SG)
Cultivo vaginal --------- --------- (1) (35-37 SG)
Citología Si es necesario --------- ----------
cervicovaginal
Rubéola (IgG) Si es necesario --------- ---------
Sífilis (VDRL-RPR) Sí --------- ---------
Hepatitis B --------- Sí
(HbsAg)
HIV Sí --------- ---------
Toxoplasmosis (2) --------- ---------
Identificación el riesgo (3) A cada visita
Actividades de
promoción de la salud y (4) A cada visita
educación sanitaria

(1) Véase apartado 5.3.6. Capítulo I


(2) Véase apartado 5.3.13. Capítulo I
(3) Véase Capítulo II
(4) Véase Capítulo III
1. VISITAS DE CONTROL DURANTE EL EMBARAZO

1.2. Visitas de control

1.2.1. Primera visita


Es necesario realizarla antes de las 12 primeras semanas de gestación. Esta
primera visita es la de más larga duración, y al mismo tiempo, la más
importante, ya que debe hacerse una valoración completa de la salud de la
mujer, a partir de la información obtenida mediante la realización de la historia
clínica, de la exploración física y de las exploraciones complementarias
(ecografías y pruebas de laboratorio indicadas), para poder situar el embarazo
en el nivel de riesgo que le corresponda.

1.2.2. Visitas sucesivas


La frecuencia viene determinada por las necesidades individuales de cada
gestación teniendo en cuenta los factores de riesgo asociados, por lo cual es
aconsejable un cierto grado de flexibilidad.

Como norma general, una mujer con un embarazo normal (sin factores de
riesgo detectados), debe ir a la consulta con la periodicidad que se especifica
en la Tabla 1.1.1.

Una mujer con problemas médicos u obstétricos puede necesitar de una


vigilancia más estrecha. El intervalo entre visitas viene determinado por la
naturaleza y la gravedad del problema. Teniendo en cuenta que la gestante
puede requerir visitas de control por parte de algún otro especialista o que,
incluso, ante la presencia de algunos de los factores de riesgo pueda hacerse
necesaria su derivación a un nivel asistencial hospitalario, se decidirá el
número de visitas que requerirá el caso y el intervalo entre estas.

1.2.3. Visita de coordinación con el hospital de referencia para el parto


Seria recomendable que a las 34-36 semanas de gestación tuviera lugar una
visita al hospital maternal de referencia para familiarizarse la mujer con este
entorno y completar su historia clínica hospitalaria con los datos aportados des
de la atención primaria.
1. VISITAS DE CONTROL DURANTE EL EMBARAZO

La gestante seguirá haciendo el control de su embarazo en el ámbito de la


atención primaria hasta el momento en que el equipo de obstetricia, tenga en
cuenta sus características, de por finalizado el embarazo, fecha en que se
derivará al hospital de referencia donde tendrá lugar el parto.
1.3. Contenido de las visitas durante el embarazo normal
1.3.1. Primera visita
Durante la primera consulta debe hacerse:

- La historia clínica (ver apartado 2, Capítulo I)


- La exploración física general, obstétrica adecuada a la edad gestacional
(ver apartado 3, Capítulo I)
- Las pruebas de laboratorio adecuadas, dependiendo de la edad de
gestación en que se realice esta primera consulta ver apartado 5, Capítulo
I).
- Clasificación del embarazo en el grupo de riesgo que le corresponda según
los factores de riesgo detectados a partir de la anamnesi y de las
exploraciones y pruebas realizadas (ver Capítulo II).

- Información sobre la evolución del embarazo y pruebas y exploraciones


que se le harán así como los mensajes específicos, de promoción de la
salud y educación sanitaria, adecuadas a la edad gestacional (ver Capítulo
III).

1.3.2. Visitas sucesivas


A partir de la segunda consulta, en cada nuevo control al centro, debe hacerse:

- La actualización de la historia clínica. En cada nueva visita debe obtenerse


información sobre la evolución del embarazo actual des de la visita prenatal
anterior (ver apartado 2, Capítulo I).

- La exploración física, general y obstétrica, que corresponda a la edad


gestacional a cada consulta (ver apartado 3, Capítulo I).
1. VISITAS DE CONTROL DURANTE EL EMBARAZO

- La segunda ecografía, a la 18a-20a semana de gestación, y la tercera


ecografía, a la 34a-36a semana de gestación, a la visita que corresponda
(ver apartado 4, Capítulo I).

- La pruebas de laboratorio que correspondan a cada visita (ver apartado 5,


Capítulo I).

- La reavaluación del riesgo en cada visita, vigilando la aparición de algún


factor de riesgo no apreciado a la visita prenatal anterior. En cualquier
momento, el embarazo puede cambiar de grupo de riesgo (ver Capítulo III).

- Transmisión de información sobre la evolución de su embarazo y sobre las


exploraciones que se le harán, así como los mensajes específicos de
promoción de la salud y de educación sanitaria adecuados a su edad
gestacional, en cada nueva visita (ver el Capítulo III).
2. Historia clínica de la embarazada

La historia clínica obstétrica es un cuestionario sistematizado sobre los aspectos, pasados


y presentes, relacionados con la salud de la embarazada y las circunstancias de su
entorno, cuya finalidad es registrar esta información, de forma clara y inequívoca, y
ponerla al alcance del personal sanitario que se cuidará de sus procesos fisiopatológicos
durante el transcurso de la gestación. Por este motivo se focalizará especialmente en la
acumulación de la información transcendente para un buen control, seguimiento y
conclusión del embarazo.

La historia clínica ha de cumplir los requisitos siguientes:

∗ Estar correctamente identificada y ordenada


∗ Ser clara y inteligible
∗ Ser concisa pero completa
∗ Constituir un guión del interrogatorio y de las acciones sanitarias a desarrollar
∗ Garantizar el derecho a la intimidad
∗ Posibilitar la explotación estadística de los datos contenidos (1)
∗ Cumplir los requisitos legales
(1) Es muy aconsejable disponer de una descripción tabulada, con una fila o columna para cada
visita, de los resultados de las principales exploraciones físicas y pruebas complementarias
realizadas.

Carnet de salud de la embarazada


Ya en la primera visita debe proporcionarse a la mujer el Carnet de salud de la
embarazada, el cual se debe rellenar con los datos de su historia clínica.

Se le debe recomendar que la lleve a todos los controles del embarazo para ir
actualizándolo en cada nueva visita, para que éste sea un documento útil para la
coordinación entre los diferentes niveles asistenciales que puedan intervenir en la
atención a su embarazo.
2. Historia clínica de la embarazada

2.1. Contenido mínimo de la historia clínica


El formato de la historia clínica podrá ser diverso en cuanto a la presentación, pero acerca
del contenido deberá estar preparado para poder registrar el conjunto mínimo de datos
necesarios para el seguimiento del embarazo normal, en los apartados siguientes:

2.1.1. Identificación (datos personales)


- Apellidos y nombre
- Número de identificación individual (núm. de historia clínica, y/o núm. del documento
nacional de identidad (DNI), y/o núm. de asociados a la Seguridad Social (NASS), etc.).
- Fecha de nacimiento
- Dirección y teléfono de contacto
- Fecha en que se inicia la historia clínica
- Identificación del profesional que rellena la historia clínica
- Nombre de una persona de confianza de la mujer y su dirección (con quien ponerse en
contacto en caso necesario).

2.1.2. Características étnicas, antropométricas y hematológicas


- Etnia
- Talla en cm
- Peso en Kg., previo al inicio del embarazo
- Grupo sanguíneo y factor Rh
- Factor Rh de la pareja en caso de gestantes Rh negativas

2.1.3. Circunstancias sociales


- Nivel de instrucción (analfabeta, sin estudios, estudios primarios, estudios secundarios,
estudios universitarios)
- Religión
- Estado civil (soltera, casada, vive en pareja, viuda, divorciada, separada)
- Situación laboral de la mujer (empresaria, profesional liberal, empleada a sueldo,
pensionista, estudiante, parada, ama de casa, otros). (Se considerará la situación actual y
la ocupación principal tanto de la mujer como de su pareja).
- Situación laboral de la pareja si hay
2. Historia clínica de la embarazada

- Situación económica

2.1.4. Antecedentes familiares


- Defectos congénitos y enfermedades hereditaria
- Endocrinopatias
- Patología cardiovascular
- Hipertensión
- Patología pulmonar y tuberculosis
- Enfermedades hematológicas
- Neoplásias
- Embarazo múltiple
- Partos distócicos y otras patologías obstétricas
- Patología ginecológica
- Enfermedades infecciosas
- Psicopatología
- Otros antecedentes familiares de interés

2.1.5. Antecedentes personales generales


- Anomalías congénitas y enfermedades hereditarias
- Alergias a medicamentos y otros alergenos
- Transfusiones de sangre y hemoderivados
- Inmunidad (ante la rubéola, tuberculosis, toxoplasmosis, hepatitis B, etc.)
- Intervenciones quirúrgicas y accidentes
- Hipertensión arterial y nefropatias
- Patología cardiorespiratoria (tuberculosi, etc.)
- Varices y/o tromboembolismo
- Diabetis mellitus con especificación de insulinodependencia o no (fármaco y dosis de
tratamiento actual).
6. EXPLORACIÓN FÍSICA DE LA EMBARAZADA

3.1. Tabla resumen

3.1.1. Exploración de la embarazada

Primera visita Visitas sucesivas


Constantes - Peso - Peso
- Talla - TA
- TA
Exploración - Inspección de la piel - Abdomen
general - Exploración de mucosas y cavidad bucal - Extremidades
- Auscultación cardiorespiratoria
- Palpación tiroidal
- Exploración abdominal
- Percusión lumbar bilateral
- Exploración de la columna vertebral y pelvis
- Exploración de las extremidades
Exploración - Exploración mamaria - Estática fetal: maniobras de Leopold
obstétrica y - Exploración vulvovaginal y de cérvix uterino - Altura uterina
ginecológica - Citología cervicovaginal - Perímetro abdominal
- Tacto vaginal - FCF
- Medida de la altura uterina - TV a partir de gestación a término

3.2. Observaciones específicas sobre cada exploración

3.2.1. Exploración en la primera visita


Durante el primer control debe realizarse una exploración física general, breve, pero
que permita obtener los datos más relevantes con el objetivo de valorar el estado de
salud de la mujer. Los serian los siguientes:

Constantes
- Peso
Para conocer bien el punto de partida y poder valorar el aumento ponderal
posterior. Se recomienda la utilización del índice de masa corporal (IMC = Kg/m).

- Talla
Es importante que conste en la historia clínica sobre todo para el momento del
parto.

- Tensión arterial
6. EXPLORACIÓN FÍSICA DE LA EMBARAZADA

Debe medirse en las condiciones correctas: en el brazo izquierdo, al final de la


consulta con el fin de reducir al máximo las influencias psíquicas y emocionales
(reposo previo de 10 a 15 minutos), siguiendo el procedimiento estándar.

Medida de la tensión arterial


(procedimiento estándar, método indirecto

1. La gestante debe estar cómodamente sentada en un ambiente tranquilo, con el brazo sin ninguna
constricción durante cinco minutos o más antes de realizar la medición. Los músculos del brazo
deben estar relajados y el antebrazo debe estar situado a nivel del corazón.

2. Se aplica un brazal de medida adecuada a las dimensiones del brazo alrededor de su parte superior,
evitando la formación de arrugas en su colocación. Para un adulto de medida mediana, la anchura
del brazal debe de ser de 13-15 cm. Para pacientes con brazos gruesos se requiere brazales más
grandes, y para las personas delgadas, más pequeños.

3. El manómetro debe ser exacto y su precisión controlada periódicamente (cribado a cero).

4. Es necesario intentar evitar todos los factores extrínsecos que pueden aumentar o disminuir
artificialmente la TA como el estado emocional, medio ambiente, observador, consumo reciente de
alimentos o cigarrillo, ejercicio, posición, frío, distensión de la bufeta, hiperventilación, acción de
fármacos (automedicación).

5. El brazal se hincha mientras se hace la palpación del pulso radial o braquial hasta su desaparición;
aproximadamente este punto indica la tensión arterial sistólica (TAS). A continuación se procede a deshinchar
lentamente el brazal, auscultando los sonidos de Korotkoff mediante un estetoscopio colocado sobre la arteria
branquial. El nivel de tensión en el cual se perciben estos sonidos por primera vez corresponderán, pues, a la
TAS.

6. La tensión arterial diastólica (TAD) (fase IV de Korotkoff) se define como aquella en la cual los sonidos se
atenúan súbitamente. La TAD (fase V) viene señalada por el punto en el cual el sonido desaparece. El valor de
la TAD obtenido a partir de la fase V es menor que el observado en la fase IV. Así mismo, dado que la mayoría
de los estudios se han desarrollado utilizando la TAS en la fase V, se utilizará este parámetro para la decisión
diagnóstica y terapéutica. La TA se ha de medir al menos tres veces durante un periodo mínimo de 3 minutos, y
se registrará la lectura menor.

Exploración general

Conviene que en el primer control de la gestación, se haga una exploración


general de la paciente para conocer su estado de salud valorando,
principalmente, los parámetros siguientes:

- Inspección de la piel
Pigmentaciones anómalas, infecciones, erupciones, etc.
6. EXPLORACIÓN FÍSICA DE LA EMBARAZADA

- Exploración de mucosas y cavidad bucal


Una deficiente coloración de las mucosas nos puede hacer sospechar un estado
anémico de la gestante. Es necesario revisar bien las encías y las piezas
dentales, y aconsejarle la visita al odontólogo ante cualquier problema.

- Auscultación cardiorespiratoria
Es necesario solicitar consulta con el especialista correspondiente ante una
anormalidad.

- Palpación tiroidal
Para comprobar aumentos de la glándula tiroide

- Exploración abdominal
Primero se realizará una inspección para localizar posibles cicatrices anteriores
(teniendo en cuenta las cicatrices ocultas como la incisión para laparoscopia
dentro de la cicatriz umbilical o la incisión de Pfannestiel bajo la vellosidad
púbica). Posteriormente se hará una palpación del abdomen de la embarazada
para descartar puntos dolorosos, tumefacciones, hernias, visceromegalias, etc.

- Percusión lumbar bilateral


En caso de positividad, debe buscarse su etiología.

- Exploración de la columna vertebral y pelvis


Para prever la aparición de posibles problemas posteriores o el empeoramiento
de una alteración actual.

- Exploración de las extremidades


Especialmente las inferiores, buscando la existencia de varices y la aparición de
edemas.
6. EXPLORACIÓN FÍSICA DE LA EMBARAZADA

Exploración obstétrica y ginecológica


- Exploración mamaria
En primer lugar, debe hacerse una inspección con la mujer sentada, los brazos al
lado del tórax y las manos en las caderas. Nos fijaremos en la simetría de ambas
mamas, la piel, los mugrones. Después haremos una palpación, con la gestante
estirada, para descartar posibles tumefacciones. Algunos autores recomiendan
repetirla cada trimestre.
- Exploración vulvovaginal y de cérvix
Hay que buscar signos que nos orienten sobre un posible proceso inflamatorio,
leucorrea, la presencia de condilomas, etc. Observaremos las condiciones
anatómicas de la vagina.

- Citología cervicovaginal
Aprovecharemos para hacerla si no se ha realizado previamente dentro del
período recomendado previo a la visita actual (ver apartado 5.3.8., Capítulo I).

- Tacto vaginal
Debe valorarse el cuello uterino, la medida y la forma del útero para descartar
alteraciones de la morfología uterina y la presencia de posible patología anexal.
También es útil para valorar la morfología de la pelvis ósea.

- Medida de la altura uterina


En el caso de que la primera visita se realice a partir del segundo trimestre, y
según la edad gestacional, ser realizará la medida de la altura del fondo uterino,
las maniobras de Leopold, como medida indirecta que nos servirá para llevar un
control del crecimiento fetal y nos permitirá detectar anomalías en el ritmo de este
crecimiento. Si esta y las posteriores medidas que vayamos haciendo las vamos
reflejando en un gráfico podremos ver el ritmo de crecimiento correcto.
6. EXPLORACIÓN FÍSICA DE LA EMBARAZADA

La altura del fondo uterino es la distancia que separa la sífilis del pubis del fondo del útero, debe
medirse y anotar en cada consulta. Con la mujer en decúbito supino, se aplica uno de los
extremos de una cinta métrica sobre el borde superior de la sínfisi del pubis en la línea mediana y
se fija con el dedo pulgar. Se extiende la cinta métrica sobre la línea media y se remonta la mano,
deslizando su borde cubital a lo largo de la cinta hasta el punto en que desaparece la resistencia
del útero subyacente; la cifra que aparece bajo el borde cubital de la mano es la altura del fondo
del útero.

Existe una relación entre altura del fondo uterino y la duración de la gestación. De forma genera
puede afirmarse que:

- Desde la 16ª a la 36ª SG, la altura del fondo uterino es 8/7 de la duración del embarazo
expresado en semanas des de la fecha de la última regla (regla de McDonald), con una
variación normal de ± 3 cm.
- El ritmo de crecimiento de la altura del fondo uterino hasta la 36ª SG es de unos 4cm/mes.

Diversos factores, además de la duración de la gestación, pueden influir sobre la altura del fondo
uterino:

- Obesidad materna
- Estática fetal
- Volumen del líquido amniótico
- Medida fetal
- Número de fetos
- Experiencia del explorador

Si la altura uterina es anormal para la edad de la gestación, debe descartarse un error de cálculo
de la duración del embarazo. Si ésta es correcta, se realizará el diagnóstico diferencial entre las
causas de un crecimiento uterino excesivo o insuficiente, mediante la valoración de los
antecedentes, sintomatología clínica, datos de la exploración física y la exploración ultrasónica.

3.2.2. Exploración en las visitas sucesivas

Constantes
- Peso
Para poder valorar el aumento ponderal y controlar que se mantenga dentro de los
límites deseables.

- Tensión arterial
6. EXPLORACIÓN FÍSICA DE LA EMBARAZADA

Criterios para definir la hipertensión arterial durante el embarazo


Existencia después de la 20ª semana de gestación (o antes en el caso de enfermedad trofoblástica)
de:
1. Aumento de la tensión arterial sistólica (TAS) igual o superior a 30 mm Hg o de la tensión arterial
diastólica (TAD) igual o superior a 15 mm Hg sobre los valores previos al embarazo.
2. Si los valores previos son desconocidos, existencia de una TAS igual o superior a 140 mm Hg y
de una TAD igual o superior a 90 mm Hg.
3. Si se utiliza el criterio de la tensión arterial mediana (TAM), el valor que se obtiene sumando a la
TAD un tercio de la diferencia entre la TAS y la TAD:
a) Aumento de la TAM igual o superior a 20 mm Hg sobre los valores previos, y
b) Si los valores previos son desconocidos, existencia de una TAM igual o superior a 105 mm Hg.
Los niveles tensionales deben comprobarse al menos en dos ocasiones separadas por un intervalo
de 6 horas, utilizando una técnica estandarizada de medida de la TA.

Exploración general

- Inspección de la piel
Es necesario buscar la aparición de grietas, sobre todo en el abdomen y la parte alta
de las extremidades inferiores.

- Extremidades
Para detectar, sobre todo, edemas y varices.

- Edema
6. EXPLORACIÓN FÍSICA DE LA EMBARAZADA

El edema es un signo clínico que traduce la acumulación excesiva y generalizada de agua en los
tejidos, y se ha considerado como un signo precoz de la preeclamsia. “El edema gestacional” se ha
definido como la aparición de una acumulación excesiva y general de líquido en los tejidos con más
de 1 + de edema con “fòvea” después de 12 horas de reposo en la cama, o bien el aumento de 2 o
más kilos de peso en una semana a causa de la influencia del embarazo. En la exploración física el
edema gestación es blanco, indoloro y blando, conservando la huella del dedo después de la presión
(signo de la “fòvea”). El primer signo clínico de edema generalizado es la presión del anillo sobre el
dedo y la dificultad para su extracción. La aparición de edema facial es más tardía. El edema puede
ser masivo haciendo que la imagen de la paciente sea irreconocible. Una clasificación
semicuantitativa de la intensidad del edema, útil en la práctica es:

1+: Edemas pedis, maleolares y pretibiales


2+: Edema en las extremidades inferiores
3+: Edemas faciales, manos, pared abdominal y sacro
4+: Anasarca con ascitas

El edema grado 3 o superior requiere una evaluación adicional, ya que puede ser el inicio de una
preeclampsia. El edema latente puede ser identificado para el control seriado del peso corporal, ya
que se manifiesta por una ganancia excesiva de peso. El aumento de peso no dice nada sobre cual
es su causa. De hecho, solo una de cada cuatro embarazadas que experimentan un aumento
excesivo de peso en el tercer trimestre (> 2 kg/semana) desarrollan una preeclampsia.

Exploración obstétrica y ginecológica (con la gestante en decúbito y el tronco


ligeramente elevado)

- Estática fetal
Maniobras de Leopold, a partir de la 28ª semana de gestación, y sobretodo al final
de la gestación. Mediante la palpación, utilizando las cuatro maniobras de Leopold,
se obtiene información sobre la situación, posición, presentación y actitud fetal.

Medida de la altura uterina


Es necesario actualizarla en cada nueva consulta

- Frecuencia cardiaca fetal


6. EXPLORACIÓN FÍSICA DE LA EMBARAZADA

Si la edad gestacional es superior a 12 semanas dado que, a partir de este


momento, con un aparato de ultrasonidos hemos de poder oírlo. La auscultación
clínica, mediante el estetoscopio de Pinard, se ha de realizar a partir de la 18ª
semana de gestación en cada nueva visita y si, después de esta edad gestacional,
no se identifica el latido fetal, la causa puede ser: muerte fetal o dificultad para la
auscultación por obesidad materna, polihidramnis, superposición de otros ruidos o
posición fetal en dorsoposterior.

- Tacto vaginal (TV)


Es necesario valorar la realización del TV a partir de la 37ª semana de gestación
(gestación a término) para hacer una evaluación de las características obstétricas
que puedan orientar la inminencia del parto y, a partir de la 41ª semana se puede
realizar amnioscópia cada 48 horas para detectar cambios de coloración de líquido
amniótico como signo indirecto de sufrimiento fetal.
7. ECOGRAFIAS DURANTE EL EMBARAZO

4.1. Tablas resumen

4.1.1. Ecografías durante el embarazo

Primer trimestre: 8ª - 12ª semana de gestación 1ª ecografía


Segundo trimestre: 18ª - 20ª semana de gestación 2ª ecografía
Tercer trimestre: 34ª - 36ª semana de gestación 3ª ecografía

4.1.2. Sistemática de la exploración ecográfica durante el embarazo

Semana de Nivel Objetivos Contenido


gestación
8ª - 12ª I Vitalidad embrionaria 1. Sac. gestacional y embrión:
Estimación de la edad de gestación (1) - Nº de sacos y/o embriones
Patología del 1r trimestre - Presencia o ausencia del embrión
- Latido cardíaco fetal
Marcadores ecográficos precoces de - Medida de la LCR y estimación de la edad
aneuploides (2) - Localización y características del trofoblasto

2 Observación del útero y anexos


18ª - 20ª II Número de fetos 1. Biometrias basales (DBP, CC, CA, CC/CA,
longitud del fémur)
2. Estudio de la anatomía fetal
Control del CIR -. Características de la placenta, cordón (nº de
vasos) y estimación de la cantidad de líquido
Diagnóstico de anomalías estructurales amniótico
y marcadores de cromosomopatías
34ª - 36ª I Estimación de la normalidad fetal y de 1. Estimación del crecimiento fetal (DBP, CC,
su entorno CA, CC/CA, LF, etc.)
2. Estudio de la anatomía fetal

(1) La edad gestacional determinada en esta primera ecografía es un dato imprescindible para el cálculo del riesgo de
cromosomopatías y de los defectos del tubo neural que se hará sistemáticamente en todas las embarazadas que cumplan los
criterios para el cribado bioquímico. Por esta razón es necesario que se coordine de forma más adecuada en cada caso para
poder hacer coincidir estas dos exploraciones de cara a causar los mínimos trastornos posibles tanto a la embarazada como a
la organización de
la red sanitaria.

(2) En el momento de redactar este texto existen diversos estudios en marcha sobre la posible utilidad de una exploración
ecográfica específica efectuada a las 12-14 semanas de gestación, para el cribado ecográfico de cromosomopatías
(eventualmente coordinados con un cribado bioquímico).
El marcador ecográfico, aparentemente más eficiente en esta época, es el incremento de la “translucidez nucal” (superior a 3
mm) que puede ser transitorio. Faltan aún evidencias de su utilidad en el colectivo de gestantes de bajo riesgo de aneuploides.
Solo si se efectuase esta validación se podría introducir este examen en la práctica ordinaria.
7. ECOGRAFIAS DURANTE EL EMBARAZO

4.1.3. Niveles de atención ecográfica

Nivel I: Realizada por obstetras (no dedicados exclusivamente a ecografía),


que utilicen un equipo lineal (electrónica-digital)

Nivel II: Realizada por ecografistas dedicados prioritariamente a la ecografía


obstétrica. Utilizan equipos de alta resolución sectorial, transductor
vaginal (Pueden practicar por ellos mismos técnicas invasivas de
diagnóstico prenatal).

Nivell III: Realizada por ecografistas dedicados exclusivamente al diagnóstico


prenatal (Unidades de Diagnóstico Prenatal). Utilizan equipos de alta
resolución. Doppler. Ecocardiografía. Econeurografía. Transductor
vaginal.

4.2. Observaciones específicas sobre cada una de la exploraciones ecográficas


Se recomienda realizar, a lo largo de una gestación en curso aparentemente normal,
tres exploraciones ecográficas (ver apartado 4.1.1., Capítulo I).

Dada la creciente complejidad y posibilidades de los equipos actuales de


ultrasonografía, se aconseja distinguir tres niveles de atención ecográfica (ver
apartado 4.1.3., Capítulo I).

4.2.1. Ecografía del primer trimestre


Se aconseja su realización entre la 8ª i 12ª semana de gestación. Además de excluir
la patología propia del primer trimestre (aborto, embarazo ectópico, mola), los
objetivos fundamentales de esta exploración consisten en confirmar la vitalidad
embrionaria y precisar la edad de gestación, así como la detección de grandes
malformaciones.
7. ECOGRAFIAS DURANTE EL EMBARAZO

La sistemática de la exploración será:

Localización del saco gestacional del embrión


• Número de sacos gestacionales y/o embriones (y su corionicidad si se trata de un
embarazo múltiple).
• Presencia o ausencia del embrión
• Presencia o ausencia de vitalidad embrionaria (latido cardíaco fetal)
• Existencia y características del saco vitelino
• Características y localización del trofoblast y su posible patología
• Biometría:
• Biometría del saco gestacional: La medida del saco gestacional se utiliza
para predecir la edad gestacional i valorar el estado del embarazo. Su
utilidad en la estimación de la edad del embarazo es menor que la de la
longitud vertex-coccix; su valor clínico más alto es ayudar en el
diagnóstico del huevo abortivo. Este diagnóstico se puede establecer
cuando el diámetro mayor del saco es mayor de 25 mm i no se ve el
embrión.

• Medida de la longitud vertex-coccix: la longitud vertex-coccix (LVC o CRL)


es la longitud más larga del embrión, medida entre la parte más alta de la
cabeza y la más prominente del coccix. Es útil para hacer la estimación de
la edad ecográfica en el primer trimestre de gestación.

• Eventual detección de grandes malformaciones (anencefalia, etc.).

Útero y anexos
Se debe realizar una descripción detallada del útero y de los anexos, así como de
sus alteraciones en el caso de que hubieran (atención especial a las malformaciones
ováricas y a la presencia de miomas uterinos).
7. ECOGRAFIAS DURANTE EL EMBARAZO

4.2.2. Ecografía del segundo trimestre


Se recomienda realizar esta exploración entre la 18ª y la 20ª semana de gestación
pero, si fuera necesario, se podría realizar hasta el último día de la semana 22. La
inspección ecográfica en estas semanas es fundamental para el diagnóstico de los
defectos para malformaciones. En el caso de gestantes con riesgo de
malformaciones fetales, se debería repetir la ecografía, no más tarde de la 28ª-30ª
semana de gestación.

Básicamente, la metodología de exploración en el segundo trimestre es:

Vida fetal
Es necesario establecer la presencia o ausencia de vitalidad fetal.

Número de fetos
Se debe confirmar la existencia de una gestación única o múltiple. En el segundo
caso se establecerá el número de placentas y amnios (confirmación de corionicidad),
así como hay diferencias en la biometría de ambos fetos. Se debe establecer la
estática fetal indicando la situación, presentación y posición del feto.

Biometría fetal
Es aconsejable que cada unidad de ecografía disponga de tablas de biometría fetal
propias o adaptadas a su población, de los diferentes parámetros antropométricos a
explorar a lo largo de la gestación.

Se recomienda seguir los parámetros biométricos siguientes:

Cabeza
- diámetro biparietal (DBP)
- diámetro frontooccipita (DFO)
- calcular el índice cefálico (DBP/DFO)
- perímetro o área cefálica
- valoración del ventrículo lateral (diámetro atrioventricular) (DAV)

- valoración del hemisferio


7. ECOGRAFIAS DURANTE EL EMBARAZO

- calcular el índice ventrículo/hemisferio (V/H) (de forma optativa)

La exploración se ha de realizar en un corte transversal a nivel de la sutura


interhemisférica, cavum del septum pellucidum y del tercer ventrículo. Se medirá el
diámetro bipariental (DBP); si éste no coincide con el correspondiente a su fecha de
amenorrea, debe medirse el diámetro frontooccipital y establecer el índice cefálico
(DBP/DFO). Si éste no se encuentra entre 0,70 y 0,85, la medida del diámetro
biparietal no se correlacionará bien con la edad gestacional (dolicocefália o
branquicefália). Se medirá también el prímetro o el área cefálica.

También es importante la evaluación del ventrículo lateral. Si se observan


desviaciones de la normalidad se determinará el diámetro atrioventricular, así como
el índice ventrículo/hemisferio que a esta edad gestacional tiene un valor entre 0.4-
0.5.

Abdomen
- Circunferencia o área abdominal

Se ha de medir en un corte transversal (lo menos ortogonal posible) en la entrada de


la vena umbilical en el abdomen, donde es posible visualizar dos tercios de esta
vena y el estómago.

Fémur

La longitud del fémur se mide entre las diáfisis, sin incluir los núcleos epifisiales. La
longitud del fémur tiene un buen valor predictivo para diagnosticar la edad
gestacional.

Estudio de la anatomía fetal


El estudio de la anatomía fetal ha de ser absolutamente ordenado y preciso.
Después de un examen ecográfico preliminar para determinar la ubicación fetal y
7. ECOGRAFIAS DURANTE EL EMBARAZO

placentaria, y familiarizarse con las características del abdómen materno, se


explorarán las estructuras fetales mediante cortes multidireccionales estándards,
utilizando la sistemática siguiente:

Cabeza y cuello
Deben explorarse los ventrículos laterales (cuernos anteriores y posteriores, y plexos
coroidales), el III y el IV ventrículos, para descartar la presencia de una hidrocefalia,
el septum pellucidum, el cuerpo calloso (cuando sea posible), el cerebelo (vérmix y
lóbulos) y la cisterna magna. La presencia del “signo del limón” en un corte
transversal se asocia, en un 77% de los casos, a una espina bífida. También debe
descartarse la presencia del “signo de la banana”, a causa de la obliteración de la
cisterna magna con un abombamiento de los hemisferios del cerebelo (probable
asociación con espina bífida).

- Ventrículos laterales (cuernos anteriores y posteriores, y plexos coroidales)


- III y IV ventrículo
- Septum pellucidum
- Tálamos y pedúnculos cerebrales
- Cerebelo (vérmix y lóbulos)
- Cisterna magna
- Morfología global del cráneo (signos “del limón” o “de la banana”)

En el cuello se evaluarán sus contornos (tumoraciones, etc.) y, si es posible, sus


estructuras vasculares.

Tórax
Se determinará la integridad de sus paredes y se observarán los pulmones
(densidad, medida, estructura, derramen, etc.) y mediastino.

El corazón se explora realizando un corte de las cuatro cámaras para evaluar la


medida y la morfología de las cuatro cavidades, el movimiento de las válvulas
auriculoventriculares, la integridad de los septos ventriculars y auriculares, así como
7. ECOGRAFIAS DURANTE EL EMBARAZO

la salida de la aorta y de la pulmonar y confirmar una correcta correlación ventriculo-


arterial. Si existen dudas sobre su normalidad debe derivarse el caso a un nivel III,
donde se disponga de un equipo de ecocardiografía Doppler.

Columna vertebral
Debe establecerse su forma y total integridad, para lo cual se explorará en toda su
longitud. Primero en un corte longitudinal y después en un corte transversal,
visualizando el cierre posterior de los pedicles vertebrales.

Abdomens
- Diafragma y pared abdominal
- Estómago
- Vesícula biliar
- Suprarenal
- Hígado
- Riñones
- Pelvis renal
- Bufeta urinaria
- Paquete intestinal

En primer lugar debe comprobarse la integridad del diafragma para descartar una
hernia diafragmática y también la de la pared abdominal. A continuación debe
visualizarse el estómago, la vesícula biliar, la suprarenal y el hígado. Debe
descartarse imágenes anómalas, sobre todo quísticas (doble burbuja, etc.). También
debe ser explorados los riñones, comprobando que no haya dilataciones y que no
tengan otras anomalías. En caso de observar una medida anormal, debe medirse la
circunferencia renal en un corte transversal; el cociente circunferencia
renal/circunferencia abdominal (CR/CA) debe encontrarse entre 0,27-0,30. Si existe
dilatación por la zona de las pelvis renales, se medirán verticalmente en un corte
transversal. Si la medida está por debajo de 5 mm, se considera normal, si está
entre 5-10 mm debe repetirse la exploración para ver si la dilatación progresa. Si la
medida está por encima de 10 mm y hay dilatación de los cálices, se hará el
7. ECOGRAFIAS DURANTE EL EMBARAZO

diagnóstico de hidronefrosi. Debe de indentificarse la bufeta urinaria; si no se


visualiza debe repetirse la exploración después de 30 minutos.

Extremidades
- Integridad de las cuatro extremidades y su simetría

Debe explorarse la integridad de las cuatro extremidades y su simetría y orientación.


si existen dudas, debe utilizarse curvas de normalidad para cada uno de los huesos
largos y, en caso de que se confirmaran anomalías biométricas, el caso debe
enviarse a un nivel III.

Genitales
La exploración del sexo fetal y su anotación en el informe se hará únicamente
cuando exista la seguridad en su diagnóstico (habitualmente, después de la 24ª
semana de gestación).

En el diagnóstico solo se hará constar si se confirma la presencia de escroto y pene


(en el caso del sexo masculino) y de vulva con labios mayores i menores (en el caso
del sexo femenino).

Marcadores anatómicos de cromosomopatías


Se han descrito diversos marcadores ecográficos anatómicos, la observación d los
cuales, en estos momentos, ha de hacer pensar en una alteración cromosómica
fetal. Entre éstos se puede mencionar: el incremento de la translucidez nucal (o
edema nucal) superior a 3 mm, el recorte del fémur y/o el húmero, la hipoplásia de la
falange mediana del quinto dedo, l’éctasis piélica bilateral, la hiperecogenicidad del
abdomen inferior, etc. En este caso es necesario transferir a la gestante a un nivel III
para evaluar el grado de sospecha y efectuar, eventualmente, una prueba invasiva
diagnóstica.

Estudio de los anexos ovulares


7. ECOGRAFIAS DURANTE EL EMBARAZO

Placenta
- Localización
- Inserción

Debe identificarse su ubicación, clasificándola en:

• Alta: si está alejada del orificio cervical interno


• Baja: si se encuentra a menos de 2 cm del orificio cervical interno, y
• Previa: si cierra el orificio cervical interno.

En cualquier caso, el diagnóstico de inserción baja, marginal u oclusiva, se hará


siempre después de la 20ª semana de gestación.

Se indicará el lugar de la inserción, cara posterior izquierda, derecha, etc., y si existe


alguna separación con la decidua sugerente de hematoma retroplacentario.
Igualmente se indicará si existe alguna imagen sonoluminescente o mixta en los
márgenes que pueda hacer pensar en u hematoma subcorial.

Cordón umbilical
- Inserción placentaria
- Presencia de tres vasos
- Se identificará su entrada en el abdomen
- Próximo al cuello del feto o envolviéndolo
- Grueso anormal

Debe de visualizarse tanto en corte longitudinal como transversal. Con el primer


corte y siguiendo su recorrido, veremos la inserción placentaria (debe descartarse
inserción velamentosa) y con el segundo, confirmaremos la presencia de tres vasos,
dos arterias que se enrollan sobre otro vaso mayor que es la vena umbilical. Se
identificará su entrada en el abdomen, descartando la presencia de un omfalocele o
laparosquisi. Es importante señalar si el cordón se encuentra cercano o envolviendo
7. ECOGRAFIAS DURANTE EL EMBARAZO

el cuello del feto, lo cual es una aproximación al diagnóstico de vuelta de cordón, así
como si existen quistes o un grueso anormal (edema).

Líquido amniótico
- Cantidad de líquido amniótico
- Índice de líquido amniótico (ILA)

Es importantísimo valorar la cantidad de líquido amniótico.


• Por defecto, el oligoamnio se ha relacionado con malformaciones, sobre
todo renales, y con el crecimiento intrauterino retrasado (CIR).
• Por exceso, el polihidramnio se ha relacionado con malformaciones del
tubo digestivo y con descompensación de la diabetes.

La clasificación de Phelan (1987) permite realizar una estimación de volumen del


líquido amniótico, midiendo las bolsas de líquido en los cuatro cuadrantes, y
tomando como referencia la línea alba (de color oscuro durante el embarazo) y el
ombligo materno. Para medir, el trasductor se coloca en un corte transversal en cada
cuadrante y se mide la bolsa en vertical.

La suma de los cuatro cuadrantes se anotará en el informe como índice de líquido


amniótico (ILA). Existe un oligomanio ligero, cuando el índice es de 5 a 8 cm, y grave
por debajo de 5 cm, y hidramnio, cuando es superior a los 22 cm.

4.2.3. Ecografía del tercer trimestre


Se recomienda realizar este examen alrededor de la 34ª semana de gestación, con
el objetivo de detectar precozmente los casos de CIR.

Las normas para la exploración son:

Biometria fetal
- Cuociente CC/CA (circunferencia cefálica/circunferencia abdominal).
7. ECOGRAFIAS DURANTE EL EMBARAZO

Se realiza utilizando la metodología descrita para la exploración de la 18ª-20ª


semana de gestación. Los parámetros biométricos básico son el DBP, la CC (o AC),
la CA (AA) y la longitud del fémur (LF). Es importante confirmar el adecuado
crecimiento fetal. Debe ponerse especial atención al cuociente C/A, ya sea mediante
el índice CC/CA o el índice AC/AA (área cefálica/área abdominal), que es superior a
1 hasta la 35ª-35ª semana de gestación y se invierte a partir de entonces. La no
inversión nos ha de hacer pensar en la posibilidad de estar ante un CIR tipo II.

Estudio de la anatomía fetal


Como en la ecografía de la 18ª-20º semana de gestación, debe de ponerse especial
atención en explorar el encéfalo, los ventrículos, el cerebelo y la fosa posterior. En
tórax, debe realizarse el corte de las cuatro cámaras cardíacas y confirmar la
integridad del diafragma. En el abdomen, se debe visualizar el estómago, los
riñones, las pelvis renales y la bufeta.

Placenta
- Localización
- Imágenes econegativas o mixtas retroplacentarias
- Estructura placentaria; debe clasificarse de acuerdo con Grannum.

La exploración a esta edad gestacional no difiere de la realizada en la 18ª-20ª


semana de gestación, pero debe prestarse especial atención a la localización (alta,
baja, marginal o previa) y a la ausencia de imágenes econegativas o mixtas
retroplacentarias (hematomas).

Clasificación de Grannum
Grado 0: Estructura homogénea, placa corial y placa basal casi no visible
Grado 1: Discreto aumento de la ecogenicidad de forma dispersa, placa corial un
poco ondulada
Grado 2: Placa corial con algunas formas dentadas: algunas imágenes
calcificadas que empiezan a dibujar los cotiledones.
7. ECOGRAFIAS DURANTE EL EMBARAZO

Grado 3: Marcadas formas dentadas que van desde la placa corial a la basal
estableciendo tabiques completos; aparición o aumento de lagunas
anecogénicas en el interior de los cotiledones.

Teóricamente no debería observarse una placenta grado 3 pasadas las 35 semanas


de gestación.

