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JOVENES 2022
GENERACION DE IMPACTO
INTRODUCCION:
David fue el descendiente del Rey Saúl, tal vez sin pensarlo fue el
sucesor de este rey. (2. Samuel – 2:1)
El rey salomón fue la generación que venía detrás del el rey David.
Él fue quien tomo la corona después de su padre. (1. Reyes – 1:28)
Dios los guiaría a una tierra que fluía leche y miel, y los guiaba de día con una
columna de nube y de noche con una columna de fuego, Dios siempre se veía
presente, nunca los dejo solos.
Pasaron los obstáculos que se les presentaban (mar rojo, las aguas del mara etc.)
y aunque muchas veces el pueblo dudo y muchos renegaron contra Moisés en
algún momento, Dios siempre les proveyó lo necesario para que vivieran.
Dios uso a Moisés de una manera especial, la biblia menciona que no hubo en la
tierra otro profeta como Moisés. (Dto. 34:10)
Muchos se preguntaron, quien iba a ser el sucesor de Moisés, quien podía darle la
medida a este profeta, eran muchas las cosas que Dios había hecho por medio de
este hombre, la liberación del pueblo de Israel y durante la peregrinación por el
desierto fueron muchas las maravillas que vieron por mano de Moisés.
LA NUEVA GENERACION:
Se levantaría una nueva generación, que iba a ser estremecer lo que estuviera al
frente. Alguien que iba a terminar el propósito que Dios tenía con el pueblo de
Israel.
Había entre ellos, un joven llamado Josué, quien fue lleno del espíritu santo
cuando Moisés impuso las manos sobre él. (Dto. 34:9)
Tal vez, el sintió miedo, porque manejar un pueblo tan grande y en muchas
ocasiones rebelde, era inexperto en muchas cosas, para muchos no era el
indicado, pero Dios lo puso ahí porque iba a hacer grandes cosas.
Dios le dio promesas grandes, a este joven que poco a poco él iba a cumplir en él
y en el pueblo de Israel.
2. Nadie te podrá hacer frente, en todos los días de tu vida, así como estuve
con Moisés estaré contigo, no te dejare ni te desamparare. (Josué – 1:5)
3. Yo Jehová tu Dios estaré contigo donde quiera que vayas. (Josué – 1:9)
Comenzó Josué a hacer conforme a lo que Dios le decía que hiciera. Empezó el
trabajo, tomo la vocería y el mando. Y les dice a los jefes de pueblo que vayan por
todo el campamento y ordenen a todos que preparen provisiones, porque dentro
de 3 días iban a cruzar el Jordán, para tomar la tierra que el señor nuestro Dios
nos dará.
Josué necesitaba ayuda y hablo con las tribus. De la tribu de Rubén, hijo mayor de
Israel. Que eran (46.500), varones Israelitas de 20 años hacia arriba, actos para
la guerra. De la tribu de Gad (45.650) varones. Y de la media tribu de Manasés
(32.200) varones actos para la guerra. (Se llamaba así, porque de los
descendientes de José, salían dos tribus, la primera que era de Efraín y la
segunda que era de Manases) y les hablo del mandato que Moisés dejo, cuando
el señor Dios les dijo: que les daría esta tierra para que pudieran descansar.
Josué se levantó muy de mañana y con él, todos los hijos de Israel y partieron de
Sitim hasta el Jordán, y descasaron en la orilla del rio.
sacerdotes que la llevan, todos deben salir de sus campamentos y marchar en pos
de ella.
Con el propósito de que sepan por donde es que deben ir, ya que ninguno del
pueblo había pasado por este camino antes. (Josué – 3:3-4)
- Debemos permitir que el espíritu santo sea el que nos indique el camino,
porque todos los que se dejan guiar por el espíritu santo son verdaderos
hijos de Dios. (Romanos – 8:14)
Los levitas: La única tribu que no fue censada, por mandato de Dios. Tenían un
trabajo especial. Eran los encargados de estar cerca del tabernáculo del
testimonio y sobre los utensilios y sobre las cosas que pertenecían a este lugar.
Ellos llevaban los enceres y ellos servían en él y acampaban alrededor del
tabernáculo. Y si han de moverse, los levitas desarmaban el tabernáculo y al llegar
al lugar de estadía ellos lo armaban y si un extraño se acercaba al tabernáculo
moriría.
- Pero después del nuevo pacto que Dios hizo por medio de Jesús en la
tierra, nos podemos acercar a él confiadamente, y entre más cerca estemos
más seguros estamos y más poder tenemos. (Hechos – 1:8) y recibiréis
poder, cuando haya venido sobre vosotros el espíritu santo. No es con
ejércitos ni con espada, sino con el espíritu santo.
Las tribus no podían pasar los linderos de las demás tribus. Cada tribu tenía su
bandera, la cual los identificaba.
Jehová hablo a Josué y le dijo: que de cada tribu tomara un hombre y les dijera
que tomaran de en medio del Jordán, del lugar en donde están firmes los pies de
los sacerdotes, doce piedras, las cuales tomaran y las levantaran en el lugar que
pasen la noche.
