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ALGUNAS MEDITACIONES MIENTRAS ESPERO A LAS MUSAS

Alberto Byass y Víctor Villegas


In memoriam

Miguel Ángel Fornerín


fornerin.blogspot.com
I

Van y vienes las horas. Los días de doradas luces. Los trabajos y sus afanes. A cada
día sus ajetreos y sus cuidados. No sé, si al pasar el tiempo, el presente se hace
menos significativo. Y entonces la memoria, hija de Mnemosine, nos aguarda en
cualquier rincón y vienen los recuerdos a contarnos cosas. Como ciervos, como
cuervos.

II

No logro explicarme satisfactoriamente por qué cuando


nos vamos poniendo viejos comenzamos a rememorar
las épocas pasadas. Los amigos idos. Entonces el tiempo
(segundos, minutos, horas, mañanas y ocaso) se agolpa
y nos llenamos de edades, de afanes, de quimeras.

III

Recuerdo a Alberto Byass. Mi amigo cocolo era un


hombre universal. Pasábamos largas horas hablando de
la historia de las matemáticas, de los griegos, de la
teoría del conocimiento; de los grandes filósofos, sobre
todo los ingleses; de la literatura inglesa que le
apasionaba; de la historia monástica de Inglaterra, de la
lucha entre las casas
inglesas, de Cromwell,
del período isabelino...
de los cocolos de San
Pedro de Macorís y de
la negritud de Marcus
Garvey.

IV

Yo era solo oído.


Nuestra conversación
era a la vez un
monologo y un dialogo
con mi perplejidad e
ignorancia. Podría
Byass discurrir de
vastos temas, viajar
por distintos tiempos.
Lo rememoro joven,
como profesor de
matemáticas en una
escuelita rural de Hato
Mayor. Lo recuerdo con su gorra de sonero de los años cincuenta.

Nunca podré olvidar su cara tan inglesa, tan flemática de negro curtido, iluminado
cuando presentamos por primera vez a los Guloyas de SPM. Lo pienso después de
muerto y creo que no puedo mejorar mucho. Lamento que no tomáramos más en
serio la grandeza de un magisterio que apenas se notaba. Compartimos con él su
grandeza, creyendo que teníamos alguna estatura.

VII

Pero Mir, macorisano como Víctor Villegas y Byass, un día se me negó a hablarme
del fututo. Me dijo que un viejo no puede hablar del porvenir. Ya el futuro no le
pertenece. Y agregó sin dilación que un hombre cuando ya ha perdido la mayoría
de sus amigos, pertenece a la posterioridad. Ahora recuerdo cuando Alberto
Byass me entregó el libro Charlotte Amalie de Villegas, autografiado por el vate
para un joven poeta que no conocía.
Luego hablamos Villegas y yo de Byass...

Me toca duro hablar de los muertos. Me


taladra el corazón escribir algunas líneas
nostálgicas. Me rompen las lágrimas y el
destino. Me reitero: a cada día sus
cuidados, a cada día sus afanes. Como si
fuera a entrar a la morada de la Pitonisa y
leyera en las paredes del templo la
máxima dórica: cuídate a ti mismo...

VIII

No sé por qué entre las muchas imágenes


de Alberto Byass que saco de mi memoria,
me viene las innumerables veces que me recitaba el poema “El cuervo” de Edgar
Allan Poe. No sé por qué cuando pienso en Poe, mi pensamiento es como un gato
que se extiende y toca la punta del silencio de Alberto Byass. No podré pensar
jamás en una imagen tan misteriosa y dolorosa como esa obra romántica. Todo el
inglés me llega con la repetición del ritornelo nevermore, nevermore, nevermore.

IX

Nunca jamás. ¿Qué será? No lo logro prefigurar. ¿Un viajero atrapado en sus
sueños; un laberintico camino intrincado en la literatura utópica, un espejo roto;
un recuerdo que trato de atrapar y que me hace pensar cada día en sus diminutos
instantes? ¿Es el dolor de la ausencia, la nostalgia? Entonces secretamente hago
un homenaje al día y a su incurable afán: a la vida y a sus cuidados.

En una biblioteca que nos era familiar a Byas y a mí, leía la Ética a Nicómaco que
inicia abordando el tema de la amistad, que él practicaba como una religión. En
días de dulces aires, pasé de El Príncipe de Maquiavelo a Así habló Zaratustra de
Nietzsche... pienso y divago, res cogitans, Oh, res extensa soy. Estoy aquí
rememorando. Como si fuera un viejo. El tiempo presente me abandona y camino
lentamente hacia el pasado. La imagen de un lugar anchuroso de la Teodicea de
Leibniz me acompaña.

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