Líquido amniótico
Se recomienda valorar el volumen utilizando el ILA. Si es inferior a 8 cm deben
realizarse ecografía seriades para evaluar su posible evolución hacia un oligoamnio
grave. Si se ha excluido una causa malformativa debe pensarse en un sufrimiento
fetal crónico y, en ese caso, además de precisar si existen anomalías en el
crecimiento fetal, se debería efectuar un estudio de la hemodinámia fetal.
8. PRUEBAS DE LABORATORIO DURANTE EL EMBARAZO

5.1. TABLAS RESUMEN

5.1.1. Pruebas sistemáticas

Prueba 1r trimestre 2º trimestre 3r trimestre


Test de O’Sullivan ------ Sí (24 - 28 SG) ------
(sin riesgo) (5.3.1.1.)
Test de O’Sullivan Si es necesario Sí (24 - 28 SG) Si es necesario
(con riesgo) (5.3.1.2.) (30 - 32 SG)
TTOG Si es necesario Si es necesario Si es necesario
(5.3.1.3.)
Cribado bioquímico ------ Sí (14 - 17 SG) ------
(sin riesgo) (5.3.2.1.)
Cariotipo fetal Si es necesario
(con riesgo) (5.3.2.2.)
Grupo ABO y factor Rh Sí ------ ------
(5.3.3.1.)
Coombs indirecta Si es necesario Si es necesario Si es necesario
(5.3.3.2.)
Hemograma Sí Sí Sí
(5.3.4.)
Urinocultivo Sí (16 SG)
(5.3.5.)
Cultivo vaginal (1)
(5.3.6.) (35 - 37 SG)
Proteinúria Sí Sí Sí
(5.3.7.)
Citología cervicovaginal Si es necesario ------ ------
(5.3.8.)
Rubéola (IgG) Si es necesario ------ ------
(5.3.9.)
Sífilis (VDRL-RPR) ------
(5.3.10)
Hepatitis B (HbsAg) ------ Sí
(5.3.11)
HIV Sí ------ ------
(5.3.12.)
Toxoplasmosis (2) ------ ------
( ) Ver más información en cada uno de los apartados de este Capítulo referencias entre paréntesis
(1) Ver apartado 5.3.6., capítulo I
(2) Ver apartado 5.3.12., capítulo I
8. PRUEBAS DE LABORATORIO DURANTE EL EMBARAZO

5.1.2. Valores de normalidad durante el embarazo

Prueba Valor normal


Hb > = 11 g / dl
Hto 34 - 36 %
Leucocitos < 16.000
Plaquetas >150.000
Test de O’Sullivan < 140 mg mg / dl
TTOG (3h 100g glucosa) en ayunas < 105 mg/dl
1 hora < 190 mg/dl
2 horas < 165 mg/dl
3 horas < 145 mg/dl
Urinocultivo Negativo
Riesgo de síndrome de Down y DTN < 1/270
negativo (alfafetproteina y B-HCG)
Coombs indirecto Negativo
Proteinuria Negativo
Glucosuria La positividad no implica patología

5.2. Condiciones para la realización de analíticas en la gestante

5.2.1. Necesidad de ayuno


Las nauseas matinales y los vómitos son una complicación frecuente en la gestación.
No existe ninguna indicación para que la analítica de la gestación se realice en ayunas,
excepto si lo que solicitamos es una glucemia basal. Los otros parámetros no se
alteran demasiado por la ingesta.

La administración de 50 g de glucosa, cuando está indicado en el protocolo de


realización de test de O’Sullivan, especialmente si se ingieren con el estómago vacío,
pueden desencadenar el vómito. Se ha de tener en cuenta que este test no requiere el
ayuno previo, dado que su resultado no se ve alterado por la ingesta de alimento previo
a la extracción de sangre. También debe tenerse en cuenta que, si se realiza el test de
O’Sullivan, no está indicada la determinación de glucemia basal. Por ello, para evitar
vómitos en las embarazadas hemos de recomendar lo siguiente:

- Que no vayan a realizar la analítica en ayunas sino después de haber desayunado


- Se les ha de administrar los 50 g de glucosa antes de realizar ninguna extracción
8. PRUEBAS DE LABORATORIO DURANTE EL EMBARAZO

- Se les ha de realizar una única extracción a los 60’ para la realización del test de
O’Sullivan, hemograma, serologías, test de Coombs, y cualquier otra determinación
indicada.

5.2.2. Hora recomendada para la extracción


La primera hora de la mañana no es la más conveniente para la gestante (porque la
sensación de nauseas suele ser mayor), aunque acostumbra ser la preferida por los
laboratorios por cuestiones organizativas. Así pues, no hay ningún inconveniente,
desde el punto de vista médico, que la extracción se realice a otra hora del día.

5.2.3. Recogida de la muestra de orina


La validez del sedimento y del cultivo de orina depende, en buena medida, de la
correcta recogida de la muestra. La contaminación con células procedentes del tramo
final de la uretra o de la piel pueden alterar e invalidar un análisis.

Para recoger orina de adecuadamente debe darse a la gestante las instrucciones


siguientes:

- Abril el pote estéril que se le habrá suministrado teniendo cuidado de no tocar la parte
interna con las manos.

- Lavar la zona vulvar con agua jabonosa

- Aclarar los restos de jabón con agua abundante

- Iniciar la micción rechazando la primera cantidad de orina

- Recoger la orina restante directamente en el pote estéril con cuidado de que este no
entre en contacto con la piel.

- Tapar el pote sin tocar la parte interna del tapón


8. PRUEBAS DE LABORATORIO DURANTE EL EMBARAZO

5.3. Observaciones específicas sobre cada determinación sistemática

5.3.1. Cribado de la diabetes gestacional


5.3.1.1. Test de O’Sullivan en el embarazo sin riesgo
Por convenio internacional se acepta que el método de cribado para descartar la
diabetes en la gestante es el test de O’Sullivan. El momento de máxima rentabilidad
diagnóstica es el comprendido entre la 24-28 semana de gestación y, en caso de
realizar un único test, debe practicarse en este periodo.

El test de O’Sullivan no diagnostica la diabetes gestacional (DG), tan solo establece la


sospecha. Si el test es positivo debe ir seguido de una curva de glicemia de 3 horas
(test de tolerancia oral a la glucosa-TTOG), para confirmar el diagnóstico (ver apartado
5.3.1.3., Capítulo I).

En Cataluña se realizará el cribado a todas las embarazadas siguiendo los criterios del
Consejo Asesor sobre la Diabetes en Cataluña del Departamento de Sanidad y
Seguridad Social, para la detección de la DG. Siguiendo estos criterios se realizará el
cribado mediante el test de O’Sullivan a todas las embarazadas de edad inferior a 35
años. Según las últimas recomendaciones, quedarían excluidas de este cribado
universal las gestantes de menos de 24 años con peso normal y sin antecedentes
familiares de diabetes mellitus, y sin otros factores de riesgo (antecedentes familiares
de diabetes, diabetes gestacional previa, patología obstétrica previa, obesidad), entre la
24-28 semana de gestación.

Realización del test


- Se administran 50 g de glucosa en solución al 25% por vía oral (en 200 cc
- Se realiza una extracción de sangre venosa una hora después de la administración de
glucosa
- Se determina la glucosa al suero por el método de la glucosaoxidasa
- No se requiere dieta preparatoria
8. PRUEBAS DE LABORATORIO DURANTE EL EMBARAZO

- La gestante no necesita estar en ayunas porque este factor no altera de


manera significativa el resultado
- Se estará sin comer ni fumar durante una hora, hasta la extracción de sangre
capilar o venosa
El test se podrá hacer en cualquier momento del día
- No es necesario disponer de glicemia basal

Valoración del Test de O’Sullivan


- Test negativo: inferior a 140 mg/dl (7,8 mmol/l)
- Test positivo: igual o superior a 140 mg/dl (7,8 mmol/l)

Si el cribado es positivo se sospecha un posible DG. Para realizar el diagnóstico de


seguridad se practicará una TTOG.

5.3.1.2. Test de O’Sullivan en el embarazo de riesgo


Debe realizarse este cribado ya en la primera visita (primer trimestre de la gestación) a
todas las embarazadas de más de 35 años de edad o que tengan algún otro de los
factores de riesgo (antecedentes familiares de diabetes, diabetes gestacional previa,
patología obstétrica previa, obesidad). Si resulta negativo, debe repetirse a la 24-18
semana de gestación y si nuevamente sale negativo deberá repetirse a la 30 - 32
semana de gestación.

5.3.1.3. Test de tolerancia oral a la glucosa (TTOG)


Debe realizarse en los casos en que el test de O’Sullivan resulte positivo. El TTOG
servirá para realizar el diagnóstico de seguridad. Debe realizarse en condiciones de
ayuno durante las 10-12 horas previas a la extracción de sangre, y después de la
preparación de una dieta especial durante tres días.

Realización del TTOG


- El TTOG se practica en ayunas, por vía oral, 100g de glucosa en solución al
25%, y se determina la glucemia plasmática venosa a los 0 (en ayunas), 60, 10,
y 180 minutos
8. PRUEBAS DE LABORATORIO DURANTE EL EMBARAZO

- de ingesta. Mientras dura esta prueba, la paciente debe permanecer sentada y


sin fumar

Valoración del TTOG


- Valoración en cada punto de la curva:

0’ .... 105 mg/dl (5.8 mmol/l)


60 .... 190 mg/dl (10.6 mmol/l)
120 .... 165 mg/dl (9.2 mmol/l)
180 .... 145 mg/dl (8.1 mmol/l)

Clasificación del TTOG

TTOG CRITERIO ACCIÓN


Normal Todos los valores son Se practica un nuevo
menores a los límites cribado en la fecha
establecidos prevista
Intolerante Solo uno de los valores Se repite nuevamente
iguala o supera el límite después de 3 semanas, sin
realizar un nuevo cribado
Diabetes gestacional Dos o más valores del Se suprimen nuevos
TTOG igualan o superan el cribados y curvas de
límite establecido glucemia y se dirige a la
paciente a la CLINICA DE
DIABETES Y GESTACIÓN

Dieta preparatoria para el TTOG en la gestación

Composición: 2100 calorías, 265 g de CHO, 125 g de proteína, 60 g de grasa


Se sigue esta dieta durante los 3 DIAS PREVIOS a la realización del TTOG

DESAYUNO . Un vaso de leche descremada y


. 40 g de pan y
. 25 g de jamón
MEDIA MAÑANA . 200 g de naranja (o 200 g de pera o 160 g de manzana)
ALMUERZO . 1 plato de ensalada y
. 200 g de judía tierna (o espinacas o zanahoria) y
. 130 g de patata hervida (o 130 g de arroz hervido)
. 20 g de pan y
. 150 g de pollo sin piel (o 150 g de pescado, o 150 g de ternera) y
8. PRUEBAS DE LABORATORIO DURANTE EL EMBARAZO

. 200 g de naranja (o 200 g de pera o 160 g de manzana)


MERIENDA . Un vaso de leche (o 2 yogures descremados) y
. 200 g de naranja (o 200 g de pera o 160 g de manzana)
CENA . Igual que la comida
ANTES DE IR A DORMIR . Un vaso de leche descremada y dos galletas maría (o 20 g de pan)

ACEITE: 15 g DURANTE TODO EL DIA


Para que la prueba salga bien es MUY IMPORTANTE que haga TODA LA DIETA que se indica

5.3.2. Cribado de cromosomopaties y defectos del tubo neural

5.3.2.1. Cribado bioquímico en el embarazo sin riesgo


Previa información adecuada y la obtención del consentimiento informado de la
embarazada, se realizará el cribado informado de la embarazada, se realizará el
cribado bioquímico a todas las gestantes de edad inferior a los 38 años (< = 37) en el
momento del parto, y que no presenten ningún otro factor de riesgo asociado a
cromosomopatias (hijo anterior con cromosomopatía documentada, padre o madre
portadores de una anomalía cromosómica, hallazgo ecográfico sugestivo de anomalía
cromosómica fetal).

Es imprescindible que previamente se fije la edad gestacional mediante una ecografía


(ver apartado 4.2.1., Capítulo I), para evitar errores en el cálculo de riesgo. Esta
ecografía debe realizarse con un margen de tiempo suficiente, para disponer del
resultado en el momento de realizar la extracción de sangre para esta determinación
hormonal, o bien y preferiblemente, coordinar ambas exploraciones para causar los
mínimos trastornos posibles tanto a la embarazada como a la red sanitaria.

De momento, y hasta que no se tengan valores de referencia, este cribado no podrá


ofrecerse a las gestantes portadoras de más de un feto.
8. PRUEBAS DE LABORATORIO DURANTE EL EMBARAZO

Mujeres < 38 añosEscriba aquí el nombre


sin factores de riesgo

Entre la 8-12 SG
Alfa-fetoproteina
Ecografía por determinar
edad de gestación

Estudio/DTN
Entre la 14-17 SG
alfa-fetoproteína y beta HCG

Cálculo informático
del nivel de riesgo

Riesgo < 1/270 Riesgo > 1/270

Entre la 18-20 SG Procedimientos


Ecografía estudio invasivos
morfológico fetal

Alteració Normal Alteración Normal

Estudio cromosómico Asesoramiento Entre la 18-20 SG


Asesoramiento reproductivo Ecografía estudio
reproductivo morfológico fetal

Consentimiento informado
Cualquier acción en el campo del diagnóstico prenatal de defectos congénitos debe
fundamentarse en una información esmerada, objetiva y comprensible por parte de los
profesionales sanitarios, con la finalidad de que la pareja/mujer embarazada disponga
de la información adecuada sobre el proceso global que tiene como objetivo la
detección del riesgo y el diagnóstico de anomalías congénitas (indicaciones, beneficios,
limitaciones e inconvenientes de cada una de las pruebas que se le ofrecen) (ver
apartado 4.1.5, Capítulo III), a fin de que puedan decidir libremente si quieren acceder
o no al diagnóstico prenatal y posteriormente considerar, de acuerdo con el resultado,
las opciones disponibles.
8. PRUEBAS DE LABORATORIO DURANTE EL EMBARAZO

Realización del cribado bioquímico


La extracción de sangre para realizar la analítica se hará entre la 14a-17a semana de
gestación (óptimamente la semana 16). Este cribado bioquímico consiste en el cálculo
de riesgo que el feto se encuentre afectado por alguna anomalía cromosómica o DTN.
Este cálculo de riesgo se realiza para una edad gestacional determinada, mediante
ecografía.

El cálculo de riesgo, es decir, la probabilidad de tener alguna anomalía cromosómica o


algún DTN se realizará a partir de la determinación, en la sangre venosa materna, de la
α-fetoproteína (AFP) i de la fracción β libre de la gonadotrofina coriónica (β-hCG) entre
la 14a-17a semana de gestación (confirmada ecográficamente); i corrigiéndolo
posteriormente, teniendo en cuenta los factores siguientes:

Factores de corrección del cribado bioquímico


- peso de la gestante
- raza
- diabetes tipo I
- consumo de tabaco

Con la introducción de todos estos factores, además de la edad de la mujer en el


momento del parto, en un programa informático se calcula el riesgo de llevar un feto
afectado y se obtiene este índice de riesgo para la semana de gestación determinada.

Interpretación del resultado del cribado


El valor a partir del cual este riesgo empieza a considerarse positivo (cut-off, o nivel de
corte) es >=1/270. Aplicando este nivel de riesgo obtendremos aproximadamente entre
un 8-10% de falsos positivos (FP) y un porcentaje de falsos negativos (FN) mucho más
bajo (0,02% aproximadamente).

Una vez realizado el cálculo de riesgo debe informarse del resultado de manera
confidencial y objetiva, intentado reducir al máximo la angustia que puede producir un
riesgo elevado (>=1/270).
8. PRUEBAS DE LABORATORIO DURANTE EL EMBARAZO

Un índice de riesgo superior o igual a >=1/270 quiere decir que estamos ante una
probabilidad de 1 entre 270, es decir un 0,4%, de encontrarnos ante un caso de
anomalía cromosómica.

Por encima de esta probabilidad, es decir, con un cálculo de riesgo >=1/270, es


aconsejable ofrecer a la mujer la posibilidad de llegar a un diagnóstico mediante el
análisis del cariotipo fetal y/o otras determinaciones, u obtener, previamente con el
asesoramiento adecuado, su consentimiento informado.

Si el índice de riesgo es <=1/270, es decir, si nos situamos con una probabilidad menor
de 0,4% de encontrarnos ante un caso patológico, no se recomienda ofrecer un
procedimiento invasivo, dado que los efectos indeseables (abortos asociados) de la
amniocentesis no compensan la baja probabilidad de encontrarnos ante un falso
negativo (0,02%). Y se informará a la mujer/pareja, en este caso, que entre la 18a-20a
semana de gestación se hará una ecografía (ver apartado 4.4.2., Capítulo I), para
proceder a un estudio morfológico del feto con la finalidad de descartar anomalías
estructurales.

En el caso de un índice de riesgo <=1/270 no debe recomendarse la repetición de la


prueba, dado que no incrementa sustancialmente la eficiencia de este cribado (reduce
el porcentaje de falsos positivos asociados, pero también el porcentaje de detección).

Recomendaciones para los laboratorios de bioquímica clínica


Para mantener en toda la población de gestantes una elevada tasa de detección (60-
80%) y un porcentaje de FP (8-10%) y FN (0,02%) dentro de los intervalos descritos,
los laboratorios clínicos deberán de tener en cuenta las recomendaciones explicitadas
en el Protocolo de diagnóstico prenatal de anomalías congénitas de Catalunya del
Departamento de Sanidad y Seguridad Social.
8. PRUEBAS DE LABORATORIO DURANTE EL EMBARAZO

5.3.2.2. Estudio del cariotipo fetal en el embarazo de riesgo


Se aplicará este estudio a todas las mujeres de edad igual o superior a los 38 años en
el momento del parto, o a las embarazadas de edad igual o inferior a los 37 años, si
existen factores de riesgo de cromosomopatía (ver apartado 4.1.5.2., Capítulo III), o
bien si el índice de riesgo es >=1/270 del cribado bioquímico. Se les ofrecerá la
posibilidad de hacer un estudio cromosómico, para lo cual se realizará una técnica
invasiva (biópsia corial, amniocentesis o funiculocentesis) para la obtención de células
fetales.

Mujeres ≥ 38 años Mujeres < 38 años


con factores de riesgo

Procedimiento
invasivo

Normal
Alteración

Entre la 18-20 SG
ecografía estudio
Asesoramiento morfológico fetal
reproductivo

Alteración Normal

Asesoramiento
reproductivo

Consentimiento informado
La aplicación de estas técnicas no está exenta de riesgos, dado que se trata de un
procedimiento invasivo, con un pequeño porcentaje de abortos asociados. Por este
8. PRUEBAS DE LABORATORIO DURANTE EL EMBARAZO

motivo, es necesario pedir, por escrito, previo consejo asistido adecuado (ver apartado
4.1.5.2., Capítulo III). La decisión de aceptar o no la prueba corresponde a la gestante,
pero la oferta por parte del facultativo es inexcusable.

Realización de la prueba
El estudio de los cromosomas de las células del feto se realiza mediante el análisis del
cariotipo fetal. Estas células se obtienen a partir de procedimientos invasivos
(amniocentesis, biópsia corial o funiculocentesis).

Desde el punto de vista obstétrico, la elección de la técnica depende de la edad de


testación , la indicación específica, las condiciones del caso y la experiencia del
explorador, el riesgo de la técnica y de las posibilidades de cada centro, El cronograma
más habitual según la edad gestacional, es el siguiente:

- 8a-10a SG Biópsia corial transcervical


- 10a-13a SG Biópsia corial transabdominal (aunque también puede realizarse
más tarde)
- 14a-17a SG Ammiocentesis (puede efectuarse precozmente (13a SG),
especialmente si se recurre a técnicas de microfiltración).
- >018a SG Funiculocentesis

Condiciones para los centros donde se realice la toma de la muestra


La realización de los diferentes procedimientos invasivos se ha de hacer en centros
con una experiencia acreditada y en un número de casos que permita reducir al mínimo
los efectos indeseables asociados a la técnica, de acuerdo con lo que establece el
Protocolo de diagnóstico prenatal de anomalías congénitas a Catalunya, publicado por
el Departamento de Sanidad y Seguridad Social.

Condiciones para los laboratorios de citogenética


Una vez obtenida la muestra, el análisis del cariotipo fetal debe hacerse en un
laboratorio de citogenética que pueda dar resultados válidos y fiables. Las condiciones
de trabajo de estos laboratorios deberán seguir las recomendaciones del Protocolo de
8. PRUEBAS DE LABORATORIO DURANTE EL EMBARAZO

diagnóstico prenatal de anomalías congénitas en Cataluña y también las publicadas por


la Asociación Española de Diagnóstico Prenatal.

El tiempo de crecimiento de las células fetales oscila entre 2 o 3 semanas, tiempo que
se tarda en obtener el resultado del cariotipo.

5.3.3. Grupo sanguíneo y factor Rh


5.3.3.1 Grupo ABO y factor Rh
En la primer visita debe hacerse la determinación en el caso que la embarazada no
aporte la información de una forma suficientemente fiable.

5.3.3.2. Prueba de Coombs indirecta


En la gestante Rh negativa se hará esta determinación periódicamente (según y tercer
trimestre de la gestación) para comprobar la posible seroconversión en el transcurso
del embarazo.

5.3.4. Hemograma
Se realizará una determinación a cada trimestre de la gestación que incluirá Hb, VCM,
HCM, CHCM, recuenta y fórmula leucocitária y plaquetas.

5.3.5. Urinocultivo
Una vez recogida la orina de forma correcta (ver apartado 5.2.3., Capítulo I) se
procederá a realizar el cultivo.

El urinocultivo está indicado para detectar la bacteniuria asintomática. Se ha


demostrado que, durante el embarazo, un 20-40% de bacteriúries asintomáticas
evolucionan a pielonefritis y que hay una clara relación entre pielonefiritis y parto
prematuro. La prevalencia de bacteriuria asintomática durante la gestación es de un 4-
7%. En la mayoría de los casos existían ya antes del embarazo. Solo el 0,8-1,9% se
adquieren durante este período. El cribado y tratamiento de esta patología evita un 70-
80% de las pielonefritis y disminuye significativamente el riesgo de bajo peso del recién
8. PRUEBAS DE LABORATORIO DURANTE EL EMBARAZO

nacido. Se considera que la 16a semana de gestación es la más adecuada para


estudiarla.

Para detectar la bacgteriuria asintomática es necesario cultivar la orina. Se consideran


inaceptables los métodos basados en el examen microscópico. Si el urinocultivo es
negativo, no es necesario repetirlo en todo el embarazo. Si es positivo, se
administrarán antibióticos (según el antibiograma) durante 5-7 dias, se practicará un
control a los 7-14 días de su administración y se hará uno cada mes hasta el parto.

Cultivo vaginal
Para la identificación de Streptococcus agalactiae (SA), se recomienda la práctica de
un cultivo vaginal y rectal durante el tercer trimestre del embarazo y, si es posible,
cerca del parto (35a-37a semana de gestación) orientado, fundamentalmente, a el
aislamiento del SA.

Se ha demostrado que la administración endovenosa de antibióticos intraparto (AIP)


iniciada, como mínimo, dos horas antes del nacimiento, es la mejor estratégia para
reducir la transmisión vertical madre-feto del SA o estreptococo del grupo B, y por lo
tanto, para reducir la morbilidad y la mortalidad perinatal por este microorganismo. Al
contrario, la administración de antibióticos por vía general o local durante la gestación
se ha demostrado ineficaz para eliminar el estado de portadora vaginal de SA ya que,
con frecuencia, la vagina se vuelve a recolonizar a partir del recto. Es por este motivo
que no se recomienda la realización sistemática de cultivo vaginal durante el primer
trimestre de la gestación.

Recientemente, se han recomendado dos estrategias para la administración de AIP. La


primera consiste en administrarlos a:

- Todas las mujeres identificadas como portadoras vaginales de SA


- Todos los partos <= a 37 semanas
- Todas las mujeres gestantes que previamente han tenido un niño con una
enfermedad perinatal por SA y,
8. PRUEBAS DE LABORATORIO DURANTE EL EMBARAZO

- Cuando no se tienen los resultados del cultivo y existen factores de riesgo (>= 18
horas de rotura de membranas o fiebre >= 38 C).

La segunda estrategia consiste en la administración de AIP solo en las mujeres con


factores de riesgo.

La recomendación de seguir una u otras estrategia debería fundamentarse en las tasas


de colonización vaginal y de infección perinatal por SA existentes en cada país, ya que
estas tasas pueden variar entre las diferentes áreas geográficas. En Cataluña, estudios
recientes, aunque parciales, han demostrado una colonización vaginal alrededor del
13-16% y una infección perinatal del 1,64/1.000 recién nacidos vivos. Basándonos en
estos datos y esperando estudios más completos, parece adecuado recomendar la
primera estrategia.

5.3.7. Proteinuria
Determinación cualitativa con tiras reactivas en cada visita. Su positividad indica
presencia de infección urinaria, nefropatía, o bien el inicio de una enfermedad
hipertensiva del embarazo..

5.3.9. Rubéola
La serología de la rubéola se pedirá sistemáticamente en la primera visita de control del
embarazo para comprobar la seropositividad de la mujer en el caso de que no aporte
documentación sobre su estado inmunitario. En el pequeño porcentaje de casos en que
esta serología resulta negativa, debe ir comprobándose las posible seroconversión de
la embarazada por contacto con algún caso de rubéola, tomar las medidas adecuadas
para llegar a eliminar la rubéola congénita y, al menos, finalizar el embarazo actual
vacunar a la mujer de cara a un potencial embarazo posterior (ver apartado 4.3.1.,
Capítulo III).

La rubéola es una enfermedad susceptible de ser prevenida mediante vacuna que se


administra a la población infantil a los 15 meses de edad y a los 11 años desde el año
1989. Esto quiere decir que las cohortes teóricamente vacunadas al 100% tienen
8. PRUEBAS DE LABORATORIO DURANTE EL EMBARAZO

actualmente, en el año 1998, 10 años de edad. Se espera que, cuando la población


vacunada haya llegado al periodo de edad fértil, sea posible eliminar esta prueba.

Es necesario que continuemos la detección sistemática y que, al mismo tiempo,


hagamos un control confirmatorio de que realmente disminuye la prevalencia de
seronegativas.

Sífilis
La prueba de la sífilis se pedirá sistemáticamente a la primera visita de control de
embarazo ya que, aunque es una afección poco frecuente, su detección precoz permite
el tratamiento de la madre y del hijo. En embarazos de riesgo de ETS se seguirá la
pauta correspondiente (ver apartado 4.4.13., Capítulo II).

En la primera visita, a mujeres sin comportamientos de riesgo en cuanto a las ETS, se


pedirán pruebas no treponémicas (VDRL-RPR) tipificadas. En caso de resultados
positivos, el laboratorio ha de realizar pruebas treponémicas (FTA-ABS, MHA-TP)
cuantificadas.

5.3.11. Hepatitis B
Se practicará la serología a todas las embarazadas sin antecedentes de vacunación
con el objetivo de evitar, en el caso de las portadoras, la transmisión vertical de la
infección al recién nacido (mediante la administración al recién nacido de la
immunoglobulina específica y de la vacuna indicada a los recién nacidos hijos de
madre seropositiva) (ver apartado 4.3.1., Capítulo III). Durante el último trimestre del
embarazo se pedirá sistemáticamente la serología para detectar el HbsAg. Esta
determinación se podrá avanzar en el segundo trimestre cuando, para la organización
de la infraestructura local, se pueda prever que los resultados no estarán disponibles
con tiempo suficiente previo al parto, o bien en aquellos casos en que esto aporte una
mejora en la organización del funcionamiento de la red sanitaria y mas comodidad de
acceso para la embarazada.
8. PRUEBAS DE LABORATORIO DURANTE EL EMBARAZO

En el caso de gestantes con riesgo de contraer ETS, debe seguirse la pauta


correspondiente (ver apartado 4.4.13., Capítulo II).

La administración de la vacuna a grupos de riesgo y de forma sistemática a toda la


población de escolares de 12 años de edad ha producido una disminución de las tasas
de incidencia de la hepatitis de tipo B, por lo cual es de esperar que el número de
madres portadoras también esté en franca disminución. En el futuro se debería hacer
un seguimiento de las portadoras para identificar el momento en que no sea necesario
hacer esta prueba o bien trasladarla a grupos muy específicos de riesgo.

5.3.12. Serología del HIV


5.3.12.1. Serología del HIV en el embarazo sin riesgo
La oferta sistemática de la detección voluntaria de los anticuerpos anti-HIV y de
consejo asistido a las mujeres embarazadas durante la primera visita de control del
embarazo viene dado por la extensión de la epidemia del HIV entra las mujeres y sus
hijos. La principal identificación de esta prueba es el diagnóstico precoz de la infección
por HIV, en su doble objetivo de tratar la infección de la madre y de prevenir la
transmisión, y tratar, si es necesario, el hijo. Para esta población el avance más
significativo ha sido el resultado de un ensayo clínico que indica que la administración
de zidovudina en mujeres infectadas por el HIV durante el embarazo reduce, en casi
dos tercios, el riesgo de transmisión perinatal por el HIV.

Actualmente se está estudiando la posible eficacia de pautas antiretrovirales


combinadas en la prevención de la transmisión vertical.
8. PRUEBAS DE LABORATORIO DURANTE EL EMBARAZO

Algoritmo para el diagnóstico serológico de la infección por el HIV (1)

EXTRACCIÓN DE SANGRE

PRUEBA DE DETECCIÓN DE LOS ANTICUERPOS ANTI-HIV


(POR EJEMPLO, “ELISA”) Sí

REACTIVA NEGATIVA

PRUEBA DE CONFIRMACIÓN VALORAR LA CONVENIÉNCIA DE


(POR EJEMPLO, “WESTERN BLOT”) REPETIR LA PRUEBA AL CABO
DE 3 A 12 SEMANAS

No

POSITIVA NEGATIVA

NO INFECCIÓN POR HIV


INFECCIÓN POR HIV

(1) Para el diagnóstico del HIV-2 deben utilizarse pruebas específicas o combinadas HIV-1/HIV-2.
(2) Es recomendable repetir las pruebas reactivas por duplicado, antes de pasar a las pruebas de
confirmación, para evitar posibles errores de laboratorio
(3) En los casos de Western-Blot indeterminado debe realizarse otras pruebas según el protocolo del
centro

Consentimiento informado
Los criterios de actuación que siempre han de estar presentes en la práctica de las
pruebas serológicas para el diagnóstico de la infección por HIV son las nombradas 4 C:

Serología HIV en embarazadas (condiciones imprescindibles)


• Consentimiento
• Confidencialidad
8. PRUEBAS DE LABORATORIO DURANTE EL EMBARAZO

• Consejo asistido
• Cautela

Cada embarazada debe ser informada antes de la realización de la prueba y ha de dar


su consentimiento. Es más, la embarazada puede negarse. I, como que el beneficio
potencial de la prueba solo tiene sentido con la cooperación de la gestante, no hay
razón para hacerla sin que lo sepa, ni es ético.

No es un requisito que la embarazada firme ningún documento sobre la obtención de


consentimiento informado. Es aconsejable, no obstante, que conste en la historia
clínica de la mujer que se pide el análisis de HIV una vez obtenido su consentimiento
informado. Bajo ningún motivo se discriminarán las mujeres ni sus hijos cuando el
resultado sea positivo, ni las mujeres que no quieran hacerse el análisis.

Los profesionales sanitarios han de procurar que todas las mujeres embarazadas
reciban consejo asistido y han de animarlas para que se hagan una serología anti-HIV,
para que conozcan su estado serológico y para disminuir el riesgo de transmisión
perinatal. El consejo asistido antes de realizar la prueba debe hacerse de acuerdo con
las recomendaciones publicadas por el Departamento de Sanidad i Seguridad Social.
El consejo asistido debe incluir información sobre el riesgo de infección por HIV
asociado a la actividad sexual y de uso de drogas, el riesgo de transmisión de madre a
hijo, la disponibilidad de tratamiento para disminuir el riesgo y la posibilidad de
interrupción voluntaria del embarazo. El consejo asistido, incluido el material
divulgativo, ha de ser apropiado para la edad y las características culturales,
educacionales y lingüísticas de las mujeres.

El consejo asistido y la detección de los anticuerpos debe ofrecerse tan pronto como
sea posible durante el primer trimestre de embarazo, a la primera visita de control, para
que se puedan tomar a tiempo decisiones terapéuticas y reproductoras sobre la
continuación o no del embarazo. Deberá preverse recursos apropiados para
comunicarse con mujeres que podrían no recibir una correcta atención prenatal (por
ejemplo, usuarias de drogas por vía parenteral).
8. PRUEBAS DE LABORATORIO DURANTE EL EMBARAZO

Debe animarse a las embarazadas no infectadas por HIV que tienen comportamientos
de riesgo a evitar exponerse al HIV. Será necesario que vuelvan a hacerse un análisis
del HIV durante el segundo y/o tercer trimestre (ver apartado 4.4.13., Capítulo II).

Realización de la prueba
El algoritmo analítico del HIV recomendado por el Departamento de Sanidad y
Seguridad Social de la Generalitat de Catalunya, comprende, inicialmente, el uso de
pruebas de cribado, habitualmente de tipo immunoenzimático (ELISA), seguido del uso
de pruebas de confirmación de las muestras repetidamente reactivas, habitualmente
del tipo Western Blot. Debe tenerse presente que, con independencia del rigor y de la
calidad del trabajo de laboratorio, el incremento del análisis en mujeres embarazadas,
que en conjunto es una población de baja prevalencia, puede aumentar el número de
resultados incorrectos, indeterminados y falsos positivos. Por la trascendencia que
puede tener un resultado positivo, es imprescindible que los resultados de las pruebas
de detección de los anticuerpos anti-HIV se obtengan y se interpreten correctamente.

Interpretación de los resultados de los análisis del HIV


La infección por HIV (presencia de anticuerpos contra el HIV) se identifica por una
prueba de detección repetidamente reactiva seguida de una prueba confirmatoria
positiva. Las dudas sobre el estado serológico del HIV (seroconversiones recientes,
resultados indeterminados) deberán de resolverse mediante la anamnesi, el
seguimiento clínico y otras pruebas de laboratorio adicionales, antes de que la mujer
tome cualquier decisión (interrupción voluntaria del embarazo, uso de zidovudina u
otras intervenciones).

Recomendaciones para los laboratorios de micriobiología


El análisis de los anticuerpos anti-HIV debe hacerse de acuerdo con el algoritmo
analítico recomendado, el cual incluye el uso de una prueba de detección seguido de
una prueba de confirmación más específica. Las pruebas deben realizarse siguiendo
las instrucciones de los fabricantes de reactivos y de acuerdo con las directrices que,
sobre las pruebas diagnósticas del HIV, se puedan establecer para los laboratorios.
8. PRUEBAS DE LABORATORIO DURANTE EL EMBARAZO

Preferiblemente los laboratorios clínicos deberán de utilizar todas las pruebas analíticas
del HIV disponibles para definir el estado serológico de las mujeres embarazadas. En
todo caso los obstetras que ha solicitado la prueba ha de conocer el algoritmo
diagnóstico que sigui el laboratorio. La utilización y adaptación de diferentes pruebas
analíticas y algoritmos diagnósticos se hará siguiendo las recomendaciones generales
establecidas, de acuerdo con los avances en el conocimiento de la epidemia del HIV y
de las pruebas diagnósticas.

5.3.12.2. Serología del HIV en el embarazo de riesgo


La opción de ofrecer el consejo asistido y la detección de los anticuerpos anti-HIV
durante el segundo y tercer trimestre está condicionado por la posible ocurrencia del
periodo ventana (tiempo que transcurre entre la infección por HIV y su detección
serológica, seroconversión, generalmente al cabo de 3 a 12 semanas) y/o la
existencia/persistencia de comportamientos de riesgo para el HIV durante el embarazo
de una mujer con una serología inicial negativa.

En cuanto a las mujeres que se han hecho la prueba de detección de los anticuerpos
anti-HIV durante el primer trimestre de embarazo y que dieron resultados negativos, el
seguimiento en relación a esta infección no ha de finalizar con el resultado de esta
prueba, especialmente cuando las características de estas mujeres hacen que se
mantengan situaciones de riesgo de contraer la infección. En este sentido, debe
indicarse estrategias de intervención orientadas a conseguir los cambios de
comportamiento necesarios para reducir este riesgo. Además de la educación sanitaria
de las mujeres, es necesario hacer un seguimiento clínico en relación con esta
infección y un seguimiento serológico, mediante la realización de nuevas pruebas de
detección de los anticuerpos anti-HIV, en las visita sucesivas, por si ha habido cambios
que puedan suponer un riesgo durante el embarazo.

5.3.13. Toxoplasmosis
La realización de este cribado ha estado sometido en los últimos años, a múltiples
controversias sobre la conveniencia o no de continuarlo haciendo. En el grupo de
profesionales que han participado en la elaboración de este protocolo, la decisión de
8. PRUEBAS DE LABORATORIO DURANTE EL EMBARAZO

incluir o no incluir esta serología dentro de la batería de pruebas a realizar


sistemáticamente a todas las embarazadas se ha condicionado el análisis de la
toxoplasmosis en nuestro medio y de sus implicaciones sobre el embarazo, mediante
un estudio representativo de nuestra población de embarazadas. En función de los
resultados se decidirá la recomendación sistemática o la eliminación de la
determinación de anticuerpos antitoxoplasma del protocolo de seguimiento del
embarazo normal.

De momento, es opcional por parte del obstetra hacer esta determinación, y se ha de


tener en cuenta que:

- La población catalana de mujeres en edad fértil presenta una susceptibilidad frente


a la toxoplasmosis según datos del año 1985 alrededor del 50%. En este sentido,
sería conveniente disponer de datos seroepidemiológicos actualizados, así como
disponer tanto de los datos sobre la incidencia de casos de infección materna como
de las de transmisión vertical y afectación del feto.

- En caso de infección aguda confirmada está documentado que la transmisión


materno-fetal tiene lugar con una frecuencia que varía en función de la edad de
gestación. Contra más avanzada está la gestación más elevado es porcentaje de
transmisión vertical del feto (entre el 1,1% y el 80%) y se produce un riesgo de
anomalías congénitas entre el 1,5% y el 6% de los recién nacidos infectados.

- La toxoplasmosis congénita es una enfermedad grave cuando se presenta el recién


nacido.

- El hecho de disponer de una pauta quimioprofiláctica parece que puede evitar, en


gran medida, los problemas asociados a la infección fetal. Si bien esto no ha
estado ampliamente demostrado se considera que puede ser un medida útil.

- La dificultad existente, en muchos casos, para distinguir la infección aguda de una


infección antigua, ya que, a menudo, la IgM específica se puede detectar durante
8. PRUEBAS DE LABORATORIO DURANTE EL EMBARAZO

meses e incluso años, hace que se recomiende solo la determinación de IgG al


sueromaterno y asumir que en los casos de IgG positiva la gestante se encuentra
protegida frente a la infección por toxoplasma. De todas formas, la situación más
idónea sería poder disponer de una determinación de IgG previa a la gestación.

- En los casos en que el resultado de la determinación del primer trimestre de la


gestación sea negativo, se recomienda repetirlo al segundo o al tercer trimestre.

5.4. Observaciones respecto a algunas pruebas que no se recomiendan de forma


sistemática

Serología de la hepatitis C
No hay medidas preventivas para evitar la transmisión vertical del HCV, por lo cual
parece poco justificable un cribado sistemático del anti HCV en las gestantes con
embarazo normal, ya que no se derivarían actuaciones médicas concretas (ver
apartado 4.4.13., Capítulo II).

Glucémia
No se ha de pedir esta determinación de forma sistemática, dado que la glucemia basal
no es un buen indicador de DG. Durante el embarazo bajan las cifras de glucemia
basal respecto a la situación previa. Además, la DG se caracteriza por presentar
hiperglucemia postprandial con las cifras previas a la ingesta generalmente normales.
Por esta razón, la mayoría de los pacientes no serían diagnosticados utilizando este
criteriol. Solo se ha de pedir una glucemia basal en el caso de que no se pueda hacer
un test d’O’Sullivan y con el objetivo de diagnosticar las DG más graves.