Cada hombre, de cada tribu, tomo una piedra, y Josué les dijo: que esto sea señal
entre vosotros, para que cuando vuestros hijos pregunten el día de mañana
diciendo ¿Qué es esto? Responderán: que las aguas del Jordán fueron divididas
delante del arca del pacto de Jehová. Estas piedras servirán de monumento, de
recordatorio, de testimonio conmemorativo para siempre. (Josué – 4:6-7)
Las tribus eran conformadas por familias, cada tribu tenía un líder, del cual
descendía la demás familia. Por eso es que las tribus tienen el nombre de su líder,
del principal de esa tribu. (Rubén, Manases, Gad)
- cada familia es una tribu del pueblo del señor, y en cada tribu siempre hay
un líder el cual tiene una responsabilidad grande, que es velar por esa
generación que viene tras él.
LAS 12 PIEDRAS:
Las piedras fueron tomadas por el líder de cada tribu, con un propósito específico.
- Las piedras son los momentos cundo Dios hace milagros en nuestra vida.
Es importante marcar y tener como señal cada uno de los milagros que
Dios ha hecho en nuestra vida.
- tomar una piedra de en medio del Jordán, no de una orilla, es del centro del
Jordán. Cada tribu debe tener una señal, una prueba, algo que sirva para
mostrar las promesas de Dios.
- El rio Jordán lo podemos comparar con un problema muy difícil, con una
circunstancia que te haya hecho perder la fe, la confianza y la esperanza en
Dios
- La piedra es la señal que debes de tener cada tribu (familia), para que
testifiquen de la grandeza de nuestro Dios, para que cuando la nueva
generación, (los hijos) pregunten sobre lo que paso, puedas decir el señor
Dios extendió su mano y me ayudo a cruzar el Jordán de mi dificultad.
La circuncisión:
Era necesario que Josué circuncidara a todos los varones incircuncisos, ya que en
la peregrinación por el desierto nacieron varios niños varones, porque todos los
varones que pertenecían a los ejércitos de Israel habían muerto por su edad, por
esta razón Jehová da esta ordenanza a Josué, de circuncidar a todos los no eran
circuncisos.
Esta marca que quedaba de por vida en el hombre, significaba la alianza que Dios
hizo con Abraham. Símbolo de separación, de propiedad, todo el que era
circuncidado era separado para Dios. Era propiedad de Dios. Y el que era
incircunciso no podía ser parte del pueblo de Dios, este debía ser eliminado de
este pueblo por mandato de Dios. (Josué – 5:1)
(Josué – 5:13) un día estaba Josué cerca de Jericó, cuando vio delante un
hombre con una espada en la mano, y le pregunto: ¿eres de nosotros o de
nuestros enemigos?, el respondió, ni del uno ni del otro, vengo como jefe
del ejército del señor.
Josué se postro hasta que su rostro quedara en tierra y le adoro, y Josué le
pregunto; ¿que ordena mi señor? El jefe del ejército del señor le respondió.
Descálzate, porque el lugar donde estas es sagrado y el obedeció.
Josué tal vez se sintió muchas veces preocupado, cansado, y necesitaba sentir
que Dios estaba cerca de él.
Nosotros como jóvenes muchas veces nos cansamos y sentimos que no podemos
dar más porque nos faltan fuerzas, pero en ese momento siempre aparece Cristo
a darnos fuerzas, pero fue necesario que Josué se quitara el calzado para poder
adorar al que estaba frente a él.
Es necesario que nosotros nos despojemos de lo que somos, nos quitemos todas
esas cosas que nos impiden adorar a Dios. Si lo hacemos así, nuestra vida será
una vida llena de victoria.
(Josué – 6:11)
Todo lo hicieron de este modo tal como jehová lo había ordenado, y comenzaron a
marchar y a dar una vuelta a la ciudad por día, y los ejércitos de Jericó estaban
listos para enfrentar a los israelitas.
Duraron 6 días el ejército de Israel dieron una sola vuelta a la ciudad y se
retiraban, pero el séptimo día, dieron las siete vueltas y después se pararon el
frente de la ciudad amurallada.
Toda esa nueva generación, porque los que habían pertenecido al ejército de
Israel antiguamente habían muerto. La mayoría de los que estaban ahí en ese
ejército, de todas las tribus, de todas las familias, eran de la Nueva Generación.
Tomaron las fuerzas y Gritaron “El muro de la ciudad caerá” y los muros cayeron
delante de los hijos de Israel y tomaron esta ciudad en sus manos.
Ellos necesitaban entrar a Jericó porque no había otra ruta a la tierra prometida,
debían atravesar esta ciudad, para poder llegar a su objetivo.
Es necesario que entendamos que este es nuestro destino, es lo que Dios quiere
para nosotros, que marquemos diferencia, que impactemos al mundo que nos
rodea, una Generación que sea capaz de cambiar lo malo por lo bueno, una
generación que tenga la capacidad de mostrar santidad y de ser luz en medio de
tantas tinieblas. Que tomemos la señal que tienen nuestros padres, que
agarremos ese legado que ellos nos están dejando y lo levantemos lo más alto
que podamos.
CONCLUSION: