Vous êtes sur la page 1sur 19

EXTRACTOS A FRITHJOF SCHUON

René Guénon

-Extracto del 22-12-31. En David Gattegno, Guénon, Pardès, 2001.


-Extractos del 1-4-37, 9-11-46, 16-1-47, 15-6-47, 27-7-47, 3-12-47, 16-12-47, 27-
12-47, 17-3-48, 25-4-48, 7-6-48, 22-7-48, 12-8-48, 11-9-48, 17-3-49, 13-7-50, 10-
8-50, 5-10-50. En Connaissance des Religions, nº 65-66, julio-diciembre de 2002.
-Carta del 16-4-46. En Cahier de l'Herne: René Guénon, París, 1985.
- Lettres à Frithjof Schuon, en "Dossier H" sur Frithjof Schuon, Éditions L'Âge d
´Homme, Lausana, 2002.

Extracto del 22 de diciembre de 1931

"Estoy cada vez más persuadido de que las formas constituidas del Cristianismo
son actualmente incapaces de proporcionar un apoyo efectivo para una
restauración del espíritu tradicional: yo había considerado eso sobre todo para que
no se me pudiese reprochar el haber desdeñado alguna posibilidad"
En David Gattegno, Guénon, Pardès, Puiseaux, 2001

Extracto del 1 de abril de 1937

"(...) Yo ya había sabido, por la última carta de Clavelle, la visita de C. y de B. a


Basilea y estoy muy contento con esta <reanudación de contacto>. En cuanto a la
incomprensión doctrinal que persiste sobre ciertos puntos, debo decir que no estoy
muy sorprendido; además veréis precisamente en la revista de abril un artículo
que he escrito pensando precisamente sobre todo en Amiens y que se relaciona
con ello bastante directamente. Lo que me decís me confirma aún que he hecho
bien al decidirme y que eso podrá no ser inútil. Solamente que es preferible que no
se sepa en Amiens que lo he hecho intencionalmente, pues C. 1 jamás me ha
hablado él mismo de lo que se trata, de suerte que se supone que lo ignoro, etc."

Carta del 16 de abril de 1946

Bismi Llah al-Rahmân al-rahîm


al-hamdu li-Llâhi wahda-Hu
En el nombre de Dios clemente y misericordioso
Alabanza a Dios sólo

El Cairo, 16 de abril de 1946

ilâ l-shaykh al-fâdil wa-l-akh al 'aziz


Sayyidî Isa Nùr al-Dîn Ahmad
al-salâm 'alaykum wa-rahmat Allah wa-barakâtu-Hu-Wa-ba'd
Al Shaij excelente y al hermano muy querido, Sidi Aissa Nur al-Din Ahmad
A vos el saludo y la misericordia de Dios y Sus bendiciones. Y Después...

Bien que ya he tenido frecuentemente de usted noticias en estos últimos tiempos


como puede pensar, he quedado de lo más feliz al recibir esta vez directamente la
visita de alguno de nuestros amigos; y quizás usted mismo pueda también volver
de nuevo a vernos sin tardanza...

Gracias por los envíos sucesivos de los capítulos de su libro2, ahora completado;
lo encuentro del mayor interés, y sin duda habría sido bien lamentable que no
decidieseis a escribirlo. No veo verdaderamente qué modificaciones podría
sugerirle, ni lo que podría añadirse o recortarse; creo que lo que se relaciona con
el Cristianismo, en particular, nunca había sido presentado de esta forma, y ello
podrá ayudar a algunos a comprender muchas cosas. Importaría que ese libro
pudiese aparecer lo más pronto posible; Luc Benoist me había hablado del final de
este año, pero, como la reedición de "La Crise du Monde moderne" parece que
debe hacerse más pronto de lo que antes os decía, espero que eso avanzará otro
tanto la publicación de los volúmenes siguientes de la colección, es decir, de
vuestro libro en primer lugar, y seguidamente del de Coomaraswamy sobre
"Hinduismo y Budismo".- Por lo referente a vuestro nuevo título me parece, en
efecto, preferible al primero porque es más corto y quizás también parecerá más
claro a los lectores que todavía no están habituados a nuestra terminología.