Cetonuria
La determinación de cetonúria no se ha de pedir sistemáticamente. Solo es útil, como
indicador de control dietético, en las gestantes diabéticas o en las que están sometidas
a dietas restrictivas. La determinación aislada en una visita, sin relación a la ingesta
previa, en embarazadas normales, no aporta datos de relevancia para el control de la
gestante.
8. PRUEBAS DE LABORATORIO DURANTE EL EMBARAZO
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CAPÍTULO II. EVALUACIÓN DEL RIESGO DURANTE EL EMBARAZO
1. TABLAS RESUMEN

1.1. Embarazo de riesgo medio

Evaluación y atención del embarazo de riesgo medio

Nivel asistencial Requerimientos mínimos Posibles complicaciones


Factores de riesgo Definición para el diagnóstico durante el embarazo y el
Diagnóstico Seguimiento Parto parto
Anomalías pelvianas P. Androide 1r nivel (1) 1r nivel (1) 2º nivel (2) Historia clínica Distócias
P. Antropoide Exploración física Cesárea
P. Platipeloide (Rx, si es necesario) Parto prolongado
Secundaria a accidente Infección
Baja altura Talla < 1,45 m 1r nivel (1) 1r nivel (1) 2º nivel (2) Exploración física Distócias
(tallímetro) Cesáreas
Obesidad no mórbida IMC (>29 <40) 1r nivel (1) 1r nivel (1) 2º nivel (2) Historia clínica HTA, DG
Exploración física Distócias
(báscula, tallímetro, tabla Morbilidad post-parto
IMC) Macrosomía fetal
Control insuficiente gestante 1a. visita después de la 1r nivel (1) 1r nivel (1) 2º nivel (2) Historia clínica
12 S.G., y/o bien menos
de una visita por trimestre,
y/o bien sin pruebas
complementarias
adecuadas
Embarazo no deseado Situación clara de rechazo 1r nivel (1) 1r nivel (1) 2º nivel (2) Historia clínica Morbilidad materno-fetal
(controles, hábitos inadecuados,
etc.)
Condiciones socioeconómicas Sin soporte 1r nivel (1) 1r nivel (1) 2º nivel (2) Historia clínica Morbilidad materno-fetal
desfavorables socioeconómico (controles, hábitos inadecuados,
etc.). Bajo peso.
Prematuridad
Mujer adolescente < = 17 años 1r nivel (1) 1r nivel (1) 2º nivel (2) Historia clínica Prematuridad
Mujer de edad avanzada > = 38 años 1r nivel (1) 1r nivel (1) 2º nivel (2) Historia clínica Bajo peso, RPM
Mortalidad fetal
Gran multiparidad Mujer que ha tenido 4 o 1r nivel (1) 1r nivel (1) 2º nivel (2) Historia clínica Presentación anomalías
más fetos viables Hemorragia obstétrica
previamente Complicaciones intraparto
CAPÍTULO II. EVALUACIÓN DEL RIESGO DURANTE EL EMBARAZO
1. TABLAS RESUMEN

Fumadora habitual Si fuma 1r nivel (*) 1r nivel (1) 2º nivel (2) Historia clínica CIR
(independientemente del Bajo peso
número de cigarrillos)
Metrorrágias 1r trimestre Presencia de Metrorrágias 1r nivel (1) 1r nivel (1) 2º nivel (2) “Comprobación de la pérdida” RPM
Aborto
Malformación
Cardiopatía 1 No insuficiencia durante el 1r nivel (1) 1r nivel (1) 2º nivel (2) Historia clínica Depende de la etiología
esfuerzo
Incrementos de peso < 7 kg. o > 15 kg. 1r nivel (1) 1r nivel (1) 2º nivel (2) Control peso en cada visita Macrosomas
excesivos o insuficientes Báscula, tabla IMC Distócias
Rh- Mujer Rh- (Riesgo en 2º 1r nivel (1) 1r nivel (1) 2º nivel (2) Historia clínica Peligro de Isoinmunización
embarazo) (1ª analítica grupo sanguíneo CIR
y Rh). Coombs indirecto
Infección urinaria baja o Detección en el 1r nivel (1) 1r nivel (1) 2º nivel (2) Urinocultivo sistemático Peso bajo, Prematuridad
bacteriana sintomática urinocultivo Pielonefritis
Riesgo laboral - Contacto con plomo, 1r nivel (1) 1r nivel (1) 2º nivel (2) Historia clínica Depende del riesgo
mercurio, cadmio,
disolventes orgánicos,
gases anestésicos,
citostáticos, esterilizantes,
etc.
- Radiaciones ionizantes
(Rx, etc.)
Periodo intergenésico De parto a parto 1r nivel (1) 1r nivel (1) 2º nivel (2) Historia clínica (fecha del Ruptura del útero
<12 meses último parto) Parto prematuro
Riesgo enfermedades de Comportamiento de riesgo 1r nivel (1) 1r nivel (1) 2º nivel (2) Historia clínica (hábitos y Según etiología
transmisión sexual (ETS) en algún miembro de la conductas de riesgo o de
pareja, o bien transmisión por vía
antecedentes de UDVP o sanguínea)
de ETS.
Esterilidad previa Pareja que no ha 1r nivel (1) 1r nivel (1) 2º nivel (2) Historia clínica Exceso de angustia
conseguido gestación
durante dos años previos
al embarazo actual

(1) El primer nivel asistencial se considerará el ámbito de la atención primaria de salud, ya sea el centro de atención primaria (CAP), CAP II o consultorios municipales o similar, que darán
atención al embarazo normal mediante el equipo de obstetricia (obstetra + comadrona), o bien dentro del marco de la unidad de atención a la mujer (UAD), en los centros donde esté en
funcionamiento, y que dispondrá como mínimo del equipo que se indica en el anexo 2.A. Se incluye en este primer nivel asistencial la atención especializada de soporte a la atención primaria
de salud.

(2) El segundo nivel es el que corresponde a un hospital tipo B (hospital comarcal) donde el equipo de obstetricia debe estar integrado por el obstetra + comadrona, y que dispondrá como
mínimo del equipo que se indica en el anexo 2.B.
CAPÍTULO II. EVALUACIÓN DEL RIESGO DURANTE EL EMBARAZO
1. TABLAS RESUMEN

1.2. Embarazo de rieSg alto

Evaluación y atención del embarazo de riesgo alto

Nivel asistencial Requerimientos mínimos Posibles complicaciones


Factores de riesgo Definición para el diagnóstico durante el embarazo y el
Diagnóstico Seguimiento Parto parto
Anemia grave Hemoglobina <9 g/dl 1r nivel (1) 1r nivel (1) 2º nivel (2) o Analítica
Hematocrito < 25% 3r nivel (3)
Gemelos Embarazo con resultado 2 1r nivel (1) 1r nivel (1) 2º nivel (2) Ecografía (1r trimestre) Abortos
recién nacidos Preeclamsia
CIR, Prematuridad
Cardiopatía 2 Limita parcialmente la 1r nivel (1) 1r nivel (1) 2º nivel (2) Historia clínica (enfermedad
actividad física crónica diagnosticada por el
cardiólogo)
Cirugía uterina previa Que haya asumido la 1r nivel (1) 1r nivel (1) 2º nivel (2) o Historia clínica Ruptura de útero
cavidad endometrial 3r nivel (3)
(cesárea anterior)
Diabetes gestacional Curva de glucemia 1r nivel (1) 1r nivel (1) 2º nivel (2) Test de O’Sullivan positivo Toxemia
patología descubierta + TTOG positivo Infección urinaria vaginal
durante el embarazo Hidramnio, Abortos
Malformaciones
Macrosomía
Prematuridad
Endocrinopatía Alteraciones 1r nivel (1) 1r nivel (1) 2º nivel (2) o Historia clínica (según tipo Según etiología
- hipófisis 3r nivel (3) de endocrinopatía)
- tiroides
- suprarrenal, etc.
Historia obstétrica - Abortos anteriores 1r nivel (1) 1r nivel (1) 2º nivel (2) Historia clínica Según etiología
desfavorable - Partos prematuros (antecedentes obstétricos)
- Recién nacidos bajo
peso
Partos distócicos
Infección materna Infección diagnosticada 1r nivel (1) 1r nivel (1) 2º nivel (2) o Analítica (serologías, etc. Según etiología
3r nivel (3) según tipo de infección)
Hepatitis B Infección diagnosticada 1r nivel (1) 1r nivel (1) 2º nivel (2) o Infección del recién nacido
3r nivel (3)
CAPÍTULO II. EVALUACIÓN DEL RIESGO DURANTE EL EMBARAZO
1. TABLAS RESUMEN

Hepatitis C Infección diagnosticada 1r nivel (1) 1r nivel (1) 2º nivel (2) Infección del recién nacido
o 3r nivel
(3)
Toxoplasma Infección diagnosticada 1r nivel (1) 1r nivel (1) 2º nivel (2) Malformaciones congénitas
o 3r nivel
(3)
Pielonefritis Infección diagnosticada 1r nivel (1) 1r nivel (1) 2º nivel (2) Bajo peso y Prematuridad
o 3r nivel
(3)
Rubéola Infección diagnosticada 1r nivel (1) 1r nivel (1) 2º nivel (2) Malformaciones congénitas
o 3r nivel
(3)
Sífilis Infección diagnosticada 1r nivel (1) 1r nivel (1) 2º nivel (2) Malformaciones congénitas
o 3r nivel
(3)
CMV Infección diagnosticada 1r nivel (1) 1r nivel (1) 2º nivel (2) Lesiones pneumológicas feto
o 3r nivel
(3)
EB-Hemo Infección diagnosticada 1r nivel (1) 1r nivel (1) 2º nivel (2) Morbilidad y mortalidad recién
o 3r nivel nacido
(3)
Herpes primario genital Infección diagnosticada 1r nivel (1) 1r nivel (1) 2º nivel (2) Malformaciones congénitas
o 3r nivel
(3)
VIH Infección diagnosticada 1r nivel (1) 1r nivel (1) 2º nivel (2) Infección feto
o 3r nivel
(3)
Obesidad mórbida IMC >40 1r nivel (1) 1r o 2º nivel 2º nivel (2) Báscula g – Tallímetro cm Distocia
(2) Tabla de IMC
Preeclamsia leve > 20 S.G. TAD > 90 mm Hg 1r nivel (1) 1r nivel (2) 2º nivel (2) Exploración física en cada Desprendimiento de placenta
TAS > 140 mm Hg control (edemas, HTA) Prematuridad
Analítica (albuminuria)
Sospecha malformación Ecografía 1r nivel (1) 1r o 2º nivel 2º nivel (2) Historia clínica (antecedentes Defecto congénito
fetal Cribado bioquímico (2) familiares, etc.) ECO (18
(> 1/270) (entre 14-17 S.G.)
semanas de gestación) Diagnóstico prenatal (14-17
S.G.)

(1) El primer nivel asistencial se considerará el ámbito de la atención primaria de salud, ya sea el centro de atención primaria (CAP), CAP II o consultorios municipales o similar, que darán
atención al embarazo normal mediante el equipo de obstetricia (obstetra + comadrona), o bien dentro del marco de la unidad de atención a la mujer (UAD), en los centros donde esté en
funcionamiento, y que dispondrá como mínimo del equipo que se indica en el anexo 2.A. Se incluye en este primer nivel asistencial la atención especializada de soporte a la atención primaria
de salud.

(2) El segundo nivel es el que corresponde a un hospital tipo B (hospital comarcal) donde el equipo de obstetricia debe estar integrado por el obstetra + comadrona, y que dispondrá como
mínimo del equipo que se indica en el anexo 2.B.

(3) El tercer nivel asistencial es el que corresponde a un hospital tipo C (hospital de alta tecnología), donde el equipo de obstetricia debe estar integrado por el obstetra + comadrona, y que
dispondrá como mínimo del equipo que se indica en el anexo 2C.
CAPÍTULO II. EVALUACIÓN DEL RIESGO DURANTE EL EMBARAZO
1. TABLAS RESUMEN

1.3. Embarazo de riesgo muy alto

Evaluación y atención del embarazo de riesgo muy alto

Nivel asistencial Requerimientos mínimos Posibles complicaciones


Factores de riesgo Definición para el diagnóstico durante el embarazo y el
Diagnóstico Seguimiento Parto parto
Amenaza parto prematuro Desencadenamiento 1r nivel (1) 2º nivel (2) 2º nivel (2) o Consulta síntomas Prematuro
trabajo de parto <37 3r nivel (3) Exploración física-Tacto
semanas completas vaginal
Cardiopatía 3 y 4 Limitación falta de 1r nivel (1) 3r nivel (3) 2º nivel (2) Informe cardiólogo Según etiología
actividad física Esp (*)
Diabetes 1 o 2 Diabetes gestacional (sea 1r nivel (1) 3r nivel (3) 2º nivel (2) Informe endocrino Toxemia, inf. urinaria y/o
tipo 1 o tipo 2) Esp (*) vaginal, hidramnios,
prematuridad, aborto,
macrosomía, CIR.
Drogadicción Consumo habitual 1r nivel (1) 2º nivel (2) 2º nivel (2) o Historia clínica Infección HIV/HCV, CIR,
Alcoholismo (Esp*) 3r nivel (3) 3r nivel (3) (anamnesis esmerada de prematuridad, síndrome
(CAS) hábitos tóxicos) alcohólica fetal
Gestación múltiple > 3 fetos en el embarazo 1r nivel (1) 2º nivel (2) 2º nivel (2) Ecografía 1r trimestre Prematuridad, peso bajo,
actual 3r nivel (3) desprendimiento de placenta
Malformación uterina Malformación congénita 1r nivel (1) 2º nivel (2) 2º nivel (2) o Ecografía 1r trimestre Aborto, prematuridad, CIR
del útero 3r nivel (3) 3r nivel (3)
Incompetencia cervical uterina Incapacidad de mantener 1r nivel (1) 2º nivel (2) 2º nivel (2) Historia clínica Prematuridad
cerrado el orificio cervical (antecedentes obstétricas) Aborto
interno
Defecto congénito fetal Diagnóstico prenatal 1r nivel (1) 2º nivel (2) 2º nivel (2) o Diagnóstico prenatal Depende del defecto
confirmado (confirmación mediante 3r nivel (3) 3r nivel (3)
ECO/CARIOTIPO, etc.)
Muerte perinatal recurrente 1 o más muertes fetales 1r nivel (1) Según 2º nivel (2) o Historia obstétrica Según etiología
previa perinatales o neonatales etiología 3r nivel (3) Posibilidad de repetición
2º nivel (2) Trastornos derivados de la
3r nivel (3) ansiedad
CAPÍTULO II. EVALUACIÓN DEL RIESGO DURANTE EL EMBARAZO
1. TABLAS RESUMEN

Patología asociada grave Trastornos sistémicos 1r nivel (*) Según 2º nivel (2) Historia clínica (anamnesis) Según patología
maternales ESP (*) patología 3r nivel (3)
2º nivel (1)
3r nivel (2)
Placenta previa Insertada totalmente o 1r nivel (1) 2º nivel (2) 2º nivel (2) Ecografía 2º o 3r trimestre Hemorragia materna
parcialmente en el segmento Desprendimiento de placenta
inferior del útero (puede Muerte fetal
cerrar el orificio cervical Prematuridad
interno)
Preeclamsia grave 20 semanas gestaciones 1r nivel (1) 2º nivel (2) 2º nivel (2) Historia clínica (HTA, Insuficiencia renal, muerte
(TAD > 110 mm. Hg. 2º nivel (2) edemas, albuminuria) materna, sufrimiento fetal,
TAS > 160 mm. Hg. prematuridad, muerte fetal
Crecimiento intrauterino Velocidad de crecimiento del 1r nivel (1) 2º nivel (2) 2º nivel (2) Ecografía 2º o 3r trimestre Estrés fetal, deficiencia
retardado (CIR) feto, inferior a la esperada nutrientes, hipoxia crónica,
poliglobúlia, morbilidad/
mortalidad perinatal.
Cierre prematuro de Cierre de bolsa amniótica 1r nivel (1) 2º nivel (2) 2º nivel (2) Consulta síntomas Infección materna
membranas en el pre- antes del embarazo a término 2º nivel (1) 3r nivel (3) 3r nivel (3) Infección fetal
término S/ peso Prematuridad
recién nacido
Isoinmunización Test Coombs indirecto (+) 1r nivel (1) 3r nivel (3) 3r nivel (3) Test de Coombs Eritroblastosis fetal
en madre Rh (-) Historia clínica
(antecedentes obstétricos)

(1) El primer nivel asistencial se considerará el ámbito de la atención primaria de salud, ya sea el centro de atención primaria (CAP), CAP II o consultorios municipales o similar, que darán
atención al embarazo normal mediante el equipo de obstetricia (obstetra + comadrona), o bien dentro del marco de la unidad de atención a la mujer (UAD), en los centros donde esté en
funcionamiento, y que dispondrá como mínimo del equipo que se indica en el anexo 2.A. Se incluye en este primer nivel asistencial la atención especializada de soporte a la atención primaria
de salud.

(2) El segundo nivel es el que corresponde a un hospital tipo B (hospital comarcal) donde el equipo de obstetricia debe estar integrado por el obstetra + comadrona, y que dispondrá como
mínimo del equipo que se indica en el anexo 2.B.

(3) El tercer nivel asistencial es el que corresponde a un hospital tipo C (hospital de alta tecnología), donde el equipo de obstetricia debe estar integrado por el obstetra + comadrona, y que
dispondrá como mínimo del equipo que se indica en el anexo 2C.

(*) Se consideran aquí las otras especialidades diferentes de la de obstetricia que intervienen en el seguimiento del embarazo en la mujer con patologías controladas por especialistas como
cardiólogos, endocrinólogos, etc.
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Condiciones socioeconómicas desfavorables

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METODOLOGÍA EN LA EDUCACIÓN SANITARIA

1.1. Consejo educativo (counselling)


La entrevista clínica que tiene lugar durante cada una de las visitas de control del
embarazo normal proporciona una oportunidad inmejorable para vehicular
informaciónes y esgrimir argumentos con el objetivo de que la embarazada
interiorice conductas favorables para su estado de salud y para el buen desarrollo de
su hijo. Así, el profesional sanitario redefine su responsabilidad y asume un papel
preventivo y educativo, fundamental.
Este cambio, pero, es necesario que encuentre una respuesta de corresponsabilidad
en la mujer gestante sometida a la intervención educativa. Es decir, es necesario
que la embarazada sea consciente del papel que ha de tener en el mantenimiento y
la promoción de su estado de salud. Precisamente, una de las táreas que
inicialmente ha de ejercer el profesional sanitario es traspasar el que Stokes llama
el “locus del control”. Esto comporta que se produzca un viraje en la tradicional
relación personal santario-usuaria, donde esta adopta generalmente un papel pAsivo
de receptora.
Cada vez más expertos del campo de la actividad preventiva dan apoyo al hecho de
que el consejo de educación sanitaria, realizado en la consulta, se convierte en una
herramienta de gran eficacia a la hora de intentar la adopción de hábitos positivos de
salud. Ante la necesidad de impartir consejo durante el acto Asístenciable de
seguimiento del embarazo normal, es recomendable valorar el siguiente esquema de
actuación:
1.1.1. Estrategia del consejo educativo

• Establecer una “alianza educativa”


• Universalizar el consejo
• Investigar los hábitos de la mujer embarazada
• Priorizar lo que se quiera modificar antes
• Diseñar el plan educativo
• Poner en marcha el plan educativo
• Monitorar los progresos

Establecer una “alianza educativa”


En el marco de la relación Asístencial que se establece entre el profesional sanitario
y la embarazada es necesario que de buen principio el profesional acepte su papel
activo como educador, se marque unos objetivos educacionales sobre la gestante y
comprenda la necesidad de hacer educación sanitaria. Al mismo tiempo la mujer ha
adoptado una actitud receptiva respecto al proceso educativo que acabamos de
iniciar y ha de aceptar su parte de responsabilidad en todo el proceso de
mantenimiento o restauración de su salud.
Esta alianza se pacta en las primeras visitas. El papel del profesional sanitario se
concreta en la vehiculación de informaciónes sobre quienes son los hábitos de vida
que es necesario cambiar o, por el contrario, los que es necesario reforzar y, así
mismo, investigar la motivación de la mujer respecto al cambio propuesto.
El papel de la gestante se concretará en un “compromiso” de participar activamente
en el proyecto educativo.
Esta primera toma de contacto es tan importante, que si alguna de las partes no
subscribe “el pacto”, el proceso educativo difícilmente será asumido por la gestante,
la cual seguirá acudiendo a la consulta con una actitud pAsiva, más para obtener
prescripción que consejo.
METODOLOGÍA EN LA EDUCACIÓN SANITARIA

Universalizar el consejo
A priori cabe pensar que todas las embarazadas que van a la consulta son
tributarias de recibir consejo educativo. A veces se tratará de investigar las
conductas relacionadas con su salud y, en caso de comprobar que son positivas,
reforzarlas con mensajes que motiven el mantenimiento, expresando nuestra
satisfacción por la situación. Otras, se deberá iniciar un verdadero proceso de
información, motivación y capacitación de la mujer sometida a la intervención
educativa.
Un punto importante que cabe señalar aquí es el de la “mujer gestante activa”.
diferentes estudios concluyen que los profesionales sanitarios tienen tendencia a
hablar más con las personas que más les preguntan, quienes, a su vez, suelen ser
mas informadas. En cambio las más reservadas, que solo escuchan las
explicaciones, son la menos aconsejadas.
El profesional ha de esforzarse por aconsejar todas las mujeres embarazadas que
vayan a la consulta, dando respuesta a sus necesidades de información. Muchas
veces también deberá de estimular sus preguntas con cuestiones como: “me he
explicado lo suficientemente bien?”, “Hay algo que quisieran comentarme?”, “Quiere
que aclaremos algo?”.
En general hay de evitar preguntas como “Me ha entendido?”, o “Lo ha entendido
todo?”, ya que la respuesta invariablemente tiende a ser afirmativa, pero a menudo
más que una autentica comprensión del mensaje responde a un intento de
complacer al profesional.
Investigar los hábitos de la mujer embarazada
Es necesario investigar el perfil conductual de la embarazada y evaluar el grado de
conocimientos, creencias, actitudes, valores, etc. y registrarlos en la historia clínica.
Los hábitos deberán cuantificarse siempre que sea posible, ya que esto permitirá
una mejor evaluación de los cambios si estos finalmente se producen.
La investigación y cuantificación de los hábitos es fundamental y un requisito previo
para cualquier intento de consejo. De hecho, no deberá intentarse nunca la
modificación de un estilo o hábito de vida concreto si no se ha hecho antes el perfil
completo de esta mujer.
La investigación de los hábitos permitirá acercarse a los diferentes componentes de
la actitud de la mujer, es decir, su opinión respecto a lo que hace habitualmente, el
grado de conocimientos correctos que poseen y también que se pretende conseguir
con esta o aquella conducta. Así mismo, permitirá explorar el grado de consonancia,
es decir, la perfecta concordancia entre lo que piensa y lo que hace, y también
conocer los intentos modificadores anteriores y por qué no se consiguió la
interiorización del comportamiento que se propone.
En esta fase debes hacerse, si es posible, un evaluación del ambiente que rodea a
la gestante, a fin de detectar posibles obstáculos que impidan el ensayo, la adopción
o la definitiva interiorización de la conducta que proponemos (situación
socioeconómica, patrón cultural, relaciones familiares y laborales, etc.).
Priorizar lo que se quiere modificar antes
Una premisa importante es que no se ha de intentar nunca de modificarlo todo la
mismo tiempo. Llegados a este punto es importante contar con las preferencias y
necesidades de la mujer embarazada para escoger que conducta negativa quiere
intentar modificar en primer lugar.
Es evidente que lo que hemos dicho antes tiene aquí su verdadera importancia. Solo
sobre la base de una sólida alianza educativa y en un clima de plena confianza y
empatía, la gestante podrá expresar lo que por ella misma esta dispuesta a hacer y
lo que nosotros podemos ofrecerle: los hábitos que consideramos “comportamiento
principal” por su importancia respecto al problema de salud que queremos prevenir,
METODOLOGÍA EN LA EDUCACIÓN SANITARIA

por su adopción potencial (accesibilidad, simplicidad, existencia de recursos para el


cambio y grado de controversia) y el grado de modificación que tengamos (duración
del comportamiento, grado de consonancia, ausencia de componentes fisiológicos,
etc.).
En cuanto a ciertos hábitos, la mujer ya comprende la necesidad de cambiarlos y
está motivada por hacerlo. Por lo tanto, como regla general, es aconsejable empezar
por estos. Así mismo, debe tener capacidades y habilidades para intentarlo. Esto
obedece a la premisa de que solo serán aceptados los comportamientos que
satisfacen deseos y/o necesidades en la escalera de valores de la mujer y que los
intentos que sirven para conseguir éxitos predisponen a ensayar hábitos muy
difíciles.
Un aspecto que es necesario tener en cuenta cuando se prioriza lo que se quiere
modificar es el hecho de intentar correlacionar hábitos, como por ejemplo, tabaco y
ejercicio físico o ejercicio físico y alimentación, etc.
Diseñar el plan educativo
Cuando ya se ha hecho una sólida priorización de aquello que realmente se quiere
modificar, debe diseñarse el plan educativo ajustado a las necesidades y
disponibilidad de la mujer gestante.
De este ejercicio de planificación conjunta entre el profesional sanitario y la
embarazada ha de salir el objetivo de orientar el esfuerzo educativo hacia aquello
que la mujer ha de acabar haciendo y no solamente hacia aquello que ha de acabar
sabiendo. Recordemos que la vehiculación de informaciónes es solo un paso
intermedio en todo el proceso y que solamente afecta al ámbito cognitivo de la
actitud humana.
El diseño ha de tener en cuenta un enfoque multimodal de todo el proceso de
aprendizaje, es decir, ha de integrar harmonicamente en el proceso diferentes
técnicas educativas (trabajo grupal, medios indirectos de apoyo, etc.). Esto aumenta
mucho la efectividad del consejo educativo. El plan educativo ha de adaptarse a las
necesidades individuales de la gestante, pero también a los recursos y la
disponibilidad que tenga el profesional sanitario incluso en las características del
centro Asístencial done se desarrollará la actividad.
En el proceso de planificación del plan es muy importante el establecimiento de los
objetivos que se pretenden conseguir. En este sentido, decir que deberán ser
tangibles, concretos, cuantificados, cuantificables y cortos en el tiempo.
Así mismo, cuando se diseña un plan educativo, debe preverse posibles rupturas en
el procedo, a consecuencia, mayoritariamente, de insatisfacción y lo que deberá
hacer, si esto se produce, para utilizar metodologías o enfoques alternativos, será
derivar la mujer a otro tipo de Asístencia si se prevé que estamos agotando las
posibilidades de nuestra actuación.
Poner en marcha el plan educativo
El primer punto se basa en el suministro de información que ha de ser cierta,
completa, clara y comprensible para la mujer. Utilizaremos normalmente un enfoque
persuAsivo basado en una comunicación bidireccional y activa que permita desvelar
dudas y asegurarnos de la correcta comprensión de los mensajes por parte de la
mujer.
Recordemos que los mensajes siempre deberán de contener “instrucciones de uso”
de la conducta que proponemos y no se limitaran a ser simples informaciónes
“vacías”, y que la repetición de instrucciones y mensajes es fundamental para
asegurarnos la comprensión.
Un aspecto relevante en el desarrollo del plan educativo es la motivación. La
exploración hecha previamente de sus deseos, actitudes y hábitos, permitirá sin
ninguna duda, encontrar los mensajes que más fácilmente la motivaran a adoptar la
METODOLOGÍA EN LA EDUCACIÓN SANITARIA

modificación de la conducta. En este sentido solo recordaremos que las


motivaciones humanas siguen una estructura piramidal, des de las puramente
fisiológicas (mantenimiento y conservación de la vida) hasta las de autorealización
(desarrollo lleno de las capacidades).
Es interesante poder otorgar a la embarazada “premios” en forma de beneficios de
salud objetivables, o reacciones de satisfacción cuando asumen los objetivos de
salud propuestos.
El profesional sanitario puede reforzar su actuación con todos los medios indirectos
que considere adecuados y que estén disponibles, para aumentar la comprensión de
las informaciónes. A pesar de todo no debe olvidarse nunca que el mejor medio
indirecto no puede substituir en efectividad el consejo verbal.
En el desarrollo del plan, merece una especial atención el medio ambiente. En este
sentido queremos recordar que, si es hostil, el cambio que proponemos difícilmente
será posible.
Monitorar los progresos
Es importante, en las visitas de seguimiento, comprobar el grado de adopción de los
comportamientos propuestos y evaluar las dificultades que hayan ido surgiendo. En
las visitas de control es importante buscar el apoyo de personajes “clave” del
entorno que pueden ayudarnos en el mantenimiento y supervisión de la conducta
propuesta (marido, hijo, etc.).
Recordemos que la interactividad del mensaje es fundamental para asegurar el
cambio de actitud.
El profesional sanitario ha de tener una actitud receptiva y dedicar, según su
disponibilidad, un tiempo a la educación sanitaria en cada visita, para comprobar el
alcance de los objetivos conductuales propuestos conjuntamente.
Finalmente, es necesario el hábito de registrar la práctica del consejo a la historia
clínica, con el mismo énfAsis con el cual se apunta un parámetro clínico, ya que esto
evitará la repetición innecesaria de preguntas ya hechas o la realización de
abordajes que se han demostrado ineficaces.
1.1.2. Guía para iniciar acciones educativas

A continuación daremos unas pautas sencillas como guía para iniciar una acción
educativa:
Suministro de información básica (ver Tabla 1 del apartado de educación sanitaria
pregestacional, y Tabla 1,2,3 del apartado de educación sanitaria gestacional).
Detección de problemas de información y motivación
Podemos usar preguntas del tipo:
• Hay alguna cosa que le preocupe especialmente?
• Que le gustaría preguntarme?
• Esta de acuerdo con lo que le propongo a partir de ahora en relación con…?

Abordaje de los problemas de adhesión al plan educativo.


Cuando los objetivos estén cuantificados le especificaremos que esto
acostumbra a ser una excelente motivación al ver las variaciones (peso,
tensión, etc.).
• Repetiremos los mensajes tantas veces como sea necesario y nos aseguraremos
de su comprensión. Una buena técnica es que la mujer las repita. Se puede
hacer una pregunta del tipo:
• Entonces, como hemos quedado. Explíquemelo.
• Si la mujer no puede hacer lo que le hemos propuesto, planteémosle
modificaciones al plan y formulemos conjuntamente objetivos mas asequibles
METODOLOGÍA EN LA EDUCACIÓN SANITARIA

para ella. Recordemos que pequeños cambios facilitan la adopción posterior de


actitudes y habilidades más difíciles.
• También podemos necesitar medios de apoyo a la acción educativa; es
necesario estar familiarizados con su uso para poderlos ofrecer cuando
dispongamos.
• Identificamos y corregimos errores. Hacemos que la mujer nos explique en su
propio lenguaje lo que esperamos de ella.
• Exploramos las dificultades. Podemos hacer servir preguntas como:
• Le parece bien que hagamos esto?
• Cree que le será muy difícil hacerlo?
• Animémosla y felicitémosla por sus éxitos
• Démosle las “claves” para recordar instrucciones
• Hagamos que la mujer gestante, en cada visita, sea consciente de lo que
esperamos de ella según el “pacto educativo”. Al final de cada control
marquemos los objetivos conjuntamente y quedemos para la visita siguiente.
• Hablamos que la embarazada sienta que se le da apoyo. La relación de empatía
ser verá muy reforzada si puede llamarnos a la consulta siempre que surja
cualquier problema que dificulte la adhesión en lugar de haber esperado a que
tenga visita concertada. Hay que tener en cuenta, pero, que esto no represente
una carga de trabajo sobreañadido y sepamos racionalizar sus peticiones.
• Busquemos el apoyo de familiares o amigos en las visita sucesivas.

1.1.3. Abordaje de problemas de actitud

Si a pesar de todo, los problemas de actitud continúan dificultando la adhesión al


plan educativo, se puede seguir la estrategia que ahora os proponemos:
• Monitoricemos visitas de seguimiento más frecuentes. Esto normalmente facilita
la interactividad del mensaje y refuerza la alianza educativa, pero por el contrario
puede hacer que la mujer genere una dependencia hacia el profesional sanitario,
no asuma nunca su cuota de responsabilidad y tenga siempre un papel pAsivo.
• Impliquemos aun más a la familia
• Revisemos otra vez conjuntamente los objetivos pactados
• Evaluemos nuestra propia actuación

A pesar de todo lo que hemos dicho, es necesario recordar que algunas mujeres
embarazadas no conseguirán adherirse al plan educativo propuesto, ni adoptar la
conducta sugerida. Quizás estas mujeres podrán ser abordadas en otra ocAsión,
cuando encontremos un “momento de aprendizaje” más favorable. Hasta que esto
llegue, se deberá hacer una planificación para integrar los mensajes periódicamente
en las visitas de seguimiento.
1.2. Educación sanitaria grupal
Definimos como grupo un conjunto de personas con unas características o intereses
comunes. En la educación sanitaria, el trabajo en grupo es una de las actividades
fundamentales para el cambio de actitud y comportamientos. La relación que se
establece entra la información y la afectividad en el grupo es lo que favorece el
aprendizaje. La eficacia de la educación sanitaria en grupo esta relacionada no
solamente con la capacidad pedagógica del profesional sino también con la
socialización las aportaciones de las participantes, que pueden ser terapéuticas por
si mismas.
El grupo como método educativo aporta:
METODOLOGÍA EN LA EDUCACIÓN SANITARIA

• Ayuda y estímulo para fomentar y mantener conductas saludables y reforzar el


comportamiento del cambio de actitudes.
• Intercambio de conocimientos y técnicas, información y aprendizaje del
profesional y de los otros miembros del grupo.
• Estímulo de la valoración de las propias posibilidades y de la utilización de los
propios recursos.

Cuando diversas gestantes y sus parejas se reúnen para identificar, definir y resolver
un problema, se dispone de más recursos que cuando se trabaja individualmente.
En los grupos se realizan táreas que diferentes personas por separado serian
incapaces de hacer, se ayudan a comportarse de forma saludable, y la unas
aprenden de las otras.
Todo esto con el propósito de incrementar el sentimiento de confianza en la mujer
gestante a medida que se acerca el parto, ya que la embarazada y su pareja
requieren ayuda psicológica y apoyo en el embarazo, parto y puerperio; desean
saber que les pasará, y este conocimiento los capacita para participar activamente
en estos acontecimientos.
En el embarazo, la mujer y su pareja están muy motivados preparando la llegada de
su hijo. Por lo tanto, las intervenciones que haremos tendrán una buena respuesta; a
pesar de todo, es conveniente la motivación previa de las participantes para
conseguir una dinámica de grupo positiva.
Para realizar la actividad de información y educación sanitaria grupal podemos
utilizar diferentes metodología, entre las cuales las más habituales son:
1.2.1. Charlas informativas

Básicamente consisten en la transmisión de información oral dada por profesional


sanitario. Este método es poco participativo y la mujer se encuentra poco implicada.
Por ello, no somos partidarios de su utilización sistemática y exclusiva. En estos
casos, se deberá siempre hacer un debate posterior.
A pesar de ello, su utilización nos permite sintetizar información, remarcando los
puntos de más interes.
1.2.2. Trabajos en grupo

La técnica de trabajos en grupo nos permite hacer más participativa la actividad


educativa, a la vez que implica más a los participantes.
Se realiza en grupos reducidos y consiste en sesiones para debatir temes
específicos como, por ejemplo, el parto, la lactancia, etc. También es útil para hacer
aplicaciones prácticas como, por ejemplo, como se debe realizar la técnica de las
contracciones, el baño del bebe, etc.

1.2.3. Juegos de rol (role playing)

Es una técnica interpretativa medíante la cual sed reproduce o se representa una


situación cercana a la realidad.
Es una técnica que nos puede ayudar a promover cambios de actitud, ampliar
puntos de vista y controlar las propias emociones. Antes de iniciar el juego de rol se
hace una descripción de la situación y se Asignan unos papales a los participantes.
Una vez finalizada la representación, se inicia la discusión en grupo y se analizan los
problemas, las actitudes y las relaciones interpersonales que se han creado.

1.2.4. Resolución de casos


METODOLOGÍA EN LA EDUCACIÓN SANITARIA

Consiste en la presentación de un determinado problema o caso, que parte de una


situación real. Se utiliza con la finalidad que el grupo lo discuta y pueda sacar
conclusiones o la mejor solución posible, teniendo en cuenta que puede haber varias
soluciones correctas.
Es un método dinámico en que la gestante se implica personalmente y ayuda a
desarrollar las habilidades para el análisis de problemas y la toma de decisiones.

Métodos audiovisuales
Para llevar a cabo esta actividad de educación sanitaria grupal, se recomienda la
utilización de medios audiovisuales, como pueden ser retroproyección de
transparencias, proyección de díapositivas, vídeos, pósters, folletos informativos y
libros de educación sanitaria, todos ellos con la finalidad de facilitar la comprensión y
memorización del mensaje y también para hacer más dinámicas y atractivas las
sesiones.

1.2.5. Evaluación de la educación sanitaria grupal

La evaluación ocupa un lugar importante en el proceso educativo, ya que nos


permite conocer la calidad la calidad del proceso, el impacto que ha tenido en el
grupo y a la vez es también un instrumento útil para poder mejorar posteriormente
esta actividad.
La evaluación se puede realizar medíante diferentes sistemas, entre los cuales
podríamos citar:

• Cuestionario prediseñado que se ha de rellenar cuando finalice la actividad


grupal o que se puede rellenar durante el puerperio; este cuestionario puede ser
rellenado de dos formas diferentes: la óptima seria con un entrevistador
entrenado, pero, en función de los recursos, también podría ser autorellenado.

• Entrevistas directas entre el profesional y la mujer, que debería realizar unos días
después del parto y que se pueden reflejar en un documento/informe o registrar
en un cassette o en una grabación de vídeo. Posteriormente se hace un análisis
de las respuestas, sugerencias y comentarios obtenidos.
• Valoración del profesional conductor del grupo, que al finalizar la actividad grupal
hace una evaluación, tanto individual, que recoge la Asístencia, la actitud, la
participación, etc., como del grupo en conjunto.

• Indicadores de evaluación sobre la actividad realizada como, por ejemplo, para


conocer la cobertura que se está haciendo de esta actividad en un determinado –
ámbito territorial, o bien sobre la población atendida.

Papel de la persona conductora del grupo


Ha de mantener el grupo centrado en el trabajo, ha de facilitar la participación, ha de
evitar juicios sobre las aportaciones de los diferentes miembros, y ha de ayudar a
formular y a identificar las preguntas.
También es competencia de esta persona mantener un ambiente favorable al
aprendizaje.
Existen algunas situaciones que debería evitar para poder ejercer de forma
adecuada:
• Sentirse el único responsable del éxito o del fracaso del grupo
• Querer tener respuestas o soluciones a todo
• Buscar aliados o cómplices en el grupo para conseguir objetivos
METODOLOGÍA EN LA EDUCACIÓN SANITARIA

No debería preocuparle excesivamente dar toda la información, ya que lo más


importante es conseguir que la mujer esté motivada para adquirir la información
adecuada y que sea capaz de entender la información recibida.
EDUCACIÓN SANITARIA PREGESTACIONAL

2.1. Objetivos

El objetivo fundamental de la educación sanitaria pregestacional es conseguir una


sensibilización sobre la importancia de no exponerse a agentes teratógenos y/o
factores de riesgo que puedan alterar el normal desarrollo fetal.

El suministro de información y la metodología educativa se deberá enfocar a


conseguir el acceso al embarazo en las mejores condiciones físicas, psíquicas y
ambientales posibles.

Es recomendable, pues, hacer una evaluación pregestacional de los riesgos


empíricos de aparición de alteraciones del desarrollo, incluyendo el asesoramiento
reproductivo (ver apartado 4.1.5., Capítulo III). En algunos casos concretos estará
indicada la promoción de terapéuticas o acciones específicas, la eficacia de las
cuales haya estado aprobada científicamente para prevenir las alteraciones en la
reproducción.

Hemos de tener en cuenta que cuando la mujer o la pareja está interesada en la


planificación del embarazo debe informarse, en primer lugar, que es importante un
díagnóstico precoz de la gestación, para lo que las mujeres en edad fértil y con
amenorrea deberán hacerse un test de embarazo después de una semana de
ausencia de la menstruación. Actualmente, el acceso a los test de embarazo es muy
fácil para cualquier mujer.

Una vez confirmada analíticamente la gestación, la embarazada deberá dirigirse al


equipo Asístencial encargado de su Asístencia. Se dará cuenta de la importancia de
esta primera visita, si se la informa de la necesidad de hacerla lo más pronto posible.

Se le explicará que nos interesaremos por los antecedentes familiares para que,
antes de la entrevista, recoja información sobre sus familiares directos, y pueda
saber si hay precedentes de enfermedades familiares importante en ambos
componentes de la pareja, dado que algunas pueden ser hereditarias o pueden
repercutir en la reproducción. Le explicaremos también que nos interesaremos por
los antecedentes personales de ambos componentes de la pareja y que se hará
especial énfAsis en las enfermedades, operaciones y traumatismos, así como en la
importancia que aporte todos los informes médicos pertinentes relacionados con
enfermedades o ingresos hospitalarios previos.

Explicaremos que es conveniente conocer el estado inmunológico de la


embarazada, por lo que nos interesa saber las enfermedades exantemáticas
pasadas y las vacunas que le han sido administradas.

2.2. Áreas de intervención

Para facilitar la tárea de educación sanitaria pregestacional, se ha diseñado la Tabla


1, que recoge la globalidad de las intervenciones educativas que se deben llevar a
cabo a lo largo de la etapa pregestacional.

En primer lugar deben determinarse diversos intervalos de edad: de 14 a 17 años,


de 18 a 20, de 21 a 37 y >= 38 años. En cada uno de estos intervalos de edad se
EDUCACIÓN SANITARIA PREGESTACIONAL

han descrito cuales son las áreas de intervención en las cuales ha de incidir. En
cada área de intervención en las cuales se ha de incidir. En cada área de
intervención se ha especificado que mensaje debe darse, y, Asímismo, se ha
descrito en que ámbito debe hacerse esta intervención.

Los temas que se detallan en las áreas de intervención se especifican ampliamente


en el apartado 4 de este capítulo.

