Vous êtes sur la page 1sur 7

INSTITUTO LATINOAMERICANO DE LA COMUNICACIÓN

EDUCATIVA
CENTRO DE ESTUDIOS EN COMUNICACIÓN Y TECNOLOGIAS
EDUCATIVAS

La comprensión humana, rasgo de la conciencia ética.


Reflexión de la transformación de la ética personal y la
comprensión humana.

Trabajo Parcial 1
Sesión 3

OSCAR HERNANDEZ MONTERROSAS

MAESTRIA EN COMUNICACIÓN Y TECNOLOGIAS


EDUCATIVAS (MCyTE)
MODULO DE INVESTIGACION

TUTOR: ROSALBA ANGELICA SANCHEZ DROMUNDO

SEDE CENTRO DE MAESTROS DOS


NEZAHUALCOYOTL
GRUPO 04

AGOSTO 2008
La comprensión humana, rasgo de la conciencia ética.
Reflexión de la transformación de la ética personal y la
comprensión humana.

El hombre está dispuesto siempre a negar


todo aquello que no comprende.

Blaise Pascal (1623-1662)

Introducción.

Durante el desarrollo de los individuos se va formando la conciencia personal a


través del paso por las diferentes influencias recibidas. El conocimiento se
hace de la experiencia diaria, se nutre de las aportaciones y reflexiones que se
generan con las acciones de cada individuo.
La conciencia ética es un rasgo personal que se expresa de manera singular.
Sin embargo, una vez adquirida, se vuelve común, incorporándola en el actuar,
en todo momento.

Ahora, la compresión que se tenga de los entornos del actuar, nos acerca al
deber ser del mismo. La práctica de algunos valores universales facilitan el
proceso de la comprensión y por lo tanto el ejercicio de la conciencia ética.
Comprender desde un punto humanista podría permear la barrera de la visión
con clara tendencia objetiva, aquella que no permite la subjetividad del ser
humano, en un proceso de investigación objetiva.

La observación de los diferentes ámbitos de nuestro diario acontecer nos


permite apreciar la complejidad de actuar con ética. No tendremos la misma
respuesta en cada espacio, a su vez es una oportunidad constante de probar
nuestro nivel de ética.
Desarrollar la práctica de colocar en tela de juicio, de manera objetiva, de
manera constante lo que nosotros mismos hacemos y decimos, comprender
qué y cómo somos, nos facilita el camino para alcanzar una comprensión mas
humana.
Comprensión y evolución personal.
“Lo que no comprendemos no lo poseemos.”
Johann Wolfgang Goethe

El ser humano desarrolla su conocimiento desde el primer día en que abre sus
ojos, en el momento que empieza a vislumbrar el mundo que esta a su
alrededor. Cada acción deja en el una experiencia diferente que complementa
sus capacidades. El contexto familiar es enriquecedor, es el primer entorno de
evolución., en donde hay una constante en el manejo de la información y de las
acciones. Ese es nuestro paradigma inicial.
La primera transformación es cuando llega la etapa de asistir a un
contexto social, la escuela. En este lugar existe un intercambio de experiencias,
de información y saberes diferentes, percibimos acciones que son
contrapuestas a lo que para nosotros es lo normal o natural. Muchas nos
atraen, otras no, y nos apropiamos mediante la imitación de aquello que
produce una satisfacción en nosotros.
Adicionalmente tenemos la influencia y el impacto que deja el maestro
de cada uno de los grados escolares de los distintos niveles de estudio.
Somos esponjas que recibimos información, la asimilamos y procesamos. De
igual manera copiamos las actitudes de los iconos sociales más
representativos de ese contexto.
Somos como nuestro entorno social lo marca, lo dicta y lo entendemos.
No tenemos un punto de comparación y cambiamos de acuerdo a nuestro
avance de conocimiento del medio en que nos desarrollamos, cuando vamos
comprendiendo.
Morin (1999) nos dice que comprender significa intelectualmente
aprehender en conjunto, es decir apreciar todo lo que rodea a lo que queremos
comprender. El colocarnos momentáneamente en los zapatos de otra persona,
ubicarnos en su tiempo y espacio, en su situación emocional y moral. La
comprensión humana es un proceso de transformación, de apropiación, de
libertad y de respeto.
El conocimiento que adquirimos con el paso de los años de vida, van
incrementando el nivel de comprensión personal. Los valores universales
juegan un papel importante en este avance.
Hasta donde nos comprendamos, de forma ulterior, desde adentro hacia
fuera de nuestro ser, de entender por que actuamos o pensamos de
determinada manera, identificando y entendiendo esos detalles que
necesitamos mejorar nos permitirá establecer juicios más cercanos a la
realidad. Tener una comparación nos posibilita ser más objetivos. Sin mezclar
obstáculos emocionales que impidan este proceso de valoración. Cuando
traspasamos cuestiones sociales altamente limitantes, cuando nos permitimos
romper los paradigmas y nos atrevemos a vislumbrar las situaciones más allá
de lo que aparentan, a analizar y comparar, pero sobretodo a decidir
considerando estos resultados, podemos decir que hemos comprendido la
comprensión humana.