Ya había sabido por P. Genty que estaba decidido a escribiros; no sé demasiado lo


que ha podido deciros con respecto a los "Profetas del Espíritu", pero supongo
que debía ser algo pasaderamente confuso; desgraciadamente él es siempre el
mismo, desde hace casi 40 años que lo conozco, y muy testarudo en sus ideas...
Clavelle, que me dice haber recibido igualmente una copia de vuestra respuesta,
añada que, según una carta más reciente de Genty, éste "parece muy decidido
esta vez, como es habitual, a no salir tampoco del dominio de los sueños"; como
no carece de algún prejuicio al respecto, quiero creer sin embargo que exagera. Si
fuera así sería verdaderamente lamentable en efecto para el pobre Genty, pues ya
es tiempo de que tome una resolución más "efectiva"; debe tener 64 ó 65 años,
pero, a decir verdad, siempre ha parecido viejo.- Sobre lo que decís en vuestra
respuesta con relación a San Juan, habría solamente quizás que añadir lo
siguiente: muchos Musulmanes consideran también a San Jorge como un Profeta,
perteneciente a la familia espiritual de Seyidnâ El-Jidr y Seyidnâ Ilyas; pero, en
todo caso, ha de entenderse que no será igualmente más que Nabî y no Rasûl. A
este propósito, no sé ya si he tenido ocasión de decirle que lo que me había dado
la idea de escribir los artículos sobre la "realización descendente" aparecidos a
principios de 1939, es el hecho de que ciertos Chiíes pretenden que el Walî tiene
un maqâm más elevado (en el aspecto de el-qurb) que el Nabî e incluso que el
Rasûl. Lo que he escrito últimamente a propósito de los Malâmatiyah, como
veréis, (o quizás ya lo habéis visto, pues el nº4 de los "E. T." debe aparecer
ahora), toca también a la misma cuestión; este artículo se relaciona además con lo
que usted mismo ha escrito sobre las relaciones de los iniciados con el pueblo, y,
por una bastante curiosa "coincidencia" (¿?), acababa justamente de proyectar
escribir sobre ello ¡cuando esta parte de su libro nos ha llegado!

Sí, hemos recibido de Buenos Aires los dos estudios sobre el Budismo y sobre los
"Nombres Divinos" de los que habláis; yo he tenido también y sobre todo del
último, la misma impresión que usted. Es muy difícil de leer, y hay muchas
complicaciones bastante inútiles, e incluso correspondencias de las que muchas
parecen poco justificadas; me pregunto sobre qué autoridades podría apoyar el
autor muchas de sus aserciones... Sin duda, es muy diferente del trabajo de S.
Abu B.; ¿no pensáis que si este último fuera traducido al francés, valdría la pena
hacerlo aparecer en la colección "Tradition"? No creo que Luc Benoist pudiera
tener ninguna objeción que levantar contra esta idea.

He conocido, en efecto, a Mme Breton (por entonces Mlle Dano) en los últimos
tiempos que estaba en París, y, desde entonces, ha continuado escribiéndome de
vez en cuando.

Pienso que habéis hecho bien al responderle, pues es ciertamente muy simpática
y parece comprehensiva, y no ha lugar a desconfiar de ella; además, cosa
apreciable, no pertenece a la categoría demasiado numerosa de los
corresponsales que estorban e indiscretos. Debo decir que ella y su cuñado (Paul
Barbotin) me han rendido algunos servicios ayudándome a elucidar ciertas
maquinaciones de gente de la «R.I.S.S.» y otra de ese tipo. Añado, para que
sepáis más exactamente a qué ateneros, que ella es claramente católica y está en
relación con Charbonneau-Lassay.

Su capítulo sobre las formas de arte estará ciertamente muy bien para el volumen
de Bharata lyer; Marco Pallis nos ha escrito que él mismo preparaba algo sobre la
«vestimenta tradicional». En cuanto a mí, desgraciadamente no he hecho nada
todavía; como se parece querer tener los artículos sin tardar demasiado, me
pregunto si la traducción de mi estudio sobre la teoría de los elementos, aparecido
antaño en un n° especial de los «E.T.» sobre la tradición hindú, podría servir.
Apenas me es posible en efecto hacer un trabajo de cierta longitud en este
momento, en tanto que no haya salido completamente de todas las cuestiones
concernientes a las ediciones y reediciones actualmente en curso, pues todo eso
toma mucho tiempo y además se complica por la lentitud e irregularidad del
correo.- Es bien cierto que el período de silencio de estos últimos años ha tenido
para mí algunas ventajas, en el sentido de que de otro modo me habría sido
probablemente muy difícil llegar a preparar 4 nuevos libros durante ese tiempo;
pero, por otro lado, esta ausencia prolongada de toda novedad era
verdaderamente muy penosa igualmente...