Tabla 1. Educación sanitaria pregestacional


INTERVALO ÁREAS DE INTERVENCIÓN MENSAJE AMBITO DE APLICACIÓN
DE EDAD
14 a 17 años Tabaco No iniciar el hábito o abandonarlo Escuela
Alcohol No iniciar el hábito o abstenerse Centros de atención primaria
Drogas No iniciar el hábito o deshabituares (Pedíatras)
Embarazo no deseado Métodos anticonceptivos (Médicos de familia)
MTS/sida Conducta sexual segura Espacios de atención a los
Equilibrio nutricional Consejo alimentario jóvenes*
Información vacunal Consejo vacunal Oficinas de farmacia
Actividad física Hacer actividad física adecuada y controlada
18 a 20 años Tabaco No iniciar el hábito o abandonarlo Centros de atención primaria
Alcohol No iniciar el hábito o abstenerse (Médicos de familia)
Drogues No iniciar el hábito o deshabituares (Ginecólogos)*
Embarazo no deseado Métodos anticonceptivos (Tocólogos)*
MTS/sida Conducta sexual segura (Comadronas)*
Equilibrio nutricional Consejo alimentario Centros de planificación*
Información vacunal Consejo vacunal Oficinas de farmacia
Actividad física Hacer actividad física adecuada y controlada
Prevención de defectos del tubo Información sobre folatoterapia y
neural vitaminoterapia
Prevención de defectos Consejo reproductivo
congénitos
21 a 37 años Tabaco Abandono Centros de atención primaria
Alcohol Moderación y abstención en caso de embarazo (Médicos de familia)
Drogas Deshabituación (Ginecólogos)*
Embarazo no deseado Planificación familiar, métodos anticonceptivos (Tocólogos)*
MTS/sida Conducta sexual segura (Comadronas)*
Equilibrio nutricional Consejo alimentario Centros de planificación*
Información vacunal Consejo vacunal Centros hospitalarios (Maternidad)
Actividad física Hacer actividad física adecuada Oficinas de farmacia
Prevención de defectos del tubo Información sobre folatoterapia y
neural vitaminoterapia
Prevención de defectos Consejo reproductivo
congénitos
<=38 años Tabaco Abandono Centros de atención primaria
Alcohol Moderación y abstención en caso de embarazo (Médicos de familia)
Drogas Deshabituación (Ginecólogos)*
Embarazo no deseado Planificación familiar, métodos anticonceptivos (Tocólogos)*
MTS/sida Conducta sexual segura (Comadronas)*
Equilibrio nutricional Consejo alimentario Centros de planificación*
Información vacunal Consejo vacunal Centros hospitalarios (Maternidad)
Actividad física Hacer actividad física adecuada Oficinas de farmacia
Prevención de defectos del tubo Información sobre folatoterapia y
neural vitaminoterapia
Prevención de defectos Consejo reproductivo
congénitos

• Unidades de atención a la mujer (donde estén en funcionamiento)


EDUCACIÓN SANITARIA GESTACIONAL

3.1. Objetivos

La importancia del control durante la gestación, y su repercusión sobre la morbilidad


y mortalidad perinatal, la aplicación rigurosa de los protocolos establecidos y la
realización de pruebas complementarias adecuadas, demuestran cada día más su
eficacia, la cual se verá incrementada con una buena educación sanitaria durante la
gestación.

Un diseño adecuado de los sistemas de educación e información, y su aplicación


práctica, utilizando los métodos apropiados, repercutirá beneficiosamente en el
control prenatal y ayudará a mejorar el resultado perinatal.

Es necesario que se divulgue la importancia de la vigilancia perinatal y su


repercusión en la salud física y psíquica de la embarazada, del recién nacido e
incluso de la pareja. Medíante la información y la educación sanitaria, es necesario
crear la sensación de la importancia y la trascendencia de esta vigilancia, y
conseguir que los padres formen “equipo” con los profesionales encargados de su
Asístencia.

La finalidad de la educación sanitaria en la consulta prenatal es cuidar el estado de


salud de la madre y de su hijo, a través de la vehiculacion de mensajes específicos
sobre hábitos saludables durante el embarazo, que quedan recogidos en este
apartado.

3.2. Áreas de intervención

Para facilitar la tárea de educación sanitaria gestacional, se han diseñado las tablas
que se incluyen en este mismo apartado y que recogen la globalidad de las
intervenciones educativas que se han de llevar a cabo a lo largo del embarazo.

La actividad educativa durante el embarazo debe realizarse de una forma


continuada en cada una de las visitas de control. Las intervenciones que deberán
hacerse a lo largo del embarazo serán las más adecuadas para cada uno de los
diferentes periodos de la gestación; por este motivo, en cada una de las tablas se
han reflejado los temas que se deben trabajar cada trimestre.

Otro aspecto a tener en cuenta es determinar que intervenciones deben hacerse a


cada gestante, ya que hay temas que no será necesario trabajar con algunas
embarazadas, como por ejemplo el tabaco, si es una embarazada que no fuma, etc.

Deben diseñarse tres tablas según el periodo de gestación: Tabla 1, primer


trimestre; Tabla 2, segundo trimestre; y Tabla 3, tercer trimestre.
En cada una de las tablas que corresponde a un periodo de gestación de un
trimestre se han definido las áreas de intervención, las cuales se han agrupado en
tres apartados.

• Información sobre las medidas propuestas


• Asesoramiento sobre el embarazo y la maternidad/paternidad
EDUCACIÓN SANITARIA GESTACIONAL

• Asesoramiento sobre la promoción de hábitos saludables

En cada uno de estos apartados se ha descrito cuales son los mensajes que deben
darse, y el ámbito en que se difundirán.

Los temas que se detallan en las áreas de intervención se especifican ampliamente


en el apartado 4, de este capítulo.
EDUCACIÓN SANITARIA GESTACIONAL
EDUCACIÓN SANITARIA GESTACIONAL

Periodo de Área de intervención Mensaje Ámbito de


gestación aplicación
Información sobre medidas - Uso del Carnet de la Embarazada. Historia clínica - Explicación sobre la finalidad del documento Centros de
propuestas - Observación de las visitas - Necesidad de visitase regularmente Atención Primaria
Frecuencia de los controles. Lugar - Información sobre que es la ecografía y para que le haremos las
- Información sobre las exploraciones y pruebas analíticas y las serologías (Obstetras*)
complementarias. Información sobre quienes son y donde han de acudir en caso (Comadronas*)
- Motivos de alarma durante el embarazo de que se presenten
- Información sobre el díagnóstico prenatal - Información sobre el cribado bioquímico y las ecografías de la
a
18 -20a semana
- Información sobre la prueba de HIV
- Consejo Asístido
- Información sobre interrupción legal del embarazo
Asesoramiento sobre - Evolución del embarazo - Explicaciones sobre los cambios anatómicos, funcionales y Centros de
embarazo y maternidad / psicológicos (correspondientes al primer trimestre) Atención Primaria
Primer paternidad - Actuación ante molestias - Autocura ante interferencias relacionadas con el embarazo
trimestre (Obstetras*)
(Comadronas*)
Asesoramiento sobre - Prevención de enfermedades infecciosas transmisibles al - Evitar situaciones de riesgo de infección (rubéola, CMV, sida, Centros de
promoción de hábitos feto Toxoplasmosis, listerioris, etc.) Atención Primaria
saludables - Equilibrio nutricional y ponderal - Consejo alimentario
- Hábitos de higiene general y buco-dental - El embarazo no comporta, en principio, ninguna variación. (Obstetras*)
Recomendación de la ducha díaria y del uso de ropa y calzado (Comadronas*)
- Actividad sexual adecuados. Consejo de salud buco-dental.
- Normalidad de la actividad sexual. Medidas de sexo seguro ante
- Abstención de hábitos tóxicos conductas de riesgo.
- Abstención de tabaco, abstención de alcohol y drogas.
- Evitar medicamentos y agentes teratógenos Interrogatorio y consejo antitabáquico, consumo de alcohol y
drogodependencias.
- Información sobre el uso de medicamentos durante el embarazo
y evitar la automedicación, así como de la exposición a
radíaciones o a tóxicos laborales o ambientales.

• Unidades de atención a la mujer (donde estén en funcionamiento)


EDUCACIÓN SANITARIA GESTACIONAL

Periodo de Área de intervención Mensaje Ámbito de


gestación aplicación
Información sobre medidas - Motivos de alarma durante el embarazo - Información sobre cuales son y donde han de ir en caso de que Centros de
propuestas se presenten Atención Primaria

(Obstetras*)
(Comadronas*)
Asesoramiento sobre - Evolución del embarazo Como va evolucionando el crecimiento del feto Centros de
embarazo y maternidad / - Actuación ante molestias Autocura ante interferencias relacionadas con el embarazo Atención Primaria
paternidad Que es el programa y cual es el objetivo
- Adhesión al programa de educación materna (Obstetras*)
(Comadronas*)
Asesoramiento sobre - Equilibrio nutricional y ponderal - Consejo alimentario Centros de
promoción de hábitos - Hábitos de higiene general y buco-dental - El embarazo no comporta, en principio, ninguna variación. Atención Primaria
saludables Recomendación de la ducha díaria y del uso de ropa y calzado
Segundo - Actividad física y trabajo adecuados. Consejo de salud buco-dental. (Obstetras*)
trimestre - Reposo. Conocer los beneficios de la actividad física regular y (Comadronas*)
- Viajes adecuada. Ergonomia
- Actividad sexual - Cinturón de seguridad durante el embarazo
- Normalidad en la actividad sexual. Se deberán adoptar posturas
mas adecuadas. Medidas de sexo seguro ante conductas de
- Abstención de hábitos tóxicos riesgo.
- Evitar medicamentos y agentes teratógenos - Consejo antitabáquico, consumo de alcohol y drogas ilegales
- Información sobre el uso de medicamentos durante el embarazo
y evitar la automedicación, Así como de la exposición a
radíaciones o a tóxicos laborales o ambientales.

• Unidades de atención a la mujer (donde este en funcionamiento)


EDUCACIÓN SANITARIA GESTACIONAL

Periodo de Área de intervención Mensaje Ámbito de


gestación aplicacion
Información sobre medidas - Uso del Carnet de la embarazada - Llevarlo en el momento del parto Centros de
propuestas - Información sobre las exploraciones y la pruebas - Explicaciones pertinentes sobre la ecografía del 3r trimestre Atención Primaria
complementarias del 3r trimestre sobre el antígeno HbsAg, y sobre otras pruebas de laboratorio y
- Motivos de alarma de bienestar fetal (Obstetras*)
- Información sobre cuales son y donde han de acudir en caso de (Comadronas*)
- Preparación para el parto que ese presenten
- Explicación sobre donde ha de ir en el momento del parto
Teléfono de contacto, descripción esquemática sobre el proceso
a seguir al entrar en el centro y personas que le atenderán.
Asesoramiento sobre - Evolución del embarazo - Evolución y crecimiento dl feto Centros de
embarazo y maternidad / - Actuación ante molestias - Autocura ante interferencias relacionadas con el embarazo Atención Primaria
paternidad - Información sobre el parto y el puerperio, importancia de la
- Adhesión al programa de educación materna preparación psicofísica (Obstetras*)
Tercer - Promoción de la lactancia natural - Beneficios de la lactancia materna y necesidad de mantenerlo el (Comadronas*)
trimestre tiempo oportuno
- Panereta - Ropa y complementos necesarios para la madre y el bebe, que
ha de llevar en el momento del parto
Asesoramiento sobre - Equilibrio nutricional y ponderal - Consejo alimentario Centros de
promoción de hábitos - Hábitos de higiene general y buco-dental - El embarazo no comporta, en principio, ninguna variación. Atencion Primaria
saludables Recomendación de la ducha díaria y del uso de ropa y calzado
- Actividad física y trabajo adecuados. Consejo de salud buco-dental. (Obstetras*)
- Reposo. Conocer los beneficios de la actividad física regular y (Comadronas*)
- Viajes adecuada. Ergonomia
- Actividad sexual - Cinturón de seguridad durante el embarazo
- Características de las relaciones sexuales durante el último
trimestre. Postura recomendadas. Medidas de sexo seguro ante
- Abstención de hábitos tóxicos conductas de riesgo.
- Evitar medicamentos y agentes teratógenos - Consejo antitabáquico, consumo de alcohol y drogas ilegales
- Información sobre el uso de medicamentos durante el embarazo
y evitar la automedicación, así como de la exposición a
radíaciones o a tóxicos laborales o ambientales.

• Unidades de atención a la mujer (donde este en funcionamiento)


EDUCACIÓN SANITARIA GESTACIONAL
DESARROLLO DE LAS ÁREAS DE INTERVENCIÓN EN EDUCACIÓN
SANITARIA PREGESTACIONAL Y GESTACIONAL

Las áreas de intervención sobre educación sanitaria se han agrupado en tres


apartados:

4.1. Información sobre medidas propuestas


4.2. Asesoramiento sobre embarazo y maternidad/paternidad
4.3. Asesoramiento sobre promoción de hábitos saludables

4.1. Información sobre medidas propuestas

Dentro de este apartado se han descrito las actividades informativas/educativas


destinadas a informar la mujer/pareja de los controles y actividades que se harán a
lo largo del embarazo, así como de los centros sociosanitarios que tiene a su
alcance.
4.1.1. Historia clínica y Carnet de la embaraza

Es necesario explicar a la mujer la importancia de obtener unos datos fiables y


completas sobre su biografía sanitaria para la realización de la historia clínica. Se
insistirá en la necesidad de disponer de esta información, que permitirá al
profesional elaborar la historia para hacer un buen seguimiento y control de su
embarazo y para poder identificar sus factores de riesgo.

Se le explicará también que todos los datos que se anotaran en la historia clínica
serán introducidas con su consentimiento y de forma confidencial.

Así mismo, se informara a la mujer sobre el Carnet de la embarazada, en el cual


constaran todos los datos mas destacados de la historia clínica y de la evolución del
embarazo, los datos analíticos, las ecografías y las especificaciones para el parto.
Se insistirá en la importancia de llevar este documento en cada una de las visitas y
pruebas que se realicen durante el embarazo para que le profesional pueda anotar
todos los datos y resultados de las exploraciones complementarias. Este documento
permite también a la mujer disponer de un medio de información rápido y fiable en
caso de tener que ser atendida por cualquier motivo en otros centros sanitarios
diferentes de los habituales.

4.1.2. Frecuencia de visitas y pruebas complementarias

Debe informarse a la mujer sobre la necesidad de la programación y la frecuencia de


las visitas. La primera visita debe realizarse antes de las 12 semanas de gestación, y
a partir de aquí es conveniente una visita cada 4-6 semanas hasta las 36 semanas
del embarazo.

Entre las 37 y 41 semanas se hará una visita cada 2-3 semanas, según las
necesidades. A partir de las 41 semanas de gestación de las visitas serán cada 2
días. Si el último día de la semana 42 el parto no ha empezado espontáneamente,
se le ingresará al hospital previsto para la inducción del parto o bien se efectuará
una vigilancia intensiva.
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Así mismo, a las 34-36 semanas de gestación se le hará una visita al hospital de
referencia para que se familiarice con este entorno y también para completar su
historia clínica hospitalaria. Dentro de esta programación se informara que, a partir
de las 39-40 semanas de gestación, es posible que se la derive al hospital de
referencia, donde se le harán los controles posteriores hasta el momento del parto.

Se deberá explicar a la gestante que, en las visitas que se le harán a lo largo del
embarazo, se efectuará un seguimiento para controla el desarrollo del su hijo y de su
salud, y que en cada visita recibirá la información y la educación sanitaria necesarias
con relación al momento del embarazo en que se encuentra, y así mismo se le dará
toda la información que ella solicite.

También se le explicará a grandes rasgos que es realizaran un mínimo de:


• 3 extracciones de sangre para efectuar analíticas (en el primer, segundo y tercer
trimestre de la gestación). Para la realización de algunas de estas pruebas, como
son la serología del HIV y el díagnóstico prenatal de defectos congénitos, será
necesario obtener su consentimiento, después de un consejo informado.

• 3 ecografías (en el primer, segundo y tercer trimestre de la gestación)

• Otras pruebas que se establecerán en este protocolo.

Se informará también a la embarazada sobre la importancia de seguir la


programación establecida en este protocolo para facilitar la detección precoz de
posibles riesgos.

Se ha de explicar a la gestante que, de entrada, presenta un embarazo normal que


los controles y exploraciones que se le practicaran están encaminadas a conocer su
estado de salud y el del feto, y es necesario insistir en el hecho de que el embarazo
es un proceso fisiológico y natural. A pesar de ello, se informará que en la primera
visita se le hará una valoración de los factores de riesgo que se han definido en este
protocolo, y que esta valoración se hará de una forma continuada en cada una de
las consultas posteriores de seguimiento de su embarazo.

4.1.3. Motivos de alarma durante el embarazo

Al mismo tiempo que se explican a la embarazada los cambios y sensaciones que


experimentará y que forman parte de la evolución normal del embarazo, es
necesario incluir necesariamente información sobre los signos que pueden hacer
sospechar la aparición de alguna anormalidad. Por este motivo y para tomar las
medidas oportunas para evitar complicaciones, es necesario recomendar que, a
parte de las consultas periódicas programadas, ha de acudir a la consulta/hospital
ante cualquier anomalía relacionada con:

• Alteraciones visuales importantes


• Dolor de cabeza muy intenso/cefaleas
• Sensación de mareo
• Nauseas muy frecuentes
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• Vómitos incoercibles
• Problemas respiratorios
• Dolores abdominales
• Dolores en el epigastrio
• Perdidas de líquido o sangre por los genitales externos
• Edemas exagerados en las extremidades inferiores (hinchazón, por la tarde, en
otras zonas que no sean los pies y tobillos, o en estos sitios si no desaparece
con el reposo nocturno)
• Sensación de malestar general
• Fiebre elevada
• Molestias urinarias
• Modificación de las características del flujo vaginal (color, olor o cantidad
anormal)
• Díarrea intensa
• Ausencia de la percepción de movimientos fetales, a partir del quinto mes
• Contracciones uterinas dolorosas

4.1.4. Centros sociosanitarios disponibles

Es importante informar a la mujer sobre los servicios que tiene a su disposición con
relación al embarazo, parto y puerperio.

La embarazada y su pareja han de saber el nombre del tocoginecólogo y de la


comadrona de referencia, así como el lugar y los horarios en que se les puede
localizar, por si necesitan hacerlos alguna consulta.

También es necesario explicar a la embarazada en que centro se le hará el control y


seguimiento de la embarazada, así como el lugar donde se le harán las ecografias
del primer, segundo y tercer trimestre.

Otras informaciones importantes y necesarias que ha de tener la mujer son:

• Donde, cuando y en que horarios podrá hacer la educación materna.


• El hospital de referencia para el parto y para una posible urgencia importante
• Los servicios sociales, el Asistente social y el psicólogo que tiene a su
disposición, en caso que los necesite.
• La Asitencia domiciliaria al puerperio, actividad que puede solicitar cuando llegue
a casa después del parto (en los lugares donde este en funcionamiento este
servicio)
• La existencia de grupos de mujeres de apoyo a la lactancia materna, en su
ámbito.

4.1.5. Asesoramiento sobre el cribado de defectos congénitos

Concepto de defecto congénito


Según la OMS, un defecto congénito es “toda la anomalía del desarrollo morfológico,
estructural o molecular, presente en el momento de nacer (aunque se pueda
manifestar más tarde), externa o interna, hereditaria o esporádica, única o múltiple”.
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Estos defectos pueden aparecer en diferentes momentos de la gestación


(cromosomopatías, defectos del tubo neural, anomalías morfológicas y funcionales)
y algunos son díagnosticables en la etapa prenatal, mientras que otros solo se
pueden díagnosticar después del nacimiento.

Algunos de los defectos congénitos son patologías graves que no se pueden curar, y
solo una pequeña parte de estos tienen la posibilidad de ser tratados.

Etiología de las anomalías congénitas

Muchos de estos desórdenes no tienen una etiología conocida, pero, a grandes


rasgos, pueden presentarse dos grandes grupos de causas, las de origen genético y
las de origen ambiental o multifatoria (Tabla 1).

Tabla 1. Etiología de las anomalías congénitas


Etiología Anomalías cromosómicas
Origen genético Enfermedades mendelianas: - Autosómicas recesivas
- Austosómicas dominantes
- Ligadas al cromosoma X
Microbianas: - Virus de la rubéola, de la varicela, del
herpes simple i citomegalovirus
- Toxoplasma gondii
- Treponema pallidum
Origen ambiental o multifactorial Fàrmacos: - Algunos anticonvulsivos antibióticos,
quimioterápicos, etc.
Tóxicos: - Alcohol
- Metales pesados, disolventes

Anomalías de origen genético

Las anomalías cromosómicas constituyen entre el 6 y el 7% del total de las


anomalías congénitas; tienen como causa una mutación en el DNA celular que
puede afectar el número o la estructura de alguno de los 46 cromosomas
organizados en 22 parejas de cromosomas autosómicos y 1 par de cromosomas
sexuales (X e Y). El grado de afectación fetal dependerá de la cantidad de DNA
implicado.

Enfermedades mendelianas
Los desórdenes genéticos causados por un defecto en un solo gen y que siguen los
patrones de herencia descritos por Mendel el siglo XIX constituyen actualmente un
grupo numerosos de mas de 4.000 desordenes descritos, pero su incidencia
población es baja, concretamente entre el 7 y el 8% de todas las anomalías
congénitas.

El díagnóstico prenatal de estas enfermedades solo se realizará si se tiene


constancia de un caso índice familiar documentado. Este díagnóstico puede
efectuarse básicamente con el estudio bioquímico de productos de síntesis o
degradación de moléculas en líquido amniótico o en vellosidades coriales o bien con
estudios del DNA fetal.

Anomalías de origen ambiental o multifactorial

El contacto con ciertos agentes ambientales como algunos microbios, o substancias


tóxicas, así como con fármacos y el alcohol sobre todo durante el primer trimestre de
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la gestación, puede provocar la aparición de alguna anomalía congénita en el feto.


La gravedad de estos trastornos en el feto dependen en gran medida del grado de
exposición al agente y de si este ha cruzado o no la barrera placentaria.

4.1.5.1. Etapa pre-gestacional

El asesoramiento sobre el cribado de defectos congénitos, en la etapa


pregestacional, solo deberá darse en respuesta a una demanda explícita de la mujer
para aclarar dudas referidas a la temática en cuestión con el fin de evitar entrar en
una espiral de pruebas díagnósticas no pertinentes.

Basándonos en el riesgo previsible para una futura gestación podemos ofrecer:

• Contracepción efectiva
• Esterilización
• Administración de folatos antess del embarazo y/o durante el primer trimestre
• Vacunación pregestacional en mujeres susceptibles (no inmunizadas contra la
rubéola)
• Inseminación con semen de donante
• Donación de ovocitos y FIV
• Adopción

4.1.5.2. Etapa gestacional

El profesional sanitario debería explicar a la gestante, utilizando una terminología


apropiada, el concepto de anomalía congénita (apartado 4.1.5., Capítulo III) y que en
nuestro medio, en Cataluña, estas anomalías solo afecten un pequeño porcentaje de
fetos (entre un 3 y un 4%).

No obstante, se ha de tranquilizar a la embarazada con la explicación de que


durante su embarazo se le ofrecerá sistemáticamente la posibilidad de someterse a
diferentes pruebas y exploraciones: serologías, cálculo del índice de riesgo para
algunos desórdenes cromosómicos –por ejemplo, el síndrome de Down (SD) y los
defectos de cierre del tubo neural (DTN)-, y ecografías para detectar y díagnosticar
en una etapa precoz de la gestación la presencia de ciertas anomalías en el embrión
o en el feto. En este punto debe mencionarse que con el desarrollo tecnológico
actual no podemos garantizar el díagnóstico de la totalidad de anomalías que se
pueden presentar, aunque las que son objeto de cribado son las mas prevalentes en
nuestro medio.

También le explicaremos de manera objetiva i entendedora las características y


limitaciones díagnósticas de cada prueba y/o exploración para que pueda decidir
libremente si quiere acceder al díagnóstico prenatal de anomalías congénitas
fetales.
El profesional sanitario deberá insistir en el hecho que, a pesar de la existencia de
técnicas díagnósticas de estas enfermedades, es mejor prevenir su aparición
evaluando el riesgo a partir de los antecedentes personales y familiares, y
adoptando conductas saludables que eviten ciertos factores descritos en la literatura
científica como causa de anomalías en el feto. Toda esta información básica sobre el
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consejo genético y las características de las diferentes pruebas y exploraciones es


aconsejable que sea suministrada con un apoyo gráfico adecuado.
Comentaremos a la mujer que a veces deberá consultar especialistas que no están
ubicados en el centro Asistencial donde se visita habitualmente.

Prevención de las anomalías congénitas

Hablaremos a la mujer solo de los factores que es necesario evitar y de las


conductas más saludables para prevenir la aparición de estas anomalías en la
medida que sea posible (prevención primaria).
Dentro de las anomalías cromosómicas, en numerosos trabajos se ha descrito la
relación entre edad materna y más incidencia de síndrome de Down (SD) o trisomía
21 (Figura 21).

FIGURA 1. Frecuencia de aparición de síndrome de Down en función de la


edad de la madre (x 1.000 malformaciones)

En este momento será bueno recordar los consejos de la OMS para una buena
salud reproductiva:

1. Todos los hijos han de ser deseados


2. El intervalo óptimo de tiempo entre los embarazos es de 2 años.
3. La edad reproductiva materna donde aparecen menos problemas (menor tasa de
anomalías congénitas) se encuentra entre los 20 y los 35 años.
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Las medidas para la prevención de las enfermedades mendelianas que es necesario


aplicar actualmente se dirigen a prevenir o reducir al mínimo las secuelas de la
enfermedad y a prevenir la aparición de casos nuevos en las familias afectadas. La
consanguinidad puede incrementar el riesgo de sufrir estos trastornos.

Para prevenir las anomalías congénitas de origen multifactorial, explicaremos a la


mujer que la actuación más eficaz es no entrar en contacto con los diferentes
agentes teratógenos de los cuales se conoce el efecto sobre el feto, y así mismo le
explicaremos la forma de evitar el contacto.

Hasta ahora hemos hablado de las medidas de prevención primaria que evitan la
aparición de estos problemas.

Las actividades de prevención secundaria (díagnóstico y tratamiento precoz) se


orientan a disminuir el impacto de las anomalías congénitas presentes en el feto.
Ejemplos de estas actividades son el díagnóstico prenatal; el tratamiento intrauterino
en los casos en que es posible; la interrupción voluntaria del embarazo, y la
vigilancia y control del embarazo de acuerdo con su nivel de riesgo.

Métodos de cribado y de díagnóstico de anomalías congénitas en la etapa


prenatal.

Como ya hemos dicho anteriormente, no todas las anomalías congénitas son


díagnosticables antes del nacimiento. A pesar del adelanto tecnológico actual
muchas anomalías pasarán inadvertidas durante toda la gestación y solo se
detectarán una vez haya tenido lugar el nacimiento, incluso durante los primeros
años de la vida del niño. No obstante, algunas de estas patologías son objeto de
cribado en toda la población de gestantes (Tabla 2).

Los métodos de cribado tienen como objetivo identificar individuos enfermos o que
presenten un incremento del riesgo de sufrir una determinada enfermedad. Un
cribado no es una prueba díagnóstica definitiva y los individuos que han resultado
positivos deben someterse a pruebas de díagnóstico para confirmar la enfermedad.

La Tabla 2 explica los riesgos y limitaciones de los diferentes métodos de cribado y


de díagnóstico prenatal de anomalías congénitas que se aplican en nuestro medio.
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Tabla 2. Riesgos y limitaciones díagnósticas de los métodos de díagnóstico prenatal


Cribado de síndrome de Prueba invasiva Estudio del cariotipo/ Estudio del cariotipo/ Serología Serología de la Ecografía 18-20
Down y DTN abiertos. Estudio del biopsia corial/análisis funiculocentesis/ Rubéola Toxoplasmosis/ semanas de
cariotipo/ DNA serología/ algunas MTS gestación
amniocentesis/ análisis DNA
análisis DNA
Tipo de Cribado bioquímico Díagnóstica Díagnóstica Díagnóstica Cribado Cribado Cribado/
prueba díagnóstica
Población Gestantes <38 a. sin factor de - Gestantes < 38 - Gestantes < 38 - Gestantes <38 Gestantes no Todas las Todas las
díana riesgo de cromosomopatías años con factores años con factores de años con factores de vacunadas Gestantes Gestantes
de riesgo de riesgo de riesgo de
Cromosomopatías Cromosomopatías Cromosomopatías
- Gestantes ≥ 38 - Gestantes ≥ 38 - Gestantes ≥ 38
años años años
- Gestantes < 38 - Gestantes con - Gestantes con
años con cálculo riesgo de seroconversiones
de riesgo ≥ 1/270 enfermedades
- Gestantes con hereditarias
riesgo de
enfermedades
hereditarias
(defectos
monogénicos)
Riesgos Ninguno Hasta un 1% de Hasta un 2% de Hasta un 3% de Ninguno Ninguno Ninguno
pérdidas fetales pérdidas fetales pérdidas fetales
asociadas a la asociadas a la asociadas a la
técnica técnica técnica
Limitaciones Falsos positivos = 5,8% Tasa de detección Tasa de detección Tasa de detección Tasa de detección Tasa de detección Tasa de
díagnósticas Falsos negativos = 0,02% de prácticamente de prácticamente el de prácticamente 3l de prácticamente de prácticamente detección variable
Tasa de detección = 60-80% el 100% 100% 100% el 100% el 100% en función de la
anomalía
presente.
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Cribado bioquímico de anomalías cromosómicas y defectos del tubo neural (DTN)

Este cribado se basa en el cálculo del riesgo de tener un feto afectado por algún
desorden cromosómico y/o (DTN), y se ha de ofrecer entre las semanas 14 y 17 de
la gestación a todas las embarazadas de edad inferior a los 38 años que no
presenten ningún otro factor de riesgo de cromosomopatía (ver apartado 5.3.2.1.,
Capítulo I). Debe realizarse con el consentimiento de la gestante después de una
información adecuada.

Por esto, para obtener el consentimiento de la mujer para la realización del cribado
bioquímico, se le debe informar claramente sobre las diferentes situaciones en las
que se puede encontrar si accede a la realización de esta prueba, y asegurarle que
en cualquier caso se le garantizará la confidencialidad.

Condiciones del consentimiento informado


El asesoramiento a la mujer/pareja se ha de realizar en condiciones que garanticen
a las personas atendidas:
• La confidencialidad
• La privacidad
• La facilidad de acceso
• El respeto a las creencias y opiniones

Contenido mínimo del asesoramiento (consentimiento informado)


• Información sobre el alcance, las limitaciones y el riesgo del díagnóstico prenatal
(porque la pareja/mujer pueda decidir lo que considere más apropiado).
• Información sobre el cálculo del riesgo y sobre el díagnóstico de alteraciones
congénitas (para que pueda decidir el futuro del embarazo de acuerdo con la
legislación vigente).
• Información sobre los recursos asistenciales sanitarios y sociales (tanto si decide
continuar el embarazo como si decide su interrupción legal).

La realización de este cribado ha de estar apoyado en la voluntariedad y en la


decisión autónoma de la pareja/mujer gestante. Si alguna de las mujeres
embarazadas a las cuales se ofrece este cribado rehusa la realización, se dejará
constancia en su historia clínica, de la misma manera que se hace constar la
aceptación.

Se ha de informar a la gestante de que este cribado no detecta el 100% de los


casos, y también que de los casos en que resulta un riesgo elevado, hay un
porcentaje en que el riesgo no se confirma posteriormente, es decir que son falsos
positivos.

La tasa de resultados positivos de este cribado se incrementa con la edad de la


madre y es de prácticamente el 100% a los 45 años, pero el porcentaje de
resultados falsos positivos (FP) también sufre este incremento y puede llegar al 80%
en mujeres mayores de 45 años. Esta relación debe tenerse en cuenta a la hora de
informar a la gestante sobre el límite de edad recomendado para realizar este
cribado bioquímico, fijado en los 38 años.
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Se informará a la gestante que este cribado no dará el díagnóstico, sino únicamente


la sospecha, la cual deberá confirmarse posteriormente, en el caso de que el
resultado del cálculo de riesgo sea ≥ 1/270. En este caso se le ofrecerá la posibilidad
de realizar una prueba invasiva para hacer el estudio del cariotipo fetal y confirmar o
descartar la sospecha de anomalía cromosómica i/o DTN en el feto.

Una vez obtenido el resultado del cribado se informará a la gestante de forma clara y
confidencial (ver apartado 5.3.2.1., Capítulo I).

Cribado de anticuerpos contra la rubéola

La gravedad que presentan los recién nacidos afectados por el síndrome de la


rubéola congénita hace necesaria la determinación del estado inmunitario de la
embarazada respecto al virus de la rubéola. Se pedirá este cribado a todas las
Gestantes que no presenten algún documento que acredite su estado vacunal (ver
apartado 5.3.9., Capítulo I).

Si el resultado obtenido nos indica que la gestante está protegida contra el virus de
la rubéola, podemos asegurar, en general, que no hay peligro de afectación fetal por
esta causa. Si el resultado obtenido nos indica que la embarazada no está protegida
contra el virus de la rubéola se realizarán determinaciones posteriores al suero
materno. Si se mantiene la serología negativa se recomendará la vacunación una
vez finalizada la gestación.

Si se demuestra que ha habido contagio durante la gestación, se vería confirmarse


la afectación fetal por este virus analizando el nivel de anticuerpos en la sangre del
cordón medíante funiculocentesis. Si el feto se encuentra afectado, se informará a la
mujer y/o pareja suficiente de forma confidencial para que pueda tomar libremente la
decisión más oportuna.

Cribado de anticuerpos contra la toxoplasmosi

Toxoplasma gondii es un parásito que la mujer embarazada infectada puede


transmitir al feto, el cual puede sufrir secuelas neurológicas graves. Es por esta
razón que puede ser útil la realización de su determinación serológica durante el
embarazo (ver apartado 5.3.1.3., Capítulo I).
Si el resultado es negativo (lo cual indica susceptibilidad para sufrir la enfermedad si
hay contacto con el parásito), se llevará a cabo un seguimiento analítico durante el
segundo trimestre de la gestación y se informará a la mujer sobre las medidas
preventivas que ha de tener en cuenta:

• No ingerir carne cruda ni poco hecha


• Lavarse las manos después de haber tocado carne cruda
• Lavar con esmero la fruta, la verdura y las legumbres
• Utilizar guantes cuando se manipulen plantas
• Evitar el contacto con animales domésticos, especialmente los gatos
• Evitar tocar objetos que hayan estado en contacto con heces de gato
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Si el resultado es positivo nos podemos encontrar ante una exposición antigua o


reciente y, en cualquier caso, se deberá hacer un seguimiento posterior para valorar
la prescripción de un tratamiento quimioprofiláctico que pueda prevenir las secuelas
que puede producir este parásito en el feto, o bien otras medidas adecuadas a la
situación.

Ecografía
La ecografía que se realiza entre las 18 y las 20-21 semanas de gestación es una
exploración que tiene como a objetivo díagnosticar las anomalías del feto que tienen
expresión morfológica (ver apartado 4.2.2., Capítulo I).

Estudio del cariotipo fetal


Las técnicas invasivas como la amniocentesis y la biopsia de vellosidades coriales
hacen posible el estudio del cariotipo de células fetales para detectar la mayoría de
las cromosomopatías que se pueden presentar.

Las técnicas antes mencionadas no están exentas de riesgos para el feto. Es por
este motivo que desde hace unos años se ha desarrollado el método de cribado
bioquímico, basado en técnicas analíticas en sangre materna que són
absolutamente inocuas, y que es aplicable a todas las mujeres de edad inferior a 38
años. Las técnica invasivas se reservan para aplicarlas directamente solo a las
embarazadas de edad igual o superior a los 38 años, o bien a las que el cribaje
bioquímico haya mostrado un cálculo de riesgo elevado, y también cuando exista
algún otro factor de riesgo (ver apartado 5.3.2.2., Capítulo I).

4.2. Asesoramiento sobre embarazo y maternidad/paternidad

Este apartado incluye todas las actividades informativas/educativas que se dan en la


embarazada y a su pareja relativas a los cambios que experimenta o puede
experimentar la mujer a lo largo de su embarazo.

4.2.1. Cambios anatómicos y funcionales de la mujer durante el embarazo

Durante el embarazo se producen una serie de cambio físicos en el cuerpo de la


mujer, que se relacionan con la presencia de fetos. Algunos de estos cambios son
solo de adaptación a la nueva situación del cuerpo, y otras pueden producir
molestias más o menos duraderas.

Es conveniente explicar a la gestante quienes son estas modificaciones y como,


cuando, y por qué se producen, a fin que no le causen ningún tipo de preocupación.

Primer trimestre Segundo trimestre Tercer trimestre


Ausencia de la menstruación Náuseas y asténia, en disminución Edemas maleolares
Náuseas y vómitos Pirosi Eritema palmar
Gingivitis Aumento de la altura uterina Hipotensión postural
Mareo y síncope Inicio de los movimientos fetales Palpitaciones
Cambios mamarios Incremento de peso Insomnio
Fatiga, sonmolencia y astenia Estreñimiento Leucorrea
Polaciuria Hemorroides Polaciuria
Cefaleas Varices Dispnea
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Cambios mamarios Rampas


Caída del cabello Dolor lumbar y pélvico
Aparición de algunas estrías Insensibilidad y parestesias a los
Pigmentación brazos
Congestión nasal Presión abdominal
Cefaleas
Contracciones uterinas fisiológicas

Tan importante es que la mujer conozca cuales son los cambios y modificaciones
que se producen durante el embarazo como que sepa que puede hacer en cada
caso. Por este motivo se ha considerado importante describir en que consisten y
explicar como se pueden mejorar.

Todos los cambios, modificaciones, signos y síntomas, etc., que se producen


durante el embarazo los hemos nombrado interferencias, ya que consideramos que
interfieren durante este periodo sobre determinados sistemas funcionales.
Para facilitar la actividad informativa/educativa se han elaborado unas tablas en las
cuales hemos agrupado las interferencias por sistemas. De cada una de estas
interferencias se han hecho una descripción, se ha indicado la causa, y se ha
explicado como se pueden mejorar.

