Vous êtes sur la page 1sur 10

INTRODUCCIÓN

Cuando consumimos un alimento o una bebida, los nutrientes que


contiene se liberan de la matriz, pasan al torrente sanguíneo y son
transportados hasta sus respectivos destinos finales. Sin embargo, no todos
los nutrientes se utilizan del mismo modo, es decir, su biodisponibilidad es
diferente. Comprender la biodisponibilidad de los nutrientes ayudan a
optimizar la alimentación y a poder establecer recomendaciones nutricionales
apropiadas.

Existen distintas definiciones de biodisponibilidad pero, en general,


este concepto se refiere a la proporción de un nutriente que nuestro
organismo absorbe de los alimentos y que utiliza para las funciones
corporales normales

La presente investigación trata sobre la biodisponibilidad, enfocado en


el aspecto farmacéutico y biológico.
BIODISPONIBILIDAD

La biodisponibilidad es un término usado por varias ramas de estudio


científico para describir la forma en productos químicos son absorbidos por
los seres humanos y otros animales.

La biodisponibilidad de un fármaco es un término farmacocinético que


alude a la fracción de la dosis administrada del mismo, que alcanza su diana
terapéutica o lo que es lo mismo que llega hasta el tejido sobre el que realiza
su actividad. Esta cuantificación, necesaria para dar operatividad al
concepto, es prácticamente imposible de hallar en el hombre. Por ello, se
considera equivalente a los niveles alcanzados en la circulación sistémica del
paciente.

Así pues, en la práctica, la biodisponibilidad es el porcentaje de


fármaco que aparece en plasma. De esta forma, la concentración plasmática
del fármaco adquiere el valor máximo posible, es decir la unidad y la
biodisponibilidad se calcula para cada vía por comparación de la misma,
mediante la siguiente fórmula:

En donde B es la biodisponibilidad, ABC el área bajo la curva de la vía


problema a determinar y de la vía intravenosa, y D la dosis administrada en
la vía intravenosa y en la vía problema a determinar.

Esta determinación de la biodisponibilidad, recibe el nombre


de biodisponibilidad absoluta. Sin embargo hay fármacos que no permiten la
comparación con una dosis intravenosa. En estos casos la biodisponibilidad
se calcula frente a valores conocidos que se consideran estándar de otras
presentaciones del mismo fármaco investigado. La fórmula quedaría
entonces:

Es lo que se conoce como biodisponibilidad relativa (BR).

Una vez conocida la biodisponibilidad de un fármaco, podremos


calcular qué modificaciones hay que realizar en su posología para alcanzar
los niveles sanguíneos deseados. La biodisponibilidad es pues una razón
matemática individal para cada fármaco que actúa sobre la dosis
administrada. Mediante la fórmula:

(en donde De es la dosis eficaz, B la biodisponibilidad y Da la dosis


administrada) podemos calcular la cantidad de fármaco en plasma que
realmente tiene capacidad para realizar su efecto.

Así, si tenemos un fármaco cuya biodisponibilidad es de 0,8 (o del 8o


%) y se administra una dosis de 100 mg, la ecuación se resolvería:

Cómo es

Los siguientes componentes describen los distintos pasos de la vía


metabólica donde pueden darse cambios en la biodisponibilidad de los
nutrientes:
 La liberación del  nutriente de la matriz alimentaria físico-química 
 Los efectos de las enzimas digestivas en el intestino
 La unión y utilización por parte de la mucosa intestinal
 El paso por la pared intestinal (pasando a través de las células, entre
ellas o de las dos formas) a la sangre o la circulación linfática
 La distribución sistémica
 La deposición sistémica
 El uso metabólico y funcional
 La excreción (por vía urinaria o fecal)

El primer paso para que un nutriente esté biodisponible es su liberación


de la matriz alimentaria y su conversión en una forma química que pueda
unirse e introducirse en las células del intestino o incluso atravesarlas. En
general, esto se denomina bioaccesibilidad. Los nutrientes se hacen
bioaccesibles mediante los procesos de masticación y digestión enzimática
inicial del alimento en la boca, su combinación con ácidos y otras enzimas en
los jugos gástricos al tragarlos y, finalmente, su liberación en el intestino
delgado, el principal lugar de absorción de los nutrientes. Una vez aquí, otras
enzimas procedentes de los jugos pancreáticos siguen descomponiendo la
matriz del alimento.

Además de la masticación y la acción enzimática, la capacidad de


digestión de las matrices alimentarias, especialmente en el caso de los
alimentos de origen vegetal, se facilita al cocinar o triturar los alimentos. Por
ejemplo, aunque las zanahorias y las espinacas crudas son buenas fuentes
de fibra, al cocinarlas el cuerpo puede extraer una cantidad mucho mayor de
los carotenoides que contienen.