Gracias a usted y a todos nuestros amigos por sus buenos deseos; continuamos
siempre bien. Dios sea alabado, y mi familia se une a mí para dirigirles a todos
nuestros saludos y nuestros mejores recuerdos

Min al-faqïr ilâ rabbihi 'Abd al-Wâhid Yahyâ


(Emanando del indigente con respecto a su Señor Abd al-Wâhid Yahyâ)

9 de noviembre 1946

[...] Lo que habéis respondido a Clavelle con respecto a la Masonería coincide en


suma, en los puntos esenciales, con lo que yo mismo le había escrito; es así
especialmente en lo que concierne al método de realización, que forma cuerpo,
por así decirlo, con el ejercicio mismo del oficio; es evidente, por lo demás, que
esta cuestión de la realización no es, en las presentes circunstancias, la que se
plantea de la manera más inmediatamente urgente... Es totalmente exacto que
antaño, como decís, "los Masones practicaban siempre el exoterismo del mundo
donde vivían", y ello porque la Masonería misma no está ligada a ninguna forma
exotérica determinada; por esta razón precisamente no es incompatible con
ninguna, en principio al menos, de modo que la cuestión de un cambio de forma
tradicional incluso no puede plantearse realmente en semejante caso. Añado que
no es incompatible tampoco con cualquier otra iniciación, sobre todo si no se la
considera en cierto modo más que a título "accesorio", lo que su estado actual
justifica seguramente... Con relación al Islam en particular, nadie, en los países
islámicos mismos, ha pensado nunca que pudiese haber una incompatibilidad
cualquiera, y ello tanto desde el punto de vista esotérico, como desde el exotérico;
aquí, por ejemplo, ha habido siempre desde hace mucho tiempo Masones a la vez
entre los "ulamâ ez-zâhir" y entre los miembros de las diversas turuq. Para éstos,
hay además al menos un ejemplo ilustre: el del emir Abd Al-Qadir, que, aparte de
su función exterior, era un mutaçawwuf3 eminente (lo que los historiadores
europeos parecen naturalmente ignorar), y que se hizo recibir Masón durante su
estancia en Alejandría. He aquí todavía algo más: el Shaij Elîsh decía que "si los
Masones comprendieran bien sus símbolos, serían todos Musulmanes"; y, a este
respecto, él explicaba que las 4 letras del nombre Allâh, en cuanto a sus formas
corrresponden respectivamente a la regla, al compás, a la escuadra y al
triángulo... Pero eso, prefiero mejor no decírselo a Clavelle, por el momento al
menos, a fin de no influir en un determinado sentido; os agradezco el dejarme toda
libertad para darle mi opinión, pero sin embargo yo preferiría que le dijeseis
igualmente todo (o a mí, a fin de que yo pudiese tenerlo en cuenta) lo que pensáis
en lo que le concierne especialmente. En efecto, si la cuestión de principio es muy
fácil de resolver, puede no ser lo mismo para los casos particulares; a este
respecto, yo le había hablado de la posibilidad, para algunos, de cierto peligro de
"dispersión", y lo que quería decir con ello, en el fondo, era lo mismo que
consideráis también hablando de los inconvenientes que puede tener el contacto
con cierto psiquismo colectivo; es evidente que este peligro no existe para todo el
mundo indistintamente y que no se puede decir nada en general al respecto; y ahí
está, en suma, el único punto que encuentro problemático para el caso de Clavelle
mismo...

Ahora es necesario que os hable un poco de la extraordinaria historia de Raymond


C..., de la que se trata, como habréis visto, en la última carta de Clavelle: hace
algún tiempo, recibí de él (es la primera vez que ha dado señales de vida desde la
reanudación de las comunicaciones) una enorme carta que, cosa bastante
extravagante) ha sido enviada desde Lausana, y de la cual su mayor parte
concierne a la sedicente posibilidad, que dice interesarle particularmente, de una
vinculación lamaica por intermedio de Calmels. Me he quedado más bien
estupefacto y, según todo lo que yo sé de Calmels, sospechaba mucho
seguidamente que, por ese lado, tal posibilidad era inexistente de hecho.
Solamente lo que yo temía es que Clavelle esté por algo en el "lanzamiento" de
esta idea, si así puede decirse,

Primero a causa del interés que él mismo parecía tener por todo lo que toca al
Budismo durante estos últimos años, y después porque C... me aseguraba
haberse puesto de acuerdo con él para escribirme al respecto. Por eso he pedido
yo también explicaciones a Clavelle sobre lo que había dicho exactamente; según
su respuesta, que yo esperaba para poder poner las cosas a punto con más
seguridad escribiendo a C..., se trata simplemente de "imaginaciones" de éste, y
me agrada mucho más que así sea. Yo no había observado nada anormal en su
correspondencia anterior, pero Allar, que lo conoció en Saboya el año último, me
dijo por entonces que no le había parecido muy bien equilibrado, y esta historia
parecería darle la razón...