Los grupos que se han definido están relacionados con:


• el sistema digestivo (Tabla 1)
• el sistema cardiovascular (Tabla 2)
• el sistema dérmico (Tabla 3)
• el sistema urogenital (Tabla 4)
• la actividad (Tabla 5)
• el sistema respiratorio (Tabla 6)
• el sistema musculoesquelético (Tabla 7)
• el sistema neurológico (Tabla 8)
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Tabla 1. Interferencias en el sistema digestivo


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Interferencias Causas Como se puede mejorar


Nauseas y vómitos - Hormonales y emocionales - Tomando algún alimento antes de levantarse y
- Disminución de la motilidad gástrica estando estirada hasta que desaparezca la
sensación de nauseas
- Bebiendo líquido entre las comidas y no durante
las comidas
- Evitando grasas o comidas difíciles de digerir
- Hacer 5/6 comidas al día, suaves y poco
abundantes
- Evitando olores fuertes y desagradables
- Mantener una buena postura corporal
- Si persisten los vómitos e impiden la hidratación y
la alimentación oral, será necesaria la
hospitalización
Gingivitis - Cambio del pH salival, turgencia de la encía, que - Manteniendo una buena y utilizando cepillos
produce sangrados suaves
- Aumento de los estrógenos - Evitar traumatismos e infecciones
- Enfermedad dental persistente - Siguiendo una dieta equilibrada con cantidades
adecuadas de vegetales y de fruta fresca

Pirosis - Disminución de la motolidad gástrica - Haciendo 5/6 comidas al día suaves y poco
abundantes
- Evitando grasas y fritos
- Evitando las bebidas gaseosas y las alcohólicas,
el café y el tabaco
- No estirándose después de comer, reposando
semi-sentada
- Cenando dos horas antes de ir a dormir
- Toando algun antiácido
Estreñimiento - Hormonales: aumento de la reabsorción del agua - Siguiendo una dieta rica en fibra: cereales, fruta y
y del sodio por la mucosa del colon vegetales frescos
- Compresión del sigmoide y del recto por el útero - Aumentando la ingesta de agua y tomando un
- Ingesta de hierro y calcio vaso de agua en ayunas
- Haciendo ejercicio moderado
- Manteniendo un horario regular de evacuación
intestinal
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Interferencias Causas Como se pueden mejorar


Mareo y síncope • Hormonales: hipotensión postural • Haciendo ejercicio moderado, respiraciones profundas, movimientos de las extremidades
• Estasi venosa en las extremidades inferiores inferiores
• Evitando cambios súbitos de posición
• Evitando lugares con aglomeraciones
• Manteniendo un ambiente fresco
• Evitando periodos largos sin tomar alimento
Varios • Presión del útero, que dificulta la circulación de retorno • Descansando en decúbito lateral izquierdo
• Predisposión familiar • Descansando con las piernas levantadas
• Embarazos gemelares y fetos grandes • Haciendo actividad física: ejercicios de flexión, extensión y rotación de los tobillos, y
• Trabajo en bipedestación paseando diariamente
• Haciendo masajes desde los pies a las caderas
• Favoreciendo el retorno venoso mediante el uso de medías elásticas (es necesario
ponérselas al levantarse)
• Evitando la bipedestación durante mucho rato
• Evitando estar levantada mucho tiempo y no cruzar las piernas
Hemorroides • Comprensión del drenaje venoso para el útero • Evacuando diariamente
• Estreñimiento, que favorecen la aparición • Tomando una alimentación rica en fibra y evitar las especias y bebidas alcohólicas
• Descansando en decúbito lateral izquierdo
• Permaneciendo diariamente 10-15 minutos en posición antihemorroidal (adorar a Alá),
para reducir la presión en las venas del recto
• Efectuando higiene local, baños con agua fría y estando sentada en asientos blandos
• Aplicando cremas locales con antiinflamatorios y anestésicos
Edemas maleolares • Dificultad del retorno venoso a causa de comprensión del útero • Descansando en decúbito lateral izquierdo
• Retención de líquidos • Descansando con la piernas levantadas
• Es normal siempre que no se acompañe de proteinúria i TA • Evitando la bipedestación y estándo sentada durante ratos largos
aumentada • Evitando la compresión de las extremidades
• Evaluando si hay edema facial o de manos
Eritema palmar • Predisposición familiar • No existen medidas preventivas
• Aumento de estrogenos • Desaparecen espontáneamente después del parto

Hipotensión supina • Comprensión de la vena cava por el útero en posición de decúbito • Evitando el decúbito supino y adoptando posición de decúbito lateral izquierdo con las
supino piernas ligeramente flexionadas
Hipotensión postural • Vasodilatación periférica del embarazo • Levantándose lentamente
• Evitando ambientes con aglomeraciones
• Evitando la bipedestación durante mucho tiempo
Palpitaciones • Adaptación cardíaca al aumento del volumen circulante • Tranquilizando a la mujer explicándole que es un proceso normal
• Pueden aparecer al cambiar de posición en la cama y cuando se • Recomendándole movimientos suaves
practica ejercicio físico • Remitiendo a la mujer al cardiólogo si existen síntomas de descompensación cardíaca
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Tabla 3. Interferencias en el sistema dérmico

Interferencias Causas Como se pueden mejorar


Cambios mamarios • Fisiológicas • Utilizando tejidos suaves
• Aumento del volumen de las mamas • Utilizando sujetadores adecuados
• Aumento de la sensibilidad en los mugrones
• Oscurecimiento de los mugrones
• Aparición de calostro

Caida del cabello • Deconocidas • No hay prevención ni tratamiento, es un trastorno transitorio


• Se puede lavar el cabello siempre que se desee
• Evitando el uso de condicionantes, permanentes o tintes y
evitando secarse el pelo con secador eléctrico
Estrias • Mecánicas: Aumento del volumen del • Aplicando cremas antiestrias/hidratantes
abdómen y de las mamas
• Hormonales
Pigmentación (cloasma • Estimulación de los melanócitos por la • Utilizando cremas de protección solar
gravídico) hormona melanocitoestimulante -MSH- • Informando que desaparecen después del parto

Tabla 4. Interferencias en el sistema urogenital


Interferencias Causas Como se pueden mejorar
Polaciuria • Compresión de la bufeta urinaria por • Informando de que se trata de un estado de
el aumento de volumen del útero normalidad en el embarazo
• Descartando infección, si se considera oportuno

Leucorrea • Aumento del nivel de estrógenos • Efectuando higiene díaria


• Aumento de la vascularización • Utilizando ropa íntima de algodón, no protectores
íntimos (salva slips) sintéticos
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GESTACIONAL

• Durmiendo sin ropa interior


• No haciendo duchas vaginales ni utilizando
tampones
• Haciendo un cultivo de flujo si aparece picor o
cambios de olor o color

Tabla 5. Interferencias en la actividad


Interferencias Causas Como se pueden mejorar
Cansancio, somnolencia y astenia • Aumento del requerimiento metabólico • Informando de que no se trata de un estado de enfermedad
• Aconsejando de que se disminuya la actividad física
• Reposando después de las comidas y haciendo descansos
durante la jornada
• Tomando una alimentación adecuada
Insomnio • Ansiedad, movimientos fetales, • Tranquilizando a la gestante
polaciuria y rampas musculares • Haciendo ejercicios de relajación
• Tomando un vaso de leche caliente antes de ir a dormir

Presión abdominal • Aumento de la presión del útero de la • Haciendo reposo, relajación y adoptando una buena
gestante en bipedestación o postura corporal
deambulando • Levantándose lentamente
• Haciendo presión con los brazos en le fondo uterino

Tabla 6. Interferencias en el sistema respiratorio


Interferencias Causas Como se pueden mejorar
Congestión nasal • Congestión vascular de la mucosa nasal • No hay medidas preventivas
• Haciendo irrigaciones nasales con suero fisiológico
• No utilizando antihestaminicos/descongestionantes
Dispnea • Compresión del feto hacia los pulmones • Informando que es normal en el embarazo
• Adoptando una postura corporal correcta y moderando el
ejercicio
• Durmiendo con más cojines
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• Evitando llenar el estómago excesivamente y evitando el


tabaco

Tabla 7. Interferencias en el sistema musculoesquelético


Interferencias Causas Como se puede mejorar
Rampas • Aumento del fósforo en sangre y bajo nivel de • Reduciendo la ingesta de fostafo (leche y suplementos
calcio disusible al suero de fosfato cálcico) y aumentar la de calcio
• Insuficiencia de la circulación periférica (suplementos de calcio sin fósforo)
• Compresión de los nervios de las • Haciendo un estiramiento suave y pasivo del miembro
extremidades inferiores para el útero afectado
• Fatiga y/o falta de ejercicio • Evitando zapatos de tacón
Dolor lumbar y pélvico • Cambios en la incurvación de la columna • Utilizando calzado cómodo de tacón medio, evitando
vertebral (lordosis lumbar) para compensar el el tacón alto
peso y mantener el equilibrio • Utilizando asientos cómodos con cojines en la región
• Relajación de las articulaciones pélvicas lumbar
• Aprendiendo a agacharse y levantarse doblando las
rodillas
• Aprendiendo la forma de levantar pesos del suelo,
evitando la flexión de la columna vertebral y
flexionando las rodillas y las caderas
• Descansando en cama dura y aplicando calor local
• Haciendo ejercicios para fortalecer los músculos
paravertebrales y utilizando una faja abdominal
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GESTACIONAL

Tabla 7. Interferencias en el sistema musculoesquelético


Interferencias Causas Como se puede mejorar
Cefaleas • Muy diversos: tensión emocional, problemas • Evaluando para establecer el diagnóstico etiológico
visuales, etc.
Insensibilidad y • Tracción del plexo branquial a causa de la • Haciendo ejercicios para fortalecer los músculos de los
paréntesis en los brazos caída de hombros hombros
• Utilizando unos sujetadores adecuados
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GESTACIONAL

4.2.2.
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Cambios psicoemocionales de la mujer durante el embarazo

Se comentará la tendencia de las embarazadas a partir pequeños cambios


emocionales y pequeñas alteraciones del comportamiento y de la relación, hechos
que también es interesante que conozcan las personas más cercanas a la gestante.
Los cambios psicológicos durante el embarazo son una consecuencia directa del
crecimiento del niño dentro de la mujer, de los cambios fisiológicos que el embarazo
provoca y de la responsabilidad que supone la perspectiva del nuevo miembro de la
familia. La mujer experimenta cambios de personalidad con sentimientos de
ambivalencia, síntomas de angustia, hipersensibilidad, aceptación de la gestación y
miedo a perder el hijo.

La información dirigida por el equipo sanitario puede actuar como a psicoterapia


para disminuir la angustia. En este caso el curso de educación materna actúa como
terapia de grupo.

Situación psicológica de la mujer embarazada

La situación psicológica de la mujer durante el embarazo depende básicamente de


dos factores:

• La estructura de su personalidad antes del embarazo, el cual incidirá muy


directamente cuando la mujer sea excesivamente frágil, y puede desequilibrarla,
dando lugar a la aparición de cuadros patológicos.
• La evolución física del embarazo, ya que cuando evoluciona con cualquier
incidencia o dificultad que repercute sobre el feto o sobre la mujer misma la
obliga a una sobrecarga emocional que puede afectar su equilibrio psíquico.

Cambios psicológicos normales en la mujer embarazada

La necesidad de adaptación a los cambios físicos en su cuerpo, por un lado y la


preparación emocional para el próximo nacimiento de su hijo, por otro lado, obligan a
la mujer a hacer un trabajo emocional durante la gestación. Esto comporta diversos
cambios transitorios de personalidad:

• Más fragilidad emocional que hace tenga menos capacidad de respuesta ante las
dificultades externas o internas generadoras de ansiedad.

• Estados de humor cambiantes que pueden ir desde momentos depresivos (de


sentirse poco capaces, de miedo ante el futuro) en momentos de euforia
(sensación de poder con todo). Esto es, en parte, reflejo de la ambivalencia que
puede sentir respecto al nacimiento cercano: dudas respecto a su capacidad
como madre, miedo antes la experiencia del parto y ante la posibilidad de tener
un hijo con alguna tara, pero a la vez deseo del hijo, satisfacción esperanza de
que todo irá bien. Todo junto aumenta la sensibilidad, especialmente ante
cualquier noticia que tenga que ver con bebes, embarazos, partos, niños, etc.

• Más independencia de las personas importantes para ella afectivamente,


especialmente de la pareja, de la madre, el/la obstetra y la comadrona (cualquier
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comentario por parte de alguno de estos profesionales puede ser valorado como
una señal de que algo no evoluciona lo suficientemente bien y provocar una gran
preocupación); necesidad de ser reafirmada en su calidad de persona y también
de futura madre; y, en menor grado, dependencia también de amigas y familiares
que ya sean madres, y que le pueden transmitir sus experiencias.

• Menos interés para todo aquello que pasa a su alrededor. Si no tiene relación
directa con su estado, la mujer se muestra abstraída, cerrada en si misma.

Durante el embarazo la percepción del feto como ser real cambia y se hace más
presente a partir del momento en que la mujer nota sus movimientos. Por esto, a lo
largo de la gestación la mujer irá oyendo cada vez más el embarazo como cierto y
real, hecho que agudizará y acelerará los mecanismos psicológicos de adaptación.

Por otra parte, la situación social de la mujer: la pareja, la relación con su familia
(madre) y la situación económica le harán más fácil la adaptación al embarazo o al
revés.

De la misma manera, las técnicas de control de la gestación (amniocentesis y


ecografías y otras pruebas), por un lado, la tranquilizan, ya que le dan la seguridad
de descartar posibles patologías, pero, por otro lado, cargan a la mujer de ansiedad
por el hecho de que puedan perjudicar al feto de alguna forma. Así mismo, el tiempo
de espera de los resultados, en el caso de la amniocentesis, es un periodo de
mucha ansiedad y sufrimiento. Por todo ello y a causa de la situación ya comentada
de más sensibilidad y dependencia emocional, la forma como el profesional explica
lo que observa la ecografía tiene mucha importancia, ya que es la primera imagen
que la futura madre ve de su hijo, y cualquier comentario sobre él puede influir en las
fantasías de la madre y puede interferir en las relaciones futuras.

4.2.3. Educación materna. Actividad grupal

Se trata de un programa educativo para la mujer/pareja que incluye información y


entrenamiento para el proceso de gestación, el parto y el puerperio.

Es necesario informar a la mujer y su pareja de los beneficios que comporta para la


madre y para el hijo, hacer el curso de educación materna. Esta información deberá
darse en el segundo trimestre de la gestación, para que la mujer se pueda organizar
para asistir.

Muchas veces las mujeres embarazadas no realizan esta actividad par falta de
información y otras por falta de tiempo, a causa de su carga de trabajo (actividad
laboral, actividad domestica, los otros hijos, etc.).

El profesional sanitario ha de informar sobre los beneficios que aporta esta actividad:
buenos hábitos de salud, control de la tensión nerviosa, reducción de la ansiedad,
control de la tensión nerviosa, reducción de la ansiedad, refuerzo de las relaciones
familiares para tener dominio de la situación, incremento de la autoestima y la
satisfacción, alimentación adecuada del niño y adaptación suave en el postparto.
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Todo junto con el propósito de incrementar el sentimiento de confianza en la mujer a


medida que se acerca el nacimiento.

Es importante que la mujer gestante conozca cual es el contenido del curso. Por lo
tanto, deberá informarle que el programa de educación materna incluye dos
vertientes: por un lado se proporciona la información/educación sanitaria adecuada,
y por otro lado se realiza el entrenamiento psicofísico. Estos dos aspectos se hacen
conjuntamente; cada uno de los temas puede desarrollar en una o más sesiones, y,
a corte de orientación, el contenido se estructura de la forma siguiente:

PRIMERA PARTE. Información/Educación sanitaria

Introducción y objetivos. Presentación del curso

• Presentación de los componentes del grupo (nombre, edad, paridad,


expectativas del curso, miedos, angustias)

• Presentación del curso, en donde se explican los objetivos, las actividades que
se desarrollan, la estructura y la duración, la necesidad de complementar de la
actividad en casa y la implicación de la pareja en todo el proceso.

• Relleno de la ficha de educación materna.

Fisiología reproductiva y desarrollo del feto


• Ciclo genital
• Fecundación
• Desarrollo del feto (fase ovular, periodo embrionario y periodo fetal)

Embarazo
• Diagnóstico de embarazo, signos y síntomas: amenorrea, cambios mamarios,
nauseas matinales, micción frecuente, cansancio, prueba positiva del embarazo y
ecografía.
• Cambios físicos, psíquicos y sociales en el embarazo
• Higiene en el embarazo
• Alimentación y embarazo
• Sexualidad y embarazo
• Molestias habituales en el embarazo
• Contracciones uterinas y movimientos fetales
• Signos de peligro

Parto
• Anatomía del canal del parto: perineo, suelo pelviano, pelvis ósea
• Trabajo de parto y parto: preparto, dilatación, expulsión y desligamiento
• Tipo de parto
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• Tipo de analgesia y anestesia


• Reconocimiento de una contracción
• Diferencia entre contracción/dolor/sufrimiento
• Ida al hospital: requisitos de ingreso
• Factores de ayuda que podemos utilizar según las sensaciones
• Papel del padre

Puerperio
• Puerperio inmediato, precoz y tardío: aspectos físicos y psicológicos
• Atención al recién nacido: características del recién nacido, primeras atenciones
el hospital, curas generales del recién nacido, aspectos a tener en cuenta en el
domicilio, atenciones higiénicas: baño, cambio de pañales, ropa, etc.
• Lactancia del recién nacido: tipo
• Promoción de la lactancia materna

Planificación familiar
• Educación sexual
• Higiene
• Actividades preventivas
• Métodos anticonceptivos: naturales, barrera, DIU, hormonales y definidos

*Tema optativo, que dependerá de si esta información se puede dar o no después


del parto, ya que la gestante durante el embarazo está más motivada para conocer
todo lo que se refiere al embarazo y el parto.

SEGUNDA PARTE. Entreno psicofísico

Preparación física (en cada sesión)

• Ejercicios de gimnasia específicos para compensar las modificaciones que el


embarazo produce en el cuerpo de la mujer

• Preparar determinados grupos musculares para el parto y para la lactancia



• Ejercicios: circulatorios, desbloqueo de la articulación coxofemoral, pectorales,
perineo, Kegel, columna vertebral, corrección estática postural y abdominales.

Entreno respiratorio (en cada sesión)


• Respiración torácica
• Respiración abdominal
• Aprendizaje de las respiraciones más adecuadas para el parto: lentas y
superficiales
• Aprendizaje de la técnica de los espoderamientos
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Técnicas de relajación (en cada sesión)


• Aprendizaje de las técnicas de relajación adecuadas para el embarazo: vivir las
sensaciones de relajación, relacionar la respiración con la relajación y aprender
una técnica para mejorar el estado físico y emocional.
• Aprendizaje de la técnica de relajación para las contracciones en el periodo de
dilatación. Coordinación de la respiración.

También se deberá informar a la gestante sobre la pauta de asistencia al curso de


educación materna, que consiste en la realización de 10-12 sesiones en total, de 2
horas de duración cada una de ellas, una vez a la semana. Este programa se inicia a
partir del 5º-6º mes de gestación.

4.2.4. Lactancia materna

Aunque consideramos que el apartado sobre la lactancia materna deberá formar


parte de un protocolo sobre el parto y el puerperio, creemos que por la importancia
que tiene la promoción de la lactancia materna durante el embarazo es necesario
dedicarle un espacio.

Como es conocido por todos los profesionales sanitarios y la evidencia científica ha


demostrado, la lactancia materna proporciona de forma inigualable la alimentación
ideal para el correcto crecimiento y desarrollo de los bebes y tiene una especial
influencia biológica y emocional en la salud de la madre y el hijo.

La lactancia materna supone indudables ventajas para el recién nacido:

• Las características de la leche materna (composición en proteínas, grasas, sales


minerales) son las idóneas para la alimentación del recién nacido
• La leche materna proporciona al recién nacido defensas contra las infecciones
• El bebe toma la alimentación que necesita (ni demasiado ni insuficiente)
• La lactancia materna supone un intercambio psicológico y un enriquecimiento de
la madre y del bebe.

Fase prenatal. Promoción de la lactancia materna


Todas las mujeres han de tener acceso a la información correcta sobre las ventajas
de la lactancia materna. La decisión última corresponde a la madre, que en la última
etapa del embarazo, y después de estar informada, decidirá que tipo de lactancia
dará a su hijo.

Se ha de preguntar a la mujer si ha reflexionado sobre el tema y es necesario


reforzar los adelantos de la lactancia materna.

Se han de averiguar experiencias anteriores, por ejemplo fracaso de la lactancia en


un hijo anterior: por grietas, problemas laborales, etc.

Puede ser importante hacer una valoración general de los pechos, sobre todo para
eliminar dudas cuando a la anatomía del pezón, e informar de la poca importancia
que tiene su ausencia y que no es necesario ningún tipo de preparación especial
para conseguir una mejor lactancia. El recién nacido es capaz de hacer salir los
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pezones para lactarse y, de otro lado, una postura correcta evita cualquier lesión. La
higiene normal diaria es suficiente y no son necesarias cremas ni lociones
específicas.

Durante el tercer trimestre del embarazo, individualmente o dentro de los grupos de


educación materna, es importante que la mujer reciba la información sobre:

• Fisiología de la lactancia
• Inicio de la lactancia materna
• Duración y frecuencia de las mamadas: lactancia a demanda
• Posición correcta para la lactancia
• Prevención de las posibles complicaciones de las mamas en el periodo postnatal
• Fármacos y lactancia
• Anticoncepción y lactancia

Fisiología de la lactancia

Los profesionales darán información sobre esta cuestión teniendo en cuenta los
apartados siguientes:

• Influencia hormonal
• Modificación de las mamas
• Secreción láctea: reflejo de eyección y reflejo de succión; composición de la
leche y mantenimiento de la lactancia.

Inicio de la lactancia
Consejo y apoyo en la primera toma

Están lo suficiente documentados los beneficios de la lactancia y del contacto precoz


en la primera hora de vida del bebe.

Si la primera toma es satisfactoria, esto influenciará de forma muy positiva a lo largo


de toda la lactancia, favoreciendo el vínculo afectivo entre la madre y el hijo, tan
importante para el futuro de esta relación y, en definitiva, para la salud del bebe.

Por lo tanto, es muy importante explicar a la madre:

• Que pueda tardar varias horas a tener la subida de la leche, pero que esto no es
ningún inconveniente para que vaya poniéndose el bebe al pecho.
• La composición del calostro y de la leche madura que permita que el recién
nacido este bien alimentado, siempre que tenga un acceso ilimitado al pecho, y
que será el mismo bebe quien irá espaciando las tomas en días sucesivos.
• La importancia de una postura correcta para la lactancia, porque de ello
dependerá que no aparezcan grietas en los pezones y que el bebe haga una
toma suficiente. También será necesario explicarle el mecanismo de extracción
de la leche y el ritmo de succión del bebe, que deberá estimular continuamente,
porque hará pausas durante la mamada.
• La composición de la leche que recibirá el bebe durante la mamada, y el cambio
gradual desde la leche inicial a la leche final más abundante en grasas. Esto le
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ayudará a comprender que no ha de restringir la duración de las tomas y que no


importa que solamente tome un pecho en cada toma.
• Que, alrededor de las 2-6 semanas y a los 3 meses de vida, hay periodos en que
el bebe pueda incrementar la frecuencia de las tomas durante 2 o 3 días para
adecuar el suministro de leche a sus necesidades y que después la situación se
establezca otra vez.

Duración y frecuencia de las mamadas

Lactancia a demanda

Las evidencias acumuladas demuestran que los bebes que regulan las tomas por si
mismos ganan más peso rápidamente.

La lactancia a demanda resulta más fisiológica y provechosa y consiste en alimentar


el bebe siempre que lo desee y durante el tiempo que el quiera. Esta lactancia será
beneficiosa tanto por el bebe, que reducirá la incidencia de ictericia y mejorará el
ritmo de incremento de peso, como para la madre, que establecerá una lactancia
satisfactoria, porque no deberá esperar un tiempo determinado entre las tomas y
también porque podrá prevenir la ingurgitación del pecho.

Posición correcta para la lactancia

Actualmente sabemos que el éxito de la lactancia materna depende en gran medida


de una buena técnica para la lactancia.

Posición de la madre

La madre puede optar por diversas posiciones. Las más usuales son:
• Sentada en posición de cuna (Figura 1)
• Sentada en posición de rugbi (Figura 2)
• Estirada, colocados ambos en la misma dirección (figuras 3 y 4)
• Estirada, colocados ambos en dirección contraria (figura 5)
• Sentada o estirada con el recién nacido apoyado sobre cojines

La madre ha de probar diferentes posiciones ya que a lo largo de la lactancia le


pueden ser útiles, en función de su estado físico.

Posición del bebe

Para conseguir una buena posición de todo el cuerpo del bebe ha de estar en
contacto con el de la madre y su nariz ha de estar al mismo nivel que el mugrón.
Esto lo conseguimos poniendo el bebe en posición totalmente horizontal respecto a
los pechos de la madre (figuras 6 y 7).
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Prevención de las posibles complicaciones de las mamas en el periodo


postnatal

Grietas en el pezón
No se han de lavar los pechos antes de cada mamada, ya que esto provoca un
aumento de la incidencia de grietas en los pezones. Tampoco no se deben utilizar
cremas ni ungüentos para prevenir la aparición de grietas en los mugrones. El único
medio para intentar evitar las grietas es asegurarse que el bebe esté correctamente
colocado cuando mama.

Ingurgitación mamaria
Alimentar al bebe por la noche previene la ingurgitación del pecho de la madre.

Actualmente está demostrado que la descarga de prolactina, en respuesta a las


tomas nocturnas, es mas grande que durante el día; de aquí su importancia para el
mantenimiento de la lactancia.

En caso de que se inicie una ingurgitación mamaria, será necesario realizar vaciado
mamario, aplicación de calor local, administración de analgésicos y sujeción correcta
de las mamas.

Mastitis puerperal
Es una complicación poco frecuente del puerperio. Así mismo, la lactancia no debe
interrumpirse, excepto que la mastitis evolucione hacia un absceso, tanto si es
bilateral como si tienen una gran extensión. Es muy importante vaciar el pecho. Las
medidas locales que es necesario tomar son: aplicación de frío o calor local seco
(estera eléctrica), i medicación con anti-inflamatorios y antibióticos, si se considera
necesario.

Fármacos y lactancia
Se ha de tener consciencia de la importancia y de los beneficios de la leche materna
a la hora de indicar un tratamiento farmacológico a las madre, y estaría bien tener
presentes tres objetivos:

• Tratar la patología materna que motiva el uso de fármacos


• Reducir al mínimo la exposición del recién nacido al fármaco
• No suspender la lactancia materna

Los consejos que es necesario seguir a fin de limitar el consumo de fármacos son:

• Cuestionarse la necesidad del tratamiento


• Postponer el tratamiento siempre que sea posible
• Considerar fármacos alternativos
• Escoger una vía de administración alternativa: aplicación local, inhalaciones, etc.
• Evitar la lactancia en los momentos de concentración máxima de los fármacos, o
dar el pecho y después tomar la medicación.
• Utilizar fármacos que habitualmente se puedan administrar al bebe
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Anticoncepción y lactancia

La lactancia materna constituye por ella misma un método anticonceptivo, basado en


la supresión de la evolución de los cambios hormonales provocados por la succión
del pezón. La eficacia de la lactancia materna como medio anticonceptivo se ha
estimado en un 98% durante los 6 primeros meses, siempre que la mujer siga con
amenorrea y el bebe se nutra solo de leche materna. Es necesario considerar, pero,
que a partir de los 3 meses y en plena lactancia entre un 40 y un 75% de mujeres
tienen la menstruación, y que esta puede ir precedida de una ovulación. La gran
variabilidad individual respecto a la ovulación hace que consideren la lactancia como
un método poco eficaz a partir del tercer mes del postparto, por lo cual es
conveniente indicar métodos anticonceptivos más fiables.

Los métodos de barrera, por su inocuidad y facilidad de uso, son los más indicados
durante la lactancia.

Los dispositivos intrauterinos pueden utilizarse con las mismas indicaciones y


contraindicaciones que en la población general, aproximadamente a partir de la
sexta semana de un post-parto sin problemas; en algunos casos especiales se
pueden colocar antes pero las tasas de expulsión son más altas.

Los anticonceptivos orales de dosis baja y las Gestantes de tercera generación,


según la Academia Americana de pediatra, son compatibles con la lactancia
materna, ya que no impiden ni modifican la producción de leche. Es necesario
considerar que si se utilizan antes de la sexta semana del post-parto pueden
favorecer la retirada o la disminución del volumen de la leche en algunas mujeres
con dificultades para la lactancia. Por este motivo, se aconseja iniciar la
contracepción oral cuando la lactancia materna esté bien instaurada. Los preparados
de progesterona sola (mini píldora, inyectables o implantes) no tienen una influencia
notable sobre la lactancia.

4.2.5. Luto ante la muerte fetal o neonatal

El embarazo, en la mayoría de casos, tiene una evolución sin complicaciones. Es


necesario, pero, no olvidar que puede acabar bruscamente con un aborto o bien con
la muerte fetal. Así mismo, se ha de tener presente la posibilidad de la muerte del
recién nacido en el momento del nacimiento o poco después.

La reacción ante el aborto o ante la muerte fetal tiene muchos elementos comunes
con la reacción ante cualquier otra muerte, pero las circunstancias que envuelven un
embarazo hace que esta reacción presente unas características diferenciales que
conviene tener en cuenta.

En general la muerte es un factor de choque brutal, pero si sucede durante el


embarazo, que es la máxima expresión de apuesta por la vida, el impacto puede ser
aun superior.

Esta situación se puede ver agravada por la actitud de los profesionales sanitarios
que atienden las personas afectadas, cuando estos profesionales reaccionan con
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sentimientos de fracaso y obvian la atención necesaria al luto. El desconocimiento


de la importancia de acompañar en el luto lleva a una morbilidad posterior más
grande en la familia afectada.

Así mismo, se observan diferencias según el momento y el motivo de pérdida. El


problema no es igual en situaciones previsibles que en situaciones inesperadas, a
pesar de que en todos los casos el luto y sus reacciones existen.

Por todos estos motivos se ha creído oportuno introducir en este protocolo algunas
observaciones y orientaciones para facilitar el acompañamiento del duelo.

Situaciones más frecuentes en que nos podemos encontrar


La disminución de la mortalidad perinatal ha sido notable en los últimos años. Ahora
bien, esta disminución, positiva en si misma, hace que no estemos acostumbrados a
la vivencia frecuente de este hecho. Al mismo tiempo, la disminución del nombre de
hijos por pareja hace que el embarazo no sea tampoco un hecho habitual y
frecuente y, por lo tanto, que esté envuelto de expectativas altas de tener hijos
sanos.

En el transcurso de la gestación se pueden producir diversas situaciones que ponen


fin al embarazo, en algunos casos inesperadamente (muerte fetal o aborto
espontáneo), y en otras voluntariamente después de una valoración y decisión por
parte de la mujer (interrupción voluntaria del embarazo (IVE), en supósitos legales).

Reacciones más habituales que se suelen producir


El luto ha sido estudiado por diversos autores y se han descrito diversas fases.
Algunos siguen el modelo Kübler-Ross ante la muerte (negación, ira, pacto,
depresión y aceptación) y otros optan por las fases de Bowlby, uno de los máximos
estudiosos del tema. Las fases de Bowlby son:

• Ofuscamiento (como consecuencia de shock o incredulidad), interrumpido por


momentos de ira o tristeza intensa.
• Anhelo y búsqueda de la figura perdía, que puede durar tiempo. Los llantos y la
cólera son las reacciones más habituales en esta fase.
• Desorganización y desesperanza, ligado a dificultad para tener objetivos vitales.
• Reorganización, en la cual el luto se empieza a convertir en recuerdos afectivos.

Hay que tener claro, pero, que no hay procesos lineales y exactos en el luto y que
cada persona lo puede vivir de maneras diferentes. Por este motivo, describimos a
continuación, sin un orden cronológico, las reacciones más habituales que se
pueden producir a causa de estas pérdidas:

Shock inicial: puede expresarse como negación, incredulidad o sensación de que no


ha ocurrido. La negación puede ser más intensa en los abortos.

Rabia: puede dirigirse hacia el mensajero (el profesional sanitario), hacia Dios, hacia
la familia, etc.

Sentimiento de culpa: dirigido hacia uno mismo. En el embarazo este sentimiento


puede ser mucho más acentuado en pensar que no se ha hecho un seguimiento lo
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suficientemente correcto. Estos sentimientos se pueden centrar en cualquier hecho


cotidiano que haya estado el último antes del aborto. Es necesario vigilar estos
sentimientos cuando surgen en las IVE, ya que pueden ser mucho mas vivos aun.
En el caso de las IVE, el profesional ha de tener clara su forma de pensar y, si tiene
objeciones morales o éticas respecto al aborto realizado, es necesario que deje que
otro profesional acompañe la persona que ha tenido la pérdida.

Miedo: a la propia muerte y a la del resto de la gente que quiere. La muerte o la


pérdida hace que muchos pensamientos guardados muy dentro salgan a la
superficie. En el embarazo, es necesario tener en cuenta que el miedo se manifiesta
también como miedo al fracaso ante un nuevo embarazo y que es una continuación
de la reacción tenida en cuenta de la pérdida.

Tristeza: la falta de ilusión puede llevar a una disminución de la atención hacia uno
mismo e, incluso, hacia los otros hijos, si se tienen. Es un punto que los
profesionales han de valorar y tener en cuenta.

Depresión: debe entenderse que los rasgos depresivos iniciales acompañan


normalmente el luto. No se puede etiquetar de depresión los sentimientos reactivos
ante la pérdida. Es necesario valorar el problema como una depresión, si esta
situación se enquista.

Algunas orientaciones para el acompañamiento en el luto


Es fundamental el apoyo a la vivencia difícil de los padres, y muy especialmente de
la madre, que puede vivir más intensamente la pérdida ya que siente que “formaba
parte de ella. No hay normas sobre como se debe concretar el apoyo ni tampoco
sobre como ser un “experto” en estas situaciones, pero si que hay orientaciones que
pueden servir. Se presentan algunas de la básicas.

Como comunicar las malas noticias


Este es un paso que no siempre se hace, ya sea porque el profesional no ha
intervenido en el momento de la pérdida o sea porque se trata de una IVE. Pero
cuando se hace, es necesario tener en cuenta los siguientes puntos:

• Ser claros, pero adaptados a la información a un nivel que sea comprensible


para los padres.
• Dejar reaccionar y aceptar las reacciones ante la noticia. La intensidad de la
reacción puede variar según que se trate de un hecho esperado o no (embarazo
con problemas, amenaza de aborto, etc.). Las reacciones son muy variables
según el tipo de cultura al cual pertenece la persona, y conviene no sorprenderse
ante las reacciones propias de culturas diferentes de la del profesional sanitario.

• Dejar la puerta abierta para más explicaciones. Algunas personas pueden
reaccionar con silencio y sin demasiado componente reactivo. Por estas
personas especialmente, pero también para todo el mundo interesa dejar la
puerta abierta porque puedan volver cuando quieran.
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Como dar apoyo al duelo


• Dejar que expresen sus sentimientos
• Ayudar en las decisiones iniciales que sea necesario tomar (sobre todo en las
muertes neonatales). Contrariamente, es necesario intentar recomendar que no
se tomen decisiones precipitadas o que puedan posponerse. Un ejemplo: si la
pérdida es una malformación o defecto genético, los padres puede querer
apresurarse a tomar medidas anticonceptivas definitivas, sin reflexión ni estudio
previo.
• Comprender y permitir la manifestación específica del dolor (cultural, religiosa,
etc.), ofreciendo, si es necesario, los servicios de otras personas (curas, etc).
Hemos de prescindir de nuestra manera de ser y de pensar, y acompañar a los
padres en su trance. Si no nos es posible, por razones éticas, religiosas o de otro
tipo, hemos de intentar facilitar la asistencia de otro profesional.
• Desculpabilizar. Los sentimientos de culpa como ya hemos comentado antes,
pueden acentuarse más en las pérdidas durante el embarazo o en la muerte
neonatal.

Durante la gestación se insiste que se siguen conductas saludables. Esta insistencia


puede empeorar los sentimientos de culpa y fracaso si el embarazo no llega a
término. La orientación hacia conductas saludables ha de ser positiva y no
culpabilizadora, para prevenir reacciones excesivas de culpa en el luto.

En la decisión de abortar intervienen muchos factores y, aunque la causa del aborto


sea aceptada legalmente, es necesario que el proceso de decisión haya sido
tranquilo y del todo libre, al margen de nuestras convicciones. Un proceso de
decisión bien asimilado disminuye el riesgo de sentimientos de culpa demasiado
intensos después del aborto.

• Hacer entender la normalidad de las reacciones emocionales que viven (algunas


personas y culturas creen que es necesario “controlar” la manifestación externa
del dolor), siempre a partir de lo que nos digan. Nunca hemos de pretender
explicarles como se han de sentir.
• Ayudar a dar la información a otros hijos, si tienen.
• Respetar los silencios que se pueden producir en determinados momentos de la
consulta
• Dejar la puerta abierta

Cuando la muerte sea neonatal en una fase avanzada del embarazo y se produce
en los centros hospitalarios, es necesario prevenir diversas cuestiones, además de
las comentadas:

• La posibilidad de ver el cuerpo del hijo muerto, que puede ser una petición de los
padres y suele ser recomendable para hacer más fácil el luto. Conviene que haya
un espacio adecuado para hacerlo.
• La necesidad de espacios que permitan la intimidad para la comunicación de las
malas noticias y para la recepción de visitas, sin interferencias, si la madre está
ingresada.
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Los profesionales sanitarios han de hacer también un seguimiento que permita


detectar posibles dolores patológicos.

Como organizar la atención al luto

Los profesionales sanitarios han de tener en cuenta la atención al luto y, por lo tanto,
han de prevenir la organización y la formación que permita mejorar esta atención.

Los aspectos que es necesario considerar son:

• “Los organizativos” para facilitar la expresión del luto, incluyendo los espacios
adecuados para hacerlo.
• Los internos pueden dar apoyo a los profesionales que pueden también tener
una reacción de luto

Y después
Una vez pasada la vivencia más intensa del luto es posible que surja el deseo de un
nuevo embarazo, sobre todo si el aborto o la pérdida no era esperada. El profesional
ha de ofrecer información y hacer la valoración del riesgo de presentación de nuevos
problemas, si hay. Así mismo, ha de tener en cuenta que, si se produce un nuevo
embarazo, la mujer necesitará un apoyo más importante de tipo emocional, ya que la
angustia ante cualquier síntoma será superior.

4.3. Asesoramiento sobre promoción de hábitos saludables

Este apartado incluye todas aquellas actividades que hacen referencia a la


prevención de la salud de la mujer y la promoción de hábitos saludables, que
permitirán que el embarazo se desarrolle con la máxima normalidad.

4.3.1. Vacuna

4.3.1.1. Etapa pregestacional

Vacunaciones sistemáticas
El calendario de vacunaciones sistemáticas durante la infancia (Tabla 1) incluye tres
vacunas que tienen una gran trascendencia en la etapa pregestacional (rubéola,
hepatitis B y tétanos) en el sentido que es necesario garantizar que la immunización
producida por la administración de dichas vacunas todavía sea eficaz en esta etapa.
La finalidad es asegurar la protección de la mujer ante la posibilidad de infección por
los agentes causantes de la rubéola, la hepatitis B o el tétanos durante un futuro
embarazo, previniendo así las posibles repercusiones sobre el feto.

Tabla 1. Calendario de vacunaciones sistmáticas


EDADES VACUNAS
DPT Td* Triple vírica DT Poliomielitis Hepatitis B**
Difteria Tétanos Sarampión Difteria oral trivalente
Tétanos Toxoide diftérico, Rubéola Tétanos
Tos ferina tipo adulto Parotiditis
3 meses X X
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5 meses X X
7 meses X X
15 meses X
18 meses X X
4-6años X X
11 años X
12 años X
14-16 años (y X
cada 10 años)
* En caso de no disponer de vacuna Td es necesario utilizar la T
** Esta vacuna se ha de administrar en tres dosis: la segunda dosis 1 mes después
de la primera, y la tercera dosis 6 meses después

Dado que estas vacunas, hoy en día, tienen una eficacia muy alta, será muy
conveniente que durante la edad fértil de la mujer se hagan actuaciones sanitarias
rutinarias dirigidas a comprobar y confirmar sus antecedentes vacunales.

La importancia de estas situaciones durante la etapa pregestacional, viene dada por


las implicaciones patológicas que puede tener sobre el desarrollo del embrión/el feto,
y/o la patología que les puede afectar en caso que la mujer embarazada se infecte
durante el transcurso del embarazo.

En primer lugar es necesario que comprobemos la existencia de estos antecedentes


vacunales plasmados en documentado escrito (carnet de salud infantil, carnet
vacunal, certificado, etc.). Si la mujer presenta documentación escrita que acredite
una vacunación correcta la hemos de considerar como vacunada e inmunitariamente
protegida contra la infección en cuestión.

Si la mujer no presenta la justificación de la vacunación, por escrito, la opción ideal


seria realizar la serología correspondiente para comprobar su estado inmunitario
ante la rubéola, la hepatitis B o el tétanos; en su defecto, deberá proceder a la
vacunación o a la administración de dosis de recuerdo.

A mes a mes es necesario recordar la importancia de la vacuna antidiftérica, para


adultos de reciente incorporación en Cataluña.

4.3.1.2. Etapa gestacional. Inmunización activa y Pasiva

Le explicaremos a la embarazada que la prevención de una infección mediante la


inducción de una respuesta inmunitaria eficaz, es preferible al tratamiento de una
infección complementaria establecida.

La prevención de las enfermedades transmisibles se realiza mediante la


inmunización, que consiste en inducir un estado inmunitario equivalente al que se
encontraría en el huésped después de una infección natural (a excepción de la
infección tetánica), pero sin los peligros potenciales que supondría para el feto la
transmisión de la infección materna.

Esta inmunización se puede hacer de forma activa (administración de vacunas) o


pAsiva (administración de inmunoglobulinas).
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Normas a tener en cuenta para la vacunación durante el embarazo

El embarazo es un estado fisiológico que es necesario tener en cuenta a la hora de


administrar una vacuna, ya que hay un riesgo potencial de producir teratogenia en el
feto, sobre todo si la vacuna usada es de microorganismos vivos. A pesar de todo,
hasta el día de hoy, este riesgo es teórico porque no hay evidencias de
malformaciones congénitas fetales con posterioridad a la administración de una
vacuna, pero por razones medicolegales y éticas se aconseja adoptar criterios de
vacunación más restrictivos durante el embarazo.
En primer lugar se recomienda no vacunar durante el primer trimestre de la
gestación, y en edades gestacionales más avanzadas es necesario considerar estas
circunstancias donde el riesgo teórico de la vacuna está minimizado al compararlo
con lo que supondría una exposición intensa a un agente infeccioso que pudiera
comprometer la salud de la madre o del fetos.

Vacunas seguras durante el embarazo

En caso de viaje ver el apartado correspondiente.

Toxoide tetánico

Es la única vacuna recomendada en la actualidad por la Asociación Americana de


Obstetrícia y Ginecología, que aconseja la administración simultanea de toxoide
tetánico y diftérico indicada en:

• Mujeres que no han recibido la vacuna antitetánica o el estado inmunitario de las


cuales es desconocido.
• Cuando la mujer inmunizada con anterioridad no ha recibido dosis de recuerdo
en los últimos 5 años, no conviene repetirla ya que dosis excesivas de toxoide
tetánico pueden ocasionar una reacción d’Arthus y otros efectos inmunitarios
adversos.

Probablemente la experiencia más amplia de la vacunación en embarazadas sea


con la vacuna antitetánica porque el tétanos neonatal supuso en Europa un
problema sanitario de suficiente magnitud como para que ya se recomendara la
vacunación sistemática a todas las mujeres embarazadas desde el principio del uso
de la vacuna a nivel poblacional.

Una vez demostrada su inocuidad, la OMS aconseja la administración sistemática de


esta vacuna a toda mujer embarazada susceptible de sufrir el tétanus porque los
anticuerpos que producirá después de la vacunación serán transmitidos al feto y
este nacerá con anticuerpos específicos, el título de los cuales, aunque variables en
función de los que poseía su madre, será suficiente para prevenir la enfermedad.

Al mismo tiempo la madre se protege del improbable pero posible tétanus quirúrgico.
Así pues toda mujer embarazada susceptible, ha de administrarse la vacuna del
tétanos ya sea como una dosis de recuerdo o bien para iniciar, continuar o finalizar
una primovacunación. Si el parto sobreviniera antes de finalizar esta
primovacunación, las dosis que faltan se administraran con posterioridad.
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Toxoide diftérico

No hay evidencia que el toxoide diftérico (Td) sea teratógeno razón por la cual la
vacuna combinada tétanus – diftéria del adulto, puede también administrarse en la
mujer embarazada.

A pesar de todo, siempre es recomendable esperar al según trimestre para la


administración de la Td.

Antirubéola

En el caso de la rubéola, la vacuna se prepara a partir del virus vivos y por tanto no
puede administrarse a las mujeres embarazadas ni a las que puedan quedarse
durante los tres meses después de recibir la vacunación.

No obstante esto los centros de control de enfermedades transmisibles de los EUA


estudiaron 200 mujeres que recibieron la vacuna 3 meses antes o después de
quedarse embarazadas y tuvieron niños completamente normales. Por tanto la
vacunación de la rubéola durante el embarazo no debería ser ordinariamente una
razón para recomendar la interrupción del embarazo, aunque si una mujer
embarazada es vacunada o se queda embarazada dentro de los tres meses
posteriores de la vacunación, ha de ser informada del teórico riesgo de afectación
fetal (rubéola congénita), y de la legislación sobre el aborto legal.

Vacunaciones recomendadas durante el embarazo de riesgo

Antihepatítica tipo B (HB)

Es una vacuna recombidada que se obtiene a partir de cepas Saccharomyces


cerevisiae que llevan incorporado un gen responsable de sintetizar una proteína del
virus del hepatitis B responsable de producir la inmunidad. Su utilización está
indicada en:

• Mujeres con riesgo de contraer la enfermedad y que no estén infectadas por el


virus de la hepatitis B.

Hasta el momento actual, no se dispone de datos sobre la seguridad de la vacuna


del HB sobre el feto, pero probablemente sea muy elevada ya que el antígeno
vacuna no es un agente infeccioso. Es por este motivo, que esta vacuna no está
contraindicada en la embarazada. Si además se considera el pronóstico que puede
suponer una hepatitis crónica en el hijo, esta vacuna ha de ser indicada si una mujer
durante el embarazo está sometida al riesgo de adquirir la infección.

Antigripal

La vacuna antigripal está indicada en la mujer embarazada cuando el sufrimiento de


esta infección suponga la aparición de complicaciones que puedan afectar su salud
y la de su hijo, por ejemplo el caso que la embarazada tenga además alteraciones
cardiovasculares y pulmonares crónicas incluida la diabetes mellitus, disfunciones
renales, anemias inmunosupresión, asma, etc., y especialmente las que cursan de
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forma más severa y han requerido revisiones médicas o hospitalización durante el


año anterior.

Es conveniente administrar la vacuna después del primer trimestre para minimizar


cualquier riesgo de teratogenicidad. De todas formas, demorar la vacunación de las
mujeres embarazadas que tienen un riesgo elevado y que todavía estén en el 1r
trimestre del embarazo cuando empieza la temporada epidémica, no deseable.

Las mujeres con un alto riesgo de adquirir la enfermedad, han de ser vacunadas
preferentemente antes del embarazo.

Antipneumocóccica

La seguridad de los polisacáridos componentes de esta vacuna en mujeres


embarazadas no ha de estar evaluada. Actualmente esta vacuna no se recomienda
de forma rutinaria en la embarazada porque los efectos que pueda tener en el feto
no están suficientemente estudiados. Las mujeres con un alto riesgo de adquirir la
enfermedad han de ser vacunadas preferentemente antes del embarazo.

Vacunas para viajes internacionales que están contraindicadas durante la


gestación

La gestante que se tenga que vacunar ha de tener en cuenta que es mejor evitar la
vacunación durante los primeros meses del embarazo, dado el incremento del
riesgo de aborto al sufrir procesos febriles en esta fase. En general, podemos decir
que las vacunas con gérmenes vivos o atenuantes no se recomiendan durante el
embarazo. Estas vacunas son:

Virus

Antifiebre amarilla, antigripal, antisarampión, antiparotiditis, polio oral, antirubéola,


antivaricela.
Bacterias
Antifoidal, antituberculoso

Si el riesgo de fiebre amarilla es alto (mujer que viaja para trabajar en la selva
amazónica o en zonas de Africa Occidental), la vacuna se podría aplicar después del
primer trimestre y antes del último mes de embarazo, conociendo el riesgo que, en
caso de un parto prematuro, podría provocarse una infección en el recién nacido.

Una excepción la constituye la administración del virus de la poliomielitis como


refuerzo a una vacunación previa en la infancia. Es necesario recordar que el riesgo
de sufrir poliomielitis paralítica en el recién nacido, la madre del cual se ha infectado
de poliomielitis paralítica durante el primer año de vida.

El resto de las vacunaciones preparadas con virus vivos y bacterias vivas


atenuantes es mejor no administrarlas, teniendo en cuenta los riesgos que pueden
originar y la poca eficacia que presentan.
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Las vacunas con virus inactivados (rabia, polio inyectable) pueden administrarse
siempre, aunque en el caso de la rabia es mejor esperar al final del embarazo,
excepto si se ha producido un mordisco sospechosa de poder transmitir la
enfermedad, caso en que se ha de seguir la pauta de vacunaciones post-exposición.
La antitosferina no se administra a los adultos.

La anticolérica, atendida su poca eficacia y el escaso riesgo de la enfermedad, si se


siguen unas correctas medidas higiénicas, tampoco se dará a los adultos, por lo que,
a pesar de los peligros que supone el cólera en la mujer embarazada, no se debe
administrar.

La vacuna antitifoidal inactividad es mejor no administrarla, pero, en caso de riesgo


elevado, se puede dar de forma intrepidérmica para disminuir los efectos
secundarios.

Paludismo o malaria. En la embarazada, los métodos para evitar una infección


palúdica se han de basar en medidas antimosquitos, tanto físicas (ropa de colores
claros que cubre el máximo de superficie corporal, uso de mosquiteras) como
químicas (evitar los perfumes y colonias, uso de repelentes corporales y
ambientales).

El uso de medicamentos para la profilaxi antipalúdica se limita (en caso de


embarazo) a la cloroquina, las dosis son similares a las utilizadas en otros adultos
que escojan esta opción, y se determinen en función del peso de la embarazada,
teniendo que ajustarse a las variaciones que este parámetro observa a lo largo del
embarazo.

No se han de usar: mefloquinas, tetraciclinas, primaquinas ni sulfamidas +


pirimetaminas, por los efectos que puedan tener sobre el feto y/o la interrupción del
embarazo, y los efectos secundarios de algunos de estos medicamentos.

Las vacunas con bacterias inactivadas si que se pueden administrar.

Las vacunas contoxoidas (tétanos, diftéria), igual que las vacunas con polisacáridos
inactivadas (pneumococo, meningocócico, hepatitis B) si que se pueden administrar
a la embarazada.

4.3.2. Consejo alimentario y nutricional

4.3.2.1. Etapa gestacional

Importancia del consejo alimentario en este período


La salud de la mujer antes de la concepción influye de forma decisiva en la evolución
del embarazo. Es necesario revisar los hábitos de vida para potenciar los que
aumenten el capital de salud y para reducir o suprimir los hábitos insanos. El estado
nutricional de la mujer es uno de los factores más directamente relacionados con la
salud de la futura gestante y de sus hijos.
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La pareja con expectativas de concepción inmediata es muy receptiva a los consejos


de los profesionales de salud. Siempre, pero aun más en esta situación, es
aconsejable que la futura madre asuma un peso adecuado, reduce o suprime el
consumo de tabaco y bebidas alcohólicas y establezca una alimentación variada y
equilibrada, tal como se aconseja a la población adulta.

Por qué es necesario hacer el consejo alimentario?


La mayor parte de la población adoptará, probablemente, de forma espontánea una
alimentación suficiente para una concepción y un embarazo que lleve al nacimiento
de un niño de peso adecuado y aparentemente sano. No obstante, es necesario
tener presente que algunas mujeres se beneficiarán especialmente de consejos
alimentarios y nutricionales durante este período.

Cuales son las características de estas mujeres?


Las que tienen antecedentes de trastornos nutricionales (anemias, determinadas
carencias), las consumidoras habituales de vitaminas y minerales, las que toman
forma crónica algunos medicamentos que puedan interferir la absorción de
determinados nutrientes esenciales(anticonvulsivos, etc.), los que tienen problemas
para mantener un peso estable adecuado (índice de masa corporal fuera del rango
de normalidad), las mujeres que tienen hábitos alimentarios atípicos (vegetarianas
estrictas, alimentaciones disociadas, tendencias macrobióticas, etc.), y las
consumidoras habituales de substancias aditivas peligrosas para la salud de la mujer
y del hijo (tabaco, alcohol y otras drogas).

Fórmula para el cálculo del índice de masa corporal


Peso en kg./ (talla en cm)2 = IMC (*)

(*) Tampoco se puede calcular mediante el nomograma para el cálculo del índice de
masa corporal.

Valoración del índice de masa corporal


Constitución de la mujer Índice de masa corporal (IMC)
Delgada < 20
Normal ≥ 20, < 25
Sobrepeso ≥ 25, < 30
Obesa ≥ 30, < 40
Obesa mórbida ≥ 40

El consejo alimentario y nutricional previo a la concepción será de mucha utilidad


para prevenir trastornos que a menudo no tienen un tratamiento satisfactorio durante
el embarazo.

Cual es el consejo alimentario y nutricional adecuado?


A las mujeres en la etapa pregestacional, básicamente, se les ofrecerá las
recomendaciones y consejos que se refieren a una alimentación variada y
equilibrada. Esta alimentación asegurará la aportación necesaria de energía,
nutrientes y fibra. Los consejos fundamentales pueden resumirse en:
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Recomendaciones cualitativas:
• Hacer un buen reparto de las comidas a lo largo del día (de 3 a 5 comidas,
aproximadamente), intentando evitar las ingestas muy copiosas.
• Hacer un desayuno completo, antes de salir de casa
• Utilizar alimentos muy variados, dentro de cada grupo
• Hacer servir diversas técnicas culinarias (al horno, a la plancha, guisados,
hervidos, fritos, etc.).
• Procurar una aportación de verdura cruda, en forma de ensalada, cada día, para
garantizar una adecuada ingesta de vitaminas, minerales y fibra.
• Utilizar preferentemente el aceite de oliva, tanto por cocinar como para aliñar.
• Comer sentada en la mesa y con tranquilidad. Intentar comer a las mismas horas
y no saltarse nunca ninguna comida.
• Intentar no comer sola, pero sobretodo nunca con compañía no deseada, para
que el acto de comer no se convierta en un momento de tensión.
• Beber mucho agua a lo largo del día.

Recomendaciones cuantitativas:
Cantidades aproximadas de alimentos básicos diarios;
• 2 raciones de lácticos
• 2 raciones de carne o substitutos (pescado, huevos, legumbres).
• 3-6 raciones de féculas y farináceos
• 2 raciones de verduras y hortalizas
• 3-6 raciones de aceite

Consideremos una ración la cantidad habitual de este alimento que suele consumir
en un plato. Teniendo en cuenta que no todas las personas comen la misma
cantidad, se toman como referencia un valor medio que viene determinada para las
costumbres sociales y las encuestas alimentarias realizadas. A pesar de esto, las
cantidades de cada ración son flexibles y adaptables a las necesidades energéticas
de cada persona. La coordinación de las diferentes raciones alimentarias
recomendadas configura una alimentación equilibrada.

Diferentes grupos de alimentos y contenido de las raciones

Ejemplos de ración

Leche y productos lácteos


250 cc (un tazón) de leche
2 unidades de yogur
40-50 g de queso (bola, manchego, etc.)
125 g de mató

Carne, ave, pescado, huevos y substitutos


De 80 a 100 g de carne, pescado, hígado, una vez cocido
¼ de pollo o conejo
Un plato de guisantes, judías, lentejas o garbanzos cocidos (80 g en crudo)
2 huevos
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Pan y féculas
60 g de pan
Un plato de arroz, de macarrones, de fideos, de tallarines (60 a 80 g en crudo)
Una patata mediana (180-200 g)

Verdura y ensaladas
1 plato de ensalada o de verdura fresca, congelada o en conserva (aprox. 250-300
g)
2 zanahorias grandes (aprox. 200-250 g)
1 tomate grande (aprox. 200-250 g)

Fruta
Una pieza mediana de: manzana, plátano, naranja, melocotón, pera, etc.
2 0 3 mandarinas
3 o 4 albaricoques
½ taza de fresas
½ taza de cerezas

Aceites vegetales
30-60 g por día
FUENTE: Manual de recomendaciones y requerimientos nutricionales.
Departament de Sanitat i Seguretat Social, 1988.

Recomendaciones para mejorar los hábitos alimentarios de la población adulta


en Cataluña.
Los hábitos alimentarios de la población catalana presentan el perfil de la
alimentación característica de los países mediterráneos. A pesar de esto, es
conveniente hacer algunas recomendaciones:

• Es necesario mantener y aumentar el consumo de verdura, hortaliza y fruta,


aspecto muy positivo en la alimentación de los catalanes, que es necesario
fomentar entre los más jóvenes.
• Seria conveniente disminuir el consumo de carne, sobretodo la más grasa , y
también embutidos, Así como mantener y aumentar el consumo de pescado.
• Conviene disminuir el consumo de grasa procedente de la leche y de sus
derivados, fomentando el consumo de lácticos descremados en adultos y
ancianos.
• Se debe continuar utilizando el aceite de oliva como una grasa de elección tanto
en crudo como para cocinar.
• Es necesario moderar el consumo de bollería, productos de pastelería,
chucherías y bebidas refrescantes, sobre todo en la población más joven.

Para llevar a término una alimentación sana y equilibrada, no es necesario tomar


suplementos de vitaminas y minerales (excepto en situaciones especiales y bajo
recomendación y control médico), ni tampoco productos “especiales”.
La mejor medida es disfrutar de una alimentación bien variada, rica en fruta y
verdura, legumbres y otros farináceos, moderada en el consumo de grasas de origen
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animal, con aceite de oliva para aliñar y cocinar y una buena ingesta de agua.
También es importante utilizar una gran variedad de técnicas culinarias: guisos,
vapores, fritos, hornos, hervidos, plancha, etc., y mantener los rasgos tradicionales
de la alimentación mediterránea, recuperando platos, recetas y costumbres.

Potenciar el ejercicio físico regular también ayudará a mantener un peso adecuado.

En el caso que la mujer necesite modificar su peso, se deberá aconsejar una


estrategia de aumento o reducción ponderal, de forma gradual. Algunos
medicamentos y suplementos vitamínicos y/o minerales pueden representar un
riesgo para el futuro embarazo y solamente deberían incluirse bajo prescripción
médica.

En el caso de las mujeres con antecedentes de anemias, se deberá evaluar sus


reservas de hierro. Las mujeres con antecedentes familiares o personales de
malformaciones del tubo neural, así como las usuarias de medicamentos del tubo
neural, así como las usuarias de medicamentos que pueden interferir el metabolismo
del ácido fólico (anticonvulsivos, algunos antibióticos y anticonceptivos orales), se
beneficiarán de un suplemento con esta vitamina des de tres meses antes de la
concepción y durante el primer trimestre del embarazo.

Una aportación insuficiente de folatos se asocia a un incremento del riesgo de


defectos del tubo neural en el recién nacido. Sería necesario pues, evaluar la ingesta
aproximada de folatos que realiza la mujer que tiene intención de quedar
embarazada, ya que se constata que el adecuado estado de los depósitos de esta
vitamina antes de la gestación tiene un efecto protector.

Se ha de considerar, muy especialmente, posibles déficits de pautas alimentarias


alejadas del equilibrio nutricional: vegetarianas estrictas, regímenes macrobióticos,
dietas hipocalóricas autoadministradas, embarazadas adolescentes, gestación
múltiple, etc.

Requerimientos
Los requerimientos diarios de folatos de una mujer embarazada son de 400 kg./día,
el doble de las necesidades diarias establecidas por una mujer joven no
embarazada.

En caso de constatar una baja ingesta de folatos, será necesario hacer las
recomendaciones siguientes:

1. Incrementar la cantidad de alimentos ricos en esta vitamina, y instar que estos


alimentos se consuman diariamente.

2. En la mujer sin antecedentes, indicar un suplemento, teniendo en cuenta que


para conseguir una adecuada prevención es necesario iniciarla durante la etapa
pregestacional (al menos 4 semanas antes de la concepción), desde el momento
en que la mujer quiera quedarse embarazada, y proseguir la administración de
folatos durante todo el primer trimestre del embarazo.

Pauta de folatos en mujeres sin antecedentes 0,4 mg/día


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3. En la mujer con antecedentes de recién nacidos o fetos con DTN o en familiares


de primer grado, prescribirle un suplemento, también pregestracional, con una
dosis 10 veces superior.

Pauta de folatos en mujeres con antecedentes 4 mg/día

Esta cantidad ha de ser administrada a partir de preparados que contengan solo


folatos, ya que obtener estos 4 mg/día mediante polivitamínicos puede suponer
ingerir dosis excesivas de vitaminas liposolubles como la vitamina A.
4. Las mujeres con una diabetes insulinodependientes presentan un riesgo superior
al de la población general. En este caso, algunos estudios aconsejan darles un
suplemento con una dosis de 1 mg/día des del momento en que quieran quedar
embarazadas hasta el final de las 12 primeras semanas de gestación.

No hay evidencias de efectos deseables durante el embarazo a consecuencia de la


administración suplementaria de folatos, la cual no excluye la necesidad de
considerar métodos de diagnóstico prenatal, ya que no elimina totalmente el riesgo
de DTN.

Advertencia: Aportación/alimentaria/interacciones

El proceso de cocción de los alimentos, interacciones con algunos medicamentos o


hábitos tóxicos disminuyen la disponibilidad alimentaria de folatos.
A pesar de que los folatos son muy abundantes en los alimentos de origen vegetal,
la cocción determina pérdidas importantes para su carácter termolábil, lo cual obliga
a consumir habitualmente productos crudos y/o integrales para asegurar los
requerimientos antes mencionados.

Así mismo, hay que tener presente que hay un cierto nombre de medicamentos que
pueden disminuir la absorción de folatos : antiácidos, sulfasalizina, colestiramina,
anticonvulsivos (carbamazepina, ácido valproico), algunos antibióticos y
anticonceptivos orales.

También es importante valorar la ingesta concomitante de alcohol, el hábito


tabáquico o un posible proceso de mala absorción, circunstancias que incrementan
los requerimientos.

4.3.2.2. Etapa pregestacional

Importancia del consejo alimentario y nutricional en este período. Por que hace
falta el consejo?

En primer lugar se deberá preguntar a la embarazada respecto a los consejos que


sobre el tema de la alimentación ha recibido durante el periodo pregestacional y, si
es necesario, sugerir las recomendaciones que se han expuesto (ver apartado
anterior).

Para tratar el tema de la alimentación durante el embarazo, hemos de tener en


cuenta que la mujer recibe informaciones de muchas fuentes diversas sobre lo que
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debe hacer y lo que no debe hacer y, en especial, sobre la alimentación que se


supone que es la mejor par el buen curso de su embarazo. Es por ello que será
necesario que los profesionales que tienen a su cargo el control seguimiento del
embarazo le faciliten la información correcta en el momento adecuado. También es
muy importante que se de a la embarazada la oportunidad de expresar sus dudas y
miedos respecto a la alimentación. Al final del embarazo es posible que muestre
inquietud por problemas relacionados con la alimentación del recién nacido
(lactancia materna, horarios de las tomas de alimentos, cantidades, suplementos,
etc.), que se deberán abordar. Es importante que nos adelantemos a esta inquietud
de la embarazada, introduciendo estos temas durante los transcursos de la
gestación, bien sea en las visitas de seguimiento y/o en el curso de educación
materna (ver apartados 4.2.3. y 4.2.4., Capítulo III).

En las sucesivas visitas de control del embarazo deben introducirse los temas
referidos a la alimentación que en cada momento sean pertinentes en función de la
semana de gestación (consejo dietético hacia las molestias digestivas ligadas al
embarazo, consejo para la correcta evolución del aumento de peso y sobre las
estrategias para aumentar la absorción intestinal del hierro).

Los consejos de orden dietético son muy útiles en este período. Pero también es
conveniente explicar con claridad otras decisiones sanitarias, como las ligadas a la
administración de suplementos con vitaminas y/o minerales, así como hacer
participar a la embarazada en el control del aumento de peso, fijando con ella el
objetivo de aumento de peso total y por periodos. Con esta estrategia se obtendrá
un mejor cumplimiento de las prescripciones e indicaciones preventivas y
terapéuticas.

Los consejos que se proponen a continuación se justifican por la necesidad de tener


en cuenta los requerimientos nutricionales para el desarrollo del feto, y que al mismo
tiempo se mantengan adecuadamente los depósitos de nutrientes de la mujer
embarazada. Estas necesidades aumentadas se cubren con un aumento
espontaneo de la ingesta de alimentos y, si hace falta, con un suplemento
nutricional. Los únicos nutrientes que con mucha frecuencia son insuficientes a las
dietas habituales de las mujeres embarazadas de nuestro medio son hierro y los
folatos, aunque a veces también se observan ingestas inferiores a las
recomendables de calcio, zinc y piridoxina. El aumento de peso durante el embarazo
es relativamente constante (feto, placenta, líquido amniótico, útero y mamas). En
cambio, se observa más variabilidad en los depósitos del líquido intersticial.

El aumento de peso de la mujer durante el embarazo es un factor estrechamente


ligado al peso del recién nacido al nacer y a la morbilidad y mortalidad perinatal. El
aumento de peso óptimo varia en función, entre otras, del estado nutricional de la
mujer antes de la concepción. El control de esta progresión del peso es una
actividad que centra en gran medida la relación entre el equipo sanitario y
embarazada. A menudo, para evitar un aumento de peso excesivo en las últimas
semanas de gestación, se hacen indicaciones del control de la ingesta que no tienen
una justificación y crean una angustia innecesaria.
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1r trimestre 2n i 3r trimestre
Kcal 2.300* 2.550*
Kj 9.623 10.669
Proteïna (g) 41 56
Ca (mg) 800 1400
Fe (mg) 18 18 (1)
Iode (µg) 110 135
Mg (mg) 330 450
Zn (mg) 15 20
Tiamina (mg) 0,9 1
Riboflavina (mg) 1,4 1,6
Eq. Niacina (mg) 15 17
Vit. B6 (mg) 1,6 3,6
Ac. Fòlic (µg) 200 400
Vit. B12 (µg) 2 2,2
Vit. C (mg) 60 80

FUENTE: Departamento de Nutrición. Universidad Complutense de Madrid. 1994


*La aportación calórica es modificable según las características individuales
(1) Las RDA (1989) establecen, para este periodo, 30 mg/día. Los requerimientos
dependen muy del estado de las reservas en el momento de la concepción.

Seria deseable que la primera visita de control y seguimiento del embarazo fuese la
continuación de un proceso de atención iniciada con la visita pregestacional. No
obstante, ya que la realización de estas visitas en nuestro medio es todavía
infrecuente, la mujer embarazada se puede beneficiar de los consejos que hemos
indicado para el período pregestacional (apartado 4.3.2.1., Capítulo III).

Cual es el consejo alimentario y nutricional adecuado?


Con cierta frecuencia la embarazada refiere cambios en sus preferencias
alimentarias que se han relacionado con variaciones de la sensibilidad gustativa. La
embarazada puede encontrar desagradable el gusto o el olor de alimentos que le
gustaban antes de la gestación o, por el contrario, observar una marcada apetencia
por otros alimentos que no le eran especialmente agradables (los típicos “deseos”).
Este fenómeno, que a veces se manifiesta antes de diagnosticar el embarazo, no se
debe, en absoluto, a alteraciones psicológicas y no tiene importancia mientras no
interfiera la posibilidad de realizar una alimentación equilibrada y sana.

En cambio, será necesario intervenir si las apetencias se dirigen hacia productos no


alimentarios ya que, a veces, su ingesta puede ser inadecuada.

El comportamiento alimentario de la mujer durante el embarazo puede no


corresponder al requerimiento real del organismo. Es probable que, a pesar de que
los requerimientos energéticos se mantienen durante el primer trimestre y aumentan
de forma progresiva a partir del cuarto mes (alrededor de 350 kcal sobre la ingesta
habitual), la dona coma menos a causa del malestar producido por el mismo
embarazo.
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SANITARIA PREGESTACIONAL Y GESTACIONAL

Durante el día, en el caso que los alimentos sólidos no sean bien tolerados debería
procurarse una buena ingesta de zumos de fruta o bebidas azucaradas sin gas.

Durante el tercer trimestre, cuando las necesidades han aumentado mucho a causa
del crecimiento fetal, la sensación de pesadez y fatiga puede hacer disminuir la
actividad física y a veces la sensación de hambre.

A continuación se facilitan una serie de recomendaciones dietéticas para evitar o


aligerar algunos de los trastornos producidos por el mismo embarazo:

Vómitos y nauseas

• Será conveniente hacer comidas ligeras, frecuentes y poco abundantes así como
respetar los horarios y las prisas.
• Tener a mano, en la mesita de noche, unas galletas, tostadas o cereales para
comer algo antes de levantarse de la cama.
• Evitar beber agua en ayunas así como zumos demasiaado ácidos
• Evitar beber café y te
• Beber especialmente entre las comidas
• Intentar evitar los olores de guisos y preparaciones culinarias que produzcan
malestar
• Disminuir alimentos y preparaciones ricos en grasas y especies
• Evitar aquellos alimentos que puedan ser menos o peor tolerados

Acidez o pirosis
• Es recomendable comer poca cantidad de alimentos, poco grasos y, sobre todo,
comer poco a poco.
• Como extra de aportación energética se pueden tomar alimentos tantas veces
como haga falta pero en pequeñas cantidades. Alimentos como tostadas, pan,
fruta, en general, comidas poco grasas.
• Beber principalmente entre las comidas
• No es conveniente ir a dormir o estirarse justo después de las comidas. Es
necesario dejar pasar entre una o dos horas después de la ingesta.
• Es recomendable llevar ropa que no apriete i bien cómoda

Estreñimiento
• Tomar mucho líquido. Las bebidas tibias o calientes son especialmente
recomendables justo al levantarse.
• Comer alimentos ricos en fibra: legumbre, verdura, fruta, cereales, etc.
• Aumentar la actividad física medíante ejercicios suaves como caminar, nadar,
etc.
• En el caso de haber controlado la ingesta energética, no es conveniente restringir
totalmente el consumo de aceite.
• Evitar tomar laxantes, excepto para indicación del médico.
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Aportaciones de vitaminas y minerales


Hierro
Es prácticamente imposible obtener, únicamente mediante modificaciones dietéticas,
las aportaciones de hierro necesarias. Las mujeres que no tienen unos depósitos
de hierro adecuados al inicio del embarazo deberán de recorrer a la administración
de un suplemento para evitar los problemas ligados a la anemia ferropénica. Para
prevenir la anemia ferropénica en estas mujeres se recomienda, además de
potenciar la biodisponibilidad de hierro de la dieta, administrar 30 mg/día de hierro
elemental durante el segundo y tercer trimestre del embarazo.

En este sentido, y para aumentar la ingesta y biodisponibilidad de hierro, podemos


hacer algunas sugerencias:
• Incluir en la alimentación diaria un par de raciones del grupo de la carne. Son
especialmente ricos en hierro los alimentos siguientes: carne roja, hígado de
ternera, gambas, langostinos, huevos, legumbres, almendras y pistachos.
• Es importante, para aumentar la absorción del hierro ingerido, hacer coincidir en
la misma comida una buena cantidad de vitamina C. Los alimentos más ricos en
vitamina C son: naranjas, mandarinas, limones, fresones, kiwis, pimiento verde y
rojo, tomates y, en general, verdura y fruta fresca.
• Es necesario recordar que el café y el te disminuyen la absorción del hierro
ingerido.

Calcio
Los requerimientos de calcio también se ven aumentados durante este periodo. Por
este motivo, se recomienda una ingesta aproximada de 3 a 4 raciones de leche o
productos lácticos al día (yogur, quesos, etc.). Si se cree conveniente, también se
deberá administrar un suplemento de esta sal mineral.

Folatos
Se beneficiaran de un suplemento pregestacional y gestacional (ver apartado
4.3.2.1., Capítulo III). La administración de un suplemento de folatos en mujeres con
reservas normales después del primer trimestre no tiene efectos positivos
demostrados.
Control del peso durante la gestación
Los objetivos de aumento de peso se fijarán en función de la constitución
pregestacional. Los aumentos máximos aceptables y compatibles con embarazos y
partos normales son muy variables. Las mujeres delgadas son las que más
dependen de un aumento de peso suficiente para conseguir un recién nacido de
peso adecuado para su edad gestacional.
El aumento de peso durant el embarazo, teniendo en cuenta la constitución de la
mujer, es lo que se especifica seguidamente:
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Incrementos de peso recomendados durante la gestación


Constitución de la mujer Ïndice de masa corporal (IMC) Aumento de peso recomendable*
Delgada < 20 12,5 kg
Normal ≥ 20 - < 25 11,5 kg
Sobrepeso ≥ 25 - < 30 7 kg
Obesa ≥ 30 - < 45 7 kg
Obesa mórbida ≥ 40

Fuente: Food and Nutrition Board. Institute of Medicine. National Academy Press.
Washington, D.C., 1990

• Estos aumentos no son aplicables a adolescentes ni a gestaciones múltiples.

4.3.3. Higiene buco-dental

4.3.3.1. Etapa pregestacional

Es conveniente que todas las mujeres tengan cuidado de su estado de salud buco-
dental. En general, se recomienda no abusar de los alimentos dulces, mantener una
buena higiene oral mediante el cepillado dental con una pasta dentífrica fluorada
después de las comidas y, como a mínimo, una visita anual a su odontólogo.

Por esta razón es necesario recomendar la visita al odontólogo (en los centros de
atención primaria se dispone de este profesional), para realizar un control y revisión
del estado de salud bucodental y tratar cualquier patología antes de la gestación.

4.3.3.2. Etapa gestacional

El embarazo es una época de alto riesgo para las enfermedades bucodentales


(caries y enfermedad periodontal) a causa, tanto de los hábitos dietéticos en este
periodo (abuso de comidas entre horas), como a los cambios fisiológicos que se
producen (cambios en la irrigación sanguínea de las mucosas, aumento de
determinadas hormonas, etc.).

Es necesario cepillarse los dientes con mucho cuidado y con un cepillo suave, dado
que durante el embarazo aumenta la propensión a la inflamación de las encías, lo
que provoca su sangrado. Este último hecho es totalmente evitable mediante una
higiene dental personal correcta.

Es necesario emplear un par de minutos para eliminar la placa bacteriana y


conseguir una limpieza correcta de todas las superficies dentales. Utilizando una
pasta dentífrica con fluor, y adicionalmente colutorios fluorados, aumentaremos la
resistencia de los dientes ante la caries.

Es necesario disminuir la frecuencia de ingesta de dulces (caramelos, bombones,


chocolate, etc.) así como de otros alimentos con alto contenido de “azúcar
escondido” (bebidas refrescantes, salsas, cereales para desayunar, etc.).
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Es importante que la embarazada realice una visita al odontólogo, al inicio del


embarazo, para controlar su estado dental, recibir consejo preventivo y,
eventualmente, realizar una profilaxi dental (limpieza de boca).

Dentro del Programa de salud buco-dental en las áreas básicas de salud ya


establecido un apartado específico para el control dental de la embarazada por parte
del odontólogo de los centros de atención primaria, a los cuales se pueden dirigir
todas las embarazadas para recibir la atención adecuada.

En caso que sean necesarios otros tratamientos dentales, la época más segura para
su realización es el segundo trimestre del embarazo. Es necesario recordar a las
embarazadas que informen de su estado al odontólogo para evitar exploraciones
radiológicas y tratamientos farmacológicos que no sean imprescindibles.

Es necesario recordar que todavía no hay ninguna evidencia científica que


demuestre el paso del fluor a través de la barrera placentaria y, por lo tanto, no se
recomienda la prescripción de comprimidos fluorados a la embarazada que tengan
como objetivo la aportación de fluor al feto.

4.3.4. Higiene personal, ropa y calzado

Ducha o baño
Ha de ser diario, con jabones neutros, sin abusar, para eliminar todas las
secreciones y por su acción tónica, sedante y laxante. La higiene ha de ser más
cuidada para el aumento de díaforesis.

La elección del baño o ducha dependerá de las costumbres de la mujer. El baño no


se aconseja cuando hay metrorágias, el cuello uterino permeable o en caso de
rotura de las membranas (bolsa de aguas). En cualquier caso la temperatura del
agua no ha de ser demasiado lenta.

Higiene íntima
Debe efectuarse cuidadosamente (región genital y ano) un par de veces al día con
jabones neutros líquidos y no irritantes, pero sin utilizar “duchas por dentro” ni
irrigaciones vaginales.

En caso de flujo abundante, de color u olor anormal, y que producen irritación


(escozor o picor) deberá de consultar al profesional de referencia.

Piel
Se informará de los cambios dérmicos que tendrán lugar en la piel durante la
gestación. Es posible que la embarazada note más sequedad de la piel, lo cual se
puede tratar con cremas hidratantes. Se informará igualmente de los cambios
pigmentarios que tienen lugar en la piel del abdomen y de las mamas, así como la
aparición frecuente de manchas en la cara y la hiperpigmentación de la línea alba,
del pezón y de la aureola mamaria.
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Pezones y areolas mamarias


En condiciones normales será suficiente el lavado con agua y jabón. Se
recomendará hacer exposición solar moderada para profilaxis de las grietas.

Si en la punta del pezón se observan pequeñas costras deberán de quitarse con


mucho cuidado al lavar el pecho, y evitar así la predisposición en la formación de
grietas.

Estrías
Pueden aparecer estrías en el abdomen, las caderas y las mamas, a causa del
aumento del volumen de estas zonas y también por causas hormonales.
Dependiendo de la elasticidad de la piel y de si este aumento es considerable, la
prevención será más o menos efectiva. Se recomendará hidratar la piel de estas
regiones como cremas antiestrias, lociones o geles hidratantes, para prevenirlas o
aligerar si ya han aparecido.

Limpieza de boca
Ha de ser regular, dos o tres veces al día y después de las comidas para evitar la
formación de caries (ver apartado 4.3.3.2. Capítulo III).

Ropa y calzado
Vestidos
Debe utilizar piezas de vestir cómodas, suaves y amplias que no oprimen el cuerpo,
especialmente a nivel de los pechos, cintura y abdomen.

La ropa ha de descansar en los hombros, evitando así que el peso recaiga en la


cintura.

Sujetadores
Su uso es muy necesario para mantener los pechos en posición normal, impidiendo
así su deformación y evitando los frecuentes dolores de espalda originados por el
aumento del volumen mamario. Se aconseja que el tejido sea de fibras naturales.

Faja
En condiciones normales los músculos abdominales están perfectamente
desarrollados y pueden soportar por ellos mismos el abdomen, y con una gimnasia
adecuada puede mejorar el restituido ad integrum post-parto.

Solo es útil el uso de esta pieza en estos casos en que los músculos abdominales no
pueden cumplir correctamente su función (embarazo de gemelos, gestación con feto
muy grande), en estas mujeres con diástasi de los rectos y en algunos casos
lumbares y pélvicos.

Medías y calcetines
Si se hacen servir, se han de evitar compresiones que faciliten la aparición de las
varices.

Las medías deben colocarse muy altas, sin ceñirlas a los muslos. Se recomienda la
utilización de medías hasta la cintura. En caso de utilizar medías de compresión por
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la prevención o tratamiento de las varices, se deberá informar de la importancia de


colocarselas estirada en la cama, ya que así se consigue una mayor eficacia.

Zapatos
Han de ser cómodas, de material flexible y que no oprimen sus pies. Los talones no
serán ni demasiado altos (como máximo 5 cm), ni finos, sino sólidos y de base un
poco ancha porqué, a causa del aumento de peso y de la relajación de las
articulaciones, hay más riesgo de tropezar y caídas.

Los zapatos totalmente planas tampoco son recomendables, porque favorecen el


aplastamiento del arco plantar y como con consecuencia pueden aparecer
lumbalgias.

4.3.5. Actividad física y deportes


Efectos del ejercicio físico
El organismo de la mujeres sanas embarazadas que practican ejercicio físico se
adapta perfectamente para mantener un crecimiento adecuado del feto. Por ejemplo,
aunque el flujo sanguíneo uterino disminuye durante la práctica de ejercicio físico,
hay mecanismos compensatorios, como una mejor una extracción de oxígeno, y una
redistribución del cabal sanguíneo, que sirven para mantener una oxigenación fetal
constante. De la misma manera, aunque el ejercicio físico aumenta la temperatura
corporal central, también aumenta la eficiencia a disipar el calor durante el
embarazo, lo cual ayuda a mantener la temperatura materna por debajo del lindar
teratogénico. Además, durante este periodo se utilizan fuentes de combustible
alternativas para mantener reservas adecuadas de carbohidratos para el feto; y una
disminución de la adrenalina y la noradrenalina en respuesta al ejercicio físico desde
la mitad hasta el final del embarazo limita el efecto estimulante que el aumento de
catecolaminas tendrá sobre el útero.

Ni la duración ni el curso del embarazo se ven afectados negativamente en mujeres


sanas que continúan practicando ejercicio físico al compararlas con mujeres
sedentarias, en cuanto a las variables siguientes: aumento de peso materno,
crecimiento fetal, duración de la gestación, duración del parto y test de Apgar.

Entre los beneficios del ejercicio físico durante el periodo gestacional se incluyen:
sensación de bienestar físico y mental, facilitación del trabajo del parte y de la
recuperación física postparto, así como una disminución de intervenciones
obstétricas.

Actualmente muchas mujeres tienen una forma física saludable y disfrutan


activamente del tiempo libre. Cuando estas mujeres están embarazadas y en
ausencia de complicaciones médicas o obstétricas, pueden seguir haciendo una
actividad física de intensidad moderada que les permita mantener la forma
cardiorespiratoria y muscular. A pesar de esto, los cambios físicos típicos del
embarazo pueden interferir con la capacidad de realizar, sin riesgos, algunos tipos
de actividad física.
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Recomendaciones sobre el ejercicio físico y los deportes


• Durante el embarazo, se puede continuar haciendo ejercicio de intensidad ligera
o moderada y obtener beneficios, especialmente si se practica de manera regular
(como mínimo 3 veces por semana)
• Es importante que la gestante conozca los cambios que se producen en la
columna vertebral durante el embarazo y su corrección. Por lo tanto,
informaremos sobre las posturas correctas que es necesario adoptar, tanto a la
hora de realizar sus actividades cotidianas (levantarse de la cama, agacharse,
coger peso, poner la lavadora, tender la ropa, planchar, etc.) como a la hora de
hacer alguna actividad física y deportiva.
• Debería evitarse el ejercicio en decúbito supino después del primer trimestre.
Esta posición se asocia con una disminución del volumen cardíaco en la mayoría
de embarazadas. Durante todo el embarazo se ha de evitar el ejercicio intenso
porque en otras intensidades de ejercicio, el resto del volumen cardíaco se
distribuye básicamente fuera del área esplancnica. También se han de evitar los
periodos prolongados de pie.
• Las mujeres embarazadas que quieren continuar haciendo ejercicio físico han de
modificar la intensidad del ejercicio de acuerdo con la autopercepción de la
intensidad del esfuerzo. Es necesario para hacer ejercicio cuando aparezca
fatiga, sin llegar al agotamiento. Aun que en algunos casos se pueden continuar
practicando ejercicios de carga en la intensidad similares a las de antes del
embarazo, las actividades de descarga, como la natación o bicicleta, reduciendo
riesgos de lesión y faciliten la adhesión al programa de ejercicio durante todo el
embarazo.
• Los cambios morfológicos que aparecen con el embarazo son una
contraindicación relativa para la práctica de algunos tipos de ejercicios que se
asocian con pérdida de equilibrio, lo cual supone un peligro para el bienestar
tanto de la madre como del feto, especialmente en el tercer trimestre. Además,
se ha de evitar la práctica de cualquier tipo de ejercicio que suponga un riesgo de
traumatismo abdominal, ni que sea mínimo (como por ejemplo deportes de
combates, esquí alpino de descenso, esquí náutico, etc.).
• Las mujeres que practican ejercicio físico han de consumir una dieta adecuada a
sus necesidades.
• Durante el primer trimestre de embarazo han de hacer el ejercicio físico en
condiciones climáticas óptimas, manteniendo una hidratación adecuada y
vistiendo ropa que favorece la disipación de calor.
• Los ejercicios en el agua y la natación son actividades recomendables para la
gestante, ya que ayudan al retorno venoso y mejoran la temperatura corporal. Es
necesario, pero, evitar siempre las situaciones extremas, ya que el choque por
inmersión brusca en agua fría se pueden presentar también en la embarazada.
• El deporte de inmersión es una práctica que no se aconseja realizar durante el
embarazo, aunque en caso de hacerse, la inmersión debe limitarse a poca
profundidad (menos de 18 m) y durante cortos periodos de tiempo (inferiores a
medía hora), dejando un mayor tiempo de recuperación hasta la superficie para
disminuir el riesgo de accidente de descompresión, no solo de la madre sino
también del feto, que tiene una mayor sensibilidad.
• La práctica del trekking en alta montaña no debería realizarse durante el
embarazo, por el esfuerzo físico extenuante que esto puede representar y
también por la altitud.
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• En la práctica del deporte en general, debe procurarse no hacer sobreesfuerzos


ya que la aparición de taquicardia a veces ha causado anorexia fetal demostrada
por la aparición de bradicardía en el feto. Por otro lado, la carrera o el jogging no
son recomendables (excepto que sea una gestante que ya hacia anteriormente, y
a pesar de ello deberá reducir la intensidad), a causa del aumento de la
temperatura corporal que producen.
• El año 1985 la Amercian College of Obstetricians and Gynecologists (ACOG)
publicó unas recomendaciones según las cuales la frecuencia cardíaca al
alcanzar durante el ejercicio física no debía superar los 140 latidos por minuto ni
la sesión de ejercicio podía durar más de 15 minutos seguidos. El año 1994, este
mismo colegio las actualizó y flexibilizó.

La mayoría de estas recomendaciones referentes a las mujeres que practican


ejercicio físico también son aplicables durante el embarazo. Las mujeres que no
tienen factores de riesgo que comprometan el diagnóstico fetal o materno, pueden
seguir las recomendaciones antes mencionadas.

Contraindicaciones del ejercicio físico


Si hay alteraciones de la normalidad es necesario adaptar el programa de ejercicio
físico y recordar que las situaciones siguientes son contraindicaciones para su
práctica:

• Hipertensión inducida por el embarazo


• Ruptura prematura de membranas
• Parto prematuro en un embarazo anterior o amenaza de aborto en el embarazo
actual o ambas situaciones.
• Incompetencia cervical uterina
• Pérdidas hemáticas persistentes durante el según o el tercer trimestre
• Crecimiento intrauterino retardado

Además, las mujeres que presentan otros factores de riesgo u otras patologías
crónicas, como la hipertensión arterial, enfermedades tiroidales, cardíacas,
vasculares, pulmonares, etc. o patologías obstétricas, se han de evaluar
cuidadosamente para determinar si el programa de ejercicio es el adecuado o no.