Los minerales y otros nutrientes existen en distintas formas químicas en


los alimentos y esto puede influir en su biodisponibilidad. Un ejemplo clásico
es el hierro. En general, se puede hablar de dos tipos de hierro alimentario:
hierro hemo y no hemo. El primero solo se halla en la carne, el pescado y las
aves, mientras que el segundo se encuentra en productos de origen animal y
vegetal. El hierro hemo procede principalmente de las moléculas de
hemoglobina y mioglobina responsables de transportar y almacenar el
oxígeno en la sangre y los músculos respectivamente. Una vez liberada de la
matriz alimentaria, la molécula de hierro hemo actúa como un anillo protector
alrededor del átomo central de hierro. De esta manera, protege al hierro de la
interacción con otros componentes alimentarios, lo mantiene soluble en el
intestino y se absorbe intacto gracias a un sistema específico de transporte
en la superficie de las células intestinales. Por el contrario, el hierro no hemo
es poco soluble en condiciones intestinales y se ve muy afectado por otros
componentes de la dieta. Por ello, solo una pequeña fracción del mismo llega
a las células.

A veces, se añaden vitaminas y minerales a los alimentos para


incrementar su valor nutritivo, un proceso denominado “fortificación”. El ácido
fólico, vitamina B, que frecuentemente se añade a los cereales de desayuno,
la harina y algunas margarinas, suele ser más biodisponible que el que se
encuentra en los alimentos de forma natural, denominado “folato alimentario”.
Los estudios científicos revelan que el folato alimentario (derivado de frutas,
verduras o hígado) tiene una biodisponibilidad de 20 a 70% menor que el
ácido fólico sintético. Esto no significa que solo haya que consumir los
alimentos fortificados con ácido fólico, sino que sus fuentes naturales, como
las verduras de hoja verde, pueden complementarse con los alimentos
fortificados con esta vitamina para garantizar el consumo de las cantidades
recomendadas.

Cuando y Para qué se usa

Cuando se usa en las ciencias ambientales, evalúa el ritmo y la


cantidad de sustancias tóxicas que pueden ocurrir en el cuerpo.
La biodisponibilidad fue estrictamente una vez atribuida a la
farmacología, pero ahora tiene amplias aplicaciones en las ciencias
ambientales. Examinar la biodisponibilidad de una sustancia en estudios
farmacológicos ayuda a determinar las dosis de los medicamentos en
particular. Una medida de la biodisponibilidad de un medicamento, cuando se
llega a la circulación en el cuerpo, se describen aspectos como la absorción
y la vida media.

Las administraciones por vía intravenosa de medicamentos se


considera que tienen 100% de biodisponibilidad, ya que no pasan por el
estómago. Son inmediatamente en el sistema circulatorio. Sin embargo, otros
medicamentos administrados al mismo tiempo puede reducir los efectos de
una administración intravenosa y afectan su biodisponibilidad.

Los estudios de biodisponibilidad puede también comparar las


poblaciones de animales o plantas a la presencia de sustancias químicas
tóxicas en el ambiente.
CONCLUSIONES

La biodisponibilidad de un nutriente se rige por factores externos e


internos. Entre los factores externos se incluye la matriz alimentaria y la
forma química del nutriente en cuestión, mientras que por otro lado el sexo,
la edad, el estado nutricional y la etapa de la vida (Ej. embarazo) son algunos
de los factores internos. Dado que algunos aspectos, como el estado
nutricional, también determinan la cantidad de un nutriente que el cuerpo
utiliza, almacena o excreta, algunas definiciones de biodisponibilidad se
limitan a la fracción del nutriente que es absorbida.

La biodisponibilidad de los macronutrientes (carbohidratos, proteínas y


grasas) suele ser muy elevada, llegando a superar el 90% de la cantidad
consumida. Sin embargo, en el caso de los micronutrientes, es decir, las
vitaminas, los minerales y los fitoquímicos activos (Ej. flavonoides o
carotenoides) hay grandes diferencias en la proporción en que se absorben y
se utilizan.
BIBLIOGRAFÍA

 www.eufic.org/article/es/artid/biodisponibilidad-nutrientes-como-sacar-
maximo-partido-alimentos/
 es.wikipedia.org/wiki/Biodisponibilidad
 www.worldlingo.com/ma/enwiki/es/Bioavailability
República Bolivariana De Venezuela
Ministerio Del Poder Popular Para La Educación Superior
Fundación Misión Sucre
Universidad Bolivariana De Venezuela
San Fernando – Estado Apure

Facilitador: Participantes:
Juan C. Ruiz Marlene Lugo
CI: 7.296.205
Luís Sandino España
CI: 18.328.805
José Rafael Rodríguez
CI: 4.142.057

San Fernando, Noviembre de 2010


INDICE

- INTRODUCCIÓN . . . . . . . . .1

- Biodisponibilidad . . . . . . . . .2
- Cómo es . . . . . . . . . .3
- Cuando y Para qué se usa . . . . . . .5

- CONCLUSIONES
- BIBLIOGRAFIA

Vous aimerez peut-être aussi