Su idea de un "injerto mahayanista" (la expresión es de él) sobre la Masonería no


es menos sorprendente que el resto, y es incluso verdaderamente
incomprehensible por parte de alguien que sin duda ha leído lo que he escrito con
respecto a la mezcla de las formas tradicionales; hay incluso sobre este punto, en
la página 41 de «Aperçus» como una respuesta anticipada y bastante explícita.
Por otra parte, la idea de Maridort de la que habla Clavelle, en lo que concierne al
Islam (y todo eso nos remite a la cuestión de la "ayuda oriental"), no me parece
susceptible de aportar gran cosa tampoco, aunque al menos no apela a algo tan
completamente "extranjero" como el Budismo con relación a la Masonería (ello
sobre todo a causa de Salomón, que incluso tiene en realidad un lugar todavía
mayor en la perspectiva islámica que en el Judaísmo mismo).
En el fondo, una ayuda no podría resultar más que de la acción de
individualidades que poseyesen una iniciación oriental y perteneciesen al mismo
tiempo a la Masonería, y dejando necesariamente a ésta tal como es; al menos,
no veo otra hipótesis realmente plausible al respecto. Podría objetarse que, allí
donde eso se ha producido ya, ningún efecto apreciable ha resultado hasta ahora;
pero eso viene sin duda sobre todo de que la Masonería comprende por todas
partes muchos elementos demasiado mezclados, y la primera condición para
poder hacer algo serio desde el punto de vista que sea, sería sin duda operar una
selección lo más rigurosa posible.

No os hablo de los Ch. du P. [Caballeros del Paráclito], pues no tendría en suma


nada que añadir a lo que habéis dicho a Clavelle a este respecto; se trata de una
organización iniciática, sí, pero parece verdaderamente estar aún en peor estado
que la Masonería" (...)

(«El Murshid»), "inverosímil periódico que se publica ahora en Mostaganem".

16 de enero de 1947

[...] «Por lo que se refiere a Clavelle, no creo tampoco que pudiese haber el menor
inconveniente para su entrada en la Masonería, pero, por razones que
comprenderéis fácilmente, preferiría dejaros al cuidado de decírselo vos mismo; él
me ha escrito desde entonces que había recibido vuestra carta y que, puesto que
era así, no dudaba en participar del proyecto considerado. Con relación a éste,
veo que vuestras preferencias van hacia la idea de una Logia independiente, idea
que por lo demás es también la que Humery había ya tenido antes; eso tendría en
efecto muchas ventajas en diversos aspectos, comenzando por la de evitar
enteramente toda obligación de acoger a visitantes extranjeros. Junto a eso,
solamente hay el inconveniente que ha señalado Clavelle: y es que, dado lo que
es actualmente la organización administrativa de las Obediencias, los Masones
que fueren iniciados en esta Logia no serían reconocidos y no podrían entrar en
ningún sitio, de modo que estarían así en seria desventaja con relación a los otros
miembros. No es quizás imposible encontrar una solución a esta dificultad, pero
debo decir que no la veo por el momento, o al menos no veo más que una: sería
no hacer iniciaciones y hacer primero recibir a los futuros miembros en una Logia
ordinaria; se tendría así algo que correspondería con lo que se llama en Inglaterra
las "Logias de instrucción", pero con la diferencia de que éstas están, como las
otras, vinculadas a la Gran Logia, y también que apenas hacen otra cosa que
ocuparse de investigaciones puramente históricas.

A propósito de las relaciones entre la Masonería y el Islam, S. Must.4 me cuenta en


su última carta algo muy curiosos; os transcribo el pasaje: "Hace algunos años, he
tenido ocasión de ver planchas árabes (verosímilmente argelinas) de las cuales
una contenía dibujos que dan en resumen una interpretación masónica de la
plegaria musulmana: las diferentes fases de la "shaláh" estaban expresadas en
trazados con la escuadra y el compás, figurando esos mismos útiles con su propio
trazado. Estaban en la biblioteca que administraba por entonces mi suegro. Lo que
me ha sorprendido mucho, es que, sobre los paneles así dibujados y con palabras
en árabe, había también palabras en francés (traducción), de suerte que pienso
que esas telas han debido servir en algún momento para alguna exposición, o
reproducción en alguna obra, a menos que se trate de algo muy distinto... ¿Tenéis
alguna idea sobre lo que pueda ser eso? Lamento no poder ver de nuevo ahora
esos documentos". Debo confesar que no sé bien de qué trata eso, no habiendo
visto nunca nada parecido; es de lamentar que no pueda recordar detalles más
precisos, que permitieran especialmente saber con aproximación en qué época se
pueden fechar las planchas en cuestión (es posible que las palabras en francés
hayan sido añadidas luego). En todo caso, eso me hace pensar en lo que os había
dicho y de lo cual no había dicho nada hasta ahora a S. Must.; solamente al
responderle es cuando le he hablado a propósito de esta historia.»
15 de junio de 1947

«(...) Contrariamente al caso de éstos, Alain Danielou parece haber entrado


realmente en el Hinduismo, donde lleva el nombre de Shiva Sharan; la cosa sería
pues posible aún hoy, aunque sin duda de una manera bastante excepcional.
Hago esta observación a propósito de lo que Pallis dice ahí, y que además no es
menos cierto en lo que concierne a J. L. Y M. J.