Consideraciones finales
Las mujeres que tienen una buena forma física previa pueden mantenerla durante el
embarazo y el puerperio. En ausencia de complicaciones la práctica moderada de
ejercicio físico no es perniciosa para la madre ni para el feto. De hecho, una
actividad física regular como pasear/caminar, nadar, y los ejercicios que se realicen
en la educación materna puede reducir la incidencia de aborto espontáneo y parto
prematuro. Por lo tanto, debe procurarse que las mujeres embarazadas mantengan
una forma física adecuada durante todo el embarazo, por lo cual es necesario
también insistir en la necesidad de que toda embarazada duerma un mínimo de 8
horas diarias. Es necesario individualizar la recomendación del ejercicio físico y
adaptarse a los cambios fisiológicos típicos de este periodo.

De forma general, será necesario recomendar la realización moderada de aquellos


deportes que no comporten un riesgo para el embarazo, y desaconsejar totalmente
aquellos que pueden ser perjudiciales, tales como: deportes de combate, esquí
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alpino, submarinismo, surf, etc. La equitación podría practicarse con moderación, así
como la gimnasia deportiva, la carrera, el esquí de fondo, el tenis y el golf, si ya se
practican antes de la gestación. De todas formas, cualquiera de estas actividades se
deberán de ir moderando a medida que avance el embarazo, evitando siempre los
cambios de movimientos bruscos y rápidos.

Muchos de los cambios fisiológicos y morfológicos que van apareciendo durante el


embarazo persisten durante las primeras 4-6 semanas del postparto. Por lo tanto,
los programas de ejercicio físico previos al embarazo deben irse reprendiendo
después del parto gradualmente según la capacidad física de la mujer.

4.3.6. Viajes
La información ha de poner de manifiesto que el embarazo es un estado fisiológico
de la mujer que está esperando un hijo y, por lo tanto, existen pocas limitaciones en
este campo por el hecho de estar embarazada.

Es necesario, pero, recordar que se ha de informar de las condiciones


epidemiológicas del país de destino a fin de valorar la necesidad de prevenir
medidas previas al viaje (vacunaciones), o durante el viaje.

Durante el embarazo se producen cambios anatómicos y funcionales, que es


importante que la mujer conozca, para comprender mejor las modificaciones que
pueden tener lugar durante el viaje y que pueden ser causa de molestias (ver
apartado 4.2.1., Capítulo III).

Como planificar el viaje


Hay diversos factores que es necesario tener en cuenta a la hora de planificar un
viaje durante el embarazo, dependiendo de:
• Situación del embarazo
• Medios de transporte
• Climatología, actividades y condiciones sanitarias en el lugar de destino
• Otros factores relacionados con los viajes

Situación de embarazo
Como ya hemos indicado anteriormente, la mujer embarazada presenta unas
características fisiológicas que es necesario tener en cuenta a la hora de viajar. No
es recomendable viajar si existe alguna enfermedad previa que, sumada al
embarazo, pueda provocar patología. La historia previa de alteraciones cardíacas,
diabetes, anemia o insuficiencia renal en una mujer que haya quedado embarazada,
convierten un embarazo normal en un “embarazo de riesgo”.

Otros tipo de riesgos durante el embarazo son los relacionados con causas
obstétricas, que vengan determinadas, en primer lugar, por la historia ginecológica
previa: abortos, muertes fetales, embarazos ectópicos y partos prematuros.

También hay otras causas de riesgo, que son las relacionadas con el embarazo
actual, es decir: primer embarazo en edades límite (<16 y > 35) y algunas
condiciones patológicas, como el retardo del crecimiento intrauterino, amenazas de
aborto, embarazo múltiple, y complicaciones del embarazo, como son la diabetes
gestacional y la toxemia. En estos casos se recomienda no emprender el viaje.
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El mes del embarazo en que se realiza el viaje también es un factor importante a


tener en cuenta; los viajes son menos recomendables en el primer trimestre y en las
últimas semanas de la gestación, por lo tanto, si es posible, seria conveniente
programarlos para el periodo intermedio del embarazo.

Medios de transporte
Dependiendo del medio de transporte que se utilice y a causa de los cambios
fisiológicos que presenta la embarazada, se pueden mejorar o agravar las molestias
que un viaje pueda producir. El aumento de volumen de la gestante, la facilidad de
vomitar, de presentar nauseas y mareos causados por el movimiento del vehículo, y
la necesidad de moverse periódicamente, hacen del tren el medio de transporte más
cómodo durante el embarazo.

En general, estar sentada durante mucho tiempo favorece la estasis venosa. Se


aconseja que cada hora del viaje se compense con un paseo durante 15 minutos. En
el tren, los problemas de espacio no existen, al igual que en el barco, aunque en
este medio los vómitos pueden verse aumentados y pueden convertir en una
experiencia desagradable un viaje de placer. En cuanto al avión, los pasajeros no
han de limitarse solamente a un recorrido hasta el lavabo, sino que ha de intentar
prologarlos.

Si se viaja en automóvil, es conveniente pararse cada hora. En este medio de


transporte es necesario tener en cuenta la colaboración del cinturón de seguridad,
que aunque en algún momento puede dar la sensación de presión a la gestante, si
se fija en la parte baja del abdomen, sobre el pubis, evita un gran número de
lesiones en caso de accidente. No se ha descrito ningún caso de lesión uterina,
como rupturas o prolapsos, ni de lesiones fetales causadas por el cinturón de
seguridad.

El paseo recomendado cada hora, además de disminuir el estasis venoso de las


piernas, permite que la mujer embarazada se relaje tanto del estrés de la conducción
del vehículo (en el caso que lo haga ella), como del estrés de la fatiga. El estrés es
responsable de un buen nombre de abortos.

Estos paseos mejoran también el riesgo de rampas en las piernas, frecuentes si se


está durante mucho tiempo en posición sentada. El estiramiento de los músculos
que se producen al caminar evita estas rampas.

En cuanto a los problemas obstétricos que se pueden presentar, cuando el medio de


transporte es por tierra, en general se considera que las distancias recorridas y los
tiempos usados permitirán la Asistencia rápida de estos problemas en los centros
de salud más cercanos. En cuanto al avión, aunque la posibilidad de un parte
durante el vuelo es escasa, puede producirse en algunos casos; esta es la razón
primordial para la cual la mayoría de compañías aéreas no permiten viajes de larga
duración a Gestantes de más de 35 semanas, y exigen un certificado médico
respecto a la situación del embarazo.

El viaje por avión, por su rapidez y características, es muy utilizada. En este tipo de
desplazamientos, la mujer embarazada es necesario que esté informada de que el
paso de detectores de metales no afecta en absoluto a la gestante ni el feto y que,
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aunque el avión vuele a 10.000 m de altura, la presión dentro de la cabina es la que


se encontraría en una altitud de 2.500 m. Esta ligera falta de presión en el aire no
produce patología en el feto ni en la madre sanos.

En el caso de despresurización rápida de la cabina del avión, cosa poco frecuente,


pero posible (para lo que se dan instrucciones en todos los vuelos sobre como usar
las máscaras de oxígeno), la gestante controlará los movimientos fetales y, en caso
de apreciar una disminución deberá realizar una consulta obstétrica lo antes posible.
Los Asientos en la zona de fumadores aumentan los niveles de carboxihemoglobina
en la sangre, lo cual podría agravar situaciones de falta de oxígeno.

Otro factor que han de tener en cuenta todas las Gestantes que viajen en avión es el
problema del aumento de volumen abdominal por la expansión de gases
intraabdominales que, justamente con el aumente que ya tienen la embarazada,
puede llevar a una situación que dificulte la respiración. En estos casos, es
recomendable evitar comidas y bebidas flatulentas antes y durante el viaje, así como
hacer comidas pequeñas y frecuentes.

Se desaconsejan los viajes largos con bicicletas, ciclomotores y motocicletas.

Climatología, actividades y condiciones sanitarias en el lugar del destino


La gestante, dada su condición física, presenta una menor resistencia corporal, lo
cual hace más vulnerable a todos los cambios climáticos y ambientales que se
pueden producir durante un viaje. Por este motivo, es conveniente tener en cuenta la
climatología del lugar de destino y los diferentes factores que pueden intervenir.

Las horas y la intensidad de la radiación solar motivan que en los trópicos las
temperaturas sean altas. Estas radiaciones solares pueden afectar pieles sensibles
como la de la mujer embarazada, sobre todo si la exposición se realiza de una forma
brusca. A partir de las quemaduras que se pueden producir de primer, segundo y
tercer grado, el exceso de sol puede provocar la aparición de manchas oscuras que
posteriormente no desaparecerán.

La utilización de filtros solares en el primer momento, con factores de protección del


núm. 15, y un incremento progresivo de las horas de exposición al sol permiten una
adaptación adecuada de la piel sin estos problemas.

Los efectos del sol en la cabeza en zonas de gran exposición pueden provocar la
insolación, que se evitaría utilizando sombreros o gorras de tela. El golpe de calor es
otra situación que se da con el exceso de ejercicio en lugares con una temperatura y
un grado de humedad elevados y con escasa ventilación. Esto va asociado, muchas
veces, con la insolación. Los síntomas que producen son fiebre e hipotensión, y se
puede llegar a colapsar circulatorio. Para combatir tanto el golpe de calor como la
insolación, es necesario mantener una buena ingestión hídrica.

Otro efecto nocivo del sol y de el calor es el empeoramiento de los síntomas que
pueden producirse en personas afectadas de varices.

Al igual que se recomienda hacer de forma habitual durante el embarazo, en los


viajes será necesario utilizar telas de fibra natural, cómodas y que no aprietan la
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cintura, para evitar problemas de alergias y para no dificultar el retorno venoso. Se


recomienda también el uso de sujetadores y zapatos cómodos y anchos.

El ascenso a altitudes puede crear problemas en la mujer embarazada, similares a


los ya descritos en el viaje en avión. Las Gestantes de riesgo deberían tomar
precauciones a la hora de viajar en áreas de gran altitud, ya que al estar sometidos a
hipoxia continua, se puede incrementar el riesgo de malformaciones, así como una
disminución del crecimiento fetal. Esto no pasa en la mujer que se ha adaptado a la
altura con anterioridad al embarazo. El mal de altura es más frecuente en las
embarazadas que van a una zona de más de 2.500 m de altitud.

La práctica de ejercicio físico en el lugar de destino, relacionada con diferentes


deportes, como pueden ser trekking en alta montaña, nadas, la inmersión en aguas
profundas, y con el deporte en general, deberá adecuarla a la situación del
embarazo, teniendo en cuenta las recomendaciones que se hacen en el apartado
4.3.5., de este mismo Capítulo.

Otros factores relacionados con los viajes


El viaje es una situación que implica una serie de cambios emocionales que pueden
hacer olvidar en algún momento la situación particular que tiene la gestante.

Puede suceder que ante situaciones que se considerarían de alarma en el lugar de


residencia habitual, durante el viaje no se les preste atención debida (pequeñas
pérdidas hemáticas, aumento del flujo) y que no se realicen las medidas de control
habituales, por lo cual podría ser recomendable llevar en el botiquín tiras reactivas
para que la gestante se haga la detección del azúcar y proteínas de la orina.

El cansancio que ocasiona el viaje podría afectar a las mujeres no preparadas


físicamente. El jet-lag afecta el ritmo sueño/vigilia. Se ha propuesto ejercicios de
aclimatación para las embarazadas con la finalidad de que se adapten a los nuevos
horarios. El uso de sedantes suaves no está contraindicado en el embarazo y ayuda
a ajustar el ritmo sueño/vigilia al horario del papis.

Por otro lado, es necesario tener en cuenta que las diarreas son una afección
frecuente en los viajeros. La desinfección con yodo del agua para beber es una
medida profiláctica que no se debe emplear durante el embarazo. En caso de
aparición de diarreas, las medidas de deshidratación que se han de aplicar son las
mismas que en el resto de los viajeros. En las Gestantes es conveniente no
administrar derivados de la atropina ni antiperistálticos, como la loperamina. Hay
también otros medicamentos que se utilizan con frecuencia en el tratamiento de las
diarreas y que no se han de administrar a las embarazadas, por los peligros que
estos fármacos representan, como las sulfamidas, las tetraciclinas, las quinolonas y
el mebendazole.

4.3.7. Trabajo
Durante el embarazo, la mujer, en condiciones normales, puede desarrollar el
trabajo habitual siempre que esto no comporte posturas incorrectas, grandes
esfuerzos o ningún otro tipo de riesgo (manipulación de productos tóxicos o
exposición a radiaciones, etc.) (ver apartado 4.4.12., Capítulo II).
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Es interesante dar algún tipo de información sobre la legislación laboral vigente en


relación con el embarazo y la maternidad, concretamente es para hacer mención del
contenido de algunas normativas relacionadas con el embarazo y la lactancia, como:

• La Ley de prevención de riesgos laborales (Ley 31/95, BOE 10/1/95)


• Obliga al empresario a crear servicios de prevención independientes de él, donde se
integren médicos del trabajo que, entre otras funciones, han de conocer los riesgos de
cada lugar de trabajo, y a los cuales se pueden dirigir las trabajadoras embarazadas que
necesiten ir a la consulta
• El Real decreto legislativo 1/1994, de 20 de junio, por la que se aprueba el texto
refundido de la Ley general de la Seguridad Social.
• La Ley 4/1995, de 23 de marzo, de regulación del permiso parenteral y por
maternidad
• Período de licencia por maternidad con percepción de subsidio
• Distribución de este período antes y después del parto
• Derecho del padre a disfrutar de este periodo de baja
• Periodo de licencia maternal en el caso de adopción

La evaluación del efecto del trabajo durante la gestación es una tarea difícil, ya que
hay una multitud de factores que influyen sobre los resultados (Tabla 1). Pueden
atribuirse al trabajo efectos que son debidos a otras circunstancias, como ahora:
• La dificultad de cuantificar el trabajo que realiza la mujer, y por lo tanto que el
profesional sanitario pueda valorar el esfuerzo que realiza durante la gestación
sobre bases rigurosas y no sobre prejuicios, dada la doble vertiente del trabajo
domestico y laboral propiamente dicho.
• Entre los factores que pueden modificar el resultado perinatal, está el tipo de
trabajo, riesgo o peligros profesionales (enfermedades y accidentes laborales),
edad, historia obstétrica, clase social, accesibilidad al sistema sanitario, etc.

Tabla 1. Orientaciones para la evaluación del efecto del trabajo sobre la


gestación
Tipos y lugares de trabajo:
- Carga laboral Permite identificar la gestante y las personas que
- Empleado pueden ser entrevistadas más tarde, para obtener
- Sindicato mayor información. El objetivo es aumentar los datos
- Supervisor habituales sobre el ámbito laboral.
- Trabajo
- Asistencia sanitaria Es aconsejable obtener información sobre la pareja, por
si es un portador de substancias tóxicas o infecciones.
Esquema de trabajo:
- Días y horas de trabajo El objetivo es conocer la duración y regularidad del
- Cambios en el horario trabajo, la existencia de periodos de descanso, si están
- Frecuencia y cantidad de horas extras dentro del horario y se toman cuando se necesiten.
- Periodos de descanso
- Regulación del ritmo de trabajo Con frecuencia es posible evitar efectos adversos,
alterando el horario de trabajo o cambiando la relación
trabajo/reposo. La flexibilidad del ritmo de trabajo es
importante. La mujer puede seleccionar su ritmo de
trabajo o este viene determinado por una cadena de
producción? Hay momentos rápidos y lentos o el ritmo
es estable?
Comodidades:
- Lavabos El objetivo es conocer la disponibilidad y accesibilidad
- Áreas de descanso de las comodidades que pueden tener especial
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- Alimentos y bebidas importancia para la mujer embarazada: Puede ir al


lavabo todas las veces que sea necesario? Hay algún
lugar donde descansar? Puede combinárselo para
descansar y tomar medios adicionales, según se le
aconseje?
Trabajo físico:
- Tipo de trabajo Permite conocer la duración de la actividad continuada
- Tiempo de pie y/o levantado en horas y minutos, y la frecuencia para cada periodo
- Actividad física adicional en el cual se realizan estas actividades. El hecho de
. Caminar estar continuamente sentada puede afectar la columna
. Flexión corporal lumbar y el retorno venoso. El tipo de silla y la existencia
. Subir escaleras de banquetas son importantes. Se pueden usar taburete
tipo “barra de bar” para aligerar la trabajadora que se ha
de quedar de pie.

Peso manejado por la embarazada Permite conocer la fuerza requerida, la forma y las
dimensiones de los objetos que es necesario cargar, y
aconsejar como hay que cargarlos o empujarlos.

Características del trabajo, incluyendo el balance y la Permite obtener información sobre el riesgo de caídas,
coordinación requerida para mover maquinaria u bien por problemas de equilibrio, mareos, uso de
objetos, inicios y detenciones bruscas, utilización de escaleras, o ubicaciones en lugares peligrosos. Es
cinturones y arneses necesario valorar el riesgo de golpes o que el abdomen
quede aprisionado entre la columna vertebral y un
objeto externo.

Características ambientales:
- Temperatura Permite obtener información sobre la exposición a
- Presión barométrica factores tóxicos.
- Ruidos y vibraciones
- Radiación Valorar la existencia de características especiales del
- Agentes biológicos trabajo que puedan reducir o aumentar la exposición:
- Polvo, humo y vapores del aire ropa que oprime, ventilación, habitaciones cerradas,
- Compuestos químicos aislamiento, equipo de transporte de urgencia, estres
- Características especiales emocional.
The Amercian College of Obstetricians and Gynecologists: Guidelines on Pregnancy and
Work, Chicago, and States Departament of Health, Education and Welfare, 1977.
La decisión sobre si una embarazada puede realizar o no una determinada actividad
laboral, es necesario hacerla de forma individualizada, en función de:
1) Tipo de tareas que realiza
2) Estado físico y de salud de la mujer embarazada
3) Semana de gestación en que se encuentra

La incapacidad para desarrollar una actividad laboral durante el embarazo puede ser
debida a tres causas:
1) Incapacidad a causa del embarazo propiamente dicho (parte y periodo puerperal)
2) Incapacidad relacionada con la existencia de complicaciones propias del
embarazo o enfermedades previas
3) Incapacidad relacionada con la exposición ocupacional (a valorar por el equipo de
obstetricia o por los equipos médicos del servicio de prevención de la empresa
donde trabaja la embarazada (ver apartado 4.4.12., Capítulo II).

La evaluación de los riesgos de la actividad laboral ha de iniciarse en la primera


consulta prenatal, y continuar en las visitas de seguimiento durante todo el
embarazo. Se aconseja intentar reducir al mínimo los riesgos potenciales, teniendo
en cuenta:
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• Los aspectos fisiológicos del embarazo


• Los aspectos psicológicos de la mujer embarazada trabajadora
• Los riesgos específicos del trabajo que desarrolla

Aspectos fisiológicos del embarazo


Los efectos adversos del trabajo, durante el embarazo, se han atribuido a una
disminución de la circulación sanguínea placentaria. Las observaciones realizadas
en animales de experimentación aportan datos en este sentido:
• Que la actividad física intensa disminuye la circulación sanguínea
uteroplacentaria; sin embargo, la aportación de oxígeno al úter de la gestante no
disminuye significativamente.
• Que la reducción de la aportación de sangre se produce fundamentalmente por el
descenso de la circulación plancentaria.
• Que, al aumentar el esfuerzo físico, se produce un aumento de las catecolaminas
maternas y una disminución de la oxigenación fetal.

En relación con el embarazo, se dispone de las observaciones siguientes:


• Cuando la madre es sometida a esfuerzos moderados y de corta duración, no se
observan modificaciones de velocidad de circulación a la aorta descendiente.
• El volumen plasmático y el cabal cardíaco materno son menores en bipedestación
que en decúbit, lo cual sugieren una menor circulación uteroplacentaria en
bipedestación; este hecho explica que las madres con actividad laboral en
bipedestació prologada tienen una mayor incidencia de nacidos de peso bajo.

En general, el trabajo implicaría:


• Contracciones musculares, con una aumento de la actividad simpática
vasomotora de los tejidos que trabajen sobre los que no lo hacen.
• Un aumento del cabal cardíaco durante el ejercicio muscular, incrementando la
circulación hacia los músculos en acción y disminuyéndola en otras vísceras,
como la placenta, que no posee sistema de autoregulación, con descenso de la
circulación uteroplacentaria.
• Durante el esfuerzo físico, el aumento de catecolaminas implica una
vasocontricción arteriolar, la temperatura corporal aumenta, y la sudación
consecuente para producir una disminución del volumen plasmático que puede
agravar la disminución de la circulación uteroplacentaria. En general, la capacidad
de reserva placentaria es suficiente para no alterar la homeostasi fetal ante estos
ajustes maternos.

Es necesario nombrar especialmente las actividades en que hay una alteración


frecuente de los ritmos cardíacos (cambios en el turno horario de trabajo), ya que
estos cambios inducen alteraciones en el ritmo son vigilia, patología gastrointestinal
y una aumento del riesgo cardiovascular. En las mujeres con cambios habituales en
los horarios de actividad laboral, se ha observado un aumento en la incidencia de
aborto y menor peso en los recién nacidos, con un incremento del crecimiento
intrauterinno atrasado, pero sin cambios en la tasa de nacidos pretérmino, aunque
otras observaciones no coincidan con este último hecho.

Aspectos psicológicos del embarazo


Actualmente se considera la gestación como un estado fisiológico, y esto ha
originado que tanto el número de mujeres Gestantes como el periodo de tiempo
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durante el embarazo con actividad laboral normal sea cada vez más grandes. Este
hecho obliga a considerar aspectos relacionados con el bienestar materno-fetal,
tanto físico como psíquico. Históricamente se tenia la idea de que cualquier tipo de
trabajo comprometía la capacidad de la mujer por tener un hijo normal y sano, lo que
propiciaba la dificultad del embarazo para acceder la mundo laboral; actualmente,
las cosas han cambiado, aunque esta discriminación puede tener repercusiones
psíquicas. El estrés psicosocial que sufre la mujer es diferente en cada grupo de
población, y puede ser cuantificado usando las variables demanda y control; las
tareas con baja demanda y alto control se asocian con un riesgo menor. Las mujeres
con una actividad laboral más estresante pueden tener una incidencia más grande
de cesáreas, nacimientos pre-término, enfermedades hipertensivas del embarazo y
nacidos con bajo peso. Además otros factores como el estado civil y la posición
socioeconómica condicionan, en la gestación, más o menos estres. Así, se hja
comprobado que las mujeres casadas y con buena posición social viven una
situación menos estresante durante el embarazo.
Esta situación hace que la mujer activa profesionalmente atrase la edad de su
reproducción. Actualmente, el concepto de primípara de edad avanzada se
establece a partir de los 38 años, y se observa una aumento percentual en el grupo
de edad de las mujeres que tienen su primer hijo por encima de esta edad.
Riesgos específicos del trabajo
Los riesgos ambientales y ocupacionales del lugar de trabajo tienen una significación
específica cuando se considera el caso de la mujer embarazada.
Es fundamental individualizar la valoración de cada gestante, dado que el riesgo
específico depende del tipo de lugar de trabajo y de la susceptibilidad de la
embarazada, tal como hemos mencionado en el apartado 4.4.12, Capítulo II.

4.3.8. Relaciones sexuales

El embarazo, como otras situaciones que envuelven la vida, puede modificar las
relaciones sexuales. Por este motivo, es importante informar a la mujer y a su pareja
de los cambios físicos y psicológicos que pueden influir en las relaciones sexuales
durante este periodo.

Muchas parejas agradecen que se les informe de que los cambios de


comportamiento que pueden haber observado, y que irán observando, están dentro
de la normalidad. Se les informará también de que no hay ninguna razón científica
que avale el cambio de la actividad sexual durante la gestación. Por lo tanto, si el
embarazo es normal, no será necesario modificar o interrumpir los hábitos sexuales,
siempre que no resulten molestos o desagradables para la embarazada.

A lo largo de las visitas de control y seguimiento del embarazo, es importante que el


profesional escuche a la gestante y le transmita confianza y seguridad para que
pueda plantear abiertamente sus dudas. El profesional ha de ser capaz de informar
sobre los cambios que se producen durante el embarazo y como pueden modificarse
las relaciones sexuales, en algunas parejas.

Primer trimestre
En algunos casos, las nauseas y los vómitos durante los tres primeros meses de
gestación pueden actuar disminuyendo la apetencia sexual. Además, los cambios
precoces en algunas partes del cuerpo, como por ejemplo los pechos, pueden
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inhibir también las relaciones sexuales durante las primeras semanas, sobre todo
por la sensación de dolor. Si esta situación se produce, es fácil que la mujer no
considere los pechos como objetos eróticos. La estimulación de los pezones por
parte de la pareja ha de ser suave y la mujer ha de manifestar si las sensaciones
son agradables.

También se puede producir durante este periodo una preocupación en la pareja


sobre la posibilidad de un aborto. Esta situación ejerce una marcado efecto sobre la
expresión física de las sensaciones sexuales, incluso sobre la capacidad de sentirse
excitados, tanto la mujer como su pareja. El hombre, en este caso, puede estar
nervioso e incómodo en esta situación y sentirse como una amenaza directa para su
hijo.

En estos casos, hay una situación de ansiedad e interacción negativa, cosa que
motiva a veces que la pareja deje de acariciarse o de abrazarse por miedo a
excitarse sexualmente. En este aspecto, el profesional ha de ayudar a conseguir que
en la pareja vayan desapareciendo estos miedos, y que se entienda que es
necesario continuar manifestando afecto a través de las caricias, la ternura y la
comunicación.

El cansancio que experimenta la mujer en el primer trimestre de gestación también


puede modificar el ritmo de las relaciones sexuales.

No obstante, algunas mujeres disfrutan más de las relaciones cuando saben que
están embarazadas, ya que no requieren ningún método anticonceptivo. Pero al
revés suele ser más frecuente después de las diez o doce semanas de gestación,
una vez la mujer ha superado las nauseas y los vómitos, el miedo a un aborto, o el
cansancio.

Se ha de tener en cuenta que la expresión de la sexualidad también está


íntimamente relacionada con el deseo de estos embarazos. Es muy probable que la
pareja que no acepta el embarazo no disfrute de sus relaciones sexuales
inicialmente. Es necesario hablar sobre estos aspectos también en la consulta.

Segundo trimestre
Los cambios que se producen durante el segundo trimestre (mayor congestión de
los tejidos que rodean la vagina, etc.) hace que en algunas mujeres haya una mayor
excitación sexual. Esta sensación hace que a veces no se corresponda con la de su
pareja que puede continuar teniendo miedo de hacer algo perjudicial para su hijo.

La pareja ha de saber que las relaciones sexuales con o sin penetración en las
cuales haya orgasmo pueden producir alguna contracción, cosa que está
considerada como normal.

Probablemente la pareja, a medida que va avanzando el embarazo, tenga la


necesidad de adaptar sus técnicas o posturas sexuales.

Es importante informar de los cambios relacionados con la sexualidad que se


pueden producir, como por ejemplo, aumento de la lubrificación, cambios en las
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zonas erógenas o de la libido. Es necesario continuar insistiendo en la comunicación


con la pareja.

Determinadas pruebas que se pueden realizar durante el embarazo, como por


ejemplo, la anmiocentesis, requieren que la pareja sea informada sobre las
relaciones sexuales. Los profesionales han de informar de la necesidad de no tener
relaciones sexuales después de la realización de la prueba.

Tercer trimestre
Durante este trimestre el abdomen de la mujer experimenta el crecimiento más
grande. En esta situación, el coito utilizando la postura clásica puede resultar
incómodo; si es así, se pueden plantear otras alternativas a la actividad coital,
informar de la posibilidad de adoptar diferentes cambios posturales, y recomendar
incrementar los estímulos táctiles, como forma de disfrutar de la sexualidad.

La relación sexual amorosa puede contribuir de forma efectiva al bienestar durante


el embarazo, ya que la pareja intercambia afectividad y ternura.

Situaciones que modifican las relaciones sexuales

El profesional ha de informar sobre cuando se han de evitar las relaciones sexuales,


como por ejemplo cuando se presentan hemorrágias o pérdidas de sangre por los
genitales, amenaza de aborto, amenaza de parto prematuro o rotura de la bolsa de
las aguas, o ante determinadas pruebas como la anmiocentesis. Pero se ha de
fomentar en estas situaciones las caricias para mantener un buen nivel de
sensualidad y afecto, muy importantes durante el embarazo.

En los casos en que se han producido pérdidas durante el primer trimestre, u otras
situaciones en las cuales se ha aconsejado no mantener relaciones sexuales con
coito por la posibilidad de aumentar el riesgo de aborto, es importante que los
profesionales no se olviden de indicar cuando ya no hay riesgo y, por lo tanto, se
pueden iniciar de nuevo las relaciones con coito, dado que, si no se hace así, hay
algunas parejas que no solo continúan evitando del coito, sino también, con
frecuencia, cualquier otra forma de mantener relaciones sexuales a lo largo de todo
el embarazo, o sentirse culpables si lo hacen.

En cuanto a las Gestantes que durante el embarazo tengan conductas sexuales de


riesgo, será necesario informarles sobre las medidas a seguir (ver apartado 4.3.9, a
continuación).

4.3.9. Consejos para la prevención y el control de las enfermedades de


transmisión sexual y del sida.

Las enfermedades de transmisión sexual (ETS) son aquellas enfermedades de


naturaleza infecciosa para las cuales la transmisión sexual tiene la importancia
epidemiológica, aunque en algunas de ellas este mecanismo no es el más
importante.
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Este concepto de ETS engloba las clásicas enfermedades venéreas (sífilis,


gonocóccia, chancro blando, limfagranuloma venereo y granuloma inguinal) y otras
enfermedades que se transmiten o pueden trasmitirse por las relaciones sexuales,
como las infecciones genitales para clamídías (serotipos D-K) o micoplasmas, el
herpes genital, los condilomas acuminados, la hepatitis B, etc. La incorporación más
reciente ha sido el virus de la inmunodeficiencia humana (HIV), que es la ETS más
grave, ya que todavía no se dispone de tratamiento ni vacunas eficaces para curarla.
En la Tabla 1 se muestran los principales agentes infecciosos implicados, así como
la enfermedad o síndrome que ocasionan.

Las infecciones por N. gonorrhoeae, C. trachomatis o M. hominis pueden ocasionar,


en la mujer, la enfermedad inflamatoria pélvica (MIP), que puede ser causa de
embarazos ectópicos e infertilidad. Determinados genotipos de papilomavirus
humano están relacionados con el carcinoma espinocelular del aparato genital.
También es necesario tener en cuenta el sinergismo entre la infección por el HIV y
otras enfermedades de transmisión sexual.

Tabla 1. Agentes infecciosos, implicados, con la correspondiente enfermedad


o síndrome
AGENTE ENFERMEDAD O SÍNDROME MÁS FRECUENTE
Bacterias
Tremponema pallidum Sífilis
Neisseria gonorrhoeae Gonocòccia
Haemophilus ducreyi Xancre tou
Calymmatobacterium granulomatis Granuloma inguinal
Chlamydía trachomatis (L1 L2 L3) Limfogranuloma inguinal
Chlamydía trachomatis (D-K) Uretritis y cervicitis
Ureaplasma urealyticum Uretritis y cervicitis
Mycoplasma hominis Uretritis y vaginitis
Streptococcus grup B Fiebre post-parto
Gardnerella vaginalis Vaginosis bacteriana

Virus
Virus de l’herpes simple Herpes genital
Papilomavirus humano Condilomas acuminates
Virus de la hepatitis B Hepatitis B
Virus de la inmunodeficiencia humana Sida
Virus del Molluscum contagiosum Molluscum contagiosum
Citomegalovirus Patología perinatal

Protozous
Trichomonas vaginalis Vaginitis y uretritis

Fongs
Diversas especies del género Candida Vulvovaginitis y balanopostitis

Artropodas
Phtrirus pubis Pediculosis púbica
Sarcoptes scabiei Escabiosi
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Desde el punto de vista de la morbilidad y mortalidad maternofilial, estas infecciones


se asocian a una incidencia más grande de embarazo ectópico, abortos de
repetición, conjuntivitis o pneumonías.

Una característica de las ETS, especialmente en las mujeres, son las formas
Asíntomáticas (no se evidencian ni signos ni síntomas de la enfermedad). Las
infecciones por C. trachomatis i N. gonorrhoeae suelen presentarse de forma
Asíntomática, solamente de un 10 a un 30% presentan sintomatología (cervicitis
mucopurulenta o salpingitis). Por esto, es conveniente investigar la presencia de
ciertos microorganismos, como N. gonorrhoeae o C. trachomatis y la existencia de
serología compatible con sífilis en las mujeres que mantienen conductas de riesgo o
que han tenido relaciones sexuales con personas infectadas, aunque no tengan
síntomas, para aplicar el tratamiento correcto y evitar posibles complicaciones y/o
secuelas.

Magnitud del problema


Las ETS constituyen la segunda causa de enfermedades declaradas según los
registros de morbilidad europeos, solo precedida por las infecciones del tracto
respiratorio.

En Cataluña, igual que en la mayoría de países desarrollados, las enfermedades


que están teniendo un incremento más grande entre las ETS son las uretritis y/o
cervicitis no gonococcicas (UNG) y las enfermedades víricas (especialmente
condilomas acuminados, infección por el virus de la inmunodeficiencia humana y
herpes genital). Bien al contrario, la incidencia de sífilis y gonococcia ha disminuido
en los últimos años, como muestras los datos del sistema de notificación obligatoria
(MDO). El registro de los pacientes atendidos en los centros de prevención y control
de las ETS también lo confirma.

En cuanto al sida, la vía de transmisión más frecuente para la infección del virus de
la inmunodeficiencia humana (HIV) a partir de los casos de sida, tanto en hombres
como en mujeres, es la de usuarios de drogas por vía parentaral (UDVP). En cuanto
a la transmisión sexual del HIV, se ha dado como probable vía de contagio como
mínimo en el 35% de estos casos diagnosticados durante el año 1996. Se ha
observado una tendencia al aumento de casos en los pacientes heterosexuales y a
la estabilización en los pacientes homosexuales, durante los últimos cinco años.

4.3.9.1. Recomendaciones generales


Los consejos para la prevención y el control de las ETS y el sida, deben dirigirse a
todas las mujeres sexualmente activas que no tengan pareja cerrada, en particular a
las mujeres con prácticas sexuales de riesgo (mujeres con múltiples parejas
sexuales, prostitutas, drogadictas por vía parenteral) y, muy especialmente, a las
adolescentes. Debe tenerse en cuenta que son útiles sobre todo durante la etapa
pregestacional y también durante el embarazo, aunque teniendo presente que son
las mismas recomendaciones que se dan en otros ámbitos y a toda la población en
general.

Las adolescentes están en proceso de adquirir conocimientos, y es el momento de


informarlas y educarlas sobre los peligros que comportan las ETS y la forma como
se han de prevenir estas enfermedades.
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Aunque los jóvenes no escolarizados, comparados con sus compañeros


escolarizados, practican más frecuentemente conductas sexuales de riesgo, no se
ha de caer en el error de creer que hay un solo prototipo de adolescente de riesgo
(masculino, no escolarizado y de nivel socioeconómico bajo). Así, la mayoría de
personas que han tenido relaciones sexuales desprotegidas durante la adolescencia
son individuos sanos desde un punto de vista psicológico, tienen padres que los
ayudan y acaban los estudios con éxito. No olvidemos que la adolescencia es un
periodo de experimentación en que el individuo a menudo se siente vulnerable y no
siempre tiene la madurez o las habilidades suficientes para evitar situaciones de alto
riesgo. Diversos estudios llevados a cabo en el ámbito catalán en adolescentes
escolarizados de una mediana de edad de 16 años indican que cerca de un 15%
han tenido relaciones sexuales de penetración y solo la mitad afirma utilizar siempre
el preservativo. Alrededor de un 14% de los sexualmente activos declara haber
tenido relaciones sexuales con parejas desconocidas en el último año. Estas
conductas de riesgo, paradoxalmente, no se asocian con peores conocimientos
sobre el sida.

Por otro lado, los adolescentes son individuos poco frecuentadores de los servicios
sanitarios y una gran mayoría declaran que no tienen suficiente confianza en su
médico para tratar cualquier tema. A un 70% pero, les gustaría recibir información
sobre estas patologías por parte de los profesionales sanitarios.

Es conveniente, pues, aprovechar la estancia de la mujer que por cualquier motivo


acuda a los servicios médicos para preguntarle sobre sus prácticas sexuales y/o
antecedentes relacionados con el consumo de cualquier tipo de drogas y, si es
necesario, dar los consejos para la prevención de estas enfermedades. Es necesario
remarcar que el hecho de cambiar de conducta de riesgo por otra más segura
disminuye el riesgo de enfermar.

Para que la adopción del consejo propuesto sea el más eficaz posible, la mujer ha
de estar dispuesta a compartir la información de sus comportamientos y opiniones y
ha de estar abierta a las opciones propuestas por el sanitario. El paso de conocer
como prevenir las ETS a modificar su conducta sexual por otra más saludable es
difícil y, además, este cambio no se puede basar en el miedo a sufrir estas
enfermedades, sino en la modificación de aquellos elementos de sus prácticas
sexuales que hacen que sean de riesgo. Las modificaciones no se han de realizar
todas a la vez. Para que una modificación de conducta sea duradera debe
priorizarse según el riesgo y la dificultad que le supone al individuo, y se debe
intentar conseguir con pequeños cambios.

Los consejos para la prevención de las ETS han de ser generales para todas ellas,
ya que, a pesar de que algunas ETS se pueden evitar aplicando medidas que para
otras resultan ineficaces, son las mismas conductas de riesgo las que condicionan la
aparición de una (o diversas) ETS en un momento determinado y que,
posteriormente, facilitarán la aparición de otras enfermedades.

La incorporación del sida como ETS es un hecho que refuerza que la mejor
estrategia que se puede realizar es la prevención primaria, es decir, la que pretende
evitar que aparezcan nuevos casos de enfermedad.
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4.3.9.2. Recomendaciones específicas par al prevención primaria

La prevención primaria de las ETS y el sida se basa en la adopción personal de


conductas seguras.

La conducta sexual
Las acciones que eliminan totalmente la posibilidad de contagiarse son la
abstinencia de relaciones sexuales o bien la práctica monogamia mutua entre dos
personas no infectadas.

Estas medidas se pueden recomendar y las practicarán determinados individuos de


la comunidad, pero no pueden generalizarse al conjunto de la población porque van
en contra de creencias y de actitudes sobre las relaciones personales y sociales
perfectamente aceptadas en la sociedad actual.

A las mujeres que han optado por unas relaciones sexuales diferentes a las
mencionadas se les ha de recomendar las prácticas sexuales que comportan un
menor riesgo de transmisión, como:
• Reducir el número de parejas sexuales, ya que al aumentar el número aumenta la
probabilidad de contacto con parejas con conductas de riesgo.
• Extremar las medidas de protección en las relaciones sexuales con personas que
tienen un riesgo elevado de sufrir una infección por HIV o por otros agentes de
ETS.
• Evitar las prácticas sexuales que faciliten la producción de traumas en la mucosa
rectal, ya que son un factor de riesgo tanto de la infección del HIV como de
cualquier otra ETS. La Tabla 2 muestra el gradiente más alto a mes bajo riesgo
que tienen las diferentes prácticas sexuales para transmitir el HIV.
• Utilizar correctamente y sistemáticamente el preservativo. En caso de no disponer
de preservativo, deben emplearse técnicas de sexo seguro (safe sex), como
masturbación mutua, caricias, besos, etc.

Tabla 2. Gradiente de riesgo de tranmsión que comportan las diferentes


prácticas sexuales con personas infectadas por el HIV.
ALTO RIESGO
- Coito anal sin protección

- Coito vaginal sin protección

Coito vaginal o anal con uso correcto de preservativo

- Besos con intercambio de saliva


BAJO RIESGO

Preservativo masculino
Es una funda de látex que recubre el pene, protegiendo del contacto con el semen y
las secreciones y las lesiones genitales.

En modelos experimentales, el preservativo ha demostrado ser eficaz, frente al virus


del herpes simple, Chlamydía trachomatis, citomegalovirus, HIV y virus de la
hepatitis B (HBV).
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En estudios epidemiológicos, el preservativo ha resultado eficaz frente a la infección


por HIV y de la enfermedad inflamatoria pélvica.

El preservativo es entre los diferentes métodos anticonceptivos el más eficaz. Se


estima que su eficacia es del 85-90%, si se utiliza correctamente. Cuando el
preservativo se utiliza acompañado de espermicidas (nonoxynol-9) su eficacia
aumenta.

El preservativo se ha de poner antes del contacto genital cuando el pene está


erecto, se ha de mantener intacto durante la relación sexual y se ha de retirar
inmediatamente después de la eyaculación, antes que desaparezca la erección.

Es conveniente recomendar la utilización de preservativos lubrificantes tanto para la


penetración vaginal como anal. Si se desea más lubrificación, debe hacerse uso de
cremas hidrosolubles como la glicerina, nunca cremas que contengan aceites como
la vaselina, lanolina, etc., ya que este tipo de productos disminuyen la resistencia del
preservativo y facilitan su ruptura.

La Tabla 3 recoge las principales recomendaciones que hay que hacer para una
correcta utilización del preservativo.