Comprensión y ética personal


"En términos legales, un hombre es culpable cuando viola
los derechos de otros. En ética, lo es sólo con que piense hacerlo."
Pascal

El nivel de comprensión que desarrolla una persona considero que depende del
grado de conocimiento que tenga de lo que desea comprender y como desea
comprenderlo. El Cómo es un reto personal, algo que necesitamos desarrollar y
activar constantemente. Puedo mencionar con toda seguridad que he sido
incomprendido y al mismo tiempo he estado en el lugar de incomprender.
Todos pasamos por estos momentos. Durante la adolescencia es cuando mas
sucede esta experiencia desalentadora y que nos conduce a tomar decisiones
no acordes a la norma.
Cuando el deber ser esta presente, cuando la ética nos plantea las
acciones a seguir, evolucionamos en nuestro proceder. Nos da pauta y norma.
No es posible comprender a una persona que no permite ser
comprendida, es de considerar una relación bidireccional para poder llegar a un
conocimiento detallado de sus rasgos para lograrlo, sin embargo la tolerancia
permite dar el beneficio de la duda. El conocer la razón del ser o hacer del
elemento u objeto, no conlleva a permitir o aceptar los argumentos.

Después de ser tolerante, debemos intentar comprender la posición o situación


que difiere de la nuestra. Soy tolerante por permitirme escuchar a los demás,
lo que no implica que acepte incondicionalmente, intentaré cuestionar y hacer
una observación objetiva. La tolerancia implica respeto, aceptación de un
argumento, pero no la apropiación consecutiva del mismo.
El bien hacer, es ética personal y particular. Evaluar el resultado de una
acción y lograr un resultado objetivo incrementa nuestra ética personal.

La ética en los diferentes ámbitos de acción.

No podemos continuar con los ojos y oídos cerrados, una propuesta de


mejora de las relaciones intrafamiliares es un proceso de comprensión con
tendencia a lo humano. Despegarnos de los papeles que la sociedad nos
pinta, y ubicarnos en la situación del hijo, la esposa, la hermana, el tío o el
pariente cercano, nos acercará a conducirnos a un entendimiento y enlace más
ligero de las relaciones, sin tensiones que las lesionen. El respeto a sus
decisiones y actitudes nos dará mejor resultado. No podemos continuar
pensando que nuestro juicio es el correcto, tenemos que reconocer que no
tenemos la razón en todo. Como dice el dicho mexicano, “más sabe el diablo
por viejo que por diablo”, pero eso no implica que comprendamos el sentir de
alguien. Tenemos que hacer un doble esfuerzo para lograr actitudes éticas de
familia para lograr la unión e integración como núcleo fuerte e indivisible.