Le agradezco haberme comunicado su última respuesta a Clavelle; éste me ha, en


efecto, tenido al corriente de vuestra correspondencia con él hasta ese momento,
pero estoy un poco sorprendido de que no me hable de esta respuesta en una
carta que acabo justamente de recibir. Es cierto que cree quizás haberlo hecho ya,
pues no me había escrito desde hacía mucho tiempo, y esta carta, bastante corta,
estaba destinada sobre todo a excusarse por lo que podría parecer negligencia,
pero que, asegura él, sólo es debido a las preocupaciones causadas por su
situación, y que desgraciadamente parecen no disminuir... Yo había también
observado su temor con respecto a la vinculación a la Shariy'ah para los
candidatos a la iniciación masónica, y le había dicho que os planteara claramente
la cuestión; he aquí aún otra dificultad más, o sedicente tal, que ahora se
encuentra disipada. El principal inconveniente de una Logia no federada habría
sido que, con la organización actual, (es decir, la que remonta a 1717), los
miembros que hubieran recibido la iniciación habrían sido considerados de hecho,
bien que equivocadamente, como Masones "irregulares" (sin que se contestara,
sin embargo, la validez misma de su iniciación), y que, por lo tanto, no habrían
podido penetrar en ninguna parte ni ejercer una acción más extensa sobre el
medio masónico. En cuanto al punto de vista católico y a la cuestión de
competencia que plantea, no creo verdaderamente que sea posible añadir algo a
lo que usted ha dicho al respecto... Para lo referente a la invocación de un Nombre
divino y de la manera como éste podría ser "dado" para que esta invocación sea
plenamente válida, soy naturalmente por completo de vuestra opinión; solamente
habría que precisar en cuáles condiciones sería ello posible, y pienso también que
debería ser reservada a una especie de "círculo interior". El nombre El Shaddai es,
como sabéis, el que se dice haber sido invocado más particularmente por Seyidna
Ibrahim5; es más que probable que, en general, apenas se deba comprender qué
relación pueda haber entre éste y los ritos de los constructores (por lo demás,
nunca he visto plantear esta cuestión en ninguna parte); pero ¿no se podría decir
que esa relación resulta de que él construye con sus manos la Kaabah con
Seyidna Ismaîl? En este caso, habría aún un lazo bastante notable con el Islam, y
que incluso justificaría aún más completamente la comunicación del Nombre,
como usted lo considera, por miembros de una organización islámica. »

27 de julio de 1947

[...] «Aún no he tenido noticias directas de Rocco6 desde su viaje a Suiza; la


correspondencia con Italia es generalmente más lenta todavía que con los otros
países, lo que no es decir poco; me hace muy feliz saber por S. Abu B. 7 la
excelente impresión que habéis tenido de él. Lo que no me explico es lo que os ha
dicho con respecto a Iván Cerf, pues yo mismo no he sabido nada hasta ahora
que pudiese dar que pensar que éste crea haber reencontrado el método perdido;
me pregunto pues de dónde haya podido venir eso y si no ha habido alguna
confusión. Por otra parte, me he dado cuenta como usted, por la última carta de
Clavelle, que éste pensaba que la admisión a Shariy'ah, para los candidatos a la
Mas (onería). no presentaría ya el mismo interés ahora que "las puertas de la
Tarîqah estarían abiertas de nuevo"; de acuerdo con lo que usted ha escrito a este
respecto a S. Must. y de lo cual ya me había informado; he intentado poner un
poco las cosas en su punto respondiendo a Clavelle. La recepción de Clavelle, de
Maridort y de Maugy en la L. "La Grande Triade" ha debido tener lugar el 10 de
julio. Se estima que habrá ya una treintena de demandas de afiliación a examinar
tras las vacaciones; me parece que es verdaderamente mucho, pero espero que al
menos se hará una selección seria en todo eso; es todo lo que he sabido de nuevo
hasta ahora. Por otra parte, he sabido que Ivan Cerf tiene la intención de obtener
para Clavelle (pero creo que éste no sabe nada todavía) el puesto de bibliotecario
de la G. L.8; es muy de desear que lo logre, pues me parece que esta situación le
convendría mucho, y es sin duda lo que habría mejor para salir al fin de las
dificultades en medio de las cuales se debate siempre.»