Tabla 3. Instrucciones para la correcta utilización del preservativo masculino


- Deben utilizarse preservativos de látex porque son los que ofrecen una mejor protección
- Deben utilizarse un preservativo nuevo cada vez
- Debe ponerse el preservativo cuando el pene esté erecto y antes de cualquier contacto genital
- Si el preservativo se rompe durante el coito, debe retirarse inmedíatamente el pene y poner un
preserativo nuevo
- Desues de la eyaculación, la base del preservativo debe de sujetarse mientras se retira del pene. El
preservativo debe sacarse cuando el pene está erecto.
- El preservativo utilizado debe tirarse a la basura
- Si se quieren utilizar lubrificantes, estos deben tener excipientes acuosos. Los lubrificantes que tienen
aceite, petróleo o derivados ablandan el látex. No debe utilizarse saliva porque puede contener
microorganismos patógenos.
- Los preservativos deben guardarse en un lugar fresco y seco, lejos de la luz solar
- Los preservativos agrietados o pegajosos no deben utilizarse
- Actualmente, los preservativos han de estar homologados de acuerdo con el Real decreto 1688/1991,
de 22 de noviembre o el Real decreto 414/1996, de 1 de Mayo. A partir del 15 de junio de 1998 solo se
podrán homologar para la aplicación de la Directiva 93/42/CEE.

Preservativo femenino
Es una funda lubrificada de poliuretano con una anilla adaptable a cada extremo,
que recubre las paredes vaginales y el cuello del útero. Este preservativo forma una
barrera impermeable a las secreciones y lesiones genitales. Las normas de
utilización se recogen en la Tabla 4.

Tabla 4. Instrucciones para la correcta utilización del preservativo femenino


- Es una funda suave y flexible de poliuretano, que se adapta perfectamente a la vagina. Tiene
dos anillas, la anilla interior debe colocarse por detrás del pubis y la anilla exterior ha de restar
fuera de la vagina.
- Debe utilizarse un preservativo nuevo en cada relación sexual (en una misma relación sexual
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no es necesario cambiar el preservativo, si hay diversas penetraciones).


- Se puede colocar antes de la relación sexual y no cal retirarlo inmedíatamente después del
coito
- El preservativo utilizado debe tirarse a la basura
- Este preservativo está lubrificado, por lo cual no es necesario el uso adicional de ninguna
crema espermicida.
- Los preservativos deben guardarse en un lugar fresco y seco, lejos de la luz solar
- Los preservativos agrietados o pegajosos no deben utilizarse

Las vacunas
Actualmente, solo se dispone de la vacuna antihepatítica B. En Cataluña, todos los
escolares de 6º de EGB (11 a 12 años) son vacunados frente al virus del hepatitis B.
Y también se vacunan los recién nacidos de madre portadora (ver apartado 4.4.13,
Capítulo II).
Es conveniente que las personas que tienen múltiples parejas sexuales se vacunen
contra esta enfermedad. En Cataluña hay un programa de vacunas que incluyen
este grupo de riesgo.
Para vacunar correctamente es necesario administrar tres dosis de vacuna (a los 0,
1 y 6 meses).

La vía sanguínea
Algunos microorganismos patógenos que se contagien por vía sexual se pueden
transmitir por vía sanguínea, como es el caso del virus de la hepatitis B y del HIV.
Los mensajes para la prevención de estas enfermedades por vía parenteral deben
ser:
a) Es necesario eliminar o reducir el uso de drogas por vía parenteral

El objetivo es la eliminación de este tipo de drogadicción (abstinencia), como medida


de prevención de enfermedades, pero esto comporta en algunos adictos serias
dificultades, y hace necesario seguir las recomendaciones sobre la utilización más
segura de la inyección:

• Reducir y/o eliminar el uso compartido de jeringas y material de preparación de


las drogas inyectables.
• Promover el uso de jeringas estériles. Enseñar medidas de higiene de las jeringas
y de la preparación de la droga (taula 5 y 6).
• Promover el cambio de la via de administración (d’endovenosa a nasal).
b) Evitar el contacto con material médico no esterilizado (agujas, bisturís, etc.).
c) No utilizar utensilios de otra persona (cepillos de dientes, maquinas de afeitar,
etc.).

Es necesario tener en cuenta que algunas mujeres drogadictas ejercen la


prostitución para obtener droga, o bien dinero para comprársela. En estas mujeres
es necesario hacer énfasis en el uso del preservativo y también a evitar el uso
compartido de jeringas y material de preparación de las drogas.
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Tabla 5. Técnicas de reducción de riesgo de infección por el HIV por via


parenteral

1. Lavarse las manos y la piel con jabón antes de la venopunción


2. Para disolver la droga, abrir el grifo del agua y dejar correr un poco. Es mucho mejor hervirla primero.
Es una buena alternativa hacer servir agua mineral sin gas. No debe utilizarse nunca ninbún otro tipo de
agua. Es preferible no utilizar zumo de limón natural, puede estar contaminado. Es suficiente un poco de
vitamina C. Demasiada cantidad vuelve ácida la droga.
3. No usar nunca la cuchara de nadie. Dsponer de cuchara propia. Desinfectar la cuchara cada vez.
4. No dividir nunca la droga inyectando una parte directamente dentro de otra jeringa, a traves de la
aguja de esta segunda jeringa. Es necesario hacer primero las partes, prepararlas por separado y
cargar las jeringas por separado.
5. Utilizar aguja y jeringa estériles. Es necesario tener siempre una jeringa limpia encima. Si no es así,
conseguirla antes de consumir o, si todavia no se dispone de la dosis, antes de conseguirla dosis. En
caso de emergencia y de no disponer de una jeringa limpia, puede utilizarse la vieja después de hervirla
o de lavarla con lejía (Tabla 6).
6. Desinfectar la piel del lugar de la inyección con alcohol. No utilizar algodón usado.
7. No aceptar nunca la jeringa de otro y no dejar nunca la propia a nadie.
8. No inyectarse nunca al cuello, a los músculos o bajo la piel. Inyectarse cada vez en un lugar
diferente.
9. En caso de infección, consultar al médico inmedíatamente.
10. Si se quiere volver a usar el equipo de inyección, desinfectarlo y ponerlo en alcohol hasta la
siguiente vez. No dejar las agujas usasdas en cualquier lugar. Ponerlas en un cartón de leche o similar
(Tetrabrik) antes de tirarlas.

Tabla 6. Como usar la lejía


1. Poner lejía no diluida en un vaso
2. Llenar la lejía, con la aguja puesta, hasta el máximo de capacidad. Vaciar la jeringa. Repetir la
operación.
3. Poner agua del grifo en un vaso
4. Llenar la jeringa, con la aguja puesta, hasta el máximo de capacidad. Vaciar la jeringa. Repetir la
operación.

La transmisión sexual
Para evitar el contagio de estos microorganismos patógenos al feto o al recién
nacido es necesario realizar a las mujeres embazadas con comportamiento de
riesgo los cribados siguientes:
• Hepatitis B: en mujeres embarazadas con prácticas de riesgo para las ETS es
conveniente realizar la investigación durante el primer trimestre del embarazo
para evitar las complicaciones neonatales (ver apartado 4.4.13, Capítulo II).
• Sífilis: en el primer trimestre del embarazo. Si la paciente es de alto riesgo para
las ETS, conviene repetirlo al tercer trimestre.
• Infección por Neisseria gonorrhoeae: en mujeres embarazadas con prácticas de
riesgo para las ETS es conveniente realizar la investigación durante el primer
trimestre del embarazo para evitar las complicaciones neonatales.
• Infección para Chlamydía trachomatis: en mujeres embarazadas con prácticas de
riesgo para las ETS es conveniente realizar la investigación durante el tercer
trimestre del embarazo para evitar las complicaciones neonatales.
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• HIV: Se ofrecerá la realización del cribrado serológico a todas las mujeres durante
el primer trimestre del embarazo, previo consentimiento informado (ver apartado
5.3.12., Capitulo I).

4.3.9.3. Recomendaciones específicas para la prevención secundaria

Las principales recomendaciones que ha de incluir el consejo sanitario dirigido a una


mujer que ya tiene ETS son las siguientes:
• Tomar la medicación tal como está prescrita
• Volver a la consulta para comprobar la curación
• Asegurar el examen de la/las pareja/s sexual/es
• Reducir el riesgo mediante:

. Abstenerse de cualquier relación sexual hasta que se haya comprobado


curación
. Abstenerse de cualquier actividad sexual siempre que aparezcan síntomas
• Acudir a los servicios médicos cuando sospeche un contagio

Así mismo, es importante advertir que las infecciones asíntomáticas son frecuentes.
El profesional que da el consejo ha de valorar que aspectos son más importantes
par la mujer que tiene delante y se los debe dar en el orden adecuado. De manera
general, es necesario pensar que la paciente responderá mejor a aquellos consejos
que tengan relación con su enfermedad. En según lugar, se le han de dar los
mensajes mensajes que hagan referencia a la salud de aquellas personas que
estima o que están mas cerca de ella; en tercer lugar, se le han de hacer ver los
beneficios propios a lo largo plazo y, en último lugar, se le ha de hablar de los
beneficios para la salud de la comunidad.
4.3.9.4. Recomendaciones específicas para las mujeres HIV positivas

En estas mujeres, el consejo sanitario ha de hacer referencia a los aspectos


siguientes:
• Que supone estar infectada. Debe ofrecerse el apoyo médico (frecuencia y tipo
de controles) y piscológico adecuado.
• La conveniencia de informar a todos los nuevos contactos sexuales de su
infección
• No se deben compartir agujas, cepillos de dientes, maquinas de afeitar u otras
objetos que puedan contener restos de sangre.
• No deben hacerse aportaciones de sangre, plasma, órganos corporales, leche o
tejidos.
• Es necesario evitar que sus parejas contacten con las secreciones vaginales o
con su sangre. El preservativo reduce el riesgo de transmisión del HIV.
• Es necesario abstenerse de relaciones sexuales cuando uno de los componentes
de la pareja presenta una ulceración o lesión a la región genital, anal o oral, así
como durante la menstruación.
• Informar a las parejas antiguas de su infección y animarlas a investigar su
estado serológico.
• Evitar el embarazo (utilización adecuada de los servicios de planificación
familiar).
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En el caso que de que la mujer esté embarazada, se le ha de informar del riesgo de


infección perinatal, para que pueda escoger si opta por la continuación o por la
interrupción voluntaria del embarazo. Si decide continuar el embarazo, se le ha de
ofrecer el tratamiento con Zidovudina. Este tratamiento reduce el riesgo de
transmisión al recién nacido (del 25% al 8%) si se administra a la mujer durante el
embarazo, durante el parto y al niño durante los primeros seis meses de vida.

Las mujeres que sufren una seroconversión se encuentran en una situación


emocional y social muy delicada que hace que, en principio, sean más receptivas al
consejo sanitario. Pero no se puede olvidar que, además de estos consejos,
necesitarán muy probablemente apoyo psicológico, de servicios sociales y de
servicios médicos continuados. Se les debe aconsejar que expliquen su estado
serológico solo a aquellas personas más próximas que realmente las puedan
ayudar.

Aunque los consejos sobre la infección por el HIV comparten los mismos principios
que todas las otras ETS, esta enfermedad requiere una mayor dosis de tacto y
sensibilidad por parte de los profesionales sanitarios.

No se puede perder de vista que el futuro del sida en la comunidad dependerá en


gran manera de cómo se estructuren y de cómo se realicen las actividades de
información y de educación sanitaria tanto entre la población no infectada como
entre la población que lo está, especialmente en colectivos como adolescentes y
mujeres en edad fértil, que en nuestro medio suponen el mayor número de
infecciones evitables.

4.3.10. Tabaco
El hecho de fumar durante el embarazo se considera un factor de riesgo. La nicotina
es un tóxico vascular con efecto vasoconstrictor, reduce la circulación placentaria y
dificulta la aportación de nutrientes al feto. Por eso es necesario conseguir que
ninguna embarazada fume. Para abandonar este hábito, la educación sanitaria y el
apoyo psicológico son fundamentales.

Es importante, también, tener en cuenta si la gestante es una fumadora pasiva, tanto


en casa como en el trabajo, ya que el humo que surge de la combustión del cigarro
contiene una concentración más alta de substancias tóxicas que el humo aspirado
por el fumador pasivo. Por esto es importante velar desde nuestra responsabilidad
porque el ambiente que envuelve a la embarazada esté libre de humo.
Es necesario tener en cuenta que el embarazo es un momento durante el cual las
mujeres que fumen esperen que se les interrogue sobre su hábito tabáquico y
muchas de ellas están particularmente receptivas a la idea de dejar de fumar. Por
otro lado, los profesionales de la salud pueden sentirse más motivados a abordar el
tema del abandono del hábito tabáquico si la mujer está embarazada.
Podemos distinguir tres principios generales, para ayudar a las mujeres
embarazadas a dejar de fumar, que deberán tenerse muy presentes: Presiones,
fases y abordaje personal y positivo.

Presiones
La mujer embarazada fumadora necesita reconocer y comprender algunas de las
presiones que la inducen a fumar y que dificulten, a menudo, el abandono del
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tabaco. El profesional sanitario deberá conocer estas presiones o causas y tratar de


entenderlas.

Fases
Hay diferentes fases en el proceso de dejar de fumar:

El comportamiento del fumador depende de las actitudes de la persona respecto a


su hábito, por lo cual estas actitudes deberán cambiar antes si quiere conseguir que
el comportamiento cambie.

El proceso de abandono del hábito tabáquico pasa gradualmente (y pueden ser


necesarios años) a través de las fases siguientes, que se llaman el círculo del
cambio:

• Pensar en el cambio
• Prepararse para el cambio
• Realizar el cambio
• Mantener el cambio o bien recaer

Muchas fumadoras han de pasar por este proceso diversas veces, recayendo y
volviéndolo a intentar.

Abordaje personal y positivo


Se ha de tener presente lo siguiente:
• Cada persona tiene un nivel de valoración diferente de los riesgos de fumar y de
los beneficios de dejarlo. Esto es válido para la mujer embarazada y también,
incluso, para los profesionales que la atienden.
• Cada persona es diferente en términos de:
• Determinación para dejar el tabaco
• Nivel de dependencia nicotínica
• Barreras / obstáculos para dejar de fumar
• Habilidades / instrucciones para conseguir el cambio de comportamiento
• Manera como el fumador puede controlar todo el proceso de abandono del
hábito tabáquico

Lo que debe hacerse en la primera visita:


Debe preguntarse a todas las mujeres embarazadas por su hábito tabáquico, y si es
fumadora hacerle las preguntas siguientes:
• Que sabéis / pensáis sobre las consecuencias de fumar?
• Que pensáis de dejar de fumar y de los beneficios de hacerlo?
• Hasta que punto os planteáis dejar de fumar?

A partir de las respuestas obtenidas a estas preguntas podremos conocer en que


fase del proceso de abandono del hábito tabáquico se encuentra la mujer
embarazada:
• Fase “consonante”
• Fase “disonante”
• Fase “de intento”
• Fase de “mantenimiento”
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• Fase de “recaida”

La mujer embarazada fumadora “consonante” (es decir, aquella mujer embarazada


que no se plantea en absoluto dejar de fumar):
• Abandonar el hábito tabáquico pasa a un segundo orden de prioridad
• Corregir la información errónea, falacias, creencias falsas
• Dar información y consejo solo si ella lo pide
• Ofrecer apoyo para su futuro
• Advertir a la mujer que se le volverá a preguntar más adelante sobre el hábito
tabáquico

La mujer embarazada fumadora “disonante” (aquella que pensaba dejarlo)

• Intercambiar información para hacer la exploración de la actitud de la gestante,


buscar las presiones que inducen a su hábito y valorar su nivel de dependencia
física o nicotínica: es necesario vehicular información relevante y corregir
conceptos o creencias erróneas, si se detectan.
• Ofrecer consejo y apoyo durante todo el proceso de abandono del hábito
tabáquico. Se debería hacer el registro del hábito, explicar los beneficios de
dejarlo, los trucos y las instrucciones para conseguirlo, etc.
• Animarla fervientemente a dejar el tabaco.
• Decir a la gestante que le preguntemos de nuevo respecto a este tema en
próximas visitas.
• Asegurarse de tener nuevos contactos después del parto para hablar del tema
del tabaco.

Dejar de fumar durante el embarazo, “intento”:


• Repetir o amplificar el intercambio de información relevante para la mujer.
• Aconsejar y guiar en las acciones siguientes:
• Fijar una fecha: escoger un “día D” para dejar de fumar y hacerlo saber a los
amigos/familiares.
• Eliminar todo aquello que tenga que ver con el tabaco (paquete de cigarros,
ceniceros, cerillas, etc.)
• Hacerlo de golpe: fijarse como a objetivo dejar de fumar completamente y de
golpe (en lugar de reducir la cantidad de cigarros)
• Buscar ayuda y apoyo en los demás: familia, amigos, ex-fumadores o
profesionales/especialistas.
• Distraerse: hacer cosas diferentes, especialmente en los momentos que más
se fumaba. Evitar los fumadores durante un tiempo.
• Ofrecer ayuda (farmacológica o de otro tipo) cuando sea necesario.
• Alentar, dar ánimos
• Ofrecer seguimiento; asegurarse de ser fácilmente contactable (personalmente
o telefónicamente) o bien ofrecer / sugerir el apoyo de otro profesional.

Mantenerse sin fumar, “mantenimiento”:


• Asegurar el contacto postnatal con aquellas mujeres que han dejado de fumar
durante el embarazo (dos tercios de ellas recaen después del parto).
• Repetir o amplificar el intercambio de información relevante para la mujer.
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• Guiar y aconsejar, vehiculando los mensajes siguientes:


• Ocupaos solo de hoy; concentraos en el día de hoy, no penseis en un futuro
sin fumar
• Desarrollad alternativas efectivas (manos ocupadas), nuevas actividades,
deportes, manualidades, etc.
• Gratificaos con algún pequeño premio de vez en cuando (con los dineros
ahorrados).
• Seguid una dieta y un programa de actividad física regular que se adecue con
vuestro estado de embarazada.
• Detectad y controlad vuestros síntomas de abstinencia (son pasajeros).
• Ofrecer ayuda (farmacológica o de otro tipo) cuando sea necesario
• Alentar, dar ánimos
• Ofrecer seguimiento, asegurarse de ser facilmente contactable (personalmente o
telefónicamente) o bien ofrecer / sugerir el apoyo de otro profesional.

La recaida
• Intercambiar información relevante para la mujer y:
• Asegurarse de que la mujer fumadora entiende bien que recaer es un hecho
absolutamente normal y que proporciona un aprendizaje muy útil.
• Ayudarla a identificar y explorar las razones por las cuales ha recaido.
• Identificar correctamente en que posición del circulo del abandono del hábito
tabáquico queda la mujer que ha recaido (Figura 1).
• Aconsejar y guiar a la fumadora según su situación en el círculo del abandono
del hábito tabáquico.
• Ofrecer ayuda (farmacológica o de otro tipo) cuando sea necesario.
• Alentar
• Ofrecer seguimiento, asegurarse de ser fácilmente contactable (personalmente o
telefónicamente) o bien ofrecer/sugerir el soporte de otro profesional.
• Avisar a la fumadora de que se le volverá a preguntar sobre el tema más
adelante.

Dudas, preguntas y comentarios frecuentes


Como afecta el tabaco a mi hijo?
El humo del tabaco contiene muchas substancias químicas nocivas que pasan a la
sangre fetal, a través de la placenta. Estas substancias enlentecen el crecimiento del
feto e incrementan el riesgo de aborto espontáneo, prematuridad y bajo peso al
nacer.
Estoy embarazada de tres meses. De que servirá que deje de fumar, ahora?
No es nunca demasiado tarde para dejar de fumar y siempre se obtienen beneficios.
Las posibilidades de tener un embarazo normal y un recién nacido con plena salud
se incrementan mucho si dejáis de fumar, especialmente si lo hacéis durante el
primer trimestre de gestación.
Durante el embarazo anterior fumé y mi hijo fue normal
No todos los fetos sufren las consecuencias del humo del tabaco materno, ahora
bien, si la madre fuma durante el embarazo se dobla el riesgo de tener un recién
nacido prematuro y se multiplica por las tres posibilidades de tener un recién nacido
de bajo peso o que muera poco después del parto. También aumenta el riesgo de
sufrir desprendimiento placentario y alteraciones de la coagulación durante el
periodo final de la gestación.
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Un peso bajo del recién nacido al nacer no facilita el parto?


Esto no es cierto; la fase de expulsión no es más fácil cuando el recién nacido es
pequeño o de bajo peso. Al contrario, se incrementa el riesgo de morir y
complicaciones durante el periodo postnatal y la primera infancia. Además, quizás
deberemos alargar vuestra estancia en el hospital después del parto.
Si lo dejo durante el embarazo, puedo volver a fumar después del parto?
Si fumáis o vuestra pareja fuma, el niño tienen muchas posibilidades de sufrir
infecciones otorrinolaringológicas (faringitis, mal de oído, etc.) y si sufre asma en el
cursos de su enfermedad será peor.

El tabaco me ayuda a neutralizar el estrés


En realidad la nicotina actúa más bien como estimulante, en la mayoría de las
personas, aumentando, entre otras cosas, el nivel de adrenalina en sangre. Lo que
pasa es que vuestro cuerpo se ha habituado a la nicotina y es natural que os sentáis
más relajados cuando obtenéis la nicotina por medio de un cigarro. Pasadas unas
semanas sin fumar, muchos fumadores se notan menos nerviosos, aprenden a
relajarse sin el tabaco y encuentran un mejor autocontrol.

Y si reduzco el número de cigarros que fumo diariamente?


Muchos fumadores que reducen su consumo diario de cigarros inhalan (se tragan el
humo) más a menudo y más intensamente, de forma que mantienen a los niveles
previos de consumo. Además, la cantidad de substancias químicas que recibe el feto
es muy parecido y, por lo tanto, los efectos tóxicos y nocivos son los mismos.
Solo dejando de fumar completamente se obtienen beneficios claros e importantes,
tanto para el feto como para la madre.
El mismo comentario se puede hacer respecto al consumo de cigarros light o ultra
light.

Sirve de algo que yo deje de fumar si mi compañero / esposo fuma?


Aunque vuestro compañero/esposo fume, es importante y positivo para vuestra
salud y la del niño que abandonéis completamente el tabaco. De todas formas,
deberíais alentarle para que él deje de fumar o, al menos, no lo haga en vuestra
presencia, ni de la del niño.

Ya lo he intentado antes, y no funcionó!


La mayoría de los fumadores no tienen éxito en su primer intento de dejarlo, ahora
bien, muchos que lo vuelven a intentar consiguen dejar el tabaco definitivamente. Lo
más importante es tener un buen motivo para hacerlo. Prácticamente un millón de
personas en Cataluña son exfumadores.

Conozco personas que han fumado mucho y que han vivido mucho de tiempo con
buena salud
Debéis saber que son personas con suerte. No podemos predecir de forma exacta
quien sufrirá las enfermedades relacionadas con el tabaquismo y quien no.
Sabemos, pero, que su incidencia es mucho más importante entre los fumadores y
que la menos un 25% de los que fuman sufren a lo largo de su vida enfermedades y
procesos graves relacionados con su hábito, lo cual acorta, de mediana, entre 6 y 10
años su esperanza de vida.
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Cuanto tardará mi cuerpo a recuperarse de los efectos del tabaco


Notareis los efectos positivos en seguida, aunque quizás sufrais durante algunos
días manifestaciones desagradables atadas a la abstinencia nicotínica. Los
beneficios empiezan a las 24 horas de dejar de fumar y se incrementan con el
tiempo, de manera que 5 años después de abandonar el tabaco vuestro riesgo de
sufrir enfermedades relacionadas con el tabaquismo será muy parecido al de la
persona que no ha fumado nunca.

Si dejo de fumar, me engordaré?


No todo el mundo se engorda y, normalmente, son pocos quilos (entre 2 y 3 kg.). El
peso inicial se puede recuperar fácilmente, después de unos meses, con un
programa de ejercicio físico moderado y una dieta equilibrada y saludable que os
ayudará mucho durante y después de la gestación.

Puedo dejar de fumar con la ayuda de chicles o parches de nicotina.


Aunque no hay una evidencia científica clara que demuestre que este tipo de
preparados con nicotina sean peligrosos para el feto, es mejor abstenerse de
utilizarlos sin un estricto control médico. En las personas muy dependientes de la
nicotina, como por ejemplo las que fuman más de 20 cigarros/día y/o muy temprano
por la mañana, es muy posible que el tabaco de los cigarros sea perjudicial, ya que
los niveles de nicotina y de substancias tóxicas es mucho más elevado en el
fumador que cuando se utilizan productos de reemplazo nicotínico para mitigar la
abstinencia, como el chicle o parche de nicotina.

Figura 1. Fases del proceso de dejar de fumar

Fuente: Adaptado de Prochaska J, Di Clemente U, Norcross L (1992)


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1. Cambio de actitud
2. Cambio de comportamiento
3. Precontemplación (no interesada en dejar de fumar)
4. Pensando en dejar de fumar
5. Preparación para dejar de fumar
6. Acción de dejar de fumar
7. Mantenimiento
8. Recaída
9. Exfumador

4.3.11. Alcohol y otras drogas

Al inicio de los años 70 se describió el síndrome alcohólico fetal (SAF), caracterizada


por un conjunto de malformaciones físicas, especialmente en la cara, retraso del
crecimiento de la madurez psicomotora y retraso del desarrollo intelectual que
presentaban los hijos de madres alcohólicas. Se ha constatado que, aunque hay
cambio s en algunos de los aspectos de este síndrome con el tiempo, el déficit
intelectual y del crecimiento observados en los casos diagnosticados de SAF al
nacer, persisten a menudo al llegar a la adolescencia incluso en los caos leves o
moderados.

Aunque el riesgo para el feto es especialmente elevado en las Gestantes que


consumen cantidades muy elevadas de alcohol (como es el caso de las mujeres
dependientes de esta substancia), el hecho de que sea probable que también unos
niveles bajos de consumo de alcohol puedan ser peligrosos para el feto, y que el
periodo crítico para el aumento del riesgo de anomalías anatómicas fetales se
encuentre en las primeras semanas de gestación, hacen desaconsejable el consumo
de bebidas alcohólicas durante e inmediatamente antes del embarazo.

En cuanto al consumo de otras drogas, sus efectos sobre el feto no ha estado


siempre suficientemente bien estudiado. Con carácter general debe desaconsejarse
el consumo de cualquier droga psicoactiva durante el embarazo, ya que
habitualmente las substancias que actúan sobre el sistema nervioso central (SNC)
son lipofílicas y tienen un peso molecular relativamente bajo, cosa que facilita su
paso de la circulación sanguínea materna a la fetal y deja expuesto el feto a los
efectos tóxicos y aditivos de las drogas.

Es necesario tener presente también que el consejo para la abstinencia del consumo
de alcohol y otras drogas durante el embarazo es la norma general para los casos
de consumo sin dependencia (consumo esporádico o recreativo en la mayor parte
de los casos).

Ante una situación de dependencia, la interrupción del consumo de drogas puede


requerir la realización de un tratamiento, y no siempre está indicado: así, por
ejemplo, en el caso de las Gestantes dependientes de la heroína, la opción más
adecuada suele ser la inclusión en un programa de mantenimiento con metadona,
que contribuirá a conseguir que la paciente se mantenga alejada del uso de la
heroína y de la vía parenteral, y facilitará el seguimiento del embarazo hasta el parto.
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Evaluación del consumo de alcohol y otras drogas


La mejor evidencia del consumo de alcohol y otras drogas es la que proporciona una
correcta anamnesi, contando la cantidad de alcohol en mg/día (tablas 1 y 2). El
profesional ha de tener en cuenta, pero, que está interrogando sobre un tipo de
conducta especialmente sensible para algunas personas, por lo cual es posible que
muchas mujeres consumidoras informen de un consumo de alcohol muy inferior al
real o que, incluso, indiquen que no consuman en absoluto cuando en realidad si
que lo hacen.

Esta tendencia a esconder el consumo de alcohol y drogas es más importante en el


caso de las mujeres que presentan consumos de riesgo y puede verse influida por
diversos factores:

Factores relacionados con la misma mujer


El miedo a perder la custodia del hijo que ha de nacer, el sentimiento de culpa por
ser alcohólica o drogodependiente, sentimientos depresivos que inhiben una acción
positiva y la negación del consumo de riesgo.

Factores relacionados con el entrevistador/a


La falta de empatía, una actitud culpabilizadora o la inseguridad en interrogar sobre
temas muy personales.

Cuando se interroga a la embarazada en relación con el consumo de bebidas


alcohólicas hay que estar seguro de que la mujer entiende bien a que tipo de
bebidas nos referimos: algunas personas no identifican con el alcohol algunas
bebidas de baja graduación como la cerveza o bien piensan que las preguntas se
refieren a consumo de bebidas alcohólicas que llevan a la embriaguez, pero no al
consumo de alcohol durante las comidas.

Es necesario huir de preguntas que llevan a una valoración del consumo por parte
de la mujer en lugar de una valoración por parte del profesional: así, preguntas muy
generales como “Usted bebe”? o “Cuanto bebe usted”? llevan a menudo a repuestas
poco útiles y significativas como “No bebo” (cuando en realidad es posible que haya
un consumo de alcohol, aunque moderado) o bien “Bebo normalmente” (cuando el
concepto de ingesta alcohólica normal seria muy difícil de precisar).

Es preferible facilitar la evocación del consumo por parte de la mujer embarazada


preguntando por el consumo de bebidas alcohólicas en el decurso de un día normal,
como por ejemplo:

“Durante un día normal, que bebidas alcohólicas –como vino, cerveza, licor, cava,
etc.- toma usted?, por la mañana, antes de comer, con la comida, por la tarde, antes
de cenar?”.

O bien preguntando para el consumo habitual de diferentes tipos de bebidas


alcohólicas:

“Toma usted alguna vez cerveza?”


“Aproximadamente, con que frecuencia?”
“Los días que bebe cerveza, cuantas toma?”, etc.
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Tabla 1. Fórmula para el cálculo de gramos de alcohol en las bebidas


Graduación x ml x 0,79
---------------------------------
100

Tabla 2. Conversión en gramos de alcohol de las bebidas más usuales


Medidas usuales
Vaso de agua 200 ml
Vaso de vino 100 ml
Vasos combinados (p. ex. cuba libre: medida de alcohol) 60 ml
Vaso de licor 40 ml
Copa de agua 200 ml
Copa de vino 100 ml
Copa de cava 100 ml
Copa de coñac 50 ml
Copa de vino generoso o vermut 50 ml
Copa de licor 40 ml
Xibeca o litrona 1.000 ml
Mediana 333 ml
Quinto 250 ml
Caña 200 ml
Carajillo 25 ml

Relación de gramos de alcohol de las bebidas en función


de las medidas y graduación más usual
Aguardiente 40 ml 50º 16 g
Whisky, coñac, Cointreau, ginebra, tequila, marc de cava 50 ml 40º 16 g
Anís, pacharán 50 ml 25º 10 g
Licor de melocotón, manzana, pera 40 ml 20º 7 g
Vinos finos (jerez, madeira) y vermuts 50 ml 18º 7 g
Vinos de mesa y cavas 100 ml 12º 10 g
Cerveza 1.000 ml 6º 48 g
Medíana 333 ml 6º 16 g
Quinto 250 ml 6º 12 g
Caña 200 ml 6º 10 g
Cuba libre 60 ml 40º 19 g
Carajillo 25 ml 40º 8 g
En general, será más fácil para la mujer embarazada comprender que el
interrogatorio sobre el consumo de alcohol y otras drogas se inscribe en el contexto
de la recogida de información sobre hábitos alimentarios y consumo de
medicamentos que si esta información se recoge de forma aislada.

Es necesario insistir en el hecho de que la relación empática, que genera confianza


en la gestante, mejora la validez de las informaciones que se recogen con la
ananmesi y que esta es la única técnica disponible ara registrar el consumo de
bebidas alcohólicas y otras drogas.

Algunas pruebas pueden complementar los datos recogidos con la anamnesi. Los
marcadores biológicos más útiles para detectar el consumo excesivo de alcohol son
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la gamma glutamil trasnpeptidasa (GGT), el volumen corpuscular medio (VCM) i las


transaminasas (GOT, GPT y relación GOT/GPT). Todos estos marcadores pierden
sensibilidad cuando el consumo de alcohol es moderado.

Algunos cuestionarios han sido muy utilizados en el cribado del alcoholismo. Entre
todos ellos destaca el CAGE (Tabla 3) y, más recientemente, el AUDIT. Debe
observarse que estos cuestionarios indican principalmente la existencia de un
síndrome de dependencia del alcohol –y no el consumo de riesgo sin dependencia-
y que diversos estudios han puesto de manifiesto, en el caso de CAGE, una
proporción importante de falsos positivos en poblaciones jóvenes.

Tabla 3. Cuestionario CAGE


El cuestionario CAGE se utiliza para el cribado de la dependencia del alcohol en la población
general. De acuerdo con la mayoría de estudios, el CAGE tiene unos niveles aceptables de
sensibilidad y especificidad en la mayoría de poblaciones estudiadas.
Consta de cuatro preguntas, y dos respuestas afirmativas indican un consumo de riesgo.

1. Ha tenido alguna vez la impresión de que debería beber menos?


2. Le ha preocupado alguna vez que la gente criticara su forma de beber?
3. Se ha sentido alguna vez culpable por su hábito de beber?
4. Alguna vez le ha ocurrido que lo primero que ha hecho por la mañana ha sido beber una
copa para calmar los nervios?

Finalmente, la determinación de la presencia de alcohol, drogas o sus metabolitos


en la sangre y en la orina puede ayudar a contrastar la información facilitada para la
gestante, aunque la sensibilidad de estas pruebas es baja cuando ha pasado algún
tiempo entre el consumo y la analítica.

Contenido del consejo


Todos los casos de dependencia o sospecha de dependencia del alcohol o otras
drogas en Gestantes pueden ser valorados conjuntamente con un especialista y
deberían de ser abordados como embarazos de riesgo. En la Tabla 4 se pueden
encontrar los criterios diagnósticos de dependencia que aparecen en la décima
revisión de la clasificación Internacional de Enfermedades de la OMS (CIM-10).

Tabla 4. Criterios de dependencia, según la clasificación Internacional de


Enfermedades, décima revisión (CIM-10)
Se trata de un conjunto de manifestaciones fisiológicas, comportamentales y congnitivas donde
el consumo de una droga, o de una clase de drogas, adquiere la máxima prioridad para el
individuo, incluso superior a otras formas de comportamiento que anteriormente habian tenido
un valor más alto.

La manifestación característica del síndrome de dependencia es el deseo (a menudo fuerte y a


veces insuperable) de consumir substancias psicotrópicas (aunque hayan estado prescritas por
un médico), alcohol o tabaco. La recaida en el consumo de una substancia después de un
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SANITARIA PREGESTACIONAL Y GESTACIONAL

periodo de abstinencia lleva a la instauración del resto de características del síndrome de una
forma más rápida que en los individuos no dependientes.

Pautas para el díagnóstico:


El díagnóstico de dependencia solo debe hacerse si en algún momento de los doce meses
anteriores han estado presentes trs o más de los rasgos siguientes:

• Deseo intenso o vivencia de una compulsión para consumir una droga


• Disminución de la capacidad para controlar el consumo de una droga o de alcohol, unas
veces para controlar el inicio del consumo y otros para acabarlo o para controlar la cantidad
consumida.
• Síntomas somáticos de un síndrome de abstinencia cuando se reduce o se interrumpe el
consumo de la droga, confirmados por el síndrome de abstinencia característica de la droga
o bien para el consumo de la misma droga (o una de parecida) con la intención de reducir o
evitar los síntomas de abstinencia.
• Abandono progresivo de otras fuentes de placer o diversión a causa del consumo de la
droga, aumento del tiempo necesario para obtener o consumir la substancia o para
recuperarse de sus efectos.
• Persistencia del consumo de la substancia a pesar de las evidentes consecuencias
perjudiciales, como los daños hepáticos para el consumo excesivo de alcohol, estados de
ánimo depresivos como a consecuencia del consumo elevado de una droga o deterioro
cognitivo secundario al consumo de una droga. Debe investigarse a fondo si la persona que
consume la droga es consciente, o puede llegar a serlo, de la naturaleza y gravedad de los
perjuicios.

En el resto de los casos, es necesario indicar a la gestante la necesidad de


abstenerse del consumo de bebidas alcohólicas y de otras drogas durante el
embarazo e inmediatamente antes, explicando que cualquier consumo representa
un riesgo para el feto y que este riesgo aumento cuando aumenta el consumo.

También es necesario explicar a la mujer que todavía no está embarazada que la


abstinencia del alcohol y otras drogas es necesaria a partir del momento en que
decide que desee quedarse embarazada (o al menos, ante la primera sospecha de
embarazo), ya que muchas de las anomalías provocadas para el consumo de
alcohol se pueden producir en el primer trimestre de gestación, antes incluso de que
esta haya estado diagnosticada. La abstinencia del alcohol y otras drogas deberá de
continuar durante todo el embarazo y la lactancia.

Puede ser útil a la mujer ayudarla a identificar aquellas situaciones en las cuales
encontrará más difícil de abstenerse de consumir alcohol u otras drogas. La presión
social puede ser una de las principales dificultades para mantener la abstinencia.
Podemos sugerirle diversas formas para hacer frente a esta presión de los demás:
normalmente, informar que se está embarazada o referirse al hecho de que le han
prohibido el consumo de alcohol son métodos eficaces de hacer frente a esta
presión.
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SANITARIA PREGESTACIONAL Y GESTACIONAL

4.3.12. Medicamentos durante la gestación

Es difícil precisar cuales son los efectos perjudiciales de cada uno de los fármacos
en el feto. La prescripción de medicamentos durante el embarazo se realizará solo
cuando sea estrictamente necesaria.

En primer lugar, en la primera visita, será necesario saber si la mujer embarazada


toma algún tipo de medicación habitualmente, con o sin prescripción médica.

Si es necesario, consultaremos con el especialista correspondiente la conveniencia


de la continuación de tratamientos por patologías crónicas que la mujer pueda
presentar.

Es necesario informar con esmero de que se ha de evitar la automedicación durante


el embarazo y, por lo tanto, no tomar nunca ningún medicamento sin prescripción
médica por innocuo que parezca.

El primer trimestre de la gestación es un periodo especialmente crítico durante el


cual muchos agentes de tipo vírico, físico (por ejemplo, radiaciones) o químico (por
ejemplo, fármacos) pueden producir alteraciones del embrión que se está formando
y dar lugar a malformaciones congénitas. Durante una gran parte de este periodo del
embarazo, antes de la tercera o la cuarta semana, la mujer puede desconocer que
está embarazada, y por esto es necesario recomendar medidas contraceptivas y
mujeres en edad fértil que reciben determinados tratamientos farmacológicos.

Durante las últimas semanas de las gestación la administración, sobre todo


continuada, de algunos fármacos puede facilitar la aparición de complicaciones en el
recién nacido durante y después del parto.

Teniendo en cuenta los peligros derivados de la especial susceptibilidad a los


medicamentos, primero del embrión y después del feto, es esencial evitar la
administración de medicamentos a la mujer gestante en la medida que esto sea
posible. A pesar de esta recomendación general, hay mujeres que por el tratamiento
de determinadas patologías previas al embarazo necesitan un medicamento, ya que
algunas enfermedades no tratadas pueden ser tan peligrosas para el feto como la
administración de determinados medicamentos, y hay que pueden presentar
afecciones que haga necesario prescribir alguno.

En los casos en que la abstención total sea imposible, será necesario tener en
cuenta unas premisas básicas:

• Escoger el medicamento que se ha de administrar en la función de la relación


beneficio/riesgo basada en la información que se conoce actualmente y
explicarlo así a la mujer gestante en términos inteligentes.
• Utilizar preferentemente aquellos medicamentos de los cuales se dispone de
más experiencia clínica, y evitando utilizar los fármacos de comercialización
reciente, explicándolo así para rehuir presiones para pedir esta o aquella
prescripción sobre la base de la información que la mujer haya podido obtener
otras fuentes.
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SANITARIA PREGESTACIONAL Y GESTACIONAL

• Prescribir la mínima dosis eficaz y durante el mínimo tiempo posible, y dar estas
instrucciones por escrito con mucha claridad.
• Evitar la administración de preparados con múltiples principios activos, porque
es difícil valorar la posible potenciación de efectos adversos. Es necesario
explicar que los medicamentos que parecen servir un poco “para todo” pueden
resultar muy contraproducentes.

En cualquier caso, y dado que hay pequeños trastornos por los cuales no se llega a
consultar al médico, conviene insistir a la mujer gestante que ha de evitar la
administración indiscriminada de medicamentos para situaciones banales, y la
automedicación, y que debe tener en cuenta que, en principio, ningún medicamento
no es del todo inocuo, ni siquiera los preparados tópicos. Así pues es necesario
remarcarle hasta que lo interiorice, que no tome nada hasta que pueda consultarlo
con un profesional sanitario.

La mujer embarazada no se ha de exponer a ambientes con radiaciones por su


posible efecto teratógeno sobre el feto. Y es necesario que informe de su estado de
gestación, en el caso que se le haya de realizar alguna exploración radiológica.

Es necesario saber si la mujer ha sido expuesta a radiaciones, teniendo en cuenta el


tipo de radiación y la intensidad que ha recibido, para que, en caso de ser necesario,
pueda ser derivada a una unidad de asesoramiento reproductivo.
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