La conciencia ética profesional, me dicta que debo implicar un proceso de


compresión humana en las relaciones laborales, entre los compañeros de
trabajo, entre los diferentes actores de este entorno. Intentar comprender antes
de que me comprendan puede dar resultado. ¿Qué es lo que debo hacer? No
hay que olvidar que el ejercicio de múltiples valores universales de la conducta
son promotores de buenos ambientes de trabajo.
La humanización de las instituciones es un proceso largo y agotador, pero si
hacemos que nuestras relaciones sean mas humanas podremos aportar
nuestro grano de arena para que esto suceda. ¿Cómo debo hacerlo? En
primer lugar comenzar con la reflexión personal de nuestro desempeño laboral,
ser honestos con el análisis y con las soluciones aplicadas, aceptar el cambio y
la transformación de nuestro hacer y constantemente hacer un proceso de
regulación. Encender los focos rojos cuando alguien esta en desacuerdo con
lo que hago, y también con lo que digo. No alterarme ni adelantarme en emitir
juicios sin antes recibir toda la información posible o al menos hacer un
esfuerzo por preguntar el ¿por qué?
Un factor que puede mejorar nuestra ética es hacer lo que nos corresponde,
como debe ser, y en tiempo y forma, sin dejar a un lado la posibilidad de aplicar
una mejora constante si así se requiere.

Como parte de la aplicación de una conciencia ética y comprensión humana en


la faceta de investigación de un profesional tenemos una actitud diferente,
generada por un proceder adecuado a las circunstancia. Reitero que la
honestidad y el respeto permiten llevar a buen término nuestras acciones.
En un proceso de investigación respetar las fuentes de donde obtuvimos
información que utilizamos para crear nuestro documento o texto, se
manifiesta evitando el plagio, el cual no es justificable por no saber que es.
Si estamos inmersos en un proceso de investigación, se debe de investigar
todo lo necesario, indagar, preguntar, leer, anotar, comparar, evaluar, regular,
retroalimentar y volver a empezar. Cada respuesta es el inicio de una nueva
pregunta, de un planteamiento diferente.
En este proceso no debemos olvidar nuestra conciencia ética para realizar las
acciones como deben de ser, mantenernos en esa línea del bien hacer. Evitar
el plagio y mantener la mente abierta a cualquier sorpresa, por negativa que
resulte a nuestras intenciones no debe ser obstáculo para emitir juicios
cercanos a la realidad.

Reducir la mirada al entorno que rodea al proceso de investigación es una gran


perdida de información complementaria que podría ser la pieza que de
respuesta a nuestras hipótesis. Esos rasgos que no tomamos en cuenta, por
considerarlos obvios o simplemente tan abstractos que no los percibimos
pueden marcarla diferencia.
El conocimiento que tenemos de nuestro buen proceder, de nuestro bien decir
y pensar nos genera una conciencia ética que aplicamos en diferentes ámbitos.
Sin embargo pueden mejorar. Por ejemplo, en el entorno familiar la manera en
que regularmente se conduce un grupo puede ser cuestionado, las prácticas
cotidianas deben ser congruentes con la conciencia ética. La comprensión
humana, incorpora el respeto y tolerancia. Cada miembro puede actuar de
acuerdo a sus causales diarios, reacciona diferente por que esta en situaciones
distintas.

En la investigación se debe de contar con una gran conciencia ética para lograr
productos representativos de nuestro esfuerzo y sobre todo que otorguen
utilidad a nuestra línea de investigación.

Conclusiones.

Todo es complementario. Todos formamos parte de un todo, y dentro de


nosotros existen rasgos que fortalecen nuestra humanidad. Las tentaciones
estarán siempre presentes a lo largo de nuestra existencia, y es en estos casos
en donde la congruencia de nuestro pensar, decir y hacer debe ser adecuada.
La conciencia ética desarrollada y apropiada personalmente no debe estar
desarticulada de la comprensión humana. Nuestro origen es humano y por lo
tanto nuestro proceder es humano, será perfectible únicamente por .nuestra
propia ética y por todo aquello que podamos comprender que pueda mejorarla.

Bibliografía
1. Morin, E. “Los siete saberes necesarios para la educación del futuro”. Correo
de la UNESCO, 1999.

Vous aimerez peut-être aussi