3 de diciembre de 1947

"Yo también estoy sin novedades de Clavelle desde hace mucho tiempo,
directamente al menos y hay varias cartas mías a las cuales no ha respondido;
ésa no es muy buena señal, y, efectivamente, según lo que me dice Allar, que le
ha visto varias veces en estos últimos tiempos, sigue muy atormentado por su
situación material; hay que preguntarse cómo saldrá de ello".

16 de diciembre de 1947

«Al instante, recibo al fin una carta de Clavelle, por lo demás muy breve; él dice
que va a escribiros también sin pausas "tras un silencio demasiado largo". No sé
cuáles disgustos ha tenido todavía en estos últimos tiempos, pero parece que
viene de pasar un período de lasitud y desánimo peor que el de todos los que
había atravesado hasta ahora... »

27 de diciembre de 1947

« Veo que Clavelle ha debido escribiros casi lo mismo que a mí, pero quizás más
ampliamente; soy muy de vuestra opinión en lo que concierne a sus dificultades, y
desgraciadamente no veo demasiado lo que sería posible hacer para ayudarle a
salir de ellas, pues es evidentemente de él mismo del que todo eso depende ante
todo... »
17 de marzo de 1948

[...] «Me entero también de que Q... debe estar estos días en Lausana, y que
Clavelle le ha encargado hablaros de las cuestiones concernientes a la "Grande
Triade". Hay desgraciadamente, en estos últimos tiempos, en la actitud y los
propósitos de Cerf, algo bastante extraño e incluso un poco inquietante; no sé
verdaderamente qué pensar de ello, pues no comprendo que un hombre de su
edad (tiene 65 años) pueda encabezonarse hasta ese punto... Espero que no
olvidareis decirme qué impresión tenéis de todo eso.»

25 de abril 1948

[...] «Volviendo a la cuestión de la «Grande Triade», hace falta que os diga primero
que desde las propuestas que tanto nos han inquietado y de las que Q... ha
debido informaros, como Clavelle le había encargado, Maridort ha tenido con Cerf
varias conversaciones que dan igualmente una impresión un poco más
tranquilizadora, en el sentido de que dichas propuestas no corresponderían
realmente a su manera de pensar. Él las explica por el hecho de que, dado el
medio con el que tiene que tratar en la G. L., está obligado a muchos miramientos
y diplomacia, lo que le impulsa incluso a decir a veces cosas que se contradicen
más o menos; no sé por lo demás si esta «diplomacia» es verdaderamente tan
hábil como él mismo está persuadido... En todo caso, es manifiestamente muy
impulsivo y cambiante, lo que hace muy difícil saber exactamente a qué atenerse
a su respecto; al mismo tiempo, está también demasiado seguro de sí mismo en
ciertos aspectos, y atribuye probablemente una importancia exagerada a sus
diversos conocimientos de orden exterior (en lo que concierne al tomismo, por
ejemplo). Además, es muy posible que, según vuestra observación, su función le
haya trastornado un poco la cabeza, bien que eso sea seguramente más
sorprendente en alguien de su edad (tiene 65 años) que si se fuera más joven.
Una cosa todavía que es bastante extravagante, y es que él asegura siempre que
tiene intención de escribirme pero jamás lo hace; nadie logra explicarse cuáles
pueden ser las razones de ello, e inclusos e ha llegado a suponer que temía
quizás indiscreciones del correo... A título documental, le transcribo un extracto de
una carta del H. Corneloup, director del "Symbolisme", a uno de sus
colaboradores, que me la ha comunicado: "Yo he ido a visitar la <Grande Triade> y
he quedado muy favorablemente impresionado. Yo no conocía a Iván Cerf; según
lo que había oído decir, temía encontrar en él mucho teatro. No diré que carece
por completo de ello, pero lo que pudiera haber es perfectamente soportable y casi
natural en un artista que no carece de valía. Yo diría incluso que eso le sirve en
este caso: como tienen un físico apropiado, evoca muy bien a un gran hierofante.
Preside pues perfectamente, con dignidad y la autoridad que se precisa". Esto
podrá daros una idea de la impresión que produce Cerf en un Masón "medio";
añado que el H. Corneloup ha quedado sobre todo impresionado, y mucho más de
lo que me hubiera esperado por su parte, por el trabajo de Clavelle, a quien ha
escrito además desde entonces. Ahora, por lo referente a la constitución de un
círculo interior, a lo cual habrá que llegar ciertamente lo más pronto posible, he
aquí lo que hay ahora: la mayor parte de los fundadores de la "Grande Triade"
parecen desgraciadamente, por diversas razones, insuficientemente cualificados
para formar parte de aquel; los unos son demasiado superficiales y apenas
parecen poderse cambiar (es el caso especialmente del G.M. Dumesnil de
Gramont9); los otros, que tienen ciertamente mejores posibilidades de
comprehensión, tiene otros defectos más o menos dificultosos. En suma, dejando
aparte el caso de Cerf hasta nueva orden, sólo queda entre ellos Mordvinoff que
está muy bien desde todos los puntos de vista y a quien yo conozco por lo demás
desde hace mucho tiempo; no tiene en la G. L. La autoridad que era necesaria
para la fundación de la «Grande Triade» pero naturalmente eso no tiene ninguna
importancia para la organización del círculo interior. Solamente que, es evidente
que por sí solo no basta, lo que obliga a esperar un poco, hasta que varios de los
"nuevos" hayan llegado al grado de Maestro; eso no tardará además sin duda
demasiado, puesto que Clavelle, Maridort y Maugy están desde ahora
dispensados de los plazos normales, de modo que los recibirán probablemente el
próximo julio. Hay varias maneras posibles de constituir ese círculo interior, pero,
como he escrito últimamente a Clavelle, la que me parece preferible, al menos
para empezar, sería la de darle la forma de una "Logia de instrucción", que bien
entendido, sería independiente de toda Obediencia; se volvería pues así, en cierto
sentido, a la antigua idea de una Logia independiente, pero como no haría
iniciaciones y como todos sus miembros serían Masones ya reconocidos como
regulares y quedarían al tiempo como miembros activos de la "Grande Triade", ello
no tendría ya ninguno de los inconvenientes que esta solución habría presentado
sin la existencia previa de esta última. En suma, mi conclusión es que no ha lugar
a desesperar ni a desinteresarse del asunto, sino solamente a esperar que se
pueda completar el nº requerido para que esta organización sea "justa y
perfecta"».

7 de junio de 1948

(... ) «"Sobre la respuesta de Clavelle a Corneloup, vuestra reserva con relación al


pasaje de la p. 2 está muy justificada, al menos en principio; pero yo he pensado,
leyendo eso que él había querido aprovechar esta ocasión para presentar una
especie de visión de conjunto de la iniciación, tanto más cuanto que sabía que, en
su intención, su puntualización estaba destinada tanto, si no más, a los miembros
de la "Grande Triade" como a Corneloup mismo. Hay sin embargo todavía otra
cosa, pues su trabajo para la obtención del grado de Maestro, que acaba de
enviarme, contiene consideraciones tendentes a explicar por qué razón piensa
que, en el estado actual de las cosas, la Masonería no puede ya limitarse a la sola
perspectiva de una iniciación artesanal, tras la desaparición en Occidente de las
iniciaciones de otro orden (caballeresca y sacerdotal); y, a este propósito, hace
alusión especialmente a la destrucción de la Orden del Templo, lo que se aproxima
en cierto mdo a lo que usted mismo dice. Por otra parte, debo añadir que, desde el
punto de vista de la Masonería propiamente dicha, el simbolismo del grado de
Royal Arch (por lo demás completamente desconocido en Francia), indica al
menos la existencia de una puerta abierta a los "Grandes Misterios". Desde hace
algún tiempo tengo nuevas mucho más tranquilizadoras con respecto a Cerf;
parece que si él no me escribe directamente, es porque su correspondencia está
actualmente "vigilada" en el punto de partida, no sé por quién ni por qué razones...
Sea como fuere, me ha hecho enviar expresamente la seguridad de que "está en
comunicación constante con mi pensamiento y principalmente cuando dirige los
trabajos y que todo el trabajo que hace está absolutamente conforme a aquel". Me
llega en este momento una cosa inesperada: algunos miembros de altos grados
del Gran Oriente se proponen fundar una Logia en el mismo espíritu que la
"Grande Triade".»

12 de agosto de 1948

«Con relación a Bachelet, del cual S. Must. Me ha transmitido sus cartas y que me
dice haber recibido por vuestra mediación, creo que sería bueno también ser
prudente, no tengo más que razones para pensar que conviene ser prudente, no
porque tenga razones para pensar que hay lugar a desconfiar de él
personalmente, sino a causa de sus relaciones bastante heteróclitas. Cuando
estaba todavía en París, ha impartido conferencias al grupo de la «Vie Claire»,
cuyo órgano publica entre otros artículos de ese Dr. Bertholet del cual S. Must. me
hablaba en su carta anterior (y a este respecto, respondiéndole, yo le preguntaba
qué había sido de Bachelet del que yo no había oído hablar desde hacía mucho
tiempo); esta misma publicación hace reclamos de cuando en cuando para los
"Amigos del Islam", e incluso ha reproducido en uno de sus últimos números un
artículo de Izard aparecido en "El Murshid".»

11 de septiembre de 1948
[...] «Clavelle me ha enviado la copia de las notas que os ha dirigido con respecto
a la situación actual de la G. T.; según lo que decía de Cerf, he pensado que
habría todas las ventajas en aplazar la visita que éste proyectaba haceros, y veo
que sois también de esta opinión; Clavelle continuará con seguridad teniéndome al
corriente (...)

«No estoy muy sorprendido de lo que me decís a propósito del abate Girc.10, pues
había sabido por Clavelle que, desde hacía cierto tiempo, él y el abate Chat. 11 no
están ya en los mejores términos con Tamos. Según éste, habrían creído que él
habría comunicado a Bourdariat ciertas cosas que les habría disimulado a ellos
mismos; pero me pregunto cada vez más lo que pueden significar todos esos
chismes más o menos incoherentes y cuál es su verdadero origen. Entiéndase
bien, podéis contar con que no diré a Clavelle lo que me decías al respecto. En
cuanto a Bourdariat, no le he oído hablar; creo además que estaría muy apurado
para darme una explicación cualquiera de lo que ha pasado».

17 de marzo de 1949

«Con respecto a Mostaganem, S. Must. Habrá debido deciros ya lo que se ha


producido de nuevo por esa parte: el boletín de la "USM" (Union Spirituelle
Universelle) del demasiado famoso "Mahâ-Choan" ha publicado una apelación de
Izard para la sociedad de los "Amigos del Islam", la cual está ahora ¡adherida a
dicha USM! Tras la participación en los "Congresos espirituales mundiales", no
hay que sorprenderse demasiado, pero, con todo, esta incorporación a una
organización que sólo surge del más bajo charlatanismo, es aún peor de lo que se
habría podido imaginar».

13 de julio de 1950
[...] «No hay que tomarla con S. Ibr.12 por lo que me ha escrito desde Dublín, pues
ciertamente ha creído hacer bien citándome algunos extractos de una carta que
acababa de recibir de usted; solamente que la verdad es que había ahí frases
sueltas de las que era imposible saber a propósito de que venían. Si he destacado
la que se relacionaba con la Mas. Es porque me ha parecido que podía haber ahí
algún equívoco; sé además muy bien que es Clavelle quien os ha desaconsejado
recibir a Cerf, pues él mismo me ha escrito en aquel momento, y lo que os ha
dicho de sus defectos, especialmente de su vanidad, es desgraciadamente
demasiado verdadero; que Cerf hay quedado decepcionado o incluso herido, sin
duda es muy posible en tales condiciones... Pero, dejando de lado esta cuestón
totalmente "personal", lo que he querido decir es que, para poder desembocar en
algo, habría hecho falta poder encontrar modalidades compatibles con la forma
particular de la iniciación masónica, lo que es muy difícil de apreciar por quien no
tiene un conocimiento directo de ésta. He dado algunas precisiones relacionadas
con esta cuestión en mi artículo "Trabajo iniciático colectivo y <presencia>
espiritual". Aparte de eso, entiéndase bien que soy totalmente de su opinión sobre
la distinción que conviene hacer entre la Masonería en sí misma y la mentalidad
de ciertos Masones e incluso de ciertas colectividades masónicas actuales; por lo
demás, en nuestra época, habría sin duda que hacer una distinción semejante en
otros casos, comenzando por el del Cristianismo mismo... ».

10 de agosto de 1950

[...] «A propósito de la Masonería, si yo había pensado que se trataba de Cerf, es


porque era el personaje más importante en ese caso; Gassier, que por entonces
no tenía más que el simple grado de Aprendiz, no podía ser considerado como
"representativo" de la Masonería. Clavelle me había dicho que, tras haber tenido
conocimiento de las notas que él había redactado para usted sobre cierto número
de miembros de la G. T. (Grande Triade) (los que le parecían más interesantes) y
de las cuales me había enviado también la copia, le habíais escrito que es Gassier
al que recibiríais más de buena gana; pero, en esas condiciones, yo creía que era
a título puramente "personal", puesto que, no siendo Maestro, él no podía
evidentemente desempeñar papel ninguno efectivo. Sea como fuere, veo que sin
duda no habéis sabido nunca lo que ha llegado a continuación: el pobre Gassier
ha tenido trastornos de los que ignoro la naturaleza exacta, pero que han
producido en él una especie de desánimo, y ahora está en un estado de salud
muy inquietante pues los médicos hablan de cáncer o al menos de estado
precanceroso; creo que a causa de todo eso nunca habéis tenido su visita».

5 de octubre de 1950

"Sé bien que se os atribuyen, como a mí, muchas cosas que no habéis dicho"

Vous aimerez peut-être aussi